CIRCUITOS ECONÓMICOS EN EL GRAN LAGO.

LA REGIÓN DEL NAHUEL HUAPI ENTRE 1880 Y 1930

Laura Marcela Méndez

Introducción

Las campañas militares a la Patagonia organizadas por el Estado nacional entre

1879 y 1885 significaron la exclusión material y simbólica de las etnias indígenas en el
proceso de construcción de una nacionalidad y una nación argentina. Sin embargo, con-
solidada la ocupación militar, siguieron vigentes en el espacio cordillerano norpatagónico
las formas económico-sociales heredadas de los pueblos indígenas -aunque con diferentes
actores-, sobre todo las vinculadas al funcionamiento del área como parte de la región de
los centros urbanos y puertos chilenos.1 
El lago Nahuel Huapi, ubicado en el oeste del actual territorio de la provincia
de Río Negro y el sur de Neuquén, comprende una superficie de 557 km2, es decir unas
60.000 ha. A sus márgenes, en el período que va desde 1880 a 1930, la articulación de
prácticas económicas y redes sociales consolidaron a San Carlos de Bariloche como centro
comercial, de acopio y abastecimiento, de un extenso territorio que incluyó la zona andina
norpatagónica de los actuales territorios de Río Negro y Chubut, así como importantes áreas
de la meseta rionegrina. Un conjunto de decisiones políticas y económicas contribuyó a su
centralidad, en concordancia con su estratégica ubicación -que permitía la comunicación
todo el año con Chile a través del paso Pérez Rosales-, la producción ganadera y de lanas
en el área rural, y la instalación en Bariloche de grandes casas comerciales dedicadas al
abastecimiento regional y a la exportación a los mercados europeos por puertos chilenos.
El propósito de este trabajo es realizar un análisis de las relaciones económicas y
de las prácticas sociales en la región del Gran Lago -muy poco estudiada por los historia-
dores-, señalando particularidades y complementariedades del oeste rionegrino con otros
espacios sociales como los del territorio neuquino y el sur chileno, concibiéndolos como
partes de un complejo sistema de acumulación, producción e intercambio. En especial,
se seguirá el proceso de formación y liquidación de la Compañía Comercial y Ganadera
Chile Argentina, de capitales germano-chilenos, y el accionar de sus sucesoras en el
lugar -las empresas de Primo Capraro y Carlos Roth-, en cuanto temas vitales para la

Existen numerosos trabajos que dan cuenta de este proceso, entre ellos la producción de Susana Bandieri y su
 1

equipo de investigación, algunos de cuyos materiales se citan en este capítulo.

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comprensión de la transformación de la región del gran lago de espacio de frontera en desarrollo complementario de actividades productivas y comerciales a ambos lados
centro turístico internacional. de la cordillera de los Andes.
El Archivo Histórico Regional aportó valioso material para este trabajo, La reciente colonia agrícola pastoril y el núcleo urbano que comenzaron a
principalmente referido a temas de historia económica regional, que permitió analizar organizarse desarrollaron tres prácticas económicas diferenciadas: la producción agrí-
articulaciones económicas y sociales a ambos lados de la Cordillera. Se consultaron allí cola para el autoconsumo y abastecimiento de parajes vecinos, la ganadería para la
los libros del almacén de Jarred Jones, ubicado en el nacimiento del lago Nahuel Huapi; exportación a Chile y a otros puntos del territorio nacional, y el establecimiento de una
la correspondencia de Federico Hube, cónsul argentino en Puerto Montt, y de Primo gran casa comercial en la ciudad de Bariloche. El Gran Lago sirvió como vertebrador
Capraro, importante empresario regional. También resultó valiosa la recopilación que el de las prácticas económicas y sociales, actuando en su vértice oeste -a través del brazo
fundador del Archivo, Ricardo Valtmitjana, realizó sobre los periódicos nacionales “La Blest- como nexo hacia Chile y vinculándose en su vértice este -en el nacimiento del
Prensa” y “Buenos Aires Herald”, los regionales de San Antonio Oeste “La Verdad” río Limay- con el territorio nacional hacia el Atlántico.
y “El Siglo” y “La Nueva Era” de Carmen de Patagones, los locales “El Tronador de San Carlos de Bariloche concentró la venta de productos agrícolas que abas-
Mange” y “Ecos Andinos” y el chileno “Llanquihue”. tecían a la extendida región de la Colonia Agrícola y Pastoril, proveyó la materia prima
El entrecruzamiento de estas fuentes con documentación más general, como para la fabricación de cerveza y harina, y concentró el procesamiento industrial de los
la existente en el Archivo Histórico Provincial y el Archivo General de la Nación, productos. Durante los primeros años del siglo XX, la región del Nahuel Huapi producía
enriqueció la perspectiva de análisis, permitiendo observar el comportamiento de las más del 90% de la producción agrícola total de la zona andina aledaña, principalmente
disposiciones generales en el marco provincial y regional, así como las diferentes per- trigo, avena y cebada, papas y hortalizas.
cepciones de la realidad social pasada de acuerdo a cual fuera el lugar de los actores. Con respecto a la producción ganadera, a diferencia del resto del espacio so-
cial patagónico en el que el ganado ovino adquirió un papel de privilegio en cuanto a
Las prácticas económicas en el Nahuel Huapi (1880-1920) articulador del mercado nacional, en la región andina de la norpatagonia fue el ganado
bovino el que incrementó su volumen. En parte, porque las condiciones naturales lo
Finalizada la razia armada en el Nahuel Huapi, a fines del siglo XIX,se esta- admitían para consumo del mercado interno, para exportación a puertos del Pacífico
bleció sobre la costa del río Limay el Fortín Chacabuco y, a partir de él, comenzaron y Europa, así como para la transformación en manufacturas a través de curtiembres,
a poblarse las zonas próximas al río primero y al lago Nahuel Huapi después, en su graserías, saladeros, fábricas de jabón, textiles, etc.2  En el Nahuel Huapi, la producción
mayoría por pobladores de origen germano-chileno provenientes de la zona de Llan- fue variada: lanas, en primer lugar, y también bovinos en pie y cueros destinados al
quihue. En 1902, el gobierno nacional, a través de un decreto de su presidente Julio A. mercado chileno y, a través de éste, al europeo. También apareció otro rasgo distintivo:
Roca, fundó la Colonia Agrícola Ganadera del Nahuel Huapi, dándole así identidad el interés de los inversores y propietarios provenientes de Chile por establecer una
jurídica a un conjunto poblacional que venía nucleándose alrededor del lago desde amplia red comercial que permitiera abastecer, a través de San Carlos de Bariloche, de
hacía casi quince años. artículos de primera necesidad a los habitantes del oeste rionegrino y a las poblaciones
Fue en este período cuando el Estado dispuso mediante una serie de leyes el de ambas márgenes del lago Nahuel Huapi.
traspaso de la tierra pública a manos privadas. Sólo aquellos adquirientes originarios La posibilidad de trasladar mercaderías por pasos cordilleranos -como el paso
que conocían el área con anterioridad y confiaban en las potencialidades del tráfico
ganadero con el área del Pacífico, siempre demandante de carne roja, se convirtieron
en pobladores reales. En el resto, se produjo una masiva venta especulativa de los ter- En 1902, un poblador de la colonia pastoril, Pablo Horn, realizó un censo ganadero que dio un resultado
 2

