Foucault M Las Mallas Del Poder
Foucault M Las Mallas Del Poder
Foucault M Las Mallas Del Poder
EI esquema de los juristas, ya sea el de Grotius, Pufendorf o el de Hubo un rendimiento militar muy superior gracias a un nuevo
Rousseau, consiste en decir: «AI comienzo no había sociedad, poco procedimiento de poder, cuya función no era en absoluto la de prohi-
después apareció ésta, a partir deI momento en que surgió un pun- bir. Evidentemente, estaba abocado a prohibir esto o aquello, sin
to central de soberania que organizó e! cuerpo social y que permi- embargo su fin no era decir «no debes», sino esencialmente obte-
tió a continuación toda una especie de poderes locales y regiona- ner un mejorrendimiento, una mejor producción, una mejor pro-
les», Marx no reconoce implicitamente este esquema. Muestra, por ductividad deI ejército. Lo que fue perfeccionado, o mejor, lo que
el contrario, cómo a partir de la existencia inicial y primitiva de fue asegurado por esa nueva técnica de poder, fue e! ejército como
esas pequenas regiones de poder -como la propiedad, la esclavi- producción de muertos. De ningún modo la prohibición. Podemos
tud, e! taller y también el ejército- se pudieron formar poco a decir lo mismo de la disciplina en los talleres, que comenzó a for-
poco grandes aparatos de Estado. La unidad estatal es, en el fondo, marse en los síglos XVII y XVIII, cuando los pequenos talleres de tipo
secundaria con relación a estos poderes regionales y específícos corporativo fueron reemplazados por grandes talleres con muchos
que aparecen en primer lugar. obreros -centenares de obreros-, era necesario vigilar y a la vez
En tercer lugar, tales poderes especificos, regionales, de ninguna coordinar los gestos de unos y otros, con la división deI trabajo. La
manera tienen como función primordial prohibir, impedir, decir: división de! trabajo fue, aI mismo tiempo, la razón que obligó a in-
«no debes», La función primaria, esencial y permanente de esos ventar esa nueva disciplina de taller; pero, inversamente, podemos
poderes locales y regionales es, en realidad, ser productores de una decir que la disciplina de taller fue la condición para conseguir la
eficacia, de una aptitud, productores de un producto. Marx realiza, división dei trabajo. Sin dicha disciplina, es decir, sin la jerarquia,
por ejemplo, unos espléndidos análisis deI problema de la discipli- sin la vigilancia, sin la aparición de los contramaestres, sin el con-
na en e! ejército y en los talleres. EI análisis que voy a hacer de la trol cronométrico de los gestos, no hubiera sido posible obtener la
disciplina en el ejército no se encuentra en Marx, pero eso poco im- división deI trabajo.
. porta. iQué ocurrió en e! ejército desde finales deI siglo XVI y co- Finalmente, una cuarta idea importante: hay que considerar es-
mienzos deI XVII hasta prácticamente finales deI XVIII? Una enorme tos mecanismos de poder, estos procedimientos de poder, como
transformación que hizo que en e! ejército, que hasta entonces ha- técnicas, es decir, como procedimientos que han sido inventados,
bía estado constituido esencialmente por pequenas unidades en perfeccionados y que se desarrollan sin cesar. Existe una verdadera
cierto modo intercambiables, organizadas en torno a un jefe, éstas tecnologia de! poder o, mejor, de los poderes, que tiene su propia
fueran reemplazadas por una gran unidad piramidal, con toda una historia. Aqui, una vez más, podemos encontrar fácilmente entre
serie de jefes intermedios, suboficiales y también técnicos. Esto se las Iineas dellibro II de El capital un análisis, o aI menos el esbozo
debió sobre todo a que se había hecho un descubrimiento técnico: de un análisis, que seria la historia de la tecnologia deI poder, tal
el fusil de tiro relativamente rápido y preciso. como se ejercia en los talleres y en las fábricas. Seguiré, entonces,
A partir de ese momento no se podia tratar aI ejército -era peli- estas indicaciones esenciales e intentaré considerar el poder con
groso hacerlo funcionar- bajo la forma de pequenas unidades ais- respecto a la sexualidad no desde un punto de vista jurídíco, sino
ladas, compuestas por elementos intercambiables. Era necesario, tecnológico.
