El Kybalion
El Kybalion
El Kybalion
"INTRODUCCIÓN"
No hay porción de las enseñanzas ocultas poseídas por el mundo que haya sido tan
cuidadosamente guardada como los fragmentos de las enseñanzas herméticas que han
llegado hasta nosotros a lo largo de las decenas de centurias que han transcurrido desde
la vida de su gran fundador, Hermes Trismegistus, el "escriba de los dioses", que residió
en el antiguo Egipto en los días en que la raza presente de los hombres estaba en su
infancia.
De labio a oído, la verdad ha sido transmitida entre los pocos. Siempre ha habido unos
pocos iniciados en cada generación, en los diversos países de la tierra, que mantuvieron
viva la llama sagrada de las enseñanzas herméticas, y ésos siempre han estado deseosos
de usar sus lámparas para reencender las lámparas menores del mundo externo, cuando
la luz de la verdad se tornaba sombría y nublada por la negligencia, y cuando las
mechas se obstruían con materia extraña. Siempre hubieron unos pocos para atender
fielmente al altar de la verdad, sobre el que se mantenía encendida la lámpara perpetua
de la sabiduría. Estos hombres dedicaron sus vidas a la labor de amor que el poeta ha
establecido tan bien en sus versos:
"¡Oh, no dejes que se extinga la llama! Protegida edad tras edad en su oscura
caverna en sus santos templos cuidada. Alimentada por sacerdotes puros de amor-
¡no dejes que se extinga la llama!"
Estos hombres nunca han buscado la aprobación popular ni una multitud de seguidores.
Son indiferentes a estas cosas, pues saben cuán pocos hay en cada generación que estén
preparados para la verdad, o que la reconocerían si les fuera presentada. Reservan la
"carne fuerte para los hombres", mientras otros proporcionan la "leche para los bebés".
Estos hombres nunca han olvidado las enseñanzas originales de Hermes, considerando
el traspaso de las palabras de la verdad a esos preparados para recibirlas, enseñanza que
está establecida en El Kybalión como sigue: "Donde caen las pisadas del maestro, los
oídos de aquellos listos para su enseñanza se abren de par en par." Y de nuevo: "Cuando
los oídos del estudiante están listos para oír, vienen los labios a llenarlos con sabiduría."
Pero su actitud acostumbrada ha estado siempre estrictamente de acuerdo con el otro
aforismo hermético. también en El Kybalión: "Los labios de la sabiduría están cerrados,
excepto para los oídos del entendimiento."
Hay quienes han criticado esta actitud de los hermetistas, y han proclamado que no
manifestaban el espíritu apropiado en su política de reclusión y reticencia. Pero una
ojeada momentánea hacia atrás sobre las páginas de la historia mostrará la sabiduría de
los maestros, que sabían de la equivocación de intentar enseñar al mundo algo para lo
que no estaba ni preparado ni deseoso de recibirlo.
En esta pequeña obra nos hemos esforzado por daros una idea de las enseñanzas
fundamentales de El Kybalión, haciendo lo posible por daros los principios funcionales,
dejándoos que los apliquéis vosotros mismos, antes que intentar desarrollar la
enseñanza en detalle. Si eres un verdadero estudiante, serás capaz de desarrollar y
aplicar estos principios; si no, entonces debes convertirte en uno, pues de otro modo las
enseñanzas herméticas serán solo como "palabras, palabras, palabras" para ti.
Así que, de acuerdo con las enseñanzas, el pasar este libro a aquellos listos para la
instrucción atraerá la atención de esos que están preparados para recibir la enseñanza.
Y, del mismo modo, cuando el pupilo esté listo para recibir la verdad, entonces este
pequeño libro le vendrá a él, o a ella. Tal es la ley. El principio hermético de causa y
efecto, en su aspecto de la ley de atracción, juntará labios y oído, pupilo y libro en
compañía. ¡Así sea!
"Explica que el TODO, que es la realidad sustancial que se oculta detrás de todas las
manifestaciones y apariencias que conocemos bajo diversos nombres, y en una palabra,
todo cuanto es sensible a nuestros sentidos materiales, es espíritu, quien en sí mismo es
incognoscible e indefinible, pero que puede ser considerado como una mente infinita,
universal y viviente. Explica también que todo el mundo fenomenal o universo es una
creación mental del TODO en cuya mente vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser.
El estudiante hermético puede utilizar conscientemente las grandes leyes mentales, en
vez de usarlas por casualidad o ser usado por ellas. Con la clave maestra en su poder,
el discípulo puede abrir las puertas del templo del conocimiento mental y psíquico y
entrar en el mismo, libre e inteligentemente. Sin esta clave maestra el adeptado es
imposible, y el estudiante que no posea, en vano llamará a la puerta del Templo."
(El Kybalión)
"Este principio incorpora la verdad de que todo es mente. Explica que EL TODO (que
es la realidad sustancial que subyace más allá de la materia, de la energía, etc.) es
ESPIRITU, que en sí mismo es incognoscible e indefinible, pero que puede ser
considerado y concebido como una MENTE UNIVERSAL, INFINITA Y VIVIENTE.
Explica que todo el mundo o universo fenomenal es simplemente una creación mental
del TODO, en cuya mente "vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser". Con la llave
maestra en su posesión, el estudiante puede abrir las muchas puertas del templo mental
y psíquico del conocimiento, y entrar al mismo libre e inteligentemente. Este principio
explica la verdadera naturaleza de "energía", "poder" y "materia", y por qué y cómo
están todos éstos subordinados a la maestría de la mente".
