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TERCER EJERCICIO

GRUPO A. SEGURIDAD NUCLEAR

TEMA 22: Sistemas eléctricos interiores y exteriores de centrales nucleares.


Sistemas de generación y distribución de corriente continua y corriente alterna
en los distintos niveles de tensión. Sistemas eléctricos de emergencia.

INDICE

1. INTRODUCCIÓN

2. SISTEMA ELÉCTRICO EXTERIOR

3. SISTEMA ELÉCTRICO INTERIOR

3.1 Sistema de Generación de Energía Eléctrica

3.2 Sistema de Distribución Interior

3.3 Suministro Eléctrico de Emergencia

3.3.1 Generadores Diesel de Emergencia

3.3.2 Baterías

4. OPERACIÓN DEL SISTEMA ELÉCTRICO

5. NORMATIVA BÁSICA APLICABLE A LOS SISTEMAS ELÉCTRICOS


1. INTRODUCCIÓN

La instalación de una central nuclear tiene como misión principal la


contribución al sistema eléctrico nacional mediante la generación de energía
eléctrica. Por su parte, el sistema eléctrico nacional contribuye al funcionamiento de
la central aportando la energía necesaria para la alimentación de los sistemas
auxiliares de la misma requeridos para su operación en condiciones normales o para
hacer frente a situaciones de accidente.

Los sistemas eléctricos de una central nuclear comprenden todos los equipos
y sistemas encargados de la generación de potencia eléctrica y de su suministro a la
red nacional de transporte, y aquellos equipos y sistemas encargados de cubrir las
necesidades de alimentación eléctrica de la planta tanto para su operación normal
como para hacer frente a transitorios operacionales. Aquellas porciones del sistema
de transporte nacional próximas a una central nuclear y encargadas de proporcionar
la conexión con la misma para permitir las dos funciones anteriormente reflejadas
constituyen lo que se denomina el “sistema eléctrico exterior” asociado a la central
nuclear. Por su parte, aquellos equipos y sistemas de la central encargados de la
generación de energía eléctrica, la distribución de alimentación eléctrica a los
servicios auxiliares, y los equipos internos de la planta que proporcionan un
suministro eléctrico alternativo ante una pérdida del suministro eléctrico exterior
constituyen lo que se denomina el “sistema eléctrico interior” de la central.

2. SISTEMA ELÉCTRICO EXTERIOR

Tal y como se ha reflejado en la Introducción, el sistema eléctrico exterior


asociado a una central nuclear presenta una doble funcionalidad: (1) proporciona la
conexión entre la central nuclear y el sistema eléctrico nacional para permitir la
transmisión de la potencia generada por el turbogenerador de la planta a la red de
transporte, y adecuar los parámetros de la energía eléctrica producida a la red de
transporte, y (2) proporciona la conexión entre la red de transporte y el sistema
eléctrico de distribución de la central nuclear para permitir la alimentación eléctrica
de equipos y sistemas auxiliares de la central.

A los equipos y componentes que contribuyen a la primera de las funciones


se le puede denominar “sistema de transmisión”, y no están sometidos a requisitos
específicos. A los equipos y componentes que se encargan de proporcionar la
segunda de las funciones se le denomina “sistema de suministro preferente” (SSP
en adelante). Dependiendo del diseño específico de la Central estos sistemas
pueden ser independientes o compartir elementos comunes que participan en
ambas funciones.

De acuerdo con la IEEE Std 765-1995, se define el SSP como “la


alimentación de potencia eléctrica desde la red de transporte exterior al sistema de
distribución Clase 1E de la central que es preferente para proporcionar potencia
eléctrica bajo condiciones de accidente y post-accidente”. El mismo documento
refleja que la función del SSP es “proporcionar potencia eléctrica, como sea

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requerida, para la parada segura de la planta y para la operación de los sistemas de
seguridad. Los circuitos del SSP pueden ser usados durante todos los modos de
operación para proporcionar potencia a los trenes Clase 1E y No Clase 1E de la
planta”.

Si bien el diseño del sistema eléctrico exterior es característico de cada


central nuclear, puesto que son diversas las posibilidades para dar cumplimiento a lo
requerido al mismo, y asimismo está influenciado por la configuración de la red
nacional en la zona de ubicación de la planta, se podría representar un esquema
típico simplificado de sistema eléctrico exterior de acuerdo con lo contemplado en la
Figura 1, en la cual se pueden identificar como componentes principales de un
sistema eléctrico exterior los siguientes:

· Subestaciones (o parques) eléctricas de alta tensión. Generalmente la central


se conecta con el sistema eléctrico nacional a través de dos (en algunos casos
3) subestaciones eléctricas, una de las cuales, generalmente correspondiente a
la red de 400 kV (en alguna central a la de 220 kV) tiene como misión principal
proporcionar el camino para la evacuación de la energía generada por la
unidad, y la otra, perteneciente a la red de 132 kV (110 kV en algunas zonas) o
de 220 kV en algunas centrales, proporcionan la conexión para el suministro de
energía eléctrica exterior a la central, que constituye lo que se denomina
Sistema de Suministro Preferente (SSP).
· Interruptores de conexión de la unidad a los parques. Permiten las maniobras
de conexión/desconexión a las barras del parque y asimismo, mediante su
apertura, permiten la separación de la unidad de la red de transporte.
· Transformador principal (TP); constituido por tres transformadores monofásicos,
es el encargado de elevar la tensión de generación (cuyo valor típico en la
mayoría de los casos es en torno a 20 kV) a la tensión de la red de transporte.
· Transformador auxiliar de grupo o de unidad (TAG); se encarga de acomodar la
tensión de generación a la tensión nominal de las barras de servicios auxiliares
de la central en su posibilidad de alimentación desde generación o desde el
parque de 400 kV.
· Transformadores auxiliares de arranque o reserva (TAA); se encargan de
acomodar la tensión del parque de SSP (138 kV) a la tensión nominal de las
barras de servicios auxiliares de la central.
· Interruptor de generación (IG); disponible en algunas centrales, permite la
apertura de la salida del generador y por lo tanto en condiciones de disparo del
reactor permite la alimentación de los sistemas auxiliares desde la subestación
de 400 kV, permitiendo que el sistema de 400 kV pueda ser tratado como parte
del SSP.

El sistema eléctrico exterior no es considerado de Clase 1E, y por lo tanto no


le son de aplicación los criterios normativos para sistemas de seguridad. No
obstante, y dada la relevancia de la función de suministro de potencia a los sistemas
de la central, se han especificado requisitos normativos para el SSP. Los principios
básicos normativos aplicables al diseño de los sistemas eléctricos de una central
nuclear son contemplados en los Criterios Generales de Diseño (GDC) 17 y 18 del
Apéndice A del 10CFR50. En lo que se afecta al SSP el GDC 17 refleja:

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· Un sistema de potencia eléctrica interior y un sistema de potencia eléctrica exterior
deberán ser proporcionados para permitir el funcionamiento de estructuras, sistemas, y
componentes importantes para la seguridad. La función de seguridad deberá ser
proporcionar la suficiente capacidad para asegurar que (1) los límites aceptables
especificados para el diseño del combustible y las condiciones de diseño de la barrera
de presión del refrigerante del reactor no son excedidas como consecuencia de
transitorios operacionales anticipados, y (2) el núcleo es refrigerado y la integridad de
la contención y otras funciones vitales son mantenidas en el caso de accidentes
postulados.

En su interpretación, la USNRC (United States Nuclear Regulatory Comisión)


especifica que el sistema interior y el sistema exterior deben ser capaces de
proporcionar la potencia requerida para todas las funciones de seguridad, y que
ambos sistemas han de ser independientes el uno del otro. Los sistemas interior y
exterior considerados en conjunto deben cumplir el criterio de fallo simple sin pérdida
de capacidad para proporcionar la energía a las funciones de seguridad, y
adicionalmente, los dos sistemas considerados como conjunto deben ser capaces
de soportar un fallo doble, uno de los cuales es la completa pérdida de potencia
exterior.