para que el ejército fuera eficaz, a fin de que se pudieran emplear En efecto, me parece que, si analizamos el poder dando priori-
los fusiles de la mejor forma posible, que cada individuo estuviera dad aI aparato de Estado, si analizamos el poder considerándolo
bien entrenado para ocupar una posición determinada en un frente como un mecanismo de conservación, si lo consideramos como
extenso, para colocarse simultáneamente de acuerdo con una Iinea una superestructura jurídica, en el fondo no hacemos sino retomar
que no debía ser rota, etc. Un problema de disciplina implicaba el tema c1ásico deI pensamiento burgués cuando trata el poder
una nueva técnica de poder con suboficiales, una jerarquia de sub- como un hecho jurídico. Dar preeminencia ai aparato de Estado, a
oficiales, oficiales inferiores y ofíciales superiores. Y así, el ejércijo la función de conservación, a la superestructura jurídica, es en de-
pudo ser tratado como una unidad jerárquica muy compleja, ase- finitiva «rousseaunizar» a Marx. Es inscribirle en la teoría burgue-
gurando su rendimiento máximo con la unidad de conjunto según sa y jurídica deI poder. No es sorprendente que esta concepción su-
la especificidad de la posición y deI papel de cada uno. puestamente marxista deI poder como aparato de Estado, como
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instancia de conservación, como superestructura jurídica, se en- -aquello en lo que consistía el poder- era esencialmente el poder
cuentre fundamentalmente en la socialdemocracia europea de fi- de tomar una parte, de tener el derecho y la fuerza de percibir algo
nales dei siglo XIX, cuando el problema era justamente saber cómo -un impuesto, un diezmo, cuando se trataba de un clérigo- de las
hacer funcionar a Marx dentro de un sistema jurídico que era el de cosechas que se habían obtenido: la percepción obligatoria de tal o
la burguesía. Entonces, recogiendo lo que dice ellibro II de El capi- cual porcentaje por el sefior, por el poder real, por el clérigo. EI po-
tal y alejándome de todo lo que ha sido aftadido y reescrito sobre der era, de este modo, esencialmente preceptor y predador. En esta
los privilegios del aparato de Estado, la función de reproducción medida, operaba siempre una sustracción económica y en conse-
dei poder y el carácter de la superestructura jurídica, me gustaría cuencia, lejos de favorecer y de estimular el flujo económico, era
intentar ver cómo es posible hacer una historia de los poderes en perpetuamente su obstáculo y su freno. De ahí esta segunda preocu-
Occidente y esencialmente de los poderes tal como han sido inves- pación, esta segunda necesidad: encontrar un mecanismo de poder
tidos en la sexualidad." tal que, ai mismo tiempo que controla las cosas y las personas hasta
Así, a partir de este principio metodológico, icómo podríamos el menor detalle, no sea oneroso ni esencialmente predador para la
hacer la historia de los mecanismos de poder en la sexualidad? Creo sociedad, que se ejerza en el sentido dei mismo proceso económico.
que, de una manera muy esquemática, podríamos decir lo siguien- Con estos dos objetivos, creo que podemos comprender, a gran-
te: el sistema de poder que la monarquía había conseguido organi- des rasgos, la gran mutación tecnológica dei poder en Occidente.
