La Medición de Síntomas Psicológicos y Psicosomáticos - El Listado de Síntomas Breve (LSB-50)
La Medición de Síntomas Psicológicos y Psicosomáticos - El Listado de Síntomas Breve (LSB-50)
La Medición de Síntomas Psicológicos y Psicosomáticos - El Listado de Síntomas Breve (LSB-50)
ISSN: 1130-5274
[email protected]
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
España
ISSN: 1130-5274
Clínica y Salud
Investigación Empírica en Psicología
Manuscrito recibido: 07/01/2014 El Listado de Síntomas Breve (LSB-50) es un instrumento de evaluación psicopatológica utilizado para el
Revisión recibida: 19/05/2014 despistaje de síntomas psicológicos y psicosomáticos. El LSB-50 contiene nueve escalas y subescalas clíni-
Aceptado: 22/05/2014 cas, a las que se ha añadido un índice de riesgo psicopatológico, tres índices globales y dos escalas de vali-
dez. El objetivo de este estudio fue estudiar la fiabilidad y validez del instrumento. Se ha empleado una
Palabras clave:
muestra de 1.242 sujetos, 790 pertenecientes a la población general y 452 a muestras clínicas. Los coefi-
Psicopatología
cientes de consistencia interna alfa de las escalas oscilan entre .79 y .90, mientras que los estudios de vali-
Evaluación psicopatológica
Listado de síntomas dez tanto factorial como criterial (correlación con variables de dependencia y vínculo interpersonal y análi-
Dimensiones de psicopatología sis discriminantes) aportan evidencias de validez de la prueba. Se plantea la discusión sobre la utilidad de
Psicometría clínica los cuestionarios de síntomas para el diagnóstico psicopatológico y posibles implicaciones en las concep-
tualizaciones de los síndromes clínicos psicopatológicos.
© 2014 Colegio Oficial de Psicologos de Madrid. Producido por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
Keywords:
Psychopathology The Brief Symptom Check List (LSB-50) is an instrument for psychopathological assessment used for the
Psychopathological assessment screening of both psychological and psychosomatic symptoms. The LSB-50 defines nine clinical scales and
Symptom checklist subscales, as well as an index of psychopathological risk, three global indexes and two validity scales. The
Dimensions of psychopathology purpose of this study was to evaluate the reliability and validity of the LSB-50 for psychopathological
Clinical psychometrics assessment. The material consisted of data from 1,242 subjects, who filled out the LSB-50; 790 subjects
belonged to non-clinical samples, and the rest of them, 452, belonged to clinical samples. Reliability
analysis obtained alpha coefficients of the nine scales and subscales in a range from .79 to .90. Analyses of
both factorial validity and criterion validity (correlation of LSB-50 dimensions with both interpersonal
dependency and bonding variables and discriminant analyses), supported significant validity for the
instrument. Possible implications on the conceptualization of both psychoreactivity and psychopathological
syndromes are discussed.
© 2014 Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid Production by Elsevier España, S.L. All rights reserved.
La medición de síntomas psicológicos y psicosomáticos en las ticas; operativamente ayuda a valorar el cambio producido tras in-
ciencias de la salud en general, y en particular en psicopatología, es tervenciones psicoterapéuticas, así como a detectar e identificar sín-
imprescindible. La valoración de los síntomas proporciona informa- tomas psicológicos y psicosomáticos en individuos con enfermedades
ción esencial para varios fines. Por una parte, permite la detección de médicas, algo importante por su valor pronóstico en el tratamiento
individuos con riesgo psicopatológico o que padecen alteraciones de la enfermedad. Por ello, resulta imprescindible no sólo para el
psíquicas y psicosomáticas. Conceptualmente ayuda a organizar y a diseño de tratamientos en trastornos psicopatológicos, sino también
sistematizar alteraciones psicopatológicas en dimensiones sintomá- para desarrollar tratamientos apropiados para pacientes con trastor-
nos médicos que presenten factores de riesgo psicosocial agravantes
*La correspondencia sobre este artículo debe enviarse a Manuel R. Abuín
o mantenedores.
Instituto de Psicoterapia e Investigación Psicosomática. Avda. de Filipinas 52. 28003 Así mismo, entendiendo la salud desde un punto de vista amplio,
Madrid, España. E-mail: [email protected]; [email protected] la medición de síntomas es útil no sólo en el ámbito clínico sino tam-
Doi: http://dx.doi.org/10.1016/j.clysa.2014.06.001
1130-5274/© 2014 Colegio Oficial de Psicologos de Madrid. Producido por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
132 M. R. Abuín y L. de Rivera / Clínica y Salud 25 (2014) 131-141
bién en el campo educativo, en el campo laboral o en prevención de en psicopatología, el componente psicológico de control es funda-
riesgos laborales. En la psicología educativa, la detección de altera- mental para entender las discrepancias o incongruencias entre las
ciones psicológicas y psicosomáticas, tanto en alumnos como en do- puntuaciones subjetivas y la pertenencia de un sujeto a un grupo
centes, es relevante por sus repercusiones en el proceso de enseñan- diagnóstico. Tal como se ha propuesto en la medición de la perso-
za-aprendizaje. nalidad, separando medidas explícitas de medidas implícitas
La forma de medir los síntomas psicológicos y psicosomáticos re- (Asendorpf, Banse, y Mücke, 2002; Bornstein, Manning, Krukonis,
percute en la eficiencia de nuestros recursos profesionales. Los mé- Rossner y Mastrosimone, 1993), en la evaluación de síntomas psi-
todos de entrevista individual recogen los síntomas referidos por los copatológicos es útil hacer esta diferenciación. La información re-
pacientes, junto con los signos observados en dicho proceso. Sin em- portada sobre los síntomas de forma explícita por el sujeto o pa-
bargo, los inconvenientes mayores, aparte de los sesgos característi- ciente no es la misma que la obtenida por el clínico, implícitamente,
cos de la propia observación, son el tiempo y el costo de dicho pro- en la exploración clínica psicopatológica o con técnicas no explíci-
cedimiento. El tiempo de recogida de la información es amplio y, tas como las técnicas proyectivas.
además, el procedimiento recoge los síntomas de sólo un sujeto. Teniendo presente estas consideraciones, se presenta a continua-
Se hace necesario, por lo tanto, utilizar métodos rápidos y econó- ción el Listado de Síntomas Breve LSB-50 con sus escalas, subescalas
micos, es decir, con una buena eficiencia. Los cuestionarios y escalas e indicadores, junto con sus propiedades psicométricas.
de valoración sintomática autoadministrados satisfacen estos reque-
rimientos de economía y rapidez, sin perder mucha precisión, cuan- Método
do están bien diseñados.