renos (Bandieri y Blanco, 1998b y 2001). La práctica de los hacendados chilenos de de aproximadamente 10.000 vacunos y 13.000 ovinos y un número mucho menor de ganado caballar y
yeguarizos. Unas pocas familias ubicadas en ambas márgenes del lago concentraban la propiedad del ganado,
adquirir tierras en este lado de la cordillera no era novedosa, ya que era muy común en dato que resulta interesante pues estos apellidos formarían parte de los estancieros y comerciantes con más
la región andina -sobre todo en territorio neuquino- que grandes productores chilenos peso en la región. Seis años más tarde, en 1908, el resumen general del censo agropecuario de Río Negro
desahogaran sus campos en el sur de Chile, aptos para la agricultura y de limitadas determinó que el departamento Bariloche poseía 66.137 vacunos sobre un total de 287.551, ocupando el
posibilidades para la crianza de ganado mayor. Así, inversores chilenos participaron segundo lugar en la provincia. En producción lanar ocupaba el cuarto lugar con 339.819 animales. Avanzado
el siglo XX, el número de ovinos aumentó por sobre el vacuno. El tercer censo nacional, de 1914, estableció
fuertemente en la formación del mercado inicial de tierras regional, articulando un para la región andina 36.161 bovinos contra casi medio millón de lanares. En el censo de 1920, los ovinos
eran 16 veces más.

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Puyehue, descubierto por los chilenos en 1890, y por vía lacustre -vía Paso Pérez Ro- Jarred Jones también ofrecía un servicio de troperos que llevaba mercaderías
sales-, hacía del Nahuel Huapi la zona ideal para un tráfico comercial rápido y posible y ganado en pie a diferentes puntos del país y Chile y, a partir de 1914, incorporó dos
durante todos los meses del año. camioncitos para recorridos no demasiados extensos. También organizó un sistema de
El área rural circundante al Nahuel Huapi fue la que proveyó de ganado vacuno, acopio, comprando antes de la esquila la producción lanera de los establecimientos
ovino y lanar, aunque fue importante también la magnitud de ganado que desde el oeste próximos, a los que en parte pagaba con mercaderías de su negocio.
del Chubut llegaba al Gran Lago. Jarred Jones, dueño del Almacén de Ramos Generales De acuerdo a los documentos a los que hemos tenido acceso, la demanda de
“Nahuel Huapi”, sobre la margen norte del nacimiento del río Limay, tenía asiduas lana de las firmas comerciales de Buenos Aires fue intensa durante 1910 y 1920, ten-
conexiones con comerciantes chilenos, y actuaba como intermediario de la producción diendo los precios a mantenerse -si la lana era de baja calidad- o a incrementarse si el
ganadera de la colonia pastoril y como distribuidor de productos manufacturados com- producto que ofrecía la región del Nahuel Huapi era de calidad superior.
prados en Chile y en otras regiones de la Argentina. Entre los años 1900 y 1930 realizó
importantes ventas de ganado con destino a las ciudades chilenas de Victoria y Valdivia. El comercio: la atracción del Pacífico, la complementariedad del Atlántico
Prueba la magnitud de las operaciones el aumento de las existencias de hacienda en el
Departamento de Osorno -provenientes del Nahuel Huapi, de la estancia Leleque, en Como mencionáramos al comienzo de este trabajo, el comercio con Chile era,
Chubut, y de otros establecimientos que arreaban por el paso Cochamó, ubicado más como lo fue antes, inevitable. A las largas distancias y al alto costo de los fletes, se le
al Sur-, que pasaron de diez mil vacunos a más de cien mil en el período 1891-1909. sumaba el peligro de los bandoleros y el total abandono en que las autoridades tenían
En julio de l902, y a fines de ese mismo año, el periódico chileno “El Llan- a pobladores y caminos. Entre San Carlos y la costa atlántica “no hay ni un puente, ni
quihue”,3 publicó sendos artículos acerca del movimiento comercial que hubo en el un camino, ni un gendarme que garantice la seguridad de las vidas, y eso por leguas y
resguardo del Nahuel Huapi en el primer y segundo semestre de 1902. Si bien es difícil leguas en el largo trecho que las lentas carretas de bueyes atraviesan entre dieciocho
inferir el impacto económico para la comunidad regional de los volúmenes de importa- y veinte días”. 5
ciones y exportaciones, los datos resultan relevantes para dar cuenta de la continuidad La situación interna de Chile confluyó al auge del comercio a través de la
del comercio entre ambos países y su aumento de un semestre a otro, así como del cordillera. A mediados y fines del siglo XIX la agricultura chilena se encontraba en un
tipo de mercancías que se enviaban y recibían. De los guarismos puede inferirse que franco proceso de expansión, derivado del aumento de la demanda de granos prove-
la lana era el insumo de mayor impacto, en cuanto a volumen y precio, en las exporta- nientes del desarrollo de las zonas mineras del norte del país y de las concentraciones
ciones a Chile, aunque no el único, ya que también se exportaba ganado en pie, cueros humanas generadas por el boom del oro en Australia y California, así como por la
-de ovejas, vacas y guanacos-, crines, plumas de avestruz -segundo ítem en cuanto guerra de Crimea y las exportaciones a Europa.
a valor- y charqui. Desde Chile, siempre según esta fuente, llegaban comestibles de En forma simultánea al auge de la producción cerealera, se produjo un conjunto
producción nacional por un precio levemente inferior del total de las exportaciones. de procesos vinculados a las actividades económicas y circuitos de acumulación que
Estos datos permitirían pensar que, a principios de siglo, la balanza comercial estaba también llevaron a que los intercambios con este lado de la cordillera fueran indis-
casi equilibrada en cuanto al monto total de exportaciones e importaciones. pensables para la economía chilena. Por un lado, el aumento del precio de la lana en el
El tráfico de ganado no se remitía únicamente a los mercados chilenos, sino contexto internacional la convertía en un preciado elemento de exportación y alentaba
que también incluía otros puntos del territorio argentino, tal como lo evidencian las a los empresarios chilenos a procurarla en territorio argentino, en el que la tierra y la
guías de campaña confeccionadas por Jones entre 1913 y 1919. El destino final, en
general, era Buenos Aires, vía las ciudades de Allen, Senillosa o Maquinchao -por
entonces punta de rieles- y el puerto de San Antonio Oeste. Los envíos que salían del  4
En nota del 15 de febrero de 1913, por ejemplo, Jones solicitó al Juez de Paz del Departamento Los Lagos,
Nahuel Huapi eran de ovejas en pie conducidas por troperos, o fardos de lana y cueros en Neuquén, una guía de campaña para la provincia de Buenos Aires por 9.500 ovejas de su propiedad, según
constaba en el registro de señales que conducía el tropero Joaquín Thorp. Las guías enviadas por Jones a
de cabras, becerros, potros, vacunos y cerdas. Los destinatarios más usuales eran la la punta de rieles de Maquinchao, en noviembre de 1915, con destino a San Antonio Oeste, declaran 8.287
firma Peirano, Podestá y Cia., de San Antonio, y la firma importadora y almacén por kilos consignados a los Señores Peirano, Podestá y Cia. de Puerto San Antonio (AHR, 1910-20-22-0001.
mayor de Pedro Antonio Lanusse en Buenos Aires.4 Sección comercio rural). Los datos obtenidos de las actividades comerciales de Jarred Jones y su hijo Juan
Jones fueron extraídos del apartado “Comercio Bariloche”, del mismo archivo, entre los años 1910 y 1930.
 5
Publicado en “La Nación” el 24 de abril de 1901 bajo el título “Los caminos chilenos. Su objeto real”,
 3
Archivo Histórico Regional de Bariloche (en adelante AHR). Periódico “El Llanquihue”, 18 de julio 1902. página 4, columna 6-7. Citado por Liberti (1972:4).

