Estilos de Apego Adulto en Mujeres Profesionales de La Salud y Sus Hijos. Universidad de Los Andes, Venezuela
Estilos de Apego Adulto en Mujeres Profesionales de La Salud y Sus Hijos. Universidad de Los Andes, Venezuela
Estilos de Apego Adulto en Mujeres Profesionales de La Salud y Sus Hijos. Universidad de Los Andes, Venezuela
vi
A mis compañeros de curso, con especial agradecimiento a mis
del doctorado”.
vii
Duerme, duerme, dueño mío, sin zozobra, sin temor,
aunque no se duerma mi alma, aunque no descanse yo.
Gabriela Mistral
viii
ESTILOS DE APEGO ADULTO EN MUJERES PROFESIONALES DE LA
SALUD Y SUS HIJOS. UNIVERSIDAD DE LOS ANDES. VENEZUELA.
ix
ADULT ATTACHMENT STYLES IN WOMEN HEALTH PROFESSIONALS AND
THEIR SOON. UNIVERSIDAD DE LOS ANDES. Venezuela.
ABSTRACT
Introduction: The capacity that has individuals to relate emotionally with each
other allows that they constitute social beings and actively tend to build organized
communities that safeguard and regulate social interaction. These behaviors has
its stronghold in the affective links or link of attachment that settles in early
childhood with the primary caregiver, which ideally is represented by the mother.
Objective: Analyze the styles of adult attachment in professional mothers in the
Sciences of the health areas that form part of the teaching staff of the Faculty of
the medicine at Universidad de los Andes (ULA) and their teenage and adults
soon.
Methodology: A descriptive, correlational, cross-sectional and field approach cu
study was carried out both groups was applied the assessment tool: the
questionnaire of adult attachment Melero and Cantero (2008).
Results: According to two conglomerates, 69.69% of the teachers have secure
attachment styles. 54% of children were characterized with secure attachment.
According to four cluster, 39.39% of mothers have attachment insurance, 25.76%
are concerned, 21.21% are fearful and 13.64% are remote. Children show similar
results in secure and insecure attachment, but it is lower in concerned and highest
in the distant styles. (18.1% and 24.2% respectively).The mother/son relationship,
45,45% show attachment secure/secure, 19.69% secure/no secure, 9.09% no
secure/secure and 25.75% no secure/no secure. 87, 50% of the teachers of
nutrition, 69,23% of the professors of medicine and the 63.15% of teachers of
nursing have secure attachment styles. Greater the mother/son relationship with
attachment secure/secure is in nutritionists (87.50%), in the medical teachers69,
23% and the 63.15% in nursesteachers. Greater the mother/son relationship with
attachment secure/secure is in nutritionists (87.50%), doctors is 41.02% and
nurses is 42, 10%. There is consistency between the secure and no secure
typologies in the mother/son, but there is no relationship between the style
dismissing with any style of attachment of children, while preoccupied mothers are
associated with children preoccupied and dismissing.
Conclusion: Both mothers and children is more common secure attachment style.
There is a positive relationship between the attachment styles secure professional
mothers in areas of the health sciences and their children, but it is higher in the
nutritionist / son. Notobserve significant changes in the type attachment of children
when it relates to family, caregivers, and babysitter.
x
INDICE GENERAL
DEDICATORIA……………………………………………………….. v
AGRADECIMIENTOS………………………………..……..……….. vi
RESÚMEN…………………………………………………….….…… ix
ABSTRACT……………………………………………………...……. x
INDICE GENERAL…………………………………….……….…..… xi
INDICE DE GRAFICOS……………………………………………… xv
II.- JUSTIFICACION…………………………………………………..….. 6
III. EL APEGO………………………………………………………..….... 11
1.- INTRODUCCIÓN……………………………………………………… 12
4.1.- Introducción………………………………………………..…….. 18
xi
5.1.- Apego Infantil……………………………………..………..……. 36
xii
6.0.- Otros Instrumentos de evaluación del Apego Adulto……… 79
1.- INTRODUCCION…………………………………..………………… 98
1.-
INTRODUCCION………………………………………………………. 118
xiii
DIADA MADRE/HIJO………………………………….……………
X OBJETIVOS………………………………………………..…….….. 130
XV CONCLUSIONES………………………………..…………………. 186
INDICE DE TABLAS
x
Tabla 3.- Ventajas y desventajas del modelo categorial y dimensional……... 62
Tabla 9.- Distribución de los hijos por sexo según grupo etario
147
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes. Mérida, Venezuela.
Año 2011………………………..…………………..……………………..
Tabla 15.- Relación entre apego de las madres y apego de los hijos
xi
Tabla 16.-Relación entre apego de las madres y apego de los hijos
según sexo. Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes. Mérida, 162
Venezuela. Año 2011………………………………………………..
Tabla 17.- Relación entre apego de las madres y apego de los hijos
según presencia de cuidador Facultad de Medicina, Universidad de 163
Los Andes. Mérida, Venezuela. Año 2011………………………..……
INDICE DE GRAFICOS
xii
Gráfico N° 5.Distribución de las madres que reciben ayuda por
cuidador de los hijos. Facultad de Medicina, Universidad de Los
Andes. Mérida, Venezuela. Año 2011………………………………….… 151
INDICE DE FIGURAS
xiii
I.- INTRODUCCIÓN:
PLANTEAMIENTO DEL
PROBLEMA
1
La salud es el completo bienestar físico, mental y social, que
permite a una persona crecer, desarrollarse, adaptarse y mantenerse en
un ambiente ampliamente marcado por las relaciones sociales. Una de las
características más transcendental del hombre, es la habilidad de
establecer y conservar relaciones con sus semejantes. Las relaciones
interpersonales le permiten al individuo desenvolverse en las actividades
cotidianas como las escolares, universitarias, profesionales, comerciales,
románticas, entre otras. La capacidad de los individuos para establecer y
conservar las relaciones interpersonales varía entre uno y otro en una
amplio abanico de situaciones diferentes que van desde aquellas que
establecen fácilmente un acercamiento con la mayoría de personas de su
entorno hasta las condiciones patológicas en las que el individuo es
incapaz de establecer un relación afectiva. Hernández González (2009) lo
describe como un “adhesivo emocional” que es diferente en cada uno de
nosotros y refiere que los sistemas cerebrales que nos permiten formar y
mantener relaciones, se desarrollan durante la infancia.
2
responder de manera apropiada dando protección y
consuelo. Igualmente considera que la teoría formulada por John Bowlby
y Mary Ainsworth sobre el vínculo afectivo que se establece entre madre
e hijo es un planteo teórico de mucha fuerza en el área del desarrollo
socio-emocional y que con el paso del tiempo esta teoría se ha fortalecido
y enriquecido gracias a una gran cantidad de investigaciones realizadas
en los últimos años que la han convertido en una de las principales áreas
de investigación evolutiva.
3
responde con una viva sensación de alarma a las situaciones
inesperadas, por ligeramente extrañas que le resulten. Ante la inminente
partida de la figura materna o cuando ésta no puede ser hallada, el
pequeño suele emprender una acción dirigida a detenerla o buscarla, y no
logra superar su ansiedad hasta tanto no lograr cumplir sus objetivos.
(Bowlby, 1985; 1998).
4
presente estudio se plantean las siguientes interrogantes:¿Cuáles son los
estilos de apegos en las madres profesionales del área de la
salud?¿Cuáles son los estilos de apego desarrollado en los hijos de
madres profesionales de la salud? ¿Existe relación entre los estilos de
apegos desarrollados por los hijos y la ocupación de las madres en áreas
de la salud?
5
II.- JUSTIFICACIÓN
6
El presente estudio se justifica desde el punto de vista académico, ya
que representa una oportunidad de fortalecer lazos entre Instituciones
Docentes Universitarias a través de convenios que permitan el
intercambio de ideas y el aporte de conocimientos, como ejemplo a
seguir, el convenio establecido entre la Universidad Autónoma de Madrid
y La Universidad de Los Andes, que facilitó las herramientas y la
información para ampliar el conocimiento relacionado con la Patología
existencial, del que se desprende la motivación de investigar el desarrollo
del apego en el binomio madre-hijo y los estilos de apego que se
desarrollan entre las madres con ocupaciones fuera del hogar,
específicamente en el área de la Ciencias de la Salud, y sus hijos.
7
generó en mi reconocer las distintas crisis de las etapas de la vida, en
especial la relacionada con la infancia y el desarrollo del vínculo del
apego, en el rol de la madre como cuidador ideal para el desarrollo de un
estilo de apego seguro en sus niños y en profundizar si la ocupación
materna fuera del hogar, particularmente en las áreas de las Ciencias de
la Salud puede interferir o influir en la capacidad que sus hijos tendrán en
relacionarse afectivamente con otras personas:
8
una Carla absorta, ajena, que parecía no enterada que las sesiones
habían culminado. Me saludó cariñosamente como siempre, y me atreví a
preguntarle si tenía algún problema. Sus ojos se tornaron brillante e
inmediatamente las lágrimas se liberaron revelándose a la represión a la
que habían estado sometidas durante la mañana, para bañar el rostro,
ahora francamente entristecido de la alegre Carla. Me abrazó y me hizo
sentir como una tabla de madera en medio de un océano al que ella había
alcanzado para intentar no hundirse. El silencio y las lágrimas, como luces
de neón en una noche sin luna, permitían leer claramente: DANIELA.
Hasta las 11,00 am de hoy, todo parecía que iba a ser igual a todos
los días, perfectamente cronometrado al salir de casa y con las llaves del
Fórmula Uno estacionado en mi pista del tiempo particular, pero Carla
abrió las puerta de la máquina del tiempo y disminuí la velocidad, hasta
que me detuve mirando hipnotizada la mezcla de colores arremolinadas
de las vivencias de tantos años luchando entre ellas para tener el
privilegio de ser vista aunque sea fugazmente a través de la puerta recién
abierta, e invitándome a entrar, sin presiones, obligaciones, ni
cronogramas, para una nueva mirada al principio cuando empezó la
competencia entre la mujer madre y la mujer profesional…y cedí a la
invitación.
10
III.- EL APEGO.
11
1.-INTRODUCCIÓN
12
idóneamente como agentes sociales cuya supervivencia, bienestar y
desarrollo dependen de relaciones estrechas y que se realizan en torno a
ellas. (Oates, 2005)
13
Bowlby nace en Londres en una familia noble inglesa. Fue el cuarto
de seis hijos, y fue criado por una niñera, muy a la moda tradicional
británica de su clase. Su padre, Sir Anthony Bowlby, primer BaronBowlby,
fue cirujano de la Casa Real, pero con una trágica historia; a los cinco
años, su padre (el abuelo de John) muere mientras sirve como
"corresponsal de guerra" en la guerra anglo-china (guerra del opio).
Normalmente, John veía a su madre, MayMostyn, solo una hora al día
después de la "hora del té", aunque durante el verano ella estaba más
disponible. Como muchas otras madres de su clase social, consideraba
que la atención parental y afectación provocaría una peligrosa ruina.
Cuando Bowlby recién tiene cuatro años, su amada niñera, que hasta ese
momento era su principal cuidadora, se va de la familia. Más tarde,
describe esa separación como algo tan trágico como sería la pérdida de
una madre.
