Liturgias de Las Horas, ES
Liturgias de Las Horas, ES
Liturgias de Las Horas, ES
Tiempo de Adviento
Hasta el 16 de Diciembre
Vísperas
Oficio de Lectura
Laudes
Te esperamos anhelantes
y sabemos que vendrás;
deseamos ver tu rostro
y que vengas a reinar.
Consolaos y alegraos,
desterrados de Sión,
que ya viene, ya está cerca,
él es nuestra salvación.
Vísperas
Alegría de nieve
Alegría de nieve
por los caminos.
Todo espera la gracia
del Bien Nacido.
Oicio de Lectura
Oh Emmanuel,
nuestro rey, salvador de las naciones,
esperanza de los pueblos,
ven a libertarnos, Señor, no tardes ya.
Ven pronto, Señor. ¡Ven, Salvador!
Navidad
Hasta la solemnidad de la
Epifanía
Vísperas
Oficio de Lectura
Laudes
Anúnciale el ángel
la nueva al pastor,
que niño ha nacido
nuestro Salvador.
Adoran pastores
en sombras al Sol,
que niño ha nacido,
de una Virgen, Dios.
Haciéndose hombre,
al hombre salvó.
Un niño ha nacido,
ha nacido Dios. Amén.
Vísperas
Oficio de lectura
No la debemos dormir
No la debemos dormir
la noche santa,
no la debemos dormir.
No la debemos dormir
la noche santa,
no la debemos dormir. Amén.
Laudes
La Sagrada Familia
Laudes
Vísperas
Vísperas
Norabuena vengáis al mundo
Niño de jazmines,
rosas y azucenas,
niño de la niña
después del más bella,
que tan buenos años,
que tan buenas nuevas,
que tan buenos días
ha dado a la tierra;
parabién merece,
parabienes tenga,
aunque tantos bienes
como Dios posea.
Mientras os tardasteis,
dulce gloria nuestra,
estábamos todos
llenos de mil penas;
más, ya que vinisteis,
y a la tierra alegra
ver que su esperanza
cumplida en vos sea,
digan los pastores,
respondan las sierras,
pues hombre os adoran
y Dios os contemplan:
Vísperas
El niño Jesús
lloraba, lloraba,
lo han circuncidado
y su sangre mana.
Canciones del cielo
María le canta
y, mientras lo arrulla,
lo baña en sus lágrimas.
Niñito, no llores.
Madre, el llanto acalla,
que por esta sangre
llega la esperanza,
que por este llanto
comienza la gracia,
que por esta muerte
renacen las almas.
Laudes
Eres niño y has amor
Pues en tu natividad
te quema la caridad,
en tu varonil edad,
¿quién sufrirá su calor?
Vísperas
El mal se destierra
El mal se destierra,
ya vino el consuelo:
Dios está en la tierra,
ya la tierra es cielo.
Ya el mundo es trasunto
del eterno bien,
pues está en Belén
todo el cielo junto.
Ya muere el recelo
y el llanto se cierra:
Dios está en la tierra,
ya la tierra es cielo.
Ya el hombre no tiene
sueños de grandeza,
porque el Dios que viene
viene en la pobreza.
Ya nadie se encierra
en su propio miedo:
Dios está en la tierra,
ya la tierra es cielo. Amén.
Laudes
Vísperas
Oficio de lectura
Virgen y Madre,
hija del Padre,
Santa María.
Amor maternal
del Cristo total,
Santa María. Amén.
Desde la solemnidad de la
Epifanía
Vísperas
Laudes
Vísperas
Oficio de lectura
Tiempo de Cuaresma
Vísperas
Entonces proclamaremos:
"¡Cantadle con alegría!
¡El nombre de Dios es grande;
su caridad, infinita!
Oficio de Lectura
La Cuaresma es combate;
las armas: oración,
limosnas y vigilias
por el Reino de Dios.
Laudes
Éste es el día del Señor
Hora intermedia
Miércoles de Ceniza
Vísperas
Victoria, Tú reinarás
Victoria, tú reinarás.
