Resumen Metodologia DA-MATTA
Resumen Metodologia DA-MATTA
Resumen Metodologia DA-MATTA
ROBERTO DA MATTA
Da Matta, Roberto (1974). El oficio del etnólogo o cómo tener “Anthropological Blues”
En etnología como en los ‘’ritos del pasaje ‘’existen 3 fases o planos ( o como señala la profe en
clase : aspectos interpretativos)fundamentals cuando se trata de discurrir acerca de las etapas de
una investigación vistas través del prisma de su cotidianidad:
1-PLANO TEORICO O INTELECTUAL- (mediado por la competencia academica)
2- PLANO PRACTICO ( (profe: como hacer el trabajo), autor: Visperas de la investigación, mediado
por la perturbación de una realidad que se va tornando mas inmediata))
3- PLANO PERSONAL O EXISTENCIAL ( En Etnologia abala de las lecciones que debo extraer d
emi propio caso)
Estas fases traviesan la cotidianeidad de las etapas de una investigación:
Durante años la Antropología Social estuvo preocupada por establecer con precisión cada vez mayor
sus rutinas de investigación o el trabajo de campo. Esto se ve reflejado en la innumerable cantidad
de libros/manuales que tradicionalmente han enseñado a hacer una investigación en nuestra
disciplina. Hay que reconocer los frutos que nacieron de tal tradición (el autor plantea esas rutinas
como “un mal necesario”), pero sin olvidar la otra cara de la moneda. Es decir, los aspectos
“románticos” o anecdóticos de la disciplina, las eventualidades que le ocurren al investigador en su
afán por realizar correctamente las rutinas que aprendió durante sus estudios.
Resulta curioso cómo se desmerece esta cara de la disciplina, cuando es sabido que la
Antropología Social es una disciplina de conmutación y mediación. Lo anecdotario referente a las
investigaciones de campo es un modo muy imaginativo de depositar en un lado oscuro del oficio, sus
puntos tal vez más importantes y significativos. Es una manera vergonzosa de no asumir el lado
humano y fenomenológico de la disciplina, con un temor infantil de revelar cuánto va de subjetivo en
las investigaciones de campo, temor que es tanto mayor cuanto más inclinado esté el etnólogo a una
idealización del rigor en las disciplinas sociales.
Con Anthropological Blues el autor busca incorporar en el campo mismo de las rutinas
oficiales, ya legitimadas como parte del entrenamiento del antropólogo, aquellos aspectos
extraordinarios, siempre prontos a emerger en cualquier relación humana. Ser etnólogo implica
una doble tarea: (1) transformar lo exótico en familiar y/o (2) transformar lo familiar en exótico.
En ambos casos es necesaria la vivencia de ambos universos de significación por un mismo sujeto
dispuesto a interceptarlos y situarlos. Parecería que estas transformaciones acompañan el devenir la
disciplina.
“Es como si en la graduación nos hubiesen enseñado todo: espere un sistema matrimonial
prescriptivo, un sistema político segmentado, un sistema dualista, etc. y jamás nos hubiesen
prevenido de que la situación etnográfica no se realiza en el vacío, y, que tanto allá como aquí, se
pueden oír los anthropological blues.’’
Todo indica que el antropólogo nunca está solo. En medio de un sistema de reglas aún
exótico cuyo objetivo es tornar familiar, está vinculado –y más ligado que nunca- a su propia cultura.
Y cuando lo familiar comienza a delinearse en su conciencia, cuando el trabajo termina, el
antropólogo retorna con aquellos retazos de imágenes y de personas que conoció mejor que nadie.
Pero, situados fuera del alcance inmediato de su propio mundo, apenas lo instigan y traen a la luz
una ligazón nostálgica, la de los anthropological blues.