TESIS DOCTORADO. Lucero Paniagua PDF

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 347

UNIVERSIDAD DE CIENCIAS

Y ARTES DE CHIAPAS
CENTRO DE ESTUDIOS SUPERIORES DE
MÉXICO Y CENTROAMÉRICA

TESIS
IMPLORANDO CON LOS PIES.
EL GUADALUPANISMO Y LAS
ANTORCHAS EN SAN CRISTÓBAL
DE LAS CASAS.
QUE PARA OBTENER EL GRADO DE

DOCTORA EN CIENCIAS
SOCIALES Y HUMANÍSTICAS
PRESENTA
LUCERO DEL CARMEN PANIAGUA
BARRIOS

COMITÉ TUTORIAL
Dr. Miguel Lisbona Guillén (Director)
Dr. Jesús Morales Bermúdez
Dra. Mónica R. Aguilar Mendizábal
Dra. Astrid Pinto Durán
Dra. Minerva Yoimy Castañeda Seijas

0
1
AGRADECIMIENTOS:

Este trabajo va dedicado a aquellas personas que contribuyeron y acompañaron la


investigación. Apoyo necesario que alimentó el ánimo y el aliento que se requiere para ver
culminar este arduo camino, aunque en el trayecto algunas de estas personas se convirtieron en
almas que ahora me acompañan.

Agradezco y dedico de manera especial este trabajo primeramente a mis padres


Armando y Martha, pilares de roble que han hecho de mí una mujer fuerte y valiente, pero que
además me han apoyado en todas las formas posibles para culminar este trabajo. A mis hijas
Berenice, Omara y Romina, niñas que han soportado a su madre en la parte obscura de la tesis
y las cuales me han acompañado como la fuerza inquebrantable de mi ser. A mis hermanas
Esmeralda y Dulce María, mujeres que han caminado junto a mí a lo largo de mi vida en mis
triunfos y fracasos. A Omar, mi amigo, mi esposo y compañero de vida, el cual me ha
animado, acompañado y compartido el interés por aprender más allá de la Antropología. Y por
supuesto dedico este trabajo a mis abuelos Carmen Paniagua y Rubia Solís (Q.E.P.D.) que me
amaron y estuvieron siempre conmigo en mis éxitos y frustraciones, y sobre todo me
arroparon con sus conocimientos regalándome el mejor de sus tesoros: su memoria histórica.

Agradezco y dedico este trabajo a quien fue la primera persona que creyó en mi trabajo
y quien fue mi primer director de tesis, Dr. Víctor Esponda Jimeno (Q.E.P.D), quien guió los
primeros escritos alimentado de sus buenos consejos etnográficos, así como quien me despertó
el gusto por acercarme a la historia desde los archivos. A mi Director de Tesis, Dr. Miguel
Lisbona Guillén, amigo y colega que me acompaño a lo largo del desarrollo de este trabajo,
quien tomó el timón del barco en el momento de turbulencia e incertidumbre y quien con su
paciencia me ha guiado para culminar la investigación. A los miembros del Comité de
Titulación, Dra. Mónica Aguilar Mendizábal, Dra. Astrid Pinto Durán, Dra. Minerva Yoimy
Castañeda Seijas y Dr. Jesús Morales Bermúdez que me apoyaron con sus comentarios para
enriquecer este trabajo. A mis maestros del doctorado que aún en los momentos buenos y
malos colaboraron en mi formación profesional.

2
A los amigos y colegas que han apoyado de una y otra manera en este trabajo,
agradezco la amistad sincera de Fernando Becerra, su apoyo profesional en la parte visual de
este trabajo, el cual le ha dado soporte gráfico al texto, así como agradezco el afecto y el apoyo
profesional de Carla Morales. A Susie Morales por su gran amistad y por dedicarle tiempo a
discutir mis ideas. A José Luis Escalona, Jaime Torres Burguete, Cecilia Alba, Elisa Cárdenas,
Alain Basail, Claudia Ichin, Carlos I. López Bravo, Flor María Pérez Robledo, Luis Bedoya,
Julieta Flores, Iván Porras, amigos inquebrantables que siempre me han motivado y han
confiado en mi trabajo.

A mis compañeros Nancy, Martha, Carlos, Gerardo, Federico, Yaqueline, Karina, Julio,
Lupita, Claudia, Hilde, Jaime y Alejandro por su amistad y apoyo solidario en el momento más
difícil de mis estudios. A Patricia Ballinas Salazar y Rigoberto Gómez Calvo, asistentes del
posgrado que siempre me animaron e incentivaron para culminar la tesis.

Y finalmente, agradezco a cada uno de los peregrinos que donaron parte de su tiempo
para platicar conmigo a cerca de su devoción hacia la virgen de Guadalupe, a los miembros de
la antorcha “Juan Pablo Segundo” y la antorcha “Musicalizada Santa Cecilia” por integrarme a
su grupo y brindarme su amistad. A los presidentes de antorchas Sr. Alejandro Gutiérrez, Sr.
Calixto González, Sr. Octavio Hernández, Sr. Ricardo Urbina y por supuesto un
agradecimiento especial al Sr. Iván Díaz que me apoyó incondicionalmente en el desarrollo de
mi trabajo de campo y a lo largo de la construcción de la tesis doctoral.

GRACIAS a cada una de esas personas que me han dado la fortaleza y


acompañamiento para que este trabajo pueda llegar a fin. Un abrazo fraterno!.

3
INDICE

PRESENTACIÓN 1
REFLEXIONES TEÓRICAS Y CONCEPTUALES 6
A) HISTORIOGRAFÍA DEL FENÓMENO GUADALUPANO 6
B) COMMUNITAS Y LAS PEREGRINACIONES 11
C) LIMINALIDAD DEL PEREGRINO 19
D) A PROPÓSITO DEL MÉTODO 23

INTRODUCCIÓN: LOS SANTUARIOS Y PEREGRINACIONES 27


• Movilidad religiosa y expresiones de sacralidad 27
• Santuarios y devociones en México y Chiapas 35

1ra. Parte
EL GUADALUPANISMO
CAPÍTULO I: BREVE HISTORIA DEL GUADALUPANISMO MEXICANO 46
1.1 La patrona de la Nueva España: un proyecto evangelizador 47
1.2 ¡Que no haya choza, ni lugar, donde no se venere a la Guadalupana! 52
1.3 La nación Mexicana es obra de María de Guadalupe 57

CAPÍTULO II: EL GUADALUPANISMO EN CHIAPAS 66


2.1Vulnerabilidad y difusión del culto guadalupano 67
2.2 La época de oro sancristobalense 71
2.31931: ¡Reine en Chiapas santa María de Guadalupe! 80
2.4 ¡Y repican al vuelo las campanas del templo! 97
2.5 Guadalupanos venid y organicémonos 106
2.6 Santuarios e imaginería guadalupana 113

4
2da. Parte
LAS ANTORCHAS
CAPÍTULO III: LA PARTICIPACIÓN DE ACCIÓN CATÓLICA 133
3.1De una acción política a una devoción de fe 134
3.2 Peregrinaciones de Acción Católica de Jóvenes Mexicanos (ACJM) 150
3.3 Magna Carrera Nacional de Antorchas de Fe 155
3.4 Carrera Chiapas – Tehuantepec 164
3.5 ¡Adelante Acejotemeros! 170

CAPITULO IV: EL PROCESO RITUAL GUADALUPANO 178


4.1 El Ritual 179
4.2 Fase Preliminal 196
4.3 Fase Liminal 213
4.4 Fase Posliminal 239
4.5 La Communitas de Antorchas 241

CAPÍTULO V: EL ANTORCHISMO 259


5.1 ¡Rueda camión y volante la virgen va adelante! 260
5.2 Nosotros, igual que Juan Diego: Clasificación de las Antorchas 278
5.2.1 De noche y de día, yo corro con María 279
5.2.2 Rodar y rodar hacia el Tepeyac 282
5.2.3 Con panderos y guitarras, nosotros danzaremos 288
5.3 Rutas de peregrinaje 302

CONCLUSIONES 318
BIBLIOGRAFÍA 326
APÉNDICE EN CD:
I.- Documentos Guadalupanos
II.- Oraciones y Cantos Guadalupanos
III.-Cuadros de registro de archivo y etnográfico

5
Presentación

El trabajo de investigación tiene como objetivo describir las peregrinaciones con antorcha
guadalupanas, una de las expresiones religiosas más importantes en la Ciudad de San Cristóbal
de Las Casas, lugar donde existen asociaciones de antorchistas1, por lo general organizadas
desde los barrios, las colonias o en algunos casos por grupos de devotos que mantienen esta
práctica religiosa que llamo como: implorar con los pies. Estas tienen la finalidad de peticionar a la
imagen de la virgen de Guadalupe milagros, solicitar protección, cuidados y favores.

Uno de los aportes de esta investigación es presentar al fenómeno religioso desde una
mirada multidisciplinaria, que toma en cuenta la historia y la antropología social para
comprender la expresión del guadalupanismo y su culto en diferentes momentos del devenir
histórico de Chiapas; al mismo tiempo que ayuda a comprender sus manifestaciones
contemporáneas respecto a la imagen de la virgen de Guadalupe. En este sentido considero
que aproximarnos de esta manera a la construcción del fenómeno guadalupano, permite hacer
una etnografía sobre las antorchas guadalupanas en un tiempo presente, debido a que el
estudio de un fenómeno debe partir o tomarse en cuenta que es un efecto de un contexto
existente, que ofrece una idea contemporánea sobre acontecimientos pasados (Beattie, 1975).

Para abordar el estudio desde la ciencia antropológica a las peregrinaciones con


antorcha en una ciudad, se parte de la siguiente pregunta: ¿Cómo en este complejo socio
religioso urbano, las peregrinaciones con “antorchas” representan otra forma de expresar y
vivir la religiosidad católica, partiendo de un marco histórico, cultural y social que permite la
construcción de nuevos formas de interacción?. Si bien esta pregunta obedece al aspecto
relacionado con las peregrinaciones con antorcha, como una de las muchas maneras de
expresión de la religiosidad católica, ésta fue modelándose a medida de que la misma
investigación requería de un estudio del pasado para explicar la devoción contemporánea a la
virgen de Guadalupe, imagen religiosa que da sentido para que cientos de devotos realicen las

1 Grupo de adultos, jóvenes e incluso niños organizados, que caminan o corren (en relevos) por caminos del
estado, llevando entre sus manos una “antorcha encendida”. Ellos visitan santuarios, ermitas e iglesias donde se
encuentre la virgen de Guadalupe.

1
peregrinaciones guadalupanas en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas a otros
destinos.

Para lograr tal fin, fue necesario presentar en la introducción algunos antecedentes
sobre experiencias de movilidad en diferentes momentos de la historia humana, para tener
algunos elementos de contrastación que pueden encontrarse en las actuales peregrinaciones
con antorcha que se realizan en una ciudad. Para ello, inicio exponiendo las primeras trayectos
que hicieron algunas sociedades antiguas que vieron la necesidad de realizar desplazamientos
de población para establecer contactos hieráticos con seres iluminados o para la búsqueda de la
tierra prometida o sagrada; antecedente que muestra la importancia que tuvo estas prácticas en
las distintas culturas del mundo. Así mismo presento algunos planteamientos conceptuales
relacionados con las peregrinaciones actuales, con el objetivo de tener un panorama sobre las
distintas miradas relacionadas con esta práctica religiosa, así como las características que las
componen. Para ello, menciono algunos espacios considerados sitios importantes de
peregrinaje en México y actualmente lugares donde se concentran grupos de personas que
crean diversas prácticas y rituales que rememoran algunos de esos pasajes. De la misma
manera, muestro algunos de los peregrinajes que se llevan a cabo a lo largo del año, en
diferentes regiones del estado de Chiapas como formas de expresión devocional de distintas
imágenes religiosas.

A partir de este andamiaje, en la primera parte de la tesis denominada El


Guadalupanismo, desarrollo el establecimiento del culto de la virgen de Guadalupe en México a
través de un análisis bibliográfico de fuentes documentales secundarias que reúne a algunos
historiadores, cronistas y guadalupanistas que se han interesado en el tema, posteriormente a
través de fuentes de archivo principalmente de Chiapas se describe la Coronación de la virgen
de Guadalupe en Chiapas en el año de 1931, así como el proceso de institucionalización de su
culto en el estado.

La segunda parte que lleva por título El Antorchismo, presento el origen y consolidación
de esta práctica, así como el análisis del ritual a través de la descripción de las peregrinaciones
denominadas “antorchas guadalupanas” y sus diferentes maneras de practicar esta devoción,

2
manifestación religiosa que le ha dado continuidad y fortalecimiento al culto guadalupano. En
la descripción de este fenómeno se usan las siguientes categorías: peregrinación, peregrino,
antorcha, ritual, guadalupanismo, por mencionar los más empleados, éstos permitieron
establecer los referentes de análisis que coadyuvaron a la discusión de esta tesis doctoral.

El manuscrito se encuentra distribuido en cinco capítulos, en el primero, presento un


esbozo general desde la época poscolonial (Siglo XVII- XVIII) sobre el origen e
institucionalización del culto Guadalupano en México. Imagen que fue fundamental para el
establecimiento de una Iglesia católica normada después del Concilio de Trento, la cual fue
utilizada como elemento central del proyecto evangelizador en la Nueva España y de otras
regiones de América Latina. Además de describir el establecimiento de la imagen de la virgen
de Guadalupe en cada rincón de la patria, tomando una fisonomía de elementos nativos
relacionados a la cultura prehispánica y elementos sagrados de la iconografía cristiana. Así este
icono se nutrió con las características de una sociedad hispana naciente, convirtiéndose en un
emblema en distintas luchas sociales a lo largo de la historia de México.

En el segundo, se presenta la instauración de la devoción guadalupana al celebrarse la


Coronación de la virgen de Guadalupe en Chiapas, en el año de 1931. Difusión que se llevó a
cabo en un periodo en donde la Iglesia presentaba una vulnerabilidad religiosa frente al Estado
mexicano, principalmente porque se desarrolló durante el periodo anticlerical, época en que los
actos religiosos públicos fueron prohibidos. Sin embargo, para el caso de la expansión del culto
guadalupano en Chiapas, éste inició posicionado en un contexto social y religioso favorable
que coadyuvo para su instauración.

Estos eventos ayudaron a impulsar el culto y a fomentar una conciencia nacional a


través del emblema de la virgen de Guadalupe con la intención de crear un sentido de
pertenencia a la nación mexicana. Finalmente en uno de los apartados de este capítulo,
presento el impacto que alcanzó la instauración de la imagen a través de la distribución de una
imaginería guadalupana en las principales iglesias de la entidad chiapaneca.

A partir de los antecedentes del origen del guadalupanismo, en el tercer capítulo de la


tesis, hago una reflexión en torno al movimiento religioso de “Acción Católica”, tema que no

3
puede pasar desapercibido al relacionarse con las peregrinaciones con antorchas guadalupanas,
debido a que este movimiento jugó un papel central en la creación de esta expresión religiosa
en Chiapas. Además de hacer una breve contextualización de la política implementada por la
Iglesia para establecer a grupos de católicos que estuvieron cercanos a ella, con el propósito de
contrarrestar de alguna manera las políticas anticlericales del Estado y establecer un ejército de
fieles apegados a la Iglesia católica.

Cabe hacer notar que para el caso de Chiapas, describo el inicio del grupo denominado
Acción Católica de Jóvenes Mexicanos (ACJM) establecida en la Diócesis de Chiapas, el cual
tuvo una relación muy cercana con las autoridades del centro de México a través del Comité
Central de Acción Católica Mexicana, con el objetivo de participar y organizar eventos o
celebraciones en las iglesias y parroquias del estado. Como parte de estas acciones se
contemplaron las peregrinaciones a la Basílica de Guadalupe, por ser considerada para los
acejotameros2 como uno de los santuarios más importantes, además de otros templos ubicados
en el país. Estas acciones fueron fundamentales para establecer algunos de los antecedentes de
las peregrinaciones con antorcha que se realizan actualmente en la ciudad de San Cristóbal y el
resto del estado de Chiapas.

Uno de los momentos importantes en la historia del culto guadalupano principalmente


en Chiapas, fue la participación en la Magna Carrera Nacional de Antorchas de Fe, en 1954.
Evento en el que asistieron las distintas Diócesis de México para realizar la primera
peregrinación hacia la Basílica de Guadalupe. En este apartado presento cómo fue la
intervención de la Diócesis de Chiapas y la participación del grupo de Acción Católica de
Jóvenes Mexicanos (ACJM) para la realización de este evento, así como las subsecuentes
peregrinaciones a la Basílica de Guadalupe y a otros santuarios del país.

El cuarto capítulo describo el proceso ritual de las peregrinaciones con antorcha, así
como las fases que experimenta el peregrino a lo largo del recorrido. Para ello analizo desde la
perspectiva simbólica del ritual, utilizando las nociones teóricas desde la propuesta de las fases
del rito de paso de Van Gennep (2008) y la perspectiva del procesualismo ritual de Víctor Turner
(1988) a partir de los conceptos sobre liminalidad y liminoide, y a Manuel Delgado (1999) con el

2 Término que era utilizado para nombrar a las personas que pertenecían al grupo de la ACJM.

4
concepto de intersticialidad para referirse a la construcción de las communitas. También se recurre
a otros autores como Durkheim (2000), Douglas (1973), Taracena (2008), Chihu (2001),
Lisbona (2012) entre otros.

Estos conceptos teóricos ayudaron a plantear una explicación sobre las peregrinaciones
guadalupanas donde muestro la complejidad del ritual durante la peregrinación, en momentos
en los que los peregrinos se encuentran inmersos en un complejo de simbolismos y
representaciones que los hace integrarse como grupo a través del apoyo, la solidaridad y el
compañerismo antes y durante el ritual. Además presento las actividades que se llevan a cabo a
lo largo del año, generando nuevas formas de asociación.

Y finalmente en el quinto capítulo, describo las características generales de la


composición de las antorchas, las cuales comparten elementos simbólicos comunes como el
cuerpo, la antorcha, el fuego, los banderines, el uniforme y las diferentes maneras de implorar
con los pies. Además represento la participación de la Diócesis y las parroquias en campañas de
evangelización guadalupana (música, encuentros, retiros) en donde se busca fortalecer a los
grupos de antorchas y la participación de familiares o empresas en estas celebraciones.

Para hacer una clasificación sobre los tipos de antorchas, describo las características a
partir de su práctica en: antorchas pedestres o caminatas, antorchas en bicicleta o motocicleta y las
musicalizadas, las cuales contienen elementos particulares que las hacen diferentes no en su
devoción pero si en su expresión. Y para conocer los espacios de movilidad de estos grupos,
presento las rutas de peregrinaje de los grupos de antorchas con la intención de exponer los
principales lugares y santuarios por donde ellos peregrinan.

Con la intención de aportar un conocimiento general sobre las peregrinaciones con


antorcha y sobre la historia del establecimiento del culto guadalupano en Chiapas, incluyo en
este trabajo un apéndice con material documental de fuentes primarias relacionadas con el
tema, así como otros datos etnográficos y algunos cuadros de registro sobre las
peregrinaciones con antorcha, para ofrecer información que ayude al interesado a analizar este
tema.

5
Reflexiones teóricas y conceptuales

Para organizar los tópicos relacionados con la investigación, se organizó los datos de la
siguiente manera: en primer lugar, se abordó algunos textos históricos sobre el fenómeno
guadalupano para tener el estado de la cuestión sobre el estudio y hacer el análisis sobre el
mismo. En un segundo momento se fijó el abordaje conceptual para fundamentar la
interpretación teórica que permitió explicar y reflexionar sobre el estudio de las
peregrinaciones con antorcha. Para esta fase de la investigación se estableció una mirada
teórica para describir el ritual y las fases que componen el rito de paso planteado por Van
Gennep (2008) así como la propuesta de Víctor Turner (1988) sobre el proceso ritual de las
peregrinaciones guadalupanas, así como la propuesta de Intersticialidad que propone Manuel
Delgado (1999) para analizar el concepto de communitas y finalmente se caracterizó a los grupos
de antorchistas y sus distintos momentos que los configuran.

A) Historiografía del fenómeno guadalupano.

La revisión de lo que se ha publicado sobre el fenómeno religioso guadalupano es una empresa


titánica y no es la finalidad de este trabajo, sin embargo, se recurrió a algunos historiadores que
se han interesado por el estudio del fenómeno guadalupano para tener elementos que
fundamenten el estudio de las peregrinaciones guadalupanas en su modalidad con antorcha.
Para ello, se retomó algunos trabajos que son centrales para conocer el culto guadalupano y
que permitieron reconstruir los antecedentes de esta devoción en Chiapas. Cada uno de los
textos expuestos en el documento da cuenta de distintas vertientes de análisis que han
contribuido a conocer el fenómeno guadalupano, por lo que cada uno de ellos aporta
información valiosa que alimenta la discusión de la investigación.

Uno de los puntos iniciales que marcó el trabajo fue conocer la importancia de la
imagen dentro de los cánones religiosos, para ello fue importante revisar el texto de Fausto
Zerón – Medina (1995) Felicidad de México, en el que describe a raíz de cumplirse los cien años
de la coronación de “María Señora de Guadalupe”, una visión católica y dogmática de la

6
virgen. Da cuenta de la importancia de la devoción a la imagen María, sustentada en las
escrituras de la Biblia, elemento que fundó el fervor a través de los diferentes Papas que han
guiado a la Iglesia católica como sumos pontífices de esta institución.

Algunos historiadores hablaron del proceso de instauración a lo largo del territorio en


las diferentes advocaciones marianas fusionadas con elementos de las culturas
mesoamericanas, a partir de su llegada al continente americano durante la Colonia (Zenón,
1995; Lafaye, 2006; Nebel, 1995; O´Gorman, 1996; Noguez, 1995). En esos trabajos exponen
las diversas formas de apropiación que tuvieron los nativos para establecer estos cultos.

Para entender los elementos simbólicos que guarda la imagen de Guadalupe y sobre
todo la iconografía religiosa en los primeros años de evangelización fue necesario revisar la
obra de Serge Gruzinski (2003), particularmente su libro titulado La Guerra de las Imágenes. De
Cristóbal Colón a “Blade Runner” (1492 – 2019) que expone las formas de incorporación de
imágenes en el Nuevo Mundo desde la llegada de Colón y el proceso de aculturación que
experimentaron los nativos americanos. El autor describe cómo fueron las imágenes el
vehículo para construir los imaginarios que evocan las sociedades, creando identidades
individuales y colectivas, además de analizar el caso de la imagen de la virgen de Guadalupe ya
que considera que es un referente iconográfico que expresa una infinidad de sentidos a las
personas.

Uno de los planteamientos más exhaustivos sobre el conocimiento del origen de la


imagen de Guadalupe y la proliferación de su culto, es sin duda el trabajo de O´Gorman (2016)
que hace una minuciosa explicación sobre el origen del culto guadalupano, tomando como hilo
central los dimes y diretes entre el arzobispo de México, representado por Fray Alonso de
Montúfar y el franciscano Fray Francisco de Bustamante, evento que provoca a O’Gorman a
descifrar las imbricaciones del culto guadalupano en su libro Destierro de sombras. Luz en el origen
de la imagen y culto de Nuestra Señora de Guadalupe del Tepeyac. Este texto abre una veta de
explicación sobre algunos posibles problemas que se mantuvieron dentro de la misma iglesia
en el periodo poscolonial, instaurando una Iglesia católica normada contraria a la que se
manejaron por las primeras órdenes religiosas en el nuevo mundo. Eventos en que la imagen
de Guadalupe fue crucial para revertir las viejas formas de evangelización de la Iglesia católica

7
en América. Al respecto Alicia Mayer (2000, 2002) coloca también una mirada más crítica
sobre el papel que tuvo la imagen de la virgen de Guadalupe en contextos más amplios, debido
a que la relaciono con algunos conflictos religiosos y políticos que se suscitaron en España y
que influyeron en el estilo de catolicismo que se implantó entre la sociedad novohispana.

Aunque este proceso fue de larga duración, la instauración del culto guadalupano tuvo
distintas vertientes que reforzaron su devoción. Entre ellos se planteó la idea de que sus
orígenes fueron sagrados y antiquísimos, como lo menciona Jacques Lafaye (2006), en su libro
Quetzalcóatl y Guadalupe. La formación de la conciencia nacional, que propone que el culto
guadalupano se originó porque santo Tomás llegó a tierras de América antes de la llegada de
los españoles, y personificado en Quetzalcóatl evangelizó a la ciudad de Tenochtitlán. En este
planteamiento menciona que la tilma de Juan Diego era una capa de santo Tomás y por tanto
era totalmente milagroso. Aunque esta idea fue poco discutida en su momento, el autor expone
que la veneración a la imagen de la virgen de Guadalupe ya era conocida por los nativos pero
personificada en la diosa Tonantzin.

Esta relación entre la diosa y la imagen católica fue una vertiente de análisis de algunos
historiadores como el caso de Richard Nebel (1995), en su libro Santa María Tonantzin, Virgen de
Guadalupe. Continuidad y transformación religiosa en México, en el que expone de una manera amplia
y polémica el tema sobre la construcción del fenómeno guadalupano en México. Para ello
retomó algunos escritos de académicos, teólogos, cronistas, así como de personajes de la iglesia
católica que hicieron referencia a la celebración. En este sentido afirma que este culto fue un
sitio de veneración antes de la Colonia.

En este mismo sentido, algunos de estos historiadores (Zenón, 1995; Lafaye, 2006;
Nebel, 1995; O´Gorman, 1996; Noguez, 1995) reconocieron el texto de Nican Mopohua, como
el único documento que valida el milagro guadalupano, ya que describe las apariciones de la
virgen a Juan Diego en el Tepeyac. Este material que da origen a su culto, no sólo fue
retomado por la Iglesia católica sino también por los especialistas guadalupanos.

Entre ellos se encuentra Richard Nebel (1995), que proporciona datos del origen
guadalupano como historiador y teólogo, el cual planteó dentro del marco histórico del

8
acontecimiento guadalupano, el aspecto literario que presenta la estructura de este primer
documento literario escrito en náhuatl. Otra fuente importante del origen del documento, es el
texto de Miguel León Portilla (2000) denominado Tonantzin Guadalupe Pensamiento náhuatl y
mensaje cristiano en el “Nican Mopohua”. Éste se adentra en el análisis textual, lingüístico y
filosófico del relato de las apariciones de la virgen de Guadalupe a Juan Diego en el Tepeyac.
Dicho documento fue publicado por primera vez en México en 1649. El autor sitúa el
documento escrito y asume que éste contiene una carga del pensamiento de la literatura
náhuatl colonial, debido a la apropiación del pensamiento de la época impuesto en esas
primeras décadas de la conquista. En el documento se observa el uso de un alfabeto y formas
de redactar en castellano, al mismo tiempo que se encuentra elementos con características
prehispánicas como cantos, narraciones y discursos con un estilo semejante al de los pueblos
prehispánicos. La importancia que guarda la investigación de León Portilla se encuentra en la
intención de evidenciar el origen del Nican Mopohua y los diferentes autores que se atribuyen el
origen de este documento al castellano, así como la crítica a la veracidad del mismo
documento.

Haciendo un recuento de escritores y documentos tempranos referentes al culto


Guadalupano se tiene el trabajo de Xavier Noguez (1995), Documentos guadalupanos. Un estudio
sobre las fuentes de información tempranas en torno a las mariofanías en el Tepeyac. En este documento
señala que el culto corresponde a una de “las únicas creaciones auténticas del pasado colonial”
y por tanto, expone que el tema y la infinidad de escritos sobre ello pueden ser inacabables
debido a que se han generado estudios de variados aspectos sobre la imagen guadalupana.
Muestra fuentes de información desde el contexto indígena como manuscritos, testamentos,
códices y pictografías que hacen referencia a las apariciones de la virgen de Guadalupe. De
igual manera Noguez recabó fuentes de información desde el contexto hispano tomando como
punto de partida testamentos, cartas, relatos e información sobre la mariofanía guadalupana
donde describe cada uno de los textos encontrados y los contrasta con la historia para dejar
plasmada documentación valiosa y científica que puede ser revisada por especialistas o
interesados en el tema.

Otro de los temas importantes que se desprende del culto guadalupano es sin duda la
relación entre ésta imagen y la identidad nacional. Para ello es imprescindible revisar el trabajo

9
de Lafaye (2006) que es minucioso sobre momentos históricos que influyeron para que a través
del ícono de la virgen de Guadalupe se construyera una conciencia nacional. El autor retoma
algunas fuentes primarias para reconstruir las diversas complejidades que se encuentran
alrededor del culto y a partir de ahí, explica la importancia que tiene la guadalupana en la
construcción de la identidad nacional en tormo a lo mexicano. Para ello es indispensable el
trabajo de David Brading (1985) Los Orígenes del nacionalismo mexicano, el cual expone que esta
construcción del nacionalismo surge en la época independiente, en la que la imagen de la
virgen de Guadalupe fue crucial para la consolidación de un proyecto nacionalista que estaba
impulsado inicialmente por algunos ideólogos criollistas que tenían como principal
fundamento el exaltamiento del pasado indígena y de elementos tomados de la religión como
es la guadalupana, temas que no lograron embonar en el llamado protonacionalismo y que tuvo
eco hasta la llegada de la Revolución mexicana en que se rescató y revaloró los mitos y los
temas de la lucha independentista de México.

Finalmente Zenón (1995) propone la idea de que a partir de la veneración a María se le


atribuye el calificativo de “soberana”, al considerarse protectora de la nación y finalmente la
describe como reina y madre de México. Además de señalar la importancia que tiene esta
imagen como un elemento iconográfico dentro del nacionalismo mexicano y la devoción que
expresa la feligresía en cada rincón del territorio.

En este universo de información sobre el estudio del fenómeno guadalupano, Noguez


(1995) plantea que debido a su amplio alcance, el investigador debe de delimitar su reflexión
documental debido a la diversidad de fuentes de consulta. Aspecto que puede impedir en algún
momento lograr hacer toda su revisión. Como lo he señalado, sólo retomo algunos materiales
que aportan datos necesarios para contextualizar el fenómeno de estudio y algunos otros que
se utilizan a lo largo del documento para contrastar y darle sentido a la investigación. La
citación de estos trabajos dependerá del tema que esté tocando en cada apartado, motivo por el
cual es imposible retomar sólo a uno de ellos debido a la multiplicidad de temas que se
desarrollan sobre el particular.

10
B) Communitas y las peregrinaciones.

Las peregrinaciones guadalupanas con antorchas se han convertido en los últimos años del
siglo XX y los primeros del siglo XXI en manifestaciones contemporáneas para expresar
diversas formas de religiosidad católica que se presentan en la ciudad de San Cristóbal de Las
Casas. En ellas se encuentran para los guadalupanos formas y sentidos particulares de vivir la
devoción, por eso que la peregrinación:
Es la práctica de viajar a sitios físicos en la tierra en los cuales se entiende
que es especialmente accesible determinado [por un] poder espiritual o
sagrado. La peregrinación, que tiene antiguas raíces en muchas tradiciones
religiosas del mundo, y que se le facilita con un transporte cada vez mejor,
sigue siendo ahora una práctica ritual significativa y popular [sic] (Barfield,
2000: 403).

De igual manera, la peregrinación para efectos de esta aproximación es entendida como


un rito de paso (Van Gennep, 2008) que es realizado y vivenciado con el cuerpo físico de los
devotos. Éste como sujeto ritual camina e implora con los pies, vive una serie de experiencias que
generan sentimientos de compasión, de piedad, y por qué no decirlo de un entusiasmo peculiar
dentro de ambientes de la communitas (Turner, 1988) (Delgado 1999), fenómeno que ha sido
poco explorado en la actualidad, por lo que considero de relevancia un estudio como esté.

En distintos lugares de la República Mexicana y en varias partes del mundo el


peregrinaje:
Es entendido a partir de las diversas variantes históricas y culturales en las
cuales se manifiesta en un fenómeno ubicuo en el contexto de las grandes
religiones euroasiáticas. Por esta razón, constituye uno de los temas clásicos
del análisis comparativo para las ciencias sociales y las humanidades
(Fournier, 2012: 11) 3.

En esta expresión religiosa se expresa una constante ritualidad vinculada con


peregrinaciones que realizan los devotos católicos a distintas imágenes religiosas4 como ha

3 En el libro se encuentran trabajos relacionados a peregrinaciones de América del Norte, África, Este de Asía y
Asia Pacífico. Muestra también las diferentes experiencias religiosas que construyen ritualidades a deidades
diversas.
4 Es imposible determinar la diversidad de peregrinaciones que se realizan en el país. Como un ejemplo están las

del centro de México, que tienen una larga historia de práctica ritual. Como menciona Guadalupe Sánchez: “Los
habitantes de algunos barrios como Santo Tomás, Santa Apolonia y San Simón Pochtlan acuden al santuario de
Chalma en diferentes fechas. Otras peregrinaciones relevantes que podríamos mencionar, es la que reúne a los
habitantes de los pueblos de San Miguel Amantla, San Juan Tlihuaca, San Lorenzo Tlaltenango (que actualmente

11
llegado a ser la celebración guadalupana5 en México. Estos grupos como sujetos rituales llevan
a cabo oraciones, peregrinaciones, procesiones, devociones, mandas, ofrendas, danzas y
ornatos en diferentes sitios sagrados.

Para el caso de las peregrinaciones con antorcha, los peregrinos se movilizan a través
de una carrera en relevos o en ocasiones caminando, mientras que otros se mueven en bicicleta
o motocicleta. Estos grupos se desplazan por caminos encontrando ermitas, santuarios, iglesias
y otros lugares significativos para el fervor guadalupano, con la finalidad de solicitar, agradecer,
suplicar y descargar sus penas o culpabilidades emocionales.

Se entiende a la peregrinación como fenómeno en sí, es un complejo ritual de carácter


voluntario que se genera en un ambiente de sacralidad y profanidad (Durkheim, 2000) en
donde los participantes viven de manera individual y en conjunto una serie de experiencias que
cada persona asume desde sus realidades y necesidades individuales.

Desde el momento en que inician su caminar, las experiencias se multiplican y se


vivencian a través de todo lo que constituye al peregrino y las sensaciones percibidas a través
del cuerpo, tienen una significación importante, ya que son los pies, para los antorchistas
guadalupanos, el medio por el cual ejercitan la acción expiatoria y configuran el principal medio
que emplean los peregrinos como expresión de fe.

La peregrinación es una de las expresiones dentro de las distintas prácticas religiosas


que se manifiestan en este complejo ritual y que resulta conveniente tratar bajo términos
conceptuales que ayuden a la comprensión de éstas, como un fenómeno sagrado que logra

pertenece a Naucalpan, Estado de México) y la Villa de Azcapotzalco, para ir a pie anualmente desde 1936 al
santuario de Los Remedios, también conocido como Totoltepec, localizado en Naucalpan, Estado de México, en
honor a la virgen de Los Remedios, tal como lo hace la comunidad de Santiago Ahuizotla desde 1837 pero en
distinta época del año (Sánchez, 2011:23 - 24).
5 En el caso de las peregrinaciones que Guadalupe Sánchez describe en el centro de México: “Ni los cambios

territoriales, ni los ocurridos en los órdenes político, administrativo y cultural, frenaron la continuidad de ciertas
costumbres como formas valiosas de vida; la población de Azcapotzalco no dejó de lado sus tradiciones. Hoy por
hoy los habitantes de sus pueblos, barrios y colonias realizan diferentes peregrinaciones, una de ellas, la más
antigua, es la llamada “fiesta de los naturales” que se realiza el día 12 de noviembre y consiste en una peregrinación a
pie a la Basílica de Guadalupe. La efectúan los habitantes de todos los pueblos antiguos, barrios y colonias nuevas,
independientemente de su advocación e independientemente de alguna autoridad católica. Lo que resulta más
interesante es que los habitantes afirman que peregrinan al Tepeyac desde el año de 1532, por tratarse de un
“legado histórico de sus antepasados”, y porque Azcapotzalco fue el primer pueblo de México y de América que
rindió tributo a la Guadalupana” (Ibíd., 2011: 23).

12
ligar a personas de distintas realidades e intereses, y que en un momento determinado del año
se convierten en conglomerados que comparten una cosa en particular: peregrinar a los
santuarios marianos o de Cristo.

El abordaje de estas peregrinaciones puede ser desde distintos enfoques como sería: el
religioso, el deportivo, el turístico6, entre otros, por lo que debido a la peculiaridad de las
peregrinaciones se incorporan y se crea un universo de simbolismos que sólo se explican y se
entienden en el momento mismo de la práctica ritual como es el caso de la caminata o el viaje
hacia lo sagrado. Hecho que remonta a pensar que estas expresiones contemporáneas pueden
ser concebidas en relación con aquella añeja tradición católica de conquista de “la tierra santa”
o a otras peregrinaciones como la de Santiago de Compostela en España, por mencionar
algunas. Se podría ver como una representación de un momento de búsqueda y de encuentro
del sujeto en sí mismo (peregrino) para expiar sus culpas, lograr sus fines o para mejora
personal en su vida cotidiana.
Dentro del contexto festivo, las peregrinaciones y las procesiones fueron
rituales privilegiados. Ambos rituales tienen en común el contenido
simbólico de la caminata como parte de un lenguaje total en el que el cuerpo,
el esfuerzo y el sacrificio se incorporan. Sin embargo mientras que en la
procesión el poder sagrado sale al encuentro de lo profano y lo cotidiano, en
la peregrinación se camina hacia los lugares sagrados para recibir el beneficio
de lo sobrenatural (González, 2000: 113).

Para esto Haydee Quiroz (2000) define a la peregrinación como ese viaje a un sitio
sagrado en donde el principal motivo es la “caridad” que puede ser meritoria y satisfactoria;
construida por -una manda- o en cumplimiento de una expiación impuesta por alguna
autoridad religiosa o propiciada desde el interés de cada persona.

Por su parte, Víctor Turner clasifica el origen de la peregrinación, en “prototípicas”, las


cuales son aquellas que fueron establecidas por un fundador de una religión histórica. Se

6 Así María Zielina (2013), examina una práctica de turismo religioso al Santuario de San Lázaro de Cuba, donde
reflexiona acerca de las oportunidades y limitaciones que les otorga visitar al “Santuario Nacional” a los habitantes
del lugar, al clero, al gobierno y a las personas que se identifican con el santo. Por otro lado Rogelio Martínez
analiza el potencial que ofrece el turismo religioso como detonador de desarrollo económico en la zona
denominada Altos de Jalisco, que consiste en realizar un producto turístico al estilo del Camino de Santiago en
España. “Debido al interés de las autoridades de turismo en promover la región de los Altos de Jalisco y en
particular a San Juan de los Lagos como un destino de turismo religioso, y no sólo un sitio de peregrinación, para
lo cual ha desarrollado el producto turístico denominado “ruta cristera” (Martínez, 2013: 102).

13
encuentran también “las peregrinaciones arcaicas” que tienen como característica el
sincretismo de creencias antiguas y originales traídas por “religiones proselitistas” como el caso
del cristianismo; el tercer tipo son las que le denomina “medievales” que fueron resultado de
combinar la teología y la filosofía cristiana de la misma época, y finalmente se encuentran “las
peregrinaciones modernas” que refieren a aquellas que sobresalen de mensajes de los
visionarios y apariciones como sería el caso de la Virgen María (Turner y Turner,1978:17-19).

Partiendo de la clasificación propuesta por Turner, considero que las peregrinaciones


guadalupanas se combinan entre las denominadas peregrinaciones arcaicas y peregrinaciones
modernas, ya que hay una mezcla de ambos en las peregrinaciones con antorcha, debido que
los peregrinos se mueven a los diferentes santuarios para ir en busca de la virgen de
Guadalupe; un icono que contiene características de elementos prehispánicos combinados con
el catolicismo europeo, que tiene su origen en la Colonia como resultado de un largo proceso
de cristianización y de una constante evangelización mariana en parroquias e iglesia en México
y en otras partes de América, por otro lado, es un tipo de peregrinación en el que se aprecian
elementos nacionalistas y deportivos, mezclados con una diversidad de expresiones religiosas;
lo que hace de esta práctica, una particular manera de expresar a la feligresía católica. Además,
las peregrinaciones con antorchas se ubican en estas dos tipologías, ya que tienen la finalidad
de expresar el origen del culto a través de “misioneros” que en este caso son los mismos
peregrinos que asumen el papel de ser mensajeros y evangelizadores del culto mariano, como
lo fue inicialmente Juan Diego.

Por otra parte, para Hlúšek (2013) quien retoma la propuesta de Fiona Bowie (2008),
las peregrinaciones también se clasifican de acuerdo a las características de origen, de la
siguiente manera: según su clasificación sobresale en primer lugar, la peregrinación a un
espacio sagrado (Jerusalén, Mekka, Tepeyac, etcétera); segundo, peregrinaciones que se realicen
hacia alguna persona considerada sagrada o a un Santo. Como tercer tipo, se encuentran las
peregrinaciones que veneraron un objeto sagrado como reliquias o representantes distinguidos
de una religión o a imágenes sagradas. Como cuarto tipo, son las peregrinaciones a las que
denomina como “texto sagrado” debido a que cada individuo plantea su viaje según las
escrituras sagradas de la religión que profesa, es decir, como el caso de las peregrinaciones

14
cristianas que emprenden su trayecto a Tierra Santa; y finalmente, el último tipo, se refiere a un
viaje alegórico cuando el individuo emprende su traslado no en realidad sino en su mente,
ejemplo de éste será el ejercicio de meditar durante el viacrucis que llevan a cabo algunos
católicos.

Conjuntando las dos tipologías de Turner (1988) con la propuesta de Hlúšek (2013), el
fenómeno de la peregrinación con antorcha se ubica en la primera clasificación, ya que ésta
puede ser entendida como el viaje a un lugar sagrado que se hace desde el lugar de origen del
peregrino hacia algún lugar específico de importancia entre los antorchistas guadalupanos;
como puede ser el caso del cerro del Tepeyac donde se encuentra la Basílica de Guadalupe y
sitio de las apariciones guadalupanas. Convirtiendo a este espacio en un punto mítico de
génesis de esta celebración católica, además de este lugar se encuentran reproducciones de
santuarios marianos dedicados a la virgen de Guadalupe en casi todas las poblaciones de
México, con la clara función de ser espacios sagrados que mantienen vigente este culto, como
el caso de Chiapas7.

Las prácticas rituales que se presentan al interior de las peregrinaciones con antorcha
las interpreto como parte sustancial del rito de paso, en el sentido de Van Gennep (2008) que
plantea que este rito está conformado por una serie de secuencias ceremoniales compuesto
principalmente por tres momentos. Por un lado, los ritos de separación (preliminal), seguido de
ritos de margen (liminal) y los ritos de agregación (posliminal) que son parte de un mismo
sistema ritual. En esta distinción, los ritos de separación se observan en ceremonias fúnebres;
los de agregación, entendidos en rituales como el matrimonio, quince años, bautizos; y en
cuanto a los ritos de margen se encuentran en un embarazo, iniciación o adopción a un nuevo
grupo. Este esquema de ritos de paso que sugiere Van Gennep (2008) se clasifica teóricamente
en ritos donde existe la noción de lo sagrado y lo profano; el sujeto ritual vive y convive en
ambos espacios a lo largo de su vida cotidiana, aunque en la práctica tales cambios de estado o

7 Varios pueblos de la región de los Altos de Chiapas tienen erigidos exprofeso lugares para esta imagen, como
sería el caso de la comunidad de Pocolúm, en el municipio de Tenejapa; San Andrés Larráinzar, Huixtán, Las
Rosas, entre otras. Guarda una particularidad entre sí el hecho que algunas iglesias están asentadas sobre pequeños
cerros, a manera de reproducir lo más fiel posible a la que se encuentra en la Ciudad de México.

15
de un nivel a otro no perjudica la vida social e individual debido precisamente a que éstos
mantienen el equilibrio de las sociedades.

Partiendo del sentido de la propuesta de Van Gennep (2008), durante la peregrinación


se encuentran las tres categorías que plantea debido a que “al partir [del lugar de origen] hay
ritos de separación al llegar al santuario, ritos especiales de peregrinación, incluyendo, entre
otros, ritos de agregación a lo divino… luego, ritos de separación del santuario y ritos de
regreso a la vida social, general y familiar” (pág. 254) ya que es el momento en que el sujeto
ritual se encuentra en un espacio liminal que lo determina y le da identidad. En este sentido, la
propuesta de Van Gennep que retoma Turner (1988) sobre los ritos de paso, argumenta que las
vivencias del sujeto durante su peregrinar lo sitúan en circunstancias de una estructura previa y
que se repetirá en la peregrinación, pero en diferente posición, por lo que en el periodo liminal8
se encontrará en oposición frente a la estructura social de la cual es miembro. Turner (1988)
aclara que el espacio se caracteriza por ser un sistema diferenciado, jerárquico y normalizado en
donde los individuos recrean su vida, es decir, mientras se encuentran en esta etapa tienen que
ser normados bajo las reglas de la peregrinación, las cuales asumen como miembros del grupo.
En el periodo liminal la estructuración cotidiana se rompe y se adentra en otra la cual facilita la
trasformación y regeneración social a través de un estado utópico de fraternidad e
igualitarismo, lo que llama Turner (1988) y Delgado (1999), la communitas. En este cambio de
estado, de nuevo se viven situaciones de vida que son temporales ya que al integrarse de nuevo
a su vida cotidiana todo regresa a su normalidad.

La práctica de las peregrinaciones es más usual en el catolicismo aunque se observa en


grupos como el caso de los musulmanes, los judíos, los hindúes, entre otros. En el tenor de
esto, (Turner, 1983) define a las religiones contemporáneas como manifestaciones que se
encuentran cargadas de un mundo de significados donde se contienen elementos que
construyen su vida presente y su futuro inmediato:

8 Esta segunda cotejará a los dos modelos de interacción humana, que son alternativos pero al mismo tiempo,
yuxtapuestos. En el que el primero corresponde al que representa la sociedad marcada por una estructura político-
jerárquica y económica normada, mientras el segundo corresponde al que surge de forma reconciliable durante el
periodo liminal, es el de la sociedad en cuanto comitatus, comunidad, o incluso comunión, sin estructurar o
rudimentariamente estructurada, y relativamente indiferenciada, de individuos iguales que se someten a la
autoridad genérica de los ancianos que controlan el ritual (Turner, 1988: 103).

16
Se encuentran estas dos dimensiones: 1) un sistema de símbolos que actúa
para 2) establecer modos y motivaciones poderosos, omnipotentes y
duraderos en los hombres, 3) formulando concepciones de un orden general
de existencia y 4) envolviendo estas concepciones en tal aura de factibilidad
que 5) los modos y las motivaciones parezcan incomparablemente realistas
(Turner: 1983: 312).

Para los antorchistas, la virgen de Guadalupe representa ese simbolismo que impulsa a
realizar peregrinaciones a distintos lugares, los cuales se envuelven de sacralidad con el fin de
solventar preocupaciones de su vida cotidiana. No importan los sacrificios y limitaciones que
ellos tengan durante el camino, ya que el objetivo es llegar finalmente al lugar sagrado y
encontrarse con su deidad.

Durante el ritual, el peregrino se encuentra inmerso en un mundo de significaciones


que contextualizan un momento místico. Es en este momento en que, según Turner (1988), se
convierte en la communitas, es decir, que en tales momentos se comparte un sentido de
pertenencia al grupo, es cuando se identifican entre sí como un grupo social específico y
diferenciado de los otros. Durante la communitas se incorporan a un mundo tanto sagrado como
profano. Ahí los peregrinos se confortan mutuamente, existe apoyo y solidaridad, hay una
especie de hermandad, en este sentido Víctor Turner menciona:
Es la mezcla que en ellos se observa de lo humilde y lo sagrado, de la
homogeneidad y el compañerismo. En tales ritos se nos ofrece un
‘momento en y fuera del tiempo’, dentro y fuera de la estructura social
secular, que evidencia, aunque sea fugazmente, un cierto reconocimiento (en
forma de símbolo, si no siempre de lenguaje) de un vínculo social
generalizado que ha dejado de existir pero que, al mismo tiempo, debe
todavía fragmentarse en una multiplicidad de vínculos estructurales (Turner,
1988: 103).

Dicho autor agrega que una vez que el individuo o grupo se integra a las estructuras
cotidianas de las cuales forma parte, se incorpora pero con ciertas renovaciones en sus
prácticas, situación que señala que la estructura no es rígida. En este sentido, Pinedo menciona:

En el caso de la peregrinación, eso es una constante porque en las diferentes


experiencias personales que he tenido, pude constatar que durante la
peregrinación los individuos esperan renovarse vitalmente en algún sentido;
otros desean cambiar conductas; unos más quieren recibir consejos o valores
morales que les sirvan como guía en su vida cotidiana. Además muchos

17
peregrinos me han narrado que la peregrinación ha hecho en ellos lo que
siquiatras y sicólogos no han podido: modificar su conducta (Pinedo,
2015:50).

En la elevación de estatus del sujeto que reingresa de nuevo durante el periodo de


incorporación, queda temporalmente posicionado socialmente a través del estatus que le
confiere poder y reconocimiento social en la estructura de la sociedad o grupo al que
pertenece, el cual puede perdurar o que ser solamente temporal:
La comunión de individuos también es conocimiento social para los
participantes porque se aprende algo en la communitas. También se niega
realidades, se reforman estructuras de dominio y se destruyen cadenas
psicológicas. Es decir, el peregrinus se renueva cuando vive y experimenta una
communitas durante la peregrinación” (Pinedo, 2015: 52).

Es decir, durante la peregrinación los sujetos rituales convierten el momento en un


ambiente sagrado el cual es también regido por normas y reglas que deben seguir para que
funcionen satisfactoriamente la communitas, por lo que deben asumir su papel de peregrinos
frente a otros que asumen el papel de líderes, para que el ritual se lleve a cabo de la mejor
manera. Turner (1988) define a este tipo de orden, como communitas normativa refiriéndose a que
los miembros del grupo se movilizan y se organizan para asegurar la existencia de un sistema
social duradero que mantenga el control durante el ritual. Aunque Manuel Delgado (1999)
apunta que las communitas son espacios intersticiales en que se acomodan los creyentes para cubrir
las estructuras que la misma sociedad no les ofrece, es por ello que el establecimiento de estos
grupos satisface alguna de las necesidades actuales de los guadalupanos.

Otro elemento importante que se encuentra en la peregrinación son los lugares


sagrados, estos espacios son por excelencia caracterizados por sus propios rasgos simbólicos
(por ejemplo la gruta, el manantial o la imagen de la virgen de Guadalupe en la Basílica en el
Tepeyac o en cualquier capilla). Son los devotos o personas que participan en la peregrinación,
quienes atribuyen un poder espiritual a estos espacios, además de dotarles de un ambiente
sagrado. Durante este momento, el peregrino se aleja del mundo real, asume un papel de
mensajero, pero también de apropiación de los actos en los que participa.

El movimiento es algo esencial para la peregrinación, porque lo importante


no solo es visitar un lugar sagrado sino también alejarse de la casa. Por eso
en todos los casos la peregrinación es una ruptura con las rutinas mundanas

18
y los lugares familiares. En consecuencia implica una inmersión en un
tiempo y un espacio especiales, y una participación más intensa con acciones
rituales (Barfield, 2000: 404).

Muchos de estos espacios son creados por los mismos devotos, ya que muchas veces
esos lugares adquieren el nivel de sagrado a partir de que se diera algún caso de milagro o
aparición o porque es un lugar reconocido por considerarse un cruce de caminos o un lugar de
peligro. En estos lugares es común encontrar capillas o altares en honor a la virgen de
Guadalupe o de algún santo o Cristo de importancia para la población de esa región. Estos
sitios son reconocidos como sitios de adoración y veneración, además de ser custodiados por
los mismos devotos.

C) Liminalidad del peregrino.

En el análisis de las peregrinaciones con antorchas, es el peregrino el elemento central para que
se lleve a cabo dichas prácticas rituales. Son “muchas veces los peregrinos [quienes] quieren
implorar, complacer, agradecer o simplemente ver y absorber la presencia percibida de un dios,
un santo o un poder, pero la falta de propósito, que es en sí misma un bien espiritual, también
puede estar en el fondo de esos viajes (Barfield, 2000: 404).

Considero que la propuesta planteada por Flavio Pinedo, relacionada al concepto de


peregrino es la más adecuada para entender a los antorchistas en las peregrinaciones
guadalupanas, ya que considera que es:
Es el que camina desde un lugar hacia otro por diversos motivos; es decir,
peregrina, se mueve en una acción que encierra aspiraciones, motivos,
pretextos, sacrificios o cualquier propósito o razón que justifique su acción.
De esta manera, peregrinar significa andar por extrañas tierras y
peregrinación es un viaje solitario o colectivo para visitar un lugar santo en el
que se manifiesta un poder sobrenatural real para el ‘peregrinus’ (Pinedo, 2015:
46).

El peregrino es el que participa activamente, se encuentra inmerso en la práctica ritual y


se sumerge a lo sagrado para separarse de su vida cotidiana, para luego integrarse en un tiempo

19
y espacio que tendrán una serie de normas que deben seguir; el peregrino participa en distintos
rituales durante la movilización o ruta al lugar sagrado.

En estas fases del periodo liminal que atraviesa su entorno cultural (separación – liminal
– agregación) se integra a la estructura social sea por el ascenso o descenso de status. Desde el
momento de alejarse o separarse de su vida cotidiana, el peregrino se integra a una nueva
estructura. En esa estructura, generalmente el peregrino tiene un nivel o estatus inferior,
debido a que acepta ser dominado por una autoridad, quien es la persona que dicta las reglas y
normas que las peregrinaciones deberán seguir.
Existen dos tipos de liminalidad, el primero es la liminalidad que se caracteriza
a los rituales de elevación de status, en los que el sujeto o novicio del ritual
es transferido de forma irreversible de una posición inferior a otra superior,
en un sistema en que tales posiciones se hallan institucionalizadas (Turner,
1988: 171).

Para el caso de las peregrinaciones con antorchas, se encuentra que la elevación o


descenso de su condición de peregrino, es regida dentro del segundo tipo de liminalidad, debido
a que por ser este ritual anual, el grupo de personas que participan en una antorcha, se
involucran en una posición de status inferior tanto en su condición física de humildad y
pobreza, como de autoridad ante el otro. Todos los participantes se integran como peregrinos
asumiendo el papel de sacrificado. Por otro lado, la autoridad mayor es adquirida por el
responsable o líder de la antorcha; éste puede tener un estatus menor en su vida común que el
resto de los antorchistas, sin embargo durante la peregrinación adquiere un poder por encima
de los otros.

Durante la organización del proceso ritual, el sujeto individual o colectivo, se halla


durante el recorrido o rito de paso, en una estructura normada, en la cual tiene derechos y
obligaciones que cumplir claramente establecidos y estructurados que son expuestos
previamente durante la organización del ritual. Turner (1988) utiliza el término estado, para
indicar que se encuentra regido por un sistema estructurado previamente reconocido, en el que
puede llegar a durar sólo por un lapso de tiempo y ser reconocido por otros. De alguna manera
“…es entender este rito como un rito de margen; para mostrar que en ese momento el
individuo no pertenece ni al mundo sagrado ni al mundo profano, o también que,

20
perteneciendo a uno de los dos, no se quiere que se reagregue inoportunamente al otro, se le
aísla, se le mantienen en una posición intermedia” (Van Gennep, 1969: 255).

Durante el proceso de peregrinaje, el sujeto ritual experimenta un tiempo y espacio de


alejamiento de los procedimientos normales de la acción social. Esos dos elementos pueden
contemplarse potencialmente como un periodo de revisión exhaustiva de los axiomas y valores
centrales de la cultura en que se produce (Turner, 1988: 170). En esta fase, cada uno refleja el
momento sagrado y sublime del fervor para agradecer o suplicar a la imagen sagrada. En ella se
encuentra un mundo de significados que expresan desde el momento de salida y llegada al
espacio sagrado, es decir, el lugar de origen del antorchista representa el espacio donde se
encuentra toda su referencia individual y colectiva, es donde se autoidentifica. Al iniciar el
recorrido se envuelve de nuevos referentes que lo hacen sentirse como parte de ese colectivo,
en donde se representa y forma parte integral de la peregrinación.
El acto de peregrinar constituye ese traslado místico donde el caminante
nunca va solo. Cuando comienza el trayecto se inicia la separación de la
comunidad de origen y de las pertenencias iniciáticas. Paso a paso el trayecto
se va pintando a los pies del peregrino, en forma de liminalidad, donde lo
extraño sucede por el simple hecho de que el peregrino está lejos del inicio y
lejos del final del camino. (Vázquez (2010) Op. cit., 162, apud Turner).

Para Turner (1988), el peregrino se encuentra en la fase liminar o mejor dicho liminoide,
lo que quiere decir que no pertenece a ninguna entidad estable y permanente sino temporal.
Siguiendo en la búsqueda de los atributos de la peregrinación aparece como muy significativo
que la posición social no representa la diferencia. Aunque se presente, esta desigualdad es sólo
temporal, una vez terminada la peregrinación y cumplida la misión se restablecen a su vida
común. Aplicando otra vez la terminología de Turner (Op. Cit: 250 – 352), los antorchistas
forman lo que él denomina communitas temporal, homogénea y especial formada por
circunstancias excepcionales, en contraste con la estructura social (heterogénea, desigual y
permanente) en la que viven comúnmente.
La peregrinación con antorcha demuestra los mismos atributos como otros
tipos de peregrinación, entre los cuales destacan las penitencias (el viaje es
difícil), peticiones, ruegos y agradecimientos. La peregrinación convierte el
espacio y tiempo en algo excepcional y sagrado (Hlúsek, 2013:97).

21
Es por ello que los antorchistas comparten a lo largo de su recorrido elementos que los
hacen afines, primero porque tienen un sentido de pertenencia de su lugar de origen, y
segundo, porque al mismo tiempo mantienen relaciones de reciprocidad, solidaridad y
acompañamiento durante la peregrinación.

Durante el trayecto, el grupo de antorchistas hacen paradas, muchas veces organizadas,


las cuales son necesarias para que su peregrinación se considere correcta, completa y exitosa. A
lo largo del recorrido las oraciones y cánticos acompañan ese momento sagrado, exaltan el
júbilo y la devoción, pero también son expresiones donde proyectan su presencia a todo aquel
que los vea pasar. En este caminar, llevan consigo cuadros o esculturas de la imagen sagrada
para sentirse acompañados durante el trayecto, así como el emblema o escudo de su
comunidad para identificarse ante los otros y tener un sentido del lugar de pertenencia.
Cuando el peregrinus se desplaza sobre caminos, carreteras y veredas es
frecuente que reciba como regalo o como manda, por parte de personas
instaladas en campamentos, cruceros y diversos puntos de las rutas
peregrinacionales, muchos alimentos y líquidos variados para “aguantar” la
“friega” que el desplazamiento representa” (Pinedo, 2015: 55)

Las características del atuendo del peregrino son diferenciadas de acuerdo al uniforme
que portan. Este puede tener un sentido práctico debido a los colores y maneras de vestir y
hace que los miembros de un grupo puedan diferenciarse del resto de los antorchistas y se
sientan parte de una comunidad a la cual pertenecen. Aunque todos reflejen un mismo fervor,
la comunidad de peregrinos se distingue utilizando vestimentas deportivas, indígenas o
“vestidos” con el atuendo de Juan Diego. Además de que se encuentran elementos
relacionados a la vestimenta como el de presentarse sucios y desgastados durante el viaje,
elementos que le dan significado a la peregrinación.

Aun perteneciendo a una misma población existen también expresiones particulares en


cada grupo de peregrinos, pero todas las antorchas expresan sacrificio, fe y adoración a una
entidad divina. Aunque en ellas se distingan formas de expresión devocional vinculadas con el
deporte, con aspectos relacionados al turismo religioso y otras expresan elementos de carácter
expiatorio, esto no limita que haya antorchas que puedan mezclar diferentes expresiones
durante su recorrido.

22
En los recorridos que el peregrinus realiza, generalmente los poblados que
habitan en su paso, así como los pueblos originarios de tal o cual región
ofrecen distintos elementos relacionados no sólo con la experiencia
peregrinacional religiosa, sino también otros como los relacionados con la
mística, la tradición, el ocio, la investigación, el deporte y el
autoconocimiento (Pinedo, 2015: 47).

En esta condición liminal, el peregrino se encuentra desposeído de su propia condición


social común, se enviste con ropajes particulares para diferenciarse ante los otros y al mismo
tiempo representar su práctica ritual. Es por ello que “ pueden ir disfrazados de seres
monstruosos, llevar un simple taparrabos encima o incluso ir desnudos, con el fin de
demostrar que, en cuanto a seres liminares que son, no tienen status, propiedades, distintivos,
vestimenta secular que indique el rango o rol, ni posición alguna dentro de un sistema de
parentesco (Turner, 1988: 102).

La devoción de implorar con los pies a través de las peregrinaciones con antorcha, es
una de las manifestaciones religiosas que se llevan a cabo hoy en día en la ciudad de San
Cristóbal de Las Casas, así como en el resto del estado de Chiapas. Las peregrinaciones son
una de las formas de la religiosidad católica en la que expresan la fe a la virgen de Guadalupe.
Son niños, jóvenes y adultos, todos van en busca de los santuarios en los que ven la meta para
pagar sus penas o el cumplimiento de su manda.

A partir de las categorías que se presentan en este apartado teórico, busco analizar el
fenómeno de las antorchas guadalupanas en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. Parto de
reconocer que las ritualidades y devociones no nacen de forma espontánea, sino que
responden a un contexto social específico que contribuye a que estos fenómenos religiosos se
establezcan como expresiones de la vida religiosa en los lugares donde se originan.

D) A Propósito del método.

El hilo metodológico consiste en dos ejes trasversales que ofrecen elementos para la obtención
de la información y la construcción de las reflexiones de esta investigación. Para los capítulos

23
uno y dos, se planteó algunos antecedentes históricos sobre el guadalupanismo, para ello he
recurrido a textos historiográficos que amplían el análisis para entender algunos momentos
coyunturales desde el ámbito social, político y cultural que amalgamaron el origen al culto
guadalupano en México y Chiapas.

Con los datos recopilados de estos materiales, utilicé el método comparativo el cual
busca ser la herramienta que permita identificar, describir y contrastar eventos, prácticas y
devociones marianas que fueron realizadas en Europa principalmente. Esto ayuda a establecer
las semejanzas y las diferencias en torno al fenómeno de las mariofanías y que pueda ser útil
para determinar los antecedentes para la construcción del culto guadalupano en México. De
igual manera, contrasté rituales similares en otras partes de México y fuera de él con el fin de
conocer las diversas formas de representación simbólica de peregrinación hacia las devociones
marianas y/o de santos y Cristos. A lo largo de estos capítulos se narra cronológicamente
algunos de los acontecimientos que dieron origen para fortalecer el catolicismo y la expansión
del guadalupanismo en Chiapas y posteriormente en San Cristóbal de Las Casas.

En segundo lugar, usé el registro de material primario, fuentes que se encuentran en el


Archivo Histórico Diocesano de San Cristóbal de Las Casas (AHDSC), para registrar información
sobre los antecedentes de la veneración a la Virgen de Guadalupe en San Cristóbal de Las
Casas. Esta búsqueda dio como resultado la identificación y revisión de expedientes referentes
a la documentación relacionada a la iglesia de Guadalupe de la ciudad. Entre los expedientes
encontré documentos diversos y vales de ingresos y egresos monetarios o en especie
(monedas, joyas, oro, etc.) previos a la coronación de la virgen de Guadalupe en la ciudad de
San Cristóbal de Las Casas, fechados desde 1929 a 1931, así como la revisión del Fondo de
Cura del Sagrario relacionado a la Asociación de Acción Católica.

En la exploración de la documentación sobre el culto guadalupano en Chiapas,


identifique dieciséis Boletines del Órgano del Comité Organizador de la Coronación “La Virgen de
Guadalupe”, publicados mensualmente en la Ciudad de San Cristóbal de Las Casas, a partir de
marzo a diciembre del año de 1930 y de marzo a septiembre del año de 1931. Estos
documentos están en la Colección de la Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG)
que se encuentra en el Archivo Histórico del Estado (AHE) resguardado en la biblioteca de la

24
Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (CUID - UNICACH) en la ciudad de Tuxtla
Gutiérrez, Chiapas.

En el tercer capítulo, aparecen aspectos que están relacionados con las antorchas
guadalupanas. Para ello, fue necesario hacer una revisión de fuentes de archivo referentes al
movimiento de “Acción Católica” y la participación de la diócesis de Chiapas, elementos
fundamentales que dieron paso a la construcción de las peregrinaciones guadalupanas con
antorcha en Chiapas, además de recurrir a entrevistas de peregrinos guadalupanos que
participaron en las primeras peregrinaciones que se realizaron en San Cristóbal de Las Casas,
reconstruí parte de los orígenes de las antorchas contrastándolas con los datos obtenidos en el
archivo Histórico Diocesano de San Cristóbal de Las Casas (AHDSC), referente a este tema.

En la construcción de los temas etnográficos fue necesario describir las diversas


situaciones rituales del ciclo festivo que aluden a las peregrinaciones guadalupanas con
antorcha, información que fue recopilada antes, durante y después del fenómeno religioso en la
ciudad de San Cristóbal de Las Casas. El método utilizado fueron las técnicas etnográficas
propias de la investigación social9 como el registro y observación de algunas antorchas durante
la organización previa hasta su peregrinar. Hice el trabajo de campo durante los meses de
noviembre y diciembre de 2014 al 2017. Durante esos eventos realicé entrevistas y relatos de
vida de antorchistas de la ciudad de San Cristóbal y en menor medida de peregrinos de otros
municipios del estado. También hice trabajo etnográfico en San Cristóbal de Las Casas y
multilocal para aquellas peregrinaciones que se encontraban fuera de la ciudad, ya que eran
antorchas que viajaban dentro y fuera del estado.

Los procedimientos empleados para la obtención de la información fueron


principalmente entrevistas con algunos representantes de las antorchas de los barrios y colonias
de la ciudad, el registro de organigramas de cada una de las antorchas, línea del tiempo de la
organización, la descripción de las funciones de cada uno de los cargos previos y durante la
peregrinación, las formas de organización y el reconocimiento de los miembros entre

9 Las técnicas están diseñadas para garantizar la autenticidad de los hechos o datos, para garantizar la eficacia de su
registro o control, y su principal objetivo consiste en evitar que los hechos se desvirtúen, que las observaciones o
mediaciones no resulten adecuadas que la información obtenida se pierda o se disperse (Torres, 2003:171).

25
antorchistas. Pude así clasificar los tipos de antorchas que hay en la ciudad y las características
que cada una tiene.

Realicé observación participante durante el peregrinar de dos grupos de antorchas, en


el año 2014 con la Antorcha Guadalupana “San Juan Pablo Segundo” en la ruta Tuxtla
Gutiérrez - San Cristóbal de Las Casas, y en el año de 2017 con la Antorcha Guadalupana
Musicalizada “Santa Cecilia” en la ruta San Cristóbal de Las Casas - Ciudad de México, ambas
antorchas originarias de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. Esta técnica sirvió para registrar
las actividades que realizaron durante el trayecto y para conocer de manera más profunda la
percepción devocional de los peregrinos en su proceso de peregrinar. También entrevisté a
algunos presidentes de juntas de festejos encargados de las oficinas parroquiales de la iglesia del
Barrio de Guadalupe para obtener datos referentes a la celebración guadalupana y las
peregrinaciones con antorchas.

Para ofrecer mayor información a los datos expuestos en este trabajo, incluyo un
apéndice que contiene documentos religiosos, oraciones, cantos, himnos; así como cuadros y
listados que contribuyen a enriquecer y ampliar la investigación. Igualmente hice un registro de
material iconográfico de la virgen de Guadalupe en las distintas iglesias y capillas de la ciudad
de San Cristóbal de Las Casas, así como de las ciudades más importantes del estado, con el fin
de exponer las características de esta imagen en los santuarios guadalupanos chiapanecos.

A lo largo del documento se presenta material fotográfico (del año 2014 al 2017)
referente a las antorchas que peregrinan de y hacía San Cristóbal para mostrar las diversas
formas de devoción que acompaña a los peregrinos y a las peregrinaciones, además de algunas
de las expresiones que se desprenden del culto que alimentan el fervor guadalupano; entre
ellas, carteles, altares, objetos, propaganda etc. Esto me permitió proporcionar datos más
precisos referentes a las peregrinaciones guadalupanas con antorcha que se llevan a cabo en la
ciudad de San Cristóbal y que se pueden observar en el mes de diciembre en gran parte del
estado de Chiapas.

26
Introducción
Los santuarios y las peregrinaciones
Los santuarios son los espacios donde se gestan infinidad de expresiones religiosas dentro del
campo religioso, es ahí donde se realizan rituales que son expresados hacia un santo, un cristo
o la virgen. Entre estas muestras devocionales se encuentran las peregrinaciones utilizadas a lo
largo de la historia de algunas culturas del mundo, como expresiones religiosas que han servido
para fomentar celebraciones cíclicas que las valida como miembros de ellas.

Para ello expongo algunos ejemplos de culturas antiguas que han utilizado expresiones
similares relacionadas a las peregrinaciones como una práctica para ordenar su vida ritual, así
como para construir un mundo normado y reglamentado a partir de esas ceremonias. Este tipo
de fenómenos religiosos han llamado la atención de especialistas que se interesan en
estudiarlas. Uno de los apartados muestra algunos referentes de interpretación que se han
empleado para analizar las peregrinaciones como maneras de implorar con los pies. También
presento algunos de los santuarios más importantes en México, los cuales son espacios en los
que miles de personas generan rituales y ceremonias a nivel regional o nacional. Así como se
describe de manera general algunos santuarios devocionales en los que se realizan diversas
peregrinaciones y procesiones a lo largo del estado de Chiapas.

• Movilidad religiosa y expresiones de sacralidad

Las peregrinaciones han sido una práctica utilizada en la historia de las culturas en el mundo,
realizadas de manera individual o en grupos ligados a eventos religiosos en los que los
creyentes se desplazan a los sitios sagrados para buscar la cercanía con sus seres espirituales,
divinidades y figuras sagradas.

En la historia de algunas sociedades antiguas, el fenómeno de peregrinar fue parte


importante de su práctica ritual, ya que estaban ligadas a su propia construcción cultural y
social. Estos grupos de personas viajaban por diferentes caminos, buscando aquello que les

27
daba soporte a su vida terrenal, realizando rituales o ceremonias espirituales que los acercaba a
lo sagrado, como actos con oráculos o iniciáticos.
Numerosos datos suministrados por la antropología nos vienen a demostrar
la presencia de “peregrinaciones rituales” en las más diversas culturas, que nos
hacen pensar en que la vida nómada, dentro de la que se produjeron las
primeras manifestaciones religiosas de la humanidad, convirtió su forma de
vida -siempre en movimiento- en una repetición del paradigma celestial, de
la misma forma en que las culturas sedentarias incidirían más tarde sobre la
organización cosmológica del espacio. El movimiento, o la peregrinación,
esencial en la vida y en la economía del hombre primitivo, se habrían
convertido así en una de las primeras hierofanías captadas por el hombre -
junto al sol y a los astros, los fenómenos meteorológicos y el fuego- que
nunca jamás perdieron su sentido y su simbolismo religioso (Barreiro, 1993:
59).

Haciendo una breve referencia sobre algunas de las culturas que tuvieron prácticas
rituales relacionadas a las peregrinaciones se encuentran los egipcios. Ellos celebraban ritos de
iniciación en algunos santuarios y se vinculaban con un dios en un momento de su vida. En
estos espacios se movilizaban grupos de peregrinos como en “Abidos [que era] la ciudad santa
por excelencia para los antiguos egipcios y punto de atracción principal para iniciados y futuros
iniciados en sus misterios” (García, 1987: 303). En esta concepción religiosa, los egipcios
tuvieron en su haber otros sitios de peregrinación en los que se representaba el origen y fin de
su propia vida terrenal como Busiris que era otro centro ceremonial que atraía a viajeros y
peregrinos.

Para el caso de los griegos, los santuarios de peregrinaje fueron muchos, debido a que
esta cultura realizaba rituales y ofrendas de distinto tipo. “El más famoso de los santuarios
oraculares desde tiempos inmemoriales era el de Delfos, donde la Pitia desgranaba a los
consultantes los oráculos de Apolo. El principal de los santuarios terapéuticos era el de
Asclepio, el dios médico, en Epidauro” (Ibíd.: 306).

Entre las muchas celebraciones de importancia que tuvieron los griegos se encontraba
las celebraciones deportivas en la ciudad de Olimpia, en la que se realizaban principalmente
juegos atléticos en honor a sus dioses. En estas actividades se mezclaba actos religiosos y
deportivos como las carreras de antorchas o lampadedromía, la cual consistía en hacer carreras

28
en relevos10 para llegar a un altar de un Dios. Estos eventos fueron plasmados en cerámicas en
las que se expresaba la vigorosidad de los corredores llevando una antorcha en las manos.

Cerámica griega en la que se expresaba la lampadedromía


o carrera en relevos.

Fuente: Cfr. Links de fotografías: Cerámica griega, en la bibliografía.

Se encuentran también culturas que practicaron la peregrinación como manifestación


de piedad. Entre ellas se encuentran dos grandes religiones antiguas como el budismo y el
mahometismo. Al parecer, Buda antes de su muerte, “impulsó la peregrinación a cuatro
lugares, testigos de significativos acontecimientos de su vida, desde su nacimiento hasta donde
reposarían sus restos. Y en cuanto al islamismo, es bien conocida la peregrinación obligatoria a
la Meca, con sus implicaciones religiosas, sociológicas y folclóricas” (García, 1987: 311).

Posteriormente la práctica de peregrinar, se propagó en los comienzos del cristianismo,


en lo que se puede llamar “Época bíblica”. Durante este periodo se encuentran referencias de
traslados de grupos de personas las cuales estaban relacionadas con los hitos de la vida de los
patriarcas escritos en el Antiguo Testamento, principalmente en el libro del Éxodo, pasaje que
tuvo su origen alrededor del año 1240 antes de Cristo en el que el pueblo israelita liderado por
Moisés huye del poder de los egipcios:

10 Actividad deportiva que estará presente en las carreras guadalupanas en la actualidad, una de las manifestaciones
religiosas que surgirán en el guadalupanismo mexicano y que expondré en capítulos posteriores.

29
Es la salida de Egipto, que en la Biblia es la gran hazaña de Dios: la salida del
país de la esclavitud en camino hacía la tierra prometida. Dios libera a su
pueblo “con gran poder, mano fuerte y brazo extendido”, abriéndole un
camino al mar (Éxodo, 2005: 68).

En esta narración bíblica es donde aparece la primera manifestación social de


peregrinar desde la concepción teológica en la que la religión judía y posteriormente la cristiana
utiliza a la peregrinación como un acto de fe; caminando en busca de un sitio sagrado o
prometido. Es ahí donde se pone de manifiesto la creencia de un ser poderoso que llegó a
cuidar y proteger a su pueblo ante aquellos que impedían su creencia: “Dios no viene
principalmente para exigir que se le respete o para trazar caminos espirituales, sino para
escoger, preparar y guiar a un pueblo a través del cual actuará en el corazón de la historia
humana” (Ibíd., 2005).

En el periodo post bíblico, el templo de Jerusalén fue el centro de atracción de los


israelitas y no sólo por peregrinaciones espontáneas, sino también por su carácter ritual y para
algunas fiestas.
Tres veces al año, los varones israelitas debían “presentarse ante el Señor”,
es decir, dirigirse al Templo de Jerusalén: esto daba lugar a tres
peregrinaciones con ocasión de las fiestas de los Acímos (la Pascua), de las
Semanas (Pentecostés) y de los tabernáculos; y toda familia israelita piadosa
acudía, como hacía la familia de Jesús, a la ciudad santa para la celebración
anual de Pascua. Durante su vida pública, también Jesús se dirigía
habitualmente a Jerusalén como peregrino; por otra parte se sabe que el
evangelista san Lucas presentaba la acción salvífica de Jesús como una
misteriosa peregrinación, cuya meta es Jerusalén (García, 1987: 305).

Aunque las peregrinaciones no constituyen un signo distintivo del cristianismo, ni


mucho menos de una característica específica de la religiosidad de Occidente, ha sido un
fenómeno religioso que se ha difundido en otras religiones a través de diversas formas y
simbologías entre los devotos.

En la historia del cristianismo, las peregrinaciones físicas o espirituales fortalecieron la


evangelización y posteriormente la catequización de los pueblos conquistados, modo que ha

30
sido utilizado hasta el siglo XX11. Sin embargo, para el periodo cristiano en Europa muchos
viajeros se movilizaron al sitio sagrado de Jerusalén para cumplir sacrificios que ofrecían en su
caminar, esto fue muy recurrido por “la tradición judaica, por la pagana, [en el que] propició un
mismo sentimiento de piedad que se establece en lugares concretos relacionados con Jesús de
Nazaret, con sus discípulos y con los mártires, el cristianismo no podía verse libre de no hacer
suya la práctica peregrinatoria” (Ibíd., 308). Al respecto se cuentan con relatos de viajes de
peregrinos que caminaron en los primeros años del cristianismo, entre el año 333 al 385
después de Cristo en los que largas caravanas de peregrinos caminaban en busca de los sitios
sagrados.
El más antiguo es el “Itinerario desde Burdeos a Jerusalén”, redactado por
un peregrino de la Galia anónimo por el año 333, y es una indicación de los
caminos con su exacto metraje, por leguas entre Burdeos y Tolosa y por
millas desde Tolosa hasta Jerusalén. Este itinerario supone que la
peregrinación a Jerusalén tenía ya detrás una cierta historia de desarrollo
organizado. Posterior, pero de más interés, es el “Itinerario de Egeria”, una
monja hispánica, concretamente galaica. Es la descripción del viaje realizado
por la autora desde Constantinopla a Jerusalén entre 383 y 385. Un ilustre
peregrino del siglo IV, a finales, es San Jerónimo, de quien sabemos que
siguió prácticamente el mismo camino de Egeria y que luego se quedó en
Belén para hacer vida cenobítica junto a la cueva de la Natividad”(García,
1987: 310).

Esta práctica religiosa cobró importancia en la Edad Media, al moverse por sitios
sagrados para el catolicismo, principalmente aquellos que representaban los lugares que habían
sido testigos de la vida y muerte de Cristo.
Lo realmente especifico de las peregrinaciones del Medievo en Europa es su
“organización”, llevada a término mediante la integración de las rutas hacia
los santuarios o los lugares sagrados en grandes “caminos”, que emergían
sobre la fragmentación del espacio político, y señalaban metas comunes para
una sociedad que empezaba a reconstruir su economía y su propia identidad
cultural y religiosa sobre el modelo social resultante de la fusión de los
pueblos bárbaros con las poblaciones romanizadas del antiguo Imperio
(Barreiro: 1993:62).

11En el año de 1943, es invitada la Diócesis de Chiapas para que participe en la Peregrinación Espiritual a Tierra
Santa: “El S.P. León XII acompaña a los peregrinos a Tierra Santa y anima a todos los fieles para unirse a ellos en
peregrinación espiritual con la mente, con el deseo y con la oración. Enriquecida con indulgencias. Costo 5
Centavos” (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.353. Exp.1).

31
Entre ellos se encuentra la Tierra Santa en Palestina y en Jerusalén, lugares que se
caracterizaron por tener una larga tradición de peregrinación ya que se consideraban espacios
sagrados. Recordemos que durante la Guerra Santa; el Papa, como representante de la Iglesia
católica impulsó campañas militares que propiciaron grandes batallas con el objetivo de
restablecer el control cristiano en estos lugares, pero que en nombre de ellas se aprovechaba a
“cristianizar” y se buscaba tener los sitios al resguardo para su protección como Bienes
Sagrados. Durante el siglo IV se realizaron grandes devociones y puntos de atracción a las
numerosas tumbas de mártires y santos, en las que la gente iba en busca de encontrar todo
aquello que afianzaba la fe a Cristo.
Desde los primeros tiempos de la Iglesia han estado en uso las
peregrinaciones: la Virgen María, después de la Ascensión del Señor,
peregrinaba frecuentemente al Calvario visitando los sitios de la Pasión e
inaugurando así el piadoso ejercicio del Vía-crucis; los primeros cristianos
siguieron este ejemplo, y la Tierra Santa fue el lugar de la más grande y más
frecuentada de las peregrinaciones, la que muchos santos, como San Juan
Kanció practicaron, con otra multitud de venerables personajes. Después de
ésta fueron las más célebres, las peregrinaciones al sepulcro de los Apóstoles
San Pedro y San Pablo en Roma, y la del Apóstol Santiago en Galicia, hasta
tal punto que los Sumos Pontífices se reservaron la dispensa de los votos de
estas peregrinaciones (Chávez, 1893: 6 – 7).