El LSB-50 surge desde la herencia y desde la experiencia en Espa- Participantes
ña a partir de los años 80 con cuestionarios autoaplicados para la
detección de síntomas psicopatológicos. En 1988, González de Rivera El estudio se realizó con cuatro muestras de adultos, dos de po-
construye la primera adaptación al español del Symptom Checklist- blación general y dos muestras clínicas, una de pacientes odontoló-
90-Revised (Derogatis, 1977, 1983), abreviadamente SCL-90-R, que gicos y una muestra de pacientes con trastornos psicopatológicos.
culmina con la publicación en el año 2002 de la versión española del La primera muestra de población general estuvo formada por 672
cuestionario (González de Rivera, De las Cuevas, Rodríguez-Abuín y sujetos, 360 de los cuales eran varones y 312 mujeres, adultos de
Rodríguez-Pulido, 2002). En el test se recogen los datos obtenidos en distintas edades, profesiones y niveles de estudios a los que se les
la detección y cuantificación de la morbilidad psiquiátrica en pobla- solicitó que cumplimentasen la prueba. Su edad media fue de 39.9
ción general (González de Rivera et al., 1991) y en diferentes grupos años con una desviación típica de 14.9 años. La segunda muestra de
clínicos (De las Cuevas et al., 1991; Rodríguez-Abuín, 2003) y adap- población general se utilizó exclusivamente para los estudios de la
tan el Symptom Checklist 90 Revised, SCL-90-R, denominándolo validez de criterio y estaba compuesta por 118 sujetos (37 hombres
Cuestionario de 90 Síntomas (González de Rivera et al., 2002). y 81 mujeres) que participaban en un proyecto psicoeducativo para
Los instrumentos de medida de tipo cuestionario utilizados hasta aprender a afrontar el estrés y la ansiedad, excluyéndose a todos
la fecha en psicopatología tienen muchas ventajas para la evaluación aquellos que padecían síndromes clínicos psicopatológicos. La me-
psicopatológica, incluido el SCL-90-R, pero presentan defectos sus- dia de edad del grupo fue de 25.67 años, dentro de un rango de 18
tanciales en su construcción (véase Rivera y Abuín, 2012). Así, mu- a 66 años.
chos síntomas están incorrectamente clasificados, conformando a su La muestra de pacientes odontológicos estaba formada por 149
vez dimensiones sin validez clínica (p. ej., “tener pensamientos sobre sujetos procedentes de la consulta estomatológica, 12 varones y 137
el sexo que le inquietan bastante” está dentro de la dimensión de mujeres, con una edad media de 33.5 años y una desviación típica de
psicoticismo en el SCL-90-R); se echan en falta escalas relevantes, 14.5 años y que padecían disorexias variadas, en su mayoría con dis-
como la de síntomas de sueño que, aunque pueden aparecer en dis- función temporo-mandibular. Finalmente, la muestra de población
tintos síndromes, conforman una dimensión con interés clínico y se clínica psicopatológica estuvo compuesta por 303 sujetos, 114 varo-
concede el mismo valor de predicción psicopatológico a todos los nes y 189 mujeres, con una edad media de 44.0 años y una desvia-
síntomas, obviando que hay una diferencia de gravedad clínica entre ción típica de 16.1. Los sujetos procedían de la primera evaluación de
síntomas (no es lo mismo “sentirse triste” que “tener pensamientos pacientes de consulta ambulatoria en centros de salud mental públi-
o ideas de acabar con su vida”). Estos defectos y carencias se mantie- cos y privados, abarcando un amplio número de patologías con pre-
nen en el SCL-90-R y en los derivados del mismo como el SA-45, dominio de las ansioso-depresivas.