14
en el Hospital Maudsley de Londres, siendo en ésta prestigiosa institución
donde adquirió el título de psicoanalista. En 1938, recibió el cargo de
presidente del Trinity College y con la llegada de la Segunda Guerra
Mundial, fue reclutado para el frente como Teniente Coronel en la Royal
Army Medical Corps. En los años de postguerra, se incorporó a la vida
civil como Director de la Clínica Tavistock en 1950, trabajando como
consultor de Salud Mental de la Organización Mundial de la Salud (WHO).
Durante estos prolíferos años, elaboró varios estudios centrados en la
comprensión del desarrollo infantil y realizó ensayos sobre los patrones
de interacción familiar, tanto del desarrollo normal como el patológico.
Elaboró la compleja teoría del apego, describiendo incluso, la trasmisión
transgeneracional de las fórmulas de apego. Sus ideas sobre las
características específicas del vínculo fueron tan acertadas, que han
resistido el paso del tiempo y aún resultan vigentes en nuestros días.
15
figura materna conjuntamente con la falta de un sustituto materno afecta
adversamente a los infantes.
16
frecuentemente, incluso cuando estaban en brazos de sus madres; y
niños que parecían no mostrar apego ni conductas diferenciales hacia sus
madres. Ainsworth concluyó que estos comportamientos dependían de la
sensibilidad de la madre a las peticiones del niño.
17
Ainsworth (1983), lo define como aquellas conductas que favorecen
ante todo la cercanía con una persona determinada. Entre estos
comportamientos figuran señales (llanto, sonrisa, vocalizaciones),
orientación (mirada), movimientos relacionados con otra persona (seguir,
aproximarse) e intentos activos de contacto físico (subir, abrazar,
aferrarse). Es mutuo y recíproco.
4.1 Introducción:
18
conjunto de comportamientos de apego (llorar, buscar, aproximar) que se
organizan flexiblemente alrededor de una particular "figura de apego"
(Buchheim y Kachele, 2001).
19
El ser humano no nace con la capacidad de regular sus reacciones
emocionales. Necesita de un sistema regulador diádico, en el que las
señales del niño sobre sus estados sean entendidas y respondidas por
sus figuras significativas, lo que le permitirá alcanzar así la regulación de
esos estados. Sus experiencias pasadas con la madre, por ejemplo, son
incorporadas en sus modelos representacionales, a los cuales Bowlby
(1973) denominó Modelos de Funcionamiento Interno (Internal working
models).
La teoría del apego postula que las personas tienen una tendencia
innata a buscar vínculos de apego, y cuyas funciones principales son la
supervivencia de la especie, la protección y la satisfacción individual. Las
conductas de apego del infante humano (p.ej., búsqueda de la
proximidad, sonrisa, agarrarse y colgarse) son correspondidas con las
conductas de apego del adulto (tocar, sostener, calmar) y refuerzan la
conducta de apego del niño hacia ese adulto en particular. (García, 2005)
20
varias asociadas), y que siempre se acompañan de elementos
emocionales estrictamente relacionados con ellas y los clasificó en cinco
grupos: el sistema de apego, el sistema de afiliación, el sistema de
alimentación, el sistema sexual y el sistema exploratorio.
4.3.-Modelo de Bowlby
22
situaciones de peligro hay una respuesta conductual y emocional de
permanecer cerca de la persona que cuida y protege y aquellos que
poseen estas tendencias tienen más probabilidades de sobrevivir y de
poder traspasar dichas tendencias a generaciones posteriores
23
2. El sistema de exploración: Está en estrecha relación con el anterior
aunque muestra una cierta incompatibilidad con él pues cuando se
activan las conductas de apego disminuyen las de exploración del
entorno.
3. El sistema de miedo a los extraños: Este sistema también muestra su
relación con los anteriores, ya que su aparición supone la disminución de
las conductas exploratorias y el aumento de las conductas de apego.
4. El sistema afiliativo: Aunque entra en cierta contradicción con el miedo
a los extraños, se refiere al interés que muestran los individuos, no sólo
de la especie humana, por mantener proximidad e interactuar con otros
sujetos, incluso con aquellos con quienes no se han establecido vínculos
afectivos.
Oliva (2004) considera que lejos de ser una simple conducta instintiva,
que aparece siempre ante la presencia de un determinado estímulo o
señal, el apego hace referencia a una serie de conductas diversas, cuya
activación y desactivación, así como su intensidad y la morfología de sus
manifestaciones, va a depender de diversos factores contextuales e
individuales.
24
- Componente emocional, que incluye los sentimientos referidos a sí
mismo y a la figura de apego; aunque estos sentimientos pueden ser
muchos y muy variados, los más significativos serían los de seguridad
frente al miedo y/o angustia. Cuando se está seguro de la
incondicionalidad de la figura de apego y de la competencia del otro para
ayudar, el vínculo conlleva sentimientos de seguridad, estabilidad y
autoestima, facilitando la empatía, la ternura, el consuelo y la
comunicación emocional. Este es el componente menos estudiado, por
ser más difícil de abordar y de evaluar. López, 2006).
25
Esquema del proceso de formación del apego (Cantero, 2003)
M O D EL O
M E N T AL DE
REL A CI Ó N
I NTER A C -Expectativas sobre cómo C ALI D A
CI Ó N responderá D
la figura de apego. D EL
-Concepto de figura de apego.
-Concepto de sí mismo.
C O N D U C T AS
D E A PE G O SENTIMIENTOS
(Tipo e intensidad)
Figura 1: Esquema del proceso de formación del apego (Cantero, 2003, p. 178).
26
Lucas Taracena, y Montañés Rada,2006; Trianes y Gallardo 2004),
modelos internos de trabajo (Carrillo, Maldonado,Saldarriaga, Vega y
Díaz, 2004), modelos mentales (Feeney y Noller, 2001; Ortiz Barón y
Yárnoz Yaben,1993), modelos operantes (Bowlby, 1995, versión en
castellano; LucasTaracena y Montañés Rada, 2006; Martínez y
Santelices, 2005) y modelos operativo internos (Garrido-Rojas, 2006;
Pinedo Palacios, y Santelices Álvarez, 2006; Rutter, 1995,(versión en
castellano).
Moreno (2009) presenta gráficamente la evolución de la nomenclatura
original de Bolwby para los IWM, desde 1973 hasta el 2006. (Tabla 1)
Modelos internos o Modelos internos Marrone, 1993; Ortiz Barón et al., 2002;
Activos Yárnozetal., 2001.
27
Fuente: Moreno (2009)
Según Pinedo y Santelices (2006), todos ellos tienen en común la
idea de un esquema o mapa que se internaliza en la persona y representa
una realidad poblada de personas y objetos significativos para el
individuo. Para Pinedo y Santelices (2006) el nombre de “modelo
operante interno” es el que logra mostrar con mayor riqueza un mapa
representacional cognitivo-afectivo-dinámico, que ayuda al sujeto a
ingresar en una realidad compartida, donde cada uno de sus integrantes
tiene una mente individual con deseos, planes y necesidades distintas y
particulares, y que es necesario conocer o inferir para relacionarse entre
sí.
28
conciencia. Toda nueva información recibida es asimilada a estos
modelos preexistente, lo que justifica la tendencia a la estabilidad de
estos modelos, aunque pueden ser modificados en determinadas
circunstancias (Yárnoz, Alonso-Arbiol, Plazaola, 2001)
29
1. Mostrarse sensible a las llamadas del niño y permitir su acceso, que
llevaría a un modelo de apego seguro;
2. Mostrarse insensible e impedir el acceso del niño, lo que supondría un
modelo de apego inseguro-evitativo;
3. Atender y permitir el acceso del niño de forma imprevisible, sólo en
algunas ocasiones, lo que generaría un modelo inseguro-ambivalente.
30
especial los que no son accesibles a la conciencia, son especialmente
resistentes al cambio” (Brenlla, M.E., Carreras, M.A. y Brizzio, 2001).
31
expectativas. Los “internal working model” afectan también las reacciones
emocionales inmediatas frente a una determinada situación; así, en un
momento posterior, el procesamiento cognitivo de la situación puede
mantener, ampliar o minimizar la respuesta emocional inicial,
dependiendo de cómo el individuo interprete la experiencia.
32
1.- Fase de protesta:
33
suficientemente prolongada, poco a poco puede llegar a perder interés en
las personas e interesarse cada vez más en los objetos materiales,
juguetes, caramelos y comida. Ya no se ve ansioso frente al cambio de
enfermeras, idas y venidas de los padres, ya no le tiene miedo a nadie, ni
le importa nadie. Las reacciones de los niños muestran la influencia que la
separación de la madre tiene sobre ellos y los mecanismos psicológicos
defensivos que se movilizan para sobreponerse a la pérdida.
34
De acuerdo a Martínez y Santelices (2005), Bowlby (1969, 1979,
1980, 1988) propuso un modelo del desarrollo con claras implicancias
para la psicopatología. Según este modelo, sobre la base de repetidas
experiencias con sus figuras de apego, los niños desarrollan expectativas
en relación a la naturaleza de estas interacciones (Fonagy y col, 1995).
Estas expectativas se convierten en representaciones mentales o
"modelos operantes" como los llamó Bowlby (1980) que tienen la
capacidad de integrar experiencias pasadas y presentes, como también
esquemas cognitivos y emocionales relacionados con tales experiencias.
De esta manera los modelos operantes son un sistema interno de
expectativas y creencias acerca del self y de los otros que les permiten a
los niños predecir e interpretar la conducta de sus figuras de apego. Estos
modelos se integran a la estructura de la personalidad y proveen un
prototipo para futuras relaciones sociales (Bowlby, 1979)
35
de ciertos límites, puesto que las representaciones de las experiencias
anteriores filtran las expectativas del individuo e influyen en su percepción
de estas interacciones (Marrone, 2001).
36
La Etapa II, transcurre entre dos/tres meses a seis/siete mesesde
nacido. Se hace evidente la preferencia del lactante por personas
conocidas.
La Etapa III comprende de seis/siete meses a dos/tres años y se
caracteriza por el establecimiento del vínculo a través de conductas
dirigidas a mantener proximidad con una figura determinada y por la
expresión de miedo ante individuos extraños.
37
5.1. 2. 1.- Clasificación de Ainsworth
38
A.- Apego seguro (Tipo B)
39
Las personas con estilos de apego seguro, son capaces de usar a
sus cuidadores como una base de seguridad cuando están angustiados.
Ellos tienen cuidadores que son sensibles a sus necesidades, por eso,
tienen confianza que sus figuras de apego estarán disponibles, que
responderán y les ayudarán en la adversidad. En el dominio interpersonal,
tienden a ser más cálidas, estables y con relaciones íntimas satisfactorias,
y en el dominio intrapersonal, tienden a ser más positivas, integradas y
con perspectivas coherentes de sí mismo. De igual forma, muestran tener
una alta accesibilidad a esquemas y recuerdos positivos, lo que las lleva a
tener expectativas positivas acerca de las relaciones con los otros, a
confiar más y a intimar más con ellos (Gayó, 1999).
40
mostraban inseguros, y en algunos casos muy preocupados por la
proximidad de la madre, llorando intensamente cuando abandonaba la
habitación La interpretación global de Ainsworth era que cuando estos
niños entraban en la Situación del Extraño comprendían que no podían
contar con el apoyo de su madre y reaccionaban de forma defensiva,
adoptando una postura de indiferencia. Habiendo sufrido muchos
rechazos en el pasado, intentaban negar la necesidad que tenían de su
madre para evitar frustraciones. Así, cuando la madre regresaba a la
habitación, ellos renunciaban a mirarla, negando cualquier tipo de
sentimientos hacia ella. (Oliva,2004)
41
sensibles y cálidas en algunas ocasiones y frías e insensibles en otras.
