La Yod 1
La Yod 1
La Yod 1
Grupo 25
La yod ha sido central en la fonética histórica del castellano, gracias a que con ella la evolución
de las vocales se ve alterada cuando la vocal entra en contacto con una semiconsonante anterior
palatada cerrada [JJ] o con una semivocal [j], lo que ocasionó que las vocales propendían a
cerrarse, haciendo que en los sonidos se produjera en un cierre, la yod ha servido para estudiar
el sonido o el proceso de palatización, y a su vez sirve para explicar los cambios que surgieron
en el paso del latín al castellano, pero la pregunta que nos sumerge en esto es: ¿qué es la Yod?
Según Manuel Ariza en 1990 dice que la yod es un sonido palatal semiconsonántico más
cerrado que cualquier /i/ puramente vocálica.
También se sabe que para la práctica filológica la yod es una vocal cerrada palatal de un
diptongo.
La Yod como semivocal implosiva o semiconsonante explosiva sirve para explicar todos los
fenómenos que de ella surgen, lo que podríamos decir qué nos ayuda a saber la inflexión de la
vocal, y la palatización de una consonante inmediata, lo que quiere decir que la inflexión es una
modificación de la vocal en el timbre, y modo de articulación de dicha vocal.
Pero, para hablar de la inflexión que ocurrió en las vocales se debe tener en cuenta el proceso
que surgió en la diptongación qué ocurrió en el latín vulgar, es decir en el latín clásico lo que
pasó fue que si una (e) o una (i) formaban un hiato podían formar sílabas diferentes, pero en el
latín vulgar se produjo un cambio en la secuencia silábica de hiato o diptongo y esto provocó un
cambio de /i/ y /e/ en yod.
Entonces podríamos decir que los cambios más grandes que ovacionó la Yod fueron: la
palatalización de las consonantes, y los cierres vocálicos que se dieron.
4 Metátesis o reordenamiento.
En esto surge qué daño puede estar en latín, pero si no se produce un reordenamiento no causa
estragos en los sonidos adyacentes.
Es importante destacar que no todas las yod provocan los mismos cambios, debido a que existen
algunas yod más fuertes, y otras dos más débiles esto se debe a que las más fuertes se
mantuvieron vivas durante más tiempo, y así en parte del diptongo, las yod débiles estuvieron
poco tiempo en el diptongo desaparecieron muy rápido y por eso no causaron tantos cambios en
las vocales.
Pero además esta yod crea las consonantes prepara tales africadas sordas y sonoras del español
medieval
/S/ y /z/ ts y dz y de ella se deriva el fonema interdental fricativo sordo del español peninsular
moderno. Ejemplo: Malitia> Maleza; o minācia> amenaza.
Yod segunda.
Este tipo de yod da lugar a la palatización en grupos latinos cómo: lj, k’l, g’l y t’l y provoca la
inflexión de la O abierta, lo que hace que entonces éste hecho pierda la diptongación de la
vocal, además se produce la aproximante lateral palatada /ʎ/.
Cuando la yod se funde con la consonante que precedía, la palatiza, así nace los fonemas
palatales que se representan con ll y ñ, en nuestra ortografía actual.
Yod tercera
Esta yod dio lugar al sonido fricativo palatal Sonoro /j/ qué se representa en castellano con una
y, los grupos gy y dy (o /gj/ y /dj/) fueron afectados con este proceso.
En este tercer grupo conviene mencionar al respecto de las inflexiones vocálicas que se reducen
a la inflexión de la o y la e abiertas, lo que hace que se impida la diptongación.
Pero en lo que concierne a los grupos by y my, cabe resaltar que sí inflexiona la o y e abiertas
impidiendo la diptongación.
Yod cuarta
En el último grupo aparece una yod por la diptongación de un hiato tras una síncopa, por
ejemplo, en tēpidu > t[e]pe(d)o > t[e]pio >> tipio > «tibio», no *tebio.
EL WAU
Es un elemento velar, de margen silábico que puede producir diversas modificaciones en una
vocal contigua. Aunque es menos frecuente que la yod, una inflexión causada por una wau, las
hay, se sabe que entre las limitaciones que tiene, nunca llega a afectar a la A
La wau que inflexiona a las demás vocales suele ser la derivada del apéndice labial [w] de
una oclusiva labio velar latina.