HIMNOS

1. ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Ante Ti se postra,

Señor Omnipotente, bañada de tu lumbre
siempre el labio mío ante Ti, que has sido,
loores te dará. que eres y serás.
¡Santo! ¡Santo! ¡Santo!
te adoro reverente ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo!
Dios en tres personas, por más que estés velado,
bendita Trinidad. e imposible sea
tu gloria contemplar.
¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Santo tu eres solo,
en numeroso coro, y nadie hay a tu lado
santos escogidos en poder perfecto,
te adoran sin cesar. pureza y caridad.
De alegría llenos
y sus coronas de oro ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo!
rinden ante el trono la Gloria de tu Nombre
y el cristalino mar. vemos en tus obras
en cielo, tierra y mar;
¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo!
la inmensa muchedumbre te adorará todo hombre,
de ángeles que cumplen Dios en tres personas,
tu santa voluntad. >>> Bendita Trinidad.

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2. A nuestro Padre Dios, 3. Jesús es mi Rey soberano;
demos en alta voz, Gloria a El: mi gozo es cantar su loor;
Al Dios que nos amó es Rey, y me ve cual hermano,
de modo que nos dio es Rey, y me imparte su amor.
al Hijo que murió: ¡Gloria a Él! Dejando su trono de gloria,
me vino a sacar de la escoria,
A nuestro Salvador, y yo soy feliz, y yo soy feliz por El.
rindamos con fervor, Gloria a El:
Su sangre derramó, Jesús es mi amigo anhelado,
con ella nos lavó, y en sombra o en luz siempre va;
el cielo nos abrió: ¡Gloria a Él! paciente y humilde a mi lado,
y ayuda y socorro me da.
Al gran Consolador, Por eso constante lo sigo,
que diónos el Señor, ¡Gloria a Él! porque Él es mi Rey y mi amigo,
Fuego y poder de DIOS y yo soy feliz, y yo soy feliz por El.
transforma al pecador
prepara el retornar de Cristo el Rey. Señor, ¿Que pudiera yo darte,
por tanta bondad para mí?
Con gozo y amor ¿me basta servirte y amarte?
cantamos con fervor, al Trino Dios. ¿es todo entregarme yo a Ti?
Mora en la eternidad Entonces acepta mi vida,
la Santa Trinidad; que a Ti sólo queda rendida,
¡Hermanos alabad al Trino Dios! pues yo soy feliz, pues yo soy feliz por Ti.

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4. Cerca de ti, Señor, quiero morar; 5. Pecador ven a Cristo Jesús,
tu grande, tierno amor y feliz para siempre serás,
quiero gozar. que si tú le quisieres tener
Llena mi pobre ser, limpia mi corazón, al divino Señor hallarás.
hazme tu rostro ver
en comunión. Coro:
Ven a Él, pecador,
Pasos inciertos doy, el sol se va; ven a Él, pecador,
mas si contigo estoy que te espera tu buen Salvador;
no temo ya. ven a El pecador,
Himnos de gratitud ferviente cantaré, ven a El pecador,
y fiel a ti, Jesús, que te espera tu buen Salvador.
siempre seré.
Si cual hijo que necio pecó,
Día feliz veré creyendo en ti, vas buscando a sus pies compasión,
en que yo habitaré, tierno Padre en Jesús hallarás,
cerca de ti. y tendrás por su sangre perdón.
Mi voz elevará tu dulce nombre allí,
y mi alma gozará Ovejuela que huyó del redil,
cerca de ti. da tú voces al buen Salvador,
y en los hombros llevada serás,
de tan tierno y amante Pastor.

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6. Que mi vida entera esté Toma Tú mi amor, que hoy
consagrada a Ti, Señor; a tus pies vengo a poner;
que a mis manos pueda guiar toma todo lo que soy,
el impulso de tu amor. todo tuyo quiero ser.
Coro:
Lávame en tu sangre, Salvador, 7. Mansión gloriosa tengo yo en el cielo,
límpiame de toda mi maldad, do las maldades nunca entrarán.
traigo a Ti mi vida, Toda tristeza cambiará en consuelo,
para ser, Señor; tuya por la eternidad. y en dulce canto el dolor y afán.
Coro:
Que mis pies tan sólo en pos Bellas mansiones hay allá en la gloria;
de lo santo puedan ir, tendré en la mía el gozo sin par.
y que a ti, Señor, mi voz, Suenan las notas de la grata victoria;
se complazca en bendecir. voy pues con gozo a mi dulce hogar.

Que mi tiempo todo esté En este mundo predomina el llanto,

consagrado a tu loor, somos sujetos al dolor fatal;
que mis labios al hablar, mas en el cielo cesará el quebranto
hablen sólo de tu amor. y por los siglos nunca habrá más mal.

Toma ¡oh Dios! mi voluntad, Amigo mío, cuanto anhelo yo verte

y hazla tuya, nada más; libre de penas y de turbación.
toma, sí, mi corazón, A Jesucristo debes ya entregarte,
por tu trono lo tendrás. >>> tendrás también una bella mansión.

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8. Grande gozo hay en mi alma hoy, 9. Aunque en esta vida no tengo riquezas,
pues Jesús conmigo está; sé que allá en la Gloria, tengo una mansión;
y su paz que ya gozando estoy,
por siempre durará. cual alma perdida entre las pobrezas,
Coro: de mí, Jesucristo tuvo compasión.
Grande gozo, ¡Cuan hermoso!
Paso todo el tiempo bien feliz; Coro:
porque veo de Cristo la sonriente faz,
grande gozo siento en mí. Más allá del sol,
más allá del sol,
Hay un canto en mi alma hoy; yo tengo un hogar,
melodías a mi Rey; hogar, bello hogar
en su amor feliz y libre soy, más allá del sol.
y salvo por la fe.
Así por el mundo yo voy caminando,
Paz divina hay en mi alma hoy, de pruebas rodeado y de tentación.
porque Cristo me salvó; Pero a mi lado viene, consolando,
las cadenas rotas ya están; mi Bendito Cristo en la turbación.
Jesús me libertó.

Gratitud hay en mi alma hoy, A los pueblos todos del linaje humano,
y alabanzas a Jesús; Cristo quiere darles plena salvación.
por su gracia a la gloria voy, También una casa para cada hermano
gozándome en la luz. fue a prepararles a la Santa Sión.

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10. Señor, mi Dios, Cuando recuerdo
al contemplar los cielos, del amor divino,
el firmamento y las estrellas mil; que desde el cielo
al oír tu voz al Salvador envió;
en los potentes truenos aquel Jesús
y ver brillar que por salvarme vino
el sol en su cenit: y en una cruz
Coro: sufrió por mí y murió:
Mi corazón entona la canción,
¡Cuán grande es EL!
¡Cuán grande es EL! Cuando el Señor
Mi corazón entona la canción, me llame a su presencia,
¡Cuán grande es EL! al dulce hogar,
¡Cuán grande es EL! al cielo de esplendor,
le adoraré
Al recorrer, cantando la grandeza
los montes y los valles de su poder
y ver las bellas flores al pasar; y su infinito amor:
al escuchar,
el canto de las aves
y el murmurar
del claro manantial:

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 HIMNOS
11. Pastoréanos, Señor potente,
cuida, oh buen Pastor, tu grey; Coro:
tu sustento placentero dale,
tu redil, tu suave ley. ¡Santo! ¡Santo! Eres Tú, Señor,
Alta ciencia, providencia, ¡Dios de las batallas, Glorioso!
tuyas para nuestro bien;
Bendecido, Rey ungido,
a santificarnos ven. Alabadle
Cielos, tierra y mar,
Tu misión divina es a tus hijos toda su Iglesia, sus mensajeros;
dar salud y santidad; Alabanzas, cantos de loor,
a pesar de ser tan pecadores, hoy unidos elevaremos.
no nos has de desechar. Juez majestuoso y reverendo,
Comunicas dotes ricas fuego y vida eres, Señor.
al que implora tu perdón;
Salvadora Luz que mora
en el nuevo corazón. Rey de siglos,
sólo eterno Dios,
12. ¡Santo! ¡Santo! Veraz y justo, incomprensible;
Grande, eterno Dios. Inmortal, autor de todo bien,
Con alegría hoy te alabamos; eres Tú el Anciano de días,
Rey de reyes, grande Capitán, y para siempre entonaremos
Todopoderoso Guerrero. el canto eterno de Redención.
Honor y gloria, luz y dominio,
tributaremos todos a Ti >>>

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13. ¡Estad por Cristo firmes! demanda gran tesón. >>>
soldados de la cruz; ¡Estad por Cristo firmes!
alzad hoy la bandera Bien poco durarán
en nombre de Jesús. la lucha y la batalla;
Es vuestra la victoria Victoria viene ya.
con El por Capitán, Y a todo el que venciere
por El serán vencidas corona se dará;
las huestes de satán. y con el Rey de gloria,
por siempre vivirá.
¡Estad por Cristo firmes!
Hoy llama a la lid. 14. Te loamos ¡Oh Dios! Con unánime voz
Con El, pues, a la lucha, porque en Cristo tu Hijo nos diste perdón.
¡Soldados todos, id!
Probad que sois valientes Coro:
luchando contra el mal; ¡Aleluya! Te alabamos,
si es fuerte el enemigo, ¡Cuán grande es tu amor!
Jesús es sin igual. ¡Aleluya! Te adoramos, Bendito Señor.
¡Estad por Cristo firmes!
Te loamos, Jesús. Quien tu trono de luz,
Las fuerzas vienen de Él;
has dejado por darnos salud en la cruz.
El brazo de los hombres
es débil y es infiel; Te damos loor, santo Consolador,
vestíos la armadura, que nos llenas de gozo y santo valor.
velad en oración,
deberes y peligros,

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 HIMNOS
Unidos load, a la gran Trinidad,
que es la fuente de gracia, virtud y verdad.

15. Nuestra vida acabará, Pierde el hombre su vigor,

cual las hojas caerá, se marchita cual la flor,
cual el haz se ligará: desvanece cual vapor:
Busca a Dios. Busca a Dios.
Vuela cada día veloz, Como el río aprisa va
y volando da su voz: “Ven a dar hasta entrar al vasto mar,
tu cuenta a Dios”. Busca a Dios. vas así a la eternidad: Busca a Dios.

Coro: Clama a Dios de corazón,

con sincera contrición;
Busca a Dios, busca a Dios, por Jesús Dios da perdón:
entre tanto tengas tiempo, Busca a Dios.
busca a Dios. Si no escuchas al Señor,
Si te atreves a esperar, si desprecias su perdón,
Dios la puerta cerrará, te acarreas perdición: Busca a Dios.
te dirá: “Es tarde ya”. Busca a Dios.

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 HIMNOS
Virtud hay en El, virtud en El.
¿Quieres corona de vida ganar?
por siempre virtud hay en El.
16. ¿Quieres ser libre del vicio y del mal? 17. En presencia estar de Cristo,
Virtud hay en El, virtud en El; ver su rostro ¿Qué será?,
¿Quieres ganar la victoria por El? Cuando al fin en pleno gozo
Por siempre virtud hay en El. mi alma le contemplará.
Coro: Coro:
Hay Poder, sí, sin igual Poder, Cara a cara espero verle
en Jesús, que murió; más allá del cielo azul;
hay Poder, sí, sin igual Poder, cara a cara en plena gloria
por la sangre que vertió. yo veré al Señor Jesús.

¿Quieres ser puro y acepto al Señor? Solo tras oscuro velo,

Virtud hay en El, virtud en El; hoy le puedo aquí mirar,
te limpiará con la sangre que dio; mas ya pronto viene el día
por siempre virtud hay en El. que su gloria ha de mostrar.

¿Quieres ser libre de tu vanidad? ¡Cuánto gozo habrá con Cristo

Virtud hay en El, virtud en El; cuando no haya más dolor,
pide a Jesús que te de su humildad; cuando cesen los peligros
por siempre virtud hay en El. y ya estemos en su amor!

¿Quieres a Cristo servir y agradar?

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 HIMNOS
Cara a cara ¡cuán glorioso Toda mi alma a Cristo ya entregué,
ha de ser así vivir! hoy le quiero y sirvo como a Rey,
¡Ver el rostro de quien quiso por los siglos siempre cantaré
nuestras almas redimir! al Salvador.
18. Años mi alma en vanidad vivió, 19. A los pies de Jesucristo,
ignorando a quién por mi sufrió, es el sitio aquí mejor,
o que en el calvario sucumbió escuchando cual María,
El Salvador. las palabras de su amor.
Coro: A los pies de Jesucristo,
Mi alma allí divina gracia halló, gozare su comunión,
Dios allí perdón y paz me dio, pues su mano fiel y tierna,
del pecado allí me libertó me ha provisto protección.
El Salvador.
A los pies de Jesucristo,
Por la Biblia miro que pequé, hallo tierna compasión,
el quito ya mis afanes,
y su ley divina quebranté;
y me dio su bendición.
mi alma entonces contempló con fe
Puedo yo decirle a Cristo,
al Salvador.
mis cuidados y temor,
y con El tendrá mi alma
En la cruz su amor Dios demostró, gozo, paz, eterno amor.
y de gracia al hombre revistió;
cuando por nosotros se entregó. A los pies de Jesucristo,
El Salvador. yo tendré su bendición;
en sus ojos hay dulzura,

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 HIMNOS
y en su seno protección. a El feliz elevo mi canción,
¡Que feliz es el momento mis culpas El llevó.
que yo paso junto a Ti!
Ya anhelo el encuentro,
cuando vengas Tú por mí.

Ya vivo libre de condenación

20. Cansado y triste vine al Salvador, mis culpas El llevó,
mis culpas El llevó, mis culpas El llevó;
mis culpas El llevó; su dulce paz me llena el corazón,
mi eterna dicha hallé en su amor, mis culpas El llevó.
mis culpas El llevó.
Si vienes hoy a Cristo, pecador,
Coro: tus culpas borrará,
tus culpas borrará;
Mis culpas El llevó, perdón tendrás si acudes al Señor,
mis culpas El llevó, tus culpas borrará.
alegre siempre cantare.
Al Señor gozoso alabaré Coro: II
porque El me salvó.
Tus culpas borrará,
tus culpas borrará
Borrados todos mis pecados son, y limpiará tu corazón;
mis culpas El llevó, y dirás feliz en tu canción:
mis culpas El llevó;

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 HIMNOS
“Mis culpas El llevo” el Cordero de Dios
de mi alma la condenación.

21. En el monte Calvario En la cruz de Jesús

estaba una cruz. do su sangre vertió
Emblema de afrenta y dolor. hermosura contemplo sin par;
Más yo amo a Jesús, pues en ella triunfante
que murió en la cruz a la muerte venció,
por salvar al más vil pecador. y mi ser puede santificar.

Coro:
Yo iré siempre fiel
Gloriareme solo en la cruz, en pos de Jesús
en sus triunfos mi gozo será sus desprecios con El sufriré;
y en el día de eterna salud, y algún día feliz
mi corona Jesús me dará. con los santos en luz
en la gloria con El he de estar.
Y aunque el mundo desprecie
la cruz de Jesús,
para mi tiene suma atracción;
pues en ella llevó

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 HIMNOS
de orar necesidad habrá.
Más desde el día en que yo esté
contigo en suma perfección,
mis oraciones cambiaré
22. A Ti, Dios mío, en oración, en una eterna adoración.
con mi cuidado terrenal, 23. Canten del amor de Cristo,
allégome, y de corazón, ensalzad al Redentor;
te manifestare mi mal. tributadle santos todos,
¡Oh, cuantas veces tuve en Ti grande gloria y loor.
refugio de mi tentación!
Y ¡Cuántas cosas recibí Coro:
de ti, Dios mío en oración! Cuando estemos en gloria,
en presencia de nuestro Redentor,
A Ti Dios mío, en oración, a una voz la historia,
confiando en tu fidelidad diremos del gran Vencedor.
elevaré mi petición,
la voz de mi necesidad. La victoria es segura,
Yo sé que escucharás allá a las huestes del Señor;
que me darás tu bendición, ¡Oh luchad con la mirada
que fortaleza me vendrá puesta en nuestro Protector!
de Ti, Dios mío en oración.
El pendón alzad, cristianos,
Ahora, oh Dios, en oración de la cruz, y caminad;
aliento y gozo a mi alma da; de victoria en victoria,
en este mundo de aflicción siempre firmes avanzad.

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 HIMNOS
Mientras permanezca aquí,
Adelante en la lucha, hazme siempre fiel a Ti.
¡Oh, soldados de la fe!
Nuestro el triunfo, escuchamos Yo de Cristo sólo soy,
los clamores ¡Viva el Rey! a seguirle pronto estoy;
24. En la vergonzosa cruz, al bendito Redentor
padeció por mí, Jesús; serviré con firme amor. >>>
por la sangre que vertió, Sea mi alma ya su hogar
mis pecados El expió. y mi corazón su altar;
lavará de todo mal vida emana, paz y luz
ese rojo manantial; del calvario, de la cruz.
el que abrió, por mí, Jesús,
en la vergonzosa cruz.
Coro: 25. Tal como soy, de pecador,
Si, fue por mí, Si, fue por mí; sin más confianza que tu amor,
fue por mi murió Jesús ya que me llamas, vengo a Ti;
en la vergonzosa cruz. Bendito Cristo, Heme aquí.

¡Oh! ¡Que amor, que inmenso amor! Tal como soy, buscando paz
Reveló mi Salvador; en mi desgracia y mal tenaz,
la maldad que hice yo, conflicto grande siento en mí;
al suplicio le llevo. Bendito Cristo, Heme aquí.
Ahora a ti mi todo doy,
cuerpo y alma tuyo soy.
Tal como soy, me acogerás,
perdón alivio me darás,

- 15 -
 HIMNOS
pues tu promesa ya creí;
Bendito Cristo, Heme aquí. Cuando de otros veas la prosperidad
y tus pies claudiquen tras de su maldad,
Tal como soy, tu compasión cuenta las riquezas que tendrás por fe,
vencido a toda oposición, donde el oro es polvo que hollará tu pie.
ya pertenezco solo a Ti;
Bendito Cristo, Heme aquí. 27. Cuán gloriosa será la mañana
26. Cuando combatido por la adversidad cuando venga Jesús el Salvador;
creas ya perdida tu felicidad; las naciones unidas como hermanas,
mira lo que el cielo para ti guardó, bienvenida daremos al Señor.
cuenta las riquezas que el Señor te dio.
Coro:
Coro: No habrá necesidad
de la luz el resplandor,
¡Bendiciones cuantas tienes ya! ni el sol dará su luz,
Bendiciones Dios te manda más; ni tampoco su calor;
bendiciones, te sorprenderás allí llanto no habrá,
/// cuando veas lo que Dios por ti hará. /// ni tristeza ni dolor,
porque entonces
Jesús el rey del cielo,
para siempre será Consolador.
¿Andas agobiado por algún pesar?
¿Duro te parece amarga cruz llevar? Esperamos la mañana gloriosa
Cuenta las promesas del Señor Jesús, para dar la bienvenida al Dios de Amor;
y de las tinieblas nacerá la luz. donde todo será color de rosa

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 HIMNOS
en la santa fragancia del Señor. y venceréis las huestes de satán.

El cristiano fiel y verdadero Al Rey de reyes, nuestro Salvador Jesús,

y también el obrero de valor; honor y gloria todos tributad,
y la Iglesia, esposa del Cordero, pues ya los suyos gozan de su plenitud
estarán en los brazos del Señor. y pronto reinaran en santidad.
28. ¡A combatir!, resuena la guerrera voz 29. El mundo perdido en pecado se vio:
del Salvador que hoy llamando está; ¡Jesús es la luz del mundo!
sin desmayar seguidle siempre con valor Mas en las tinieblas la gloria brilló,
¡Jesús es la luz de mundo!
y la victoria plena os dará.
Coro:
Coro: ¡Ven a la luz, no debes perder
¡A la batalla, oh fiel cristiano! gozo perfecto al amanecer!
Con el escudo de la fe; Yo ciego fui, más ya puedo ver,
sé buen soldado, pues a tu lado ¡Jesús es la luz del mundo!
está el Príncipe Jesús;
El con su gracia te sostiene, La noche se cambia en día con El:
y con potencia sin igual ¡Jesús es la luz del mundo!
su brazo extiende y te defiende Y andamos en luz tras un guía tan fiel,
en esta lucha contra el mal. ¡Jesús es la luz del mundo!

¡A combatir!, nos llama nuestro Salvador ¡Oh ciegos y presos del lobrero error!
¡Jesús es la luz del mundo!
salid, luchad con nuestro Capitán,
Él manda a lavaros y ver su fulgor,
en la constante lid, seguid sin vacilar

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 HIMNOS
¡Jesús es la luz del mundo! del mundo yo me aparto
y toda vanidad, para consagrar
Ni soles, ni lunas el cielo tendrá, mi vida a mi Señor. >>>
¡Jesús es la luz del mundo!
La luz de su rostro lo iluminará,
¡Jesús es la luz del mundo!

Si el mundo me persigue,
30. Hallé un buen amigo, si sufro tentación,
mí amado Salvador; confiado en Cristo puedo resistir;
contaré lo que Él ha hecho para mí: la victoria me es segura
hallándome perdido y elevo mi canción;
e indigno pecador, ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí!
me salvó y ya me guarda para sí.
Me salva del pecado,
me guarda de satán, Yo sé que Jesucristo
promete estar conmigo hasta el fin; muy pronto volverá;
El consuela mi tristeza, y entre tanto me prepara un lugar
me quita todo afán; en la casa de su Padre,
¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí! mansión de luz y paz,
do el creyente fiel con Él ha de morar.
Llegándome a la gloria,
Jesús jamás me falta, con El yo estaré, contemplaré
jamás me dejará, su rostro siempre allí;
es mi fuerte y poderoso protector;

- 18 -
 HIMNOS
con los santos redimidos imparte salvación.
gozoso cantare: Sé que El viviendo está
¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí! porque vive en mi corazón.