¡Oh Cruz, tú nos salvarás!
Laudes
Jesús de María,
Cordero Santo,
pues miro vuestra sangre,
mirad mi llanto.
Hora Intermedia
Vísperas
Vísperas
Pange lingua
Viernes Santo
Laudes
¡Oh Cruz fiel, árbol único en nobleza!
Vísperas
Pascua sagrada,
¡oh noche bautismal!
¿Cómo te encontraremos
al declinar el día,
si tu camino no es nuestro camino?
Detente con nosotros;
la mesa está servida,
caliente el pan y envejecido el vino.
Gallos vigilantes
que la noche alertan.
Quien negó tres veces
otras tres confiesa,
y pregona el llanto
lo que el miedo niega.
Muerto le bajaban
a la tumba nueva.
Nunca tan adentro
tuvo al sol la tierra.
Daba el monte gritos,
piedra contra piedra.
Oficio de lectura
¡Cristo ha resucitado!
¡Cristo ha resucitado!
¡Resucitemos con él!
¡Aleluya, aleluya!
¡Cristo ha resucitado!
¡Resucitemos con él!
¡Aleluya, aleluya! Amén.
La bella flor
Laudes
¡Resucitó de veras
mi amor y mi esperanza!
Venid a Galilea,
allí el Señor aguarda;
allí veréis los suyos
la gloria de la Pascua.
Cristo,
alegría del mundo,
resplandor de la gloria del Padre.
¡Bendita la mañana
que anuncia tu esplendor al universo!
En el día primero,
tu resurrección alegraba
el corazón del Padre.
En el día primero,
vió que todas las cosas eran buenas
porque participaban de tu gloria.
La mañana celebra
tu resurrección y se alegra
con claridad de Pascua.
Se levanta la tierra
como un joven discípulo en tu busca,
sabiendo que el sepulcro está vacío.
En la clara mañana,
tu sagrada luz se difunde
como una gracia nueva.
Que nosotros vivamos
como hijos de luz y no pequemos
contra la claridad de tu presencia.
Vísperas
El gozo es mi testigo.
La paz, mi presencia viva,
que, al irme, se va conmigo
la cautividad cautiva.
El cielo ha comenzado.
Vosotros sois mi cosecha,
El padre ya os ha sentado
conmigo, a su derecha.
Después de la solemnidad de la
Ascensión del Señor
Vísperas
Ven, Espíritu divino
Oficio de Lectura
¡Oh llama de amor viva!
Laudes
Esta es la fuerza
que pone en pie a la Iglesia
en medio de las plazas
y levanta testigos en el pueblo,
para hablar con palabras como espadas
delante de los jueces.
Llama profunda,
que escrutas e iluminas
el corazón del hombre:
restablece la fe con tu noticia,
y el amor ponga en vela la esperanza,
hasta que el Señor vuelva.
Tiempo Ordinario
La Santísima Trinidad
Vísperas
Oficio de Lectura
Laudes
No es soledad, es compañía.
es un hogar tu vida eterna,
es el amor que se desborda
de un mar inmenso sin riberas.
Corpus Christi
Vísperas
Se entregó a nosotros,
se nos dió naciendo
de una casta Virgen;
y, acabado el tiempo,
tras haber sembrado
la palabra al pueblo,
coronó su obra
con prodigio excelso.
Fue en la última cena
-ágape fraterno-,
tras comer la Pascua
según mandamiento,
con sus propias manos
repartió su cuerpo,
lo entregó a los Doce
para su alimento.
La palabra es carne
y hace carne y cuerpo
con palabra suya
lo que fue pan nuestro.
Hace sangre el vino,
y, aunque no entendemos,
basta fe, si existe
corazón sincero.
Adorad postrados
este Sacramento.
Cesa el viejo rito;
se establece el nuevo.
Dudan los sentidos
y el entendimiento:
que la fe no supla
con asentimiento.
Oficio de Lectura
Laudes
Vísperas
Mi Cristo
Mi Cristo, tú no tienes
la lóbrega mirada de la muerte.