· La potencia eléctrica desde la red de transmisión hasta el sistema de distribución


eléctrico interior deberá ser suministrada por dos circuitos físicamente independientes
(aunque no necesariamente con caminos de paso separados) diseñados y localizados
de manera que se minimice, en la medida de lo posible desde un punto de vista
práctico, la posibilidad de fallo simultaneo de ambos circuitos en operación y
accidentes y bajo las condiciones ambientales postuladas. Un parque común a ambos
circuitos es aceptable.

· Cada uno de estos circuitos deberá ser diseñado para estar disponible en el tiempo
suficiente siguiente a una pérdida de todas las fuentes interiores de suministro de
potencia eléctrica de corriente alterna y del otro circuito de potencia eléctrica exterior,
para asegurar que los límites especificados de diseño del combustible y las
condiciones de diseño de la barrera de presión del refrigerante del reactor no son
excedidos.

· Uno de estos circuitos deberá estar diseñado para estar disponible dentro de un plazo
de pocos segundos siguiendo un accidente de pérdida de refrigerante (LOCA) para
asegurar que la refrigeración del núcleo, la integridad de la contención, y otras
funciones de seguridad vitales son mantenidas.

En su interpretación, la USNRC especifica que cada uno de los dos circuitos


de potencia eléctrica exterior deberán estar diseñados para estar disponibles en
suficiente tiempo para participar en la parada segura del reactor en caso de la
pérdida de las fuentes interiores y del otro circuito exterior. Uno de los circuitos
deberá estar disponible en el plazo de pocos segundos tras el LOCA (circuito de
acceso inmediato). El segundo circuito ha sido denominado circuito de acceso
retardado. Puesto que solo un circuito de este tipo es requerido, el sistema de
potencia exterior no necesita cumplir el criterio de fallo simple en cuanto a su función
de acceso inmediato.

· Deberán incluirse provisiones para minimizar la probabilidad de la pérdida de potencia


eléctrica desde cualquiera de las fuentes restantes como resultado de, o en
coincidencia con, la perdida de la potencia generada por la unidad de potencia nuclear,

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la perdida de potencia desde la red de transmisión, o la pérdida de potencia desde las
fuentes de suministro eléctrico interiores.

En su interpretación, la USNRC especifica que el licenciatario deberá realizar


los análisis oportunos de cara a verificar que la red de transporte permanece estable
ante las pérdidas de: la unidad nuclear, la máxima unidad generadora de la red, o la
línea de transmisión más crítica.

En el licenciamiento de las centrales nucleares españolas se contemplaban


por parte de éstas análisis de estabilidad para dar respuesta al requisito anterior.
Teniendo en cuenta, por un lado, que estos estudios eran en principio bastantes
simples (únicas hipótesis de análisis las reflejadas en el criterio, modelos de
simulación poco detallados), que la evolución de la red desde los estudios hasta la
actualidad había sido notable, y que actualmente se dispone de herramientas de
simulación más potentes y modelos de red más precisos, y por otra parte, que la
interacción central nuclear – red de transporte es un aspecto de vital importancia en
cuanto a que las centrales nucleares, formando parte de la misma como fuentes de
generación muy importantes, han de contribuir a mejorar la estabilidad de la red
nacional, y por otra parte esta estabilidad contribuye a mejorar la fiabilidad del
suministro eléctrico exterior a las propias centrales; se desarrolló entre 1992 y 1996
un proyecto de investigación (Proyecto Escenred) en el cual participaron el CSN,
Red Eléctrica de España (propietaria de la red de transporte nacional), y todas las
centrales nucleares, que permitió actualizar y ampliar notablemente los estudios
originales de comportamiento dinámico central nuclear – red de transporte,
permitiendo asimismo la identificación de aspectos, tanto de la red como de las
centrales, cuya modificación ha contribuido a la mejora de la estabilidad del sistema
eléctrico nacional.

3. SISTEMA ELÉCTRICO INTERIOR

De cara a facilitar la posterior exposición conviene reflejar en primer término


las siguientes definiciones contempladas en la IEEE Std 308-1980:

Clase 1E : “es la clasificación de seguridad de equipos y sistemas eléctricos que son


esenciales para la parada segura del reactor, el aislamiento de la contención, la refrigeración
del núcleo del reactor, la extracción de calor del reactor y de la contención, o que son
esenciales para prevenir una liberación significante de material radiactivo al medio
ambiente”.

Función de Seguridad: “uno de los procesos o condiciones (por ejemplo, inserción de


reactividad negativa de emergencia, extracción de calor post-accidente, refrigeración de
emergencia del núcleo, extracción de radiactividad pos-taccidente, y aislamiento de la
contención) esenciales para mantener los parámetros de la planta dentro de los límites
aceptables establecidos para un suceso base de diseño”.

Sistema de Seguridad: “aquellos sistemas (el sistema de disparo del reactor, y los
sistemas de salvaguardias tecnológicas, o ambos, incluyendo todos los sistemas auxiliares
soporte) que proporcionan una función de seguridad. Un sistema de seguridad está

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compuesto de más de un grupo de seguridad, de los cuales cualquier grupo de seguridad es
capaz de proporcionar la función de seguridad”.

División: “la designación aplicada a un sistema o conjunto de componentes especificado


que permite el establecimiento y mantenimiento de independencia física, eléctrica y
funcional con respecto a otros conjuntos de componentes redundantes”.

Equipo redundante de un sistema: “una parte de un equipo o sistema que duplica la


función esencial de otra parte de un equipo o sistema de manera que cualquiera de estas
partes puede llevar a cabo la función requerida independientemente del estado de operación
o fallo de la otra”.

De cara a facilitar la descripción, se ha optado por diferenciar en tres grandes


bloques el alcance del sistema eléctrico interior de una central nuclear, esto es: el
sistema de generación de potencia eléctrica, el sistema de distribución de energía
eléctrica, y las fuentes de suministro interno de energía eléctrica de emergencia.

3.1 Sistema de generación de energía eléctrica

Los principales componentes que constituyen el sistema de generación de


energía eléctrica de la central son el grupo turbina-generador y el camino de
conexión del mismo con la red exterior, esto es, las barras de fase aislada con su
equipo de refrigeración, el transformador principal, el interruptor del generador
(cuando existe) y la línea de salida de alta tensión de enlace con el parque de
transmisión, estos últimos ya mencionados al tratar el sistema eléctrico exterior.

La función de la turbina es convertir la energía térmica del vapor procedente


del reactor nuclear en la potencia mecánica que necesita el alternador para
satisfacer las demandas de energía eléctrica de la red, manteniendo la frecuencia de
50 Hz. El paso del vapor a través de los cuerpos de alta y baja presión de la turbina
provoca el movimiento de sus álabes, y con ello el giro de la turbina y del rotor del
generador acoplado a la misma. Tras su paso por la turbina el vapor es dirigido al
condensador principal de la planta. Como funciones auxiliares de la turbina se
podrían citar: proporcionar un sistema de protección de la propia turbina, del
generador y del reactor, acomodar las variaciones de carga del generador, y
suministrar vapor al sistema de vapor de extracciones.

El generador se encarga de transformar la energía mecánica proporcionada


por la turbina en energía eléctrica en base a la interacción electromagnética entre el
rotor y el estator debido al giro del primero de ellos. Un valor típico de la tensión
nominal de generación de las centrales nucleares españolas es en torno a 20 kV. A
excepción de CN Santa María de Garona (460 MWe) y CN José Cabrera (160
MWe), la capacidad de generación de potencia eléctrica de las unidades nucleares
españolas se ubica en torno a 1000 MWe. Como sistemas auxiliares del generador
cabría destacar la excitatriz (acoplada al rotor y cuya misión consiste en generar la
corriente continua de excitación para crear el campo del rotor), el sistema de
regulación de tensión (encargado de mantener la tensión de salida al valor
deseado), el sistema de refrigeración de las bobinas del estator, el sistema de
refrigeración de núcleos magnéticos, y el sistema de sellado de hidrógeno.

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El sistema de generación de energía eléctrica no está relacionado con la
seguridad y por lo tanto no es de Clase 1E, ni le son de aplicación los criterios de la
normativa al respecto. No obstante, es importante que el diseño (como por ejemplo
adecuado dimensionamiento) y mantenimiento sea el adecuado para evitar en la
medida de lo posible problemas en estos equipos que puedan conducir a transitorios
de disparo de la Central, o degradación y envejecimiento prematuro de los equipos.