31. Al Cristo vivo sirvo En todo el mundo entero

y El en el mundo está; contemplo yo su amor,
aunque otros lo negaren y al sentirme triste
yo sé que Él vive ya. consuélame el Señor;
Su mano tierna veo, seguro estoy que Cristo
su voz consuelo da, mi vida guiando está,
y cuando yo le llamo, y que otra vez al mundo
muy cerca está. regresará.

Coro:
Regocijaos, cristianos,
Él vive, Él vive, hoy himnos entonad;
hoy vive el Salvador; eternas aleluyas,
conmigo está y me guardará a Cristo el Rey cantad.
mi amante Redentor. La única esperanza es
Él vive, Él vive, del mundo pecador,
no hay otro tan amante
- 19 -
 HIMNOS
como el Señor. ¿Qué te daré Maestro?
divino donador,
tiempo y vigor talento y fervor
serán tuyos, oh Señor.
32. ¿Qué te daré Maestro? 33. Cristo fiel te quiero ser,
Te diste Tú por mí. dame el poder, dame el poder;
¿Menos daré de lo que obtendré? yo contigo quiero andar,
o ¿Todo daré a ti? sin vacilar, sin vacilar.

Coro: Coro:
Cristo mi Salvador, En tus pasos quiero seguir,
te diste Tú por mí; cerca de Ti, cerca de Ti.
tu hogar dejaste allí Y si encuentro pruebas aquí,
para morir por mí. dame confianza en Ti.
¿Qué te daré Maestro?
Te diste Tú por mí, Con Jesús yo quiero hablar,
no la mitad, mas todo mi ser, solo con El, solo con El.
yo lo daré a ti. Paz y gozo yo tendré,
al serle fiel, al serle fiel.
¿Qué te daré Maestro?
Me redimiste a mí. Dame ardiente corazón,
Es pequeñez, mas mi todo es, lleno de amor, lleno de amor;
y todo lo entrego a ti. y tu Espíritu Señor,
como guiador, como guiador.

- 20 -
 HIMNOS
Cada día quiero cumplir,
tu voluntad, tu voluntad.
Y servirte a Ti, Señor,
en humildad, en humildad.

34. ¡Alabado el gran manantial La punzante insignia llevó;

que de sangre Dios nos mostró! en la cruz dejo de vivir;
¡Alabado el Rey que murió; grandes males quiso sufrir,
su pasión nos libra del mal! no en vano Cristo sufrió;
Lejos del redil de mi dueño al gran manantial conducido,
vime pecador, perdido y vil; que de mi maldad ha sido fin,
El cordero sangre vertió; “Lávame” le pude decir,
me limpia sólo este raudal. y nívea blancura me dio.

Coro: Padre de ti lejos vagué;

extravióse mi corazón;
Sé que sólo así como grana mis culpas son,
me emblanqueceré; no con agua limpio seré.
lávame en tu sangre, Jesús; A tu fuente magna acudí;
y nívea blancura tendré. tu promesa creo, oh Jesús.
la eficaz virtud de tu don,

- 21 -
 HIMNOS
la nívea blancura me dé. eres mi fuerza, mi fe, mi reposo,
y por los siglos mi Padre serás.

36. Dejo el mundo, y sigo a Cristo,

35. Oh Dios eterno, tu misericordia porque el mundo pasará;
ni una sombra de duda tendrá; mas su amor, amor bendito,
tu compasión y bondad nunca fallan por los siglos durará.
y por los siglos el mismo serás.
Coro:
Coro: ¡Oh, qué gran misericordia!
¡Oh, de amor sublime don!
¡Oh, tu fidelidad! ¡Oh, tu fidelidad! ¡Plenitud de vida eterna,
Cada momento la veo en mí. prenda viva de perdón!
Nada me falta, pues todo provees,
¡Grande, Señor, es tu fidelidad! Dejo el mundo y sigo a Cristo,
paz y gozo en El tendré;
y al mirar que va conmigo,
La noche oscura, el sol y la luna, siempre salvo estaré.
las estaciones del año también,
unen su canto cual fieles criaturas, Dejo el mundo y sigo a Cristo,
porque eres bueno, por siempre eres fiel. su sonrisa quiero ver,
como luz que mi camino
haga aquí resplandecer.
Tú me perdonas, me impartes el gozo,
tierno me guías por sendas de paz; Dejo el mundo y sigo a Cristo,

- 22 -
 HIMNOS
acogiéndome a su cruz,
y después iré a verle
cara a cara en plena luz.

37. Nada sé sobre el futuro, Mi sendero es más brillante

desconozco lo que habrá, cuando gozo de su amor;
es probable que las nubes, más ligeras son mis cargas
mi luz vengan a opacar. cuando voy a mi Señor.
Nada temo del futuro Cuando llegue a las mansiones
pues Jesús conmigo está, que en la gloria preparó,
yo le sigo decidido ya no más tendré temores,
pues él sabe lo que habrá. desengaños ni dolor.

Coro:
Nada se sobre el futuro,
Muchas cosas no comprendo desconozco lo que habrá;
del mañana con su afán, mas si el cuida de las aves,
más un dulce Amigo tengo, Él también me cuidara.
que mi mano sostendrá. Y al andar por mi camino,
en la prueba o tempestad,
sé que Cristo irá conmigo
sé que guarda su bondad.

- 23 -
 HIMNOS
Mi canción constante sea,
y mi sola inspiración,
proclamar la dicha eterna
38. Consagrarme todo entero del que vive para Dios. >>>
alma, vida, y corazón, ¡Oh qué gozo llena mi alma
es el íntimo deseo al saber que suyo soy,
que hoy me anima, buen Señor. y que pronto en las moradas
estaré de mi Señor!
Coro:
Héme aquí, Señor, 39. Dulce comunión la que gozo ya
a tus plantas hoy, en los brazos de mi Salvador;
pues a Ti consagrar quiero ¡Qué gran bendición en su paz me da!
todo lo que soy. ¡Oh! yo siento en mí su tierno amor.

Al contrito has prometido Coro:

que de ti no arrojarás Libre, salvo,
hoy propicio eres conmigo del pecado y del temor,
y tu Espíritu me das. libre, salvo,
en los brazos de mi Salvador.
Confesando mis pecados,
que sin número han de ser, ¡Cuán dulce es vivir, cuán dulce es gozar!
y arrojando todo a un lado, en los brazos de mi Salvador;
a servirte aprenderé. allí quiero ir y con El morar,
siendo objeto de su tierno amor.

- 24 -
 HIMNOS
No hay que temer, ni que desconfiar, quiero oír su tierna voz,
en los brazos de mi Salvador; y seguirle siempre en pos.
por su gran poder El me guardará, ¡Gloria! ¡Gloria! Sea a nuestro Buen Pastor.
de los lazos del engañador.
40. Yo vagaba mucho tiempo en el error, 41. ¿Has hallado en Cristo tu buen Salvador?
agobiado en el pecado y el temor; ¿Eres salvo por la Sangre de Jesús?
cuando vi al Salvador ¿Por la fe descansas en el Redentor?
y escuché su tierna voz, ¿Eres salvo por la Sangre de Jesús?
mi Jesús me hizo libre, por su amor.
Coro:
Coro: Lávame, lávame,
Libre estoy, libre estoy, en tu sangre, oh Cordero de Dios,
por la gracia de Jesús, y con alma limpia me presentaré,
libre estoy. ante tu Tribunal de Luz.
Libre estoy, libre estoy,
¡Aleluya, Por la fe libre estoy! ¿Vives siempre a lado de tu Salvador?
¿Eres salvo por la Sangre de Jesús?
Yo vagaba mucho tiempo en el error, ¿Del pecado eres siempre vencedor?
sin pensar en el amor del Salvador; ¿Eres salvo por la sangre de Jesús?
yo andaba con temor
lejos de mi Redentor, mas ahora Si perdón y paz deseas pecador,
por su muerte libre estoy. tu refugio es la Sangre de Jesús;
si librarte quieres de eternal dolor,
Yo vagaba mucho tiempo en el error, ¡Oh! Acude a la Sangre de Jesús.
mas ahora quiero andar con mi Señor,

- 25 -
 HIMNOS
¿Cuándo El viniere te encontrarás,
ya lavado en la Sangre de Jesús? Aunque por el valle de aflicción
¿Para su venida preparado estás, tenga que pasar aquí,
ya lavado en la Sangre de Jesús? mi Jesús dará su protección,
42. Hay un canto nuevo en mi ser, Él se acordará de mí. >>>
es la voz de mi Jesús, Cristo en las nubes volverá,
que me dice: “Ven a descansar, bajo el bello cielo azul,
tu paz conquiste en la cruz.” de esta tierra El me llevará
a vivir en gloria y luz.
Coro:
Cristo, Cristo, Cristo, 43. Sublime gracia del Señor
Nombre sin igual; que un infeliz salvó;
llena siempre mi alma, fui ciego mas hoy miro yo,
de esa nota celestial. perdido y El me halló.

Náufrago en pecado me encontré Su gracia me enseñó a temer,

sin paz en mi corazón; mis dudas ahuyentó,
mas en Cristo mi Señor, hallé ¡Oh cuán precioso fue a mi ser,
dulce paz y protección. al dar mi corazón!

Tengo de su gracia celestial En los peligros o aflicción

gozo en su santo amor; que yo he tenido aquí;
y riquezas fluyen a raudal su gracia siempre me libró
desde el trono del Señor. y me guiará feliz.

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 HIMNOS
45. Con las nubes viene Cristo
Y cuando en Sión por siglos mil que una vez por nos murió;
brillando esté cual sol; santos miles cantan himnos
yo cantaré por siempre allí a quien en la cruz triunfó.
su amor que me salvó. ¡Aleluya! ¡Aleluya!
44. Mirad al salvador Jesús, Cristo viene y reinará. >>>
el Príncipe benigno, Todos al gran soberano
por mí muriendo en la cruz, le verán en majestad;
por mí, tan vil, indigno. los que le crucificaron
llorarán su indignidad,
Coro: y con llanto, y con llanto,
De amor la prueba hela aquí: al Mesías mirarán.
el Salvador murió por mí:
por mí, por mí,
Jesús murió por mí. Las señales de su muerte
en su cuerpo llevará;
El sol su rostro encubrió
y la iglesia ya triunfante
al ver su agonía;
la dura peña se partió; al Rey invicto aclamará,
oídlo alma mía. y con gozo, y con gozo
sus insignias mirará.
Y yo también al ver la cruz,
por ella soy vencido;
mi corazón te doy, Jesús, Que te adoren todos, todos.
hoy a tu amor rendido. Digno tú eres ¡Oh Señor!
En tu gloria y en justicia

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 HIMNOS
reinaras ¡Oh Salvador!
¡Aleluya! ¡Aleluya!
Para siempre reinarás.

46. ¡Oh amor de Dios! su inmensidad

Si fuera tinta todo el mar,
el hombre no podrá contar,
y todo el cielo un gran papel,
ni concebir la gran verdad,
y cada hombre un escritor,
que Dios al mundo pudo amar.
y cada hoja un pincel,
Al primer par, de su hogar
nunca podrían describir,
echados, compadeció;
el gran amor de Dios.
y les vistió, les perdonó,
y un Redentor prometió.
Y cuando el tiempo pasará,
Coro:
con cada reino mundanal,
y cada trono caerá,
¡Oh amor de Dios! Brotando está,
con cada trama y plan carnal,
inmensurable eternal,
el gran amor del Redentor
por las edades durará
por siempre durará;
inagotable raudal.
la gran canción de salvación

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 HIMNOS
su pueblo cantará. cuidará también de mí!

47. ¿Cómo podré estar triste? “Nunca te desalientes”,

¿Cómo entre sombras ir? oigo al Señor decir;
¿Cómo sentirme sólo y en su palabra fiado,
y en el dolor vivir? hago al dolor huir.
Si Cristo es mi consuelo, A Cristo paso a paso
mi amigo siempre fiel, yo sigo sin cesar,
si aún las aves tienen y todas sus bondades
seguro asilo en El, me da sin limitar,
Si aún las aves tienen y todas sus bondades
seguro asilo en El. por siempre me ha de dar.

Coro: Siempre que soy tentado,

o si en la prueba estoy,
¡Feliz, cantando alegre, más cerca de El camino,
yo vivo siempre aquí; y protegido voy.
si El cuida de las aves, Si en mí la fe desmaya

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 HIMNOS
y caigo en la ansiedad,
tan solo El me levanta, Invencibles son los que con afán
me da seguridad, cada día dan al deber.
tan solo El me levanta, Gloria y luz tendrán y recibirán
me da seguridad. grande galardón del Redentor.
48. Siervos de Jesús, hombres de verdad, 49. ¿Temes que en la lucha no podrás vencer?
guardas del deber, somos, sí; ¿Y con las tinieblas has de contender?
libres de maldad, ricos en bondad, Abre bien la puerta de tu corazón,
fieles en la lid seremos, sí. deja al Salvador entrar.

Coro: Coro:
¡Firmes! ¡Fuertes! Alcen la bandera
Grande, noble: emblema del deber. Deja al Salvador entrar,
¡Prontos! ¡Bravos! Pasen la consigna: deja al Salvador entrar,
Marchen, todos, vamos a vencer. abre bien la puerta de tu corazón
y entrará el Salvador.
¡Cuán hermosos son los que sin temor,
listos, al llamar del clarín,
luchan con valor, sufren sin cesar ¿Es tu fe muy débil en la oscuridad?
guardas del deber hasta el fin! ¿Son tus fuerzas pocas contra la maldad?
Abre bien la puerta de tu corazón,
Nuestro Capitán es ya vencedor, deja al Salvador entrar.
Él nos redimió por su cruz;
guardas del deber, Él nos da poder,
y nos guiará en su santa luz.

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 HIMNOS
nunca negra duda, pena ni pesar,
¿Quieres ir gozándote en la senda aquí? vejaciones crueles, pueden acosar.
¿Quieres que el Señor te utilice a ti?
Abre bien la puerta de tu corazón,
deja al Salvador entrar.

50. Cual la mar hermosa, es la paz de Dios Toda nuestra vida cuidara Jesús,
fuerte y gloriosa, es eterna paz; Cristo nunca cambia, Él es nuestra paz,
grande y perfecta, premio de la cruz; fuertes y seguros, en El Salvador,
fruto del calvario, obra de Jesús. siempre moraremos en su grande amor.

Coro: I Oh Señor amado, Tú nos das quietud.

De ti recibimos celestial salud.
Descansando en Cristo Haznos conocerte, te amaremos más,
siempre paz tendré; sé tú nuestro dueño, Príncipe de paz.
en Jehová confiando
nada temeré. Coro: II

En el gran refugio de la paz de Dios, Descansando en Cristo

nunca hay molestias es perfecta paz; tengo siempre paz;

- 31 -
 HIMNOS
en Jehová confiando porque El me rescató.
hallo gran solaz.
Cantos de alegría elevo hoy
a mi Rey y buen Salvador;
y ahora mis dones a Cristo doy,
y le sirvo con amor.
51. Una vez perdido vivía yo, 52. Firmes y adelante, huestes de la fe,
lejos y vagante en error; sin temor alguno, que Jesús nos ve;
más la voz de Cristo me alcanzó, jefe soberano, Cristo al frente va,
me llamó con tierno amor. y la regia enseña tremolando está.

Coro: Coro:
Hay un nombre nuevo en la Gloria, Firmes y adelante, huestes de la fe,
mío es, si, mío es, sin temor alguno, que Jesús nos ve.
y los ángeles cantan la historia,
“Salvo es el pecador.” Al sagrado nombre de nuestro Adalid,
¡Oh!, hay un nombre nuevo en la Gloria, tiembla el enemigo y huye de la lid.
mío es, si, mío es; Nuestra es la victoria, dad a Dios loor;
todos mis pecados ya son perdonados, y óigalo el averno lleno de pavor.
¡Gloria al Señor!
Muévese potente la Iglesia de Dios;
En la Biblia dice, que salvo soy de los ya gloriosos marchamos en pos;
por la gracia de Jesucristo; somos solo un cuerpo, y uno es el Señor,
y por fe en su nombre a la gloria voy, una la esperanza y uno nuestro amor.

- 32 -
 HIMNOS
Tronos y coronas pueden perecer; Un día la tumba ocultarle no pudo,
de Jesús la Iglesia constante ha de ser; un día su Espíritu al cuerpo volvió
nada en contra suya prevalecerá, habiendo la muerte por siempre vencido,
porque la promesa nunca faltará. a la diestra del Padre, Jesús se sentó. >>>
53. Un día que el cielo sus glorias cantaba, Un día otra vez viene con voz de arcángel
un día que el mal imperaba más cruel; un día en su Gloria el Señor brillará;
Jesús descendió y al nacer de una virgen, ¡Oh día admirable en que unido su pueblo
nos dio por su vida un ejemplo tan fiel. loores a Cristo por siempre dará!

Coro: 54. Tan triste y tan lejos de Dios me sentí,

Vivo, me amaba; muerto, salvóme; y sin el perdón de Jesús,
y en el sepulcro mi mal enterró; mas cuando su voz amorosa oí,
resucitado Él es mi justicia; que me dijo: “Oh ven a la luz”.
un día El viene, pues lo prometió.
Coro:
Un día lleváronle al monte calvario, Ya todo dejé para andar en la luz,
un día claváronle sobre una cruz; no moro en tinieblas ya más;
sufriendo dolores y pena de muerte, ya todo dejé por seguir a Jesús,
expiando el pecado, salvóme Jesús. y vivo en la luz de su faz.

Un día dejaron su cuerpo en el huerto, ¡Que amigo tan dulce es el tierno Jesús!
tres días la tumba su cuerpo encerró; Tan lleno de paz y de amor.
velaban los ángeles sobre el sepulcro De todo este mundo es la fúlgida luz
mientras El Dueño del mundo durmió. el nombre del buen Salvador.

- 33 -
 HIMNOS
ven y confía en El, y tú serás feliz.
Oh ven a Jesús, infeliz pecador, Tus penas pon en Dios, pues él las llevará,
no vagues a ciegas ya más; y no tendrás pesar, sino consolación.
si, ven a Jesús nuestro gran Salvador,
pues en El salvación hallarás. ¡Oh, qué amor! ¡Que inmenso amor!
55. // ¡Oh, qué amor! ¡que inmenso amor! el de mi Salvador.
el de mi Salvador.// 56. Cristo el Señor me ama por siempre,
Dios desde el cielo al Salvador mi vida guarda El tiernamente.
mandó a morir por mí. Vence el pecado, cuida del mal.
Por ti murió, por mí murió; Ya pertenezco a Él.
mi amado Salvador.
Coro:
Ven amigo a Jesús, pues el murió por ti;
recibirás la luz que quiere darte a ti. Ya pertenezco a Cristo,
Mi buen Jesús murió para darte perdón; El pertenece a mí.
abre tu corazón y dulce paz tendrás. No solo por el tiempo Aquí,
más por la eternidad.
Coro:
Día fatal vendrá cuando no habrá lugar;
la puerta se abre hoy, y tú podrás entrar. Cristo bajó del cielo a buscarme,
Más gracias ya no habrá, cubierto de pecado encontróme;
pues la desprecias hoy; me levantó de vergüenzas mil.
acepta, pecador, la salvación de Dios. Ya pertenezco a Él.
Las manos del Señor se abren hoy para ti;

- 34 -
 HIMNOS
siempre permanece fiel.
Gozo indecible inunda mi alma.
Ya libertado estoy y mi vida Quien le dio perdón a Pedro,
llena esta de felicidad. te perdona a ti.
Ya pertenezco a Él. A Tomás quito la duda;
El la luz te da. >>>

57. Dulce y bello es el mensaje Y en su pecho Juan,

de la santa fe: reposo Él halló allí,
Hoy, ayer y por los siglos y también a ti reposo,
Cristo el mismo es. con amor dará.
Todavía el salva y guarda
al pobre pecador; Quien en la tempestad del mar
da aliento, mucha calma: en aguas caminó,
a Jesús loor. puede hoy también calmar
de tu alma la tempestad.
Coro: Quien en gran angustia
Hoy, ayer y por los siglos en huerto sí por ti oró,
Cristo es siempre fiel; El la copa bebe fiel
cambios hay, mas Cristo de toda tu ansiedad.
siempre permanece fiel.
¡Gloria, pues, a Él!
¡Gloria, pues, a Él! Como un día fue a la aldea
Cambios hay, mas Cristo de Emaús

- 35 -
 HIMNOS
y su gloria mostró después y en que el himno más dulce que habré de cantar
de su resurrección: de su paz nada más ha de ser.
Pronto habremos de admirar
el rostro de Jesús Alma triste que en rudo conflicto te ves,
para nuestro gozo y paz sola y débil tu senda al seguir,
y fiel consolación. haz de Cristo tu amigo, pues fiel siempre es,
58. En el seno de mi alma una dulce quietud ¡Y su paz tú podrás recibir!
se difunde embargando mi ser, 59. Ved a Cristo, Rey de gloria,
una calma infinita que sólo podrán Es del mundo el vencedor;
los amados de Dios comprender. de la guerra vuelve invicto,
todos deben darle loor.
Coro:
Coro:
¡Paz! ¡Paz! Cuán dulce paz Coronadle, Santos todos;
es aquella que el Padre me da, coronadle Rey de reyes;
yo le ruego que inunde por siempre mi ser, homenaje tributadle,
en sus ondas de amor celestial. tributad al Salvador.