versión reducida del SCL-90-R elaborada por Sandín, Valiente, Cho-
rot, Santed y Lostao (2008). Instrumentos y variables
Además, es necesario plantear la disyuntiva acerca de si los cues-
tionarios e inventarios de síntomas como el SCL-90-R o el LSB-50 son El instrumento elaborado, el Listado Breve de Síntomas (LSB-50),
o no instrumentos útiles para evaluar trastornos psicopatológicos está formado por 50 ítems descriptivos de manifestaciones sintomá-
específicos tal como señalan Pedersen y Karterud (2004) o, en otros ticas psicológicas y psicosomáticas. Para la redacción de los ítems se
términos, Rauter, Leonard y Sweeter (1996) y Caparrós-Caparrós, utilizó un lenguaje coloquial similar al que los pacientes utilizan para
Villar-Hoz, Juan-Ferrer y Viñas Poch (2007), planteando si los cues- manifestar sus síntomas para así incrementar la validez ecológica de
tionarios de síntomas como el SCL-90-R realmente miden un factor los mismos. Los ítems, así mismo, han sido redactados en primera
global inespecífico de distrés más que factores específicos de psico- persona, para producir una fácil identificación del sujeto evaluado
patología. Dada la comorbilidad de síntomas en los diferentes cua- con ellos (p. ej., “me vienen ideas de acabar con mi vida”). El LSB-50
dros psicopatológicos, es posible encontrarse de alguna forma un comprende ocho escalas clínicas (psicorreactividad –que, a su vez,
factor global de distrés que estaría presente en todos los cuadros. No comprende dos subescalas, hipersensibilidad y obsesión-compul-
obstante, es necesario acotar de forma conceptual su alcance y su sión–, ansiedad, hostilidad, somatización, depresión, sueño estricto,
posible relación de coexistencia con otros factores específicos. sueño ampliado y riesgo psicopatológico) y dos escalas de validez
Por último, al utilizar cuestionarios o inventarios para la medi- (minimización y magnificación). Las escalas clínicas contienen ítems
ción de síntomas se deben tener en cuenta los posibles sesgos de referidos a las clásicas dimensiones psicopatológicas (ver tabla 1), si
respuesta, tal como señalan McGrath, Mitchell, Kim y Hough (2010) bien se introducen algunas particularidades:
o Lanyon y Wershba (2013), de forma más particular sobre el sesgo a) Hay una dimensión que integra las subescalas de hipersensibi-
de minimización de respuestas. En las medidas de tipo cuestionario lidad y obsesión-compulsión (que se corresponden, en gran parte,
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Hostilidad Cólera, hostilidad manifiesta verbal y no verbal Además del LSB-50, se utilizaron otros dos instrumentos de me-
Somatización Dolores varios, molestias digestivas, dificultades dida para realizar los estudios de validez: el Test del Perfil de la Rela-
respiratorias, sensaciones pérdida equilibrio. ción de Bornstein (Bornstein y Languirand, 2004) (versión española
Depresión Tristeza, anergia, intentos autolíticos, desesperanza, de Abuín, Mesía y González de Rivera, 2007a) y el Inventario de De-
autodesvalorización. pendencia Interpersonal (Hirschfeld et al., 1977) (version española
Sueño Dificultades inicio y mantenimiento sueño, pesadillas de Abuín, Mesía y González de Rivera, 2007b).
El Test del Perfil de la Relación se compone de 30 ítems y está
formado por tres subescalas de 10 ítems cada una, valorados en una
Tabla 2 escala de medida de 0 a 4 (desde nada verdadero sobre mí a comple-
Escala de riesgo psicopatológico - índice de variación clínica del síntoma (ítems tamente verdadero sobre mí):
ejemplo)
1) Sobredependencia destructiva (SD)
CONTENIDOS Muestra de Muestra clínica Índice de Esta subescala evalúa la dependencia emocional e interpersonal
ÍTEMS población general psicopatológica variación clínica desadaptativa y rígida. Puntuaciones altas implican una autopercep-
del síntoma ción frágil e indefensa, con una necesidad imperiosa por establecer y
% Positivos % Positivos IVCS
mantener vínculos cercanos a las figuras de autoridad y cuidadores.
Gran temor al abandono y a las evaluaciones negativas.
Mareos o 18.9 62.3 3.30 2) Dependencia saludable (DS)
sensaciones de
desmayo
Evalúa la dependencia emocional e interpersonal flexible y adap-
tativa. Puntuaciones altas se asocian a una autopercepción compe-
Ideas de acabar 5.2 39.3 7.55
tente y una necesidad de vínculos saludables de cercanía, experi-
con la vida
mentando bienestar en situaciones de intimidad. Confianza en uno
Presentimientos 10.9 65.2 5.98
mismo funcionando de forma autónoma, buscando ayuda y apoyo de
de que va a pasar
algo malo
forma apropiada, cuando lo necesita.
3) Desapego disfuncional (DD)
Nota. IVCS = índice de variación clínica del síntoma o coeficiente diferencial del Evalúa una forma de desapego rígido y desadaptativo. Puntuacio-
síntoma con respecto a su frecuencia (% síntomas positivos en población general / %
síntomas positivos en población psicopatológica).
nes altas se asocian a la percepción de los demás como dañinos o no
confiables, con una necesidad de mantener distancia con otras per-
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sonas por temor a ser dañado o sobrepasado. Autopresentación au- Estadísticos descriptivos y diferencias de género
tónoma de forma excesiva y artificial.
El inventario de Dependencia Interpersonal se compone de 48 En la tabla 4 se presentan los estadísticos descriptivos (media y
ítems que configuran tres subescalas, valoradas en un rango de pun- desviación típica) de los índices dimensionales y globales de psico-
tuaciones de 1 a 4 (nada característico de mí a muy característico de mí): patología, comparándolos por el sexo en cada una de las muestras
1) Dependencia emocional de los demás consideradas, empleando la prueba t de Student. Tal como se puede
La subescala, compuesta por 18 ítems, mide la dependencia afec- observar, los índices dimensionales y globales son, en su mayoría,
tiva e interpersonal caracterizada por el condicionamiento del com- más elevados en las mujeres que en los varones. En la muestra de
portamiento y emociones a la aprobación de los demás. Puntuacio- pacientes odontológicos, dado que la muestra de hombres es muy
nes altas implican intentos conductuales de agradar a los demás más pequeña (n = 11), las diferencias no son estadísticamente significati-
que la toma de propias decisiones. vas. En la muestra de población general no hay diferencias en las
2) Autoafirmación de autonomía dimensiones de psicorreactividad, hipersensibilidad, obsesión-com-
Está compuesta por 14 ítems que miden un patrón afectivo-inter- pulsión y hostilidad. En la muestra de pacientes con trastornos psi-
personal caracterizado por extrema asertividad y autonomía, recha- copatológicos no hay diferencias significativas entre hombres y mu-
zándose necesidades de afecto y cooperación interpersonal. Puntua- jeres en la dimensión de hostilidad.