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producción de ovinos abundaban. Por el otro lado, la necesidad de ganado como ali- arribó a la región en 1895 y construyó, en lo que hoy es el casco urbano de la ciudad,
mento para abastecer al mercado interno aumentó desde fines del siglo XIX hasta la una modesta casa de comercio e inició el tráfico comercial con Chile vía lacustre.
década del 1920 en forma considerable, lo que permitió diversificar las importaciones Weiderhold vio la posibilidad de proveerse de mercadería europea que procedía de
desde el Nahuel Huapi a territorio chileno y aprovechar en forma más integral los Hamburgo a través de la línea de navegación más importante de la época, el “Cosmos”,
traslados de mercaderías. que surcaba el Estrecho de Magallanes. La mercadería la recibía la firma comercial
En tercer lugar, aunque no menos importante, influyó en la construcción de “Carlos Weiderhold y Cía.”, empresa fundada en el año 1894, con casa central en Puerto
las redes de relaciones económicas el hecho de que en Chile había comenzado, a par- Montt, desde donde se la transportaba a Bariloche.
tir de 1870, un proceso de concentración de la tierra en muy pocas manos. La ley de La Sociedad Hube y Achelis, sucesora de la empresa pionera de Carlos Wei-
colonización del año 1874, al reconocer sólo a inmigrantes europeos y norteamerica- derhold, logró monopolizar las actividades económicas de la región. Adolfo Achelis
nos el derecho a recibir tierras, favoreció la concreción de latifundios y no permitió a estaba radicado en Bremen, Alemania, e ingresó a la Sociedad para hacer enlace entre
los estratos más bajos de la sociedad transformarse en colonos. Estos procesos deben ese puerto europeo y las mercaderías que llegaran desde Chile. Su servicio de transporte
pensarse sin perder de vista otro hecho de la realidad chilena de fines de siglo XIX y unía Puerto Montt y Bariloche por tierra y agua con paradas en las casas comerciales
comienzos del XX: a diferencia del sur argentino, el territorio chileno siempre tuvo y hoteles de su propiedad en territorio chileno: desde el Nahuel Huapi llevaba lanas y
mucha población con relación a su extensión. cueros y regresaba con mercaderías manufacturadas.
El entrecruzamiento de todos estos factores tuvo en la región del Nahuel Huapi
un impacto doble: el fortalecimiento de las actividades económicas entre esta región y Prácticas económicas con Chile: ¿comercio o contrabando?
el sur chileno por vía lacustre, y el asentamiento en el Gran Lago de dos grupos huma-
nos bien diferenciados: el empresario chileno o germano-chileno dedicado a coordinar Desde mediados del siglo XIX rigió entre Argentina y Chile el principio de
las tareas de exportación e importación -que invirtió en la compra de tierras a ambos “cordillera libre”, que permitió que un número significativo de ganado argentino se
lados de la cordillera y en la actividad comercial-, y el chileno de pocos recursos, por exportara a Chile sin restricciones, salvo un mínimo -e irregular- pago por “derecho de
lo general chilote -originario de la isla de Chiloé-, quien vendría a la región con la peaje”. Desde entonces, el gobierno chileno osciló entre medidas proteccionistas que
esperanza de encontrar en estos territorios lo que tenía vedado en el propio: el acceso gravaban el ingreso de ganado desde Argentina a supresiones de aranceles, producto
a la tierra, intento que, en general, culminaba con éxito, aunque también son muchos de la presión que el mercado interno hacía ante el aumento del precio de la carne, base
los casos en que los chilenos de bajos recursos terminaron viviendo en la propiedad de esencial de la dieta de los chilenos. En cada caso de imposición de medidas protec-
un hacendado o comerciante para el que trabajaban o al que cuidaban su tierra.6  Entre cionistas, el gobierno argentino respondía con un gravamen al ganado chileno que
1870 y 1895 se trasladaron a la Argentina más de 40.000 chilenos, muchos de los cuales habitualmente invernaba de este lado de los Andes (Bandieri, 2001b).
eligieron como destino los territorios de Río Negro y Neuquén. Pero este juego de aduana libre-gravámenes aduaneros, debe entenderse en
La provincia de Llanquihue, en el sur chileno, y en especial su capital Puerto el contexto del Nahuel Huapi, región en la que hasta 1920 no hubo aduana por lo que
Montt, que hacia fines del siglo XIX albergaba a 3.500 habitantes, fue el centro comercial ninguna mercadería pagaba arancel. Paradigmático para este tema resultó el hecho que el
para el tráfico de mercaderías transcordillerano. Esta ciudad-puerto se convirtió en escala cónsul argentino en Puerto Montt, Federico Hube, dueño de la Empresa Hube y Achelis,
obligada para los navíos que llegaban desde el exterior y, sobre todo, para el comercio radicada en Bariloche, fuera acusado de contrabando en 1902 por ingresar mercaderías
de cabotaje desde Concepción y Valparaíso. Varias firmas, entre ellas la de Federico importadas desde Chile a través del paso Pérez Rosales, sin pagar derecho aduanero
Hube, se dedicaron a traer a Puerto Montt productos importados de los otros puertos. alguno. Hube respondió con virulencia a la denuncia, acusando al gobierno argentino
En el Nahuel Huapi, los hermanos Carlos y Germán Weiderhold Piwonka -de de persecución y hostigamiento. Frente a esta situación, el gobierno argentino dispuso
origen germano-chileno- y el mencionado Federico Hube, fueron los iniciadores del una investigación, en la que declararon los vecinos más renombrados de la región del
intercambio comercial entre ambos países en la etapa finisecular. Carlos Weiderhold lago.7  La Inspección de Rentas aportó a la situación la aseveración de que las costas
fluviales del río Negro eran las únicas habilitadas para la exportación e importación,
Tal es el caso por ejemplo, del relevamiento poblacional de 1902, al momento de formarse la colonia
 6
de lo que se desprende que el tráfico entre países por el Nahuel Huapi era ilegal; sin
agrícola, donde propiedades como la de Hube, Book y Jones aparecían habitadas por poblaciones chilenas
e indígenas de entre 15 y 20 personas cada una. El problema de la tenencia y acceso a la tierra en la región embargo, en una nota enviada al jefe de policía del territorio el 18 de enero de 1902
del Nahuel Huapi está siendo investigado en este momento por la autora. se dio por terminada la investigación, rechazando las quejas de Hube y negando haya