(El Kybalión)
Albert Ellis llega a decirle al lector: "si los marcianos viniesen a visitarnos y estuviesen
realmente sanos se morirían de risa con nosotros. Porque verían a gente inteligente
como tú, insistiendo sin éxito en que pueden hacer algo que no pueden, tal como
cambiar el proceso de muerte de cualquier ser humano. Mientras dicen a la vez, que no
pueden hacer algo que sí que pueden, a saber cambiarse a uno mismo. Los marcianos
no serían capaces de entender esto y se volverían pensando que estamos chiflados,
como de hecho lo estamos". Lo que sucede es que estamos tan acostumbrados que nos
parece natural querer cambiar algo que no podemos mientras que no cambiamos lo que
podemos.
"No os sintáis inseguros o temerosos, estamos SOSTENIDOS FIRMEMENTE EN
LA MENTE INFINITA DEL TODO, y no hay nada que nos hiera o que hayamos de
temer. No hay ningún poder fuera del Todo para afectarnos. Así que debemos descansar
calmos y seguros. Entonces "calmos y apaciblemente dormimos, mecidos en la cuna de
lo profundo", reposando a salvo en el seno del océano de mente infinita, que es El Todo.
En El Todo, en verdad, "vivimos y nos movemos y tenemos nuestro ser".
El Kybalión
EL TODO ES MENTE
...el universo es mental. ¿Qué significa esta frase? Escribe Jaime Lodoño al respecto:
"El mentalismo ocultista sostiene que todo lo que existe en el Universo es expresión
cada vez más grosera, más material, más densa, de un Primer Principio
extremadamente sutil y elevado, que podemos llamar Dios, Conciencia Cósmica,
Brama, inmanente en el Cosmos, y que se manifiesta en la naturaleza en distintos
planos de vibración cada vez más densa, ora como psiquis, ora como espíritu, ora como
materia. Vale decir que las cosas del Cosmos no son de naturaleza distinta entre sí,
sino que esa Esencia Universal adopta en ocasiones la característica de la energía, en
otra circunstancia la de la materia, en una tercera la del pensamiento.
Para que esto sea más entendible, imaginemos un río. Un río que nace en una cascada,
donde el agua fluye rápidamente y es cristalina, desplazándose luego por la llanura
formando meandros, donde aquella se torna lenta y turbia para morir en un pantano,
donde el agua está quieta y oscura. A primer golpe de vista, ustedes pueden dividir el
río en tres partes bien diferenciadas: aquí el agua es cristalina, más allá turbia,
finalmente negra. Pero, ¿ustedes podrían decir dónde termina un tipo de agua y
comienza la otra?. No, porque en un punto cualquiera el agua es más rápida y
transparente que unos metros río abajo, pero todavía más lenta y turbia que otro tanto
río arriba... y así en progresión infinita. Es decir, la única diferencia es de grado, de
densidad, pero no de naturaleza, y en un análisis pormenorizado todos los "sectores"
del río son indistinguibles entre sí.
Para que esto sea más entendible, imaginemos una gigantesca olla repleta de polenta
mal preparada. En algunos lugares, está grumosa; en otros, líquida. Más allá, tendrá
una consistencia media. A golpe de vista, puede decirse que allá la materia es grumosa
(sólida), aquí muy líquida y acullá intermedia, pero en definitiva todo es polenta. Así
ocurre en el Universo".
Transmutación mental
Dice el Kybalión: "La mente (así como los metales y los elementos) puede ser
transmutada, de estado a estado; de grado a grado; de condición a condición; de
polo a polo; de vibración a vibración. La verdadera transmutación hermética es un
arte mental".
Como dice el axioma, este principio establece que "El Todo es mente; el universo es
mental". Esto significa que la realidad subyacente del universo es mente. Si el universo
es mental en su naturaleza, entonces la transmutación mental debe ser el arte de
CAMBIAR LAS CONDICIONES DEL UNIVERSO. Por consiguiente, podemos ver
que la transmutación mental es realmente la "magia" de la que los antiguos escritores
tenían tanto que decir en sus obras místicas. Si todo es mental, entonces el arte que le
capacita a uno para transmutar condiciones mentales debe hacer al maestro el
controlador de las condiciones materiales, así como de las mentales. (Recuerdan cuando
hace poco tiempo en el amazonas hubo un gran incendio tras una gran época de sequía y
la meteorología pronosticaba semanas sin ausencia de lluvias y que fueron dos
chamanes los que mediante cantos y danzas hicieron que la lluvia cayera sobre ese
territorio??...)
"A través de la aplicación del principio del mentalismo, somos capaces de: CREAR LO
QUE CREEMOS Y DE CONCRETAR LO QUE DECRETEMOS" (Sixto Paz).
"Si orientamos nuestra mente con una actitud positiva hacia la consecución de
cualquier realización, ésta llegará a materializarse. Pero si por el contrario nos
dejamos llevar por el pesimismo y la negatividad, todo a nuestro alrededor será reflejo
de aquello.
Solamente nosotros somos los productores de todo lo que nos suceda. Todo depende del
clima mental en el cual vivimos. Si somos constantemente malhumorados, no nos
extrañe que nos traten mal. Si vivimos contentos, risueños, optimistas, no nos extrañe
que seamos amados, populares y bienvenidos en todas partes y que nos ocurran todas
cosas buenas.
Nos sucede lo que nosotros esperamos que nos suceda. Si no estamos de acuerdo con lo
que nos sucede, cambiemos nuestro modo de pensar y la manifestación exterior se
transformará. San Pablo decía: "Somos transformados por la renovación de nuestras
mentes".
Existe una gran diferencia entre lo que verdaderamente creemos, lo que creemos que
creemos y lo que creemos que debemos creer. Muchas veces hemos escuchado que
fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios. Esto significa que somos creadores como
El. Dios creó los Universos con su mente. Nosotros creamos nuestro mundo con nuestra
mente."
