Trabajo Sobre Los Principales Exponentes de La Filosofía en La Republica Dominicana

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 24

UNIVERSIDAD DEL CARIBE

Asignatura
Filosofía De La Educació n

Tema
Principales Exponentes De La Filosofía En La Republica
Dominicana

Sustentantes
Daniela Ruiz 2012-6243
Altagracia Ceballo Valenzuela 2016-0370

Facilitador(a)
Leda Altagracia Díaz Luna

SANTO DOMINGO, D.N. REPÚBLICA DOMINICANA


2018
INDICE

Introducción.............................................................................................................................2

Principales Exponentes De La Filosofía En La Republica Dominicana.....................3

Filosofía en República Dominicana....................................................................................6

Historia De La Filosofía En República Dominicana......................................................11

La Filosofía En El Tiempo De Trujillo...............................................................................13

Estructura, Organización Y Base Jurídica......................................................................14

Plan De Estudio De La Educación Superior...................................................................15

La Educación Técnica..........................................................................................................15

El Desarrollo Educativo.......................................................................................................15

La iglesia.................................................................................................................................19

Los Medios De Comunicación...........................................................................................20

Conclusión..............................................................................................................................21

Bibliografía..............................................................................................................................22

Anexo.......................................................................................................................................23

1
Introducción

Las ideas filosóficas en la Republica Dominicana han sido un poco difusas de


acuerdo con algunas personas. Constituida un impedimento para los que están
dentro y fuera del campo del ejercicio de la filosofía, les ha costado dar una
respuesta rápida al problema de si existe o no una filosofía dominicana,
asumiendo abruptamente su no existencia.

la siguiente asignación presenta algunas preguntas acerca de esta


problemática, de un pensar puro y social; si en un momento histórico
determinado aparecen rasgos, al menos hacia el futuro, de un pensamiento
filosófico autentico propio, tal como surge en américa latina la filosofía de la
liberación. Es necesario analizar las ideas filosóficas de las personas
dominicanas del pasado

2
Principales Exponentes De La Filosofía En La Republica
Dominicana

A principios del siglo XIX (1814) se publica el primer pensamiento filosófico


genuinamente dominicano “Introducción a la Lógica”.

Andrés López de Medrano: nacido en Santiago de los Caballeros hacia 1780,


es una figura que se destaca de manera vigorosa y notable por su contribución
a la creación de una conciencia nacional, ya dada en las circunstancias
materiales y sociales por la que estaban pasando la nación en ese periodo. Sin
embargo, esta obra debe considerarse como una contribución sumamente
importante y sólida a laceración del espíritu nacional, que debía encontrar en
ella un firme soporte conceptual y teórico.

En las primeras décadas del siglo XIX nuestra sociedad era muy pobre y e n
su mayoría campesinos, y es aquí donde aparece:

Pedro Francisco Bono (1828-1906): un dominicano surgido a raíz de la


jornada de Restauración del 1863, simpatizante por el positivismo, Socialismo
Utópico y poseía ciertas motivaciones filosóficas culturales que revelaban su
profunda y sincera preocupación por nuestra nación y los habitantes
desfavorecidos por los grupos predominantes del poder.

Eugenio María de Hostos (1839-1903) llego a la isla en 1875 formado francés


de Augusto Comte., Este propuso un eficaz e interesante sistema de educación
científica y laica de tipo experimental.

También cabe resaltar que en los primeros 30 años del siglo XX Adalberto
Chapusseaux: se convierte en el principal pensador dominicano a favor de los
pobres, de la movilidad social de las mujeres y de las ideas socialistas. A
Chapusseaux le abordaba el marxismo el cual considera a la mujer como un
elemento humano importante de la sociedad.

3
Su obra más importante Introducción al pensamiento político de Adalberto
Chapusseaux (Las ideas pre socialistas en la República Dominicana 1920-
1930) donde ha y una gran fuente de ideas humanistas, contrarias a las
racistas y pro-hispánica echas por Américo Lugo, José Ramón López, Moscoso
Puello y Pefia Baffle.

El historicismo diltheyano introducido en América Latina a través del


pensamiento de Ortega y Gasset y seguidores mexicanos, argentinos y otros,
fue dominante en el ambiente dominicano de las ideas, un poco antes de que
Trujillo arribara al poder, representado entonces por quien fuera rector de la
Universidad de Santo Domingo, don Federico García Godoy (1857-1924).

Arístides Fiallo Cabral (1876-1921): una figura importante que antes que
Osvaldo García de la Concha (y La Cósmica, 1929), incursiono también con
destreza en las reflexiones filosóficas de la física.

Su obra Doctrina Biocosmica de la Gravitación Universal y de la generación de


los mundos interpela con destreza a Newton y a Einstein.

