Sendas del Yoga

En el Yoga existen diferentes caminos o más bien sendas para llegar a la unión con Brahman, el
principio universal supremo, la Realidad Superior en el universo. Estas 4 sendas principales se
llaman Karma Yoga, el sendero de la acción; Bhakti Yoga, el sendero de la devoción. Gñana o
Jnana Yoga, el sendero del conocimiento o de la sabiduría y Raja Yoja, el sendero del control físico
y mental.
1) Karma Yoga, el camino de la acción. Karma significa la acción que surge de una actitud
desinteresada. Este camino consiste en la entrega desinteresada, una actitud vital guiada
por un espíritu de servicio a los demás. El karma yoga purifica el corazón, enseñándonos
el actuar por amor, sin buscar logros ni recompensas. Es una orientación adecuada para
personas activas, expresivas y de naturaleza extrovertida.
<<El Karma yogui actúa por amor, de forma solidaria y generosa, ofreciendo su acción y los resultados de ésta a
la Divinidad, al Yo Soy, sin esperar nada a cambio. Para conseguir realizar una acción de forma desinteresada y
sin pensar en los resultados de la misma, al aspirante le puede ser útil mantener la mente centrada con la
repetición de un mantra mientras se realiza cualquier actividad. Así, el Karma yogui se convierte en un
instrumento para que la acción pueda realizarse, pero no es el protagonista de ésta. Hasta el punto que, con la
práctica, la acción generosa, libre de ego, que no produce ningún karma negativo se convierte en una actitud
natural, espontánea, permanente.>>

2) Bhakti Yoga, el yoga del amor y la devoción. Este camino suele atraer a personas con
mayor tendencia emocional y es la entrega que purifica las emociones del ser humano,
canalizándolas hacia lo Divino. Esta entrega puede orientarse hacia el guru, el maestro, la
humanidad, la naturaleza, el Absoluto u otro objeto de Devoción, y a través de ella el
Bhakti yogui llega a comprender y experimentar la Unidad: “Todos somos uno”.

<<Hay diferentes grados de devoción, como también distintos métodos a través de los cuales el Bhakti yogui
canaliza sus emociones en un amor y una devoción incondicionales.

• Kirtanam: cantar el nombre de la Divinidad acompañándose con instrumentos musicales. El canto

se convierte así en una forma de meditación que recuerda lo divino.
• Smaranam: recordar continuamente a la Divinidad en todas sus formas.
• Padashevanam: servicio al maestro vivo. En este caso el desapego también puede manifestarse
inclinándose a los pies del gurú. Los pies se consideran tradicionalmente como el punto extremo
del poder espiritual y de la gracia.
• Archanan: adoración ritual y ofrendas.
• Bandanan: adoración mental a todas las cosas como manifestaciones de la Divinidad.
• Atma nivedanam: actitud de total rendición a la voluntad divina.
• Sakhyam: sentimiento de amistad por lo divino, que es una forma mística más íntima de asociación
con Dios. >>

