26b-Carta de Rosas A Encarnacion Ezcurra 1833

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 3

Archivo histórico

http://archivohistorico.educ.ar

Carta de Juan Manuel de Rosas a su esposa,


Encarnación Ezcurra, donde envía
informaciones y órdenes para sus aliados
políticos

23 de noviembre de 1833

Juan Manuel de Rosas

Fuente: Papeles de Rosas, Museo Mitre, Al, C36, C33, N°1. En: Mirta Zaida Lobato, La
Revolución de los Restauradores, 1833. Historia testimonial argentina, nro. 10, Buenos Aires,
Centro Editor de América Latina, 1983
Archivo histórico
http://archivohistorico.educ.ar

Río Colorado, 23 de noviembre de 1833.

Al general Pinedo dile que lo felicito por el triunfo de la justicia. A Parra dile
que tuve el gusto de recibir su muy apreciada carta del 6 de setiembre, la
que no contesté porque ya se estaba entendiendo contigo, que lo felicito por
haber defendido su patria y sus derechos como buen federal y amante de
las leyes de la tierra. [...]

Ya has visto lo que vale la amistad de los pobres y por ello cuanto importa
el sostenerlo para atraer y cultivar sus voluntades. No cortes pues sus
correspondencias. Escríbeles con frecuencia, mándales cualquier regalo, sin
que te duela gastar en esto. Digo lo mismo respecto a las madres y mujeres
de los pardos y morenos que son fieles. No repares, repito, en visitar a las
que lo merezcan y llevarlas a tus distracciones rurales, como también en
socorrerlas con lo que puedas en sus desgracias. A los amigos fieles que te
hayan servido déjalos que jueguen el billar en casa y obséquialos con lo que
puedas. […]

Estoy sentido al ver que nadie me escribe para imponerme de los sucesos
ocurridos y sólo los sé por lo que dicen los impresos y por consiguiente me
quedo obscuro de lo que no debía ignorar. […]

También quisiera saber cómo ha sido recibida la nota. En los paisanos


pobres ya sé que ha de haber agradado, pero como ningún caporal, ni de
los amigos ni de los enemigos no ha dicho nada sobre ella, deseo que me
digas cómo han opinado y que han dicho.

Guarda silencio sobre todo esto, a nadie digas que te he escrito. Este
silencio conviene porque es a veces por donde revientan algunos. Si te
preguntan, diles que es carta vieja la que has recibido y de este modo
podrás cumplir con los encargos que te hago sin que se extrañe o se crea
que te he escrito a vos solamente.

2
Archivo histórico
http://archivohistorico.educ.ar

Soy de parecer que donde se presente la oportunidad aparente, cuando no


se crea que sacas adrede la conversación, al hablar con los señores
Anchorena, Guido, García, Maza, Terrero y otros amigos míos, les digas que
temes mucho que me vaya sin que basten a detenerme mis amigos, así
como no me atajaron cuando no quise ser gobernador. Que por todo lo que
notas crees que mis intenciones son de retirarme, y que vos me conoces
bien. Si te preguntan la causa, diles que lo ignoras; pero que me consideras
aburrido y deseoso de descansar, aun cuando sea fuera de la patria y
escaso de recursos.

Por ahora nada más puedo decirte, saluda a todos de la familia, y


deseándote la mejor salud y tranquilidad recibe el cariñoso [ilegible] de tu
amante compañero.

También podría gustarte