Que tesoro yo tengo en la paz que me dio Pecadores se burlaron,

y en el fondo del alma ha de estar, coronando al Salvador,
tan segura que nadie quitarla podrá más los ángeles y santos
mientras miro los años pasar. hoy proclámanle Señor.
Sin cesar yo medito en aquella ciudad
Exaltadle, exaltadle,
do al autor de la paz he de ver,
ricos triunfos trae Jesús;

- 36 -
 HIMNOS
en los cielos entronadle, Siempre contigo estoy”.
en la refulgente luz.
El que guarda mi alma, nunca dormirá;
Escuchad las alabanzas si mi pie resbala, El me sostendrá;
que se elevan hacia “Aquel, en mi vida diaria es mi Protector;
que por nos fue inmolado” cuán fiel es su palabra:
dad honores a Emmanuel. “Siempre contigo estoy”.
60. Cristo está conmigo, ¡Qué consolación! 61. La tierna voz del Salvador,
Su presencia quita todo mi temor; nos habla conmovida:
tengo la promesa de mi Salvador: Oíd al Médico de amor,
“No te dejare nunca: quien da a los muertos vida.
Siempre contigo estoy”.
Coro:
Coro: Nunca los hombres cantarán,
No tengo temor, no tengo temor; nunca los ángeles de luz
Jesús me ha prometido: más dulce nota elevarán
“Siempre contigo estoy” Que el nombre de JESUS.
No tengo temor, no tengo temor;
Jesús me ha prometido: “Borradas ya tus culpas son”
“Siempre contigo estoy”. su voz hoy te pregona;
recibe, si, su bendición,
Fuertes enemigos siempre cerca están; y goza la corona.
Cristo está más cerca guárdame del mal
“Ten valor”, me dice, “soy Tu ayudador La amarga copa del dolor,
no te dejare nunca: Jesús, has apurado;

- 37 -
 HIMNOS
por dar al pobre pecador tu fe te sana, vete en paz,
tu amor, oh bien Amado. de todo mal librado.

Y cuando venga el Salvador, Así señales seguirán,

al cielo subiremos; a los que son de Cristo;
arrebatados en amor, demonios fuera echarán,
Su nombre cantaremos. y sanarán las gentes.
62. La tierna voz del Salvador, 63. ¡Oh, cuán dulce es fiar en Cristo,
nos habla conmovida: y entregarse todo a Él;
Venid al Médico de Amor, esperar en sus promesas,
que da a los muertos vida. y en sus sendas serle fiel!

Coro: Coro:
Él tiene toda potestad, Jesucristo, Jesucristo,
puede sanar tu enfermedad; ya tu amor probaste en mí;
lleno de gracia y de bondad, Jesucristo, Jesucristo,
es nuestro Jesucristo. siempre quiero fiar en Ti.

Los sordos oyen, ciegos ven, Es muy dulce fiar en Cristo

Jesús es quien los sana; y cumplir su voluntad,
los cojos sanan y andan bien, no dudando su palabra,
mediante su Palabra. que es la luz y la verdad.

Confía tú, quien satanás, Siempre es grato fiar en Cristo

por años ha ligado, cuando busca el corazón,

- 38 -
 HIMNOS
los tesoros celestiales bendigamos sin cesar al Redentor
de la paz y del perdón. quien nos trajo paz y luz.

Siempre en ti confiar yo quiero En el cielo nuestro cántico será

mi precioso Salvador; alabanzas a Jesús;
en la vida y en la muerte nuestro corazón allí rebosara
protección me dé tu amor. de amor y gratitud.
64. Cual pendón hermoso despleguemos hoy 65. A Cristo doy mi canto,
la bandera de la cruz. El salva el alma mía.
La verdad del evangelio, el blasón Me libra del quebranto,
del soldado de Jesús. y con amor me guía.

Coro: Coro:
Adelante, adelante, Ensalce nuestro canto
en pos de nuestro Salvador. tu sacrosanta historia;
Nos da gozo y paz nuestro Rey, Es nuestro anhelo santo
adelante con valor. mirar, Jesús tu Gloria.

Prediquemos siempre lo que dice Dios Jamás dolor ni agravios

de la sangre de Jesús, enlutaran la mente,
cómo, limpia del pecado al mortal si a Cristo nuestros labios,
y le compra la salud. bendicen dulcemente.

En el mundo proclamemos con fervor Tu nombre bendecido

esta historia de la cruz, alegra el alma mía;

- 39 -
 HIMNOS
tu nombre es en mi oído, salvóme de toda condenación
dulcísima armonía. El Cristo de Nazaret:
Sus manos heridas me señaló
Viviendo he de ensalzarte: y me dijo: “Por ti sufrí”.
y si abandono el suelo, Rendido a sus plantas, mi ser salvó
veránme ir a adorarte, El Cristo de Nazaret.
los ángeles del cielo. Las ondas furiosas del mar calmó
66. Soñé que en la playa de un mar me vi, al impulso de su poder,
era el mar de Genesaret, la turbia corriente el mandato oyó
la gente seguía con frenesí Del Cristo de Nazaret:
al Cristo de Nazaret: Es dulce, bendita serena paz
Note que los ojos del ciego abrió la que inunda mi pobre ser,
y al momento le hizo ver; mi vida en la diestra potente esta
yo vi que al cojo por fe sanó Del Cristo de Nazaret.
El Cristo de Nazaret...
Ven tú que en el mar turbulento estás,
Coro: I salvación hallaras en El,
Yo también quiero amarle por siempre, en tu alma la dulce quietud tendrás
en El mi deleite hallaré; Del Cristo de Nazaret:
me salva, me cuida y me guarda Me ordena a decirte el mensaje fiel,
El Cristo de Nazaret. que de paz llenara tu ser,
si sólo permites que more en ti
Su amor, su ternura y compasión, El Cristo de Nazaret.
olvidarlos jamás podré;

- 40 -
 HIMNOS
pues los cuida su amante Señor.
Coro: II
Tú también has de amarle por siempre, Mas no habréis de alcanzar
en El tu deleite hallarás; sus tesoros de amor
te salva, te cuida y te guarda si rendidos no vais al Señor,
El Cristo de Nazaret. pues su paz y su amor sólo son para Aquel
que a sus leyes divinas es fiel.
67. Para andar con Jesús no hay sendero mejor 68. Cuando estés cansado y abatido,
que guardar sus mandatos de amor; dilo a Cristo, dilo a Cristo;
obedientes a El siempre habremos de ser, si te sientes débil, confundido,
y tendremos de Cristo el poder. dilo a Cristo el Señor.
Dilo a Cristo, dilo a Cristo…
Coro: Coro:
Obedecer, y confiar en Jesús, ...Él es tu amigo más fiel;
es la senda marcada no hay otro amigo como Cristo,
para andar en la luz. dilo tan solo a Él.
Cuando estés de tentación cercado,
Cuando vamos así, ¡Cómo brilla la luz
mira a Cristo, mira a Cristo;
en la senda al andar con Jesús!
cuando rujan huestes de pecado,
su promesa de estar con los suyos es fiel, mira a Cristo El Señor.
si obedecen y esperan en Él. Mira a Cristo, mira a Cristo...

Quien siguiere a Jesús ni una sombra verá, Si se apartan otros de la senda,

si confiado su vida le da; sigue a Cristo, sigue a Cristo;
ni terrores ni afán, ni ansiedad ni dolor; Si acrecienta en torno la contienda,

- 41 -
 HIMNOS
sigue a Cristo El Señor. y el Padre lo exaltó;
Sigue a Cristo, sigue a Cristo... confiar en Él es mi placer
morir no temo yo.
Cuando llegue la final jornada,
fía en Cristo, fía en Cristo; Aunque él se fue, solo no estoy,
te dará al cielo franca entrada, mandó al Consolador,
Fía en Cristo, El Señor... Divino Espíritu que hoy
Fía en Cristo, fía en Cristo…
me da perfecto amor. >>>
69. Me hirió el pecado, fui a Jesús,
Vivir en Cristo trae la paz;
mostréle mi dolor;
con El habitaré.
perdido errante, vi su luz,
Ya suyo soy, y de hoy en más
bendíjome en su amor.
a nadie temeré.
Coro:
En la cruz, en la cruz 70. El gran día viene, muy pronto viene,
do primero vi la luz, el gran día del juicio final;
y las manchas de mi alma yo lavé; cuando justos y malos el gran Juez apartará,
fue allí por la fe, do vi a Jesús, esperemos el juicio final.
y siempre feliz con El seré.
Coro:
En una cruz mi Salvador, ¿Estás listo? ¿Estás listo?
su sangre derramó La trompeta ya da la señal,
por este pobre pecador ¿Estás listo, esperando
a quién así salvó. el juicio final?

Venció la muerte con Poder, Día triste viene, muy pronto viene,

- 42 -
 HIMNOS
el gran día del juicio final; está derramando,
cuando el pueblo rebelde reprobado allí será, siempre por ti y por mí.
esperemos el juicio final.
El tiempo vuela,
El gran día viene, de pleno gozo, lograrlo conviene,
cuando Cristo vendrá en poder, Cristo te llama a ti.
mas el gozo lo sienten los amados del Señor: Vienen las sombras
Esperemos a nuestro Señor. se acerca la muerte;
71. ¡Cuán tiernamente Viene por ti y por mí.
nos está llamando, 72. ¡Oh qué amigo nos es Cristo!
Cristo a ti y a mí! El llevó nuestro dolor,
Él nos espera Él nos manda que llevemos
con brazos abiertos; todo a Dios en oración.
llama a ti y a mí. ¿Somos tristes, agobiados,
Coro: y cargados de aflicción?
Venid, venid, Esto es porque no llevamos
si estáis cansados, venid; todo a Dios en oración.
¡Cuán tiernamente
nos está llamando! ¿Te hallas débil y oprimido
¡Oh pecadores, venid! de cuidados y temor?
A Jesús refugio eterno,
¿Por qué tememos dile todo en oración.
si está abogando ¿Te desprecian tus amigos?
Cristo por ti y por mí? Cuéntaselo en oración;
Sus bendiciones en sus brazos de amor tierno

- 43 -
 HIMNOS
paz tendrá tu corazón. donde he apagado yo,
esa sed que consumía
Jesucristo es nuestro amigo, mi cuitado corazón.
de esto pruebas nos mostró,
pues para llevar consigo
al culpable, se humanó.
El castigo de su pueblo
en su muerte El sufrió;
Cristo es el amigo eterno;
¡Solo en El confío yo!

Esa fuente siempre pura,

73. ¿Sabes dónde hay una fuente nunca su cristal perdió;
pura de divino amor, y sus aguas refrescantes
cuyas aguas celestiales se te ofrecen, pecador.
manan con ferviente ardor? Si sediento y fatigado,
Esta fuente inagotable, a Jesús la fuente vas,
de eficacia y de valor, satisfecho y aliviado
es el Redentor Bendito, al momento quedarás.
el precioso Salvador.

Coro: ¡Oh! Recibe, pues, su oferta,

no rechaces, no, su amor;
Es Jesús la viva fuente,

- 44 -
 HIMNOS
Dile: “De esas aguas dame y triunfantes entraran
y sabré su gran valor.” en las mansiones de la luz;
Sin dinero y sin precio, para mí también habrá un dulce hogar.
se te ofrece el grato don:
Trabajemos para Cristo,
vida eterna, paz y gozo,
anunciando su amor,
de tus culpas el perdón. mientras dure nuestra vida terrenal,
y al final de la jornada
con los salvos por Jesús,
entraremos en la Patria Celestial.
74. Cuando anuncie el arcángel 75. A Jesucristo ven sin tardar,
que más tiempo no habrá, que entre nosotros hoy Él está,
y aclare esplendoroso el día final; y te convida con dulce afán,
cuando todos los salvados
tierno diciendo: “Ven”.
se congreguen ante Dios.
Entre ellos yo también tendré lugar.
Coro:
Coro:
Cuando allá se pase lista, ¡Oh, cuan grata nuestra reunión
cuando allá se pase lista, cuando allá Señor en tu mansión,
cuando allá se pase lista, contigo estemos en comunión
a mi nombre yo feliz responderé. gozando eterno bien!

Resucitaran gloriosos
los que han muerto en Jesús, Piensa que El sólo puede colmar
las delicias del paraíso a gozar; tu triste pecho de gozo y paz;

- 45 -
 HIMNOS
y porque anhela tu bienestar, aboga en el cielo por mí.
vuelve a decirte: “Ven”. Es Rey de mi alma, Sendero de Luz,
su sangre vertió El por mí.
Su voz escucha sin vacilar,
y grato acepta lo que hoy te da, Es Cristo mejor que del mundo el placer,
tal vez mañana no habrá lugar, en El nada puedo desear;
no te detengas, “Ven”. tesoros inmensos me vino a traer
gozoso lo he de ensalzar.

76. En Cristo encontré un Amigo leal 77. ¡Oh! Cristo mío, eres tú mi amigo fiel;
mi ser satisface en verdad, Seguro amparo sólo en ti tendré,
Amigo inefable, sublime, real en mis aflicciones, Buen Jesús iré a Ti,
que salva de toda maldad. y consuelo y dicha me darás ¡oh! Sí.

Coro: Coro:

Es de Sarón la Rosa, Cristo, ven más cerca,

fragante y gentil. paz perfecta en mi alma pon;
Cristo es mi Luz, Amparo fiel, cerca, si, más cerca,
borra mi pecado vil. de mi corazón.
Es de Sarón la Rosa
mi Todo en todo es El.
Cuando la noche, vea yo estrellas mil,
Amigo constante es el tierno Jesús, tu voz hermosa pueda mi alma oír.

- 46 -
 HIMNOS
Haz que yo medite en tu tierno y dulce amor, Tú eres mi Salvador,
y que yo te alabe, lleno de fervor. ¡CRISTO! ¡CRISTO!
Tuyo seré, Señor;
Cuando esta vida tenga yo que abandonar, Te seguiré por doquiera,
corona hermosa Tú me ceñirás; si TU guiando vas,
y con dulce canto tu bondad alabaré, // y al terminar mi carrera
y en mansión de gloria siempre moraré. en gloria veré tu faz //.
>>>

78. Es Jesucristo mi todo, Cristo es el lirio del valle,

dulce es cantar su loor, la rosa es de Sarón,
¡Oh cuan sublime e infinito Cristo el radiante lucero,
es su divino amor! la roca de salvación;
Cuando me vio errabundo Él es la fuente de vida
cual hijo pródigo, y gozo eternal,
vino a buscar y a salvarme, ya satisface mi alma
a su redil me llevó. con el maná celestial.

Coro:
Cristo nació en un pesebre,
¡CRISTO! ¡CRISTO! la amarga copa bebió.

- 47 -
 HIMNOS
cual inocente cordero, de Cristo ved su majestad
en el Calvario murió; y proclamadle Rey.
resucitó de la tumba
y al cielo ascendió, Dios quiera que con los que están
mas pronto viene en su gloria, del trono en derredor,
esa promesa nos dio. cantemos por la eternidad
a Cristo el Salvador;
cantemos por la eternidad
a Cristo el Salvador.
79. Loores dad a Cristo el Rey, Suprema potestad; 80. Tenme, oh Cristo, en tu patria,
de su divino amor la ley, hazme ver allí tu faz;
postrados aceptad; contemplando allí tu gracia,
de su divino amor la ley, y gozando tu solaz.
postrados aceptad.
Coro:
Vosotros hijos del gran Rey, ovejas de la Grey;
A Ti sólo, a Ti sólo
loores dad a Emmanuel, tributar quiero mi amor.
y proclamadle Rey, Todo para bien me ayuda,
loores dad a Emmanuel, pues te amo sólo a Ti.
y proclamadle Rey.

Naciones todas, escuchad y obedeced su ley; Tenme, oh Cristo, en tu patria,

de Cristo ved su majestad, do por fe he de triunfar;
y proclamadle Rey; tu poder, Señor, es grande

- 48 -
 HIMNOS
y mis pasos puedes guiar. Cristo me limpio de mi maldad;
alabare su dulce nombre
Tenme, oh Cristo, en tu patria, por la eternidad.
tus deseos he de hacer;
todo en ti, Señor, poseo,
Tú, pues, llenas todo mi ser.

81. Maravillosa gracia vino Jesús a dar, Maravillosa gracia,

más alta que los cielos, gracia de compasión,
más honda que la mar, gracia que sacia el alma
más grande que mis culpas con plena salvación,
clavadas en la cruz, gracia que lleva al cielo,
es la maravillosa gracia de Jesús. gracia de paz y luz
es la maravillosa gracia de Jesús.
Coro:

Inefable es la divina gracia, Maravillosa gracia

es inmensurable cual la mar, llama con dulce voz,
como clara fuente, siempre suficiente llámanos a ser hechos
a los pecadores rescatar, hijos de nuestro DIOS;
perdonando todos mis errores colma de su consuelo

- 49 -
 HIMNOS
nos llena de virtud, de esas manos bellas yo confiado estoy,
es la maravillosa gracia de Jesús. ellas van guiando, pues al cielo voy.

¡Oh!, Jesús tus manos yo las vi en visión!

y vertí mi llanto con el corazón;
vi sus dos heridas y la sangre vi
que tú derramaste por salvarme a mí.
82. Manos cariñosas, manos de Jesús; 83. Confió en DIOS, muy cerca siempre está,
manos que llevaron la pesada cruz. en tierra o mar su protección me da;
Manos que supieron sólo hacer el bien, tan solo sé, doquiera este
¡Gloria a esas manos! ¡Aleluya, Amén! Mi PADRE amante cuidará de mí.

Blancas azucenas, lirios de amor, Coro:

fueron esas manos de mi Redentor. Confió en DIOS,
Manos que a los ciegos dieron la visión quien es mi amparo fiel,
con el real consuelo de su gran perdón. en lucha cruel mi defensor es El;
si apaga el sol a su arrebol,
Manos que supieron calmar el dolor, Mi PADRE amante cuidará de mí.
¡Oh manos divinas de mi Redentor!
El blanco lirio objeto de su amor,
Que multiplicaron los peces y el pan, le da la voz arpada al ruiseñor;
manos milagrosas que la vida dan. de redención es mi canción,
Mi PADRE amante cuidara de mí.
Manos que sufrieron el clavo y la cruz;
Manos redentoras de mi buen Jesús. Confió en DIOS en horas de aflicción,

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 HIMNOS
me hará triunfar en ruda tentación; y me guió por el sendero del amor.
y en mi dolor, con tierno amor
Mi PADRE amante cuidara de mí.
Cada día viene a darme nuevo aliento,
Si por el valle tenebroso voy, a mi corazón infunde dulce paz;
confiado en mí Pastor a salvo estoy; no comprenderé por qué vino a salvarme,
es mi Jesús mi guía y luz,
Mi PADRE amante cuidara de mí. hasta que en el cielo pueda ver su faz.
84. Yo quisiera hablarte del amor de Cristo,
pues en El hallé un amigo fuerte y fiel, 85. Aunque ruja la tormenta
por su gracia transformo mi vida entera, de mi vida en derredor,
lo que en esta vida soy lo debo a Él. al amparo de la Roca salvo estoy.
Si la tempestad aumenta
Coro: no tendré ningún temor,
al amparo de la Roca salvo estoy.
Nadie pudo amarme como Cristo,
es incomparable su amistad; Coro:
sólo Él pudo redimirme del pecado, Al amparo de la Roca salvo estoy,
por su amor y su bondad. al amparo de la Roca salvo estoy.
Si a mi lado está el Señor
no tendré ningún temor,
al amparo de la Roca salvo estoy.
Mi alma estaba llena de ayes y tristezas,
llena estaba de miserias y dolor; Aunque ruja el mar furioso
con ternura Cristo me tendió la mano, y agitado esté el turbión,
al amparo de la Roca salvo estoy.

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 HIMNOS
En el puerto de reposo fieles venid, el Salvador llama;
y velando en oración, nadie en sus bodas debe faltar.
al amparo de la Roca salvo estoy.
Presto acude; alma, acepta
Con ternura Dios me cuida
este convite de tu Señor;
del peligro y del dolor,
Él te dará su gozo y gloria,
al amparo de la Roca salvo estoy.
El mis penas dulcifica, ven y recibe hoy su amor.
soy objeto de su amor,
al amparo de la Roca salvo estoy.
86. Cristianos todos ya prepararse, 87. Mirad al hijo prodigo,
ved al esposo, vuestro Señor; del Padre se apartó;
llenas tened las lámparas siempre, miseria engaño y escasez
fue lo que allí encontró.
a su encuentro id con amor.
Coro:
Coro: Yo me levantare,
iré a mi Padre y le diré:
Cristo ya viene, pronto, si, viene, “contrito, heme aquí,
sin tardanza aparecerá yo he pecado contra el cielo
con El iremos ¡Aleluya! y también contra Ti.”
A la mansión que Él nos dará.
Desesperado dijo así:
“con hambre siempre estoy,
perezco si me quedo aquí,
Ya las señales cúmplense todas, junto a mi Padre voy”.
ya la higuera quiere brotar,

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 HIMNOS
“Delante de Él yo me pondré, saber que salvo soy!
pidiendo su favor; Mi Rey aquí es mi Jesús,
humilde me confesaré al cielo sé que voy.
indigno de su amor”.
¡Oh, gracia excelsa de mi Dios,
Al ver a su hijo regresar, profundo es el amor!
el Padre se alegró; De mi Jesús, vía de luz,
dispuesto estaba a perdonar, Cordero Redentor.
de besos le colmó. 89. Al Señor Jesús loemos,
88. Por fe contemplo redención, porque tanto le debemos,
la fuente carmesí;
lo que somos, y tenemos,
Jesús nos da la salvación,
sólo es nuestro en El.
su vida dio por mí.

Coro: Es Jesús su nombre amado,

La fuente sin igual hallé, a su pueblo Él ha salvado,
de vida y luz el manantial; es el triunfo asegurado,
¡Oh, Gloria a Dios, me limpia a mí
por su gran poder.
me limpia a mí, me limpia a mí!

Mi vida entrego a mi Jesús, ¡Oh, confiad en este amigo!

las dudas El quitó; nos liberta del peligro,
mi alma goza en su luz, nos es hoy un fuerte abrigo,
mis deudas El pagó.
y hasta el fin será.
¡Cuán inefable gozo es,

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 HIMNOS
Ensangrentado rostro sin par,
Cumpliráse nuestro anhelo, al contemplarte debo llorar,
en el día en que sin velo, viendo tus ojos mirando al cielo,
le veremos en el cielo, mientras el velo se parte en dos.
al Señor Jesús. viendo tus ojos mirando al cielo,
mientras el velo se parte en dos.