Extractos del libro: "El maravilloso número 7"
"PRINCIPIO DE CORRESPONDENCIA"
"Este principio incorpora la verdad de que hay siempre una correspondencia entre las
leyes y fenómenos de los diversos planos de existencia y vida. La captación de este
principio da uno de los medios de solucionar muchas de las oscuras paradojas y secretos
escondidos de la Naturaleza. Hay planos que están más allá de nuestro conocimiento,
pero cuando les aplicamos el principio de correspondencia somos capaces de entender
mucho que de otro modo nos habría sido incognoscible. Este principio es una ley de
aplicación y de manifestación universal, en los diversos planos del universo material,
mental y espiritual. Al igual que un conocimiento de los principios de la Geometría
capacita al hombre para medir soles distantes y sus movimientos, mientras está sentado
en su observatorio, así un conocimiento del principio de correspondencia capacita al
hombre para razonar inteligentemente desde lo conocido hasta lo desconocido.
Estudiando a la mónada, entiende al arcángel".
LA PARADOJA DIVINA
Aunque para el TODO infinito el Universo, sus leyes, sus poderes, su vida, sus
fenómenos, son como cosas contempladas en el estado de meditación o ensueño, el
Universo debe ser tratado como real, la vida, las acciones y los pensamientos deben
estar basados en ello, acordemente, si bien se tenga un claro conocimiento y realización
de la Verdad Superior cada uno respecto a su propio plano y leyes. Si el TODO hubiera
imaginado un Universo real sería desastroso para éste, porque entonces no podría
ascender de lo inferior a los superior, el Universo se hubiera convertido en una cosa fija,
inmóvil y el progreso resultaría imposible. Y si el hombre, por su parte, debido a su
semi-sabiduría, actúa y vive y piensa en el Universo como si fuera un sueño (parecido a
sus propios ensueños finitos), así se convertirá efectivamente para él, y, al igual de un
cadáver que caminase, se encontrará dando vueltas y más vueltas en un círculo, sin
hacer el menor progreso y siendo forzado por último a despertarse y vivir por leyes
naturales que él hubiera olvidado. Conservad siempre la mente fija en la Estrella, pero
mirad siempre dónde ponéis los pies, no vayáis a hundiros en algún abismo. Recordad
la paradoja divina que afirma que si bien "El Universo no es, sin embargo es".
Recordemos siempre los dos polos de la verdad: lo absoluto y lo relativo. Guardémonos
de las verdades a medias.
Seguimos de la mano de Jaime Lodoño, ahora con este segundo principio universal.
Tres mil doscientos años antes de Cristo, según cuentan los antiguos relatos egipcios,
finalizó el reinado de dioses y semidioses sobre la Tierra. En el valle del Alto Nilo un
rey de pastores, Menes, ascendió en ese entonces al faraonato con el título de Menes I,
El Tinita (por ser oriundo de la ciudad de Thinis).
Todo lo que vemos es un reflejo del universo que nos rodea, por lo que al ser parte
consciente de la creación, nosotros también podemos y debemos ser creadores de todo
aquello que pueda ser edificante y positivo.
Las leyes que regulan el universo son las mismas que intervienen en la vida de un
individuo, por lo cual conociéndose uno a sí mismo se puede llegar a conocer el
universo y de la misma manera, afectarlo para bien o para mal. Recordemos la famosa
frase de los grandes Griegos cuando dijeron:
"Conócete a ti mismo y conocerás a los Dioses y al universo todo".
Esto equivale a decir que en nuestro propio ambiente terreno y en todo lo que nos rodea,
podemos leer, descifrar, traducir como ocurren esas mismas cosas en otros planos. Que
toda acción y toda condición tienen su analogía o su correspondencia en todos los
demás planos de existencia, siempre tomando en cuenta que, a medida que la vida se
eleva, se van ampliando las experiencias y los poderes.
Ahora, es muy difícil intentar juzgar y apreciar exactamente como es una condición de
vida superior a aquella que estamos viviendo. Un pobre piensa de un rico "¿Cómo será
de agradable el tenerlo todo?" No lo está experimentando y no lo podrá apreciar
totalmente hasta que se encuentre rico, aunque sí puede anticipar el agrado juzgando por
lo que él mismo siente cuando logra satisfacciones, de acuerdo con su nivel económico.
Eso mismo ocurre entre planos o dimensiones. La hormiga vive en primera dimensión.
La mente en ella no pasa de ser un instinto. No le es posible, pues, ni calcular, siquiera
la vida de un hombre. A esto he querido llegar para explicar el término "conciencia" que
tanto usamos en Metafísica y cuando mencionamos la "conciencia espiritual" y la
"conciencia material", "el derecho de conciencia", etc. Es el estado de adelanto o de
atraso. Es el estar conciente de algo, en pleno conocimiento de algo por el hecho de
estar experimentándolo en carne propia o en mente propia.
En cada plano existen adelantados que ya están casi a punto de ascender al próximo
plano de conciencia, y que ya vislumbran, o presienten las condiciones superiores. Entre
los animales hay perros, caballos, etc., de los cuales se dice, "le falta poco para hablar".
Entre los hombres surge un Jesús, por ejemplo, que condesciende en regresar a un plano
inferior con el propósito de enseñar a adelantar.
Este segundo gran principio hermético incorpora la verdad de que hay una armonía,
acuerdo y correspondencia entre los varios planos de manifestación, vida y ser. Esta
verdad es una verdad porque todo lo que está incluido en el universo emana de la misma
fuente, y las mismas leyes, principios y características se aplican a cada unidad o
combinación de unidades, conforme cada una manifiesta sus propios fenómenos sobre
su propio plano.
Estas divisiones son más o menos artificiales y arbitrarias pues la verdad es que todas
las tres divisiones no son sino grados ascendentes de la gran escala de la vida, cuyo
punto más bajo es materia indiferenciada, y el punto más elevado el del espíritu. Y, más
aún, los diferentes planos se solapan uno al otro, de modo que no puede hacerse ninguna
división clara y cortante entre los fenómenos superiores del físico y los inferiores del
mental, o entre los superiores del mental y los inferiores del espíritu.