En la antigüedad muchas fueron las manifestaciones de fe y devoción que se


propagaron por toda Europa para expresar sacrificio o piedad, tal es el caso de las famosas
peregrinaciones a Santiago de Compostela12 que se remontan a más de mil años atrás. Esta
movilidad religiosa comenzó durante el reinado de Alonso II (792- 842) al descubrirse la tumba
de Santiago Mayor considerado el gran evangelista de España. El Camino de Santiago13 cobró
importancia en los siglos XII y XIII, pero que hoy en día es uno de los destinos más
importantes de peregrinación en el mundo. “Después de Roma y Jerusalén, es la tercera
peregrinación cristiana acuñada por la tradición en tiempos medievales. En cierto modo, la
gran ruta de la cristiandad medieval. Y para España, de la reconquista” (Ramos, 2013: 3).

12 “Calixto II, en 1120, fue el Papa que concedió el privilegio a Compostela de poder celebrar Años Jacobeos o
Jubilares (Años Santos), todos aquellos en los que el día 25 de julio (día de Santiago) coincida en domingo. Los
peregrinos que visitaran la tumba del Apóstol en el trascurso de un Año Jacobeo podrían ganar el Jubileo
(indulgencia plenaria). El Papa Alejandro III confirmó en 1179 este privilegio mediante bula papal. El Camino de
Santiago fue reconocido por el Consejo de Europa como Primer Itinerario Cultural Europeo. En el año 1993 la
ruta jacobea fue distinguida por la UNESCO con el título del Patrimonio Cultural de la Humanidad” (Ramos,
2013: 3).
13 Ver Barreiro, 1993.

32
La tradición hispana medieval ha establecido su predicación en la Península,
adonde fue trasladado su cuerpo a su muerte y hallado milagrosamente en el
siglo IX por un ermitaño de nombre Pelayo (Paio). La veneración de sus
reliquias y el patrocinio apostólico dieron lugar a uno de los fenómenos más
interesantes del medievo, el Camino de Santiago, eje vertebrador de la Edad
Media hispana e importante motor del proceso de Reconquista (Carvajal,
2015:63 – 64).

Para el caso de las historias de peregrinaciones entre los antiguos pueblos prehispánicos
en América se encuentran documentos y narraciones de antiguos movimientos de personas
que viajaban caminando en busca de los sitios sagrados. Además de contener dentro de los
mitos de origen de los pueblos el peregrinar en busca de la tierra prometida, como el caso de
los aztecas quienes en su búsqueda por este lugar, encontraron el valle de Aztlán para fundar
su pueblo.
Los códices y los anales contienen el relato de la salida de Aztlán, lugar de
origen sin duda mítico, en un año Uno Pedernal (1168) y también los
acontecimientos que marcan las largas peregrinaciones hacia la “tierra
prometida”, de la llegada luego al valle de México, hacia mediados del siglo
XIII y de las vejaciones que los aztecas tienen que soportar de parte de los
pueblos locales, en fin de la fundación, hacia 1325, de México Tenochtitlan y
de la existencia sin gloria de los aztecas – mexicas “entre los juncos y las
cañas”, bajo la dominación de Colhuacán primero y de los tepanecas de
Azcapotzalco después (Graulich, 1974: 311).

En este paso por las prácticas de peregrinar en la época prehispánica, se encontraron de


igual forma pasajes de tradiciones referentes a peregrinar, como el caso de los invasores
chichimecas que llegaron a fundar Tula y el imperio Tolteca, así como también otros pueblos
que basaron su mito de origen en planteamientos referentes a peregrinaciones o migraciones
en busca de la tierra prometida. Sin olvidar que parte de la práctica ritual de los pueblos
mesoamericanos era la de celebrar peregrinaciones, ceremonias y rituales en los cerros, las
cuevas, los manantiales, los árboles, etc.; debido a que eran considerados lugares sagrados.

A la llegada de los españoles a tierras de América, estos sitios sagrados fueron


aprovechados por los primeros misioneros para lograr sus propósitos de evangelización y de
paso borrar las antiguas prácticas religiosas “paganas” que los indios realizaban en estos
lugares.
Las grandes mediaciones entre la esfera mesiánica de los indios y el
milenarismo de los evangelizadores, entre los héroes – dioses indígenas y los

33
santos del evangelio, fueron los santuarios. Al no poder desmantelarlos
como a las pirámides o desviarlos como los ríos, los religiosos católicos
trataron de aprovechar la influencia de peregrinaciones a los lugares sagrados
de las religiones autóctonas. Se vio la repetición en México (y todo el
conjunto de la América andina) de los fenómenos que han podido
observarse durante milenios, especialmente en la Europa alta (Lafaye, 1984:
89).

En este periodo vertiginoso de recomposición religiosa en la que los pueblos nativos


vieron establecer una nueva concepción de lo divino, los misioneros y las primeras Órdenes
religiosas se volcaron en evangelizar a todos los indios mediante la creencia de un sólo Dios
hegemónico, que se implantó mediante la catequesis aprovechando los antiguos espacios
sagrados y estableciendo elementos de la iconografía católica de la misma manera como
ocurrió en la Europa antigua.

Son innumerables las muestras sincréticas que crearon una religión particular en
América, el ejemplo más notable y justamente el que centra este trabajo es el caso de la imagen
de la virgen de Guadalupe, imagen religiosa tuvo desde su origen una interpretación
relacionada con la cultura mesoamericana y con elementos coloniales.
La intención de los evangelizadores no dejaba lugar a dudas, como lo
recuerda Torquemada: se trataba de encaminar a los peregrinos hacía
Nuestra Señora, la Virgen que es “Nuestra Señora y Nuestra Madre”, de
sustituir a la diosa – madre de los antiguos mexicanos por la madre de
Cristo, madre de la humanidad, cuya redención había permitido (Lafaye,
2006: 290).

Otra de las características implementadas en la Colonia fue las diversas narrativas que
hay sobre vírgenes, santos y cristos aparecidos en montes, cuevas, ojos de agua o en distintos
espacios. Ejemplo de ello fue la inesperada aparición del Cristo de Chalma en una cueva14,
evento que provocó que muchos indios de la zona se convirtieran en cristianos y en la que:
Tanto los naturales de Chalma y Malinalco, como los de Ocuila se
trasformaron inmediatamente después de la aparición, tornándose en dóciles

14 Existía en la barranca una cueva entre Ocuila y Malinalco, en la cual los ocuiltecas rendían adoración a un ídolo
denominado Ostotoctheotl, que equivale a dios de las cuevas; cuentan las crónicas religiosas que ante este altar,
los naturales sacrificaban niños y animales a los que extraían el corazón para ofrecerlo en cajetes al ídolo. Fue en
esta área en donde el 8 de mayo de 1539, fue encontrado el cristo ocupando el lugar que correspondía a la
celebración de San Miguel, por tal motivo la iglesia fue dedicada a este arcángel, y la fecha de la festividad se pasó
al 29 de septiembre (Rodríguez, 2015: 36 – 37).

34
a las enseñanzas de los frailes y en sus mejores colaboradores en todo lo que
se les pedía. El Cristo fue venerado por 144 años en este lugar, y para 1683,
los frailes franciscanos ya tenían lista la iglesia actual, junto a la cual fue
construido más tarde el convento (Rodríguez, 2015: 36).

En esta recomposición hagiográfica, los fieles católicos comenzaron a plagar de


imágenes religiosas en cada rincón del territorio en los que anualmente celebran rituales y
ceremonias dirigidos a sus imágenes. En este caso será la peregrinación un aspecto
fundamental de manifestación religiosa la que se nutrirá de cada uno de los elementos
culturales de la propia sociedad que la produce.

Las peregrinaciones son una de las formas de expresión de religiosidad que ha


caracterizado a las más antiguas culturas del mundo, las cuales han cambiado con el paso del
tiempo y se han acomodado de acuerdo a las necesidades de la gente que las reproduce. Así
mismo pone al descubierto la infinidad de sitios sagrados que se encuentran diseminados en
cada región, los cuales le han dotado de elementos simbólicos y míticos que refuerzan la
práctica de peregrinar.

• Santuarios y devociones en México y Chiapas

Las peregrinaciones han sido tema de estudio y de análisis realizados por las disciplinas de las
ciencias sociales, de los cuales cada una de éstas la ha conceptualizado desde diversos enfoques
(sociológico, antropológico, histórico, económico, político, etc.), es por ello que en este
abanico de posibilidades es oportuno considerar que las peregrinaciones son consideradas
como:
…un largo camino que se hace del sitio en el que se habita a un lugar
sagrado, dedicado a una imagen sobrenatural, con el fin de solicitarle favores
especiales o dar las gracias por los ya recibidos. La finalidad de este viaje es
arribar al recinto sagrado que alberga a la imagen venerada e impregnarse de
su poder. Este peregrinaje se hace generalmente estableciendo un acuerdo
previo con la persona venerada: una manda, un voto, una promesa o
simplemente por devoción o por otros motivos y propósitos (Aguilar, 1990:
32).

35
Luis García, caracteriza a la peregrinación con tres rasgos esenciales, a) “un lugar
sagrado, [b] desplazamiento de individuos o grupos hacia él y [c), la] esperanza de alcanzar un
bien concreto, sea en la dimensión material, o sea en la espiritual. Es decir, se trata de un viaje
individual o colectivo, con motivaciones religiosas, hacia un lugar sagrado” (García, 1987: 301).

Esta práctica se encuentra ligada indiscutiblemente al ámbito religioso, por lo que para
la Iglesia, el acto de peregrinar será una forma que contendrá elementos propiamente
espirituales que denotan humildad, penitencia, esperanza así como paciencia y fortaleza, como
lo expresa un texto publicado en 1893 sobre las peregrinaciones guadalupanas:
Es grande acto de fe, porque el peregrino cree en el objeto que de lejos
camina a buscar; cree que agrada al Señor dejando sus negocios,
abandonando su hogar, erogando gastos costosos, emprendiendo largas
jornadas por visitar un Santuario venerado y postrarse ante una imagen
muda: cree que Dios se agrada de sus ofrendas, cree que el hombre no vive
de sólo pan, ni viene al mundo sólo a gozar. Y esa fe, no la esconde en los
recónditos pliegues de su espíritu; sino que externa, la patentiza, la pública:
camina como peregrino; visita los santuarios y deja los paseos y recreos de
las ciudades. No se avergüenza de Cristo ni de su evangelio, que es el pecado
más general, y uno de los más graves de la presente generación (Chávez,
1893: 13 – 14).

En esta concepción religiosa y práctica devocional está la negación de toda acción en


que se encuentre involucrado algún acto profano, por lo que el peregrino debe prepararse
previamente para tener un proceso de incorporación al mundo de lo sagrado, así como
mantener a lo largo del recorrido fortaleza espiritual para que a su llegada se encuentre
totalmente vigorizado para integrarse ya renovado a su vida cotidiana, en esta condición del
peregrino, la peregrinación es acto de fe y de reflexión de su vida.
El espíritu de fraternidad que se vive mientras se peregrina, la oración y la
reflexión sosegada que se produce en la vida interior del peregrino,
promueve la comunión espiritual y fraterna a la que todo creyente aspira. De
este modo, antes de llegar a la meta del camino, en donde el peregrino
realiza una profesión de fe, el peregrino ya manifiesta su ferviente deseo de
encontrarse con Dios, a través de la mediación santa que hallará en el centro
de peregrinación al que encamina sus pasos (Agís, 2008: 7).

La finalidad de la peregrinación va a estar necesariamente vinculada al santuario, en el


que el sacrificio del peregrino esta siempre ligado a recibir un bien sea éste espiritual, físico o
material, aunque para ello el recorrido pueda ser doloroso, cansado hasta en ocasiones

36
peligroso, el fin último es llegar a rencontrarse con la deidad y ofrecer ese peregrinar para
obtener la recompensa a su devoción.

Son estos lugares donde se entrecruza una trama social entre aspectos históricos,
sociológicos y simbólicos de las personas que crean estos espacios, de tal manera que son el
reflejo de una variedad de significaciones que se convierten en referentes particulares que en
ocasiones sobrepasan los límites territoriales. Estos santuarios en algunos de los casos
corresponden a sitios de antiguas prácticas prehispánicas; sin embargo, actualmente son lugares
importantes para la iglesia católica debido a que se realizan celebraciones religiosas de acuerdo
al santoral católico. Además de encontrarse ubicados dentro de los pueblos y ciudades donde
se suelen realizar actividades rituales anuales.

En este universo de sitios religiosos con que cuenta el país, se expresa un sin fin de
peregrinaciones y muestras devocionales de la gente. Muestra de ello es el amplio registro de
textos etnográficos y de análisis relacionados a los santuarios y devociones en México (Aguilar,
1999; Josserand, 2007; Rodríguez, 1983; Ochiai, 1985; Luna, 2015; Martínez, 2013) entre otros.

Mencionaré sólo algunos de los principales santuarios más antiguos e importantes


registrados en México, de los cuales son catalogados como centros de atracción de diversos
grupos sociales, así como de una creación de caminos y rutas de peregrinaje que adquieren por
un lado un poder sagrado, y por otro, se convierten en vías de comunicación en las que se
interconectan los pueblos y de quienes visitan estos lugares, fortaleciendo su identidad
religiosa, es por ello importante mencionar que:
Para que una iglesia se considere santuario debe de llenar los siguientes
requisitos: que esté destinado al culto divino público; que se haya convertido
en término de peregrinaciones por parte de los fieles que acuden allí para
implorar gracias o cumplir voto; que vayan los peregrinos impulsados por un
motivo especial, cual sería: orar ante una imagen venerada, visitar una
reliquia que allí se guarda, obtener milagros que en tal sitio obra Dios; lucrar
especial indulgencia que allí se puede ganar (Rodríguez, 1983: 11).

Teniendo estas características expuestas por Lucila Rodríguez, México contiene dentro
de su hagiografía diversos santuarios con devociones multitudinarias, como las peregrinaciones
en las que los feligreses recorren grandes caminos en busca de estos sitios sagrados y expresan
infinidad de maneras de implorar y agradecer los favores a sus deidades:

37
En muchos de los casi doscientos santuarios mexicanos que se registran en
estudios preliminares sobre el tema, las manifestaciones devocionales
rebasan las fronteras regionales, abarcando espacios limítrofes e inclusive
planos de alcance nacional como sucede en el Tepeyac, Chalma, Ocotlán,
Zapopan y San Juan de los Lagos (Báez, 1995: 49).

Para hacer un repaso general de estas manifestaciones religiosas se encuentra


primeramente el santuario de la virgen de Guadalupe ubicado en la Ciudad de México, que es
el centro ceremonial religioso más importante para la fe católica y para millones de personas
que lo visitan de todas partes del mundo, comparado con la “de Lourdes en Francia, Fátima en
Portugal, La Meca de los Árabes y el Muro de las Lamentaciones de los Judíos” (Rodríguez,
1983: 16).
En la perspectiva nacional, El Tepeyac guadalupano es el principal santuario,
pero su importancia está lejos de agotar la notable cantidad de referentes
numinosos que encontramos a lo largo y ancho del territorio, desde las
pequeñas localidades, a las urbes regionales. Funcionan en México múltiples
centros sagrados, sitios en los cuales clínicamente las devociones populares
se reactualizan” (Báez, 1995:54).

Para el caso del resto del país se distinguen otros santuarios importantes en las que se
consideran sitios de peregrinación y espacios en los que confluyen cientos de personas que
realizan ceremonias y rituales que son representativos de los grupos culturales que los llevan a
cabo, entre ellas se encuentran:

Santuarios de México.
Lugar Nombre Mito Fundador Fechas de Rituales y
de la celebración ceremonias
virgen o
Cristo
La Basílica de Nuestra Se dice que durante la conquista de los Los días de Durante estos días
la ciudad de Señora de indios de estas regiones, muchos fueron celebración en las muchas muestras
Zapopan, Zapopan. los enfrentamientos que tuvieron lugar que asisten miles devocionales se
Jalisco. entre indios y españoles15. En una de de peregrinos es el realizan en este
estas batallas, cuentan que Miguel de 18 de enero, fecha santuario, haciendo de
Bolonia llevaba sobre su cuello la imagen en que se celebra este uno de los
de Nuestra Señora de la Expectación, el aniversario de la santuarios más
motivo por el cual milagrosamente coronación. El 18 importantes de la

15Principalmente lo ocurrido en el año de 1538, en la que una desatada insurrección capitaneada por el tectoani
Coaxicari y secundada por la mayoría de los tectoanis de la región se enfrenta con un grupo de españoles. En esta
batalla fallece el capitán Pedro de Alvarado, que viaja desde Guatemala para engrosar la fila de españoles y luchar
contra los indios insurrectos Ante este hecho, suben al cerro de Segovia, el propio virrey acompañado de Fray
Miguel de Bolonia, como un intento por la rendición de los indios. (Rodríguez, 1983).

38
bajaron miles de indígenas con sus de diciembre es la región y del país.
caciques a rendirse. Ante este hecho fiesta titular de
muchos pueblos comenzaron a Nuestra Señora de
repoblarse y después de esto fue llamada: la Expectación, así
“La pacificadora”16 entre otros nombres. como el 8 y 18 de
cada mes.
San Juan San Juan de En los primeros años de conquista, este Los días más Es una de las vírgenes
Bautista los Lagos. lugar dependía eclesiásticamente de concurridos al más difundida en toda
ubicado en Jalostitlán, pueblo de españoles erigido santuario son la república aún con
Mezquititlán en curato en ese entonces. Esta ermita principalmente el los mexicanos
en el estado estaba bajo el cuidado de un indio día 15 de agosto radicados en los
de Jalisco. llamado Pedro Andrés y su esposa Ana día de la Asunción Estados Unidos de
Lucía, los cuales resguardaban la imagen de la Santísima América. Al igual que
de la virgen de la Purísima Concepción Virgen, el día 2 de la virgen de
que había sido obsequiada por los frailes Candelaria y las Guadalupe, su imagen
franciscanos Fray Antonio de Segovia y dos semanas del se encuentra en
Miguel de Bolonia durante su labor mes de diciembre. camiones, tiendas o
evangelizadora. Muchos fueron los cualquier lugar donde
milagros que se le adjudicaron a la virgen, es colocada para su
sin embargo lo ocurrido en el año de protección.
1623 se le conoce como el milagro más
importante que atrajo la atención de
todos17.
Estado de Nuestra El caso de la virgen de Ocotlán estará La virgen de Es celebrada durante
Tlaxcala. Señora de ligado con una peste que azotaba la Ocotlán es todo el año, pero el
Ocotlán. región. Durante esos días, un indígena de celebrada durante periodo más
nombre Juan Diego Bernardino se dirigía todo el año, pero importante en la que
a su pueblo de Santa Isabel Xiloxostla el periodo más asisten devotos en
para saber de la salud de sus familiares importante en la peregrinaciones es el
que se encontraban sufriendo ese terrible que asisten primer lunes de mayo
mal. Durante su viaje pensó en llevarles devotos en cuando baja a la ciudad
agua del rio Zahuapan para tratar de peregrinaciones es de Tlaxcala y cuando
mitigar los dolores. Al llegar a este sitio el primer lunes de regresa al santuario el
se le aparece la virgen y al igual que Juan mayo, cuando baja tercer lunes de este
Diego a la virgen de Guadalupe, la virgen a la ciudad de mismo mes.
de Ocotlán, le habla a este indígena. En Tlaxcala y cuando
esta narración el indio Juan Diego es regresa al santuario
llevado por orden de la virgen a un lugar el tercer lunes de
donde se encontraba un manantial, le este mismo mes.
pide que, recoja un poco de agua y que
les dé a tomar a cada uno de sus
familiares, así como a cualquier persona
para que a través de esa agua milagrosa se
curaran de sus males18.

16 Entre los años de 1541 y 42, se repobló Zapopan con indígenas de Jalostitlan, o de Tlaltenango, no existe
completamente certeza al respecto, y es en esta ocasión cuando el V. P. Fray Antonio de Segovia, regaló a los
indígenas de Zapopan la Virgen de la O, o de la Expectación, que desde entonces es Nuestra Señora de Zapopan
(Rodríguez, 1983: 61).
17 … cuando visitó el pueblo un grupo de maromeros formado por un matrimonio y dos hijas; uno de los

números que ejecutaban, consistía, en hacer una serie de piruetas sobre una tabla de dagas que tenía una punta
hacía arriba; al actuar una de las pequeñas falló y calló sobre una de las dagas y murió al instante; amortajaron a la
pequeña y la condujeron a la ermita, Ana Lucía, al ver como sufrían los padres, quienes además de perder una hija
sufrían remordimientos por ser responsables de la actividad circenses de la niña, se compadeció de ellos y les dijo
que la Cihuapilli (que quiere decir señora), le devolvería la vida a su hija porque ella tenía completa seguridad de
las potestades de la imagen. Pasó a la sacristía y regresó con la virgen, a la que colocó sobre el pecho de la muerta,
y un minuto tarde la niña empezó a moverse. Le quitaron la mortaja y al momento la niña se levantó viva y sana
(Rodríguez, 1983: 66).
18 Cuenta el mito fundador que al día siguiente se aparecieron a esta loma los frailes junto con el indio Juan Diego

y al llegar encontraron un árbol que resplandecía, le pusieron seña y regresaron. Al día siguiente al llegar de nuevo
a este lugar, trataron de cortar el árbol. Sin embargo se dieron cuenta que estaba hueco y que dentro de éste se

39
Estado de Virgen de la La historia de esta imagen tiene lugar, en Se lleva cabo el 18 Cientos de personas
Oaxaca. Soledad. el año de 1620, fecha que fue crucial para de diciembre, llegan a rendirle tributo
la creación del culto a esta virgen y para fecha de la a la virgen patrona, en
que fuera denominada la Patrona de los Expectación de la los que expresan
oaxaqueños, debido a que esta imagen virgen. innumerables muestras
fue encontrada cerca de la capital de de devoción.
Oaxaca en una caja abandonada19, hecho
que fue crucial para que la gente de la
zona adoptara la creencia a esta virgen.
Al sur del Virgen de Se menciona que “la pequeña imagen de Es celebrada cada Muchos fieles también
estado de Juquila. la virgen de la Concepción fue regalada 8 de Diciembre. la llaman Virgen de
Oaxaca. en la época colonial por el evangelizador Juquilita o
fray Jordán de Santa Catarina a un simplemente Juquilita,
catequista chatino, quien la llevó a su la cual recibe a cientos
pequeño pueblo de Amialtepec” de miles de visitantes
(Barabas, 2006: 249), sin embargo su al año en su santuario,
amplia difusión de ser una virgen al que llegan en
milagrosa se debe a un incendio ocurrido peregrinaciones
en el año de 1633 en la que la imagen procedentes de
salió ilesa20. distintos puntos de los
estados de Oaxaca,
Puebla, Tlaxcala,
Hidalgo, Estado de
México, Guerrero,
Veracruz, Chiapas y
otros lugares de la
república21.

encontraba una imagen de la virgen. En ese momento fue llamada la virgen de Ocotlatía que quiere decir “ocote
que ésta ardiendo”, enseguida a este evento se organizó una procesión y fue llevada a la iglesia de san Lorenzo
donde fue colocada en el altar mayor (Rodríguez, 1983).
19 El 18 de diciembre de ese año, un grupo de arrieros que venían de Veracruz rumbo a Guatemala, descubrieron

que entre sus animales venía una mula cargada con una gran caja, la cual no pertenecía a la recua que ellos traían.
Supieron que se había perdido de otro grupo y se agregó al de ellos. Decidió el patrón de la recua entregarla al
alcalde de Antequera, ya que estaban por llegar ahí, antes de que los dueños del animal supieran que había sido
robada. Estaba amaneciendo cuando el grupo llegó hasta la ermita de San Sebastián. Los arrieros se santiguaron
devotamente al pasar, las mulas pasaron todas menos la desconocida, que se quedó parada y después se echó ante
la entrada de la ermita, y no hubo poder humano que la hiciera moverse de ahí. Desesperado, el patrón de la recua
ordenó que descargaran al animal para ver si así lograban moverlo. Le quitaron la caja que cargaba, y en seguida la
mula se paró, se sacudió y cayó muerta, como si entregando la carga terminara su labor en este mundo y no
tuviera ya nada más que hacer en él. El patrón se desesperó aún más, pues temía que no solo lo acusaran de robo
del animal, sino también de sacrificarlo. Mandó inmediatamente a uno de sus arrieros a que avisara al alcalde, para
con esto salvar su responsabilidad. El día iba transcurriendo, y la autoridad representada por el alcalde se
presentó en el lugar. Este se enteró de todo y ordenó que se abriera la caja, para saber qué se le iba a regresar al
propietario cuando se presentara. La sorpresa de los ahí presentes no tuvo limite, en ella venían una imagen de
Nuestro Señor Jesucristo en el momento de la Resurrección, y la cabeza y las manos, ambas bellísimas, de la
Virgen de la Soledad. La primera imagen traía en el pedestal esta inscripción: “Jesús en su Resurrección”, y la
virgen: “María Santísima de la Soledad al pie de la Cruz”. El alcalde consideró que se encontraban ante un
verdadero milagro, por lo cual, envió inmediatamente a un empleado a que le avisase al señor obispo. (Rodríguez,
1983: 107).
20 La pequeña imagen de la virgen de la Concepción salió milagrosamente ilesa de un incendio y comenzó a hacer

milagros desde su humilde oratorio, por lo que provocó la iniciativa eclesiástica de trasladar la imagen a la
cabecera parroquial, a pesar de las negativas de los chatinos. Pero la Virgen regresó tres veces a Amialtepec y se
aparecía ante su gente confirmando que ése era su lugar escogido. Finalmente, el obispo de Juquila legitimó el
culto a la virgen de Juquila en 1719, y en 1773 fue trasladada a su actual santuario en Santa Catarina Juquila. Desde
entonces se registran peregrinaciones masivas de devotos que acuden en busca de milagros, a pagar promesas y a
solicitar salud, bienestar y riquezas (Barabas, 2006: 249).
21 Cabe señalar que la proliferación de santuarios y devociones en diversos lugares del estado de Oaxaca
relacionados a la imagen de Juquila corresponde a que consideran los lugareños de los pueblos indígenas del

40
Estado de Virgen de La iglesia dedicada a San Antonio de Celebrada desde el Fechas en la que recibe
Yucatán. Izamal. Padua que después de ser construido un 27 de noviembre la visita de
convento por Fray Pedro de Landa en un hasta el 11 de peregrinaciones de
sitio con material de los edificios diciembre. devotos, gremios de la
prehispánicos, fue necesario tener una región que llegan en
imagen católica que se venerara en esta busca de bendiciones
iglesia22. Ya como patrona de Yucatán, para su trabajo, hogar
fue llevada tres veces a Mérida para o cualquier petición.
dominar epidemias en los años de 1730,
1749 y 1769. El 22 de agosto de 1949
recibió la virgen de Izamal, la coronación
pontificia.
Entre los Señor de La historia sobre el señor de Chalma data Las fechas más La creciente devoción
estados de Chalma. del periodo de la evangelización de los importantes son el a esta imagen ha
Morelos y el pueblos de la Nueva España, en la que se 6 de enero, día de propiciado que
Estado de cuenta que al paso de las diferentes le Epifanía, habitantes de esta
México. Órdenes religiosas que se establecieron miércoles de región, sin importar
en estos lugares no había tenido éxito el Ceniza, Primer clase social como los
proyecto evangelizador. Sin embargo no viernes de rancheros, los
es hasta la llegada de un grupo de frailes Cuaresma de indígenas de la zona y
agustinos cuando se logró finalmente Semana Santa y el los capitalinos o
afianzar el catolicismo a raíz de la 1 de Julio, día del visitantes de otras
“aparición” del señor de Chalma. Señor de Chalma. partes del país,
peregrinen hacia la
iglesia23, ya sea
caminando o a caballo.
Cabe mencionar que el
camino está lleno de
narraciones.
relacionadas a los
peregrinos24.

estado que la virgen tiene “hermanas” o “hijas” también aparecidas, pero de menor jerarquía, a las que se rinde
culto en otros santuarios: el de Chontecomatlán (Chontal Alta), el de Ipalapa (amuzgos), el de Ixcuintepec
(mixes), el de Zacatepec (tacuates), el de Tejalapam (zapotecos del valle), el de Agua Virgen (Cuicatlán) y el de
Huicsisil (en la Mixe Baja) (Barabas, 2006: 249). Esto ha propiciado que se realicen ceremonias y rituales
particulares en estos lugares así como la concentración de población de estas regiones del estado.
22 Habiendo terminado la construcción de la iglesia de San Antonio de Padua, que es la advocación de la iglesia del

convento, creyó necesario traer una imagen digna para su adoración, por lo que aprovecho un viaje a Guatemala,
ya que tenía que arreglar algunos asuntos en la Audiencia de esta ciudad, ya que Yucatán pertenecía a ella, trajo a
su regreso dos imágenes idénticas de la Purísima Concepción. Cuentan en Izamal, que durante ese viaje de regreso
con tan preciado cargamento, le sorprendió un fuerte aguacero, que sin embargo respetó a los animales que
llevaban las imágenes; donde ellos iban no llovía. Al llegar a Mérida, dejó Landa una de las imágenes en el
convento de San Francisco de esa ciudad, y la otra la condujo hasta el altar de la iglesia de Sn. Antonio de Padua,
en el convento franciscano de Izamal. Según la tradición, los habitantes de Valladolid, población de españoles,
envidiosos de la bella imagen que tenían en Izamal, pueblo de indios, trataron en una ocasión de trasladar a la
virgen a Valladolid, pero al salir de la población, la caja que la contenía se volvió tan pesada que fue imposible
moverla, manifestando con esto la virgen que su deseo era permanecer en Izamal. (Rodríguez, 1983: 125).
23 Una de las peregrinaciones más importantes de la región es la que se realiza de manera anual de San Pedro

Atlapulco al Santuario de Chalma. Antiguamente Atlapulco era un pueblo de paso hacia el sur que conectaba a los
estados de Morelos, Guerrero y el Estado de México. Hoy día esta misma ruta ha tomado el papel de ser un
camino de santos y peregrinos que transitan para llegar a Chalma, en la que la participación de los santos patronos
es importante para los peregrinos durante la visita al Señor de Chalma. “El ciclo de peregrinaciones del santuario
se dividen en cinco fiestas: la feria de Reyes, Semana Santa, La Santa Cruz, San Miguel y La Natividad, por lo que
a lo largo del año, San Pedro Atlapulco tiene un nutrido grupo de Chalmeros que transitan de forma corporada o
familiar, con sus Cristos e imágenes de la Virgen de Guadalupe, de Los Remedios, de San Juan de los Lagos y los
diferentes patronos que los protegen, llevados a cuestas, en carros, en camionetas o en bicicletas”(Peña, 2015: 18).
24 Ejemplo de ello es que se aconseja que todo aquel que peregrina nunca deba de dejarse vencer por el cansancio,

debido a que según la leyenda, algunos peregrinos que se agotaron fueron convertidos en grandes rocas que aún
se encuentran en el camino.

41
Silao del Cristo Rey.25 Llama la atención que es uno de los Se lleva a cabo el En este santuario se
estado de santuarios que no contiene en su origen último domingo de muestran diversas
Guanajuato. ningún episodio milagroso. La noviembre, expresiones de piedad
construcción de este santuario respondió festividad con la y devoción a la imagen.
a una necesidad de buscar un lugar en cual se culmina el En estas devociones se
que los católicos encontraran la año litúrgico y da encuentra por ejemplo
protección ante aquellas mutilaciones a pasó para el el peregrinar a pie
los espacios religiosos que el Estado tiempo de hasta la cima de la
estaba haciendo ante el pueblo Adviento. montaña, rezar y
creyente26. participar en las
adoraciones nocturnas
y en las misas
multitudinarias en las
horas santas27.
Fuente: (Rodríguez: 1983).

Como se muestra, la proliferación de santuarios marianos y de cristo es un claro ejemplo


de la diversidad de expresiones devocionales que cubre la geografía mexicana. En cada pueblo
o localidad hay un sinfín de devociones que acapara a cientos de peregrinos que visitan éstos
lugares. En ellos se entrecruzan prácticas culturales de las distintas personas que ahí acuden, así
como de las maneras de interpretación de su religiosidad y de implorar con los pies.

En los santuarios dentro del estado de Chiapas, son propicios para que se realicen
peregrinaciones y procesiones principalmente durante los días de los santos, vírgenes o a
Cristo, como es el caso del Cristo negro de Esquipulas que comenzó a ser venerado en
Guatemala y se irrigó posteriormente en la actual zona Norte del estado de Chiapas.28 De igual

25 La imagen de Cristo Rey fue elaborada por el escultor regiomontano Elizondo. Mide 20 metros de la cabeza a
los pies y pesa 200 toneladas. A los pies del Cristo se encuentran dos ángeles que tiene una altura de 7.50 metros,
la imagen de Cristo Rey se encuentra ubicada arriba de la capilla dedicada en su honor.
26 El Santuario de Cristo Rey nace por la iniciativa de un Obispo. Sin embargo, poco tiempo después la

construcción se convirtió en un movimiento socio religioso, ya que el Estado no veía con buenos ojos el proyecto.
Entre esta controversia, el 11 de enero de 1923 fue colocada la primera piedra de este monumento, en una
ceremonia presidida por el Excelentísimo señor Delegado Apostólico don Ernesto Filippi. Ante este hecho el
Estado reaccionó haciendo cumplir el artículo 24 Constitucional que “prescribe que el culto religioso debe
celebrase exclusivamente dentro de los templos o en los domicilios particulares, el gobierno mexicano expulsó a
Mons. Filippi, a pesar de que la ceremonia se había improvisado con tablas y mantas en un recinto privado”
(Rodríguez, 1983: 78).
27 Las peregrinaciones a Cristo Rey de la montaña son parte importantes de las prácticas culturales que se realizan

en el cerro del Cubilete, ya que cuentan con un gran número de peregrinos provenientes de diferentes lugares del
país, así como de las Diócesis cercanas de la región del Bajío. En dichas peregrinaciones participan numerosos
fieles pertenecientes a importantes grupos apostólicos de sus diferentes parroquias, que se congregan en puntos
específicos ya sea en sus lugares de origen, o ahí mismo en la comunidad de Aguas Buenas en las faldas del cerro y
que se reúnen para comenzar la peregrinación hasta la cima de la montaña. (Luna, 2015: 26)
28 El origen de la devoción al cristo de Esquipulas data de principios del siglo XVI en el pueblo de Esquipulas,

Guatemala. Esto se debió a que: “El 20 de agosto de 1595, el Provisor del Obispado, Fray Cristóbal de Morales,
celebró con el famoso escultor Quirio Cataño un acuerdo para tallar para el pueblo de Esquipulas, un Crucifixo de
vara é media muy bien acabado é perfeccionado. Sin embargo, el hecho de que el contrato no fuera descubierto

42
manera, se encuentra la celebración a la virgen de Guadalupe que es venerada en todos los
templos e iglesias del estado y en las que se realizan peregrinaciones que se movilizan dentro y
fuera de la geografía para visitar no sólo los santuarios de Chiapas sino que se mueven dentro
del territorio mexicano, como una manera de rendirle tributo a la virgen.

Muestra de esta diversidad de santuarios que se encuentran en las regiones del estado, son
los siguientes:
Santuarios chiapanecos
Lugar Nombre Mito Fundador Fechas de Ceremonias y
de la Celebración rituales
virgen o
Cristo
Cabecera Señor de Tila La veneración al Cristo negro de Tila Celebrado el Desde 400 años
municipal de surgió con elementos similares cuarto viernes de movimientos de peregrinos
Tila. relacionados a un cristo aparecido en cuaresma (fecha que buscan este santuario30
una cueva, mismas características que movible). para adorar a esta imagen,
se describen en el mito fundador del muestra del sincretismo de
cristo de Esquipulas29. expresiones culturales de los
pueblos indígenas con
población mestiza que se fue
ubicando en esta región.
Cabecera Señor de Tila No hay un dato histórico que Celebrado el Es uno de los sitios
municipal de de Magdalenas explique la presencia de esta imagen. cuarto viernes de religiosos de importancia en
Aldama (antes cuaresma (fecha la región ya que asisten
Magdalenas). movible). cientos de personas de las
distintas comunidades
colindantes, así como de
otros municipios de la región
como San Andrés
Larraínzar, Simojovel, el
Bosque, Bochil e inclusive
familias enteras procedentes
de la colonia Ojo de Agua
del municipio de San
Cristóbal de Las Casas
(Porraz: 2007).

sino hasta 1685 dio paso a diversas leyendas sobre una ficticia aparición: se habla de una cueva, que no es más que
el tiro de una mina cercana cavado tiempo después de ya existir la imagen; otras colocan el suceso en un cerro o
en una milpa” (Navarrete 1999: 96-115).
29 “Según los choles el lugar de la aparición ocurrió en una cueva situada en el cerro que se alza frente al pueblo,

hacia donde se orientan la fachada del templo y la cruz atrial. En la cima, otra cruz señala el punto en donde se
localiza la cueva del milagro” (Navarrete, 2005: 264). Estas narraciones corresponden a dinámicas que los frailes
utilizaban como una medida radical para desmantelar la adoración de los antiguos indios a deidades prehispánicas
a las que se les rendía culto en esta región.
30 La práctica de peregrinar a este santuario es también para visitar la cueva como un referente del mito fundador
del culto al señor de Tila: “De ahí que tanto la estalagmita de la cueva como la imagen de la iglesia representen al
Señor de Tila, y los dos lugares sean apropiados para venerar a Cristo. Durante las festividades, se realizan
procesiones para llevar al sitio de la cueva una pequeña imagen de Cristo, que se conserva en la capilla de la iglesia
y se utiliza para sacar en procesión. Estas procesiones, presididas por el sacerdote y acompañadas de peregrinos
que emprenden la ardua subida a la cueva para cumplir con sus promesas, constituyen uno de los acontecimientos
culminantes de las dos fiestas del año” (Josserand, 2007: 87).

43
En esta celebración se llevan
a cabo rituales y ceremonias
tradicionales que organiza el
sistema de cargos de la
localidad, entre estos se
encuentra el “intercambio”
de los santos, ampliamente
descrito por Ochiai (1989)31.
Cabecera Señor de los No hay un dato histórico que Celebrado el Se realizan rituales y
municipal de Desagravios. explique la presencia de esta imagen. quinto viernes de ceremonias de la población
Tenejapa. Cuaresma (fecha tzeltal que habita en este
movible). municipio así como de
procesiones de personas
mestizas de otros municipios
aledaños, los cuales llevan
ropas y accesorios para la
imagen.
Cabecera Padre Eterno La presencia de estos santos es Celebrada cada Estas devociones han
municipal de (Santísima atribuida a imágenes aparecidas que 21 de septiembre. generado que en este
La Trinitaria. Trinidad). han generado lugares de devoción. santuario se lleven a cabo
En los cuales se refieren a anualmente una de las
narraciones sobre estos hechos peregrinaciones más
dentro de la tradición oral de los importantes de la región a
pobladores32. través de “romerías” o
procesiones realizadas por
mayordomías principalmente
de población indígena
tojolabal, procedentes de los
municipios de Las
Margaritas y Comitán
(Gómez: 2000). Estas
romerías tojolabales visitan
igualmente santuarios en San
Mateo Ixcán en Guatemala.
Cabecera virgen de No hay datos históricos sobre la Celebrada Indígenas tojolabales
municipal de Santa presencia de esta imagen en esta anualmente cada procedentes de los
Las Margaritas Margarita región. 11 de julio. municipios de Trinitaria y
Las Margaritas realizan
romerías cada 11 de julio

31 En ella se lleva a cabo procesiones desde sus lugares de origen hasta la cabecera municipal de Aldama. En cada
contingente van devotos y parte de la mayordomía de cada uno de los municipios como Larraínzar, Santa Marta
perteneciente al municipio de Chenalhó y de Santiago El Pinar. Estos santos se instalan dentro de la iglesia
durante los días que duren los festejos al Cristo de Tila. Esta misma peregrinación es llevada a cabo en las fechas
de los festejos de los santos patronos en sus lugares de origen. Según la concepción indígena, estos santos se
visitan debido a que tienen una relación de parentesco por lo que durante los días de festejo de cada uno de ellos,
las mayordomías llevan en procesión al santo hasta la cabecera municipal del santo patrón festejado. Parte de la
tradición de la población visitante es hacer grandes colas para subir las escaleras que conduce a su camarín y
acercarse a la parte trasera donde se encuentra el Cristo crucificado, la virgen de Dolores y san Juan, en donde los
devotos le besan los pies y sus ropas, además de pasarle manojos de ramas de manzanilla para que estas sean
utilizadas para bebidas en casos de enfermedad.
32 “Mis bisabuelos platicaban que la imagen del Padre Eterno aparece en un barrio que se llama Bajucal, ahí había

un montón de piedra y tres crucesitas que simbolizaban la Santísima Trinidad. Entonces, un señor que cargaba
palma se le apareció un viejito pidiéndole agua. El señor bajó su tercio y como traía su garrafita de agua le ofreció
un trago del agua y le dijo “mira hijito, yo estoy muy cansado; quisiera llegar al pueblo pero ya no me alcanza mis
pies. Yo sé que tú también tenes trabajo, llevas tu tercio, sólo un favor te pido: que lleves tu tercio pero, a ver si
podes pedir favor con tu gente que me vengan a alzar, que me vengan a llevar” y dijo el señor, no tenga usted
cuidado, voy a hacer su mandado. Volvió a cargar su tercio de palma, llegó al pueblo y dijo que en la montaña
estaba un viejito cansadito. Se juntaron para ir por el viejito y encontraron al santo y por eso esta sentadito”
(Entrevista realizada al Sr. Jaime presidente de la Mayordomía del Padre Eterno del municipio de la Trinitaria,
Chiapas. 25 de Agosto de 2018).

44
para solicitar salud,
bienestar, buenas cosechas,
además de la protección de
sus pueblos. Ellos recorren
tres kilómetros
peregrinando, en la que
llevan velas y flores en
honor a santa Margarita, así
como estandartes de los
santos patronos de los
lugares de donde son
originarios.
Fuente: Trabajo de Campo (2017).

En la mayoría de los pueblos indígenas de Chiapas, las tradiciones religiosas están regidas
por prácticas relacionadas a rituales y ceremonias vinculadas a los santos patronos y a vírgenes
o Cristos que componen su calendario ritual. Como parte de sus actividades religiosas es hacer
procesiones junto con los santos o se congregan para realizar peregrinaciones desde la entrada
del pueblo hasta los pies del altar mayor donde se encuentra la imagen sagrada, la cual le llevan
flores, obsequios y ropajes para ser depositados dentro de la iglesia; todo esto acompañado de
música tradicional.

En Chiapas como en muchos de los estados de la república mexicana, existen en cada


pueblo santuarios locales que congregan cientos de personas principalmente durante los días
de festejo. En ellos se fortalecen las relaciones entre los pueblos a través del intercambio
comercial y cultural, además de propiciar relaciones de alianzas locales.

Es por ello oportuno mencionar que las peregrinaciones son una muestra de las
expresiones devocionales en que muchos de los pueblos del mundo han utilizado para
acercarse espiritualmente a sus deidades. Actividades que han sido reproducidas entre las
sociedades contemporáneas, el cual sigue siendo un acto utilizado por los feligreses para
fomentar devociones y ritualidades, muchas veces libres del dogma religioso de la Iglesia, ya
que al ser una manifestación popular se encuentra lleno de creatividad de la propia gente que la
produce.

45
1ra. Parte
El guadalupanismo

46
CAPÍTULO I
Breve historia del guadalupanismo mexicano.
Para el católico, cualquiera que sea su nacionalidad,
al nombre México va unido el de la Virgen de Guadalupe.
Dicho el pueblo que rinde culto a la más delicada de las devociones; la de María.
Diplomático chileno, Sr. J. L. Santa María R. 190233.

Al hablar sobre la expansión del culto a la virgen de Guadalupe se tiene que mencionar que es
un tema de interpretación en donde se emplea lo histórico y lo mítico de su origen. En esta
creación sobresalen diversas visiones y sucesos que no sólo corresponden a eventos puramente
americanos sino que responden a acontecimientos y problemáticas que tuvo en mente el poder
español frente a las lógicas europeas. En este sentido, el culto guadalupano sirvió de vínculo
para generar un sentido de unidad y al paso del tiempo apoyó de manera exitosa la eficacia de
la conquista espiritual y civil de México y posteriormente de América Latina.

Es por ello importante asentar que el guadalupanismo tuvo varias aristas, en torno a las
cuales algunos autores han profundizado en fuentes de importancia histórica y literaria como
Brading, 1980; O´Gorman, [1986] 2016; Lafaye, 2006; Nebel, 2003; Gruzinski, 2006; Noguez,
1995; Taracena, 2008; León Portilla, 2012; entre otros autores que plantean diversas visiones
referentes a la historia del culto guadalupano.

Los siguientes apartados de este capítulo ponen a discusión de manera general los
distintos momentos de incorporación de la imagen mariana en el proceso de evangelización
que se estableció en América durante el periodo Colonial. Para ello es importante mencionar
que los autores que aquí se enuncian proporcionan un andamiaje interpretativo que ayuda a
ampliar su discusión, por lo que cada uno enriquece el trabajo que aquí se presenta.

33 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Pensamientos Guadalupanos”. Boletín La
Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.10. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 01 de Junio de 1930, p. 2

47
1.1 La patrona de la Nueva España: un proyecto evangelizador

El Suceso Guadalupano cambiará la realidad,


transformó los riscos, mezquites, nopales, espinas y
abrojos del cerro en turquesas, oro, piedras
preciosas y flores refulgentes, convertirá la noche
en día, el invierno en primavera, convertirá la
historia colonial en historia de salvación. Tenemos
muchos sufrimientos, miserias y problemas. Vivimos
en un tiempo muy difícil pero sabemos que nuestra
Madre vela por nosotros. La esperanza está
presente.
(Temas para antorchistas, Misión Guadalupe 2012).

Diembre 2012).
La imagen de Guadalupe tomó sentido en México a través del mito de María personificada en
Guadalupe.34 Según el relato, la virgen de Guadalupe se le apareció a un indio náhuatl en el
cerro del Tepeyac. Este mito de creación se sustentó con el documento náhuatl denominado
Nican Mopohua35, el cual narra las apariciones de Guadalupe a Juan Diego y la referencia con la
deidad femenina de Tonantzín con el mito de las apariciones en el Tepeyac (León, 2000). Al
respecto el arzobispo Francisco Antonio de Lorenzana y Buitrón36 señaló algunas
características de la virgen de Guadalupe en unos de sus escritos37, refiriéndose a que la imagen
se figuraba una niña perfecta, en edad de catorce o quince años conforme la representación del
Misterio de la Purísima Concepción.

Mientras que otros escritores de la época resaltaban las características físicas de la


virgen similar a la fisonomía de la población mexicana resultado del mestizaje, destacando la
presencia simbólica de la tez morena de la virgen relacionada con el color de la piel de los
nativos y con tradiciones mesoamericanas de lo sagrado como los colores empleados en las
representaciones religiosas de los indios (Lafaye, 2006). Estos elementos fueron pieza

34 El origen, la historia y el significado fundamental de la palabra castellana Guadalupe son discutidos. Es


universalmente aceptada la aseveración de que la primera parte, Guad – es una raíz árabe para indicar ríos y
corrientes de agua (oued), como está abundantemente difundido en la toponimia de la Península Ibérica
(Guadalquivir, Guadiana, Guadix, Guadalete, Guadiela, Guadalhorce, etc.) no ha encontrado todavía una
coordinación unánime el sufijo del nombre Guadalupe, que los especialistas en lengua árabe traducen de distintos
modos como “río de lobos” (guad – lupus), “corriente de agua escondida”, “río de grava obscura”, “río de amor”,
etc. (Nebel, 1995: 54).
35 Ver León Portilla: 2012.
36 Lorenzana nació en León, España, el 22 de septiembre de 1722 y ocuparía la sede de México de 1766 hasta el

03 de marzo de 1772, cuando regresó a España, después de nombrado arzobispo de Toledo. En 1789, Lorenzana
aún pasaría a cardenal y de 1794 a 1797 sería inquisidor general. Murió en Roma el 16 de abril de 1804, a los 81
años de edad y, en 1956, sus restos fueron trasladados a la catedral de México (Almeida de Souza, 2010:734).
37 Oración a Nuestra Señora de Guadalupe, que expuso en la catedral de México durante la homilía del 12 de diciembre

de 1770.

48
fundamental para marcar el inicio del culto a esta imagen a finales del siglo XVI, el cual fue
local y poco difundido, aunque para el caso del cerro del Tepeyac era ya un lugar importante
para la población india debido a que desde tiempo atrás gozaba de cierta fama porque era un
espacio de peregrinaciones, de cruce de caminos y de ritualidades.

Sin embargo, lo extraordinario del culto guadalupano es que no se da en 1531 sino


hasta 1648 o 1649 cuando se comenzó a difundir la existencia del milagro guadalupano, aunque
O´Gorman (2016) menciona que pudo haber sido entre 1555 a 1556, año en que Fray Alonso
Montúfar pronunció el sermón donde reconoce a la guadalupana como la madre de Dios. En
ambos casos, durante los primeros años de la aparición no existió ningún reconocimiento, ni
difusión sobre el acontecimiento en el Tepeyac. “Tropezamos con el enigma de este largo
periodo de latencia que habría podido terminar con la desaparición y el olvido si la imagen de
la virgen no hubiese aparecido tan oportunamente” (Gruzinski, 1995: 122).

En este lapso de tiempo algunos escritores y cronistas de la historia de la Nueva


España no describen sobre una veneración multitudinaria hacía la virgen de Guadalupe como
(Juan de Torquemada (1557 – 1642), Bernal Díaz del Castillo (1495 - ¿1583), “pero además
atrae poderosamente la atención que Toribio de Benavente, Motolinía (? - 1569), Andrés de
Olmos (? – 1571), Bernardino de Sahagún (¿1499? – 1590) y Gerónimo de Mendieta (¿1534? –
1604) considerados como los cuatro cronistas franciscanos más importantes del siglo XVI, no
hayan escrito ni una sola palabra sobre las apariciones guadalupanas” (Nebel, 2013: 142). Es
posible que estos escritores no hayan exaltado la veneración a la virgen de Guadalupe por
describir otros eventos que les fueron más importantes; mientras que Bernardino de Sahagún y
Bernal Díaz del Castillo sí hacen mención de la existencia de esta imagen en el Tepeyac
(Lafaye, 2006). Esto evidencia posiblemente que el culto se encontraba sumido en un evento
de menor importancia religiosa o era minimizado con otros posibles eventos de mayor
envergadura que sí fueron narrados por estos cronistas.

Lo cierto es que durante los primeros cien años sólo se edificó una ermita que
representaba las apariciones en el Tepeyac, mientras que había otros santuarios que eran más
venerados como el caso de la virgen de Los Remedios, una de las imágenes marianas que fue

49
traída por los españoles y difundida en varias partes del territorio de la Nueva España y que era
más celebrada que la misma virgen de Guadalupe.

Litografía de la virgen de Guadalupe en


tilma de Juan Diego.

Fuente: Distribución pública en la Basílica de


Guadalupe.

Lo que lleva a pensar que el impulso de la devoción guadalupana respondió a la


estrategia para establecer un culto que alcanzó y cohesionó a la mayor parte de la sociedad
católica novohispana y minimizó otras prácticas y cultos, principalmente aquellos que fueron
establecidos por las Órdenes religiosas establecidas en América (Mayer, 2002). Sin embargo
esto tomó tiempo debido a que en los primeros años de conquista los reacomodos políticos en
el Nuevo Mundo fueron marcados por conflictos y competencias entre los distintos sectores al
interior de la Iglesia católica, evento que fue opacando el renaciente culto guadalupano. En este
posible periodo de “obscuridad” o inactividad, la Iglesia no dejó de plantearse estrategias para
impulsar e incentivar a sus prelados y feligreses a fomentar su devoción, como menciona
Mayer (2002):
Si bien hay un lapso de tiempo entre 1560 y 1648 en que el culto a
Guadalupe fue casi olvidado, las altas jerarquías de la Nueva España
siguieron las premisas establecidas y los predicadores y artistas fueron
impelidos a impulsar a las diversas advocaciones de María, lo que fue bien
visible ya en el siglo XVII. En 1622 se estrenó un nuevo templo dedicado a la
virgen de Guadalupe que fue bendecido por el arzobispo Juan de la Serna.

50
Del recinto escribiría Mateo de la Cruz en 1660: “es un pedazo de cielo,
como en lugar escogido de esta Señora para asilo de nuestros trabajos y para
trono y solio de sus favores y beneficios”. Agregaba también que la
devoción a la imagen había ido en aumento por “los milagros que obraba y
con los beneficios que recibía, a cuya causa agradecidos dieron tantas
limosnas que hubo con que edificar otra ermita” (Mayer, 2002: 26 – 27).

Sin duda tanto el poder político y la Iglesia generaron una imagen unificadora que llegó
a cubrir todos los recovecos de inestabilidad tanto de indios nativos como de la población
naciente novohispana, y fue a través de la virgen de Guadalupe la que contuvo la unidad de un
pueblo carente de un símbolo que logró representarlos, protegerlos y cuidarlos. La cubrieron
de elementos propios de estas tierras y reafirmaron el poder milagroso de su imagen frente a
catástrofes y conflictos que el pueblo enfrentó a partir de ese momento en adelante. Además
de servir como un proyecto católico que impulsó la Iglesia y ganó frente a otros intentos de
devoción, tal como lo plantea Mayer (2002) al referirse que la Virgen de Guadalupe sirvió para
los fines y propósitos de la monarquía y de la Iglesia para normar y promover los valores de un
proyecto cultural para el nuevo mundo, además de trasmitir una visión del mundo y un modelo
de vida para la sociedad novohispana trasplantada con elementos autóctonos y europeos.

Es de notar que este proyecto tuvo un periodo de larga duración en el que se necesitó
del apoyo, difusión y establecimiento de un culto que requirió de la participación de diversas
instituciones, grupos y fieles marianos que se dieron a la tarea de trasmitir y realizar acciones
para exaltar la importancia de la imagen y que sirvió como un elemento que dio sentido de
identidad a la sociedad mexicana.

Entre ellos se destacan como los primeros escritores guadalupanos, el sacerdote


bachiller Miguel Sánchez38 teólogo nacido en el siglo XVI, Luis Lasso de la Vega39, así como

38 “El autor tiene 46 años. Ocho años antes, se había hecho famoso pronunciando un sermón a la gloria de San
Felipe de Jesús, primer santo mexicano, martirizado en Japón, como si él hubiese experimentado ya la necesidad
de exaltar un cristianismo arraigado en la Nueva España. Por lo demás en esta época decide consagrarse a la
redacción de una obra dedicada a la “Segunda Eva”, la virgen del Tepeyac. Gracias a él, se avivó grandemente en
los mexicanos la devoción a la sagrada imagen y desde entonces al paso que creció la noticia de su prodigioso
origen, aumentó la de su venerable santuario” (Gruzinski, 1995:123).
39 En su texto sobre la leyenda piadosa para uso de los indios: Huei tlamahuizoltica omonexiti in ilhuicac tlatoca cihuapilli

Santa María. Tlatlaconantzin Guadalupe in nican huei altepenahuac México itocayocan Tepeyacac mencionó
“Maravillosamente se apareció la señora celeste Santa María, Nuestra amada madre Guadalupe, aquí junto a la
gran ciudad de México, donde se dice Tepeyácac”.

51
los llamados Evangelistas guadalupanos como el jesuita Luis Bezerra Tanco (1603 – 1672)40,
además de Francisco de Florencia, S.J. (1620 – 1695)41, y el padre Fray Servando Teresa de
Mier42, quien al dar un sermón en 1794 propició que las autoridades eclesiásticas y políticas lo
consideraran un hereje debido a la propuesta planteada sobre el origen del culto guadalupano43.

Esta proliferación de textos guadalupanos fincó una marcada exaltación a la virgen de


Guadalupe y representó el triunfo católico en gran parte de las tierras durante la Colonia. A ella
se le reconoció como un símbolo que unificó a la Iglesia católica en América, nombrándola
Reina y Emperatriz de América44. De esta manera tanto los nativos, los criollos y los españoles
vieron en ella a una imagen cristiana con rasgos humildes, protectora y totalmente mexicana,
que generó años más tarde en una creciente devoción que se expresó en diversas
peregrinaciones y procesiones a la ermita del Tepeyac.

40 Teólogo y lingüista, además de sacerdote beneficiario de varias parroquias del Arzobispado de México que
escribió su relato y nombre de su obra el Origen del milagro.
41 Profesor de filosofía y teología en los colegios jesuitas en México, procurador en Roma y en Madrid, autor del

cuarto Evangelio, con su libro “La Estrella del Norte de México 1688” (Nebel, 2013: 154)
42 Ver (Domínguez, 2005) y (Luqui, 2009).
43 Entre sus planteamientos propuso como primer punto que la tilma de Juan Diego no había sido aparecida

frente a los ojos del obispo Zumárraga sino que era la “capa” del propio apóstol santo Tomás, quien había estado
en tierras americanas43. Como segunda proposición planteó que la virgen de Guadalupe ya era adorada y celebrada
por los indios y que su templo se encontraba erigida en la cima de la sierra de Tenayuca, en donde santo Tomás
colocó esta imagen. Como tercera proposición, aseguró Mier, que los indios llegaron a desconocer a santo Tomás
y viajaría hacia el oriente, dejando en claro a la multitud que llegarían hombres desde el mar a enseñarles la palabra
de Dios. Una vez escondida la imagen en la montaña, llegó Juan Diego y fue él quien encontraría la “capa” para
presentarla a Juan de Zumárraga. La cuarta proposición expone que la pintura se remontaba a los principios del
siglo primero de la Iglesia, y por ser una pintura divina, había sido la misma virgen quien había estampado su
imagen en el lienzo (Domínguez, 2005).
44 El 8 de febrero de 1887 a través del Papa León XIII concede “la facultad de investir con corona de oro la

milagrosa imagen de la Santísima Virgen en su advocación de Guadalupe” llevándose a cabo el sábado 12 de


octubre de 1895. En este evento no sólo se celebró la coronación sino que se llevaron a cabo tres actos que
sustentaron la devoción guadalupana: a) se inauguró el nuevo altar de la Colegiata de Nuestra Señora de
Guadalupe, una de las consagraciones más importante que guarda la imagen, b) el traslado de la imagen desde la
iglesia de las Capuchinas a la Colegiata y, c) la coronación de Guadalupe, evento que había sido esperado durante
años atrás (Adame, 2009).

52
1.2 ¡Que no haya choza, ni lugar, donde no se venere a la Guadalupana!

“El amor a la Santísima Virgen de Guadalupe y su protección hacia los mejicanos,


son el color característico de nuestra historia”. Don M. M. Zamacona45.

Desde tiempos de la conquista espiritual en la Nueva España, la veneración mariana se fue


propagando en cada espacio conquistado, ciudades y pueblos se plagaron de imágenes pintadas
o talladas, generando nuevas prácticas religiosas en la sociedad colonial46. Es de conocer que
muchas de estas imágenes fueron implantadas en espacios de veneración anteriores, lo que
provocó que en ellas nacieran rituales y ceremonias que dieron paso a nuevas formas de
devoción.

En esta construcción de la nueva Iglesia en América se incorporaron las imágenes


católicas como el caso de la virgen de Guadalupe a estos sitios sagrados prehispánicos, aspecto
que le dio fundamento y legitimidad a la virgen al relacionarla con la deidad entre los dioses
mesoamericanos, además de insertarla en un espacio donde ya se veneraba a una diosa llamada
Tonantzin47.

Esta diosa se veneraba en el cerro del Tepeyac, y “su templo [se encontraba] en un
monte, a tres millas de México, hacía el norte, y a él acudían en tropel los pueblos a venerarla
con un número extraordinario de sacrificios” (Lafaye, 2006: 285 – 286). El lugar ocupó un
papel preponderante en el mito de origen de este culto debido a que los evangelizadores
aprovecharon este espacio como “territorio sagrado” en donde antiguamente se realizaban
ceremonias y rituales, ahora se instalaban vírgenes y santos cristianos que trataban de
minimizar los cultos “paganos” de los indios de esas regiones.

45 AHE, Hemeroteca Col. Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Pensamientos Guadalupanos”, Boletín La
Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.10. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 01 de Junio de 1930, p. 2.
46 Ver la intensa proliferación de cultos de devoción mariana que Nebel (2003: 105 – 115) ejemplifica como se fue

expandiendo a lo largo de la Nueva España manifestaciones devocionales que fueron acomodándose a las
características físicas (color de piel y rasgos de su cara) de los habitantes; así como tomando sus referencias
históricas y sociales de donde eran oriundas las imágenes religiosas.
47Existe una discusión en el nombre de la diosa que era venerada en este sitio, debido a que para Sahagún

“identificaba a Tonantzin con la Diosa Cihuacóatl, mientras que Clavijero no duda que se trate de Centéotl” (Lafaye,
2006: 286).

53
Posteriormente la instauración de la devoción y el culto guadalupano se fue
fortaleciendo a través de las conmemoraciones o festividades a su imagen, así “el santuario de
Guadalupe no es más que el eslabón más notable de una red de imágenes y de fiestas, de
devociones y de milagros que satura progresivamente a la Nueva España” (Camacho, 2001:
41). Las distintas iglesias y capillas dedicadas a la virgen de Guadalupe son los lugares más
importantes para el pueblo católico mexicano y para todo aquel que se considere guadalupano
desde ese momento hasta el día de hoy, por lo que:
La primera capilla (“ermita de los indios”) fue erigida en 1532 (¿) por el
primer obispo de México, fray Juan de Zumárraga (1468 – (1533) – 1548).
Su sucesor fray Alonso de Montúfar, O.P. (1498 – (1551) – 1573) construyó
una segunda en 1556 (¿). A una capilla del año de 1566, le siguió, bajo la
autoridad del arzobispo Juan Pérez de la Serna, un primer santuario hacía
1622. Parece que alrededor de 1649 Lasso de la Vega erigió una suntuosa
iglesia. En 1695 el arzobispo Francisco de Aguilar y Seixas (arzobispo desde
1682, [muerto en] 1698) colocó la primera piedra de la actual basílica
antigua. La sagrada imagen se trasladó solemnemente el 1º. de mayo de
1709, habiendo sido consagrada el 27 de abril de 1709. En 1893 y en 1930 se
hicieron ampliaciones en la basílica. En 1904 el santuario fue elevado a
Basílica Menor. La planificación de un nuevo santuario comenzó en 1964.
La nueva basílica fue proyectada por cuatro arquitectos (Pedro Ramírez
Vázquez, José Luis Benlliure, Alejandro Schönhoefer y fray Gabriel Chávez
de la Mora) y dedicada solemnemente el 12 de octubre de 1976. La antigua
tuvo que ser clausurada debido al hundimiento y al vencimiento de la
construcción (Nebel, 2006:123 – 124).

En el marco de referencia en que nace el culto a la virgen de Guadalupe fue también el


uso del milagro un aspecto que no fue totalmente aceptado por los primeros evangelizadores
pero que a la vez fue la expresión de validez de la imagen y ayudó a exaltar la feligresía
adjudicándole leyendas y milagros que le dieron sustento a su devoción. Como lo ocurrido con
la peste o epidemia de fiebre tifoidea (matlazáhuatl) que estuvo causando estragos a la sociedad
novohispana en la ciudad de México en 1737 (Lafaye, 2006) y de la que se le atribuye la
desaparición de esta enfermedad. Instituyéndose a partir de este momento el patronato de la
virgen de Guadalupe, Mientras que en el año de 1738, Cabrera y Quintero escribe el juramento
reconociendo la importancia de esta imagen.

54
Escudo de armas de México de
Cayetano Cabrera Quintero, 1743.

Escudo de armas de México, 1738.

Fuente: Cfr. Links de Fotografías:


Escudo de la epidemia, en la bibliografía.

Este tipo de actos milagrosos ya eran recurrentes en años anteriores, en los que se
buscaba la intervención de vírgenes o santos para solicitar la protección de la población de
enfermedades o catástrofes mediante la difusión a través de sermones y de algunos escritos
realizados por teólogos, sacerdotes y devotos que fomentaron su devoción. Este fue el medio
idóneo en el que la Iglesia logró propagar el milagro guadalupano y difundir los prodigios que a
ella se le adjudicaban. Otro de los elementos que fortaleció el establecimiento del culto
guadalupano es sin duda la participación de cofradías o congregaciones que apoyaron o
generaron prácticas religiosas que fueron fomentando el culto. Estos grupos principalmente de
mujeres se comenzaron a establecer en las iglesias con el fin de reclutar, organizar, administrar
y fomentar todo lo referente a las celebraciones guadalupanas. Estas agrupaciones
denominadas cofradías guadalupanas “se fundaron en la segunda mitad del siglo XVII aunque
hay datos de la existencia de estas congregaciones desde el año de 1694” (Mayer, 2000: 193).
Estas cofradías sirvieron también para organizar fiestas, ceremonias y rituales en torno a la
imagen sobre todo durante fechas próximas a la celebración de su culto, que para ese
momento ya comenzaban a ser importantes.
Por supuesto: cada año el 12 de diciembre se desplegaban los fieles para
conmemorar la aparición. Los indios tenían su fiesta con vistosas danzas y
procesiones en el mes de noviembre. Eso no hubiera sido posible sin la

55
participación de la comunidad reunida en estas formas de organización
religiosa, que con entusiasmo, devoción y medios financieros impulsaron el
culto a la virgen del Tepeyac (Mayer, 2000: 193).

Escudo de armas de México, 1746.

Fuente: Cfr. Links de Fotografías:


Escudo de armas de México, en la bibliografía.

En este proceso de impulsar la devoción a la virgen, la Iglesia utilizó algunas de las


actividades lúdicas para catequizar a la población novohispana de una manera didáctica,
[además de utilizar] en menor proporción libros48. Debido a que el uso de la “tradición teatral”
ya era familiar entre los indígenas en la que se aprovechaba para difundir pasajes o eventos
importantes de la vida religiosa de las vírgenes y santos. “Es sabido que las sociedades
precortesianas organizaban ritos "espectaculares" y "fastuosas puestas a escena" que se
desarrollaban en ocasiones regulares y vecinas” (Mayer, 2003:194).

El teatro evangelizador, fue utilizado durante el siglo XVI y recuperado en el siglo


XVIII, para crear la devoción a la virgen de Guadalupe en el que se hacían escenografías
espectaculares montadas en “comedias” y obras de teatro para ser presentadas en diversas
ciudades; como la celebrada en 1711 en la que se llevó a cabo la escenificación de las
48 En el Concilio de 1555 se ordena vigilar más de cerca los sermones y catecismos que pasaban por los indígenas
y se limita de igual manera su circulación. Es la Santa Inquisición quien regula y fija una postura hacia quienes se
encuentren en desobediencia, para este caso, aquellos que se encarguen de difundir literatura piadosa indígena, por
lo que las versiones traducidas en lengua náhuatl relacionadas a la Doctrina Cristiana fueron confiscadas
(Gruzinski,2003).

56
apariciones en el Tepeyac49. Esta práctica fue utilizada por los sacerdotes para grabar en la
memoria y en lo visual pasajes religiosos, para ello fue necesario que las presentaciones se
realizaran en lenguas indígenas para tener más eficacia en la enseñanza y difusión.
La imagen - espectáculo comparte las características del fresco y de la
pintura. Desarrolló un vocabulario y una sintaxis nuevos para los indígenas.
Un vocabulario que no sólo acumulaba personajes inéditos tomados de la
historia sagrada y de la tradición hagiográfica, sino también elementos
figurativos que no podían dejar de sorprender, como las nubes de la
escenografía medieval, tan aptas para indicar el mundo celestial y para
concretar el ascenso o el descenso de los santos a la tierra (Ibíd.,
2003:1994).

Es por ello que la teatralidad mexicana al igual que la difusión de la imagen


guadalupana a través de los sermones, escritos y leyendas fueron utilizadas para producir
lentamente el paso de una “mariofanía mexicana” a una “epifanía patriótica50” que difundió un
profundo espíritu religioso nacionalista marcado principalmente por la institucionalización del
culto guadalupano que enriqueció su devoción y exaltó el nacionalismo mexicano a través de la
imagen, debido a que fue a través de ella la manera en que se reafirmaron los lazos entre los
creyentes y la nueva Iglesia en América.

49 A mi buen Amigo el Sr. D. Luis González Obregón. Celebre es en la historia de nuestro teatro el anexo al
hospital Real de los naturales, que estuvo en la calle que todavía conocemos con el nombre de Hospital Real, y en
el cual se daban comedias para beneficio del mismo. En diciembre de 1711 y probablemente en una de las tardes
se ponía en escena una comedia relativa a las apariciones de la Virgen de Guadalupe. No he logrado averiguar
cuando comenzaron a usarse estas comedias, ni quien fue el autor de la que entonces representaba, porque del
siglo XVII conozco algunas en mejicano y algunas de Campo Sagrado, el fecundísimo poeta popular; son de fines
del siglo XVIII, pero dejando para otra ocasión el estudio. Por cierto muy interesante de las apariciones de la
Virgen de Guadalupe en el teatro, y reanudando el hilo de mi discurso, digo que en una de dichas tardes se ponía
en escena una comedia familiar de las apariciones. La mujer que actuaba como María de Guadalupe era Gertrudis
Cervantes, quien cubrió la vacante en la compañía a la “primera dama” Antonia de Rivera. Sucedió que al
representar en la primera aparición, al bajar la comediante de lo alto del teatro entre nubes y a los acordes de bien
concentrada música “falseando los apoyos de la tramoya… estuvo a punto de precipitarse, con evidente riesgo de
su vida”. Esta lastimosa caída, le hizo abrir sus ojos y ver mejor luz los gravísimos riesgos de otras morales a que
el generó de vida que llevaba la orillaba a cada paso y los profundos abismos en que podía precipitarse y arrasar a
los adoradores, y no queriendo ya exponerse a nuevos riesgos, en cuento pido salir a la calle corrió a busca de un
confesor, y habiéndole Dios Nuestro Señor deparado un religioso descalzo del convento de S. Diego [Ciudad de
México], a su pies hizo una muy dolorosa confesión generan de toda la vida, con firme propósito de apararse de
las ocasiones de ofender de nuevo a Dios Nuestro Señor. Se refugia al establecimiento fundado bien pocos años
por el P. D. Domingo Barcia en el lugar que estuvo hasta hace poco la cárcel Municipal de Belem, con el fin de
que allí se recogieran las mujeres de mal vivir que deseaban cambiar de vida, y entonces florecía en todo generó de
virtudes, y habiendo aceptado la Cervantes, allá la mandó con uno de los Padres de la Congregación [sic]. AHE.
Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) Por García Gutiérrez, Jesús. “De la Rosa del Tepeyac.
Historias Guadalupanas. De la Farándula al Convento”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité
Organizador de la Coronación. Año I, No.10. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 01 de Junio de 1930, p. 4.
50 Ver más en (Ruíz, 2003).

57
1.3 La nación Mexicana es obra de María de Guadalupe
“Todas las demás imágenes coronadas lo han sido como efigies venerables;
más como Soberanas de un pueblo,
únicamente la portentosa Imagen Guadalupana
ha sido coronada como Reina de la nación”51

Durante la construcción del nuevo territorio español en América, el ambiente se encontraba


sumido en una recomposición social que buscaba un sentido de pertenencia a los diversos
grupos sociales que diferenciaban la sociedad colonial, en este contexto, surgió un grupo de
españoles nacidos en América que fueron llamados “criollos” los cuales lograron insertarse a la
vida política y social de la Nueva España y fueron ellos que se sintieron comprometidos en
construir la vida política y social de la naciente nación.

Imagen guadalupana

Fuente: (Zerón, 1995: 104).

Para ello fue necesario crear una unidad que cobijó y dio sentido a la vida futura, ante
esta disyuntiva los criollos se refugiaron en los elementos que les ofreció la religión católica,
una de las únicas vías que les daba certidumbre ante la falta de un sentido de pertenencia. En
este momento tomaron como estandarte de unidad a la imagen de la virgen de Guadalupe para
establecer ese lazo que los arropó para sentirse parte de una sociedad aun siendo diferentes.

51 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Pensamientos Guadalupanos”, Boletín La
Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No. 10. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 1 de junio de 1930, p. 2.

58
Los criollos de cepa española pero nacidos en el Nuevo Mundo, podían
sentir esta misma repugnancia [a los indios], ¡pero como hubieran podido ser
insensibles a los prodigios que señalaban a su patria como la tierra de su
elección de la Virgen María! Criollos, mestizos e indios de Nueva España se
encontraron desde temprano unidos bajo el pendón de Guadalupe; al menos
desde los tiempos en el que el arzobispo Montúfar emprendió su famosa
investigación sobre la Guadalupe, en 1556. La incredulidad de los
gachupines, ante las pretendidas apariciones, no hizo sino reforzar la unidad
de los devotos americanos y borrar las diferencias de castas que los
separaban, para unirlos en un mismo fervor religioso y nacional, frente a los
agentes de la dominación peninsular (Lafaye, 2006: 304).

En este contexto, la instauración de la virgen de Guadalupe como imagen religiosa no


fue tan simple ni inmediata; sin embargo, se puede decir que fue uno de los proyectos más
exitosos de la Iglesia no sólo en México sino en toda América. Será pues, uno de los
“arquetipos de mayor extensión en la historia de la humanidad” (Báez, 2003: 180). A través de
ella se visualizaron los signos y los símbolos que dieron sentido a una imagen que representó la
nueva mexicanidad, creando uno de los mitos más importantes que ha dado el catolicismo. En
esta construcción ideológica e iconográfica, la virgen de Guadalupe fue pieza fundamental para
que los indios se refugiaran ante la piadosa imagen, para buscar en ella la protección en un
ambiente desolado y complejo como en el que ellos se enfrentaban día a día. En este contexto
el mito de origen de la virgen de Guadalupe estuvo relacionado principalmente con una de las
clases más desprotegidas del pueblo novohispano y fue a través del indio representado en Juan
Diego, quien le dio vida a la construcción de las apariciones en el Tepeyac.

Fue Juan Diego52, el personaje principal en la historia del Guadalupanismo, ya que fue
el indio náhuatl que le entrega al obispo Zumárraga unas rosas de castilla y en vez de esto,

52En los testimonios que recaban por parte de Francisco de Sales, canónigo lectoral y profesor de teología de la
Universidad de México, recoge información que sería enviada a Roma a la Congregación de los ritos, con el
objeto de conformar el Patronato Guadalupano, se elabora un cuestionario entre 7 y 12 de enero de 1666 para
entrevistar a ocho habitantes de Cuauhtitlán entre ellos siete indígenas y un mestizo; cuyas edades comprendían
entre 55 y 115 años. Por lo que el evento de las apariciones de la virgen de Guadalupe y el conocimiento de la vida
de Juan Diego eran ya muy remotas debido a que había trascurrido aproximadamente 135 años y posiblemente
ningún testigo podía estar aún vivo para conocer de primera mano dichos eventos. Sin embargo los que ahí se
entrevistaron mencionaron algunos detalles sobre Juan Diego. Como el testigo Marcos Pacheco, mestizo de más
de 80 años: “Juan Diego nacido en Cuauhtitlán, en el barrio de Tlayacac, donde vivía con María Lucía, su mujer, y
Juan Bernardino, su tío. _ El recado dado a Juan Diego por la Virgen debería de entregarse al “Guey Teopisque”
(Huei teopixqui, lit.: Gran Sacerdote) y arzobispo. _ La noticia de la impresión milagrosa de la imagen mariana y la
recuperación de la salud de Juan Bernardino fueron divulgadas en “feria pública, precediendo primero trompetas,
chirimías, y atables, por cuya cusa ocurrió toda la gente de ese dicho pueblo por ser el dicho Juan Diego de él …_
Hombres de Cuauhtitlán habían participado, en trabajo semanal, en la construcción de la ermita del Tepeyac. Las
mujeres del dicho pueblo también colaboraron sahumando y barriendo el lugar. _Los habitantes de Cuauhtitlán

59
aparece la imagen de la virgen de Guadalupe plasmada sobre su ayate hacia el año de 153153.
Este tipo de narraciones americanas son similares a las que provienen de la Edad Media
Europea; sin embargo, son también profundamente americanas, en la que por un lado, es un
pastor elegido en las tradiciones españolas, mientras que en América es remplazado por un
indio (Lafaye, 2006).
Imagen oficial de San Juan Diego.

Fuente: Trabajo de campo. 2015

La presencia del indio en esta narración le da fundamento y sentido a la construcción


del culto guadalupano, debido a que es un personaje humilde, sin riquezas materiales, sin un
papel en la vida religiosa pero que tiene en sus manos la tarea de ser el mensajero de una diosa
desconocida para él, pero que tiene la encomienda de dirigirse al obispo Juan de Zumárraga
para que le edifique su iglesia en la colina del Tepeyac. Aunque en un primer momento el culto
tuvo un origen criollo, años más tarde se vinculó a la población india logrando mantener una
relación inquebrantable desde ese momento. En este sentido dentro del marco del mito

también habían participado en la fábrica o edificación de “un aposento muy chiquito que se le hizo al dicho Juan
Diego muy pegado a la dicha ermita de adobes, donde oyó este testigo decir que había muerto”. _El testigo oyó
decir a su tía que Juan Diego era viudo de María Lucía al tiempo de las apariciones, cuando tendría entre 55 y 56
años de edad. _ El testigo tiene por certero y evidente la participación de Juan Diego en las apariciones, “… pues
los antiguos lo llegaron a pintar en los conventos y retratarlo en este delante de la Virgen, que no lo hicieran si no
fuera tal, porque la pintura era de la muy antigua, y se hecha muy bien de ver por ella, y ser de aquel tiempo…”
(Noguez, 1995: 126). La importancia de este personaje y el culto Guadalupano tendrá su más alto reconocimiento
al Beatificarlo por el Papa Juan Pablo Segundo, el 6 de mayo de 1990 en la Basílica de Nuestra Señora de
Guadalupe en la Ciudad de México.
53 Sobre la historia de las apariciones guadalupanas se puede recurrir a (León, 2012; Lafaye, 2006; Nebel, 2013;

Gruzinski, 2003; Camacho, 2001; entre otros).

60
guadalupano, la figura de Juan Diego representó el ideal de indio bueno y noble como dijera el
mito fundacional del culto a la virgen de Guadalupe -“el más pequeño de mis hijos”-. Él tuvo
el papel de mensajero de María de Guadalupe para fundar su iglesia, una Iglesia que no fue
únicamente material sino que tenía la misión de establecer a partir de ese momento una
institución sólida fundada en su culto.

Tal como lo describió el Papa Francisco en el sermón54 expresado durante la homilía en


su visita a la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México, en febrero de 2016, reconociendo
la característica de humildad y sencillez que representó el indio Juan Diego55. Hizo referencia a
que él fue el elegido para construir su santuario y fue también quien reconoció a María de
Guadalupe como su madre y protectora ante el sufrimiento y penalidades de quien se siente
solo y desamparado; es decir aunque sea el más pobre entre los pobres será protegido por la
guadalupana.

Al igual que para la construcción de la nación y en el discurso de las apariciones


guadalupanas, la imagen del indio sirvió como referente identitario para la población mexicana,
se creó una comunidad imaginada56 a través de una unidad hipotética desde una característica
étnica. En este sentido, durante las primeras revueltas fue la virgen de Guadalupe y el indio los
arquetipos ideales que representaron la lucha libertaria, sobre todo porque el vínculo que atraía
a toda la nación era el catolicismo frente a la diversidad social que conformaba la población
(Brading, 1980).

54 Ver en Apéndice I: Sermón del Papa Francisco (Jorge Mario Bergoglio) durante la misa Solemne celebrada en la
Basílica de Guadalupe del 13 de febrero de 2016.
55 “En el amanecer en ese encuentro Dios despertó en su hijo Juan la esperanza de un pueblo, en ese amanecer

despertó la esperanza de los pequeños, de los sufrientes, de los desplazados de los descartados, de todos aquellos
que sienten que no tienen un lugar digno en la tierra. En ese amanecer Dios se acercó a ese corazón sufriente pero
resistentes de tantas madres y padres, abuelos que han visto partir, perder o incluso arrebatarles criminalmente a
sus hijos. En ese amanecer Juanito experimenta en su propia vida lo que es la esperanza, lo que es la misericordia
de Dios. Es el elegido para cuidar, para custodiar e impulsar la construcción de este santuario. Repetidas ocasiones
le dijo a la virgen que no era la persona adecuada, al contrario si quería seguir con esa obra, tenía que elegir a
otros, ya que él no era ilustrado, letrado o perteneciente al grupo de los que podrían hacerlo. María empecinada
con el empecinamiento que nace de su corazón misericordioso del padre le dice No!!!, que él sería su embajador.
Así logra despertar algo que él no expresar, una verdadera bandera de amor y de justicia en la construcción de ese
otro santuario, el de la vida, el de nuestras comunidades, sociedades y culturas” (Párrafo del sermón del Papa
Francisco (Jorge Mario Bergoglio) durante la misa Solemne celebrada en la Basílica de Guadalupe del 13 de
febrero de 2016).
56 Es imaginada porque aun los miembros de la nación más pequeña no conocerán jamás a la mayoría de sus
compatriotas, no los verán ni oirán siquiera hablar de ellos, pero en la mente de cada uno vive la imagen de su
comunión (Anderson, 1983: 27).