La maravilla de tu poder,
aún hoy día yo puedo ver,
90. Rostro divino de mi Señor, cuando aquel vulgo te zahería,
Rostro divino lleno de amor, y te escupía a su querer.
aunque ultrajado, siempre apacible, Siempre impregnado de compasión,
siempre apacible ante el dolor. diste a los hombres tu corazón,
Rostro divino de mi Jesús, que fue partido por una lanza,
santo y sublime lleno de luz, dando esperanza de salvación.
¡Cómo le inspiras paz a mi alma, Que fue partido por una lanza,
y dulce calma al corazón! dando esperanza de salvación.
¡Cómo le inspiras paz a mi alma,
y dulce calma al corazón!
Rostro divino, si he vivir,
todos mis días quiero sentir
Sobre tus sienes corre el sudor, las impresiones de tu ternura
que manifiesta tu cruel dolor. y las honduras de tu gemir.
Gotas de sangre inmaculada, Rostro divino, mírame más;
que es derramada en mi favor.

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 HIMNOS
transmite a mi alma dulce solaz. llévame, oh Salvador,
Nunca te apartes de mí sendero, a la celestial mansión.
bello lucero de vida y paz.
Nunca te apartes de mí sendero,
bello lucero de vida y paz.

91. Jesús, el Buen Pastor, Andando con Jesús,

mostrando su tierno amor, por sendas de gozo y luz,
del vil abismo me sacó; el mundo pierde su atracción.
su mano me extendió, Ya pertenezco a Él,
del lodo me levantó, y anhelo servirle fiel,
mis paso El enderezó. el mundo es vana ilusión.

Coro:
Con Cristo moraré,
Querido Salvador, y siempre le cantaré
canto hoy de tu inmenso amor. por toda la eternidad.
Arde mi corazón de gratitud. De reyes es el Rey,
Solo, no puedo andar, tributo le brindaré,
a tu lado yo quiero estar;

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 HIMNOS
pues tiene toda potestad. en su brazo confiaré,
nada del amor de Dios
me apartará.

92. Jehová es mi Pastor, Mi Pastor me guardará,

me apacienta con amor siempre me confortará,
en sus pastos delicados paceré; por las sendas de justicia me guiará;
descansando sin temor en el tiempo de dolor
al abrigo del Señor, me será consolador,
de las aguas de reposo beberé. en mi corazón su paz infundirá.

Coro:
¡Oh, tan fiel es mi Pastor!
El Señor me pastorea, ¡Tan constante es en su amor!
nada aquí me faltará; que mi copa rebosando siempre está;
junto a Él caminaré, cuando el valle oscuro esté,

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 HIMNOS
mal ninguno temeré, callar sus favores no quiero,
a la casa de mi Dios iré a morar. voy siempre a Jesús alabar.

Yo sé que me espera corona,

la cual a los fieles dará
Jesús Salvador; en el cielo
mi alma con El estará.

93. Comprado con sangre por Cristo, 94. En Jesucristo, mártir de paz,
con gozo al cielo yo voy; en horas negras de tempestad,
librado por gracia infinita, hallan las almas dulce solaz,
ya sé que Su hijo yo soy. grato consuelo, felicidad.
Coro: Coro:
Lo sé, lo sé, comprado con
sangre yo soy; Gloria cantemos al Redentor,
lo sé, lo sé, con Cristo al que por nosotros quiso morir;
cielo yo voy. y que la gracia del Salvador
Soy libre de pena y culpa, //siempre dirija nuestro vivir.//
su gozo El me hace sentir,
El llena de gracia mi alma,
con Él es tan dulce vivir. En nuestras luchas, en el dolor,
en tristes horas de tentación,
En Cristo yo siempre medito, calma le infunde, santo vigor,
y nunca le puedo olvidar;

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 HIMNOS
nuevos alientos al corazón.
En servicio entrego de mi vida
Cuando en la lucha falta la fe, todo lo mejor, sin vacilar.
y el alma siente desfallecer, A mi salvador doy mi promesa
Cristo nos dice: “Siempre os daré al oír su dulce voz que dice:
Gracia divina, Santo poder.”

96. Tú dejaste tu trono y corona por mí,

95. Ven y da tus diezmos al Maestro, al venir a Belén a nacer;
dale tus riquezas y tu amor. mas a ti no fue dado
Todos tus talentos hoy consagra el entrar al mesón
para gloria del Señor, quien dice: y en pesebre te hicieron nacer.

Coro: Coro:
Ven a mi corazón, ¡Oh Cristo!
“Fiando, prueba, Pues en él hay lugar para ti;
pruébame si soy tu buen Señor, ven a mi corazón ¡Oh Cristo! Ven,
que abriré las puertas del cielo Pues en él hay lugar para ti.
para dar gran bendición.”
Tú viniste, Señor, con tu gran bendición
Si mi fe vacila por las dudas, para dar libertad y salud;
o el poder de Dios no siento más, mas con odio y desprecio
viene mi Jesús y con ternura te hicieron morir,
vuelve a darme paz; Y luego dice: aunque vieron tu amor y virtud.

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 HIMNOS
Lata en nuestros pechos noble gratitud
Alabanzas sublimes los cielos darán, hacia el que nos brinda redención;
cuando vengas glorioso de allí, y a Jesús el Cristo, que nos da salud,
y Tu voz entre nubes dirá: “Ven a mí, tributemos nuestra adoración.
que hay lugar junto a mí para Ti.”
98. ¡Noche de paz, noche de amor!
97. ¡Suenen dulces himnos gratos al Señor, Todo duerme en derredor.
y óiganse en concierto universal! Entre los astros que esparcen su luz,
Desde el alto cielo baja el Salvador bella anunciando al niñito Jesús,
para beneficio del mortal. brilla la estrella de paz,
brilla la estrella de paz.
Coro:

¡Gloria! ¡Gloria sea a nuestro Dios! ¡Noche de paz, noche de amor!

¡Gloria! sí, cantemos a una voz. Oye humilde el fiel pastor,
Y el cantar de gloria, coros celestiales que anuncian salud,
que se oyó en Belén, gracias y glorias en gran plenitud.
sea nuestro cántico también. Por nuestro buen Redentor,
por nuestro buen Redentor.
Salte, de alegría lleno el corazón,
la abatida y pobre humanidad;
Dios se compadece viendo su aflicción, ¡Noche de paz, noche de amor!
y le muestra buena voluntad. Ved qué bello resplandor,
luce en el rostro del niño Jesús,
en el pesebre, del mundo la luz;
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 HIMNOS
Astro de eterno fulgor, de Cristo el Redentor.
Astro de eterno fulgor.

99. A media noche allá en Belén Las almas que se encuentran hoy
de Dios la salvación en medio de dolor:
por ángeles se proclamó solaz completo sentirán
en celestial canción. buscando al Salvador.
En las alturas “Gloria a Dios” Oh que las nuevas del Señor
El coro tributó; se extiendan más y más;
la paz y buena voluntad que sepan todos que el Señor
al mundo pregonó. hoy brinda dulce paz.

El canto de los ángeles Vosotros, llenos de temor

hoy se oye resonar; y enhiestos hoy que estáis,
el eco dulce encantador y que agobiados de dolor
alivia mi pesar. con paso lento vais.
Y al escuchar con atención Hoy descansad y contemplad
el mundo en derredor, la angélica visión;
divina paz recibirá alzad la vista y escuchad

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 HIMNOS
la célica canción. pues hoy el cielo nos mostró
su buena voluntad.

100. Oh aldehuela de Belén,

afortunada tú, ¡Cuán silencioso allí bajó
pues en tus campos brilla hoy preciado y puro don!
la sempiterna Luz. Así también aquí dará
El Hijo, el Deseado, sus bendiciones Dios.
con santa expectación ningún oído acaso
por toda gente y toda edad, percibe su venir,
en ti, Belén nació. mas el de humilde corazón,
lo habrá de recibir.

Allá do el Redentor nació

los ángeles están ¡Oh, Santo Niño de Belén!
velando todos con amor desciende con tu amor,
al Niño sin igual. y echando fuera todo mal
¡Estrellas rutilantes, nace en nosotros hoy.
a Dios la gloria dad! Angélicos cantores
le anuncian al nacer;

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 HIMNOS
ven con nosotros a morar, Loor al verbo encarnado,
Jesús Emanuel. en humanidad velado; >>>

101. Oíd un son en alta esfera: Gloria al Santo de Israel,

¡En los cielos, Gloria a Dios! cuyo nombre es Emanuel.
¡Al mortal paz en la tierra! Canta la celeste voz:
Canta la celeste voz. “¡En los cielos, Gloria a Dios!”.
Con los cielos alabemos,
al eterno Rey cantemos,
a Jesús, que es nuestro bien,
con el coro de Belén; Príncipe de paz eterna,
canta la celeste voz: Gloria a Ti, a Ti Jesús,
“¡En los cielos, Gloria a Dios!”. de tu heredad paterna
nos trajiste vida y luz.
Has tu majestad dejado,
El Señor de los señores, y buscarnos te has dignado;
el Ungido celestial. para darnos el vivir,
a salvar los pecadores a la muerte osaste ir.
bajó al seno virginal. Canta la celeste voz:

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 HIMNOS
“¡En los cielos, Gloria a Dios!”
Vienen los magos en busca del Rey;
al preguntar: “¿Dónde está?”
Las escrituras contestan su fe:
“En Bethlehem está”. >>>
102. Desde los cielos el buen Salvador Vienen pastores dejando su grey,
viene por mí, viene por ti; hasta Belén y al niño ven;
en un pesebre de pobre mesón, vuelven contentos y llenos de fe,
helo aquí, aquí. hablando de Él, de Él.
Coro:
¡Que grande amor! ¡Qué grande amor! 103. Venid pastorcillos, venid a adorar
Cristo mostró por mí; al Rey de los cielos que nace en Judá.
¡Que grande amor! ¡Qué grande amor! Sin ricas ofrendas podemos llegar,
Cristo mostró por ti. que el niño prefiere la fe y la bondad.

Pregona el ángel mensaje de amor: Un rústico techo abrigo le da;

“Vino la luz, vino salud; por cuna un pesebre, por templo un portal;
os ha nacido hoy un Salvador, en lecho de pajas incógnito está,
Cristo Jesús, Jesús”. quien quiso a los astros su gloria prestar.

Cantan los ángeles: “Al mundo paz Hermoso lucero le vino a anunciar,
¡Gloria a Dios! ¡Gloria a Dios! y magos de oriente buscándole van:
Paz en la tierra y al hombre solaz, delante se postran del Rey de Judá,
¡Gloria a Dios, a Dios!”. de incienso, oro y mirra tributo le dan.

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 HIMNOS
y de opresión el los lleva a solaz.
Con fe y con gozo vayamos a El Gozosos hoy con gratitud cantamos
que el niño es humilde y nos ama muy fiel. al Rey de reyes, todos alabad.
Los brazos nos tiende con grato ademán:
“Venid”, nos repite su voz celestial. 105. Venid, fieles todos, a Belén marchemos,
104. Santa la noche, hermosas las estrellas, de gozo triunfantes, henchidos de amor,
la noche cuando nació el Señor. y al Rey de los cielos humilde veremos.
El mundo envuelto estuvo en sus querellas,
hasta que Dios nos mandó al Salvador. Coro:
Una esperanza todo el mundo siente, Venid, adoremos, Venid, adoremos,
la luz del nuevo día al fin brillo. venid, adoremos a Cristo el Señor.

El que es Hijo eterno, del eterno Padre,

Coro: y Dios verdadero que al mundo creó,
del seno virgíneo nació de una madre.
Hoy adorad a Cristo, reverente.
Oh noche divina, nació el Salvador En pobre pesebre yace reclinado,
Oh noche divina, nació Jesús. al hombre ofreciendo eternal salvación,
(Nació el Salvador) el Santo Mesías, el Verbo humanado.

Cantad jubilosas, celestes criaturas;

Nos enseñó a amarnos tiernamente. resuenen los cielos con vuestra canción
Su ley de amor, su evangelio de paz, ¡Al Dios bondadoso, gloria en las alturas!
libra al esclavo que en cadenas gime,

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 HIMNOS
Jesús, celebramos tu bendito nombre
con himnos solemnes de grato loor;
por siglos eternos adórete el hombre.

106. Oh noche santa de estrella refulgentes, Al Rey de reyes cantamos esta noche
esta es la noche en que el Salvador nació. y su amor eterno proclame nuestra voz,
Tanto esperó el mundo en su pecado todos ante Él, delante su presencia
hasta que Dios derramo su inmenso amor. postrados ante el Rey, a nuestro Rey;
al Rey de los siglos adoración.

Un canto de esperanza, al mundo regocija,

por el que ilumina una nueva mañana; Nos enseñó amarnos uno al otro,
Ponte de rodillas, escucha reverente, su voz fue amor, su evangelio es paz.
¡Oh noche divina! Cristo nació, Nos hizo libres del yugo y las cadenas
¡Oh noche divina! Nació Jesús. de opresión, que en su nombre destruyo.

Guía la luz de fe, serenamente, De gratitud y gozo, dulces himnos canta

de corazón ante su trono a adorar. el corazón humilde, que a toda voz proclama:
Oro, incienso y mirra, antaño le trajeron, ¡Cristo el Salvador!, ¡Cristo el Señor!
la vida hoy le entregamos sin dudar. Por siempre y para siempre, todo el honor,
la Gloria y el poder sean para El.

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 HIMNOS
Poder sea para El. de la Jerusalén;
viejas paredes destruidas,
que si tuvieran vida,
nos hablarían también.
107. Tierra bendita y divina 108. ¡Al mundo paz, nació Jesús!
es la de Palestina, nació ya nuestro Rey;
donde nació Jesús. el corazón ya tiene luz,
Eres, de las naciones, cumbre y paz su santa grey, y paz su santa grey,
bañada por la lumbre y paz, y paz su santa grey.
que derramó su luz.
Coro: ¡Al mundo paz, el Salvador
Eres la historia inolvidable,
en tierra reinará!
porque en tu seno se derramó
Ya es feliz el pecador,
la sangre, preciosa sangre,
Jesús perdón le da, Jesús perdón le da,
del unigénito Hijo de Dios.
Jesús, Jesús perdón le da.
Cuenta la historia del pasado
que en tu seno sagrado
vivió el Salvador, Al mundo El gobernará
y en tus hermosos olivares, con gracia y con poder;
habló a los millares a las naciones mostrará
la palabra de amor. su amor y su poder, su amor y su poder,
su amor, su amor y su poder.
Quedan en ti testigos mudos,
que son los viejos muros

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 HIMNOS
todo niño redimido
su joya será. >>>
Coro:
109. ¡Oh santísimo, felicísimo, Como estrellas que brillan
grato tiempo de navidad! son los niños que le aman,
Al mundo perdido los tesoros que adornan
Cristo le ha nacido: su Rey y Señor.
¡Alegría, alegría, cristiandad!
Tiene Cristo en su corona
¡Oh santísimo, felicísimo, brillantes preseas;
grato tiempo de navidad! cada joya que le adorna
Coros celestiales con sangre compró.
oyen los mortales:
Él recoge los tesoros
¡Alegría, alegría, cristiandad!
de niños amantes;
y en su seno los corderos
¡Oh santísimo, felicísimo,
Jesús llevará.
grato tiempo de navidad!
Príncipe del cielo, Tanto niños como niñas
danos tu consuelo: que acudan a Cristo,
¡Alegría, alegría, cristiandad! son las joyas escogidas
preciosas a Él.
110. Jesucristo ha venido
en busca de joyas;

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 HIMNOS
Con su sangre derramada y alabar al Salvador;
Él compra las joyas; los piecitos han de andar
ningún alma no lavada listos en obras de amor.
su reino verá. 112. Cristo me ama, me ama a mí,
111. Lindas las manitas son su palabra dice así;
que obedecen a Jesús, niños pueden ir a Él,
lindos ojos son también quien es nuestro Amigo fiel.
los que están llenos de luz.
Coro:
Coro: Sí, Cristo me ama,
Lindas son las manos si, Cristo me ama;
que obedecen al Señor, si, Cristo me ama;
lindos también los ojos, la Biblia dice así.
llenos de amor de Dios.
Cristo me ama, El murió.
Lo que puedes tú hacer y la gloria nos abrió;
Cristo te lo exigirá; mis pecados borrará,
hazlo, pues, con gran placer, me dará la entrada allá.
hazlo y contento estarás.
Cristo me ama, débil soy,
Las manitas hechas son
pero a Él las gracias doy;
para al Salvador servir;
que en el cielo vive ya,
también nuestro corazón
y del mal me librará.
debe por Cristo latir.
Cristo me ama, no se va,
Y los labios para orar

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 HIMNOS
a mi lado siempre está. en millares que acudan a Ti,
cuando El véngame a buscar y con ello este pueblo contemple
siempre con El he de estar. paz, justicia, y progreso sin fin.
113. Dios eterno, clemente, benigno; 114. Se acerca un año nuevo: Tu voluntad será.
Ser supremo, divino Hacedor; Velando o trabajando, tu mano nos guiara.
Tú, que al mundo has amado al extremo Un año de progreso, de prueba y bendición,
de mandar a Jesús Redentor; más cada día probando Tu santa dirección.
a tu trono glorioso acudimos
esperando nos quieras oír,
a pedirte bendigas las obras Se acerca un año nuevo, de gracia y de bondad.
que en tu nombre se hicieren aquí. Mirando hacia adelante, dejamos la maldad.
Un año más confiando en tu divino amor;
Que esta casa, que a Ti te ofrecemos
¡Que haya esperanza, sin pena ni temor!
con ferviente cariño filial,
la destines por siempre al trabajo
de enseñar tu infinita verdad.
Que la santa y divina Escritura Se acerca un año nuevo para testificar,
reverbere su espléndida luz, de grandes bendiciones que Tu nos quieres dar.
en las vidas de los que acudieren Se acerca un año nuevo; Enséñanos así:
a esta casa a aprender la virtud. ¡Do quiera que nos lleves, el año es para Ti!
AMEN
Que el que sufre dolencias del alma
halle bálsamo en ella; Tu amor,
al que llore y no encuentre consuelo,
torne en gozo su grande aflicción.
Que podamos ver fruto en la obra

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 HIMNOS
a una muerte de terror. >>>

115. Yo quiero obedecerte, Jesús, mi Salvador; Coro:

y en agua bautizarme, según tu ley, Señor. Soy salvado del abismo,
con Jesús al cielo voy,
Coro: y confieso por bautismo
Señor, que Tú me ayudes que del mundo ya no soy.
tu nombre a ensalzar,
y en novedad de vida Tuve el corazón muy triste
Continuamente andar. por en vano paz buscar;
Así la fe demuestro que solo está en Jesús, pero a mi Señor dijiste:
que yo con el he muerto al mundo por su cruz. “Yo haréte descansar.”

Al mundo yo renuncio, sus pompas vanas son; Es la sangre que me salva

ahora al cielo aspiro de todo corazón. y en paz me guardará;
el Espíritu me sella,
En novedad de vida contigo yo andaré, y me santificará.
mi Salvador y guía, mi Redentor y Rey.
Antes muerto en el pecado,
Entonces en tu reino, vencido todo mal,
ya he muerto con Jesús,
daráme allí tu mano corona celestial.
y del mundo separado
yo me juzgo por la cruz.
116. Yo vivía en el pecado,
y doctrinas del error. En el agua sumergido,
Me guiaban engañado testimonio a todos doy,
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 HIMNOS
que yo en Cristo he creído y yo quiero consagrarme
y por El salvado soy. al que obró mi redención.
117. En las aguas de la muerte, 118. En tu cena nos juntamos,
sumergido fue Jesús, Señor, para celebrar
mas su amor no fue apagado tu pasión angustia y muerte,
por sus penas en la cruz. y ensalzar tu grande amor;
Levantóse de la tumba, grande amor, grande amor,
sus cadenas quebrantó, y ensalzar tu grande amor.
y triunfante y victorioso
a los cielos ascendió. Redimidos ya tenemos
por tu muerte comunión;
En las aguas del bautismo en el pan te recordamos,
hoy confieso yo mi fe: Cristo nuestra salvación;
Jesucristo me ha salvado Salvación, Salvación,
y en su amor me gozaré; Cristo nuestra salvación.
en las aguas humillantes
En la copa confesamos
a Jesús siguiendo estoy, que tu sangre es eficaz;
desde ahora para el mundo
por tu salvación perfecta
y el pecado muerto soy. esperamos ver tu faz;
Yo que estoy crucificado, ver tu faz, ver tu faz,
¿Cómo más podré pecar? esperamos ver tu faz.
Ya que soy resucitado, Por tu gracia congregados,
santa vida he de llevar. en tu paz y con amor,
Son las aguas del bautismo en espíritu cantamos
mi señal de salvación,

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 HIMNOS
siempre a ti, Oh Redentor; y cuando en valle oscuro esté
Redentor, Redentor, confiadamente yo andaré;
siempre a ti, Oh Redentor. es siempre el mismo amigo
119. Cristo es todo para mí, El Señor Jesús.
en calma y tempestad; 120. Lejos de mi padre Dios,
Él es mi gozo, vida y paz, fui por Cristo hallado;
camino y verdad; por su gracia y por su amor
y cuando mi alma triste esté, fui por El salvado.
su gran consuelo yo tendré; Coro:
es siempre el mismo amigo Es Jesús mi Señor,
El Señor Jesús. mi alegría eterna;
Él me amó y me salvó
Cristo es todo para mí, en su gracia tierna.
en prueba y tentación;
en su poder yo venceré Es Jesús mi Salvador,
la fuerza de satán;
fiel en su constancia;
en tiempo de debilidad
toda mi necesidad
encuentro en El seguridad;
suple su abundancia.
es siempre el mismo amigo
El Señor Jesús.
Cerca de mi buen Pastor
Cristo es todo para mí, vivo cada día;
disfruto de su amor; toda gracia en su Señor
feliz en El no temeré, halla el alma mía.
me cuida mi Señor;
Guárdame, Señor Jesús,

- 72 -
 HIMNOS
para que no caiga; digno es el Cordero: ¡Gloria sea a Él!
cual sarmiento de la vid, Y al que está en el trono, hoy y siempre
vida de Ti traiga. ¡Amén!

