2015 - Teologia y Ecofeminismos en America Latina - Barredo-Panti

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Temas de nuestra américa

ISSN 0259-2339

Teologías y ecofeminismos desde América


Latina: del soplo de vida a la plenitud de vida
Theologies and eco-feminisms from Latin America: from
the Breath of life to the fullness of life
Teologias e ecofeminismos da América Latina: o sopro da
vida para a plenitude da vida
Cuando Dios comenzó a crear el cielo y la tierra, la tierra no tenía forma, ni
había en ella nada que tuviera vida. Las aguas estaban cubiertas por una gran
oscuridad, pero sobre la superficie del agua se movía el espíritu de Dios.
Génesis 1. 1-2 (TLA)

Priscila Barredo-Pantí
Comunicadora social y teóloga
Universidad Bíblica Latinoamericana
Recibido: 20/8/2015 Aceptado: 15/11/2015 / http://dx.doi.org/10.15359/tdna.32-59.8

Resumen feminista y liberadora para el desarrollo de


esta propuesta.
En el siguiente artículo se busca
mostrar el significativo aporte de las Palabras clave: Ecofeminismo, teología
teologías latinoamericanas y los eco- latinoamericana, neoliberalismo, an-
feminismos tanto al pensamiento como tropocentrismo, pastoral, feminismo.
a la reflexión bíblico-teológica y socio-
pastoral latinoamericana. Se intenta Abstract
relacionar la Creación con el modelo
patriarcal antropocentrista reflejado, The following article intends to
sobre todo, en el neoliberalismo que show the significant contribution
avasalla la vida en todas sus manifes- of Latin American theologies and
taciones. Se parte de una perspecti- ecofeminisms to Latin American
va teológica latinoamericanista, biblical-theological and socio-pastoral
thought and reflection. It attempts to
relate Creation and the anthropocentric,
patriarchal model that is reflected, above all,
in the neoliberalism that overwhelms life in
all of its manifestations. The proposal assumes
a Latin American theological perspective that is
both feminist and liberating.

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Keywords: Ecofeminism, Latin se movía el espíritu de Dios”, y es a


American theology, neoliberalism, partir de ese espíritu, del aliento, el
anthropocentrism, pastoral, feminism. soplo de vida, de la Ruah1, de la Es-
Resumo
píritu Santa iniciadora la sinfónica
divina que con la palabra crea y or-
Este artigo procura mostrar a contri- ganiza la tierra y todo lo que en ella
buição significativa das teologias lati- habita. De ahí inicia esta reflexión,
no-americanos e ecofeminism ao pen- de ese primer viento, brisa suave,
samento e reflexão bíblico-teológica energía, fuerza de aire que, según la
e socio-pastoral latino-americana. Ele
perspectiva judeo-cristiana, emanó
tenta relacionar Criação e o modelo
antropocêntrico, patriarcal que se re-
y convocó el nacimiento de todo
flete, sobretudo, no neoliberalismo que lo que hoy existe y de lo que, por el
domina a vida em todas as suas mani- dominio exterminador, ya no existe.
festações. A proposta assume uma pers-
pectiva teológica latino-americana que Es así que, en las siguientes líneas se
é feminista e libertadora. mostrará el significativo aporte de
las teologías latinoamericanas y los
Palavras chave: Ecofeminismo, teolo- ecofeminismos tanto al pensamiento
gia latino-americana, neoliberalismo, y reflexión bíblico-teológica como a
antropocentrismo, pastoral, feminismo. la sociopastoral en relación con la
Creación y a los efectos del modelo
El libro de Génesis es el primero
patriarcal antropocentrista que ava-
del Pentateuco, de la Torah; en él
salla con la vida en todas sus mani-
se narra el origen de la vida y de la
festaciones, que solapa y fomenta la
maldad humana de acuerdo con la
globalización, neoliberalismo, explo-
cosmovisión judía, en la que Yahveh
tación, depredación, extractivismo,
crea con la voz cuando en primer lu-
saqueos de la naturaleza: personas,
gar dice: “¡Quiero que haya luz!” y se
suelo, agua, flora, fauna.
hace la luz. Lo que llama la atención
es lo que existe antes de lo creado Se ha decidido arrancar desde la
y que los primeros dos versículos del perspectiva bíblico-teológica por
Génesis lo muestran: caos, oscuri- considerar que, en el ámbito de la re-
dad, no vida, agua… Es en esta úl- flexión espiritual y de las ciencias de
tima, en el agua, donde surge todo
con movimiento, de un lado a otro,
oscilando, bailando. Dice La Escri- 1 Ruah es un pronombre masculino y femeni-
no. Aparece en los idiomas ugarítico, arameo
tura: “sobre la superficie del agua y arábigo. Según el diccionario aparece unas
378 veces en el hebreo bíblico.