Así vemos que, el átomo de materia, la unidad de fuerza, la mente del hombre y el ser
del arcángel no son todos sino grados en una escala, y todos fundamentalmente lo
mismo, siendo la diferencia entremedias únicamente una cuestión de grado y de
frecuencia de vibración; todos son creaciones del TODO, y tienen su existencia
únicamente dentro de la mente infinita del TODO.
Frases "correspondientes..."
¿Podría haber un primero y un último, cuando cada ser vive un poco en todos los
demás?
El mundo es como un gran animal. Las partes semejantes pueden ser discontinuas, y sin
embargo gozar de simpatía entre sí en virtud de su semejanza, de modo que la acción de
un elemento espacialmente aislado no dejará de alcanzar a su contraparte más remota.
Plótino
CUENTO:
AL DAÑAR TE DAÑAS
Parvati es una de las diosas más amorosas, benevolentes y misericordiosas del panteón
hindú. Es la consorte de Shiva y se manifiesta como extraordinariamente compasiva.
Cierto día, uno de sus hijos, Kartikeya, hirió a una gata con sus uñas. De regreso a casa,
corrió hasta su madre para darle un beso. Pero al aproximarse al bello rostro de la diosa
se dio cuenta de que ésta tenía un arañazo en la mejilla.
-Madre- dijo Kartikeya-, hay una herida en tu mejilla. ¿Qué te ha sucedido?
Con sus ojos de noche inmensa y profunda, la amorosa diosa miró a su querido hijo. Era
su voz melancólica y dulce cuando explicó:
- Se trata de un arañazo hecho con tus uñas.
-Pero, madre- se apresuró a decir el joven-, yo jamás osaría dañarte en lo más mínimo.
No hay ser al que yo ame tanto como a ti, querida madre.
Una refrescante sonrisa de aurora se dibujó en los labios de la diosa.
-Hijo mío- dijo-, ¿acaso has olvidado que esta mañana arañaste a una gata?
-Así fue, madre- repuso Kartikeya.
-Pues bien, ¿es que no sabes ya que nada existe en este mundo excepto yo? ¿No soy yo
misma la creación entera? Al arañar a esa gata, me estabas arañando a mi misma.
"PRINCIPIO DE VIBRACIÓN"
"Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra".
(El Kybalión)
"Este principio incorpora la verdad de que todo está en movimiento, "todo vibra", "nada
está en reposo"; hechos que la ciencia moderna refrenda, y que cada nuevo
descubrimiento científico tiende a verificar. Y sin embargo, este principio hermético fue
enunciado hace miles de años por los maestros del antiguo Egipto. Este principio
explica que las diferencias entre manifestaciones diferentes de materia, energía, mente,
e incluso espíritu, resultan mayormente de frecuencias de vibración variables. Desde EL
TODO, que es espíritu puro, bajando hasta la forma más grosera de materia, todo está
en vibración - cuanto más alta la vibración, más alta la posición en la escala-. Un
entendimiento de este principio, con las fórmulas apropiadas, capacita a las personas a
controlar sus propias vibraciones mentales, así como las de otros. Los maestros también
aplican este principio a la conquista de los fenómenos naturales". (El Kybalión)
"A través de esta ley podemos deducir también, que el vehículo de acción o el medio de
concreción de la creación es la palabra. La palabra es vibración y poder sobre las
formas, porque decreta y materializa las cosas alrededor de uno y en uno. Es más: la
palabra es la que da forma a las cosas. Por la palabra se puede construir y hasta destruir.
La palabra es una llave que puede abrir puertas entre las dimensiones, así como puede
aperturar las conciencias y los corazones de los semejantes, pero sólo si esta es bien
empleada por alguien puro de corazón. Los grandes problemas de nuestra actual
humanidad se resumen en la carencia de comunicación, en la abundancia de mensajes
sin poder; de las palabras sin una vibración superior. La carencia de un ejemplo de vida
y la falta de consecución de las enseñanzas ha hecho a las palabras vanas y vacías. Por
ello sólo se enseña bien cuando las palabras van acompañadas por el ejemplo. Cuando
restablezcamos el contacto interno y como consecuencia recuperemos el contacto con
nuestros más cercanos, volviendo a ser honestos y sinceros en nuestros pensamientos y
palabras, el universo se hará oír en nosotros y hablará a través de nuestras almas con la
fuerza del poder para abrir mentes y corazones".(Sixto Paz)
Empecemos por pensar en la hélice de un avión. Cuando está inmóvil vemos las astas;
dos remos de madera fijos a un eje. De pronto se ponen en movimiento, van acelerando
y al rato no vemos nada! Se vuelven transparentes. Esto es lo que ocurre con la alta
frecuencia. Por esto mismo es que no vemos a los espíritus, a los seres más elevados.
Algunos de ellos viven aquí en medio de nosotros pero en una frecuencia de vibración
diferente a la de nuestros cuerpos de carne y hueso. En cambio la inmovilidad de una
roca, que también se mueve en su propia frecuencia de vibración, es porque su vibración
es excesivamente lenta.
El pensamiento positivo vibra a una frecuencia altísima. Sus colores son brillantes,
claros, luminosos. El pensamiento negativo vibra lentamente y sus colores son opacos.
Cuanto más negativos, tanto más sombríos y tanto mas bajo el "tono" de su sonido.
(Estos colores se manifiestan en nuestra aura y los verdaderos maestros están
capacitados para verlos. De ahí que se diga que el maestro conoce más al discípulo que
el propio discípulo).