121. Digno es el Cordero que inmolado fue,

de tomar el reino, honra, gloria y prez; 122. De Jesús el nombre guarda,
para abrir el libro nadie se encontró: heredero del afán;
Solo Él fue digno: ¡Cante nuestra voz! dulce hará tu copa amarga,
tus afanes cesarán.
Coro:
Coro:
A Jesús loor, a Jesús loor,
a Jesús loor, porque Él es digno. Suave luz, manantial
A Jesús loor, a Jesús loor, de esperanza, fe y amor;
a Jesús loor, porque Él es digno. sumo bien celestial
es Jesús el Salvador.
Digno es el Cordero que en la cruz murió
por llevar al mundo cerca de su Dios; De Jesús el nombre estima;
y donde reinaba densa oscuridad, que te sirva de broquel,
El la luz del cielo vino a derramar. alma débil, combatida,
hallarás asilo en El.
Digno es el Cordero, canten voces mil,
que la humana raza vino a redimir; De Jesús el nombre ensalza,
cuyo sin igual poder,

- 73 -
 HIMNOS
del sepulcro nos levanta, Aun si están demonios mil,
renovando nuestro ser. prontos a devorarnos;
no temeremos, porque Dios
sabrá, aún, prosperarnos. >>>
123. Castillo fuerte es nuestro Dios, Que muestre su vigor
defensa y buen escudo; satán y su furor.
con su poder nos librará Dañarnos no podrá;
en este trance agudo. pues condenado es ya
Con furia y con afán por la Palabra Santa.
acósanos satán;
por armas deja ver 124. Es Jesucristo la vida, la luz,
astucia y gran poder; Él nos demuestra la felicidad;
cual él no hay en la tierra. el Redentor quién ha muerto en la cruz
por darnos libertad.
Nuestro valor es nada aquí, Coro:
con él todo es perdido; Él es Pastor enviado
mas por nosotros pugnará y divino Emmanuel;
de Dios el escogido. Él me conduce por sendas de paz,
¿Sabéis quién es? Jesús, como a su oveja fiel.
el que venció en la cruz,
Señor de sabaoth; Quita del alma la incredulidad,
y pues, El solo es Dios limpia las manchas de infiel corazón;
él triunfa en la batalla. es su carácter la suma bondad.
nos tiene compasión.

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 HIMNOS
Fuente preciosa de gracia y salud, A El solo adorad,
crisol que limpia de toda maldad; Señor de salvación;
feliz quien toma de su plenitud loor eterno tributad
y de su santidad. de todo corazón.
125. A Cristo coronad 126. ¿Quién podrá con su presencia
divino Salvador. impartirme bendición?
Sentado en alta majestad Solo Cristo en su clemencia,
es digno de loor. puede dar consolación.
Al Rey de gloria y paz
loores tributad, Coro:
y bendecid al inmortal Sólo Cristo satisface
por toda eternidad. mi angustiado corazón;
sí, gozoso Cristo me hace
A Cristo coronad por su eterna redención.
Señor de nuestro amor,
al Rey triunfante celebrad, Su amor no se limita,
glorioso vencedor; es su gracia, sin igual;
potente Rey de paz su merced es infinita,
el triunfo consumó, más profunda que mi mal.
y por su muerte de dolor
su grande amor mostró. Redención sublime y santa
imposible de explicar;
A Cristo coronad que su sangre sacrosanta
Señor de vida y luz; mi alma pudo rescatar.
con alabanzas proclamad
los triunfos de la cruz.

- 75 -
 HIMNOS
Cristo suple en abundancia Dirige a mi tu rostro,
toda mi necesidad; Jesús, lleno de amor,
ser de Él es mi ganancia, sol puro de justicia,
inefable es su bondad. dulce consolador. >>>

127. Tesoro incomparable, Sin tu influencia santa

Jesús amigo fiel, la vida es un morir;
refugio del que huye gozar de tu presencia,
del adversario cruel; esto solo es vivir.
sujeta compasivo
a Ti mi corazón, Jesús riqueza mía,
ya que para salvarme mi amante Salvador,
sufriste la pasión. en mí flaqueza Tu eres
mi fuerte protector.
Delicias Tú de mi alma, Jamás el enemigo
pan de la eternidad, podrá turbar mi paz;
del cual yo me alimento por más que lo intentare
en mi necesidad. no lo permitirás.
En mi flaqueza extrema
se cumple tu virtud, Al mundo de falacias
y en medio de mis males no pertenezco ya;
tú quieres mi salud. el cielo es mi morada,
allí mi Amado está.

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 HIMNOS
A donde Cristo habita, Tu inmensa bondad
con ansia quiero ir; ¿Qué lengua dirá?
en sempiterno gozo o ¿Quién tu verdad
con El quiero vivir. jamás sondeará? >>>

128. ¡Load al gran REY, Con suma grandeza

su gloria ensalzad! tus manos proveen.
su amor a su grey Y es fiel tu promesa
con gracia cantad; a los que en Ti creen.
es nuestro escudo,
baluarte y sostén. El frágil varón
El Omnipotente perdido que está,
por siglos. Amen su gran Salvador
en Ti hallara;
¡Cuán fuerte es Dios! tu misericordia
¡Mortales temblad! no puede faltar,
Oímos su voz y a tu eterna gloria
en la tempestad; le has de llevar.
brocado de estrellas
es su pabellón, ¡Tremendo poder!
y vientos y rayos ¡Ilimite amor!
sus ángeles son. Misterioso ser,
te damos loor;

- 77 -
 HIMNOS
¡Cuán maravillosa su clemente corazón.
tu gran creación!
mas, ¡Oh, qué asombrosa
es tu gran redención!

129. El amor de Dios es grande, ¡Oh que triunfo más brillante!

no podrá jamás cesar, ¡En el cielo un hombre entró!
más aumenta, más se expande Y es allá representante
cuanto más le dan lugar. de su pueblo a quien salvó.
A pesar de ser tan Santo, Santo amor fue revelado
da perdón al pecador; por el hecho de la cruz,
y el vigor de nuestra vida y Jesús ha demostrado
nos es dado en ese amor. su justicia en plena luz.

Demostró la cruz de Cristo Si, descansan los creyentes

que era Dios El Dios de amor viendo en gloria a su Señor;
y de luz, que allí se ha visto paz y gozo permanentes
esplendente cual albor. tienen por su fiel amor;
La eternal justicia hallaba y los fuertes eslabones
en la cruz satisfacción, simpatía y comunión
a la par que Dios mostraba unen ya sus corazones

- 78 -
 HIMNOS
con los que de Cristo son.

¡A la batalla y a la victoria!
130. ¡A la batalla y a la victoria ¿Quién será este buen Rey?
vamos con Dios nuestro Rey! ¿Quiénes las tropas, los que le siguen
Quien con su brazo fuerte, robusto, en esta lucha de fe?
siempre defiende su grey. Es Jehová el Poderoso
Pues, sin temor avancemos de todos reyes el Rey.
entusiasmados por fe, Acompañado por todos
mientras alegres cantemos: los que ya son de su grey.
Gloria a Dios, nuestro Rey.

Coro: ¡A la batalla y a la victoria!

bajo tan buen general,
No es la guerra de los valientes derrotaremos, si, en seguida
ni de los fuertes la paz, todas las fuerzas del mal.
más de los fieles en Cristo Reinos y tronos aún mundos
es el eterno solaz. todos al fin pasarán,
pero los fieles en Cristo
vida eterna tendrán.

- 79 -
 HIMNOS
y su poder venció
Cristo el Señor.

131. La tumba le encerró, 132. Más de Jesús quiero aprender,

Cristo mi Cristo; más de su gracia conocer;
el alba allí esperó más del amor con que me amó,
Cristo el Señor. más de la cruz en que murió.
Más quiero amarle,
Coro: más quiero honrarle;
Cristo la tumba venció, más de su salvación gozar,
y con gran poder resucitó; más de su dulce amor gustar.
del sepulcro y muerte
Cristo es vencedor, Más de Jesús quisiera hablar,
vive para siempre más de su comunión gozar;
nuestro Salvador; más de sus dones recibir,
¡Gloria a Dios! ¡Gloria a Dios! más con los otros compartir.
El Señor resucitó. Más quiero amarle,
más quiero honrarle;
De guardas escapó, más de sus dones recibir,
Cristo mi Cristo; más con los otros compartir.
el sello destruyó
Cristo el Señor. Más de Jesús anhelo ver,
más de su hermoso parecer;
La muerte dominó más de la gloria de su faz,
Cristo mi Cristo; más de su luz, más de su paz.

- 80 -
 HIMNOS
Más quiero amarle,
más quiero honrarle;
más de la gloria de su faz,
más de su luz, más de su paz. 134. Canta, oh buen cristiano;
133. En mis angustias me ayuda Jesús, dulce es el cantar,
sobre mi alma derrama su luz; hace el camino llano,
todos los días consuelo me da. y quita el pesar.
Cada momento conmigo Él está. Canta en las noches tristes
canta en la clara luz;
Coro: almas así salvadas
cantan de Jesús.
Cada momento me guardas, Señor,
Canta, oh buen cristiano;
cada momento en tu gracia y tu amor;
lleno tu corazón,
vida abundante yo tengo en Ti,
himnos lo hacen sano,
cada momento Tu vives en mí. y del cielo son.
Tanto hay en este mundo
Voy ante el trono de Gracia con fe; de angustias y dolor,
oye mi voz y mis lágrimas ve. canta el amor profundo
Cristo Jesús en los cielos allí, de tu Salvador.
cada momento se acuerda de mí.
Canta, oh buen cristiano;
Cristo es mi roca, mi libertador; Dios guardará tus pies,
Él es mi escudo, mi gran defensor; y El sostendrá tu mano
en mi conflicto al Señor miraré hasta la vejez.
cada momento, y salvado seré. ¿Sabes que al diablo invitas

- 81 -
 HIMNOS
cuando miedoso estás? Cristo me tendrá;
Pon ante Dios tus cuitas pues su vida le costé,
y Él te dará la paz. y El me sostendrá.
135. Aunque fálteme la fe, 136. Cuando venga Cristo no habrá dolor;
Cristo me tendrá. cuando venga Cristo no habrá temor;
Aunque el diablo búsqueme, por los suyos viene Cristo el Señor
Cristo me tendrá. pues siempre los amará.
Coro:
Coro: Pues siempre los amará,
Cristo me tendrá, pues siempre los amará;
salvo me tendrá, a los suyos viene a recoger,
es tan grande su poder, pues siempre los amará.
siempre me tendrá.
Todo llanto cesa al venir Jesús;
No cual yo le tengo a EL, y la vida acrece al venir Jesús;
Cristo me tendrá; por dolor el canto, por nubes luz,
débil soy y no muy fiel, pues siempre los amará.
mas El me tendrá.

Soy objeto de su amor, Al venir Jesús no habrá más morir;

Cristo me tendrá; al venir Jesús no habrá más gemir;
y me gozo en su favor, y de todo mal viene a redimir,
Cristo me tendrá. pues siempre los amará.

Ya jamás me perderé,

- 82 -
 HIMNOS
¡Oh qué gozo habrá al venir Jesús!
Pues despertará al albor de luz,
a los nuestros y los traerá Jesús
pues siempre los amará.

137. Muy cercano está el día Tu venida, Jesucristo,

cuando volverá Jesús, librará la humanidad,
con la majestad y gloria de satán, autor inicuo
que le dio su Padre Dios; de su gran calamidad;
de sus santos rodeado cesarán todos los males
en la nube bajará; por el reino de Jesús;
ya de Cristo es el reinado, ¡Alegraos, oh mortales!
y el pecado quitará. ¡Ved el triunfo de su cruz!

Coro:
¡Cuánto anhelan y desean
“Ven, Señor Jesús, ven pronto” la venida de Jesús,
Claman todos con ardor; los creyentes ya salvados
“He aquí Yo vengo presto, por la obra de su cruz!
presto”, dice el Salvador. “Ven y siéntate conmigo
en mi trono” el Rey dirá:
“Has sufrido y has vencido,
de mi gloria goza ya”

- 83 -
 HIMNOS
que Tú viniste a rescatar
al más perdido pecador. >>>

138. Abre mis ojos a la luz, La mies es mucha, ¡Oh, Señor!

tu rostro quiero ver, Jesús; obreros faltan de valor;
pon en mi corazón tu bondad, heme aquí,
y dame paz y santidad. Espíritu Consolador.
Humildemente acudo a Ti
porque tu tierna voz oí; Abre mi mente para ver
mi guía sé, más de tu amor y gran poder;
Espíritu Consolador. dame tu gracia para triunfar,
y hazme en la lucha vencedor.
Sé Tu mi escondedero fiel,
Abre mi oído a tu verdad, y aumenta mi valor y fe;
yo quiero oír con claridad; mi mano ten,
bellas palabras de dulce amor, Espíritu Consolador.
¡Oh mi bendito Salvador!
Consagro a Ti mi frágil ser, Abre las puertas que al entrar
tu voluntad yo quiero hacer. en el palacio celestial,
Llena mi ser, pueda tu dulce faz contemplar
Espíritu Consolador. por toda la eternidad.
Y cuando en tu presencia esté
Abre mis labios para hablar, tu santo nombre alabaré;
y a todo el mundo proclamar

- 84 -
 HIMNOS
mora en mí,
Espíritu Consolador.

139. Es tu fidelidad tan grande, oh Padre; 140. Cerca, más cerca, ¡Oh Dios, de Ti!
tú dices la verdad descanso allí. Cerca yo quiero mi vida llevar.
Tu luz rodea mi senda en el mundo, Cerca, más cerca, ¡Oh Dios, de Ti!
tu voz me anima; mi fuerza es en Ti. Cerca a tu gracia que puede salvar.
Cerca a tu gracia que puede salvar.
Coro:
Cerca más cerca, cual pobre soy,
¡Oh que fidelidad! ¡Oh que fidelidad! nada, Señor, yo te puedo ofrecer;
Nunca me canso de darte loor. sólo mi ser contrito te doy,
Cada mañana es nueva tu gracia; pueda contigo la paz obtener.
inalterable es tu gran Amor. Pueda contigo la paz obtener.

Los enemigos son muy poderosos; Cerca, más cerca, Señor de Ti,
tú eres mi amigo, oh Dios fuerte Adalid. quiero ser tuyo, dejando el pecar;
En la batalla me das hoy tu ayuda; goces y pompas vanas aquí
vencido no seré, confiando en Ti. todo, Señor, quiero ahora dejar.
Todo, Señor, quiero ahora dejar.
En tu presencia, oh Dios, hay gran descanso,
dulce consolación perfecta paz. Cerca, más cerca, mientras el ser
Al ver las glorias de Cristo el Señor aliente vida y busque tu paz;
le hemos de celebrar siempre jamás. y cuando al cielo pueda ascender,

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 HIMNOS
ya para siempre conmigo estarás.
Ya para siempre conmigo estarás.

141. ¡Oh! Yo quiero andar con Cristo, ¡Oh! Yo quiero andar con Cristo,
quiero oír su tierna voz, él vivió en santidad;
meditar en su palabra en la Biblia yo lo leo,
y cumplir su voluntad. y yo sé que es la verdad.
Consagrar a El mi vida, Cristo era santo en todo,
siempre andar de Él es pos el Cordero de la cruz;
y algún día con mi Cristo, y yo anhelo ser cristiano,
gozaré la claridad. seguidor de mi Jesús.

Coro:
¡Oh! yo quiero andar con Cristo,
¡Oh, sí, yo quiero andar con Cristo! de mi senda Él es la luz,
¡Oh, sí, yo quiero vivir con Cristo! dejaré el perverso mundo
¡Oh, sí, yo quiero morir con Cristo! y cargaré aquí mi cruz,
Quiero serle un testigo fiel. este mundo nada ofrece,
Cristo ofrece salvación;
y es mi única esperanza
gozar vida eterna en Sión.

- 86 -
 HIMNOS
aprovechad el tiempo que el Señor os da,
pues pronto el día de salud acabará. >>>
142. Oíd, oíd lo que nos manda el Salvador: Pensad, pensad, la hora presto llegará;
“Marchad, marchad, y proclamad mi amor, Jesús vendrá su reino a disfrutar:
pues he aquí Yo con vosotros estaré; De mar a mar habrá prosperidad y paz;
los días todos hasta el fin os guardaré.” sus alabanzas cantará la humanidad.
Coro: 143. ¿Soy yo soldado de Jesús?
Id, id por el mundo; ¿Un siervo del Señor?
id, id y predicad el evangelio; ¿Y temeré llevar la cruz
id, id, va adelante, sufriendo por su amor?
El todopoderoso Salvador. Coro:
¡Gloria, gloria, aleluya a Jesús! Yo hablaré por mi Señor,
¡Gloria, gloria, aleluya a Jesús! confesaré mi fe;
Nuestras almas El salvó, su Espíritu me ayudará,
nuestras manchas El lavó: yo testificaré.
proclamemos, pues, a todos su amor.
Lucharon otros por la fe;
Mirad, mirad la condición del pecador cobarde no he de ser;
¡Qué triste es! ¡Qué llena de dolor! por mi Señor batallaré,
Sin luz, sin paz camina a la eternidad, confiando en su poder.
y no conoce el gran peligro en que está.
Es menester que sea fiel,
Salid, salid, embajadores del Señor;
buscad, buscad al pobre pecador;

- 87 -
 HIMNOS
que nunca vuelva atrás, cómo Jesús los quiere ver
que siga siempre en pos de Él a su amparo y así vencer.
su gracia me dará. ¡Danos un bello hogar!
144. Danos un bello hogar: ¡Danos un bello hogar!
donde la Biblia se pueda leer; 145. Me vino un mensaje veraz,
donde tu amor bienestar nos dé; mensaje de gracia y poder,
donde en Ti todos tengan fe. que trajo a mi alma la paz
¡Danos un bello hogar! la paz que quise obtener.
¡Danos un bello hogar! Coro:
¡Paz, paz! Sí, paz,
Danos un bello hogar:
donde el padre sea fuerte y fiel;
don que recibo de Dios.
donde no haya el sabor a hiel; ¡Qué maravilla es la paz!
donde en su ambiente haya sólo miel. La paz, el don de mi Dios. ¡Amén!
¡Danos un bello hogar!
¡Danos un bello hogar! Se hizo la paz en la cruz
por sangre que allí derramó,
Danos un bello hogar: mi deuda pagó mi Jesús,
donde la madre con devoción, y paz en mi alma me dio.
sepa mostrarnos tu compasión;
donde Tú habites con santa unción. Y cuando a Jesús acepté,
¡Danos un bello hogar! mi alma de paz se llenó:
¡Danos un bello hogar! En Cristo la dicha encontré,
Danos un bello hogar: la paz divina me dio.
donde los hijos podrán saber
En Cristo encuentro la paz,

- 88 -
 HIMNOS
yo cerca de El quiero estar, Él te recompensará.
y siempre su faz contemplar,
la paz divina gozar.

146. Escuchad, Jesús nos dice: Si como elocuente apóstol

“¿Quiénes van a trabajar? no pudieres predicar,
Campos blancos hoy aguardan puedes de Jesús decirles
que los vayan a segar” cuánto al hombre supo amar.
Él nos llama cariñoso, Si no logras que sus culpas
nos constriñe con su amor; reconozca el pecador,
¿Quién responde a su llamada: conducir los niños puedes
“Heme aquí, yo iré, Señor”? al benigno Salvador.

Si por tierras o por mares

no pudieras transitar,
puedes encontrar hambrientos
en tu puerta que auxiliar;
si careces de riquezas,
lo que dio la viuda da;
si por el Señor lo dieres,

- 89 -
 HIMNOS
cantemos en coro con gracia y ardor.

147. Iglesia de Cristo, reanima tu amor 148. Grata noticia, viene Jesús
velando y orando espera al Señor. por los salvados mediante su cruz,
Jesús el Esposo vestido de honor, para llevarnos al trono de luz,
viniendo se anuncia con fuerte clamor. sí, pronto vuelve el Señor.
Coro: Coro:
Levántate Iglesia, sacude el sopor; Cristo Jesús de los cielos vendrá,
que viene en las nubes pronto en su gloria vendrá.
tu Esposo y Señor. Para el creyente ¡Que gozo será
ver al amado Señor!
Si algunos dormitan sin sentir dolor,
la fe sea en todos el despertador. Con alegría y aclamación,
Velad compañeros, velad sin temor, voz de arcángel, trompeta de Dios,
que está con nosotros el Consolador. viene Jesús con cabal salvación;
sí, pronto vuelve el Señor.
El hombre en sus penas, infiel pecador,
se entrega en las manos del sueño traidor; Los que han dormido despertarán,
mas el que es amado del fiel Salvador, y con los vivos se reunirán;
velar esperando prefiere mejor. todos unidos con Cristo estarán,
cuando viniere el Señor.
La noche difunde su negro pavor,
más pronto del alba saldrá el resplandor, ¡Firmes! Hermanos, fieles velad,
en tanto esperamos el primer albor,

- 90 -
 HIMNOS
siempre por Cristo constantes obrad, ya no desprecies más su amor,
y su venida hasta el fin esperad, ¡Oh, ven a Jesús!
sí, pronto vuelve el Señor.
149. ¡Oh, no rechaces la verdad! 150. En tu templo, Padre Dios,
Tus ojos hoy abre a la luz, elevamos nuestra voz
renuncia toda la maldad, a tu nombre, dando honor
y ven a Jesús. por Jesús, el Salvador.
Coro: Damos hoy también loor
¡Oh, ven sin tardar! por las madres y su amor.
¡Oh, ven sin tardar!
Acepta a Jesús,
y salvo serás. En eterna gratitud
por tu gracia en plenitud,
Tus ojos ya tal vez el sol, te loamos en canción,
no más aquí contemplarán; por la inmensa bendición,
hoy es el día de salvación, del constante y puro amor
¡Oh, ven a Jesús! de las madres, Dios de amor.
Jesús te tiene compasión,
¿Con qué su amor le pagarás? Oye, pues, la petición
Hoy trae a El tu corazón, de esta fiel congregación;
y salvo serás. te rogamos con fervor
Jesús recibe al pecador, por las madres, Dios de amor;
que quiera a Él su alma unir; que con tu divino bien
coronadas hoy estén.
- 91 -
 HIMNOS
amor que me trajo el perdón;
la esperanza que aliento
151. Cuán glorioso es el cambio la debo al Señor;
operado en mí ser, porque El vino a mi corazón.
viniendo a mi vida el Señor; 152. Cristo tan sólo pudo amarme;
hay en mi alma una paz nada podrá de El separarme,
que yo ansiaba tener: pues con su sangre me redimió:
La paz que me trajo su amor. Ahora soy de Él.