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habido en el Nahuel Huapi abuso de autoridad y acciones tendientes a entorpecer el Jarred Jones y la triangulación de Nahuel Huapi
comercio libre con Chile.
La situación de Hube se resolvió en 1903 con su exoneración del cargo de La primacía del comercio orientado hacia el Pacífico no implicó que este
Cónsul. Esta decisión fue posterior a la firma de un convenio de paz entre ambos países: fuera excluyente, sino más bien que era complementado con otros circuitos dentro de
el 28 de mayo de 1902 se firmó entre Chile y Argentina el acuerdo conocido como los límites nacionales. Desde fines del siglo XIX y hasta finales de la década de 1920
Pactos de Mayo, en el que además de limitarse el poderío militar de ambos países se los proveedores de Buenos Aires enviaban mercaderías a la zona andina por medio del
selló un acuerdo de confianza mutua. Ferrocarril del Sur a Fuerte Roca, Neuquén o Senillosa, o por barco a Puerto Madryn
El 23 de agosto de 1904, por disposición del Presidente Julio A. Roca, se con la Compañía Hamburgo-Sudamericana representada por Delfino Hermanos, o
declaró zona libre de derechos aduaneros en el territorio de Río Negro a todo el de- la Compañía Argentina de Navegación en los vapores Presidente Mitre, Quintana o
partamento de Bariloche y la parte occidental del departamento 9 de Julio. Entre los Roma. El vapor Río Negro tenía puerto habitual en San Antonio, donde la carga era
argumentos esgrimidos para avalar esta resolución figuraban: consignada a la empresa de Peirano Podestá, que se encargaba del lancheo en la playa.
Luego se trasladaba en el ferrocarril a la punta de rieles -entonces Maquinchao y luego
“Vista la presentación de los señores Hube y Achelis pobladores de la parte Pilcaniyeu- donde la mercadería era esperada por la tropa de carros de Oreste Aste y
occidental del Río Negro, pidiendo para esa región las mismas libertades Cia., Jarred A. Jones, o de la firma Fernando Solano. De allí se distribuía a las pobla-
de que, para canon de Aduanas gozan los territorios limítrofes del Chubut ciones próximas, entre ellas Bariloche. En este proceso, era vital el lugar que desde el
y Neuquén, y atento lo informado por la Inspección de Aduanas y teniendo Nahuel Huapi ocupaba el mencionado estanciero tejano Jarred Jones con su negocio
en cuenta que aparte de que por razones de conveniencia pública, para fo- de tienda, almacén, artículos generales y compra y venta de hacienda, ubicado en el
mento de esas localidades conviene definir a lo pedido, en nada se perjudica nacimiento del río Limay.
al comercio general, desde que por la distancia y condiciones que la rodean Entre fines del siglo XIX y las tres primeras décadas del siglo XX, el almacén
no pueden importarse mercaderías de contrabando en los territorios de la “Nahuel Huapi” concentró gran parte de la actividad económica de la región. Jones
Pampa Central o de la provincia de Buenos Aires que disponen de Adminis- tenía vinculaciones comerciales con puntos tan distantes entre sí como los puertos
traciones de Renta”.8 chilenos de Puerto Varas y Puerto Montt y los argentinos de Puerto Madryn, Buenos
Aires y San Antonio; y ciudades del Alto Valle de Río Negro y Neuquén, de los que
Esta resolución, que a primera vista pareciera contradictoria con la idea de recibía diferentes mercaderías que luego distribuía en la región andina, encargándose
fortalecer las fronteras nacionales, debe comprenderse en el ya mencionado contexto además del servicio de fletes que iba y venía continuamente desde la punta de rieles
posterior a los Pactos de Mayo. También, con seguridad, aportó a la decisión el hecho hasta las diferentes localidades del sur rionegrino y del norte de Chubut. Así, gran parte
de que el Presidente de la Nación firmante de la concesión estaba emparentado con la de los insumos que llegaban a Bariloche pasaban primero por el Nahuel Huapi y, a la
familia Uriburu-Castells, cuyas tierras en territorio neuquino fueron compradas por los vez, muchas de las mercancías que producía San Carlos de Bariloche era acopiadas en
socios de la compañía chilena. La connivencia de intereses entre destacadas familias el almacén de Jones y desde allí transportadas a distintos puntos del país y de Chile.
de la burguesía chilena con sus pares de Argentina fue, sin duda, avalada por el poder Esta relación era dinámica y cambiante, ya que muchas veces, ante la demora de la
central y demuestra la articulación entre parentesco, negocios y la posición social de llegada de productos desde lugares alejados, el Nahuel Huapi y Bariloche se abastecían
ambos grupos (Bandieri y Blanco, 1998b). mutuamente, hasta la llegada de las cargas provenientes de otros puntos del país.

 7
Detalles de las declaraciones del “affaire Hube” pueden encontrarse en la carpeta “Contrabando” del AHR.
Interesante resulta la descripción que se realiza de la actividad comercial entre Chile y Argentina y de los
rubros exportados e importados.
 8
AHR, “Comercio Bariloche”: Chile Argentina, 1904, Boletín 9.0001.