zar a finales de la Edad Media presentaba dos inconvenientes impor- Tenemos la costumbre de decir -una vez más de acuerdo con el es-
tantes para el desarrollo dei capitalismo. En primer lugar, el píritu de un marxismo un poco primario- que el gran invento,
poder político, tal como se ejercía en el cuerpo social, era un poder todo el mundo lo sabe, fue la máquina de vapor, o bien inventos de
muy discontinuo. Las mallas de la red eran demasiado grandes y un este tipo. Es verdad que esto tuvo mucha importancia, pero hubo
número casi infinito de cosas, de elementos, de conductas y de pro- toda una serie de diferentes invenciones tecnológicas, tan impor-
'cesos escapaban ai control dei poder. Si tomamos como ejemplo un tantes como dicho invento, y que generaron, en última instancia, la
aspecto concreto, el de la importancia dei contrabando en toda Eu- condición de funcionamiento de otras. Así ocurrió con la tecnolo-
ropa hasta fines dei siglo XVIII, advertimos un flujo económico muy gía política; tuvo lugar una completa invención en el terreno de las
importante, casi tan importante como el otro, un flujo que escapa- formas de poder a lo largo de los siglos XVII y XVIII. Por consiguíen-
ba por completo ai poder, pero que era, por otra parte, una de las te, hay que hacer no solamente la historia de las técnicas industria-
condiciones de la existencia de la gente: si no hubiera habido pira- les, sino también la de las técnicas políticas, y creo que podemos
tería marítima, el comercio no habría podido funcionar y la gente agrupar en dos grandes capítulos las invenciones de la tecnología
no habría podido vivir. En otras palabras, la ilegalidad era una de política, para lo que debemos tener en cuenta sobre todo los siglos
las condiciones de vida, pero eso significaba ai mismo tiempo que XVII y XVIII. Yo las agruparía en dos capítulos, porque me parece
había ciertas cosas que escapaban ai poder y sobre las que el poder que se han desarrollado en dos direcciones diferentes. Por un lado,
no tenía control. En consecuencia, procesos económicos, mecanis- existe esa tecnología que llamaría "disciplina». La disciplina es, en
mos diversos que en cierta manera permanecían fuera de control el fondo, el mecanismo de poder por el cualllegamos a controlar
exigían el establecimiento de un poder continuo, preciso, de algún en el cuerpo social hasta los elementos más tenues, y por éstos
modo atómico. Se trataba de pasar de un poder con lagunas, global, alcanzamos los átomos sociales mismos, es decir, los individuos. Téc-
a un poder continuo, atómico e individualizante, es decir, que cada nicas de individualización del poder. Cómo vigilar a alguien, cómo
uno, que cada individuo en sí mismo, en su cuerpo, en sus gestos, controlar su conducta, su comportamiento, sus aptitudes, cómo in-
pudiera ser controlado, en lugar de controles globales y en masa. tensificar su rendimiento, cómo multiplicar sus capacidades, cómo
EI segundo gran inconveniente de los mecanismos de poder, tal situaria en el lugar en que sea más útil: esto es, desde mi punto de
como funcionaban en la monarquía, es que eran excesivamente one- vista, la disciplina.