Coro: Coro:
El vino a mi corazón;
Él vino a mi corazón; Ahora soy de Cristo,
soy feliz con la vida que Cristo me dio, mío también es El;
cuando El vino a mi corazón. puedo gozar de su amistad
por la eternidad.
Ya no voy por la senda
que el mal me trazó,
Antes vivía en el pecado,
do sólo encontré confusión;
mi corazón de Dios alejado;
mis errores pasados
mas mi vergüenza El me quitó:
Jesús los borró,
cuando El vino a mi corazón.
Ya pertenezco a Él.

Ni una sombra de duda Mi ser rebosa de pleno gozo,

oscurece su amor, Dios me liberta, me da reposo,
pues con su sangre me redimió:
Ahora soy de Él.

- 92 -
 HIMNOS
en tu comunión aquí.

153. ¡Abba, Padre! Te adoramos,

en el nombre de Jesús; Por tu mano revestidos,
Dios y Padre te llamamos, del ropaje de salud;
hechos hijos de la luz; en tu casa recogidos,
ya del juicio libertados, por tu gran solicitud;
por la sangre del Señor, redimidos y lavados,
y por EL reconciliados, Por la sangre de Jesús,
disfrutamos de tu amor. restaurados, bien amados,
hechos hijos de tu luz.

Pródigos un tiempo fuimos,

y alejados del hogar; ¡Abba! Todos te alabamos,
mas tu voz de amor oímos, muy contentos de saber;
pues quisístenos llamar; que los bienes que gozamos,
por Jesús nos perdonaste, claro dan a comprender;
y nos allegaste a Ti, que Tú encuentras complacencia,
nos besaste y nos sentaste, en mostrarnos tu favor,
y por tal benevolencia,

- 93 -
 HIMNOS
te alabamos con fervor.

154. Hermano dinos hoy algo de Jesús, Al escuchar tu voz que habla del Señor;
dinos otra vez la historia de su amor; dinos otra vez la historia de su amor;
decláranos tu fe, gozo y gratitud. tal vez un pecador se convierta a Dios;
Dinos otra vez la historia de su amor; dinos otra vez la historia de su amor.
¿Sigues siempre cerca de tu Señor? Muchos tienen sed en su corazón,
¿Arde tu alma del primer fervor? en el mundo buscan diversión,
¿Está tu copa llena de bendición? señálales la fuente de bendición;
Dinos otra vez la historia de su amor. dinos otra vez la historia de su amor.

Coro:
La ayuda que te ha dado en la tentación;
Dinos otra vez la historia dinos otra vez la historia de su amor;
del amor del Salvador: las pruebas de tu fe y su compasión;
Tan bendita y grata historia dinos otra vez la historia de su amor;
nos hará cantar su gloria; dinos que Jesús es tu amigo fiel,
dinos otra vez la historia que es tu Capitán y gran Pastor;
de su amor. socorro oportuno has hallado en El;

- 94 -
 HIMNOS
dinos otra vez la historia de su amor. Y tendrás que dar cuenta
ante Cristo, tu Juez,
entonces no habrá salvación. >>>
155. ¿Cómo puedes pecar Cuando Dios haya puesto
sin temor contra Dios, su trono de luz
echando en olvido su amor? llamándote a su tribunal,
¿Cómo puedes vivir y buscares en vano
rechazando la voz de Cristo, refugio en Jesús,
tu buen Salvador? ¡Qué espanto y terror sentirás!
Coro: 156. La noche termina y el día amanece,
El verano acabó, la siega pasó, del alba brillante la luz aparece;
y tenemos que ir y la cuenta rendir, de Cristo la vuelta gloriosa esperamos,
delante del trono de Dios. descendiendo en las nubes de luz.
Coro:
¿Cómo puedes pensar Pronto viene Jesús,
que al infierno tú vas, rodeado de gloria y de luz,
sin estremecerte de horror, ¡Aleluya, Cristo vuelve!
sin pedir a tu Dios, ¡Aleluya, amén! ¡Aleluya, amén!
mientras tengas lugar
que tenga de ti compasión? Con gozo su rostro divino veremos,
y luego a su imagen, cambiados seremos;
con cuerpo glorioso veloz subiremos
Cuando acabe el verano
a verle en las nubes de luz.
y llegue la mies,
la muerte vendrá con su hoz.

- 95 -
 HIMNOS
Su magnificencia y gloria veremos, El hará fuerte lo débil al fin,
el mundo, el pecado, hermanos dejemos; todo perfecto que ahora es ruin;
Así, con gran gozo, le recibiremos y por tristeza su gozo dará;
cuando Cristo nos venga a llevar. consigo en gloria a su Iglesia tendrá.
157. Pronto Jesús de los cielos vendrá, 158. Tentado, no cedas; Ceder es pecar;
dulce es pensarlo y gran gozo nos da; más fácil seráte luchando triunfar;
transformarános su rostro al ver, ¡Valor!, pues, gustoso domina tu mal;
esta es la meta al fin del correr. Jesús librar puede de asalto mortal.
Coro: Coro:
Nos cambiará, nos cambiará
al ver de El la gloriosa faz; A Jesús pronto acude,
nos cambiará, nos cambiará, en sus brazos tu alma
al ver de El la Faz. hallará dulce calma;
Él te hará vencedor.
Los separados unidos serán,
no más ausentes de Cristo estarán;
a los que duermen resucitará, Evita el pecado, procura agradar
y a su imagen El los cambiará. a Dios, a quien debes por siempre ensalzar;
no manche tus labios impúdica voz,
Oscuras nubes El disipará; tu corazón guarda de codicia atroz.
noche en día El transformará;
las tempestades Él ha de cambiar, Amante, benigno y enérgico sé;
en dulce calma; el llanto en cantar. en Cristo ten siempre indómita fe;

- 96 -
 HIMNOS
veraz sea tu dicho, de Dios es tu ser;
corona te espera, y vas a vencer.

Da lo mejor al Maestro,
159. Da lo mejor al Maestro, ríndele fiel devoción;
tu juventud, tu vigor; sea su amor tan sublime
dale el ardor de tu vida, el móvil de cada acción.
del bien luchando en favor. Puesto que al único Hijo
Cristo nos dio el vivo ejemplo dionos el Padre de amor,
de su pureza y valor; sírvele con alegría,
da tu lealtad al Maestro, dale de ti lo mejor.
dale de ti lo mejor.

Coro: Da lo mejor al Maestro,

que incomparable es su amor,
Da lo mejor al Maestro, pues al morir por nosotros,
tu juventud, tu vigor; dejó su regio esplendor.
por la verdad lucha siempre, Sin murmurar dio su vida
que va contigo en Señor. por el más vil pecador;
ama y adora al Maestro,
dale de ti lo mejor.

- 97 -
 HIMNOS
Tú las darás sin tardar;
mientras aquí esperamos,
haz que las veamos llegar.
160. “Lluvias de bendición grandes” 161. Me guía El, con cuanto amor,
es la promesa de amor; me guía siempre mi Señor;
hoy te pedimos las mandes al ver mi esfuerzo en serle fiel,
de tu presencia, Señor. con cuanto amor me guía El.
Coro: Coro:
Las lluvias grandes Me guía El, me guía El,
mándanos, oh Salvador; con cuanto amor me guía El.
haz que sintamos de nuevo No abrigo dudas ni temor,
más de tu gracia y tu amor. pues me conduce en buen Pastor.

“Lluvias de bendición grandes” En el abismo del dolor,

¡Cuanta falta hacen aquí! o en donde brille el sol mejor,
Las gotas ya recibimos; en dulce paz o en lucha cruel,
lluvias pedimos a Ti. con gran bondad me guía El.

Aquí rogándote estamos, Tu mano quiero yo tomar

oye Tú nuestra oración; Jesús, y nunca vacilar,
toda la gloria te damos pues solo a quién te sigue fiel
a ti por tu bendición. se oyó decir: “Me guía El”.

Ya vendrán las lluvias grandes, Y mi carrera al terminar,

- 98 -
 HIMNOS
y así mi triunfo al realizar, con la cota de fe y caridad.
llegando al cielo, vencedor,
loor daré al Buen Pastor.

162. ¡Despertad, despertad, oh cristianos! La gloriosa armadura de Cristo

Vuestro sueño funesto dejad; acudid con anhelo a tomar,
que el cruel enemigo os acecha confiando que el dardo enemigo
y cautivos os quiere llevar. no la pueda romper ni pasar;
¡Despertad! las tinieblas pasaron; ¡Oh cristianos, antorcha del mundo!
de la noche no sois hijos ya, De esperanza el yelmo tomad.
que lo sois de la luz y del día, Embrazad de la fe el escudo,
y tenéis el deber de luchar. y sin miedo corred a luchar.

No temáis, pues de Dios revestidos,

¡Despertad! y bruñid vuestras armas, ¿Qué enemigo vencernos podrá,
vuestro lomo ceñid de verdad; si tomáis por espada la Biblia,
y calzad vuestros pies, aprestados la palabra de Dios de verdad?
con el grato evangelio de paz. En la cruz hallareis la bandera,
Basta ya de profundas tinieblas; en Jesús hallareis Capitán,
basta ya de pereza mortal, en el cielo obtendréis la corona:
revestid, revestid vuestro pecho ¡A luchar, a luchar, a luchar!

- 99 -
 HIMNOS
donde te espera Jesús Salvador;
allí de Dios hallarás el amor
¡A su nombre Gloria!
163. Junto a la cruz do murió el Salvador, 164. Paz con Dios busqué ganarla,
por mis pecados clamaba al Señor, con febril solicitud;
¡Qué maravilla! Jesús me salvó mas mis obras meritorias
¡A su nombre gloria! no me dieron la salud.
Coro: Coro:
¡A su nombre Gloria! ¡Oh, qué paz Jesús me da!
¡A su nombre Gloria! Paz que antes ignoré;
¡Qué maravilla! Jesús me salvó todo nuevo se tornó,
¡A su nombre Gloria! desde que su paz hallé.

Junto a la cruz recibí el perdón; Lleno estaba yo de dudas,

limpio en su sangre es mi corazón; temeroso de morir;
llena es mi alma de gozo y de paz; hoy en paz, mañana triste,
¡A su nombre Gloria! con temor del porvenir.

Junto a la cruz hay el manantial Al final en desespero,

de agua de vida cual el cristal; “Ya no puedo”, dije yo;
mi sed allí Cristo pudo apagar. y del cielo oí respuesta:
¡A su nombre Gloria! “Todo hecho ya quedó.”

Ven sin tardar a la cruz, pecador; De mis, obras despojado,

- 100 -
 HIMNOS
vi la obra de Jesús; El diablo rugirá,
supe que la paz fue hecha el mundo burlará; >>>
por la sangre de Jesús.

165. Mirad el gran amor

¡Aleluya! ¡Aleluya! Pero el Salvador será
De nuestro Salvador con nosotros hasta el fin.
¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya!
Su trono El dejó, Confiemos en Jesús;
al mundo descendió, ¡Aleluya! ¡Aleluya!
su sangre derramó Venceremos por su cruz.
por salvar al pecador.
¡Aleluya! ¡Aleluya!
Demos gloria a Jesús; ¡Muy pronto volverá!
¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya!
Somos salvos por su cruz. ¡Que gozo nos dará!
¡Aleluya! ¡Aleluya!
¡Gloriosa reunión!
Luchemos con valor ¡Eterna bendición!
¡Aleluya! ¡Aleluya! Y grata comunión,
En nombre del Señor para siempre con Jesús
¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya!
Para siempre con Jesús;

- 101 -
 HIMNOS
¡Aleluya! ¡Aleluya!
redimidos por Jesús. Consuélome en su larga ausencia
pensando: Pronto volverá.
Entonces su gloriosa herencia
166. Mi redentor, el Rey de gloria, a cada fiel Jesús dará.
que vive, yo seguro estoy; 167. Dad al Padre toda gloria,
El da coronas de victoria; dad al Hijo todo honor,
a recibir la mía voy. y al Espíritu Divino,
Coro: alabanzas de loor.
Que permanezca no pidáis
entre bullicio y el vaivén; Coro: I
el mundo alegre hoy dejara, Adoradle, adoradle,
aun cuando fuese algún Edén; adorad al Salvador;
la cita nada más aguardo, tributadle toda gloria,
que el Rey me diga: Hijo, ven. pueblo suyo por su grande amor.

En mi Señor Jesús confío; ¡Adoradle, Oh Iglesia!

su sangre clama a mi favor; Por Jesús tu Redentor,
es dueño Él de mi albedrío; rescatada por su gracia,
estar con Él es lo mejor. libre por su grande amor.

De tanto amor me maravillo, Entonadle un canto nuevo,

y no me canso de admirar; huestes libres del Señor;
me libertó de mi peligro, tierra, cielos, mar y luna,
sufriendo todo en mi lugar.

- 102 -
 HIMNOS
Gloria dan al Trino Dios. ¡Cantad, cantad, cristianos! Con alma y voz
cantad,
Coro: II a Cristo, Rey de gloria, con júbilo aclamad;
Yo te adoro, yo te adoro, Él nos ha prometido que al mundo volverá,
yo te adoro, buen Jesús. el día ya se acerca, Jesús vendrá.
Yo te adoro reverente, 169. Cantares cristianos, sublime expresión
¡Oh, Cordero Santo de mi Dios! del alma que ofrece incienso de amor;
168. Resucitó triunfante, Jesús mi Salvador, a ti Padre excelso que por compasión,
ya vive el Rey glorioso, del mundo Redentor; nos diste en Cristo un gran Salvador.
su dulce voz escucho, conmigo siempre va;
palpar su mano puedo; muy cerca está. Coro:
Cantemos hermanos a la Trinidad,
Coro: que mil bendiciones nos da sin cesar.
La tersa hermosura de la santidad,
¡Él vive ya! ¡Triunfante vive ya! inspire ardiente el sacro cantar.
El Victorioso Salvador conmigo siempre va.
¡Él vive ya! ¡Sí, Cristo vive aquí! Escucha amoroso, Bendito Jesús
¡Yo sé que Cristo vive en mí, Yo sé que vive en mí! el canto de gloria que la multitud,
al verse salvada por Ti en la cruz,
te ofrece gozosa con fe y gratitud.
En todo el mundo brota su amor y su poder,
¡Espíritu Santo buen Consolador!
su gran misericordia me sigue por doquier:
Unidos los fieles con fe y devoción,
Cual buen Pastor me guía, feliz yo vivo aquí,
humildes te alaban con todo fervor,
pues siento su presencia, Él vive en mí.
cual muestra inefable de su adoración.

- 103 -
 HIMNOS
las doradas mieses pronto cosechad.
Al Padre, al Hijo, al Consolador,
unísonos todos fervientes rogad: Vidas santas Cristo necesita,
Su gracia nos cubra, con férvido amor. que a los pecadores muestren su poder;
Y fiel nos imparta su luz y verdad. libres de ansiedades, en Jesús confiadas
170. Cristo busca limpios corazones y que pueda de ellas siempre disponer.
que le sirvan siempre son fidelidad; 171. Todas las promesas del Señor Jesús,
que a los pecadores insten fervorosos son apoyo poderoso de mi fe;
que se vuelvan del pecado a la verdad. mientras luche aquí buscando yo su luz,
siempre en sus promesas confiaré.
Coro:
Id a trabajar allá en los campos del Señor, Coro:
que para la siega se presentan blancos hoy.
¡Oh, fieles siervos de Dios! Grandes, fieles,
A quien debéis todo honor, las promesas que el Señor Jesús ha dado,
oíd su voz, salid a trabajar. grandes, fieles,
en ellas para siempre confiaré.
Labios puros Cristo necesita,
que con gozo anuncien plena salvación;
lenguas consagradas sólo a su servicio,
que proclamen al cautivo redención.
Todas sus promesas para el hombre fiel,
el Señor en sus bondades, cumplirá,
Cristo busca manos bien dispuestas y confiado sé que para siempre en El,
para trabajar con buena voluntad; paz eterna mi alma gozará.
siembras ya maduras piden vuestra ayuda,
Todas las promesas del Señor serán,

- 104 -
 HIMNOS
gozo y fuerza en nuestra vida terrenal; del impío corazón!
ellas en la dura lid nos sostendrán, Me salvó de perdición, mi Jesús.
y triunfar podremos sobre el mal. Del pecado, el perdón;
de la ruina, salvación;
por tristeza, bendición, dio Jesús. >>>

172. De mi tierno Salvador En el mundo al vagar,

cantaré el inmenso amor, solitario sin hogar,
gloriaréme en el favor de Jesús; no sabía que dulce paz da Jesús.
de tinieblas me llamó, más las lágrimas de ayer,
de cadenas me libró, han pasado, y placer
de la muerte me salvó, mi Jesús. ya comienzo a tener, en Jesús.

Coro:
De lo falso a su verdad,
¡Mi Jesús! ¡Mi Jesús! de lo inmundo, a santidad,
¡Cuán precioso ya me trajo la bondad de Jesús.
es el nombre de Jesús! Hechos fuertes en virtud,
Con su sangre me limpió, de su perennal salud;
de su gozo me llenó, himnos dad de gratitud a Jesús.
de su vida me dotó, mi Jesús.

¡Oh, qué triste condición

- 105 -
 HIMNOS
“No te dejaré, ni desampararé,”
es la gran promesa que alienta fe;
mi alma en Dios feliz por siempre estará,
con sublime amor mi senda cuidará.
173. Caminando voy a la ciudad mejor, 174. Si solo y triste te sientes tú,
aunque me agobien sombras y dolor, por los cuidados y el mal,
dulce esperanza me alentará, tus cargas aliviará Jesús
no hay en mi temor si oras a El sin cesar.
pues Dios me cuidará.
Coro:
Coro:
Dios me cuidará, Dios me cuidará, Ora con fe, ora con fe,
Él es mi Pastor, nada faltará. ¿Triunfo deseas tener?
Estando con El ¿Que podré temer? Ora con fe, ora con fe,
Él es toda gracia y sin par poder. ora con fe,
El cielo y la tierra se pueden mudar, ¿Triunfo deseas tener?
mas el alto Dios no se podrá cambiar; Ora con fe.
mi buen Señor siempre fiel conmigo va,
por su santa gracia El me cuidará. Si estás tentado a volver atrás
tentado a desesperar,
Oro, plata y fama pueden sucumbir, corre a los brazos del Salvador,
mi vigor también podrá de mi huir, dile todo en oración.
Dios es inmutable, nunca cambiará
El será mi Roca; El me cuidará. Si por problemas perplejo estás,

- 106 -
 HIMNOS
ora y solución tendrás, veréis al Salvador.
si enfermedades minan tu ser,
ora hasta el triunfo obtener.

175. Para todos los salvados

hay segunda bendición; Da en sacrificio vivo
pueden ser santificados tu alma y cuerpo al Señor;
y tener un corazón. ponte en el santo altar,
Ya limpiado enteramente, y el fuego purificador
no habrá condenación; quemará raíz de mal,
esta bendición se llama santidad. te alumbrará con su fulgor,
y tendrás la bendición de santidad.

Coro:
Pues la voluntad de Dios
Hoy buscad santidad es nuestra santificación,
Dios ofrece este don, de justicia, paz y gozo
perfecto amor; llena nuestro corazón,
suplicad santidad, Él nos guardará por siempre
sin la cual jamás sin temor o reprensión
en la hermosura de la santidad.

- 107 -
 HIMNOS
177. Lejos de mi Salvador,
en tristeza y temor,
yo vagaba en este mundo de dolor;
pero Cristo me encontró,
mis pecados perdonó,
176. Luchad, luchad, soldados valientes y serenos, y mi alma con su gracia EL llenó. ¿>¿
que el triunfo solo se halla tras rudo batallar, Coro:
orad, orad constantes con corazones llenos ¡Aleluya! EL me salva
de fe profunda y pura que alienta sin cesar. y me guarda del maligno por la fe,
¡Aleluya! ¡Aleluya!
Coro: En su amparo y poder yo moraré.
¡Oh juventud cristiana! ¡Oh juventud leal!
Sé fiel a tu Maestro que te ama sin cesar; Dudas ya no tengo más,
ninguno te desprecie; mas siempre ejemplo sé y no sirvo a satanás,
en caridad y gracia; en santidad y fe. pues Jesús me llena de su amor y paz;
mi limpiado corazón,
Decid, decid do quiera la historia del calvario tiene dulce comunión,
que salva y que redime al mundo contumaz; con el gran autor de esta salvación.
llevad, llevad las almas al frente del santuario
que allá a los pies de Cristo encuentren dulce paz. ¡Cuán precioso es su amor!
¡Oh! Jóvenes valientes, heroicos y guerreros, ¡Cuán glorioso el Salvador!
de Cristo la bandera en alto tremolad; Siempre quiero darle gracias y loor.
leales sed y firmes, veraces y sinceros, ¡Cuán hermoso es el hogar,
que os premiará el Maestro allá en la eternidad. que fue El a preparar,
donde cantaré su gloria sin cesar!

- 108 -
 HIMNOS
¡Oh amigo! Hay salud, “Arrepentíos”, Porque Dios
y hay gracia en plenitud, “Su reino acerca ya.”
que tú debes aceptar con gratitud;
si rechazas esta paz,
a la perdición irás,
y en eterna oscuridad tú vivirás.

