Cervantes-GUÍA DE LECTURA DE EL COLOQUIO DE LOS PERROS
Cervantes-GUÍA DE LECTURA DE EL COLOQUIO DE LOS PERROS
Cervantes-GUÍA DE LECTURA DE EL COLOQUIO DE LOS PERROS
[Para contestar adecuadamente a las preguntas de este trabajo, deberás leer previamente con
atención “El coloquio de los perros”, una de las Novelas ejemplares de Miguel de Cervantes. Texto
disponible en: http://www.avempace.com/file_download/3445/Cervantes-El+coloquio+de+los+perros.pdf.
También deberás leer los comentarios incluidos en este documento. Buen trayecto.]
http://www.avempace.com/personal/jose-antonio-garcia-fernandez
[Es también importante que lees el documento “Cervantes-Su vida y su obra”, disponible en
http://www.avempace.com/file_download/4015/Cervantes-SU+VIDA+Y+SU+OBRA.pdf]
1
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
EL PENSAMIENTO DE CERVANTES
LA NOVELA CERVANTINA
LA INFLUENCIA DE CERVANTES
Todos estos apartados están disponibles en el documento “Cervantes-Su vida y su obra”, disponible en
http://www.avempace.com/file_download/4015/Cervantes-SU+VIDA+Y+SU+OBRA.pdf.
“El coloquio de los perros” pertenece, según Agustín G. de Amezúa, estudioso de Cervantes, a la tercera
época de las Novelas ejemplares, lo mismo que “El licenciado Vidriera” y “Rinconete y Cortadillo”. Es uno
de los doce relatos incluidos en la colección de novelitas de intención didáctica que don Miguel publicó en
1613.
2
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
censura, el cual fue aprobado sin reconvenciones, convencidos como estaban los censores de que las
historias cervantinas eran realmente ejemplares. Amezúa la considera obra de la tercera época, es decir,
más próxima a 1612 que a 1605.
Tampoco sabemos con seguridad si el orden en que aparecieron las doce novelas –La gitanilla, El
amante liberal, Rinconete y Cortadillo, La española inglesa, El licenciado Vidriera, La fuerza de la sangre,
El celoso extremeño, La ilustre fregona, Las dos doncellas, La señora Cornelia, El casamiento engañoso y
El coloquio de los perros- se debe a Cervantes o fue elección del impresor Juan de la Cuesta.
Lo que sí es seguro es que El coloquio de los perros es continuación de otra novela ejemplar
anterior, El casamiento engañoso, que Amezúa sitúa en la segunda época de composición. O sea, que El
casamiento… fue escrito antes que El coloquio… y sirve de marco a aquel.
“—No sé qué responderos —dijo Peralta—, si no es traeros a la memoria dos versos de Petrarca que
dicen:
Ché, qui prende dicleto di far fiode;
Non si de lamentar si altri l’ingana
Que responden en nuestro castellano: «Que el que tiene costumbre y gusto de engañar a otro no se
debe quejar cuando es engañado”.
Campuzano deja de lado su propia historia y se presenta como el transcriptor (como Cide Hamete
Benengelli en el Quijote) de otra nueva, El coloquio de los perros, de manera que ambas novelas forman
una unidad, y eso ha llevado a algunos críticos a decir que las Novelas ejemplares no son realmente doce,
sino once. Así acaba El casamiento engañoso, dando paso a la nueva novela:
“—Como vuesa merced —replicó el licenciado— no se canse más en persuadirme que oyó hablar a
los perros, de muy buena gana oiré ese coloquio, que por ser escrito y notado del buen ingenio del señor
alférez, ya le juzgo por bueno.