El pensamiento positivo, como la mente que está polarizada en plano positivo, no puede
ser dominado por una vibración baja. Jesús dijo: "El dios de este mundo viene a mí y no
encuentra nada en mí para asirse". El dios de este mundo es el polo negativo que es lo
que impera en la mayoría de las mentes. Todo lo que es materia está siempre en
movimiento circular. Girando en torno a algo más grande como los planetas que giran
alrededor del sol. Este es el patrón universal para todo lo material.
Los pensamientos e ideas respecto a Dios, sobre los Maestros de Sabiduría, sobre el Yo
Superior o sobre todo lo noble y puro tienen vibraciones altísimas. Estas elevan
cualquier vibración menor, pudiendo curar enfermedades, resolver problemas, etc.
"Extractos de "el maravilloso número 7"
Del extracto de "el maravilloso número 7" se desprende la gran importancia de intentar
purificar nuestro interior para poder emanar la mayor cantidad posible de buenos
pensamientos, de buenas vibraciones. Conociendo este principio, también podemos
entender por qué cuando entramos a una casa a la cual nunca habíamos entrado,
sentimos un fuerte rechazo o una gran armonía. Los pensamientos y sentimientos de sus
habitantes conforman la energía general de esa casa. Dicen que se van acumulando en
los ángulos rectos de las habitaciones. Por este motivo las construcciones de la nueva
era tienden a ser curvas y no rectas.
Viendo este principio de vibración desde otro ángulo, más de una vez nos hemos
preguntado: ¿cómo podemos ayudar a la humanidad, a revertir el actual estado de
cosas? No tenemos que hacer nada estrambótico ni difícil. Simplemente estando atentos
a nuestros pensamientos, y controlándolos, estamos ayudando muchísimo. Como dicen
los budistas, en este campo existen tres pasos a seguir:
Este principio nos dice que no sólo está toda cosa en movimiento y vibración
constantes, sino que las "diferencias" entre las diversas manifestaciones del poder
universal, son debidas enteramente al grado y modo variables de las vibraciones.
De esta manera, tanto la materia, como la energía, como los fenómenos de la mente, son
igualmente diferentes modos de vibración, al igual que el TODO, que también es
vibración.
Una pequeña reflexión de lo que hemos dicho nos mostrará que el principio de
vibración subyace en los maravillosos fenómenos de poder manifestados por los
maestros y adeptos, que son capaces de dejar a un lado aparentemente las leyes de la
Naturaleza, pero que, en realidad, están simplemente usando una ley contra otra, un
principio contra otros; y que consiguen sus resultados cambiando las vibraciones de los
objetos materiales, o formas de energía, y ejecutan así lo que comúnmente se llaman
"milagros".
"PRINCIPIO DE POLARIDAD"
"Todo es dual; todo tiene polos; todo tiene su par de opuestos; semejante
y desemejante son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza,
pero diferentes en grado: los extremos se encuentran; todas las verdades
no son sino medias verdades; todas las paradojas pueden ser
reconciliadas". (El Kybalión)
"Este principio explica las viejas paradojas, que han dejado perplejos a tantísimos, que
han sido establecidas como sigue. "Tesis y antítesis son idénticas en naturaleza, pero
diferentes en grado"; "los opuestos son lo mismo, difiriendo sólo en grado"; "los pares
de opuestos pueden ser reconciliados"; "los extremos se encuentran"; "todo es y no es al
mismo tiempo"; "todas las verdades no son sino medias verdades"; "toda verdad es
medio falsa; "hay dos lados para todo".
Explica que en todo hay dos polos, o aspectos opuestos, que los "opuestos" son
realmente sólo los dos extremos de la misma cosa, con muchos grados variables entre
ellos. Para ilustrar esto: calor y frío, aunque "opuestos", son realmente la misma cosa,
consistiendo la diferencia meramente de grados de la misma cosas. Si miramos nuestro
termómetro, cómo podemos saber dónde termina el "calor" y comienza el frío. No hay
tal cosa como el "calor absoluto" o el "frió absoluto". El mismo principio se manifiesta
en el caso de luz y oscuridad, duro y blando, alto y bajo, etc.
Al frío se opone el calor, al arriba el abajo, a la luz la oscuridad, al bien, el mal. Pero
ambos se necesitan mutuamente; si no existiera la sombra, la luz nos sería irreconocible
como tal. Si no existiera el Mal, no habría nada meritorio en hacer el Bien. Si alguna
vez no fuéramos infelices, ¿cómo sabríamos cuándo somos felices?. Es lo que expresa
el símbolo del "pakua" chino, quizás más, y erróneamente, conocido con el nombre de
"yin y yang", ese círculo dividido por una sinusoide, blanco de un lado y negro del otro
y con sendos pequeños círculos de iguales colores pero invertidos en cada mitad.
Fíjense ustedes, asimismo, el profundo conocimiento psicológico encerrado en esa
figura.
Según observara el gran psicólogo suizo Carl Gustav Jung, todo ser humano masculino,
para realizarse y ser completo como tal, debe tener algunas leves características de las
que habitualmente se atribuyen a la feminidad en su personalidad: ternura, compasión,
etc., que conforman lo que Jung denominó el "ánima" del varón. Y lo contrario
caracteriza a la mujer realizada, que a través de su "ánimus" expresa coraje, agresividad,
etc. Un hombre o una mujer sólo dominados por lo inherente a su sexo serían algo así
como extremistas psicóticos, él un "duro" a lo Bogart sobreactuando y ella una pasiva
histérica. Es decir, lo "yang" masculino necesita algo de "yin" femenino para ser
perfecto y viceversa. Entonces, polaridades opuestas, pero complementarias.
El uni-verso en que vivimos es una armonía de espíritus, una sinfonía etérea donde cada
nota por sí sola parece carecer de valor, pero todas se necesitan -ensambladas entre sí
mediante alguna Inteligencia- para que resuene la música.