61
Estandarte de Miguel Hidalgo y Costilla, 1810.

Fuente: Cfr. Links de Fotografías:


Estandarte de Miguel Hidalgo, en la bibliografía.

A través de una imagen religiosa se construyó una conciencia colectiva de nación, fue la
representación de la virgen de Guadalupe la que se convirtió en un referente de la identidad
nacional para un sector de la población y particularmente para la grey católica, pero también
fue un elemento cohesionador interno entre criollos, mestizos y castas que tomaron a esta
imagen para establecer un sentido de unidad. Es aquí en que el patriotismo criollo tomó el
liderazgo fincado en el pasado indígena y en la devoción guadalupana para establecer los
sentimientos que exaltaron lo grandioso de la nación, en este periodo se elaboró una gran
cantidad de literatura criolla que estaba caracterizada por la asimilación del pasado (Brading,
1980). Como los primeros cronistas que narraron la gesta de la independencia como Fray
Servando Teresa de Mier y Carlos María de Bustamante, ideólogos que fortalecieron el rumbo
de esta nueva nación. En este sentido, el objetivo central del proyecto insurgente estaba
fincado en “la idea de una nación independiente con la concepción de una nación indígena
anterior a la conquista” (Florescano, 1998:334) y fortalecida con elementos del catolicismo
tradicional que fomentó el patriotismo criollo, fundamentados con arquetipos que
cohesionaron a la población.

62
Fue el andamiaje que sostuvo los más grandes ideales de la patria57 y la mayor cohesión
que sirvió de bandera para los seguidores de Hidalgo, de Morelos y más tarde de Iturbide, que
la nombraron como “la protectora y madre de los mexicanos”. Posteriormente se retomó
como elemento central en la Independencia de México en el que Agustín de Iturbide y el
Ejército Trigarante unió los tres elementos que le dieron sentido a la lucha (Religión, Unión e
Independencia). Para 1810, el cura Miguel Hidalgo y Costilla utilizó el estandarte de
levantamiento tomando la imagen de la virgen de Guadalupe como bandera de insurgencia,
posteriormente José María Morelos y Pavón, ferviente creyente de la guadalupana tomó de
igual manera el estandarte para reivindicar su lucha58. Para 1813 a través de Morelos se apertura
el Congreso Nacional y se declaró el 12 de diciembre como el día de la “Patrona de nuestra
libertad59”, en todos los pueblos del país en la que la Guadalupana pasó de ser la virgen criolla
a virgen india y la virgen libertadora para el movimiento independentista, se escribió a partir de
entonces una profunda historia de complicidad entre los mexicanos y la virgen de Guadalupe.

Si bien en el inicio del movimiento independentista no fue del todo un pensamiento


que naciera con el fin de liberarse del dominio español, los líderes como Hidalgo y los demás
rebeldes no tenían la idea en la mente de la separación de la monarquía, por lo que el grito de

57 “Acá en nuestra Patria, se apareció la divina Miriam con vestidos caudales, con un arcángel que la sostiene, con
arcos que le prestan luz, con símbolos de celestial grandeza. Así quiso dibujarla el Señor: como reina. Y lo es en
realidad. Suele discutirse entre los juristas si es legítimo o no, en el orden político, el derecho de conquista; y
cuales sean las consecuencias sociales que se derivan de la selección de un país a otro país. Si una nación
civilizada, creyente, noble y poderosa va a conquistar a tribus sin fe, sin cultura, que se arrastran, envilecidas por
los vicios y las degradaciones, si las enseña, los educa y las redime entonces aquel país realiza una obra meritísima
que lo inmovilizará en los fastos de la historia”. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), J.
Cantú Corro “Nuestra Reina” Pensamientos Guadalupanos, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité
Organizador de la Coronación. Año II, No.32. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 05 de Julio de 1931, p. 3.
58 El párroco de Nocupétaro y Carácuaro, fue enviado por Hidalgo a luchar en el sur, levanta el estandarte

guadalupano, imponiendo a uno de sus regimientos el nombre de Guadalupe, así como a la capital de la nueva
provincia de Tecpan, que erige el 18 de abril de 1811 con el título de ciudad de Nuestra Señora de Guadalupe. Ese
mismo año, ante la derrota del ejército insurgente de Hidalgo y Allende, surge en la ciudad de México, con
amplias ramificaciones en el centro del país, la sociedad secreta de «los Guadalupes», que no sólo contó con el
apoyo de Ignacio López Rayón y de Morelos, sino que aglutinó a miles de mexicanos partidarios de la
independencia, quienes aportaban a ese movimiento sus recursos, apoyo y colaboración de todo tipo, y tuvieron
una organización con 12 jefes jerarquizados. La actuación de la sociedad de los Guadalupes, permitió que los
insurgentes estuvieran informados de los actos de las autoridades realistas; les posibilitó contar con una imprenta
para publicar sus periódicos; favoreció que los grupos nacionalistas triunfaran en las elecciones de diputados a las
Cortes de Cádiz. Su actuación apoyó al ejército de Morelos y sólo disminuyó a partir de 1816, luego del
fusilamiento de éste.
59 “¡DIA DOCE DE DICIEMBRE! ¡Qué hermosa fecha para todos los mexicanos! Este día debe de ser el día

mexicano por excelencia, pues es la fecha en que la madre de Dios quiso también manifestarse madre cariñosa de
la Patria Mexicana”, AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa, “El día mexicano por excelencia”,
Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San Cristóbal
de Las Casas, Chiapas. 12 de diciembre de 1930, p. 1.

63
atraer al pueblo era “¡Viva Fernando VII! ¡Mueran los gachupines! ¡Muera el mal gobierno!,
ejemplo de una profunda molestia que tenían ante la clase que mantenía el poder, como
menciona Brading “un salvaje levantamiento de las clases más bajas contra los propietarios”
(1980: 74), por lo que Miguel Hidalgo se aprovechó de la popularidad que ya tenía la imagen
guadalupana para utilizarla como estandarte del levantamiento, siendo los símbolos religiosos
el único emblema que unía al pueblo ante aquella disparidad social que vivía México.

Retablo de la virgen de Guadalupe.

Fuente: En (Zenón, 1995: 123).

De esta manera se convirtió en un símbolo de la creciente nación tanto para los


liberales como para los conservadores, los cuales se mostraron atraídos por la imagen
emblemática para pelear su libertad y ser la bandera de lucha en los subsecuentes eventos que
se detonaron a partir del movimiento independentista en México60.

60 …los diputados le rindieron culto en la sala del Congreso y decretaron “el 12 de diciembre” el día más grande
de esta América por razón de la maravillosa aparición de María de Guadalupe, el emperador Iturbide fundó una
orden de Caballería, la orden Imperial de Guadalupe (1822); la Virgen recibió los trofeos militares de la joven
república (1828); el emperador Maximiliano se recogió en su santuario (1864) y resucitó la orden de Guadalupe,
que no sobrevivirá a la caída del imperio. La imagen adquirió para los liberales una estatura política que, a sus
ojos, abarcaba su identidad religiosa. Lo mismo puede decirse de los masones, que no pudieron resistir el encanto
de la virgen. Una logia que agrupa las grandes figuras del México insurgente y republicano, la india Azteca,
mezclaba la celebración de la Guadalupana con sus ritos; era un nuevo avatar sincrético en la historia ya agitada de
la diosa del Tepeyac (Gruzinski, 2003: 206).

64
En este proceso de reacomodo social y político de un México renaciente, la
guadalupana fue ganando espacios en todo el territorio mexicano al igual que en las provincias,
sin embargo ya en el periodo de Maximiliano, la Iglesia se separa del poder político y se marcó
la ruptura posterior a través de las Leyes de Reforma y la desamortización de los bienes del
clero, generando éste último en conflictos con los bienes de las comunidades y de las cofradías,
las cuales mantenían el culto a imágenes y a las fiestas católicas. No obstante, en este periodo
se reconoció el significado social que representaba la virgen de Guadalupe por lo que cuidó
que dentro de las leyes de este periodo no se afectara el santuario del Tepeyac y se mantuviera
el 12 de diciembre como fiesta oficial, por lo que se mantuvo el simbolismo de la imagen de la
virgen de Guadalupe como una manera de expresión del arte pictórico nacido en el periodo de
la Contrarreforma61.

Durante la Revolución Mexicana siguió presente la guadalupana, ahora como


estandarte de Emiliano Zapata durante el levantamiento armado.
La Virgen fue el estandarte de los indios y mestizos que combatieron en
1810 contra los españoles y volvió a ser la bandera de los ejércitos
campesinos de Zapata un siglo después. Su culto es íntimo y público,
regional y nacional. La fiesta de Guadalupe, el 12 de diciembre, es todavía la
fiesta por excelencia, la fecha central en el calendario emocional del pueblo
mexicano (Paz, 2006: 21).

Ya en el siglo XX, estuvo presente durante la gesta que se originó en las tierras de
Chiapas en el año de 1994 durante el levantamiento armado del Ejercito Zapatista de
Liberación Nacional (EZLN), en el que se tomó de igual modo el estandarte de la virgen de
Guadalupe como se había retomado en los anteriores movimientos sociales en la historia de
México. Se le reconoció como “protectora de los desprotegidos” y símbolo de validez a las
luchas que ha enfrentado el pueblo mexicano, al mismo tiempo de ser un estandarte en
diversas manifestaciones sean estas marchas, plantones, procesiones que demandan justicia.

La presencia de la imagen de la virgen de Guadalupe en estos contextos se debe a la


labor que hizo la Iglesia Católica para su institucionalización y establecimiento del culto en
todo el territorio novohispano y con ello en el imaginario histórico de México. De esta manera,

61 En 1859, Juárez retuvo entre el número de las fiestas nacionales la de la Guadalupana y eximió de la
nacionalización de los bienes de la Iglesia a las riquezas de la Basílica, así como al donativo reservado al capellán
del santuario de Los Remedios (Gruzinski, 2003:206).

65
se fincó en esta imagen una ferviente devoción entre distintos grupos de católicos quienes
vieron representada en la virgen de Guadalupe, la expresión de la mexicanidad, principalmente
porque “había surgido un gran mito nacional mucho más poderoso, porque tras él se hallaba la
devoción natural de las masas indígenas y la exaltación teológica del clero criollo” (Brading,
1980: 27).

Convirtiendo a la virgen de Guadalupe en el más grandioso proyecto político de la


Iglesia en América, debido a que fue el bastión que llegó a cohesionar, reforzar y mantener el
poder de una Iglesia reformada pero con un nuevo tinte cultural y fortalecido con una
creatividad religiosa a través de rituales, ceremonias y peregrinaciones.

Esto no viera sido posible sin la participación de un gran número de personas que
contribuyeron desde su inicio a institucionalizar el culto guadalupano, inicialmente impulsado
desde la Iglesia católica y apoyada posteriormente por escritores y devotos guadalupanos que
se propusieron a establecer un creciente fervor a esta imagen. Sin embargo, la Iglesia católica
no ha llegado a controlar en su totalidad esta devoción, debido a la diversidad de formas en
que los creyentes manifiestan su fervor, lo que muestra una heterodoxia en la praxis de los
guadalupanos al apropiarse de este culto, independientemente de que se rijan en algunos
momentos por las directrices que marca la Institución religiosa, particularidad que ha
mantenido su vigencia y que la ha llevado a rebasar el tiempo y las fronteras simbólicas,
culturales y territoriales.

66
Capítulo II
El guadalupanismo en Chiapas.
“Quiera la Santísima Virgen, patrona de los Mexicanos,
bendecir a nuestro estado de Chiapas, que aunque muy lejos
del centro de nuestra Nación se apresta a Coronar la Imagen
de Nuestra patrona nacional, para estrechar más lazos de
unión que deben hacer feliz a nuestra patria”.

El culto y devoción guadalupano fue parte de un proceso de expansión del catolicismo que se
estableció paulatinamente a lo largo del territorio mexicano y del continente americano, como
se ha descrito en las páginas anteriores. Su difusión se mantuvo constante principalmente en el
siglo XVII y principios del XVIII, mientras que ya en el siglo XIX se fortaleció fuertemente en
toda la república mexicana.

Este capítulo presenta el proceso del establecimiento del culto guadalupano


primeramente en la Provincia de Chiapas y en su posterior anexión a México. En éste se
exponen las acciones que enfrentó la Iglesia para la consolidación del culto guadalupano,
debido principalmente a la vulnerabilidad política que permeaba el estado por la política
anticlerical que se imponía en el país, sin embargo pese a este ambiente la devoción a la virgen
de Guadalupe fue cada vez mayor.

En el primer apartado se hace un recuento de la influencia política y social que irrigó la


Nueva España y principalmente la cercanía que tuvo la Provincia de Chiapas con la población
de Guatemala, elementos que fueron cruciales para el establecimiento del culto guadalupano
que llegó a Chiapas formalizándose en el siglo XIX, para ello fue necesario la participación de
la Iglesia mexicana y la Diócesis de Chiapas a través de sus iglesias y parroquias, así como la
participación de la comunidad católica chiapaneca.

Estas acciones estuvieron a cargo de la Iglesia del centro de México hacia la única
Diócesis de Chiapas, en la que se pidió apoyo para la consolidación del culto en la Ciudad de
México y de paso coadyuvar al establecimiento en el territorio chiapaneco, posterior a la
anexión de Chiapas a México.

67
En el segundo apartado se presenta el proceso de institucionalización del culto
guadalupano y la que considero como la época de oro sancristobalense debido al surgimiento
de esta devoción centrada en la participación activa de la Diócesis de Chiapas, que para ese
entones se encontraba en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. En ese periodo, se contó
con el apoyo constante de los grupos que pertenecían a la Asociación de Acción Católica, un
grupo político religioso que se fortaleció en toda la república.

Para la consolidación del guadalupanismo en Chiapas, se recurrió coronar a la virgen en


el estado para reconocer a la virgen como “madre de los chiapanecos”, además de difundir su
imagen en los templos, iglesias y parroquias, y entronizar su imagen en cada casa católica. Al
mismo tiempo que la Diócesis de Chiapas participó en eventos guadalupanos en el centro de
México, al celebrarse los 400 años de las apariciones guadalupanas.

En el tercer apartado se describe el proceso de consolidación de la devoción


guadalupana en el estado de Chiapas mediante la celebración de la coronación de la virgen de
Guadalupe ubicada en la catedral de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, sede de la
Diócesis de Chiapas. Para ello se creó un comité de devotos pertenecientes a la asociación de
Acción Católica que se encontraba dispersa en los templos y parroquias de todo el estado. Este
acto significó para el pueblo chiapaneco, un evento de gran envergadura, ya que no sólo se
estaba coronando a la virgen de Guadalupe sino que además simbólicamente representó la
verdadera anexión de la población católica chiapaneca al territorio mexicano.

En un siguiente apartado se describe a la par de la coronación, el proceso de


construcción de la iglesia dedicada a la virgen de Guadalupe en San Cristóbal de Las Casas,
evento que requirió del apoyo constante de los obispos de la Diócesis de Chiapas desde
mediados del siglo XIX, que contribuyeron a establecer una iglesia dedicada en su honor, y
finalmente, se describe la conformación de la junta de festejos guadalupanos en el actual barrio
de Guadalupe de la ciudad.

En el último apartado se presenta el proceso de establecimiento de las edificaciones


dedicadas a la virgen de Guadalupe en las principales ciudades del estado de Chiapas, así como
de la diversidad de imaginería guadalupana que tiene cada uno de los templos e iglesias

68
principalmente de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, sin olvidar que existe una gran
proliferación de capillas y altares que se encuentran en carreteras e iglesias de todos los
municipios de la región de Los Altos y en el resto del estado, los cuales se han convertido en
santuarios importantes.

2.1 Vulnerabilidad e difusión del culto guadalupano


Consta en efecto históricamente que lo que fue humanamente imposible antes de 1531,
fue divinamente posible después de esa fecha,
y lo que fue posible fue nada menos que
nuestra anexión a la cultura occidental emanada de la vieja sabiduría española,
rama gloriosa del más antiguo tronco cristiano62.

Durante el periodo Colonial, el territorio de la Provincia de Chiapas perteneció a la Capitanía


General de Guatemala, por ende, era el lugar donde se concentraba los poderes civiles,
políticos y eclesiásticos que determinaban las dinámicas sociales de los pueblos asentados en
este territorio, situación que se mantuvo por mucho tiempo aun después de la anexión de
Chiapas a México en 1824.

Aunque en esta propagación del culto se debe también considerar la relación que
Chiapas mantuvo con la Nueva España debido a la proximidad que se tuvo con ella, ya que la
Provincia de Chiapas se encontraba entre la frontera Sur de la Nueva España y el Norte de la
Capitanía General de Guatemala. Esta ubicación obligó a que cualquier persona o producto
tuviera que pasar por el antiguo camino Real de Chiapas63 y por lo tanto, muchas de las
manifestaciones culturales se implantaron paulatinamente entre las prácticas de los
chiapanecos. Sin embargo, para el caso particular del guadalupanismo en Chiapas considero
importante postular la idea de que la difusión del culto estuvo influenciado por la relación
estrecha que adquirió la población chiapaneca con las prácticas religiosas que fomentaron los
chapines64, situación que posibilitó la expansión del guadalupanismo al territorio chiapaneco.

62 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Pensamientos Guadalupanos”, Boletín La
Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No. 10. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 1 de junio de 1930, p. 2
63 Ver (Viqueira, 2009).
64 Sobrenombre en plural, que se le asigna a los habitantes de la ciudad de Santiago de Guatemala, pero que

posteriormente se hizo extensivo a todos los guatemaltecos durante el siglo XIX y principios del XX.

69
Al respecto Arturo Taracena (2008) hace una minuciosa descripción histórica del
origen del guadalupanismo en Guatemala y señala que la primera manifestación del culto
guadalupano es un cuadro del pintor guatemalteco Antonio Ramírez Montúfar, pintado en
1678 que fue colocado al final de la construcción de la tercera catedral de Santiago de
Guatemala, asignándole un lugar en la segunda capilla exterior izquierda de la nave (Taracena,
2008).

Este culto guadalupano fue impulsado en los siguientes años por algunos devotos
guatemaltecos que incentivaron su devoción, logrando años más tarde la fundación de la Villa
de Guadalupe en la ciudad de Guatemala establecida entre 1787 a 1795, por el establecimiento
de algunas familias en este lugar. La Villa de Guadalupe estuvo en sus inicios adscrita a la
parroquia de Los Remedios de la Nueva Guatemala y aunque el proceso de poblamiento fue
lento, la fundación de la capilla de Guadalupe se dio debido a la petición que se hizo a las
autoridades para erigir durante el año de 1798, una iglesia en advocación a Nuestra Señora de
Guadalupe (Taracena, 2008).

Finalmente el 8 de diciembre de 1803, el mayordomo de la hermandad de Nuestra


Señora de Guadalupe, el presbítero Juan Ambrosio Mata organizó el traslado de la imagen de
la Virgen desde la iglesia de San José en la ciudad de Guatemala hasta la Villa. A partir de este
momento, algunas provincias guatemaltecas -San Juan Cómala a inicios del siglo XIX y
Bartolomé Chunay aproximadamente en 1810-, iniciaron la construcción de capillas y el festejo
a la guadalupana, así como para 1821 se fundó una Archicofradía bajo el control del
arzobispado guatemalteco que se dedicó a fomentar con más solemnidad la adoración a la
virgen de Guadalupe.

En este sentido, la influencia de las prácticas religiosas guatemaltecas y la consolidación


al culto guadalupano, posibilitó la llegada a Chiapas principalmente en Ciudad Real -San
Cristóbal de Las Casas-, que para esa época era la capital de la Provincia de Chiapas y centro
rector del poder eclesiástico (Diócesis de Chiapas). En este lugar se concentró la mayor
población de clérigos, así como de edificios religiosos como iglesias y conventos. Estos
elementos facilitaron el culto guadalupano y encontraron tierra fértil para impulsar una
devoción guadalupana avalada además por el poder político y religioso mexicano.

70
En la reconstitución del territorio en el periodo poscolonial particularmente lo que
corresponde a la Provincia de Chiapas, se tiene referencia que la presencia del culto
guadalupano existió desde 1745 cerca de Ixtacomitán, en un paraje nombrado Nuestra Señora
de Guadalupe65. Aunado a ello se tiene datos que en el año de 1794 se fundó un pueblo de
indios con el nombre de San Fernando de Guadalupe que se encontraba próximo a la actual
localidad de Salto de Agua cercano al Río Tulijá, en la zona Norte del estado. Relacionado a
este hecho, en “el Archivo General de Indias existe un dibujo iluminado de la fundación de
este pueblo el cual se encuentra bendecida por la imagen de la Virgen de Guadalupe”
(Taracena, 2008: 88). Algunos datos de archivo tienen registrado que la presencia del culto
guadalupano en Chiapas va a tener un nuevo auge en el periodo republicano, es decir, posterior
a la anexión de Chiapas a México de 1824, momento en que México asume la legitimidad del
territorio chiapaneco.

Un aspecto central en este proceso tiene que ver con la posterioridad del siglo XIX,
momento en que se impulsó del culto guadalupano con la intención de emplearlo como
vehículo para fincar un sentido de mexicanidad entre los católicos que habitaban el territorio
chiapaneco, emblema que ayudó a construir un sentido de identidad nacional e integración
entre los habitantes del Sur a la nación mexicana.

De igual manera para el siglo XIX, el desarrollo del culto particularmente para el caso
de las ciudades de San Cristóbal y Comitán que eran consideradas como las ciudades que
concentraban la mayor cantidad de población mestiza e indígena de la región, tuvieron en
algunos de los templos principales altares dedicados a la virgen de Guadalupe. En San
Cristóbal como capital de la Provincia de Chiapas se comenzó a difundir la presencia de la
imagen guadalupana en distintas parroquias o capillas. Al respecto, se tiene registrada una
pequeña capilla de Guadalupe en una de las colinas de San Cristóbal que data de 1830, así
como otras referencias de esta presencia, en los planos de 1844 de la sección de Guadalupe66.
Sin embargo, pasaron algunos acontecimientos políticos como el caso de la desamortización de

65 (AGC, Guatemala, clasificación A1.57-2287. legajo 317).


66 Término que se utilizó para nombrar la zona que se ubica actualmente el barrio del mismo nombre.

71
las propiedades de la iglesia a través de las leyes de Reforma y el movimiento armado entre
conservadores y liberales que detuvo el empuje de este culto (Pedrero, 2007).

Estos eventos frenaron los trabajos religiosos debido a que muchos sacerdotes huyeron
de las ciudades y abandonaron por un tiempo las actividades dedicadas a la Iglesia, entre ellas
las relacionadas al culto guadalupano67. Aunque los sacerdotes de Chiapas prosiguieron
realizando sus actividades litúrgicas a escondidas del Estado, no fue hasta el paso de algunos
años que esta restricción fue menos drástica y se comenzó a dar ciertas concesiones que
ayudaron a establecer una vida religiosa menos violenta, aun cuando el conflicto entre la Iglesia
y el Estado en Chiapas siguió existiendo, el culto a la virgen de Guadalupe se fortaleció en las
iglesias y templos del estado, así como en las casas particulares de feligreses católicos.

2.2 La época de oro sancristobalense


Es difícil encontrar una familia mexicana
en que no haya una persona del sexo femenino
y aun del masculino que no se llame Guadalupe,
y no hay nadie que no evoque algún recuerdo al pronunciar este nombre68.

El surgimiento del culto guadalupano en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas comenzó a
tomar importancia en el siglo XIX, momento en que se exaltó la devoción aun cuando ya había
algunos intentos de tener una presencia más significativa en las familias chiapanecas. El
momento de florecimiento del culto se da cuando la Diócesis de Chiapas tomó la iniciativa de
apoyar activamente a través del obispo don Miguel Mariano Luque y Ayerdí69 en la
conmemoración de la coronación de la virgen de Guadalupe en la ciudad de México en 1895.

Este hecho tomó importancia no sólo para el obispo sino para las personas que fueron
al evento, cabe señalar que el obispo Luque y Ayerdí no logró vivir lo suficiente para ver los

67 “Además, se enviaron circulares que impedían la confección y los rezos cotidianos y que restringían las misas a
los domingos; se clausuraron conventos, se prohibió el uso del traje talar dentro y fuera de los templos y se
retiraron las cruces que había en los tejados de algunas casas particulares. Finalmente, se dictaron órdenes verbales
para que los sacerdotes abandonaran Chiapas en un plazo de 24 horas” (Ríos, 2001: 10).
68 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Pensamientos Guadalupanos”, Boletín La

Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No. 10. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 1 de junio de 1930, p. 3.
69 El obispo Luque y Ayerdí obtiene el nombramiento del Papa como obispo de la ciudad de San Cristóbal, el 1 de

noviembre de 1884 y toma posesión el 31 de marzo de 1885, dejando el cargo debido a su muerte el cargo el 14
de mayo de 1901.

72
primeros resultados debido a que murió seis años después de este evento. En su lugar llegó el
Pbro. Francisco Orozco y Jiménez70 que desde su llegada a la ciudad de San Cristóbal tomó
posesión en el templo de La Merced debido a que la Catedral estaba cerrada por encontrarse
severamente dañada por un terremoto ocurrido el 23 de septiembre de 1902.

Una de las primeras acciones que el obispo realizó en la ciudad fue visitar la iglesia de
Guadalupe, “antes de pisar los umbrales de su palacio, se trasladó al templo de Guadalupe para
visitar a la Santísima Virgen de la que fue siempre devotísimo” (Orozco y Jiménez, 1999: 15).

El obispo Orozco y Jiménez fue conocido como el obispo “chamula”, por lo en este
contexto, no fue novedoso para ese momento que procuró llevar a un grupo de peregrinos
indígenas a la Basílica de Guadalupe en la ciudad de México en el año de 1905. En este viaje
aprovechó para solicitar audiencia al presidente Porfirio Díaz para plantearle la situación de
abandono y miseria en la que se encontraba el estado. Su presencia marcó un antes y un
después en la historia del culto guadalupano en Chiapas ya que el obispo tuvo un peso en la
comunidad católica y fomentó el culto a la guadalupana. Como muestra está, la siguiente nota
publicada en el Boletín de Guadalupe de San Cristóbal de Las Casas: “El 25 de agosto de 1908
a petición del Itmo. Sr. Arzobispo [sic] don Francisco Orozco y Jiménez, concedió que en toda
la Republica se pueda decir perpetuamente misa votiva de Ntra. Sra. de Guadalupe, el 12 de
cada mes”71. Aún después de su salida, la participación del Obispo fue constante en actividades
relacionadas a la virgen y a la misma Diócesis.

A su partida de Chiapas en 1912, le sucede el Obispo Maximino Ruíz y Flores72, sin


embargo durante su periodo de 1913 a 1919 no se tiene referencia sobre alguna participación
activa relativa al culto guadalupano, aunque en el testimonio del Padre Andrade que venía de
acompañante oficial del obispo, describe en un apartado de su diario personal la visita del
obispo a la ciudad de San Cristóbal de Las Casas y alude sobre las características de una de las

70 Orozco y Jiménez llega a Chiapas, después de que el Papa le da el nombramiento de obispo el 29 de mayo de
1902 y toma posesión el 3 de diciembre de 1902, debido a su traslado a Guadalajara deja el obispado en el año de
1912.
71 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “El Papa y la virgen de Guadalupe”, Boletín La

Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 12 de Diciembre de 1930, p. 3.
72 Ruíz y Flores es nombrado por el Papa el 8 de julio de 1913, y asume el cargo el 8 de octubre de 1913, pero en

1919 renuncia a la Diócesis.

73
capillas de la catedral que estaba dedicada a la virgen de Guadalupe y que servía para ese
momento de bautisterio, además de mencionar que en el paisaje de la ciudad sobresalían dos
cerrillos que dominan el valle, entre ellas la iglesia de Guadalupe y la de San Cristóbal73.

Al término del periodo del obispo Ruíz y Flores llega el 8 de agosto de 1920 a la
Diócesis de Chiapas, el sacerdote Genaro Anaya y Díez de Bonilla74; durante su gestión como
obispo de la Diócesis, celebró la conmemoración de la fundación de la capilla de la virgen de
Guadalupe en San Cristóbal, al conmemorarse los cuatrocientos años de las apariciones de
Guadalupe en el Tepeyac. En este año organizó la coronación de la virgen de Guadalupe en
San Cristóbal de Las Casas, uno de los eventos más significativos en la historia del culto
guadalupano en Chiapas, ya que fue utilizado para difundir la imagen a todos los católicos de
los pueblos del estado, además de coronar de igual manera, la imagen de la virgen de
Guadalupe que se encuentra en el templo de san Francisco en la ciudad de San Cristóbal y la
imagen guadalupana en la catedral de Tapachula. (Flores, 1978).

Mientras tanto durante este mismo periodo, las autoridades eclesiásticas del centro de
México solicitó el apoyo de la comunidad católica a través de las Diócesis de cada estado para
que contribuyeran para el arreglo de la Basílica de Guadalupe en la ciudad de México, debido a
que recientemente habían colocado una bomba dentro de este recinto75 (1921). Por este
incidente, se les pidió a las diferentes Diócesis de toda la república que apoyaran
monetariamente para su restauración76, en el marco del IV Centenario de las apariciones de la
virgen en el Tepeyac. Al respecto se le pide a la Diócesis de Chiapas su apoyo:
Dr. Dn. Gerardo Anaya, de acuerdo a la Carta Pastoral Colectiva del
Episcopado Mexicano sobre el IV Centenario de la Aparición de la
Santísima Virgen de Guadalupe, el último domingo del mes, día 25 (mayo)
sea para la Diócesis de Chiapas “el día de la Basílica Guadalupana”. Todas
las parroquias de la Diócesis, harán una colecta con el fin de contribuir para

73 Ver (Andrade, 2001).


74 El obispo Anaya y Díez de Bonilla, fue consagrado en la basílica de Guadalupe el 13 de junio de 1920 y asume
la Diócesis el 8 de marzo del mismo año. Pero en septiembre de 1941 fue trasladado a la Diócesis de San Luis
Potosí y partió de Chiapas en enero de 1942.
75 Para esta fecha ya había sido elevada de Colegiata al rango de Basílica desde 1904.
76 La Basílica Nacional de Santa María de Guadalupe, nuestra casa solariega, el rincón de México donde se

albergan nuestros más tiernos amores, allí donde la siempre Virgen María está siempre esperando a sus hijos para
consolarlos, para sostenerlos, para salvarlos, está en REPARACIÓN. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón
Gamboa (HFCG), “Para el Centenario guadalupano”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité
Organizador de la Coronación. Año II, No.32. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 05 de julio de 1931, p. 3.

74
el embellecimiento que se llevará a cabo en la Basílica Nacional. La Basílica
Guadalupana es el templo que nuestra tierna madre ha querido tener en
nuestra patria para que allá acudamos todos los mexicanos, a visitarla, a
contarles nuestras penas, a consolarnos con su amor, a mostrarle toda la
ternura y filial devoción77.

La Diócesis de Chiapas a través de sus diferentes parroquias se dedicó a organizar


colectas con el fin de recabar ingresos para ser enviados a la Basílica y de esta manera se apoyó
con la reparación del templo. Esta labor sirvió al mismo tiempo para difundir el culto
guadalupano, ya que se invitó a proclamar su nombre y hacer algunas buenas acciones que se
hicieran en su honor para crear una devoción a la virgen de Guadalupe. Estas acciones fueron
ser escritas y enviadas a los párrocos o a la misma Diócesis para registrarlo en un libro
denominado “Libro de Oro del IV Centenario Guadalupano” que fue colocado en los pies de
la virgen en la Basílica de la Ciudad de México78.

77 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Reine en Chiapas Santa María de Guadalupe.
Día de la Basílica Guadalupana”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la
Coronación. Año I, No.07. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 20 de Abril de 1930, p. 2
78 Con motivo de la solemne Coronación de la Imagen de la Sma. virgen de Guadalupe, que se venera en la Sta.

Iglesia catedral, es necesario que pensemos en la celebración del IV Centenario de las Apariciones de la Virgen
Santísima de Guadalupe; para unirnos en los mismos sentimientos de amor filial y gratitud a nuestros hermanos
los católicos mexicanos. Y en primer lugar, es necesario que todos cooperemos con nuestras limosnas para que se
lleven a feliz término las obras de restauración y embellecimiento emprendidas en la Basílica de Nuestra Señora de
Guadalupe. En la Carta colectiva del Episcopado Mexicano, de 12 de diciembre de 1929, decíamos a nuestros
muy amados fieles: en 1531 Santa María de Guadalupe expreso su deseo de que se le construyera un templo en
nuestra Patria. Con este fin, ordenamos que los domingos terceros de cada mes, durante el presente año, se hagan
colectas especiales en las Iglesias de la Diócesis. Los Sres. Sacerdotes anunciaran esta Colecta el domingo anterior
y procuraran exhortar a los fieles a que contribuyan con sus generosas limosnas a la restauración y
embellecimiento de la Basílica de Nuestra Sra. de Guadalupe. Lo colectado será enviado a cada mes al Sr.
Secretario Pbro. Néstor López. Es muy conveniente y justo que todos los mexicanos procuremos hacer algunos
obsequios espirituales en honor a la Inmaculada Virgen del Tepeyac. A este fin se enviara a los Sres. Curas cada
mes un número suficiente de hojitas en donde los fieles puedan apuntar las buenas obras que vayan haciendo en
honor a la Sra. Virgen de Guadalupe. Muy encarecidamente rogamos a los Sres. Curas y a los fieles no descuiden
este Tesoro Espiritual, que será muy agradable a Nuestra Madre Santísima y nos atraerá sus maternales
bendiciones. Las hojitas se recogerán cada mes y serán enviadas al Sr. Pbro. Dn. Felipe Ramos, de esta ciudad,
quien se encargara de formar el tomo correspondiente del Álbum que se denominara LIBRO DE ORO DEL IV
CENTENARIO GUADALUPANO, que será depositado a los pies de la imagen de Nuestra Sra. de Guadalupe
como una constancia del amor y de la gratitud que México profesa a su madre y Reina Santa María de Guadalupe.
Este edicto será leído inter Misarum sollemnia el domingo siguiente a su recepción y fijando en lugar conveniente
para que llegue a conocimiento de los fieles. Dado en San Cristóbal L. C. el 24 de junio de 1931. Gerardo Obispo
de Chiapas. Por mandato de S. Excia. Rma. N.L. Gordillo Srio. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón
Gamboa (HFCG), “Edicto diocesano. Nos el Dr. Dn. Gerardo Anaya, por la gracia de Dios y de la Santa Sede
Apostólica, Obispo de Chiapas. Al muy I. Sr. Deán y Ven. Cabildo, A los Sres. Sacerdotes y fieles, salud, y paz en
Jesucristo N.S. Paz y bendición en María de Guadalupe, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité
Organizador de la Coronación. Año II, No.32. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 05 de julio de 1931, p. 3

75
Los curas de cada iglesia se encargaron de recolectar la mayor parte de documentos
donde se expuso alguna acción de gracias, milagros o cualquier expresión de fe. Estas acciones
sirvieron para que cada familia católica expresara muestras devocionales a la guadalupana, con
la intención de formar una comunidad de creyentes en cada rincón del estado.
Se suplica a los Sres. párrocos, si a bien lo tienen, y para mejores resultados a
lo relativo al TESORO ESPIRITUAL del IV Centenario de las Apariciones
de Ntra. Sra. de Guadalupe, que organicen en todos los pueblos de sus
parroquias respectivas, Comités instruidos sobre el particular, para que estos
se encarguen de penetrar [sic] que lleguen en conocimiento de todos los
fieles las hojitas mensuales. Este desear [sic] que los mismos del Comité se
encarguen de pedir las hojitas que vayan necesitando, y que al fin de mes
manden el recuento de las obras ya formando en hojita aparte a la Srita.
Carmen Trejo Castillo; de ese modo podrá publicarse en el periódico, como
son los deseos del Exemo. Señor Obispo. La Virgen Sma. de Guadalupe
corresponderá abundantemente todo lo que ella se haga79.

La coronación efectuada el 12 de diciembre de 1931 en la Ciudad de México, al


cumplirse los 400 años de las apariciones de la virgen en el Tepeyac fue un evento que atrajo la
mirada de los devotos católicos, así como también para la Iglesia en Chiapas, ya que no sólo
apoyó la reparación de la Basílica de Guadalupe, sino que se proclamó a la virgen de
Guadalupe como emblema de la mexicanidad y de los chiapanecos. En la difusión que la
Iglesia organizó para que cooperaran los feligreses, se hizo hincapié constantemente que la
virgen había elegido a la nación mexicana para que en ella se edificara su templo, por lo que era
importante construir un lugar ideal para venerarla.
El honor de México está en la Virgen de Guadalupe, si México es conocido
en todo el mundo, es, más que por sus otras relaciones, por el insigne
beneficio que la Madre de Dios le concedió, al dejarle el retrato pintado por
manos divinas, y por haberlo elegido como pueblo de su predilección,
pidiendo tener un palacio en la Nación Mexicana; palacio que es la I. y
Nacional Basílica. Si pues, la virgen de Guadalupe es nuestra gloria y nuestro
honor, y lo que es más, es nuestra amantísima madre; todos los mejicanos
debemos trabajar por honrarla y reconocer sus beneficios, y cooperar para la
reparación y embellecimiento de su palacio, que es la Basílica80.

79AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Atenta recomendación”, Boletín La Virgen de
Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.36. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 6 de septiembre de 1931, p. 5
80AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Peregrinaciones”, Boletín La Virgen de

Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.32. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 05 de julio de 1931, p. 4.

76
Para el caso de la difusión del guadalupanismo en Chiapas se recurrió de nuevo como
en épocas pasadas al discurso sobre el papel que tuvo la virgen a lo largo de la historia de
México y por lo tanto reconocerla como madre de los chiapanecos, ya que al considerarse
mexicano igualmente fuera guadalupano. Se utilizó además de un discurso reiterativo de
convencimiento difundiendo el mito de las apariciones de la virgen en el Tepeyac, con el
objetivo de que el interés de la guadalupana era ser amada en estas tierras.
El 12 de Diciembre del presente año, se cumplirán cuatrocientos años desde
que la Reina de los cielos, verdadera madre de Dios, la siempre virgen María
bajo la dulcísima advocación de Guadalupe, se apareció en la colina del
Tepeyac para de allí derramar sus maternales bendiciones sobre los feligreses
de esta tierra privilegiada81.

Al respecto Taracena (2008) menciona que a lo largo del siglo XIX en el campo
religioso se dio una propagación de imágenes y cultos que delimitaban territorios como el caso
de la frontera Norte, donde existía la disputa de espacios en un territorio plagado de nuevas
religiones protestantes, para la frontera Sur fue necesario de igual forma construir a través de la
virgen de Guadalupe la construcción de la mexicanidad de los chiapanecos que recientemente
se había anexado a México en el año de 1824.
Según comunica el estimado padre don Mariano Salazar, que es el presidente
del Comité Auxiliar de la Coronación en México, la fiesta que se da año con
año celebra [sic] la Diócesis de Chiapas en la Basílica de Nuestra Señora de
Guadalupe, [sic] resultó muy tierna y devota. La palabra elocuente y llena de
unción del Ilmo. Sr. Vicente Camacho, hizo brotar lágrimas de consuelo y
amor hacía la Santísima Virgen de todos los concurrentes. Quiera la
Santísima Virgen, patrona de los Mexicanos, bendecir a nuestro estado de
Chiapas, que aunque muy lejos del centro de nuestra Nación se apresta a
Coronar la Imagen de Nuestra patrona nacional, para estrechar más lazos de
unión que deben hacer feliz a nuestra patria82.

Es por ello que la participación de la Diócesis de Chiapas en la coronación de la virgen


en México significó para la comunidad católica un evento que exaltó a que las familias
chiapanecas honraran su nombre y se sintieran a través de ella más cerca de su protección,

81AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “El IV Centenario de las benditas apariciones de
Ntra. Sra. de Guadalupe 1531 – 1931”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la
Coronación. Año II, No.32. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 05 de julio de 1931, p. 3
82 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “La Fiesta de la Diócesis de Chiapas en la

Basílica”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas.12 de diciembre de 1930, p. 2

77
además de reafirmar el sentido de pertenencia a México a través de uno de los iconos de
construcción nacionalista más relevantes del país.

Resulta interesante analizar que la coronación de la virgen de Guadalupe en 1931


generó una pugna entre la Iglesia y el Estado debido a que la década de los treinta, México se
encontraba controlado por los liberales y marcado por un régimen anticlerical. En este
contexto, el evento de la coronación de la Virgen de Guadalupe al cumplirse el IV Centenario
de las apariciones significó para el Estado un acto de provocación o confrontación de la
Iglesia, ya que fue un evento que estuvo motivado por la sociedad católica a través de
comunidades religiosas que estaban cimentadas en el proyecto de Acción Católica. Este
proyecto, impulsó a grupos de jóvenes y adultos entre hombres y mujeres a participar en un
proceso de reorganización de la Iglesia católica precisamente debido a esta lucha anticlerical
con el Estado.
La Acción Católica Mexicana (ACM) nació justo al término del conflicto
cristero; se conformó con la base de las organizaciones católicas más
pujantes de los años veinte: Damas Apostólicas, la Juventud Femenina
Católica y la Asociación Católica de Jóvenes Mexicanos (Barranco, 1996:
40).

Esta conducción disciplinaria y doctrinaria fue impulsada por el Vaticano para los
países de Latinoamérica y puesta en marcha en México a través de la “carta apostólica Paterna
Sane Sollicitudo83 a través del Episcopado Mexicano el 2 de febrero de 1926” (Ibíd., 41). En los
años treinta se fue acentuando su difusión y su práctica cada vez más en las parroquias de los
pueblos rurales, supervisada por los sacerdotes que ofrecían sus servicios y animaban a la
comunidad de fieles. Para el año de 1931 estas acciones cobraron eficacia, al grado que fueron
estos grupos quienes fomentaron el culto guadalupano celebrando la coronación de la virgen
en la Basílica de la Ciudad de México. Sin embargo esto molestó seriamente al Estado al
percatarse del poder de convocatoria que tuvo la Iglesia precisamente durante la coronación,
debido a que “la Iglesia llegó a congregar alrededor de un millón de personas, acto que el
Maximato no toleró. Dos días después de haber realizado los actos, el Congreso condenó los
festejos e incluso la participación de los altos funcionarios de la administración pública”
(Barranco, 1996: 58).

83 Carta donde expone el Papa Pio XI sobre la prohibición de los católicos para no formar un partido político,
sino que la obra de Acción Católica era la de crear conciencia como medio eficaz para influir en la vida pública del
espíritu cristiano.

78
Ante esta afrenta de la Iglesia, el poder legislativo promulgó una serie de leyes y
decretos que delimitaron el poder de sacerdotes ante la comunidad católica, no sólo en la
Ciudad de México sino en el resto de la república. Para el año de 1934 como un acto de freno
político hacia la Iglesia, se modificó el artículo 3º. Constitucional en octubre y se publicó en
Noviembre de 1934.

Frente a estas modificaciones del Estado, el Papa Pio XI se pronunció hacía la


prudencia, la unión y la legalidad en los reclamos, por lo que se dio a la tarea de fortalecer el
proyecto de Acción Católica como un medio de establecer los lazos entre la Iglesia y la
población católica, para de esta manera respaldar sus acciones. Durante los siguientes años, la
Acción Católica Mexicana fue un claro ejemplo de un modelo de movimiento social católico
en el siglo XX y que estuvo ligado a la feligresía durante los años cincuenta en más de 35
Diócesis de todo el país, mismo que se amplió significativamente en las siguientes décadas.

Para el caso de Chiapas, el anticlericalismo del siglo XX, generó de igual manera
conflictos entre el Estado y la Iglesia, sobre todo en la década de los 20 en que arribó a
Chiapas la Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa, organización que contribuyó para
que la Iglesia de Chiapas pudiera celebrar en el año de 1931 la coronación de la virgen de
Guadalupe en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. Al respecto Lisbona (2008) aunque no
lo plantea directamente para el caso de la celebración de la coronación, expone varios
elementos que contribuyeron a crear un ambiente idóneo para conmemorar este evento. Entre
estos presenta que para estas fechas se había dado a).- Acuerdos mínimos entre la Iglesia y el
Estado, principalmente fundados por una serie de artículos84 que impedían el trabajo libre de
los sacerdotes para ejercer sus ministerios, por lo que ante esta orden, B).- La Iglesia procuró
camuflar sus actividades litúrgicas y de trabajo pastoral, aprovechando la feligresía católica85.

84 “Entre estos estaba la administración de los Sacramentos como el bautismo y matrimonio ante el Registro Civil,
se excusaba este control para los casos de celebraciones sacramentales para niños o adultos enfermos. Los
párrocos debían de instruir a la feligresía a darles de alta ante el Registro Civil, los nacimientos y matrimonios, y
los sacerdotes debían de cumplir las disposiciones, ya que de no ser así, se hacían acreedores de multas y
sanciones, como la suspensión de sus servicios” (Lisbona, 2008: 173).
85 El obispo Anaya da instrucciones a los sacerdotes de su diócesis para contrarrestar la ley, mostrando la posición

de resistencia aplicada para seguir sus labores de evangelización: “1.- Los Sres. Sacerdotes que tengan templos a su
cargo nombrarán una comisión de diez vecinos, quienes se harán cargo de los templos desde el día 30 del
presente. Cuando se les exigiere a los Sres. Sacerdotes el aviso de que habla el art. 130 de la Constitución, dirán

79
En esta política se promovió la Institución eclesiástica a escondidas del Estado y de paso se
mantuvo en resistencia ante la aplicación de la ley, llevando a cabo liturgias y celebraciones
religiosas ocultas por la población católica. Por otro lado, C).- Se creó un acuerdo entre iglesia
y el gobierno, mientras la comunidad de sacerdotes mermados en su número se mantuvo en el
territorio siempre huyendo o escondidos del poder del Estado pero manteniendo relaciones
entre sus feligreses. Ante este panorama, mucho del éxito para que la Iglesia no perdiera
control y presencia en el estado ante la política anticlerical, fue a raíz de D).- la participación de
la población católica, principalmente de las familias adineradas sancristobalenses86 que eran
fieles a la iglesia y que procuraron apoyarla, así como, E).- la presión política de la crítica en
periódicos locales87, nacionales e internacionales que reprendieron las acciones que el Estado
utilizó hacía la Iglesia.

En este contexto, la vida religiosa en el estado fue favorecida también porque los
dirigentes políticos chiapanecos quienes respondieron más a “quedar bien” con el poder
nacional y menos hacia conservar una postura propia del Estado en Chiapas, aspecto que
favoreció que el gobierno del estado fuera más indulgente con la Iglesia chiapaneca y menos
violenta que el resto del país. Al respecto Julio Ríos menciona que:
Los gobernadores chiapanecos, por la necesidad de estar sintonizados y en
buenos términos con el gobierno central, sumaban sus esfuerzos a los del
gobierno mexicano. Las razones de la complacencia en las medidas
anticlericales en Chiapas son, por un lado, que la Iglesia católica en Chiapas
no representaba una amenaza de ningún tipo; por otro lado, la relativa
autonomía que el gobierno chiapaneco tuvo para emprender las medidas
revolucionarias incluyendo las anticlericales (Ríos, 2001: 12- 13).

Ante este panorama, el gobierno estableció ciertos reglamentos para que se lograra el
trabajo pastoral aún en condiciones irregulares para que los sacerdotes se establecieran en sus

que no son encargados de los templos: de esta manera no sufrirán las penas fijadas en el decreto del Ejecutivo de
la Unión” (Lisbona, 2008: 173).
86 “En los primeros años de la Revolución mexicana la mencionada familia Zepeda, desde San Cristóbal de Las

Casas, tuvo un papel decisivo en la difusión de las posiciones de la iglesia católica, o en defensa del catolicismo”
(Ibíd., 204)
87 La defensa de la Iglesia fue basta, en la que participaron periódicos locales que recurrían a defender al clero: “en

semanarios como El Despertador, dirigido por Eduardo Flores Ruíz, o en la Hoja Parroquial y la Hoja Doctrinal, el
primero encargado al cura Belisario Trejo. Incluso en los años treinta aparece [el Boletín] La Virgen de Guadalupe”
(Ibíd., 204).

80
iglesias y estuvieran cercanos a sus feligreses88. Sin embargo, la Iglesia chiapaneca propició la
promoción del culto Guadalupano desde 1929, así como la creación de grupos de oración,
asociaciones y hermandades para su causa, fortaleciendo el quehacer de los sacerdotes
tomando como bandera a la virgen de Guadalupe y aprovechando la conmemoración de los
400 años de las apariciones y la coronación de la virgen en territorio chiapaneco.
Esta extensión de la imagen de Guadalupe, como pretendido signo del culto
más reconocido en todo el territorio mexicano y muestra de la vigencia del
hecho religioso católico en tierras chiapanecas, no estaba reñido con las
argucias que los propios sacerdotes debían construir para poder ejercer su
profesión (Lisbona, 2008: 179).

Entre estas acciones se instauró en Chiapas el proyecto de Acción Católica que tuvo
impacto en la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, en la que se crea esta figura a través de
grupos de jóvenes entre hombres y mujeres que impulsaron la doctrina cristiana y que se
consagraron a Cristo Rey y a proclamar como reina a la Virgen de Guadalupe, además de
fomentar la cohesión social entre los feligreses de la región creando grupos de oración como la
Asociación Católica de Jóvenes Mexicanos (ACJM) apoyada por la Diócesis de San Cristóbal
de Las Casas. Grupo que tendrá un papel decisivo en la conformación de expresiones de
devoción vinculadas a la virgen de Guadalupe como las antorchas guadalupanas.

2.3 1931: ¡Reine en Chiapas santa María de Guadalupe!


Pero es necesario entenderlo bien,
que no se trata de una fiesta cualquiera, ni de una ciudad,
sino de un hecho de mucha importancia en lo religioso y en lo social,
y que por lo tanto ha de verificarse con el tributo de todo el Estado que quiera ser mexicano de veras.
¡Reine en Chiapas santa María de Guadalupe!89

88 “En febrero de 1929 el gobierno chiapaneco hizo un censo de templos y sacerdotes en el Estado con el objeto
de hacer la entrega de templos una vez concluidos los “arreglos” a nivel nacional. Durante febrero y marzo los
sacerdotes enviaron sus datos al gobierno (AHECH – Asuntos Religiosos). El 12 de julio de 1929 el obispo
Genaro Anaya le envía al gobernador del estado una relación de los sacerdotes católicos en Chiapas y sus templos:
son en total de 30 sacerdotes (AHECH – Asuntos Religiosos). Recordemos que la ley de 1928 marcaba como
máximo 25 ministros de cualquier culto religiosos. Católicos había 30. Esto nos da una idea de la indulgencia de la
“campana anticlerical” en Chiapas durante ese periodo” (Ríos, 2001: 22).
89 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), ¿Por qué debemos coronar a la imagen de la

Santísima Virgen de Guadalupe en Chiapas?, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador
de la Coronación. Año I, No.10. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 01 de junio de 1930, p. 4.

81
Al celebrarse el 12 de diciembre de 1931, la coronación de la virgen de Guadalupe en la ciudad
de México y cumplirse el IV Centenario de las apariciones en el cerro del Tepeyac, las Diócesis
de todo el país impulsaron el culto guadalupano. Para el caso de Chiapas, se pensó en coronar
de igual manera en ese mismo año a la virgen de Guadalupe en la Catedral de la ciudad de San
Cristóbal de Las Casas. Para la realización del evento se requirió de la participación de la
comunidad católica del estado de Chiapas y del trabajo de difusión por parte de los sacerdotes
de las diferentes parroquias de la Diócesis.

Altar de la capilla de la virgen de Guadalupe en


la Catedral de S. C. L. C.

Fuente: Trabajo de campo en S. C. L. C., 2015

Además del apoyo de las elites sancristobalenses que impulsaron la coronación con el fin
de evidenciar que la Diócesis de Chiapas ubicada en la ciudad de San Cristóbal seguía
manteniendo una presencia en el estado. Actividad que demostraba que era también la única
autoridad hasta cierto punto reconocida con la cual contaba la ciudad, debido a que en el año
de 1892 había perdido el poder político, al trasladarse “la sede de la capital” del estado de
Chiapas a la ciudad de Tuxtla Gutiérrez.

82
Virgen de Guadalupe en la Catedral de S. C. L. C.

Fuente: Trabajo de campo en S. C. L. C., 2015

Ante este panorama político, tanto la comunidad católica chiapaneca como la Diócesis de
Chiapas organizaron un acto de gran envergadura al coronar a la virgen de Guadalupe no sólo
para la ciudad de San Cristóbal de Las Casas sino que simbólicamente fuera para todo Chiapas.
Este acto expresó el tributo que le rindieron a la “reina de los mexicanos” y, por ende se
afianzó con ello un sentido “nacionalista” del pueblo chiapaneco a través de la imagen
guadalupana. Es decir, que este evento resaltó no sólo el acercamiento de la virgen a sus
creyentes sino que también denotó una línea política sustentada en la idea de que Chiapas
también formaba parte de la nación, lugar que “la virgen había elegido para fincar su iglesia”.

Para la realización de este evento fue fundamental el papel del obispado de Chiapas en
nombre del Pbro. Anaya y Diez de Bonilla, que logró aglutinar a los feligreses católicos del
estado. Para ello contó con la aprobación y respaldo del anterior obispo de la Diócesis el
Mons. Francisco Orozco y Jiménez, quien ya se encontraba para este momento en el
Arzobispado de Guadalajara. Sin embargo mantuvo el aprecio de muchos católicos
chiapanecos y apoyó la conmemoración del Cuarto Centenario de las Apariciones en México,
por lo que incentivó a que los chiapanecos como mexicanos debían de contribuir con las
acciones dedicadas a la virgen de Guadalupe, como la de celebrar el día de la Basílica de

83
Guadalupe en la Ciudad de México. Para este momento, la imagen que iba a ser coronada en
San Cristóbal fue un lienzo que se encontraba en la catedral de la ciudad90.

La planeación de la coronación de la virgen de Guadalupe estuvo a cargo del “Comité


Organizador de la Coronación de la virgen de Guadalupe” que tuvo el papel de preparar los
eventos. Los miembros de esta agrupación fueron católicos pertenecientes a grupos de oración
como “Acción Católica” que vivían en la ciudad de San Cristóbal, mientras que la organización
de los “Comités Auxiliares” fueron componentes de las diferentes parroquias del estado que se
encargaron de organizar actividades en cada uno de sus lugares de origen. Esta organización
estuvo siempre coordinada por la Diócesis de Chiapas que se encargó de exaltar y difundir el
milagro guadalupano en todas las parroquias que tenían a su cargo. Para ello se planearon
algunas peregrinaciones a la Basílica de la ciudad de México con el fin de incentivar la devoción
y dar a conocer su milagro.
Mas así como hace 35 años la nación entera reconoció en la Santísima virgen
de Guadalupe la soberanía que tiene sobre nuestros corazones; así ahora
Chiapas quiere reconocer y proclamar la Soberanía de la misma virgen
Santísima. Coronar a la Santísima virgen de Guadalupe en nuestro estado, es
unirnos más a Ella como fieles súbditos, es hacernos más acreedores a sus
beneficios y es, en fin, estrechar más y más la vía en los que nos unen a toda
la Nación. No se trata de una fiesta cualquiera, la coronación ha de ser de
mucha trascendencia en lo religioso y en lo social. Ha de ser un florecer
grandioso del espíritu de fe y estrecharnos más y más a nuestros hermanos
de la república que reconoce en la Santísima Virgen de Guadalupe al lazo
más poderoso que une a todos los mexicanos. Por lo tanto si queremos el
bien del ancestro [sic] Estado, si deseamos la unión de todos los mexicanos,
para que estrechamente unidos caminemos al progreso real y verdadero;
debemos trabajar para la coronación de la virgen de Nuestra Señora de
Guadalupe en Chiapas. Pero es necesario entenderlo bien, que no se trata de
una fiesta cualquiera, ni de una ciudad, sino de un hecho de mucha
importancia en lo religioso y en lo social, y que por lo tanto ha de verificarse
con el tributo de todo el Estado que quiera ser mexicano de veras. ¡Reine en
Chiapas Santa María de Guadalupe!91

Este párrafo muestra la importancia que representaba el evento de la virgen de Guadalupe


entre los devotos, ya que al coronarla se fincaba la unión de los chiapanecos al pueblo de

90 “La imagen coronada de Ntra. Señora de Guadalupe, que se venera en la capilla del mismo título, es obra
antigua, probablemente del siglo XVII, renovada en ocasión de la fiesta de su coronación” (Flores, 1978: 34).
91 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “¿Por qué debemos coronar a la imagen de la

Santísima Virgen de Guadalupe en Chiapas?”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador
de la Coronación. Año I, No.10. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 01 de junio de 1930, p. 5.

84
México. Para lograr el objetivo, la Iglesia católica se encargó de difundir entre las familias
chiapanecas el milagro guadalupano y el reconocimiento de todos los católicos como la reina
de México y ahora de Chiapas:
Ahora bien, en nuestra Diócesis de Chiapas, ha hecho manifiesto su deseo por
medio del Pastor de nuestras almas; y es, que anhela reinar en el corazón de sus
buenos hijos de Chiapas, los últimos del territorio patrio, pero quiere que sean
los primeros en el amor. Santa María de Guadalupe desea ser conocida y es su
voluntad ser amada de los hijos de Chiapas. Por eso el eco de su voz se ha
extendido clamando por todas partes; repercute en todas las montañas. Santa
María de Guadalupe ambiciona el lugar predilecto en los hogares, desea penetrar
en todos los corazones, esto es: quiere ser el alma de cada buen chiapaneco. Y
que en llegado el día de la magna solemnidad venga a significarse la apoteosis del
acendrado amor a tan digna Madre. Que el 12 de Mayo de 31, venga a ser el
triunfo del reinado de Santa María de Guadalupe en todos los corazones
chiapanecos del corazón de nuestra Madre querida del Tepeyac92.

En el discurso había también la idea de integrar a la nación al último pedazo del territorio
mexicano, el cual había estado “desprotegido” de las manos de la guadalupana, debido a que el
estado de Chiapas se había anexado a México en el año de 1824 y hacía apenas 107 años de su
incorporación. Ante este contexto era de suma importancia que la virgen de Guadalupe fuera
la forjadora de integración del pueblo chiapaneco al reinado guadalupano, y con ello, los
chiapanecos se sintieran más identificados con la nación, en un territorio “bendecido” que
había elegido para forjar su Iglesia guadalupana y mexicana.

92 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Seré Madre cariñosa de todo el que me
invoque”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.18. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 05 de octubre de 1930, p. 4.

85
Boletín guadalupano para la coronación de
la virgen de Guadalupe 1931.

Fuente: AHE. Col. Fernando Castañón


Gamboa (HFCG).

El Comité organizador creó varias acciones que se encaminaron a la propagación de su


culto, una de estas iniciativas fue publicar un Boletín denominado “La Virgen de Guadalupe”
que se emitió durante el 1er. y 3er. domingo de cada mes durante los años de 1929 a 1931. En
los boletines se difundió el milagro guadalupano y se publicó oraciones, mandas,
pensamientos, agradecimientos, rifas, poemas, acción de gracias, textos guadalupanos y
principalmente para dar cuenta de los preparativos de la coronación de la virgen de Guadalupe
en San Cristóbal93.

Los preparativos para la coronación se comenzaron a llevar a cabo aproximadamente en


el mes de diciembre de 1929, aunque la mayor participación se dio entre 1930 a 1931. Para ello,
fue importante que los comités auxiliares de las parroquias, los sacerdotes y la comunidad
católica se abocaran a preparar y apoyar en cada uno de los eventos para los gastos de la

93El costo de la subscripción era de $1.00 anual, sueltos $.5 cts. y un número atrasado $10 cts. En este boletín se
admitía anuncios “convencionales”, como avisos, venta de terrenos, animales, publicidad de negocios (farmacias y
ferreterías), y servicios profesionales como dentistas, entre otros., que ayudaban a obtener ingresos para el evento
guadalupano. El director responsable de estos tirajes fue el Pbro. Dr. Lino Morales, administrado por el Seminario
Conciliar y registrado como artículo de segunda clase en la Administración de Correos de la ciudad de San
Cristóbal.

86
coronación de la virgen de Guadalupe, así se ofreció la venta de objetos religiosos para el
consumo de los feligreses y con ello obtener algunos ingresos.
Conforme anunciamos a los Sres. Párrocos y fieles de la Diócesis, ya
tenemos imágenes grandes y pequeñas de Ntra. Sra. de Guadalupe para que
se haga la entronización en los hogares. Hay también en la
ADMINISTRACIÓN medallas, crucifijos bonitos, diplomas de Primera
Comunión e imágenes de Ntra. Sra. de Guadalupe y consagre su hogar a la
Reina de los mejicanos94.

Esta tarea de difusión fue una de las maneras en que la Iglesia introdujo a la imagen de la
virgen de Guadalupe en las casas de las familias chiapanecas95, así como la devoción
guadalupana en las diversas iglesias de la ciudad y de los pueblos cercanos. Entre los poblados
se solicitó el apoyo de los feligreses de las comunidades indígenas de la región en donde tenía
presencia la Diócesis para que participaran en las actividades previas al evento96.
Una idea simpática nació en la Asamblea y decimos simpática, porque responde
perfectamente a los deseos de Nuestra tierna madre y a los fines de la
coronación, es la idea de trabajar mucho y con empeño por la raza indígena que
es numerosa en el estado, y que, según las palabras de nuestra morenita, tiene
derecho a que se le atienda, especialmente al tratarse de la Coronación de
Aquella que bondadosamente eligió a un indígena para su mensajero en el gran
favor que concedió a México. Al ponerse la idea de trabajar por nuestros inditos

94 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Aviso importante”, Boletín La Virgen de
Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 12 de diciembre de 1930, p. 3.
95 “La consagración de los hogares a la Santísima Virgen de Guadalupe, es el reconocimiento de sus maternales

favores y de su soberanía sobre toda la nación Mexicana que se considera dichosa por tener la Imagen de la
Morenita del Tepeyac que quiso retratarse Ella misma en la tilma de Juan Diego, para ser nuestra Madre y
Patrona”. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Consagre Usted su hogar a la
Santísima Virgen de Guadalupe”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la
Coronación. Año I, No.10. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 01 de junio de 1930, p. 3. En otra de las
invitaciones que exaltan venerar a la guadalupana mencionan: “La virgen Santísima de Guadalupe quiere Reinar en
Chiapas de una manera especial y para que todos le rindamos nuestro filial vasallaje, deben de empezar las familias
por entronizar a nuestra querida morenita en sus casas. Entronice, Ud., pues en su casa a la santísima Virgen de
Guadalupe. Procure Ud. que toda su familia ame mucho a nuestra tierna madre, así manifestara su gratitud como
mejicano a la que se apreció en nuestra patria para ser su Reina y protectora” AHE. Col. Hemeroteca Fernando
Castañón Gamboa (HFCG), “Entronice Ud. en su casa a la Sma. Virgen de Guadalupe”, Boletín La Virgen de
Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.14. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 03 de agosto de 1930, p. 4.
96 “El día 12 del presente mes se verificó una asamblea del Comité Organizador de la Coronación de la Imagen de

Ntra. Señora de Guadalupe en Chiapas. Con el fin de intensificar los trabajos relativos a la misma Coronación.
[…] Como el conjunto de familias componen la sociedad, para que la Santísima Virgen tenga su Reinado efectivo
en nuestro Estado, es necesario que primero reine en cada hogar, y por eso se acordó en la mencionada asamblea
hacer grande propaganda para que la virgen de Guadalupe sea entronizada en todos los hogares chiapanecos.
Esperamos que todos los amantes hijos de Santa María de Guadalupe, y especialmente los Comités Auxiliares
procuraran secundar esta propaganda” AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG),
“Intensificar los trabajos para la coronación”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador
de la Coronación. Año I, No.19. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 19 de octubre de 1930, p. 3.

87
¿quiere decir que no se ha hecho nada por ellos? De ninguna manera; allí están
nuestros abogados párrocos que trabajan mucho con ellos, pero con motivo de
la coronación queremos que se haga algo especial, haciéndoles conocer más y
más el amor que la virgen de Guadalupe ha tenido para ellos fomentándoles su
piedad, instruyéndolos lo mejor que se pueda, haciendo lo que se pueda por
introducirlos de lleno a la civilización, en fin buscar un modo práctico de
hacerles todo el bien posible, especialmente ahora que se trata de coronar en
nuestro estado a la que ha mostrado su predilección por los indígenas.97

Cabe señalar que una de las características de la población chiapaneca era que estaba
habitada mayoritariamente por indígenas con alto grado de analfabetismo y marginación, los
cuales se encontraban ubicados principalmente en los territorios de Las Montañas del Norte,
Los Altos, La Selva y La Frontera del estado. Situación que fue aprovechado para incorporar a
esta población a la Iglesia católica, debido a que los sacerdotes se le dificultaba llegar a estos
lugares y se le complicaba la evangelización, principalmente por la lejanía que había con el
centro de la Diócesis y además porque carecían de personas que se dedicaran a entronizar el
culto guadalupano en estos lugares.

Para este proceso, la participación de la feligresía católica en cada región fue


indispensable, ya que se creó comités auxiliares y un grupo de la pastoral de la juventud que se
encargaron de organizar eventos previos guadalupanos en los pueblos y rancherías, con la
intención de recabar ingresos a través de rifas de animales98 y con la recolección de alcancías en
las iglesias que el mismo Comité Organizador mandaban a elaborar. Estas cajas fueron
enviadas a los barrios de Mexicanos, San Felipe, San Ramón, Santa Lucia, entre otros., y en los
pueblos cercanos como Simojovel, San Andrés, Yajalón, Oxchuc, Chanal, Teopisca, Comitán,
Motozintla, Tzimol, Zinacantán, Cintalapa, Escuintla y otros más. Además de alcancías,
algunas personas se dedicaron a recolectar dinero, donar objetos de valor como monedas

97 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Intensificar los trabajos para la coronación”,
Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.19. San Cristóbal
de Las Casas, Chiapas. 19 de octubre de 1930, p. 3.
98 EL Sr. Dn. Manuel Aguilar residente en la ranchería de Tzimol, bondadosamente obsequió un torito para que

se rifara a beneficio de la coronación de Ntra. Sra. De Guadalupe en Chiapas. Dicha rifa se verificó en la misma
Ranchería, el mes pasado y su producto fue de $ 42.00 cuarenta y dos pesos que ya fueron enviados al Comité
Organizador de la Coronación. El mismo Comité envió sus más expresivos agradecimientos al Sr. Aguilar y a
todas las personas que contribuyeron al feliz éxito de la rifa, y espera que la virgen Santísima de Guadalupe le
pagará con recompensas su generosidad. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Rifa en
Tzimol”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.27. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 15 de marzo de 1931, p. 3.

88
antiguas en oro y plata, y “veladas”99 que se llevaron a cabo en la ciudad de San Cristóbal. Los
ingresos obtenidos de estas actividades eran enviados al tesorero el Sr. Rodolfo Franco, que
formaba parte del Comité Organizador de la Coronación, el cual registraba en vales para mejor
control100. Además de crearse algunas cofradías en algunas iglesias de la ciudad de San Cristóbal
en honor a la virgen de Guadalupe con el fin de incrementar devotos, apoyos en la recolecta de
fondos y en las diversas actividades que estaban planeadas para la coronación.

Durante la organización de los preparativos, el Comité de la coronación apoyó al grupo


de “Acción Católica” con la compra de materiales (templetes, telas, pinturas, madera, etc.) para
la presentación de obras teatrales que eran realizadas en el teatro Zebadúa101 que en ese año
estaba recién inaugurado. En cada evento se aprovechaba para anunciar públicamente la
importancia de coronar a la virgen en el estado, como se había hecho en otras partes del
mundo102.

Los primeros gastos que el Comité Organizador invirtió en los preparativos de la


coronación fueron la impresión de anuncios dedicados a la virgen y gastos de los eventos que

99 El día 29 del mes próximo pasado, con fin de preparar los festejos de la Coronación de la Imagen de la
Santísima Virgen de Guadalupe en Chiapas y cuarto Centenario de las Apariciones en el Tepeyac, se verificó en
esta Ciudad, una velada que estuvo muy concurrida y agradó mucho al público. El comité organizador de la
Coronación agradece sinceramente a todas las personas que bondadosamente cooperaron al feliz éxito de la
Velada. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Velada con motivo de la coronación y
Cuarto Centenario de la aparición de Sma. Virgen de Guadalupe”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del
Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 12 de diciembre de
1930, p. 4.
100 Ver Apéndice III: Cuadro sobre los gastos e ingresos para la coronación.
101 “En 1882, San Cristóbal emprendió una importante renovación urbana, que no se detuvo con el traslado de la

capital del estado a Tuxtla Gutiérrez en 1892: Se construyeron un nuevo palacio de gobierno _luego trasformado
en presidencia municipal_ y el teatro Fray Bartolomé de Las Casas; se creó el parque central; se reformaron las
iglesias de San Nicolás y del Cerrillo; se remodeló la catedral; se erigió la iglesia de Santa Lucia; y se avanzó con la
construcción de infraestructuras urbanas (empedrado de las calles del centro, apertura de nuevas calles, alumbrado
público, electricidad, acueductos y atarjeas, rastro y mercado de San Francisco). Esta oleada constructivista llegó a
su fin en 1931 con la inauguración de un nuevo teatro, el teatro Zebadúa. Es muy probable que el periodo entre
1880 y 1930 haya sido el de mayor esplendor de la ciudad, a pesar de que durante éste perdió definitivamente su
carácter de capital del estado” (Viqueira, 2009: 81).
102 “Al referirse a los muchos eventos de la historia de México se refiere a Chiapas: ¿y quién extrañara, por

consiguiente que el pueblo de Chiapas, émulo de los demás que constituyen la grande patria mejicana, se empeñe
en realizar ahora, al celebrarse las extraordinarias solemnidades del cuarto Centenario de las apariciones en el
Tepeyac, lo que en tantas partes de nuestro país y aún en varias naciones extranjeras como en Argentina,
Colombia, Italia, se ha verificado ya, es decir, la Coronación de la Virgen Sma. de Guadalupe como Patrona y
Reina, ya que Ella ha querido mostrarse Madre?”. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG),
“Alocución pronunciada por el Sr. Presidente del Comité Organizador de la Coronación, en la velada que se
verificó el 29 de noviembre próximo pasado, en esta ciudad”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del
Comité Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 12 de diciembre de
1930, p. 3.

89
se organizaron para recolectar dinero. Sin embargo este acontecimiento no sólo tuvo el
objetivo de coronar a la virgen, sino que parte de los ingresos obtenidos en las recolectas fue
también para la reconstrucción de la capilla dedicada a la virgen de Guadalupe en la catedral103,
la cual inició sus trabajos a mediados de 1930 y prosiguió durante todo el año de 1931.104 Para
estas reparaciones se requirió la compra de vidrios, pintura, material eléctrico, yeso, tablas,
planchones, piedra de cantera, cal, arena, entre otros materiales de construcción; así como la
mano de obra de albañiles, pintores, carpinteros, canteros, caleros, barrenderos y otros
trabajadores que fueron requeridos para su arreglo105.

Entre los planes que se tuvo para la coronación, se planeó junto con el Comité
Organizador y el obispo la elaboración de la corona106, para ello se difundió a todos los
feligreses la importancia de dicho acto:
Por qué o cuál es el obstáculo impide para que los chiapanecos se vean
indiferentes y continúen las alabanzas y esto se debe a que no la conocemos o se
sabe poco de ella. La virgen de Guadalupe quiere ser reconocida y amada por la
Diócesis de Chiapas y se encamina la coronación de su imagen bendita entre

103 Este edificio ya requería hacerle algunos arreglos debido a que ya había sido modificado desde el periodo del
obispo Olivera y Pardo entre 1713 – 1733, “Emprendió la tarea el obispo de Chiapas y Soconusco, don Jacinto de
Olivera y Pardo por recomendación expresa del Papa Clemente XI y la fábrica estuvo a cargo de un arquitecto y
de albañiles llegados de Guatemala, quienes substituyeron la cimentación primitiva de poca profundidad por otra
más capaz y, los muros de adobe, por paredes de cal y canto, dos metros más altas que las anteriores. Las naves
del templo se agrandaron en veinticinco varas hacia el frente, hasta llegar a la longitud total de cincuenta metros
que tienen hoy en día para sí eliminar por completo el atrio principal. Era su máxima capacidad de crecimiento,
no se podía invadir la vía pública. Dentro de estos trabajos se incluyen los de la Sacristía, Sala Capitular y la
construcción de la capilla, hoy de Guadalupe” (Artigas, 1986:12).
104 “…en 1931, al celebrar con inusitada solemnidad la coronación de la Virgen de Guadalupe, colocó el altar de

mármol, que cubría la vista del magnífico retablo barroco que ocupa el fondo de la nave central. Por la misma
época una nueva construcción enriqueció el templo. Se utilizaba como bautisterio la mitad de un salón vulgar,
cuya otra mitad servía de paso entre la Capilla del Sagrario, hoy de Guadalupe, y la Casa Parroquial y la Merced al
generoso donativo de una dama de la sociedad, doña Margarita Aguilar Vda. de Villafuerte, surgió el actual
bautisterio” (Flores, 1978: 28).
105 “Estando próximos del día signado para la Coronación de la Imagen de Ntra. Sra. de Guadalupe en Chiapas,

que se verificará, con el auxilio divino, el 12 de mayo del presente año, era menester activar los trabajos de
preparación. Con este motivo desde a principios del mes pasado, se comenzaron los trabajos en catedral,
consistentes en el decorado del artesón, arreglo del presbiterio y pisos, y en la colocación de un altar de mármol,
obra de la casa Ponsanelli, que ha mandado un enviado especial para que coloque dicho altar. Esperamos que las
obras de la catedral quedaran terminadas para los primeros días de mayo. Con diseño y estilo hermosos, se está
elaborando, en la capital de la República. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG),
“Trabajos para la Coronación”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la
Coronación. Año II, No.27. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 15 de marzo de 1931, p. 2.
106 “El 12 de Mayo de 1931 en la catedral de Chiapas. Se acerca con pasos de gigante el día de la Coronación de la

Imagen de nuestra Sra. de Guadalupe y por consiguiente se está labrando la Corona, material que se depositará en
las sienes de nuestra Reina queridísima”. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Corona
espiritual que se ofrecerá A Ntra. Señora de Guadalupe”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité
Organizador de la Coronación. Año I, No.22. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 12 de diciembre de 1930, p. 2.

90
nosotros. Es necesario que se le conozca y comprenda lo importante de su
creación. La coronación de la imagen en la catedral es la Iglesia madre de todas
las demás de la Diócesis. Que se labre una corona para presentarla en este
solemne día. Y que sea elaborada y fabricada con metal precioso y ofrecerle
joyas preciosas y brillantes para que brillen en la sienes de Guadalupe. Para que
llueva su cariño fraterno en este suelo y de esta manera conocerla y amarla y [sic]
fecundara en nuestras almas bendiciones y virtudes. Procurar en reuniones
familiares, infiltrar a los amigos el espíritu a Guadalupe. Hagámosla saber a los
niños, pobres analfabetas, estudiemos su historia, hagamos ver su aparición
milagrosa. Se levante un altar en cada hogar y en cada corazón chiapaneco tenga
un trono.107

Corona utilizada en la Coronación de la virgen de


Guadalupe, 1931.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017

Para la elaboración de la corona se creó un pequeño comité que le dio seguimiento108


integrado por el obispo Genaro Anaya y Díez, miembros del Comité Organizador como el
tesorero Sr. Rodolfo Franco y conocidos devotos como la Srita. Carmen Salazar, el Sr. Camilo
Arguello y el Sr. Ignacio Robledo. Este último, se encontraba en la ciudad de México y era

107 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Edicto sobre “El Día de la Basilica
Guadalupana”. Al M. I. Sr. Deán y Ven. Cabildo, Al Ven. Clero secular y regular, y a todos los fieles de la Diosesis
de Chiapas, salud y bendición en el señor”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de
la Coronación. Año I, No.04. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 02 de marzo de 1930, p. 2.
108 “Sta. María de Guadalupe ostentará una corona, bien pobre por cierto, pero está labrada a fuerza del sudor de

sus hijos y por eso tiene un precio incalculable, pero también, con esta corona llevará otra formada, no con oro ni
metal precioso, sino que es el resultado del más puro amor hacia la Madre, constará de perlas, de topacios de
margaritas preciosas puestos[sic] buenos hijos de Santa María de Guadalupe, con el afán y la constancia labraren
durante el tiempo de preparación para el día tan memorable. Vendrá a ser la corona espiritual formada con las
misas. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Día doce de mayo de 1931, en Chiapas”,
Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.27. San Cristóbal
de Las Casas, Chiapas. 15 de marzo de 1931, p. 2.

91
quien tuvo el contacto con el platero que diseñó y elaboró la corona de la virgen. Para ello se
requirió del apoyo de los fieles devotos para donar objetos de valor como oro, plata o piedras
preciosas para ser enviadas al joyero, quien se encargó de elaborar la corona de la virgen de
Guadalupe.

El proceso de la elaboración de la corona inició el 4 de diciembre de 1929, por los


plateros Sr. Jorge Ochoa y el Sr. Israel Ruíz que vivían en la ciudad de México. Esta corona fue
hecha en plata dorada en fuego y por indicaciones del señor obispo se le hicieron
incrustaciones de piedras preciosas, por lo que el joyero le colocó amatistas con un peso de
388.5 quilates y escudos en sus lados. El costo de la corona que inicialmente se había
programado fue más alto de lo convenido, por lo que se requirió que fuera pagada en cómodos
pagos que fueron enviados por correo al Sr. Ignacio Robledo para que posteriormente fuera
entregada a los plateros. Finalmente el costo total de la corona fue de $1, 400, 12109.

Aproximadamente cinco días antes de que fuera puesta la corona a la virgen de


Guadalupe fue bendecida en San Cristóbal de Las Casas y preparada para la celebración de la
coronación en la ciudad. Además de que el Monseñor Eduardo Flores110 mandó a elaborar un
marco de plata para la virgen111 donde se colocó la imagen.

109 Al parecer el costo de la corona fue pagada en su totalidad hasta después de haberse celebrado la coronación,
en mayo de 1931. Debido a la fecha de este telegrama que indica el término de la deuda. “Coronación de la Virgen
de Gpe. México, 1 de septiembre de 1931. Sr. Don Rodolfo Franco. San Cristóbal L.C. Muy estimado amigo:
Recibí el giro bancario por el valor de la cantidad que se adeuda de la Corona; tan pronto como lo cambie se lo
entregue al joyero para saldar la cuenta. Le agradezco mucho él envió. Reciba mis más cariñosos saludes los que le
ruego hacer extensísimos a su apreciable familia. Su afmo. Amigo y S. S. E.C que le desea todo bien. Ignacio L.
Robledo. Año 1931” (AHDSC, Cap.4958 Exp.2).
110 Monseñor Eduardo Flores Ruíz (1890 – 1977) nació en San Cristóbal de Las Casas. Sus primeros estudios los

realizó en la escuela “El Porvenir”, de su ciudad natal e ingresó al Seminario Conciliar de Chiapas en la misma
ciudad. Prosiguió su educación en el Seminario Conciliar de México, culminándola en la Universidad Gregoriana y
en el Colegio Pío Latino, donde se doctoró en Filosofía. Fue miembro de la Sociedad Científica, Literaria y
Artística de San Cristóbal de Las Casas, del Patronato Fray Bartolomé y de la Sociedad Mexicana de Geografía y
Estadística. Se avocó al estudio de la historia de Chiapas y de algunos resultados de sus investigaciones fueron
publicados en la Sociedad Científica, Literaria y Artística de San Cristóbal de Las Casas en 1943: “Ciudad Real, su
principio y su evolución”, Las armas heráldicas de Mazariegos”, “Pergaminos y Polillas. Francisco Ortes de
Velasco”. En 1954 publicó: “el Sumidero. La leyenda de los Chiapas”. En 1973 el Patronato Fray Bartolomé de
Las Casas reunió varios de sus trabajos en la obra “Investigaciones históricas sobre Chiapas” (Flores, 1978: 1).
111 Al respecto reproduce la descripción del Sr. Camilo Arguello sobre las características del marco de plata, que se

encuentra hoy en día en la capilla de la virgen de Guadalupe en la catedral de la ciudad de San Cristóbal de Las
Casas:
“Finalmente, tenemos el marco de la Virgen de Guadalupe, cuya descripción hecha por su mismo autor, el P.
Camilo Arguello, S.J. es la Siguiente: “El marco de plata en la que está colocada la Imagen de la Sta. Virgen de
Guadalupe, y que se venera en la Capilla de su nombre en la santa Iglesia de Catedral de San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas, es gratísimo recuerdo que queda entre nosotros de la Solemnísima Coronación de la Reina de

92
El día de la celebración de la coronación fue el 12 de mayo de 1931 y no en el mes de
diciembre como se había pensado originalmente, debido a que para este mes el clima de la
ciudad era muy frío o en ocasiones llovía, siendo no propicio para que los peregrinos pudieran
asistir al evento, por ello decidieron cambiar la fecha y eligieron un día en los meses de
primavera.
Y desde luego se imponía la necesidad de aplazar la fecha en un principio fijada
para el grande acontecimiento que se prepara, en proporción a la tregua aludida
y a los trabajos que se han de realizar, que ciertamente requieren tiempo mayor
que el que media entre el presente y el mes de diciembre próximo venidero… y
se previó desde los comienzos de la obra, que no era el mes de diciembre el más
adecuado para una función que desean presenciar tantas y tantas personas
foráneas, según nos lo han manifestado; ya que la temporada de lluvias deja los
caminos en pésimo estado y verdaderamente intransitables hasta fines de
noviembre y aún en diciembre. Por otra parte en la época del invierno el frio es
muy intenso en esta ciudad, y no fácilmente tolerable para personas que de
lugares cálidos quisieran venir en peregrinación con motivo de ser coronada
nuestra Madre Sma. de Guadalupe. Tan poderosas razones como las apuntadas
han impuesto la traslación antes dicha; por lo cual el Comité General en su
última sesión verificada el miércoles pasado, fijó definitivamente como fecha
para la coronación, el 12 de mayo de 1931.112

Este momento puede considerarse como el de mayor esplendor del guadalupanismo en


Chiapas y el inicio de una creciente devoción hacia ella, pero también fue el momento en que la
Diócesis de Chiapas estableció una fuerte relación con el pueblo creyente, ya que no había
existido un evento que reuniera a todas las iglesias y parroquias del estado y que pudiera captar
el interés de los católicos chiapanecos.