—Pues hay en esto otra cosa —dijo el alférez—: que, como yo estaba tan atento y tenía delicado el
juicio, delicada, sotil y desocupada la memoria (merced a las muchas pasas y almendras que había comido),
todo lo tomé de coro [=de memoria]; y, casi por las mismas palabras que había oído, lo escribí otro día, sin
buscar colores [=figuras] retóricas para adornarlo, ni qué añadir ni quitar para hacerle gustoso. No fue una
noche sola la plática, que fueron dos consecutivamente, aunque yo no tengo escrita más de una, que es la
vida de Berganza; y la del compañero Cipión pienso escribir (que fue la que se contó la noche segunda)
3
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
Igual que en Rinconete y Cortadillo, el final de la obra vuelve a ser abierto, como gustaba a
Cervantes, partidario de una nueva teoría narrativa y en dominio pleno, en sus años últimos, del oficio de
escritor. El final abierto permite al lector dar rienda suelta a su imaginación y a su interpretación, creando
una lectura personal.
El can Berganza, como ocurría con los protagonistas de la novela picaresca —género que, en aquel
tiempo (siglos XVI y XVII), tuvo gran éxito editorial—, había tenido varios amos, todos de baja estofa: un
carnicero, unos pastores, un mercader, un alguacil, un tambor, la bruja Cañizares, unos gitanos, un
morisco, un poeta, un autor de comedias.
Con los perros como personajes, hace Cervantes crítica social, sátira de la raza humana, tan
malvada que a su lado incluso el pérfido lobo, famoso en las fábulas por su pésima reputación, parece
inocente. La vida de Berganza se nos cuenta desde su nacimiento y el relato es, como en el Lazarillo, una
novela de aprendizaje, donde el perro constata la miseria, la barbarie y la falsedad de los seres humanos.
Hay una visión pesimista de la sociedad, pero también alguna esperanza, pues Berganza, hastiado de los
hombres, se retira del mundo y se refugia en el hospital donde conoce a Mahudes, quien se dedica a
cuidar a los enfermos y a practicar la caridad. Él es el único amo a quien merece la pena servir.
4
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
Esther Karina Feria Zitelli, en “El coloquio de los perros: fusión de géneros” (disponible en
http://www.avempace.com/file_download/3446/Cervantes-El+coloquio+de+los+perros-
Esther+Karina+Feria.pdf ), habla de la intención didáctica de la novela y del uso novedoso del diálogo que
se hace en ella, al servicio de la sátira. Habla también de los modelos previos que inspiraron a Cervantes,
como El asno de oro, de Apuleyo (123-180), novela traducida al castellano en 1513, donde un personaje
llamado Lucio, aristócrata romano, es convertido en burro y viene a ser testigo y víctima de las miserias de
los desposeídos.
http://www.avempace.com/file_download/3448/Cervantes-
El+coloquio+de+los+perros-Giovanni+Previtali.pdf ) , dice que la vida de Berganza
es, en cierto modo, trasunto de las peripecias biográficas sufridas por el propio
autor: una “vida de perros”.
FRAGMENTOS INTERESANTES
Nacimiento de Berganza
“BERGANZA: Me parece que la primera vez que vi el sol fue en Sevilla y en su matadero, que está fuera de la
Puerta de la Carne; por lo que cabe imaginar, si no fuese por lo que después te diré, que mis padres fueron
1
alanos , de aquellos que crían los matarifes o carniceros. El primero a quien tuve por amo fue un tal Nicolás el
2
Romo , mozo robusto, fuerte y colérico, como lo son todos aquellos que ejercitan la carnicería. Este tal Nicolás
me enseñaba a mí y a otros cachorros a que, en compañía de alanos viejos, arremetiésemos a los toros y les
3
hiciésemos presa de las orejas. Con mucha facilidad salí un águila en esto.
CIPIÓN: No me maravillo, Berganza. Como hacer el mal forma parte de la condición humana, es fácil de
aprender.