Jaime Londoño
Todo es dual, todo tiene dos polos
Este cuarto principio encierra la verdad de que todas las cosas manifestadas tienen dos
aspectos, son un par de opuestos con innumerables grados entre ambos extremos.
Aquellas antiguas y eternas paradojas que han confundido las mentes como: "Todo es y
no es, al mismo tiempo", "La tesis y la antítesis son idénticas en naturaleza", y "Los
extremos se tocan", quedan explicadas si se medita este principio.
La Ley de Polaridad explica que lo que existe entre cosas diametralmente opuestas es
solamente cuestión de grados, y afirma que todo par de opuestos puede reconciliarse
mediante la aplicación de esta Ley. Vamos a examinar este principio vinculado
especialmente con el plano mental.
Los pares de opuestos existen en todo. Donde encontramos una cosa encontramos
también su opuesto. Esto es lo que permite transmutar un estado mental en otro,
siguiendo las líneas de polaridad. Las cosas diferentes no pueden transmutarse unas a
otras, pero sí las de igual clase. Por ejemplo, el amor no puede transmutarse en Este u
Oeste, pero sí puede tornarse en odio, e igualmente (y esto es lo que más nos interesa).
El metafísico sabe que la enfermedad es una apariencia producida por una forma
mental, creación del individuo. Es ignorancia y credulidad. Sabe que la Verdad eterna es
Vida. Sabe que se está manifestando una enfermedad porque aquella persona está
creyendo en la realidad de la forma mental que él ha creado. Creamos lo que creemos.
Polariza todo lo que puedas y a todos los que puedas y así serás lo que llamó Jesús: "La
Sal de la Tierra".
"El maravilloso número 7".
AXIOMAS HERMÉTICOS I
No hay que perder el tiempo tratando de arrojar afuera la oscuridad, sino que es
muchísimo mejor abrir las ventanas y dejar entrar la luz, y la oscuridad desaparecerá por
sí sola. Para matar una cualidad negativa es necesario concentrarse sobre el polo
positivo de esa misma cualidad, y las vibraciones cambiarán gradualmente de negativas
a positivas, hasta que finalmente se polarizará en polo positivo, en vez de estarlo en el
negativo. La inversa también es verdad, porque muchos han encontrado el DOLOR por
haberse permitido vibrar demasiado constantemente en el polo negativo de las cosas.
"La mente, así como los metales y los elementos, pueden transmutarse de grado en
grado, de condición en condición, de polo a polo, de vibración en vibración".
(El Kybalión)
AXIOMAS HERMÉTICOS II
Las masas se dejan arrastrar, obedeciendo al ambiente que las rodea, a las voluntades y
deseos de algunos hombres más fuertes que ellas, a los efectos de las tendencias
heredadas o a las sugestiones u otras causas exteriores, no siendo más que fichas en el
tablero de ajedrez de la vida. Elevándose sobre esas causas, el hermético avanzado
busca un plano de acción mental superior, y dominando sus propias cualidades, se crean
un nuevo carácter, cualidades y poderes, mediante los cuales se sobreponen a su
ambiente ordinario, haciéndose así directores en vez de dirigidos.
"El sabio sirve en lo superior, pero rige en lo inferior. Obedece a las leyes que
están por encima de él, pero en su propio plano y en las que están por debajo de el
rige y ordena. Sin embargo, al hacerlo, forma parte del principio en vez de
oponerse al mismo. El sabio se sumerge en la Ley, y comprendiendo sus
movimientos, opera en ella en vez de ser su ciego esclavo. Aquel que esto
comprenda va en el buen camino que conduce al Adepto".
(El Kybalión)
Este axioma hermético indica que el ambiente externo se influencia mediante el poder
de la mente.
"El Universo, que es totalmente mental, sólo puede ser dominado mediante la
mentalidad."
(El Kybalión)
LEY DE SINCRONICIDAD.
Todo existe en pares, dijimos. Y cada evento, sea material, psíquico, espiritual, tiene su
contrapartida. Es el caso de las partículas elementales, según apunta la física cuántica,
que una vez estuvieron en contacto y a partir de lo cual mantienen una extraña "ligazón"
por sobre el tiempo y el espacio. Jung llamó a esto "sincronicidad" y el físico Wolfang
Pauli las llamó "coincidencias significativas". Un acto telepático sería entonces una
sincronicidad eventual simbólica entre dos o más psiquis. Un evento telekinético, por su
parte, es un ente psicoide entre la imagen mental de un movimiento y el fenómeno
mecánico que se efectiviza en un marco material. Los antiguos filósofos medioevales
decían que no cae una aguja en el mundo de los hombres sin que tiemble una estrella, y
los sacerdotes aztecas hablaban de que cada hombre tiene su "náhual", una contraparte
animal o vegetal, de manera tal que lo que le pase a uno le sucederá al otro. Muere un
animal en el bosque y un hombre rueda víctima de un síncope. Se descompone una
mujer, y un árbol cae vencido a los pies del leñador.
Los propios sucesos que acompañaron la muerte de Jung son quizás la manifestación
poéticamente más contundente de la propia Naturaleza para demostrar a los hombres la
realidad inapelable de esta ley.
En los años postreros de su vida, el genial psicólogo se había retirado a su mansión
solariega de Klüsnacht, donde de joven había plantado un roble a cuya atención
dedicara tiempo preferencial. Bajo ese árbol se retiraba a meditar, fumando su pipa, o a
repasar originales de sus últimas obras. Era, a todas luces, el "roble de Carl". Ahora
bien, en el preciso momento en que este gran hombre fallece de un ataque cardíaco, el
15 de junio de 1961 a las tres de la tarde, un rayo se desprende del tormentoso cielo
suizo e impacta en el roble de Jung, matándolo. El rayo podría haber caído a cien
kilómetros de distancia o en cualquier otro árbol, media hora antes o dos días después.