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La Compañía Comercial y Ganadera Chile Argentina. en el mismo año en que Roca y Terry firmaron el acuerdo de exclusión del Nahuel
Una peculiar manera de acumulación de capital Huapi de la jurisdicción aduanera argentina. Su socio mayoritario fue Federico Hube
con 10.000 acciones, a quien además se le adjudicaron por intermedio de la firma Hube
El proceso de traspaso de la tierra pública a manos privadas iniciado tras la y Achelis, y en concepto de servicios y gastos de organización de la nueva sociedad,
conquista militar del espacio patagónico, como mencionara anteriormente, dio inicio otras 5.000 acciones. El objetivo principal de la “Chile-Argentina” era adquirir el activo
a la fundación de pueblos y colonias agrícolo-pastoriles, al tiempo que propició la y pasivo de la empresa Hube y Achelis en Puerto Montt, incluidas las propiedades y
consolidación de grandes estancias cuyos propietarios fueron un reducido grupo de explotación de emprendimientos comerciales y productivos que la empresa poseía
capitalistas. Hacendados y comerciantes chilenos se interesaron por participar de este en Chile y Argentina, dejando sentada la posibilidad de emprender y profundizar ac-
proceso y, bajo la forma de propietarios particulares o de grandes compañías, se pro- ciones de apertura de sucursales, compra de ganado y sus productos, y explotación de
curaron tierras y desarrollaron diversas modalidades de participación en los circuitos transportes, entre otras (Blanco 2003: 304).
económicos de las zonas fronterizas de ambos países. La compra-venta de tierras, la Esta sociedad llegó a concentrar por compra a sus propietarios originales una
producción agropecuaria y la comercialización de los productos derivados de ésta, fue superficie total de 419.737 hectáreas, en tierras colindantes, en territorio neuquino,
una práctica común a comienzos del siglo XX (Blanco, 2003:301-322). formando un conjunto de estancias que constituyeron una única unidad de producción.
Las sociedades conformadas en Chile, generalmente sobre la base de propie- En territorio rionegrino compraron las estancias El Cóndor y San Ramón, adquiriendo
dades ya adquiridas a ambos lados de la cordillera que se incorporaban como parte del 30.000 hectáreas sobre el Lago Nahuel Huapi y otras 60.000 ha con ubicación no
capital social, nuclearon a un heterogéneo grupo de chilenos, que incluía financistas, especificada.
agricultores, mineros, industriales, comerciantes, ganaderos y profesionales. Estas so- En la región del Nahuel Huapi el interés de la “Chile-Argentina” fue princi-
ciedades tenían como objetivo central poner sus tierras en producción y comercializar palmente comercial y su objetivo radicó en habilitar un puerto -primero instalado en la
los productos obtenidos en los mercados chilenos, así como también la transformación zona de Puerto Moreno y luego en el casco urbano- que recibiera y enviara mercaderías
y posterior exportación de los mismos. (Blanco, 2003:302). de Chile y que distribuyera éstas en las sucursales menores que la compañía poseía en
Tal es el caso de la compañía “Chile-Argentina”, a la que analizaremos el interior de los territorios de Río Negro y Neuquén. En el centro de la ciudad muchos
en profundidad debido a que constituye un caso paradigmático por la magnitud de de los terrenos fueron reservados y ocupados por personal de la Compañía, lo mismo
sus inversiones y negocios, inusuales para la zona y para la época. Sus operaciones que en la colonia agrícola y pastoril, además del pedido de un extenso lote realizado
económicas a escala regional y patagónica impactaron en San Carlos de Bariloche, por Hube al gobierno para la explotación de bosques hacia el oeste del lago, en una
marcando el ritmo de las prácticas sociales y económicas de la región del Gran Lago zona lindante con Chile.
por casi dos décadas.9  También muy tempranamente la Compañía advirtió el potencial turístico de la
En 1900, la empresa de Federico Hube y Adolfo Achelis, que ya mencionára- zona de los lagos, a la cual la Sociedad Hube y Achelis presentaba en sus propagandas
mos, pasó a manos de una sociedad denominada “Sociedad Anónima Comercial y como “La Suiza Chilena y Argentina”. A través de una fuerte inversión en obras de
Ganadera Chile-Argentina” (en adelante “Chile-Argentina”), con sede central en Puerto infraestructura y comunicaciones, se amplió la oferta turística con excursiones a través
Montt.10 La sociedad se constituyó formalmente en Valparaíso en septiembre de 1904, de un circuito cordillerano y lacustre. Se invirtió en caminos -2.000 hectáreas en Chile-,
puentes, muelles y hasta una línea telefónica de 170 kilómetros entre la casa central de
Puerto Montt y sus sucursales.
 9
Si bien la Chile-Argentina es única en cuanto a volumen de exportaciones y concentración de tierras, En la primera década del siglo XX la actividad de la sociedad comercial era
existieron otras empresas con características similares en los territorios neuquino y rionegrino, como es el floreciente, con un activo comercio con Alemania que se mantuvo intenso hasta la
caso de la “Sociedad Agrícola y Ganadera del Limay”, conformada en Santiago de Chile en enero de 1905, Primera Guerra Mundial. Poseía 998 clientes declarados en Chile y 400 en Argentina.
con la que comparte objetivos comerciales vinculados al ganado y socios, como es el caso de Subercaseaux
y Errázuriz. También fue de gran importancia al sur del Nahuel Huapi la compañía de origen chileno “Co- La casa central estaba en Puerto Varas, con sucursales en Frutillar, Ensenada, Peulla
chamó”, fundada a fines del siglo XIX, con propiedades a ambos lados de la cordillera en la zona comprendida y Casa Pangue. Por el lado argentino, poseía establecimientos en lago Frías, Puerto
entre el paralelo 42 y el río Chubut. Blest, Comallo y Bariloche, así como en las estancias de Neuquén. En la casa central
 10
Este dato resulta interesante porque ya a principios de 1900 aparece la Chile-Argentina, en facturas, cor- de Bariloche trabajaban más de 300 empleados, en su totalidad chilenos y alemanes.
respondencia e informes de los Inspectores de Tierras, como vendedora y compradora de bienes y servicios,
aunque recién cuatro años más tarde se constituye formalmente.