Francisco Eugenio Moscoso Puello (1885-1959): fue un prestigioso


dominicano cuyo pensamiento se ubica en la misma línea de un desarrollo
teórico y científico-natural de Osvaldo García de la Concha y de Fiallo Cabral.
Moscoso Puello trabajo su teoría cinematicista, reflexión abordada en la Óptica
horaciana sobre el movimiento que a principios del siglo xx, se desarrolla en un
contexto materialista anti escolástico.

Pedro Henríquez Ureña (1884-1946): Es frecuentemente mencionado no


solamente como un filósofo, sino como el Único filosofo de la República
Dominicana, quizás por tratarse de una figura que traspaso y alcanzó la fama
allende las fronteras nacionales y eso cuenta mucho. Sin embargo, Alfonseca
lo considera un intérprete o analista de sistemas filosóficos, y no un filósofo
creador de una escuela, pese a que todavía tiene discípulos nutriéndose de sus
ideas.

Troncoso Sánchez (1906-1989), Escribió sobre los valores en Bosquejos


filosóficos (1938), donde presenta sus preocupaciones por los problemas de la
metafísica, y reflexiones filosóficas sobre la cultura.

4
Igualmente desde 1938 a 1940, Fabio A. Mota (1892-1975). Publico varios
ensayos en los Anales de la Universidad de Santo Domingo, cuyo conjunto se
denominó «Evolución del pensamiento filosófico», trabajo que fue acogido con
entusiasmo por los cultivadores del área.

Juan Francisco Sánchez (1902-1973), Juan Isidro Jiménez Grullon (1903-


1983) y Andrés Avelino García Solano (1900-1974), dominicanos muy
conocidos, conceptualizan de forma distinta las dimensiones de la realidad y la
conducta del ser humano, con tres posturas teóricas inteligentemente
explicadas en el contenido de esta compilación.

No podemos dejar de mencionar a un gran símbolo Para nuestro País Y


excelente profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, poeta
nacional;

Pedro Mir: quien durante mucho tiempo expone con brillantez sus
teorizaciones filosóficas sobre la estética, y después de la gesta patriótica de
abril de 1965, en las aulas y pasillos de la UASD, sigue provocando admiración
en profesores y estudiantes de la época con su poética oratoria.

Agregamos en la compilación a Fernández Spencer (1923-1999): raciovitalista


que publica su obra más importante (A orillas del filosofar en 1960).

5
Filosofía en República Dominicana

El primer volumen de filosofía de autor genuinamente dominicano aparece


editado en Santo Domingo en la imprenta de la Capitanía General, el año de
1814. Es un libro precoz. La imprenta no tenía aún una década de haber sido
introducida al país. El primer impreso de que se tiene noticia data de 1808.

Precisamente, el autor de esta obra, Andrés López de Medrano, o López


Medrano, nacido en Santiago de los Caballeros hacia 1780, es una figure que
se destaca de manera vigorosa y notable por su contribución a la creación de
una conciencia nacional, ya dada en las circunstancias materiales que rodean a
ese periodo.

La obra de López Medrano, "Introducción a la Lógica" o "Elementos de


Filosofía Moderna destinadas al uso de la juventud dominicana" fue escrita
pare satisfacer las necesidades de la cátedra de su asignatura en la
Universidad. Su carácter académico la circunscribía a los círculos minoritarios
de los estudiantes que seguían los curves. Sin embargo, esta obra debe
considerarse como una contribución sumamente importante y sólida a la
creación del espíritu nacional, que debía encontrar en ella un firme soporte
conceptual y teórico.

López Medrano fue uno de los primeros rectores de la Universidad. El primero


había sido el Lic. José Núñez de Cáceres y más tarde lo había sido también el
Dr. Correa y Cidrón. Todos estos personajes poseían una sólida formación
intelectual. Otros intelectuales se reunían en una tertulia que se hizo famosa en
case de Núñez de Cáceres donde las discusiones versaban, no solamente en
torno a los destellos del pensamiento de Europa y de América que llegaban al
país, sino precisamente en torno a la creación de una nación dominicana en
esa colonia entonces española. López Medrano iba a ser con Núñez de
Cáceres, el más conspicuo animador y uno de los más profundos de ese
inquietante momento histórico.

6
En las conversaciones que tenían lugar en la tertulia de Núñez de Cáceres,
parece haber tenido un cálido ambiente el conjunto de ideas que el rebelde
siglo XVIII derramaba en sierras americanas, a través del pensamiento de
Rousseau. Era un conjunto de pensamientos que se orientaban a la creación
de un mundo nuevo. Y, así como ellas habían desembocado en la Revolución
Francesa en Europa, habían servido también de germen teórico de la
Independencia de América.