3.2 Sistema de distribución interior

El sistema de distribución eléctrica de una central nuclear está formado por


aquellos equipos y subsistemas encargados de distribuir y adecuar el suministro de
potencia, procedente de la red exterior o de las fuentes de generación internas de la
central, para proporcionar la alimentación eléctrica requerida (corriente alterna o
corriente continua, potencia, nivel de tensión de alimentación, fiabilidad del
suministro, etc...) para el adecuado funcionamiento de los equipos y sistemas de la
central necesarios para la correcta operación de la misma bajo cualquier modo de
operación de la planta.

Las cargas a alimentar comprenden tanto cargas asociadas al funcionamiento


normal de la planta como cargas de sistemas encargados de llevar a cabo funciones
de seguridad. En este sentido el sistema eléctrico interior de una central nuclear se
divide en lo que constituye el sistema eléctrico Clase 1E, encargado de proporcionar
el adecuado suministro a los sistemas de seguridad bajo las condiciones
establecidas en las bases de diseño, y el sistema eléctrico No Clase 1E, encargado
de proporcionar el suministro para los servicios auxiliares no relacionados con
funciones de seguridad de la central.

Los elementos que componen el sistema eléctrico de una central nuclear son:
fuentes de potencia (generadores diesel, baterías), componentes y equipo de
distribución (transformadores, cabinas, cables, bandejas de cableado, cargadores de
baterías, inversores), equipos actuadores (interruptores de circuito, controladores,
relés de control, interruptores de control, válvulas piloto), equipo actuado (motores,
solenoides), y la instrumentación y controles asociados con el suministro y
distribución de corriente eléctrica (indicadores de vigilancia, interruptores, equipo de
protección).

Los componentes y el diseño del sistema eléctrico interior No Clase 1E no


están sometidos a requisitos normativos específicos, y el fin último es que sea el
más adecuado posible para mantener la correcta operación en funcionamiento
normal de la central. Bajo este prisma no se va a profundizar más sobre el mismo,
reflejando únicamente que está compuesto por un sistema de suministro de corriente
alterna de media y baja tensión, y un sistema de suministro de corriente continua de
baja tensión, para dar respuesta a las diversas demandas de suministro eléctrico de
los diferentes equipos.

La IEEE Std 308 refleja como criterio general para los sistemas eléctricos
interiores Clase 1E que deberán ser diseñados de manera que se asegure que
ningún suceso base de diseño causará: (1) la pérdida de potencia eléctrica a un
número tal de salvaguardias tecnológicas, equipos de monitorización y vigilancia, o
equipos del sistema de protección, que una función de seguridad requerida no

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pueda ser ejecutada, ni (2) la pérdida de potencia eléctrica a equipos que podrían
resultar en un transitorio de potencia del reactor capaz de causar daño significante a
las vainas del combustible o a la barrera de presión de refrigerante del reactor.

Asimismo, la aplicación del criterio de fallo simple a los sistemas de seguridad


de la central conduce a que el diseño contemple la redundancia de los equipos
encargados de proporcionar la función de seguridad de estos sistemas. El sistema
eléctrico interior de la central encargado del suministro eléctrico de estos equipos
está sometido al mismo criterio y por lo tanto el diseño contempla divisiones
redundantes e independientes del sistema de distribución eléctrica y de las fuentes
de potencia internas. Existen posibilidades diversas para el diseño del sistema
eléctrico Clase 1E capaces de dar adecuada respuesta a este requisito. La
configuración más común en las centrales nucleares españolas consiste en 2
divisiones redundantes, cada una con una capacidad del 100% para llevar a cabo
las funciones de seguridad previstas. Otras configuraciones diferentes a ésta son las
contempladas en el diseño de C.N. Trillo (tecnología Siemens-KWU), en la que se
dispone de 4 divisiones redundantes con capacidad del 50% (lógica de actuación 2
de 4), y en el diseño de C.N. Cofrentes (tecnología BWR), en el cual se contemplan
3 divisiones, siendo una de ellas dedicada a la actuación del Sistema de
Refrigeración de Alta Presión (HPCS), y en la cual se requiere la lógica 2 de 3 para
cubrir todas las funciones de seguridad previstas.

Por ser el caso más común, y de cara a facilitar la descripción, nos


centraremos en el diseño consistente en dos divisiones Clase 1E del sistema
eléctrico interior. En la figura 1 se muestra un esquema simplificado de una
configuración de este tipo. La interfase entre el sistema Clase 1E de distribución
interna y el suministro de alimentación exterior también presenta configuraciones
diversas en las centrales nucleares españolas. En algunos casos el suministro
exterior a las barras de media tensión (MT) de Clase 1E (frecuentemente llamadas
Barras de Emergencia o de Salvaguardia) se realiza a través de las barras de MT No
Clase 1E (frecuentemente denominadas Barras Normales), realizándose la conexión
mediante dos interruptores en serie. En otros casos ésta alimentación se realiza
directamente a las Barras de Emergencia, y en otros casos existe una alimentación
directa desde la red preferente y otra desde la Barra Normal hasta la Barra de
Emergencia. En cualquiera de los casos la interfase debe cubrir el criterio de
independencia y separación entre el suministro de potencia exterior (No Clase 1E) y
el sistema de distribución Clase 1E contemplado en la IEEE Std 308 (y en IEEE Std
765), en las que se requiere que esta conexión debe ser realizada en los terminales
de entrada de un interruptor Clase 1E, localizado en una estructura de clase de
seguridad.

El sistema de distribución eléctrica Clase 1E abarca desde los interruptores


de entrada de suministro a las barras de MT hasta las cargas. En este sistema se
pueden distinguir los siguientes subsistemas: el subsistema de potencia de corriente
alterna, el subsistema de potencia de corriente continua, y el subsistema de
instrumentación y control vital.

El subsistema de corriente alterna (c.a.) de cada división Clase 1E comprende:

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· 1 Barra de Salvaguardia de Media Tensión (generalmente del orden de 6 kV de
tensión nominal, si bien pueden darse otros valores tales como 4.16 kV en CN
José Cabrera y 10 kV en CN Trillo). Desde esta barra se alimentan
directamente, a través de su correspondiente interruptor, los motores de MT
Clase 1E de c.a. de potencia elevada (superiores a 250 CV), como por ejemplo:
bombas de carga, bombas de evacuación de calor residual, bomba de agua de
refrigeración de componentes, bombas de agua de alimentación auxiliar,
bombas de rociado de la contención, bombas de agua de servicios esenciales,
etc. Asimismo, desde estas barras se proporciona la alimentación a las barras y
centros de distribución de baja tensión de la división que cuelgan de la mismas
y a la que están conectadas a través del transformador para cambio de tensión
y los correspondientes interruptores de separación de barras.

En esta barra es donde tiene lugar la entrada de suministro de potencia


eléctrica al sistema de distribución Clase 1E, bien desde la red exterior o desde
el generador diesel de emergencia. Los circuitos de control y actuación de los
interruptores de la barra son actuados por corriente continua de 125 V,
procediendo la alimentación del corriente subsistema de corriente continua
Clase 1E de la propia división. Los interruptores tienen actuación eléctrica,
manual o automática desde Sala de Control, y la posibilidad de apertura manual
local. En la Sala de Control se tiene indicación de la tensión en esta barra y de
la intensidad de la conexión con las barras de emergencia de baja tensión. La
interconexión entre las barras de MT y las barras de 400 V y las cargas está
dotada de medios de aislamiento de faltas eléctricas mediante un sistema de
protección selectiva que aisla la falta eléctrica en el punto en el que se produce,
mediante la apertura de los interruptores adecuados. De esta forma, la falta no
se transmite al resto del sistema y por otra parte, se mantiene la máxima
disponibilidad del resto del sistema de distribución.

· Barras de Salvaguardia de baja tensión (normalmente 400 V de tensión


nominal), las cuales comprenden centros de fuerza (tambien denominados
centros de distribución) y centros de control de motores (CCM). De los centros
de fuerza se alimentan directamente motores de 400 V y de una potencia
comprendida entre 75 y 250 CV (tales como por ejemplo, para una central
BWR, compresores de aire de instrumentos, ventiladores Booster, bombas
auxiliares de Clean-UP, bombas de vacio del condensador, ..), y se dota de
alimentación a los CCM que cuelgan de cada uno de ellos y a otros paneles de
distribución, tanto a 400 V como a otros niveles de tensión (como por ejemplo
120 Vc.a. o 220 Vc.a.), dependiendo del diseño y requisitos de alimentación de
las cargas de la central, a través del correspondiente transformador.