rosos. Y eran onerosos precisamente porque la función del poder He citado hace poco el ejemplo de la disciplina en el ejército. Es
un ejemplo importante porque éste fue verdaderamente el punto
c Fin de la parte publicada en 1981. donde se produjo el gran descubrimiento de la disciplina y se desa-
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rrolló casi en primer lugar, ligado a esa otra invención de orden de la civilización y que todavía, ai comenzar el siglo XIX, se encuen-
técnico-industrial que fue el invento del fusil de tiro relativamente tran escuelas en las que los alumnos se presentan en grupo de pie,
rápido. A partir de ese momento podemos decir en definitiva lo si- alrededor de un profesor que les da clase. Y esto implica, evidente-
guiente: el soldado dejaba de ser intercambiable, dejaba de ser pura mente, que el profesor no puede vigilarles real e individualmente:
y simplemente carne de caiión y un mero individuo capaz de golpear. existe el grupo de alumnos y además el profesor. En la actualidad,
Para ser un buen soldado era necesario saber disparar, así pues ha- ustedes están colocados así en fila, la mirada dei profesor puede in-
bía que pasar un proceso de aprendizaje. Era igualmente necesario dividualizar a cada uno, puede nombrarlos para saber si están pre-
que el soldado supiera desplazarse, que supiera coordinar sus ges- sentes, qué hacen, si están soiiando, si bostezan... Son futilidades,
tos con los de los otros soldados. En suma: el soldado se convirtió pero futilidades muy importantes, pues, finalmente, en el dominio
en algo hábil, y por tanto, preciado. Y cuanto más preciado era, de toda una serie de ejercicios de poder, en estas pequeiias técni-
más había que conservarlo; cuanto más había que conservarlo, más cas, es donde han podido investirse y funcionar estos nuevos meca-
necesario era enseiiarle técnicas capaces de salvarle la vida en el nismos. Lo que ha sucedido en el ejército y en los colegios se puede
combate, y cuantas más técnicas se le enseiiaban, más largo y valio- constatar igualmente en los talleres a lo largo dei siglo XIX. Es lo
so era el aprendizaje. Y de modo brusco, nos encontramos con una que yo llamaría tecnología individualizante dei poder, una tecnolo-
especie de expansión de esas técnicas militares de adiestramiento, gía que mira a fondo a los individuos, hasta en su cuerpo, en su
que culminaron en el famoso ejército prusiano de Federico lI, que comportamiento; es, a grandes rasgos, una especie de anatomía po-
pasaba gran parte de su tiempo haciendo ejercicios. EI ejército pru- lítica, de anatomopolítica, una anatomía que se dirige a los indivi-
siano, el modelo de disciplina prusiana, es precisamente la perfec- duos hasta anatomizarlos.
ción, la intensidad máxima de esta disciplina corporal dei soldado, Se trata de una familia de tecnologías de poder que apareció en
que ha sido en cierto modo el modelo de otras disciplinas. los siglos XVII y XVIII. Disponemos de otra familia de tecnologías de
. Otro lugar en el que vemos aparecer esta nueva tecnología disci- poder que apareció un poco más tarde, en la segunda mitad dei
plinaria es la educación. Primero en los colegios y después en las XVIII, y que se desarrolló (hay que decir, para vergüenza de Francia,
escuelas primarias observamos la irrupción de esos métodos disci- que la primera fue desarrollada sobre todo en Francia y Alemania)
plinarios en los que los individuos son individualizados en la mul- en especial en Inglaterra: tecnologías que no apuntan a los indivi-
tiplicidad. EI colegio reunía decenas, centenares y, a veces, miles de duos en tanto que individuos sino, por el contrario, a la población.
colegiales, de escolares, y la cuestión era entonces ejercer un poder En otras palabras, el siglo XVIII descubrió algo capital: que el poder
que fuera mucho menos oneroso que el poder dei preceptor, que no no se ejerce simplemente sobre los súbditos; ésta era la tesis funda-
puede existir más que entre el alumno y el maestro. Nos encontra- mentai de la monarquía, según la cual existe el soberano y los súb-
mos con un maestro para decenas de discípulos. Sin embargo, es ditos. Se descubre que sobre lo que se ejerce el poder es sobre la
necesario que, pese a esta multiplicidad de alumnos, se consiga población. i.Y qué quiere decir población? No quiere decir simple-
una individualización del poder, un control permanente, una vigi- mente un grupo humano numeroso, sino seres vivos atravesados,
lancia en todos los momentos. De ahí la aparición de ese personaje mandados y regidos por procesos y leyes biológicas. Una población
que todos los que han estudiado en colegios conocen bien, el vigi- tiene una tasa de natalidad, de mortalidad, tiene una curva y una
lante, que en la pirámide corresponde ai suboficial dei ejército; pirámide de edad, una morbilidad, un estado de salud, una pobla-
igualmente, la aparición de la notación cuantitativa, la aparición ción puede perecer o puede, por el contrario, desarrollarse.