Pero tuvo que ser en ese árbol en ese momento como para señalar con este acto teatral
que, después de todo, Jung tenía razón y su enunciación de la Ley de Sincronicidad era
un hecho. Jaime Londoño
Si lo miramos desde otro punto de vista podemos inferir también que toda realización
cuesta esfuerzo y genera una fuerza de oposición, pudiendo medirse el valor e
importancia de lo que se hace por el grado de dificultad antes, durante o después. Por
ello, no debemos amilanarnos cuando las cosas se nos complican pareciendo no tener
solución, por cuanto todo lo que realmente vale, exige una máxima dedicación y suele
ser un camino lleno de escollos, que va probando palmo a palmo nuestra voluntad y
convicción.
El mundo ideal no existe, por lo tanto hay que crearlo todos los días y en todo lugar con
la conciencia despierta y actitudes positivas que influyan sobre el ambiente y las demás
personas.
Sixto Paz
"Este principio incorpora la verdad de que en todo hay manifestada una moción medida,
a un lado y otro; un flujo y un reflujo; un vaivén hacia atrás y hacia delante; una mengua
y una crecida como una marea; una pleamar y una bajamar; entre los dos polos que
existen de acuerdo con el principio de polaridad descrito anteriormente. Hay siempre
una acción y una reacción; un avance y un retroceso; una elevación y un hundimiento.
Esto es así en los asuntos del universo, soles, mundos, hombres, animales, mente,
energía y materia. Esta ley está manifiesta en la creación y destrucción de mundos; en la
elevación y caída de naciones; en la vida de todas las cosas; y finalmente en los estados
mentales del hombre. Los hermetistas aplican la ley mental de neutralización. No
pueden anular el principio, o hacerle cesar su operación, pero han aprendido cómo
escapar a sus efectos sobre ellos mismos hasta un cierto grado. Han aprendido cómo
USARLO, EN VEZ DE SER USADOS POR EL. El maestro de las enseñanzas
herméticas se polariza en el punto en el que desea reposar, y neutraliza entonces la
oscilación rítmica del péndulo que tendería a conducirle al otro polo. Todos los
individuos que han alcanzado cualquier grado de auto-maestría hacen esto hasta un
cierto grado, más o menos inconscientemente, pero el maestro hace esto
conscientemente, y por el uso de su voluntad, y alcanza un grado de aplomo y firmeza
mental casi imposible de creer por parte de las masas que son balanceadas hacia atrás y
hacia delante como un péndulo".
El Kybalión
El ritmo es compensación
En el Plano Espiritual, por ejemplo, siempre hay una emanación seguida de una
absorción. Nosotros emanados de Dios nacemos (descendemos a conciencia material) y
luego morimos (somos absorbidos a conciencia espiritual). Este es nuestro Gran Ritmo.
Es una evolución rítmica ASCENDENTE, en nuestro nacer y morir. Es la Exhalación y
la Inhalación de Brahmán, según dicen los Hindúes (Mambántara y Pralaya).
Los universos se crean, alcanzan el punto más bajo de materialidad (como nosotros en
este momento) y entonces comienza la oscilación de vuelta, acercándose hacia el grado
más alto de espiritualidad (como nosotros en este momento, hacia allí vamos. Estamos
"tocando fondo", para desde ahí agarrar impulso e iniciar nuestro camino de ascenso,
una vez más. La evolución no es en línea recta sino cíclica, rítmica. Pero sí es
ascendente. Aunque a veces no parezca, estamos evolucionando...).
"También lo vemos en todas las fases de la humana actividad. Las mareas de la vida
fluyen y refluyen de acuerdo con la ley, y así vemos suceder nuestros estados de ánimo
fluctuantes, nuestros sentimientos, nuestros estados mentales. Vemos que empezamos
algo con gran entusiasmo que no sabemos cuándo ni por qué decae, y luego vuelve y así
nos va manejando este Principio porque él, como toda ley, es inmutable. Siempre se
cumple; pero al estudiarlo y conocerlo y saber que él siempre está en función, se
aprende a usar igual que lo hacemos con el resto de las leyes. Lo que quiero decir es que
estas leyes no son ni buenas ni malas. Simplemente garantizan el funcionamiento
amónico del Universo y es nuestro conocimiento y uso de ellas lo que las hace buenas o
malas para cada quien. Este principio, como los otros no se puede eludir, pero al
conocerlo, nosotros dejamos de permitir que juegue con nosotros y nos lleve de allá
para acá, logrando eludir sus efectos hasta cierto grado. Todo el que ha adquirido cierto
grado de dominio sobre sí mismo ejecuta esto hasta cierto punto. Consciente o
inconscientemente. Esta actitud es la que nos lleva al tan mentado EQUILIBRIO que
todos deseamos alcanzar en nuestra vida. Equilibrio, estabilidad, firmeza mental, etc."
"El maravilloso número 7"
Los hermetistas van más lejos y enseñan que los estados mentales de un hombre están
sujetos a la misma ley. El hombre que goza agudamente, está sujeto a agudo
sufrimiento, mientras que aquel que no siente sino poco dolor no es capaz de sentir sino
poco gozo. Hay temperamentos que no permiten sino bajos grados de regocijo, y grados
de sufrimiento igualmente bajos; mientras que hay otros que permiten el más intenso
regocijo, pero también el más intenso sufrimiento. La regla es que la capacidad para el
dolor y el placer, en cada individuo, están equilibradas. La ley de compensación está en
plena operación aquí.
También nos explica El Kybalión que antes de que uno sea capaz de gozar de un cierto
grado de placer, debe haber oscilado igual de lejos, proporcionalmente, hacia el otro
polo de sentimiento...