México, llevada a cabo con una pompa jamás vista en esta ciudad el memorable día 12 de mayo de 1931, por el
Excmo. Dr. Don Genaro Anaya y Diez de Bonilla y el Excmo. Sr. Obispo de Huajuapan de León, Dr. Don Luis
Altamirano y Bulnes. El marco dentro del cual está colocada la Imagen, consta de dos partes: una rectangular que
mide dos metros de alto y un metro, cincuenta centímetros de ancho; la otra colocada sobre la primera, tiene
forma un tanto ojival y sirve de fondo y sostén a la corona; mide noventa centímetros de alto. Todo es de plata
laminada y repujada por plateros, hijos de San Cristóbal de Las Casas. Aunque las curvas y el ornato de él hacen
alguna reminiscencia a la época de Luis XIV, el conjunto es estilo propio para la reina de los Mexicanos y
exclusivo para la solemnidad presente, pues a los pies de la Celestial Imagen está Chiapas representado por un
escudo rindiéndole filial homenaje a su dilectísima Reina; y en la parte superior, en el remate, hay un monograma
de María rodeado de multitud de corazones como enlazados e íntimamente unidos en el mismo amor, para honrar
a la Madre de Dios y Reina nuestra. Y el adorno dominante en la variedad de dibujos del repujado es rosa, por ser
ella el símbolo de amor y la elegida por la Reina del Cielo para mostrar la gran predilección que ha tenido por la
nación Mexicana”. Nota: Los artesanos que trabajaron la obra material son los señores Bartolomé Gutiérrez,
Joaquín Ruíz y varios ayudantes” (Flores, 1978: 38).
112 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Los trabajos Para la Coronación se

reasumen”. En: Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año I,
No.16. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 07 de septiembre de 1930, p. 2.

93
¡¡Reine en Chiapas Santa María de Guadalupe!! ¡Aleluya, aleluya! Alegría, alegría!
Exclama a la Santa Iglesia católica llena de regocijo al contemplar que hermoso
y resplandeciente, se llevará al sepulcro Cristo Jesús, Nuestro Divino y Adorable
redentor todas las angustias de la Pasión. ¡Alegría, alegría! Debemos exclamar
todos los habitantes de Chiapas, al considerar que ya se acerca el día hermoso y
radiante, tantas veces deseado, en que la Augusta madre de Dios, con la
dulcísima advocación de Guadalupe, fijará de manera especial su Reinado entre
nosotros. Aquel día en que, al colocar sobre sus Benditas Sienes la corona,
símbolo de nuestro amor y vasallaje, la reconocemos como nuestra Reina y
Madre, en justa correspondencia a los favores que nos ha dispensado, y que
desde el 12 de mayo, seguirá derramando con mayor abundancia. Si
alegrémonos santamente en el señor. Seamos agradecidos a los beneficios que
nos concede. Procuremos aprovechar los beneficios espirituales que en los días
de preparación a la gran solemnidad de la Coronación, se nos prodigaran.
¡Felices de nosotros, si para que el 12 de mayo de 1931 quede endeblemente
grabado en nuestros corazones, nos preparamos bien a fin de que el reinado de
la Sma. virgen de Guadalupe produzca en nosotros los frutos que nuestra tierna
Madre y Reina ardiente desea!113
Ceremonia de coronación S.C.L.C. 1931

Fuente: S.C.L.C. s/f. Anónimo.

Para que los devotos del estado pudieran estar presentes en la coronación en la ciudad de
San Cristóbal, el Comité Organizador y la Diócesis de Chiapas planeó en la última semana del
mes de abril y la primera de mayo que cada barrio de la ciudad le presentara su lealtad a la

113AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “¡¡Reine en Chiapas Santa María de
Guadalupe!!”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II,
No.23. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 26 de abril de 1931, p. 2.

94
guadalupana, estos eventos comenzaron con diferentes actos litúrgicos que fueron organizados
por la misma Diócesis para cada grupo de representantes de los barrios114.

Para organizar las peregrinaciones de los diferentes municipios que llegaron al festejo de
la coronación se distribuyó un documento con la programación de actividades a los párrocos
de las iglesias de Chiapas, con el fin de que las peregrinaciones que visitaron la ciudad fueran
ordenadas y que las actividades se llevaran en buen término. En este documento se expuso el
lugar donde debían de partir las procesiones, los cánticos para la ocasión, los horarios de las
misas, así como el tipo de alojamiento que el mismo Comité Organizador había preparado para
los peregrinos interesados en asistir a los actos. El apoyo que el Comité Organizador ofreció
fue el alojamiento gratuito durante los tres primeros días y el cuarto ya quedaba por cuenta del
peregrino. Estos servicios eran variados de acuerdo a los niveles socioeconómicos de cada uno,
ya que eran acogidos en hoteles que estuvieron al servicio de los devotos, así como los
alimentos115 y los costos de las misas para cada procesión116.

114 Se encaminaran a las seis de la mañana hacia la Santa Iglesia catedral, en donde serán recibidos
procesionalmente y entraran entonando canticos de alabanzas a la Inmaculada virgen del Tepeyac. Acto continúo
el Ilmo. y Rvmo. Prelado diocesano celebrará la misa y durante el santo sacrificio habrá una plática a cerca de la
Sma. Virgen. Habrá además todos los días, misa con plática a las cinco y media a. m y otra a las siete y media. Los
fieles durante todo ese tiempo podrán acercarse al S. Tribunal de la Penitencia. Por la tarde, a las seis y media,
expuesto el Divinísimo se entonará el santo Rosario, y después de un sermón alusivo, se hará por todos los fieles
el Acto de desagravios por los pecados públicos y privados, terminando todo con la bendición Eucarística”.
Finalmente, y para facilitar a todos los hijos de esta ciudad la asistencia a estas extraordinarias festividades, se
tendrá exclusivamente para caballeros, una función especial, los días 30 de abril, 1 y 2 de mayo, de las ocho a las
ocho y media de la noche, con Exposición plática y bendición. Todos de una u otra manera hemos cooperado a la
preparación del acto nobilísimo de la Coronación de nuestra Reina: todos, por lo mismo, debemos aprovechar la
ocasión de purificarnos y merecer el dictado de hijos y vasallos. Corramos a sus pies, busquemos su mirada
maternal y entonemos loores a su grandeza y a su gloria. ¡Reine en Chiapas Santa María de Guadalupe! San
Cristóbal Las Casas, Abril de 1931. Pbro. E. Flores Ruiz, presidente.- Lic. B. A. Coello, Srio”. AHE. Col.
Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “¡¡Reine en Chiapas Santa María de Guadalupe!!”, Boletín La
Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.23. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 26 de abril de 1931, p. 1.
115 “En los hoteles de la ciudad se ha conseguido la rebaja siguiente: Hotel Catedral, por hospedaje y alimentos

$2,00; por alimentos $1.50, Hotel Odilón, hospedaje y alimentos, $2. 50; alimentos solo $1.50; Hotel Español,
hospedaje y alimentos, $3.50; alimentos $2.00. Estos precios comprenden las tres comidas acostumbradas; y el
cobro es por cada persona diariamente. En fondas especiales se ha contratado para personas pobres, las tres
comidas de cada día al precio más bajo posible: las tres comidas $0.60” (AHDSC. Carp.4957 Exp.22).
116 El costo de la celebración de la misa era de $8.00, pero si se solicitaba misa cantada y comuniones, se añadiría

$1.00 por músico, más alumbrado eléctrico con un total de $20.00. Para que la participación de cada delegación
fuera ordenada, se solicitaba que se tuviera previamente el número de peregrinos que asistirían, cuantos
necesitarían del hospedaje en los hoteles y cuantos requerirían de albergues. Además se nombró a dos
representantes de cada delegación para que asistieran al acto de coronación como carácter de padrinos, de
preferencia que fuera un hombre y una mujer.

95
El evento dio comienzo el 12 de mayo de 1931 a las 8 y media de la mañana. En la
catedral se reunieron los padrinos, el clero y el obispo de Chiapas el Pbro. Genaro Anaya y
Díaz Bonilla y el obispo de Huajuapan de León, Mons. D. Luis M. Altamirano y Bulnes, que
había sido invitado para dar el sermón en la iglesia catedral y coronar a la imagen, por ser
conocido como uno de los mejores oradores “Sagrados de la Republica”117. Estuvieron
presentes también los representantes de las delegaciones invitadas y devotos de la virgen de
Guadalupe que estuvieron en cada uno de los actos de la coronación. Para asentar oficialmente
el evento se elaboró un “Acta Solemne de Coronación de la Santísima Virgen de Guadalupe”118
y se tocaron las campanas de la catedral al igual que las de todos los templos de la ciudad,
anunciando que la virgen de Guadalupe había sido coronada en Chiapas.

Acta de la Coronación de la virgen de


Guadalupe S.C.L.C. 1931

Fuente: (AHDSC. Carp.4958 Exp.1) y


(AHDSC. Carp.4959 Exp.2).

117El Excmo. Sr. Obispo de Huajuapan de León, Dr. Dn. Luis M. Altamirano y Bulnes, quien bondadosamente
aceptó la invitación para predicar en la santa Iglesia catedral de esta ciudad, con motivo de la Coronación de la
Imagen de Ntra. Sra. De Guadalupe en Chiapas, estará entre nosotros el día 7 del presente, según noticias seguras
que hemos recibido. Hojas volantes especiales señalaran la hora precisa en que hará su entrada en esta ciudad. Ya
de antemano invitamos a todos los habitantes de esta ciudad, para que con entusiasmo y haciendo muestra de su
cultura, salgan a recibir a tan digno personaje que nos honrara con su presencia durante algunos días. AHE. Col.
Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “¡Reine en Chiapas Santa María de Guadalupe! El Excmo. Sr.
Obispo de Huajuapan de León, Dr. Dn. Luis M. Altamirano Y Bulnes, llegara a esta ciudad, el 7 del presente
mes.”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.30. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 03 de mayo de 1931, p. 1.
118 Acta Solemne de la Coronación de la Virgen de Guadalupe, año 1931 (AHDSC. Carp.4958 Exp.1) y (AHDSC.

Carp.4959 Exp.2).

96
Como parte de las actividades de la coronación se creó una lista de peregrinaciones de las
delegaciones de los diferentes municipios que asistieron a venerar a la virgen, entre ellas estaba
también las delegaciones de los pueblos indígenas de la región, en la que se dio un sermón en
su propia lengua y se tocó música tradicional durante el acto religioso119. Durante los días
previos a la coronación se realizaron peregrinaciones de los diferentes lugares del estado como
Teopisca, Huixtán, Tenejapa, Tonalá, Cintalapa, Tapachula, Tuxtla Chico, Motozintla,
Comitán, Tuxtla Gutiérrez, Ocozocuahutla y días después de la coronación asistieron otras
delegaciones como Simojovel, San Andrés, Escuintla, Copainalá, Ixtapa, Las Margaritas,
Zapaluta (Venustiano Carranza) y Pinola (Las Rosas), así como asociaciones guadalupanas y
cofradías de la ciudad.

Posterior al evento, se siguieron llevando a cabo ceremonias religiosas para exaltar la


devoción a la virgen de Guadalupe, entre ellas la Archicofradía de la virgen de Guadalupe que
celebró rezos en su honor a cargo de algunas devotas120, así como también se siguió
mencionando sobre el evento que había dado renombre al estado:
El mexicano por el mismo hecho de serlo, lleva en su corazón el amor a la
virgen de Guadalupe. Hasta los impíos aman a la Virgen del Tepeyac, porque
miran en ella el lazo más estrecho, quizá el único que une a todos los mexicanos,
es el baluarte fuerte y seguro de nuestra independencia. Cooperemos pues, con
nuestro óbolo como hijos agradecidos. Chiapas por la bondad divina, de manera
especial, acaba de proclamar como su amantísima Reina, a Santa María de
Guadalupe. Todavía vibran en nuestros oídos los entusiastas vivas que brotaron
de los corazones agradecidos, al aclamar como Reina a la patrona de nuestro
suelo: todavía palpitan de emoción nuestros corazones poseídos por el amor
guadalupano. Que brotó pujante al coronar la imagen de Nuestra Señora de
Guadalupe el 12 de mayo próximo pasado.121

119 Conforme lo indica el programa, el día 3 del presente, a las 11 de la mañana llegaron a la Iglesia catedral los
indígenas de los pueblos de Chamula y Zinacantan. Iban precedidos de sus banderas y su típica música compuesta
de arpas, guitarras y tambores. Todo el recorrido desde S. Ramón hasta la santa Iglesia catedral. Fueron
acompañados de los melancólicos pero bien sentidos sones de la típica música. Llegaron a la catedral. Llegados a
la catedral rezó la Estación al santísimo Sacramento y luego escucharon un sermón en su propia lengua. Al
terminó el sermón y la bendición con el Divinísimo, obsequiaron a nuestra morenita. Con dos piezas de su
orquesta. Al salir en el atrio de la catedral se les tomaron varias fotografías para que permanezca el recuerdo de su
hermosa peregrinación. AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Peregrinación Indígena”,
Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.30. San Cristóbal
de Las Casas, Chiapas. 03 de mayo de 1931, p. 1.
120 Triduo de rezos por la Archicofradía de Ntra. Sra. de Guadalupe AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón

Gamboa (HFCG), “Triduo guadalupano”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de
la Coronación. Año II, No.35. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 16 de agosto de 1931, p. 2.
121 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Todo mexicano es guadalupano”, Boletín La

Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.32. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 05 de julio de 1931, p. 2.

97
La importancia de coronar a la virgen de Guadalupe en Chiapas marcó el inicio de una
creciente devoción que propició la construcción del templo dedicado en su honor en la ciudad
de San Cristóbal de Las Casas, así como el establecimiento de altares en todas las iglesias de la
ciudad y en muchos de los pueblos del estado.

Aunque el establecimiento del culto guadalupano en Chiapas estuvo permeado por


intereses políticos que se encontraban difuminados en ese momento, los feligreses tuvieron la
necesidad de apoyarse de la imagen guadalupana para incorporar a un territorio que se había
mantenido en el abandono por el Estado mexicano, además de integrar a la nación a una
población de mayoría indígena y en menor proporción compuesta por mestizos, los cuales no
tenían totalmente arraigado un sentido de nación, debido a que había pasado 107 años de su
anexión a México. Así la imagen de la virgen de Guadalupe como en otros eventos en la
historia de México sirvió para forjar una identidad mexicana, ahora en Chiapas.

2.4 Y repican al vuelo las campanas del templo!

…nuestra casa solariega,


el rincón de México donde se albergan nuestros más tiernos amores,
allí donde la siempre Virgen María está siempre esperando a sus hijos para consolarlos,
para sostenerlos, para salvarlos…122

Para entender el origen de los santuarios dedicados a la virgen de Guadalupe en la ciudad de


San Cristóbal de Las Casas, hay que referirse al espacio donde se celebró por primera vez el
culto a la virgen, este tuvo lugar en la iglesia de catedral123 que fue reconstruido entre 1718 y
1721 a raíz del deterioro de la obra y principalmente debido al terremoto causado en 1672. En

122 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Para el Centenario guadalupano”, Boletín La
Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.33. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 19 de julio de 1931, p. 4.
123 El obispo Olivera y Pardo la amplió al doble de su tamaño en 1720, reconstruyó íntegramente la parte antigua,
erigió la fachada y la capilla del Sagrario. Los rasgos arquitectónicos que hoy presenta se atribuyen al obispo
Fuero. Otro dato interesante se refiere a la renovación contemporánea del interior que entre 1915 y 1920, se hizo
por iniciativa de Don Carlos Z. Flores. Se tallaron las columnas y se cambió la forma de las ventanas. El
bautisterio en su diseño actual, procede de la misma época, es obra del maestro albañil Don Jovo Hernández,
originario del barrio de San Diego. En el anterior de este recinto se admira un cuadro de San Juan Bautista y San
Andrés Apóstol, del siglo XVII, así como el bautismo de Jesús de la misma época (Jiménez, 1994: 38).

98
esta reconstrucción de la catedral se edificó la capilla El Sagrario124 en la parte Norte de la
entrada de la nave principal de la iglesia y posteriormente se le asignó a la virgen de Guadalupe.

Imagen de “bulto” de la Virgen de


Guadalupe, Iglesia de Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2016.

A principios del siglo XIX ya había algunos primeros indicios del culto en otra de las
zonas de la ciudad como en la labor de Guadalupe125, la cual era una sección que estaba
ubicada sobre un cerro al Este de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, en donde había una
pequeña capilla dedicada a la virgen y una capellanía a su nombre. Se tiene referencia que fue
construida a principios de 1830 y para 1844 la zona aún seguía poco poblada, por lo que pasó
una década después entre 1854 y 1864 que la capilla fue mejorada por medio del obispo Carlos
Ma. Colina y Rubio126. En este lugar se tiene registro que se llevó a cabo una celebración a la

124 Emprendió la tarea el obispo de Chiapas y Soconusco, don Jacinto de Olivera y Pardo por recomendación
expresa del Papa Clemente XI y la fábrica estuvo a cargo de un arquitecto y de albañiles llegados de Guatemala,
quienes substituyeron la cimentación primitiva de poca profundidad por otra más capaz, y los muros de adobe,
por paredes de cal y canto, dos metros más altas que las anteriores. Las naves del templo se agrandaron en
veinticinco varas hacia el frente, hasta llegar a la longitud total de cincuenta metros que tiene hoy en día para así
eliminar por completo el atrio principal. Era su máxima capacidad de crecimiento, no se podía invadir la vía
pública. Dentro de estos trabajos se incluyen los de la Sacristía, Sala Capitular y la construcción de la capilla, hoy
de Guadalupe” (Artigas, 1986: 12).
125 Zona como se le nombraba al actual barrio de Guadalupe en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas.
126 Asume el nombramiento por el Papa el día 7 de abril de 1854, toma posesión de la Diócesis el 20 de

noviembre de 1854 y termina su mandato el 19 de marzo de 1863, por su traslado a la ciudad de Puebla. Quien
no por casualidad había recibido la condecoración de Comendador de la Orden de Guadalupe por Santa Ana.

99
virgen de Guadalupe el 12 de diciembre de 1837127 y posteriormente se siguieron realizando
eventos religiosos en este lugar.

La culminación como santuario guadalupano tuvo lugar el 29 de junio de 1855, fecha


en que el Sr. Lino García dona por medio de un testamento la imagen “de bulto” de la virgen
de Guadalupe a la Diócesis y a los procuradores de la fiesta, en este documento expone que:
[…] tiene una imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, de bulto, como de
vara y media de alto, con su camarín, y que la deja para que la coloquen en la
ermita que está contribuyendo de esta misma señora en la sección de su
propio nombre, y que quienes quiera esta misma imagen “consignara” los
mismos bienes, que con quinientos pesos, con cuyas réditos sirva celebrar el
novenario de misas en la misma capilla al beneficio de las almas, y demás de
su obligación” (AHDSC. Carp.4957, Exp.7).

Esta imagen fue entregada por medio de un vale a nombre del grupo de procuradores
del culto guadalupano integrado por el Sr. Carlos Ballinas y firmando de testigos el Sr. Mariano
Aguilar y el Sr. Ángel Utrilla según consta en uno de los documentos que se encuentra en el
Archivo Histórico Diocesano de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. La imagen fue
llevada finalmente a la capilla de Guadalupe, mientras que los $500.00 en efectivo fueron
utilizados no para la celebración del novenario de misas como había solicitado el donante, sino
para la compra de la labor de “Guadalupe” vendida por el Sr. Ramón Franco128.
Aunque hasta ahora no se ha presentado a la ermita diocesana el testamento
de que aquí se hace merito como debe hacerse con todo lo que contenga
cláusula de legados piadosas, pase al don albacea del finado don Dr. Lino
García para que diga si está disponible la imagen de nuestra señora virgen y
la cantidad de 500 pesos de que se habla en la cláusula que obra en este
expediente informando todo lo demás que le parezca. El exelentísimo y
altísimo sr. Obispo de esta Diócesis aquí lo decreto y firmo. Firma El
Obispo M.N Feliciano J. Lazos. Excelentísimo e ilustrísimo señor. La
imagen de la señora virgen de Guadalupe que dejo el finado señor D. D.
Lino García esta ya entregada, como veinte días ya, al cura del Sagrario y
parroquia de la sección de Guadalupe a quienes tiempo se ha dicho que
sobre la labor vendida a D. Ramón Franco están los quinientos pesos
reconocidos y el comprador y con la acta de la escritura pública de venta que

127 “Aproximándose el 12 de diciembre del corriente en que se celebra como patrona de la Republica Nuestra
Señora de Guadalupe, y cuya función se ha mandado celebrar para varias disposiciones, ese gozoso departamental
que desea solemnizarla del mejor modo posible, tienen el deber de dirigirse a los necesitados de su eficaz
cooperación, y asistencia con el objeto se dará este acto piadoso toda la magnificencia que le corresponde. Sírvase
Usted la audiencia los sinceros votos de aprecio y respectos que le tributo. Dios y libre el cristo. Diciembre 9 de
1837” (AHDSC. Exp.4957. 20).
128 Ver en Apéndice I: Testamento de don Lino García, para donar la imagen de la virgen de Guadalupe.

100
le otorga. Aceptada de la junta formal de esta obra (así como la de atrás) a su
tiempo lo hare y daré cita a V.E.Y de todo. San Cristóbal, 28 de junio de
1855. Excelentísimo e ilustrísimo señor José Domingo Robles (AHDSC.
Carp.4957 Exp.7).

Las festividades en honor a la virgen de Guadalupe fueron tomando más importancia


para algunos habitantes de la ciudad de San Cristóbal, además que al tener la imagen dentro de
la capilla implicaba que los habitantes de la ciudad y de la región comenzaran a rendirle culto y
concentrar las celebraciones en este lugar.

Entrada a la Garita, parte trasera de la


iglesia de Guadalupe S.C.L.C.

Fuente: S.C.L.C. s/f. Anónimo.

En los siguientes años, la zona de la sección de Guadalupe comenzó a poblarse y la


ciudad de San Cristóbal fue ampliando su caserío sobre las faldas del cerro donde se
encontraba la capilla de Guadalupe, así como la parte trasera donde era una de las garitas129 que
daba entrada a los comerciantes que llegaban de los pueblos indígenas de Los Altos de
Chiapas. Poco a poco la capilla de Guadalupe fue tomando un aspecto más ordenado, para
1880 el edificio comenzó a tener características de una iglesia formal y los habitantes de la
sección de Guadalupe organizaron la compra de una campana para ser colocada en la pequeña

129 “Los ingresos que el Ayuntamiento obtenía por los remates de los derechos cobrados en las garitas de
Guadalupe, San Diego y la Merced debido a las mercancías introducidas a la ciudad, constituían un componente
básico de los activos de la Tesorería Municipal, por lo que su reducción a partir de 1864 trajo importantes
consecuencias” (Blasco, 2005: 156).

101
iglesia130, esto pudo ser posible a medida que el crecimiento poblacional de esta zona comenzó
a ser más constante, lo que requirió que aumentara la atención en los servicios que pedía la
iglesia, entre ellos el apoyo de un sacristán131 y de un sacerdote que cubriera las necesidades de
la población cristiana.
Escaleras e iglesia del barrio de Guadalupe,
S.C.L.C.

Fuente: S.C.L.C. s/f. Anónimo.

Las solicitudes que le hicieron a la Diócesis fue el de crear la parroquia de Guadalupe


en la sección denominada con el mismo nombre, sin embargo esta idea no fue muy bien
recibida por la Diócesis, debido a que esto demeritaba la capilla de El Sagrario de la catedral en
donde se encontraba la antigua imagen de Guadalupe.
Debido a que esta se encuentra en las orillas de la ciudad. Se le pide al
obispo que pueda llegar un sacerdote a la parroquia. En vista de lo anterior
responden que no es posible debido a que sólo cuentan con un coadjutor y
que cubre las salidas a otras parroquias. Además que es imposible que parte
del Sagrario pase como parroquia en Guadalupe: “en esta virtud la erección
de la parroquia que se solicita no es sólo difícil sino hasta cierto punto

130 Acción de la iglesia de Guadalupe. En contestación a su respetable orden que recibimos el día de ayer,
pasamos a suplicar en nombre de la sección: que esta tarde pondremos la campana que se nos pide, caso de que
no la tomemos y si deja hacer en el acto, es porque estamos pendientes que el Sr. Don Vicente Corria, resuelva si
nos compra unas de metal que tiene en su poder. Quedo de Usted, San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 27 de
Abril de 1880. José R. Flores. Romulo Bermúdez (AHDSC. Carp.4959 Exp.6).
131 Oficio dirigido al cabildo de la iglesia Catedral de Chiapas, de la señora Guadalupe Gutiérrez. En donde pide
se le suba el sueldo de sacristán debido que es muy poco los seis pesos que recibe, ya que anteriormente recibía de
apoyo el préstamo de la casa llamada “de la Casa Mayor” y ahora ya no la tiene. Solicita su apoyo para aumentar
su salario. Año 1896. Firma Guadalupe Gutiérrez (AHDSC. Carp.4957. Exp.18).

102
imposible, pues la desmembración que se le hiciera de la sección de
Guadalupe en la parroquia del Sagrario para erigirla en parroquia será en
detrimento de la del Sagrario”. Firma Normita. Año 1896 (AHDSC.
Carp.4957, Exp.23).

La presencia de población radicada en esta zona de la ciudad fue cada vez más
constante y muchas de las tierras se comenzaron a lotear, sin embargo en 1921 la inundación
causó estragos significativos en la ciudad de San Cristóbal incluyendo el panteón municipal,
por lo que las autoridades municipales buscaron donde darle inhumación a los cadáveres tras el
percance. Ante esta disyuntiva optaron ocupar el antiguo panteón132 que se encontraba en la
zona del recién barrio de Guadalupe. Al enterarse los habitantes de este lugar de esta decisión,
se dieron a la tarea de elaborar un documento al gobernador para levantar la voz en contra de
tal propuesta. “Es decir, siete días después que el gobierno sancionara la medida municipal, los
vecinos de Guadalupe, con más de cuarenta firmas, envían una carta al gobernador del estado,
acompañada de un mapa a colores133, en la que protestan por la decisión y expresan sus
motivos de queja” (Lisbona, 2007: 87). En este mismo oficio se expuso que la zona estaba ya
delimitada por predios y que ya había demarcaciones de solares y calles, y que para esos
momentos ya se tenía registrado la ampliación de la iglesia en el Archivo del ayuntamiento
(Ibíd. 89).

Además de describir en este documento el terreno y la orientación del viento que podía
bañar de microbios a toda la población. Este evento natural puso en alerta a la población
asentada en esta zona para defender sus tierras así como para agilizar las acciones que
impulsaron la ampliación del área dedicada a la virgen de Guadalupe y la delimitación de calles
y solares del reciente barrio.

Finalmente la iglesia de Guadalupe fue construida a mediados del siglo XIX con un
estilo neoclásico, al respecto Juan B. Artigas la describe así:

132 En 1879 por orden de las autoridades de la ciudad se utiliza como panteón la parte de la colina de la sección de
Guadalupe, que en ese tiempo estaba casi despoblada. Sin embargo, al parecer se le atribuye a este hecho, la
epidemia de tifoidea que se propagó en el siguiente año, en 1880. Datos obtenidos en (Lisbona, 2007: 88).
133 Miguel Lisbona presenta en este artículo, el expediente que integra un mapa que se presentó al gobernador, en

el que se describe las delimitaciones de las casas y solar con el nombre de los dueños de estos, las calles y avenidas
del barrio y lo que correspondía a los límites de la iglesia, la sacristía y plazuela de Guadalupe, firmando al calce
los miembros del comité del barrio.

103
Al penetrar al templo desde el acceso principal encontramos el sotocoro de
madera sobre esbeltos pilares elaborados con el mismo material. La nave
ésta ornamentada con pilastras y nichos que no llegan a romper la
continuidad de los planos laterales y de esta manera se señala la profundidad
del edificio hasta el altar, perspectiva que queda reforzada por el ritmo de los
tirantes de las armaduras de la techumbre” (Artigas, 1991: 320).

Panorámica del Cerro de Guadalupe en S.C.L.C.

Fuente: S.C.L.C. s/f. Anónimo.

Para la década de 1930, la ampliación y desarrollo de la arquitectura de la iglesia fue


tomando una estructura más suntuosa, sobre todo a raíz de la celebración del IV Centenario de
las apariciones en el Tepeyac y la coronación de la virgen en la ciudad de San Cristóbal, se
realizó la construcción de la cúpula de la iglesia que albergó a partir de entonces a la virgen en
la sección de Guadalupe.
Los cultos tributados a nuestra Reina Guadalupana, en su Santuario de esta
ciudad, resultaron dignos de nuestra Madre. El 12 del presente mes. Todo el
día estuvo expuesto a la adoración de los fieles el Santísimo Sacramento.
Numerosas personas de toda la ciudad ascendían la colina que ésta situado el
santuario, para adorar a Jesucristo Sacramentado, y para visitar a la Reina y
madre de la Patria. Por la tarde terminaron los cultos con el canto de la salve
y bendición con el Santísimo Sacramento. LOS TRABAJOS. Los trabajos
que se están llevando a cabo en este Santuario para su ampliación y para
levantar su hermosura cúpula que le dará muy bonito aspecto, están bastante
adelantados. ¡Ojala todos cooperen con eficiencia, de modo que puedan ser
terminados dichos trabajos para la celebración del IV Centenario de las
Apariciones! Así tendrá nuestra Reina su digna morada en la Sección de
Guadalupe y en esta Ciudad!. 134

134 AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “En el Santuario de Guadalupe de esta
ciudad”, Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.35. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 16 de agosto de 1931, p. 4.

104
Escaleras e iglesia del barrio de Guadalupe en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015.

Aun después de haberse realizado la coronación de la virgen, los trabajos de


construcción de la cúpula siguieron después del mes de agosto de 1931, fecha en que el obispo
de San Cristóbal de Las Casas, el obispo Pbro. Genaro Anaya y el cura como rector de El
Sagrario celebraron la bendición de esta obra.
Con asistencia de muchos fieles, tanto del barrio de Guadalupe como de
toda la Ciudad de S. Cristóbal, se verificó la bendición de los trabajos ya
realizados en la Construcción de la Cópula del templo de Ntra. Señora de
Guadalupe. Eran las 10 horas del día veintitrés del mes de Agosto cuando
llegó al templo el Excmo. y Rvmo. Sr. Obispo Dr. Dn. Gerardo Anaya,
acompañado del M.I. Sr. Vicario General y del Sr. Cura Rector de El
Sagrario. Asistido por varios sacerdotes el Exemo. Sr. Obispo se revistió de
las vestiduras litúrgicas para entonar la salve, pero antes dirigió a los fieles
palabras llenas de emoción invitando a dar las gracias a la Santísima Virgen
por haber ella concedido el que pudiera continuarse los trabajos de la Copula
que ya van bastante adelantados, suplico también que todos cooperen con
sus limosnas en la construcción de las mejoras proyectadas a fin de que
cuanto antes la Reina de los Mexicanos tenga su hermoso templo entre
nosotros135.
Posteriormente a su edificación, la iglesia de Guadalupe ha tenido varios cambios y
reconstrucciones, entre ellos se han realizado modificaciones de ciertos espacios para darle

135AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Bendición en el templo de Guadalupe”,
Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.36. San Cristóbal
de Las Casas, Chiapas. 6 de septiembre de 1931, p. 2.

105
mejor uso o apariencia al recinto, como los arreglos que se hicieron al piso en 1939136, así como
la construcción sobre la colina de los 79 escalones que conducen al atrio de la iglesia. Ya en la
década de los 90s, el INAH se hizo cargo de los monumentos históricos como el caso de la
iglesia de Guadalupe, por lo que la junta de señoritas en el año de 1991 solicitó a esta
institución, la modificación de algunos espacios que fueron necesarios para el buen uso del
edificio, como el realizado en el patio interno que se encontraba entre el templo y la sacristía de
la iglesia137.

Estos eventos facilitaron la promoción de la virgen de Guadalupe en San Cristóbal de


Las Casas, a partir de ir institucionalizando su devoción y de propagar su imagen a través de los
diferentes actos que fueron realizados en la catedral, seguido por la iniciativa de los habitantes
con el aval de la misma Diócesis para construir la parroquia de Guadalupe que se encuentra
ahora en el barrio del mismo nombre y la donación de la imagen de bulto de la virgen de
Guadalupe, que es única en su estilo en el estado de Chiapas.

Estas acciones generaron una creciente devoción no sólo a los sancristobalenses, sino
para los pueblos vecinos de la ciudad e incluso para otras regiones del estado. Es por ello que
tanto la capilla dedicada a la virgen ubicada en la catedral138 como la que se encuentra en el
cerro del barrio de Guadalupe han impulsado que los católicos realicen prácticas devocionales

136 “Al Presidente Municipal Profr. D. Manuel Castellanos. Donde exponen que no se ha reparado, ni hecho
ninguna construcción; solamente se arreglaron algunos desperfectos de una parte del templo y arreglo de pisos de
ladrillo por madera. Por la junta vecinal. 1 de Diciembre de 1939” (AHDSC. Carp.4957 Exp.5).
137 Asunto: permiso de obras en el templo de Guadalupe de esta ciudad. C. Arq. Yolanda Cano Romero. Delegada
del Instituto Nacional de Antropología e Historia. S.C.L.C.
Por las presente letras solicitamos la autorización para arreglar la capilla de la virgen de Guadalupe, donde se
encienden velas y veladoras, capilla que se encuentra anexa al templo de Guadalupe, entre los muros del templo,
las paredes de la capilla principal anexo al templo y la sacristía. Era un pequeño patio que por necesidad y para
evitar daño al edificio principal se convirtió en capilla hace mucho tiempo. Tienen techo de lámina, carece de cielo
y sobre todo de seguridad. Se proyecta cambiar el techo de lámina por loza de concreto y si es posible a hacer una
especie de chimenea para eliminar el humo y finalmente reforzar los barandales de los corredores para más
seguridad del templo y anexos. Esperemos contar con el apoyo, autorización y asegurar del INAH, para su
conservación de nuestro patrimonio histórico. Será responsable inmediato de dicha obra la Junta Procuradora del
Templo, nombrada por el Párroco, portadores de la solicitud. Esperando contar con su amable atención,
quedamos a sus apreciables órdenes. 1991- Junta de Señoritas (26 de Dic/1991). 30 de Noviembre – Mudada de la
virgen y su novena, 8 de noviembre – mudada de la virgen, 9 de noviembre – festejos al beato Juan Diego, 10 de
noviembre – subida de inditos a 12 – 16 hrs. 9 de octubre de 1998 (AHDSC. Carp.4955, Exp.6).
138 Aunque hay que aclarar que la imagen que ahí se encuentra hoy en día no es tomada en cuenta por los devotos

sancristóbalenses durante los días de fiesta de la virgen de Guadalupe, al grado que durante esos días se encuentra
abandonada y solo es adornada con algunos arreglos simples que son colocados en sus costados.

106
a esta imagen y que sean ahora las nuevas generaciones quienes sigan fortaleciendo el culto
guadalupano.

Actualmente debido al creciente desarrollo urbano de la ciudad y de la zona del barrio


de Guadalupe fue necesario elevar a parroquia la iglesia de Guadalupe en el año 2001 al igual
que otras iglesias de las colonias y fraccionamientos de la ciudad como San Francisco, Fátima,
María Auxiliadora, San Juan Bautista, y recientemente San Judas Tadeo, lo que ha generado
que estas iglesias sean consideradas importantes para la celebración de liturgias a cargo de
sacerdotes establecidos en estos lugares para cubrir los servicios a la comunidad católica de la
zona de influencia.

2.5 Guadalupanos venid y organicémonos

Para la realización de las actividades y culto guadalupano, desde finales el siglo XVIII y
principios del XIX existió la figura de procuradores o miembros de la junta de festejos que
fueron apoyados por la Diócesis de Chiapas. Ellos estaban a cargo de la iglesia de Guadalupe y
eran originarios de la sección de Guadalupe o eran personas que recién se habían instalado en
el naciente barrio.

A raíz de la donación de la virgen de Guadalupe a la Diócesis y a la junta procuradora,


los habitantes de esta zona organizaron para los siguientes años una junta de festejos para
planear las fiestas de la virgen, ejemplo de ello fue la solicitud que hizo el Sr. Cura Vicario de la
Parroquia de esta ciudad, el Sr. Manuel Navarro que solicitó el 23 de noviembre de 1876 que
fueran los procuradores quienes se encargaran de visitar a los vecinos de toda la sección de
Guadalupe y cooperaran para la celebración.

107
Oleo de la virgen de Guadalupe ubicada
en la iglesia de Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Para este momento, la recién inaugurada capilla de Guadalupe estaba administrada por
la parroquia de El Sagrario ubicada en la catedral de la ciudad, por lo que el sacerdote debía de
trasladarse a la iglesia para celebrar ceremonias litúrgicas y apoyar a los vecinos en la
recaudación de fondos para las festividades. Sin embargo, al paso del tiempo al sacerdote le
llegó a causar molestias debido a que los horarios de visita a las casas eran por la noche y
dificultaba el regreso del cura al centro de la ciudad. Además que en esta zona, gran parte de la
población se encontraba dispersa y con escasos recursos económicos, lo que dificultaba la
recolección del dinero para la celebración de las fiestas. Por lo que el cura nombró a los
“colectores” que tenían el papel de visitar cada una de las casas de los habitantes de la Sección
de Guadalupe para recabar las limosnas139 para la iglesia.

Posteriormente las personas comenzaron a integrarse a las juntas como procuradores


de la fiesta, según uno de los expedientes que se encuentra en el Archivo Histórico Diocesano

139 Ver en Apéndice I: Carta al Comité de Procuración de la Sección de Guadalupe.

108
de San Cristóbal de Las Casas, relacionado a la conformación de la junta procuradora del
barrio de Guadalupe ya eran planeadas desde el año de 1869140.

Integrantes de la Junta de Señoras del barrio de Guadalupe.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

Durante los siguientes años se comenzaron a solicitar a la Diócesis actos litúrgicos141 en


la capilla de Guadalupe con el fin de incentivar acciones que atendieran tanto a la población
que ahí se asentaba, como para la celebración del 12 de diciembre. Como parte de los apoyos
que fueron pedidos al obispo en el año de 1879, fue que colaborara con el tres por ciento de
sus diezmos y fuera entregado a la Colegiata para organizar las festividades142. Estas acciones
tuvieron como objetivo que los habitantes que pertenecían a la sección de Guadalupe se

140 Para ese momento se encontró a cargo del Sr. Melesio Trejo, Sr. Francisco Domínguez, Sr. Eusebio Urbina,
Sr. Pedro Trejo y Sr. Vicente Sánchez como procuradores de las fiestas del barrio de Guadalupe, así mismo se
adjunta la relación de gastos generales de la parroquia de ese año. (AHDSC. Carp.5411, Exp.12).
141 “Solicitud para que se exponga el divino señor sacramentado el 12, 16, 17, 18, 19.durante y después de la fiesta
de la virgen de Guadalupe. Año 1867” (AHDSC. Carp.4957 Exp.8).
142 Como era Sagrada Mitra ésta cooperando voluntariamente con el tres por ciento de sus diezmos para el culto a
la Ntra. Sra. Madre de Guadalupe, la función que me corresponde el día 12 del próximo octubre, hará por cuenta
Colegiata, según lo que se tiene acordado y dicha función se verificara en los mismos términos y con la misma
solemnidad que los años anteriores. Lo que tenemos el honor de participar a N. S. G para su debido
conocimiento y para que se digne averiguar quién es el predicador, y quienes los representantes de esa sagrada
Mitra que N.S.G servirá nombrar, así como también decirnos si tiene una cantidad correspondiente al referido
tres por ciento de lo que podamos disponer para los crecidos gastos del sostenimiento del culto Divino en esta
colegiata. Con este motivo renovamos a N.S.G las protestas de la muy atenta consideración y distinguido aprecio.
Dios guie N.S.G, 12 de Agosto de 1879. Iltrisimo. Señor José M. Nulo. José María Rivera (AHDSC. Carp.4959
Exp.1).

109
inscribieran y participaran voluntariamente en la “Sociedad Católica” para establecer un grupo
de devotos para planear todo lo relativo a los eventos y las celebraciones guadalupanas143.

Poco a poco se fueron consolidando grupos que fomentaron la devoción a través de la


creación de juntas o procuradores de las fiestas, así como de la conformación de la
Archicofradía de Nuestra Señora de Guadalupe144 que contribuyó al impulso del culto
guadalupano en los siguientes años, logrando establecer uno de los eventos religiosos católicos
más importantes para la ciudad y para gran parte del estado.

Para los siguientes años, la conformación de las juntas fue avalada por la Diócesis de
San Cristóbal a través de un acta de nombramiento145 para la organización de los actos y los
cultos dedicados a la virgen de Guadalupe. Para ello se requirió de la participación de
diferentes juntas de festejos para distribuir las actividades durante los días de fiesta. Es así que
surgieron grupos de Jóvenes, de hombres (Junta Procuradora), de Señoritas y de Señoras que
tenían ciertas responsabilidades durante los quince días de la celebración a la virgen de
Guadalupe. Sin embargo hace aproximadamente ocho años que solamente se encuentra
organizada por la Junta Procuradora o de Señores y la Junta de Señoras debido a los constantes
problemas de organización con las juntas de jóvenes y de señoritas, por lo que el actual
sacerdote de la parroquia el Pbro. Guillermo Hernández Pinto decidió desintegrar esos grupos
quedando solamente con personas mayores la organización.

La participación de devotos dentro de las juntas puede tener muchos intereses, entre
estos se encuentran aquellos que se integran a las juntas por una promesa o devoción, por
herencia familiar o porque se lo proponen debido a que esta actividad genera prestigio social
dentro y fuera del barrio. Por lo que existe una lista de personas interesadas para obtener el
cargo de la presidencia o ser miembro de las juntas, que en ocasiones pueden estar en espera
hasta varios años.

143 El año de 1896 se invitó al coro de la iglesia de Guatemala para que participara en una de las ceremonias
dedicadas a la virgen de Guadalupe durante el aniversario de las apariciones en el Tepeyac. “Don Domingo
capellán del coro de esta Metropolitana iglesia de Guatemala como más allá lugar ante N.S. Para que cante en el
coro de la santa iglesia. Año 1896. Firma Domingo Mere. (AHDSC. Carp.4957, Exp.23).
144 Lista de colecta de los celadores de la archicofradía de Nuestra Señora de Guadalupe. Año 1920- 1921 – 1922.
Año 1920 (AHDSC. Carp.4957, Exp.9).
145 Foja que contiene el nombramiento de las personas que formarán la junta de festejos del Templo de Nuestra

Señora de Guadalupe. San Cristóbal de Las Casas, 8 de septiembre de 1954 (AHDSC. Carp.4960, Exp.45).

110
Carro alegórico con niños vestidos de
indígenas de la región.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.,


2016.

El comité de la junta de festejos está a cargo de un presidente, un vicepresidente, un


tesorero, un secretario y vocales con sus respectivos suplentes, los cuales debe ser validado por
el sacerdote además de levantarse un acta constitutiva146. Cada uno de ellos tiene funciones ya
determinadas por un periodo establecido de un año o más, como es el caso de la Junta Mayor
o Procuradora que tiene un periodo de tres años, los cuales son mayoritariamente hombres que
se encargan de los maitines, de las actividades de la plazuela, de los adornos de las calles y de
los arreglos materiales que se requieren en el templo a lo largo del año como el pago del aseo,
lavado de cortinas, arreglo de altares, lavado de los trajes de los sacerdotes etc. La Junta de
Señores se encarga de recabar fondos para el arreglo de la iglesia, apoyos que muchas veces
provienen de negocios o pequeñas empresas que solventan los gastos por algún deterioro o
remodelación que se le haga a los espacios de la iglesia.

146Cuando la junta se establece se levanta una acta constitutiva que firman el sacerdote y cada una de las personas
que van a desempeñar funciones. Una copia se envía a la curia, otra a la parroquia y otra le queda a la presidenta
de la junta. Al inicio de cada año el sacerdote les entrega una libreta para que registren los ingresos y egresos. Los
ingresos provienen de las limosnas, venta de vasos de veladoras y cera o parafina, los egresos se registran por el
pago de un salario mensual al campanero, sacerdotes, al velador y a otros colaboradores. Es posible que reciban
un salario los miembros de la junta, pero ellos lo niegan y se respaldan en afirmaciones como “colaboramos por
amor a la virgen” o damos un servicio a la comunidad y a Dios” (Escobar, 2002: 101).

111
Se encuentra también la Junta de señoras que son las encargadas de caminar de casa en
casa por los distintos barrios y colonias de la ciudad. Esta actividad inicia a partir del 10 de
mayo hasta antes del 30 de noviembre, este grupo se encarga de buscar los donadores de los
vestidos que tendrá la virgen de Guadalupe durante los días del 30 de noviembre hasta el 9 de
diciembre; así como las vestiduras del querubín, San Juan Diego, “la anda147” de la virgen,
perfumes, cabelleras, toallas de los santos de la iglesia, etc.

Además de organizar las festividades de los días 30 de noviembre, 8, 9, 10 de


diciembre, además del 24 de diciembre y del 6 de enero, durante estos días se realizan
diferentes actividades en las que piden el apoyo de las autoridades de algunos municipios o
personas con solvencia económica para cubrir los gastos que se requieren para cada evento,
como la contratación de grupos musicales, compra de bombas y cohetes, arreglos florales,
adornos de los carros alegóricos, la decoración de los altares y calles durante los días que a
estos grupos les corresponde148.

Otra de las actividades que tiene la presidenta de la junta de señoras es recibir y


custodiar los inmuebles y objetos149 con los que cuenta la iglesia, así como recibir los objetos o
alhajas que son propiedad de la virgen de Guadalupe. Entre ellas se encuentra aretes de oro
con diferentes piedras o adornos, medallas de oro con cadenas, dijes, anillos, pulsos y otras
joyas de plata o de “fantasía” que son obsequiadas a la imagen. Durante el periodo
comprendido entre 1988 – 1993 se tenían en resguardo 36 piezas, mientras que en 1998 habían
alcanzado 50 alhajas y joyas de la virgen de Guadalupe, sin embargo al parecer en los últimos
años, estas piezas han desaparecido y en los más recientes inventarios registrados en la
Diócesis de San Cristóbal de Las Casas y de la misma parroquia se han registrado una
disminución del número de piezas150.

147 Es una especie de mesa de madera con sostenedores en sus cuatro costados que sirve para colocar la virgen de
Guadalupe cuando hacen la procesión.
148 Ver (Escobar, 2002).
149 Ver Apéndice I: Inventario de los bienes que tienen el templo de nuestra Señora de Guadalupe, 4 de marzo de

1993 (AHDSC. Carp.4956 Exp.2).


150 Ver Apéndice I: Inventario general de las alhajas, que recibió la Junta Procuradora del templo de Nuestra
Señora de Guadalupe, por personas devotas de la virgen en el periódico del 4 de Octubre al 4 de marzo de 1993.
(AHDSC. Carp.4956, Exp.1)

112
Las actividades festivas tanto de la junta de Señores como la Junta de Señoras son
preparadas año con año, tareas en las que participan activamente y que son organizadas con el
apoyo del sacerdote Guillermo Hernández Pinto que controla y respalda el trabajo de las
juntas, así como también se encarga de que las juntas entreguen las cuentas al final de las fiestas
y sean debidamente aclaradas para evitar conflictos con los habitantes del barrio y quienes
participan en ella.
Niñas vestidas de indígenas de la región.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2016.

Durante los días de fiesta de Guadalupe asisten cientos de personas durante los
primeros días de diciembre, por lo que se requiere que cada junta participe y organice los
eventos; actividades en que se esmeran para que cada año sea único y muy suntuoso, ya que de
eso depende el prestigio social de los miembros de las juntas. Es de llamar la atención que la
celebración de la virgen de Guadalupe a diferencia de las fiestas de los barrios que se celebran
en la ciudad, es una festividad en que no sólo participan originarios del mismo lugar, sino que
asiste gran parte de la población local, sin importar el origen del barrio.

Entre las actividades que se llevan a cabo es la tradicional “subida de los niños” el día
10 de diciembre, esta actividad consiste en que los niños de todas las edades son “vestidos”
con indumentarias de indígenas de la región o como describe Taracena (2008) es: “una romería
de infantes ‘disfrazados de inditos’ [que] es parte de un rito que cumplen miles de padres

113
católicos no indígenas, quienes durante el embarazo o al cumplir el primer año de sus hijos han
prometido realizar dicho gesto como ofrenda a la virgen de Guadalupe” (Taracena, 2008: 131).
En el caso de San Cristóbal de Las Casas, los varones son “vestidos” con atuendos de
campesinos o con ropajes151 similares a Juan Diego (calzoncillos, camisa de manta, huaraches y
sombrero de paja), además de ir pintados en la cara con bigotes y barba, mientras que las
mujeres son “vestidas” con ropas de indígenas de la región (huipiles o faldas largas, blusas
bordadas, huaraches o descalzas), además de llevar trenzas, collares y listones en el cabello.

Estos niños llevan flores, velas, animales y algunos objetos que son ofrecidos a la
virgen al llegar al altar, una vez ahí, le avientan a los pies de la virgen pétalos de rosas o confeti
y esperan que les pongan “agua bendita” para que sean bendecidos. Así también se observa a
personas adultas y niños “vestidos” que participan en otros actos durante la celebración de la
virgen de Guadalupe como los desfiles que se organizan a lo largo de los diferentes días y en
algunos actos dentro de la iglesia.

Arturo Taracena (2008) señala que “vestir a los niños de indígenas” en la ciudad de
Guatemala data de finales del siglo XIX y que se fortaleció en el siglo XX, mientras que para el
caso de Chiapas pudo haber sido influenciada en el siglo XX, desde la Capitanía de Guatemala
al pertenecer previamente a esta región durante el periodo Colonial, sin embargo considero que
es necesario una investigación más profunda sobre el tema en la ciudad de San Cristóbal
debido que es una práctica religiosa muy difundida entre los creyentes guadalupanos no sólo en
la ciudad de San Cristóbal sino que se realiza en otras ciudades importantes del estado.

2.6 Santuarios e imaginería guadalupana.

Los santuarios en México, como en muchas partes del mundo, indica que son espacios
dedicados a vírgenes, santos o cristos que son concebidos como imágenes religiosas que le
asignan una presencia humana de la cual se le trata como un ente vivo, que piensa, siente y

151 Estos atuendos son vendidos en las tiendas de ropa tradicionales de la ciudad de San Cristóbal, fechas previas a
las fiestas guadalupanas.

114
mira pero que al mismo tiempo resuelve, atiende, da alivio y esperanza a quienes lo visitan. Así,
el “carácter multifacético de las imágenes religiosas actuales [muestra que éstas son] aquellas
que caminan, fundan, cuidan, emparentan, pelean y hasta comen, son narraciones cotidianas”
(Lisbona, 2012: 19), por lo que se convierten en contenedores de cientos de personas que se
acercan a estos lugares y en los que realizan infinidad de rituales y ceremonias particulares.
[El] componente fundamental de la operación ritual de los santuarios lo
constituyen las peregrinaciones, complejos y coloridos actos de invocación,
acción de gracias, “promesas”, restitución de la salud o de los dones, que
tienen en El Tepeyac su centro numinoso fundamental en tanto la Virgen de
Guadalupe (imagen – memoria) deviene punto culminante del catolicismo
mexicano (Báez, 1995: 48).

Altar principal de la iglesia de Guadalupe en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

En los altares y capillas dedicadas a la virgen de Guadalupe se pueden encontrar en


oleos, grabados y esculturas que han fortalecido su culto en cada pueblo, caminos, calles y en
cada rincón donde se procure su bendición y protección. Estos lugares se encuentran
custodiados por muchos y nunca están abandonados, las imágenes se encuentran rodeadas de
veladoras, flores y rosas que realzan su presencia. Los santuarios dentro de las iglesias o
pequeñas capillas tienen una posición igual o a la par que los santos o vírgenes patronos de los
pueblos.

115
Imagen principal en la iglesia de Guadalupe
en Comitán de Domínguez.

Fuente: Trabajo de campo en Comitán, 2016.

Para hacer un recuento de altares y templos dedicados a la virgen de Guadalupe en el


estado, hay que remontarse a las primeras iglesias que se establecieron en el periodo colonial en
Chiapas, principalmente en Ciudad Real, la antigua capital de la Provincia y actualmente San
Cristóbal de Las Casas, lugar que como ya se mencionó anteriormente, fue la ciudad en que se
construyó el primer santuario al culto guadalupano. Paulatinamente se difundió a otras
ciudades importantes del actual estado de Chiapas, entre ellas se encuentra la ciudad de
Comitán, una de las ciudades que está ubicada en los valles fronterizos con Guatemala. En este
lugar se construyó un templo dedicado a la virgen de Guadalupe en el año de 1907, ubicado al
poniente de la ciudad en el actual barrio de Guadalupe. La iglesia se encuentra sobre una de las
colinas que compone la ciudad con una construcción de estilo neoclásico, adornada en sus
ventanales con cuatro vitrales coloridos que evocan el milagro del Tepeyac. La virgen que ahí
se encuentra es un óleo sin mucho detalle, de aproximadamente 1.80 x 90 cm. de ancho. En
esta misma ciudad, también se encuentra un óleo de la imagen de la virgen de Guadalupe
dentro de la iglesia dedicada a Santo Domingo de Guzmán construida en el año de 1556. La
imagen de la virgen que está colocada en el altar principal se encuentra sólo por debajo del
santo patrón. Al parecer, la colocación corresponde a una etapa posterior a la construcción del

116
altar, ya que se nota el espacio reducido en que se encuentra; sin embargo, cuelga en sus sienes
una corona dorada detallada que se intuye que puede corresponder al siglo XVIII o XIX.

Altar principal de la iglesia de Guadalupe en Tuxtla


Gutiérrez.

Fuente: Trabajo de campo en Tuxtla Gutiérrez, 2016.

En otras ciudades del estado se comenzó a propagar el culto guadalupano durante el


periodo republicano, es decir, cuando Chiapas ya formaba parte del territorio mexicano. Tal es
el caso de la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, que después de haber sido nombrada capital del
estado de Chiapas, inició lentamente el culto a la guadalupana. Para mediados del siglo XIX, las
iglesias de la ciudad de Tuxtla pertenecían a la Diócesis de San Cristóbal. Inicialmente la capilla
dedicada a la virgen de Guadalupe fue atendida por el padre Montoya y estaba a cargo de la
familia del Sr. Ramón Martínez. En noviembre del año de 1953 se erige la iglesia como
parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe por el obispo de Chiapas el Mons. Lucio
Torreblanca y Tapia152 quien encomendó la iglesia a los Misioneros del Espíritu Santo. 153

152 El obispo tiene su nombramiento por parte del Papa en 1944, y toma posesión el 1 de abril de 1944,
terminando su mandato el 5 de junio del 1959, por su traslado a Durango.
153 En ese momento es nombrado como primer párroco el P. Agustín Álvarez. Mientras que para el 24 de mayo

de 1954 se nombró como segundo sacerdote al P. José Cabral Torres, que fortaleció la vida comunitaria e inició el
grupo de damas Guadalupanas, los Caballeros Guadalupanos, el Apostolado de la Cruz, las Hijas de María y un
grupo de catequistas, además de fundar el grupo “Acción Católica Mexicana” (A.C.J.M). Finalmente, el 10 de
mayo de 1959, el obispo Mons. Lucio Torreblanca y Tapia bendijo la primera piedra del nuevo santuario de
Guadalupe y llega el cuarto párroco el P. José Quezada Vázquez, quien tomó posesión el 23 de noviembre de
1960 hasta 1969 y asume la continuidad de la construcción del templo a cargo del Arq. D´Amico y el maestro de
obras el Sr. Álvaro Sol.

117
Fachada de la iglesia de Guadalupe en Tapachula, 2017.

Fuente: Trabajo de campo en Tapachula, 2016.

Para el 25 de julio de 1965, se celebró la consagración episcopal del Sr. José Trinidad
Sepúlveda, como primer Obispo de la Diócesis de Tuxtla Gutiérrez, que fue celebrado en el
templo de Ntra. Señora de Guadalupe154, y a partir de este momento, todas las iglesias de
Tuxtla dejaron de pertenecer a la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas. A 61 años de su
creación como parroquia de “Nuestra Señora de Guadalupe” perteneciente a la Diócesis de
Tuxtla Gutiérrez, el grupo de sacerdotes han fortalecido cada vez más la devoción a través del
trabajo pastoral de la nueva Diócesis para fomentar el guadalupanismo y fortalecer la práctica
católica en la región de influencia a través de una comunidad de comunidades155.

154 A partir de 1970 hubo otros sacerdotes que asumieron el cargo de sacerdote en diferentes periodos: El 4 de
julio de 1970 - 76 fue nombrado el quinto párroco, el P. Ignacio de la Fuente y de la Peña. Entre 1977 – 1980
estuvo a cargo de la iglesia, el P. Sergio Maciel Espinosa como sexto párroco; el 30 de mayo de 1980, inició el P.
Máximo Gutiérrez García, como séptimo párroco; el 9 de mayo de 1982, tomó posesión el párroco Miguel Alfaro
Araujo, quien fue el primer organizador de las peregrinaciones de las distintas iglesias de la ciudad al templo
parroquial de Guadalupe. El 5 de junio de 1989, inicia Ernesto Aguilar Mancera como noveno párroco; el 3 de
septiembre de 1995, es nombrado el P. José Castelán Serna, como decimo párroco, periodo en que inicia la
remodelación del templo de Ntra. Señora de Guadalupe. El 31 de julio de 2006, encomiendan la parroquia al P.
Marco Antonio Fájer Cardona, como undécimo párroco y el 9 de julio de 2013 fue nombrado el duodécimo
párroco, el P. Pablo Héctor González Alarcón.
155 Estos grupos están diseminados por zonas geográficas de la capital del estado. entre ellas se encuentran las

capillas que pertenecen a la Zona Norte Alta, como Nuestra Señora de la Soledad, ubicada en la Colonia Nueva
Jerusalén; San Judas Tadeo, ubicada en la colonia Jardines del Norte; Nuestra Señora de Lourdes, ubicada en la
colonia Democrática y Nuestra Señora de la Asunción, ubicada en la colonia Yukis. En la Zona Norte Media, se
encuentran las capillas de Santiago Apóstol, ubicada en la colonia Chiapas Solidario; San Isidro Labrador, ubicada
en la colonia Lindavista Shanká; Cruz del Apostolado, ubicada en la colonia Chiapas Solidario; San Pedro Apóstol,
ubicada en la colonia Potinaspak; Jesús de la Esperanza, ubicada en la colonia Adonahí; Nuestra Señora de las
Américas, ubicada en la colonia Las Américas. En la Zona Centro, se encuentran las capillas de la Santísima
Trinidad, ubicada en la colonia Paraíso; Jesús Santo Niño de Atocha, ubicada en el barrio de Niño de Atocha;
Jesús Señor de los Milagros, ubicada en la colonia Centro; y otras más de reciente creación (Datos obtenidos en el
portal de internet de la Parroquia de Guadalupe: http://parroquiadeguadalupe-tuxtla.org.mx/ 16 /09/16).

118
En Tapachula, la ciudad más importante de la zona del Soconusco, el culto
guadalupano ha adquirido en los últimos años una importancia regional debido a que se
encuentra ubicada en los límites de la Frontera Sur. Fue construida hace poco más de 60 años
por Decreto Oficial por parte del obispo de la Diócesis de Tapachula a cargo del Sr. Leopoldo
González González. El 9 de mayo de 2013 fue elevada al rango de Santuario Diocesano, el
cual se encuentra ubicado al Oriente de la ciudad de Tapachula. “La Villita de Guadalupe”
como se conoce popularmente a este lugar, ha sido remodelado varias veces para aumentar su
capacidad debido a que acuden católicos de la ciudad y de los municipios cercanos, pero
también de Guatemala, Honduras y El Salvador. Se calcula que durante los primeros días de
diciembre tiene una afluencia de medio millón de personas que asisten a visitar a la virgen.
Cabe mencionar que el obispo Genaro Anaya y Diez, coronó en 1931 a la imagen de
Guadalupe que se encuentra ubicada en la catedral de la ciudad de Tapachula.

Con relación a municipios de Chiapas con población mayoritariamente indígena, sobre


todo aquellas ubicadas en la zona de Los Altos del estado, éstos no han sido ajenos a la
influencia de la guadalupana, ya que desde el periodo poscolonial con las políticas eclesiásticas
y de tributo. Los dominicos que llegaron a estos lugares se dieron a la tarea de reubicar a la
población indígena, instauraron inicialmente el culto mariano y posteriormente la devoción
guadalupana en las iglesias y capillas de estos pueblos.

La presencia de la virgen de Guadalupe en estas iglesias es interminable debido a que


en todas ellas tiene un altar exclusivo con una escultura, una litografía e incluso un óleo que
datan principalmente del siglo XIX, además de contar con un mayordomo encargado de cuidar
y adorar a la imagen en la estructura de cargos político - religiosos. Entre estos pueblos
indígenas se encuentran como ejemplo: Zinacantán, Tenejapa, Chamula, Larráinzar, Pantelhó,
Chenalhó, Mitontic, Huixtán, Oxchuc y el resto de los municipios de la región.

119
Escultura de la virgen de Guadalupe en la
capilla de San Andrés Larraínzar.

Fuente: Trabajo de campo en Larrainzar, 2016.

En algunos de estos lugares cuentan con una capilla exclusiva para su culto que se
encuentra casi siempre en una de las colinas del pueblo. Esta particularidad que tienen las
capillas de la virgen de Guadalupe tiene sus orígenes principalmente al replicar las
características del cerro del Tepeyac. Esta representación geográfica de los templos se
reproduce en muchos de los pueblos de Chiapas, ejemplo de uno de ellos es el caso del
municipio de Las Rosas ubicado en los límites del Altiplano Central y de la Depresión Central,
aún perteneciente a la zona de Los Altos de Chiapas, donde se observa la construcción de la
capilla de Guadalupe en la colina más alta cercana al centro del pueblo que tiene grandes
escalinatas que conducen al atrio principal.

De igual manera, para el caso del municipio de San Andrés Larráinzar, ubicado al
Noreste de la zona de Los Altos, la presencia del culto guadalupano no tiene referencia
concreta pero se menciona que ya existía antes de 1924 ya que se encuentra una pintura de la
virgen dentro de la iglesia construida en 1911 dedicada al santo patrón San Andrés Apóstol. La
imagen es una litografía de la virgen de Guadalupe firmada por Gonzalo Carrasco S. J.156, de

156 Pintor Jesuita (1859 – 1936) de origen poblano, formado en la Academia de San Carlos, realizó trabajos
referentes a los temas religiosos.

120
aproximadamente 1.00 x 70 cm. y está al lado derecho de la nave principal. En la década de los
años treinta, Larráinzar como en muchos de los pueblos indígenas de la región, la organización
de las fiestas de los santos, los arreglos157 y la recolección de fondos para la iglesia estaba a
cargo de personas ladinas158, posteriormente fue el mayordomo de origen indígena quien se
hizo cargo de estas actividades.

Actualmente en la colina de la capilla fueron construidos 190 escalones que conducen a


la entrada del templo, dentro de éste se encuentra en la parte alta del altar una litografía de la
virgen de Guadalupe y debajo una escultura de la misma imagen que esta vestida con un
camisón en telar característico de los bordados de las mujeres sanandreseras y a su lado
derecho se encuentra una escultura de san Juan Diego de aproximadamente 60 cm. de alto
hecho de yeso y vestido con un camisón en telar. Esta característica entre las comunidades
indígenas de vestir a la usanza local a los santos y vírgenes es muy común, por lo que se puede
encontrar en varios municipios en Los Altos de Chiapas.

Uno de los recientes cultos guadalupanos en zonas indígenas es el caso de la localidad


de Pocolúm del municipio de Tenejapa. Lugar donde fue construida una réplica de la Basílica
de Guadalupe de la Ciudad de México, pero con dimensiones menores a la original. Esta
capilla surge a partir de un mito local en donde al parecer a una mujer procedente de este
mismo lugar, se le aparece la imagen de Guadalupe sobre una olla y mediante un sueño pide

157 Como menciona la Sra. Rubia Solís, que elaboró durante varios años “la guirnalda” de flores hechas de papel
para adornar el contorno del cuadro de la imagen de Guadalupe además de apoyar en otras actividades que se
requerían para los festejos que estaban a cargo de la junta procuradora. Además refiere que durante los años 90 un
grupo de aproximadamente 30 jóvenes indígenas y ladinos organizó una antorcha y visitaron por primera vez el
municipio de Villaflores. Durante los siguientes años visitaron Puerto Arista, Comalapa, Tila y Chetumal, en el
estado de Quintana Roo, entre otros lugares.
158 Por ejemplo, en el pueblo de San Andrés Larráinzar la organizaba una mujer que se encargaba de su cuidado y

de organizar la fiesta158. Así mismo, en el año de 1930, se tiene registro que la Sra. Epifanía Hernández era la
encargada de recaudar fondos para la coronación de la virgen de Guadalupe en San Cristóbal de Las Casas.158
Posteriormente en la década de 1960 fue construida en el pueblo de Larráinzar la capilla de Guadalupe sobre una
colina por un grupo de procuradores ladinos, Durante el siglo XIX, el grupo de ladinos controlaban económica y
socialmente a los indígenas de gran parte de los pueblos cercanos a Larráinzar. Pero además, se encargaban de
procurar y organizar muchas de las celebraciones religiosas, a través de juntas organizadoras que planificaban las
fiestas de los santos junto con la mayordomía de los pueblos de influencia. Entre ellos se encontraban el Sr.
Filiberto Pérez, Sr. Aurelio Barrios, Sr. Adolfo Solís, Sr. Ramón Hernández, Sr. Octavio Rojas, entre otros más,
que se dieron a la tarea de colectar dinero para levantar la pequeña capilla. El terreno fue donado por el Sr. David
Rojas, originario del pueblo y la litografía de la imagen que se colocó dentro de esta capilla, fue donada por el Sr.
Ramón Hernández, originario también de Larráinzar y que al parecer fue comprada en la Ciudad de San Cristóbal
de Las Casas, en ese mismo periodo. Durante los primeros años de la celebración a la virgen en esta capilla, se
realizaban los maitines el día 11 con un baile público en la fiesta del 12 de diciembre se llevaba a cabo una misa.
Ver (Paniagua, 2013).

121
que se le construya una capilla en ese lugar. Cabe señalar que existe un ojo de agua que se
encuentra cercano a la actual capilla y a la que se le atribuye un poder milagroso.

Capilla de la virgen de Guadalupe en


Pocolúm, Tenejapa.

Fuente: Trabajo de campo en Pocolúm, Tenejapa, 2016.

En este espacio se construyó un altar donde se encuentra resguardada la olla con la


silueta de la supuesta imagen de Guadalupe; este evento tuvo su origen aproximadamente en
1990, fecha en que la gente de la localidad celebra durante los primeros días de diciembre.
Durante el año de 2007 tuvo lugar en este sitio un evento muy significativo para exaltar el culto
guadalupano, debido a que se realizó el VI Encuentro Mundial de las familias organizado por
el Arzobispado Primado de México, en la que la localidad de Pocolúm participó al ser elegida
como uno de los lugares donde debían peregrinar las litografías de la imagen de Guadalupe y
de san Juan Diego, las cuales fueron bendecidas por el arzobispo Norberto Rivera Carrera, con
el fin de visitar algunos pueblos indígenas de México.
Como una preocupación de la pastoral Indígena en el contexto del VI
Encuentro Mundial de las familias es la evangelización. Por esta razón el 9
de diciembre de 2007 el Cardenal Norberto Rivera Carrera Arzobispo
Primado de México, bendijo las imágenes de Tonantzín Guadalupe y San
Juan Diego Cuauhtlatoatzin, y a partir de este momento comenzaron a
peregrinar entre las comunidades indígenas, con el fin de llevar un mensaje
evangelizador y rescatar los valores de la familia indígena (Jamaica, 2008: 29).

122
Entre los pueblos de la república mexicana que visitaron estas imágenes se encontraron
Huazamota, Durango; Ayutla, Guerrero; Tezcatepec, Veracruz; Tomatlán; Santa Cruz
Huejutla, Hidalgo, entre otras. La visita a la capilla en honor a la virgen de Guadalupe en la
localidad de Pocolúm tuvo la intención de ayudar a cohesionar más a las familias indígenas y de
fortalecer a través de su culto a la misma Iglesia católica en esta zona de Chiapas.
Los indígenas de Tenejapa y Pocolúm, Chiapas recibieron el mes de junio
estas imágenes peregrinas. Aquí se resaltó mucho la urgencia de unir a las
familias por la división provocada por la presencia de muchas sectas
protestantes. La fe a Tonantzin Guadalupe y San Juan Diego es muy grande
entre las comunidades indígenas donde Dios es el centro de su vida
(Jamaica, 2008: 30).

Cabe mencionar que estos eventos peregrinos tienen el objetivo que la Iglesia católica
se acerque a los municipios indígenas para tratar de afianzar las comunidades católicas,
precisamente en aquellas donde hay más influencia de intervención de religiones protestantes
como es el caso del municipio de Tenejapa, Chiapas.

En la iglesia dedicada a San Idelfonso que ésta ubicada en la cabecera municipal de


Tenejapa, se encuentra, como en muchas otras iglesias, un altar dedicado a la virgen de
Guadalupe. Son espacios guadalupanos que han generado la proliferación de organizaciones de
antorchas que planean visitar ciudades y pueblos dentro del estado de Chiapas, como también
algunas que peregrinan a la Basílica de Guadalupe en la ciudad de México.

Otro de los municipios de importancia guadalupana es San Juan Chamula, ubicado en


la zona Norte de la región de Los Altos de Chiapas. Es uno de los pueblos indígenas de mayor
tradición festiva y ritual. En la cabecera municipal se encuentra la iglesia principal dedicada a
San Juan Bautista; en este lugar se encuentra un óleo de la imagen de Guadalupe, de la cual no
se tiene referencia de la fecha de origen, pero según Arturo Taracena (2008) la pintura es un
óleo de grandes proporciones:
La hermosísima corona barroca que sobre su cabeza sostienen dos ángeles
indica que fue elaborado en el siglo XVIII. La tez del rostro sorprende por
su blancura y deja ver que es una representación criolla de la virgen. El
cuadro está también expuesto en un altar neoclásico, construido
especialmente para el mismo, en medio de la nave derecha del templo, lo
que puede indicar que fue puesto allí durante el siglo XIX o inicios del XX
(89 – 90).

123
La devoción a la guadalupana se ha difundido a lo largo de algunas de las localidades de
este municipio. Como ejemplo se encuentra algunas capillas que fueron construidas a lo largo
de la carretera que lleva a otros municipios colindantes más al Norte, como San Andrés
Larráinzar, Chenalhó, Pantelhó y otros. Entre éstas se encuentran las capillas de Tzalatón,
Lomhó, Tzajatetic, El Ciprés, Cruz Quemada, Macvilhó, Nichtón, El Callejón y Cruztón
pertenecientes al municipio de Chamula, así como otras comunidades que colindan con el
municipio de Tenejapa. Estos están ubicados a las orillas de la carretera, como la comunidad de
Culaltik donde actualmente se construye una capilla dedicada a la virgen de Guadalupe.

Capilla de la virgen de Guadalupe, Nichtón,


Chamula.

.Fuente: Trabajo de campo en Nichtón, Chamula.


2017

La construcción de estos templos es muy particular debido a que son construidos sobre
los terrenos que pertenecen a la casa del devoto, a un grupo familiar o de un linaje en particular
que celebra la fiesta de la virgen de Guadalupe. Estas son capillas pequeñas con dos torres son
pintadas casi todas de blanco o con colores patrios y tienen un pequeño campanario que son
adornadas en las puntas con jarros hechos de cemento elaborados rudimentariamente por los
indígenas de la región. Durante el primero de diciembre, todas las familias que organizan las
fiestas comienzan con la limpieza y pintada de la iglesia. Para el caso de dos de las capillas del
paraje de Tzajatetic159 se reúnen para lavar los manteles, cortinas y algunas prendas de la virgen

159Cabe mencionar que en una de estas capillas, aproximadamente a las 8 de la mañana comienzan las mujeres a
lavar la ropa, mientras que los hombres limpian y preparan las lonas que servirán para las antorchas que ahí se

124
de Guadalupe que son elaboradas por los chamulas con lana de borrego. Así como otros
grupos étnicos visten a la virgen con indumentaria característica del grupo al que pertenecen.

Otra de estas capillas chamulas, es la de la familia del Sr. Carlos de la Cruz Sánchez,
originario de Nichtón que en el año de 2010 construyó una ermita a la Metik - madre morena- a
donde llegan fieles de comunidades aledañas como Tzajaltec, Botatulon y el Ciprés, así como
también pasan devotos o antorchas que cumplen la manda en templos de San Cristóbal,
Comitán y Tila, principalmente.160

Para el caso de las iglesias y parroquias católicas que se encuentran dentro de la ciudad
de San Cristóbal de Las Casas, no falta que en su lista de santos y vírgenes que se veneran
dentro de los templos, se encuentre un altar dedicado a la virgen de Guadalupe.

Litografía de la virgen de Guadalupe en la


iglesia del Carmen, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

organizan. Estas actividades son acompañadas por una banda de música y un grupo de mariachis que tocan
algunas melodías. Alrededor de las 12 del día estas actividades terminan, quedando solamente las prendas colgadas
sobre lazos que son puestos frente a la capilla. Durante los días de fiesta, en estos lugares se reúnen las familias y
amistades que disfrutan de música, alcohol y comida. Algunas de ellas tienen organizados grupos de antorchas que
peregrinan por las ciudades importantes del estado, que a su llegada son recibidos, el día 11 de diciembre, con
grandes banquetes.
160 (Gutiérrez, Oscar. El Universal.11 de Diciembre de 2010).

125
Es por ello que después de haberse celebrado la coronación a la virgen de Guadalupe
en 1931, todas las iglesias que corresponden a la primera etapa de instauración del catolicismo
en la ciudad, colocaron una imagen de la virgen, ya que fue parte de la iniciativa que tuvieron
los sacerdotes de las parroquias para instaurar el culto guadalupano entre los feligreses de cada
templo. Es por ello que en el caso de la iglesia de San Francisco, se encuentra una imagen de
grandes proporciones con fecha de 12 de diciembre de 1931, que corresponde al año del
evento de la coronación. La virgen que se encuentra en esta iglesia fue también coronada por el
obispo Genaro Anaya y Diez en este mismo año, así también se encuentra la imagen ubicada
en la iglesia de la Merced, la cual ésta firmada por el Sr. J. Flores y pintada con fecha 1930.

El caso de la imagen guadalupana que está en la suntuosa iglesia y convento de Santo


Domingo de Guzmán, se encuentra al lado derecho sobre uno de los retablos laterales de la
nave principal, pintada en el año de 1945 por el artista Luis Jovel. Cabe mencionar que este
espacio originalmente no corresponde al cuadro de la virgen, por lo que se advierte que fue
colocada años después. Mientras que en la antigua iglesia del Carmen, se encuentra un cuadro
de la virgen en un altar elaborado de madera de cedro, de aproximadamente dos metros de
alto; sin embargo, este altar es reciente debido a que este edificio se quemó en el año de 1993
perdiéndose los objetos religiosos que se encontraban dentro.

A medida que la ciudad de San Cristóbal de Las Casas fue ampliando sus barrios,
colonias y fraccionamientos, se construyeron de igual manera iglesias, templos y capillas
dedicadas a distintos santos y vírgenes. En cada uno de esos recintos, uno de sus altares
principales está dedicado a la virgen de Guadalupe representada en óleos, litografías o
esculturas en yeso161. Estas imágenes son veneradas por los devotos del barrio, de la colonia o
de los fraccionamientos y son ellos quienes las mantienen con flores y veladoras durante todos
los días del año.

Imaginería Guadalupana en San Cristóbal de Las Casas.


Iglesia o Santo patrón Características de la virgen de Guadalupe
parroquia
Barrio de Mexicanos La Virgen de la Asunción Es una escultura de yeso de aproximadamente un
de María metro y medio de alto, posiblemente elaborada ya en el

161 Ver en Iconografía Guadalupana.

126
siglo XX. Se encuentra junto al pilar izquierdo que
divide del altar principal a la nave del templo.
Parroquia de San San Francisco de Asís Es una pintura sin nombre de autor, firmada en 1931.
Francisco En la que se inscribe de lado izquierdo, la fecha 12 de
diciembre de 1531, como fecha de conmemoración de
la aparición de la virgen de Guadalupe en la Cd. de
México y del lado derecho 12 de diciembre de 1931,
como la fecha de la coronación de la virgen en la
ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.
Iglesia de Caridad Virgen de Caridad Es una litografía de autor anónimo. Mide
aproximadamente casi dos metros de altura y un metro
de ancho. La cual cubre completamente el cuadro. Se
encuentra en la única capilla alterna de la nave principal
de esta iglesia, ubicada a un costado del altar, en donde
ésta el camarín elaborado de cedro con cuatro pilares a
sus costados.
San Felipe Ecatepec San Felipe Se encuentran tres litografías de diferentes periodos. El
cuadro principal es de aproximadamente 70 cm de alto
por 50 de ancho que se encuentra en un altar sencillo,
en uno de los costados de la iglesia. Sobresale una
litografía que tiene debajo de sus pies, las palabras “Non
Fecit Taliter Omni Nationi162”, cabe mencionar que este
cuadro es de color café por su posible antigüedad.
Además se halla una escultura de yeso de
aproximadamente dos metros de alto que es colocada
en la parte del altar principal de la iglesia, mientras que
las litografías se encuentran colocadas en el lateral
izquierdo de la nave.
Iglesia del Carmen Virgen del Carmen Debido a la quema de la iglesia en 1993, se volvió a
reconstruir el edificio, así como la colocación de
imágenes religiosas. Entre ellas está la imagen de la
virgen de Guadalupe, sobre uno de los costados de la
iglesia. Es una a oleo de 1. 70 cm. pintada por Carlos
Nava San Román en 1993. Acompañada de san Juan
Diego en forma de bulto.
Barrio de San Ramón San Ramón Nonato Es un cuadro de aproximadamente 90 cm. que está
colocada en la parte alta de lado izquierdo, en una de
las paredes de la nave de la iglesia. La imagen se
encuentra colocada en un cuadro de madera de cedro
con adornos sencillos.
Barrio de San Diego San Diego de Alcalá Es una escultura elaborada al parecer de yeso de
aproximadamente dos metros de altura. Se encuentra
en una esquina del lado izquierdo de la nave de la
iglesia.
Barrio de Santa Lucía Santa Lucía Es un óleo sobre tela, que se encuentra ubicada en una
de las laterales de la iglesia. Su altar es de color blanco
con detalles de representaciones de las apariciones de
Guadalupe a Juan Diego. La imagen es ovalada, de
aproximadamente 1. 50 x 1.00 posiblemente elaborada
en el siglo XIX. Dentro de la iglesia se encuentra una
pequeña pintura de la virgen de Guadalupe donada por
la señora Lucía Besner en el año de 2005 a la misma
iglesia.

162El 25 de mayo de 1754, el Papa Benedicto XIV confirmó el patronato de la Virgen de Guadalupe sobre la
Nueva España (desde Arizona hasta Costa Rica) y promulgó una Bula que aprobó a la Virgen de Guadalupe como
patrona de México, concediéndole misa y oficio propios.