BERGANZA: ¿Qué puedo decirte, hermano Cipión, de lo que vi en aquel matadero y de las cosas exorbitantes
que en él pasan? Primero, has de presuponer que todos cuantos en él trabajan, desde el menor hasta el mayor,
4
son gente desalmada, de conciencia relajada, que no teme al rey ni a su justicia; los más, amancebados ; son
aves de rapiña carniceras: se mantienen ellos y sus amigas de lo que hurtan. Todas las mañanas que son días de
carne, antes que amanezca, están en el matadero gran cantidad de mujercillas y muchachos, todos con talegas,
5
que, llegando vacías, vuelven llenas de pedazos de carne, y las criadas con criadillas y lomos medio enteros. No
6
hay res alguna que se mate de la que esta gente no se lleve diezmos y primicias de lo más sabroso y bien
7
parado. Y, como en Sevilla no hay obligado de la carne, cada uno puede traer la que quisiere; y la que primero se
mata, o es la mejor, o la más barata, y de este modo hay siempre mucha abundancia. Los dueños se
encomiendan a esta buena gente que he dicho, no para que no les hurten, lo que es imposible, sino para que se
1
Alano: Perro de presa, corpulento y fuerte.
2
Romo: Chato
3
Salir hecho un águila: Destacar.
4
Amancebados: Que viven emparejados fuera del matrimonio.
5
Criadillas: Testículos.
6
Diezmos: La décima parte de algo. Primicias: Los primeros frutos. Tanto los diezmos como las primicias eran formas de tributación
habituales.
7
Obligado: Persona responsable.
5
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
moderen en las tajadas que hacen en las reses muertas, que las mondan y podan como si fuesen sauces o parras.
Pero ninguna cosa me admiraba más ni me parecía peor que el ver que estos carniceros con la misma facilidad
matan a un hombre que a una vaca; por un quítame allá esas pajas, cada dos por tres meten un cuchillo de
cachas amarillas por la barriga de una persona, como si se lo clavaran a un toro en el cogote. Rara vez pasa un día
sin pendencias, heridas o muertes. Todos presumen de valientes, y se comportan como rufianes. No hay ninguno
8
que no tenga su ángel de guarda en la plaza de San Francisco , comprado con lomos y lenguas de vaca.”
(CERVANTES SAAVEDRA, Miguel de, Novelas ejemplares. Selección, adaptación, notas y apéndice de Vicente
Muñoz Puelles. 2ª ed. Madrid, Oxford, 2011, pp. 166-170)
1. También en “Rinconete y Cortadillo” se sitúa la acción en Sevilla. ¿Cómo era el ambiente de la ciudad,
a juzgar por lo que leemos en ambas novelas ejemplares? ¿Qué recuerdo guardaba Cervantes de la
metrópoli andaluza?
2. ¿Qué parecido podemos establecer entre “El coloquio de los perros” y la novela picaresca a partir de
este fragmento de la novela?
3. ¿Por qué decimos que en “El coloquio de los perros” hay pesimismo?
8
En la plaza de San Francisco de Sevilla estaban las instituciones donde se administraba justicia, el Cabildo y la Audiencia. Berganza
sugiere que se daba protección a los rufianes, a cambio de carnes exquisitas.
9
Barcino: De pelo blanco y pardo, y a veces rojizo.
10
Berganza se refiere a las novelas pastoriles, género importado de Italia y muy imitado en España, en el que también incurrió
Miguel de Cervantes con su Galatea (1585).
11
Zampoña: Instrumento rústico, compuesto de muchas flautas. Rabel: Instrumento musical pastoril, semejante al laúd,
compuesto de tres cuerdas solas, que se tocan con arco. Churumbela: Instrumento de viento hecho de madera, parecido a la
trompeta.
12
Anfriso y Belisarda son personajes de la novela pastoril Arcadia (1598), de Lope de Vega (1562-1635).
13
Arcadia es una región de Grecia, en el Peloponeso, que sirvió como escenario ideal a la mayor parte de la literatura pastoril.
14
En la mitología griega, Aurora era la diosa del amanecer, y Tetis la del mar.