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La vinculación dinámica entre las prácticas económicas y las relaciones carta enviada a Moreno en enero de 1914, dio la primera evidencia que advertimos sobre
políticas y sociales puede observarse en el pueblo de San Carlos y en la Colonia agrí- la declinación de la Compañía. En la misiva a Moreno, a quien lo unía una prolongada
cola y pastoril del Nahuel Huapi, espacio en el que la “Chile Argentina” concentró la amistad, Frey sostenía que:
producción agrícola, proveyó a la región de insumos básicos como harina y concentró
las actividades comerciales, a las cuales sumaba la muy importante propiedad de tierras “También sería un gran negocio la adquisición de todas las existencias de
en Neuquén. La posibilidad de trabajo de los habitantes, la participación en el poder la Compañía Chile Argentina [...] Respecto a la Chile-Argentina le diré que
político de las Comisiones de Fomento -cuyos miembros coincidieron con los jefes de están en agonía, no tiene dinero, y casi tirado se podría adquirir todo lo que
la Compañía desde 1907 hasta 1920-, así como la influencia que sin duda tuvo sobre la tienen en el Lago. Han estado en trato con otra casa, pero no se concretó
policía local, el juzgado de paz y la educación -pues era quien proveía de los edificios la venta, por causa de la guerra balcánica en Europa. El Sr. Boss se retiró
para que estas instituciones funcionaran y, muchas veces, quien pagaba los sueldos de la Compañía el 31 de diciembre [1913] y creo que está buscando socios
de los empleados públicos-, hicieron que la Compañía tuviera un rol muy importante capitalistas para comprar la Compañía”.12
en la comunidad.
Diferentes registros de principios de siglo dan cuenta de las propiedades que Entre las causas de la liquidación, figuraron un conjunto de negocios fallidos.
la Compañía poseía en Bariloche y la importancia superlativa de ésta en un pueblo La “Chile-Argentina” compró 10.000 ovejas en el otoño de 1912 y en el invierno una
que no llegaba a los 1.000 habitantes. Entre ellos, figuran la casa central de comer- seguidilla de copiosas nevadas cubrió los pastos y los animales se murieron de hambre.
cio -ubicada en lo que hoy es el Centro Cívico de Bariloche-, almacenes, casas para Debido a que el transporte de las mercaderías por la cordillera era difícil y costoso, la
empleados y peones, una casa para sal, panaderías, gallineros, cinco edificios para Sociedad comenzó a construir un carril aéreo cuyos cables y maquinarias se importaron
ganadería y agricultura, galpones para caballos, depósitos de mercaderías, muelles, desde Alemania. El proyecto consistía en un cable carril de 9 kilómetros de extensión
herrerías, dársenas y puerto propio, además de los edificios cedidos para Bomberos en dos tramos, que cruzaría la cordillera entre Puerto Blest y Casa Pangue. Se inició
de Bariloche, la policía y la oficina de telégrafo. Todas estas construcciones datan de el desmonte y se levantaron las torres. Pronto llegaron las calderas, enormes bobinas
1896.11 De la “Compañía”, como la llamaban los pobladores de la zona, dependía la de cables, poleas y balancines. Pero la obra quedó abandonada hacia 1909 por falta de
economía de la mayoría de la población. dinero y lo hecho hasta entonces quedó abandonado en los bosques del Paso Vicente
Pérez Rosales.
La declinación de la “Chile-Argentina” El vapor transatlántico “Condorsol”, que se compró en Inglaterra, resultó
inadecuado para las aguas chilenas por lo que, luego de estar un tiempo varado, se
A la etapa de apogeo y expansión de la “Chile-Argentina” le siguió muy vendió a un precio irrisorio. La Sociedad escuchó los consejos de un ingeniero in-
pronto la declinación y liquidación de sus activos. La participación de Alemania en dustrial europeo para fabricar briquetas de leña molida la cual, comprimida, podría
la Primera Guerra Mundial fue un factor decisivo para su ocaso, teniendo en cuenta competir con el carbón. En una de las pruebas experimentales la máquina que había
que eran de ese origen la mayoría de sus accionistas y que era Alemania el principal sido adquirida a un costo muy elevado no resistió la fuerza del compresor y se rompió,
destino de las exportaciones que salían desde Puerto Montt y Valparaíso. A la inminente quedando inutilizada.
derrota de Alemania en la guerra se le sumaron una serie de traspiés y malos negocios Ante tantos contratiempos, y cortado el circuito comercial y los flujos de capi-
que iniciaron el principio del fin de aquella sociedad. tales desde Alemania, la Sociedad decidió liquidar poco a poco sus bienes, fracasado
Emilio Frey, colaborador del Perito Moreno en la demarcación de límites y el intento de Boss –uno de sus ex gerentes- de conformar una cooperativa patagónica
participante de la Comisión de Estudios Hidrológicos de Bailey Willis de 1911, en una con empresarios de la región que siguiera con las actividades comerciales. Los adqui-
rientes de las propiedades fueron Roth y Minte, que compraron los muelles; Carlos
11
Da cuenta de las propiedades de la Compañía en el Nahuel Huapi un informe fechado en 1901, producto Weiderhold, quien se hizo cargo del edificio en Puerto Montt; Carstens, que adquirió
del sumario iniciado por presunción de contrabando que detalláramos en el capítulo anterior y que culminó las tiendas de Puerto Montt y Nueva Braunau; Jorge Ditazel, quien compró maquinarias
con la declaración de zona libre de aduana. Con sello del Juzgado de Paz de Bariloche se realizó un inven-
tario de los bienes que la Compañía tenía en la ciudad. Corrobora esta información el informe final de la
Inspección de Tierras de principios de siglo y el Boletín Oficial de la Compañía de 1904 (AHR, Apartado
“Comercio Bariloche”: Chile-Argentina). 12
Museo de la Patagonia, Archivo Frey, Carta de Emilio Frey a Francisco Moreno, VII. Enero 7 de 1914.

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para su fábrica de conservas; y el Banco Osorno y La Unión, que adquirió parte de las Argentina” en Bariloche, se abre una etapa nueva, que si bien contiene a la anterior,
propiedades de Puerto Montt.13 va a constituir una nueva red de relaciones sociales y económicas caracterizada por un
Con respecto a las estancias que la Compañía poseía, ya en 1911 había ini- proceso de nacionalización de los capitales. La “Compañía” dejó de monopolizar las
ciado un proceso de venta de alguna de ellas, como la Estancia Chacabuco en Neuquén. actividades comerciales de la región. “La era Capraro” había comenzado.
En 1919, en pleno proceso de liquidación, vendió todos sus campos en ese territorio a
la “Sociedad Ganadera Gente Grande”, una de las cuatro sociedades más importantes La década de 1920. Capraro: crisis y resurrección
del área magallánica, con sede central en Santiago de Chile. Luego de adquiridos los
campos de Neuquén por “Gente Grande”, la explotación de los mismos continuaría
dirigida desde Chile, siendo representada por la firma comercial Waldron & Wood de Capraro fue uno de los principales actores de la incipiente burguesía regional,
Buenos Aires, en tanto el gerente de todas las estancias operaba desde el estableci- conectada con miembros de las esferas de poder en el espacio nacional, quien junto con
miento neuquino de Quemquemtreu. La tierra que la compañía poseía en el territorio otros inmigrantes europeos y norteamericanos -propietarios en su mayoría de almacenes
rionegrino fue transferida varias veces y, finalmente, la mayoría de las propiedades de ramos generales y dueños de tierras- construyeron una sólida posición económica
quedaron en manos de la empresa patagónica Lahusen y Cía., de capitales mayoritari- durante los primeros quince años del siglo XX.
amente alemanes. Primo Modesto Capraro, oriundo de Belluno, Italia, llegó al sur en 1902 y
En 1916, en San Carlos de Bariloche, un empresario argentino -hijo de padres se convirtió, a mediados de la década de 1910, en el mayor empresario de la región
suizo alemanes- y otro empresario italiano -casado con una alemana y con un hijo, andina norpatagónica. Tras el fallido intento de encontrar oro en los lagos del sur, se
Francisco, nacido en Alemania- se convirtieron en dueños de lo que quedaba de la instaló sobre el río Correntoso, en la periferia de la actual Villa La Angostura, y se
Chile-Argentina. El argentino se llamaba Carlos Roth y el italiano Primo Capraro. La dedicó a la venta de madera para las construcciones de estancias y viviendas, montando
compañía vendió a Capraro la sección comercial e industrial barilochense. La comuni- un aserradero en esa zona. Los postes y varillas para alambrados que fabricaba junto
cación entre Chile y Argentina vía lacustre y los circuitos turísticos que monopolizaba a su amigo Leopoldo Baratta, los vendía a la compañía “Chile Argentina”. Capraro
la Compañía, quedaron a cargo de Carlos Roth. no respetó los límites locales sino que, desde un comienzo, pensó a la región como
Aunque hasta la fecha desconocemos los nombres de los integrantes de la un todo en cuanto a mercado, conglomerado humano y posibilidades de desarrollo;
nueva compañía organizada por Primo Capraro, hemos podido dilucidar, de la nota solía recorrer todo el vecindario de la cordillera de Río Negro y Chubut ofreciendo sus
enviada a los clientes, que los accionistas eran chilenos. Según sostuvo el firmante de la servicios y así logró sus primeros contratos.
misiva, Jürgens, “la compra hecha por el señor Primo Capraro se ha hecho a nombre Trasladado Capraro a San Carlos de Bariloche, inició junto al Comisario de
personal por razones de conveniencia, mas es una sociedad con el que suscribe a otra Policía, José Alanís, una fábrica de ladrillos. En muy poco tiempo instaló una usina,
persona de Chile, y la razón social será Primo Capraro y Cía.”. 14 De cualquier manera, carpintería, herrería y taller mecánico, monopolizando así el mercado de la construc-
esta firma sólo duró un par de años, ya que “Primo Capraro y Cía.” se transformó en ción en la región. Como tantas actividades le impedían atender su tierra de Correntoso,
1919 en “Primo Capraro”. delegó su cuidado a dos italianos que hizo venir especialmente de Belluno: los hermanos
Con respecto a la actividad turística y lacustre, el paso de propiedad de la Carlos y Domingo Coletti. Con su ayuda formaría la estancia “La Bellunense”, cuya
“Chile Argentina” a Carlos Roth implicó un impulso para el turismo que desde Chile muestra de trigo ganará una medalla en la Exposición Rural del Centenario en 1910.
llegaba al Nahuel Huapi, ya que Roth estableció una serie de contactos con el Ministerio Otra de sus prácticas habituales fue traer desde Italia a amigos y conocidos
de Agricultura, entonces responsable del área natural del Nahuel Huapi, a partir de los que formarían parte de su vasto grupo de empleados, a los que gustaba tener cerca y,
cuales logró la autorización para mejorar la infraestructura de servicios dedicada a la en general, agrupaba en terrenos colindantes. Capraro se encargaba de las gestiones
actividad turística. ante el Ministerio de Agricultura y el Director de Tierras Fiscales para asegurar la
Con el fortalecimiento de Roth como empresario turístico y la consolidación de radicación de los colonos que llegaban.
Primo Capraro como único heredero de la actividad industrial y comercial de la “Chile- En cuanto a su poderío económico, el inicio del proceso de acumulación de
capital estuvo organizado en torno a la tala de los bosques y a su empresa construc-
tora. Consolidó su posición a partir de sus actividades comerciales, principalmente
Ibídem, pp.162-163.
 13
vinculadas al mercado de la tierra, la venta de insumos básicos para la vida cotidiana
AHR, Apartado “Personas”: Capraro, Primo, 05.0001.
 14