Tus ojos no se cierran:
son agua limpia donde puedo verme.
Mi Cristo, tú no puedes
cicatrizar la llaga del costado:
un corazón tras ella
noches y días me estará esperando.
Mi Cristo, tú conoces
la intimidad oculta de mi vida.
Tú sabes mis secretos:
te los voy confesando día a día.
Mi Cristo, tú aleteas
con los brazos unidos al madero.
¡Oh valor que convida
a levantarse puro sobre el suelo!
Mi Cristo, tú sonríes
cuando te hieren, sordas, las espinas.
Si mi cabeza hierve,
haz, Señor, que te mire y te sonría.
Oficio de Lectura
Laudes
Asomad el corazón,
Cristo, a esa dulce ventana,
oiréis de mi voz humana
una divina canción.
Vísperas
Laudes
Oficio de lectura
Te Deum
A Tí te ensalza
el glorioso coro de los apóstoles,
la multitud admirable de los profetas,
el blanco ejército de los mártires.
A Tí la Iglesia santa,
extendida por toda la tierra,
te aclama:
Te rogamos, pues,
que vengas en ayuda de tus siervos,
a quienes redimiste con tu preciosa sangre.
Sé su pastor
y ensálzalo eternamente.
Hora intermedia
Tu poder multiplica
la eficacia del hombre,
y crece cada día, entre sus manos,
la obra de tus manos.
Hora de gracia,
en que Dios da su paz a la tierra
por la sangre de Cristo.
Completas
Te ofrecemos, humildemente,
dolor, trabajo y alegría;
nuestra plegaria balbuciente:
"Gracias, Señor, por este día".
De la vida en la arena
De la vida en la arena
me llevas de la mano
al puerto más cercano,
al agua más serena.
El corazón se llena,
Señor, de tu ternura;
y es la noche más pura
y la ruta más bella
porque tú estás en ella,
sea clara u oscura.
La noche misteriosa
acerca a lo escondido;
el sueño es el olvido
donde la paz se posa.
Y esa paz es la rosa
de los vientos. Velero,
inquieto marinero,
ya mi timón preparo
-tú el mar y cielo claro-
hacia el alba que espero.
Como el niño
que sabe que alguien vela
su sueño de inocencia y esperanza,
así descansará mi alma segura,
sabiendo que eres tú
quien nos aguarda.
Tiempo Ordinario
Laudes
Es domingo; la alegría
del mensaje de la Pascua
es la noticia que llega
siempre y que nunca se gasta.
Es domingo; la pureza
no solo la tierra baña
que ha penetrado en la vida
por las ventanas del alma.
Es domingo; la presencia
de Cristo llena la casa:
la Iglesia, misterio y fiesta,
por El y en El convocada.
Es domingo; de su hoguera
brilla toda la semana
y vence oscuras tinieblas
en jornadas de esperanza.
Rezamos, te alabamos,
porque existes, avisas;
porque anoche en el aire
tus astros se movían.
Así: te necesito
Así: te necesito
de carne y hueso.
Misioneros de la alegría,
de la esperanza y del amor,
mensajeros del Evangelio,
somos testigos del Señor.
Llévame en tu compañía,
donde tu vayas, Jesús,
porque bien sé que eres tú
la vida del alma mía;
si tú vida no me das,
yo sé que vivir no puedo,
ni si yo sin ti me quedo,
ni si tú sin mí te vas.
Padre nuestro,
padre de todos,
líbrame del orgullo
de estar solo.
No vengo a la soledad
cuando vengo a la oración,
pues sé que, estando contigo,
con mis hermanos estoy;
y sé, estando con ellos,
tú estás en medio, Señor.
No he venido a refugiarme
dentro de tu torreón,
como quien huye a un exilio
de aristocracia interior.
Pues vine huyendo del ruido,
pero de los hombres no.
Padre nuestro,
que en los cielos estás, haz a los hombres
iguales: que ninguno se avergüence
de los demás; que todos al que gime
den consuelo; que todos, al que sufre
del hambre la tortura, le regalen
en rica mesa de manteles blancos
con blanco pan y generoso vino;
que no luchen jamás; que nunca emerjan,
entre las áureas mieses de la historia,
sangrientas amapolas, las batallas.