ciones altas se asocian a una autopresentación rígida, con énfasis en
las capacidades personales y en la propia autonomía. Correlaciones con la edad
3) Desconfianza en uno mismo
Está formada por 16 ítems que miden una forma de vinculación En la tabla 5 se exponen las correlaciones de Pearson de las escalas,
interpersonal caracterizada por la desconfianza en las propias capa- subescalas e indicadores globales del LSB-50 con la edad, tanto en la
cidades para la resolución de conflictos, toma de decisiones y mane- muestra total como sólo en la población general. En la muestra total,
jo de situaciones adversas. Altas puntuaciones se asocian a una baja los resultados obtenidos muestran correlaciones positivas significati-
tolerancia a la frustración y la percepción de baja autoeficacia. vas de la edad con las puntuaciones de las escalas de sueño (r edad-sue
Así mismo, de acuerdo con Bornstein (1994), se obtiene un Índice = .203, r edad - sue-a = .147, p < .01) y con los indicadores de intensidad
de Dependencia Interpersonal (IDI) derivado de las puntuaciones en de los síntomas presentes (r edad-int. = .168, p < .01). Así mismo, hay
las tres subescalas (IDI = dependencia emocional de los demás + des- correlaciones positivas muy bajas, que no llegan a .1, pero significativas
confianza en uno mismo – aserción de autonomía). estadísticamente, con las dimensiones de somatización (.097, p < .01)
y depresión (.067, p < .05). De igual forma se encuentra una correla-
Resultados ción negativa muy baja, pero significativa, de la dimensión de hostili-
dad con la edad (-.06, p < .05). Análoga tendencia de resultados, pero
A continuación, primero se presentan los análisis descriptivos y con correlaciones más acentuadas, se ha encontrado en la muestra de
comparativos entre hombres y mujeres en las diferentes muestras, población general (r edad-sue = .289 y r edad - sue-a = .233, p < .01; r
segundo los análisis de correlaciones de las dimensiones del LSB-50 edad-somatización = .10 p = .01; r edad-depresión = .119, p < .01; r
con la edad, tercero los análisis de fiabilidad de las dimensiones e edad-intensidad = .247, p < .01; r edad-hostilidad = -.154, p < .01).
indicadores y los análisis de validez concurrente con otras medidas,
cuarto el estudio factorial realizado y quinto los análisis discriminan- Análisis de fiabilidad y validez concurrente
tes para diferenciar y clasificar óptimamente entre las muestras de
población psicopatológica y población general, a partir de las dimen- A partir de la muestra clínica psicopatológica se han obtenido los
siones clínicas del LSB-50. coeficientes de fiabilidad de Cronbach para las diferentes escalas y
Tabla 4
Estadísticos descriptivos y diferencias por sexo en las escalas e índices del LSB-50
Med (DT) Med (DT) Med (DT) Med (DT) Med (DT) Med (DT)
Psicorreactividad 0.50 (0.44) 0.53 (0.47) 1.13 (0.70) 1.09(0.86) 1.37 (1.00) 1.64 (0.91)*
Hipersensibilidad 0.40 (0.45) 0.47 (0.50) 1.06 (0.73) 1.10 (0.92) 1.29 (1.05) 1.55 (0.98)*
Obsesión-compulsión 0.60 (0.56) 0.60 (0.57) 1.19 (0.77) 1.09 (0.86) 1.44 (1.06) 1.73 (0.99)*
Ansiedad 0.34 (0.31) 0.48 (0.46)** 0.62 (0.48) 0.79 (0.73) 1.19 (0.91) 1.54 (1.04)**
Hostilidad 0.51 (0.49) 0.48 (0.54) 0.71(0.58) 0.86 (0.72) 1.14 (0.93) 1.28 (1.06)
Somatización 0.47 (0.50) 0.69 (0.64)** 0.72 (0.51) 1.10(0.87) 1.15 (0.85) 1.77 (0.98)**
Depresión 0.54 (0.49) 0.79 (0.62)** 1.09 (0.64) 1.16 (0.87) 1.56 (0.99) 2.02(0.97)**
Sueño 0.76 (0.86) 1.09 (1.00)** 1.18 (1.44) 1.40 (1.26) 1.78 (1.22) 2.34 (1.22)**
Sueño ampliado 0.66 (0.54) 0.95 (0.66)** 1.10 (0.94) 1.21 (0.91) 1.62 (0.97) 2.18 (1.04)**
IRPSI 0.20 (0.26) 0.28 (0.37)** 0.70 (0.40) 0.70 (0.69) 1.04 (0.90) 1.39 (0.91)**
GLOBAL 0.48 (0.36) 0.63 (0.44)** 0.90 (0.49) 1.04 (0.71) 1.33 (0.79) 1.71 (0.82)**
INT 1.63 (.48) 1.79 (0.52)** 1.84 (0.48) 1.94 (0.63) 2.18 (0.65) 2.52 (0.65)**
Tabla 5 Tabla 6
Correlaciones Pearson edad-psicopatología Coeficientes de fiabilidad como consistencia interna (alfa de Cronbach) de las escalas
LSB-50 en muestras de pacientes con trastornos psicopatológicos
Escala e índices LSB-50 Muestra total Muestra población
(N = 1124) general (N = 672) Escala LSB-50 Alfa de Cronbach
Tabla 7
Correlación de las variables del LSB-50 con variables de dependencia y desapego
Sobredependencia destructiva .34** .37** .26** .33** .18* .20* .28** .10 .19* .26** .30** .22*
Desapego disfuncional .20* .14 .24** .13 .27** .06 .16 .30** .22* .18 .21* .16
Dependencia saludable -.39** -.37** -.35** -.31** -.39** -.24** -.40** -.27** -.35** -.37** -.39** -0.21*
Dependencia emocional en otros .64** .57** .61** .56** .52** .34** .60** .30** .45** .57** .59** .42
Desconfianza en uno mismo .39** .39** .34** .34** .26** .19* .35** .27** .29** .34** .36** .19
Autoafirmación de autonomía .08 .03 .13 .05 .22* -.09 .07 .15 .07 .14 .09 .09
Índice de dependencia interpersonal .52** .51** .46** .46** .32** .34** .48** .23* .37** .43** .48** .30**
Nota. Pr = psicorreactividad, Sen = hipersensibilidad, Obs = obsesión-compulsión, An = ansiedad, Hs = hostilidad, Sm = somatización, De = depresión, Sue = alteraciones del
sueño, Sue-a = escala de alteraciones del sueño ampliada, Irps = índice de riesgo psicopatológico, Num = número de síntomas positivos, Int = intensidad de los síntomas
positivos.