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la religión, la contribución es clave estos sectores es el de señalar la


para quienes como creyentes, cris- existencia de una interconexión
tianos o no, estén peregrinando en entre la explotación de las mujeres
esta búsqueda constante de saberes y de la naturaleza, y que ambas se
interdisciplinares, diversos y perti- enraízan tanto en una cosmovisión
nentes para la construcción de tanto patriarcal como en unas estructuras
un conocimiento como de práctica sociales, políticas, económicas y re-
comunitaria, en donde todas y todos ligiosas que es necesario modificar
cabemos, en donde las expresiones si queremos acabar con esa forma
de fe no tienen que ser mutuamente de dominación.
excluyentes, sino más bien, integra-
doras, complementarias e inclusivas. La teóloga Mary Judith Ress (2010)
Con todo, sí es claro que el análisis apunta que “la opresión de la mujer
de quien escribe está transversaliza- y la destrucción del planeta no son
do por dos ejes: el de género y el teo- dos fenómenos aislados, sino dos for-
lógico cristiano liberador. mas de la misma violencia. Los dos
vienen de una aberrante necesidad
Ahora bien, para un abordaje más de controlar lo que es diferente, lo
justo y amplio del tema que nos que no entendemos. De ser fuen-
ocupa, hay que referirse a ecofemi- tes de vida, tanto la tierra como la
nismos y teologías latinoamericanas mujer hemos llegado a ser recursos.”
(indígenas, negras y caribeñas), en (Ress, p. 113).
plural como las voces que se escu-
chan. En ese sentido, como cita Lu- También es importante decir que
cía Ramón Carbonell: entre los ecofeminismos hay diver-
sidad de enfoques y contribuciones.
El ecofeminismo es hoy como una Las pensadoras y activistas que cami-
gran rotonda de tráfico en la que nan por estos senderos vienen, desde
confluyen personas y colectivos la experiencia ecológica, espiritual,
que proceden de vías muy diver- social y política, sembrando sus se-
sas: el activismo ecologista y fe-
millas con puntos de vista, estudios
minista, el mundo académico, las
religiones, grupos locales y redes específicos y vivencias que comple-
internacionales. (2014, p. 101) mentan y enriquecen los aportes del
ecofeminismo. Algunos nombres
A lo anterior se añaden las pala- por destacar son los de Vandana Shi-
bras de R. Ruether, quien señala va, Petra Kelly, Wangary Maathai y
que el común denominador entre Marina Silva; los de Ivone Gebara