Peldaños de eternidad
me ofrece el tiempo en su huída,
sí, ascendiendo paso a paso,
lleno mis manos vacías.
¡Nacidos de la luz!
Hora intermedia
A nuestros corazones
A nuestros corazones
la hora del Espíritu ha llegado,
la hora de los dones
y del apostolado:
lenguas de fuego y viento huracanado.
Oh Espíritu, desciende,
orando está la Iglesia que te espera;
visítanos y enciende,
como la vez primera,
los corazones en la misma hoguera.
La fuerza y el consuelo,
el río de la gracia y de la vida
derrama desde el cielo;
la tierra envejecida
renovará su faz reverdecida.
Nada te turbe
Nada te turbe,
nada te espante,
todo se pasa,
Dios no se muda;
la paciencia
todo lo alcanza;
quien a Dios tiene
nada le falta:
sólo Dios basta.
Tarea y aventura:
entregarme del todo,
ofrecer lo que llevo,
gozo y misericordia.
Aceite derramado
para que el carro ruede
sin quejas egoístas,
chirriando desajustes.
Soñar, amar, servir,
y esperar que me llames,
tú, Señor, que me miras,
tu que sabes mi nombre.
Ando mi camino
El tiempo se recoge;
desarrolla lo eterna sus entrañas;
se lavan los cuidados y congojas
en las aguas inmobles,
en los inmobles álamos,
en las torres pintadas en el cielo,
mar de altos mundos.
El reposa en la hermosura
del corazón de Dios, que así nos abre
tesoros de su gloria.
Nada deseo,
mi voluntad descansa,
mi voluntad reclina
de Dios en el regazo su cabeza
y duerme y sueña...;
sueña, en descanso,
toda aquesta visión de esta hermosura.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
por los siglos de los siglos. Amén.
Vísperas
Hora de la tarde,
fin de las labores.
Amo de las viñas,
paga los trabajos
de tus viñadores.
Al romper el día,
nos apalabraste.
Cuidamos tu viña
del alba a la tarde.
Ahora que nos pagas,
nos lo das de balde,
que a jornal de gloria
no hay trabajo grande.
Das al vespertino
lo que al mañanero.
Son tuyas las horas
y tuyo el viñedo.
A lo que sembramos
dale crecimiento.
Tú que eres la viña,
cuida los sarmientos.
Amo, Señor, tus sendas
La noche entera
la pasamos queriendo
mover la piedra.
No supieron contarlo
los centinelas:
nadie supo la hora
ni la manera.
Antes del día,
se cubrieron de gloria
tus cinco heridas.
La noche no interrumpe
tu historia con el hombre.
La noche es tiempo
de salvación.
La noche es tiempo
de salvación.
La noche es tiempo
de salvación.
La noche es tiempo
de salvación.
De noche, por tres veces, oyó Samuel su nombre;
de noche eran los sueños tu lengua más profunda.
La noche es tiempo
de salvación.
La noche es tiempo
de salvación.
La noche es tiempo
de salvación.
La noche es tiempo
de salvación. Amén.
Te llamaré
Padre, porque
la palabra me sabe a más amor.
Tuyo me sé,
pues me miré
en mi carne prendido en tu fulgor.
Me has de ayudar
a caminar,
sin deshojar mi rosa de esplendor.
Por cuanto soy
gracias te doy:
por el milagro de vivir.
Y por el ver
la tarde arder,
por el encantamiento de existir.
Y para ir,
Padre, hacia ti,
dame tu mano suave y tu amistad.
Pues te diré:
sólo no sé
ir rectamente hacia tu claridad.
Tras el vivir,
dame el dormir
con los que aquí anudaste a mi querer.
Dame, Señor,
hondo soñar.
¡Hogar dentro de ti nos has de hacer! Amén.
Acuérdate de Jesucristo
Acuérdate de Jesucristo,
resucitado de entre los muertos.