de los exámenes, la aparición de las oposiciones, la posibilidad, en Ahora bien, todo esto comienza a descubrirse en el siglo XVIII. Se
consecuencia, de clasificar a los individuos de manera que cada cae en la cuenta, en consecuencia, de que la relación dei poder con
uno ocupe exactamente su sitio, bajo los ojos de su maestro, o en la el súbdito (sujet) o, mejor, con el individuo, no debe ser simplemen-
calificación y el juicio que tenemos sobre cada uno de ellos. te esa forma de sujeción (sujétion) que permite ai poder quitarle ai
Fíjense, por ejemplo, cómo están ustedes sentados en fila ante súbdito los bienes, las riquezas y eventualmente su cuerpo y su
mí. Es una posición que quizás, les parezca natural, pero es bueno sangre, sino que el poder se debe ejercer sobre los individuos en
recordar que, sin embargo, es relativamente reciente en la historia tanto que constituyen una especie de entidad biológica que se debe
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'tomar en consideración, si queremos utilizar a esta población como será un instrumento de "Ia acción de disciplinar», uno de los ele-
máquina para producír, producir riquezas, bienes, para producir mentos esenciales de la anatomopolítica de la que he hablado; pero,
otros índívíduosi EI descubrimiento de la población es, a la par que por otro lado, el sexo asegura la reproducción de las poblaciones, y
el descubrimiento dei individuo y dei cuerpo adiestrables, el otro mediante el sexo, mediante una política dei sexo, podemos cambiar
gran núcleo tecnológico en torno ai cual se han transformado los la relación entre la natalidad y la mortalidad. En cualquier caso,
procedimientos políticos de Occidente. En este momento se inven- la política dei sexo va a integrarse dentro de toda esa política de la
tó lo que llamaré, por oposición a la anatomopolítica que he men- vida que negará a ser tan importante en el siglo XIX. EI sexo está en
cionado antes, la bíopolítíca. En este preciso momento es cuando la bisagra entre la anatomopolítica y la biopolítica, en la encrucija-
vemos aparecer problemas como los dei hábitat, las condiciones de da de las disciplinas y las regulacíones, y en esta función es como
vida en una ciudad, la higiene pública, la modificación de la rela- ha negado ser, ai final dei siglo XIX, una pieza política de primera
ción entre natalidad y mortalidad. Surge entonces la cuestión de magnitud para hacer de la sociedad una máquina de producción.
saber cómo podemos hacer que la gente tenga más hijos, en todo
caso cómo podemos regular el flujo de la población, cómo pode- *
mos regular igualmente la tasa de crecimiento de una población,
las migraciones. Y a partir de aqui toda una serie de técnicas de ob- M. Foucault: (Desean ustedes hacer alguna pregunta?
servación entre las cuales está evidentemente la estadística, pero
también todos los grandes organismos administrativos, económi- Un oyente: (Qué productividad pretende eI poder en las prisiones?
cos y políticos se encargan de esta regulación de la población. En la
tecnologia dei poder han tenido lugar dos grandes revoluciones: eI M. Foucault: Ésa es una larga historia. EI sistema de la prisión,
descubrimiento de la disciplina y el descubrimiento de la regula- quiero decir de la prisión represiva, la prisión como castigo, fue es- .