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(Brasil) y Elsa Támez (México). Los concepto ‘los pobres’ sólo se define
aportes de estas pensadoras, des- la opresión de personas en térmi-
de el ecofeminismo y lo teológico, nos socio-económicos, mientras
son especialmente importantes en otros factores que causan exclu-
sión y opresión, como sexo, color
este texto, debido a que se trata de
de piel, etnicidad, opción sexual
mujeres que además de estar com- y edad no se hacen explícitos en
prometidas con una espiritualidad este concepto. (Van Andel, p. 13).
liberadora, la lucha por la ecojusti-
cia y la equidad de género, generan Ivone Gebara, una de las precurso-
ideas provenientes de la experiencia ras del ecofeminismo en la teología
cristiana liberadora que encuentra cristiana liberadora, es categórica
una de sus bases en la teología de la cuando cuestiona las limitaciones de
liberación. Tanto como praxis como la teología de la liberación en su en-
en su aspecto teórico, los estudios sayo Intuiciones ecofeministas:
teológicos ecofeministas han enri-
quecido considerablemente a la teo- En cuanto a la teología de la li-
logía de la liberación, ya que la han beración, su gran mérito fue el
de recuperar la cuestión de los
desafiado a repensar y redefinir quié-
pobres como una perspectiva teo-
nes son los pobres, los excluidos y los
lógica fundamental, y a partir de
oprimidos así como que la opción de ahí alimentar una espiritualidad
Dios por ellos y ellas trasciende de la de búsqueda de liberación de dife-
solidaridad y la justicia social al cui- rentes opresiones, especialmente
dado del cuerpo como un todo, en lo de los llamados pecados sociales.
individual y, sobre todo, lo comuni- Mostró la íntima relación entre
tario. Ese cuidado de lo comunitario la adhesión a Jesús y la lucha
se extiende a la tierra, el agua, los contra las injusticias sociales que
animales, las plantas, los alimentos, cotidianamente matan la vida
en toda Latinoamérica... Esta
el aire.
teología pareció aportar sobre la
Es así que Ivone Gebara, junto con epistemología antigua y medie-
val, una epistemología moderna y
muchas biblistas y teólogas feministas
hasta de cierta forma mecanicis-
comienzan a cuestionar al sujeto de ta, donde los conceptos de lucha
los primeros teólogos de la liberación: de clases, sociedad sin clases y
Reino de Dios parecen a primera
La categoría ‘los pobres’, según
vista armonizarse. Pero, en reali-
estas teólogas, es demasiado ho-
dad, no se introduce una nueva
mogénea y generaliza. Con el
epistemología; se incluyen apenas

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aspectos de la epistemología ca- en la exigencia de reestablecer a


racterística de la modernidad... El las mujeres como sujetos de ple-
carácter fundamentalmente an- no derecho en todos los ámbitos
tropocéntrico y androcéntrico de de la existencia, como en la in-
la teología de la liberación es in- trínseca equivalencia de mujeres
discutible. (Pimentel, 2007, s/p) y hombres en cuanto personas
constitutivas de la humanidad,
Es evidente que esta nueva concep- dada en diferencia modal; junto
ción de la liberación, de los pobres con ello, busca crear las condi-
y del cuerpo obliga a la teología de ciones reales, actitudes sociales
la liberación a reformularse. Esto ya y estructuras socio-políticas que
está sucediendo en algunos sectores, revelen, sostengan y preserven
ambos aspectos. (p. 163)
como señala Leonardo Boff, uno de
sus destacados representantes. En La historia señala que a finales de la
efecto, el brasileño no echa por tierra década del 70, en medio de un clima
los postulados de la teología que lo de persecución política y masacres,
ha acompañado todos estos años, ni del auge de los movimientos popula-
su riqueza y pertinencia, sino que la res y las luchas revolucionarias de las
cuestiona y la llama a agregarse a esta izquierdas, comenzaron a desarro-
ola de movimientos y prácticas más llarse otras teologías que partían de
inclusivas, holísticas e integradoras la realidad de opresión de los pobres
en las cuales no caben solo las perso- y la opción de Dios por ellos.
nas sino todo lo que respira, lo que se
mueve, lo creado. Según Phillip Berryman (1987, 1989
versión en español), la teología de la
Ante esto es relevante apuntar que liberación latinoamericana no es un
Elsa Támez e Ivone Gebara nom- fenómeno aislado. Teologías paralelas
bran el ecofeminismo como la ter- –asiática, africana, negra y feminis-
cera fase de la teología feminista en ta– han surgido de las luchas. Todas
América Latina. ellas representan reacciones contra
la teología oficial europea y nortea-
María Pilar Aquino (citado por Az-
mericana, la cual inconscientemente
cuy, 2012) señala que:
asumió que su teología era simple-
La acepción más común, si bien mente teología “cristiana”. Cada una
no es de uso universal, señala de estas nuevas teologías se ha hecho
que ‘feminista’ es una persona – crítica sobre la forma heredada de in-
hombre o mujer– que cree, tanto terpretar los símbolos cristianos. Los