El es nuestra salvación,
nuestra gloria para siempre.
a través de la nada,
van mis caminos
hacia el dolor más alto,
pidiendo asilo.
La espuma me sostiene,
y el verde frío
de las olas me lleva
pidiendo asilo.
Ignorando mi vida
Ignorando mi vida,
golpeado por la luz de las estrellas,
como un ciego que extiende,
al caminar, las manos en la sombra,
todo yo, Cristo mío,
todo mi corazón, sin mengua, entero,
virginal y encendido, se reclina
en la futura vida, como el árbol
en la savia se apoya, que le nutre
y le enflora y verdea.
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y dijo Dios: "¡Que existan los océanos,
y emerjan los cimientos de la tierra!"
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya!
Y vio el Señor
que las cosas eran buenas.
¡Aleluya! Amén.
Atardece, anochece, el alma cesa
25 de Enero: La conversión de
San Pablo
Oficio de Lectura
Si derribado caíste
Si derribado caíste,
fue para elevarte más.
De hoy por siempre seguirás
al Cristo que perseguiste.
Ruega por mí, ciego y triste,
que Saulo de errores fui.
Si en el pecado me hundí,
pueda seguirte en tu vuelo.
Desde el fulgor de tu cielo,
san Pablo, ruego por mí.
Laudes
Infatigable viajero,
recorres la tierra entera,
apóstol y misionero
hasta el fin de tu carrera.
Como una flecha bruñida,
vas a la meta, de suerte
que sólo Cristo es tu vida,
y una ganancia la muerte.
Descúbrenos la victoria
de Jesús crucificado,
para compartir la gloria
del Señor resucitado. Amén.
Vísperas
Oficio de Lectura
Ya ha cesado la nevada;
y el Niño, tan blanco, blanco,
oye que va a ser el blanco
de contradicción, la espada,
ay, para su Madre, y mueve
hacia ella sus ojuelos,
regalando desconsuelos,
como si él no fuera nieve.
"Hermosa María
-dice el sol, vencido-,
de vos ha nacido
el Sol que podía
dar al mundo el día
que ha deseado".
Esto dijo, humillado,
a María el sol,
porque vió en sus brazos
otro Sol mayor.
Al Padre y al Hijo
gloria y bendición,
y al Espíritu Santo
por los siglos honor. Amén.
Laudes
Laudes
Cristo te llama, Pedro
El te pregunta:
"¿Me amas más que éstos?";
tú le respondes: "Sabes que te quiero".
El te encomienda todo su rebaño;
tú lo apacientas.
Vísperas
Tu barca de pescador
Tu barca de pescador,
que llegó de Roma al puerto,
va siguiendo el rumbo cierto
que le trazara el Señor.
La va llevando el amor
siempre a nuevas singladuras.
En las borrascas oscuras,
para que a Cristo sea fiel,
Simón Pedro, el timonel,
vela desde las alturas.
Vísperas
Humilde magisterio
bajó el que Dios aprende:
¡Que diga, si lo entiende,
quien sepa de misterio!
Si Dios es cautiverio
se queda en aprendiz,
¡aprende aquí la casa de David!
Laudes
El alba mensajera
El alba mensajera
del sol de alegre brillo
conoce este martillo
que suena la madera.
La mano carpintera
madruga a su quehacer,
y hay gracia antes que sol en el taller.
Cabeza de tu casa
del que el Señor se fía,
por la carpintería
la gloria entera pasa.
Tu mano se acompasa
con Dios en la labor,
y alargas tu la mano del Señor.
Vísperas
Oficio de Lectura
¡Oh Virginal doncella!
El álamo frondoso,
la yerba humilde donde el agua suena
y el vuelo rumoroso
de la rubia colmena
canten tu suavidad de gracia llena.
Laudes y Vísperas
31 de Mayo: La Visitación de la
Virgen María
Laudes y Vísperas
Ya la semilla de Dios
crecía en su blando seno.
Y un apóstol no es apóstol
si no es también mensajero.
Y, al saludar a su prima,
Juan en el seno saltó.