Desde los CCMs se proporciona alimentación a aquellos motores cuya potencia


es inferior a 75 CV.

Las barras Clase 1E de 400 V disponen de indicación de tensión en Sala de


Control. Asimismo, están dotadas de dispositivos de detección de faltas en las
mismas y la generación de la alarma correspondiente en la Sala de Control. Las
protecciones eléctricas de las mismas, cuya actuación produce el disparo de su
correspondiente interruptor de alimentación al circuito donde se detecta la falta
son selectivas con otros dispositivos de protección del subsistema de MT y

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otros subsistemas de baja tensión. Los circuitos de control de actuación de
interruptores son actuados por corriente continua de 125 V procedente del
subsistema de corriente continua Clase 1E de la propia subdivisión, pudiendo
asimismo procederse a la apertura manual del interruptor.

El subsistema de corriente continua (c.c.) se diseña para proporcionar el suministro


de energía eléctrica de c.c. a cargas de la central tales como válvulas, bombas,
interruptores, circuitos de control, protecciones, alumbrado, instrumentación nuclear
y otros, cuyo funcionamiento se precisa con independencia de que se disponga o no
de potencia en c.a.

El subsistema de c.c. Clase 1E de cada división comprende uno o varios centros de


distribución a 125 V, alimentados por una batería y uno o más cargadores, y los
elementos de las conexiones hacia las cargas de c.c. a ser alimentadas. El cargador
se alimenta a su vez de un centro de distribución de 400 V de la misma división, y
proporciona la alimentación de c.c. requerida para la alimentación de las cargas en
servicio y para el mantenimiento de la batería en flotación. El diseño del cargador
requiere que su capacidad sea tal que cubra la mayor demanda combinada de las
cargas asociadas al mismo en servicio en condiciones estables de la Planta más la
capacidad requerida para restablecer la batería desde el estado de mínima carga de
diseño hasta carga completa dentro del tiempo establecido en las bases de diseño,
independientemente del estado de la planta durante el cual la demanda ocurre.
Asimismo, cada cargador deberá incorporar equipos de separación en su circuito de
alimentación de c.a. y en su circuito de salida de c.c. que permita el aislamiento del
mismo, y deberá ser diseñado para prevenir que el suministro de c.a. al mismo
pueda llegar a convertirse en una demanda de carga para la batería. Los criterios
de diseño para las baterías serán tratados posteriormente en el capítulo de fuentes
de suministro de reserva. Las situaciones anormales del subsistema de c.c. son
señalizadas en Sala de Control para permitir la toma de las acciones oportunas.

Dependiendo del diseño específico de la Planta puede existir asimismo otros


subsistemas de c.c. a otros niveles de tensión, tal y como el subsistema de 48/24 V
en centrales BWR encargado de proporcionar el suministro eléctrico para la
instrumentación nuclear. La configuración de este subsistema es similar a la del
subsistema de 125 V.

El subsistema de suministro para instrumentación y control vital, cuya tensión


nominal es generalmente 120 Vc.a. (118 V en algunos casos), es proporcionar
alimentación eléctrica de c.a. a la instrumentación vital Clase 1E del sistema de
disparo del reactor, del sistema de protección del reactor, de los sistemas de control
de salvaguardias tecnológicas, y de otros servicios esenciales de la Planta.

En la IEEE Std 308 se expone al respecto del diseño de este sistema que
dadas las diversas configuraciones, especiales requerimientos y complejidad de los
sistemas a alimentar por el mismo resulta muy difícil alcanzar una detallada
definición de los requisitos de suministro eléctrico a cubrir. En cualquier caso, el
suministro de potencia deberá ser tal que se preserve la fiabilidad, independencia y
redundancia de estos sistemas.

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Las configuraciones posibles para este subsistema Clase 1E son muy
diversas, respondiendo al diseño específico aplicado en cada planta. A continuación
se exponen dos configuraciones correspondientes al diseño existente en una central
PWR y una central BWR españolas.

Ejemplo 1 (PRW):

El subsistema de 120 Vc.a. para alimentación de la instrumentación vital


Clase 1E de la Planta contempla a su vez el subsistema de energía a 120 Vc.a.
regulada y el subsistema de energia a 120 Vc.a. no regulada, los cuales son
utilizados en función de que las cargas a alimentar necesiten o no regulación de
tensión.

El subsistema de 120 Vc.a. regulada consiste en cuatro barras de


alimentación vital a 120 Vc.a. (dos asociadas a cada una de las divisiones del
sistema eléctrico Clase 1E). Cada uno de los cuatro canales redundantes e
independientes de la instrumentación y control vital de la planta, así como cada uno
de los cuatro canales redundantes e independientes del sistema de protección del
reactor y del sistema de salvaguardias tecnológicas, se alimentan desde barras
diferentes de alimentación vital. El sistema está diseñado de manera que un fallo
único afectara únicamente a una de las barras de alimentación vital y no impedirá al
sistema de protección del reactor o al sistema de salvaguardias tecnológicas llevar a
cabo su función de seguridad. Adicionalmente, cada barra de alimentación vital
dispone de vigilancia en la Sala de Control.

Cada barra de alimentación vital recibe una alimentación normal y una


alimentación alternativa. La alimentación normal de la barra procede de un inversor
estático, el cual convierte la energía en c.c. a su entrada en la energía en c.a. con
las características de regulación requeridas. El inversor a su vez puede ser
alimentado desde un CCM de 400 Vc.a. de salvaguardia asociado, a través de un
rectificador, o bien desde el sistema de 125 Vc.c. Clase 1E asociado de su división.
La alimentación normal será la procedente del CCM, y en caso de fallo de la misma
el inversor quedará alimentado desde el sistema de 125 Vc.c. sin que ello produzca
interrupción en la salida del inversor. La alimentación alternativa a la barra de
alimentación vital procede de un transformador de 400/120 V conectado a un CCM
de salvaguardia de la división. Un interruptor manual permite conectar la fuente
alternativa y dejar fuera de servicio el inversor estático y su equipo asociado cuando
se precise por razones de avería o mantenimiento.

Los sistemas no regulados de corriente alterna a 120 V Clase 1E constan de


transformadores de 400/120 V y de cuadros de distribución instalados en los CCMs
a 400 V de Clase 1E.

Ejemplo 2 (BWR):

El sistema de suministro a 120 Vc.a. Clase 1E para la instrumentación vital


consta de 2 barras (1 por división), denominadas esenciales. Cada una de estas
barras consta de un panel de alimentación que da tensión a una unidad de
suministro de potencia ininterrumpida (UPS) y a un transformador de bypass de la
UPS, y de un panel de distribución. El panel de distribución se encuentra en la Sala

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de Control, y el resto en las salas de UPS. Los paneles de distribución disponen de
alimentación doble, con transferencia automática y manual de la línea preferente a la
de reserva. La línea preferente se asigna mediante un selector y proviene de la UPS,
quedando de reserva la del transformador monofásico de 400/120 V. En caso de
pérdida de tensión en la línea preferente, se produce la transferencia automática a la
línea de reserva con paso por cero de tensión. En cada UPS la línea principal
contiene un rectificador que carga a unas baterías en flotación y alimenta a un
inversor que genera una tensión de 120 V, 50 Hz, sincronizada con la línea de
bypass para permitir la conmutación sin paso por cero. A la salida del inversor está
instalado un conmutador estático que en caso de anomalía en la línea preferente
transfiere toda la carga a una línea de bypass interna de la UPS. Los
transformadores de bypass de las UPS tienen además una alimentación alternativa
desde un CCM no Clase 1E de su misma división.

El panel de alimentación de cada barra esencial recibe tensión desde dos


CCM de Clase 1E de su misma división. Cada una de las barras esenciales dispone
de una alarma en Sala de Control, que será activada en el caso de producirse
alguna anomalía en el funcionamiento de los componentes asociados a dicha barra.