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teólogos feministas han extendido su 2. Retrabajo del discurso bíbli-


crítica a los símbolos mismos y cues- co-teológico a partir de las as-
tionan el “machismo” de la deidad. piraciones, sufrimientos y espi-
Cada uno ha reinterpretado el pasado ritualidad de las mujeres como
para encontrar su propia historia, la tales, buscando feminizar el dis-
cual ha sido ampliamente suprimida curso teológico.
de la memoria por las interpretacio-
nes dominantes. 3. Desarrollo de un nuevo discurso
bíblico-teológico con la ayuda
Varias fueron las teologías nacidas de de las teorías de género; se trata
contextos de opresión y sufrimiento de deconstruir la teología y los
como el de la población afrodescen- textos patriarcales para recons-
diente, la indígena y la de las mu- truir nuevos discursos. 2
jeres latinoamericanas. Fue en ese
momento cuando las teólogas co- En este sentido, hoy se sigue desa-
menzaron a trabajar en el desarrollo rrollando un nuevo discurso bíbli-
de una teología feminista latinoa- co-teológico feminista y ecofemi-
mericana originada desde la pobreza nista, descubriendo, indagando,
y la desigualdad, pues se reconoció a reconstruyendo, repensando, po-
la mujer como sujeto discriminado y niendo atención a los otros sujetos
como sujeto histórico de liberación de opresión y producción teológica
y de producción teológica. Elza Tá- cada vez más visibles en los retos
mez habla de este como el primer sociales, políticos y económicos que
momento, o fase, del desarrollo de nos plantea esta segunda década del
teologías feministas de la liberación. nuevo milenio, cada vez más plural
e inclusiva, que avanza vertigino-
Ella señala que las tres fases coexisten- samente. Como se ha mencionado,
tes en el trabajo de los textos bíblicos entre esos nuevos sujetos están: la
y del discurso teológico, los cuales se tierra, el aire, los animales, las plan-
han ido desarrollando desde la década tas, todo lo que tiene vida.
de 1970 hasta los albores de nuestra
actualidad:

1. Descubrimiento de la mujer 2 Véase para más detalle en: Támez, Elsa. Ar-
como sujeto oprimido, de libera- tículo: Hermenéutica feminista latinoameri-
cana. Una mirada retrospectiva. En Religión
ción y de producción teológica. y género, ed. Silvia Marcos. Editorial Trotta,
Madrid, 2008, 2012, 63-64.

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Las imágenes de la deidad y la ecofeminista liberadora habrá un