6
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
libros son cosas soñadas y bien escritas para entretenimiento de los ociosos, y no verdad alguna; que, de serlo,
entre mis pastores habría alguna reliquia de aquella felicísima vida, y de aquellos amenos prados, espaciosas
selvas, sagrados montes, hermosos jardines, arroyos claros y cristalinas fuentes, y de aquellos requiebros tan
honestos como bien declamados, y de aquel desmayarse aquí el pastor, allí la pastora.
CIPIÓN: Basta, Berganza; vuelve a tu senda y camina.
BERGANZA: Te lo agradezco, Cipión amigo; porque, si no me avisaras, de tal manera se me va calentando la
boca, que no pararía hasta pintarte un libro entero de esos que me tenían engañado. Digo, pues, que yo me
hallaba bien con el oficio de guardar ganado, por parecerme que comía el pan ganado con mi sudor y trabajo, y
que la ociosidad, raíz y madre de todos los vicios, no tenía que ver conmigo, a causa de que, si de día
holgazaneaba, de noche no dormía, atento a los avisos de la llegada de los lobos y a sus asaltos. Apenas había
oído a los pastores gritar: «¡Al lobo, Barcino!», cuando acudía, antes que los otros perros, a la parte donde me
señalaban que estaba el lobo: corría los valles, escudriñaba los montes, desentrañaba las selvas, saltaba
barrancos, cruzaba caminos, y a la mañana volvía al hato, sin haber hallado lobo ni rastro de él, sin aliento,
cansado, hecho pedazos y con los pies abiertos por las ramas quebradas y puntiagudas de los árboles; y hallaba
en el hato, o ya una oveja muerta, o un carnero degollado y medio comido por el lobo.
»Me desesperaba ver hasta qué punto servía de poco mi mucho cuidado y diligencia. Venía el señor del
ganado; salían los pastores a recibirlo con las pieles de la res muerta; culpaba a los pastores por negligentes, y
mandaba castigar a los perros por perezosos. Llovían palos sobre nosotros, y sobre ellos represiones; y así,
viéndome un día castigado sin culpa, y que mi cuidado, ligereza y bravura no eran de provecho para coger el
lobo, determiné cambiar de estilo, no desviándome para buscarlo, como tenía por costumbre, lejos del rebaño,
sino permanecer con él. Si el lobo llegaba, allí me encontraría.
»Cada semana daban la voz de alarma, y en una oscurísima noche pude ver a los lobos, de los que era
imposible que el ganado se guardase. Me agaché detrás de una mata, pasaron los perros, mis compañeros,
adelante, y desde allí observé, y vi que dos pastores asían un carnero de los mejores del cercado, y lo mataban de
manera que por la mañana pareció que el lobo había sido su verdugo. Me asombré, quedé admirado al ver que
los pastores eran los lobos y que despedazaban el ganado los mismos que debían guardarlo. Al punto,
informaban a su amo del ataque del lobo, le daban el pellejo y parte de la carne, y se comían ellos lo más y lo
mejor. Volvía a reñirlos el señor, y volvía también el castigo de los perros. No había lobos, menguaba el rebaño.
Me habría gustado contárselo a alguien, pero me hallaba mudo. Todo lo cual me llenaba de admiración y de
congoja. "¡Válgame Dios!, —decía para mí—, ¿quién podrá remediar esta maldad? ¿Quién podrá explicar que la
defensa ofende, que los centinelas duermen, que la confianza roba y que quien os guarda os mata?".
CIPIÓN: Y decías muy bien, Berganza, porque no hay mayor ni más sutil ladrón que el que está en casa, y así,
mueren muchos más entre los confiados que entre los recatados. Pero el daño está en que es imposible que las
gentes puedan pasarlo bien si no se fía y confía. Mas dejémoslo aquí, que no quiero que parezcamos
predicadores. Pasa adelante.” (pp. 174-180)
15
«Cata el lobo do va, Juanica» es un cantar popular del siglo XVI, cuya letra y música se han conservado.
16
Abarcas: Sandalias rústicas de cuero.
17
Nombres característicos de la novela pastoril.