López Medrano llevó al piano de la discusión académica, naturalmente


anegada en las tradiciones metafísicas imperantes en la época, la problemática
del conocimiento censoria, imponiendo consciente o inconscientemente, más lo
primero que lo segundo, la tendencia a dirigir la mirada a la realidad
circundante y apartándola en al-tuna medida de la vida eterna.

La Independencia Efímera, así calificada porque no duró más que siete


semanas, se hundió en la anexión de la colonia antes española a la vecina
República de Haití. Este acontecimiento constituyó una frustración histórica de
profundas consecuencias. La tarea de concebir una nación, a partir de un
conjunto de planteamientos teóricos que le sirvieran de raíz conceptual, fue
desplazada del campo de la filosofía. López Medrano como Núñez de Cáceres
y otros intelectuales, abandonaron el país. Otros, como Correa y Cidrón, se
adaptaron a las circunstancias. El proceso quedó a la derive, dependiendo del
juego inexorable de la vida histórica. Y, como consecuencia de ello,
desapareció el marco apropiado a la especulación filosófica orientada a forjar o
a comprender la realidad nacional. Es natural que la actividad filosófica se
refugiara entonces en el diletantismo y cayera en manos de aquellos
intelectuales que, por encontrarse sumidos en las corrientes de la inteligencia
prevalecientes en el mundo, fueron inevitablemente arrastrados a participar en
el juego asentista de las ideas.

Hasta la primera década del presente siglo, después de un desvanecimiento de


todo un siglo, no encontramos figure alguna cuyo trabajo en el campo a que
nos referimos, merezca atención. Entonces aparece Federico García Godoy
(1857-1924). Pero aún en este cave se advierte cierto desdén de la filosofía por
incidir en la problemática histórica. Y es curioso.

7
García Godoy era un hombre profundamente preocupado por los destinos de
su país y su pluma estuvo siempre consagrada a estas preocupaciones. Fue en
la novela histórica donde se canalizaron sus ideales patrióticos, legándonos un
tríptico de muy acendrados valores nacionales y democráticos. Entre sus obras
filosóficas se cuentan "Horas de estudio" y "La religión de la humanidad",
ambas publicadas en 1910. Son obras, ambas, de exégesis filosófica, como su
estudio inédito "El Bergsonismo", o de incursión en la literatura filosófica, sin
aspirar a una concepción general de la realidad particular de su país.

En Arístides Fiallo Cabral (1876-1921) encontramos una concepción del


universo. Fiallo Cabral era un espíritu profundamente inquieto que desplegó su
inteligencia en los más variados campos. Era médico ilustre y al mismo tiempo
cosmógrafo, jurista, literato, pedagogo y filósofo. Sus obras merecieron
atención por parte de algunos notables de Europa, principalmente su "Doctrina
Biocósmica de la Gravitación Universal y de la Generación de los Mundos"
(Santo Domingo, 1915), que hoy no despierta más interés que el bibliográfico.

Francisco Eugenio Moscoso Puello (1885-1959), nos ofrece un fenómeno


similar al de Fiallo Cabral. También es médico ilustre, maestro de médicos,
conferencista, novelista de no mediano rango, conocedor de leyes y de historia
nacional e inclusive hombre de preocupaciones democráticas. Su actividad
filosófica es preocupación juvenil que culmina en 1907 con dos obras, "La
Forma Específica y Discurso del Cinematicismo", publicada en el país.

Otro hombre que viene a encarnar la preocupación filosófica en nuestro país es


Andrés Avelino (18991974). Avelino es, como sus predecesores, un espíritu
profundamente inquieto y vivaz. Comenzó a figurar en el campo de la literatura
como poeta adscrito al Postumismo, que señoreaba Moreno Jiménez.

8
Después de una estancia más o menos entusiasta y feliz en el campo de la
poesía, consagró sus entusiasmos vitales a la matemática superior, que
profesó como catedrático en la Universidad, y de allí hizo un rápido tránsito al
campo de la filosofía, escribiendo numerosas obras, escritas con gran soltura
literaria. "Metafísica categorial" (1940): "Prolegómenos a la única metafísica
posible" (1941); "Esencia y existencia del ser y de la nada" (1942); "Une lettre a
Maritain" (1944); "El problema antinómico de la fundamentación de una lógica
pura" (1951); "Los problemas antinómicos de la esencia de lo ético" (1971), y
otras, son sus obras.

Avelino es el filósofo más consistente y ambicioso que encontramos en toda la


literatura filosófica dominicana, tanto por la dedicación al trabajo como por la
severidad de sus temas y por el volumen de su obra. Sin embargo, Avelino tuvo
que afrontar el peso de sus anhelos especulativos en el área de la situación
política más lúgubre y severa de nuestra historia. Es el filósofo de la época más
hostil a aquella tradición que se inauguraba con los pensadores que en los
alrededores de 1820, consagraban sus facultades al ideal de una nación que
entonces pugnaban por modelar con su pensamiento.