Estas pautas de comportamiento habían llevado al niño a la inseguridad
sobre la disponibilidad de su madre cuando la necesitasen. Además de
los datos de Ainsworth, diversos estudios realizados en distintas culturas
han encontrado relación entre el apego inseguro-ambivalente y la escasa
disponibilidad de la madre. Frente a las madres de los niños de apego
seguro que se muestran disponibles y responsivas, y las de apego
inseguro-evitativo que se muestran rechazantes, el rasgo que mejor
define a estas madres es el no estar siempre disponibles para atender las
llamadas del niño. Son poco sensibles y atienden menos al niño, iniciando
menos interacciones. Sin embargo, el hecho de que en algunos estudios
se haya encontrado que en algunas circunstancias estas madres se
muestran responsivas y sensibles, podría indicar que son capaces de
interactuar positivamente con el niño cuando se encuentran de buen
humor y poco estresadas. Un aspecto muy destacado del comportamiento
de estas madres tiene que ver con su actitud ante la conducta exploratoria
del niño, ya que los estudios que han considerado este aspecto han
hallado que tienden a intervenir cuando el niño explora, interfiriendo con
esta conducta. Este aspecto, unido al anterior, aumenta la dependencia y
falta de autonomía del niño, y sirve para explicar la percepción que el niño
puede llegar a tener sobre el comportamiento contradictorio de la madre.
(Oliva, 2004)
42
los casos. Por ejemplo, puede producirse una situación conflictiva cuando
el estímulo que provoca tanto la huida como la conducta de acercamiento
de un individuo se halla ubicado entre éste último y la figura en quien se
centra su afecto. Reviste primacía una u otra forma de conducta cuando
el individuo atemorizado marcha de manera más o menos directa hacia la
figura del apego, a pesar de que para ello tiene que pasar cerca del objeto
amenazador, o cuando huye de este último aún cuando al hacerlo pone
una distancia cada vez mayor entre si mismo y la figura de apego
(Bowlby, 1985; 1998).
43
apego, pero no aporta una muestra de la conducta esperable en el niño
en cualquier entorno.
44
si ésta es inaccesible y la aflicción es esperable ante la pérdida de una
figura de apego (Simpson, Steven Rholes, 1998).
45
deber, principalmente, a que tenían poca confianza en que podrían ser
ayudados y esperaban ser desplazados porque las experiencias pasadas
así se lo decían (Thompson, 2000). Estos sujetos tenderían a manifestar
una cierta evitación al negar recuerdos, idealizando o devaluando (o
ambas) las relaciones. A su vez, los recuerdos que mantienen de sus
experiencias infantiles están teñidos por fuertes emociones al ser
recordados, expresando, frecuentemente, ira hacia sus padres. Parecen
agobiados y confundidos acerca de la relación con sus padres o figura
parental, mostrando muchas incoherencias y siendo incapaces de ofrecer
una imagen consistente y sin contradicciones (Oliva, 2004).
46
Mainy Goldwyn, (1994) citados por Fonagy, (1999), concluyen que
los individuos “ambivalentes” tienden a estar confundidos, enojados o
pasivos en relación a las figuras de apego, quejándose a menudo de las
ofensas frente a las cuales fueron víctimas en su infancia Sin embargo, le
dan una amplia importancia a sus relaciones infantiles de apego y,
paradójicamente, tienden a idealizar a sus padres, sin ser capaces de
recordar experiencias concretas. Lo poco que recuerdan lo hacen de una
forma muy fría e intelectual, con poca emoción (Oliva, 2004).
47
5.2.1.- Clasificación del apego adulto a través de Sistema
representacional.
48
Mary Main (1985) correlacionó la conducta del niño en la Situación
Extraña con el discurso de los padres. Desarrolló mediciones y
construcciones teóricas, basándose en las narrativas de padres y madres
sobre sus experiencias relacionales. Main y Cassidy (1988) concuerdan al
hablar de tres tipos básicos de niños, el tipo A (evitante), el tipo B (seguro)
y C (ambivalente) y con la ayuda de Judith Salomón, agregan un nuevo
patrón de apego, al que denomina “desorganizado/desorientado”. (Hess y
Main, 2000)
49
apego (tanto positivas como negativas), y a considerarlas importantes
para su propia personalidad. (Martínez y Santelices, 2005).
Según expresa Tapia (2001), los adultos con este estilo de apego
tienen dificultad para expresar afectos, desvalorizan la importancia de
esas relaciones en su vida adulta y presentan representaciones
idealizadas y contradictorias de sus experiencias con sus padres. Marrone
(2001) denomina a este estilo de apego como “elusivo”, y Cantón y
Cortés, (2000) lo llaman “devaluador” o “desapegado”
50
C.- Preocupado o ambivalente (Preoccupied, E).
51
En la entrevista, los adultos con este estilo de apego, demuestran,
normalmente, que hay signos de no haber superado alguna experiencia
traumática, debido a la pérdida de seres involucrados en la relación de
apego. En sus relaciones de apego infantiles hay indicadores de conflicto,
desamparo, disforia y conducta coercitiva o impredecible para con ellos
(Martínez y Santelices, 2005). Una hipótesis utilizada para interpretar esta
entrevista es que estas personas han sufrido episodios traumáticos
severos en su infancia, como muerte de un progenitor, o miedo en
respuesta al abuso sexual o físico o la violencia familiar (Lyons-Ruth y
Jacobvitz, 1999). Este estilo de apego también se ha denominado apego
no resuelto por trauma o pérdida (Main y Goldwyn, 1998).
E.- Incalificable.
53
Bartholomew y Horowitz en 1991, y la Experiences in Close Relationships
y su versión revisada (ECR y ECR-R) propuestas por Brennan y
colaboradores en 1998 y por Fraley y colaboradores en el 2000 (Martínez
y Santelices, 2005).Las autoras comparan ambos modelos como se
aprecia en la Tabla 2.
SISTEMA SISTEMA
REPRESENTACIONAL COMPORTAMENTAL
ORIGEN Psicología evolutiva Psicología SociaL
- Aisworth y col (1978) Hazan y Shaver (1987)
- Main y cols (1985,1990)
Cuestionario de autoreporte
METODO DE EVALUACION Entrevista Entrevistas
Sentimientos, conductas y
DOMINIO O FOCO DE Estado mental con respecto a: cogniciones con respecto a:
- Relación padre-hijo -Relaciones de pareja
ESTUDIO
- Temprana infancia -Relaciones interpersonales
- Pérdidas o separaciones actuales
SISTEMA DE
Categorial
Categorial
CLASIFICACIÓN Dimensional
54
En este sentido, Stein y col (2002) señalan que en recientes
estudios se plantea el tema de la concordancia entre mediciones que
entregan categorías generales de apego, como la Entrevista de Apego
Adulto o por sus sigla en inglés AAI (Adult Attachment Interview) u otros
cuestionarios que tienen un sistema clasificatorio parecido versus
mediciones que categorizan los estilos de apego en torno a dimensiones
comunes, pero cuantitativamente diferentes.
55
Para muchos autores, entre ellos Buchheim y Strauss (2002) Griffin
y Bartholomew, (1999) y Shaver, y cols., (2000) consideran que el
modelo categorial muestra desventajas si se desea utilizar estas
mediciones en el ámbito clínico, dado que acentúa el análisis en la
variación entre grupos y no al interior de los grupos humanos.
56
útiles para tareas clínicas (Bartholomew y Shaver, 1998; Fraley y Waller,
1998).
- Diferentes mediciones no
evalúan igual a los mismos
individuos - Pérdida de propiedades
- Debilidad teórica emergentes que surgen
- Induce a relaciones causales de la combinación entre
- Produce sesgo cognitivo y dimensiones
perceptuales hacia la - Su naturaleza nomotética
estereotipización genera pérdidas de
- Poco útil en el ámbito clínico información ideográfica
- Mayor dificultad en la
codificación de jueces
expertos.
57
alternativas de estrategias para enfrentar las relaciones interpersonales
en la ausencia de una habilidad para formar relaciones cercanas y
seguras. Estos autores, evalúan el comportamiento de cinco medidas de
apego adulto, realizando un análisis correlacional de componentes
principales entre ellos, obteniendo un mapeo ortogonal que arrojó una alta
correlación de dos componentes (Figura 2). El primero, inseguridad
(seguridad vs temor), que se relaciona con el nivel de ansiedad que
experimenta la persona frente a las relaciones interpersonales. El
segundo, estrategia (rechazante vs preocupado), que se relaciona con las
estrategias que los individuos utilizan para enfrentar las dificultades con
las relaciones interpersonales. (Martínez y Santelices, 2005)
58
En este sentido, Martínez y Santelices (2005), consideran que aun
cuando este modelo es relativamente reciente, viene a apoyar con
pruebas empíricas otros aportes similares que han propuesto las
dimensiones de ansiedad y evitación como las dos dimensiones que
debieran combinarse con las categorías tradicionales de apego. Un
ejemplo de esto es el modelo de cuatro categorías y dos dimensiones de
Bartholomew y Horowitz (1991), quienes agregan la categoría "temor" a
las ya conocidas y han diseñado varios cuestionarios para medirlas.
59
prototipo en un momento dado y también cómo esta adaptación puede
variar a través del tiempo
60
una perspectiva clínica. El método de evaluación de la AAPR consiste en
tres elementos principales:
61
Figura 3. Prototipos AAPR y Categorías generales de apego
PI Seguro- Autónomo Seguro
P2 Excesivamente dependiente
P3 Inestable en sus relaciones Preocupado /Ambivalente
P4 Excesivamente sobreprotector
P5 Excesivamente autocontrolado
P6 Excesivamente autónomo Evitativo/Rechazante
P7 Emocionalmente indiferente
62
alguien disponible y en quien se puede confiar, y la imagen del self, o
evaluación de uno mismo como alguien que vale o no la pena y suscita o
no el interés de los demás. Dependiendo del tipo de relaciones cercanas
que se establezcan, el sujeto puede desarrollar un modelo negativo o
positivo de sí mismo y de los otros (Bartholomew y Shaver, 1998), con
tendencia a la estabilidad, aunque estos modelos pueden ser modificados
en determinadas circunstancias (Yárnoz y cols. 2001).
63
conclusión de que existen dos dimensiones mayores subyacentes a las
mediciones del apego en el adulto: la ansiedad (frente al abandono o el
amor insuficiente) y la evitación (de la intimidad y de la expresión
emocional). Señala que aquéllas se pueden organizar en relación con
otras dos dimensiones relacionadas con las representaciones de SI
MISMO y DEL OTRO: El primero es el “modelo de sí mismo” positivo (sí
mismo merecedor de amor y de atención) vs. negativo (sí mismo no
merecedor) y el segundo, el “modelo de otros” positivo (los otros son
vistos como disponibles y protectores) vs. negativo (los otros son poco
confiables o rechazantes).
64
elementos de más de un patrón y que para evaluar adecuadamente los
sentimientos, expectativas y comportamientos de las personas en sus
relaciones de apego, es necesario considerar perfiles a través de las
cuatro categorías que plantea el modelo (Bartholomew y Horowitz, 1991).
65
que evitan involucrarse sentimentalmente. Son muy dependientes y
temen ser rechazados.
Byng Hall (1999) plantea cuatro estilos: Evitante (A), Seguro (B),
Ambivalente o resistente (C) y desorganizado/desorientado (D, o A+C).