vida plena avance real y contundente en el cui-
dado de la naturaleza, porque se le
Vivir en una sociedad históricamente verá como nuestra hermana, como
patriarcal y androcéntrica; es decir, parte del gran y diverso cuerpo del
que se rige por la premisa de que la que el apóstol Pablo hablaba a los
perspectiva masculina, que es la que Corintios, a saber, que: “la creación
ha predominado en la filosofía, la po- entera a una gime y sufre dolores de
lítica, la teología y otras áreas, debe parto hasta ahora” (Romanos 8.22,
aceptarse como universal, requiere BLA).
deconstruir la imagen del Dios mas-
culino que tanto ha afectado la con- Sin embargo, existen muchos de-
cepción que las personas creyentes, tractores a lo interno de las agrupa-
en toda nuestra complejidad, tene- ciones religiosas de corte protestante
mos de la fuente de toda bondad, y católico que pretenden tanto des-
de la divinidad creadora, tan diná- legitimar como aminorar el impacto
mica como diversa que lo mismo se de este creciente movimiento eco-
representa en la niñez, como en la lógico, feminista y liberador. Vale
mujer y en la creación entera. Según la pena mencionarlo porque esta
Sandra M. Schneiders, patriarcado postura fundamentalista, alienante y
es: “Estructura de poder masculino reduccionista denota el miedo exis-
cuyas relaciones son entendidas en tente ante un movimiento florecien-
términos de superioridad e inferiori- te cuyas raíces siguen extendiéndose
dad, y donde la cohesión social está en las sociedades latinoamericanas
garantizada por el ejercicio de poder con suma rapidez y profundidad.
dominante” (Citado por Geymo- Acerca de la teología ecofeminista,
nat-Pantalés, 2009: p. 75). el representante de la organización
católica Acción en Familia, Juan
Como señala Sylvia Marcos: “El gé- Antonio Montes Varas, asevera:
nero, como una postura que emerge
desde abajo y desde los márgenes, Algunos pensarán que tales abe-
llama a reconceptualizaciones de rraciones sólo pueden darse en
la cabeza de pobres extraviadas
las categorías hegemónicas de los
que, de tanto leer y sofismar, lle-
discursos religiosos” (2012, p. 10). garon a esas conclusiones. ¿Pero
El propósito de esta reflexión es ex- qué diría Ud. si supiese que esta
plicar que en la medida en la que doctrina está siendo enseñada por
haya una conciencia y práctica más religiosas de Chile y de América

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Latina, que ella posee una vasta adultocéntricos y antropocetristas.


red de contactos internacionales, Ellos encuentran su base y perpe-
que cuenta con publicaciones tuación en las estructuras de poder
que llegan a conventos y que son y dominación, en donde hay un arri-
estudiadas y puestas en práctica
ba-abajo, mayor-menor, fuerte-débil.
en “retiros” a lo largo y ancho
de todo el Continente (…) Las
En este sentido, otro de los aportes
transformaciones propuestas por
clave de Ivone Gebara es la apuesta
esta teología, si no son detenidas,
podrán producir profundas conse- por una nueva epistemología, una
cuencias, no sólo en la propia vida incluyente, originaria, surgida de la
de la Iglesia sino también en la so- experiencia, que desafíe lo que es
ciedad civil, especialmente en los el “conocimiento” y que integre los
países con población mayoritaria- saberes y vivencias de las mujeres
mente católica, como es el caso pobres (ya las que conviven con la
de la casi totalidad de los países de naturaleza en los campos), a quienes
América Latina. (2011, p. 12-13) por su condición de género y eco-
nómía se les ha alienado del mundo
Este pensamiento conservador y li-
académico todavía jerarquizante.
mitado evidencia las luchas de resis-
tencia que enfrentan las teólogas y Gebara afirma que la epistemología
biblistas feministas y ecofeministas a occidental dominante es patriar-
lo interno de las instituciones reli- cal, que excluye a grandes grupos
giosas (que son diversas), donde se de personas a consecuencia de su
atisban cambios y transformaciones carácter androcéntrico, universa-
en grupos de resistencia promotores lista y jerárquico, debido a que se
de un pensamiento más crítico pro- ha originado de la experiencia de
yectado en prácticas de fe concretas hombres blancos y occidentales, se
que coadyuven a desmontar los pa- ha presentado como “conocimien-
radigmas patriarcales, kyriarcales3, to universal”. Asimismo, afirma que
es jerárquica porque da más impor-
3 Kyriarcado es un neologismo acuñado tancia al conocimiento intelectual
por Elisabeth Schüssler Fiorenza, con la que a otras formas de conocimiento,
intención de redefinir la categoría analí-
tica de patriarcado de manera tal que in- menospreciando e invisibilizando el
cluya distintas estructuras de dominación conocimiento obtenido en la vida
entrelazadas y multiplicativas. Abarca el
sexismo, racismo, homofobia, injusticia
diaria, catalogándolo como “sólo
económica y otras formas de jerarquías
dominantes en las que la subordinación de e institucionalizada. Tomado de: https://
una persona o grupo a otro es internalizada es.wikipedia.org/wiki/Kyriarcado