¿Por qué más tiempo aquí arriesgáis

178. Enviados somos del Señor vuestra alma inmortal,
las nuevas a llevar, cuando Jesús el precio dio
de su grandiosa salvación y quiere salvos seáis?
que brinda libertad. Es nuestro Padre Celestial
Deseamos siempre obedecer quien con potente voz
y en su obra siempre estar, os llama a Salvación buscar
“Arrepentíos”, porque Dios y el mal abandonar.
“su reino acerca ya”.

Coro: La vida pronto acabará

tras pronto más vagar;
Decid doquier: “Su reino cerca está,” la eternidad pronto vendrá
Y anunciad hoy: “Su reino cerca está.” y cesará el correr;
Embajadores predicad el fin de todo viene ya
del mundo en derredor do no habrá tiempo más.
- 109 -
 HIMNOS
Cuando crujir y lloro habrá,
el juicio al contemplar. La voluntad de Cristo yo quiero obedecer,
pues en la santa Biblia encuentro mi saber,
y con su gran poder al mundo venceré,
si EL va conmigo, do quiera yo iré.
179. Ya sea en el valle do el peligro esté; 180. Cristo está buscando obreros hoy
o que en la luz gloriosa de paz habité yo, que quieran ir con EL;
a mi Jesús diré: “Tu voluntad haré”, ¿Quién dirá: “Señor contigo voy,
si Cristo me guía do quiera yo iré. yo quiero serte fiel”?
Coro: Coro:
Si Cristo conmigo va, yo iré, ¡Oh! Señor, es mucha la labor,
yo no temeré, con gozo iré, conmigo va; y obreros faltan ya;
es grato servir a Jesús, llevar la cruz; danos luz, ardiente fe y valor,
si Cristo conmigo va, yo iré. y obreros siempre habrá.

Si al desierto quiere Jesús que vaya yo Cristo quiere mensajeros hoy,

llevando buenas nuevas de santa salvación, que anuncien su verdad;
si allí en dura lid, mi campo señaló, ¿Quién dirá: “Señor yo listo estoy,
a Cristo yo sigo, sin más dilación. haré tu voluntad”?

Aunque mi parte sea mi dura cruz llevar, Hay lugar si quieres trabajar,
diré a mis hermanos también su gran poder, de Cristo en la labor;
contento quedaré, mi luz haré brillar, puedes de su gloria al mundo hablar,
testigo de Cristo do quiera yo iré. de su bondad y amor.

- 110 -
 HIMNOS
algún pecador salvar.
¿Vives ya salvado por Jesús Señor, si quisieres mi guía ser,
su amor conoces ya? mi oscura senda andaré;
¡Habla pues, anuncia que en la luz tu fiel mensaje podré anunciar
de Cristo vives ya! y así lo que quieras diré. >>>
181. En la montaña podrá no ser, El vasto mundo lugar tendrá
ni sobre rugiente mar; do pueda con noble ardor
podrá no ser en la dura lid gastar la vida que Dios me da
do Cristo me quiere emplear. por Cristo mi Salvador.
Más si El me ordenare seguir aquí Y siempre confiando en tu gran bondad
senderos que yo ignoré, tus dones todos tendré;
confiando en El, le diré: “Señor, y alegre haciendo tu voluntad,
do Tú quieras que vaya, iré” lo que quieras que sea seré.

Coro: 182. No me importan riquezas de precioso metal,

si más rico tesoro puedo ir a gozar.
Do Tu necesites que vaya iré, En las páginas bellas de tu libro eternal,
a los valles, los montes o el mar. dime, ¡Oh Cristo bendito si mi nombre allí está!
Decir lo que quieras, Señor, podré, Coro:
lo que quieras que sea, seré. ¡Oh, el libro precioso de tu reino eternal!
Soy feliz para siempre si mi nombre allí está.
Quizá hay palabras de santo amor Muchos son mis pecados cual la arena del mar,
que Cristo me ordena hablar; mas tu sangre preciosa me los puede limpiar;
y en los caminos do reina el mal porque Tú has prometido ¡Oh bendito Emanuel!

- 111 -
 HIMNOS
Si tus culpas son negras, blancas yo las haré.
Dime la misma historia, si crees que tal vez
¡Oh ciudad deliciosa con mansiones de luz! me ciega de este mundo la falsa brillantez.
Do triunfante el cristiano goza ya con Jesús; Y cuando ya me alumbre de la gloria la luz,
do no entra el pecado ni tristeza, ni mal; repíteme la historia: “Quién te salva es Jesús”.
allí tengo mi herencia; Sí, mi nombre allí está. 184. A la lucha compañeros sin cesar marchad,
183. Dime la antigua historia de celestial favor, Cristo es nuestro Jefe, jamás cejaremos;
de Cristo y de su gloria, de Cristo y de su amor. pues nuestro Maestro la victoria nos dará,
Dímela con llaneza propia de la niñez, fieles yendo hasta el final.
porque es mi mente flaca y anhelo sencillez.
Coro:
Coro:
Dime la antigua historia,
Marchar, marchad, luchando hasta el morir,
cuéntame la victoria,
que Cristo el Rey a nuestro lado está;
háblame de la gloria
de Cristo y de su amor. luchad, luchad, hasta el triunfo alcanzar,
si el son de la trompeta oís.
Dime esa grata historia con lentitud, y así
conoceré la obra que Cristo hizo por mí. ¡Oh soldados del Maestro que en la brega estáis,
Dímela con frecuencia, pues soy dado a olvidar, sed valientes siempre en la ruda lucha,
y el matinal rocío suele el sol disipar. que Jesús el Capitán a nuestro lado va
dándonos de su poder!
Dime tan dulce historia con tono claro y fiel;
murió Jesús, y salvo yo quiero ser por El. Habrá pruebas, habrá luchas y enemigos mil,
Dime esa historia siempre, si en tiempo de aflicción mas si somos fieles, venceremos todo;
deseas a mi alma traer consolación.

- 112 -
 HIMNOS
a Jesús sigamos Él es nuestro paladín del precioso Salvador, Señor y Rey.
y al triunfo nos llevará.

Claras voces sonarán,

185. Miles de almas cantarán todos fieles cantarán
en la gloria más allá; la victoria ya obtenida sobre el mal;
poderoso y grande coro formarán; ningún ángel se unirá,
cantarán del dulce amor solamente escuchará
que hasta el cielo los llevó, y Aleluyas todo el cielo llenarán.
y el cantar del coro aquel no tiene igual.

A través de la expansión
Coro: se oirá la gran canción,
cada acorde hasta la altura se alzará;
Cuando aquel gran coro cual las aguas de la mar,
empiece allá a cantar al Rey Jesús el sonido allí será
¡Oh! Cuan dulces melodías sonarán, cuando al fin los peregrinos se unirán.
al Rey Jesús.
Por millones cantarán en aquel coro.
No habrá pruebas, ni tristeza, Notas tristes no tendrá
ni cruel lloro, cantaremos sino melodías sin par,
aquel coro en sus hosannas al cantar;
- 113 -
 HIMNOS
será siempre su canción, pronto el tiempo de la siega aquí terminará,
alabando al Redentor: te hallarás al fin vacío ante tu Creador.
¡Aleluya, a nuestro Rey tributo dad! Joven, joven, ven trabaja ya.

186. Es el tiempo de la siega y tú sin vacilar, 187. Yo espero el día alegre cuando Cristo volverá,
declarando con holgura “no hay que trabajar”, pues vendrá al mundo pronto y nos arrebatará;
mientras tanto que el Maestro te vuelve a llamar, ¡Oh!, qué gozo este pensamiento a mi alma da:
joven, joven, ven trabaja ya. El que Cristo venga al mundo otra vez.

Coro: Coro:
Ven y ve los campos blancos, como están ¡Oh! Jesús vendrá al mundo otra vez,
aguardando manos que los segarán. si, Jesús vendrá al mundo otra vez;
Joven ¡despierta! Hazlo pronto y alerta, le veremos en las nubes con los ángeles de luz,
sé el primero en decirle “Heme aquí, Señor”. cuando Cristo venga al mundo otra vez.
Por doquier se inclina la madura mies
que las auras mueven, y ¡que bella es! La venida de Jesús será el remedio del dolor
Joven ¡despierta! Hazlo pronto y alerta, que aflige siempre a este pobre mundo pecador;
pocos días hay que restan para el segador. toda lágrima se enjugará por nuestro Salvador;
cuando Cristo venga al mundo otra vez.
Las gavillas que recojas joyas de esplendor,
brillarán en la corona que dará el Señor. Llegarán los santos a Sión con gozo eternal,
Busca pronto eternas joyas, Dios es premiador. y en todo el santo monte nada daña ni hace mal,
Joven, joven, ven trabaja ya. pues conocerán a Dios, entonces, todos por igual,
cuando Cristo venga al mundo otra vez.
Va pasando la mañana, y nunca volverá,
El pecado, pena y muerte en este mundo cesarán,

- 114 -
 HIMNOS
mártires y santos con Jesús por siempre reinarán,
cada alma gozará de paz perfecta, sin afán, Nuestro Padre sus dones más ricos dará,
cuando Cristo venga al mundo otra vez. y favores preciosos a su pueblo fiel;
las ventanas del cielo con gozo abrirá
188. Cuan glorioso será cuando el pueblo leal cuando todos sus diezmos le den a Emanuel.
a la casa del Padre sus diezmos traerán,
cuando todos unidos por gracia eternal, 189. Voy feliz al dulce hogar, por fe en Jesús,
a la causa de Cristo colaborarán. y luchando por traer, almas a la luz;
dardos encendidos mil vienen contra mí,
Coro: mas yo sé que por fe, venceré aquí.

Cuando todos sus diezmos a Cristo le den, Coro:

cuando todos sus diezmos a Cristo le den,
no habrá nunca pobreza, ni ansiedad, ni tibieza, ¡Oh! sí, quiero verle, ver al Salvador,
cuando todos sus diezmos a Cristo le den. quiero ver su rostro lleno de amor;
en aquel gran día yo he de cantar,
Ni escaseces, ni crisis entonces habrá, ya pasó todo afán, todo mi pesar.
ni pobreza, ni falta la Iglesia tendrá;
al contrario: Potente el Señor obrará, En las olas del turbión Cristo guardará,
cuando el pueblo sus diezmos a Cristo traerá. mi barquilla guiará hasta el puerto allá;
yo tranquilo puedo estar mi piloto es El,
En el pueblo de Dios robadores no habrá,
es mi Rey, tengo fe, sé que Él es fiel.
que la parte de Dios para sí retendrán;
pues la viña de Cristo doquier crecerá
y abundante su pueblo sus dones traerá. En servir al Salvador por los valles voy,
donde muchas sombras hay, mas seguro estoy;

- 115 -
 HIMNOS
muchos triunfos obtendré, nunca faltará, siempre agiten nuestra pobre embarcación,
mi Jesús, es la Luz, Él me sostendrá. fiando en Cristo llegaremos
a la playa celestial
de la nueva Jerusalén.

190. Cuando cesen los conflictos Consagremos nuestras vidas

de la vida terrenal, al servicio del Señor,
y dejemos este mundo de aflicción, siempre hablemos de su grande salvación;
entraremos por las puertas si en su viña trabajamos
de la patria celestial nos espera galardón
en la nueva Jerusalén. en la nueva Jerusalén.

Coro:
En aquel país hermoso
Cantaremos con los santos do jamás se dice “adiós”,
la canción de redención, gozaremos el descanso sin afán;
en Jerusalén, en Jerusalén; cara a cara allá veremos
con acentos de alegría a Jesús, quien nos salvó,
alabando al Salvador, en la nueva Jerusalén.
en la gran Jerusalén.

Aunque el mar embravecido

y las olas del turbión,

- 116 -
 HIMNOS
su amor brotó en raudal
incontenible, inmenso,
sanando todo mal.
191. Del santo amor de Cristo Él puso en las pupilas
que no tendrá igual, del ciego nueva luz,
de su divina gracia, la eterna luz de vida
sublime y eternal; que brilla en la cruz,
de su misericordia, y dio a las almas todas
inmensa como el mar la gloria de su ser,
y cual los cielos alta, al impartir su gracia,
con gozo he de cantar. su Espíritu y poder.

Coro:
El amor de mi Señor, Su amor, por las edades,
grande y dulce es más y más; del mundo es el fanal,
rico e inefable, que marca esplendoroso
nada es comparable, la senda eternal,
al amor de mi Jesús. y el paso de los años,
lo hará más dulce y más
Cuando él vivió en el mundo precioso al darle al alma,
la gente lo siguió, su incomparable paz.
y todas sus angustias
en El depositó,
entonces bondadoso,

- 117 -
 HIMNOS

192. No hay tristeza en el cielo, No hay aflicción en el cielo,

ni llanto ni amargo dolor. ni pruebas existen allá;
No hay corazón angustiado el alma que en Cristo reposa
do reina el Dios de amor; segura en su seno estará;
las nubes de nuestro horizonte no hay tentación en el cielo
jamás aparecen allá, ni sombras de muerte atroz,
el sol en su gloria esplendente el árbol de vida florece
derrama su luz celestial. do fluye el río de Dios.

Coro:
¡Cuán dulce será en el cielo,
Yo voy a la patria del alma pasadas las penas aquí,
do Cristo prepara mí hogar; volvernos a ver reunidos
do todos los santificados con nuestros amados allí;
irán para siempre a morar: por todos los siglos eternos!
El día feliz ya se acerca, ¡Que dicha inefable ha de ser!
en que el sol para mí se pondrá: Estar en presencia de Cristo,
¡Oh! Qué gozo será gozando eterno placer.
cuando mire al Señor
en aquella hermosa ciudad.

- 118 -
 HIMNOS
tú me dices lo que soy,
193. Da al Señor tus diezmos con el alma grata, de quién vine y a quién voy. >>>
pues te da sus dones en gran multitud, Tú reprendes mi dudar;
reconoce y mira cómo Dios te trata, tú me exhortas sin cesar;
dándote la vida, dándote salud. eres faro que a mi pie,
Coro: va guiando por la fe
Tus diezmos trae y ofrendas también, a las fuentes del amor
de Dios a la casa que es el alfolí. del bendito Salvador.
Pues El prometió al que cumple bien
darle bendiciones grandes y sin fin.
Sé fiel mayordomo de lo que el Maestro Eres inefable voz
ha puesto en tus manos para trabajar; del Espíritu de Dios,
por lo mismo debes estar siempre presto que vigor al alma da
a traer tus diezmos de Dios al altar. cuando en aflicción está;
tú me enseñas a triunfar
Sé dador alegre que con toda el alma de la muerte y el pecar.
dé al Señor sus diezmos y ofrendas de amor;
Dios te ofrece premio, pues que mucho te ama, Por tu santa letra sé
abriráte el cielo tu buen Redentor. que con Cristo reinaré
yo que tan indigno soy,
194. Santa Biblia, para mi
por tu Luz al cielo voy;
eres un tesoro aquí;
¡Santa Biblia! Para mí
tú contienes con verdad
eres un tesoro aquí.
la divina voluntad;

- 119 -
 HIMNOS
De la voluntad de Dios nos habla él,
195. Entre duda y mal en que teméis quizá y del Salvador que al mundo descendió,
permanece un libro santo y eficaz; de las duras pruebas que Jesús sufrió
aunque el mundo pase, nunca cambiará, y del gran poder que nos da para vencer.
porque Dios ha dicho que siempre durará.

Coro: De la vida eterna nos explica aquí,

qué recibiremos tras servicio leal
La Biblia y la Fe Antigua y al vencer la muerte y a la Sión entrar,
son las rocas en que estoy, viviremos con gozo, paz y luz sin fin.
la Biblia y la Fe Antigua
del país defensa son; Coro Final:
han resistido oposición
de todo el mundo en derredor; La Biblia y la Fe Antigua
la Biblia y la Fe Antigua son las rocas en que estoy,
la esperanza doquier son. la Biblia y la Fe Antigua
del país defensa son;
Oh, la Antigua Biblia y la Antigua Fe,
Este libro dice del eterno Dios son las rocas en que estoy,
que por gran amor al mundo a su Hijo envió; Oh, la excelsa Biblia y la amada Fe
que por sus promesas riqueza ofreció; la esperanza doquier son.
y a todo el que cree le da plena salvación.

- 120 -
 HIMNOS

196. Viene otra vez nuestro Salvador, Terminará el poder de satán,

¡Oh, qué si fuera hoy! ¡Ojalá fuera hoy!
Para reinar con poder y amor, No más tristezas aquí verán,
¡Oh, qué si fuera hoy! ¡Ojalá fuera hoy!
Ya por su esposa viene esta vez, Todos los muertos en Cristo irán
purificada en su grande amor arrebatados por su Señor;
del mundo por la redondez, ¿Cuándo estas glorias aquí vendrán?
¡Oh, qué si fuera hoy! ¡Ojalá fuera hoy!

Coro: Fieles y leales nos debe hallar,

si El viniera hoy;
¡Gloria! ¡Gloria! todos velando con gozo y paz,
Gozo sin fin traerá, si El viniera hoy.
¡Gloria! ¡Gloria! Multiplicadas señales hay,
Al coronarle Rey; en el oriente se ve el albor,
¡Gloria! ¡Gloria! ya más cercano el tiempo está,
La senda preparad, ¡Ojalá fuera hoy!
¡Gloria! ¡Gloria!
Cristo viene otra vez.

- 121 -
 HIMNOS
197. Es Jesús el mejor amigo. 198. Con gran gozo y placer nos volvemos hoy a ver;
Cuando triste y tentado estés, nuestras manos otra vez estrechamos.
colmará de bendición Se contenta el corazón ensanchándose de amor:
tu afligido corazón. todos a una voz a Dios gracias damos.
Es Jesús el mejor amigo.
Coro:
Coro:
Es Jesús el mejor amigo. ¡Bienvenido! ¡Bienvenido!
Es Jesús el mejor amigo, Los hermanos de aquí nos gozamos en decir:
Pues Él no nos dejará; ¡Bienvenido! ¡Bienvenido!
siempre nos protegerá. Al volvernos a reunir, ¡Bienvenido!
Es Jesús el mejor amigo.
Hasta aquí Dios te ayudó, ni un momento te dejó,
En Jesús, fiel amigo encuentro; y a nosotros te volvió, ¡Bienvenido!
paz perfecta a mi alma da, El Señor te acompañó, su presencia te amparó,
apoyado en El estoy; del peligro te guardó, ¡Bienvenido!
sin temor mi ser le doy.
Es Jesús el mejor amigo. Dios nos guarde en este amor, para que de
corazón,
Aunque ande por la vía triste consagrados al Señor le alabemos
o en sombra de muerte esté, en la eterna reunión do no habrá separación,
ningún mal me alcanzará, ni tristeza, ni aflicción, ¡Bienvenido!
pues Jesús me amparará.
Es Jesús el mejor amigo.

- 122 -
 HIMNOS
199. Al Señor Jesús rechazan la del Salvador divino
los del mundo pecador, más que el sol deslumbrará
esta sorda muchedumbre aquel día majestuoso que vendrá.
tan ajena del amor;
pero El vendrá glorioso; Fin será de nuestras pruebas,
el gran día cerca está; del pecado, del pesar;
aquel día majestuoso llega ya. de futuro goce prenda
y de eterno bienestar,
Coro: semejantes y cercanos
al que diónos redención,
De los días el más bello, aquel día majestuoso de canción.
la corona, el principal,
poco tarda su llegada Apresure el día bello
pleno triunfo celestial; nuestro fiel y fuerte amor;
de alegría y paz eternas consagrémonos de nuevo
para el vigilante fiel, cada cual a su labor;
ha de ser el día grande de Emanuel. recojamos los perdidos
para Cristo, el buen Pastor,
Iluminará los cielos aquel día majestuoso de su amor.
nunca visto resplandor,
brillará la grey de Cristo
con belleza superior >>>

- 123 -
 HIMNOS
200. Meditad en que hay un hogar En que mora Jesús, meditad,
en la margen del río de luz, donde seres que amamos están;
donde van para siempre a gozar y a la patria bendita volad
los creyentes en Cristo Jesús. sin angustias, temores ni afán.
Más allá, más allá Más allá, más allá,
meditad en que hay un hogar, en que mora Jesús, meditad,
más allá, más allá, más allá, más allá, más allá, más allá,
en la margen del río de luz. donde seres que amamos están.

Meditad en que amigos tenéis Reunido a los míos seré;

de los cuales marchamos en pos; mi carrera a su fin toca ya;
y pensad en que al fin los veréis y en mi hogar celestial entraré,
en el alto palacio de Dios. do mi alma reposo tendrá.
Más allá, mas allá, Más allá, más allá,
meditad en que amigos tenéis reunidos a los míos seré;
más allá, más allá, más allá, más allá, más allá, más allá
de los cuales marchamos en pos. mi carrera a su fin toca ya.

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 HIMNOS
201. Dios bendiga las almas unidas 202. ¡Oh nuestro Padre!, Ahora venimos a pedir
por los lazos de amor sacrosanto, bendigas a los novios que acábanse de unir:
y las guarde de todo quebranto corónalos, ¡oh Padre! Con celestial favor.
en el mundo, de espinas erial, Haz Tú que estén constantes y fieles en amor.
que el hogar que a formarse comienza
con la unión de estos dos corazones,
goce siempre de mil bendiciones, Y Tú, Señor amante, que sufriste en la cruz.
al amparo del Dios de Israel. Que así tu amada Iglesia gozará eterna luz.
Ayúdalos, rogamos, a preparar su hogar,
Que el Señor, con su dulce presencia,
de amor y gozo lleno, do Tú podrás morar.
cariñoso, estas bodas presida,
y conduzca por sendas de vida
a los que hoy se prometen lealtad.
Les recuerde que nada en el mundo
Espíritu Divino, Tu, fiel Consolador,
es eterno, que todo termina, en pruebas de la vida, en goces o aflicción,
y por tanto con gracia divina, que tengan tu potencia en toda plenitud
cifrar deben la dicha en su Dios. y en santidad de vida demuestren tu virtud.