Que Jesús tenía prisa
de empezar su salvación.
Oficio de Lectura
Laudes
Profeta de soledades
Profeta de soledades,
labio hiciste de tus iras,
para fustigar mentiras
y para gritar verdades.
El desierto encendido
fue tu ardiente maestro,
para allanar montañas
y encender los senderos.
En el Jordán lavaste
el más puro Cordero,
que apacienta entre lirios
y duerme en los almendros.
En tu figura hirsuta
se esperanzó tu pueblo:
para una raza nueva
abriste cielos nuevos.
Sacudiste el azote
ante el poder soberbio;
y, ante el Sol que nacía,
se apagó tu lucero.
Profeta de soledades,
labio hiciste de tus iras,
para fustigar mentiras
y para gritar verdades. Amén.
Oficio de Lectura
Laudes
Vísperas
Oficio de Lectura
Laudes
Tu pecado quemante
se convirtió en incendio,
y abriste tus dos brazos
al madero sangriento.
II Vísperas
Laudes
Laudes
Al levantarse la aurora
Al levantarse la aurora
con la luz pascual de Cristo,
la Iglesia madrugadora
te pregunta: "¿A quién has visto?"
Ví a Jesús resucitado,
creí que era el jardinero;
por mi nombre me ha llamado,
lo reconocí primero.
Vísperas
"Vacío el sepulcro,
sudarios y vendas.
Angeles testigos,
movida la piedra.
Vi al resucitado,
soy su mensajera.
Hoy ha renacido
todo con su vuelta.
Es el primer día,
la creación nueva,
nuevo paraíso
de nupcias eternas.
Amando buscaba,
lloraba la ausencia".
"¡María!" "¡Maestro!"
(La Esposa es la Iglesia).
"Dile a mis hermanos:
Id a Galilea".
Vísperas
En Judea y Samaría
al principio predicaste,
después a España llegaste,
el Espíritu por guía,
y la verdad has plantado
donde reinaba el error.
Oficio de Lectura
¡Gloria a Santiago,
patrón insigne!
Gratos, tus hijos
hoy te bendicen.
Camino de Compostela
Camino de Compostela,
va un romero caminando
y es el camino de estrellas
polvareda de sus pasos.
En el pecho las vieiras,
y alto bordón en la mano,
sembrando por la vereda
las canciones y los salmos.
Laudes
Mas no a mí solo,
purifica también
a todos los hijos de tu Padre
que te rezan conmigo o te rezaron,
o que acaso ni una madre tuvieron
que les guiara a balbucir el Padrenuestro.
No quiero contento,
mi Jesús ausente,
pues todo es tormento
a quien esto siente;
sólo me sustente
tu amor y deseo,
véante mis ojos,
muérame yo luego.
Vísperas
Albricias, Señora
Albricias, Señora,
reina soberana,
que ha llegado el logro
de vuestra esperanza.
¡Dichosa la muerte
que tal vida os causa!
¡Dichosa la suerte
final de quien ama!
Laudes
¿A dónde va, cuando se va, la llama?
8 de Septiembre: La natividad de
la Santísima Virgen María
Oficio de Lectura
Niña de Dios
Laudes
Vísperas
14 de Septiembre: La exaltación
de la Santa Cruz
Después
que se puso en cruz el Salvador,
en la cruz está la gloria y el amor,
y en el padecer dolor vida y consuelo,
y el camino más seguro para el cielo.
15 de Septiembre: Nuestra
Señora, la Virgen de los dolores
Oficio de Lectura
Mi culpa es tu tormento,
mi pecado tu herida,
oh Madre dolorida:
tu sufres, y es por mí.
Haz que en mi alma se clave
el despiadado acero
que, insensible y fiero,
hoy te traspasa a ti. Amén.
Laudes
La madre piadosa
Vísperas
¡Ay dolor, dolor, dolor!
A mí me dijo Gabriel
que el Señor era conmigo,
y mi dejó sin abrigo
más amarga que la hiel.
Díjome que era bendita
entre todas las nacidas,
y soy de las doloridas
la más triste y afligida.