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en sus almacenes de ramos generales y la producción y comercialización de ganado El 4 de octubre de 1932, Primo Capraro puso fin a su vida. No lo mató ni la
en pie y lana. Como trabajaba en las obras del Ferrocarril del Estado, tenía sucursales pérdida de las primeras elecciones que para conformar el municipio se realizaron en
de su almacén en Comallo y Pilcaniyeu, además de la proveeduría que funcionaba en marzo de 1930, ni el regreso a la dirección política comunal tras el golpe de estado
el Correntoso, transformada luego en hotel. Con los autos Ford que no logró vender del mes de septiembre. Lo afectaron deudas insalvables, empleados suyos a los que
formó una línea de transporte de pasajeros entre Bariloche y las puntas de rieles de la no pudo pagar sus sueldos -quienes organizaron ollas populares para subsistir- y un
línea sur rionegrina. Las actividades de Primo Capraro se expandieron cuando en 1916 Estado moroso que le debía dinero adelantado por Capraro a los obreros del ferrocarril.
se convirtió en dueño, junto a otros socios y desde 1919 como único propietario -como Serios problemas de salud y un viaje a Buenos Aires en busca de recursos, que fracasó
ya mencionáramos-, de la empresa “Chile-Argentina”, firma que liquidó en esos años rotundamente, lo llevaron al suicidio. Amigos y adversarios ocuparon nuevamente las
la totalidad de las propiedades que poseía en territorio argentino. calles de la ciudad en la manifestación más numerosa que se recuerda hasta la fecha.
A comienzos de la década de 1920 el aserradero de su propiedad abastecía de La flota naval entera del gran lago Nahuel Huapi -con más de 200 embarcaciones- se
la madera con la que su empresa constructora levantó prácticamente todas las vivien- concentró a la vista del viejo cementerio del Ñireco, dejando oír sus sirenas durante
das del pueblo y de las estancias vecinas, los puentes y las carreteras de la región. Su todo el entierro.
servicio de vapores recorría los lagos Espejo, Correntoso y Nahuel Huapi; mientras La crisis parecía perpetuarse. Sin embargo, dos decisiones políticas del Estado
acumulaba los títulos de Cónsul de Italia, presidente del Concejo Municipal, agente argentino, decidido a ejercer el control efectivo sobre sus territorios y sus habitantes,
de YPF, representante de las empresas Indian Oil Company, Ford y Fordson, Vacuum van a modificar una vez más el mapa de las relaciones sociales y económicas: la creación
Oil Company, Pirelli Sociedad Anónima Platense, Seguros La Buenos Aires, Cia. de de la Dirección de Parques Nacionales y la llegada del ferrocarril a Bariloche, ambas en
Seguros La Columbia, Banco de Italia y Río de la Plata, además de corresponsal de 1934, convertirían a un pueblo en agonía en una ciudad que redefine su perfil adoptando
los Diarios “La Nación” y “La Patria Degli Italiani”. Capraro se destacó también por al turismo como actividad monopólica y transformándose en un centro turístico inter-
tener fluidas y excelentes relaciones con empresarios y funcionarios gubernamentales nacional. Cómo lo logró y cuáles fueron sus costos, será parte de otra historia.
en Buenos Aires, ciudad en cuyo centro poseía una oficina.
Más allá del liderazgo económico y político de Capraro, quien participó en Consideraciones finales
forma ininterrumpida de la Comisión de Fomento local en diferentes cargos, esta década
estuvo para Bariloche signada por la crisis económica. Finalmente, en 1920, tanto Chile Como hemos expuesto, la conquista militar de la región del Nahuel Huapi
como Argentina instalaron un resguardo aduanero a ambos lados de la cordillera, con por parte del Estado argentino, realizada entre 1879 y 1885, dio inicio a un proceso
sede del lado argentino en Bariloche, y los impuestos de exportación e importación a de construcción de un espacio social que, con actores sociales diferentes, mantuvo vi-
pagar hicieron que lo que hasta entonces había sido, aún con altibajos, un buen negocio, gentes por un largo período un conjunto de prácticas sociales y económicas anteriores
se interrumpiera paulatinamente hasta prácticamente desaparecer avanzada la década a la ofensiva militar.
de 1930. Varias opciones -como la producción a gran escala de trigo o el desarrollo de En la región del Gran Lago, entre 1880 y 1930, se conectaron las historias de
la industria maderera- se pusieron en práctica para reconvertir el perfil económico de diversos lugares circundantes al Nahuel Huapi, como el núcleo urbano de San Carlos de
la ciudad, pero no tuvieron éxito, debido principalmente a las distancias, a la precarie- Bariloche, la colonia agrícola y pastoril, el núcleo poblacional sobre las nacientes del
dad de las comunicaciones y a las deficiencias en infraestructura: la actividad turística río Limay, y otros espacios sociales más alejados como los puertos y ciudades chilenas
crecía a ritmo muy lento y la inserción de la región andina en el mercado nacional era del sur, ciudades de la Línea Sur rionegrina y del departamento Confluencia de Neu-
más un anhelo que un hecho concreto. quén. Estos espacios sociales conformaron un complejo sistema de redes comerciales
La crudeza del golpe de estado de 1930, la rigurosidad de los controles ad- y sociales, integrado a las posibilidades y demandas de los mercados chilenos y a las
uaneros en Chile y Argentina, la paralización definitiva en 1928 de la construcción -a de los territorios del sur argentino y Buenos Aires.
cargo de la empresa de Capraro- del ramal del ferrocarril que llegaría a Bariloche, la A partir de la fundación del Fuerte Chacabuco en 1884 y de la Casa Hube y
caída de los precios internacionales de la lana, la desaparición física de Jarred Jones Achelis, luego “Compañía Chile- Argentina”, Bariloche -núcleo urbano constituido en
en 1932 y las dificultades tanto de abastecimiento como de inserción de los productos forma espontánea alrededor del fuerte y del lago y fundado oficialmente en 1903- se
regionales en el mercado nacional, parecieron asestar a los pobladores del Gran Lago transformó en centro de su periferia al concentrar las prácticas económicas y comerciales
una herida mortal. de que dependían una gran cantidad de poblaciones urbanas y rurales de la zona andina