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conocimiento desde la experiencia”. tantos siglos de explotación y escla-


(Van Andel, p. 17). vitud, en plena era de los más gran-
des avances, sigue explotando, con-
Esta degradación del saber, del co- sumiendo a costa del bienestar de los
nocimiento obstaculiza el avance demás y atropellando la dignidad e
de una conciencia y estilo de vida integridad humana.
ecológico, feminista, acorde con los
valores del cristianismo liberador: Para este caso, el teólogo costarri-
justicia, verdad e igualdad en donde cense Jonathan Pimentel se refiere
conviven todos los seres creados. a Gebara como quien señala que la
espiritualidad ecofeminista desea
¿Y cuál es esa vida plena propuesta en producir relaciones tanto de estima
medio de un contexto de violencia, como de autoestima personal y social
desamparo, discriminación y explota- capaces de desplegarse en institucio-
ción contra todo lo creado? ¿Es una nes y lógicas sociales, es un lugar de
buena nueva que se hace práctica en encuentro y diálogo entre culturas,
el camino o una que se grita desde el sensibilidades y luchas específicas.
balcón? Es una que desde siempre ha
anunciado y soñado el Dios de la Bi- Otro aspecto por tratar desde la teo-
blia representada en la nueva Jerusa- logía ecofeminista es el concepto de
lén, la ciudad profetizada en Isaías 65. cuerpo, el cuerpo como comunidad
Una tierra en la que se edifican casas y templo, en donde todas las perso-
para ser habitadas; en la que se plan- nas somos integrantes, en el que el
tan viñas y se vive con los frutos de resto de la creación también lo es.
la cosecha. Es decir, una ciudad en En la primera Corintios 12, 12-26,
donde todas las personas viven del Pablo utiliza la metáfora del cuerpo,
fruto de su esfuerzo con un trabajo para hablar de la diversidad de los
digno, además, conviven con el lobo integrantes, destacando la impor-
y el cordero que serán apacentados tancia de los/las “débiles”, de los/
juntos, y el león comerá paja como las “menos honrosos/as” y de los/las
el buey; y el polvo será el alimento “menos presentables” a quienes los
de la serpiente. No una en la que dominantes de la congregación me-
se construyen casas para que otros nospreciaban y excluían.
las habiten; ni en la que se plantan
viñas para que ajenos coman. En el Así Dios ha dispuesto los miem-
bros de nuestro cuerpo, dando ma-
sueño de Dios existe una sociedad
yor honra a los que menos tenían,
distinta a la nuestra que luego de

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a fin de que no haya división en en cuanto al tema que nos convoca,