Algunos nombres podrían añadirse como el de Juan Francisco Sánchez, pero


en rigor este profesor universitario se limitó a una labor de exégesis filosófica
sin aspirar a construir un sistema o a integrar el trabajo filosófico, lo cual habría
podido acarrearle graves consecuencias a la realidad nacional. Se puede incluir
también, el de Pedro Troncoso Sánchez que es tal vez el único intelectual
moderno de nuestro país que ha intentado ligar la especulación filosófica a la
búsqueda de la realidad nacional.

9
Ha preferido la vía del ensayo al que logra insuflarle cierta gracia, siempre
inclinada a seguir las veredas nativas. "Nuestra cultura jurídica y la filosofía del
derecho" (1950); "Espiritualidad y cultura del pueblo dominicano" (1956); "El
bien común, fin del Estado" (1956), son algunos de sus títulos. Seguramente en
Troncoso Sánchez han operado los mismos factores inhibitorios y frustratorios
que la dictadura infligió sobre toda la intelectualidad dominicana y tal vez
debido a ello sus mejores contribuciones filosóficas se manifiestan en el estudio
de nuestro pasado. Sólo en los últimos tiempos, una vez pasadas las sombras
de la tiranía, su pensamiento se ha inclinado a la contemplación de la
problemática nacional, pero sus antiguas aficiones filosóficas han palidecido y
prefiere su pensamiento seguir otros rumbos en su vocación ensayística. Lo
demás es el marxismo.

La discusión filosófica en nuestro país gira mayormente en torno a las


controversias que disparan las concepciones del materialismo dialéctico. Sin
embargo, la producción estrictamente filosófica no es copiosa. Es más bien rala
y se consagra mayormente al campo de la historiografía. Un nombre que
habría que mencionar porque se inscribe en la literatura con una obra
ambiciosa es Juan Isidro Jiménez Grullón, quien mice armas con Ortega y
Gasset en su "Al margen de Ortega y Gasset" (La Habana, 1957). Pero más
que una obra de filosofía es una obra de crítica filosófica y de controversia a la
luz de sus concepciones marxistas. Una obra menos controversial y más
constructiva es 'La Filosofía de José Martí)" (La Habana, 1959). También
Jiménez Grullón era médico pero es sobre todo un político.

En general la filosofía "pura" se encuentra en nuestro país en completo estado


de decadencia. Las razones actuales no son las mismas que en el pasado. En
realidad esta decadencia de la filosofía nacional es un reflejo de la decadencia
que la filosofía, en su sentido clásico experimenta en todo el mundo. Y si aquí
hay factores coadyndantes, y el estado de subdesarrollo crónico y de
dependencia política son los más acentuados, el fenómeno que se aprecia es
de naturaleza ecuménica. Y es claro que en pequeños países como el nuestro
se sienta esta realidad de manera más notoria y terminante.

10
Historia De La Filosofía En República Dominicana

El curso de las ideas filosóficas en la República Dominicana, ha sido un poco


heterogéneo, difuso y encubierto, en el marco de las reflexiones sociales,
literarias, estéticas, antropológicas, históricas y sobre la naturaleza; maleza (de
acuerdo con algunas personas), constituida en un impedimento para encontrar
una reflexión filosófica nativa, propuesta en el lar nacional al estilo de la
filosofía occidental. Quizás esta es una de las muchas razones por las cuales,
a las personas que están dentro y fuera del campo de ejercicio de la filosofía,
les ha costado o han decidido, sin que esté precedida de una exhaustiva
investigación, dar una respuesta rápida al problema de si existe o no una
filosofía dominicana, asumiendo abruptamente su no existencia.

Normalmente se consideran trabajos filosóficos, los referentes a los grandes


problemas y preguntas de la ontología, conceptualizaciones tendentes a la
totalidad, que interrogan sobre el Ser, la libertad, la verdad, el origen, Dios, el
alma, los valores; de modo que guiados por esta consideración, vinculada al
filosofar puro, se ha decidido, a la ligera en muchos casos, apuntar que no
existe una filosofía dominicana.

En la síntesis teórico-práctica, se hacen visibles, entonces, temas sobre las


etnias, las mujeres, el medio ambiente, la identidad y la dominicanidad, los
grupos marginados, ahora en textos a interpretar en sus prácticas. La filosofía
está en la base de todo el pensamiento dominicano. Original o no, orgánico o
sistemático (o no), cada texto discursivo del área social o natural, contiene
preguntas filosóficas.

La concepción de la filosofía que manejamos es diferente a la concepción de


un filosofar solipsista en busca de esencias ideales, en conexión con el mundo
parmenídico que soslaya lo sensorial vivido, de espaldas a la pluralidad
temática, a la historia, sin determinaciones contextuales, culturales, ciega a la
contradicción.