*p < .05, **p < .01
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Tabla 8
Saturaciones factoriales de los ítems del LSB-50
31 .712 49 .523
33 .561
36 .640
38 .783
Tabla 9
Correlaciones entre dimensiones clínicas del LSB-50 (muestra total)
Su 1 .540** .875**
Irps 1 .772**
Su-a 1
Nota. Pr = psicorreactividad, An = ansiedad, Hs = hostilidad, Sm = somatización, De = depresión, Sue = alteraciones del sueño, Sue-a = escala de alteraciones sueño ampliada,
Irps = índice de riesgo psicopatológico.
**p < .01
natoria entre los grupos psicopatológico y de la población general a discriminante resultante, de acuerdo a los coeficientes de las funcio-
partir exclusivamente de la escala de riesgo psicopatológico. nes discriminantes, es: D1 = -1.120 + 0.612 * An + 0.332 * Sue + 1.106
Análisis 1: análisis discriminante entre la muestra de población * Irpsi. A partir de la función discriminante, se clasifican correcta-
general y la muestra de población con trastornos psicopatológicos mente un 85.1 % de los casos (tabla 11).
(hombres). Las matrices de covarianzas-varianzas son diferentes, es Análisis 2: análisis discriminante entre la muestra de población
decir los grupos tienen una variabilidad diferente, tal como muestra general y la muestra de población con trastornos psicopatológicos
el test de M. Box (F = 70.011, p = .000); este hecho no impide seguir (mujeres). También las matrices de covarianzas-varianzas son dife-
el análisis, dado que las muestras tienen un número de sujetos gran- rentes, tal como muestra el test de M. Box (F = 40.184, p = .000),
de. La primera variable que ha entrado en el análisis ha sido el índice pero las muestras son igualmente amplias, con lo que se pueden
de riesgo psicopatológico (Irpsi), seguido de la dimensión de sueño interpretar los resultados. La primera variable que ha entrado en el
(Sue) y de la dimensión de ansiedad (An). El resumen de las funcio- análisis ha sido el índice de riesgo psicopatológico (Irpsi), seguido
nes canónicas discriminantes se exponen en la tabla 10 y la función de la dimensión de sueño (Sue) y de la dimensión de psicorreacti-
M. R. Abuín y L. de Rivera / Clínica y Salud 25 (2014) 131-141 137
Tabla 10 Tabla 13
Resumen funciones canónicas discriminantes (muestra hombres) Clasificación de sujetos por función discriminante (muestra mujeres)
Coeficientes estandarizados de las funciones discriminantes canónicas Nota. Clasificados correctamente el 84.6% los casos originales de los grupos.
Grupo 1 = muestra población general
Ansiedad .322
Grupo 3 = muestra población trastornos psicopatológicos
Sueño estricto .318
3 56 126 182
1 3
Porcentajes 1 92.6 7.4 100
Número sujetos 1 330 30 360
3 30.8 69.2 100
3 41 77 118
Nota. Clasificados correctamente el 84.0% de los casos originales de los grupos.
Porcentajes 1 91.7 8.3 100
Grupo 1 = muestra población general
3 34.7 65.3 100 Grupo 3 = muestra población trastornos psicopatológicos
acuerdo a los coeficientes de las funciones discriminantes, es D1 = Número sujetos 1 332 28 360
-1.443 + 0.438Pr + 0.221 * Sue + 1.004 * Irpsi. A partir de la función
3 44 74 118
discriminante, se clasifican correctamente un 84.6 % de los casos
Porcentajes 1 92.2 7.8 100
(tabla 13).
Análisis 3: análisis del poder predictivo de la pertenencia tenien- 3 37.3 62.7 100
do en cuenta sólo el índice de riesgo psicopatológico. Utilizando ex- Nota. Clasificados correctamente el 84.9% de los casos originales de los grupos.
clusivamente este índice se clasifican correctamente el 84% en la Grupo 1 = muestra población general
muestra de mujeres y el 84.9% en la de hombres, (ver tablas 14 y 15). Grupo 3 = muestra población trastornos psicopatológicos
Discusión
Tabla 12
Resumen funciones canónicas discriminantes (muestra mujeres)
Conceptualmente el LSB-50, a diferencia de otros listados de sín-
Autovalores tomas más largos como el SCL-90-R, evalúa la sintomatología psico-
Función Autovalor % de varianza % acumulado Correlación lógica y psicosomática de forma más rápida, con unos buenos índices
canónica de fiabilidad y validez. Los estadísticos descriptivos de las escalas clí-
1 .8081 100.0 100.0 .669 nicas son congruentes con la experiencia clínica y con lo encontrado
Lambda de Wilks
con otros cuestionarios de evaluación de síntomas psicopatológicos
(p. ej., el SCL-90-R; Caparrós-Caparrós et al., 2007; González de Rive-
Contraste de las Lambda de Chi-cuadrado gl Sig.
ra, De la Hoz, Rodríguez-Abuín y Monterrey, 1999; González de Rive-
funciones Wilks
ra et al., 2002). De igual forma, las correlaciones de la edad con las
1 .553 289.315 3 .000
dimensiones de psicopatología son coherentes con los datos epide-
Coeficientes estandarizados de las funciones discriminantes canónicas miológicos y evolutivos, teniendo en cuenta los efectos del tamaño
Psicorreactividad .293 muestral que posibilitan la significación de algunas correlaciones ba-
Sueño estricto .249
jas. Las alteraciones del sueño se incrementan con la edad, así como
los síntomas depresivos y de somatización que, a su vez, pueden es-
Índice de riesgo psicopatológico .623
tar relacionados con las propias alteraciones del sueño (Foley, Anco-
Se ha empleado una función discriminante canónica en el análisis.
