Aprendamos de Los Primeros Cristianos.
Aprendamos de Los Primeros Cristianos.
Aprendamos de Los Primeros Cristianos.
CRISTIANOS
La iglesia de los primeros apóstoles era una iglesia de oración, una iglesia
que perseveraba en la oración, que oraba sin rendirse, y veía las maravillas de
Dios en sus vidas.
Lo que el apóstol Pablo escribió en la carta a la iglesia en Tesalónica era una
realidad en los cristianos de la iglesia primitiva (1 Tesalonicenses 5:17) lo que para
nosotros hoy es solamente un versículo más de la Biblia, para los primeros
cristianos era su estilo de vida.
Lastimosamente la iglesia moderna es una iglesia que quiere milagros, que quiere
ver las maravillas de Dios, pero es una iglesia que no quiere orar.
¿Cuáles son los cultos más pequeños en las iglesias? ¡los cultos de oración! y una
iglesia que no ora es como una iglesia sin ventanas donde el resplandor del poder
de Dios no puede entrar.
Alguien dijo: ¿quieres saber qué tan reconocida es tu iglesia en tu comunidad?
Mira los cultos de domingo en la mañana, ¿quieres saber qué tan reconocido es tu
pastor en tu comunidad? Mira los cultos de domingo en la tarde, ¿quieres saber
qué tan reconocido es Jesús en tu iglesia? Mira los cultos de oración durante la
semana.
Los primeros cristianos eran unidos, y todo lo que tenían era de todos, no
había egoísmo entre los miembros de la iglesia.
Hoy en día UNIDAD es la palabra que más hace falta en la iglesia, y tenemos que
saber que la falta de unidad es ir en contra de la voluntad del Señor (Juan 17:20-
21) nuestro señor Jesús oró para que entre los cristianos hubiera unidad, que
fuéramos uno, así como él es uno con el padre.
Pero ¿en que se manifiesta o cómo podemos notar la falta de unidad que hay en
la iglesia moderna?
Lastimosamente hoy en día las iglesias no están siendo destruidas por satanás,
sino por los pleitos y rivalidades entre los mismos hermanos (Mateo 12:25) Los
cristianos estamos dejando sin trabajo a satanás… pues nosotros mismos nos
encargamos de dividir y destruir la iglesia del Señor.
En la iglesia de los primeros cristianos era tan grande el amor que había entre los
hermanos que cada uno vendía sus propiedades y sus bienes y los repartían con
aquellos que estaban pasando necesidad.
No tenían egoísmo entre ellos, se apoyaban mutuamente, no había indiferencia
entre ellos, cada hermano se preocupaba por la necesidad del hermano más
necesitado.
Pero lastimosamente la iglesia moderna tiene el corazón muy duro, tan cargado de
egoísmo que, aunque veamos a nuestro hermano padecer necesidad no abrimos
nuestro corazón para ayudarle, y el Señor a nosotros los cristianos modernos el
Señor nos hace una pregunta muy impactante (1 Juan 3:17)