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norpatagónica y del noroeste de Chubut. Las inversiones chilenas en la región fueron Primo Capraro se transformó en el dueño de los bienes de la Compañía en la
mixtas: tierras en la zona rural y una gran casa comercial en San Carlos con sucursales ciudad. Sus relaciones con los círculos de poder porteños, su capacidad para dar trabajo
en el interior de los territorios rionegrino y neuquino, que proveyeron de insumos para y nuclear compatriotas en la región, además de la permanente participación personal y
la vida cotidiana a las poblaciones de la región y concentraron las exportaciones a de su grupo más cercano en la Comisión de Fomento local, lo convirtieron en uno de
Chile, principalmente de lanas, cueros y ganado en pie. los actores más relevantes de la década de 1920.
La disposición de decretar esta zona libre de aduana y las permanentes poster- La instalación de un resguardo aduanero a ambos lados de la cordillera a co-
gaciones que sufrió la construcción del ramal del ferrocarril a Bariloche, sumadas a mienzos de ese mismo año, hizo que el comercio con Chile comenzara a disminuir y
las características físicas de la región y a la facilidad de las comunicaciones con Chile dio inicio a una década de crisis económica en la región, producto también de la crisis
por vía lacustre y terrestre, tuvieron un impacto doble: por un lado, permitir que la a nivel nacional, la caída de los precios internacionales de la lana, la interrupción de la
región siguiera vinculada hasta por lo menos entrada la década de 1920 a los circuitos construcción del ramal del ferrocarril a Bariloche y la falta de una opción en el ámbito
comerciales y financieros chilenos mucho más que a los del mercado nacional y, por regional que reemplazara al circuito comercial con los puertos chilenos como activi-
el otro, convertir a Bariloche en el centro de acopio y abastecimiento de insumos y dad económica preponderante. Finalmente, en 1934, tras la creación de la Dirección
manufacturas para la línea sur rionegrina y el norte de Chubut. de Parques Nacionales y la llegada del tren a Bariloche, se definiría un nuevo perfil
Hasta mediados de esa década, la región del Nahuel Huapi, a través de grandes regional con la localidad de San Carlos como centro turístico internacional.
almacenes de ramos generales, como el de Jarred Jones o los de la “Chile-Argentina”, Si bien este es un trabajo en construcción, creemos que puede ser un aporte
dedicados a la compra y venta de hacienda y al transporte, jugó un papel fundamental importante por cuanto, al reconstruir las redes comerciales y de transporte regionales
en cuanto articulador del comercio regional, actuando la mayoría de las veces como durante los treinta primeros años del siglo XX, nos permite reconsiderar el supuesto
acopiador, tanto de lo que salía de la región (principalmente lanas y vacunos en pie) aislamiento de las poblaciones del oeste rionegrino y sus pares en Neuquén, ya que
con destino al mercado chileno o a otros lugares del país, como de las mercaderías evidencia fluidos intercambios entre casas del Nahuel Huapi y otras del territorio
que venían desde Chile, Puerto Madryn, Neuquén o Buenos Aries. Desde San Carlos rionegrino, Neuquén, Chubut, Buenos Aires y el sur chileno.
y su área de influencia se realizaba la distribución de esas mercancías, a la vez que se En el Nahuel Huapi los capitales chilenos se diversificaron, el Estado na-
cobraban los servicios de flete, generándose fuertes lazos de dependencia económica con cional permitió los intercambios con Chile y la gran actividad de la “Chile-Argentina”
los pobladores de la zona a través de préstamos, adelantos de sueldo y recepción antici- sin interferir hasta 1920, el comercio fue intenso tanto hacia el Atlántico como hacia
pada de mercadería a cuenta de lana y ganado a entregar tras la esquila o el engorde. el Pacífico, y el turismo una actividad relevante desde la primera década del siglo.
La “Chile-Argentina” resulta un claro ejemplo de la modalidad de inver- Las trabas aduaneras en 1920 y la crisis económica nacional produjeron una
sión de los capitales chilenos en la región, donde a la compra de tierras se le sumó severa crisis en la región. La llegada del ferrocarril y la creación de la Dirección de
una importante actividad comercial. Su articulación con las burguesías locales y su Parques Nacionales en 1934 van a constituirse en el comienzo de su resolución en
impacto para San Carlos de Bariloche, en cuanto a compradora de materias primas y clave política, al culminar un proceso que comenzó a gestarse en la década de 1920:
proveedora de insumos, trabajo, vivienda y posibilidades de crecimiento individual, la irrupción en el espacio regional de elites nacionales interesadas en “nacionalizar”
son indudables. El análisis de sus actividades permite observar cómo las prácticas los circuitos económicos regionales y hacerse dueñas de sus beneficios.
económicas influyen en las redes sociales e impactan en las decisiones políticas, a
pesar de un discurso nacionalista instalado como oficial en el siglo XX, permitiendo e
incentivando el desarrollo de las inversiones chilenas en la zona andina.
La disolución de la Compañía -hasta donde sabemos hasta este momento-
marca el fin de una sociedad, pero no la culminación de una práctica, ya que el tipo
de inversiones y producciones siguió vigente al menos otra década aunque cambiaron
sus actores, ya que éstos asumieron una mayor presencia nacional y se rompió la con-
centración de poder y tierras que había tenido esta sociedad comercial y ganadera en
las dos primeras décadas del siglo XX.

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