127
Col. El Altejar Virgen de la Concepción Es una escultura de aproximadamente 1. 50 mtrs. de
altura, elaborada de yeso. Se encuentra colocada en la
parte alta de una tarima sobre una de las paredes
laterales de la capilla principal.
Col. 14 de Septiembre San Judas Tadeo Es una escultura de yeso de aproximadamente un
metro y medio de alto. Donada por la Sra. Berenice
Díaz de la misma colonia.
Col. La Isla Virgen de Santa Cecilia Es una litografía de aproximadamente 70 cm. de alto y
se encuentra sobre una repisa, a lado derecho del altar
principal.
Col. Los Alcanfores El Señor Crucificado Es un cuadro de aproximadamente 50 cm. donde sólo
aparece el rostro de la virgen, rodeada de tela color
dorado con algunos adornos. Fue donada por una
señora de la colonia La Isla, de la ciudad de San
Cristóbal de Las Casas.
Col. Cascajal San Pedro y San Pablo Es una litografía de aproximadamente un metro y
medio, es copia certificada y firmada por la
Arquidiócesis de la Basílica de Guadalupe. Esta imagen
fue adquirida por un antorchista en una rifa en la
ciudad de México. Al parecer estuvo perdida por
algunos años y fue rescatada por los dueños y colocada
en este pequeño templo. Imagen que tiene una
participación muy importante para el Grupo de
Antorchas Unidas de la ciudad de San Cristóbal de Las
Casas.
Fuente: Trabajo de campo en San Cristóbal de Las Casas. 2017.

En agosto del año 2010 se construyó una iglesia dedicada a San Juan Diego ubicada en
la zona Norte de la ciudad, el cual es celebrado el día 10 de diciembre. La iglesia se encuentra
ubicada en un espacio de asentamiento de población de migrantes indígenas de Chamula y de
otros municipios de la región que fueron expulsados principalmente en los años 70 por
conflictos religiosos, por lo que la iglesia de san Juan Diego compite con muchos de los
templos evangélicos que ahí se encuentran.

Los santuarios guadalupanos populares son lugares donde convergen devotos,


autoridades de la Iglesia e incluso comerciantes de todo tipo que se benefician con este culto,
principalmente durante los días de fiesta. “Los santuarios mexicanos (concreción del tiempo y
el espacio) conciertan manifestaciones devocionales e interés socioeconómicos, comúnmente
asociadas a identidades fundamentales de carácter local, regional o nacional” (Báez, 1995: 46).
Lugares que han generado al mismo tiempo, un sinfín de expresiones culturales y sociales de la
gente que los visita, dando lugar a producir diversas actividades vinculadas a estos espacios

128
como realizar un tipo de “turismo religioso”163, término que ha sido asignado para aquellas
personas que al realizar sus viajes a los sitios sagrados aprovechan para visitar otros espacios
turísticos del lugar.
Virgen de Guadalupe con vestimenta
de Tenejapa, Chiapas. S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2017.

Esta actividad ha ido en aumento sobre todo en los últimos años, de tal manera que la
movilidad de personas que visitan los santuarios responde de igual manera al número de
turistas que consume los espacios culturales y de recreación de los lugares donde se encuentran
los santuarios visitados164. Es por ello que participar en una peregrinación a un santuario o
centro religioso, incluye además de las actividades espirituales, el intercambio y contacto con
otros elementos culturales que el peregrino experimenta durante el peregrinaje (Luna, 2015). La
práctica de la peregrinación o de procesión será un referente que estará en constante
trasformación, debido a que las personas que visitan estos lugares generan formas diversas de

163 Tema que ha sido abordado por algunos especialistas y que requiere para éste caso, su análisis de manera
particular.
164 Los centros de culto religioso más grandes en el mundo cristiano atraen alrededor de 25 millones de

peregrinos (el 15% de los fieles migratorios de esta religión). A estos centros pertenecen Roma, con el Vaticano
(aproximadamente 8 millones), Lourdes, en Francia (6 millones), Fátima, en Portugal (4 millones) y Guadalupe, en
México (2 millones) (Serrallonga y Hakobyan, 2011: 64).

129
devoción, pero al mismo tiempo dan lugar a crear otras prácticas ligadas al ámbito económico
y social que están cada vez más relacionadas a los santuarios o sitios sagrados.

Altar en casa particular en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

Otra de las formas de expresar la devoción y difundir el guadalupanismo son las


celebraciones en decenas de casas particulares que resguardan imágenes antiguas y algunas más
recientes de la virgen de Guadalupe o del recién san Juan Diego, las cuales son celebradas en
formas diversas mediante rezos previos al 12 de diciembre, fecha en que algunos culminan con
grandes bailes y banquetes para sus invitados.

Si bien las festividades religiosas dedicadas a la virgen de Guadalupe se encuentran


ligadas inicialmente por la instauración e institucionalización por parte de la Iglesia chiapaneca
en la década de los treinta, actualmente ha propiciado el establecimiento de una imaginería
guadalupana en los templos e iglesias en el estado a través de oleos, litografías y actualmente de
esculturas en yeso. Estas imágenes han generado una proliferación de ceremonias y rituales
privados y públicos que continúan siendo un referente de creencia y práctica religiosa
relacionadas al culto guadalupano.

Muestra de ello son las festividades en las casas particulares de los devotos
guadulupanos, donde llevan a cabo rezos durante varios días y hacen ceremonias particulares
de acuerdo a su idiosincrasia. Muchas de estas celebraciones son realizadas desde varias
décadas atrás, debido a que muchas de estas imágenes corresponden a una imaginería que ha

130
sido heredada de sus padres o abuelos, por lo que guarda además una tradición devocional, una
vinculación con sus antecesores. Mientras que en las capillas que se encuentran en los pueblos
indígenas, ha propiciado la creación de grupos religiosos o juntas de festejos que se encargan
de organizar las fiestas para la virgen de Guadalupe, las cuales son organizadas al libre albedrío
y de acuerdo al nivel socioeconómico de los dueños de los santos.

Otro de los espacios guadalupanos, es sin duda aquellos sitios donde ha habido
“apariciones” de la virgen de Guadalupe en los objetos o lugares menos pensados. Tema que
no fue tocado en esta tesis, pero sin embargo, son muestra de la variada interpretación de los
devotos y de las maneras de vivir su religiosidad. En este lugar se construyen altares y capillas
dedicadas a ella, se oficializa localmente y se recrea un lugar de devoción, la cual construye
ritualidades y ceremonias.

Lo interesante de estas expresiones religiosas tanto de las casas particulares, de los


espacios de vírgenes “aparecidas”, como de las capillas en los pueblos indígenas, es que todos
estos lugares de devoción se encuentran libres del control de la Iglesia, situación que no regula
la conducta de los devotos, ni controla las ceremonias y rituales; por lo que son organizadas al
gusto y condiciones de los que ahí intervienen. Sin embargo, al perecer la Iglesia católica
tampoco se preocupa de la regulación de estos espacios, ya que son considerados santuarios
populares locales, mientras que para los devotos son considerados lugares sagrados debido a
que la deidad se hizo presente en ese lugar, motivo suficiente para que se genere un culto
religioso.

Estos espacios han propiciado infinidad de muestras devocionales en cada lugar de


culto, entre las más sobresalientes y multitudinarias se encuentran las procesiones y
peregrinaciones, en la que cientos de personas se movilizan por los diferentes caminos que los
llevan a los santuarios. Estos son un claro ejemplo de apropiación de las imágenes religiosas
entre la población católica, muestra de ello son las peregrinaciones guadalupanas con antorcha,
tema central de esta tesis, la cual denota una particularidad del culto guadalupano en Chiapas.

Si bien el culto guadalupano se fue fortaleciendo y difundiendo en todo el territorio


mexicano, para el caso de Chiapas se institucionalizó formalmente en el año de 1931 a raíz de

131
la coronación. Este acto no sólo sirvió para impulsar y entronizar a la virgen de Guadalupe en
cada casa, sino que fue utilizada de nuevo como en la época poscolonial para fomentar la
mexicanidad entre los feligreses chiapanecos ya en el siglo IXI.

Sin embargo, aunque el inicio del culto se haya dado principalmente en la ciudad de San
Cristóbal, muchas de las ciudades del estado construyeron iglesias, capillas y altares en sus
iglesias, además de crear grupos de devotos que estuvieron fomentando la devoción a través de
eventos, ceremonias y peregrinaciones que impulsaron a que las nuevas generaciones
prosiguieran su culto.

Es por ello que es trascendental conocer el origen del establecimiento de la virgen de


Guadalupe en Chiapas, ya que al paso del tiempo, puede pensarse que fue una imagen religiosa
que existió per se en este territorio, sin embargo como se ha mostrado esto no fue del todo así,
ya que es un culto instaurado en Chiapas que tuvo de fondo la construcción de la mexicanidad
chiapaneca y al mismo tiempo institucionalizar su devoción entre los feligreses católicos.
Acciones que requirió de la participación primeramente de la Iglesia y posteriormente de los
grupos apegados a ella como el grupo de Acción Católica, los cuales fueron apoyados por
cientos de devotos guadalupanos, los cuales lograron difundir el culto en todo el estado de
Chiapas.

132
IMAGINERIA GUADALUPANA
en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.

Fuente: Trabajo de campo en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 2017.

133
2da. Parte
El antorchismo

134
Capítulo III
La participación de Acción Católica
Venid, marchad, en apretadas filas,
En pos del ideal y la virtud,
Bañad en luz celeste las pupilas,
Alas al viento, bella juventud,
Alas al viento, bella juventud
(Coro del “Himno de la Acción Católica de Señoritas”).

A raíz del surgimiento y consolidación de la Asociación de Acción Católica Mexicana y la


influencia de las políticas ideológicas y organizativas que impulsó la Diócesis de Chiapas, se
inició la realización de peregrinaciones guadalupanas aproximadamente en la década de 1930,
en la que grupos de devotos se dieron a la tarea de visitar santuarios e iglesias importantes del
estado.

Para entender el proceso y conformación de esta práctica religiosa es importante


mencionar que la Iglesia católica en Chiapas fue establecida desde la Colonia en una sola
Diócesis ubicada en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas y fue “…hasta en 1957 [que] se
subdividió al crearse la de Tapachula y posteriormente, en 1964, la de Tuxtla Gutiérrez, capital
del estado. Es decir, que la Diócesis de Chiapas, fue desde su creación el centro más
importante de la actividad eclesiástica” (Rivera, 2005: 59). Esta particularidad contribuyó a que
esta Diócesis ubicada en la ciudad de San Cristóbal, tuviera durante varios años el control de la
feligresía chiapaneca, motivo por el cual las acciones que eran dictadas desde el centro de la
república a la Diócesis de Chiapas, se dispersaba en cada una de las parroquias y capillas que
tenían su jurisdicción, afianzando de esta manera los principios de asociaciones religiosas,
como sería el caso de Acción Católica.

Los datos dejan entrever que la instauración de la asociación de Acción Católica estuvo
vinculada como contramedida para dirimir aquellos añejos y constantes problemas entre la
Iglesia católica165 y el Estado mexicano, con la intención de controlar algunos espacios y

165 “Al hablar de la iglesia católica nos referimos a la institución de carácter universal y a la organización y
jerarquía eclesiástica, representada por la Santa Sede y las iglesias nacionales que dependen de ella y que, a su vez,
están internamente organizadas por regiones pastorales” (Rivera, 2005: 58).

135
sectores de la población católica. Eventos que generaron un periodo de constantes
enfrentamientos políticos e ideológicos durante las primeras décadas del siglo XX166.

Para el caso de Chiapas, la Iglesia tomó a la imagen de la virgen de Guadalupe para que
el pueblo chiapaneco fincara en ella su devoción y de esta manera, contrarrestar las políticas
antirreligiosas en el estado167, además de establecer grupos pertenecientes a Acción Católica en
todas las iglesias y parroquias del estado, para impulsar no sólo el culto guadalupano, sino
establecer con ellos, grupos ligados directamente a la Iglesia católica y formar parte del ejército
que ayudará a difundir el catolicismo en esas regiones.

Es por ello que las peregrinaciones guadalupanas se pueden entender como una política
religiosa que tuvo un trasfondo político en sus inicios, pero con el paso de los años se
convirtió en una práctica que ha tenido una continuidad y vigencia entre las nuevas
generaciones de católicos guadalupanos, tanto en San Cristóbal de Las Casas, como en algunas
de las regiones del estado de Chiapas.

3.1 De una acción política a una devoción de fe

Al referirme particularmente al establecimiento de la asociación de Acción Católica, ésta surgió


como un movimiento de católicos comprometidos a raíz de la posición del Papa Pío XI el 23
de diciembre de 1922, que dictó como parte de su primer Encíclica “Ubi arcano Dei” (Donde
está el tesoro de Dios), definiéndola como:
…la participación de los seglares católicos en el apostolado jerárquico para
defender los principios religiosos y morales, para ejercer acción social sana y
benéfica, bajo la dirección de la jerarquía eclesiástica fuera y sobre todo
partido político, con la intención de restaurar la vida católica en la familia y
en la sociedad (Pio XI, Encíclica Ubi Arcano De Concilio: 3).

166 Un ejemplo de ello será las políticas anticlericales en varias regiones del país o la Guerra Cristera en el centro
occidente.
167 En el año de 1954 la Acción Católica organiza la Magna Carrera Nacional de Antorcha de Fe que atrajo a

personas de todo el país, sembrando en ellos el espíritu por peregrinar a los santuarios o sitios sagrados
específicamente para los acejotaemeros (término empleado para los socios de la Acción Católica).

136
En la encíclica expuso la preocupación de la Iglesia en resanar los sufrimientos
derivados del hambre, el interés de las cosas materiales y otros problemas que los pueblos del
mundo estaban padeciendo. Ante esto, el Papa proclamó organizar a grupos de laicos para
respaldar a la Iglesia desde sus trincheras:
Nos referimos a las diversas iniciativas para aumentar la precisión en la
cultura religiosa y la santificación de los sacerdotes y laicos; matrimonios del
clero y de los laicos en apoyo de las misiones católicas en sus múltiples
actividades de expansión merced física y la redención moral, natural y
sobrenatural del reino de Cristo (Pio XI, Encíclica Ubi Arcano De Concilio, 23
de Diciembre de 1922).

Calificándola como “la Asociación Oficial del Apostolado Seglar”, motivo por el cual
se le conoce como el “Papa de la Acción Católica”, por ser el fundador de la misma (Flores,
1975: 176). El movimiento de Acción Católica tuvo impacto en muchos países de Europa,
como ejemplo de ello está el caso de Italia que durante el pontificado de Pío XI, se encontraba
en un periodo fascista y el modelo de Acción Católica que llegó a establecer un periodo de
maduración interna en un contexto político muy particular.

Ante este panorama, este nuevo modelo tuvo como fin la formación estrictamente
dependiente de la jerarquía al servicio de una misión evangelizadora, pero también impulsó de
manera sutil la creación de una educación política168. En este sentido, tanto en Europa como en
el caso de muchos de los países de América Latina, incluyendo México, la asociación de Acción
Católica fue el medio central para la confrontación directa entre la Iglesia y el Estado. A través
de Acción Católica se iniciaron movimientos de jóvenes, de organizaciones, de sindicatos, de
universidades que fueron bastiones importantes en la toma de decisiones políticas en sus
propios países169, pero que a la par provocó el rechazo del Estado y la represión contra la

168 En España se sustentará en una política hacía las mujeres. “La Acción Católica de la Mujer nació en la crisis de
la Restauración (1919-1920), recogiendo diversas iniciativas personales, pero desplegó su mayor actividad en el
tiempo de la dictadura. Los trabajos y conclusiones de la III Asamblea de la Asociación, en 1926, año también en
el que se promulgaron las nuevas bases de la Acción Católica española, revelan bien su orientación claramente
feminista: sus propuestas de reforma del Código Civil, su defensa de una política socio-laboral específicamente
destinada a las mujeres trabajadoras, uno de cuyos puntales era el seguro de maternidad; pero también, en su
dimensión política, su defensa del sufragio femenino y su colaboración activa en la política municipal (mujeres
concejales) y en la nacional (presencia en la asamblea nacional consultiva). Todo este impulso feminista católico
era claramente innovador en el contexto del catolicismo y de la mentalidad de la época, pero al mismo tiempo
encajaba plenamente con el proyecto” (Montero, 2007: 174).
169 En 1934, por ejemplo, fueron 600 los jóvenes reunidos en la Asamblea Nacional de los Jóvenes de Acción

Católica Argentina (JAC); en 1943 -en Mendoza- contaban ya con 8.000 miembros. Son los movimientos de
juventudes los que han abierto mayores campos y esperanza. La JOC brasileña tenía en 1953 quince mil

137
misma Iglesia. En el caso de algunos países de América Latina surgió este movimiento en
distintos periodos170. Para el caso de México la Acción Católica va a tener sus primeros
momentos en el año de 1903 durante el Primer Congreso Católico Mexicano donde se fundó
los círculos obreros, encomendados a los párrocos (Dussel, 1992).

En la construcción de este movimiento político religioso fue importante la


participación de Luis B. Beltrán y Mendoza, quien fundó la Liga de Estudiantes Católicos
apoyados por el Padre Bernardo Bergoend que conocía el funcionamiento de estos grupos en
Europa, con la aprobación del Arzobispo de México, el Pbro. José Mora y del Rio. A raíz de
esto, se crearon las dos asociaciones pioneras relacionadas a la Acción Católica en México. Para
el año de 1912 se formó la Unión de Damas Católicas Mexicanas, hoy la Unión Femenina
Católica Mexicana y el 12 de agosto de 1913 se creó la Asociación Católica de la Juventud
Mexicana.

Al restablecerse la vida política del país después de la Revolución Mexicana, se decretó


en 1917 la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en la que se hicieron
efectivas las leyes de Reforma, limitando a la Iglesia en la participación política del país a través
de los artículos 3º, 23, 25, 27, 130. En ese momento, el poder político estaba representado por
el Presidente Álvaro Obregón y en febrero de 1921 comenzó a establecer un régimen no sólo
anticlerical, sino antirreligioso. Durante su mandato se presentaron dos altercados en contra de
la Iglesia; el primero se dio cuando fue colocada una bomba en el Arzobispado y el segundo
fue en noviembre de 1921 en el que se pone otra bomba en la Basílica de Guadalupe para
destruir la imagen de la Virgen de Guadalupe171.

miembros. En 1961 cuenta con 120.000 miembros en más de 500 secciones; la JUC (universitaria) ha dado
nacimiento a diversos movimientos de opinión cristianos que paulatinamente ganan las elecciones en Chile,
Argentina, Brasil, Perú, incluso Bolivia, etc. Para quien conozca la historia Latinoamericana, los movimientos
universitarios son los signos de los grandes «cambios» históricos: puede ya hablarse de un cambio absoluto de la
opinión en Chile y próximamente en Argentina, Venezuela, Perú, etc. (Dussel, 1992:182).
170 En 1929, [la creación de] Acción Católica en Cuba; en 1930, en Argentina; en 1943, en Uruguay; en 1935, en
Costa Rica; en 1938, en Bolivia. Estos pocos ejemplos-límites indican las fechas de este fenómeno capital en la
historia de la Iglesia latinoamericana. Nacida principalmente según el modo italiano -aunque después de la
Segunda Guerra Mundial se verá la influencia francesa de la Acción Católica especializada-, Acción Católica
latinoamericana se adapta rápidamente a las situaciones nacionales de tipo mixto (así en Argentina, Uruguay,
Venezuela, Perú, Cuba, Bolivia, Brasil, Paraguay, Colombia, etc.) (Dussel, 1992:182).
171 “El 14 de noviembre de 1921 una bomba explotó junto al altar mayor de la Basílica de Guadalupe – quizá el

más sagrado de los lugares dentro de la comunidad católica mexicana- , la bomba había sido escondida en un
ramo de flores y su explosión detonó también la ira de millones de católicos mexicanos. La imagen Guadalupana
resultó ilesa, lo que fue interpretado por muchos como un milagro” (López, 2016: 31).

138
Contrarrestando a estas acciones, la Iglesia colocó la primera piedra del monumento de
Cristo Rey en el Cerro del Cubilete, en Guanajuato, el 11 de enero de 1923; evento que de igual
modo causó molestia al Estado por faltar a la ley, al celebrar un evento litúrgico en un sitio
público. Esto motivó la expulsión del Delegado Apostólico Monseñor Filippi junto con varios
obispos, además de presentarse constantes ataques contra la Iglesia como daños a templos, a
sacerdotes y a católicos que fueron violentados durante la “Guerra Cristera”172 en algunos
lugares del país.

Posteriormente, en el año de 1926, en medio del estallido de la persecución religiosa


(1926-1929) a cargo del General Plutarco Elías Calles, se intensificó la política en contra de
sacerdotes y la clausura de conventos y colegios, así como la suspensión de cultos religiosos.
Mientras que al interior de la misma Iglesia mexicana había desacuerdos entre los grupos, ya
que como menciona Andes Stephen (2010), la Iglesia se encontraba posicionado en una
“intransigencia – integral173, [fincada en] el nacionalismo católico desde la imagen de la virgen
de Guadalupe y la mexicanización de las enseñanzas pontificias, [elementos que] fueron los
fundamentos del catolicismo social en México” (Stephen, 2010: 78). Esto generó que el estado
trazara un particular proyecto sustentado a partir de una política de identidad antirreligiosa y de
un naciente indigenismo.

En ese polvorín político, la ACJM tomó la iniciativa de asumir la defensa de la religión


y de la Iglesia creando grupos de jóvenes como la Juventud Católica Femenina Mexicana y tres
años después, la Unión de Católicos Mexicanos que surgió a través de la asociación de Acción
Católica en el año de 1926 a través de la “Carta Apostólica Paterna Sane Sollicitudo”174. El

172 Periodo en que se efectúan el surgimiento de mártires de la Guerra Cristera, entre ellos el sacerdote jesuita
Miguel Pro, beatificado por Juan Pablo II en 1988 y Manuel Bonilla, que era uno de los jefes de la Asociación
Católica de la Juventud Mexicana (ACJM), entre una lista de veinticinco mexicanos que fueron canonizados en el
año 2000, que murieron en este período en México. Ver (López, 2016: 31 – 53; Carpio, 2016: 55 – 80) y para el
caso de la persecución religiosa en el estado de Chiapas, ver (Lisbona, 2008).
173Andes Stephen retoma la idea de Blancarte al relacionar el caso de México como la intransigencia – integral a

través de tres instancias “por un lado, los prelados que estudiaron en Roma en el Colegio Pío Latino Americano,
instituto papal para la enseñanza del alto clero de América Latina. Dicha educación era de corte ultramontano, un
tipo de tradicionalismo católico con fines de apoyar la autoridad suprema del papado. Por otro, las encíclicas
papales como, Aeterni patris (1879), Immortale Dei (1885), y Rerum novarum (1891). Y las órdenes de religiosos y
religiosas, especialmente los jesuitas y la educación de los jóvenes católicos (Andes, 2010: 78).
174 “Así que planea apelar únicamente al hecho de que Paternal corazón e instarlos a "Acción Católica" Cada día,
conspiración mutua y la formación en el rebaño confiado a su unidad de propagación. Tomar parte en la Iglesia

139
Episcopado Mexicano nombró una comisión especial para organizar los preparativos de
formación oficial del organismo. Sin embargo, esto fue suspendido por los problemas entre
Iglesia y Estado reanudándose hasta tres años después (junio de 1929), que se iniciaron los
preparativos para el establecimiento oficial de la Acción Católica en México, instaurando de
manera oficial los cuatro organismos de la Acción Católica Mexicana en la primera Junta
Nacional el 24 de diciembre de 1929.

El establecimiento de la Acción Católica en nuestro país estuvo a cargo de la


Conferencia del Episcopado Mexicano quedando este movimiento dividido en cuatro
organizaciones fundamentales:
1. La Unión de Católicos Mexicanos (U.C.M), que comprendía a todos los hombres
casado o viudos y a los solteros mayores de 35 años.
2. La Asociación Católica de la Juventud Mexicana (A.C.J.M) la cual estaba integrada por
solteros de 15 a 35 años; además de un grupo en preparación denominado “la
Vanguardia”, formada por los niños de 10 a 15 años.
3. La Unión Femenina Católica Mexicana (U.F.C.M), integrada por señoras de cualquier
edad y por señoritas de 35 años que tenían a su cargo la Agrupación de niños de
Acción Católica (A.N.A.C), de 4 a 10 años de edad, y aún para niños de 10 a 12 años,
en una Sección Suplementaria, de acuerdo con la A.C.J.M.
4. La Juventud Católica Femenina Mexicana (J.C.F.M), compuesta por señoritas de 15 a
35 años que contaban con dos Secciones preparatorias; a) la de aspirantes, para jóvenes
de 12 a 15 años; b)la infantil, para niñas de 7 a 12 años.

Estas agrupaciones fortalecieron el combate que había contra la Iglesia, por lo que
“[fue] indispensable la Acción Católica, porque, por una parte, peligra la fe y las buenas
costumbres, como consecuencia del laicismo, por otro lado, cada día es más reducido el
número de sacerdotes y, además, los católicos solamente unidos pueden hacer más eficaces sus

Católica, siento la profunda. En verdad, sobre todo en el presente, no las ventajas de una situación de este tipo, es
necesario en absoluto, hermanos y hermanas venerables, de modo que usted, al mismo tiempo, todos los hombres
del clero, y con las asociaciones católicas, y de todos los partidos políticos completamente abstienen, esas cosas
también se dice en relación con la causa de la fe católica, el enemigo la oportunidad de dar no a sus hijas a la vida
religiosa de su para ser considerado para cualquier lado político” (Papa XI, Carta de la Apostólica “Paterna Cuidado
Cuerdo”, 5 de Septiembre 1924).

140
esfuerzos para contrarrestar la acción unida de los enemigos de la Iglesia” (Flores, 1978: 175 –
176).

Al respecto, el presidente de la ACJM en Chiapas emitió un discurso en el año de 1945


relacionado a la fundación de esta agrupación católica mexicana, pero refiriéndose a la anterior
congregación que se había establecido en el país:
El 12 del presente mes de agosto la ACJM cumplió 32 años de existencia
[1913], cada uno de los cultos días son testigos elocuentes de páginas
gloriosas hinchadas de heroísmo. Así nació la primitiva ACJM, que bien se
puede definir como una reacción mejicana, patriótica de nuestra juventud
ante los ataques anti mejicanos y extranjeros de que fue y ha sido objeto
durante los ya largos 32 años de nuestro último periodo histórico. Esa
reacción, ese patriótico movimiento nacionalista y cristiano contrario ciento
por ciento al antiguo adormecimiento de las fuerzas sociales de la patria,
pronto se extendió por toda la gran extensión del suelo mejicano. Y cuando
el primitivo esfuerzo juvenil entro a formar parte de las milicias cristianas del
siglo XX, la Acción Católica, su eco llego hasta nuestras lejanas y olvidadas
tierras de Chiapas que no por ser olvidadas y lejanas dejan de tener un
historial glorioso digno de mejor suerte. Agosto 25 de 1945175.

Ante esta lucha de la Iglesia católica frente al Estado, se establecieron acciones que
buscaron la unión de los católicos mexicanos. Entre estas acciones se incentivó la devoción a
algunos santos o vírgenes como la guadalupana; los cuales se veneraron dentro de sus espacios
de oración, así como se impulsó a los grupos y su feligresía a guardarles fervor a estas
imágenes, para ello cada una de las asociaciones tuvo un santoral que veneraba y un lema que
los representaba.

Para el caso de la Unión de Católicos Mexicanos (U.C.M) se consagró al Sacratísimo


Corazón de Cristo Rey y tuvo como protector a San José y como patrono especial a San Pedro
Apóstol, además de reconocer a la Virgen de Guadalupe y su lema “Fortes in fide” (Fuertes en la
fe). Para la Asociación Católica de la Juventud Mexicana (A.C.J.M) se consagró a Cristo Rey y
proclamó como reina a la Santísima Virgen de Guadalupe y como patronos a San Felipe de
Jesús y demás mártires mexicanos y su lema era “Por Dios y por la Patria”. La Unión
Femenina Católica Mexicana (U.F.C.M) proclamó de igual manera, como patrona especial a la
virgen de Guadalupe y su lema era “Restaurarlo Todo en Cristo”. Finalmente, la Juventud

175 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.254. Exp.27).

141
Católica Femenina Mexicana (J.C.F.M) consagró sus actividades al Espíritu Santo y eligió como
Patrona y modelo a Santa Teresita del Niño Jesús y su lema era “Eucaristía, Apostolado,
Heroísmo” (Flores, 1978). Todos los grupos de acejotaemeros tenían asignado un “Himno a la
Acción Católica Mexicana”, un “Himno de la Acción Católica de Señoras”, un “Himno de la
Acción Católica de Señoritas”, y un “Canto Marcial Acejotaemero”176, los cuales se les
enseñaba durante las doctrinas que recibían cada semana.

Para organizar las actividades de este movimiento, se valió de personas que pertenecían
a la Acción Católica Mexicana y se creó para ello la “Junta Central” que estaba ubicada en la
Ciudad de México, la “Junta Diocesana” en cada región de la república y la “Junta Parroquial”
en cada municipio o localidad, todos ellos dirigidos por la dirección del V. Episcopado
Mexicano encabezado por el Excmo. Sr. Director Pontificio, que a su vez tuvo a su mando al
Obispo de la Diócesis y al sacerdote de la parroquia.

Para el caso de la Diócesis de Chiapas, se estableció aproximadamente en el año de


1930, año en que se organizó la Coronación de la Virgen de Guadalupe, un evento inicial en el
que participó la asociación de Acción Católica en Chiapas, la cual tuvo una participación
crucial junto con el Obispo Genaro Anaya y Diez de Bonilla177 en el año de 1945. Al respecto
mencionó el presidente de la Acción Católica, lo siguiente:
Los jóvenes de Chiapas, hace precisamente 15 años sintieron la llamada de
Dios y de México, y ante la disyuntiva de seguir la verdad o la doctrina
sofistica, prefieren mil veces cobijarse en los pliegos del pabellón de la patria.
Gloriosos y digna de encomio y gratitud son a este respecto las actividades
del Exmo. Sr. Anaya. Obispo a la sazón de Chiapas, no menos que del
infatigable luchador y apóstol del P. Lino Morales, fundador de nuestros
grupos de Acción Católica en estas apartadas regiones. Agosto 25 de 1945178.

Cabe mencionar que para el caso de la Diócesis de Chiapas fue en el mes de julio de
1945, cuando se instauró el comité de la asociación Juventud Católica Femenina Mexicana

176 Ver Apéndice I-. Documentos, oraciones y cantos guadalupanos: 44.- Himnos Acejotaemeros.
177 En uno de los recibos realizados por el Comité de la Coronación de la Virgen de Guadalupe, en el año de 1931
en San Cristóbal de Las Casas, aparece algunos de los gastos realizados por este grupo católico para la
organización de este evento: Vale #7. 24 de Octubre de 1930. Recibí de los señores José Velasco y la señora
Braulia Carballo para gastos hechos a la Acción Católica $64.05 (AHDSC. Exp.4958. 2).
178 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.254. Exp.27.

142
(J.C.F.M) aunque ya estaba establecida la Asociación Católica de la Juventud Mexicana
(A.C.J.M) como una de las asociaciones iniciales en esta ciudad.

Durante los próximos años, la organización de Acción Católica estuvo dedicada a


congregar a los sacerdotes de la misma Diócesis, para que fueran instruidos sobre los grupos
de Acción Católica y organizaran a los jóvenes en cada una de sus iglesias para asociarse179 en
estos grupos, al respecto el Sr. Ricardo Urbina (Coord. de la Antorcha de la ACJM) mencionó:
Esta surge acá cuando estaba don Lino Morales, luego vino el Monseñor
Rubén Ramos y otros que vinieron. Pero los que iniciaron fueron don Lino
Morales y Rubén Ramos. Y se encargaban de reunir y hacer las juntas en un
salón de la ACJM y ahí se organizaban para hacer las posadas aquí en San
Nicolás y en los barrios180.

Estos grupos de feligreses estaban presentes en las actividades de la misma Diócesis y


las relacionadas con la catequización mediante grupos de oración, penitencias, obras de piedad
(donaciones de desayunos y ropa a los niños pobres):
Se trata que cada socia escoja, para hacerlo objeto de su caridad práctica, un
ser desvalido, ya sea huérfano, una viuda desamparada, que le dedique
durante este año sus atenciones, sus visitas, sus palabras de consuelo y de ser
posible su ayuda pecuniaria. No se necesita de grandes recursos casi
podemos decir que no se necesita de ningún recurso pecuniario pues todos
podemos dar el obsequio de nuestras palabras cariñosas, de nuestro interés
afectuoso en sus penas”. Presidente Lic. Juan J. Correa Delgado. Secretario
Lic. Raimundo Prieto. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 17 de febrero de
1945181.

Además de realizar conferencias, celebraciones litúrgicas (primeras comuniones,


bautizos etc.), catecismos, campañas de alfabetización, se celebraban rezos a los santos de
acuerdo al calendario católico, entre otras actividades. Entre estas novenas y triduos se
enfatizaba la devoción a san José, a santa Teresita del Niño Jesús, santa Inés, Cristo Rey, san
Felipe de Jesús, san Francisco de Asís y Navidad así como a los santos más importantes de

179 Pueden ser socios de la A.C.M todos los católicos de cualquier sexo o condición que sean, con tal que llenen
los requisitos que marcan los estatutos. 1º. Profesar prácticamente la fe católica, así en público como en privado,
observando una conducta que no desdiga de ella; 2º. Guardar el debido respeto y sumisión a la autoridad de la
Iglesia; 3º. Conocer los estatutos de la A.C.M. y comprometerse a cumplirlos; 4º. Solicitar el ingreso por escrito al
Comité Parroquial respectivo, firmando el candidato y dos socios que lo presenten; 5º. Pasar tres meses de
preparación, a satisfacción del propio Comité. (Flores, 1978: 183 -184).
180 Entrevista realizada a don Ricardo Urbina, 20 de noviembre de 2015.
181 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.253. Exp.22.

143
cada una de las iglesias o capellanías, sin olvidar a la virgen de Guadalupe que se le reconocerá
como la patrona de esta asociación.
A los H. Comités parroquiales de la JCFM. Queridas hermanas. La Junta
Central desea que toda la ACJM honre a la Santísima Virgen de Guadalupe
con motivo del Cincuentenario de su coronación, con un acto de cada socio,
que a nuestro modo de ver será muy grato a los ojos de aquella que llena de
caridad bajo los cielos y no temió posar sus benditas plantas sobre las
piedras del cerro del Tepeyac, para decirnos a todos los mexicanos,
representados en la persona de Juan Diego cuanto nos ama sin ningún
temor y peligro, no debe afligirnos, estando nosotros en su maternal regazo.
Presidente Lic. Juan J. Correa Delgado. Secretario Lic. Raimundo Prieto. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 17 de febrero de 1945182

Aunque no fue hasta el periodo del Pbro. Lucio Torreblanca y Tapia, obispo de
Chiapas entre 1944 a 1959, cuando se empezaron a regular a los grupos de la Acción Católica
en las parroquias del estado. Entre ellos se registró el grupo parroquial de El Sagrario de la
Ciudad de San Cristóbal de Las Casas oficialmente el 3 de enero de 1944183. Al mismo tiempo
el Cura D. José Natividad Gordillo encargado de la iglesia de Zapaluta -hoy, La Trinitaria-
anunció en noviembre de 1944 el establecimiento de los grupos de Acción Católica dentro de
su parroquia.

A partir de este mismo año, otras iglesias tomaron el proyecto liderado por el obispo,
quien no dejó de incentivar a los curas para que iniciaran la organización de los grupos. Para el
26 de Octubre de 1947 quedó integrado el Comité Parroquial de la ACJM en la ciudad de
Tapachula a cargo del Sr. Antonio Aguilar Cruz184, así como también, en noviembre de 1947 se
fundó la agrupación en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez a cargo del Sr. Enrique Calderón Cruz185.

Para el caso de los Comités Parroquiales de la Unión Femenil Católica Mexicana


(UFCM), se establecieron en los municipios principalmente de: Acala, Bochil, Cintalapa,
Comitán, Coapilla, Chiapa de Corzo, Chilón, Copainalá, Buena Vista, Huixtla, Ixtapa, Jitotol,
Oxchuc, Ocosingo, Pueblo Nuevo Solistahuacán, San Carlos (Villa Altamirano), San
Bartolomé (Venustiano Carranza), San Cristóbal, San Fernando, San Andrés Larráinzar (a
cargo de la Sra. Dña. Rebeca C. González), Santa Catarina Pantelhó, Soyaló, Socoltenango,

182 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.253. Exp.22.


183 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.268. Exp.2.
184 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.139. Exp.29.
185 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.317. Exp.12.

144
Simojovel, Teopisca, Tonalá, Tecpatán, Tapilula, Tumbalá, Tenejapa, Tapachula, Tuzantán de
Morelos, Therán, Tzimol, Tila, Yajalón, Villa Las Margaritas, Villa La Trinitaria y Huixtán186.

“Capacitación de Catequistas Rurales” 17 de Sep. de 1951.


S.C.L.C.

Fuente: (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario.Carp.250, Exp.23).

Para difundir las acciones y actividades que se planearon para estos grupos de feligreses
se realizaron asambleas diocesanas que se encargaron de recluir a los representantes de Acción
Católica de cada parroquia, en las que se le dio instrucciones de las actividades que debían
seguir para lograr buenos resultados en su catequesis:
A los señores Asistentes Ecos. de la Diócesis. Habiendo trascurrido ya una
año después de las últimas Asambleas Diocesanas de la Acción Católica, y
debiendo intensificarse más y más esta obra de tanta importancia y que “la
suerte de la Acción Católica está en las manos de los Asistentes”, en tal
virtud el Excmo. Sr. Obispo ordena lo siguiente: 1º. Que en los pueblos de
la jurisdicción donde todavía no se ha organizado la A. C se establezca
cuanto antes, y en donde no se pueda trabajar con los hombres, se comience
con lo más rudimentario de A.C, teniendo en cuenta, que en todas partes no
falta católicos que de buena voluntad quieran ayudar en el apostolado.; 2º.
Que se le dé la debida importancia a la propagada católica como es: oír
cultura cristiana, hojas que difunde buena prensa, catecismo de A.C.
catecismo de controversia, etc.; 3º. Que la imagen de nuestra Señora de
Guadalupe que se coloque en todos los poblados, en donde todavía no está
expuesta a la veneración Publica y, como homenaje a Ntra. Sra. de
Guadalupe, se estudie el Concurso Mariano indicado por la A.C. ya que de
este estudio se espera grandes bienes en los fieles.; 4º. Que procuren
informar de sus actividades sobre los puntos ante indicados. Lo que me es
grato comunicar a Vdes. Dios nos Guarde a Ustedes por muchos años. San
Cristóbal de Las Casas, Chis. Abril 21 de 1945187.

186 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.252. Exp.77.


187 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.15. Exp.50.

145
Para el periodo de 1950 a 1952 quedó integrado el Comité de la ACJM como
representantes de la Diócesis de Chiapas, en el que se organizó desde el presidente hasta los
delegados y jefes de los puestos que componían la asociación188, para esto en el año de 1951 el
número de participantes dentro de la VII Asamblea de la ACFM eran 300 socias registradas
solamente en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas189.

En los siguientes años, se siguieron fortaleciendo los grupos de Acción Católica en


cada una de las parroquias de los municipios de Chiapas, además de realizar diversas acciones
dedicadas a exaltar el trabajo de A.C.J.M, como concursos para dirigentes en las que se les
reconocía con diplomas por su participación. Se realizaron también cursos de capacitación para
catequistas rurales y campañas de propaganda pensadas para las delegaciones de la misma
Diócesis, entre ellas estuvo las 12 delegaciones que se organizaron después de haberse
celebrado las reuniones de invierno denominada “Campaña sobre la Juventud, la Gracia y la
Ciudadanía”190. Además de realizarse algunas veladas a beneficio de Nuestra Señora de
Guadalupe en la que se programó actividades culturales (marimba, canciones, drama, etc.)191,
así como se festejó el día de las madres con las integrantes de A.C.F.M., en donde se realizaron
celebraciones religiosas y otros eventos que fueron más de carácter civil192.

188 A los HH. Comités parroquiales de la ACJM. Como resultado de nuestra última Asamblea 1950 – 52, quedo
integrado de la siguiente forma: Presidente: José Amezcua Manjarrez, Secretario: Mario Castellanos Molina, Pro
secretario: Raúl Jiménez Paniagua, Tesorero: Alejandro Moreno A., Protesorero: Noé Pascasio, Delegado de
Instrucción Religiosa: Amado de J. Zepeda, Delegado de Piedad: Eduardo Suarez Rivera, Delegado de Acción
Social. Jorge Sarquis Asis, Encargado de Boletín: Humberto Molina Molinari, Vanguardias: Ramón Becerra
Espinosa, Encargado de deporte: Jorge Ochoa Cruz, Jefe de MEP: Romeo Moscoso y Juan Sánchez, Jefe de
empleados. Abelardo Domínguez, Jefe de Obreros: Heriberto Velasco H., Jefe de campesinos: Mario Maldonado.
José Amezcua Q. Presidente Mario Castellanos Secretario. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.294,
Exp.3).
189 AHDSC, Fondo Curia de El Sagrario. Carp.52, Exp.77.
190 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.252. Exp.61.
191 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.248. Exp.5.
192 ¡Madres de familia! Como un sencillo homenaje a las Madres, roca firme en que se asienta la FAMILIA, la

U.F.C.M. Parroquial invita a todas las madres de esta ciudad, a las siguientes celebraciones: 9. 10 y 11 de MAYO.-
Triduo a la Sma. Virgen de Guadalupe: a las 6:30 a.m. misas y comunión, en la catedral con la asistencia colectiva
de las socias de U.F.C.M. 4p.m .- Conferencia solo para señoras en San Nicolás.10 de mayo.- Día de las Madres.-
a las 6: 30 a.m. se irá a misa en catedral por intención de las madres difuntas. Por la tarde.- Programa especial. 12
de mayo.- a las 3.30 p.m. - PEREGRINACION que partirá del Templo de la Merced a la Santa Iglesia catedral.
MADRE DE FAMILIA: Te invitamos No faltes. Lleva a tus hijos a Misa y a que reciban la Sagrada Comunión.
Asiste a las conferencia. Te esperamos. Lleva una flor blanca a la peregrinación. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. Mayo de 1957 “Restauración Todo con Cristo”. Unión Femenina Católica Mexicana. María Cristina C.
de Molina. Presidenta. Dolores C. de Pedrero.- Comisionada de Madres de familia. Vto. Bno. Mon. J. Rubén
Ramos.- Asistente Ecco. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.43. Exp.1).

146
Otro de los proyectos en que la Acción Católica de Chiapas participó fue la de
colaborar en la recaudación de joyas y dinero en efectivo para la realización de un cetro de oro
con piedras preciosas que fue colocado dentro del mismo marco que cubre la virgen de
Guadalupe con motivo del año Jubilar de su coronación:
A los H. Comités parroquiales de la JCFM. Nada más natural para una reina
que tener un cetro y nada más propio que este signo de su realeza le sea
ofrecido por sus mismos vasallos. Suplicamos y recomendamos a los
Comités parroquiales se sirvan invitar a sus sociales para reunir lo más
posible de pedacitos de alhajas, piedras preciosas y dinero en efectivo para
enviarlo a este comité a principios del mes de julio próximo, para que
enviemos todo esto inmediatamente que se reciba al Comité Central y pueda
así ser ofrecido este obsequio a la Sma. Virgen en los días de su fiesta, en
octubre. Presidenta Alicia Velasco, Secretaria Margarita Ruíz. San Cristóbal
de Las Casas, Chiapas. Circular No. 41. Asunto_: año Guadalupano. 6 de
abril de 1945193.

Ante esta solicitud, el Comité Parroquial de El Sagrario de la ciudad de San Cristóbal de


Las Casas envió las alhajas para el cetro de la virgen de Guadalupe el 23 de julio de 1945, a
través de Minerva Zenteno O., como presidenta de ACJM y María de la Luz Zepeda como
tesorera de la asociación de esta parroquia194 y fue recibido por parte del Comité Central, el día
28 de julio de 1945 a cargo de la presidenta la Sra. Alicia Velasco S. y la Sra. Margarita Ruz S.
como secretaria195.

La participación de esta asociación en México y principalmente en Chiapas fue


fundamental para la concentración de feligreses católicos, pero también para la exaltación de la
devoción principalmente a Cristo Rey y a la Virgen de Guadalupe, imágenes que se difundieron
en todo el estado. Entre esta difusión, se exaltaron las peregrinaciones a estos santuarios, los
cuales estaban incentivados por la Iglesia y por la asociación de Acción Católica, eventos que
fueron organizados desde el Comité Central y dirigidos a todos los comités diocesanos en toda
la república.

Entre estas invitaciones se encuentra la del año de 1948 en donde se invitó a todos los
presidentes diocesanos y parroquiales del país para asistir a la Gran Peregrinación a Santiago de

193 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.253. Exp.45.


194 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.253. Exp.87.
195 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.253. Exp.88.

147
Compostela, en España. En esta invitación, la comunidad de Acejotaemeros española invitaba
a jóvenes católicos a dar testimonio de fe y de hermandad junto a la tumba del apóstol, el cual
“era vínculo de la Unión Europea y capitán de la reconquista española”. Este evento tuvo
como propósito reunir a más de diez mil jóvenes de todo el mundo hispano y rendirle tributo
al apóstol de Cristo, llamado “hijo del Trueno”:
Para Nosotros Acejotaemeros este viaje puede revestir excepcional
importancia si hacemos un sacrificio procuramos concluir a Compostela un
buen grupo de mexicanos que lleve la representación de nuestro país tan
amado y admirado por nuestros compañeros los jóvenes españoles de
Acción Católica. Ciertamente que el viaje costará algo de dinero pero este
dinero estará bien empleado si esta peregrinación es, como debe ser, una
nueva inyección de vida para toda la asociación. No son motivos románticos
los que nos lleven a Santiago, sino una honda preocupación por ensanchar
los horizontes de nuestra acción apostólica juvenil de México.
Simultáneamente llevaremos al Apóstol a España y a la Juventud católica de
España nuestro testimonio de hermandad y de admiración pero con la
Admiración a María de Guadalupe vamos sobre todo a implorar nuevas
gracias sobrenaturales y temporales para la tierra que espera a nuestra
Asociación en México. Hagamos todos pronto un generoso sacrificio para
que México pueda presentar en Compostela una Delegación fervorosa,
numerosa, y bien preparada. Con un fraterno saludo para todos. Felipe
Pardinas Illanes, S. J. Asistente Eclesiástico General196.

Junto con esta invitación, los organizadores españoles enviaron un Pregón197 a todos
los “Romeros de Santiago de Compostela” para que conocieran la legendaria historia de las
peregrinaciones a este santuario y la invitación a que todos los mexicanos debían de ir a esta
peregrinación:
Jóvenes Católicos de México: debemos ir a Santiago!
Vamos a pagar al apóstol en nombre de nuestro pueblo, su fulgurante visita.
Vamos a decirle como amarraron a nuestros padres y cuanto le deben
nuestras tierras. Nuestra peregrinación a Santiago es el pago de una deuda
antigua y gloriosa. Con nosotros ira el mundo juvenil católico
iberoamericano.
De Santiago vamos a traer una nueva bendición: vamos a fortalecer juntos al
viejo sepulcro aquella antigua caballería, cristiana y recia, contra los peligros
del cuerpo y del espíritu; vamos a recibir de su espada de fuego el
espaldarazo de los caballeros de Cristo. Vamos a apretar las filas de la

196 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.277, Exp.16). Cabe mencionar que hay ocho ejemplares de esta
invitación en la carpeta donde se encuentra este expediente dentro del Archivo Histórico Diocesano de San
Cristóbal de Las Casas. Al parecer no fueron difundidas en todas las parroquias o fueron los sobrantes enviados
para su difusión.
197 Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos guadalupanos, No. 28.- Pregón: A los Romeros de Santiago

de Compostela.

148
juventud contemporánea que sigue a Cristo, por encima de las fronteras y
del odio.
Santiago, ultreya!...
Felipe Pardinas Illanes, S. J. Asistente Eclesiástico General198.

Ante la poca iniciativa de los acejotaemeros a participar a la gran peregrinación a


Santiago de Compostela, de nuevo se hizo la invitación a todos para llevar un grupo de
mexicanos más numeroso, debido a que el problema central era el económico. Ante ello, se
envió la invitación haciendo notar descuentos para su estancia en el lugar, que contó con un
ahorro en la cuota del pasaje en el que se propuso que de no alcanzar 10 personas, el costo
fuera de $4,500.00, y si eran mayor a 15 personas el costo bajaría a $3862.50 pesos.

Además que en esta invitación sugirieron que al no haber peregrinos podía buscarse a
uno de los socios con suficiente recursos económicos para que fuera en representación de la
delegación de Chiapas, esta persona podía ser elegida por votación o de la manera más idónea
para que asistiera a tan digno acto.

Ante esto, el Comité Diocesano de la ACJM de Chiapas pidió al señor Francisco


Santiago Cruz se sirviera representar a esta Diócesis “durante la peregrinación que el Comité
Central de la ACJM había organizado a la tumba del Apóstol Santiago de Compostela de
España. El día 5 de Agosto del año del señor 1948”199. La convocatoria para integrar esta
peregrinación se difundió a través de boletines y propagandas en las que se alentaba a que
todas aquellas personas católicas se unieran ante el llamado que el mismo Cardenal Primado
hiciera para la “Gran Peregrinación de los Jóvenes de Acción Católica al Año Santo de
Santiago”200. Pero no obtuvo respuesta dentro de la misma Diócesis de Chiapas, debido a que
no se contaba con el recurso suficiente para que fuera un representante a esta peregrinación:
Reverendo padre: Diremos aquí lo que estamos comunicando al H. Comité
Central que de nuestra Diócesis es muy difícil que alguno pueda ir como
peregrino a la tumba de Santiago apóstol en España, dado que, nuestra
probabilidades son muy raquíticas para hacer un desembolso como el que se
requiere para ir a España, por cuyo motivo, sólo podremos unirnos en
pensamiento y en oración a nuestros compañeros que puedan ir. “Por Dios

198 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.277, Exp.17.


199 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.293, Exp.14.
200 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.277, Exp.21.

149
y por la patria”. Amado de J. Zepeda O. Presidente. Indalecio Ovando M.
Secretario201.

Otra de las invitaciones que el Comité Central hizo a los socios de la Acción Católica
en el país, fue la de invitar anualmente a las peregrinaciones multitudinarias que hacían a otro
de los santuarios importantes dentro de la república; esté era el Cerro del Cubilete, lugar donde
se encuentra la veneración a Cristo Rey. Para estos casos, el Comité diocesano informó a cada
una de las parroquias que componía su Diócesis para difundir estos eventos202, a través de
boletines o propagandas que se hicieron para su difusión203. Ante esto, en octubre de 1950 la
Diócesis de Chiapas notificó al “Comité Central” de la imposibilidad de asistir a este evento. Al
parecer, muchas de las Diócesis del país no asistían regularmente a estos eventos que invitaba
la asociación, posiblemente debido a los gastos que esto implicaba, por lo que la Junta Central
a través de la Comisión de Propaganda ordenó a todas las juntas y a los comités diocesanos de
la república mexicana que al no poder asistir a esos eventos, debían organizar peregrinaciones
en los mismos santuarios marianos ubicados en su localidad o en su defecto a otro templo.

Al año siguiente (1951), se invitó de nueva cuenta a la Diócesis de Chiapas para que
asistiera a la peregrinación a Cristo Rey en la ciudad de Guanajuato, además de solicitar apoyo
para la construcción de dicho monumento. Al respecto se instruyó a que se difundiera la
información a cada una de las socias de la Asociación Católica Femenil Mexicana de la
Diócesis para su conocimiento:
Circular No. 1514 de octubre de 1951. A las Señoritas Presidentas
Parroquiales de la ACFM. Queridas hermanas: Peregrinación a Cristo Rey.
El último domingo de octubre se efectuara D.M. La peregrinación a la
Montaña de Cristo Rey, por lo que hacemos de su conocimiento de ustedes
para que hagan la mayor propaganda posible, y si Dios quiere vayan muchos
chiapanecos a Guanajuato. Las personas que fueran deberán salir con el
debido tiempo, para llegar con oportunidad. Para la terminación de este

201 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.277, Exp.29.


202 A los presidentes de los HH Comités Parroquiales. Adjunto a la presente le enviamos copia de la Circular que
con motivo de la peregrinación al Cerro del Cubilete, nos ha enviado el Comité Central, para que se las enviemos.
En caso de que haya alguno de ustedes que desee ir a tan famosa peregrinación puede dirigirse al Apdo. # 1647,
de México DF. Para que les envíen pase personal del desayuno que se efectuara el domingo 29, fecha de la
peregrinación. Por otra parte comunicándoles que debido a disposiciones del Excmo. Prelado, el asistente de la
ACJM Pbro. Manuel Urbina, fue cambiado a Tapachula, por lo cual ha sido nombrado asistente Interino el
párroco de esta ciudad Pbro. J. Rubén Ramos. José Amezcua M. Presidente Raúl Jiménez Jr. Secretario. 21 de
Octubre de 1950 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.294, Exp.3).
203 Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos guadalupanos, No. 31: Propaganda al Cerro del Cubilete.

150
monumento piden un óbolo que se les suplica enviar o llevar, a Tabasco
264. Srita. Amelia G. Saravia México D.F.204

Muchas fueron las acciones que la asociación de Acción Católica formalizó en el estado
de Chiapas, lugar en el que este movimiento encontró tierra fértil para que se estableciera por
muchos años, logrando con ello que la Diócesis encaminará a su feligresía para establecer
grupos en todas sus parroquias y templos. Se configuró un ejército que sirvió como medio para
la catequización de la población católica de Chiapas, y a su vez para apoyar económicamente a
los proyectos que la misma Iglesia iniciaba. Entre estos, se encontraban aquellos en los que
incluía a los socios de la Acción Católica de toda la república mexicana.

Como por ejemplo, el de 1951, en que se llevó a cabo la VII Asamblea del Comité
Central de Acción Católica en la que se invitó a todos los Comités Diocesanos a constituir un
Comité Pro construcción de la Plaza Monumental de las Américas, en la basílica de Guadalupe
en la ciudad de México:
Por acuerdo del señor cura, este comité se constituyó también en Comité
Parroquial Pro construcción de la Plaza Monumental de las Américas en la
Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, habiéndose repartido las cartillas
correspondientes y enviándose hasta la fecha al Comité Diocesano del
mismo objeto, la cantidad de $3670.00, que es lo que se ha vendido de
timbres”. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas a Septiembre 23 de 1951.
Minerva Zenteno O. Presidenta205.

En los siguientes años, muchas fueron las peregrinaciones que la Asociación de Acción
Católica organizó con el afán de difundir la veneración a los santos, así como incentivó a los
feligreses a asistir a peregrinaciones a los santuarios de Cristo Rey y a la Basílica de la Virgen de
Guadalupe, además de servir de apoyo económico y pastoral en las acciones que emprendieron
y en las que la Diócesis de Chiapas estuvo presente.

204 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.268, Exp.3.


205 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.268, Exp.3.

151
3.2 Peregrinaciones de Acción Católica de Jóvenes Mexicanos (ACJM).

Desde la época prehispánica, el cerro del Tepeyac ya era antiguamente un sitio de peregrinaje
dada su significación como lugar sagrado, pero al consagrarse el milagro guadalupano, miles de
personas fueron a visitar a la virgen de Guadalupe en el lugar donde se originaron las
apariciones a Juan Diego. Para el caso de las peregrinaciones de Chiapas a este sitio, datan de
1904 a través de la Diócesis y en la década de los 30, con la participación de la Asociación de
Acción Católica, eventos que marcaron el inicio de futuras visitas de otros grupos de
peregrinos procedentes de distintas parroquias e iglesias del estado.

Como he señalado en los capítulos anteriores, la virgen de Guadalupe se ha convertido


en un icono nacional importante para la construcción de la nación y para fortalecer la identidad
mexicana, pero al mismo tiempo fue usada para representar la unión cristiana y la expresión del
mestizaje mexicano.
Este suceso, conocido al principio de muy pocos y al parecer sin
importancia alguna para la patria que nacía, fue nada menos que el origen de
nuestra nacionalidad mexicana y el principio de nuestra cultura cristiana y
latina que nos ha diferenciado siempre como una sociedad perfectamente
independiente y real. Consta en efecto históricamente que lo que fue
humanamente imposible antes de 1531, fue divinamente posible después de
esa fecha, y lo que fue posible fue nada menos que nuestra anexión a la
cultura occidental emanada de la vieja sabiduría española, rama gloriosa del
más antiguo tronco cristiano. Justamente, pues a María de Guadalupe se la
ha llamado LA VIRGEN QUE FORJO UNA PATRIA. Domingo 26 de
agosto de 1945206.

Es por ello, que la Iglesia católica a través de la Diócesis de Chiapas tomó a esta
imagen para establecer lazos de unión entre Chiapas y México, sobre todo en los años
posteriores a su anexión. Ante esta relación, la Diócesis buscó acercar a su feligresía con la
virgen de Guadalupe, al celebrarse la coronación a María de Guadalupe en el año de 1895, en el
Tepeyac. Durante esta celebración se dispuso que todos los obispos de México realizaran
peregrinaciones a este lugar:
Próspero María Alarcón y Sánchez de la Barquera, arzobispo de México, en
nombre y con la autoridad del romano Pontífice, ayudado por José Ignacio
Arciga y Ruíz de Chave. Arzobispo de Michoacán, coronó a María, Señora

206 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.136. Exp.2.

152
de Guadalupe, Reina de México por siempre. A iniciativa del obispo de
Querétaro, Rafael Sabás Camacho, todos los obispos presentes depositaron
sus báculos y mitras a los pies de la imagen guadalupana. También propuso,
y fue aceptado, que cada diócesis mexicana visitara en peregrinación anual el
Tepeyac (Zenón, 1995: 116 – 117).

Diez años después se organizó otra visita a la basílica de Guadalupe apoyados como era
común por la misma Diócesis de Chiapas, esta peregrinación fue organizada por el obispo de la
Diócesis Don Francisco Orozco y Jiménez207.
En 1904 organizó la primera delegación de peregrinos indígenas que
condujo hasta la Basílica de Guadalupe en la Capital de la República;
aprovechando su estancia allí solicitó audiencia con el presidente Díaz para
plantearle la situación de abandono y miseria en que se encontraban los
indios chiapanecos, reclamando para ellos justicia y atención (Esponda,
1999: 15 – 16).

Este acontecimiento aunque no correspondía a un posible evento político, exaltó la


relación simbólica que mantenía la virgen de Guadalupe con la población más desprotegida, y
que en este caso fueran además indígenas, fue la razón más adecuada para que se acercaran
primeramente a la “morenita del Tepeyac” y luego al Estado para plantear sus necesidades.

La constante catequización guadalupana que hizo la Acción Católica a través de las


visitas al Tepeyac, eran también una forma de llegar a otros sectores sociales de la población
chiapaneca. La Diócesis de Chiapas tuvo dentro de su administración territorial a zonas
pastorales con una presencia muy importante de población indígena208. Según registros de
archivo, se menciona que en esta época los indígenas no tenían mayores referentes sobre el
milagro del Tepeyac, por este motivo la Iglesia insistió que “en las chozas de los indios no
faltara la guadalupana”209. Acciones pedagógicas como estas, permitieron en los años siguientes
crear las condiciones y los elementos necesarios para que los devotos comenzaran a sentirse
cada vez más atraídos por conocer el “milagro guadalupano” y por ende, fue el momento en

207 Uno de los primeros obispos del siglo XVIII, que llega a la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, el 30 de
Noviembre de 1903, quien se le reconoce por su labor humanista. Fue reconocido a nivel nacional por sus obras
que llegó a realizar a estas tierras en favor de la Iglesia y de interesarse de las condiciones del pueblo indígena.
208 “En el Sureste mexicano existen dos de ellas: la Región Pastoral del Sureste que abarca los estados de

Campeche, Yucatán, Tabasco y Quintana Roo y la Región Pastoral Pacífico – Sur integrada por la Diócesis de
Oaxaca, Tehuantepec, Los Mixes, Tuxtla Gutiérrez, Tapachula y San Cristóbal de Las Casas; regiones casi todas
con un alta concentración de población indígena” (Rivera, 2005: 58).
209 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.43. Exp.12.

153
que la Iglesia de Chiapas promocionó las primeras “visitas” que partieron de la ciudad de San
Cristóbal de Las Casas al Cerro del Tepeyac, sitio emblemático del surgimiento de esta
devoción.

Pasaron 36 años después de haberse celebrado la coronación a la virgen de Guadalupe,


y al cumplirse los cuatrocientos años de las apariciones en el año de 1931, se organizó otra
visita importante de devotos guadalupanos de distintos rincones de la república mexicana, así
como de muchas otras partes del continente210.
Toda la América Latina se aprecia a celebrar dignamente el IV Centenario de
las Apariciones de la Sma. Virgen de Guadalupe. De varias nacionalidades
hermanas vendrán numerosas peregrinaciones a postrarse ante la imagen
secular de Nuestra Morenita para estrechar más los vínculos de la raza Latina
y para manifestar su amor a la que es Patrona de toda América Latina211.

Muchos fueron los países que peregrinaron hacía el Tepeyac, entre ellos participaron la
delegación guatemalteca a la Basílica bajo la dirección del Arzobispado el Excmo. Sr. Luis
Durou, que la organizó en dos momentos. La primera el día 6 de septiembre de 1931 en donde
asistió solamente el Sr. Arzobispo y la segunda el día 12 de diciembre donde asistieron todos
los devotos a la Solemne Misa Pontificial en la Basílica que fue organizada exclusivamente para
el vecino país de Guatemala212.

En el año de 1943 se registró una peregrinación organizada por la delegación Chiapas al


Santuario de la Virgen de Guadalupe, motivada hasta cierto punto por los problemas que se
vivían en Europa por la Segunda Guerra Mundial. Esta se llevó a cabo el día 24 de Octubre
para solicitar “la intervención divina de la Virgen para impetrar la paz del mundo y pedir por
nuestras necesidades”. En este evento, la delegación chiapaneca de la Acción Católica elaboró

210 Los informes que constantemente recibe el Comité Oficial de Peregrinaciones Guadalupanas, son prueba
segura del general interés que existe entre los católicos de toda América para venir a México formando grandes
peregrinaciones a postrarse a los pies de la Inmaculada del Tepeyac con motivo del IV Centenario de sus
Apariciones. (AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Divinidad de la Iglesia católica”.
En: Boletín La Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.32. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 05 de julio de 1931, p. 3).
211 (AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “En toda la América Latina”. En: Boletín La

Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.35. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 16 de agosto de 1931, p. 5).
212 (AHE. Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG), “Centenario guadalupano”. En: Boletín La

Virgen de Guadalupe. Órgano del Comité Organizador de la Coronación. Año II, No.35. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 16 de agosto de 1931, p. 4).

154
propaganda a través de carteles213 en donde se informaba a los devotos de los procedimientos
que debían de cubrir para asistir a la peregrinación. Al mismo tiempo se aprovechó también
para extender la invitación para los interesados en celebrar “peregrinaciones espirituales” no
físicas a Tierra Santa, en la que los feligreses a través de oraciones simbólicamente peregrinaron
a este lugar, cubriendo un costo monetario con el objetivo de que una vez cumplidas las
plegarias las personas obtuvieran “indulgencias”214.

Las muestras devocionales a la virgen de Guadalupe fueron cada vez más frecuentes a
través de peregrinaciones al santuario guadalupano, por ejemplo la peregrinación del día 31 de
mayo de 1944, fecha en que se celebra la Virgen de la Pureza. En enero de 1946, la Acción
Católica organizó una colecta entre los feligreses de los templos parroquiales para reunir dinero
para la peregrinación que se llevó a cabo al año siguiente, el 26 de enero, para que “los fieles de
todos los ámbitos de la patria concurran sin cesar al Tepeyac, para impetrar sus bendiciones y
exponer delante de la madre todas sus miserias. También a Chiapas le toca en esta ocasión
valerse de la protección de Sta. María de Guadalupe, para obtener el remedio de tantas
necesidades”215.

Cabe señalar que la organización de estas peregrinaciones era responsabilidad del


Comité Diocesano, el cual acordaba las cuestiones de logística para establecer los tiempos y los
puntos de salida y llegada de los peregrinos. A este respecto se estableció a la ciudad de Arriaga
como punto de reunión principal para todas las peregrinaciones tomarán el tren y desde ahí
partir por la noche hacía la Ciudad de México.

En el año de 1951, los sacerdotes en las predicaciones dominicales orientaron sus


sermones hacía sus feligreses exhortándolos a celebrar a santos que fomentaba la devoción de
los grupos de Acción Católica, así como tener una especial dedicación a la virgen de
Guadalupe. Para ello se establecieron algunas acciones como aquellas en donde los sacerdotes
debían dedicar sermones todos los domingos para tratar el tema guadalupano; además de

213 Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos guadalupanos, No. 26: Peregrinación de Chiapas a la
Basílica el día 24 de Octubre de 1943 (Cartel).
214 Peregrinación Espiritual a Tierra Santa. El S.P. León XII acompaña a los peregrinos a Tierra Santa y anima a

todos los fieles para unirse a ellos en peregrinación espiritual con la mente con el deseo y con la oración.
Enriquecida con indulgencias. Costo 5 Centavos (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.353. Exp.1).
215 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.353. Exp.3.

155
exponer la labor que desempeñaba el Comité Diocesano al organizar actividades en cada
parroquia para que se difundiera constantemente la historia de las apariciones de la Virgen
María de Guadalupe:
Ojalá y en este hermosísimo trabajo participen todos los grupos y aun todos
los socios, estos últimos no solo aprendieron el catecismo guadalupano, sino
enseñándolo a todas las gentes, principalmente a todos los niños. Esto ni
siquiera requiere una preparación catequística especial en los que han de
enseñar el catecismo, pues la sencillez de la materia y la propiedad del texto
hacen que sea facilísimo enseñarlo. Seguramente que ustedes también, como
todos, estarán muy satisfechos del éxito que se alcanza en la enseñanza del
Catecismo Guadalupano. A los niños y aun a los grandes, deja embelesados
y no podía ser de otra manera, cuando como en este caso, se van
aprendiendo las palabras dulcísimas que la virgen dijo a Juan Diego, y en él a
nosotros. Dios te guarde muchos años. “Por Dios y por la Patria”. José
González Torres Presidente General Alfonso Aguilar Aguilar M. Delegado
CEN. de Instrucción Rel216.

Por otra parte, se pidió que en lo espiritual se realizaran:


A)…el mayor número de misas solemnes, comuniones, peregrinaciones de
hombres por las noches, especialmente los sábados y días 8, comenzando
desde diciembre próximo. Con solemnidad especial en mayo, octubre y
diciembre; y B) parte externa: se procurará la mayor difusión por la prensa,
cine, aparadores, autos, anuncios iluminados en las torres y en los cerros,
faroles, carros alegórico etc. Se prepararan veladas y el estudio de la virgen.
Se desea que las niñas y señoritas vistan algunos días del mes con vestido
parecido a la Ntra. Sra. de Lourdes y las niñas que nazcan en el año lleven el
nombre de Concepción. San Cristóbal de Las Casas 8 de Septiembre de
1953217.

De esta manera ya no se dejó de visitar a la virgen morena en el Tepeyac, ya que los


grupos de devotos organizados inicialmente por la asociación Acción Católica a través de la
ACJM peregrinaron hacia ese sitio sagrado. Es de recalcar que esta práctica religiosa incentivó
en los siguientes años a los fieles de la guadalupana para que siguieran visitando su templo,
realizando peregrinaciones procedentes de distintos pueblos y localidades de los municipios de
Chiapas.

En los años cincuenta, la difusión de la imagen guadalupana se hizo cada vez más
extendida, ya que en la mayoría de las parroquias e iglesias del estado, se fue estableciendo la

216 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.317. Exp.12.


217 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.43. Exp.12.

156
participación de la Acción Católica a través de sus organizaciones, como la Acción Católica de
Jóvenes Mexicanos (A.C.J.M.) y la Acción Católica Femenina Mexicana (A.C.F.M.), que
estaban respaldadas por la Diócesis de Chiapas. Estos grupos impulsaron la creación de
peregrinaciones con antorchas en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, actividad que
después se difundió en otros municipios de Chiapas.

3.3 Magna Carrera Nacional de Antorchas de Fe.

Esta carrera deberá verificarse de frontera a frontera


y de península a península,
debiendo terminar el día 12 de octubre próximo,
en la ciudad de México
y ante la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe.
(AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.331. Exp.13).
.

La creación de la asociación de Acción Católica y la participación de sus miembros en las


peregrinaciones dentro y fuera del estado fue cada vez más frecuente. Algunas de las
actividades religiosas que la Diócesis de Chiapas organizó fueron planificadas desde el Comité
Central, en la Ciudad de México. El Comité se reunía cada año en el mes de diciembre; a estas
actividades se les denominaba “Reuniones de Invierno” en las que se trataban asuntos
relacionados con la asociación, así como la organización de eventos en los que debían de
participar todas las delegaciones a través de los presidentes Diocesanos y grupos Aislados de la
ACJM de todo el país.

Dentro de los eventos organizados a través del Comité Central y desde la Coordinación
del Deporte de la Asociación, fue el que se coordinó en el año de 1954, el cual convocó a
todos los socios de la ACJM para participar en la denominada “Magna Carrera Nacional de
Antorcha de Fe” como un homenaje a la virgen de Guadalupe. Éste fue el primer momento en
que se habló de una peregrinación con antorcha, una práctica que se estableció a partir de ese
momento como un evento representativo de la fe católica en el estado de Chiapas.

Dicho evento contó con la aprobación del Comité Episcopal -Sr. Manuel Estebas Val y
Mayer - Presidente Central, y el Sr. Luis Manuel Orozco Mendoza- Delegado Central-,

157
nombrado para los festejos del año Mariano, así como con “la aprobación del Exmo. y Ilmo.
Señor Director Pontificio de la A.C.J.M, Dr. L. Luis María Martínez y Rodríguez, Arzobispo
Primado de México”218. Este evento tuvo el objetivo de hacer cinco peticiones a la inmaculada
del Tepeyac:
El éxito del Congreso Nacional Mariano, la paz del mundo, el reinado de la
justicia social en México, la educación cristiana de la juventud de la patria, y
la consolidación de la Acción Católica Mexicana, que en este año de 1954
cumple sus bodas de plata219.

La invitación se dirigió a todas aquellas organizaciones Católicas de la Juventud y


aquellas normadas por jóvenes católicos que tuvieran un carácter deportivo para que se unieran
a la ACJM, aunque no era prohibitiva para que otros grupos se integraran a esta manifestación
devocional, así fueran organizaciones políticas o anticatólicas, ya que la idea fue dirigirlas hacia
toda la juventud mexicana.

Para ello se establecieron diferentes rutas y se organizaron a través de una clasificación


de zonas geográficas con referencia a la república mexicana, entre ellas se encontraba:
• Ruta 1º. TIJUANA – MÉXICO; abarcaba las Uniones Diocesanas de Baja California,
Sonora, Sinaloa, Tepic, Guadalajara, Morelia, Toluca y México, a la cual se unía el ramal
de Manzanillo a Guadalajara.
• Ruta 2ª.- CIUDAD JUÁREZ – MÉXICO: abarcaba las Uniones Diocesanas de
Chihuahua, Durango, Zacatecas, Aguascalientes, Guadalajara, León, Morelia,
Querétaro, Toluca, México, uniéndose el ramal de Tacámbaro, Morelia.
• Ruta 3ª. NUEVO LAREDO – MÉXICO: abarcaba las Uniones Diocesanas de
Tamaulipas, Monterrey, San Luis Potosí, Huejutla, Tulancingo y México, así como con
los ramales de Saltillo – Monterrey y Poza Rica a Tulancingo.
• Ruta 4ª. MERIDA - MÉXICO: Esta ruta se realizó de Mérida a Campeche por la
carretera y de allí por avión a Villahermosa y luego a Veracruz. Abarcaba las Uniones
Diocesanas de Yucatán, Campeche, Tabasco, Veracruz, Puebla y México. Y se sumó el
ramal Teziutlán – Perote, para abarcar la Diócesis de Papantla.

218 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.30.


219 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.30.

158
• Ruta 5º. OCOTAL – MÉXICO: que comprendía a la unión de las Diócesis de
Tehuantepec, Oaxaca, Huajapan, Puebla, Chiapas y México.
• Y finalmente, la Ruta 6ª. ACAPULCO - MÉXICO: abarcaba las Uniones de Chilapa,
Cuernavaca y México. Todas ellas se encontraban apoyadas por la Asistencia
Eclesiástica a cargo del Sr. Pbro. Dr. Pedro Velázquez y Hernández que pertenecían al
Comité Central de la A.C.J.M220.

Como se observa, ninguna de las circunscripciones eclesiásticas de la república quedó


excluida. Para la organización de la carrera, hubo comisiones integradas por representantes de
cada estado que aprobaron las actividades que se propusieron para lograr el buen desarrollo de
la carrera. Entre estas estaba la planeación de las distancias, los horarios de la carrera, las
estadísticas, conseguir los permisos oficiales, la distribución de los corredores, proporcionar las
antorchas y los servicios médicos, además hacer la propaganda, aprobar los presupuestos y
fondos necesarios para los gastos que se ofrecieron. Esta comisión coordinadora se encontró
constantemente comunicada con las Juntas Diocesanas, aunque estas tuvieron la libertad de
modificar algunos aspectos de acuerdo a los contextos y necesidades de sus regiones para que
finalmente se lograra el buen desarrollo de la carrera.

A cada Diócesis, el delegado Central del Deporte dio algunas instrucciones que debían
de realizarse durante el transcurso de la carrera. Una fue que todos los peregrinos debían
celebrar rezos y mencionar una intención especial en la salve de las nueve de la noche, además
de que los Comités debían de visitar los santuarios marianos, mientras que “los Vanguardias” -
formados por los niños de 10 a 15 años- debían de realizar salve todos los días, mientras las
delegaciones de antorchistas se mantuvieran en su recorrido.

Se solicitó que se difundiera la convocatoria en las regiones de control de cada uno de


los Comités Diocesanos y se publicó la convocatoria en periódicos y boletines. Para el caso de
la Diócesis de Chiapas, esta propaganda vino del estado vecino de Oaxaca debido a que ambos
pertenecían a la misma ruta de peregrinaje hacía la Basílica de Guadalupe, en el que venía la
especificación del procedimiento que llevaría la carrera:

Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos guadalupanos, No. 32.- Participación en la Magna Carrera
220

Nacional de Antorcha.

159
Los corredores de todo el país convergerán hacia la metrópoli y se reunirán
en ella a fines de la primera decena del mes de octubre próximo, en ocasión
de la apertura del Congreso Nacional Mariano.
A la Diócesis de Oaxaca le corresponde conducir la Antorcha de la Fe
correspondiente a la ruta número cinco (el Ocotal – Chis – México D.F) a lo
largo de trecientos cincuenta y cinco kilómetros. Este tramo se correrá en
relevos durante los cuatro primeros días del propio octubre en la forma
siguiente:
1º. De octubre. A las 12: 25 horas el fuego simbólico será entregado en la
Ciudad de Tehuantepec [por la delegación de Chiapas] al primer corredor de
Oaxaca quien inmediatamente continuará la carrera rumbo a Tajapa, situada
a 94 kilómetros distancia a la que llegará la antorcha a las 19 horas de ese día
y en la que será velada hasta continuarse el evento siguiente.221.

Esta información se difundió para que la mayoría de socios o católicos se vieran


interesados en realizar la carrera, por lo que en las invitaciones se expuso el objetivo del
evento:
México, la patria de Santa María de Guadalupe, pasa lista de presente en este
año mariano que está conmoviendo al mundo católico entero. Como cálido
homenaje de filial amor hacia la virgen María y como pública manifestación
de fe católica que caracteriza al heroico pueblo mexicano, el H. Comité
Central de la A.C.J.M ésta organizando. “La Gran Carrera Nacional
Guadalupana de Antorchas de la fe”. El Comité Diocesano de Oaxaca,
secundando la brillante iniciativa del Comité Central y sumando su esfuerzo
para la feliz realización de este evento que, al mismo tiempo que deportivo
es también altamente simbólico, puesto que representa la unidad de la fe
católica en nuestro pueblo, lanza a toda la juventud católica de la Diócesis de
Oaxaca222.

También se incluyeron los requisitos que debía tener toda aquella persona que deseara
participar en esta carrera, independientemente de la parroquia o Diócesis a la que perteneciera,
entre estos se encontraba:
a) Ser mayor de 15 años.
b) Obtener certificado médico, que extendió un facultativo designado por el Comité Ejecutivo.
c) Sujetarse a un entrenamiento previo para estar en buenas condiciones físicas.

221 Periódico El Imparcial. Diario Independiente de Información y Variedades. Miembro de prensa unida de
México. Registrado como Artículo de 2ª. Clase en la Administración de Correos de Oaxaca, el 17 de Marzo de
1952. Año II, Núm. 931, vale 20 cts. Director Manuel Pichardo. Oaxaca de Juárez, 2 de septiembre de 1954
(AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.33).
222 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.32.

160
d) Disciplinarse al Reglamento que rigió este evento deportivo y simbólico223.

El uniforme que se solicitó fue una camiseta sport blanca con una banda de 10 cm.
cruzada diagonalmente en el pecho, en la que tuvo la siguiente inscripción: “Carrera Nacional
Guadalupana- Año Santo Mariano” además llevó en el pecho el escudo de la asociación y un
pantalón corto (short) de color azúl con tenis de color blanco.

La Diócesis de Chiapas difundió la invitación a todas las parroquias y capillas del


estado, con la intención de que se unieran a esta gran peregrinación para la virgen de
Guadalupe:
Muy respetable Sr. Cura.
En las conclusiones de las reuniones de invierno del Comité Central, se
encuentra la Organización de una carrera simbólica Guadalupana, que para
conmemorar el AÑO MARIANO, celebrará nuestra agrupación.
Esta carrera deberá verificarse de frontera a frontera y de península a
península, debiendo terminar el día 12 de octubre próximo en la ciudad de
México y ante la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe. Debiendo cada
comité diocesano, ver que las parroquias comprendidas en la ruta, corran su
tramo correspondiente.
Será a pie y portando una antorcha que oportunamente debe mandarse a
fabricar y que se ira entregando de una mano a otra, hasta completar
totalmente la ruta.
Con este fin, el Comité Central nos ha girado circulares indicando que deben
formarse en cada parroquia, Comités Organizadores de la Carrera
Guadalupana, que deben de contar con un delegado de finanzas, un
delegado de supervisión, un delegado de planeación, un delegado de
servicios, y uno de propaganda, [estos] deben de encargarse del buen
funcionamiento del recorrido.
Por lo tanto y considerando que se trata de un asunto de mucha
importancia, nos estamos permitiendo dirigirnos a usted personalmente, con
la súplica de que se promueva y entusiasmo [sic] a los jóvenes
Acejotaemeros de esta parroquia, para que cubran la ruta comprendida entre
esa ciudad y ésta224.

Las invitaciones se remitieron a los socios de la parroquia de Comitán, el 27 de Agosto


de 1954 a través del Cura Sr. Carlos Mandujano; el 28 de Agosto de ese mismo año al Sr. Cura

223 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.32).Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos
guadalupanos, No. 33.- Periódico Oaxaqueño Sobre La Gran Carrera Nacional Guadalupana de Antorchas de
la Fe.
224 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.331. Exp.13).Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos

guadalupanos, No. 34.- Invitación a la parroquia de Comitán a la Magna Carrera de Antorcha.

161
Natividad Gordillo de la casa parroquial de Zapaluta225 - La Trinitaria- ; al Comité Diocesano
de San Cristóbal de Las Casas226 y también se le envió esta misma invitación al Sr. J. Rubén
Ramos para que difundiera la invitación a los socios de esta ciudad y a los de Tuxtla
Gutiérrez227.

Para la casa Parroquial de Tonalá se hizo extensivo a través del Sr. Cura Carmen
Castillo228; a la casa Parroquial de Arriaga se envió a través del Sr. Enrique Alfaro229. A cada
uno de ellos se les pidió que como dirigentes diocesanos de las parroquias de Chiapas
respondieran ante el llamado que hacia el Comité Central de Acción Católica para lograr cubrir
los tramos y llegar a un buen resultado de la Carrera guadalupana:
En nuestra condición de dirigentes diocesanos, no quisiéramos que Chiapas
dejará de responder al llamado hecho por el [comité] Central, por lo que
deseamos que cada Comité parroquial se haga responsable de la parte que le
corresponde, teniendo en cuenta que la falta de colaboración de un solo
lugar, sería motivo suficiente para no verificar esta carrera.
En vista de lo anterior, les rogamos que en caso de que sea verdaderamente
imposible cubrir su ruta, nos lo hagan saber por la vía más rápida, para
hacerlo del conocimiento del H. Comité Central.
Esperamos que con la gracia de Dios y de Nuestra Madre Santísima de
Guadalupe, podremos [sic] lograr el duro fin que nos han encomendado230.