1
li-Israel, Britz y Walsh, 2004). De igual forma, tal como ocurre con
138 M. R. Abuín y L. de Rivera / Clínica y Salud 25 (2014) 131-141
otros instrumentos de medida y con diferentes muestras, las puntua- vo. Esta mezcla de síntomas de sensibilidad y de obsesión-compul-
ciones de las escalas clínicas son más elevadas en las mujeres que en sión se ha conceptualizado como psicorreactividad, ya que refleja el
los hombres (Caparrós-Caparrós et al., 2007; Sandín et al., 2008). malestar psíquico debido a la vulnerabilidad relacionada con la re-
Además de las escalas clínicas con validez factorial se presentan lación con uno mismo y con los demás y con las respuestas de con-
diferencias técnicas en su conceptualización con respecto a otros ins- trol obsesivo-compulsivo. Es decir, esta dimensión identifica en la
trumentos como el SCL-90-R o el SA-45: (1) la distinción del rango de parte baja del continuo a sujetos que mantienen una producción
síntomas, que permite configurar una escala de riesgo psicopatológi- emocional baja o ajustada y reaccionan con una producción cogniti-
co útil para detectar sujetos que puntúan en ítems infrecuentes y va ajustada a la situación sin demandar control excesivo, mientras
muy leves en la población general y que como se ha visto clasifica en la parte alta estaría identificando el patrón opuesto, alta produc-
correctamente como normales o como con trastornos psicopatológi- ción emocional sobre las experiencias, con sobreproducción en la
cos alrededor de un 85% de los sujetos, (2) la inclusión de escalas de respuesta de control cognitivo obsesivo-compulsivo. Esta dimensión
validez de minimización y magnificación diseñadas para prever po- de psicorreactividad está presente en la mayoría de síndromes psi-
sibles sesgos de aumento o disminución en las puntuaciones del lis- copatológicos clínicos, bien como factor de vulnerabilidad o como
tado y que abren un campo de estudio para su utilidad y limitaciones factor definitorio de la psicopatología. Por ello, las correlaciones de
y (3) escalas de sueño que ayudan a identificar y distinguir alteracio- la psicorreactividad con otras dimensiones clínicas son esperables,
nes del sueño asociadas o independientes de alteraciones ansioso- así como que otros ítems puedan saturar en el factor, como sucede.
depresivas. La dimensión de sueño constituida por 3 ítems con gran Por otra parte, la patoplastia es variada y, como se observa en la
peso factorial es, a su vez, una variable que permite discriminar entre experiencia clínica, los pacientes expresan los síntomas de forma
la muestra de población general y la muestra de población psicopa- idiosincrásica y variable a lo largo del tiempo. Así, a lo largo de una
tológica, tanto en hombres como en mujeres. Estas dos variables, por historia clínica se pueden encontrar diferentes etiquetas diagnósti-
tanto, son importantes para predecir y clasificar a una persona con cas que muestran diferentes expresiones de la psicopatología. Un
riesgo de padecer un desajuste psicológico. Esto es congruente con la paciente, por ejemplo, en un momento determinado es diagnostica-
experiencia clínica, en la que la presencia de síntomas inusuales o do de agorafobia pero al cabo de unos meses el diagnóstico cambia
infrecuentes, junto con alteraciones del sueño, alerta al clínico de o se amplía a un trastorno depresivo. Este hecho, común en la clíni-
procesos psicopatológicos en desarrollo presente o de próxima apa- ca, muestra que las entidades nosológicas pueden no ser estructuras
rición. invariantes si no, al contrario, pueden ser variables dependiendo de
Los resultados sobre el estudio factorial permiten la discusión factores ambientales o de desarrollo psicopatológico mediadas por
sobre la unidimensionalidad o multidimensionalidad de los cuestio- la personalidad. En el momento del diagnóstico de agorafobia el pa-
narios de síntomas psicológicos y, secundariamente, sobre la natu- ciente puede puntuar ya con síntomas depresivos, pero que todavía
raleza de lo psicopatológico. Tal como se plantea en otros trabajos no han cristalizado en un síndrome clínico. He aquí dónde son útiles
(Bados, Balaguer y Coronas, 2005; Caparrós- Caparrós et al. , 2007; las dimensiones más específicas y menos salientes explicativas de
Rauter et al., 1996; Vassend y Skrondal, 1999; Zack, Toneatto y Strei- menos varianza en el LSB-50, permitiendo identificar síntomas,
ner, 1998) o en la revisión realizada por Cyr, McKenna-Foley y Pea- cuya comorbilidad con otros permite definir de forma particular a
cock (1985), los cuestionarios de síntomas, como por ejemplo el cada individuo en un momento dado. Se puede esperar que lo más
SCL-90-R, son puestos en entredicho en cuanto a su estructura fac- susceptible al cambio a lo largo del tiempo sea lo más específico de
torial. Se sugiere que los cuestionarios de síntomas más que medir la expresión psicopatológica, pero no, sin embargo, la psicorreacti-
varios factores perfectamente definidos e invariantes miden básica- vidad, dimensión consistente, más general e inespecífica, presente
mente un factor de distrés general que, según los diferentes autores en la mayoría de los cuadros y, probablemente, más estable.