29 de Septiembre: Santos
arcángeles Miguel, Gabriel y
Rafael
Testigo de lo invisible,
presencia del cielo amiga,
gracias por tu fiel custodia,
gracias por tu compañía.
En presencia de los ángeles,
suba al cielo nuestro canto:
gloria al Padre, gloria al Hijo,
gloria al Espíritu Santo. Amén.
Señor,
haz de mí un instrumento de tu paz.
Allí donde hay odio ponga yo amor.
Allí donde hay discordia ponga yo unión.
Allí donde hay error ponga yo la verdad.
Allí donde haya duda que ponga yo la fe.
Allí donde haya desesperación,
que ponga yo esperanza.
Allí donde haya tinieblas,
que ponga yo la luz.
Allí donde haya tristeza,
que ponga yo alegría.
Haz, Señor, que no me empeñe tanto
en ser consolado, como en consolar;
en ser comprendido,
como en comprender;
en ser amado, como en amar.
Porque dando se recibe,
olvidando se encuentra,
perdonando se es perdonado
y muriendo a uno mismo
se resucita a la vida eterna.
5 de Octubre: TEMPORAS DE
ACCION DE GRACIAS Y DE
PETICION
LAUDES
LAUDES
VISPERAS
LAUDES
Soberana Majestad,
eterna Sabiduría,
Bondad buena al alma mía;
Dios, Alteza, un Ser, Bondad:
la gran vileza mirad,
que hoy os canta amor así:
¿Qué mandáis hacer de mí?
VISPERAS
I VISPERAS
El amor y la pena
despiertan en mi pecho un ansia ardiente;
despiden larga vena
los ojos hechos fuente,
hasta que digo al fin con voz doliente:
"Morada de grandeza,
templo de claridad y hermosura,
el alma que a tu alteza
nació, ¿qué desventura
la tiene en esta cárcel baja, oscura?
OFICIO DE LECTURA
LAUDES
21 de Noviembre: LA
PRESENTACION DE LA
SANTISIMA VIRGEN
LAUDES Y VISPERAS
LA NIÑA MARIA
La niña María
-¡qué gracia es su vuelo!-,
paloma del cielo,
al templo subía
y a Dios ofrecía
el más puro don:
sagrario y mansión
por él consagrada
y a él reservada
en su corazón...
¡Oh blanca azucena!,
La Sabiduría
su trono te hacía,
dorada patena,
de la gracia llena,
llena de hermosura.
Tu luz, Virgen pura,
niña inmaculada,
rasgue en alborada
nuestra noche oscura.
Tu presentación,
princesa María,
de paz y alegría
llena el corazón.
De Dios posesión
y casa habitada,
eres la morada
de la Trinidad.
A su Majestad
la gloria sea dada. Amén.
LAUDES
VISPERAS
EN CONOCER A JESUS
En conocer a Jesús
tú fuiste, Andrés, el primero,
Juan te señaló al Cordero,
tú le seguiste a la cruz.
Como un reguero de luz,
a Cristo evangelizando,
tu vida se fue sembrando
para cosechar después
gavillas de rica mies,
nuevas Iglesias fundando.
8 de Diciembre: La Inmaculada
Concepción de Santa María
Virgen
VISPERAS
REINA Y MADRE
OFICIO DE LECTURA
LAUDES
OFICIO DE LECTURA
LAUDES
TU QUE REVELASTE A JUAN
OFICIO DE LECTURA
OYE, ANSIOSO Y TURBADO, EL REY TIRANO
LAUDES
OFICIOS COMUNES
COMUN DE LA DEDICACION DE
UNA IGLESIA
OFICIO DE LECTURA
NO RECHAZAREMOS LA PIEDRA ANGULAR
No rechazaremos
la piedra angular.
Sobre el cimiento de tu cuerpo
levantaremos la ciudad.
Relampaguea jubilosa
la pedrería de tus puertas;
abres tus ámbitos sagrados
y, por la palma de sus méritos,
penetra en ellos el que sufre
pasión por Cristo en este mundo.