66
Vargas y Díaz Loving (2001) realizaron un estudio de campo en
niños de primaria, encontrando siete estilos de apego: evitante-ansioso
agresivo, seguro externo, seguro interno, evitante independiente,
preocupado amistoso, ansioso manipulador e interdependiente cercano
expresivo (Vargas, A; Díaz, R y Sánchez, R., 2000).
67
convergencia entre las distintas medidas de apego adulto no va más allá
de una correspondencia moderada. (Melero y Cantero, 2008)
68
En Venezuela, Echavarria y Auvert (2007) realizaron un estudio
para evaluar las propiedades psicométricas del cuestionario de apego
adulto sobre relaciones (Relationship Quiestionnaire) en la Población
Venezolana, en la que señala que el Cuestionario de Apego Adulto sobre
Relaciones es utilizado en Venezuela dentro del entorno clínico,
habiéndose establecido parcialmente la validez, por el estudio realizado
por Torres y Urbina (2005) en el que validaron la traducción, sin embargo
señalan no haber encontrado referencias en relación a estudios de
confiabilidad. Los resultados de este estudio permitieron a los autores
afirmar que el instrumento discrimina adecuadamente la totalidad de os
estilos de apego. El apego seguro se diferencia de los estilos
Preocupado, Temeroso y Evitativo, cargando en un solo factor. El estilo
preocupado se agrupa en otro factor que corresponde a la dimensión de
ansiedad ante la separación del Brennann. El estilo evitativo se diferencia
del resto agrupándose en un factor correspondiente a la dimensión de
evitación de la intimidad. Por último, el estilo temeroso, que tiene
componentes de ambas dimensiones (ansiedad y evitación) del Brennan,
se asocia entre los dos factores pertenecientes a dichas dimensiones.
69
evitativo despectivo, argumentando que estos cuatro tipos pueden ser
puestos dentro de un espacio definido por dos dimensiones ortogonales
entres sí: valor representacional de sí mismo (positivo / negativo) y los
otros (positivo / negativo) (Fraley yShaver, 2000).En este sentido, Melero
y Cantero (2008) llevaron a cabo estudio cuyo objetivo principal fue la
creación baremación y validación de un Cuestionario de apego adulto a
partir del orinal del Cuestionario de Relación Bartholomew y Horowitz
(1991), para evaluar los estilos de apego adulto en la población no clínica
española. El Instrumento creado y validado por Melero y Cantero (2008)
fue el utilizado en esta investigación.
70
dependencia, miedo al rechazo y problemas de inhibición conductual y
emocional. El segundo, resolución hostil de conflicto, rencor y
posesividad, como un factor que describe ira hacia lo demás,
resentimiento, facilidad a la hora de enfadarse, posesividad y celos. El
tercer factor, denominado expresividad emocional y comodidad con la
intimidad, evalúa sociabilidad, facilidad para expresar emociones y
confianza en los demás a la hora de expresar y solucionar los problemas
interpersonales. Por último, el factor autosuficiencia emocional e
incomodidad con la intimidad, se centra en el menosprecio de las
relaciones íntimas, en la dificultad para comprometerse y en la
sobrevaloración de la independencia personal. (Melero y Cantero (2008)
71
Académicos 2009- B y 2010-A, teniendo como docente del Curso, la
investigadora. Previo a la realización del análisis factorial, se analizó la
adecuación muestral de los 40 ítems iniciales a partir del análisis de la
diagonal de matriz de correlación anti-imagen. El 96% de los ítems
obtuvieron índices de moderados a muy óptimos (M.S.A. > .70), no
existiendo ningún ítem dentro de la categoría de inaceptable. Los índices
de consistencia interna de las 4 escalas fueron evaluados mediante el
coeficiente a de Cronbach. La escala de "Baja autoestima, necesidad de
aprobación y miedo al rechazo" obtuvo un índice de .86; la escala
"Resolución hostil de conflictos, rencor y posesividad" de .80; la escala
"Expresión de sentimientos y comodidad con las relaciones" de .77; y la
escala "Autosuficiencia emocional e incomodidad con la intimidad" de .68
72
Martínez y Santelices (2005) esquematizan las líneas de
investigación en grupos basadas en dos diferentes conceptualizaciones y
maneras de evaluar el constructo. La primera línea o Sistema
representacional se inicia con las observaciones de Ainsworth sobre
padres e hijos y luego por psicólogos clínicos, quienes diseñaron
entrevistas para estudiar el "estado mental" o "sistema representacional"
de los padres con respecto al apego. Los autores, señalan que la Adult
Attachment Interview (AAI) es el principal instrumento de medición del
"estado mental" y consiste en una larga entrevista que evalúa los
recuerdos que un adulto tiene de sus relaciones con sus figuras de apego
en la infancia. La AAI es codificada en términos de la coherencia del
discurso que muestra la persona mientras relata experiencias relevantes
de su infancia, como también la estructura de su relato y su habilidad para
colaborar efectivamente con el entrevistador. De esta codificación surge
una clasificación del individuo en una de 4 categorías que serían
equivalentes a las descritas por Ainsworth.
73
(“Totalmente de acuerdo”). La mitad de los ítems evalúa la dimensión de
ansiedad y los 18 restantes la de evitación. (Fernandez y cols, 2011)
74
mismo y del otro en las relaciones interpersonales (Pierrehumbert y
cols.,1996) para lo cual construyeron un instrumento que destacara las
relaciones de la infancia y las representaciones de las personas en cuanto
a sus necesidades personales y las de los demás. Los ítemes están
dirigidos a cubrir 4 niveles de realidad: el presente, el pasado, el estado
de ánimo y las generalizaciones En cada uno de estos niveles, los ítemes
exploran las estrategias relacionales, a) estrategia primaria: la persona
valora el apoyo social y la seguridad relacional (prototipo seguro) y b)
estrategia secundaria: la persona valora la independencia en desmedro
del apoyo relacional (prototipo rechazante) o, por el contrario, valora la
implicación interpersonal en desmedro de la autonomía (prototipo
preocupado). El cuestionario está constituido por 72 ítemes reagrupados
en las siguientes escalas: Escala A: Interferencia Parental (IP); Escala B:
Preocupación Familiar (PF); Escala C: Resentimiento de Infantilización
(RI); Escala D: Apoyo Parental (AP); Escala E: Apoyo Familiar (AF);
Escala F: Reconocimiento de Apoyo (RA); Escala G: Indisponibilidad
Parental (IP2); Escala H: Distancia Familiar (DF); Escala I: Resentimiento
de Rechazo (RR); Escala J: Traumatismo Parental (TP); Escala K:
Bloqueo de Recuerdos (BR); Escala L: Demisión Parental (DP); Escala M:
Valorización de la Jerarquía (VJ).
75
cuyos contenidos estaban relacionados de forma más directa con el
Apego. Las láminas seleccionadas fueron: Portada, Camada,
Vacilaciones, Juegos Sucios y Pelea; Posteriormente realizaron un
análisis a partir de las historias obtenidas para cada lámina, establecieron
nueve categorías de interpretación, algunas de ellas tomadas de la
investigación realizada por Yárnoz, en 1993. Al comparar el número de
sujetos en cada uno de los tres estilos de apego, encontraron que de 30
adolescentes entre 12 y 14 años, el 13,33 % (n=4) de los sujetos
presentaron un estilo de apego seguro, y para los dos estilos de apego
inseguro se registra el mismo porcentaje, 43,33 % (n=13) en el estilo de
apego Inseguro Evitativo y el 43,33 % (n=13) restante, en el estilo de
apego Inseguro Ansioso. Los Investigadores consideran que los
resultados se corresponde con la tendencia de la muestra a agruparse
hacia los estilos inseguro-evitativo e inseguro ansioso, y se confirman con
la relación estadísticamente significativa que se encontró entre las
variables estilos de apego y la categoría de movimiento agresivo, lo que
quiere decir que la mayoría de los sujetos que componen la muestra
presentan un mayor número de respuestas asociadas a contenidos
agresivos que están ocurriendo en tiempo presente.
76
traves de la evaluacion de tres dimensiones: confianza, comunicación y
alienación.
77
que la solución del análisis de conglomerados para la escala de apego
con la madre se obtuvieron seis grupos para la escala de apego estudiado
por Ainsworth y cols. (1978). Esta solución describe dos grupos que
representan el estilo de apego seguro, que corresponden al 46.32% de la
muestra poblacional estudiada. El estilo de apego evitativo se refleja en
tres grupos representando el 39.58% de la muestra. Por su parte, el estilo
de apego ambivalente es característico de un grupo y representa el
14.11% de la muestra de adolescentes colombianos. La solución del
análisis de conglomerados para la escala de apego de apego con el padre
mostró una estructura semejante a la encontradaen la escala de la madre.
78
Santelices, Pierrehumbert y Armijo, 2009) y el Cuestionario de Relaciones
Barthoemew y Horrowitz (1991.)
Por otro lado, Oliva (2004) destaca que el hecho de que los padres
seguros tengan hijos con apego seguro, que los padres preocupados
tengan niños con apego inseguro-ambivalente, y los padres rechazados
79
niños de apego inseguro-evitativo, ha sido constatado en distintas
investigaciones que han encontrado que la capacidad predictiva que las
representaciones maternas tienen sobre el tipo de apego que establecen
sus hijos ronda el 80%.
80
Ellos encontraron una asociación clara entre los modelos de apego
categóricos en tres generaciones, que indicaba que los estilos de apego
de las hijas eran, en la mayoría de los casos, similar a los estilos de
apego de sus madres.
81
guardaba relación con los receptores de oxitocina, cuyo papel en los
vínculos afectivos está más que demostrado (OXTR).
82
en la infancia (Situación del Extraño) y en la adultez (ECR Inventory o
Adult Attachment Inventory) puede estar relacionado con la mayor
heredabilidad encontrada tras la adolescencia.
83
IV.- DISFUNCION Y
PSICOPATOLOGIA DEL APEGO
84
1.- INTRODUCCIÓN:
85
la repercusión de las vinculaciones tempranas sobre la construcción y el
desarrollo relacional, emocional, neuropsicológico y cognitivo.
86
tiene miedo a perder sus amigos (frustrar un motivo de
comunión/pertenencia/dependencia). La existencia de relaciones
interpersonales pobres o perturbadas es, asimismo, una marca en la
mayoría de los trastornos de personalidad (TP). Muchos autores
sostienen que un TP es esencialmente un trastorno de relación
interpersonal. En muchos desordenes de la personalidad, motivaciones
de tipo interpersonal son frustradas provocando un intenso distrés
emocional.
87
ritmo de sueño y alimentación, padece de aerofagia y cólicos
consecuentes, y desarrolla conductas reactivas a dicha agresión, con
rechazo al exceso de alimentación y llantos excesivos e incontrolables.
Ello, confunde más a su madre y se crea un círculo vicioso en el cual
cada uno agrede y enferma al otro.(Pinto, 2007)
88
razonamiento a la hora de interpretar distintas experiencias de pérdidas y
traumas (Oliva, 2004)
89
emocionales y físicas básicas del niño. En algunos casos se asocia a
cambios frecuentes o discontinuidad en el cuidador principal a cargo del
niño(a). Ambos subtipos, inhibido y desinhibido, se identifican en los niños
expuestos a malos tratos y a institucionalización (Zeanah, Scheeringa,
Boris,2004).