Por último, cabría resaltar que el sistema eléctrico interior, en su parte No


Clase 1E, contempla según el diseño de la planta otra serie de subsistemas a 120
Vc.a. destinados a proporcionar la alimentación requerida por servicios diversos no
relacionados con la seguridad, tales como: Subsistema de 120 V del Sistema de
Protección del Reactor (que alimenta al SPR, equipos de instrumentación nuclear, y
canales de lógica de aislamiento), Barra de Computador/SPDS (que alimenta al
cumputador de procesos y equipos del Sistema de Visualización de Parámetros de
Seguridad), Barra de Control (que alimenta equipos a 120 Vc.a. de control de la
Central en operación normal), etc.

3.3 Suministro eléctrico de emergencia

Los servicios auxiliares de una central nuclear incluyen estructuras, sistemas


y componentes relacionados con la seguridad que precisan alimentación eléctrica
para llevar a cabo su misión de seguridad incluso cuando se pierde la posibilidad de
alimentación desde la red exterior o desde el propio generador nuclear. Cuando esto
ocurre, el sistema de suministro de emergencia interno de la central ha de ser capaz
de garantizar la alimentación de aquellas cargas necesarias para la actuación de las
salvaguardias tecnológicas y para llevar al reactor a una parada segura. Este
suministro de emergencia consta tanto del suministro en corriente alterna como del
suministro en corriente continua. Unidades generadoras diesel han sido
ampliamente usadas como fuentes de suministro de emergencia en corriente
alterna. El suministro de emergencia de corriente continua lo proporcionan baterías
de emergencia instaladas en la Central.

La aplicación del GDC 17 a este suministro de emergencia interno, también


denominado fuentes de alimentación eléctrica de reserva, supone que ha de ser
diseñado con la suficiente independencia, capacidad (cualitativa y cualitativa),
redundancia y capacidad de prueba para asegurar su función. A su vez, el GDC 18
requiere que ha de estar diseñado para permitir la adecuada inspección y prueba

- 11 -
periódica para asegurar la continuidad del sistema y la condición de sus
componentes.

3.3.1 Generadores Diesel de Emergencia

Una unidad generadora diesel consiste de un motor (o motores) de


combustión interna con combustible diesel directamente acoplados a un generador
eléctrico, los sistemas auxiliares eléctricos y mecánicos asociados, y los sistemas de
monitorización, control y protección de la unidad.

La aplicación al sistema eléctrico interior de los criterios de capacidad,


independencia y redundancia establecidos en la IEEE Std 308 supone que para
cada una de las divisiones redundantes contempladas en el diseño específico de la
central se incorpore el suministro eléctrico de emergencia, con la capacidad
suficiente para alimentar los servicios de emergencia de esa división (por ejemplo,
en el caso tratado de dos divisiones del 100% cada división dispondrá de una unidad
generadora diesel de emergencia y de baterías de emergencia dimensionados con
capacidad del 100%).

Cada generador diesel de emergencia (GDE) está asignado a la barra de


emergencia de MT de su división, de manera que cuando se pierde el suministro de
alimentación desde el exterior a la misma se produce el acoplamiento del GDE a la
barra y éste se encarga de la alimentación de las cargas de la división.

El criterio de diseño en cuanto a la capacidad de los GDE establece que un


generador diesel de emergencia deberá tener capacidad para (1) arrancar y acelerar
el número requerido de grandes motores en rápida sucesión manteniendo la tensión
y frecuencia dentro de los límites aceptables, (2) proporcionar potencia de manera
rápida a los sistemas de salvaguardias tecnológicas si una pérdida de potencia
exterior y un accidente tienen lugar al mismo tiempo, y (3) proporcionar potencia de
manera continuada al equipo necesario para mantener la planta en una condición
segura si ocurre una pérdida de potencia exterior.

Los GDE son trifásicos y síncronos. La potencia nominal de un GDE en


servicio continuo es superior a la demanda de carga máxima que puede energizarse
en condiciones de accidente coincidente con pérdida de suministro exterior, más un
porcentaje de reserva. Los GDE están diseñados para dar un valor de sobrepotencia
del 10% sobre su potencia nominal durante dos horas de cada 24 horas de
funcionamiento. El GDE está diseñado para arrancar, acelerar, y mantener en
servicio las cargas conectadas a su barra de salvaguardias en los diversos modos
operativos.

Cada GDE deberá ser capaz de arrancar y acelerar a su velocidad nominal,


en la secuencia requerida, todas las cargas requeridas de salvaguaridas
tecnológicas y parada de emergencia. Cada GDE se arranca automáticamente al
menos por: señal de falta de tensión en su barra de salvaguardia, o por señal de
iniciación de las salvaguardias o señal de accidente (Inyección de Seguridad (IS),
señal de LOCA). Asimismo, se ha previsto el arranque y parada manual desde la
Sala de Control, así como desde el panel de control local.

- 12 -
El GDE se diseña para que una vez recibida una señal de arranque alcance la
velocidad síncrona, con los adecuados valores de tensión y frecuencia en sus
bornes (presencia de señal “Ready to Load”) en un tiempo no superior a 10
segundos. La secuencia de arranque para las cargas consistentes en motores de
potencia elevada se fija en periodos de 5 segundos, para asegurar que el sistema se
ha recuperado en tensión y frecuencia antes de producirse el arranque siguiente de
otro motor. En ningún momento de la secuencia de carga la frecuencia descenderá
por debajo del 95% de su frecuencia nominal ni la tensión descenderá por debajo del
75% de su tensión nominal. La frecuencia debería ser restablecida a valores del 2%
de la frecuencia nominal y la tensión al 10% de su tensión nominal en menos del
60% del tiempo de cada etapa de la secuencia de toma de cargas.

Durante la recuperación del transitorio provocado por la desconexión de la


mayor carga simple la velocidad del GDE no deberá exceder el valor de la velocidad
nominal más el 75% de la diferencia entre la velocidad nominal y el tarado del
disparo de sobrevelocidad, o el 115% de la velocidad nominal, el más bajo de los
dos. El transitorio provocado por el rechazo total de la carga del generador no
deberá provocar que se alcance el punto de disparo por sobrevelocidad.

Los sistemas asociados a la unidad generadora diesel incluyen el sistema de


arranque, el sistema de lubricación, el sistema de combustible, el sistema de
refrigeración, el sistema de aire de combustión, el sistema de extracción de humos,
el generador, el sistema de excitación, el sistema de regulación de tensión. Estos
sistemas deben tener suficiente instrumentación eléctrica y mecánica para la
vigilancia de las variables requeridas para la operación satisfactoria y para generar
las oportunas señales de situación anormal, predisparo o disparo requeridas.

El sistema de arranque de cada motor diesel es redundante, con aire


comprimido almacenado para hacer varios arranques sin el soporte de los
compresores.

El sistema de refrigeración de cada motor diesel consiste en un circuito


cerrado de agua, con un cambiador de calor aire-agua, procediendo la alimentación
de los ventiladores de las barras alimentadas por los mismos generadores.

El sistema de lubricación por aceite está compuesto por bombas, filtros e


intercambiador de calor.

El tanque principal de almacenamiento de combustible tiene capacidad


suficiente para el funcionamiento de los GDE ante un suceso base de diseño con
pérdida de energía exterior durante 7 días. Asimismo, cada motogenerador dispone
de una bomba de transferencia de gasoil, alimentada de su misma división eléctrica,
y sus propias tuberías y tanques de almacenamiento intermedio para suministro de
combustible al motor (tanque día, tanque base de almacenamiento).

La energía auxiliar para control y para la excitación del arranque es de 125


Vc.c., procedente de las baterías Clase 1E de la central correspondientes a su
misma división. Una vez arrancado el generador, la alimentación a la excitación se
conmuta pasando a tomarse de la propia salida del generador.

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El GDE deberá ser disparado automáticamente ante la actuación de la
protección de sobrevelocidad o la protección diferencial del generador. Todos los
demás disparos por actuación de las protecciones del generador diesel deben ser
baipasados en condiciones de emergencia, o deberán diseñarse las protecciones
mediante señales independientes y con lógica de actuación 2 de 2 de manera que
se evite que un fallo en las mismas pueda provocar el disparo del generador.