¡Oh hermosas piedras bien labradas,
prueba tras prueba, golpe a golpe!
¡Como se ajustan en sus puestos
bajo la mano del artífice,
y permanecen duraderas
en los sagrados edificios!
LAUDES
OFICIO DE LECTURA
Enséñanos a vivir;
ayúdenos tu oración;
danos en la tentación
la gracia de resistir.
Honor a la Trinidad
por esta limpia victoria.
Y gloria por esta gloria
que alegra la cristiandad. Amén.
LAUDES
Virgen y Madre,
hija del Padre,
santa María.
Amor maternal
del Cristo total,
santa María. Amén.
VISPERAS
El tesoro divinal
en tu vientre se encerró,
tan precioso, que libró
todo el linaje humanal.
Tu sellaste nuestra fe
con el sello de la cruz,
tu pariste nuestra luz,
Dios de ti nacido fue.
OFICIO DE LECTURA
SALVE, MADRE
QUIERO SEGUIRTE A TI
COMUN DE APOSTOLES
OFICIO DE LECTURA
¡GUARDADNOS EN LA FE Y EN LA UNIDAD!
¡Guardadnos en la fe y en la unidad,
vosotros, que ya estáis desde el principio
en comunión con Cristo y con el Padre!
¿A quién acudiremos
cuando la fe va herida
sino a vosotros, testigos vigilantes,
que anunciáis con palabra poderosa
lo que era en el principio,
lo que vieron de cerca vuestros ojos
y lo que vuestras manos
tocaron y palparon del Verbo de la vida?
¡Guardadnos en la fe y en la unidad,
vosotros, que ya estáis desde el principio
en comunión con Cristo y con el Padre!
¡Guardadnos en la fe y en la unidad,
vosotros, que ya estáis desde el principio
en comunión con Cristo y con el Padre!
VOCEROS DE DIOS
Voceros de Dios,
heraldos de amor,
apóstoles santos.
Locura de cruz,
de Dios es la luz,
apóstoles santos.
Mensaje del Rey,
de amor es la ley,
apóstoles santos.
De Cristo solaz,
sois cristos de paz,
apóstoles santos.
LAUDES
OFICIO DE LECTURA
LAUDES
TESTIGOS DE AMOR
Testigos de amor
de Cristo Señor,
mártires santos.
Rosales en flor,
de Cristo el olor,
mártires santos.
Palabras en luz
de Cristo Jesús,
mártires santos.
Corona inmortal
del Cristo total,
mártires santos. Amén.
VISPERAS
ESPIRITUS SUBLIMES
PARA UN MARTIR
LAUDES
VISPERAS
COMUN DE PASTORES
OFICIO DE LECTURA
PUERTA DE DIOS
LAUDES
VISPERAS
COMUN DE DOCTORES DE LA
IGLESIA
OFICIO DE LECTURA
LAUDES
VISPERAS
OFICIO DE LECTURA
Y tanto se apresura
a zaga de la huella del Amado,
que en él se transfigura,
y el cuerpo anonado
ya está por el amor resucitado.
LAUDES
VISPERAS
DICHOSA TU
Enséñanos a vivir;
ayúdenos tu oración;
danos en la tentación
la gracia de resistir.
Honor a la Trinidad
por esta limpia victoria.
Y gloria por esta gloria
que alegra la cristiandad. Amén.
OFICIO DE LECTURA
DESDE QUE MI VOLUNTAD
LAUDES
CANTEMOS NUESTRA FE
VISPERAS
OFICIO DE LECTURA
LA MUJER FUERTE
La mujer fuerte
puso en Dios su esperanza:
Dios la sostiene.
La mujer fuerte
puso en Dios su esperanza:
Dios la sostiene. Amén.
LAUDES
OFICIO DE DIFUNTOS
OFICIO DE LECTURA
DEJAME, SEÑOR
Déjame que dé de mí
el grano limpio, y que fuera,
en un montón, toda entera,
caiga el alma para tí.
HORA INTERMEDIA
VISPERAS