el cuerpo, sino que sus miembros ¿acaso la tierra, la naturaleza, no es
se preocupen por igual unos por también parte de este gran cuerpo?
otros. Si uno de los miembros Si ella se duele, ¿nos dolemos todas
sufre, los demás comparten su su-
y todos?
frimiento; y si uno de ellos recibe
honor, los demás se alegran con
Hoy hace falta mirar ese cuerpo, el
él. (vv. 25 y 26, NVI).
propio y comunitario, a la luz del
Usualmente, se habla de este pasaje cuerpo del Cristo amigo, hermano,
para respaldar la idea de la unidad del que incluye, convive y reivin-
en medio de ciertas diferencias que, dica; un cuerpo que tiene partes
con frecuencia y casi en automáti- heridas y entumecidas por la falta
co, asociamos a la personalidad, el de empatía, solidaridad, cuidado y
carácter, las habilidades y los dones amor. Para esto cito a la teóloga Ute
de las personas. Sin embargo, el Seibert; (2011, s/p):
mensaje paulino es confrontativo Somos cuerpos, y es en nuestro
e incómodo para quienes ostentan cuerpo donde vivimos el dolor,
poder en la iglesia corintia, está ar- la alegría, el abuso, la violen-
gumentando que para que el cuerpo cia, hambre y placer; el cuerpo
funcione es indispensable que cada es nuestro lugar de bendición y
miembro sea reconocido, no discri- maldición. Participamos en el
minado ni hecho a un lado por su movimiento social como cuer-
condición social y económica. pos; formando parte y queriendo
transformar este cuerpo social,
Ahora bien, hoy, ¿siguen dominan- nos encontramos en la comuni-
do criterios e ideas de grupos y per- dad, en la iglesia −el cuerpo de
Cristo− como cuerpos, compar-
sonas con mayor poder e influencia
tiendo un cuerpo de creencias
en nuestros grupos, organizaciones,
acerca de la vida, la muerte y la
sociedad?, si es así, ¿a qué y a quié- resurrección de los cuerpos; el sis-
nes se está excluyendo y de qué tema, económico negocia con los
maneras? En la actualidad, ¿quiénes cuerpos, la cultura los moldea y
tendrían que incomodarse por me- las políticas afectan su crecimien-
nospreciar y hacer a un lado al otro to o deciden su exclusión.
por su condición socioeconómica,
edad, escolaridad, etnia, sexo, orien- Para Ivone Gebara, cita Pimentel
tación sexual o identidad de género? Chacón,

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es el cuerpo de Dios es todo el paz sea con ustedes!...” “Como el Pa-


universo; es toda la materia en dre me envió a mí, así yo los envío
sus infinitas formas, antiguas y a ustedes” (Juan 20, 21). Y quiero
modernas, desde los quarks4 has- recordar este episodio porque es en
ta las galaxias. Esta idea contiene
su resurrección donde cobra vida la
un despliegue ético: el cuerpo de
Dios que debemos cuidar es todo
misión cristiana liberadora, es en
el planeta tierra, ya que en cada ella donde se muestra la vida como
partícula se manifiesta y recrea el plenitud, esa que triunfa sobre la
amor creacional y encarnacional injusticia, la maldad y la opresión
de Dios. Dentro de esta visión, de los/las poderosos/as, de los/las
Dios necesita del soporte (relacio- depredadores/as, los/las que quitan
nalidad e interdependencia) de la vida. Hoy son las trasnacionales,
todas nosotras para su vida. “En- el capitalismo y el neoliberalismo
tre esta casa grande y la casa chica que avasalla y atropella el campo, el
existe una relación intrínseca, ya
suelo, los mares, la flora, la fauna, la
que las condiciones favorables o
desfavorables del ecosistema van
vida humana, el agua, los cuales fun-
a afectar nuestra vida cotidiana”. cionan, como recursos que mantie-
Este modelo imagina a Dios como nen los intereses económicos de las
parte de un constante flujo de in- élites de poder en nuestras naciones
terrelaciones y cambios. (Pimen- afro-indio-latinas.
tel, p. 112).
Dios es Sofía –Sabiduría–, Espíritu
Conclusión móvil, puro, amante de las perso-
nas, que invade cada rincón mise-
A manera de conclusión quiero re- rable, y gime ante la pérdida y libe-
memorar aquella tarde del siglo I, ra un poder que permite comenzar
cuando el Maestro del pueblo, en de nuevo. Su energía despierta la
tierra a la vida, su belleza brilla en
medio de nosotros y nosotras, excla-
las estrellas, su fuerza estalla en
mó con una luminosa sonrisa: “¡La cada fragmento de shalom [paz con
paz sea con ustedes!”, mostrándonos justicia] y renovación que se pro-
sus manos y su costado en señal de duce en la arena de la violencia y
que la vida había vencido sobre la el sinsentido [...] Sofía-Dios habi-
muerte, diciendo una vez más: “¡La ta en el centro y en las orillas del
mundo, es vitalidad activa que gri-
ta con dolores de parto, haciendo
4 Son los constituyentes fundamentales de la ma-
teria. Varias especies de quarks se combinan de
nacer la nueva creación. Dios-So-
manera específica para formar partículas suba- fía echa mano de la sabiduría de
tómicas tales como protones y neutrones.