11
Si se plantea que el esfuerzo del pensamiento dominicano se ha dirigido
básicamente a tratar de resolver palmariamente la cuestión de nuestra
identidad y que este material racional no es filosofía, porque la pregunta por la
identidad no se corresponde con las grandes preguntas del filosofar, sólo
Andrés Avelino García Solano y Juan Francisco Sánchez se mostrarán como
pensadores netamente filosóficos, o filosóficamente puros.

En este sentido, si se descuenta a Andrés Avelino y a otros pocos pensadores


de la época de Trujillo y de la actual, la línea filosófica que se ha desarrollado
en el país, ha tenido que ver con la problemática político-social, antes y
después de la formación de la República en el 1844. Si lo abordamos de esta
manera, quizás podremos decir que no existe una filosofía dominicana con un
lugar en el mundo de la cultura universal, y sí un pensamiento filosófico
dominicano en construcción. Averiguarlo con hondura y honestidad es un
compromiso moral. Entonces, recorrer la historia del pensamiento dominicano a
través de un hilo que conduzca hacia la abstracción filosófica, es una tarea
pendiente.

Muchos se refieren a las reflexiones filosóficas dominicanas como notas a pie


de página del pensamiento occidental o europeo, que por razones históricas y
culturales, en una investigación rápida, como se sabe, es la fuente principal de
primera mano del pensamiento dominicano, a pesar de que nuestra
transculturación no ha sido únicamente europea. Es amplia la capacidad de
algunos de nuestros pensadores más exhaustivos respecto a las discusiones
filosóficas propias de sus épocas; pero, se piensa que, poseedores o no de una
tradición filosófica, los dominicanos han vivido de espaldas a su realidad,
porque, según Iván Alfonseca (1981), siguiendo a Julián Marías, «con
demasiada frecuencia, sacrificaron el ser al ser distintos» y según Hegel,
pensando en Latinoamérica: «Lo que hasta ahora acontece allí no es más que
el eco del viejo mundo y el reflejo de ajena vida».

12
Con el descubrimiento de la isla en el siglo xv, se inició un reinado de ideas
filosóficas y religiosas, bajo la égida del pensamiento escolástico todavía vivo
en España desde el Medioevo, y que durará entre nosotros hasta el siglo xix,
aunque su modalidad en la versión de Santo Tomás de Aquino, se fortalecerá
en el siglo xvi.

En las dos primeras décadas del siglo xix, la sociedad dominicana es


francamente, como todos conocen, muy pobre y mayoritariamente campesina.
En este escenario social, tenemos a Pedro Francisco Bonó (1828-1906),
influenciado por el positivismo y por el socialismo utópico, uno de los
dominicanos surgidos a raíz de la jornada de la Restauración del 1863, con
motivaciones filosóficas culturales que expresaban un sincero y profundo
desvelo por la nación y sus habitantes menos favorecidos por los grupos de
poder.

La Filosofía En El Tiempo De Trujillo

Para iniciar les hablaremos un poco del presidente que gobernaba antes de
Trujillo. Este era general Horacio Vásquez y como vicepresidente el señor
Federico Velásquez, las elecciones de este tiempo se celebraron el 15 de
marzo de 1924 los dirigentes de esta asamblea eran horacistas por supuesto
que declararon ganador al general mencionado anteriormente el 7 de julio de
1924, estando el país intervenido por tropas de la infantería de marina de la
Armada estadounidense.

El 16 de agosto de 1930, el general Rafael Leonidas Trujillo Molina se


juramentó ante la Asamblea Nacional como Presidente Constitucional de la
República, dando inicio a la dictadura más absolutista y prolongada de nuestra
historia republicana.

Una de las primeras disposiciones de Trujillo a su llegada al poder en 1930 fue


ordenar la preparación de un plan de reformas de la educación en procura de
que la escuela dominicana evolucionara hacia modalidades más amplias y
sistemas más acordes con el espíritu científico y la tendencia experimental de
las prácticas pedagógicas modernas.
13
Al arribo de Trujillo al poder en 1930, el país apenas disponía 526 escuelas:
400 de ellas eran escuelas primarias rudimentarias de tres cursos de nivel
primario, orientadas a la formación de los niños y jóvenes campesinos; 68
escuelas primarias graduadas; 52 escuelas secundarias, comerciales o de
oficios; 6 escuelas especiales para adultos analfabetos; y una universidad, la
Universidad de Santo Domingo.

La población de la República Dominicana era estimada en 1 millón, 250


habitantes. Apenas un 4% de los dominicanos de edades comprendidas entre
los 7 y 14 años asistía a la escuela y alrededor del 90% de más de 18 años de
edad no sabía ni leer ni escribir.