3) Gñana Yoga. El yoga del conocimiento. Este tipo de yoga atrae habitualmente a
personalidades filosóficas e intuitivas que tienen un profundo interés por descubrir su
verdadera esencia. Sus herramientas son la reflexión, el estudio, la auto-observación y la
meditación.
4) Raja Yoga. El yoga mental. Esta es la senda del control físico y mental. Su objetivo es llegar
a canalizar y convertir la energía física y mental en energía espiritual. Para aquello es
 aspirtante debe indagar en su mundo interior, explorando diferentes niveles y procesos
de la mente y la conciencia, para llegar así a comprender su esencia, su verdadera
naturaleza.
De las 4 sendas, no escojo ninguna por sobre la otra. Si bien me siento intuitivamente atraído
hacia el Karma y Bhakti yoga, entiendo existe una profunda relación entre ellas 4, que las hace
complementarias y sumamente necesarias. Creo yo es necesario practicarlas en conjunto. Se me
hace difícil ponerlo en palabras por la naturaleza de lo que evocan al leerlas, que más que un
pensamiento resulta en un sentimiento de profunda verdad. Quizás si tuviera que escoger, sería
el orden en que empiezo a aplicar cada senda en mi vida, y creo yo ya he empezado a transitar
por las 3 primeras de ellas. La espiritualidad siempre ha estado presente en mi vida, pero es
durante el último año que ha empezado a tomar mayor importancia. Y no tengo otra forma de
decirlo más que diciendo que de a poco he ido incorporando estas creencias, y cada vez me
resuenan más. (Cuesta, pero lo intento, a veces me olvido, otras veces no quiero, pero es parte
del cambio, del crecimiento y por eso no me sobre exijo, porque todo es en su momento). Siento
que he dicho todo, pero a la vez nada. Me es muy difícil ponerlo en palabras profe, pero tengo la
corazonada de que usted entiende todo lo que quiero decir.
8 ramas del Yoga
Estas 8 ramas abordan diferentes aspectos de la vida y son senderos en el viaje a la liberación o
“moksha”
1. Yamas – Vida ética. Son los valores morales que rigen el mundo a nuestro
alrededor y nuestra interacción con él. Son los principios éticos de nuestro
comportamiento. Son 7 yamas:
▪ Ahimsa: la no violencia verbal, física o mental.
▪ Satya: la verdad, la honestidad.
▪ Asteya: el no robar, la generosidad.
▪ Brahmacharya: el uso debido de nuestra energía.
▪ Aparigraha: la no avaricia.
2. Niyamas – Vida Sana. Las obligaciones con nosotros mismos. Son un código de
conducta personal que guía nuestras acciones internas o hacia nosotros mismos,
con el objetivo de tener una vida positiva y sana. Existen 5:
▪ Saucha: la limpieza del cuerpo y la pureza en nuestro comportamiento.
▪ Santosha: la alegría, la satisfacción con lo que poseemos, la paz con nosotros
mismos.
▪ Tapas: la autodisciplina, la quema del deseo, la austeridad, la resistencia.
▪ Svadhyaya: el autoconocimiento, la introspección y la conciencia de uno mismo.
También se refiere al estudio de textos espirituales
▪ Isvarapranidaha: la devoción, el rendirse a un poder superior. Es el amor y la
entrega a la sabiduría universal.
3. Asanas – posturas. Son el conjunto de posturas que preparan el cuerpo para las
siguientes ramas del yoga.
4. Pranayama – Respiración consciente. Trabajando la manera como respiramos,
podemos aumentar o disminuir la energía de nuestro cuerpo e influir en el estado
 de nuestra mente. puede significar dos cosas completamente distintas. Y ello
puede llevarnos a tomar dos direcciones totalmente diferentes en este punto del
camino del yoga. Pranayama puede entenderse como “prana-yama”, que
significaría “control de la respiración” o “restricción de la respiración”. Pero
también se puede entender como “prana-ayama” que se traduciría como
“liberación de la respiración” o “expansión de la respiración”.
5. 5. Pratyahara – Aislamiento. Significa el control de los sentidos, aislándonos de
estímulos exteriores. La práctica de pratyahara cambia nuestro estado mental, de
manera que estamos tan concentrados que lo que sucede en el exterior ni nos
distrae ni nos molesta. Es el estadio previo y necesario para la meditación.
6. Dharana – Concentración. Significa “concentración enfocada”, es decir, la
concentración un solo punto, objeto o tarea.
7. Dhyana – Meditación
8. Samadhi – Iluminación. Es el estado de plenitud existencial, felicidad y dicha. No
se trata de un estado continuo de felicidad o una sensación permanente de dicha.
Sino que es ver la vida y la realidad por lo que son exactamente, sin pensamientos,
sensaciones ni emociones que las alteren. No es un estado de ser o de sentir, o
una forma de pensar. Es simplemente ser.

De estas 8 ramas, son muy pocas las practicas que llevo a la practica en el día a día. Solo algunos
Yamas, Niyamas, y de vez en cuando Pranayama. Y debo ser sincero. No los practico de mera
pereza. Me doy cuenta que vivo como esperando algo. No se lo que es, pero es como si estuviera
esperando que mis maestros me hablen y me digan has esto y esto, o haya algún suceso místico
que me ponga a hacerlo. Y es algo de lo que soy consciente, pero prefiero ignorarlo, hacerme el
loco. Deseo tanto tener experiencias, pero espero que sucedan por arte de magia, como si la
mera fe fuera a dármelas.

Eduardo Mackay