7
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
5. Explica qué son la novela pastoril y la Arcadia y di si la novela pastoril es un género realista o idealista
y por qué.
del pobre, por bueno que sea, ha sido admitido, ni el pobre humilde ha de tener la
presunción de aconsejar a los grandes y a los que piensan que lo saben todo. La
sabiduría en el pobre está ensombrecida; que la necesidad y la miseria son las sombras
y nubes que la oscurecen y, si acaso se descubre, la consideran necedad y la tratan con
menosprecio.
BERGANZA: Tienes razón, y de aquí en adelante seguiré tus consejos. Entré
asimismo la otra noche en casa de una señora principal, que tenía en los brazos una
perrilla de esas que llaman de falda, tan pequeña que podía esconderla en el seno; la
cual, cuando me vio, saltó de los brazos de su señora y arremetió contra mí ladrando, y
con tal arrojo que no paró hasta morderme una pierna. Volví a mirarla con una mezcla
de respeto y fastidio, y dije para mí: «Si yo te encontrara en la calle, animalejo ruin, no
haría caso de ti o te haría pedazos entre los dientes». Me di cuenta de que hasta los cobardes y de poco ánimo
son atrevidos e insolentes cuando son favorecidos, y se adelantan a ofender a los que valen más que ellos.
CIPIÓN: Una muestra de esa verdad que dices nos la dan algunos hombrecillos, que a la sombra de sus amos
se atreven a ser insolentes; y si acaso la muerte u otro accidente de fortuna derriba el árbol donde se arriman,
luego se descubre su poco valor; porque, en efecto, sus virtudes solo valen lo que sus dueños y valedores han
estimado. La virtud y el buen entendimiento siempre es una y siempre es uno: desnudo o vestido, solo o
acompañado. Bien es verdad que puede cambiar en la estimación de las gentes, pero no en la realidad verdadera
de lo que merece y vale. Y, con esto, pongamos fin a esta plática, que la luz que entra por esos resquicios
muestra que el día avanza con paso firme. Si este gran beneficio del habla no nos ha abandonado, esta noche
que viene tendré la oportunidad de contarte mi vida.
BERGANZA: Que así sea, y acuérdate de acudir a este mismo sitio.” (pp. 266-269)
11. ¿En qué sentido decimos que “El casamiento engañoso” sirve de marco a “El coloquio de los perros”?
12. ¿Qué parecido hay entre “El coloquio de los perros” y obras de la tradición satírica como las fábulas y
El asno de oro, de Apuleyo?
8
Prof. José Antonio García Fernández DPTO. LENGUA Y LITERATURA- IES Avempace
[email protected] C/ Islas Canarias, 5 - 50015 ZARAGOZA - Telf.: 976 5186 66 - Fax: 976 73 01 69
BIBLIOGRAFÍA
CARRASCO, Félix: “El coloquio de los perros: veridicción y modelo narrativo”, disponible en
http://www.avempace.com/file_download/3447/Cervantes-El+coloquio+de+los+perros-F%C3%A9lix+Carrasco.pdf.
CERVANTES SAAVEDRA, Miguel de, Novelas ejemplares. Selección, adaptación, notas y apéndice de
Vicente Muñoz Puelles. 2ª ed. Madrid, Oxford, 2011.
Cortadillo. El casamiento engañoso. El coloquio de los perros. Ed. Antonio Rey Hazas y Florencio Sevilla
Arroyo. Madrid, Espasa-Calpe, 1997. Col. Austral, 402.
CERVANTES SAAVEDRA, Miguel de, “El coloquio de los perros”, texto completo de la novela,
disponible en http://www.avempace.com/file_download/3445/Cervantes-El+coloquio+de+los+perros.pdf.
FERIA ZITELLI, Esther Karina, “El coloquio de los perros: fusión de géneros”, disponible en
http://www.avempace.com/file_download/3446/Cervantes-El+coloquio+de+los+perros-Esther+Karina+Feria.pdf.