En febrero de 1931, Trujillo nombró a Max Henríquez Ureña como


Superintendente General de Instrucción Pública.

La educación en la Era de Trujillo se caracterizó por tener una cobertura muy


limitada, lo que se evidencia en el hecho de que el analfabetismo alcanzó el
70%.

Aunque en las escasas escuelas imperaba el orden y la disciplina,


protagonistas de la época lo atribuyen al terror y la represión de la dictadura.

Según de la Rosa, en términos educativos “la Era de Trujillo fue un desastre”.


Dijo que la cobertura en la educación básica “era muy limitada”, ya que pocos
dominicanos tenían la oportunidad de asistir a la escuela, lo que provocó que el
analfabetismo llegara a niveles alarmantes, pasaba de 70%.

De la Rosa recordó que las pocas escuelas que funcionaban en el país estaban
localizadas en zonas urbanas, cuando la mayoría del pueblo dominicano
residía en el campo.

Estructura, Organización Y Base Jurídica

El gobierno de Rafael Leónidas Trujillo Molina se inició en 1930. Hasta 1940 la


educación continúo el camino trazado por el gobierno norteamericano de
ocupación.

14
Durante el periodo, el Sistema Educativo sufrió cambios curriculares que le
afectaron. En los primeros cinco años del régimen se implantaron cinco planes
de estudios diferentes, y por el corto tiempo que transcurría entre el uso de un
plan y la introducción de otro, ambos quedaban yuxtapuestos, creando serias
dificultades a los estudiantes.

En 1933, Trujillo prohibió la aplicación de la enseñanza hostoniana y cerro casi


todas las escuelas normales que formaban bachilleres, luego llamadas liceos
de educación secundaria. Sobre la educación superior. Pedro Henríquez Ureña
trato de crear la facultad de Filosofía y Letras.

Plan De Estudio De La Educación Superior

En la era de Trujillo el plan de estudio para la educación secundaria tenía un


tronco común hasta el grado undécimo, mientras el grado 12 se diversificaba
en tres tipos de bachillerato académico: Filosofía Y Letras, Matemática y Física
y Ciencias Físicas y Naturales, tal como ya se señaló.

La Educación Técnica

Hacia 1974, el país contaba con cinco escuelas de educación técnica de


carácter oficial.

El 1 de octubre de 1941 iniciaron sus labores las primeras escuelas de


emergencia 500 en total y para el año escolar 1948- 1949 sumaban 1,204. Su
finalidad era combatir el analfabetismo.

El Desarrollo Educativo

Hay que destacar que dos aspectos del desarrollo educativo producidos
durante la Era de Trujillo. Apreciar la estructura del sistema de enseñanza, y
tomar en cuenta que al lado de la instrucción o formación académica se
desarrollaba una orientación o formación de variados matices.

15
La educación fue ampliamente expandida y sus mejores logros se relacionaban
al interés que mostró el gobierno para dotarla de los mejores medios y
recursos, empezando por el humano. En un principio, la superintendencia
general de la enseñanza estuvo bajo la dirección del humanista dominicano
Pedro Henríquez Ureña, y llegó a contar con equipos técnicos de planificación
que como la misión chilena dotó a la organización y programación educativa
nacional de la filosofía más avanzada en América. La expansión educativa y
sus mayores logros tuvieron que ver con la edificación de recintos escolares, y
con una amplia campaña de alfabetización. Aunque los resultados de dicha
campaña fueron exagerados por la propaganda, puede pensarse que
mejoraron el nivel de la sociedad.

Estructuralmente, el sistema educativo comprendía los niveles primarios,


intermedios y secundarios. El planeamiento respondía al modelo creado
durante el período de la intervención de 1916-1942, pero con algunas variantes
como lo fue la enseñanza especial que mereció la atención y el interés
gubernamental en conformidad con el planteo de algunas demandas
acrecentadas durante la Era.

Entre los tipos de enseñanza especial estaba la vocacional que respondía a la


necesidad de obreros técnicos; la educación dirigida hacia la formación
diplomática; y la educación en oficios y bellas artes. Otra variante fue la
enseñanza para la formación de maestros, ampliada cuantitativamente para
complementar el crecimiento de la escolaridad, cuyos resultados no fueron tan
buenos desde el punto de vista cualitativo.

Innovaciones significativas fueron las academias militares, en especial la de


cadetes, para las cuales se escogieron los mejores maestros de todo el país; y
la escuela para trabajadores, denominadas "Universidades Libres" y cuyo
planeamiento obedecía a un horario nocturno. En líneas generales, la
enseñanza conlleva un régimen disciplinario riguroso que envolvía tanto a
escuelas públicas como privadas. Lo disciplinario incluía el adoctrinamiento
como en el caso de las escuelas primarias, y la sumisión como en los casos de
los niveles intermedios y secundarios.