y muestras, puede estar acompañado de otros factores secundarios. La intercorrelación entre dimensiones clínicas y la presencia de
De igual manera, a partir del análisis factorial del LSB-50 se obtiene un factor de psicorreactividad –en otros estudios denominado de
un primer factor que se asemeja a este factor de distrés general y distrés general– abre el debate sobre el rigor científico y la utilidad
que se denomina psicorreactividad, explicando un porcentaje muy de las etiquetas diagnósticas. Tal como discuten Pedersen y Karterud
alto de varianza, en este caso de más del 34%, mientras que los cinco (2004), la supuesta continuidad dimensional que se utiliza en los lis-
restantes explican un 21%. Por otra parte, en todos los estudios men- tados de síntomas no encaja bien con los criterios discontinuos (pre-
cionados con el SCL-90-R, y también en éste, se ha encontrado una sente/ausente), junto con la severidad y duración de los síntomas
intercorrelación entre las dimensiones que refuerza la hipótesis de que utilizan en los criterios diagnósticos del DSM. Por otra parte, mu-
la unidimensionalidad de los instrumentos de medida. Aunque a chos criterios diagnósticos son discutibles, tanto en el DSM-IV como
primera vista estos datos parezcan desalentadores, con respecto a en el reciente DSM-V, sobre todo en lo que se refiere a los trastornos
las propiedades psicométricas derivadas del estudio factorial, no lo de la personalidad (Verhul, 2012), pudiendo producirse sobrediag-
son si se hace un análisis más detallado. Por una parte, es esperable nósticos o falsos positivos (Ghaemi, 2013). Tampoco en la caracteri-
que la estructura factorial de los cuestionarios de síntomas pueda zación de los cuadros clínicos del eje I se explica suficientemente
cambiar con la muestra, pero conservando el factor de distrés gene- cómo pueden afectar las disfunciones de la personalidad a la expre-
ral. La patoplastia es dependiente de la cultura, de la muestra, de la sión y variabilidad de síntomas de los cuadros clínicos. Sin embargo,
personalidad y de la patología. Dependiendo de las características la investigación muestra grandes relaciones entre personalidad y sín-
muestrales, la organización sintomática puede cambiar. Además, en dromes clínicos (Haddy, Strack y Choca, 2005). Esto lleva a conside-
la población general la distribución de las puntuaciones escalares rar que la categorización de las clasificaciones diagnósticas, presupo-
está sesgada y apuntada, con lo que hay una falta de variabilidad que niendo tipos puros, pueda ser un a priori del investigador, pero no
puede afectar a los resultados del análisis factorial. Las puntuacio- una estructura que esté en la realidad mental de las personas. Cuan-
nes en esta población son bajas en la mayoría de sujetos. Con el LSB- do se utilizan tests de tipo cuestionario en áreas como la psicología
50 se ha utilizado una muestra variada, con cuadros psicopatológi- de la personalidad, muchas veces las dimensiones o categorías pue-
cos en su mayoría procedentes de la consulta ambulatoria, siendo den ya estar presentes en la mente de las personas de forma implíci-
aproximadamente dos tercios de síndromes clínicos mixtos ansioso- ta; esto, sin embargo, no parece tan claramente definido en los lista-
depresivos. Es congruente, por lo tanto, encontrar un primer factor dos de síntomas psicopatológicos, donde las personas parece que
principal relacionado con el distrés general, compuesto por ítems identifican sólo de forma consistente un factor de sufrimiento perso-
relacionados con la sensibilidad hacia uno mismo y las relaciones nal, cuya forma de expresión varía en función de otros factores más
interpersonales, junto con síntomas de control obsesivo-compulsi- específicos y más cambiantes en el tiempo.
M. R. Abuín y L. de Rivera / Clínica y Salud 25 (2014) 131-141 139
dependency — emotional reliance on others (ER), lack of social self- were the index of psychopathological risk, sleep, and anxiety. The
confidence (LS), and assertion of autonomy (AA), and an interpersonal cross-validated classification showed that overall 85.1% were
dependency index. The ER subscale consists of 18 items that include classified correctly. Using only the index of psychopathological risk
contents referred to both behaviour and affects, conditioned to as predictor, the cross validated classification showed that overall
others’ approval. The LS subscale consists of 16 items that measure a 84% were classified correctly in the sample of women and overall
type of interpersonal bond characterized by the lack of self- 84.9 % in the sample of men.
confidence when coping with both conflicts and adverse situations.
The AA subscale consists of 14 items referred to an affective- Discussion
interpersonal pattern characterized by an extreme assertion and
autonomy. Items are assessed on a scale with a range from 1 to 4 The Brief Symptom Checklist LSB-50 assesses, both psychological
(from not characteristic of me to very characteristic of me). According and psychosomatic symptoms, faster than other instruments like
to Bornstein (1994), an Interpersonal Dependency Index (IDI) is SCL-90-R. Besides, its psychometric characteristics of reliability are
obtained from the scores of the three subscales (IDI = ER + LS - AA). satisfactory, as Cronbach’s alpha of symptom dimensions have a
range between .79 and .90. The LSB-50 has three main technical
Results innovations with regard to other instruments of self-reported
psychopathology: 1) the distinction between symptoms of primary
Mean scores of the LSB-50 symptom dimensions are showed in rank vs. symptoms of secondary rank; 2) the inclusion of two validity
Table 4. Gender differences were found in both the dimensional and scales, named “magnification scale” and “minimization scale”,
the global indexes, with higher scores in women than in men. respectively; and 3) the inclusion of sleep scales.