90
pueden explicarse exclusivamente por y no cumple criterios de trastorno
generalizado del desarrollo y debe correlacionarse con las
manifestaciones de la crianza patogénica caracterizadas por
desestimación permanente de las necesidades emocionales básicas del
niño relacionadas con el bienestar, la estimulación y el afecto, o por
desestimación persistente de las necesidades físicas básicas del niño, y/o
por los cambios repetidos de cuidadores primarios, que impide la
formación de vínculos estable. Los Niños con relaciones sociales
alteradas, que se manifiestan con dificultad para iniciar las interacciones
sociales con respuestas inhibidas, hipervigilantes, ambivalentes o
contradictorias se clasifican como Tipo Inhibido, mientras que aquellos en
que predominan los vínculos difusos manifestados por una sociabilidad
indiscriminada con acusada incapacidad para manifestar vínculos
selectivos apropiados se clasifican como Tipo Desinhibido.(Díaz y
Blánquez 2004)
91
Soares y Dias (2007) hacen un estudio teórico en donde presentan
las contribuciones de los estudios y trabajos de investigación
relacionados con el apego y la psicopatología del adolescente y del
adulto. Los autores citan el meta-análisis realizado por Botella y Gambara
(2006) basada en 14 estudios que utilizaron instrumentos de evaluación
del apego adulto con muestras clínicas, en jóvenes, adultos y padres con
niños con trastornos y en la que los resultados arrojaron que en las
muestras clínicas existe una sobre representación de las organizaciones
de apego insegura estadísticamente muy significativas, no encontrándose
relaciones sistemáticas entre un determinado tipo de organización
insegura (desligada o enmarañada) y un tipo específico de trastorno
psicológico. Por otro lado, algunos estudios clínicos muestran que la
organización enmarañada es más frecuente en muestras de madres y
padres maltratadores o abusivos, de padres con niños con trastorno
oposicional, así como en muestras de adultos deprimidos o borderline.
Estos mismos estudios revelan que la organización desligada es más
frecuente en padres de niños con trastornos del sueño. Cuando se
analizan las muestras de padres de niños con trastornos psicológicos,
apenas el 14% son catalogados como seguros-autónomos, en contraste
con 45% inseguros-enmarañados y 41% de inseguros desligados. Estos
resultados al ser comparados con muestras de padres con niños
hospitalizados por enfermedades físicas agudas o crónicas, sugieren que
solo los problemas emocionales y de comportamiento de los niños están
asociados a la inseguridad de los progenitores.
92
una de las causas de violencia juvenil. Afirma que el apego es uno de los
elementos básicos dentro de los aspectos psicológicos para lograr un ser
humano operativo. La misma autora, señala que acorde con la teoría del
apego, la conducta controlada del niño desorganizado en etapa escolar
puede desarrollarse para contener la conducta amenazante de los padres
y se generaliza posteriormente a otras situaciones conflictivas con los
iguales e incluso con los profesores. Lyons y Ruth (1996) citado por
Mejías (2010), en la revisión que realizan sobre las investigaciones de las
conductas agresivas de los niños, concluyen que el apego desorganizado
de la primera infancia predice conductas violentas en la edad escolar.
93
esto plantea la posibilidad de que los adultos que han desarrollado un
estilo de apego seguro tienen más alta autoestima, sean socialmente más
activos y presenten menos sentimientos de soledad que aquellos con un
estilo de apego inseguro.
94
de apego y las fijaciones en las distintas etapas de desarrollo infantil que
estos vínculos pudieran haber dejado, en especial en adolescentes que
presentan problemas de comportamiento y manifestaciones agresivas
verbales o físicas.
95
traumáticas, pueden modificar los estilos de apego, lo que los motivó a
estudiar la asociación del apego inseguro con la enfermedad renal crónica
terminal.
96
V.- LA MUJER Y LA OCUPACION
FUERA DEL HOGAR.
97
1.- INTRODUCCIÓN
98
2.- OCUPACION LABORAL FUERA DEL HOGAR DE LA MUJER EN
AMERICA LATINA
99
sobre la naturaleza femenina, dotada de virtud para las labores
domésticas, mientras que el hombre estaría relacionado con el suministro
y producción de bienes y servicios.
100
participación femenina en el período 1990 - 2002 (similar al observado
durante los ochenta), mientras la masculina se estanca.
Cono Sur
Argentinab/ 38 48 50 64
Paraguayc/ 50 57 59 70
Brasilc/ 45 53 54 67
Chiled/ 35 42 48 57
Uruguay 44 50 58 69
Región Andina
Colombiae/ 48 57 59 72
Venezuela 38 55 49 65
Ecuador 43 53 54 65
Perú f/c/ 62 54 75 72
Boliviag/ 47 57 64 74
Centroamérica y México
Costa Rica 39 46 50 60
Honduras 43 47 53 59
Méxicog/ 33 45 43 57
Panamáe/ 43 54 58 68
El Salvadorc/ 51 51 64 68
Guatemalag/ 43 58 51 68
Nicaraguah/c/ 44 52 62 63
República Dominicanai/ 53 53 62 68
101
En base a las cifras del informe de la Organización Internacional
del Trabajo (OIT, 1999), se pueden establecer comparaciones de la
participación laboral femenina con países desarrollados correspondientes
al año 1997: Alemania, 47.7%, Canadá, 57.4%; Estados Unidos, 59.8%;
Francia, 47.8%; Japón, 50.4%; Reino Unido, 3.9% (OIT, 1999).
103
VI.- LA MUJER Y LA OCUPACION
LABORAL EN LAS AREAS DE
LAS CIENCIAS DE LA SALUD
104
1.- INTRODUCCIÓN:
105
madre o sustituta) en los primeros estadios evolutivos del hombre es
considerada como la práctica de cuidados más antigua.
106
Las primeras órdenes de mujeres trabajadoras (grupos de
enfermería) crecieron rápidamente y se convirtieron en expresión de los
deseos filantrópicos y vocacionales, formando parte de ellas las
diaconisas y las viudas y más tarde se incorporaron las vírgenes, las
presbíteras, las canónigas y las monjas, aunque sólo las diaconisas y las
monjas se dedicaban a la enfermería. La diaconisa primitiva podía estar
casada, ser viuda o virgen. Febe (60 d.C) es reconocida como la primera
diaconisa y la primera enfermera visitadora siendo la única diaconisa a
quien menciona San Pablo en el Nuevo Testamento. Las diaconisas
trabajaban sobre una base de igualdad con el diácono, tenían múltiples
funciones entre ellas colaborar en el sacramento del bautismo, cuidar y
visitar a los enfermos, llevarles comida, dinero, vestido, atención física y
espiritual, entre otras. (McCormack, 2007)
107
En total aplicaron 437 encuestas y la variable independiente fue la
internalización de estereotipos de género evaluada mediante el Inventario
de Masculinidad y Feminidad, y la variable dependiente fueron los motivos
por los cuales las estudiantes habían elegido su carrera. En este estudio,
las estudiantes de enfermería registraron los valores más altos en los
rubros de feminidad, es decir, se perciben más compasivas, sensibles a
las necesidades de los demás, caritativas, cariñosas, amigables, tiernas,
dulces, les agradan los niños, entre otros. Con respecto a la sumisión, las
estudiantes de enfermería ocuparon el mayor porcentaje en comparación
con otras carreras. Aunado a lo anterior ellas también ocupan el primer
lugar al haber elegido la carrera por tradición familiar en la enfermería,
datos que le sugiere a los autores, que el cuidado de la salud, es una
función socialmente atribuida a la mujer y posteriormente a las
enfermeras al profesionalizarse esta actividad.
108
también ha actuado como un centro asociado de la Universidad de las
Naciones Unidas. El INCAP fue creado el 20 de febrero de 1946, por
acuerdo de los Ministros de Salud de Costa Rica, El Salvador, Guatemala,
Honduras, Nicaragua, Panamá y el director de la Organización
Panamericana de la Salud. La inauguración se llevó al cabo el 16 de
septiembre de 1949 con el propósito de investigar el problema nutricio
alimentario e identificar posibles soluciones, contribuir al desarrollo de la
ciencia de la nutrición, promover su aplicación y fortalecer la capacidad de
los países miembros para resolver sus problemas.(Hernández, 2009)
109
crea el Instituto Nacional Pro-alimentación (INPAP) Popular, que funcionó
hasta 1949 y en la que la Sección de Nutrición se convirtió en la División
Técnica del INPAP. Durante esta etapa se inician algunos estudios de
nutrición. En 1949 se crea el Instituto Nacional de Nutrición. Durante este
período, se calcularon los primeros requerimientos calóricos de la
población venezolana. Se fundan una red de comedores Populares y
Escolares. En 1950 aparece la revista Archivos Venezolanos de Nutrición
y se crea la escuela Nacional de Dietista y el 18 de noviembre de 1951 se
celebró por primera vez el día nacional de la alimentación. (Landaeta y
col, 2005)
110
sumado a lo anterior concluyen que los motivos de elección de carrera se
relaciona con la compatibilidad con las labores del hogar, que es
adecuada para su sexo, le permite el cuidado de los hijos y mantenerse
saludable, características que tradicionalmente se les ha asignado a las
mujeres. Los autores consideran que en el caso de esta disciplina se
profesionalizaron actividades femeninas lo que la hace atractiva para su
ejercicio profesional en mujeres que tienen que hacer compatible su rol de
género y el ámbito público.
111
En América latina, la primera universidad fundada oficialmente, de
acuerdo a la normativa jurídica impuesta por la monarquía española, fue
la Real y Pontificia Universidad de San Marcos, actual Universidad
Nacional Mayor de San Marcos en Lima, Perú. Las dos primeras
secciones con las que inicia la Escuela de Medicina fueron creadas en
1571. Laura Esther Rodríguez Dulante, luego de rendir los exámenes
integrales, recibió el Título de Médica Cirujana, por primera vez otorgada
a una mujer, con fecha 25 de octubre de 1900 convirtiéndose en la
primera mujer que juró la demanda hipocrática en el Perú.( Díaz, 2007)
112
de Padua, de Valencia en 1775, el de San Felipe del Fuerte 1776,
Guanare en 1778, Puerto Cabello 1779, el de Cumaná en 1789 y
finalmente el de Barinas en 1793. Hospitales que fueron regentados por
mayordomos y estuvieron, en la mayoría de lasveces a cargos de
médicos y cirujanos romancistas. Los estudios de medicina se iniciaron en
la Universidad de Caracas el día 10de octubre de 1763 por la insistencia y
el empeño del Dr. Lorenzo Campins y Ballester, egresado del Real
Universidad de Gandía. La junta examinadora para los aspirantes al título
de médico estaba constituida por dos representantes del cabildo
eclesiástico y secular, dos guardianes de los conventos de Caracas, el
Rector de la Universidad Real y Pontificia, el Protomédico y el Capitán
General de la Provincia de Venezuela.(Mérida Fuentes, 2005)
113
2005-2006, lo que representa 3 puntos más que en 1998 y 73 puntos más
que en 1955 (Ortiz-Gómez, 1985, 2007).
114
responsabilidad en el ejercicio de la profesión. (García Guerrero Jair,
2007)
115
salud de sexo femenino (42.1%), y de estas, 246 (64.3%) tienen hijos,
distribuidas de la siguiente forma:48 son contratadas, 64 son profesoras
fijas y 134 son profesoras jubiladas). De las Profesoras activas con
condición fija (ordinaria) o contratadas,71 (64%) tienen hijos mayores de
15 años, y de las profesoras en condición de Jubiladas, 123 (92%) tiene
hijos adultos.