El Kybalión
"Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de
acuerdo con Ley; la suerte no es más que el nombre que se le da a una ley
no conocida; hay muchos planos de casualidad, pero nada escapa a la
Ley". (El Kybalión)
Este principio encierra la verdad de que todo efecto tiene su causa, y toda causa su
efecto. Afirma que nada ocurre casualmente y que todo sucede conforme a la Ley. La
suerte es una palabra vana, y si bien existen muchos planos de causa y efecto,
dominando los superiores a los inferiores, aun así ninguno escapa totalmente a la Ley.
Las muchedumbres se dejan llevar, arrastradas por el medio ambiente que las envuelve
o por los deseos y voluntades de los demás, si éstos son superiores a las de ellas. La
herencia, las sugestiones y otras múltiples causas externas las empujan como autómatas
en el gran escenario de la vida. Los Maestros obedecen a la causación de los planos
superiores al en que se encuentran, pero prestan su colaboración para regular y regir en
su plano.
En el Universo nada ocurre por azar, por casualidad. Cuando el ser humano no ve lógica
o razón de ser en el devenir de una serie de circunstancias, sean estos fenómenos físicos
o problemáticas sociales o personales, atribuyendo su aparición a algún aspecto
aleatorio, sólo está reconociendo con ello su ignorancia de principios más trascendentes
y, por ello, quizás incognoscibles. En efecto, si existe una inteligencia divina, de la cual
por emanación de la Ley de Mentalismo la humana es apenas una ínfima parte, aunque
procedamos racionalmente (o quizás precisamente por ello), ¿es lícito esperar que ese
corpúsculo pueda entender los designios de lo Trascendente, por más que sea parte
necesaria de él?. Yo no sería un yo completo, por ejemplo, si me fuera amputado un
dedo pero, ¿no resultaría ridículo esperar que mi dedo, por sí mismo (o las células que
lo forman) pueda comprender qué soy yo, para qué y por qué lo uso para un
determinado fin o las razones que me llevan a amputarlo?. O como dijera el poeta: "La
casualidad es el pseudónimo de Dios cuando quiere permanecer anónimo". Todo efecto,
entonces, tiene su causa aunque ésta, hoy por hoy, nos sea incomprensible. Esto explica
el estudio, en Parapsicología y Astrología, de lo que se denomina SPA, o Signos
Precursores de Acontecimientos, el modo de "leer" los avatares de la vida para entender
su postrer significado.
Jaime Londoño
Causas y efectos
La mente es un motor. Los pensamientos son fuerza o energía que genera la mente. Esta
energía sale de nuestra mente en vibraciones, que por obra y gracia de la ley del Ritmo,
regresa a nosotros trayéndonos el futuro que hemos sembrado. Si hacemos un bien a
alguien o si hablamos bien de alguien, esas palabras o ese acto bueno sale en
vibraciones de color. Ese color atrae las vibraciones de su mismo color y te regresan
aumentando el bien que hiciste. Te ocurren cosas bellas, cosas milagrosas, y dices: Qué
casualidad!! Mira lo que me sucedió hoy de mañana...!
Si piensas o hablas mal de alguien, es negativo. Lo has sembrado en polo negativo, sale
de color gris o negro, dependiendo de la cantidad de maldad que contiene, recoge en su
camino cantidad de energía del mismo color y te regresa aumentado en fuerza. Si
criticas, serás criticado; si dañas a alguien o a algo, serás dañado o algo tuyo sufrirá un
daño; si eres injusto, esa injusticia se te devuelve igualmente. Esas causas que siembras
tienen que dar su fruto en efectos, antes que quedes liberado. Si siembras discordias,
tienes que recoger discordias; si siembras bondad, amor, ayuda, tienes que recoger eso.
Lo que siembras, que sea constructivo o destructivo, lo verás devolverse. ¿Cómo puede
la gente seguir creyendo que pueden impunemente ser crueles, calumniadores,
malhumorados, violentos, mezquinos y esperar tener salud, amor, felicidad, es decir,
todas las cosas buenas de la vida, si sólo siembran las cosa malas? El mundo entero se
lo pasa enviando odio, egoísmo, discusiones, ... por lo tanto, recogen la cosecha en
cuestión: caos, guerras y molestias de toda clase.
Muchas veces las personas a quienes hemos dañado en alguna forma se mueren antes de
que se haya podido saldar la cuenta con ellas, y TIENE que haber una oportunidad para
saldarla en el futuro, porque Dios es infinita misericordia y no deja a un hijo suyo en
eterno castigo sin darle oportunidad de saldar sus deudas. Por eso es que Dios ha
instituido la reencarnación. Para dar oportunidad de pagar las deudas, y... para dar
también oportunidad de cobrar el bien carnal y material que hayamos merecido y que no
se puede cobrar en un plano invisible e inmaterial.
Cuando entre dos personas existe una atracción de amor y armonía, es seguro que
estuvieron en contacto y asociación armoniosa en vidas anteriores, y pueden expandir
esta cualidad tan necesitada en el mundo. Cuando noten un sentimiento de resistencia
contra alguien, es que las sensaciones recuerdan una asociación discordante o
desagradable.
Es muy confortante saber que el perdón de Dios, por el mal uso de su energía, siempre
esta a la mano para aquellos que lo desean realmente. Aquel "Fuego Eterno" y "Castigo
Eterno" que inventaron las religiones de la Era pasada para controlar al mundo a través
del temor, la superstición y la obediencia ciega, no son verdad. Cualesquiera que sean
las causas, el pecado, la imperfección, el error que hayan sido cometidos, hay una
manera consciente de transmutar esos errores.
Cuando los humanos se dan cuenta de que ellos mismos son los causantes de todos sus
males y de todas sus bendiciones, es en ese momento cuando se hacen responsables de
su destino y dejan de buscar culpables.
"El maravilloso número 7"
"Aquel que conoce con Comprensión éstos 7 principios de la Verdad, posee la llave
mágica ante cuyo toque todas las puertas del templo se abren de repente"