ción y eI perfeccionamiento de una anatomopolítica y eI de una tablecido muy tarde, prácticarnente a finales dei siglo XVIII. Con an-
biopolítica. terioridad a esa época, la prisión no era un castigo legal; se hacía
La vida nega a ser entonces, a partir dei siglo XVIII, un objeto de prisionera a la gente simplemente para retenerla antes de instruir-
poder. La vida y el cuerpo. Antes no había más que súbditos isu- les un proceso y no, salvo casos excepcionales, para castigarles. Pues
jets), sujetos (sujets) jurídicos a los que, por otra parte, se podia qui- bien, se crearon las prisiones como sistema de represión, afirmando
tar los bienes y también la vida. Ahora hay cuerpos y poblaciones. lo siguiente: la prisión será un sistema de reeducación de los crimi-
EI poder se hace materialista. Deja de ser esencialmente jurídico. nales, Después de una estancia en prisión, gracias a una domestica-
Debe tratar con cosas reales como son el cuerpo y la vida. La vida ción de tipo militar y escolar, vamos a poder transformar ai delin-
entra en eI dominio dei poder: mutación capital, una de las más im- cuente en un individuo que obedezca las leyes, Con su paso por la
portantes sin duda en la historia de las sociedades humanas; y es prisión, se buscaba la producción de individuos obedientes,
evidente que se puede ver cómo el sexo ha negado a ser, a partir de Ahora bíen, muy pronto, desde los primeros tiempos dei sistema
entonces, es decír; justamente a partir dei siglo XVIII, un elemen- de prisiones, se cayó en la cuenta de que no conducía de ninguna
to absolutamente capital, pues, en eI fondo, el sexo está colocado manera a ese resultado, sino que producía realmente un resultado
exactamente en el punto de articulación entre las disciplinas indivi- exactamente opuesto: cuanto más tiempo pasaba el individuo en
duales dei cuerpo y las regulaciones de la población. Cabe asegurar prisión, menos se reeducaba y era más delincuente. No solamente
la vigilancia de los individuos a partir dei sexo, y se puede compren- nula productividad, sino productividad negativa. En consecuencia,
der por qué en el siglo XVIII, y precisamente en los colegíos, la se- normalmente el sistema de prisiones hubiera debido desaparecer.
xualidad de los adolescentes se convirtió en un problema médico, Sin embargo ha permanecido, continúa y cuando preguntamos a la
un problema moral, casi un problema político de prímera impor- gente qué se podría instaurar en lugar de las prisíones, nadie res-
tancía, ya que a través -y bajo el pretexto de- ese control de la se- ponde.
xualidad, se puede vigilar a los colegiales, a los adolescentes a lo (Por qué siguen existiendo las prisiones a pesar de resultar con-
largo de su vida, en cada instante, incluso durante el sueüo. EI sexo traproducentes? Yo responderia: precisamente porque producen de-
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cas que funcionan sobre la base de la delincuencia y, en esta medi-
lincuentes y la delincuencia tiene cierta utilidad económico-política da, la prisión que llega a fabricar un delincuente profesional tiene
en las sociedades que conocemos. Podemos desvelar fácilmente la su utilidad y su productividad.
utilidad económico-política de la delincuencia: primero, cuantos más
delincuentes haya, más crímenes habrá, cuanto más crímenes, Un oyente: En primer lugar, me gustaría expresar el placer que
más miedo habrá en la poblacíón, y cuanto más miedo haya, más me produce escucharle, verle, releer sus libros. Todas mis pregun-
aceptable, e incluso deseable, será el sístema de control policial. La tas se centran en la crítica que Dominique" le ha hecho: si da usted
existencia de ese pequeno peligro interno permanente es una de las un paso adelante más, dejará de ser un arqueólogo, e! arqueólogo
condiciones de aceptabilidad de este sistema de control, lo que ex- dei saber, si da ese paso, caerá en el materialismo histórico. Éste es
plica por qué en los periódicos, en la radío, en la televisión, en todos el fondo de la cuestión. A continuación, me gustaría saber por qué
los países dei mundo sin excepción alguna, se dedica tanto espacio afirma usted que los que sostienen el materialismo histórico y el