Las inscripciones para los interesados de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas
fueron en ese momento “en la casa N. 3 de la calle del 5 de mayo de esta ciudad, de las 18 a las
21 horas. En las poblaciones foráneas dichas inscripciones se hicieron por conducto de los
Comités Directivos de la A.C.J.M”231. Los encargados de organizar todo lo referente a la Gran
Carrera Nacional de Antorcha de Fe en el estado estuvieron a cargo del Sr. Sarquis Asís, como

225 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.331. Exp.13).Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos
guadalupanos, No. 35.- Invitación a la parroquia de Zapaluta para la Gran Carrera de Antorcha.
226 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.317. Exp.8). Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos

guadalupanos, No. 36.- Invitación a la parroquia de Cristóbal de Las Casas para la Gran Carrera de Antorcha.
227 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.334. Exp.1). Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos

guadalupanos, No. 39.- Invitación al Monseñor Don J. Rubén Ramos de Arriaga para la Gran Carrera de
Antorcha.
228 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.331. Exp.13). Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos

guadalupanos, No. 37.- Invitación a la parroquia de Tonalá para la Gran Carrera de Antorcha.
229 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.343. Exp.9). Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos

guadalupanos, No. 38.- Invitación a la parroquia de Arriaga para la Gran Carrera de Antorcha
230 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.334. Exp.1).
231 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.32.

162
presidente de la Asociación de Chiapas y el Sr. Carlos Siliceo N. como Secretario, junto con el
Padre Rubén Ramos en representación de la Diócesis de Chiapas.

En algunas de las parroquias de la Diócesis, como el caso de la parroquia de Tonalá,


misma que manifestó al Padre Rubén Ramos, que no podían tomar parte en el evento
guadalupano debido a que no contaban con el recurso para llevarlo a cabo, además de que se
estaban realizando otros eventos al interior de la iglesia que impedían cumplir con la solicitud
que Acción Católica proponía232, por lo que algunos optaron por organizar rifas y veladas para
sufragar los gastos de los corredores, como el grupo de integrantes de la parroquia de El
Sagrario que organizó estas actividades233.

La convocatoria para asistir a la Magna Carrera tuvo éxito debido a que se llegaron a
inscribir en las iglesias de San Francisco, Santo Domingo y Catedral aproximadamente 40
corredores234, de los cuales aportaron $10.00 por persona como cuota de inscripción.

En el mes de septiembre se remitió a los presidentes diocesanos y delegados de


deportes así como a los grupos aislados de la ACJM, las normas generales que debían de
cumplir previamente o durante la carrera, así como los puntos que cada delegación le
correspondía. Entre los puntos importantes que se observaron estaban los siguientes: si se
presentaba algún problema durante el evento era los Comités Diócesanos quienes resolverían
los casos, respetando las instrucciones del Comité Central; así como debían evitar retrasos que

232 AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.331. Exp.13.


233 Periódico El Coleto. Al Público. La Rifa de CIEN PESOS a favor de la Carrera Guadalupana se verificó el
domingo 26 de septiembre, habiendo salido premiado el numero QUINIENTOS NOVENTA Y OCHO,
adquirido por el niño José Guadalupe Ruiz, del barrio de la Merced, con domicilio en la casa N. 23 de la calle
Cuauhtémoc, cuya madre recogió el premio de CIEN PESOS. “Recibí la suma de CIEN PESOS”, premio
correspondiente al número 598, en Rifa a favor de la Carrera Guadalupana. San Cristóbal de Las Casas, 29 de
Septiembre de 1954. Francisca Pérez de Ruiz. Ante nosotras: Marta Guerra.- Guadalupe Cancino. 30 de
Septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.4).
234 Nombres de los inscritos: Rodolfo Trujillo, Ramón Ramos, Rafael Molina, Francisco García, Humberto Ruiz

Castro, Humberto García Ramos, Jorge Guadalupe Díaz, Felipe W. Mijangos, José Miguel Trejo, Juan Lazos
Domínguez, Carlos Muñoz V., Carlos Jiménez A., Jorge Suarez, Adrián Cañas, Javier Molina, Jaime Mandujano.,
Jorge Laterreria, Cesar A. Lazos, José Becerra S., Jorge Cordero, Carlos Espinosa, Virgilio Ventura, Enrique
Ballinas, Natalio Mazariegos, Ramón Martínez Martil, Javier Velasco, José Zapata, Rodolfo Mandujano, Cristóbal
Trejo, Alberto Rojas C., Humberto Ruiz Villatoro, Jorge Pedrero, Jorge Ochoa Moguel, José Javier Ramos
Fonseca, Calixto Zuart, Jorge Mijangos, Jorge Ontiveros, Gustavo Esquinca, Fernando Enrique Ruíz, Roberto
Ruiz Gutiérrez, Andrés Díaz, Homero Robles, Jundel Laturnerie, Alejandro Hernández, Roberto Cruz, Hermilo
Bermúdez, Fernando Trujillo, Guadalupe Sánchez, Francisco Ruiz Cruz, Heberto Ruiz Cruz. (AHDSC. Fondo
Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.15).

163
de alguna manera afectara la carrera, por ello se ajustaron a las fechas de salida y llegada en
concordancia con el itinerario girado por el Comité235. También debían de evitar tramos
difíciles que dificultaran su tránsito, por lo que podían hacer uso de vehículos adecuados para
llegar al punto de llegada, además de señalar que durante el recorrido dentro de la ciudad de
México en “el tramo que se corra el día 8 de octubre de la Santa Iglesia Catedral a la Basílica de
Sta. María de Guadalupe, se cubrirá con el representante de cada Unión Diocesana y el de cada
grupo aislado”.

En lo que respecta a los servicios con que contaba la carrera, se pidió el apoyo a las
oficinas de tránsito para el permiso de utilizar el traslado de personas en vehículos que no eran
de pasajeros, así como servicios de ambulancia y un botiquín de primeros auxilios para casos
de emergencia, entre otros. Mientras que los gastos de alojamiento y alimentación estuvieron a
cargo del Comité Central y se propuso levantar una lista con los nombres de los peregrinos
participantes para que fuera depositada a los pies de la virgen de Guadalupe.

3.4 CARRERA CHIAPAS – TEHUANTEPEC

Se tiene registro que para el caso de la delegación de Chiapas se notificó a la delegación de


Tehuantepec que por acuerdo de los organizadores de esta entidad, recibieron el fuego
simbólico el día 30 de septiembre a las 20 hrs. para velarlo en éste lugar y no en Juchitán como
se había programado. Se pidió la contestación inmediata para que los corredores de Chiapas
entregaran a los de Oaxaca el fuego simbólico en el lugar señalado, el día primero de octubre
para que prosiguiera sin problema alguno su recorrido a la ciudad de México236. Para esta
ocasión, en algunos de los tramos, la delegación de Chiapas tuvo problemas con el pebetero
debido a que éste fue estropeado y no hubo personas que supieran elaborar otro237.

235 Listado de rutas (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario Carp.313. Exp.29).


236 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.24).
237 Al Cura Párroco Rubén Ramos. Las Casas, Chis. “Carrera preparada espero antorcha jueves aquí no hay quien

hágalas [sic]”. De José Natividad Gordillo. Telegrama N. 41. 22 de septiembre de 1954, Comitán Chis. (AHDSC.
Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.4).

164
El Comité diocesano se encargó de difundir el evento a través de “volantes por medio
de globos invitando al pueblo a recibir y despedir a los corredores, así mismo fue conveniente
alquilar una camioneta con sonido para que fuera anunciando la llegada de los corredores, de
preferencia se hizo en los santuarios de las sedes diocesanas de las principales ciudades”238.
Como parte del seguimiento de los recorridos durante la carrera, se pidió que se comunicaran
vía telegrama o teléfono para conocer los puntos principales de sus recorridos y
promocionarlos a través de periódicos o boletines de prensa sobre la peregrinación239.

En lo referente a las finanzas, la comisión encargada de este rubro debió de sufragar


todos los gastos que originó la carrera, por lo que cada corredor llevó un distintivo, en este
caso fue un brazalete, que los identificaba durante el recorrido que fue solicitado al Comité
Central y tuvo un costo de $1.00 por cada uno.

Los Comités Diocesanos eran muy estrictos, al grado de que para el caso de Chiapas,
padres y madres de familia mandaron telegramas240 al Padre J. Rubén Ramos para notificar la
aceptación para que sus hijos participaran en la “Magna Carrera Nacional de Antorcha de Fe”,
por lo que tuvieron comunicación constante con los encargados de las parroquias
pertenecientes a la Diócesis de Chiapas, para tener todo organizado y evitar algún
contratiempo:
Con gusto arreglare el local para que pasen aquí la noche los muchachos,
aunque sea en la sacristía y en esta su pequeña casa. Ya hable con el jefe de
tránsito federal y gustosamente concede el permiso para que transiten los

238 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.8) Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos
guadalupanos, No.40.- Normas Generales para la Magna Carrera Nacional Guadalupana.
239 Al Cura don J. Rubén Ramos. Conocido. Las Casas, Chiapas. “Apensiones parroquiales impídanme llegar este

domingo, llegaremos sábado medio día sin convenimos última entrevista. Avisare salida”. De Carlos o.
Mandujano Telegrama N. 48. 23 de septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.4).
A Monseñor a Don Rubén Ramos. Conocido. Las Casas, Chiapas. “Según padre Carlos mañana sale antorcha
Ocotal hoy necesito antorcha”. José Natividad Gordillo Telegrama No. 23. Comitán Chiapas, 23 de septiembre de
1954 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.4).
240 “Honorable monseñor Rubén Ramos. “Con todo gusto doy el permiso a mi hijo que corra en la carrera

guadalupana como un deber de católicos. Espero que usted se dignará a echarles su bendición”. Agustina
Vázquez. Guadalupe Sánchez. San Cristóbal de Las Casas Chis, Septiembre 20 de 1954. (AHDSC. Fondo Curia
de El Sagrario. Carp.313. Exp.18). “Monseñor J. Rubén Ramos. Ciudad. “Le doy el permiso debido a mi hijo
Roberto Ruíz para que participe en la carrera guadalupana”. Atentamente Delina G. Vda. De Ruiz. San Cristóbal
L.C. Chis. Septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.19). Al Sr. Presbítero. J.
Rubén Ramos. “Los que suscribimos, padre de Jorge Guadalupe Díaz Montiel, damos nuestro pleno
consentimiento para que nuestro preferido hijo tome participación en el evento de la carrera Guadalupana que se
verificara el día 27 del actual”. San Cristóbal de Las Casas, a 23 de septiembre de 1954. Firma. Guadalupe Díaz y
Natividad Montiel de Díaz. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.21).

165
muchachos en el camión de redilas, igualmente protegerán la carrera desde el
Ocotal agentes de su dependencia. Según pude darme cuenta, tienen
también instrucciones del centro para facilitar la carrera. El Sr. Cura de
Cintalapa ya arregló lo necesario para que sus muchachos corran desde
Cintalapa hasta Tapana. Hoy hablé con él y me dijo que hoy mismo avisaría
a S. Sria. Los muchachos de aquí de Tuxtla están ya preparados para salir el
28, a las 13 horas 15 minutos. Suplico decirme si estará bien que el fuego
simbólico pernocte en el anexo parroquial o en el templo.
Suyo Afmo. En Cristo. Ranulfo Morellón. Tuxtla Gutiérrez, Chis a 23 de
septiembre de 1954241.

La Diócesis de Chiapas estaba en constante comunicación con la Diócesis de Oaxaca


para coordinar las actividades y que los corredores chiapanecos entregaran a los corredores
oaxaqueños en el tiempo estipulado en la ciudad de Tehuantepec, notificando que sus
corredores llegarían el 30 de septiembre para entregar del fuego simbólico en la ciudad de
Tehuantepec, por lo que salieron de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas el día 27 de
septiembre para estar en la hora señalada. Además solicitaron al Sr. Carlos Z. Vázquez
presidente del Comité de la Diócesis de Oaxaca que:
Por medio de su valiosa cooperación y conocimiento que tienen ustedes de
los lugares donde habremos de pasar o sea por toda la carretera
Panamericana, se sirva escribir a algunas personas de esos lugares que nos
brinden su ayuda moral, proporcionando orientaciones del terreno, agua, en
fin toda clase de detalles que nos pueden ser muy útiles, en vista que desde el
Ocotal, Chis., hasta la ciudad de Tehuantepec, tendremos por obligación
buscar estrictamente lo que nos hemos forjado, y hacer totalmente el
recorrido a pie”242.

La delegación de Chiapas inició la peregrinación en la localidad de El Ocotal, municipio


de La Trinitaria.243 por la mañana del día 24 de septiembre rumbo a Comitán; al siguiente día
arribaron a las ocho de la mañana a la localidad de Teopisca,244 para posteriormente llegar el día
26 de septiembre a la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. Al respecto el Sr. Ricardo Urbina,
coordinador de la Antorcha Guadalupana de la ACJM recuerda:

241 Telegrama enviado al Ilmo. Mons. Rubén Ramos. San Cristóbal de Las Casas, Chis. (AHDSC. Fondo Curia de
El Sagrario. Carp.313. Exp.22).
242 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.25).
243 Al Cura Rubén Ramos. San Cristóbal de Las Casas. “Hoy llegamos esta doce y media de Ocotal con antorcha”.

José Natividad Gordillo Telegrama n. 119. Comitán. 24 de septiembre de 1954 (AHDSC. Fondo Curia de El
Sagrario. Carp.313. Exp.4).
244 Al Cura José Rubén Ramos. Conocido. Las Casas, Chis. “Corrida interés de saber, salen de esta ocho A.M. día

25, avisándole Teopisca. Saludos”. Carmen Pedrero Nájera. Telegrama n. 127. Comitán Chiapas 24 de septiembre
de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.4).

166
La fundadora que hay aquí en San Cristóbal, eso fue hace 60 años, podemos
decir que fue en el año de 1954, que se hizo la primera antorcha
guadalupana, lo que puedo decirle es que ellos fueron a México, fueron de
Trinitaria, pasaron a Comitán y se fueron a México, fue la primera antorcha
guadalupana. Hubo otra que se hizo antes, pero no como antorcha
guadalupana, sino como aniversario de la Acción Católica. Para 1954 se hizo
oficial ya la antorcha guadalupana (Entrevista realizada 20 de noviembre de
2015).

Se le pidió al presidente Municipal de San Cristóbal de Las Casas el Sr. J. Luis Franco
Ballinas que al ingresar a esta ciudad por la carretera Panamericana se avisara a todos los
habitantes para que limpiaran y despejaran las calles de automóviles por: Guadalupe Victoria
Oriente y Av. General Utrilla Sur, debido a que se tenía contemplado la entrada de la Carrera
Nacional Guadalupana aproximadamente a las dos de la tarde por esas zonas de la ciudad y se
solicitó a Mons. Rubén Ramos que los apoyara informando a los feligreses que mantuvieran
libres esos mismos espacios para el día 27 a las ocho de la mañana en las calles de Guadalupe
Victoria Oriente, pasando por la plaza de armas y la calle Mazariegos Poniente245, hora en que
salieron de San Cristóbal con destino a Tuxtla Gutiérrez.

En la ciudad de San Cristóbal de Las Casas se unieron al contingente los corredores


oriundos de esta ciudad y algunos estudiantes de la Escuela de Enseñanza Especiales No. 10246
que sumaban aproximadamente 40 corredores en su mayoría estudiantes, empleados y
comerciantes247. Posteriormente se adhirieron otros jóvenes a la carrera para finalizar con 47

245 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.26). Así también se notifica al Comité Central de la
llegada a la ciudad de San Cristóbal: “Al Sr. Agustín Eugenio Alcocer Roblero. San Juan de Letrán N. 23 segundo
piso. México D-F. “Particípanosles cubierto sin novedad tramo Ocotal – San Cristóbal.- entusiasmo desbordante
Telegrama ordinario”. San Cristóbal de las Casas a 26 de Septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El
Sagrario. Carp.313. Exp.4).
246 Prof. Heriberto Velasco Hernández, Rodolfo Trujillo, Cesar A. Lazos, Jorge Quintero, Fidel Laturniera,

Francisco Ruiz, Heberto Ruiz, Miguel Hernández, Fernando Enrique Ruiz Ruiz, Carlos Ruíz Ruíz, Jaime
Mandujano, Marco Antonio Estrada, Javier Molina Molinari. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313.
Exp.4).
247 Jóvenes que tenían derecho a correr en la Carrera Guadalupana porque habían llenado todos los requisitos:

Rodolfo Trujillo.- Trov., Ramón Ramos - obrero, Francisco García - empleado, Humberto Ruiz Castro -
empleado, Jorge Guadalupe Díaz - comerciante, Humberto García Ramos – empleado, Juan Lara Domínguez –
prepa, Carlos Jiménez Albores – prepa, Cesar A. Lazos – prepa, José Becerra – Prepa, Carlos Espinosa –
enseñanza, Jorge Quintero – prevo, Roberto Ruiz Gutiérrez – prepa, Homero Robles – prepa, Andrés Díaz –
obrero, Jorge Laturniere – enseñanza, Jorge Suarez – enseñanza, José Miguel Trejo – prepa, Carlos Muñoz –
prepa, Virgilio Ventura – enseñanza, Fidel Laturniere – prevo, Ramón Martínez – Kartil – obrero, Alejandro
Hernández – obrero, Roberto Cruz – obrero, Hermilo Bermúdez – obrero, Guadalupe Sánchez – Obrero,
Francisco Ruiz – prevo, Fernando Trujillo – obrero, Heberto Ruiz – prevo, Rafael Molina Mijangos – prepa,
Miguel Hernández – prevo, Rodolfo Ruiz López – obrero, Víctor Guadarrama – obrero, Fernando Enrique Ruíz
Ruíz – prevo, Humberto Morfin – empleado, Carlos Ruiz Ruíz – prevo, Jaime Mandujano – prevo, Felipe W.

167
personas que recorrieron el tramo San Cristóbal de Las Casas - Tehuantepec248. En los
expedientes que se encuentran en el AHSC se localiza únicamente un expediente donde se
señala el “presupuesto” del plan de viaje para 40 corredores, por tanto no hay un dato preciso
que dé una idea sobre cómo se hicieron los ajustes en torno a los gastos que se excedieron.

Presupuesto programado para la “Carrera Nacional Guadalupana tramos:


SCLC a Tehuantepec, para 40 corredores249.

Día Ciudades Hora de Salida Hora de Llegada


27/Sep. San Cristóbal L. C - Tuxtla Gutiérrez 8 a. m 16 p. m
28/Sep. Tuxtla Gutiérrez – Cintalapa 10 a. m 20 p. m
29/Sep. Cintalapa – Tapanatepec 6 a. m 12 p. m
29/Sep. Tapanatepec – Tehuantepec 15 p. m 21 p. m
30/Sep. Juchitán Tehuantepec – Tehuantepec 16 p. m 20 p. m

Para facilitar la movilidad de la carrera se empleó un autobús que proporcionó el


obispo para el uso de la carrera y cubrir el tramo de San Cristóbal a Tehuantepec. La salida de
la delegación Chiapas en San Cristóbal se acordó que fuera frente al templo de San Nicolás a
las siete de la mañana del día 27 de septiembre y posteriormente pasar por el grupo que
esperaba en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez250 y seguir el recorrido al estado de Oaxaca.

Hay que hacer notar que ya desde esta ocasión se realizaban pequeñas visitas con fines
turísticos a los sitios de peregrinación, ya que particularmente para este viaje, los corredores

Mijangos – prevo, Javier Molina Molinari – prepa, Marco Antonio Estrada – obrero. (AHDSC. Fondo Curia de El
Sagrario. Carp.313. Exp.4).
248 Lista de los corredores que participaron en la Carrera Guadalupana, en el tramo San Cristóbal de Las Casas -

Tehuantepec, Oaxaca: Rafael Molina Mijangos, Jorge Mijangos Ross, Jorge Gutiérrez Franco, Jorge Latuniere,
Rodolfo Ruiz López, Carlos Jiménez Albores, Humberto Morfín, Armin Cañas Salazar, Alejandro Hernández,
Felipe W. Mijangos, Julio César Toledo, Javier Ramos Fonseca, Fernando Enrique Ruiz Ruiz, César Lazos, José
Becerra J., Javier Molina Molinari, Víctor Guadarrama, Marco Antonio Estrada, Jaime Mandujano Franco,
Rodolfo Mandujano Ruiz, Roberto Cruz, Guadalupe Sánchez, Hermilo Bermúdez, Fernando Trujillo, Ramón
Martínez, Juan Lara Domínguez, Fidel Laturniere, Homero Robles Gutiérrez, Miguel Hernández, Carlos Ruiz
Ruíz, José Miguel Trejo, Jorge Suarez, José Zapata, Virgilio Ventura, Jorge Quintero, Roberto Ruiz Gutiérrez,
Enrique Ballinas, Ramón Ramos, Francisco García, Francisco Ruíz, Damián Mandujano, Carlos Espinosa,
Humberto García Ramos, Jorge Guadalupe Díaz, Humberto Ruiz Castro, Rodolfo Trujillo, Heberto Ruiz.
(AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.28).
249 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.14).
250 A Agustín Eugenio Alcocer I. Robledo. San Juan de Letrán n. 23 segundo piso. México D-F. “Hoy ocho horas

salió carrera Tuxtla.- avisen recepción Tehuantepec llegaremos jueves vente horas”. Jorge Sarquis Asis Telegrama
S/N. San Cristóbal de las Casas 27 de septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313.
Exp.4).

168
solicitaron pasar de regreso por la mañana a la ciudad de Salina Cruz251 para conocerla. El día
30 de septiembre el grupo de acejotaemeros llegaron a las 12 de la noche a Juchitán, una de las
últimas etapas del viaje252.

Una vez que llegaron a la ciudad de Tehuantepec, Oaxaca, los jóvenes entregaron la
antorcha con el fuego simbólico para que otro grupo prosiguiera el camino hacia la Ciudad de
México, asignando al Sr. Ramón Ramos Santiago, como representante del Comité Diocesano
de la Asociación de Acción Católica de Chiapas253 y al Sr. Enrique Ballinas Castro254 como su
acompañante, para que se integraran al contingente que fue a la capital del país.

Mientras tanto el grupo de corredores que había terminado la ruta asignada, el primero
de octubre en la ciudad de Tehuantepec, prosiguió su recorrido ahora de regreso a la ciudad de
San Cristóbal de Las Casas. Durante el viaje se mantuvieron comunicados por medio de
telegramas dirigidos a la Diócesis de Chiapas, para que tanto sus familiares como las
autoridades eclesiásticas supieran de las condiciones del camino de retorno255.

Al regreso, los responsables de llevar a los corredores entregaron un informe de los


gastos que se habían hecho durante el viaje al Comité Diocesano de la ACJM. Estas cuentas
respondían a los gastos totales que se habían utilizado a partir del 27 de septiembre al 1 de
octubre de 1954, así como los gastos en el hospedaje y la alimentación256 que se habían hecho

251 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.23).


252 Al Reverendísimo señor Rubén Ramos. Las Casas, Chiapas. “Ayer medio torrencial lluvia caminos llegando
doce noche Juchitán, salimos para acá llegando cinco tres y cuatro, aceptaremos cubrirnos gloriosamente última
etapa”. Alonso Coello Telegrama N. 36. Tehuantepec Oaxaca, 30 de Septiembre 1954. AHDSC. Fondo Curia de
El Sagrario. Carp.313. Exp.4).
253 “Por las presentes acreditamos al portador Enrique Ballinas Castro, como representante de este Comité

Diocesano de Chiapas en las Ciudad de México, para el evento atlético de la Carrera Nacional Guadalupana.
Rogamos al H. Comité Central se sirva guardarle las consideraciones debidas y orientarlo en todo lo necesario,
por lo que le anticipamos las más cumplidas gracias”. Jorge Sarquis Asis. Presidente. Vto. Bno. Monseñor Rubén
Ramos. Asistente Ecco. A 27 de septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.23).
254 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.23).
255 Telegrama N. 28: “Al Ilmo. Revmo. M.J. Rubén Ramos, Casa Parroquial. San Cristóbal Chis. “Permítame

comunicar superioridad llegamos bien, continuamos marcha diez horas”. Resptte. Alfonso Coello Esponda. 2 de
Octubre 1954”. Telegrama N. 14: “Al Párroco Rubén Ramos. San Cristóbal de las C. “Vamos carrera antorcha
bien sin novedad”. Resptte. Saludos. Enrique. 4 de Octubre 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario.
Carp.313. Exp.4).
256 Cuenta de canje Hotel Bety. Propietaria Xochitl F. Burguete. Sr. Daniel Sarmiento. Pago por dos habitaciones

15 camas $75.00, Días de alimento 28 comidas $81.00, Total $159.00. Cintalapa Chis, 29 de Septiembre de 1954.
Diego E. Burguete H. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.5). “Antorcha guadalupana debe:
Cena y hospedaje a 15 personas $75.00, Solo cenas a 6 personas $15.00, Septiembre 19 c/desayuno a 21 personas
$52.50, Total 142.50. Cristóbal Chis. Septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313.

169
los corredores durante la Carrera Nacional de Antorcha de Fe. Se hizo entrega de una lista
desglosada por los días en que utilizaron el recurso, siendo un total de $2,380.00. Esta
información se entregó el Ilmo. Mons. Ramos y el presidente Diocesano, encargados de la
carrera.257 La cantidad ya incluía $600.00 correspondientes al pago de un camión de redilas para
el transporte, así como el pago de los choferes y sus ayudantes, además de algunos gastos
extras como: frutas, medicinas, dulces, entre otras compras hechas en el recorrido y el pago del
“mezcalito” que se les dio a todos los corredores y al equipo de apoyo durante uno de los días
del peregrinaje.

Aunque el presupuesto previo para el viaje fue de $2460.00, el informe final reflejó un
ahorro de $80.00. Cabe señalar que dentro de las indicaciones se instruyó para que cada
corredor proporcionara sus alimentos para el primer día.

Concluida la carrera el 12 de octubre, fue hasta el 15 de noviembre de 1954 que el Sr.


Agustín Eugenio Alcocer L. Robledo. Presidente de la ACJM hizo llegar a todos los
presidentes, miembros titulares y auxiliares de los Comités Diocesanos y de Grupos Aislados
de la ACJM, un documento donde se expresaba el entusiasmo que sentían como organización
al ver terminado y vivido tan magno evento:
Me es altamente grato y satisfactorio dirigir a ustedes estas líneas cuya
misión especial y primera, es de hacer llegar nuestra más sincera, efusiva y
cordial felicitación y estímulo como un profundo reconocimiento por los
trabajos por ustedes desarrollados [sic] en nuestra Magna Carrera Nacional
Guadalupana de Antorchas que acaba de pasar. La ACJM, alcanzó sin lugar
a dudas, el éxito más rotundo y arrollador que le mereció de nuestra más
altas autoridades Eclesiásticas y de grandes personalidades, los más cálidos
elogios y los plausos tan merecidos como numerosos del pueblo de México
que vio pasar a nuestros gallardos atletas, todo esto y más merecen nuestros
muchachos es innegable, sin embargo ellos, sin las indicaciones adecuadas y
pertinentes de ustedes los Dirigentes Diocesanos, poco habrían logrado; es
por esto que a ustedes Dirigentes va esta nuestra felicitación, pues no
desconocemos los méritos de los acejotaemeros que desafiando distancias,
venciendo obstáculos y sobreponiéndose a todos los sacrificios, supieron
cumplir y pudieron poner el fuego de su corazón en manos de nuestra

Exp.6). La cuenta de hotel, Sra. María… por la cuenta de 15 cena a $2.50 c/u = $37.50 c/u, desayunos a $2.50
c/u = 24.00, 8 camas a $3.00 c/u= 24.00, Total: $99.00. Atentamente Firma. 29 de septiembre de 1954 (AHDSC.
Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.7).
257Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos guadalupanos, No. 42. Cuenta de gastos que me permito

reunir al honorable Comité Diocesano de la ACJM, relativa a la Carrera Guadalupana, que se llevó a cabo el 27 de
septiembre y terminó el 1 de octubre en la ciudad de Tehuantepec del año 1954.

170
Augusta Reina, esta antorcha símbolo de nuestro amor, que ilumina todos
los senderos de nuestra patria258.

En este mensaje se manifestó sobre el papel que jugó el fuego simbólico, objeto que
fue a partir de este momento un símbolo importante para la ACJM, ya que había representado
dignamente a esta asociación; entendido este fuego como el objeto mediante el cual se
expresará la fuerza de la juventud mexicana:
Han trascurrido ya los días, y sin embargo, aún se palpa y se vive el
entusiasmo desbordante que supo arrancar de los corazones del pueblo
mexicano nuestra carrera, se siente aun la emoción sublime en nuestro
pecho cuando recordamos los momentos cumbres en que nuestra juventud
que es la auténtica esperanza de la patria, con viril paso y esforzada mano,
entregaba a nuestros prelados el fuego traído desde los lugares más lejanos y
apartados de nuestros suelo que ha visto nacer con la ACJM y en la ACJM,
a los que han sabido ser, son y serán el baluarte de nuestra fe, los soldados
de Cristo Rey y los Guardianes fieles del recinto sacrosanto de nuestra Reina
la Virgen Santísima de Guadalupe259.

Así, la antorcha, a partir de este momento, fue utilizada para exaltar a la virgen de
Guadalupe y también se vio como un símbolo de responsabilidad, fuerza y valor ante las
dificultades, esfuerzos y sacrificios que implican el cumplir con la misión de ser los mensajeros
de “la Luz y la Paz”, y que fue la expresión más fuerte de victoria de la ACJM que el pueblo
católico mexicano había hecho posible, como mencionó el Presidente de la ACJM:
La ACJM con su evento sin precedentes hizo posible que el pueblo de
México se percatara de la fuerza, del grande y puro amor a nuestra reina, se
dio a conocer en todas partes lo que se puede hacer cuando se quiere,
dejando imborrables escenas de certidumbre, heroísmo y osadía, la ACJM,
ha triunfado una vez más, pues ha dejado verdadera inquietud en aquellos
que no han conocido tal cual es, ha desvanecido prejuicios, se ha hecho
presente como una fuerza avasalladora de nuestra juventud, esto le ha de
abrir el sendero que conduzca al logro de nuestros ideales, hacer que reine
Cristo en el corazón de nuestros hermanos y conquistar para México el lugar
que le corresponde entre las naciones del mundo y que ha de tener lugar
escogido en el reino eterno de los cielos260.

Si bien es cierto que este evento atrajo la mirada de por lo menos la población católica,
es cierto también que el éxito de la ACJM logró convocar a los jóvenes de las parroquias de

258 Ver Apéndice I.- Documentos, oraciones y cantos guadalupanos, No. 43.- Documento de agradecimiento por
la Magna Carrera de Antorcha de Fe.
259 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.347. Exp.10).
260 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.347. Exp.10).

171
cada una de las Diócesis de México, por lo que a partir de este evento, la asociación de Acción
Católica exhortó a que se siguiera realizando este tipo de actos:
Es por eso caros compañeros, que los exhorto a trabajar con más ímpetu y
con más entusiasmo, pongamos en nuestra empresa todos el espíritu
apostólico necesario capaz de hacer que fructifiquen nuestras labores, y esta
actividad febril y fecunda, deberá realizarse en todos y en cada uno de
nuestras trabajos, desde los mapas importantes y trascendentales, hasta los
mapas insignificantes y sencillos, que en cada uno de ellos se sienta y se note
el espíritu sobrenatural que nos anima como es la constante oración y sobre
todos la frecuencia de los sacramentos, que estos, sigan siendo como hasta
ahora la fuerza que nos impone y haga posible nuestra empresa261.

En los siguientes años se impulsó la participación de los jóvenes en las carreras a otras
partes de la república mexicana, sobre todo se exaltó aquellos lugares donde tuvo presencia la
Acción Católica Mexicana. En especial el grupo perteneciente a la Diócesis de Chiapas, se le
invitó en reiteradas ocasiones a participar en el Año Jubilar de la Acción Católica Mexicana y
declarado Mariano para México. A la convocatoria de la Magna Peregrinación de la Juventud
Católica Masculina Mexicana al monumento a Cristo Rey262 en el Cerro del Cubilete, en León,
Guanajuato el 15 de mayo de 1955, así como el evento que también recordaron como fecha
memorable del aniversario de Magna Carrera Nacional Guadalupana de Antorchas Organizada
por la ACJM en 1954263.

A partir de entonces el grupo de ACJM inició en los siguientes años peregrinaciones a


algunos santuarios marianos importantes del país y a otros lugares que están presentes en las
rutas de peregrinar de las antorchas guadalupanas de San Cristóbal de Las Casas actualmente.

3.5 ¡Adelante Acejotemeros!

La intensiva participación del grupo de Acción Católica establecida en la Diócesis de Chiapas y


particularmente en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, impulsó ya en la década de los

261 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.347. Exp.10).


262 Festividad de Cristo Obrero. Ver a (Luna, 2015).
263 (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.347. Exp.19).

172
sesentas la práctica de correr con antorcha. Ahora este grupo estaba organizado desde la
misma Diócesis de Chiapas para peregrinar por los santuarios dentro y fuera del estado.

La convocatoria se dirigió a aquellos jóvenes que ya habían asistido a las


peregrinaciones anteriores organizadas desde el grupo de Acción Católica y que principalmente
habían tenido la experiencia de haber participado en la “Magna Carrera de Antorcha de Fe”.
… don Constancio Robles, Joaquín Coello, Víctor Bermúdez de allá de San
Ramón, el Dr. Molina y algunos que ya fallecieron como don Raulito
Jiménez, otro que vive fue don Carlos Gordillo, otro de apellido Chanona
que vive en Tapachula y yo. Y hay muchos que se me escapa sus nombres
pero fueron ellos que hicieron oficial la antorcha guadalupana264.

Posteriormente se hizo extensiva a todos los jóvenes católicos que tuvieron interés de
participar como el caso del Sr. Ricardo Urbina265 que fue invitado por otros jóvenes que
pertenecían a la agrupación antes mencionada. El Sr. Ricardo debido a su interés y
responsabilidad llegó pronto a ser uno de los organizadores de la primera antorcha
guadalupana de la ACJM (Acción Católica de la Juventud Mexicana) en San Cristóbal,
actualmente es el presidente de este club:
Yo me entero por una persona que se llama Fernando Zepeda, me hizo la
invitación con otros señores porque yo estaba muy joven tenía como 15 o
16 años, es más, ellos me regalaron mi uniforme, mi playera y el short que se
llevaba antes. Me prestaron unos tenis y todo y así es como participé mi
primera vez. La verdad no sé porque me invitaron a partir en ese momento
[y después] fui interrumpidamente. Había gente que nos apoyaba, nos
regalaban transporte. Sólo se pagaba la gasolina y ellos nos ayudaban con
camioncitos de redilas. En ese momento eran como unos 70 o 80 tal vez,
porque yo después llegue a tener más de 200 o 220 más o menos266.

En los primeros años, las peregrinaciones fueron acompañadas por personas que
fueron miembros cercanos a la Parroquia de El Sagrario de la Diócesis de San Cristóbal, los

264 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
265 “Como a los tres o cuatro años comencé a ser parte de la directiva. Yo inicie como vocal, después fui
secretario, luego tesorero, hasta llegar a ser presidente, tal vez desde el 74. Me involucré más con los señores que
lo organizaban. Se hacían las reuniones en la catedral, en el salón de arriba y me empecé a relacionar con los
párrocos de aquí. [Fui] a Tuxtla, Ciudad Cuauhtémoc, cuando asumí el cargo es que salimos fuera y salimos a
Tehuantepec, la primera más larga, luego fuimos a Guatemala y luego México y así”. Entrevista realizada a don
Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las Casas. El 20 de noviembre de
2015.
266 Entrevista realizada a Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

173
cuales fueron los responsables de dirigir y coordinar las actividades de los peregrinos de todas
las parroquias de donde provenían los antorchistas. Para el caso de la antorcha de mujeres de la
JCFM (Juventud Católica Femenina Mexicana) que se fundó aproximadamente en el año de
1977, fueron acompañadas de algún sacerdote o madre religiosa que tuvo la responsabilidad de
cuidarlas durante todo el recorrido, como menciona la Sra. Rosa Cruz:
La que dio origen fue la que se creó en San Nicolás, creo que ahí los padres
tenían algo que ver, porque yo recuerdo que nuestra guía era primera una
Madre y el Padre Eugenio que era guía de la otra antorcha, porque nosotros
éramos como el hermanito menor de la ACJM. Éramos como 40, todas
mujeres, todas éramos jovencitas, entre 15 y 22 años, no había niñas.
Éramos de todos la barrios de la ciudad. En los viajes iba una persona
encargada, en una ocasión parece que nos acompañó el Padre Eugenio, él
sólo iba cuidándonos no corría267.
Sra. Rosa Cruz, peregrina de la Antorcha
Juventud Católica Femenina Mexicana
(JCFM) 1970.

Fuente: Fotografía donada por la Sra. Rosa Cruz.


2017.

La ACJM como la JCFM organizaban sus actividades de manera separada, aunque en


algunas ocasiones coincidieron en los caminos, ambas proseguían su recorrido de manera
separada. Un ejemplo de esto fue el caso del transporte que rentaban a la empresa Lacandonia,
en el que cada grupo se movilizaban debido a que el camión se les asignaba un asiento a los
pasajeros y llevaban otro camión de redilas que servía para bajar y subir a los peregrinos
durante los recorridos de la antorcha.

Entrevista realizada a la Sra. Rosa Cruz, peregrina fundadora de la Antorcha de la JCFM. San Cristóbal de Las
267

Casas. Febrero 2017.

174
Para cubrir los gastos del transporte, se realizaron rifas y el resto era absorbido por los
mismos antorchistas. Las salidas fueron frente a la iglesia de San Nicolás durante las primeras
horas del día y al llegar al lugar programado se celebraba la misa y posteriormente fueron
recibidos con alimentos por parte de las iglesias o parroquias y durante los días que estuvieran
en ese lugar les brindaban un espacio donde pernoctar. Estos sitios eran principalmente
albergues que la misma iglesia les proporcionaba para su estancia, las cuales se encontraban
cerca del centro o de la iglesia de la imagen de Guadalupe, de no ser así, buscaban algún lugar
que previamente había sido elegido el coordinador de la carrera para que fueran recibidas,
narra la Sra. Rosa Cruz, en una de las carreras donde participó:
Era en un colegio el que estaba cerca del centro, pero no recuerdo cómo se
llamaba. El que sí recuerdo bien es el de Comitán, era el colegio Regina.
Cuando fuimos a Tapachula regresamos por Comitán y en los lugares donde
parábamos, ahí nos esperaban. Había gente que nos invitaba un cafecito y
tamalitos268.
Sra. Rosa Cruz, peregrina de la Antorcha
Juventud Católica Femenina Mexicana
(JCFM) 1970.

Fuente: Fotografía donada por la Sra. Rosa Cruz. 2017.

En los años setentas, no era frecuente encontrar las peregrinaciones con antorcha en
las carreteras del estado, situación que hizo que las personas reaccionaran con extrañeza al ver
este tipo de prácticas, incluso en algunas ocasiones no sabían por qué hacían este tipo de
manifestaciones. Mientras corrían, los hombres y mujeres no llevaban ninguna imagen de la

Entrevista realizada a la Sra. Rosa Cruz, peregrina fundadora de la Antorcha de la JCFM. San Cristóbal de Las
268

Casas. Febrero 2017.

175
virgen de Guadalupe en las manos, ni cargaban algún estandarte que sirviera de distintivo, ya
que estos objetos eran solamente usados cuando se llegaba a algún pueblo donde pernoctaban:
No veíamos antorchas en el camino de aquí a Tapachula, yo creo que aquí se
inició porque yo veía que la gente se sorprendía cuando entrábamos
corriendo, pero la gente nos aplaudía. Sólo nos hacían preguntas que de
dónde llegábamos, qué porque hacíamos eso y les decíamos que era por fe a
la Santísima Virgen de Guadalupe. En los pueblitos en que entrábamos, nos
recibían y se sorprendían de vernos corriendo. Habían otros que nos
ignoraban porque no sabían lo que estábamos haciendo o por qué
propósito269.

Algunos de los jóvenes desconocían las características de la misma carrera, por lo que
previamente en las reuniones que tuvieron junto con los varones de la ACJM y las mujeres de
la JCFM en la parroquia de El Sagrario, les dieron instrucciones de cómo debían de correr y
como coordinarse en equipos para establecer los tiempos y los lugares que ocupaba cada
corredor y se aprovechaba a darles algunas pláticas referentes a la virgen de Guadalupe o
pasajes de la biblia que reforzaran la devoción.

Día previo a iniciar la carrera de regreso, los peregrinos aprovechaban a salir a conocer
el centro o los lugares cercanos donde pernoctaban. No se les permitía salir a sitios lejanos,
mucho menos pasear por otros lugares, ya que estaban cuidados por los mismos coordinadores
y, para el caso de las mujeres, muchas tenían temor debido a que eran muy jóvenes y para
muchas de ellas fue la primera vez que salían de viaje, como recuerda la Sra. Rosa Cruz:
Todo era solamente religioso no lo agarrábamos de paseo. No nos daban
permiso de salir a ningún lado, todos estábamos en un lugar. Por ejemplo en
Motozintla cuando llegamos a las 3 de la tarde, llegamos a bañarnos y luego
a buscar dónde comer. Sólo estuvimos en el parquecito y luego nos fuimos a
descansar, pero no para que saliéramos a pasear. Ahora lo agarran un
poquito más de pachanga270.

Ella menciona que no llegaban a conocer ningún sitio turístico, ni representativo del
lugar, solamente tenían permiso de salir para buscar alimentos o relajarse un rato en las plazas
o parques cercanos a donde se hospedaban.

269 Entrevista realizada a la Sra. Rosa Cruz, peregrina fundadora de la Antorcha de la JCFM. San Cristóbal de Las
Casas. Febrero 2017.
270 Entrevista realizada a la Sra. Rosa Cruz, peregrina fundadora de la Antorcha de la JCFM. San Cristóbal de Las

Casas. Febrero 2017.

176
Cuando iniciaban la peregrinación, el sacerdote anfitrión les ofrecía una misa y
bendecía la antorcha para iniciar su recorrido. Para ello, la carrera estaba organizada en relevos
y cada peregrino corría un tramo, luego pasaba la antorcha a otro peregrino y continuaba el
recorrido, mientras que el que había cumplido su tramo, se subía al carro para descansar:
Como nos asignaban un número y ya sabíamos después de quien nos tocaba,
era obligatorio bajar. Para el primer año lo veíamos muy fácil pero se lastima
uno, parece que en una ocasión una muchacha ya no quería bajar porque lo
había sentido muy pesado y le echamos gente para que corriera porque no
había llegado para estar descansando. Solamente descansaba un rato y volvía
a comenzar a correr. Luego nosotros lo pensábamos fácil como cuando
jugábamos de agarrador, así lo pensábamos que era, pero esto era más duro
y siempre se lastima uno, no falta que uno se golpe el pie. Algunos se caían
cuando estaban bajando del camión, y sólo pasaba el dolor o la molestia y a
correr o incluso dejaban de correr ese día y al otro día volvían a comenzar
(Ibíd.).

La experiencia de las mujeres en las peregrinaciones con antorcha era totalmente


desconocida, ya que ellas no habían experimentado la “Magna Carrera Nacional de Antorchas
de fe” en la que los hombres habían participado anteriormente. Para ellas significó una práctica
muy pesada y en algunos momentos hasta peligrosa:
Nos dijeron qué íbamos a correr en tramos no muy lejanos. Incluso a veces
platicábamos entre nosotras, era en tramos de 50 metros por la mañana,
después, cuando ya salía el sol, eran tramos más largos como de unos 200
metros, mientras que el carro y el autobús iba atrás cuidándonos porque
había lugares que eran desiertos completamente (Ibíd.).

Durante el recorrido de la antorcha, junto con los peregrinos iba un periodista que
hacía notas a través de telegrama o teléfono, con el objetivo de informar a los radio escuchas
sobre los lugares por donde iban pasando, así como los pormenores que los peregrinos iban
viviendo. Esto era de ayuda para los familiares, sobre todo de las mujeres, ya que para muchas
de ellas, era la primera vez que viajaban sin compañía de sus familiares271. El periodista en
funciones de “locutor” iba apoyado por algún patrocinador de la ciudad de San Cristóbal.

271Muchas de ellas fueron solamente una o dos las ocasiones en que participaron en las antorchas debido a que
sus familiares no les gustó que se alejaran de ellos o porque fue una experiencia muy difícil. Como menciona doña
Rosa Cruz: “me sentenciaron a que ya no iba ir a correr, como era hija única, mi mamá me extrañaba mucho. De
hecho, desde el primer año no me quería dar permiso y le dije que me diera permiso que sólo ese año iba a
participar, y sólo porque a Julieta Ruiz Astudillo, que era una vecina muy cercana, su mamá le dio permiso, por
eso me dieron permiso a mí”. Entrevista realizada a la Sra. Rosa Abdulia Cruz, peregrina fundadora de la
Antorcha de la JCFM. San Cristóbal de Las Casas. Febrero 2017.

177
Iba alguien que nos ayudaba y se comunicaba, no sé cómo le hacía, pero tal
vez en caseta telefónica o no sé, pero avisaba de cómo íbamos en el viaje. Se
organizaba quién iba a patrocinar, para eso teníamos gente que nos apoyaba,
en ese tiempo estaba el grupo Drosursa.

Las rutas de peregrinar era a lugares cercanos, organizados con otras parroquias, por lo
que reunían a jóvenes, principalmente a los que pertenecían a los grupos de Acción Católica de
sus respectivas localidades. Al respecto recuerda el Sr. Ricardo Urbina: “los primeros años en
que participé [la carrera de antorchas] se hacía de San Cristóbal a Tuxtla, de Comitán a San
Cristóbal. Esperábamos que vinieran de Comitán, venían para acá y nosotros nos íbamos a
Tuxtla y ahí se concentraban los de Tapachula y de otros lugares”272.

A principios de los setentas, se comenzaron a organizar peregrinaciones a lugares más


lejanos, para ello se necesitaba más recursos y tiempo para realizar el viaje. “Ya las primeras
carreras largas que me tocó a mí, la hicimos a Ciudad Cuauhtémoc. La primera más larga fue a
Tehuantepec, Oaxaca, luego fuimos a Guatemala y así hemos visitado diferentes lugares de la
República Mexicana273”, tal es el caso de la Antorcha Ciclista Peregrina de María (ACPM):
Ya le dimos vuelta casi medio país, del sureste hasta la península y desde el
centro hasta Puebla. Ya hemos ido a Puebla, Oaxaca, Minatitlán, Villa
Hermosa, Campeche, Escárcega, todos los lugares de la península. Con la
ACGM corrimos más lejos porque nos patrocinaban la unidad, éramos más
integrantes y por eso podíamos trasladarnos a más lugares, ahora somos sólo
ocho y pues no llegamos lejos.

La importancia que tuvo en México el establecimiento de la asociación de Acción


Católica fue fundamental para la Iglesia, en un periodo de inestabilidad frente al Estado,
motivo suficiente para que se establecieran acciones que encaminaran a fortalecer el trabajo
pastoral de la Iglesia a fin de no perder a la comunidad creyente ante el embate político. Estas
acciones dieron paso a que de nuevo la Iglesia tomará a la virgen de Guadalupe como emblema
de su lucha política, ya que se pensó en reunir a la comunidad católica a través de la Magna
carrera de antorchas de Fe, para que fueran los jóvenes de todo el país quienes se convirtieran
en el ejército espiritual que enfrentó al Estado a través de una expresión religiosa multitudinaria
como fue la peregrinación.

272 Entrevista realizada a al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de
Las Casas. El 20 de noviembre de 2015.
273 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

178
Esta iniciativa fue exitosa, ya que congrego a la población juvenil de las parroquias e
iglesias de México, sin embargo, no en todos los estados tuvo un impacto positivo para que
estos grupos se apoderaran de esta práctica. Mientras que para el caso de la Diócesis de
Chiapas, después de este evento, prosiguió realizando peregrinaciones a distintos lugares con la
participación de la asociación de Acción Católica chiapaneca, la cual contribuyó a fortalecer en
sus primeros años a las comunidades religiosas en cada una de las parroquias y se procuró a
través de ellas, fomentar el catolicismo en cada rincón del estado, impulsando eventos
religiosos y realizando peregrinaciones a los distintos santuarios dentro y fuera del estado.

Con el paso de los años, se fueron fortaleciendo los grupos de antorchas guadalupanas
a través de fervientes devotos a la virgen de Guadalupe, multiplicándose a través de diferentes
clubs y grupos apegados a las parroquias, mientras otras se constituirán independientes, debido
a que muchas de ellas nacerán por el interés propio de los creyentes y no tendrán la intención
de seguir bajo el control de la Iglesia, sin embargo compartirán la misma devoción de
peregrinar por las diferentes carreteras del estado en nombre de Guadalupe.

179
Capítulo IV
El Proceso Ritual Guadalupano

Las peregrinaciones con antorcha es una práctica religiosa que manifiesta experiencias de fe y
devoción a la virgen de Guadalupe. En ella, se puede analizar el proceso ritual que vive el
peregrino antes y después de la peregrinación, las formas de organización previa al recorrido,
las experiencias personales y de grupos durante el traslado, los arribos al centro de peregrinaje,
el comportamiento y el proceso de retorno a sus lugares de origen; aspectos que muestran que
el peregrino acciona una diversidad de prácticas antes, durante y una vez terminado el ritual.

Para ello, una vez iniciado el proceso ritual, el sujeto se aleja de su ambiente social, se
incorpora a un grupo y una vez cumplido con el ritual, regresa nuevamente a su posición
institucionalizada pero en un estado de renovación y envuelto de sacralidad. Así las
peregrinaciones pueden plantearse como rituales de purificación y de liberación de culpas,
debido a que en el traslado hay ritos de paso que el peregrino vive, son etapas en las que se
desprende de sus cargas emocionales, se libera y ya renacido se incorpora a su vida cotidiana, al
respecto Van Gennep señala:
Todos los ritos, tienen un fin especial y actual, se yuxtaponen a los ritos de
paso o se combinan con ellos, a veces de manera tan íntima que no se sabe
si tal rito pormenorizado es, por ejemplo, un rito de protección o un rito de
separación. Este problema se plantea, entre otros casos, a propósito de las
diversas formas de los ritos llamados de purificación, que pueden ser bien
una simple suspensión de tabú, que se limita a suprimir la cualidad impura,
bien ritos propiamente activos, que otorgan la cualidad de pureza” (Van
Gennep, 2008: 26- 27).

Los rituales realizados por los grupos de antorchas que se movilizan a lo largo del
estado y principalmente desde o hacia la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, son un ejemplo
en el que se distingue la existencia de fases que el peregrino enfrenta durante la “transición”
para lograr su objetivo.

El peregrino se envuelve él mismo en un símbolo total, ya que durante peregrina es


motivado a meditar y a pensarse como una persona especial, ya que en “esa meditación es

180
considerada más apropiadamente como participación en una existencia hierática con el
objetivo de alcanzar un paso hacia la sacralidad y totalidad de uno mismo, en cuerpo y alma”
(Turner, 2009: 51- 52) y se refuerza con elementos rituales durante las fases que componen al
rito, donde el sujeto ritual, en su dimensión individual o colectiva, tiene que experimentar una
serie de acciones o de pasos que lo identifican como tal.

El contenido de este capítulo, entreteje los aspectos etnográficos con algunos


planteamientos considerados en la propuesta de Emilie Durkheim (2000) relacionada con la
importancia que guarda el ritual dentro de los grupos sociales, así como la propuesta que hace
Arnold Van Gennep (2008) en torno a los ritos de paso en la que clasifica al ritual en tres fases
(la separación o preliminar, el intermedio o liminal y la reagregación o reincorporación –
posliminal), y que posteriormente se retoma a Víctor Turner (1988) al analizar la etapa liminal.
Para la compresión del establecimiento de las asociaciones de antorchas se toma la propuesta
de Manuel Delgado (1999) al referirse que estas son sociedades intersticiales que se encuentran
subsanando ausencias que no proveen la estructura institucional de la iglesia católica, por lo que
para los feligreses guadalupanos este tipo de agrupaciones les genera certeza y certidumbre a su
vida.

4.1 El Ritual
Soy un antorchista
Soy Guadalupano,
Orgulloso llevo,
La antorcha en mi mano
(Fragmento de una porra antorchista).

El ritual se entiende como ese mecanismo que hace reproducir e integrar a un grupo y es el
medio por el cual se refuerzan las estructuras básicas de una sociedad (Durkheim 2000, Turner
1988). En este sentido, Durkheim menciona que el ritual tienen la función de ayudar a crear y
conservar solidaridades sociales a través de los actores, los cuales comparten creencias
colectivas que deben ser reforzadas de manera periódica para lograr una cohesión entre
quienes lo practican, además de tener la función social de romper con las medidas rígidas que
impone la vida cotidiana y que es a través del ritual la manera de destensar probables conflictos
(Durkheim, 2000). Para el caso de las peregrinaciones con antorcha, la imagen de la virgen de

181
Guadalupe es la manera de integración de este colectivo, símbolo que alienta a practicar
movilizaciones y devociones por diversas partes del estado y ayuda a mantener relaciones de
solidaridad entre los actores antes y después del ritual, creando grupos que se refuerzan a
través de distintos actos religiosos a lo largo del año a través de rezos, rosarios, reuniones,
conferencias, retiros, etcétera.

Entrada de la antorcha visitante a la iglesia de


Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Durante el ritual, se crea un orden normativo alterno a su vida cotidiana, la cual crea su
propia dinámica en la que articula a un colectivo que mediante roles construyen
representaciones dramáticas en un tiempo determinado. Es en este momento en que los
antorchistas se integran a un grupo, compartiendo algunos elementos como la manera de vestir
y de realizar la peregrinación. Con ello se disminuye las diferencias y jerarquías sociales que
caracterizan la vida cotidiana, además de crear identidad en tanto integra a un grupo, confirman
y dan continuidad a las tradiciones y articulan el sistema normativo del mismo (Turner, 1988).

Durante el traslado, los peregrinos se involucran para crear una estructura que se
encuentra ordenada y supeditada mientras dure el ritual. Es el momento temporal, separado de
la cotidianidad en donde el antorchistas practica su peregrinaje asumiendo un sentido de
pertenencia como “peregrinos de María” o novicios como los nombra Turner:
A los novicios se les “despoja” de su indumentaria secular cuando pasan por
debajo de un símbolo umbral; se “les nivela”, ya que renuncian a los
nombres que hasta entonces ostentaban, asignándoles a todos ellos la

182
denominación común de mwadyi, o “novicio”, y todos son tratados igual
(Turner, 1988, 114 – 115).

Arreglo y organización dentro camión en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016

En las peregrinaciones con antorchas se puede entender desde la concepción del ritual
de Durkheim (2000) en la que se considera que estos actos contienen una dimensión
integrativa, que reglamenta a los integrantes de ese grupo y a las prácticas. De esta manera, las
antorchas dan identidad al grupo religioso y además regula la práctica de sus creyentes,
reforzado su afiliación religiosa tanto desde lo colectivo como de manera individual.

Esta práctica religiosa es un ejemplo de esta dimensión integrativa, ya que durante las
fases que dura el ritual, los actores experimentan relaciones de solidaridad, se diluyen las
diferencias y las jerarquías sociales institucionalizadas, que aunque éstas sean por un tiempo
determinado les otorga cohesión social al grupo, así como regula su comportamiento ante otras
prácticas. Estos elementos crean, reafirman y establecen acciones que hacen del ritual un
momento liminal que los determina y que les da identidad frente a otras maneras de devoción.

Actualmente esta peregrinación es un ritual que distingue distintos procedimientos y


formas de movilidad de implorar con los pies, el cual ésta determinada por las maneras en que
recorren los caminos en busca de los santuarios marianos o de Cristo.

El inicio del ritual da comienzo cuando los peregrinos se organizan para el arreglo de
los camiones que llevan a los antorchistas. Esta actividad es planeada un día antes de iniciar el

183
recorrido, los integrantes de la antorcha se reúnen para ordenar los objetos dentro del camión,
se coloca una lona encima de él para cubrirse del frío o la lluvia y se organiza las maletas para
tener espacio suficiente para que los peregrinos puedan moverse dentro del carro o para ser
utilizado como dormitorio. En uno de los costados del transporte se coloca una manta donde
tiene inscrito el lugar de visita, el origen del club, el nombre de la antorcha y algunos dibujan
algunas imágenes religiosas como la virgen de Guadalupe o santo de su devoción. Así también
se “solda” la escalera con la parte trasera del vehículo para que quede reforzada y suban con
seguridad los antorchistas cuando se movilizan por las carreteras.

Reunión previa para iniciar la peregrinación en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016

Llega el día y la hora de iniciar la peregrinación, todos se reúnen en el lugar donde se


planeó comenzar el recorrido; cada uno va llegando animado y coloca las últimas maletas. Una
vez que todos se encuentran juntos, el coordinador los reúne para rezar y pedirle a la virgen de
Guadalupe que los acompañe y los bendiga en el camino. Una vez terminada la ceremonia, de
nuevo el coordinador menciona los últimos detalles de organización y actividades que están
programadas para ese momento y los anima gritando porras a la virgen y a la antorcha. Al
término, cada uno de los integrantes se reúne con sus familiares que llegan gustosos a verlos
para despedirse, cada uno es bendecido por ellos, haciéndoles una cruz sobre su pecho y
frente; hay abrazos, risas y llanto, pero también hay mucha adrenalina por iniciar ese proyecto
que venían organizando por varios meses atrás. Todos comienzan a tomar el rol de peregrino,
es hora de partir al santuario de visita. Muchos de los grupos sancristobalenses inician su
recorrido visitando la iglesia de Guadalupe para ser bendecidos por el sacerdote y por la virgen,
que garantiza la protección espiritual de cualquier peligro durante el camino.

184
Equipo encargado de lavar los trastes en la CDMX.

Fuente: Trabajo de campo en CDMX. 2016

Es el momento de partir, se suben al camión y comienza la peregrinación, todos viajan


en un transporte exclusivo para los peregrinos. Durante este momento no realizan la carrera en
relevos sino que todos viajan dentro del vehículo, excepto aquellas antorchas que utilizan
bicicletas, motocicletas o caminatas. Pese a la diversidad de peregrinar existe un proceso ritual
que los representa como antorchas guadalupanas, las cuales está compuesta por otros rituales
menores que son realizados a lo largo del recorrido, algunos de ellos son modificados o
improvisados por los propios antorchitas, debido que al ser una práctica libre adquiere diversos
matices de quienes lo experimentan.

Una vez llegado al santuario de visita, todos se regocijan al saber que finalmente han
llegado al lugar que habían planeado durante el año o que habían elegido para peregrinar.
Inicialmente se dirigen al templo donde se encuentra la virgen de Guadalupe, entran corriendo
y gritando porras que pueden durar entre 5 a 10 minutos. Posteriormente, se reúnen para orar
y agradecer por ese momento, así como solicitar o pedir aquello por lo que están ahí. Es el
momento más sublime de cada peregrino, ya que expresan el gozo y la compensación de todos
los sacrificios por haber logrado llegar al santuario, algunos lloran en silencio, se alejan del
grupo y se conecta con la deidad. Una vez que este momento termina, todos se relajan y
comienzan a buscar el lugar donde pernoctarán, muchas veces se ubican en las banquetas de
las calles aledañas al templo de Guadalupe del lugar donde se visita.

185
El grupo descansa en el lugar durante el resto del día, se establecen los acuerdos y
reglas para tener un orden dentro de la peregrinación. Se organizan en grupos para la
elaboración de los alimentos, comienzan a sacar la despensa del camión, los trastes y utensilios
que utilizarán para la preparación. Ellos improvisan cocinas en los lugares donde llegan para
hacer los alimentos que son principalmente de fácil elaboración274, los cuales son repartidos
equitativamente a todos los integrantes del grupo. Al terminar los alimentos, un equipo se
organiza para lavar los trastes, limpiar el lugar donde se hizo la comida y ordenar las cosas en
su lugar. Mientras que el resto del grupo aprovecha a descansar, algunos compran antojitos o
algunos objetos en las ferias fuera del templo, mientras otros se desplazan por los lugares
cercanos para conocer la ciudad.

Peregrinos custodiando a la antorcha en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016

Por la noche, el coordinador los reúne de nuevo y organiza los equipos de velación
que consiste en custodiar a sus compañeros para que puedan dormir, estar pendientes de los
objetos que quedan a la intemperie y principalmente cuidar durante una hora a los santos. Esta
actividad es ordenada y respetada por todos, cada grupo -que puede estar organizado por 3 o 5
personas- sabe la hora de despertar para iniciar su velación. Mientras se encuentren velando,
los antorchistas deben de ser respetuosos y estar en silencio, no hacen relajo, ni burlas, ya que
algunos aprovechan a rezar o se dedican a pasar el rato haciendo por ejemplo “bolas” de

274Cabe señalar que los alimentos son generalmente platillos sencillos como huevos acompañado de productos
enlatados como verduras, frijol, atún o sardinas, los cuales son hechos en “galones” al carbón.

186
estopa que posteriormente cubren con gasolina o diesel, material que les servirá para mantener
el fuego de la antorcha, así como otros aprovechan a platicar de su vida personal y de trabajo.

Al llegar la hora de despertar, el grupo de velación anuncia que es el momento de


iniciar el peregrinaje, todos se despiertan y levantan las ropas de dormir, que son casi siempre
sobre banquetas o corredores de los lugares donde pernoctan, y una vez levantados buscan
algún lugar para ir al baño275 y lavarse la cara, mientras el grupo encargado hace el desayuno.

Reunión de oración para bendecir y encender la


antorcha.

Fuente: Trabajo de campo en la CDMX. 2016

Una vez terminada las actividades, los peregrinos se reúnen para rezar frente al altar
improvisado para iniciar el recorrido y dirigirse a la iglesia donde se encuentra la virgen de
Guadalupe, para despedirse de ella y pedirle la bendición para proseguir el camino. Es el
momento en que la antorcha se llena con estopa y diesel y es encendido con el fuego que se
encuentra en el santuario de llegada. Para ello buscan de preferencia a un sacerdote o algún
diácono de la iglesia para que encienda el fuego de la antorcha y bendiga el camino de los
peregrinos; al no encontrarse alguno de ellos, son los mismos antorchistas que encienden el
fuego con el “cirio Pascual” que se encuentra en ese santuario y hacen una pequeña oración
solicitándole protección y luz para que los cuide durante todo el recorrido, luego se canta y se
gritan porras.
275Para hacer las necesidades fisiológicas se busca en las inmediaciones del lugar donde acampan algún baño que
se encuentre en renta, lugar de algún domicilio cercano a los santuarios que improvisan para hacer negocio, por lo
que casi siempre hay que hacer cola y pagar $5.00. Cuando el grupo hace paradas sobre la carretera, se busca algún
lugar detrás de los matorrales para que las mujeres puedan hacer sus necesidades, mientras que los hombres se
ocultan detrás de los carros o simplemente se voltean.

187
Sólo algunos de los grupos de antorchas expresan la oración dedicada a los
antorchistas276 mientras en otros grupos, es el coordinador quien invita a los corredores a
iniciar la peregrinación expresando frases como "Gloria a ti Señor', "Aleluya”, “Amén”, para
que de esta manera se mantengan en alabanza contantemente, otros grupos solamente rezan,
hacen alguna oración y gritan porras. Es aquí donde da inicio la carrera, el contingente sale del
templo de visita o del pueblo, comienzan a correr por las calles llevando el estandarte, las
imágenes religiosas y las antorchas encendidas.

Una vez que toman la carretera, los peregrinos de las antorchas pedestres se suben al
camión e inicia el orden de los corredores que fue organizada días antes de iniciar la
peregrinación, ya sea rifándose el número de colocación del corredor o por acuerdo del grupo,
los cuales deben de saber el turno de cada uno. El corredor que inicia la peregrinación toma la
antorcha, mientras dos a tres personas se quedan cercanos a la escalera277 del camión, que irán
alimentando la antorcha con diesel y estopa cada vez que hace cambio del corredor. Cuando
éste se encuentre cansado o lastimado pide cambiar de turno y prosigue el siguiente de la lista,
como narra el peregrino:
Depende a veces se corre 500 metros, a veces 400, depende de cómo va el
tiempo o como va uno o si el compañero quiere que lo releven, levanta la
mano. Pero no permitimos que corra 5 kilómetros solo, por qué razón?,
porque los que van en el camión se aburren y entre más constantemente
bajen están más animados y despiertos278.

276 Oración al Antorchista: Hoy quiero ofrendarme Madre Mía de Guadalupe toda mi vida, mis esfuerzos, mi
cansancio, los riesgos que nos acechan en la carretera, quiero ser antorcha de llama viva, que ilumine mi camino y
de los demás, que donde yo pase no sea solo yo, sino que tú derrames bendiciones abundantes en cada uno de tus
hijos, los ilumines y acompañes en cada una de sus necesidades. A mí hazme instrumento de tu amor, de paz, de
esperanza, y caridad, deja que contemple tu rostro para llenarme de esa dulce mirada, quiero que me concedas lo
que hoy te ruego, (aquí se pone la intención) hoy que estoy bajo tus pies enciende en mi corazón esa antorcha que
ilumine mi camino, mi familia y a todos que necesiten de ti, te ruego me protejas y bendigas donde quiera que yo
este, gracias madre de Guadalupe, déjame partir, proclamando tu nombre en pueblos, colinas, y montes. Amen.
277 Este objeto es fundamental para que los peregrinos puedan bajar y subir del camión de manera segura, es una

escalera hecha de metal que se encuentra sujetada a la base del carro. A lo largo del recorrido, mientras el camión
va en movimiento, algunos de los antorchitas de apoyo, como los corredores en turno se paran sobre ella, lo que
hace que se cuide que vaya completamente reforzada, para evitar posibles percances al utilizarla constantemente
en el recorrido.
278Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

188
Encargado de alimentar la antorcha durante el recorrido.

Fuente: Trabajo de campo en CDMX. 2016.

Exceptuando los tramos por la noche, los niños y mujeres descansan y solamente
quedan los hombres que se encargan de recorrer los caminos. En esta conformación de los
grupos de antorcha, el apoyo de todos es sumamente importante, ya que se genera un sentido
de unidad fraterna que se solidariza y se acompaña durante todo el viaje, como menciona
Turner:
La idea de que existe un vínculo genérico entre los hombres, así como el
sentimiento relacionado de “confraternidad”, no son epifenómenos de algún
tipo de instinto gregario sino productos de hombres entregados en cuerpo y
alma (Turner, 1988: 134).

En esta distribución de funciones y actividades dentro del recorrido, uno de los


peregrinos se coloca cerca de la escalera para orientar y dirigir con una bandera “de seguridad”
a los automovilistas que pasan cerca del camión debido a las constantes paradas que hace a lo
largo de las carreteras. Esta actividad es dirigida principalmente por una persona del grupo
organizador y con experiencia debido al peligro que esto representa. Mientras tanto los demás
peregrinos que se encuentran dentro del camión animan a los corredores para que corran con
más aliento, algunos cantan y se divierten haciéndoles juegos a sus compañeros, otros comen
alimentos ligeros o duermen sabiendo el momento en que les tocará correr.

Algunas antorchas realizan durante el viaje oraciones o Rosarios por la noche o por la
mañana cuando el camión se encuentra en movimiento, cuando descansan, antes de cada
alimento o cuando el silencio y el cansancio se apropian de los corredores. Esto ocurre

189
generalmente cuando la luz del día comienza a ocultarse, es el momento en que se aprovecha
para que algunas oren y pidan que no ocurra algún accidente o simplemente para animar a
seguir adelante, como narra el peregrino:
Porque hacemos oración temprana acá en la antorcha, porque hacemos
Rosarios dentro del camión. Porque sólo con eso alejamos lo malo, alejamos
de todo mal, porque al hacer el Santo Rosario, el mal no le gusta, se aleja, el
poder de la oración es muy fuerte. Después de la oración nos sentimos en
paz porque ya no hay nada que nos moleste, porque en esta bendita la
antorcha, vamos279.

La oración es más común en climas cálidos debido a que al concentrarse el calor dentro
del camión hace que el esfuerzo de correr y mantenerse despierto sea cada vez más difícil. Es
por ello que a lo largo del recorrido, los grupos de antorchas hacen paradas en determinados
lugares del camino para descansar. Estos lugares pueden ser pequeños poblados o espacios
visibles que se encuentran sobre la carretera, de esta manera evitan quedarse en lugares
solitarios para protegerse de cualquier incidente o actos de violencia como robos o asaltos.

Desde el primer momento en que se hacen presentes las antorchas, comienzan a


expresar su devoción a través de cantos, alabanzas, oraciones y porras, principalmente al llegar
a los pueblos o ciudades en la que la prioridad es gritar a niveles altos para que sean
escuchados. Sin embargo, al encontrarse más de dos antorchas juntas, los gritos de las porras
se vuelven cada vez más ruidosas y constantes, mientras las otras son opacadas, esto se debe a
que una de ellas quiere ser más observada y por lo tanto adquiere por un momento un dominio
por encima de las otras. Siempre hay dos o tres antorchistas que dirigen las porras y el resto de
ellos asumen de coros, por lo que en ocasiones los dirigentes sufren de inflamación de la
garganta por la continua exclamación de las porras a lo largo de la peregrinación. Los cantos
son el medio por el que difunden el guadalupanismo y expresan su identidad religiosa frente a
los demás, además de fortalecer su integración como grupo.

Cuando se acercan a un poblado o ciudad durante su recorrido, todos los antorchistas


principalmente las pedestres bajan del camión y comienzan a correr juntos, llevando hasta
adelante el banderín, otro lleva la antorcha encendida, mientras otros llevan las vírgenes y

279Entrevista realizada al Sr. Geovanny López Martínez, peregrino de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”.
Diciembre de 2016.

190
detrás de ellos los demás corren. Algunos grupos de antorchas aprovechan para gritar porras,
danzar o cantar alabanzas a la virgen de Guadalupe, es el momento en que se asumen como
evangelizadores católicos, de ser mensajeros de la palabra de Dios y de quienes vienen
anunciando el milagro guadalupano. Mientras las personas del lugar se asoman rápidamente a
ver el contingente, algunos de ellos responden aplaudiendo y otros los ven con recelo, sobre
todo en pueblos que pertenecen a otras religiones no católicas280.

Es en este momento en que el ritual cumple otra de sus funciones, la de construir una
identidad marcada por una frontera simbólica. En este caso es la virgen de Guadalupe, el
elemento que legitima a los peregrinos, al nombrarse como católicos sobre todo frente a otras
agrupaciones no católicas que no tienen entre su concepción y creencia a los santos y vírgenes.
Símbolo que adquiere un sentido de pertenencia entre quienes integran las antorchas:
Los rituales también pueden dividir al permitir el establecimiento de
fronteras simbólicas. La categoría de “extranjero” dentro de una sociedad
puede ser articulada y confirmada mediante rituales. Los símbolos que
subrayan las diferencias culturales entre dos grupos son elegidos para usarse
en rituales de “separación”. Es frecuente que tales símbolos sean del
nacionalismo o de la religión (Chihu, 2001:143).

Es por ello que los grupos de antorchas que recorren los caminos, también establecen
fronteras simbólicas a través de cánticos guadalupanos tradicionales en las que enfatizan
constantemente la devoción guadalupana y su ser católico, como las siguientes:
Rueda camión y volante la virgen va adelante.
Se ve se siente la virgen está presente.
Con Cristo María todo se puede.
Z, z, z la virgen se respeta.
Juan Diego hermano nos lleva de la mano.
M, m, m de María.

Reza, reza, reza


La virgen milagrosa
Aquí y allá la virgen reinará.
L, l, l, ele de Lupita.
J, j, j, jota de Juan Diego.

280 Cabe señalar que durante la observación etnográfica se pudo observar que al pasar por los pueblos,
principalmente la antorcha Musicalizada anuncia a través del micrófono que ellos son católicos y guadalupanos,
que se encargan de predicar el milagro guadalupano, que el danzar o cantar alabanzas no son propias de las
religiones evangélicas y que Dios le gusta que lo adoren con cantos.

191
Rosa, rosa, rosa, la virgen es hermosa281.

Grupo musical “Anhelo” pertenecientes al


Movimiento Carismático Católico.

Fuente: Trabajo de campo en Tapanatepec, Oaxaca.


2016

Muchas veces ingenian e innovan letras que toman de canciones populares de cantantes
famosos que modifican la letra por estrofas religiosas dedicadas a la virgen. Estas son cantadas
inicialmente por alguna antorcha y luego de ser escuchada son difundidas entre los grupos,
como muestra estas estrofas, donde el tono corresponde a la canción popular es “Allá en el
rancho grande”:
Y si son los antorchistas, como?
Que corren de noche y día
Con la antorcha encendida
Y con la virgen María
Haya en el rancho grande haya donde vivía
Había una morenita que alegre me decía,
Que alegre me decíaaaaaaaa
Me gusta los antorchistas _cómo?_
Que corren de noche y día
Con la promesa hacía la virgen
Hacía la virgen María (aplausoooos)282.

Estos cantos religiosos están determinados a partir del tipo de evangelización que se
instruye en su iglesia o parroquia, sean estas tradicionales o que pertenezcan al Movimiento
Carismático Católico. Esta última, a diferencia de las antorchas tradicionales cantan alabanzas
combinadas con la danza, mientras que otras antorchas que son independientes de la iglesia

281 Ver porras en Apéndice II: cantos y oraciones guadalupanos.


282 Canto dirigido a la Virgen de Guadalupe, durante las mañanitas realizado por la Antorcha “San Juan Pablo II”,
a las 12 de la noche del día 11 de Diciembre de 2014.

192
casi siempre reproducen los cantos y oraciones que son comunes entre las antorchas
guadalupanas.

Para el caso de la antorcha musicalizada utilizan instrumentos musicales y bocinas para


ir tocando alabanzas que retoman de la discografía de la antorcha Mezcalapa, además de incluir
canciones de su propia autoría que han grabado en discos compactos. Estas “tandas” musicales
son de aproximadamente una hora y después hacen una pausa para descansar, en ocasiones
corren en silencio y otras veces dejan amenizando con las alabanzas ya grabadas para evitar que
se calienten los aparatos y no haya algún accidente. Aunque suele ocurrir que al llevar estos
instrumentos musicales puede llegar a presentarse algún contratiempo durante el viaje, como
quema de algún fusible o problemas con el sonido o cosas de este tipo, situación que es
atendida por algunos antorchistas que se encargan de apoyar los asuntos técnicos que se
requieran y puedan solucionar de inmediato.

Las antorchas deben de contar con el apoyo de músicos que tengan la disposición de
viajar durante el recorrido, para ello invitan a un conjunto musical283 que pertenece al mismo
grupo carismático compuesto por un tecladista, un guitarrista y el animador o cantante que
durante todo el año participan en eventos religiosos en los que son requeridos.

Este grupo es transportado durante todo el recorrido en un camión que es exclusivo


para los instrumentos musicales, además de colocar grandes bocinas, efectos de luces y humo
que son utilizados durante la carrera, además de contar con una planta de luz que abastece de
energía a los instrumentos, los aparatos de sonido y la luz:
Se tuvo que comprar una planta de luz y un generador de corriente, que se le
invirtió, la antorcha Guadalupana aportó con $5000.00 pesos y yo lo demás;
eso sí es otra cosa porque el sonido lo tengo sino pues si es mucho gasto y
se tendría que rentar. Así lo hacemos, pues lo pongo y pues el servicio es
para Dios no para los integrantes, y no para dar espectáculo tampoco, y la
idea es de ir de lugar en lugar para difundir la alabanza y luego, así como los
de Mezcalapa, que pasan por Cintalapa, Tuxtla ya los están esperando,
cuando oyen el sonido se comienzan a reunir todos los antorchistas y
nosotros nos venimos por Villa Hermosa, Estación Chontalpa, Malpaso y la
idea es difundir la alabanza, y llegamos a Tuxtla el día 11 para que nos vea la

En año de 2016 la antorcha “Santa Cecilia fue acompañada durante la peregrinación del grupo “Ministerio
283

Anhelo”, los cuales son originarios de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.

193
antorcha Mezcalapa y nos den felicitación o consejos, cuando llegamos a
Nachig, ahí preparamos todo para entrar a san Cristóbal el día 12284.
Arribando a un sitio de visita.

Fuente: Trabajo de campo en Chiapa de Corzo. 2016

Al viajar a lugares lejanos como la Ciudad de México, éstas no llevan los instrumentos
musicales hasta el santuario final; ni se comportan como antorcha musicalizada, por lo que no
realizan alabanzas, ni danzan, sino que actúan como peregrinos comunes. Para ello dejan el
camión con los instrumentos en algún poblado285 que se encuentre de paso y sólo se mueven
con el transporte donde van los peregrinos, con él llegan hasta el lugar de visita286. Esto se debe
principalmente a que eleva los costos para el traslado de los instrumentos y el gasto de la
gasolina hasta los lugares de la peregrinación, así como también evitan el cuidado y supervisión
constante de los instrumentos a lo largo del recorrido y durante la estancia en el lugar de visita,
por lo que sólo se limitan a realizar su promesa y no manifiestan las maneras de expresión
religiosa comunes del movimiento carismático.

Para las antorchas musicalizadas, los organizadores programan la hora de entrada a


estos pueblos que están de paso, ya que la llegada es utilizada para presentar un espectáculo de
luz y sonido, por lo que planean su arribo entre las 5 a 6 de la tarde, momento en que la luz del

284 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.
285 Este camión es resguardado en alguna casa de algún devoto, mientras el contingente prosigue su camino, a su

regreso se incorpora para iniciar su participación dentro de la peregrinación.


286 Durante el trabajo de campo realizado en el año de 2016 junto a la antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”, el

camión con los instrumentos quedo en una casa particular en las afueras de la ciudad de Tapanatepec Oaxaca,
lugar que al regreso de la ciudad de México recibió a los peregrinos con comida.

194
sol comienza a ocultarse y pueda ser vista con mayor lucimiento. Al ser un lugar de paso o de
visita de antorchas, el júbilo de los peregrinos es más grande debido a que comienzan a
acercarse inmediatamente al contingente y la antorcha musicalizada comienza animar a los
observadores para que dancen y alaben a la virgen de Guadalupe, se gritan porras a los santos y
a los antorchistas.

Altar improvisado durante el descanso en el albergue


de CDMX.

Fuente: Trabajo de campo en CDMX. 2016

Todos comienzan a reunirse frente al camión, el tumulto se hace cada vez más grande,
todos bailan, danzan, levantan sus antorchas, los banderines, los cuadros de las vírgenes de
Guadalupe, los antorchistas sean estos tradicionales, ciclistas o cualquier otra forma de
peregrinar, cuando llegan las antorchas musicalizadas todos se vuelcan a ellos para alabar a
Dios y a la virgen. Como menciona el peregrino: “El que canta ora dos veces y el que canta y
baila ora tres veces”287. Esta explosión de júbilo dura desde la entrada del pueblo hasta la
llegada a la iglesia donde se lleva a cabo las festividades de la virgen de Guadalupe. Los
antorchistas siguen bailando, casi siempre el contingente se queda durante quince a veinte
minutos frente a la iglesia y luego prosigue su camino hasta encontrar un refugio donde se
quedan a descansar o proseguir su recorrido288.

287 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.
288 Ejemplo de ello es lo observado en el trabajo etnográfico del día 10 de diciembre de 2015, en la que esta
antorcha hizo su arribo en la ciudad de Tapanatepec Oaxaca, sitio de concentración de todas aquellas antorchas
que viajaron a otros partes del país procedentes principalmente de Chiapas.

195
Al llegar algún sitio donde pernoctan o descienden por algún motivo tienen que bajar
del camión todas las imágenes religiosas que llevan en la peregrinación, excepto aquellas que
van en las defensas de los camiones. Debido que al no hacerlo, existe la creencia que puede
tener algún incidente durante el recorrido. Este presagio ha sido experimentado por algunos
peregrinos que al no bajarlas han vivido experiencias negativas como algunos accidentes o
retrasos durante el viaje. Tal como lo señala Durkheim al considerar que lo sobrenatural se
encuentra en la naturaleza de las interdicciones que para este caso “proviene del respeto que el
objeto sagrado inspira y tiene por objeto impedir que se falte a este respecto” (Durkheim,
2000: 312 – 313), por lo que al considerarse un objeto sagrado adquiere poderes divinos y por
ello son tratados con respeto además de integrarlos a la peregrinación ya que de no ser así
puede provocar peligros.
Adornando el camión para hacer
su entrada a S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017

Cada grupo de antorcha lleva consigo una o inclusive hasta más de diez imágenes de la
virgen de Guadalupe en diferentes tamaños, ya sea en cuadro o de bulto, número que
dependerá de la antorcha, de los coordinadores y de las reglas del club. Muchas antorchas
tienen una virgen de Guadalupe que es la “predilecta”, mientras que las demás son vírgenes
que son de algún integrante o puede ser del grupo, pero todas son llevadas como peregrinas.
La “predilecta” es colocada en medio de todas las demás, es la que se le rinde culto y se

196
custodia, muchas veces esta imagen adquiere esta categoría por tratarse de ser una imagen que
contiene alguna importancia para el grupo, para algunos la consideran por haberla tenido desde
los inicios en la antorcha, porque es milagrosa o porque existe otra justificación que es válida
para ellos, otras llevan imágenes religiosas que le tienen devoción o son considerados los
santos patrones de los lugares que los representan, como menciona el peregrino:
Llevamos una virgen de Guadalupe y San Felipe de Jesús que es el patrón de
los jóvenes y Santa Teresita de Jesús de la ACJM de mujeres en cuadro y una
de bulto de la virgen de Guadalupe que lo lleva un señor en el camión289.