16
Aunque los programas comprendían una gama variada de conocimientos
científicos y humanísticos bien planeados, un objetivo primordial era lograr la
adhesión al régimen a través de mecanismos trujillizantes infiltrados,
traspuestos y obligados mediante un clima educativo y algunos tópicos de los
programas de la metodología de la enseñanza. En este sentido puede
señalarse que la educación era anti-democrática debido al fomento exclusivo
del trujillismo en las aulas, y anticientífica, porque no se ajustaba a un análisis
racional o sociológico.

El aseo, la uniformidad y la puntualidad eran reglas disciplinarias como el canto


escolar al izar la bandera, las marchas, los concursos literarios, y la celebración
de efemérides. En la dirección de cada plantel escolar, en las entradas, en los
pasillos y los salones de clases, el retrato de Trujillo era parte primordial de lo
trujillizante, que por lo regular también se fomentaba constantemente en
clases. Cada maestro al iniciar la enseñanza solía escribir una idea alusiva a
Trujillo o a su Era conjuntamente con la fecha, mientras que en el patio grupos
de estudiantes ejercitaban marchas militares.

Por otra parte, en algunos salones el tema del día era la lectura de
composiciones al Benefactor, como parte del nacionalismo chauvinista que se
fomentaba, y que siempre tendió al cultivo sistemático del odio contra el
revolucionario o el opositor exiliado, pero en especial "dirigido a crear un
estado psicológico de guerra contra la vecina república de Haití", lo que servía
al régimen "para justificar la existencia de un ejército de más de 20,000
hombres como para mantener explotadas las masas trabajadoras negras". La
contraparte al antihaitianismo fomentado por la vía de la enseñanza lo era la
propaganda unilateral de la hispanidad, respecto de la cual opinaba el mismo
Trujillo: "En nuestra asociación

íntima con España, fuente de donde brotan las energías espirituales y el vigor
inexhausto que nos permitirían construir un bloque invulnerable a toda filtración
foránea, reside no solo en nuestra propia salvación sino también, en parte
escencialísima, la de todo el Occidente cristiano.

17
De ahí la necesidad de que no haya ese frente fisuras por donde pueda el
comunismo, y de ahí también el deber que tenemos de eliminar todas las
diferencias que puedan existir entre nuestros países y la Madre Patria, como
consecuencia de discrepancias ideológicas o situaciones forzosamente
pasajeras". Estos criterios explican en parte la insistencia en blanquear los
caracteres de la negritud dominicana mediante programas donde el hispanismo
no solamente quedo en la propaganda ideológica y en nexos estrechados con
el régimen del franquismo español, sino en el fortalecimiento de los valores
hispánicos a base de atraer refugiados y emigrantes procedentes de la Madre
Patria. Los refugiados influyeron notablemente en la enseñanza universitaria.

La educación universitaria mereció durante la Era una atención prioritaria


dentro de la programación cultural y el planeamiento educativo. El gobierno no
solo se empeñó en restituirle históricamente el rango de universidad primada,
sino que la edificó como recinto, dotándola tanto de un conjunto de modernos
edificios como de buenos recursos didácticos. Bajo la orientación del educador
Julio Ortega Frier la universidad alcanzó una reorganización académica
notable, aunque no escapó de la manipulación trujillizante.

Una asociación de estudiantes universitarios (ANEU), surgida en 1928, fue


convertida para los años 1940 en una Guardia Universitaria: un cuerpo
militarizado que debía pertenecer todo estudiante que ingresara al recinto.La
universidad le otorgó a Trujillo el doctorado en honoris causa, aparte de que
poseía el nombramiento de catedrático en economía, el cual nunca ejerció. Con
su impulso o desarrollo, la Universidad de Santo Domingo era una institución
que tenía "ritmo seminario conventual" y donde la enseñanza estaba
"anquilosada por la mordaza política que impedía toda discusión de temas que
pudieran despertar inquietudes".

18
La iglesia

El gobierno de Trujillo se convirtió en un auspiciador cultural al buscar a través


del fomento de los diversos medios socioculturales en una adecuación
trujillizante. Aparte del medio educativo, el trujillismo ideológico se valió de la
iglesia, a la cual manipulaba mediante el patrocinio de edificaciones
eclesiásticas y del respaldo que le dio a la clerecía trayendo misiones de
religiosos extranjeros con las cuales reforzaba el catolicismo dominicano, la
dominicanización de la frontera y la hispanidad, ya que los misioneros, en su
gran mayoría, procedían de España. Lo religioso quedo al solidificar

El culto a Trujillo, amén de que el laicismo escolar introducido por Hostos fue
sustituido por la obligatoriedad de la catequización en el sistema educativo.
Puede señalarse que la manipulación trujillista tendió a estrechar "los
elementos religiosos y políticos hasta la confusión", y que representantes
eclesiásticos se subordinaron al rejuego político del régimen, hasta que fueron
surgiendo las discrepancias que enfrentaron la función pastoral de la iglesia y
los requerimientos cada vez más exigentes del Estado. Pero esta discrepancia
hay que entenderla en el cauce de la crisis que en los últimos años fue
socavando aceleradamente al trujillismo.