Cada uno de los GDE de divisiones redundantes deberá estar situado en


estructuras de seguridad separadas, y con aire de alimentación independiente. Los
elementos auxiliares del generador estarán en la misma estructura de seguridad.

El sistema de suministro exterior deberá ser independiente de los GDE. La


pérdida del generador principal no deberá causar la pérdida de las fuentes de
alimentación de emergencia.

El sistema de distribución se diseñara para que la tensión en cada uno de los


centros de distribución y para cada uno de los escalones de la secuencia, sea la
adecuada para arrancar y acelerar las cargas correspondientes. Los cables de
alimentación a las cargas se dimensionaran de manera que supongan caídas de
tensión inferiores al 5% en operación normal y al 10% en arranque.

Se han previsto indicaciones y alarmas para cada GDE en Sala de Control y


en los paneles locales, que suelen incluir: Indicadores (amperímetro, voltímetro,
vatimetro, factor de potencia, velocidad motor diesel, frecuencia de la tensión de
salida, etc), Alarmas: fallo de arranque, alarma del interruptor de conexión, alarma
general en panel local, sobrepotencia, disparo diferencial, interruptor de campo
abierto, baja velocidad, baja presión aire de arranque, bajo nivel tanque gasoil, bajo
nivel tanque dia, tajo nivel tanque expansión refrigeración, selector de arranque no
en AUTO, avería ventilador radiador, etc.

Los GDE son Clase 1E y categoría sísmica I. Asimismo, son Clase 1E aquellos
sistemas auxiliares asociados al generador diesel necesarios para el correcto
funcionamiento del mismo que garantice la realización de su función de seguridad.
La RG 1.9, la cual endorsa la IEEE Std 387-1984, proporciona una guía aceptable
por la USNRC para la selección, diseño, cualificación y pruebas de generadores
diesel usados como fuentes Clase 1E en centrales nucleares. La cualificación de
unidades generadoras de emergencia se lleva a cabo mediante pruebas tipo o
análisis, o por una combinación de ambos, y por pruebas funcionales. Entre las
pruebas de cualificación de los GDE se podrían destacar:

- Pruebas de capacidad de carga – para demostrar la capacidad de la unidad


generadora diesel para las siguientes cargas con el factor de potencia nominal
y por el periodo de tiempo indicado, y para responder satisfactoriamente a las
pruebas de rechazo de carga: Carga nominal continua, Carga nominal de corta
duración (2 horas), Rechazo de la carga de corta duración, Capacidad de
funcionamiento a baja carga o sin carga.
- Pruebas de arranque y toma de carga – para demostrar la capacidad de la
unidad para arrancar y aceptar la carga en el plazo necesario para satisfacer
los requerimientos de diseño de la planta. Se requiere la realización de 100
pruebas satisfactorias de arranque y toma de carga.

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- Pruebas de márgenes – para demostrar la capacidad del generador diesel para
arrancar y tomar cargas que son superiores al mayor escalón de carga previsto
en el perfil de cargas del diseño de la planta.
- Pruebas de envejecimiento.

Los GDE y todos sus componentes clase de seguridad han de estar


sísmicamente cualificados de acuerdo al contenido de IEEE Std 344-1987.

La documentación de la cualificación deberá ser acorde al contenido de IEEE


Std 323-1983.

Un programa de pruebas, inspección y mantenimiento preventivo debe ser


establecido para la unidad diesel generadora y todos los sistemas soporte, basado
en las recomendaciones del fabricante.

Las pruebas en el emplazamiento de los GDE consisten en las pruebas de


aceptación en el emplazamiento, pruebas preoperacionales, y pruebas periódicas.
Las pruebas de aceptación en el emplazamiento contemplan: pruebas de arranque,
pruebas de aceptación de carga, pruebas de carga nominal, pruebas de rechazo de
carga, pruebas eléctricas, y pruebas de los sistemas de control, protección y
vigilancia. El programa de pruebas preoperacionales prácticamente se corresponde
con el programa de pruebas periódicas, que se tratan a continuación.

Una vez puesto en servicio, el GDE debe ser probado periódicamente para
demostrar que mantiene la capacidad y disponibilidad para llevar a cabo la función
prevista. El alcance de las pruebas periódicas, que constituyen requisitos de
vigilancia de las ETFs para los GDEs, comprende lo siguiente:

Pruebas de disponibilidad:
- cada mes se ha de realizar una prueba de arranque y toma de carga, con una
carga del 90 al 100 %, y funcionamiento durante al menos 1 hora (se permite
arranque lento (mayor de 10 segundos) para evitar degradación innecesaria del
equipo).
- cada seis meses se ha de realizar esta prueba de arranque y toma de carga
con arranque rápido (10 segundos).

Pruebas de operación del sistema - a realizar en cada recarga:


- Prueba de PPE (para demostrar que ante una señal de pérdida de suministro
exterior las barras de salvaguardias son desenergizadas, se disparan sus
cargas, y el GDE arranca automáticamente, alcanza valores de tensión y
frecuencia en el tiempo previsto, acopla a la barra y energiza satisfactoriamente
las cargas de la secuencia de PPE).
- Prueba de IS (cuyo objeto es demostrar que ante una señal de IS el GDE
arranca automáticamente, alcanza los valores nominales de tensión y
frecuencia, y funciona en estado de espera sin conectar a la barra).
- Prueba de PPE+IS; cuyo objeto es demostrar que ante una señal de PPE
coincidente con una señal de IS el GDE arranca, alcanza valores de tensión y
frecuencia en el plazo previsto, acopla a la barra de salvaguardias y energiza
satisfactoriamente las cargas correspondientes a la secuencia de IS.
- Prueba de rechazo de la mayor carga simple.

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- Prueba de rechazo total de carga.
- Prueba de funcionamiento continuo durante 24 horas (22 horas a la potencia
nominal, 2 horas a un valor de potencia entre el 105 y el 110 % de la potencia
nominal).
- Prueba de rearranque en caliente.
- Prueba de sincronización a la red exterior.
- Prueba de anulación del modo de prueba ante una señal de IS.
- Comprobación de la anulación de los disparos por protección, excepto
sobrevelocidad y protección diferencial.

Prueba de independencia: cada 10 años, o tras una modificación que pudiese


afectar la independencia, se deberá demostrar la independencia de los trenes de
suministro eléctrico de emergencia arrancando simultáneamente los GDE
redundantes, para permitir la identificación de un posible fallo en modo común que
no pudiese ser detectado en las pruebas individuales de cada generador diesel.

Los GDEs están sometidos a un programa de verificación de la fiabilidad. La


R.G. 1.155 proporciona la guía para el establecimiento de los objetivos de fiabilidad
mínimos para las fuentes de emergencia interiores de c.a. En esta guía se
recomienda que la operación fiable de estas fuentes esté asegurada por un
programa de fiabilidad diseñado para mantener y monitorizar el nivel de fiabilidad de
cada fuente en el tiempo. Asimismo, en la R.G. 1.9 se establecen las directrices para
el análisis y contabilización de arranques y fallos de los GDEs de cara a su uso en la
valoración de la fiabilidad.

3.3.2 Baterlas

Las baterías Clase 1E de una central nuclear tienen un papel primordial como
fuentes de alimentación de c.c. de la instrumentación y control requerida para la
parada segura de la central, de equipos de tensión segura, para el arranque de
GDEs, y por ser la única fuente de energía disponible en escenarios de Station
Blackout. Según los estudios de APS, el fallo de estos equipos es uno de los que
más influyen en el riesgo de las centrales nucleares.

Las baterías son elementos capaces de proporcionar energía eléctrica desde


energía almacenada en forma de energía química. En función de los componentes
encargados de llevar a cabo esa función se pueden distinguir baterías de Plomo-
acido (Oxido de plomo en placas, H2SO4 como electrolito) o baterías Alcalinas (de
KOH, Fe-Ni, o Ni-Cd). Asimismo, en función de su forma constructiva se pueden
distinguir baterías herméticas (también denominadas estancas o cerradas) o
abiertas.

