Perspectivas para El Siglo XXI
Perspectivas para El Siglo XXI
Perspectivas para El Siglo XXI
León Trahtemberg, en la entrevista citada, nos presenta una nueva visión del enfoque de
una educación organizada para el futuro. Veamos algunos de sus mensajes:
Las nuevas formas de educación no se condicen con el estilo de educar del siglo
XX.
Con el enfoque del siglo XX todo se define afuera del niño: ley, programa,
curriculum, contenidos, evaluaciones, horario. Todo lo define el ministerio, el
director, el maestro.
Debemos formar ciudadanos que sean personas inteligentes, activas, con
iniciativa, con capacidad de investigación, propuestas y trabajo en equipo. Que
sean innovadores y creativos.
¿Cómo puede lograrse eso en escuelas en las que le piden al alumno que no
hable, que no se mueva, que solo haga lo que le piden hacer?
Tenemos que poner al niño al centro del modelo educativo.
Se debe trabajar por proyectos interdisciplinarios.
El alumno debe aportar las cosas que desea investigar.
Si todo viene cocinado en el libro y las guías, el alumno no participa.
El profesor debe investigar como fomentar y facilitar los espacios de desarrollo
sugeridos por los niños.
Todo se puede hacer con las personas [maestros] con que hoy contamos. Hay que
capacitar e inspirar.
El nuevo curriculum es retrógrado, inmaduro, no rescata las innovaciones que ya
se hacen en el Perú.
Está inspirado en una visión del siglo V o VI.
El mundo ya pasó de la economía del conocimiento a la economía de la
innovación.
Las escuelas deben ser un espacio para crear éxito. Hoy son fábricas de
fracasados.
El esquema actual desintegra las materias y pretende que luego el niño las integre.
El enfoque educativo debe ser interdisciplinario en la estructura y no una estructura
segmentada por curso.
Deberíamos convertir al Perú en un gran laboratorio de innovación educativa y
darle a las escuelas las facilidades para innovar. Y luego, llevar al resto, los
mejores desarrollos.
En PISA, luego de partir de un nivel muy bajo en el 2000, en las pruebas del
2012 fue el país que más avanzó en las pruebas de lectura, y si bien las
pruebas de matemáticas y ciencias no son estrictamente comparables se
constata que las mejoras fueron igualmente sustantivas.
Los desafíos
Del estudio se desprende que al Perú se le plantean enormes desafíos para
el futuro. Uno de ellos es aumentar el gasto público en educación y la
inversión pública por estudiante para acercarnos a los US$ 2 000 que en
promedio ya invierten los países analizados. Una elevación de la inversión
por estudiante traería consigo la mejora de la remuneración docente y la
sostenibilidad de inversiones en recursos didácticos, capacitación e
infraestructura, también indispensables. Afortunadamente la perspectiva del
Perú, no obstante una desaceleración de su economía, es aún favorable, a
lo que se asocia una mayor toma de conciencia social sobre la necesidad
de apostar por la educación.
Ciertamente que habrá que superar los nudos que hasta ahora han venido
impidiendo mejores logros en la educación peruana. Uno de ellos es la
docencia que requiere de políticas integrales y articuladas. No basta
enfrentar una o algunas de sus aristas sino toda la complejidad de su
problemática. Mejora salarial, carrera más exigente y basada en criterios de
mérito, trabajo en jornada completa al igual que otros trabajadores,
captación de jóvenes talentosos para la docencia, currículo de formación
que responda a lo que los profesores enfrentarán en las aulas y a los retos
del cambio científico y tecnológico, variados materiales de apoyo para la
formación y el trabajo en las aulas, acompañamiento y supervisión eficaces,
son parte de esa compleja demanda de medidas que hay que implementar
si se quieren maestros más idóneos.