La situación se tornó mucho más delicada para la tiranía cuando el clero


cambió su oposición a partir de la llegada del nuevo Nuncio Papal, Arzobispo
Lino Sanani, quien se había destacado en Argentina por su lucha contra el
régimen de Domingo Perón. La iglesia enfrentó la tiranía el 31 de enero con
una famosa pastoral, leída en todos los templos en que se manifestaba su
oposición a las represiones políticas y el rompimiento de la alianza que habían
mantenido con el tirano.El dictador reaccionó airado, Trujillo profirió insultos en
contra de los religiosos y organizó turbas que se dieron la tarea de agredir
verbal y hasta físicamente a los sacerdotes y a templos religiosos.

19
Los Medios De Comunicación

En el año que Trujillo asciende al poder uso los medios de comunicación


existentes para difundir su poder por medios eficaces como lo fue la radio la
prensa escrita, la televisión, etc. como medio de comunicación la prensa estaba
en poder directo del Estado y era un mecanismo efectivo de propaganda que
enaltecía el personalismo de Trujillo. A través del periodismo se trazaban
pautas, se lanzaban consignas y toda información era ajustada
cuidadosamente al programa ideológico trujillista. Los tres periódicos de
circulación nacional eran El Listín, La Información y La opinión.

Pero también la prensa escrita asumía una política requisitoria frente a los
ciudadanos vistos como desleales y funcionarios caídos en desgracia frente al
régimen, o se cerraba todo tipo de información que pusiera en entredicho al
Estado. Como los periódicos, parecida era la función radial introducida antes de
la Era y cuyos programas asumían mucho mejor la ofensiva propagandista y
doctrinera. En la radio la música laudatoria era constante y como la danza era
Gloriosa y los merengues Salve San Cristóbal y déjenlos que lleguen hablaban
del tirano, de sus logros como estadista y de su ideología política.

20
Conclusión

En conclusión puedo decir que al arribo de Trujillo al poder en 1930, el país


apenas disponía 526 escuelas: 400 de ellas eran escuelas primarias
rudimentarias de tres cursos de nivel primario, orientadas a la formación de los
niños y jóvenes campesinos; 68 escuelas primarias graduadas; 52 escuelas
secundarias, comerciales o de oficios; 6 escuelas especiales para adultos
analfabetos; y una universidad, la Universidad de Santo Domingo. La población
escolar del país ascendía entonces a 50 mil 739 alumnos distribuidos así: 20
mil en escuelas primarias rudimentarias; 29 mil, 938 en escuelas primarias
graduadas; mil 358 en escuelas secundarias y normalistas; 1310 en las
escuelas especiales de adultos analfabetos; y 379 en la Universidad de Santo
Domingo.

Para entonces, la población de la República Dominicana era estimada en 1


millón, 250 habitantes. Apenas un 4% de los dominicanos de edades
comprendidas entre los 7 y 14 años asistía a la escuela y alrededor del 90% de
más de 18 años de edad no sabía ni leer ni escribir.

La Universidad de Santo Domingo, a pesar de que preservaba las rancias


tradiciones de las universidades dominicas, no era más que un reducto de
varios centenares de jóvenes privilegiados que en poco o en nada contribuía al
desarrollo del país.

En 1930, la instrucción pública de la República Dominicana se encontraba


bastante degradada; la oferta de educación muy limitada; y muy escasas las
oportunidades de educarse.

En los primeros dos años de la dictadura, la educación dominicana siguió los


mismos lineamientos que le habían trazado los interventores. Las leyes que
entonces regían en la materia eran las mismas que habían sido formuladas por
Julio Ortega Frier en tiempos de la Intervención.

Fue a partir de 1932 cuando el gobierno de Trujillo comienza a legislar sobre la


materia y a enrumbar por senderos distintos la educación de los dominicanos.

21
Bibliografía

 html.rincondelvago.com/filosofia-en-la-republica-dominicana.html

 aseufil.blogspot.com/2009/08/importancia-de-la-filosofia-en.html

 eldia.com.do/filosofía-y-actualidad/

 https://prensalibrenagua.blogspot.com/.../la-educacion-dominicana-
durante-la-era.htm.

 hoy.com.do/la-educacion-en-tiempos-de-trujillo-2/

22
Anexo

23

También podría gustarte