Las baterías están constituidas por una agrupación de elementos


denominados vasos o celdas. El conjunto conseguido al unir, tanto en serie como en
paralelo, estos elementos permite obtener los valores deseados de tensión y
capacidad. Los componentes principales de las celdas de las baterías son: las
placas positivas y negativas (donde está la materia activa), los separadores (entre
placas), el electrolito (que es el medio que baña a las placas y permite el movimiento
de iones para la transformación de energía, los terminales de conexión (que recogen

- 16 -
la electricidad generada sobre las placas y la conducen al exterior), y el recipiente
(formado por la tapa y la cuba).

Para el dimensionamiento de las baterías hay que tener en cuenta los criterios
de diseño generales del sistema de c.c. en que se va a utilizar, que
fundamentalmente pueden concretarse en los siguientes factores:

- la demanda de energía, en función del tiempo, a la que se va a ver sometida


(que se suele representar en un diagrama llamado “ciclo de diseño”). Para
determinar este ciclo se han de estudiar las demandas de c.c. en el más
desfavorable de los posibles sucesos que considere la central. La duración del
ciclo de diseño se determina en función de los criterios generales de diseño de
la Central y de los especificos de los consumidores del sistema de c.c. (valores
típicos son ciclos de diseño de 2 horas o de 4 horas).
- La tensión nominal del sistema en el que se va a utilizar la batería (las baterías
Clase 1E en centrales suelen ser de 125 Vc.c.).
- La tensión de flotación prevista (este parámetro puede establecer el número de
elementos de una batería, un valor usual es de 2,23 V por elemento).
- Requisitos a cumplir impuestos por los consumidores (estos son los valores de
tensión máxima y mínima que, junto con las caídas de tensión prefijadas en el
sistema de distribución, han de determinar la tensión límite de uso permitida en
bornes de la batería).
- Condiciones ambientales a las que va a estar sometida la batería.
- Reserva de capacidad para posteriores incrementos de cargas (margen de
diseño que suele estar en un 10 a 15%).
- Límite de degradación de la batería por envejecimiento (se ha de prever un
incremento de capacidad para garantizar que la batería, que va perdiendo
capacidad por envejecimiento, en el limite de envejecimiento previsto pueda
atender las demandas establecidas).

Las principales características nominales de las baterías comprenden: tensión


nominal en bornas a circuito abierto, capacidad nominal, densidad nominal del
electrolito, tensión de flotación, y tensión final de descarga.

El funcionamiento normal de una batería es acoplada a su correspondiente


barra de emergencia del sistema de distribución de c.c. La batería se encuentra en
flotación, y en paralelo con el cargador, el cual se encarga de la alimentación de las
cargas normales de la barra y de recargar la batería cuando sea necesario. Ante una
pérdida del suministro eléctrico de c.a. el cargador ya no podrá realizar la
alimentación de las cargas y será la batería la que proporcione la energía necesaria,
durante el tiempo establecido, para alimentar las cargas de c.c. previstas para la
misma. Asimismo, la batería es la que hace frente a aquellas demandas rápidas de
c.c. que no pueden ser seguidas por el cargador.

Las baterías se ubican en salas específicas adecuadamente ventiladas para


el mantenimiento de las adecuadas condiciones ambientales para su funcionamiento
y para evitar la disminución de la vida de la misma.

La IEEE Std 450-1995 define los criterios para el mantenimiento, pruebas y


sustitución de baterías de Acido-Plomo. Asimismo, en la IEEE Std 1106-1995 se

- 17 -
contemplan los criterios para la instalación, mantenimiento y sustitución de baterías
Niquel-Cadmio. El mantenimiento y pruebas periódicas a realizar son recogidos
como requisitos de vigilancia de las ETFs de cada central para las Baterías Clase
1E, y en líneas generales contemplan lo siguiente:

- Inspección periódica de la batería, al menos 1 vez al mes, consistente en un


chequeo de diversos parámetros, tales como: tensión de flotación en bornas de
la batería; apariencia general y limpieza de la batería, su rack y la sala de la
batería; la tensión e intensidad de salida del cargador; niveles de electrolito;
presencia de roturas o pérdidas de electrolito; evidencias de corrosión en
terminales, conectores, racks o cabinas; temperatura ambiente y ventilación;
tensión, densidad, y temperatura del electrolito en celdas piloto.
- Al menos una vez cada 3 meses la inspección anterior deberá ser ampliada con
los siguientes chequeos: densidad en el 10% de las celdas; tensión en cada
celda y en terminales de la batería; temperatura del electrolito en el 10% de las
celdas.
- Al menos una vez al año la inspección anterior deberá ser aumentada con los
siguientes chequeos: densidad de cada celda; condición de cada celda; medida
de la resistencia celda a celda y en terminales; integridad estructural del rack de
la batería y de la cabina.
- Prueba de servicio; donde se comprueba que la batería desde su condición “tal
y como se encuentra” es capaz de hacer frente a su ciclo de diseño; esta
prueba se realiza en cada recarga.
- Prueba de Capacidad; en la cual se calcula la capacidad de la batería cuando
ésta se somete a una descarga controlada a intensidad constante y tiempo de
duración de la descarga dependiente de un valor definido de tensión (tensión
final de la descarga). La frecuencia de la prueba será como mínimo una vez
cada 60 meses. Se aumentará la frecuencia de la prueba a un año en el caso
de que la capacidad obtenida sea menor del 90%, el descenso de la capacidad
con respecto a la de la prueba de capacidad anterior es 10% o mayor, o si el
tiempo de utilización de la batería ha superado el 85% de su vida estimada.
- Prueba modificada de capacidad; cuyo objeto es conocer la capacidad
remanente de la batería y comprobar la disposición de esta para conseguir dar
la intensidad máxima del ciclo de diseño durante el tiempo en que es
demandada. Esta es una prueba optativa que puede sustituir a las de
Capacidad y de Servicio, cuando estas coinciden y siempre y cuando la
descarga en el primer minuto no represente un valor apreciable en el total de la
capacidad de la batería.

4. OPERACIÓN DEL SISTEMA ELÉCTRICO

La evolución del sistema eléctrico de una central nuclear ante transitorios


operacionales diversos dependerá del diseño del mismo específico para cada
central. Para la presente descripción vamos a considerar como ejemplo la
configuración de la Figura 1, y suponiendo que inicialmente, en operación normal,
ambas barras normales de MT se encuentran alimentadas desde el turbogrupo a
través del TAG, y que éstas a su vez alimentan cada una de ellas a la barra de
salvaguardia correspondiente. Durante el arranque y parada de la Central, en la cual

- 18 -
no se dispone del turbogrupo, las barras normales estarán alimentadas desde el
parque de arranque (o de reserva), o bien desde el parque de 400 kV, en el caso de
que se disponga de interruptor de generación.

Estando en operación normal, cuando se produce una falta eléctrica en el


suministro de alimentación normal a alguna de las barras normales de MT se
realizará una transferencia automática rápida, mediante el disparo del interruptor que
alimentaba a la barra y el cierre del interruptor de la alimentación desde el sistema
de 138 kV. Esta transferencia se realiza con interrupción momentánea de la
alimentación a las barras, pero sin interrupción de servicio.

Ante situaciones en las que el sistema de vigilancia de mínima tensión en las


barras normales detecta una mínima tensión, bien por el fallo de la tensión de
suministro o bien por fallo en la transferencia rápida, la actuación de los sensores de
baja tensión en la barra (relés 27 tarados al 75%) da orden de disparo a la
alimentación existente a esa barra y a los interruptores de alimentación a bombas de
MT de esa barra. Cuando han abierto estos interruptores se da una segunda orden
de cierre del interruptor de alimentación desde el sistema de 138 kV (transferencia
lenta). Como alternativa a las transferencias automáticas anteriores los interruptores
de alimentación desde las líneas exteriores pueden ser actuados manualmente
desde Sala de Control. La operabilidad de cada uno de los circuitos independientes
entre la red exterior y el sistema interior y de las transferencias son probadas
periódicamente de acuerdo al contenido de las ETFs.