a la crimínalidad, como si cada día se tratase de una novedad. Des- psicoanálisis no están seguros de sí mismos, no están seguros de la
de 1830, en todos los países de! mundo se han desarrollado campa- cientificidad de sus posiciones. Lo primero que me sorprende,
nas sobre e! tema dei crecimiento de la delincuencía, hecho que no después de haber leído acerca de la diferencia entre refoulement y
ha sido demostrado nunca; pero esta supuesta presencia, esta ame- répression." diferencia que no tenemos en nuestro idioma, es que
naza, este crecimiento de la delíncuencia, es un factor de acepta- usted comience a hablar de represión general sin distinguirla de re-
ción de los controles. [oulement . Realmente me sorprende. La segunda sorpresa es que
Sin embargo, esto no es todo. La delincuencia es útil económi- en el intento de trazar una anatomía de lo social apoyándose en la
camente. Vean la cantidad de tráficos perfectamente lucrativos e disciplina en el ejército, utilice usted la misma terminología que hoy
inscritos en la ganancia capitalista que pasan por la delincuencia: utilizan los abogados en Brasil. En el congreso de la OAB' que se ha
la prostitución, por ejemplo -todo el mundo sabe que el control desarrollado últimamente en Salvador, los abogados empleaban
de la prostitución en todos los países de Europa (no sé si esto ocu- con frecuencia las palabras «compensar» y «disciplinar» para defi-
rrirá también en Brasil) es ejercido por gente cuya profesión se lIa- nir su función jurídica. Curiosamente, usted usa los mismos térmi-
ma proxenetismo y todos ellos son ex delincuentes cuya función es nos para hablar dei poder, utiliza el mismo lenguaje jurídico. Lo
canalizar los beneficios recibidos a partir dei placer sexual hacia que le pregunto es si, por tanto, no cae en e! mismo discurso apa-
circuitos económicos tales como la hostelería, y hacia cuentas ban- rente de la sociedad capitalista, en la ilusión dei poder, discurso
carias-. La prostitución ha permitido que e! placer sexual de la que ahora comienzan a utilizar estos juristas. Así, la nueva ley de
gente lIegue a ser oneroso, y el marco en el que se desenvuelve ha las sociedades anónimas se presenta como un instrumento para
permitido derivar el beneficio dei placer sexual hacia determinados disciplinar los monopolíos, pero lo que representa realmente es un
circuitos. EI tráfico de armas, el tráfico de drogas, en síntesis toda preciado instrumento tecnológico muy avanzado que obedece a de-
una serie de tráficos que, por una razón u otra, no pueden ser efec- terminaciones independientes de la voluntad de los juristas, a sa-
tuados directa y legalmente en la socíedad, pasan por la delincuen- ber, las necesidades de reproducción dei capital. Adernás, en este
cia, que de esta forma los asegura. sentido me sorprende que, a la par que usted establece una dialécti-
A esto hemos de aüadir e! hecho de que la delincuencia sirve ca entre tecnología y disciplina, use la misma terminología. Y mi
masivamente en el siglo XIX, y continúa haciéndolo en el siglo xx, última sorpresa es que tome la población como elemento de análi-
para toda una serie de operaciones políticas, tales como abortar las
huelgas, infiltrarse en los sindicatos obreros, servir de mano de d El participante se refiere al artículo de Dominique Lecourt «Sur l'archéologie
obra y de guardia personal para los jefes de los partidos políticos, et le savoir», La Pensee, n° 152, agosto de 1970, págs. 69-87, reproducido en Lecourt
(D.), Pour une critique de í'epistemoícgie, Paris, Maspero, cal. «Théories», 1972,
incluidos los más y los menos dignos. Aquí estoy hablando más
pégs. 98-183 (trad. cast.: Para una crítica de la epistemologia, México, Sigla XXI,
concretamente de Francia, donde los partidos políticos tienen una 1973. pãgs. 97-130).
mano de obra que va desde los que pegan carteles hasta los mato- e Aparecen también en francés en el original en portugués.
nes, mano de obra que está formada por delincuentes. De este f Orden dos Advogados do Brasil: Orden de los Abogados de Brasil.
i Laguna en la transcripción de la cinta, indicada en el texto brasfleno. j Nueva laguna en la transcripción de la cinta.
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