Con relación a esto último, es importante que todos los camiones que recorren los
caminos junto con los antorchistas lleven un cuadro de la virgen de Guadalupe, estas son
denominadas también vírgenes peregrinas, ya que van amarradas y aseguradas fuertemente en
la defensa de los carros para que no se mueva a lo largo del recorrido y son adornadas con
escarchas navideñas, flores, ramas de árboles naturales, globos y en ocasiones con luces de
colores, aspecto que realza la centralidad de la virgen de Guadalupe como símbolo de la
peregrinación y es la que los cuida a lo largo de su peregrinar, como señala el peregrino:
La primera vez que hice la antorcha ya tenía unos cuadros y yo compré una
virgencita en Villa Hermosa y pues con ella empezamos y luego dos
personas donaron dos cuadros también, que fue la virgen de Santa Cecilia y
una más que nos quisieron donar y ahora tenemos casi siete cuadros de la
virgencita290.

Este tipo de prácticas religiosas que mueven a miles de devotos genera que durante el
mes de diciembre, la policía federal de tránsito en el estado de Chiapas procura apoyar en las
carreteras a los antorchistas para evitar posibles accidentes, en los últimos años son los
coordinadores de cada antorcha que deciden no correr por las noches para mayor seguridad,
sólo en caso que la peregrinación se encuentre muy atrasada, algunos recurren a correr por las
noches utilizando chalecos fluorescentes para ser detectados en la obscuridad.

Cabe mencionar que los encargados de migración que se encuentran en las carreteras,
pocas veces paran a los camiones que traen peregrinos y si éste es parado, sólo los observan y
no piden papeles de identificación. Es por ello que las autoridades tanto de tránsito como de
289 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
290 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de

2015.

197
migración colaboran para que tengan una circulación libre por las carreteras en el estado de
Chiapas. Una vez cruzando la frontera estatal solamente son parados para observar a los
peregrinos desde los carros y sólo se limitan a preguntar el origen y destino de la antorcha, sin
solicitar documentación personal de los que ahí se encuentran. Algunos peregrinos mencionan
que han escuchado que hay algunas de las antorchas han sido “utilizadas” para pasar
indocumentados centroamericanos al centro el país291, sin embargo no ha sido verificado este
dato, ya que los peregrinos no les gusta hablar de ello y sólo lo mencionan como experiencias
de otros y no de manera personal.

4.2 Fase Preliminar

Como parte del proceso ritual planteado por Víctor Turner (1988), señala que en todo rito de
paso se encuentra en una fase preliminar o de separación como lo plantea Van Gennep (2008),
la cual “comprende la conducta simbólica por la que se expresa la separación del individuo o
grupo, bien sea de un grupo anterior fijo en la estructura social, de un conjunto de condiciones
culturales (un “estado”) o de ambos” (Turner, 1988: 101). Aunque Turner no específica con
claridad el o los momentos que se establecen durante esta fase, es el momento en que todos los
que se integran a un grupo de antorcha se involucran a organizar el viaje y se asumen como
peregrinos; dejando por tanto de pertenecer temporalmente a su estructura social cotidiana y
abandonando su posición para integrarse a una nueva estructura, para Van Gennep el estado
de separación corresponde a:
Todo cambio en la situación de un individuo comporta acciones y
reacciones entre lo profano y lo sagrado, acciones y reacciones que deben
ser reglamentadas y vigiladas a fin de que la sociedad general no experimente
molestia ni perjuicio (Van Gennep, 2008:15).

Es por ello que es necesario contar con personas que ayuden a integrar a estos novicios
previamente antes de iniciar el ritual, por lo que se apoyan algunos grupos de antorchas con los
sacerdotes de la parroquia que realizar pláticas o asesorías espirituales previas a la realización de

291Al respecto esta situación es un tema tabú entre los antorchistas, sin embargo durante las entrevistas realizadas
a los peregrinos solamente hacen mención que saben que esto ocurre pero no amplían la información ya que es
un tema que pone en riesgo la integridad jurídica de las antorchas, por lo que invita a ser abordado en una
investigación particular.

198
la peregrinación. Del total de las antorchas pertenecientes a San Cristóbal, algunas de ellas se
capacitan todo el año debido a que pertenecen a alguna parroquia o asisten al grupo de
Antorchas Unidas. El resto de los grupos se reúnen meses antes de iniciar las fiestas de
diciembre y trabajan de forma independiente, por lo que muchas veces son criticados por
algunos grupos evangélicos o por los mismos católicos al realizar esta práctica religiosa de
manera superficial o sin un seguimiento espiritual, al respecto menciona el Sr. Octavio
Hernández:
Se escuchan muchas cosas, por eso estamos muy mal parados y el padre
Eugenio decía que éramos como hongos que nacen solo en los días en que
está las fiestas y luego desaparecen; están en la coordinación y luego
desaparecen, son honguitos. Eso lo tenía el padre Eugenio y decía dónde
van dos regresan tres. Por eso nosotros estamos bien marcados. Y estamos
señalados que solo es para echar novia, echar trago, hacer fiesta así estamos
marcados. Ahora ya casi no, en Ocosingo, vimos cómo entre compañeros se
dan [golpes] entre ellos, los que asistimos en la coordinación [Antorchas
Unidas] no, pero algunas independientes sí, andan con su Tecate, con sus
botellas292.

Reunión previa a la peregrinación en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016

Esto ha propiciado que algunos de los jóvenes busquen u organicen nuevos grupos de
antorchas y se acerquen a los grupos parroquiales para que aprendan sobre el milagro
guadalupano y la predicación católica. Sin embargo, esto mismo ha dado como consecuencia
que se organicen también grupos independientes a estos y crean antorchas espontáneas que
solamente se reúnen los meses previos a las fiestas guadalupanas para organizar todo lo
referente a la peregrinación, como señala el peregrino:
292Entrevista realizada al Sr. Octavio Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María
(ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016.

199
A raíz que surgieron otros grupos, la gente empezó a dispersarse a otros
lugares y más que todo porque en otros grupos es más fácil para participar,
porque no hay que hacer nada todo el año, no hay reuniones cada sábado,
no hay trabajo en la parroquia, simplemente los llaman en estos días
[diciembre] y ya; y el joven es más difícil trabajar con ellos, en donde van
más lejos, es donde se van293.

En la organización de los grupos de antorchas, hay algunas que evitan la participación


de las mujeres debido a que mencionan que son una “distracción” para los hombres y por lo
tanto no pueden concentrarse en las actividades “únicamente” religiosas, ante esto menciona el
Sr. Octavio Hernández “optamos para llevar puros varones porque llevar mujeres es tentación,
nosotros vamos a correr, vamos por devoción, vamos a demostrar nuestra fe”294. Esta
característica es común entre las antorchas ciclistas o motociclistas, debido a que se considera
una actividad que implica más esfuerzo y de mayor riesgo, por ello no se observan a mujeres en
estos grupos. Al respecto Mary Douglas (1973) menciona que esto responde a una visión
ordenada de la sociedad, la cual regula la vida ritual y clasifica a los hombres o mujeres como
seres contaminantes:
El peligro del sexo se controlaba igualmente mediante reglas que protegían
las actividades masculinas contra la contaminación femenina y las actividades
femeninas contra la contaminación masculina. Todos los ritos tenían que
protegerse contra la contaminación femenina, viéndose obligados los
oficiantes de sexo masculino (las mujeres por lo general eran excluidas de los
asuntos del culto) a abstenerse del trato sexual la noche anterior a la
ceremonia (Douglas, 1973: 204).

Actualmente la participación de las mujeres es cada vez mayor entre las antorchas, ya
que en muchos de estos grupos llega ser el porcentaje de población más elevado que el de
varones, sin embargo, la mayoría de quienes componen la coordinación o el equipo cercano al
líder son generalmente hombres y son pocas las mujeres que llegan a ser coordinadoras o líder
de una antorcha. Este cargo debe ser una persona responsable que organice y supervise a sus
compañeros de acuerdo al reglamento interno, por lo que “los que lideran los grupos son

293 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
294 Entrevista realizada al Sr. Octavio Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María

(ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016.

200
personas con más antigüedad y responsables, [ellos] tienen más conocimiento y pueden hablar
con los compañeros”295

Una vez organizado el grupo de antorcha, algunos planean reuniones en los primeros
meses del año, otros comienzan a invitar a los jóvenes en los meses de octubre y noviembre
para integrar a los grupos y preparar espiritualmente a los peregrinos, en algunas de las
antorchas solicitan el permiso de padres o tutores para que puedan viajar sobre todo si éste es
menor de edad o para informar de algún contratiempo que pueda ocurrir en el trascurso del
recorrido.

Uno de los temas principales durante las reuniones previas es lo referente a la ruta y
lugar de visita para ese año, como menciona el peregrino:
Lo planeamos en junio, iniciamos las juntas quincenales, dos al mes y en
agosto y septiembre empezamos con las juntas semanales todos los viernes y
en septiembre vemos cuantos integrantes ya somos y escogemos tres lugares,
el cual, por ejemplo este año, pusimos la Basílica de nuevo, Chinaguapan,
Puebla y Paraíso Tabasco; y pues dependiendo de las posibilidades
decidimos el destino, porque nos sale bastante carito la cooperación y más
que nada el camión que es lo que cobra más. Y ahí con los que estemos
decidimos el lugar, y nos ponemos de acuerdo de las dinámicas que vamos a
trabajar, quienes son los coordinadores, la mesa directiva, y todo296.

La búsqueda del sitio de visita requiere de la discusión y aprobación de los integrantes


de la antorcha, la cual debe ser discutida tomando en cuenta los gastos, la ruta, el traslado y
todo lo referente a la peregrinación, como señala el Sr. Calixto:
Varias antorchas de acá se van, como los Alcanzar de [San Felipe] Ecatepec,
que pertenece a las unidas. No sé si ya llegó al Cristo Rey, pero si nosotros
llegamos de visita a San Juan de los Lagos, Jalisco, yo creo que varios se han
hecho metas. Incluso los de San Juan Chamula, visitan muchos lugares,
Cristo Rey, Juquilita, México, lugares muy diferentes, qué son los más
lejanos y que también nosotros hemos querido; pero a veces las
posibilidades económicas no nos permiten. Pero igual año con año no nos
quedamos, seguimos y seguimos como dicen seguir remando contra la
corriente, pero no dejar que sólo el barco, nos apoyarnos todos y al decir

295 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
296 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de

2015.

201
¡oye compañero que hacemos para mejorar este año!, y así, y nos vamos
enfocando en varias cosas297.

Elaboración de los alimentos durante la peregrinación.

Fuente: Trabajo de campo en CDMX. 2016

Para ir planeando todo lo referente a la peregrinación se organiza la compra de la


gasolina o el diesel, la estopa, los medicamentos como gasas, alcohol, desinfectantes, vendas,
pastillas para (dolor, temperatura, infecciones estomacales y de la garganta), para atención de
primeros auxilios, además de organizar la compra de alimentos no perecederos que sirven para
el consumo de los días del recorrido y así evitan el alto costo del viaje para los peregrinos. Para
ello se forman pequeños grupos internos para la compra de agua embotellada, azúcar, café,
aceite, sal, sopas, huevos, alimentos enlatados (verduras, sardinas, frijol, atún, salsas) además
del carbón o en ocasiones un tanque de gas (20 kg.), trastes de cocina y para el consumo, así
como acordar el costo que tendrá el transporte, como narra el peregrino:
Dependiendo del lugar preguntamos cuanto nos va a cobrar el camión y lo
dividimos entre todos y cooperamos pero como estamos ahorrando cada
semana de ahí sale. Ahora para gastos de camino, casi no gastamos porque
casi nunca bajamos a restaurantes y comemos en el camión, ahí compramos
que pan Bimbo, que mermelada, sal, entre todos y si alguien lleva o come
algo ahí, se están repartiendo. El primer día que viajamos llevamos nuestro
desayuno de aquí y si sobra se come al otro día y sino compramos pan
Bimbo, mermelada, yogurt y frutas298.

297 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.
298 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

202
Los gastos que se requieren para la inscripción y traslado de la peregrinación se ajustan
dependiendo del lugar a donde se visite y de la organización de cada antorcha, debido a que
hay algunas que piden la compra de un uniforme y cooperaciones a lo largo del año, para ello
en ocasiones se apoyan con familiares para cubrir los gastos, como señala el Sr. Calixto:
Un aproximado es de $500.00, porque llevamos despensa nosotros ahorita
recolectamos con nuestros familiares para ver con cuánto nos apoyan y nos
apoyan con despensas agua o cosas que nos puedan ayudar y con eso íbamos
bastante despensa, ya sólo venimos comprando las tortillas y algunas cositas,
así que de $500.00 o $600.00 es el gasto de un peregrino. Por ejemplo, ir a la
basílica es de $1000.00 a $1200.00 y así año con año nos organizamos para
ver a dónde iremos y cuántos serán los gastos299.

Como parte importante de la organización de la peregrinación está la participación en


las actividades en las cuales son necesarias para llevar a buen término el recorrido como cuidar
de los niños, la seguridad de cada peregrino y del transporte, así como apoyar y respetar al
coordinador en las actividades que sean asignadas a lo largo del viaje.

Supervisión y cuidado de los niños durante los recorridos

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Estas acciones son aceptadas por el peregrino de acuerdo al rol que asume en el
contexto de separación o preliminar, el cual debe guiarse bajo normativas que rigen el ritual.
Estas pueden parecer rígidas en algún momento debido a que “… quienes se interesan por el
mantenimiento de las “estructuras”, todas las manifestaciones prolongadas de communitas deben
de parecer peligrosas y anárquicas, por lo que deben de ser acotadas por medio de
prescripciones, prohibiciones y condiciones” (Turner, 1988: 115). Para esto es muy importante

299Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

203
aceptar el reglamento que rige la antorcha, la cual puede ser difundida de manera verbal en una
de las reuniones o en otras antorchas más organizadas cuentan con un reglamento escrito.

Ejemplo de ello es el reglamento de la antorcha “San Juan Pablo II”, el cual expone los
puntos principales que deben seguir toda persona que se integre a este grupo:

Reglamento de la Antorcha “San Juan Pablo II”


2015
1. Hacer oración cada vez que lleguemos o salgamos de algún lugar.
2. Respeto ajeno (respetar las cosas de nuestros compañeros).
3. No separarse de la antorcha durante la carrera y siempre estar unidos como verdadera
familia.
4. No decir palabras obscenas.
5. No consumir bebidas embriagantes.
6. No fumar.
7. Estar unidos y hacer oración en cada comida.
8. Respetar el turno al correr en caso este en mal estado.
9. No adelantarse si el camión hizo alguna parada en algún lugar.
10. No competir con las demás antorchas.
11. Hombres y mujeres que corran descalzos con tenis etc., deberán ir así durante todo el
recorrido al menos que se encuentre muy mal físicamente.
12. Niños y mujeres no bajaran a correr por las noches al menos que tengan alguna
petición o por necesidad.
13. Apoyarse mutuamente en las labores del camión y en otras cosas.
14. Hombres y mujeres dormir por aparte.
15. No llevar cosas de valor al menos que sea de utilidad y necesidad.
16. No se podrá lavar ni cambiarse el uniforme dentro de la antorcha al menos que sea
asearse.
17. Hombres y mujeres no utilizaran piercing y mujeres no maquillarse excesivamente.
18. Respetar las decisiones que se tomaron, tener ETICA antorchista (burlas o demás,
todos somos iguales).
19. Poner atención y un granito de arena para que todas las cosas salgan bien.
20. Personas que se miren abusando con la mayoría de las reglas sin excusa alguna se
retirarán de la antorcha300.

Hay antorchas que tienen un reglamento más elaborado y más restrictivo, mientras que
otras tienen reglas más tolerantes. Ejemplo de ello, es lo relacionado a las relaciones amorosas
que se suscitan durante el viaje, las cuales pueden estar totalmente prohibidas para algunas
antorchas, mientras que otras llegan a ser aceptadas. Algunas acceden que viajen junto a su

300 Reglamento de la Antorcha San Juan Pablo II, (Diciembre de 2015).

204
pareja pero deben mantenerse separados mientras dure la peregrinación y no podrán dormir
juntos, sólo en caso que sea una pareja estable entonces podrán hacerlo, de no ser así estarán
siendo monitoreados por todos para que esto no ocurra, como señala el peregrino:
No pueden ir novios, o si van no pueden estar juntos, antes de ir se les hace
saber, no pueden estar con besitos, apapachos, malas palabras, el cigarro,
alcohol tampoco, de no aceptar o romperla se regresa el integrante; otro
reglamento es para los que van descalzos, porque hay algunos que van así, se
les pide que si comienzan así que así lo terminen, solamente si está muy
herido pues lo atendemos y se vendan301.

En este sentido, las relaciones sexuales ha sido una de las reglas prohibitivas entre
diversos grupos sociales sobre todo si se trata de rituales o ceremonias religiosas en las que la
interrupción de las relaciones sexuales y la ausencia de actos que puedan profanar el ritual o
puede llegar a causar daños y accidentes a los que ahí intervienen, es por ello que las
restricciones sexuales son severamente castigadas y reglamentadas antes y durante la
celebración del ritual.
Por ejemplo, existen creencias de que cada sexo constituye un peligro para el
otro, mediante el contacto con los fluidos sexuales. Según otras creencias,
sólo uno de los dos sexos corre peligro por el contacto con el otro,
habitualmente el masculino con respecto al femenino, pero a veces ocurre lo
contrario. Semejantes configuraciones del peligro sexual pueden
considerarse como expresiones de simetría o de jerarquía (Douglas, 1973:
16).

Al respecto el Sr. Calixto González menciona:


Pues [un reglamento] interno no, pero lo platicamos todos y decimos
sabemos a lo que vamos, nada de alcohol, nada de cigarros, mucho menos
estar ahí con las compañeras o ir a ver a integrantes de otros clubes, o estar
molestando. Luego ya los vemos de la manita y que ya te conocí desde el
otro día, como un día antes venimos a veces de Tapanatepec a la Ventosa,
venimos ya casi juntas todas las antorchas y que surja eso de que yo te
conozco y empiezan a platicar y después luego agarrados de la mano, si
quieres ser mi novia o sea tratamos de cuidar eso; y vamos a lo que vamos y
enfocada la mente. Incluso ya ni nos da ni tiempo porque venimos agotados
de estar velando la antorcha toda la noche, nosotros nunca dejamos la
antorcha sola, mucho menos a las vírgenes, a las virgencitas nunca las
dejamos solas, hacemos nuestros grupos de dos y a velar a la antorcha302.

301 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.
302 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del

Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

205
Sin embargo, en las observaciones del trabajo etnográfico me percaté que hay otros
grupos de antorchas en las que no existe prohibición sexual durante la peregrinación, debido a
que por las noches es común encontrar a parejas de jóvenes en algunos rincones aprovechando
la obscuridad o durmiendo juntos, además de mencionar en algunas entrevistas que en
ocasiones las mujeres se embarazan después de haber realizado la peregrinación, aunque para
otras antorchas no aceptan que esto ocurra.

Del mismo modo sucede con el uso de las bebidas alcohólicas, en la que algunos
grupos de antorchistas aprovechan las noches para embriagarse. Estos actos no son aceptados
para los grupos de antorchas, sobre todo aquellas que tienen relación con la iglesia y
parroquias, debido a que piensan que estas actitudes demerita el objetivo religioso de las
peregrinaciones. Sin embargo, algunos de los entrevistados mencionan el caso de las antorchas
que salen del municipio de San Juan Chamula, las cuales son reconocidas a “las antorchas
chamulas” como uno de los grupos que consume estas bebidas durante el recorrido. Cabe
señalar que para estos grupos las bebidas embriagantes forma parte del uso ritual, por lo que la
concepción que se tenga de este producto dependerá de los modos culturales de quienes lo
practican. Sin embargo, este tema ofrece una ventana para ser estudiado con más detenimiento
ya que esto puede obedecer exclusivamente a los acuerdos y reglamentos que rigen los grupos
de antorchas, así como las tradiciones y los diversos significados que le pueden atribuir, por lo
que esta práctica es utilizada para unos y no para otros.

Grupo de la antorcha “Santa Cecilia” que asistió al


retiro previo la peregrinación en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017

206
Estos se deben principalmente a que una vez iniciada la peregrinación, la Iglesia deja de
tener control de las prácticas de estas communitas y cada una de ellas actúa de manera libre y
reglamenta sus propias formas de vivir su. Es por ello que la Iglesia católica trata de
involucrarse en el asesoramiento y seguimiento de algunos de los grupos que se acercan a ella
para “orientar” sobre el objetivo de estas peregrinaciones y evitar que en el proceso de la
peregrinación actúen fuera de la norma, acciones en las que muchas veces realizan actividades
que no son bien vistas por la misma Iglesia católica como las que se mencionaron
anteriormente.
Discusión de textos bíblicos, organizada por “Antorchas
Unidas” en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017

Es por ello que la Diócesis de San Cristóbal apoya con la creación de una Coordinación
de Antorchas Unidas que asesora y supervisa las actividades previas de los grupos de antorchas
durante todo el año, sin embargo existen otras más que se organizan de forma independiente y
se niegan a ser supervisados por otros, como menciona el Sr. Ricardo Urbina para el caso de la
Antorcha de la ACJM:
No es una asociación es una coordinación de antorchas y esa lo
coordinamos aquí y después se fue para otro lado. Esa coordinación para
que se coordinen para el día 30, porque hay una peregrinación de todas las
antorchas que están unidas entre comillas, porque sí, el 30 nos unimos y nos
aceptan, pero los que se coordinan son pocos porque casi todos se reúnen
poco durante el año, habrán como 10 o 12, porque no se coordinan todos.
Porque aquí en san Cristóbal habrá como unas 50 para arriba, que sí tengo

207
mis hermanos, mis sobrinos, mis hijos, mis nietos y nos reunimos todos
hacemos nuestra antorcha y vámonos303.

Como parte de la fase preliminar del ritual, algunas antorchas inician las actividades
previas a la peregrinación con un retiro en el que participan las antorchas registradas en
“Antorchas Unidas”. Esta actividad es planeada por la Madre María Luisa que organiza un
sábado antes de las peregrinaciones, desde las 8 a. m a 3 p. m, en la que los grupos de
antorchas realizan diversas dinámicas, entre ellas conferencias, grupos de trabajo, discusión de
textos y lluvias de ideas sobre temas bíblicos, así como se aprovecha a discutir el papel del
antorchista, el fuego y la devoción a María de Guadalupe.

En un segundo momento, se reúnen los pertenecientes a “Antorchas Unidas” para


organizar la misa que es realizada el 30 de noviembre en la iglesia de Guadalupe, que tiene
como fin celebrar la llamada “Misa de Envío”, en la que participan todas aquellas antorchas
que se registran ante la agrupación previamente. Para ello deben de apoyar con la cooperación
del pago de la misa que ofrece el Obispo y dos sacerdotes de Guadalupe, el pago de la
estudiantina y los cohetes que se queman durante la peregrinación. Cabe mencionar que hay
muchas antorchas de la ciudad que comienzan a salir días antes de esta celebración por lo que
si pertenecen a esta agrupación, lógicamente no pueden asistir a este evento pero si son
recordados al hacer oración.

Para llevar a cabo esta celebración, se inicia con la procesión de la “virgen Peregrina”
que se encuentra resguardada en la capilla dedicada a san Pedro y san Pablo de la colonia El
Cascajal en la Ciudad de San Cristóbal de Las Casas304. Esta imagen tiene un especial aprecio
por los antorchistas debido a que es una litografía de la imagen de la virgen de Guadalupe que
fue donada el año de 1999 por el Papa Juan Pablo II a los guadalupanos de San Cristóbal de
Las Casas en una de las visitas a México, como narra el peregrino:
…..la virgen llegó de la Ciudad de México acá y luego peregrinó en muchos
pueblos indígenas de por acá, y nadie sabía dónde estaba, hasta que don
Ramón, que coordinaba la Antorcha de San Felipe Ecatepec junto con otros
antorchistas fueron a buscarla en una comunidad de la selva, ahí se

303 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
304 Cabe señalar que esta actividad en ocasiones no se realiza ya que depende de la organización de los

coordinadores del grupo.

208
encontraba. No querían dárnosla y tuvimos que mostrar un papel donde
decía que era de acá. La trajimos pero nadie la quería en su iglesia, visitó el
Cerrillo, Mexicanos, María Auxiliadora y otras y no la querían hasta que en la
colonia el Cascajal la recibieron, ahí había problemas con la gente y cuando
llegó todo se arregló, por eso la gente la quiere y ella sabe porque está ahí, la
gente le hace ceremonias tradicionales, le pasan incienso y acá la cuidan
(Entrevista realizada a Alejandro Gutiérrez. Noviembre de 2015).

Imagen que se encuentra en la Col. Cascajal


en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2015

“La virgen Peregrina” es una réplica litográfica de la original que se encuentra en la


ciudad de México, mide aproximadamente dos metros alto por un metro de ancho, la cual
tiene en uno de los costados una leyenda que dice: “Imagen de Nuestra Señora de Guadalupe
conocida como “Virgen Peregrina”, bendecida por S.S. Juan Pablo II el 25 de enero de 1999 y
que recorrió el territorio nacional de enero de 1999 a abril del 2000, con motivo del Gran
Jubileo de los 2000 años de nuestra Redención” y en el otro costado menciona “Certifico que
la presente impresión es una reproducción fiel del Archivo digital del Sagrado Original de la
Imagen de Nuestra Señora de Guadalupe. Firma Norberto Rivera Carrera. Arzobispo Primado
de México. 12 XII 1998”. Esta imagen representa para los antorchistas a la virgen que
peregrina y que recorre los caminos junto a ellos, que los guía y que los protege, es por ello que

209
antes de emprender las peregrinaciones de cada una de las antorchas van en busca de ella para
que los bendiga.
Imagen cargada sobre los hombros para subir
a la iglesia de Guadalupe en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2015
La reunión del día 30 de noviembre, está dirigida por la Madre Teresa de Jesús, que es
la Coordinadora de Antorchas Unidas y se encarga de celebrar el Rosario en la iglesia de la
Colonia el Cascajal junto con los antorchistas de los distintos clubs y grupos de antorchas de la
ciudad que se integran a la agrupación, al término, la coordinadora dirige unas palabras a los
antorchistas305 en la que pide la protección de la virgen de Guadalupe para que bendiga a cada
uno de ellos su peregrinar, mientras que algunos antochistas comienzan a levantar el cuadro de
la virgen para sacarla del templo y dirigirlo a la calle. La virgen peregrina es subida y amarrada
en un camión de tres toneladas que se encuentra sin redilas y detrás de él, hay otros carros

305 Mensaje de la Coordinadora de Antorchas Unidas, la Madre Teresa de Jesús: en esta capillita de San Pedro y
San Pablo en donde nos encontramos. Nos acompañan y nos reciben con mucho agrado. Hoy nos volvemos a
encontrarnos con ellos y mostramos nuestra fe a la virgen de Guadalupe, nuestra morenita. Que esa alegría de la
virgen María nos convoca, nos llama a manifestar, sea en verdad con algún propósito de que es la caridad fraterna,
como dice el Papa Francisco como hermanos de una gran familia, de qué? de fraternidad, de quién? o para quién?,
Para el pueblo. Que el señor hoy que nuestros coordinadores somos llamados y convocados para ser
representantes de cada uno de ustedes para ser testimonio de la vida y vamos a comenzar con una oración para
después sacar con el debido respeto a Nuestra Madre Santísima con unas oraciones. Nos decimos ser
guadalupanos con algarabía, cantos que nos alegran, como la virgen le gustaba saltar, cantar y danzarle a Dios.
Seamos como la virgen pues, cantando y adorando a Dios. No con faltas de respeto sino con toda tranquilidad
pero con alegría que los caracteriza porque la mayoría son jóvenes y así inicie nuestra oración. Gracias por
acompañarnos y acompañarnos en este caminar que hoy inicia. 30 de Noviembre de 2016.

210
adornados con globos, festones y amenizados con música y luces; todos los peregrinos se
colocan detrás llevando en las manos faroles, velas y flores.

La procesión comienza su recorrido306, todos gritan porras y cánticos dedicados a la


virgen, algunas antorchas independientes se integran al contingente al llegar al zócalo.
Finalmente este contingente se reorganiza para iniciar el último recorrido y caminan por el
Andador Guadalupano y siguiendo la calle Real de Guadalupe con dirección a la Iglesia de
Guadalupe. Una vez en la plazuela de la iglesia algunos hombres cargan el cuadro de “la virgen
Peregrina” para subir por todas las 79 escaleras hasta llegar al templo donde los espera el
obispo que bendice a la virgen, así como a los antorchistas y familiares que asisten a esta
celebración litúrgica307, posteriormente el contingente baja de nuevo a la virgen y es regresada a
su capilla en la colonia el Cascajal; al término de la procesión, en las afueras de esta capilla se
obsequia tamales y café a todos los asistentes.

Estas ceremonias y rituales son compartidos entre los miembros de las distintas
antorchas que integra el grupo de “Antorchas Unidas”, donde reúnen a grupos de antorchas
pedestres, ciclistas o musicalizadas. Ellas comparten símbolos y creencias comunes e integran
al grupo que los regula y los organiza, como menciona el Sr. Octavio Hernández, coordinador
de la ACPM:
A raíz de eso me metí más a la coordinación, si asistíamos pero no
participábamos en la coordinación, cuando llegamos nos atendía la madre
306 El recorrido inicia desde la calle Cascajal hasta topar con la calle Dr. José Pacheco Luna, hasta salir al
boulevard Juan Sabines, posteriormente llega a la Av. Insurgentes directamente hasta topar con el parque central
de la ciudad.
307 Fragmento del sermón que dio el Obispo Mons. Enrique Díaz durante la misa del 30 de Noviembre de 2016:

“Hace un rato me avisaron que ya vienen de Guadalajara, yo a ratos me asusto hasta donde andan llegando. Pero
porqué lo hacemos? Cada quien sabe en su corazón, porqué lo haces? Porque algunos lo hacen por deporte, o
porque algunos lo hacen para conocer otros lugares o a lo mejor alguno lo hace para pasársela bien con sus
amigos, yo no sé porque lo hacen?, la virgen sí sabe porque lo hacen, ella mira en tu corazón, ella descubre lo
gigante y lo pequeño de lo que estás haciendo. Yo creo que ella busca junto a su hijo Jesús las oportunidades para
buscar el verdadero amor… y hoy que van a empezar a caminar y hoy vamos a bendecirlos a todos ustedes yo les
diría en el camino piensen mucho en María de Guadalupe y en el regalo grande que da María que es su hijo Jesús,
sino recibimos a su hijo Jesús nos cansamos, llegaremos cansados, quemados del sol y llegaremos como muchos
de ustedes tiznados de la antorcha pero con el corazón lleno de Jesús y lleno de esperanza, para después
enfrentarse a lo que tienen que luchar. La mayoría de ustedes son jóvenes y ven facilito el trago, la cerveza, el posh
y estoy aburrido y me voy a divertir y ahora que te aventuras y que te lanzas al peligro, a lo desconocido que hay
de importancia en la caminata, en la antorcha, en la peregrinación, nos enseña muchas cosas de como en tu vida
que quieres, como vas caminando con la antorcha, en el camino tienes que ir pensando que quiero yo encontrar.
No tengan miedo a Juan Diego le dio una encomienda de construir un templo, anunciar, denunciar, gritar que se
podía vivir con el señor, no tengan miedo de sus gritos, de sus porras, del cansancio, den testimonio que sea
respaldado con sus acciones en la vida”.

211
Efigenia, teníamos platicas todos los sábados en las oficinas conciliar, las
antorchas los atendía el padre José, el padre Rogelio Frutis que en paz
descanse, el padre Eugenio ya fallecido, para ese entonces ya existía
Antorcha Unidas, esto era como en los 90s, ahí asistíamos los
coordinadores, los antorchistas, como en el 85 comenzamos porque nos
impartían temas lo sacerdotes.

A la par de esta coordinación, los grupos de antorchas se organizan de manera


particular, ejemplo de ello es la antorcha musicalizada “Santa Cecilia” que además de
pertenecer a la Coordinación de Antorchas Unidas, el coordinador organiza junto con los
predicadores Magnolia y Dardo un “Retiro carismático” una semana antes de iniciar la
peregrinación, para ello, eligen un sitio alejado del centro de la ciudad para que todos los
participantes de la antorcha se purifiquen previamente y se encuentren consientes de la
responsabilidad y compromiso de peregrinar con devoción.

Retiro de los niños de la Antorcha “Santa Cecilia” de


S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Durante “el retiro” se invita a que los peregrinos lleguen muy temprano (a las 8:00 am.)
al lugar donde se lleva cabo las actividades religiosas. En este lugar se organiza una serie de
oraciones y pláticas sobre “la importancia del perdón”, posteriormente se realizan dinámicas y
se planea un desayuno comunitario en el que todos intercambian sus alimentos, con la
intención de fortalecer los lazos de unión entre los “hermanos”.

Posteriormente se comienza con un espacio de reflexión espiritual en donde el


predicador emite un discurso apoyándose del ambiente natural del bosque para que los
asistentes dejen fluir sus emociones, durante este lapso algunos lloran o se desmayan, actitudes

212
que son valoradas por todos ya que expresan que esto se debe a que ellos se han acercado al
“Espíritu Santo”, estas personas son atendidas por auxiliares que se encargan de supervisar a
los participantes. Al término del evento y de haber concluido sus actividades espirituales, están
listos para iniciar la peregrinación que se acerca. A la par se realizan actividades exclusivamente
para los niños que participaran en la antorcha, ellos son atendidos por algunos de los
integrantes del grupo que hacen actividades manuales y lecturas bíblicas para incentivar y
enseñar la importancia del antorchismo.

En esta fase preliminar existen diversas actividades rituales previas que involucran a
grupos de manera individual o en colectivo, situación que evidencia de alguna manera que la
communitas se presenta a lo largo del año constantemente involucrada en rituales menores, por
lo que se visualiza a través de esta fase que los grupos de antorchas no se diluyen del todo
manteniendo relaciones con otros grupos, tema que se analizará en la discusión sobre
communitas en este mismo capítulo. Sin embargo, es el momento en que el antorchista se
desvincula con su realidad, se aleja de su vida cotidiana y se asume en una estructura que la
identifica y la cohesiona, en un lugar en el que el sujeto se aísla de su colectividad
institucionalizada y normada.

Reunión de Retiro organizado por la Antorcha


“Santa Cecilia” en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

213
PROMOCIÓN DE EVENTOS GUADALUPANOS308

Fuente: Trabajo de campo durante 2014 – 2018.

La mayoría de la publicidad está realizada para circularse en las redes sociales, aunque aún se imprimen carteles,
308

posters o afiches.

214
4.3 Fase Liminar

Esta fase corresponde a la parte más importante de todo proceso ritual y por la que Turner le
dedica más atención de las tres fases del rito de paso plateado por Van Gennep (2008), sin
embargo, la propuesta de Turner (1988) está centrada principalmente en asumir la conducta de
sujeto ritual frente a una relación estructural de relaciones institucionalizadas y en las que al
encontrarse en esta etapa liminal todo individuo o el colectivo se aleja y se integra al mismo
tiempo a una nueva estructura y se aísla de la vida cotidiana, como menciona Turner:
La “liminalidad” es ese estado intermedio entre la marginalidad o condición
de pertenecer (de manera continua, por adscripción, temporal, situacional o
voluntariamente) al margen de la estructura de un sistema social, de la
conducta, del status, de los roles (Turner, 1988: 52).
Peregrino custodiando las imágenes y la antorcha.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Es en este proceso de la peregrinación en donde el sujeto ritual ocupa el rol de


peregrino que se aleja y se desviste de su condición social durante la peregrinación. Es el
momento en que el peregrino ingresa en la liminalidad debido a que es un ser que se encuentra
en el umbral, por lo que no tiene en este momento un lugar fijo. Deja de pertenecer a su grupo
social y asume otro rol durante el ritual, debido a que se encuentra en un espacio intermedio en
el que se apropia como un ente sagrado y en esa posición de transición es renovado y
fortalecido para de nuevo reintegrarse a su vida cotidiana.
El peregrinaje involucra el alejamiento de la persona respecto a la rutina de
la vida cotidiana y su compromiso con una búsqueda comunal de un lugar
sagrado, el cual simboliza el renacimiento del individuo en nuevos valores.

215
Cuando el peregrino arriba al lugar sagrado, después de hacer experimentado
la communitas durante la ruta de la peregrinación, su identidad sufre un
proceso de renovación (Chihu, 2001:148).
Grupo de peregrinos entrando a la iglesia de
Guadalupe en SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

En este caso es durante la peregrinación el momento en que el sujeto ritual se


encuentra en un periodo de marginalidad, en transición de un status social a otro, en este lapso
de tiempo y durante “el peregrinaje libera al individuo de las restricciones obligatorias y diarias
de su estatus y su rol; lo define como un ser humano integral con una capacidad de libre
escogencia, y entre los límites de su ortodoxia religiosa le presenta un modelo vivo de
hermandad humana” (Turner, 2009: 51), como señala el peregrino:.
Desde enero, esto de la antorcha les digo a los compañeros peregrinos
somos todo el año, toda nuestra vida, peregrinamos toda nuestra vida, no
sabemos que es lo que nos puede pasar, peregrinos de trabajo tras trabajo,
escuelas peregrinas, así debe de ser, así es la vida de un antorchista,
peregrinar cada rato309.

Asume su nivel de “novicio o neófito”, como lo plantea Turner:


Todos los atributos que distinguen a las categorías y grupos en el orden
social estructurado se hallan aquí simbólicamente en suspenso; los neófitos
son meros entes en estado de transición y, por el momento, sin lugar ni
posición” (Turner, 1988: 109).

Entrevista realizada al Sr. Alejandro Gutiérrez, Coord. de la Antorcha San Juan Pablo II, del barrio de
309

Mexicanos. San Cristóbal de Las Casas. El 11 de Diciembre de 2015.

216
Es en este momento en que el líder del ritual asume el papel de ser el conocedor y
guiador de llevar a los peregrinos a los santuarios, que en este caso no serán ancianos sino
jóvenes que se comprometen a salvaguardar el ritual y el cuidado de los participantes, además
de que este personaje debe formar parte de la comunidad. Para ello Víctor Turner propone que
durante el ritual, el peregrino asume una posición de inversión de status, ya que es la persona que
se involucra, se comporta como miembro del grupo y obedece las indicaciones del coordinador
o líder de la antorcha.
Es el que frecuentemente se encuentra en los rituales cíclicos y regidos por el
calendario, normalmente de tipo colectivo, en los que, en determinados
momentos culturalmente definidos […], prácticamente se ordena a
determinados grupos o categorías de personas, que habitualmente ocupan
posiciones de status inferior en la estructura social, que ejerciten una
autoridad ritual sobre sus superiores, los cuales, a su vez, deben de aceptar
de buen grado su degradación ritual (Turner, 1988: 171).

Coordinador de la antorcha “Santa Cecilia”


frente a los integrantes de la antorcha.

Fuente: Trabajo de campo en Tehuantepec, Oaxaca.


2016
En este sentido, los peregrinos una vez integrados a la antorcha, deben de asumir ese
rol aun cuando su posición social en su vida cotidiana sea de mayor nivel socioeconómico,
ocupa la posición igualitaria al resto de los peregrinos, mientras que el comité de la antorcha
serán las personas que supervisan y regulan el comportamiento de los integrantes de la
antorcha, el cual está organizado por un presidente, secretario, tesorero y algunos vocales.

217
Algunos comités, sólo llegan a funcionar con el presidente o coordinador310 de la
antorcha y es apoyado de dos o tres integrantes que lo asesoran para la toma de decisiones, así
como tratar los asuntos relativos a la representación del grupo ante otras instancias (la
Diócesis, Antorchas Unidas, etc.) que son necesarias para realizar la peregrinación.

Integración del grupo en ceremonias religiosas.

Fuente: Trabajo de campo en Tehuantepec, Oaxaca


2016

Turner plantea que el papel del líder o del que se eleva de status constituye un personaje
que la misma comunidad lo avala, el cual adquiere un poder por encima de los demás pero que
al mismo tiempo debe de integrarse como miembro del grupo.
Quienes tienen un status elevado sienten especial tentación de emplear la
autoridad con que la sociedad les ha investido para satisfacer estos deseos
personales y privados, pero deberían considerar sus privilegios como
ofrendas que les hace la comunidad, la cual, en última instancia, tiene el
control último sobre todas sus funciones (Turner, 1988: 111).

La creación del comité de la antorcha funge como trámite, en realidad muchas veces la
confianza y responsabilidad de alguno de los integrantes es lo que determina la participación
dentro del grupo y de quienes coordinaran el equipo; regularmente, siempre cae el mayor peso

310 Algunos de estos organizadores o presidentes de la antorcha son aquellos peregrinos que vienen de otras
experiencias de antorchas y deciden crear una nueva, es común, que estos organizadores o presidentes tienen el
puesto indefinidamente, debido a que son ellos quienes fundaron al grupo y cuenta con los instrumentos que se
requieren para realizar el recorrido (lámparas, chalecos fluorescentes, escaleras, banderas, virgen peregrina, sirenas,
pebeteros, estandartes, etc.); así como la experiencia de la organización de éstas peregrinaciones. Además del
presidente o comité organizador son apoyados por la parroquia a la que pertenecen, quien se encarga de asesorar
de manera muy cercana todo lo referente a las actividades religiosas que lleven a cabo los antorchistas, entre ellos,
algunos de éstos presidentes o coordinadores de las antorchas pertenecen y colaboran en los grupos de jóvenes de
la misma iglesia, por lo que apoyan en la realización de otras actividades necesarias en el templo.

218
en el coordinador de la antorcha, quien es el que decide, autoriza y determina las actividades
que guían la peregrinación y es la persona que tiene la facultad de solucionar algún
contratiempo y quien toma las decisiones y aplica o no el reglamento.

Es en este proceso ritual en que el antorchista vive su experiencia de peregrino con


limitaciones, él no tiene un lugar establecido y no pertenece a ningún lugar, como lo define
Manuel Delgado a éste momento:
Las «gentes del umbral», como las llama Turner- eluden o se escapan del
sistema de clasificación que distribuye las posiciones en el seno de la
estructura social. Otra característica es que el transeúnte ritual no tiene nada,
ni estatuto, ni propiedad, ni signos, ni rango que lo distinga de quienes
comparten su situación (Delgado, 1999: 107).
Son “los neófitos” o quienes se encuentran en un proceso transposición ritual durante
“su fase ‘liminal’, debido a que los participantes abandonan su identidad o su condición social,
trocándola por una nueva” (Chihu, 2001, 144). En este caso el antorchista al ser liminoide se
reconoce al igual que los demás y se dicen llamar “hijos de María o guadalupanos”. En esta
condición el peregrino es según Turner:
Alguien que hace una jornada a un lugar sagrado como un acto de devoción
religiosa”, mientras que “un peregrinaje” es “la jornada de un peregrino”,
para esta fuente, significa “consagrado o muy estimado a una deidad […]
dedicado o reservado o apropiado a alguna persona o propósito; hecho
santo por asociación religiosa, santificado (Turner, 2009: 24).

Es por ello que el papel del peregrino/antorchista está asociado con el origen
fundacional del culto guadalupano al identificarse con la imagen de Juan Diego, como el
mensajero que llevó el encargo de la virgen de Guadalupe al obispo Zumarraga:
… ve allá al palacio del obispo de México, y le dirás de qué modo yo te
mando de mensajero… Le contarás bien todo lo que has visto y admirado y
lo que has oído. … te daré felicidad y merecerás mucho que te recompense
tu fatiga y tu trabajo, con que vas a poner en obra lo que te he dado en
comisión. … fui a donde me enviaste a decir tu pensamiento y tu palabra…
tal como tú lo mandaste… Pero no lo creyó. Por eso mucho te suplico…
que alguno de los nobles, los conocidos, estimados y respetados les des el
encargo de pasar y llevar tu mensaje y tu palabra para que le crean. Le
respondió la Virgen: Oye hijo… sabe en tu corazón que no son pocos los
servidores y mensajeros, a quienes puedo dar el cargo de que lleven mi
pensamiento y mi palabra, para que cumplan mi voluntad. Pero es de
absoluta necesidad que seas tú mismo el que vayas y hable de esto, y que
precisamente con tu mediación y ayuda se haga realidad mi deseo y mi

219
voluntad. Nican Mopohua. (Tema para los antorchistas. Misión Guadalupe.
Diciembre, 2012).

Esta encomienda que le entrega a Juan Diego va a ser un elemento significante para
que posteriormente cada peregrino guadalupano represente a este Juan Diego que camina y
que recorre los lugares; como enviado de la virgen para que conozcan su mensaje de buenas
esperanzas, pero también es el personaje que el antorchista se identifica por considerarse
también mensajero de los pobres y de los más desprotegidos.
El mediador, el mensajero de los hombres, se encuentra con María,
mediadora y mensajera de parte de Dios. María de Guadalupe no lleva el
mensaje sola, confía su mensaje a Juan Diego. Es una madre que les da
encargos a sus hijos, a los sencillos, a los pobres (Ibíd.).
Antorchistas chamulas dentro de la iglesia de
Guadalupe de SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

El peregrino es ese personaje que se encuentra en el espacio liminal como un ente que
está en un momento intermedio y que tiene un manto de sacralidad, por lo que “ser antorchista
es ser mediador entre el cielo y la tierra, es ser mensajero de la Buena Noticia de Dios”311. Es el
elemento que funda la práctica de peregrinar a los santuarios marianos o de Cristo y que
mediante la evangelización mariana se realiza el antorchismo como una manera de difundir
también el catolicismo.
El compromiso de un peregrino, físicamente, con una jornada ardua pero
inspiradora, es, para él, aún más impresionante —en el campo simbólico—

311 (Tema para los antorchistas. Misión Guadalupe. Diciembre, 2012).

220
que los símbolos visuales y auditivos que dominan las liturgias y ceremonias
de una religión calendáricamente estructurada (Turner, 2009: 51).

Para la Iglesia, el antorchista tiene el papel de evangelizar a todo aquel que lo vea pasar
en nombre de María; es guiado por ella, es bendecido por ella en los caminos, en su sacrificio,
en sus acciones, mientras sea el mensajero está bendecido por Dios y por María de Guadalupe,
como lo señala este fragmento de los antorchistas:
La Virgen fortalece a Juan Diego y lo reafirma como sujeto evangelizador.
María lo anima y le repite su misión, pues es él quien lo debe hacer.
Juan Diego se quedará a la entrada del templo después de las apariciones. Se
convertirá en intercesor ante Dios de las necesidades de su pueblo. Si
nosotros aceptamos ser antorchistas nos convertimos ahora en los
mensajeros, en los mediadores, del mensaje que trae la Virgen de Guadalupe,
con nuestras acciones, con nuestra vida estamos llamados a recordar a la
comunidad la presencia y el proyecto de Dios (Tema para los antorchistas.
Misión Guadalupe. Diciembre, 2012: 19).

El peregrino al ser un mensajero de una comunidad creyente católica se encuentra con


dificultades en el camino, sobre todo con algunos grupos no católicos que no reconocen a
estas prácticas devocionales como válidas:
Este encargo no es tarea fácil, tenemos muchas dificultades que nos impiden
realizar nuestra misión. Como las tuvo Juan Diego, no le creían, lo
rechazaban hasta lo quería golpear. Si aceptamos ser verdaderos mensajeros
con nuestra vida nos criticarán nuestros “amigos”, se burlarán de nosotros,
no creerán que hayamos cambiado. Juan Diego reconoce sus debilidades
pero comprende que es a él a quien la Virgen le pide el encargo: nadie puede
hacerlo por él, es responsable ante su encargo. Nosotros, igual que Juan
Diego, somos débiles y muchas veces pensamos que el encargo de construir
la comunidad no es para nosotros y se lo dejamos a otros, pero nadie puede
hacer por mí, la voluntad de Dios (Tema para los antorchistas. Misión
Guadalupe. Diciembre, 2012: 9).

Esto se debe principalmente a la proliferación de iglesias evangélicas, que ha generado


que muchos de los antorchistas hayan tenido alguna experiencia de rechazo por practicar esta
devoción. Es decir, algunos de ellos mencionan que mientras recorren los caminos son
abucheados o les gritan mensajes de insultos e incluso mensajes obscenos cuando pasan por
algunos caminos donde se encuentran personas que no aceptan o rechazan este tipo de
prácticas religiosas. Como menciona el joven Luis López “en ocasiones nos gritan que nos

221
pongamos a trabajar en lugar de molestar en las carreteras”312, así mismo menciona el Sr.
Calixto González sobre el tema:
La gente te queda viendo a veces te critican con extrañeza o diciendo y estos
que nos tocó una experiencia en Salina Cruz Oaxaca veníamos de la Basílica
hace 5 años pasamos todo lo que es Salina Cruz y al final estamos en una
pequeña cancha está abandonada prácticamente y nosotros nos pusimos a
barrer, a limpiar y sólo pasaban escueleros no quedaban encarando, incluso
una vez que nos dijeron ¡y estos locos qué?, pero prácticamente dije yo [sic]
no lleva la religión y si son muy diferentes deben de respetar nuestra religión;
pero son experiencias que hemos vivido que a veces nos quedan encarando
o a veces nos critican, incluso otro compañero igual venía corriendo cuando
fuimos a Juquila para venir a Puerto Escondido, igual una señora salió con
un garrote y lo empezó a corretear y no nos entienden son experiencias muy
diferentes cuando vas a otros lugares313.
Antorchitas en la puerta de la iglesia de
Guadalupe, SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Para los antorchistas esto no es causa de molestia, al contrario sostienen que tienen la
misión de orar por esos “hermanos alejados para que Jesús con la intercesión de María los
acerque de nuevo a la familia cristiana” (Ibíd.); haciendo alusión a que la comunidad católica es
la única válida. Es por ello, que mientras pasan por algún pueblo, gritan porras o cantan

312 Entrevista realizada al Joven Luis López, peregrino de la antorcha “Hijos de María” de la ciudad de San
Cristóbal de Las Casas, el 23 de diciembre 2015.
313 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del

Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

222
canciones alusivas a la virgen de Guadalupe para que cualquiera que los escuche les mande
mensajes de evangelización a todas aquellas personas que no creen en ella.
No obstante, los rituales también pueden dividir al permitir el
establecimiento de fronteras simbólicas. La categoría de “extranjero” dentro
de una sociedad puede ser articulada y confirmada mediante rituales. Los
símbolos que subrayan las diferencias culturales entre dos grupos son los
elegidos para usarse en rituales de “separación”. Es frecuente que tales
símbolos sean del nacionalismo o de la religión (Chihu, 2001:143).

Es en este momento en que la peregrinación con antorcha establece fronteras a partir


de diferencias de creencias o representaciones simbólicas, las cuales contienen una gran
cantidad de interpretaciones de las que sus devotos le atribuyen, contrario para aquellos grupos
en que consideran que estas imágenes no representan más que objetos de culto no válidas para
su iglesia.

En esta posición de neófitos, el uso de los uniformes entre los participantes los
identifica en la posición y rol que ellos juegan durante el ritual, para ello no hay diferenciación
en su condición social, ya que muchas de las antorchas tienen el mismo diseño en el uniforme
desde hace muchos años. “Tenemos un uniforme oficial que es blanco con franjas de colores
patrios y ese es el uniforme oficial que tenemos nosotros y ya llevamos muchísimos años con
ese, con los compañeros que ingresan se les adquiere un uniforme igual314”.

Algunas de las antorchas llevan un uniforme deportivo (pantalón o short deportivo y


una playera) que encarga previamente el coordinador con alguna empresa de publicidad,
mientras que los peregrinos abonan el pago durante los últimos meses previos a la
peregrinación, como narra el peregrino:
Lo de las tilmas no salen $100 pesos ya impresa, y el uniforme estamos
hablando de $500 a $400 pesos, tenemos que comprar la camisa y el
pantalón que es de manta prácticamente es lo más caro, lo compramos en el
andador de Santo Domingo dónde están los artesanos y pedimos manta no
lavada porque la lavada está carísima nosotros compramos la no lavada qué
es más delgada y la venimos a remojar a la casa, al otro día las lavan ya
quedan suaves para el recorrido315.

314 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015
315 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del

Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

223
Mientras que para las antorchas ciclistas solamente se mandan a hacer playeras que los
identifica y la licra de ciclista es comprada al gusto del peregrino. Actualmente hay pocas
antorchas que cuentan con algún patrocinador que les proporciona el uniforme, de ser así
algunas de estas prendas llevan algún logotipo de la empresa como parte de la publicidad, las
cuales “pagan” con plegarias u oraciones que hacen los antorchistas para que sus negocios les
vaya bien y de esta manera los peregrinos les queda los uniformes cada año, como menciona el
peregrino:
Así esta si fue proporcionada por un licenciado que quiere que se le pida por
él, que a su nombre se le diga una oración, a las personas pues que nos han
apoyado y ahora en la serenata a la virgen se les pide a esas personas que nos
han ayudado316.
Coordinador de la antorcha “ACJM”
de SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2015
El antorchista se enviste de prendas que le proporciona identidad solamente en los días
de peregrinación, por lo que no se diferencia por su género ya que todos visten de la misma
manera y se identifican como “hijos de María” o guadalupanos, como menciona Turner:
Estos atributos, la ausencia de sexo y el anonimato, son muy característicos
de la liminalidad, y en muchas modalidades de iniciación en las que los
neófitos son de uno y de otro sexo, los varones y las hembras se visten de
forma semejante y se les designa con un mismo término (Turner, 1988: 109).

Entrevista realizada al Sr. Alejandro Gutiérrez, Coord. de la Antorcha San Juan Pablo II, del barrio de
316

Mexicanos. San Cristóbal de Las Casas. El 11 de Diciembre de 2015.

224
El objetivo de todo peregrino es la identificación de la pertenencia a un grupo debido
al gran número de antorchas que se mueven a lo largo del estado, motivo por lo que es
necesario identificarse con el uniforme y al mismo tiempo les da identidad a los peregrinos,
como menciona el Sr. Ricardo Urbina al recordar cómo comenzó a establecerse esta
característica entre las antorchas guadalupanas:
Anteriormente se ponía uno una playera zaga blanca y se compraba un short
blanco y se ponía atravesado un listón rojo en frente y llevaba la fecha, el
año y la ciudad, pero como fueron pasando los años, ya con los compañeros
fuimos adquiriendo un uniforme y el párroco nos dijo que debía de tener un
uniforme oficial para que se identifiquen porque como ya hay más grupos317.

Este tipo de indumentaria ha sido la característica por muchos años de la antorcha de la


ACJM, que también fue utilizada para el grupo de mujeres (JCFM) de esta misma agrupación
en la década de los años 50s, como recuerda la Sra. Rosa Cruz:
Teníamos dos o tres uniformes, procuramos comprar el uniforme y ya en el
trayecto nos poníamos otro uniforme, pero también podíamos ir con otro
color. Pero nos decíamos que teníamos que ir con uniforme, pero ya ve que
por el humo se negrece y se percude entonces, lo lavábamos y entrabamos
limpios. Cuando había mucho frío teníamos que salir con pans. A mí no me
gustaba andar de short pero me tenía que someter a todos los demás. Este
uniforme era parece que con letras [JCFM], y parece que cuando fuimos a
Tapachula fue blanco con guinda cada año cambiaban. Durante los dos años
que fui y cuando fuimos a Cintalapa fue diferente.

Aquí se presenta la idea de Turner (1988) al referirse al rol que ocupa un ente liminal, en
el que asume que los “neófitos” en todo rito de iniciación se encuentran desposeídos de su
condición social estructurada y de un sistema clasificatorio, por lo que se puede observar que:
Pueden ir disfrazados de seres monstruosos, llevar un simple taparrabos
encima o incluso ir desnudos, con el fin de demostrar que, en cuanto seres
liminales que son, no tienen status, propiedades, distintivos, vestimenta
secular que indique el rango o rol, ni posición alguna dentro del sistema de
parentesco (Turner, 1988: 102).

Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
317

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

225
Peregrinos de la antorcha de descalzos
en SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2015
En este proceso liminal su conducta es de humildad y por lo tanto la indumentaria es
concebida como una manera de expresar la sumisión ante la virgen y ante la sociedad, es por
ello que se uniforman dotándose de nuevos atributos que los colocan en una nueva condición
en el ritual y después del ritual. Es por ello que actualmente se encuentran algunas
agrupaciones de antorchas que utilizan como parte de la indumentaria un traje con las
características tradicionales que representa a san Juan Diego, éste es un calzoncillo hasta las
rodillas, camisa sencilla, ambas hechas de manta blanca, con un mandil en color café o blanco,
éstas prendas son utilizadas por muchas de las antorchas, las cuales son encargadas con meses
de anticipación con algunas costureras de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. Entre las
antorchas que recurren a este tipo de prendas de vestir para hacer su peregrinación son las
antorchas de descalzos, ya que la idea es ir lo más sencillo posible y que le da sentido al
sacrificio a su peregrinar, como menciona el señor Calixto González, coordinador de la
Antorcha de descalzos del barrio del Cuxtitali de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas:
Si compramos nuestra tilma, las mandamos hacer y sucesivamente ponemos
los logotipos y las frases que deben llevar nuestra tilma y nuestra manta, que
nos identifica como Juan Diego, que prácticamente las antorchas del club de
descalzos es la costumbre y lo originario de un antorchista318.

318Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

226
En el “mandil/ tilma” o en la playera de los antorchistas llevan impreso el nombre y
algunas de ellas el escudo del club, el nombre del lugar de visita y la imagen de la virgen de
Guadalupe o alguna imagen religiosa, como la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia” tiene en
su escudo algunos elementos importantes para el grupo, como menciona el Sr. Iván Díaz:
Yo fui buscando los modelos y tiene sus significados como la flama que es
la antorcha, es la luz que cada uno quiere llevar cada integrante, tener la
claridad por fuera y también por dentro, las flores son las flores que
encuentra Juan Diego cuando llega con el obispo, eso son las florecitas, la
mano, es la mano de cada uno de los antorchistas, y la cruz, es la cruz que
día con día cargamos cada uno, es Juan Diego, y además colocamos la
imagen de santa Cecilia y la virgen de Guadalupe319.

Algunos utilizan el uniforme exclusivamente durante su ingreso a la ciudad de San


Cristóbal y para otras lo llevan todos los días que dure el recorrido, algunas de las antorchas
cuidan que sus miembros no estén “sucios” debido a que consideran este acto es una falta de
respeto hacia la virgen de Guadalupe y para las personas que les ven pasar.
Nosotros en el camino llevamos diferente ropa, diferente playera, short, pero
el último día nos ponemos el uniforme oficial ya cuando entramos. Por lo
regular venimos limpios, no se trata de venir todos sucios, porque es parte
de la preparación no de venir así, no se trata de venir sucios, no porque se
van diez días no se bañan, es antihigiénico eso320.

La concepción sobre la higiene personal puede ser interpretada de diversas maneras


entre algunos grupos de antorchistas, esta condición puede entenderse como un acto simbólico
religioso de sacrificio del peregrino, éste se compromete durante el traslado a no bañarse y ni
ponerse otra vestimenta, es entendido como una muestra de expiación que entregan a la virgen
de Guadalupe, como señala Mary Douglas:
[La]…idea de la suciedad nos conduce directamente al campo del
simbolismo, y nos promete una unión con sistemas de pureza más
obviamente simbólicos (Douglas, 1999: 55).

En este sentido, la limpieza de las impurezas del espíritu se lleva a cabo en la traslación
que hace el peregrino de un lugar a otro; representa un proceso, en el cual, el antorchista se

319 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.
320 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

227
despoja de vicios e imperfecciones que lo contaminan para surgir como un nuevo ser, renacido
hacia una vida nueva.
Peregrina bañando a su hijo en Tehuantepec,
Oaxaca.

Fuente: Trabajo de campo en Tapanatepec, Oaxaca. 2016

En esta concepción de la suciedad algunas consideran que la imagen del guadalupano


no debe de ser desagradable y ofensivo para la gente que los ve por lo que cuidan de su
apariencia, como menciona un peregrino:
Nosotros desde que salimos de aquí nunca nos la quitamos y si no las
quitamos pero cuando nos vamos a bañar o cuando descansamos porque no
podemos, ¡Cómo pueden aguantar doce días los que se van a la basílica o los
que se van a Chalma!. Son catorce días sin bañarme, no aguantamos, y nos
volvemos a poner la misma ropa y así continuamente no rompemos las
reglas.321

En este sentido estos peregrinos tienen una concepción generalizada sobre la falta de
aseo, es decir: “la suciedad, tal como la conocemos, consiste esencialmente en desorden. No
hay suciedad absoluta: existe sólo en el ojo del espectador” (Douglas, 1973: 14). Este
planteamiento responde a una concepción de la higiene o la limpieza desde una visión
“occidental”, como menciona Douglas:
Una es que el acto de evitar la suciedad es para nosotros cosa de higiene o
estética, sin tener nada que ver con nuestra religión. La segunda diferencia es
que nuestra idea de la suciedad está dominada por el conocimiento de los
organismos patógenos (Douglas, 1973: 54).

321Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

228
Peregrinos durmiendo dentro del camión en
movimiento.

Fuente: Trabajo de campo en CDMX. 2016

Douglas refiere a esta última concepción como una manera contemporánea de percibir
la higiene personal a partir del descubrimiento de la trasmisión de las enfermedades en el siglo
XIX. Para el caso de algunos grupos de antorchas prefieren el cambio de ropa durante el
recorrido, mientras que otras permiten que sus integrantes no se cambien de indumentaria
durante la peregrinación ya que forma parte del sacrificio y adquieren un valor simbólico y
sagrado, como menciona el peregrino:
Así eso no se lo pueden quitar y desde el treinta que se los di la playera, ya
están benditas, el padre se los bendice, ya si dentro de la carrera gustan
asearse adelante, si se la quieren quitarse adelante, le vuelvo a repetir no sólo
lo que ésta afuera nos hace sentirnos bien sino también lo que ésta dentro
debe estar limpio y solo bendito esta dios, bendito sea, nosotros somos sus
hijos. Bendita esta los santos, bendito esta dios, bendito también nosotros
que estamos en una antorcha, por eso la playera no se quita322.

Ahora bien, en esta fase liminal en el que el peregrino/antorchista se encuentra en el


umbral en el que asume la posición de sacrificado y utiliza el dolor para expresar parte de esa
ofrenda que le entrega al ser sagrado, es la manera en que se libera de sus cargas emocionales
para que de nuevo sea integrado a su vida cotidiana, como lo señala Durkheim:
Los dolores que imponen no son, pues, crueldades arbitrarias y estériles; es
una escuela necesaria donde el hombre se forma y se templa, donde adquiere
las cualidades de desinterés y de resistencia sin las cuales no hay religión
(Durkheim, 2000: 324).

Entrevista realizada al Sr. Alejandro Gutiérrez, Coord. de la Antorcha San Juan Pablo II, del barrio de
322

Mexicanos. San Cristóbal de Las Casas. El 11 de Diciembre de 2015.

229
El sacrificio y los dolores forman parte de la manda de los peregrinos desde la
incomodidad del viaje, la poca y sencilla alimentación, la falta de higiene y muchas otras
restricciones hace que sea el peregrinar aún más gratificante para los antorchistas; en este
sentido, el cuerpo vive de igual manera el sufrimiento, el esfuerzo, el cansancio, el dolor y la
manera de implorar con los pies que es ofrecida a la virgen para cubrir sus mandas, como
menciona el peregrino:
Sí cada quien va viendo pues como va sintiendo su cuerpo porque también
las ampollas y todo eso nos van afectando, pero ya no siento ni dolor ni
nada, ya se viene a sentir tantito cuando ya vienes ya acercándote, porque los
días que te vas recorriendo ósea los días que ya viene, [sic] se acerca llegar a
tu casa, son los días que se van acercando y encuentras piedrotas o hay
carreteras que ya están desgastadas, y sí te duele y tienes que caminar de
ladito, pero ya cuando se encalla el pie o cuando ya sientes que el pie ya está
medio desgastado o sea te las tienes que curar igual323.

La manera de curación de las heridas durante el recorrido son diversas, ya que esto va a
depender de las experiencias de los antorchistas, de cómo se curan sus propias llagas al correr
descalzos, mientras unos se curan con remedios improvisados, otros prefieren curarse con
medicamentos alópatas, como menciona el peregrino:
Nosotros nos la curamos con diésel y estopa ardiendo y ya eso mismo le va
creciendo cayó, ósea mojamos la estopa, la pasamos en el pie y la pasamos
por el fuego y ya, es un calentón o te las va curando. Pero cuando ya son
unas grandes las ampollotas ya no se puede hacer nada porque a la hora que
le quitas el agua está dura, así nos ha pasado, pero vamos preparados con
medicamentos llevamos nuestro pequeño botiquín porque tampoco un
botiquín grande no alcanzamos, así que ese dolor se viene a sentir cuando ya
estamos cerca324.

Para esto, las antorchas pedestres prefieren iniciar su recorrido durante la madrugada
para avanzar el camino lo más posible y así evitar los rayos del sol del mediodía, para el caso de
las antorchas de descalzos prefieren correr el mayor tiempo por la noche, ya que de esta
manera el suelo se encuentra más fresco y pueden evitar lastimarse.
El piso está ardiendo y si se siente más duro cuándo vienes por los lugares
que si hay un buen de calor tienes que levantarte a las dos de la mañana para
empezar a correr tenemos que levantarnos a las tres o a las dos para

323 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.
324 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del

Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

230
aventajar temprano para que esté más fresco porque a las doce o a la una no
se puede ni avanzar325.

El correr conlleva mucha motivación pero también un compromiso de realizar el


recorrido, es por ello que al realizar las peregrinaciones invierten mucha energía al grado que
puede llegar a perjudicar su salud326, mientras que en los casos que deciden correr descalzos el
esfuerzo es mayor, ya que se arriesgan a lastimarse durante el recorrido haciendo que su
práctica sea más dolorosa, al respecto Durkheim menciona:
El dolor es el signo de que ciertos vínculos que lo ataban al medio profano
se han roto; atestigua pues que está parcialmente liberado de ese medio y, en
consecuencia, es considerado como el instrumento de la liberación
(Durkheim, 2000: 323).

El ir descalzo es un sacrificio que tiene una intención ya que lo hacen para darle gracias,
pagar alguna manda o pedirle la solución de algún problema, como narra el peregrino:
Yo pienso que es eso y una ofrenda o algo qué queremos de corazón y que
ella nos ha cumplido porque han surgido milagros muy diferentes incluso
este año íbamos con la preocupación llevamos el trotón, nos faltaba como
$1000.00 y yo no sé, ni la compañera que tenía el dinero. Pero quien sabe,
sacó su dinero y no sabe ni de donde apareció el dinero, cuando venimos a
ver el milagro y estaba completo el dinero incluso nos sobró $500.00 más y
ya habíamos hecho cuentas acá, nos juntamos un día antes de irnos e
hicimos cuentas nos faltan $800.00 pongamos $1000.00 y cuando venimos a
ver al otro día estaba todo solucionado. Íbamos entrando a Tuxtla cuando
llamó a la compañera y me dice ya vamos a pagar, si hay que pagar porque
va a poner diesel dicen el chofer, cuando empieza a sacar la compañera me
empezó a dar y a dar y yo quedo viendo, pero de dónde salió ese dinero ósea
no entendemos pero como le digo, son milagros grandes y así sucesivamente
nos vamos motivando más de salir descalzos nuestra fe es grande y el amor a
ella yo digo que siempre es el amor a ella y nuestra promesa por las que
queremos cumplir y ser en este año327.

325Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.
326 En los datos etnográficos se registró que algunos de los antorchistas tuvieron desmayos, calambres,
hipoglucemia, desequilibrio de la presión arterial, motivo por el cual llevan un botiquín de medicamentos para
atender estos contratiempos, sin embargo, la solidaridad del grupo es sobresaliente ya que al encontrarse alguna
persona con problemas de salud se deja de correr y se mantiene en observación al corredor hasta que se
restablezca.

Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
327

Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

231
Una de las normas que circula entre aquellos que practican el antorchismo, es que al
ofrecer el sacrificio de correr por una manda, lo debe de realizar por lo menos tres años
consecutivos y una vez culminado la penitencia pueden seguir solicitándole favores. Aunque
esta práctica sea anual, los feligreses tienen muy claro que sólo en caso de enfermedad o alguna
situación que interrumpa su participación, pueden faltar; de lo contrario quedan expuestos a
que suceda algo inesperado y negativo en su vida futura, como menciona el peregrino:
Hay veces que vienen personas que hicieron promesa de tres años y
estuvieron en otra, dos años y quieren terminar ahora. Eso no lo permitimos
que jueguen de grupo en grupo y mucho menos para la religión no hay que
ponerse un límite, que solo tres años y ya, eso no, para servirle a la virgencita
no hay que ponerse un límite, ahí viene que tu solo eres guadalupano
solamente en diciembre o cuando lo necesitas, no eso no porque tengo
compañeros que están todo el año aquí y esos si son verdaderos
guadalupanos y si dicen querer a la virgen328.

Hay quienes hacen promesas que responden a situaciones difíciles que los mismos
antorchitas viven, por lo que buscan la solución de sus problemas a través de una imagen
sagrada, por lo que en ocasiones la promesa de correr puede durar muchos años como
agradecimiento o por una fiel devoción a la virgen.
Lo hacen por agradecimiento, le hacen solicitudes, estas solicitudes son para
mi familia, y como a mí que le pedí porque estaba preso, llegaban a darme
animo en la cárcel, me apodaban “Frijol” y llegaban a decirme que solo yo
me iba a quedar, que todos los amigos irían, menos yo. Y dije para el
próximo año iré, porque de que me saca, me saca; y el próximo año salí y le
ofrecí a la virgen que correría, [que solo lo dejaría], una por viejo o por
muerte y no le he fallado a ella, y llevo treinta y tres años corriendo329.

Otro de los elementos que aparecen en este tipo de peregrinaciones es quienes han
experimentado “el milagro” de la virgen durante su recorrido, como menciona el Sr. Octavio
Hernández:
Cuando fuimos a Puebla, estaba embarazada mi mujer y estaba con amenaza
de aborto y cuando ya íbamos a correr me dijo que estaba bien para que me
fuera a correr y como trabajaba en la Volkswagen visitamos al doctor Bonilla
y pregunte que si podía ir a la antorcha y cuando llegamos a la antorcha a
Puebla; pregunté y fui a pedirle [a la virgen de Guadalupe] que me lo diera,
pero que si me la quitaba, ella sabía qué hacer; salimos de Puebla, y
[pregunte] y ella se sentía bien y cuando llegue a San Cristóbal la vi y desde

328 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
329 Entrevista realizada al Sr. Octavio Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María

(ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016.

232
ahí, mi hija salió bien y su parto, hasta ahora sigue bien y está en la
universidad.

Fotografía de la Aparición de la virgen


de Guadalupe en un pebetero de la
Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

Muchas veces la relación entre el milagro y la devoción van muy de la mano entre los
peregrinos, los cuales experimentan diversas manifestaciones que son atribuidas a la
intercepción de María de Guadalupe, como señala Chihu: “Los estados ‘liminales’ también se
producen en los procesos en los cuales aparecen experiencias paranormales, sobrenaturales
(2001: 147). Hay que mencionar que para el caso de “la Antorcha Musicalizada Santa Cecilia”
de la Ciudad de San Cristóbal de Las Casas, tiene un simbolismo mayor debido a que, según
cuenta el Sr. Iván Díaz, que en uno de los viajes que realizaron a Veracruz hicieron una parada
para desayunar sobre un terreno baldío. En esta ocasión, bajaron todos los peregrinos del
camión y colocaron la antorcha en una “base de la antorcha”330. Fue en ese momento que
mientras descansaban y algunos la custodiaban, uno de ellos se percató de que en una de las
paredes de la lámina del pebetero estaba totalmente negra y tiznada y sobre ella se reflejaba la
silueta de la virgen de Guadalupe. Al respecto recuerda el Sr. Iván Díaz:

330Objeto que tiene tres patas de fierro (solera o alambrón) y en medio una círculo donde es depositada la
antorcha para que mantenga parada y siga quemando el fuego.

233
Fue una experiencia bonita, es un día que íbamos por Malpaso y dejamos la
antorcha ahí, nos olvidamos de la antorcha y uno de nosotros se percató de
la antorcha y le pusieron estopa y como estábamos desayunando la antorcha
estaba ahí, y al ponerle la estopa como que se derramo el diesel, vimos que
en la misma antorcha se formó la imagen de la virgen de Guadalupe y fue
una experiencia grande, que ahora tengo la imagen. La levantamos y al
apagarla desapareció y la volvimos a encender y ya no apareció, ya no la
volvimos a pintar Ahora no la llevamos y se le tomo una foto, ya no la
usamos [sic], está en el altar guardada331.

En ese momento le tomaron fotos y la guardaron muy cuidadosamente para que no se


perdiera “la imagen de la virgen en la antorcha”. Este hecho significó para ellos un milagro y
bendición, por lo que a partir de este momento, fue colocada hasta el día de hoy en el altar del
coordinador de la antorcha; aunque ya no se observa esta imagen, sigue ahí como muestra de
este milagro. Según cuenta Iván Díaz, al percatarse de que después de algunos días se fue
desvaneciendo la imagen, le volvieron a poner diesel y la prendieron para ver si la imagen se
apreciaba, pero esta no volvió a aparecerse; sin embargo, mantienen esa evidencia en una foto
que está colocada igualmente en el altar con un mensaje:
Aparición de La Santísima Virgen de Guadalupe en la Antorcha del “Club
Santa Cecilia” de San Cristóbal de Las Casas. 10 de Diciembre de 2013. 10:
57: 12 a.m. en el tramo carretero de Coatzacoalcos, Ver. A Raudales Mal
Paso nos encontramos en un terreno baldío desayunando. Cuando un
integrante del club percató la aparición en la antorcha del mismo club332.

Estos “milagros” vienen a ratificar aún más la devoción a la virgen y de peregrinar a sus
santuarios, así otros grupos de antorchas llevan entre sus imágenes alguna fotografía de
“siluetas” de la virgen de Guadalupe que se “aparecieron” en diversos e inexplicables lugares u
objetos, al respecto Douglas menciona:
Tenemos que reconocer que la posibilidad de la intervención mágica se
encuentra siempre presente en la mente de los creyentes, que es humano y
natural esperar que beneficios materiales resulten de la representación de los
símbolos cósmicos (Douglas, 1973: 35).

331 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coordinador de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de
noviembre de 2015.
332 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coordinador de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de

noviembre de 2015

234
Accidente suscitado en el tramo Tuxtla Gutiérrez – SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

En esta condición de intervención de los seres sagrados pueden ocurrir distintas


acciones negativas para los peregrinos, como la muerte de alguna persona durante la
peregrinación, esto puede ser recibido con resignación debido a que fue ella que así lo decidió y
“se irá bendecida por la virgen”. Ésta y cualquier situación que pueda pasar durante el viaje es
decisión de la virgen de Guadalupe debido a que se considera que es la que guía, vigila y
supervisa todos los actos mientras peregrine. Así también si ocurre algún accidente se cree que
la virgen “llama la atención” para que no se rompa las reglas de la peregrinación, es por ello,
que la deidad adquiere un poder dual, en la que por un lado puede ser compasiva y por otro
llega a ser severa ante los actos que realicen los antorchistas durante el recorrido, como señala
Douglas:
La separación que existe entre el santuario, las cosas, las personas
consagradas, y las profanas -parte normal de los cultos religiosos- tiene el
mismo fundamento que las separaciones inspiradas en el temor a los
espíritus malévolos. La separación es la idea esencial en ambos contextos;
difiere sólo en su motivación. Sin embargo, no es tanta la diferencia, ya que
los dioses benévolos también a veces inspiran temor (Douglas, 1973:25).

Entre las creencias que se le atribuye a la virgen de Guadalupe es que al incurrir a


alguna falta al reglamento o al realizar algo prohibido durante el viaje, la virgen actúa a través
de alguna acción sobrenatural que puede ser traducida en incidentes de todo tipo, como atrasos
durante el viaje, problemas entre compañeros, accidentes automovilísticos, entre otros, como
señala el peregrino:

235
No nosotros íbamos con el otro club veníamos con el tortón, fue un
instante de que nosotros nos quedamos aquí en coita y salió incluso una
antorcha antes no sé si veníamos mal, venían pequeños defectos entre
compañeros, como le digo de noviazgos, y veníamos en Cintalapa, ya nos
había dado una prueba muy grande la virgen [sic]. Llevamos un Cristo de
yeso o de hueso no sé, de dónde lo habían traído los señores o les habían
regalado, no sé ni de dónde, pero si lo conservaron bastante, incluso
traíamos a las virgencitas, las teníamos acomodadas, llegamos a un lugar y las
acomodamos y en eso, en Cintalapa [estaba] bien el viento y [que] nos las
tira todas. Pero porque no se rompieron las vírgenes y el Cristo si?, sí ahí
nos está dando entender varias cosas. [Entre ellas] el milagro que sucede del
Cristo del atentado, nos va dando pruebas que la virgen viene con nosotros
y está con nosotros presente y surge esto y no lo que pasa que el Cristo
defiende a la virgen y venimos y ya venía roto el Cristo. En otra ocasión, en
coita nos quedamos tantito por un poco no salíamos antes, y cuando nos
dicen que atrás hubo un accidente y dónde surgió un accidente grande,
donde fallece un chavo, nos tocó ver el chavo antorchista, fue un percance
más atrás de nosotros, el carro se fue incrustar, no nos tocaba a nosotros333.

Cuando se presenta algún incidente durante el recorrido, el grupo de antorchistas


invocan a celebrar un Rosario, algunas alabanzas o se hacen reuniones urgentes para llamar la
atención a todos los participantes de posibles faltas que pudieron haber hecho, por lo que
invitan a pedir perdón de sus actos para no poner en riesgo la vida de todos los que van en la
antorcha334.

333 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.
334 Ejemplo de ello es lo ocurrido durante el trabajo campo en diciembre de 2016, en el que ocurrieron una serie
de incidentes que pusieron en riesgo la integridad de los participantes. En esa ocasión, pude registrar alrededor de
seis eventos significativos que se tuvieron durante el recorrido, en los que les atribuyeron como “llamadas de
atención de la virgen de Guadalupe” a los integrantes de la antorcha: Estos incidentes se presentaron a lo largo del
viaje, desde la ida a la ciudad de México hasta el regreso a la cuidad de San Cristóbal de Las Casas. Primeramente
se dio, el 5 de diciembre de 2016, en la que el cuerpo de organizadores de la antorcha Musicalizada “Santa
Cecilia”, veían con asombro el atraso del viaje a la Ciudad de México, llevándonos 24 horas solamente de ida,
siendo que esto puede llevar a lo más 18 horas, por llevar camiones pesados; otro de los incidentes sucedió
cuando nos encontrábamos en el albergue para peregrinos en la Basílica de Guadalupe, el día 6 de diciembre, uno
de los peregrinos tuvo un desmayo, motivo que en ese momento no provocó un mal presagio. El tercer incidente
se dio ya de regreso, el día 11 de diciembre, en el que mientras atravesábamos la calle central de la ciudad de
Tuxtla Gutiérrez, dos de los integrantes de la antorcha sufrieron desmayos provocados por el nivel de calor de la
ciudad y el alto grado de esfuerzo que los jóvenes hacen en todo el recorrido. Sin embargo, en el momento no
causó extrañeza pero fue mencionado en una reunión posterior. Otro de los incidentes que tuvo la peregrinación,
fue el 12 de diciembre, por la carretera federal (tramo Tuxtla Gutiérrez – San Cristóbal de Las Casas)
aproximadamente a 15 o 20 kilómetros para llegar a la comunidad de Nachig, Zinacantán. En el que se detuvo la
antorcha debido a que se quemó una de las bujías de una de las baterías que alimentaba la energía de los
instrumentos musicales, esto provocó que se retrasara la entrada a esta comunidad. Uno de los lugares
importantes para los organizadores, ya que, una de las características de esta antorcha es “entrar” a los pueblos
tocando canciones, para llamar la atención de todo aquel que lo vea pasar para difundir y “evangelizar” el milagro
guadalupano. Posteriormente en este mismo tramo, se dio el quinto de los incidentes más sobresalientes a lo largo
del recorrido, el mismo 12 de diciembre. En la que uno de los integrantes de la antorcha que llevaba

236
Como en la liminalidad de los ritos de iniciación, tal actor – peregrino es
confrontado por secuencias de objetos sagrados y participa en actividades
simbólicas que él cree eficaces para la transformación de su interior y, a
veces, con optimismo, de su condición exterior del pecado a la gracia, o de la
enfermedad a la salud. Espera milagros y trasformaciones, del alma y del
cuerpo (Turner, 2009: 43).

