El Autor de Efesios
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El Autor de Efesios
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No hay duda que Pablo tenía la autoridad para exponer el argumento teológico de la
nueva vida en Cristo que presenta a través de la Carta a los Efesios y para exhortar a
los creyentes a vivir de acuerdo con esa nueva vida. Él no solamente era enviado por
Dios (un apóstol de Cristo Jesús), sino que había asumido estos conceptos y el reto de
vivir conforme a la nueva vida en Jesucristo. Estaba preso, pero esto no le impedía
expresar su convicción respecto al señorío de Cristo sobre su vida. Aunque el imperio
del momento lo tenía bajo prisión, él se consideraba prisionero de Cristo Jesús para el
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Su autoridad como apóstol no dependía de sí mismo, sino de la
voluntad de Dios. En otras palabras, Pablo estaba hablando en nombre de Dios, Él lo había enviado. Era
un embajador en cadenas.
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P. ej. la inclusión de los gentiles en el pueblo de Dios. Era difícil para un judío aceptar que un gentil
formara parte del pueblo de Dios.
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P. ej. estar dispuesto a sufrir por el evangelio. Vivir de manera distinta a como vive el mundo sin
Dios.
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bien de ustedes (3:1), preso por causa del Señor (4:1) y un embajador en cadenas para
dar a conocer el misterio del evangelio (6:20).
El autor califica a los destinatarios como los santos y fieles en Cristo Jesús4 que están
en Éfeso.5 Esto no es extraño, porque Pablo frecuentemente se refería a los creyentes
como santos (comp. Romanos 1:7; 1 Corintios 1:2; Filipenses 1:1; Colosenses 1:2).
Normalmente, él usaba el término santo para referirse a un pueblo separado (dedicado)
para un oficio (servicio) específico. Se refiere a los que se identificaban como cristianos
y se dedicaban a vivir como Cristo enseñó. El segundo término, fieles, resalta una
característica de esos creyentes. Esta descripción significaba que asumían el
compromiso de seguir a Cristo, cualquiera que fuera el costo. Cuando Pablo les
escribió, estaba en la cárcel. ¿Por qué estaba preso? Porque proclamaba el evangelio;
en este caso, era el costo del discipulado. Desde el punto de vista de Pablo, ser un
creyente fiel significaba un compromiso fuerte que se debía cumplir en cualquier
circunstancia. Él era un verdadero testigo de Jesucristo.
El saludo indica que Pablo deseaba que Dios les concediera gracia y paz.6 Pablo
incluye estas dos palabras en todas sus cartas en el Nuevo Testamento. Como
expresiones de salutación, “gracia” expresa el amor constante (eterno) de Dios hacia
los seres humanos y “paz” se refería a un estado de bienestar integral que debían
alcanzar los seres humanos. Al usar estas expresiones en un saludo es como si Pablo
dijera que “Dios los bendiga siempre” y que “tengan la tranquilidad total que viene del
Señor”.
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La expresión en Cristo, se encuentra no menos de 36 veces en Efesios.
Pablo utiliza esta expresión para referirse a varios conceptos relacionados con la persona y la obra de Jesús.
Por lo general, el contexto en el cual se encuentra esta expresión, se refiere a la unión e identidad que un
creyente comparte con Cristo. La mayor parte de lo que enseña Pablo en el capítulo uno se relaciona con
esta unión con Cristo. P. ej., el propósito y la elección de Dios se llevan a cabo en Cristo (1:4, 9, 11). La
gracia y la redención se encuentran en Cristo (1:6, 7). Todas las cosas se reúnen en Cristo (1:10). Los
seres humanos esperan en Cristo, escuchan la Palabra en Cristo y por la fe reciben el sello del Espíritu en
Cristo (1 :12b, 13).
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Los manuscritos más antiguos, no incluyen la frase “en Éfeso”. Bien puede ser que ésta fue una
carta circular dirigida a los creyentes que vivían en la provincia de Asia Menor de la cual Éfeso era la
principal ciudad. Si este es el caso, la carta fue enviada a los creyentes en Éfeso y ellos debían
pasársela a otros creyentes en otras ciudades en Asia Menor.
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Normalmente los griegos utilizaban en sus cartas otra palabra más genérica que significaba:
saludos.
Si desea una información más amplia sobre este asunto, puede consultar Introducción al Nuevo
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Cuando se compara lo escrito en Efesios con otras cartas escritas por Pablo, se nota
que hay bastantes semejanzas. Así que, es mejor considerar a Pablo como el autor,
especialmente por la evidencia incluida en la carta misma. P. ej., la inclusión de su
nombre en la introducción (1:1), la mención de su nombre en la primera sección de la
carta (3:1), la mención de sí mismo como prisionero (3:1, 13; 4:1; 6:20) y como apóstol
a los gentiles (3:1-13), son evidencias internas de Pablo como autor.
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