Derrida El Animal Que Estoy Siguiendo

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Derrida el animal que estoy siguiendo

Sigo esta secuencia y en lo que me dispongo a decir, todo debería reconducir a la cuestión de lo
que -seguir-, perseguir o proseguir quiere decir, e ir tras y a la cuestión de lo que hago cuando
sigo- digo sigo si por consiguiente, yo sigo esta secuencia, entonces voy desde los fines del hombre
y esto es desde los confines del hombre hasta el paso de las fronteras entre el hombre y el animal.

Hace tanto tiempo, por consiguiente, desde hace todo ese tiempo y para lo que queda por venir,
estaríamos en el momento decisivo de acudir y entregarnos a la promesa de ese animal que
adolece de sí mismo.

Tengo dificultad en reprimir un movimiento de pudor. (Lo propio del hombre, el vestido)
dificultad en silenciar en mí una protesta contra la indecencia.

Animalsonancia: lo malsonante de cierto animal desnudo delante de otro animal, la experiencia


originaria, única e incomparable de lo malsonante que resultaría aparecer realmente desnudo,
ante la mirada insistente de animal, una mirada benevolente o sin piedad, asombrada o
agradecida. Una mirada de vidente.

Sentir vergüenza de sentir vergüenza por estar desnudo.

¿vergüenza de qué y desnudo ante quién? Vergüenza de estar desnudo como un animal.

Lo propio de los animales y lo que distingue en última instancia del hombre, estar desnudo sin
saberlo. Por consiguiente, no estar desnudos, no tener el conocimiento de su desnudez, la
conciencia del bien y del mal, en definitiva.

No estarían desnudos porque están desnudos. En principio a excepción del hombre, ningún animal

Ha pensado nunca en vestirse. El vestido sería lo propio del hombre, uno de los propios del
hombre.

El animal, por consiguiente, no está desnudo porque está desnudo. No tiene el sentimiento de su
desnudez. No hay desnudez en la naturaleza. No hay más que el sentimiento, el afecto, la
experiencia de existir en la desnudez.

Porque está desnudo sin existir en la desnudez, el animal no se siente ni se ve desnudo. Al menos
así se piensa. Con el hombre ocurriría lo contrario y el vestido responde a una técnica.
Tendríamos, pues, que pensar juntos, como un mismo tema el pudor y la técnica.

El hombre sería el único en haberse inventado un vestido para esconder su sexo. Sólo sería
hombre al tornarse capaz de desnudez, esto es, púdico, al saberse púdico porque ya no está
desnudo. Y saberse púdico sería saberse púdico. Suele creerse que el animal, desnudo porque no
tiene conciencia de estar desnudo, seguiría siendo ajeno tanto al pudor como al impudor. Y al
saber de sí que se inicia con ello.
¿ Qué es el pudor si no se puede ser púdico más que permaneciendo impúdico y recíprocamente?
P´g- 19

La literalidad cuenta y también la cuestión animal. La cuestión de la respuesta animal pasa a


menudo por lo que está en juego en una letra, por la literalidad de una palabra, a veces de lo que
la palabra quiere decir literalmente.

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