116
VII.- RELACION ENTRE DE LA
OCUPACION LABORAL DE LA
MADRE YEL DESARROLLO DE
PSICOPATOLOGIA DEL APEGO.
117
1.- INTRODUCCION.
Los resultados a las que han llegado las investigaciones sobre los
efectos del trabajo materno son inconsistentes.
118
alternativos y el tipo de apego que los niños establecían con sus madres.
Los estudios revisados por estos autores encontraron una relación
negativa entre apego y las guarderías, ya que aquellos niños que no eran
cuidados exclusivamente por sus madres tenían más posibilidades de
mostrar apegos inseguros, por lo que podrían ser considerados como
población de riesgo. En concreto, eran aquellos niños que durante el
primer año de vida recibían más de 20 horas semanales de cuidados
alternativos quienes tenían más posibilidades de ver alterado su
desarrollo(el 35% de estos niños, y el 47% cuando los cuidados
alternativos superaban las 35 horas, desarrollaban apegos inseguros con
sus madres). Los cuidados alternativos que más parecían perjudicar la
formación del vínculo con la madre, además de los que suponían más
tiempo, eran los que tenían lugar fuera de casa.
119
necesidad de recurrir a instituciones que se encarguen de la crianza
infantil. Así, a lo largo de un día de trabajo, el infante permanece más
tiempo de vigilia en la institución que al lado de su madre. De la crianza a
la que se exponga el infante en estas instituciones dependerá en gran
medida, su desarrollo intelectual (Guzmán, A; Barranco, R y González, S;
1989).
120
sobreestimulación por la madre y la congruencia entre la actitud de la
madre y el estado de trabajo. Sin embargo, Clarke-Setwar insiste en que
no hay evidencias convincentes que estos factores estén implicados. El
autor señala que los factores más prometedores para ser utilizados en la
contabilización de las diferencia individuales en el desarrollo de los niños
que asisten a guarderías serian la actitud emocional de la madre hacia el
bebe, su accesibilidad emocional y la sensibilidad del comportamiento, y
su deseo de independencia (la suya y la del bebé).
121
ese papel. Algunos investigadores han observado que el niño puede
correr un riego ligeramente mayor de apego inseguro, si la madre
regresaba a trabajar en los primeros nueve meses después de dar a luz,
sin embargo consideran que no se debe dar mucho valor a esos
hallazgos, porque la mayoría de los niños cuya madre regresan a trabajar
terminan logrando un apego seguro, sobre todo cuando la madre es
buena cuidadora y trabaja porque ella quiere.
123
VIII.- RELACION ENTRE EL
ESTILOS DE APEGO DE LAS
MUJERES PROFESIONALES DEL
LAS CIENCIAS DE LA SALUD Y
DE SUS HIJOS.
124
1.- INTRODUCCIÓN.
125
conjeturar acertadamente la seguridad de las relaciones de apego que
luego establecerían sus hijos con ellos.
126
que los patrones de apego inseguros de los hijos de madres
trabajadoras corresponden a 90.3% distribuidos en 35% evitativos,
26.2% ambivalentes y 29.1% desorganizados; y en los hijos de madres no
trabajadoras el 91.6% tuvieron apegos inseguros, distribuidos en 29.6%
evitativos, 22.2 % ambivalente y 39.8% desorganizados.
127
IX.- INTERVENCION EN
DISFUNCIONES Y
PSICOPATOLOGIAS DEL APEGO
128
1.- INTRODUCCION.
129
manifestar sus sentimientos y las dificultades experimentadas durante la
sesión. Esta discusión se suele utilizar para indagar sobre las
experiencias vinculares en los propios padres. Esta intervención ha sido
utilizada para incrementar el vínculo y mejorar el funcionamiento del niño
en otras áreas.
130
de generalizarlos a la relación con otras personas. Los sentimientos que
experimenta el niño durante la actividad lúdica deben ser devueltos e
interpretados por el terapeuta. Este método se ha utilizado en niños
traumatizados y que presentan trastorno del vínculo. En estos casos la
intervención debe ser inmediata al trauma. Por último, existe un programa
de intervención pensado para establecer el vínculo tras la adopción. Es el
Programa de Terapia Familiar de Cohen. (Díaz y Blanquez, 2004).
131
Los programas que se focalizan en las representaciones mentales
de apego o modelos operativos internos de los padres, o como señala
Lecannelier (2002) en la capacidad de mentalización o de inferir estados
mentales (creencias, planes, deseos y expectativas) en uno mismo y en
los otros, se fundamentan en el hecho de que los padres que poseen
mayor desarrollo de esta habilidad de mentalización tienden a tener niños
más seguros, 3 o 4 veces más que los padres inseguros.
132
intervenciones incluyó el uso de masajes al bebé y de videos educativos y
otra intervención la discusión sobre la historia de apego temprana de las
madres, apuntando a mejorar sus representaciones de apego. (Gómez,
Muñoz y Santelices. 2008).
133
multiproblemáticas o multiestresadas, que han mostrado ser resistentes a
otras formas de abordaje. La interacción guiada se centra en las
interacciones madre/padre-niño(a) y consiste en sesiones de juego
familiar grabadas en video, intercaladas con sesiones de exposición y
discusión junto al padre y/o madre, así mismo secuencias de interacción
positivas y negativas escogidas por el terapeuta, que permitan a los
padres a mejorar su comprensión del hijo(a), identificar y reforzar sus
propias competencias, a disfrutar de la relación con su hijo(a) y a mejorar
el vínculo afectivo entre ambos. Los autores reconocen que es necesario
seguir investigando sobre la efectividad de estos programas, pero para
ilustrar esta forma de terapia citan a Suarez (2008) quienes han mostrado
el potencial de aplicación en organizaciones sociales con niños y familias
con historia de trastornos vinculares, vulneraciones transgeneracionales y
apego interrumpido por procesos de institucionalización temprana.
134
entre otros resultados no relacionados con el foco de este
artículo.(Gómez, Muñoz y Santelices, 2008).
135
X.- OBJETIVOS
136
La presente investigación pretende avanzar en la comprensión de
los procesos de interacción que se dan dentro de la diada Madre-Hijo,
examinando específicamente el rol de la profesionalización de las madres
en las áreas de la salud (Medicina, Enfermería y Nutrición) en el
desarrollo del vínculo del apego con sus hijos.
Para ello nos planteamos los siguientes objetivos:
OBJETIVO GENERAL.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS.
137
Objetivo 3: Establecer relación entre el estilo de apego de las madres
profesionales de la salud y tipo de apego adulto de sus hijos.
138
XII.- METODOLOGÍA
139
1.- Tipo y diseño de Investigación:
2.- Población.
140
3) Tener al menos un hijo mayor de 15 años de edad.
4) Consentir en participar en el estudio (tras lectura y aceptación de
consentimiento informado que se les da por escrito).
Los hijos de las Profesoras objeto de este estudio debían cumplir los
siguientes requisitos:
1.1.- Criterios de inclusión
1) Ser mayor de 15 años de edad
2) Consentir en participar en el estudio (tras lectura y aceptación de
consentimiento informado que se les da por escrito).
1.2.- Criterios de exclusión
1) Tener problemas de salud que le impidan comprender o responder el
cuestionario
141
resolución hostil de conflicto, rencor y posesividad, evalúa ira hacia los
demás, resentimiento, facilidad a la hora de enfadarse, posesividad y
celos. La tercera escala, expresividad emocional y comodidad con la
intimidad, evalúa sociabilidad, facilidad para expresar emociones y
confianza en los demás a la hora de expresar y solucionar los problemas
interpersonales. Por último, la escala 4 concierne a autosuficiencia
emocional e incomodidad con la intimidad y valora la priorización de la
autonomía frente al establecimiento de lazos afectivos, la evitación del
compromiso emocional y la sobrevaloración de la independencia
personal. Estas 4 escalas representan dimensiones donde los sujetos se
sitúan en un continuo. Además de evaluación dimensional, este
cuestionario permite obtener un diagnóstico por categorías de apego.
TEMEROSO
PREOCUPADO SEGURO ALEJADO
HOSTIL
Escala 1: baja
Autoestima, necesidad MUY ALTO ALTO MUY BAJO BAJO/MOD
de aprobación y miedo 52 49.15 28.94 35.73
al rechazo
MUY ALTO MODERADO BAJO MODERADO
Escala 2: Resolución 44.73 28.17 22.34 32.70
hostil de conflictos,
rencor y posesividad.
BAJO MOD/ALTO ALTO BAJO/MOD
Escala 3: Expresión de 35.51 40.40 44.13 38.29
sentimientos y
comodidad con las MOD/ALTO BAJO/MOD BAJO ALTO
relaciones. 15.51 13.99 18.73
18.97
Escala 4:
Autosufieciencia
emocional e
incomodidad con la
intimidad
143
Análisis Estadístico:
Estudio Descriptivo:
Estudio analítico:
144
XIII.- RESULTADOS
145
Análisis de los resultados.
Tabla 8.
Distribución de las madres según grupo etario
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Grupo etario Total %
146
En relación a los hijos, 56,92% son mujeres y 43,08% hombres.
Por grupo etario se observó que 38,46% oscilan entre los 15 y 19 años,
30,77% entre los 20 y 24 años, 15,38% entre 25 y 29 años, 9,23% fluctúa
entre 30 y 34 años y 6,15% entre 35 y 39 años. (Ver Tabla 9)
Tabla 9.
Distribución de los hijos por sexo según grupo etario
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Sexo
Grupo etario Mujeres Hombres Total %
Total % Total %
[15 - 19] 14 21,54% 11 16,66% 25 38,20%
[20 - 24] 13 20,00% 7 10,60% 20 30,60%
[25 - 29] 5 7,69% 6 9.09% 10 16,78%
[30 - 34] 2 3,08% 4 6,06% 6 9,14%
[35 - 39] 3 4,62% 1 1,51% 4 6,13%
Total 37 56,92% 28 43,08% 65 100,00%
Fuente: Cuestionario de apego adulto (Hijos)
Nota: se excluyen los que no declararon
147
Gráfico N° 1.
Distribución de las madres e hijos por estado civil
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
80,00%
72,31%
70,00%
60,00% 56,06%
50,00%
Porcentaje
40,00%
31,82%
30,00% 24,62%
20,00%
9,09%
10,00% 3,08% 3,03%
0,00%
Casada Soltera Divorciada Viuda
Estado civil
Madres Hijos
28,78%
59,09%
112,12%
148
El tiempo promedio que las madres tienen laborando está por
encima de los 20 años, las nutricionistas 25,17 años, las médicas 23,23
años y las enfermeras 21,76 años. (Ver gráfico N° 3)
Gráfico N° 3.
Tiempo promedio laborando de las madres por profesión
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
26
25,17
25
24 23,23
23
Años
21,76
22
21
20
Médico Nutricionista Enfermería
Profesión
149
Gráfico N° 4.
Distribución de las madres por ayuda en el cuidado de los hijos
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
49,21%
50,79%
Ayuda familiar Sí No
150
Gráfico N° 5.
Distribución de las madres que reciben ayuda por cuidador de los
hijos
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
45,00%
40,63%
40,00%
35,00%
30,00%
25,00%
Porcentaje
20,00%
15,63% 15,63%
15,00% 12,50%
10,00%
6,25% 6,25%
5,00% 3,13%
0,00%
Padre y Tía Niñera Abuela (o) y Tía (o) Padre Doméstica Abuela (o)
(o) Doméstica
Cuidador
151
Gráfico N° 6.