Ante una situación de pérdida de energía exterior (PPE o PSE) detectada por
la actuación de los relés sensores de baja tensión de una de las barras (o en ambas)
de salvaguardia (relés 27 tarados al 75%, con una lógica de actuación 1de2-2veces),
se disparan los interruptores de enlace con la barra normal, se disparan las cargas
conectadas a la barra de salvaguardia y se da orden de arranque automático al GDE
asociado. Cuando la tensión en bornes del GDE y su velocidad alcanzan valores
próximos a su valor nominal se produce el acoplamiento automático del mismo a la
barra de salvaguardia, y se inicia la secuencia de toma de cargas. La secuencia de
cargas será la secuencia de pérdida de suministro exterior en el caso de que no esté
presente una señal de IS. En el caso de que la conexión del GDE coincida con una
situación de IS la secuencia de cargas que será realizada será la secuencia de IS.

La aparición de una señal de IS en la Central sin PSE provoca el arranque


automático de los GDEs, si bien estos permanecen en operación en estado de
espera, de manera que ante una posible situación de PSE el acoplamiento de los
mismos sea inmediato.

Una degradación de tensión en la red durante un tiempo prolongado puede


ocasionar daños en los motores importantes para la seguridad, si están en servicio.
El diseño de las barras de emergencia incluye, además de protecciones que
detectan la pérdida de tensión, sensores que vigilan situaciones de tensión
degradada. La actuación de la vigilancia de tensión degradada durante un tiempo
prefijado, da lugar al aislamiento de la barra de salvaguardia correspondiente,
mediante la apertura del interruptor de alimentación a la misma, provocando con ello
la mínima tensión en la barra y las actuaciones posteriores.

- 19 -
Si ante una pérdida total del suministro exterior se produjese asimismo la
pérdida del suministro de emergencia interno de c.a. se alcanzaría una situación
conocida como “Station Blackout” (SBO), la cual se define como : “pérdida total de
potencia eléctrica de c.a. hacia las barras esenciales y no esenciales de una central
nuclear, y por lo tanto envuelve la pérdida de potencia exterior coincidente con el
disparo de la turbina y el fallo del sistema interno de c.a. de emergencia”. Los
estudios de APS han puesto de manifiesto que el SBO podría ser un contribuidor
significativo al riesgo para algunas plantas. El tema de SBO envuelve la probabilidad
de una perdida de suministro exterior y su duración, la redundancia y fiabilidad de
los sistemas de potencia de c.a. interiores de emergencia, y el potencial para
secuencias de accidentes severos tras una pérdida total de c.a. De cara a reducir
este riesgo y resolver las preocupaciones al respecto de los sucesos de SBO, la
USNRC promulgó el 10CFR50.63 “Loss of Alternating Current Power”, y emitió la
guía soporte R.G. 1.155 “Station Blackout”, la cual endorsa el NUMARC-8700 y
describe un método aceptable para el cumplimiento de los requisitos del
10CFR50.63. Las centrales españolas han realizado el análisis del cumplimiento con
la normativa de SBO, y con las directrices recogidas en el documento CSN 89-00, el
cual se ha basado en demostrar mediante análisis la capacidad del diseño existente
en la planta para hacer frente al suceso de SBO con la duración especificada, y en
otros casos se ha procedido a incorporar una fuente alternativa de corriente alterna
(AAC o Generador Diesel de SBO), tal y como se define en 10CFR50.2 y descrita en
mayor detalle en 10CFR50.63.

5. NORMATIVA BÁSICA APLICABLE A LOS SISTEMAS ELÉCTRICOS

La normativa aplicable a los sistemas eléctricos de una central nuclear es muy


extensa, por lo cual procederemos a reseñar aquí solo algunas de las normas, guías
reguladoras (R.G.) de la USNRC y documentos de la industria más importantes,
centrándonos fundamentalmente en la normativa americana por ser la de más
frecuente aplicación a las centrales nucleares españolas, en su mayoría de
tecnología procedente de este país.

- GDC 17 del Apéndice A del 10CFR50 (Code of Federal Regulations, Parte 50,
Título 10) – contempla las directrices generales para el diseño de los sistemas
eléctricos.
- GDC 18 del Ap. A del 10CFR50 – contempla los requisitos de diseño para
permitir la inspección y prueba de los sistemas eléctricos.
- Criterio III, “Control del Diseño” y Criterio XI “Control de Prueba”, del Apéndice
B del 10CFR50 “Criterios de Garantía de Calidad para Centrales Nucleares y
Plantas de Reprocesamiento de Combustible” - en los que se requieren
adecuadas medidas de verificación y chequeo del diseño, y la elaboración de
un adecuado programa de pruebas.
- Sección 50.63 “Pérdida Total de Potencia de Corriente Alterna” del 10CFR50 -
en la que se requiere que cada central nuclear de agua ligera sea capaz de
soportar y recuperarse de una situación de Station Blackout.
- IEEE Std 308-1980 - es la norma básica en la que se establecen los criterios de
diseño, condiciones de operación y requisitos de vigilancia aplicables a los
sistemas eléctricos Clase 1E en centrales nucleares. Los criterios principales

- 20 -
tratados contemplan: capacidad de respuesta ante sucesos básicos de diseño,
relación entre los Sistemas de Seguridad y los Sistemas Eléctricos Clase 1E,
efectos de Sucesos Base de Diseño, calidad de la alimentación eléctrica, Bases
de Diseño del sistema eléctrico Clase 1E, localización de indicación y control,
identificación, independencia, y cualificación del equipo, criterio de Fallo Simple,
conexión de circuitos No Clase 1E, etc.
- R.G. 1.6 - trata la independencia entre las fuentes redundantes de suministro
de reserva internas y sus sistemas de distribución.
- R.G. 1.9 - trata la selección, diseño, cualificación y prueba de los GDE Clase 1E
para su uso en centrales nucleares. Endorsa la IEEE Std 387-1984.
- R.G. 1.32 - trata los criterios básicos para los sistemas eléctricos relacionados
con la seguridad en centrales nucleares. Endorsa la IEEE Std 308-1974.
- R.G. 1.53 - trata la aplicación del Criterio de Fallo Simple a los sistemas de
protección de centrales nucleares. Endorsa la IEEE Std 379-1972.
- R.G. 1.63 - trata las penetraciones eléctricas, hace referencia a la IEEE Std
242-1986, en la que se trata la protección y coordinación en sistemas de
potencia, a la IEEE Std 317-1983, relativa a las penetraciones eléctricas en
centrales nucleares, y la IEEE Std 741-1986, en la que se exponen criterios de
protección de equipos Clase 1E.
- R.G. 1.75 - trata la independencia física de sistemas eléctricos. Endorsa la
IEEE Std 384-1974, de criterios para la separación de equipos y circuitos Clase
1E.
- R.G. 1.118 - trata las pruebas periódicas de sistemas eléctricos y de protección.
Endorsa la IEEE Std 338-1987.
- R.G. 1.128 - trata el diseño e instalación de Baterías de plomo para su uso en
centrales nucleares. Endorsa la IEEE Std 484-1975.
- R.G. 1.129 - trata el mantenimiento, prueba y sustitución de baterías de plomo
utilizadas en centrales nucleares. Endorsa la IEEE Std 450-1975.
- R.G. 1.153 - trata los criterios básicos de suministro eléctrico, instrumentación y
control de sistemas de seguridad. Endorsa la IEEE Std 603-1980, relativa a los
criterios de sistemas de seguridad de centrales nucleares.
- R.G. 1.155 - trata el tema de Station Blackout. Hace referencia al NUMARC-
8700.
- IEEE Std 323 - trata la cualificación de equipos Clase 1E.
- IEEE Std 344 - trata la cualificación sísmica de equipos Clase 1E.
- R.G. 1.160 – trata la monitorización de la efectividad del mantenimiento en
centrales nucleares. Hace referencia al NUMARC 93-01.

Líneas de
Transporte

Subestación de Transmisión

Subestación de Sumistro Eléctrico


TP Preferente

- 21 -TARs
TAG
IG
TEMA 22. REFERENCIAS

- Estudio Final de Seguridad de C.N. Almaraz, Rev. AC.14; Capítulo 8 “Sistemas


Eléctricos”.

- Estudio Final de Seguridad de C.N. Ascó II, Rev. 34; Capítulo 8 “Sistema
Eléctrico”.

- Estudio de Seguridad de C.N. Santa María de Garona, Rev. 24; Capítulo 8


“Sistemas Eléctricos”.

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