Correlation of age with psychopathological dimensions can be seen Mean score of both dimensional and global scores are congruent
in Table 5. In the total sample, correlational analyses (Pearson with the results that were found with other instruments for screening
correlations) show that age was positively correlated with sleep psychopathology (e.g., SCL-90-R; see Gonzalez de Rivera, De las
scales (age-sleep scale = .203, age-extended sleep scale = .147, Cuevas, Rodríguez-Abuín, & Rodriguez-Pulido, 2002). Gender
p < .01) and with global index of symptom intensity (age-int. = .168, differences in psychopathology dimensions were also coherent with
p < .01). Age was also positively correlated with somatization (.097, results obtained previously with the SCL-90-R. Correlations of age
p < .01) and with depression (.067, p < .05), although it can be noted with both LSB-50 dimensions and the three global indexes make
that these correlations are between .0 and .1. On the contrary, age sense and are congruent with both epidemiological and
was also slightly correlated negatively with hostility (-.06, p < .05). developmental data (Foley, Ancoli-Israel, Britz, & Walsh, 2004). Sleep
Considering only the sample of general population, a similar pattern dysfunctions are more intense and more frequent with aging.
of correlations was found: age-sleep = .289 and age-extended sleep Correlations of age with both dimensions of depression and
scale = .233, p < .01; age-somatization = .10, p = .01; age-depression = somatization are not high but significant, because the sample is very
.119, p <. 01; age-global index of symptom intensity = .247, p < .01; large and it can show slight general tendencies.
and age-hostility = -.154, p < .01). Results of the factorial study give room for debate on the
Reliability analysis obtained alpha coefficients of the nine scales unidimensionality of instruments to measure self-reported
and subscales in a range from to .79 to .90 (Table 6). Validity psychopathology (Bados, Balaguer, & Coronas, 2005; Vassend &
coefficients, having as concurrent criteria both interpersonal Skrondal, 1999; Zack, Toneatto, & Streiner, 1998). In this study, like in
dependency and bonding variables, support a significant validity for many others (Caparrós- Caparrós, Villar-Hoz, Juan-Ferrer, & Viñas-
the test. All psychopathology dimensions were positively correlated Poch , 2007; Rauter, Leonard, & Swett, 1996), a large primary factor
with variables related to both unhealthy dependency and unhealthy was identified that accounts for 34% of the variance, whereas the
bonding (Table 7): destructive overdependence, lack of social self- other five factors account approximately for just a 21% of the variance.
confidence, and emotional reliance on others. On the contrary, all This factor contains items of both obsessive-compulsive symptoms
psychopathology dimensions correlated negatively with healthy and sensitivity symptoms. Thus, it can be seen as a psychoreactivity
dependency. Hostility was the only variable to correlate with dimension. There can be three explanations for this primary global
assertion of autonomy. Dimensions of psychoreactivity, hostility, and distress factor. Firstly, the composition of the sample with
sleep were positively correlated with dysfunctional detachment. psychopathological disorders affects the factor structure; most of the
An exploratory factor analysis using a promax rotation was cases are anxious-depressive syndromes with various pathoplasties.
conducted, yielding 6 factors with the respective items having It is probable that the factor structure changes, depending on the
loadings between .34 and .87. The six factors explain the 55.3% of the sample composition and its variability. Secondly, the mental
total variance, with a main factor that accounts for 34.6 % of this total representation of psychopathology is not as clear as it happens with
variance, while the others account for 20.7% of the total variance. personality tests. People report symptoms showing an unspecific
These factors supported six psychopathology dimensions: representation of psychopathology in the self. The implicit theory of
psychoreactivity, anxiety, hostility, somatization, depression, and psychopathology is not as clear as it happens with other measures of,
sleep (Table 8). The first factor was psychoreactivity, accounting for for example, personality. Thirdly, the nature of psychopathology can
34.6% of the total variance or, in other words, the 62.5% of the be discussed. A lot of diagnostic criteria can be in question, as it has
explained total variance. As Table 9 shows, significant intercorrelations been pointed out by Verhul (2012) on personality disorders. Are the
among LSB-50 dimensions were found. diagnostic labels precise? Do they show the clinical reality of
Stepwise discriminant analyses were conducted to find the best psychopathology? And, lastly, the influence of personality on the
set of psychopathology variables, to distinguish the clinical sample variable expression of psychopathology has to be discussed. The
with psychopathological disorders from the sample of general diagnostic criteria, sometimes, cannot account for the complexity of
population. The psychopathology variables that have been considered the human being, variable over time and variable depending on
in these analyses were the six main dimensions of psychopathology personality, culture, and other social variables.
and the index of psychopathological risk. Stepwise discriminant Even with this issue on the multidimensionality of many symptom
analyses were conducted separately for men and women. For women, checklists that can be in question, the LSB-50 is useful for clinical
predictor variables were the index of psychopathological risk, sleep purposes. LSB-50 dimensions are correlated with both variables of
and psychoreactivity. The cross-validated classification showed that interpersonal behavior and bonding. Most symptom dimensions are
overall 84.6% were classified correctly. For men, predictor variables positively correlated with unhealthy and rigid dependency; on the
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contrary, LSB-50 dimensions are negatively correlated with healthy Bornstein, R. F. y Languirand, M. A. (2004). A new clinical measure of overdependence,
detachment and healthy dependency. The Relationship Profile Test. Journal of the
dependency. It makes sense that hostility scores are correlated with
American Psychoanalytic Association, 2, 470-471.
an extreme autonomous self-presentation (positive correlation with Bornstein, R. F., Manning, K. A., Krukonis, A. B., Rossner, S. C. y Mastrosimone, C. (1993).
assertion of autonomy), whereas the other LSB-50 dimensions are Sex differences in dependency. A comparison of objective and projective measures.
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not correlated with this type of self-presentation. There is also a
Caparrós-Caparrós, B,, Villar-Hoz E., Juan-Ferrer, J. y Viñas-Poch F. (2007). Symptom
point of interest that only psychoreactivity, hostility, and sleep scores Check-List-90-R: fiabilidad, datos normativos y estructura factorial en estudiantes
are correlated with dysfunctional detachment scores. There seems to universitarios. International Journal of Clinical and Health Psychology, 3, 781-794.
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dysfunctional detachment, which could show a cluster of defensive De las Cuevas C., González de Rivera, J. L., Henry-Benítez, M., Monterrey, A. L.,
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The LSB-50 is a symptom checklist with only 50 items. It does not
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cover all the possible symptoms that belong to other different 15, 91-95.
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Agradecemos los útiles comentarios y sugerencias de D. Pablo as a source of error variance in applied assessment. Psychological Bulletin, 136, 450-
Santamaría Fernández sobre este artículo. 470.
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