Distribución de las madres sin ayuda para cuidar sus hijos
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
45,00%
37,87% 37,87%
40,00%
35,00%
30,00%
25,00% 24,24%
Porcentaje
20,00%
15,00%
10,00%
5,00%
0,00%
Guardería Mamá Mamá y Guardería
152
Para la presente investigación, la caracterización del apego y su
tipología se realizó utilizando la técnica estadística análisis de
conglomerados en dos fases (Cluster), donde a partir de las escalas 1.-
Bajo Autoestima Necesidad de aprobación y miedo al rechazo, 2.-
Resolución hostil de conflictos, rencor y posesividad, 3.- Expresión de
sentimientos y comodidad con las relaciones, 4.- Autosuficiencia
emocional e incomodidad con la intimidad, se obtuvo agrupaciones
naturales (o conglomerados), clasificando a las madres e hijos en apego
seguro e inseguro empleando dos conglomerados, mientras que la
tipología se caracterizó mediante cuatro conglomerados, tomando en
consideración los valores referenciales obtenidos por Melero y Cantero en
el cuestionario del apego adulto.
Tabla 10.
Total de madres e hijos según conglomerado de pertenencia
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Conglomerado Madres Hijos
(Apego) Total % Total %
Seguro 46 69,69% 36 54,55%
Inseguro 20 30,30% 30 45,45%
Total 66 100,00% 66 100,00%
Fuente: Cuestionario de apego adulto (Madres e Hijos)
153
Características apego según los conglomerados
154
Tabla 11.
Caracterización de las madres por condición de apego según escala
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Conglomerado (Apego)
Escala
Seguro Inseguro
100% 43,48%
Bajo Autoestima Necesidad de (Muy Bajo 81,40%, Bajo (Moderado/alto 13,04%,
aprobación y miedo al rechazo 13,95% y Bajo moderado Alto 8,70% y Muy alto
4,45%) 21,74%)
76,74% 60,87%
Resolución hostil de conflictos, (Muy Bajo 25,58%, Bajo (Moderado/alto 21,74%,
rencor y posesividad 11,63% y Bajo moderado Alto 4,35% y Muy alto
39,53%) 34,78%)
79,07% 52,17%
Expresión de sentimientos y (Moderado/alto 23,26%, (Muy Bajo 17,39%, Bajo
comodidad con las relaciones Alto 20,93% y Muy alto 21,74% y Bajo moderado
34,88%) 13,04%)
65,12% 60,87%
Autosuficiencia emocional e (Muy Bajo 37,21%, Bajo (Moderado/alto 4,35%,
incomodidad con la intimidad 11,63% y Bajo moderado Alto 30,43% y Muy alto
16,28%) 26,09%)
155
muy bajo (13,33%), bajo (10%) y bajo moderado (16,67%) de expresión
de sentimientos y comodidad con las relaciones; el 70% con valores
moderado alto (10%), alto (30 %) y muy alto (30%) de autosuficiencia
emocional e incomodidad con la intimidad. (ver Tabla 12)
Tabla 12.
Caracterización de los hijos por condición de apego según escala
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Conglomerado (Apego)
Escala
Seguro Inseguro
94,44% 33,33%
Bajo Autoestima Necesidad de (Muy Bajo 72,22%, Bajo (Moderado/alto 16,67%,
aprobación y miedo al rechazo 11,11% y Bajo Alto 6,67% y Muy alto
moderado 11,11%) 10%)
61,11%
70%
Resolución hostil de conflictos, (Muy Bajo 38,89%, Bajo
(Alto 23,33% y Muy alto
rencor y posesividad 2,78% y Bajo moderado
46,67%)
19,44%)
77,78% 40%
Expresión de sentimientos y (Moderado/alto 2,78%, (Muy Bajo 13,33%, Bajo
comodidad con las relaciones Alto 22,22% y Muy alto 10% y Bajo moderado
34,88%) 16,67%)
86,11% 70%
Autosuficiencia emocional e (Muy Bajo 52,78%, Bajo (Moderado/alto 10%,
incomodidad con la intimidad moderado 2,78% y Alto 30% y Muy alto
Moderado 30,56%) 30%)
156
mientras que la escala expresión de sentimientos y comodidad con las
relaciones (76,92%) valores moderados altos, alto y muy alto.
157
Tabla 13.
Caracterización de las madres por tipología de apego según escala
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Conglomerado (Tipologías de Apego)
Escala
Seguro Temeroso Hostil Preocupado Alejado
92,31% 70,59%
Resolución hostil de 71,43% 66,67%
(Muy Bajo 30,77%, Bajo (Bajo moderado17,65%,
conflictos, rencor y (Moderado/alto 28,53% y (Bajo moderado
19,23% y Bajo moderado Moderado 41,18% y
posesividad Mul alto 42,86%) 66,67%)
42,31%) Moderado alto 11,76%)
158
Los clasificados como apego preocupado presentan en las escalas
de bajo autoestima necesidad de aprobación y miedo al rechazo (16,67%)
valores bajo moderado, resolución hostil de conflictos rencor y
posesividad (66,67%) valores moderados, autosuficiencia emocional e
incomodidad con la intimidad (50%) valores moderados y moderados
altos, y la escala expresión de sentimientos y comodidad con las
relaciones (66,67%) presentó valores altos. Los de apego alejado
presentaron en bajo autoestima necesidad de aprobación y miedo al
rechazo (50%) valores muy bajo, bajo y bajo moderado, resolución hostil
de conflictos rencor y posesividad (43,75%) valores moderados y
moderados altos, autosuficiencia emocional e incomodidad con la
intimidad (50%) valores altos, y la escala expresión de sentimientos y
comodidad con las relaciones (75%) presentó valores bajo moderado y
moderado. (ver Tabla 14 )
Tabla 14.
Caracterización de los hijos por tipología de apego según escala
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Conglomerado (Tipologías de Apego)
Escala
Seguro Temeroso Hostil Preocupado Alejado
Expresión de 75%
79,17% 50%
sentimientos y 66,67% (Bajo moderado
(Moderado/alto 4,17% y (Muy Bajo 28,57% y Bajo
comodidad con las (Alto 66,67%) 31,25% y Moderado
Muy alto 75%) 21,43%)
relaciones 43,75%)
Autosuficiencia
58,34% 71,43% 50%
emocional e 50%
(Muy Bajo 54,17% y Bajo (Alto 7,14% y Muy alto (Moderado 41,67% y
incomodidad con la (Alto 50%)
moderado 4,17%) 64,29%) Moderado alto 8,33%)
intimidad
159
La tipología del apego se caracterizó mediante cuatro
conglomerados obteniendo los siguientes resultados: de las 66 madres el
39,39% son seguras, 25,76% preocupadas, 21,21% temerosa y hostil y
13,64% alejadas. Para los hijos la clasificación de la tipología del apego
fue: el 36,35% seguro, 18,18% preocupado, 21,21% temeroso y hostil y
24,24% alejado. (Ver gráfico N° 7)
Gráfico N° 7.
Caracterización madres e hijos por tipología del apego
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
45,00%
39,39%
40,00%
36,36%
35,00%
30,00%
25,76%
Porcentaje
24,24%
25,00%
21,21% 21,21%
20,00% 18,18%
15,00% 13,64%
10,00%
5,00%
0,00%
Seguro Preocupado Temeroso Hostil Alejado
3.- Relación del apego de las madres con respecto al apego de los
hijos.
160
Tabla 15.
Relación entre apego de las madres y apego de los hijos
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Apego de la madre
Apego del Hijo Seguro Inseguro P
Total % Total %
Seguro 30 69,77% 6 26,09%
0,00
Inseguro 13 30,23% 17 73,91%
Total 43 100,00% 23 100,00%
161
Tabla 16.
Relación entre apego de las madres y apego de los hijos según sexo
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011}
Apego de la madre
Apego del Hijo
Seguro Inseguro P
/sexo
Total % Total %
Mujeres
Seguro 15 68,18% 3 20,00%
0,007
Inseguro 7 31,82% 12 80,00%
Total 22 100,00% 15 100,00%
Hombres
Seguro 14 70,00% 3 37,50%
0,20
Inseguro 6 30,00% 5 62,50%
Total 20 100,00% 8 100,00%
162
Tabla 17
Relación entre apego de las madres y apego de los hijos
según presencia de cuidador
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Apego de la madre
Apego del Hijo Seguro Inseguro P
Total % Total %
Cuidador Familiar o
Doméstica
Seguro 11 57,89% 3 23,08%
0,075
Inseguro 8 42,11% 10 76,92%
Total 19 100,00% 13 100,00%
Madre Cuidadora
O Guardería
Seguro 17 77,27% 3 33,33%
0,038
Inseguro 5 22,73% 6 66,67%
Total 22 100,00% 9 100,00%
163
Tabla 18
Seguro/seguro 30 45.45%
Seguro/inseguro 13 19.69%
Inseguro/seguro 6 9.09%
Inseguro/inseguro 17 25.75%
Total 66 100
164
Tabla 19
Relación entre la profesión y el apego de las madres
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Profesión
Apego de la Madre
Médico Nutricionista Enfermera P
Total % Total % Total %
Seguro 27 69,23% 7 87,50% 12 63,15%
0,028
Inseguro 12 30,76% 1 12,50% 7 36,84%
Total 39 100,00% 8 100,00% 19 100,00%
165
Tabla 20
Profesión y el estilo de apego en la diada madres/hijo
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
166
Gráfico N° 8.
Relación entre la tipología del apego entre madres e hijos
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Grafico No.9
Relación tipología de apego y seguridad e inseguridad,
de las madres
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Seguro
Seguro 0%
60,46% Preocupado
6,97%
Alejado
Insegura 32,45%%
Preocupado
32,45%% Seguras
2 conglomerados
Alejado
6,97% Temeroso 4 conglomerados
Hostil Hostil (tipologías)
0% 60,46%
168
Los resultados obtenidos que se presentan en el Gráfico Nº 9,
muestran que el apego seguro de las madres, caracterizado de acuerdo
a dos conglomerados se asocia en 60,46% de los casos con la tipología
seguro obtenida por cuatro conglomerados, con las preocupadas en
32,45%, en 6,97% con alejadas y ninguna se corresponde con temeroso-
hostil. En cuanto al apego inseguro en las madres, obtenidos por dos
conglomerados, se corresponden con 60,46% de las caracterizadas como
temeroso-hostil, con 32,45% Alejadas, 6,97% preocupada y con ninguna
de tipología seguro obtenidas por cuatro conglomerados.
Grafico No.10
Relación tipología de apego y seguridad e inseguridad,
de los Hijos
Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes
Mérida, Venezuela. Año 2011
Seguro
Seguro 0%
66,66% Preocupado
0%
Alejado
46,66%
Preocupado Seguro Inseguro
33,33%
Alejado Temeroso
0% Hostil
Hostil 2 conglomerados
53,33%
0% 4 conglomerados
(tipologías)
169
Los resultados obtenidos que se presentan en el Gráfico Nº 10,
muestran que el apego seguro de los hijos, caracterizado de acuerdo a
dos conglomerados se asocia con la tipología seguro obtenida por cuatro
conglomerados en 53,33% y con las preocupados en 33,33% y ninguno
se corresponde con alejadas ni temeroso-hostil. En cuanto a los hijos con
apego inseguro de acuerdo a dos conglomerados se corresponden con
53,53% de tipología temeroso hostil y 46,66% de tipología Alejado, y
ninguno se corresponde con tipología preocupado o seguro obtenidas por
cuatro conglomerados.