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los pobres, nos recuerda la sabidu- cómo la percibimos y cómo nos acer-
ría antigua que procede de la tie- camos a ella.
rra y la existencia encarnada, en
el hambre y anhelo de justicia ¿De qué otras formas podemos lla-
que no se pueden saciar. Ella es marle? ¿Qué otras características y
la mujer escondida en el desier- atributos vemos y experimentamos
to del patriarcado durante tantos
que nos inspiren para acercarnos y
siglos, que ahora ha despertado,
poner en práctica una alternativa de
llamándonos a epifanías más
profundas de lo divino. (M. Gray vida comunitaria justa y renovada en
en Ramón, 2014: p. 107) un mundo regido por el consumismo
acelerado, la competencia de merca-
La imagen de Dios ha sido construida, do y la presión por productividad? Si
a través de los siglos, con imaginarios somos hechas y hechos a su imagen
de género de tradición patriarcal. Es y semejanza, ¿cómo ayudaría verle y
decir, los símbolos literarios y visua- experimentarle como Amiga, Fuen-
les han fortalecido la idea religiosa de te de vida, Deidad nuestra, Hermana,
un orden jerárquico y autoritario he- Viento fresco, Sabiduría u otras? Pues
redado de las metáforas del Antiguo este ejercicio, lejos de trasladar la
Testamento en el que Dios es esposo y imagen de Dios de una considerada
su pueblo (Israel) es esposa. masculina a otra femenina, nos ayuda
a generar una imagen inclusiva y plu-
En detrimento del Dios creativo, ral que nos permite verle en toda su
identificado con los pequeños, amigo riqueza, diversidad y dinamismo, que
solidario, consolador y justo, se ha apela a la construcción de un mundo
enfatizado a uno que es rígido, im- mejor, el cual se resiste a los terribles
placable e inaccesible, y a uno que es efectos de la globalización y el de-
persona, bajo una lógica antropocen- predador neoliberalismo en nuestras
trista. La forma en la que le evocamos tierras latinoamericanas y caribeñas,
todavía necesita pasar del paradigma las cuales luchan no por una supervi-
androcéntrico, adultocéntrico y an- vencia sino por una vida en plenitud,
tropocentrista al de la inclusividad en en abundancia.
el que todo lo creado cabe con toda
la diversidad, con nuestras varia- Finalizo con un salmo de alabanza
das características ni “femeninas” ni que propongo en relectura, no desde
“masculinas”, sino naturales. Nece- una perspectiva de la Deidad Todo-
sitamos ampliar nuestra cosmovisión poderosa, sino de una que crea y que
de la Deidad, de cómo la nombramos,

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se amiga con la creación porque es 13 Alaben el nombre del Señor, por-


parte de ella y está en ella: que sólo su nombre es excelso; su es-
plendor está por encima de la tierra
Salmo 148, 3-12 y de los cielos.
14 ¡Él ha dado poder a su pueblo! ¡A
1 ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor! él sea la alabanza de todos sus fieles,
Alaben al Señor desde los cielos, de los hijos de Israel, su pueblo
alábenlo desde las alturas. cercano!
2 Alábenlo, todos sus ángeles, alá- ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!
benlo, todos sus ejércitos.
3 Alábenlo, sol y luna, alábenlo, es-
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