Que los dos que al Señor se aproximan

a prestarse su fe mutuamente, ¡Oh Trino Dios eterno! Escucha esta oración,
busque siempre de Dios en la fuente y en vuestro amor tan tierno danos contestación;
el secreto de dicha inmortal. haz Tú que sea vista en su felicidad,
Y si acaso de duelo y tristeza de Cristo y de su Iglesia, la eterna unidad.
se empañasen sus sendas un día,
en Jesús hallarán dulce guía,
que otra senda les muestre mejor. AMÉN.

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 HIMNOS
203. Dios os guarde en su santo amor; 204. Ama la Biblia que Dios nos ha dado
hasta el día en que lleguemos pues nos enseña divina verdad:
a la patria do estaremos Cristo es su tema, el Hijo entregado
para siempre con el Salvador. para salvarnos de nuestra maldad.

Coro: Coro:
Al venir Jesús nos veremos Ama la Biblia, lee la Biblia,
a los pies de nuestro Salvador; sigue a la Biblia; de Dios es el don.
reunidos todos seremos,
un redil con nuestro buen Pastor. Lee la Biblia, sus bellas historias
traen al alma salud celestial;
Dios os guarde en su santo amor; llenan tu espíritu todas sus glorias,
en la senda peligrosa, para salvarnos de nuestra maldad.
de esta vida tormentosa,
os conserve en paz y sin temor. sigue a la Biblia, que puede guiarnos
Dios os guarde en su santo amor; por los peligros que abundan aquí;
os conduzca su bandera; y al fin con Cristo podremos gozarnos
y os esfuerce en gran manera viendo su faz y sus glorias allí.
con su Espíritu Consolador.
Gracias a Dios por su don inefable,
Dios os guarde en su santo amor; Él se revela al humano por fe:
con su gracia Él os sostenga, en su palabra con gozo insondable
hasta que el Maestro venga, ya nos llegamos delante del Rey.
a fundar su reino en esplendor.

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 HIMNOS
205. ¿Vives cansado y triste? 206. Vengo rendido a tus pies, Señor;
¿Es grande tu aflicción? quiero fielmente depositar:
¿Tu ser calmar quisiste? Diezmos, talentos, mi don de amor;
¿Buscas feliz protección? ofrenda grata hoy vengo a dar.

Coro: Coro:
Todo buen don viene del Señor;
¿Sabes tú de Cristo? ¿Cómo negarlo podré?
¿Le conoces ya? Fiel mayordomo de Cristo seré,
En su amor bendito y un día, “Fiel siervo” oiré.
Salvación y poder te dará.
“Probadme en esto”, dice el Señor;
¿A quién te acercas, dime, “Y bendiciones derramaré”
cuando te acosa el mal? Fiel a mis votos de fe seré,
Y cuando tu alma gime, testigo digno de mi Señor.
¿Quién es tu paz eternal?
Si vas conmigo no dudaré;
En tus desilusiones, en tus promesas yo confiaré.
tu llanto enjugará; De lo que es tuyo yo te daré,
en rudas tentaciones y almas preciosas cosecharé.
tu prez El contestará.

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 HIMNOS
207. Cariñoso Salvador, huyo de la tempestad; 208. A Dios sea la gloria, al mundo El dio,
a tu seno protector, fiándome de tu bondad; al Hijo Bendito, que por nos murió;
sálvame Señor Jesús, de las olas del turbión; Expió los pecados de quien en El cree,
hasta el puerto de salud, guía Tú mi embarcación. abriónos la senda hacia Dios por la fe.

Coro:
Otro asilo ninguno hay; indefenso acudo a Ti; ¡Gloria a Dios! ¡Gloria a Dios!
mi necesidad me trae, porque mi peligro vi. Que de tal modo amó
Solamente en Ti, Señor, tengo yo consuelo y luz; al que lejos de El en pecado se halló.
vengo lleno de temor a tus pies, Señor Jesús. Venid por el Hijo al gran Dios Salvador,
y dadle la gloria por tan grande amor.

Cristo, encuentro todo en ti, y no necesito más; La sangre de Cristo la obra efectuó,
caído, me pusiste en pie; débil ánimo me das; para todo creyente perdón alcanzó;
al enfermo das salud, guías tierno al que no ve; si en Cristo confía el más vil pecador,
con amor y gratitud, tu bondad ensalzaré. perdón en el acto le otorga el Señor

Inmensa la obra de Cristo en la cruz,

enorme la culpa se ve por su luz;
al mundo El vino, nos iluminó,
y por nuestras culpas el Justo murió.

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 HIMNOS

209. Soñé que el gran día del juicio llegó El rico llego, más su oro se fue
y sonó el clarín; y se desvaneció,
Soñé ver los pueblos reunidos para oír cual pobre parose ante el trono,
su destino final. de sus deudas a Dios se acordó.
Del cielo bajo un gran ángel, El grande también, más la muerte
y parado en tierra y mar, le había quitado su honor:
juro con su diestra alzada, Y el ángel abriendo los libros,
que el tiempo ya no más será. no halló nada en su favor.

Coro:
Vino el moralista al juicio,
Con llanto y duelo entonces, más vana fue su pretensión;
los perdidos su cuenta darán; También los que a Cristo mataron
clamarán a las rocas, ¨Cubridnos¨, hicieron moral profesión.
orarán, pero tarde será. Y el alma que daba la excusa
"Hoy, no, otro día mejor",
Hallo que por siglos eternos
sufría por su gran error.

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 HIMNOS
210. Cantan los ángeles con dulce voz, 211. Cantaré a Cristo por su gran amor,
canten los hombres con sonora voz; cómo vino para ser mi Salvador;
Cristo vendrá nuestro Rey vencedor, ¡Tan humilde fue el lugar
Cristo vendrá otra vez. en el pueblo de Judá,
donde Cristo vino por amor de mi!
Coro:
Viene otra vez, viene otra vez, Coro:
En gloria viene al mundo otra vez, Es sin igual su infinito amor,
viene otra vez, viene otra vez, pues en la cruz allí,
El viene pronto a reinar. su vida dio por mí;
yo cantaré su dulce nombre, sí;
Ved en la tierra, los aires y el mar,
Oh Salvador eterno, loores doy a Ti.
grandes señales cumpliéndose ya,
todo indicando que pronto vendrá,
Cantaré a Cristo, quien en humildad,
nuestro glorioso Señor.
obró siempre la divina voluntad:
Todos los muertos en Cristo saldrán, Los enfermos el sanó
de sus sepulcros y alegres irán, a los muertos levantó,
para encontrar a su Rey subirán, a los pobres el colmó con su bondad.
Cristo vendrá otra vez.
Cantaré a Cristo, quien murió por mí,
Ven en las nubes, ¡Oh buen Salvador! contaré lo que Él ha hecho para mí;
¡Ven a la tierra te ruego, Señor! mis pecados el llevo,
¡Ven que tu Iglesia te espera, Jesús! mi perdón y paz compró;
Cristo vendrá otra vez. siempre cantaré su dulce nombre, sí.

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 HIMNOS
212. Juntos en tu presencia, henos, bendito Dios. 213. ¡Digno, digno, digno! Señor Jesús, Tu eres;
Con filial reverencia, para escuchar tu voz. cuando nadie al Padre podría contentar,
Salvos, por pura gracia. Siervos, por puro amor. Tú viniste al mundo, y en la cruz muriendo,
Llena Tu nuestras almas, bendícenos, Señor. la obra redentora pudiste consumar.

Coro: ¡Digno, digno, digno! te vemos coronado,

pero no de espinas del mundo pecador;
Bendice a los creyentes, bendícenos, Señor. nos regocijamos que Tu que nos salvaste,
Haznos ser más fervientes, aumenta aquí el amor. tienes ya corona de gloria y de honor.
Haznos ser fieles siempre, grata congregación.
¡Digno, digno, digno! En breve los ancianos,
bendice a los creyentes, bendícenos, Señor.
sus coronas te echaran del trono en derredor;
te darán la gloria, la honra y la potencia,
Placido es este sitio, sitio de reunión.
porque Tú eres solo de todo el Creador.
Oyendo hablar tu libro, en viva comunión.
Te ensalzaremos siempre, Oh nuestro Salvador; ¡Digno, digno, digno! Un cantico celeste
Bendito eternamente, Bendito Tu, Señor. todos los salvados darán a una voz;
“Inmolado fuiste, y nos has redimido,
Padre, te suplicamos en tu gran compasión, de los pueblos todos y lenguas para Dios”
guárdanos los hermanos en fraternal amor;
prontos a perdonarnos, prontos a oír tu voz. Digno en tu persona, y digno en tus obras,
Cual escogidos, santos; Y amados de Ti, ¡Oh Dios! la creación del mundo y tu grande redención;
Digno, siempre digno, aquí te tributamos,
nuestras gratitudes de todo corazón.

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 HIMNOS
214. Todos juntos levantemos 215. Cristo en Ti confió, salvación me das;
gracias al buen Salvador; sin ti estoy perdido, no merezco más;
siempre es grande su paciencia, pero tú viniste mi alma a rescatar,
y eternal su dulce amor; para que en la Gloria yo pudiera entrar.
¡Aleluya! ¡Aleluya!
¡Proclamemos su loor! Coro:

El divino Rey eterno En tu amor confiando buscare tu faz,

nos rodea con fervor; porque en tu presencia tengo gran solaz;
santifica a los creyentes dueño de mi vida, amante Salvador.
y perdona al pecador; Ya me encuentro cautivo por tu amor.
¡Aleluya! ¡Aleluya!
¡Proclamemos su loor! Cristo a Ti te alabo, ya no mueres más.
Has resucitado y en la Gloria estas.
¡Que tengamos, pues, confianza! Tu por mi intercedes ante el trono allí,
Fiel es nuestro Salvador; y me guardas cada día junto a Ti.
y en el cielo reunidos
cantaremos su loor; Cristo, a Ti te espero, vienes pronto ya;
¡Aleluya! ¡Aleluya! fiel es tu promesa; Sí, se cumplirá;
Cantaremos su loor. estaré contigo, semejante a Ti,
y alabanzas gratas cantaré yo allí.

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 HIMNOS
216. Salvo en los fuertes brazos del tierno Salvador, 217. Escudriña mi corazón;
dulce reposo tengo en su inmutable amor. a Ti me consagro, Jesús;
Vivo bien protegido contra el poder del mal; concédeme un santo fervor;
Cristo me ha recogido, del hondo cenegal. pues mi alma desea, pues
mi alma desea, desea tu luz.
Coro:
Salvo en los fuertes brazos Me postro a tus pies, oh Señor;
del tierno Salvador. el mundo nada es para mí;
Dulce reposo tengo ¿Qué vale su gloria o placer?
en su inmutable amor. Hallé mi tesoro, hallé mi tesoro,
tesoro en Ti.
En el desierto triste por donde paso aquí.
Con su bondad me guía bien apoyado así; Confiado me entrego a Ti
Él siempre se conduele por todo mi dolor; ¡Oh limpia Tu mi corazón!
lo cambia en alegría con su sincero amor. Transfórmalo, mi Salvador;
Tú sólo lo puedes, Tú sólo lo puedes,
A mis necesidades el cuida de atender; potente Señor.
mis dudas, mis errores, consigue esclarecer.
sobre mi oscura vida lanza celeste luz; Señor, recibí tu perdón,
mi protector y guía siempre será Jesús. tu gozo y tu paz por la fe.
Contigo soy ya vencedor;
Deseo acá servirle mientras ausente está; ¡Aleluya al Señor! ¡Aleluya al Señor!
y cuando venga en nubes El me recogerá; A Cristo, el Señor.
día en el cual su rostro en plena luz veré;
y su divina gloria sin nieblas miraré.

- 133 -
 HIMNOS
218. ¡Qué maravilla! Perdón recibí; 219. En su profundo amor por nos el Salvador
Cristo por gracia salvóme a mí; vino del cielo y obro redención;
mis culpas todas El las llevo, tu vida de pecar debes abandonar,
y sólo por gracia salvo soy. confiando en Cristo por tu salvación.

Coro: Coro:
Sólo por gracia salvo soy;
sólo por gracia salvo soy: ¡Oh sin igual amor! De Cristo el Salvador;
esta es mi historia, nuestra salud compró cuando en la cruz murió.
de Dios es la Gloria, Pues tanto fue el amor de nuestro Redentor
que sólo por gracia salvo soy. que por nosotros su vida entregó.

Yo tengo un gozo que Cristo me dio Perdidos y sin luz nos encontró Jesús,
cuando en su sangre mis culpas lavó; y en el calvario su vida entregó;
feliz elevo mi corazón, vio nuestra perdición, mostro su compasión,
que sólo por gracia salvo soy. cuando en la cruz nuestros males llevó.

Más por la gracia la cruz puedo ver, Hijo del Padre Dios es Cristo, cuya voz
ya me hallo libre y contento con El, hoy tiernamente llamándote está;
su amor inunda mi corazón; Él te perdonará, tus males borrará
y sólo por gracia salvo soy. confía en El pues te quiere librar.

- 134 -
 HIMNOS
220. ¡Eternidad! ¡Qué grande eres! ¡Eternidad! ¡De amor la historia!
¡Eternidad! ¡Que nunca mueres! ¡Que corran siglos a su fin!
¡Oh dime ¡¿Dónde yo iré? ¡Que suene el último clarín!
¿Qué suerte allí encontrare? ¡Oh ven, Señor ven si tardar!
Feliz o triste, ¿Cuál será? ¡La eternidad se acerca ya!
¡La eternidad se acerca ya!
221. Escuchad la voz de Cristo ¡Cuán dulce es!
¡Ved! Los niños se congregan a sus pies.
¡Eternidad! ¿Qué cuentas llevas? Los pequeños abrazados pronto son;
¡Eternidad! ¿Con qué me pagas y el Señor a todos da su bendición.
las horas de carnal placer; Los discípulos se oponen con tesón
las obras que deje de hacer? a que traigan a los niños al Señor.
Pesar o gozo, ¿Cuál será? se entristece, más al fin su corazón
¡La eternidad se acerca ya! se hace alegre, Cristo da su bendición.

Luego a los que siguen dice: “Estos van

¡Señor Jesús! ¡Mi fiador! a mi reino, allí por siempre brillarán;
¡Señor Jesús! ¡Mi Salvador! no los impidáis pues, antes id, llamad
La vida diste Tú por mí; a los niños aún a todos, convidad.”
mi espíritu halla paz en Ti,
Todavía convidando Cristo está;
la eternidad no espanta ya,
a los niños que le sirvan busca ya;
la eternidad no espanta ya.
que digamos pues alegres: “Tuyo soy,
>>> eres mi Señor, oh Cristo, desde hoy.”
222. Vagaba yo en la oscuridad,
¡Eternidad! ¡Suprema gloria!
- 135 -
 HIMNOS
más me salvo Jesús, cosas preciosas allí puedo ver;
y con su amor y gran bondad y sobre todo, que el gran Redentor
llenome de su luz. es de los niños el tierno Pastor.

Coro: Coro:
Gozo tengo en mi corazón,
gozo, gozo por su salvación; Con alegría yo cantaré
desde que a Jesús vi y a su lado fui, al Redentor, tierno Pastor,
de su amor el gozo yo he sentido en mí. que en el calvario por mi murió,
sí, sí por mi murió.
Las nubes y la tempestad
no apartan a Jesús, Me ama Jesús, pues su vida entregó
y en medio de la oscuridad por mi salud y de niños hablo:
me gozo de su luz. Dejad a los niños que vengan a Mí,
para salvarlos mí sangre vertí.
Andando así en la luz con Dios
encuentro plena paz; Si alguien pregunta que como lo sé;
voy adelante con fervor “Busca a Jesús, pecador”, le diré
dejando el mundo atrás. “Por su Palabra que tienes aquí
Puedes saber que Jesús te ama a ti.”
Veréle pronto como Él es,
raudal de toda luz;
y gozaré en la eternidad
a causa de su cruz.
223. Gozo la Santa Palabra leer,

- 136 -
 HIMNOS
224. Grato es decir la historia Grato es decir la historia
del celestial favor; que antigua sin vejez,
de Cristo y de su gloria; parece al repetirla
de Cristo y de su amor. más dulce cada vez.
Me agrada referirla, Me agrada referirla
pues sé que es la verdad, pues hay quien nunca oyó,
y nada satisface que para hacerlo salvo
cual ella mi ansiedad. el buen Pastor murió.

Coro:
¡Qué bella es esa historia! Grato es decir la historia:
Mi tema allá en la gloria el que la sabe ya,
será la antigua historia parece que, de oírla,
de Cristo y de su amor. sediento aun esta.
Y cuando el nuevo canto
Grato es decir la historia, la gloria cantare,
más útil al mortal, será la antigua historia
que en Gloria y portentos que en vida tanto ame.
no reconoce igual.
Me agrada referirla,
pues me hizo mucho bien;
por eso a Ti deseo,
decírtela también.

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 HIMNOS
225. Halle un amigo sin igual, Halle un amigo sin igual,
amóme eternamente; pues suya es la potencia
de amor la cuerda celestial de guiarme en senda terrenal,
me atrajo dulcemente; de aquí hasta su presencia.
vencida mi alma, se la doy La gloria brilla más allá
en liga permanente; de aquel hogar paterno;
pues mío es El, y suyo soy, me anima a vigilar y obrar
ahora y para siempre. hasta el reposo eterno.

Coro:
Si, mío es El y suyo soy Halle un amigo sin igual,
Ahora y para siempre; tan fiel y bondadoso;
contento estoy, al cielo voy, mi defensor de todo mal,
soy suyo para siempre. mi guía poderoso;
y del autor de salvación
Halle un amigo sin igual, ¿Quién separarme puede?
murió por mí y salvóme, Ninguna fuerza ni aflicción,
y todo don espiritual soy suyo para siempre.
El en sí mismo diome,
y ya no tengo posesión,
me entrego enteramente,
mi vida, fuerza y corazón,
a Cristo para siempre. >>>
226. Yo espero la mañana,

- 138 -
 HIMNOS
de aquel día sin igual, mientras que viva acá;
en que la alegría emana y que le complazca siempre
y su gozo es eternal. en clase, juego, hogar.

Coro: Coro:
Esperando, esperando, ¡Brillando! ¡Brillando!
otra vida sin dolor, Quiere Jesús que yo brille;
do me den la bienvenida, ¡Brillando! ¡Brillando!
de Jesús mi Salvador. Yo brillaré para El.

Yo espero la victoria Quiere Jesús que sea amable

de la muerte al fin triunfar. con cuantos llegue a ver,
Recibir la eterna gloria, para que vean que alegres
y mis sienes coronar. sus niños pueden ser.

Yo espero entrar al cielo, Pediré a Cristo su ayuda,

donde reina eterno amor, y limpio corazón;
peregrino soy y anhelo imitaré su dulzura
las moradas del Señor. brillando para El.

Pronto espero unir mi canto Yo brillare para Cristo,

al triunfante y celestial, con su poder podré;
y poder cambiar mi llanto, día tras día le sirvo,
por un canto angelical. y al fin al cielo iré.
227. Quiere Jesús que yo brille

- 139 -
 HIMNOS
228. Has buscado la paz y divino solaz. Satisfecho estarás, paz y gozo tendrás,
Y deseas que crezca tu fe; un amor cual las ondas del mar;
pero te es menester alma y cuerpo traer y verás lo que es el sentarse a sus pies
al altar cual ofrenda a tu Rey. cuando traigas tu todo al altar.

Coro:
¿Te has puesto en el santo altar de tu Dios? 229. Te seguiré, Maestro, haré tu voluntad.
¿Te has entregado al Señor? A los cansados y tristes anunciaré tu verdad.
Solo así tú tendrás su descanso y solaz, Les diré que te reciban, y vida eterna tendrán,
y sus ricas delicias de amor. y que te sigan do quiera, haciendo tu voluntad.

Para andar con Jesús y gozarte en la luz, Divino nazareno, lléname de bondad.
y vivir libre de la maldad; Dame espíritu recto, libre de toda maldad.
lleva presto al altar para sacrificar Haz que al mundo perdido diga que Cristo Jesús
lo que tengas a su voluntad. vino a buscar y salvarles muriendo en cruenta cruz.

No podemos saber, ni por gracias tener, Dame poder de lo alto, dame tu santa unción;
la dulzura de su bendición; espíritu, alma y cuerpo, te entrego con devoción.
de colmarnos de amor del Bendito Señor, Cual Isaías te clamo:" Santo Señor, heme aquí.”
sin rendirnos en consagración. Pues en el fondo de mi alma tu tierno llamado oí.
>>>

- 140 -
 HIMNOS
230. Hoy es día de reposo, Trabajar es la sentencia
el gran día de solaz; de la antigua creación:
es el día venturoso Y morir la consecuencia
que nos trae dulce paz. de la prevaricación.
Es el día señalado Más reposo y vida estable
con el sello del amor; Dios nos da, quitando el mal;
nuestro Dios lo ha designado: y su amor inescrutable
Es el día del Señor. de la gracia es el raudal.

Celebremos a porfía Los que a Ti nos acercamos

al autor de aquel gran don, por Jesús, Dios de verdad,
que nos da el festivo día, hoy alegres y proclamamos
y se goza en el perdón. tu justicia y tu bondad.
Aceptemos hoy con gusto Este día y su gloria
el descanso semanal, siempre se celebrará;
esperando el día augusto y en los cielos su memoria
del reposo celestial. por los siglos durará.

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 HIMNOS
231. Corazones te ofrecemos, Las montañas las alegras,
Dios de vida y plenitud; a las tardes das favor;
al Señor hoy honraremos maravillas son tus obras,
con lealtad y gratitud. que producen gran pavor.
Tú perdonas rebeliones Tú visitas a la tierra
Al que escoges para bien; con tus lluvias, oh Señor;
en tus atrios los recibes y la riegas por doquiera,
para darles tu sostén la enriqueces con verdor.

Con las aguas, los desiertos

Tú respondes en justicia de renuevos vestirás;
y tremendas cosas das; y los valles como huertos
tierra y mar los beneficias con sus frutos llenarás.
con salud, sostén y paz. Gracias hoy, Señor, te damos
En la tierra Tú afirmas porque aceptas la oración,
las montañas con poder; y los votos te pagamos
y el rugir de mares, callas con placer y devoción.
y al gentío en su correr.

- 142 -