170
XIV.- DISCUSIÓN DE LOS
RESULTADOS
171
Los resultados de este estudio son objeto de discusión con trabajos
previos citados en el marco teórico, sin embargo cabe destacar que el
cuestionario aplicado es de reciente baremación y validación, por tanto su
aplicación en otros estudios de apego adulto es escaso, aunado al hecho
de que en la literatura médica consultada es prácticamente nula la
publicación de trabajos en los que se investigue como eje central la estilos
de apego en madres profesionales de las ciencias de la salud y la
correlación con los estilos de apego adulto de sus hijos.
172
corresponden a médicos, un tercio son enfermeras y solo una décima
parte corresponde a nutricionistas.
173
1.- Objetivo 1: Determinar el tipo de apego de las madres profesionales
de las Ciencias de la salud: Medicina, Enfermería y Nutrición.
174
y Cantero a través del cuestionario de apego adulto, se observó de las
madres seguras muestran valores altos relacionados con la escala 3 que
evalúa expresión de sentimientos y comodidad con las relaciones, y las
puntuaciones obtenidas son significativamente superiores al compararlas
con las escalas 1, 2 y 4 que evalúan la baja autoestima y necesidad de
aprobación y miedo al rechazo, la Resolución Hostil de conflictos, rencor y
posesividad y la Autosuficiencia emocional e incomodidad con la
intimidad, respectivamente. Mientras que las madres profesionales de la
Ciencias de la salud con estilos de apego inseguro presentan valores
bajos en la escala 3 y puntuación moderada alta, alta y muy alta en las
escalas 1, 2 y 4.
175
de que solo se encontraron referencias aisladas producto de resultados
de estudios cuyo objetivos no pretendían conocer el estilo de apego que
predominan en los individuos de acuerdo a la profesión y/o ocupación
laboral. Basados en lo planteado por Bartholomew y Horowitz (1991), que
consideran que los estilos de apego se definen de acuerdo a la visión
positiva o negativa de sí mismo y de los otros, resulta probable que las
personas que se dedican profesionalmente a carreras en la que las
relaciones interpersonales son la base del ejercicio profesional, y que la
principal función gira en torno a “los otros” (el paciente o usuario), supone
un estilo de apego seguro (visión positiva de sí mismo y del otro) y/o
preocupado (visión positiva del otro y negativa de sí mismo), mientras que
un estilo alejado (visión negativa del otro y positiva de sí mismo) y el
estilo temeroso (negativo de sí mismo y de los otros) supone dificultad
en el establecimiento de relaciones interpersonales.
176
lo que obtuvieron que el 46.32 de los adolescentes colombianos entre 15
y 20 años tienen apego seguro, y con el de Brandon, Valera y Zarate
(2008) en cuya investigación obtuvieron que en la población adolescente,
entre 12 y 14 años, tiene una mayor prevalencia el apego inseguro, sin
embargo se debe señalar que este en estudio, el grupo etario es diferente
al del presente estudio, en la que los adolescentes entrevistados son
mayores de 15 años. Sin embargo nos permite destacar que Berth y cols.
(2005) afirman que existe evidencia que en el desarrollo del individuo
desde la niñez hasta la edad adulta, están influenciados por múltiples
variables, complejas, y no siempre predecible desde los estilos de apego
de la infancia. En este orden de ideas, y aun cuando no se refiere a
eventos propios de la adolescencia o crisis del adulto joven, Santelices y
cols. (2009) estudiaron como el apego inseguro se relaciona con eventos
traumáticos al comparar un grupo de individuos con enfermedad terminal
crónica con un grupo de individuos sin la enfermedad, y en la que hubo
predominancia de apego preocupado en el primer grupo, mientras que en
el segundo grupo predomino el apego seguro. Estos resultados permiten
orientar la influencia de distintos eventos a lo largo del desarrollo vital del
individuo en la modelación del estilo de apegos, en concordancia a lo
expresado por Oliva (2003) quien señala que aun cuando se ha
establecido que los modelos representacionales del tipo de apego
parecen mostrar bastante estabilidad, ciertos acontecimientos pueden
provocar cambios.
177
cuanto al apego inseguro corresponde a tres cuartas partes, resultando
en valores estadísticamente significativos de que hay relación ente el
estilo de apego de la madre con el estilo de apego de su hijo. Estos
resultados están en concordancia con la mayoría de los estudios
realizados desde que Bolwby planteó el vínculo afectivo que se establece
entre la madre y sus hijos. En este sentido, Main y cols (1985)
establecieron que las investigaciones cuyo eje central es el estudio de la
relación entre padres e hijos, proporcionan una clara evidencia de la
correspondencia entre los modelos de relación de los padres y el estilo de
apego de sus hijos.
178
Cuando se relacionan los estilos de apego en la diada madre/hijo
de acuerdo a dos conglomerados y al sexo de los hijos, se observa que
en más de dos tercios de las madres con apego seguro sus hijas mujeres
son de apego seguro, y esta relación aumenta notablemente cuando
evalúa el apego inseguro de la madre y el de las hijas en la que se
obtiene una relación de 80%, teniendo estos resultados significancia
estadística. Cuando se analiza esta relación con el estilo de apego de los
hijos varones no se observa nivel de significancia, sin embargo más de
dos terceras partes las madres seguras tienen hijos varones seguros y en
dos tercios de los casos se aprecia apego inseguro en la diada madre/hijo
varón.
180
Cantero (2008) para caracterizar a la población adulta de acuerdo al estilo
afectivo, es relativamente reciente. Sin embargo al comparar nuestros
resultados con las tipologías obtenidas por Melero y Cantero, se observa
que las Profesoras de la Facultad de Medicina de la ULA con estilos de
apego seguro es mayor, con 39.39%) que la observada en la población
estudiada por Melero y Cantero (2008), en la que el estilo seguro fue
28.54%. En cuanto a los estilos alejado y temeroso hostil, tampoco se
observó concordancia ya que al comparar los resultados entre ambos
estudios se obtiene que 13.5 % de las madres son de estilo alejado Vs
29.6% del estudio de Melero y Cantero, y 21.2% de estilo temeroso-hostil
en las profesoras de la Facultada de Medicina y 15.7% en el estudio
realizado en la población española por Melero y Cantero. Mientras que
hubo coincidencia con el estilo preocupado, mostrando que una cuarta
parte de los casos en ambos estudios, muestran este estilo de apego.
181
hijos presentan apego seguro (aproximadamente la tercera parte de los
casos), lo cual es un poco más alto que el porcentaje obtenido en la
población española (28.54%), A diferencia de lo obtenido con las madres,
al compararlos con los resultados de Meleros y Cantero, se observa
mayor concordancia entre los resultados de apego alejado (24.24% Vs
29.66%) y menor correspondencia con los estilos preocupados (18.1 Vs
26.07%) y temerosos-hostil (21.1% Vs 29.6%).
182
con hijos preocupados como alejados como reflejo de su propia
ambivalencia.
183
5.- LIMITACIONES DEL PRESENTE ESTUDIO.
184
la madres con ocupaciones fuera del hogar, la importancia de promover
políticas orientadas a asegurar el bienestar en la diada madre/hijo, sin
afectar la decisión de la mujer de ocupar cargos de trabajo fuera del
hogar, o profesionalizarse, y que estas políticas incluyan desde
programas de divulgación sobre la importancia de esta vinculación
afectiva hasta disponibilidad de espacios en las distintas Instituciones
para favorecer el desarrollo del apego saludable en el binomio madre/hijo.
185
XV.- CONCLUSIONES
186
El apego es un vínculo afectivo que se establece entre el niño y su
principal cuidador, y representa la base de la Capacidad que tiene los
individuos para relacionarse afectivamente unos con otros, lo que permite
que se constituyan en seres sociales y tiendan activamente a construir
comunidades organizadas que resguarden y regulen esta interacción
social. La principal figura de apego está representada por la madre, lo cual
motivo el presente estudio, a fin de indagar la relación de los estilos de
apego en las madres con ocupaciones fuera del hogar, específicamente
profesionales de las Ciencias de la salud, que se desempeñan como
profesoras de la Facultad de Medicina y los estilos de apego desarrolladlo
por sus hijos.
- PRIMERA
- SEGUNDA
Las mujeres que optan por profesiones de las áreas de las ciencias
de la salud tienen un estilo de apego seguro, que implica una visión
positiva de sí misma y de los demás, garantizado relaciones
interpersonales saludables con sus alumnos y sus pacientes.
- TERCERA
187
En este estudio se observa una clara correspondencia entre el
estilo de apego adulto de la madre y el estilo de apego del hijo
adolescente y adulto, tanto en los caracterizados como seguros o
inseguros, así como las madres con tipología preocupadas, orientando a
la transmisión generacional de este vínculo.
- CUARTA
- QUINTA
- SEXTA
Las madres con estilo seguro e inseguro se asocian a hijos seguros e
inseguros respectivamente, mientras que las madres con tipología
preocupada se asocian a hijos tanto preocupados como alejados. Las
madres de tipología alejada no se asocian a otras tipologías de sus hijos.
- SEPTIMA
La tipología preocupada y alejada, pueden corresponder a estilos
limítrofes o borderline, con tendencia al estilo seguro para los
caracterizados como preocupados y tendencia a lo estilo inseguro para la
tipología alejado.
188
XVI.- BIBLIOGRAFÍA
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http://www.sivmec.grupos.usb.ve/Archivos/ResumenesCartelesPorSesion.
pdf
205
XVII.- ANEXOS
206
ANEXO I:
Instrumentos de medida
CONSENTIMIENTO INFORMADO
____________________________
Firma del Investigador Principal
207
UNIVERSIDAD DE LOS ANDES
INSTRUCCIONES
I PARTE:
EDAD____ ESTADO CIVIL: Casada____ Soltera____ Divorciada____Viuda____
Masculino Femenino si no
208
II PARTE
CUESTIONARIO DE APEGO ADULTO
A continuación encontrarás una serie de afirmaciones, marca con una X el número que
corresponda al grado en que cada una de ellas describe tus sentimientos o tu forma de
comportarte en tus relaciones.
1 2 3 4 5 6
1 2 3 4 5 6
209
pensar en ello
24 Soy rencoroso
27 Cuando tengo un problema con otra persona, intento hablar con ella
para resolverlo
29 Cuando me enfado con otra persona, intento conseguir que sea ella
la que venga a disculparse
210
33 Cuando abrazo a beso o alguien que me importa estoy tenso/a y
parte de mí se siente incómodo/a
38 Los demás opinan que soy una persona abierta y fácil de conocer
ANEXO II:
CONSENTIMIENTO INFORMADO
211
Firma del (de la) Participante
____________________________
Firma del Investigador Principal
INSTRUCCIONES
I PARTE:
212
otros
Masculino Femenino si no
II PARTE
A continuación encontrarás una serie de afirmaciones, marca con una X el número que
corresponda al grado en que cada una de ellas describe tus sentimientos o tu forma de
comportarte en tus relaciones.
1 2 3 4 5 6
1 2 3 4 5 6
213
9 Creo que los demás no me agradecen lo suficiente todo lo que hago
por ellos
24 Soy rencoroso
27 Cuando tengo un problema con otra persona, intento hablar con ella
para resolverlo
29 Cuando me enfado con otra persona, intento conseguir que sea ella
la que venga a disculparse
214
30 Me gustaría cambiar muchas cosas de mi
38 Los demás opinan que soy una persona abierta y fácil de conocer
215
216