Peregrinos subiendo al camión


en movimiento.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

La relación divina que existe entre la imagen guadalupana y los peregrinos es de una
madre que cuida de sus hijos, por lo que puede castigar o bendecir al mismo tiempo, como lo

“alimentando” la antorcha con estopa y gasolina, y venía sentado cerca de las escaleras en la que bajan los
corredores, comenzó a incendiarse el bote con estopa, momento en que todos los que venían en el camión
comenzaron a gritar. Inmediatamente pararon el carro y apagaron el incendio que se había provocado. Esto fue
impactante para todos los integrantes de la antorcha, ya que inmediatamente tradujeron en “una llamada de
atención” que la virgen de Guadalupe estaba haciendo al grupo, debido a que kilómetros atrás venían muy
desanimados, durmiendo y muchos de ellos ya no corrían, quedando solamente con unos 15 corredores, quienes
hacían el esfuerzo de continuar llevando la antorcha. La reacción de asombro llamó la atención de todos los
peregrinos y entre el impactó del momento, se escuchó entre ellos, una voz que invitaba a que se bajaran todos y
comenzaran a realizar una pequeña peregrinación, todos caminando y llevando la antorcha. En ese momento se
bajaron del carro y comenzaron a caminar, mientras el camión iba lento detrás de ellos. Este acto despertó
literalmente a todos los integrantes, además de propiciar de nuevo a organizarse de acuerdo a los turnos y correr
con seriedad, ya que se habían relajado, lo que para ellos había provocado el descontento de la virgen. Al llegar a
la comunidad de Nachig, de nuevo hubo un sexto percance, en el que uno de los camiones se le trabo una de las
llantas, motivo que de nuevo se atrasa el recorrido. Este fue un motivo por el cual, una vez que los peregrinos
entraron a la iglesia del pueblo, fueron llamados para una junta urgente en el atrio de iglesia. Todos los miembros
de la antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”, se reunieron haciendo un círculo, en el que tanto el coordinador
como uno de sus ayudantes comenzaron a llamar la atención de aquel que hubiera incurrido en una falta o no
estaba por devoción, además de pedirles que cerraran los ojos para que pidieran perdón por si habían incurrido en
algún pecado a lo largo del viaje, lo que había provocado atrasos y peligros, además de mencionar que en ninguna
ocasión había tenido tantos contratiempos como en esta ocasión. En ese momento nadie fue atacado
directamente, sin embargo todos se mantenían preocupados y apenados de lo ocurrido.

237
señalan Lisbona e Higuera citando a Marzal, “están de alguna manera vivos’ puesto que
escuchan oraciones y otorgan bendiciones, milagros o castigos. Son, en muchos de los casos,
parte de la familia” (2012: 18). Las acciones de los peregrinos están íntimamente ligadas a las
imágenes que llevan en la peregrinación, ya que son parte del grupo, la hacen viva y activa. Ella
se encuentra en la cabeza de la peregrinación, abre los caminos y los cuida, así como también
les llama la atención. Esta simbiosis se percibe a lo largo de los caminos, ella siempre los
acompaña; se le trata de madre, de Lupita, con un trato de confianza, ella no está por encima
de los peregrinos, ella ésta ahí, junto a ellos, como señala Lisbona e Higuera:
El carácter multifacético de las imágenes religiosas actuales, [son] aquellas
que caminan, fundan, cuidan, emparentan, pelean y hasta comen, es
narración cotidiana imposible de obviar cuando el acercamiento a ellas
trasciende la ortodoxia pretendida como ideal religioso (2012: 19).

En esta dualidad de concebir a lo sagrado, el sujeto ritual vive una experiencia de


incertidumbre durante su etapa liminal como iniciado, momento que puede padecer diversas
experiencias que trastocan su propia conciencia y hasta llegar a percibir actos sobrenaturales
que se expresan físicamente, como menciona Durkheim al referirse a las ceremonias de
iniciación entre los Larakia de Australia:
Muchos ritos que se practican en esta ocasión consisten precisamente en
infligir sistemáticamente al neófito sufrimientos determinados, para
modificar su estado y hacerle adquirir las cualidades características del
hombre (Durkheim, 2000: 322).

Entre estas acciones se encuentran los múltiples accidentes que han dado a lo largo de
los años debido principalmente al considerarse una práctica religiosa muy riesgosa, por lo que
el ser sagrado adquiere un poder por encima de los “neófitos” que puede interpretarse como
una “llamada de atención” o bien estar protegidos y cuidados por ella, por lo que todo lo que
ocurra será porque la virgen de Guadalupe así lo quiso, como señala el peregrino:
A veces muchos peregrinos les causa miedo pero sabemos que ella y
también Dios sabe porque, si nos sentimos mal, por el miedo y los percances
que no tenemos planeado y el día que salimos de la casa vamos
encomendados en ella y la bendición de nuestra familias, pero como le digo
no sabes que pueda pasar en el camino335.

335Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

238
En este sentido, la inseguridad de esta práctica ritual, hace que los peregrinos se
encuentren vulnerables durante la peregrinación, ya que el peregrino se encuentra en un
proceso de transición ritual en donde el pasar el umbral, involucra en sí un peligro. Como
señala al respecto Manuel Delgado:
El transeúnte ritual es un peligro, puesto que él mismo está en peligro. No es
casual que tran –ce se emplee como sinónimo de ‘situación crítica’, ‘peligro’,
‘riesgo’..., cosa lógica dado que el pasajero ritual es alguien ‘entre mundos’, o,
cuando menos, ‘entre territorios’ (Delgado, 110).

En este proceso el peregrino se encuentra en un estado de indefinición y de renovación


implica un acto de sacrifico para lograr finalmente ser un ente nuevo y trasformado, como
señala Douglas:
El peligro reside en los estados de transición; sencillamente porque la
transición no es un estado ni el otro, es indefinible. La persona que ha de
pasar de uno a otro está ella misma en peligro y emana peligro para los
demás. El peligro se controla por el rito que precisamente lo separa de su
viejo estado, lo hace objeto de segregación durante algún tiempo y luego
públicamente declara su ingreso en su nuevo estado. No sólo es peligrosa la
transición, sino que los ritos de la segregación constituyen la fase más
peligrosa de la serie ritual. Leernos por ello con frecuencia que los
muchachos mueren durante las ceremonias de la iniciación, o que se dice a
sus hermanas y madres que teman por su seguridad, o que antaño solían
morir de fatiga o susto, o por el castigo sobrenatural de sus faltas (Douglas,
1973: 132).

En el tiempo que se ha realizado este peregrinaje, algunos peregrinos han


experimentado accidentes de peregrinos, como menciona el Sr. Ricardo Urbina:
Tuvimos un accidente hace tres años con una muchacha, que cuando dicen
que va a pasar va a pasar. Inconscientemente se salió de la carretera y se
atravesó y le llamamos para que se parara y no, se fue y lo paso a traer un
carro y murió. Nosotros guardamos la calma para que no hubiera más
accidentes y hablamos acá a san Cristóbal y llegaron sus familiares. Ese año
hablamos con el párroco y nos dijo que acompañáramos hasta dejarla aquí
[San Cristóbal], ya veníamos de regreso, habíamos corrido un día,
inesperadamente se fue para el otro lado, y pues lo que iba a pasar pues.
Como eran en Puebla donde estábamos, pues nos venimos donde lo iban a
preparar y estuvimos toda la noche, salimos en la mañana y llegamos en la
madrugada y al otro día corrimos tres días más para no suspender el evento.
Porque los familiares nos dijeron que ustedes no lo suspendan, ustedes sigan

239
pero no los acompañamos, lo que nos dijo el obispo fue “levanten la cara lo
quería así el de arriba, así lo dispuso y a eso quien se opone”336.

Por tratarse de peregrinaciones pedestres, muchos antorchistas han llegado a tener


accidentes que ponen en riesgo su propia integridad física por correr principalmente por las
carreteras federales337. Algunos peregrinos han experimentado accidentes menores como
doblarse el pie, caídas o incluso quebraduras, como recuerda el Sr. Iván Díaz: “el año pasado
una compañera se bajó y nadie se dio cuenta como se cayó y se lastimó la uña, no sabemos
cómo fue y pues no nos quiso decir sólo eso hemos pasado”; pero hay otros, que han
experimentado accidentes lamentables como la muerte de compañeros antorchistas, como
recuerda el peregrino:
Sí claro hemos tenido un accidente hace tres años con una muchacha, que
cuando dicen que va a pasar va a pasar, inconscientemente se salió de la
carretera y se atravesó y le llamamos para que se parara y no se fue y lo paso
a traer un carro y murió. Lo que hicimos fue guardar la calma para que no
vaya hubiera más accidentes y hablamos acá a san Cristóbal y llegaron sus
familiares. Ese año hablamos con el párroco y nos dijo que acompañáramos
hasta que se deje aquí, ya veníamos de regreso, habíamos corrido un día,
inesperadamente se fue para el otro lado, y pues lo que iba a pasar pues, lo
que nos dijo el obispo levanten la cara, lo quería así el de arriba, así lo
dispuso y eso quien se opone. Como eran en Puebla donde estábamos pues
nos venimos donde lo iban a preparar y estuvimos toda la noche, salimos en
la mañana y llegamos en la madrugada y al otro día corrimos tres días más
para no suspender el evento. Porque los familiares nos dijeron que ustedes
no lo suspendan ustedes sigan pero no los acompañamos. Para uno porque
lleva uno la responsabilidad, después de 58 años vino a pasar eso, habíamos
tenido accidentes de caídas, raspaduras y hasta ahí, pero ya nos tocaba338.

Esta reflexión es generalizada entre los antorchistas, ya que al sufrir algún accidente
durante la carrera, la conciben como dolorosa pero también es aceptada por los familiares y
peregrinos, ya que consideran que es la decisión de Dios y de la virgen de Guadalupe.

336 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
337 Hernández, Gabriela. “Al menos 13 peregrinos guadalupanos mueren en percances en Puebla” En: Proceso. 12

de Diciembre de 2017. https://www.proceso.com.mx/514773/al-menos-13-peregrinos-guadalupanos-mueren-


en-percances-carreteros-en-puebla. (Consultado el 16 de mayo de 2018); Editorial. “18 guadalupanos chiapanecos
mueren en trágico accidente” En: Código San Luis. Periódico en línea. 30 de noviembre de 2017.
http://www.codigosanluis.com/18-guadalupanos-mueren/. (Consultado el 16 de mayo de 2018).
338 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

240
Pero podemos estar seguros de que estos peligros inventados expresan algo
importante acerca de la marginalidad. Decir que los muchachos arriesgan sus
vidas significa precisamente que salirse de la estructura formal y entrar en los
márgenes es exponerse a un poder que es capaz de matarlos o de hacerlos
hombres. El tema de la muerte y del renacimiento, claro está, posee otras
funciones simbólicas: los iniciados mueren a su vieja vida y renacen a la
nueva. El repertorio entero de ideas con respecto a la contaminación y
purificación se usa para señalar la gravedad del acontecimiento y el poder
que tiene el rito para rehacer a un hombre -esto no deja lugar a dudas
(Douglas 1973: 132).

Es por ello que en la fase liminal el peregrino o todo “neófito” se enfrenta


constantemente a actos en los cuales pone en riesgo su vida, no sólo de manera simbólica
debido a que se encuentra en un espacio desposeído y alejado de su propia realidad, sino que al
encontrarse en este proceso liminal también el sujeto ritual se encuentra vulnerable ante
cualquier hecho. Y es que se encuentra en proceso de renovación de su vida, en esta
renovación también implica el renacimiento de un hombre despojado de sus culpas y
penalidades para que inicie una nueva vida limpia y fortalecida.

Durante las peregrinaciones el sujeto ritual se involucra a una nueva estructura que
asume humildemente, pero que actúa de tal manera que adquiere una identidad grupal, para
ello el sujeto ritual se desviste de su condición social y está supeditado por otros que fungen el
papel de conocedores y guías del ritual. Vive limitaciones, padece dolor y angustias, pero que
todas estas acciones están solventadas una vez que se haya logrado llegar al final de la
peregrinación en donde encontrará alivio a sus preocupaciones.

4.4 Fase Posliminar

En la tercera y última fase del rito de paso, es el momento en que el sujeto ritual se encuentra
en el proceso de “regresión o reincorporación” del individuo a su vida cotidiana, adquiriendo
derechos y obligaciones que lo define como parte de un grupo normado y estructurado
institucionalmente, que dicta costumbres y principios éticos que rigen su medio social.

241
Una vez que ha concluido el ritual de la peregrinación, el grupo de antorcha tiene una
última reunión con el coordinador en las afueras del templo de origen. Aquí el líder de la
antorcha se enviste de autoridad frente al resto de los “neófitos” o recién iniciados, asume su
condición y reúne por última ocasión al grupo para hablar sobre sus experiencias y
contratiempos, agradece a la virgen por haber concluido el viaje, se realizan algunas oraciones y
se gritan porras. Una vez terminando las oraciones, el coordinador da indicaciones finales para
la limpieza del camión, recoger las mochilas o ropa de dormir que utilizaron durante la
peregrinación, así como el desmantelamiento de los objetos usados durante el ritual, actividad
que muchas veces es realizada al día siguiente por el coordinador y algunos de los integrantes
cercanos a él, ya que la mayor parte de los participantes ya no asisten a hacer esta actividad.

En el momento posliminal del proceso ritual, el peregrino se despide de sus compañeros


y del coordinador de la antorcha, se incorpora a su ambiente cotidiano liberado de los pecados
anteriores, y cumplida la manda se encuentra renovado y dispuesto a cambiar de actitud. Es el
momento en que adquiere un poder por encima de los demás, ya que la “función purificadora”
que adquiere el sujeto una vez que realiza la peregrinación obtiene “una elevación de status
temporal”, es decir, es reconocido como una persona que ha ofrecido y sacrificado su vida
para liberarse de las inconformidades que lo aquejaban y por lo que adquiere atributos
transitoriamente sagrados, es por ello que el resto de las personas lo observa con respeto e
incluso hasta con compasión.

En las afueras del templo, algunos antorchistas son esperados por sus familias que los
reciben con júbilo, les arrojan confeti sobre la cabeza, les aplauden, los abrazan y felicitan por
el logro de haber concluido su manda y por estar de nuevo juntos. Algunas de estas familias
organizan comidas familiares para su recibimiento y son él o los antorchistas de la familia los
protagonistas de la reunión, ya que aprovechan a compartir las experiencias y anécdotas que
vivieron durante la peregrinación. Durante la reunión les dan un trato especial que al resto de
los asistentes, se les ofrece alimento y ropa limpia o incluso algunos se alejan para descansar.
Es en este momento en que el proceso ritual concluye y se da por terminado las actividades, el
sujeto se libera de su condición liminoide y se incorpora a su cotidianidad.

242
4. 5 La Communitas de Antorchas

Si partimos de que los católicos son un grupo en el que comparte una serie de prácticas,
principios y dogmas religiosos, que se aglutinan para conformar un colectivo que se identifica a
través de símbolos y signos que los determina. Entonces estamos hablando de una communitas,
ya que es una afinidad voluntaria del individuo que les proporciona seguridad en una ambiente
que se encuentra en constantemente cambio debido a los procesos contemporáneos (Delgado,
1999), estas identidades voluntarias les:
Brindan un código moral claro, susceptible de orientar las conductas y de
regular de manera positiva la urdimbre de las interacciones humanas. Todas
esas virtudes están directamente relacionadas con el tipo de función que hoy
por hoy cumplen las afinidades voluntarias, que es básicamente la de hacer
frente a las tendencias a la desestructuración que amenazan a individuos
inmersos en procesos de urbanización y modernización, procesos en los que
las referencias colectivas a todos los niveles -política, familia, moral, religión,
etc.- aparecen desacreditadas e incapaces de otorgar significado a la
experiencia crónicamente desorientada de un mundo en constante cambio
(Delgado,1999: 134).

La communitas funcionan como mecanismos de integración con la intención de regular


las acciones en colectivo, ya que se da “…una relación entre individuos concretos, históricos y
con una idiosincrasia determinada, que no están segmentados en roles y status sino
enfrentados entre sí (Turner, 1988: 138).
Antorchistas iniciando la peregrinación.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015

243
Si bien a lo largo de este capítulo se ha centrado en describir el proceso ritual desde el
planteamiento de Van Gennep (2008) y la etapa liminal de Víctor Turner (1988), el concepto
de communitas planteada por este autor no logra explicar ampliamente el caso de los grupos de
antorchas guadalupanos, porque para Víctor Turner (1988), la communitas parecieran estar
solamente en los momentos en que un grupo se incorpora a una práctica ritual, instituyéndose
como miembros de un grupo a través de elementos que construyen un sentido de pertenencia.
Mientras que la propuesta de Manuel Delgado (1999) se refiere a que la communitas es el
mecanismo en que “facilita la articulación de identidades individuales sólidas, sustituyendo o
complementando formas primarias de socialización que se han mostrado insuficientes para
disminuir o aliviar los sentimientos de aislamiento y atomización (Delgado, 1999: 133). Es
decir, no sólo se encuentran durante el proceso que dura el ritual sino que se localizan
constantemente en las interrelaciones humanas y son utilizadas para protegerse de un mundo
que no les provee de certidumbre. Es por ello que Manuel Delgado apunta:
La communitas no es ningún estado prístino de la sociedad al que se anhele
regresar, sino una dimensión siempre presente y periódicamente activada,
cuya latencia y disponibilidad el marginal recibe el encargo de evocar en todo
momento a través de las aparentemente extrañas formas de sociedad que
protagoniza con otros como él (Delgado, 1999: 116).

Analizando a ambas propuestas, creo que aunque en algunos momentos Turner (1988)
explica las características en el proceso ritual, al referirse a la explicación sobre la construcción
de estos grupos de antorchas, la propuesta de Manuel Delgado (1999) ayuda a explicar de
mejor manera la conformación de estos grupos y el papel que juega dentro de la sociedad
contemporánea. Sin embargo, es importante que se intente dialogar con ambos autores para
tener un análisis más profundo sobre el objeto de la investigación.

Al respecto, se puede decir que los grupos de antorchas según Manuel Delgado (1999)
son acciones colectivas con cierta libertad que aglutinan a feligreses católicos, que muchas
veces se escapan de ser condicionados por la Institución de la Iglesia a través de la regulación
de la conducta y la moral de sus feligreses, y de esta manera esta communitas católica está
constantemente instalada en la vida cotidiana, la cual se ingresa en cada momento en que el
individuo lo necesite. Pero no siempre esta communitas logra satisfacer las necesidades o

244
intereses de su propia comunidad, por lo que surge ese momento de “intersticialidad”339 o
espacio intermedio que sirve para cubrir o tapar esos huecos religiosos que carecen o que ya no
satisfacen a estos feligreses, debido a que la Institución católica no logra aglutinarlos en un
mundo moderno y complejo. Es por ello que “las nuevas corrientes religiosas funcionarían
como reacciones ante el fracaso de los mecanismos de control mediante los que una sociedad
ejerce su autoridad y exige obediencia (Delgado, 1999). Estas corrientes religiosas que muchas
veces se encuentran dentro de la misma Iglesia, pero adquiriendo características y prácticas
libres al control de la misma Institución, que al mismo tiempo no se alejan, ni se separan del
dogma religioso y siguen reproduciendo la institucionalidad. Como señala Delgado, al referirse
a las características de estas nuevas maneras de religiosidad:
Esa lectura en clave de intersticialidad da por supuesto que las nuevas
organizaciones religiosas a las que se aplica no tienen como función
oponerse a una cierta estructura social, sino precisamente a su ausencia o a
sus déficits. No compiten con una visión del mundo hegemónica, sino con
el hecho de que no exista ninguna visión del mundo capaz de ejercer su
autoridad desde el prestigio. No se enfrentan a la legitimidad existente, sino
a la desligitimídad de lo dado. No se rebelan contra las instituciones que dan
sentido a la sociedad, sino contra la incapacidad de la sociedad de generar
instituciones capaces de otorgarles un sentido (Delgado, 1999: 137).

Para el caso de los católicos sancristobalenses, las peregrinaciones con antorcha se


pueden entender como un intersticio que se encuentra entre la práctica católica, medida en que
estos feligreses utilizan para integrarse como una communitas que cumple la función de subsanar
las carencias o la debilidad de la Iglesia católica para aglutinar a esta población. Es en estas
peregrinaciones con antorchas guadalupanas es en donde se puede observar a una communitas,
debido a que cada grupo de antorchas vive durante la peregrinación una afinidad, un sentido de
pertenencia y sobre todo una hermandad particular entre los que conforman las agrupaciones,
configurándose de esta manera la communitas que se organiza partiendo de su entorno
cotidiano, es decir se agrupan a partir de un espacio determinado sea este un barrio, una
colonia, una familia o un gremio normado e institucionalizado, y en el que actúan a partir de

339 La noción de intersticialidad fue retomada por Eric R. Wolf para referirse a instancias informales que
complementaban sistemas institucionales deficientes. Estas estructuras interpersonales suplementarias o paralelas,
‘grupos que se adhieren a la estructuras institucionales como los moluscos al casco de un barco herrumboso’, se
superponen al sistema institucional y existen en virtud suya, muchas veces con funciones análogas a las que en las
sociedades tradicionales jugaban las relaciones de parentesco (Delgado, 1999: 139).

245
ciertos roles que los estratifica y los determina como sujetos que cumplen con una función en
la sociedad.

Es por ello que los integrantes de un grupo de antorchas se involucran y se asumen de


manera momentánea como miembro de la communitas, estableciéndose otras series de normas y
prácticas ah doc a su condición de “peregrinos”. Estas se establecen durante la peregrinación ya
sea mediante relaciones flexibles o en ocasiones más rígidas debido a que nacen en un
ambiente de liminalidad, asumiendo una característica de communitas normativa que se sujeta “[…]
bajo la influencia del tiempo, la necesidad de movilizar y organizar los recursos y el imperativo
de ejercer control social entre los miembros del grupo para asegurar su consecución de los
fines propuestos…” (Turner, 1988: 138).

Es en este momento cuando los organizadores y participantes acuerdan normas que


regulan la conducta de los peregrinos para evitar transgresiones que puedan salirse de control y
se conduzcan de manera ordenada durante el ritual. El peregrino se integra a una estructura
que ordena y norma sus acciones durante el proceso de movilización de la peregrinación.
En tales ritos se nos ofrece un “momento en y fuera del tiempo”, dentro y
fuera de la estructura social secular, que evidencia, aunque sea fugazmente,
un cierto reconocimiento (en forma de símbolo, sino siempre de lenguaje)
de un vínculo social generalizado que ha dejado de existir pero que, al
mismo tiempo, debe todavía fragmentarse en una multiplicidad de vínculos
estructurales (Turner, 1988: 103).

Entre estos vínculos individuales del antorchista, una vez que se integra a una
communitas establece relaciones de solidaridad, compañerismo y devoción, acciones que son
aceptadas entre los integrantes de la antorcha guadalupana. Es común que durante los
recorridos se encuentren jóvenes que no cuentan con recursos económicos suficientes para
sufragar los gastos, por lo que el comité o en su caso algunos de los compañeros peregrinos se
ofrecen para ayudar económicamente a estas personas durante el viaje, como señala el
peregrino:
El gasto más fuerte es el transporte, si hay algún compañero que no puede ir
porque no tiene dinero, nosotros lo ayudamos porque es un muchacho

246
cumplido, cumpliste todo el año, participaste todo el año y entre todos te
vamos a ayudar a comer y todos te ayudamos340.

En ocasiones se organizan ventas de algunos alimentos ya sea en las fiestas de los


barrios o durante los días domingos, en otras ocasiones se realizan rifas entre familiares y
amigos con el fin de recabar recursos que les permitan aminorar los gastos durante la
peregrinación. Sin embargo, en la communitas de antorcha queda en manos del organizador y los
participantes la manera en cómo se soluciona los problemas para evitar malos entendidos,
como menciona el peregrino:
Anteriormente hacíamos eventos, quermeses en el centro recreativo,
hacíamos rifas, pero ahora ya no da resultado porque ya no nos fue bien
porque ya había mucho desorden, muchos pleitos y platicamos con el
párroco que no es posible que esto éste provocando pleitos, así que hasta
aquí no más, y las rifas no dan resultado porque no se venden los boletos, es
muy difícil; por lo que lo que hacemos es que cada sábado cooperan y están
dando su ahorro341.

Una de las características más significativas que se encuentra entre la communitas es la


solidaridad entre los otros grupos de antorchas, es decir, cuando se topan en los caminos se
expresa un sentido de afinidad al saludarse y animarse para que sigan adelante o se apoyan en
caso de algún percance. Así como también cuando algunos devotos guadalupanos que se
encuentran principalmente en los caminos del estado de Chiapas, hacen la parada a los grupos
de antorchas para ofrecer alimentos como café o pan por la noche y por la mañana, les
convidan tortas o guisados preparados, así como en localidades de zonas de tierras calientes se
acostumbra a donar aguas de frutas naturales o pozol de cacao o de maíz blanco.

340 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
341 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

247
Antorchistas apoyados para recibir alimentos
durante la peregrinación.

Fuente: Trabajo de campo. 2015

En estos intersticios que regula la conducta de los feligreses, se encuentran algunas


familias guadalupanas que reciben constantemente grupos de antorchas que se mueven a lo
largo de los caminos, ayudando a que los peregrinos no pasen hambre o para regalar objetos
religiosos342 con la imagen de Guadalupe. Estos obsequios son entregados como ofrecimientos
o promesas para que la virgen les recompense en salud, les alivie de alguna pena o por una
solicitud hecha. Para ello, cada grupo de antorcha al llegar a la casa del donador debe de pasar
al altar de la virgen de Guadalupe adornada con flores y luces para rezarle y cantarle. Esta
imagen es colocada durante el mes de diciembre fuera del domicilio o en algún espacio dentro
de la casa; al término de la comida, deben de dirigirse de nuevo a este lugar para darle gracias,
así como pedirle protección para el camino, agradecer y bendecir a la familia que les ofreció los
alimentos, finalizando con porras y cánticos guadalupanos, como señala el peregrino:
Por ejemplo hay gente que en las carreteras nos paran para darnos un
cafecito a las 6 de la mañana o a medio día y nos dan café con galletas de
animalito u ovaladas y seguimos avanzando y nos paran. Estomago nos hace
falta!!!. Hay una persona en Ocosingo que tiene un restaurante que ofrece a
todas las antorchas que pasan le ofrece y prepara cantidad de comida y nos
ofrece a todos igual, pero antes de pasar a la mesa a comer ahí está el altar y
hay que rezar, cantamos le echamos porras a la virgen y salimos mientras se
desocupe si hay otra antorcha pues ya nos toca, es una devoción que tiene el
señor. Hay otro señor que hay por “Las Canchas” por el camino de Yajalón

342 Como los pañuelos que son entregados a los peregrinos, los cuales se amarran a la cabeza para cubrirse el
cabello y evitar la sudoración de la frente, mientras algunos se lo amarran en el cuello y no se lo quitan hasta que
llegan al final de su recorrido o lugar de procedencia.

248
a Ocosingo que prepara una gran mesona y prepara arroz y atole y nos invita
a comer o a desayunar343
Peregrinos agradeciendo por los alimentos
donados por una familia chiapaneca, Chiapa de
Corzo.

Fuente: Trabajo de campo en Chiapa de Corzo. Chiapas.


2014

Al ser una práctica libre de la institucionalidad de la Iglesia, se llevan a cabo prácticas


que se escapan del control de los sacerdotes, por lo que algunas familias esperan
exclusivamente a una antorcha en particular, la cual es invitada con anterioridad para que pase
a ese lugar y sea atendida. Esta práctica es común, ya que en varios de los entrevistados
recuerdan estas formas devocionales en la que estas familias muchas veces se convierten en
devotos de las imágenes que llega a estos lugares anualmente, en los que se realizan ceremonias
y rituales particulares, por lo que en ocasiones les impide cambiar de ruta debido a que son
esperados. Durante esos días la familia les ofrece comida a los antorchistas que pasan por sus
domicilios durante el día y la noche del 11 y 12 de diciembre principalmente.

Durante la peregrinación cada grupo se involucra a una serie de actos que construye
una communitas, sin embargo, esta misma communitas pareciera que se diluyera una vez terminado
el peregrinar y se reintegra a su vida “cotidiana” como lo plantea Víctor Turner (1998). Sin
embargo este grupo o communitas no se diluye, ya que continua integrado a lo largo del año
mediante una programación de actividades que se reactiva realizando novenarios, rezos

Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
343

Casas. El 20 de noviembre de 2015.

249
mensuales, platicas en parroquias, retiros, fiestas e incluso apoyos solidarios para su comunidad
religiosa.

A esta variabilidad de expresiones dentro del campo religioso, Víctor Turner lo


denomina como una communitas espontánea que es “el instante fugaz en su decurso” (Turner,
1988: 138), debido que los grupos de antorchas se organizan para planear o realizar ceremonias
durante el año. Al respecto el autor explica que en la actualidad entre las sociedades de
América y Europa accidental suceden actos que interrumpen las estructuras sociales
institucionalizadas, debido a que el ser humano se encuentra en una multiplicidad de procesos
de los cuales se inserta a ciertas acciones que hace que su vida sea más estable y en la cual
renuncia temporalmente a sus problemas y dificultades:
En la communitas espontánea proliferan los sentimientos, sobre todo los
agradables, mientras que en la vida en la “estructura” está llena de
dificultades objetivas: han de tomarse decisiones, los gustos han de
sacrificarse a los deseos y necesidades del grupo, y los obstáculos físicos y
sociales deben superarse con un cierto coste personal (Turner, 1988: 144-
145).

En este sentido, siguiendo la propuesta de Turner en el caso de las antorchas, se


pueden entender el momento en que se involucran a actividades religiosas o a una reunión
social fuera de sus actividades cotidianas, es un momento de “estar afuera de todas las
posiciones estructurales que uno ocupa normalmente en un sistema social” (Ibíd., 144), y en
esta condición el sujeto no se encuentra constantemente atado a una serie de regulaciones que
imposibilitan salir de cualquier lugar, ya que mediante la communitas espontánea puede liberarse de
su estructura para de nuevo integrarse, por lo que en ese juego constante del ir y venir, es un
diálogo de relaciones estructurales en las que ambas son necesarias para mantenerse
suministrado de energía y de mantenerse en un posible equilibrio emocional.

Sin embargo, Manuel Delgado (1999) discute la propuesta de Turner (1998) al referirse
este último, que en la communitas no existe estructura social y por lo tanto es durante ese
momento liminal en el que el individuo se involucra en una antiestructura que la regula,
alejándose de una estructura que lo domina y le ordena. Al respecto Manuel Delgado (1999)
hace una modificación a esa propuesta diciendo que la estructura a que se refiere Turner
(1988), no se encuentra en la vida cotidiana, sino que al contrario, la sociedad esta carente de

250
una estructura que aglutine a estas communitas y que por lo tanto se crean estructuras intersticiales
que no tienen la intención de creación de una estructura contraria o alterna a la estructura
existente, sino que son mecanismos de apropiación que los colectivos utilizan para sentirse
seguros en un ambiente que no les proporciona esa estabilidad y protección en los espacios
urbanos, al respecto Manuel Delgado hace la aclaración:
Frente a la ratificación del propio Víctor Turner de los nuevos cultos
religiosos como construcciones en communitas, más bien deberíamos
reconocer que es contra la communitas generalizada que representa la
experiencia de la complejidad contra lo que estos grupos se revelan, puesto
que no aspiran a derrocar la estructura social existente, sino a rebatir la
imposibilidad de organizar pautas capaces de dotar de seguridad,
homogeneidad y equilibrio moral la existencia en las sociedades urbano-
industriales. Sería, por ello, mucho más propio reconocer que los nuevos
cultos se justifican como reacción de protección y defensa ante esa fuente
general de peligro y contaminación que representa una sociedad que ha
desertificado moralmente grandes extensiones de su territorio y que parece
dominada por las inconsistencias y los tránsitos, es decir por síndromes de
liminalidad-communitas (Delgado, 1999: 140).

En esta propuesta considero explica cómo la población preferentemente juvenil ha


creado nuevas expresiones de ser católicos reagrupándose en una communitas, la cual asume
estructuras que le dan estabilidad moral y espiritual que se traduce en la aceptación de normas
sociales que regulan su conducta dentro y fuera de su ambiente cotidiano. El integrante de una
antorcha acepta de manera libre y espontánea las actividades previas, durante y posterior al
ritual, pero también le proporciona un sentido de pertenencia a un grupo que le otorga
compañerismo, solidaridad y respaldo frente al caos que enfrenta, no sólo ante en el ambiente
religioso, sino también ante la carencias y crisis que cada individuo puedan estar enfrentando.
Al respecto Manuel Delgado apunta que el servicio de estas corrientes voluntarias ofrecen la
pertenencia voluntaria capaz de satisfacer la necesidad de hacer frente a la soledad que muchas
veces enfrentan en contextos urbanizados, por lo que construyen coherencias identitarias a
nivel personal que no han sabido encontrar en su vida ordinaria (Delgado, 1999).

En estos espacios de intersticialidad en que recurren los antorchistas para cubrir las
necesidades espirituales que le den certidumbre a su vida cotidiana, se crean mecanismos
posteriores al proceso ritual del día 12 de diciembre, algunos se integran ocasionalmente a
otros grupos constituidos como el grupo de “Antorchas Unidas” que realizan eventos
colectivos que tiene como objetivo evangelizar a sus integrantes y planear actos previos a la

251
peregrinación, mientras que a la par los grupos de antorchas independientes realizan
actividades similares.
Peregrino custodiando a las imágenes, Tuxtla Gutiérrez.

Fuente: Trabajo de campo en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 2014

Es aquí cuando se crea dentro del intersticio, una variedad de communitas dentro de la
práctica del antorchismo. Y es que aquellas antorchas que dependen de alguna manera a alguna
parroquia o iglesia de la ciudad se agrupan en lo que denominó como communitas ampliada. Es
decir, independientemente de las maneras propias de cada grupo, algunas antorchas se reúnen
primeramente para compartir un sentido de unidad ritual afianzada por el respaldo que tienen
de la Iglesia y por otro lado constituyen grupos en los cuales crean lazos de afinidad,
reciprocidad y compañerismo que hace que estos grupos no se diluyan del todo. Ejemplo de
esto, es el grupo denominado “Antorchas Unidas Guadalupanas” de la ciudad de San Cristóbal
que se creó hace aproximadamente 40 años para organizar a grupos de antorchas pedestres, de
descalzos o de ciclistas para asesorar y programar actividades como la reflexión de algunos
temas guadalupanos o para realizar celebraciones importantes durante el año344. Aunque en
estas actividades son muchas veces organizadas de manera independiente de la Iglesia católica,
existe en algunos momentos celebraciones y rituales religioso que construyen “a su manera”

344Ejemplo de ello fue la invitación que hace el Obispo Felipe Arizmendi, al finalizar la misa del 12 de diciembre
de 2014, expone que todas las antorchas que pertenecían a la agrupación de Antorchas Unidas y aquellas que
quisieran participar, previamente debían de acercarse a esta agrupación, para que participarán en la valla humana
que cuidaría el paso del papa Francisco durante la visita a la Ciudad de San Cristóbal en el año de 2015. Esta
invitación fue muy aplaudida por todos los miembros de las antorchas ya que para ellos sentían que era un
privilegio servir y ayudar en la organización de tan importante evento.

252
pero que no rompen con el dogma, ya que es el líder de la antorcha quien respeta que estos
actos se lleven a cabo de acuerdo a la solemnidad.

Para la organización del grupo de “Antorchas Unidas” cuenta con un comité y el apoyo
de la Madre Teresa de Jesús Morales Vázquez, quien a su vez es apoyada por la Diócesis de
San Cristóbal. A estas reuniones asisten principalmente los coordinadores de las antorchas
inscritas de manera formal a este grupo y realizan sesiones durante los primeros seis meses del
año para reflexionar y discutir aspectos vinculados a la hagiografía de la vida de María o de los
santos, en los meses de octubre y noviembre se dedican para organizar los eventos dedicados a
la virgen de Guadalupe para el mes de diciembre.

En esta diversidad de communitas hay otros grupos de antorchas que no están


completamente de acuerdo con las acciones que realiza “Antorchas Unidas” por lo que
organizan communitas independientes a las parroquias e iglesias de la ciudad. Esto se debe
principalmente a que muchos de estos grupos no ven con agrado las formas burocráticas de
organización y actividades que establece esta agrupación. Aspecto que muestra que: “…
mientras que la exageración de la communitas en determinados movimientos religiosos o
políticos de tipo nivelador puede ir en seguida sin tardanza de despotismos, burocracia
desmedida u otras modalidades de esclerosis de la estructura” (Turner, 1988: 135), situación
que trae como consecuencia que parte de la feligresía se alejan de la dirección impuesta por
“Antorchas Unidas”, ya que esto implica una relación parcial del control de la Iglesia y de la
Diócesis, por lo que deciden practicar el antorchismo de manera independiente. Esto hace
pensar que en la actualidad gran parte de los católicos jóvenes se reúsan a seguir los dogmas
religiosos y practican el catolicismo “a su manera” produciéndose una riqueza de formas de
vivir la religiosidad católica. Es por ello que Manuel Delgado apunta que estas son “las
sociedades intersticiales [que] cubrirían así los territorios físicos y morales que la estructura social
dejaba al descubierto, restaurando fracturas, cubriendo agujeros, reparando costuras
deterioradas o rotas, sirviendo de avanzadilla o de sucedáneo a dinámicas de cristalización
social más complejas. Puentes sobre aguas turbulentas” (Delgado, 1999: 136), que en este caso
es la misma Iglesia católica, la que se le escapa de las manos para atender y satisfacer los interés
de esta población.

253
En estas actividades posteriores al proceso ritual, algunos de los grupos de antorchas
concluyen sus actividades con la celebración de la Nacida del Niño Dios a finales del mes de
diciembre, en esta reunión participan los coordinadores y algunas personas que son invitadas
para disfrutar de la fiesta, quebrando piñatas y distribuyendo algunos alimentos para los
asistentes. Para ello, se organizan para llevar alimentos, bebidas y regalos que son disfrutados
por los antorchistas y sus familiares, como menciona el Sr. Ricardo Urbina: “el próximo
sábado tenemos la primera reunión para hacer la navidad, nosotros nos toca hacer el
nacimiento”345. En estos eventos se acostumbra a platicar de las experiencias del viaje anterior,
de los momentos de alegría o dificultades que hayan tenido, así como aquellos que fueron
curiosos o chuscos a lo largo del recorrido346, de esta manera se cierra el año de trabajos tanto
de la agrupación como para muchos de los grupos de antorchas.

Para el siguiente año, algunas de ellas comienzan las actividades el día 6 de enero con la
celebración del día de reyes, en la que se reúnen para partir “la rosca de reyes” y se planea las
actividades de ese nuevo año, así otras antorchas de manera individual aprovechan este día
para rencontrarse de nuevo, mientras que se reintegran a su vida cotidiana.

Otra de las actividades en que se integran a la communitas son los días 12 de cada mes en
que tienen como tradición que los grupos de antorchas más consolidados o que pertenecen a
“Antorchas Unidas” realicen un “rosario” a la virgen de Guadalupe “preferida” de cada grupo
de antorcha. Para la realización de esta actividad, algunos deciden que la virgen “preferida”
peregrine por las casas de los antorchistas y otros optan mantener la imagen todo el año en
casa del coordinador, como señala el Sr. Ricardo Urbina sobre la virgen que tiene la antorcha
de la ACJM:
Es un cuadro que a mí me obsequiaron para que le pusiera su cuadro y la
llevamos y todo el año peregrina, ese primer sábado comienza a hacer su
recorrido, algunos hacen rezo a veces nos invitan y a veces lo hacen en
familia. La que tenemos acá es un cuadro que tiene muchos años que ésta

345 Entrevista realizada al Sr. Ricardo Urbina, Coord. de la Antorcha Deportiva de la ACJM. San Cristóbal de Las
Casas. El 20 de noviembre de 2015.
346 Para el caso de la antorcha Musicalizada Santa Cecilia, organizó su posada en un salón de fiestas, en las que

asistieron casi todos los participantes de la antorcha, así como familiares de ellos. Cada familia llevó botanas y
bebidas excepto alcohol. Para esto se celebró las clásicas posadas acompañado de un Rosario, una vez terminado
dio inició la rifa de objetos que los mismos peregrinos donaron para este evento. Cabe señalar que el organizador
de la antorcha elaboró un video fotográfico de cada uno de los momentos cruciales del viaje así como los
momentos de relajación que los peregrinos experimentaron.

254
aquí y tenemos una virgen que esta con el Papa que es peregrina que ésta en
casa de los compañeros, que está quince días con uno y quince con el otro, y
asistimos cada doce de cada mes venimos a misa y traen la imagen y se lo
lleva otro y así todo el año ésta visitando los compañeros en sus casas.

Durante estos “rosarios” se llevan algunos alimentos o botanas que son distribuidos a
todos los familiares y miembros de la antorcha, mientras que en algunas ocasiones queda a
consideración de los anfitriones de la fiesta si se invita a otras personas ajenas. Durante este
día, se programa el apostolado (actividades filantrópicas) que consiste una vez realizado “el
rosario”, algunos de los integrantes de la antorcha se organiza en equipos para donar a la
comunidad algunos alimentos (café, pan o tamales), principalmente en la madrugada a
personas que se encuentran en las afueras de los hospitales de la ciudad, en los asilos o las
cárceles cercanos a la ciudad.
Donación de café y pan a personas en el Hospital de las
Culturas en SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017

Como parte de la programación de actividades en el mes de mayo, la agrupación de


“Antorchas Unidas” planea un “rosario” a la virgen de Guadalupe para conmemorar el día de
la madre, mientras que los grupos de antorchas realizan en cada una de las casas de los
coordinadores una serenata o rezo el día 9 de mayo para celebrar a la virgen de Guadalupe
considerada “madre de los mexicanos”.

Para el día 2 de noviembre, la asociación de “Antorchas Unidas” organiza una pequeña


reunión para celebrar el día de muertos, en ella cada coordinador lleva velas, incienso, pan,
frutas, alimentos para elaborar el altar y se celebra un “rosario”, mientras que cada martes de

255
reunión se planean actividades o se discuten situaciones referentes al trabajo de las antorchas y
los coordinadores llevan café o té y algo de pan o galletas para todos los que ahí participan.

De manera particular, aquellas antorchas que se encuentran cercanas a las parroquias,


no se diluyen completamente debido a que constantemente tienen reuniones semanales en los
que realizan actividades propias de su iglesia o asisten a grupos de oración en los que se
encuentran integrados.

Reunión de la antorcha musicalizada “Santa Cecilia”,


SCLC.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016

Ejemplo de estos grupos es la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”, que organiza


diversas actividades a lo largo del año, ya sea en reuniones de los grupos de oración de cada
parroquia o se integran a eventos multitudinarios organizados para fortalecer esta nueva
evangelización católica en donde se planean conferencias, retiros y la participación de varios
apostolados y ministerios que siguen la enseñanza de la predicación carismática. Al respecto
Manuel Delgado plantea que estas corrientes de culto garantizan un conjunto de eficacia
psicológica y social que proveen de una estructura capaz de ordenar con claridad una
comunidad que ofrece un modelo cognitivo poderoso:
Los miembros de los nuevos movimientos religiosos se consideran
reformadores de la fe y de la práctica religiosa. Estas corrientes son, en
todos los casos, salvíficas, en tanto que implican fórmulas para protegerse o
escapar de un mundo que se percibe como un imperio del pecado, que se
debe cambiar o del que urge escapar o protegerse (Delgado, 1999: 133).

256
En la iglesia de Guadalupe existen cuatro grupos de oración que son organizados por el
grupo de Renovación Carismática que congrega a niños, jóvenes y adultos (mujeres y
hombres), en los cuales atiende un día a la semana.347 En estas reuniones se llevan a cabo
discusiones de textos bíblicos, conferencias, presentaciones de videos y pláticas sobre temas
espirituales. Manuel Delgado plantea que este tipo de agrupaciones de culto “fomentan
doctrinalmente la convicción de que la sociedad puede y debe ser mitigada o incluso redimida
su postración actual, por medio de intervenciones que modifican la consciencia colectiva o
personal, lo que justifica un permanente estado de agitación propagandística y de
reclutamiento” (Delgado, 1999: 133). Es por ello que estos grupos están supervisados por
predicadores que se encargan de llevar a cabo la organización y supervisión de las actividades
planeadas:
Los maestros o catequistas han de llenarse cada vez más, anhelar que se
desarrollen en ellos los dones de la sabiduría, de entendimiento y de ciencia,
y en general el carisma de la enseñanza que les capacita para este mismo
ministerio. “Hombres fieles, que sean capaces, a su vez, de instruir a otros”
(2 Tim. 2,2), que sepan introducir en la mentalidad y en el sentir de Dios,
que no sólo hablen a la mente sino al corazón, creando las actitudes del
Señor que deben definir la vida del cristiano (Renovar la Renovación
Carismática Católica: 37).

Otra actividad dentro del Apostolado es visitar a personas pertenecientes al grupo que
viven fuera de la ciudad y que se encuentren enfermos o que estén pasando un momento
difícil. Estos grupos de oración son parte de las nuevas formas de agrupar a jóvenes feligreses
católicos que se involucran a estas dinámicas religiosas modernas para solventar sus
necesidades espirituales y de paso integrarse a nuevos grupos en los que se identifiquen.
Manuel Delgado plantea que estos grupos se integran debido a que tienen la dificultad de
encontrar un lugar en la sociedad, por lo que la communitas es una manera de mantenerlos
permanentemente integrados y movilizados. (Delgado, 1999).

Es por ello que la Iglesia católica trata de que estas agrupaciones se acerquen para
apoyo en las diversas actividades planeadas en la parroquia a lo largo del año o para servir
como reguladores de la conducta moral y psicológica de la comunidad religiosa. Sin embargo

347 El grupo de mujeres es llamada “Hijas de María” se reúnen los lunes de 5 a 7 pm., el grupo de hombres es
llamado “Hombres del Espíritu Santo” y se reúnen los lunes de 8 a 10 pm., y se encuentra un grupo que atiende a
todos (adultos, mujeres, niños), llamado “Grupo de Restauración Familiar Guadalupe” que se reúnen los jueves
de 6 a 8 pm. Este grupo tiene actualmente un total de 440 miembros en Facebook.

257
para aquellas en las que se organizan de manera independiente se alejan gran parte del año de la
vida religiosa y solamente se reúne en las fechas en que se acerca de nuevo las fiestas de la
virgen de Guadalupe, que inclusive organizan al grupo espontáneamente por lo que los
integrantes pueden cambiar de un año a otro, siendo el coordinador de la antorcha y algunos
familiares los que se repiten y el resto se integran nuevos peregrinos.

Es por ello mencionar que el ritual no sólo es un acto religioso y devocional sino que
muestra también las diversas relaciones sociales y culturales que hay entre los grupos de
antorchas, así como las circunstancias que atraviesan a los peregrinos, lo que determina las
maneras y formas de organización y seguimiento de estos grupos a lo largo del año. Esto hace
del ritual, un acto en el que se puede analizar también las relaciones de interdependencia que
pueden haber entre grupos institucionalizados como la Iglesia o el Estado, así como un sinfín
de acciones que rebasan la misma práctica religiosa.
El sentido de lo sagrado en el peregrino ya no es privado; es una cuestión de
representaciones colectivas objetivadas que se convierten ritualmente en
todo su ambiente y le dan motivos poderosos para creer. No sólo eso; la
jornada del peregrino también se convierte en un paradigma para otros tipos
de comportamiento: ético, político, etc. (Turner, 2009: 44).

Ejemplo de estas maneras libres de apropiación del catolicismo contemporáneo es las


dinámicas de difusión y enseñanza que utilizan los grupos de antorchas para dar a conocer sus
actividades antes y durante las peregrinaciones. Estas antorchas crean grupos de WhatsApp
que sirven para informar sobre alguna reunión o avisos de eventos en los cuales participan
como grupo y para que la communitas puedan integrarse por este medio, además de que algunas
crean páginas en Facebook en la que grupos de jóvenes “siguen” las actividades a lo largo del
año, como señala Lisbona (2012) al referirse a estas nuevas formas de difusión religiosa y
maneras de expresión en la actualidad:
Si hay una frase que define el periodo contemporáneo, en especial por la
incorporación de nuevas tecnologías, es aquella que reza ‘una imagen vale
más que mil palabras’. Tanto la fotografía como el cine, la televisión o la
Internet se han convertido en formas de expresión humana que condensan
en imágenes la realidad cotidiana o la sobrepasan, a la vez que se convierten
en modelos de acción y de comportamiento (Lisbona, 2012: 9).

Para los grupos de antorchas, la Internet ha servido de vínculo entre ellos, se crean
communitas virtuales en las que se promueven a través de estas páginas, algunas actividades

258
propias de su grupo, así como también son utilizadas para intercambiar ideas, rutas o
simplemente para tener contactos con otras antorchas de los distintos estados de la república,
así como difundir videos en YouTube sobre actividades durante la peregrinación, conciertos o
reuniones que realizan como grupo.

Para el caso de la antorcha Musicalizada “Santa Cecilia” cuenta con una página de
Facebook propia de la antorcha y otra denominada “Restauración Familiar Guadalupe” en el
que difunde las actividades, las ceremonias y los rituales que llevan a cabo los integrantes de
este grupo, así como los sitios en que participan los predicadores. Para el caso de la Antorcha
musicalizada de Mezcalapa, difunde en su página los lugares donde se llevará a cabo algún
evento religioso en el que participa, así como videos en vivo de conciertos o durante la
peregrinación. Esta manera de publicitar (evangelizar) las actividades religiosas también invita a
que grupos de jóvenes se involucren en las nuevas maneras de crear communitas virtuales que
sirven de algún modo de estrategia de integración de nuevos feligreses ante el embate que
hacen las nuevas religiones, ya que es a través de estas redes como muchos jóvenes siguen las
actividades guadalupanas aunque no participan directamente en estos grupos.

Son esos espacios intersticiales en donde los feligreses guadalupanos se organizan para
crear la communitas con antorcha, con el objetivo de satisfacer las dinámicas e interés
contemporáneos de las nuevas maneras del ser católico. Mientras que para la iglesia católica ve
con buenos ojos esta actividad, ya que son los jóvenes quienes se movilizan por los caminos,
los que difunden el catolicismo guadalupano y tienen la posibilidad de penetrar en las
poblaciones como contrapeso a otras religiones no católicas.

Si bien la propuesta teórica sobre el proceso ritual planteada por Van Gennep (2008) y
Víctor Turner (1988) permite clasificar las fases de la peregrinación en preliminal, liminal y
posliminal ayuda a describir e identificar los diferentes momentos por los que atraviesa el
peregrino; en ocasiones los resultados etnográficos superan a este supuesto teórico, debido a la
multiplicidad de maneras de practicar el antorchismo de manera libre, sin ataduras
institucionales y fuera del alcance de las autoridades eclesiásticas. Por lo que los grupos de
antorchas se ingenian rituales menores como rezos colectivos, círculos de meditación, entre
otros que hacen de cada peregrinación una experiencia única para quienes lo practican.

259
Y es que la peregrinación en sí es un instante en el tiempo, un momento en el que
puede durar todo el año en la mente de quien la ejecuta, por ello para cada integrante, la
experiencia es significativa y llena de particularidades, debido a que cada año experimentan
emociones y expectativas nuevas que hace que sea una actividad trascendental para su vida,
porque les provee de “tranquilidad”, “esperanza” y “seguridad” para iniciar nuevos proyectos o
para enfrentar los obstáculos que la vida les tiene preparado.

Es el “espíritu de la fe” la que mueve a que los peregrinos imploren con los pies, pero
también es el estímulo que encuentran muchos de los jóvenes que se encuentran incrédulos o
que carecen de algo que les sujete dentro del engrane social complejo en el contexto de la
modernidad. En este sentido, Manuel Delgado (1999) asegura que este tipo de movilizaciones
o prácticas son construidas por el feligrés en colectivo, para cubrir esos intersticios que no logra
cubrir la Iglesia o las estructuras de la sociedad. Son acciones que tienen como fin, crear
eslabones rituales que respondan a los intereses y satisfacciones de la nueva feligresía católica,
sobre todo frente al embate de la diversidad religiosa que experimenta la sociedad actual en San
Cristóbal de Las Casas. Es por ello, que describir este tipo de rituales en espacios urbanos
ayuda a entender la constante transformación religiosa que enfrenta por un lado el individuo
(devoto) y por otro en las ritualidades que se expresan en el contexto contemporáneo.

260
Capítulo V
El Antorchismo

Las peregrinaciones con antorcha son realizadas por jóvenes, niños y adultos católicos que
recorren los caminos del estado de Chiapas, peregrinando a los santuarios marianos o de
Cristo. Es una manifestación religiosa que en los últimos cincuenta años del siglo XX y en los
albores del XXI se ha convertido en una de las prácticas recurridas entre la feligresía católica.
En ella se observan las distintas maneras de vivir la religiosidad católica entre los devotos del
guadalupanismo y al mismo tiempo da cuenta de la complejidad del escenario religioso que
caracteriza el estado. De acuerdo al censo del INEGI 2010, el número de católicos representó
el 58% de la población chiapaneca348. Sin embargo, en los últimos años ha sido notable el
aumento de la población no católica adscrita a otras asociaciones religiosas349. En esta
proliferación de diversidad religiosa en el estado, las peregrinaciones guadalupanas con
antorcha se han convertido en una manera de religiosidad católica muy particular, ya que el
creyente dramatiza y exalta su identidad religiosa a través del ritual, además de experimentar
constantemente un periodo de liminalidad durante el proceso ritual.

Los grupos de antorchas es uno de los mecanismos que la Iglesia católica avala como
medio de catequización en parroquias e iglesias de algunas regiones del estado a través de la
creación de grupos de jóvenes cercanos a las iglesias, además de que contrarrestan a esta
población la posible influencia de religiones no católicas que están permeando en el territorio
chiapaneco. Es por ello que el antorchismo guadalupano es un factor que le ha dado presencia
y vitalidad a muchas de las parroquias tanto en la ciudad de san Cristóbal de Las Casas como
en el resto del estado.

348 Con un total de 1, 163, 097 de la población de 5 años y más se dijo tener una religión distinta a la católica.
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 2010.
349 Católica: 2 796 685 hab., Protestante/Pentecostal/Cristiana/Evangélica: 921 357 hab., Bíblica diferente de

Evangelista: 391 516 hab., origen Oriental: 187 hab., Judaica: 513hab., Islámica: 110 hab., Raíces étnicas: 272 hab.,
Espiritualista: 206 hab., Otras religiones: 1 937 hab., Sin religión: 580 690 hab., No especificado: 103 107 hab.
(Programa de las religiones en México 2010. Chiapas. INEGI. Censo General de Población y Vivienda 2010.
SNEIG. Información de Interés Nacional. P.p. 59).

261
Familia nuclear peregrinando.

Fuente: Trabajo de campo durante 2015.

Ante este panorama, si bien las peregrinaciones con antorcha que surgieron en Chiapas
denotan una serie de componentes religiosos y políticos -que se mencionaron en los capítulos
anteriores- se han ido diluyendo con el paso de los años. En la actualidad esta práctica religiosa
que aparenta una “homogeneidad” en sus acciones -sean estas devocionales o de índole
pragmático-, muestra la presencia de una diversidad en el accionar ritual ya sea en la
organización de los grupos, en la manera de realizar la peregrinación o en la concepción del ser
antorchista; escenarios que escapan al control de la Iglesia católica y dotan de una identidad
particular a estas agrupaciones.

Este capítulo expone algunos de los elementos que comparten las antorchas, y presenta
algunas de las diferencias que hay en estos grupos, con la finalidad de analizar a las
peregrinaciones con antorcha como un ejemplo de diversidad en las formas de expresar y vivir
la religiosidad católica, aunque comparten una misma comunidad de devoción pero con
diversas maneras de practicar la ritualidad.

5.1 ¡Rueda camión y volante la virgen va adelante!

Para que una peregrinación con antorcha se lleve a cabo existe una variedad de componentes
comunes que se expresan durante el peregrinaje como el uso del cuerpo y algunos objetos
importantes para el ritual como la antorcha, el fuego, el banderín, y por otro lado, existen

262
particularidades que los hacen ser diferentes en su manera de realizar la peregrinación, como
los intereses personales de los peregrinos o en la forma de organizar las antorchas sean estas
pedestres, ciclistas o musicalizadas. Sin embargo, en esta composición de elementos, en
algunos de los grupos de antorchas se encuentra la mezcla de elementos entre unos y otros, lo
que hace evidente su complejidad en su apreciación, debido a que en la acción y en la
organización de estos grupos existe una flexibilidad en su reglamentación así como en su
práctica, lo que genera que haya una diversidad de posibilidades de expresar el antorchismo.

Grupo de peregrinos dentro del camión.

Fuente: Trabajo de campo durante 2015.

Para dar inicio a la peregrinación saben que el esfuerzo físico es parte indispensable
para el desarrollo de su acto religioso, sin embargo la mayoría de ellos no tiene una preparación
física previa, es decir, la mayoría no participan previamente en alguna actividad deportiva que
ayude a evitar posibles fracturas o estar en buenas condiciones físicas para la realización de la
peregrinación, excepto aquellos que realizan algún deporte amateur como jugar futbol, básquet
bol, ciclismo, entre otros; sin embargo, esta situación no impide su participación ya que se
encuentran peregrinos de todas las edades corriendo sin tener una preparación física adecuada.

En esta condición del antorchista usa el cuerpo como un medio para implorar con los pies,
vive un acto de absoluta voluntad para encarar la duración del recorrido. Pese a estas limitantes
corren o caminan grandes distancias para llegar al santuario. A medida que el trayecto se va
haciendo más largo, sus pies comienzan a llagarse y a padecer dolores intensos en todo su
cuerpo. Además durante el proceso de peregrinación llegan a experimentar situaciones
extremas donde ponen al límite la tolerancia, ya que soportan factores externos que pueden ser

263
desagradables o inaceptables para otras personas, es decir, desde el momento en que el
peregrino sube al camión está consciente que el viaje será incomodo, ya que en el mismo
transporte sea este camión o camioneta van apretujados unos con otros, lo que genera que sus
cuerpos comiencen a sudar y transpirar olores cada vez más acentuados sobre todo después de
haber realizado un esfuerzo físico.

Peregrina acompañada de sus hijos.


2015

Fuente: Trabajo de campo durante 2015.

Algunos grupos de antorchas están integrados por familias nucleares o ampliadas, por
lo que se encuentran a muchos niños participando durante las carreras en relevos
acompañados de sus padres; en otros, asisten solos y recomendados con familiares o amigos
cercanos, por lo que es común que parte del contingente se integre por un grupo numeroso de
niños que son iniciados en el antorchismo a temprana edad. La sobrepoblación de los
camiones hace que la posición para dormir y descansar sea agotadora, ya que no se cuenta con
un espacio suficiente para estirar las piernas y el cuerpo, más si alguno lleva en brazos a sus
hijos pequeños. Esta situación exige un esfuerzo mayor ya que al correr sin tener un descanso
adecuado en los ratos dentro del camión, hace que el recorrido sea más extenuante y difícil.

Estas condiciones de hacinamiento hacen que el recorrido sea un verdadero sacrificio,


sin embargo, ellos no se quejan de estas condiciones debido a que las precariedades o
padecimientos son ofrecidos a la virgen como prueba de fe, para liberarse de los pecados y

264
cumplir con el recorrido para ganarse la gracia y la manda que los hace realizar la
peregrinación, al respecto menciona el Sr. Giovanny López:
yo me da cierta preocupación, porque se pasa hambre, los calorcitos fuertes,
y como vengo con los pequeñas y se me vayan a enfermar, que ya quieren ir
al baño, pero como peregrinos y esta la intervención de Dios y la de la
santísima virgen, lo dejamos en la mano de Dios, y estamos contentos
porque conocemos más personas, porque venimos a conocer más nuestra fe,
y a la santísima virgen que sabemos que es nuestra mamá, es nuestra madre,
somos hermanos que vamos a buscar a nuestra mamá y en convivir entre
hermanos, pero si no tienes dinero yo te invito tu comida, es lo que me llena
de gozo350.
Peregrino frente a la Iglesia de Guadalupe en
S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

En esta condición cada antorchista vive durante su peregrinar diferentes maneras de


entender su religiosidad, ya que se observa que existen diversas intenciones en el acto de
peregrinar, las cuales van acompañados de penitencias que ellos mismos se proponen como
correr descalzos o realizar caminatas a grandes distancias, asumiendo las incomodidades, las
limitaciones, el cansancio y el dolor como parte de la expiación. Es común que durante el
recorrido de los antorchistas se escuche mencionar que desde el momento en que se asume ser
peregrino no tendrán las condiciones idóneas para viajar debido que esta acción responde un
acto de sacrificio que es ofrecido y entregado a la virgen de Guadalupe, sin importar las

350Entrevista realizada al Sr. Geovanny López Martínez, peregrino de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”.
Diciembre de 2016.

265
molestias físicas e incomodidades que se presenten en el recorrido, como menciona el
peregrino de la antorcha Juan Dieguito:
Que es un peregrino? Un antorchista? Un guadalupano? Que va en la
carretera! Para ser antorchista, un peregrino y un guadalupano con mucha
devoción, tienes que pasar hambres, tu desayuno se puede convertir en cena,
pasarás dolor pero jamás te rendirás aunque tus rodillas no den una, tu
corazón latirá y Dios te ayudara. Correrás bajo calor, sentirás sed pero no te
hará falta amor, porque María y Dios estará contigo, sentirás frio al no tener
una cobija encima pero María y Jesús cubrirán tu corazón con su manto, te
empapara la lluvia, te vas a resfriar, pero será una bendición, te vas a
enfermar pero jamás te rendirás351.

Para aquellos que realizan la peregrinación con la intención de que la virgen “los
escuche” o para “solicitar o pedir un favor”, el antorchista realiza el peregrinaje implorando la
intervención en la solución a sus problemas, como menciona la peregrina:
En una confesión me dijo [el sacerdote] que si iba a ir a peregrinar, me dijo
que iba a rezar y que iba a hacer, y si iba a correr que eso iba a ser mi
penitencia, para que mi familia le fuera bien. Cada uno decide porque y
como le va a pedir a la virgen, ellos saben porque lo piden, por la familia,
por salud, por devoción, ellos saben352.

El “pedir un favor” a la virgen es uno de los principales objetivos que se llegan a


escuchar entre los antorchistas, y es que estas “ayudas” van desde aspectos económicos hasta
personales como “solicitar salud”. Estas acciones motivan a que los peregrinos se acerquen a
un poder divino para la solución de sus problemas, como señala la peregrina:
El adorar a la morenita es desde muy pequeñita, yo le hablo y le digo: te dejo
mi dolor, te dejo mis sufrimientos y ayúdame a sacar todas esas escenas
dentro de mi cabeza para que haga mi vida y lloró porque es el dolor que
cargo y vengo a que la virgencita me ayude353.

Otros peregrinos realizan la peregrinación para pagar o “dar gracias” por las bondades
recibidas de la divinidad, es decir, algunos eventos positivos experimentados previamente son
adjudicados a la virgen, ya sea por haber solucionado algún problema que haya tenido
anteriormente o por haber ocurrido algún acto inexplicable o “milagroso” después de haber

351 Texto publicado en la página de Facebook de la antorcha Juan Dieguito de Tapilula, Chiapas, el 23 de Octubre
de 2018.
352 Entrevista a la Srita. Liliana Gómez, peregrina de caminata con Antorcha “Cristo y María”, de la localidad de

Carmen Tonapac, municipio de Chiapa de Corzo. Noviembre de 2015.


353 Entrevista realizada a la Sra. Tania Hernández, peregrina de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”.

Diciembre de 2016.

266
implorado ante ella. Sin embargo en la movilidad de los peregrinos hay algunos que realizan la
peregrinación por ambas intenciones, ya sea porque aprovechan a agradecer por los favores
recibidos o pedir nuevas solicitudes a la deidad, es por ello que el acto de peregrinar puede
llegar a no tener un fin, debido a que mientras que el devoto esté en condiciones físicas y no le
falte una intención, seguirá por muchos años la práctica de peregrinar con antorcha.

Peregrino visitante rezando dentro de


la Iglesia de Guadalupe en S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo durante 2015.

De igual manera, uno de los discursos que se encuentran entre los antorchistas, es el
acto de peregrinar como un acto de sacrificio iniciático de su vida cotidiana; es decir, el
peregrino aprovecha estas acciones expiatorias para hacer una introspección de las conductas
realizadas durante el año, debido que al celebrarse la peregrinación en el mes de diciembre y
último mes del año, es el momento ideal en el cual evalúa los actos realizados y aprovecha para
agradecer o reconocer los desaciertos que haya cometido, por lo que muchos de los peregrinos
guadalupanos ven el momento de concluir etapas y realizar también planes, deseos y promesas
para el año venidero e iniciar nuevos ciclos. Cada peregrino expresa ese ir y venir en su vida, de
entrar y salir de espacios, y sobre todo experimenta la transición de morir como pecador y
transformarse, para renacer una vez terminado su recorrido, lo que le asegura su pertenencia a
una comunidad de creyentes.

267
Si bien es cierto que el objetivo central de su peregrinar es correr para ir en busca de la
virgen de Guadalupe ya sea para solicitar, pedir o agradecer, no todos van a la peregrinación
con la misma intencionalidad. Muchos de los peregrinos aprovechan la coyuntura religiosa que
da la peregrinación para conocer y visitar nuevos lugares o para desligarse de su vida cotidiana,
aunque esto no es expresado abiertamente. Al momento de elegir el lugar de visita y organizar
las actividades durante la peregrinación, se incluye visitar los sitios turísticos o los lugares que
hay en el camino, así como conocer más allá de los límites el lugar del santuario, en espacios
que trascienden el fin religioso.

Esta actividad de recorrer los caminos, conocer nuevos lugares o realizar una especie
de turismo religioso354, es una acción que en la mayoría del discurso público del antorchista queda
velado355, posiblemente debido a que el acto de peregrinar tiene la anuencia de sus jefes,
patrones o incluso de los padres, lo que imposibilita reconocer como uno de los propósitos de
la peregrinación.
Peregrinos visitando las playas chiapanecas.
2015

Fuente: Fotografía proporcionada por el Sr. Iván Díaz. 2015.

354 “El turismo religioso es uno de los nichos del mercado turístico en crecimiento. Los principales destinos de
esta tipología turística son los lugares santos que representan lugares de devoción y de peregrinaje, así como sitios
destacados por su peculiaridad histórico-cultural. El turismo religioso tiene una composición compleja debido a
varios elementos que constituyen sus destinaciones y los motivos que mueven a los viajeros hacia estos lugares. Es
decir, el turismo religioso se compone de patrones religiosos, culturales, tradicionales, espirituales, paisajísticos,
que muchas veces interactúan en la intención y la decisión de emprender el viaje” (Serrallonga, 2011: 63).
355 Durante las entrevistas hechas a peregrinos, el tema del turismo religioso fue absolutamente negado,

adjudicando estas actividades a otros grupos de antorchas y no a las que en ella participan, limitándose a contestar
lo políticamente correcto, es decir que la peregrinación era un acto de devoción religiosa.

268
Esto se manifiesta en algunas antorchas al elegir la ruta o el lugar, ya que optan por los
sitios turísticos como zonas de playa o ciudades importantes de la región, lugares donde no
siempre hay un santuario importante, como menciona Turner al referirse a la necesidad de los
peregrinos de aprovechar estas peregrinaciones como un medio para conocer nuevos lugares:
Factores como el incremento general y rápido de la población en el mundo,
la mejoría de la comunicaciones, la propagación de medios modernos de
transporte, el impacto de los medios masivos de comunicación que incitan al
viaje, han aumentado el número de visitantes a los santuarios, muchos de los
cuales tal vez deberían de ser considerados más como turistas que como
peregrinos per se (Turner, 2009: 24).
Peregrinos dentro del camión durante la
peregrinación

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

Por otro lado es interesante observar que al alejarse de su vida cotidiana y asumir el
papel de peregrino, es el momento en que es aprovechado para alejarse de su propia realidad y
disipar sus propias preocupaciones que lo agobian de su vida cotidiana. El recorrer caminos
también ayuda a la liberación y al desahogo del sujeto para luego integrarse a su realidad, ya
restablecido. Los peregrinos disfrutan cada momento del viaje, se toman fotografías con sus
celulares en cada lugar en la que ellos pasan, aprovechan a comprar algunos “objetos
religiosos”356 y mantienen un ambiente de alegría y entusiasmo. Estas actividades rompen las
tenciones de su vida diaria, es el momento en que el peregrino se alimenta del “turismo
[porque] puede concebirse como un deseo de recuperación y de renovación, que implica un

356 Esto es de llamar la atención ya que muchos de los antorchistas tienen reservado algunos gastos
exclusivamente para la compra de objetos religiosos que se venden en las afueras de las iglesias o le dedican
algunas horas para conocer el lugar y comprar objetos propios de los lugares para llevarlos como recuerdo de su
visita o para su familiares.

269
escape respecto a las rutinas de la vida cotidiana” (Chihu, 2001:148) y que posiblemente no
tienen oportunidad en otras condiciones.

Peregrino comprando suvenires


religiosos.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2016.

Es por ello que la realización de la peregrinación no sólo tiene como único objetivo el
visitar los lugares sagrados o la imagen religiosa, sino que también se aprovecha a liberar
problemáticas que son adquiridas en su vida cotidiana y que al hacer el recorrido esta es
olvidada o liberada temporalmente, situación que ayuda al peregrino a encontrar en ese
momento de separación, un espacio de relajamiento y de desahogo espiritual. Muchas de estas
intenciones de los peregrinos son un claro ejemplo de las distintas maneras de experimentar y
vivir su catolicidad, acciones que escapan del control de la Iglesia católica y sobre todo de los
sacerdotes que se encuentran cercanos a los grupos de jóvenes dentro de las parroquias, ya que
a lo largo de la peregrinación cada grupo organiza y ejecuta sus acciones liberados de las reglas
sociales y hasta del mismo yugo dogmático de la Iglesia.

Pese a esta diferenciación de intereses vinculados a la peregrinación, es indispensable


que los organizadores o el coordinador de la antorcha tengan los objetos rituales que los
diferencian del resto de otras peregrinaciones. Para el caso del antorchismo es indispensable
que el peregrino/antorchista lleve un pebetero/antorcha que lo vincula estrechamente con el
ritual, es el elemento que le da sentido a este tipo de peregrinación debido a que en términos

270
espirituales es la conexión entre ellos y la divinidad. Es el objeto que lleva en sus entrañas el
fuego, símbolo de purificación que destruye pensamientos y acciones negativas pero que
también representa la luz que ilumina el poder de lo divino, como señala un peregrino de la
antorcha Juan Dieguito:
Correrás en el día donde podrás ver, pero estarás lleno de peligros, correrás
en la noche donde no veras, pero la antorcha, la luz de Cristo guiara tu
camino, serás ignorado por personas, pero muchas te valoraran… debes
correr con amor ya que la antorcha no es competencia, debes correr unidos
con tu hermano llevando un mensaje de paz. No es quien grita más porras
sino el que grita con amor. Extrañaras a tu familia pero ellos van a orar por
ti y tú por ellos…357

Ya desde tiempos inmemoriales el fuego ha tenido una significación a lo largo de la


historia de la humanidad, como un símbolo que representa un misticismo vinculado a la
sacralidad, en este sentido, todas las culturas del mundo han exaltado el poder del fuego como
elemento que purifica, por lo que está presente en cada acto ritual o ceremonial importante
para el grupo que lo utiliza.
Entrada a uno de los pueblos de la ruta de peregrinación.

Fuente: Trabajo de campo en Chiapa de Corzo. 2017.

La relación entre el fuego y la antorcha está ligada desde la época griega, asociada con la
llama de los juegos Olímpicos que originalmente representaba el robo del fuego de los dioses
por parte de Prometeo y su posterior entrega a la humanidad. En la época moderna, encender

357Texto publicado en la página de Facebook de la antorcha Juan Dieguito de Tapilula, Chiapas, el 23 de Octubre
de 2018.

271
el fuego en los eventos deportivos se introdujo en los juegos Olímpicos de Ámsterdam de
1928, para el año de 1936 fue en Berlín donde se instituyó por primera vez un recorrido en
relevos para llevar la llama olímpica de la ciudad de Olimpia en Grecia a la sede de los juegos.

Para el caso de las antorchas guadalupanas, el uso de la antorcha tiene su origen en el


año de 1954 al realizarse “la Magna Carrera Nacional de Antorchas de Fe”, en la que se
instruyó a que todas las diócesis de México realizaran la peregrinación hacía la Basílica de
Guadalupe. Como exprese en el capítulo anterior, para este evento se pidió a todos los
organizadores y comités diocesanos para que se elaborara un pebetero que iba a llevar el
peregrino en las manos mientras realizaban la carrera en relevos; a partir de entonces, se hizo
este objeto especialmente para estos grupos y fuera el símbolo que los identificara frente a
otras peregrinaciones.
Peregrinos custodiando las imágenes en S.C.L.C

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

En este sentido, la antorcha o pebetero es un objeto hecho de lámina de fierro, en


forma de cono y terminada con punta o en ocasiones con una cruz. Ésta se encuentra sujetada
por un tubo del mismo material, que sirve para detenerla con la mano. Muchas veces este
objeto es decorado con los colores de la bandera de México o con los que compone el
uniforme del grupo, además del escudo y el nombre del club a que pertenece. Cada grupo
tendrá mínimo de dos a tres pebeteros e inclusive, algunos tendrán una más pequeña que sirve
para que los niños peregrinos puedan cargarla. Estas son consideradas como un objeto
sagrado, por lo que estarán resguardadas a lo largo del año en los altares del coordinador de la
antorcha, así como también los objetos que sirven para la peregrinación como banderas,

272
banderines, imágenes religiosas y objetos de seguridad (conos, chalecos, focos, lámparas,
sirenas, etc.) Cada pebetero contará con una base de metal que es utilizada para que la antorcha
sea colocada mientras los peregrinos descansan en las paradas o lugares de visita.
Camioneta que lleva a los peregrinos. S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

Es el objeto que lleva en su interior el fuego que alimenta espiritualmente a los


peregrinos, por lo que es cuidada y protegida por todos, nunca queda sola y siempre se
encuentra frente y al centro del altar, que es improvisado en los lugares donde descansan, y
cuidan que el fuego no se extinga. Pero debido a que se mantiene en movimiento, el fuego en
ocasiones se apaga, situación a la cual no le asignan ninguna significación de mal augurio o de
violación a las normas que deben de cumplir los antorchistas. Sin embargo, el fuego debe durar
durante todo el recorrido de la peregrinación ya que será concebido como “el fuego nuevo, la
palabra, el mensaje representando a Dios con la antorcha” que guía el camino del peregrino,
pero que también guía a todo aquel que se deje evangelizar.

Para el caso de las antorchas guadalupanas el fuego y la antorcha será el vehículo por el
cual expresen el papel de portadores del milagro guadalupano, factor que será determinante a
lo largo de su peregrinar. “Hoy nuestros símbolos son el fuego y la antorcha, el fuego
representa a Dios, la antorcha el medio para que Dios se haga presente en nuestra
comunidad”358.

358Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coordinador de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de
noviembre de 2015.

273
La relación entre las antorchas guadalupanas y el espíritu deportivo está ligado desde su
origen, como ya se ha mencionado, la creación de la primera antorcha fue dirigida por la
Comisión del Deporte de la ACJM, para incentivar a los jóvenes a participar en un acto
deportivo con tintes religiosos, característica que se vincula en las siguientes antorchas que
prosiguieron esta tradición. Es por ello oportuno mencionar que la práctica del deporte estuvo
presente como una política de Estado desde la posrevolución en México y que fue impulsada
posteriormente en Chiapas359.

Para el caso de las antorchas guadalupanas muchos de los primeros grupos


comenzaron a organizar clubes con el nombre de sus barrios o colonias pero con tintes
deportivos. Este planteamiento fue retomado con un interés primordial por la Iglesia católica
para incentivar a una actividad dirigida principalmente a los jóvenes, a quienes se les inculcaba
ideas para organizarse con fines de convivencia en armonía y de acuerdo a preceptos marcados
por la vida cristiana. En sus primeros años, éstos grupos fueron organizados como clubs
deportivos: “Club Deportivo de la ACJM”, Club Deportivo La Asunción”, Club Deportivo
San Diego”, etc., actualmente esta palabra ha sido desplazada o ha quedado como un adjetivo
en el nombre del grupo; sin embargo, muchos han perdido de vista esta perspectiva y el origen
de esta característica, ya que conciben que su práctica no responde a motivos deportivos sino
que ahora sólo se trata de difundir la devoción guadalupana durante su peregrinar.

Actualmente la peregrinación con antorcha revela el interés que tiene la Iglesia católica
para que estos peregrinos se muevan por los caminos, empresa en la que subyace el objetivo de
difundir el catolicismo abriendo caminos en lugares que una vez fueron controlados por la
Iglesia católica y que ahora están regulados por otros grupos religiosos no católicos, argumento
velado y que no es asumido por los antorchistas, sin embargo, considero que en esta expresión
prevalece el interés por parte de la Iglesia para recuperar los espacios perdidos a través de la
expresión itinerante de la devoción guadalupana, por medio de la evangelización que hacen los
grupos de peregrinos en los sitios que transitan.

Otro de los objetos que llevan durante el recorrido es el banderín, este ha sido
utilizado a lo largo de la historia de los pueblos en el mundo, es el estandarte que irá por

359 Ver Lisbona, 2006.

274
delante del contingente y que representa al grupo que pertenece. Entre las antorchas sólo
algunos cuentan con ella porque están más organizados o pertenecen a alguna parroquia en
particular. Este banderín contiene el nombre de la antorcha, el nombre del lugar de
procedencia, el escudo y alguna imagen religiosa que es representativa del club, el cual es sólo
utilizado cuando llegan a alguna ciudad o en ocasiones los peregrinos correr con ella durante la
carretera.

Banderín representativo de una antorcha

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2016.

La mayoría de las antorchas de San Cristóbal se registran con nombres similares


relacionados a María (Peregrinos de María, Antorcha Guadalupana, Corazón Guadalupano,
Peregrinos del Tepeyac, Esclavos de María, Peregrinos de Lupita, Club Peregrinos Ángel de
Lupita, Juvenil Guadalupana, entre otros); otras antorchas se registran con el nombre de algún
santo o Cristo (Antorcha del Señor de Tila, Cristo Ayer y Siempre, Espíritu de Dios, Antorcha
Guadalupana del Señor de Esquipulas, Niño Salvador del Mundo, Peregrinos de Juan Diego,
Antorcha Guadalupana Sagrado Corazón de Jesús, Unidos Por la Fe, etc.); mientras que otras
se nombran de acuerdo a los santos patronos de su barrio o colonia (Club Guadalupano San
José, Club Santa Cruz, Antorcha Infantil Barrio de San Diego, Club Ecatepec, Club Deportivo
Candelaria, Club San Ramón, Club Asunción, etc.); se encuentran otras que denominan a la
antorcha de acuerdo a su grupo gremial (Club Deportivo de la ACJM -Acción Católica de la
Juventud Mexicana-, Antorcha de los Trabajadores Volkswagen, Club de la CTM,

275
Organización Campesino Indígena, etc.); incluso hay quienes le ponen nombres de personas o
el apellido de la familia a la que representan (Familias Urbina/Flores/Ramos, Catalina Ruiz
Hernández, Familiar, etcétera). Mientras que hay otras antorchas que no cuentan con un
nombre formal, por lo que se hacen llamar únicamente “Antorcha Guadalupana”360.

Vehículo que trasporta peregrinos. S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

Esta diversidad de maneras de expresar el antorchismo guadalupano visualiza por un lado,


distintos intereses particulares de cada antorchista y, por otro lado existe una serie de
características comunes que se expresan en el peregrinar, en el que implorar con los pies implica el
uso del cuerpo, el fuego, la antorcha, el banderín y los nombres que eligen para diferenciarse de
los demás como una manera de construir una identidad religiosa y una pertenencia a una
comunidad.

Además de estos elementos que son indispensables para la realización del ritual, se
pueden identificar algunos factores que expresan la vinculación con un sentido nacionalista,
entre ellos se encuentra el uso de la bandera mexicana, los colores patrios en su vestimenta y
en los objetos rituales. Esta vinculación entre los antorchistas y los símbolos nacionalistas están
íntimamente ligados, primeramente porque la virgen de Guadalupe es la imagen más icónica
del nacionalismo mexicano y por otro lado, es una manera en que los peregrinos representan el
sentido de pertenencia a la nación mexicana.

360Durante el trabajo de campo tuve la oportunidad de “bautizar” un grupo de antorcha que venía del municipio
de Sitala. Los cuales al preguntarles el nombre de su grupo, no sabían cómo se llamaban; por lo que les sugerí
varios nombres comunes entre las antorchas y ellos, decidieron nombrarse como la antorcha “Hijos de María”.

276
La construcción de la imagen de la virgen de Guadalupe desde al ámbito político y
religioso siempre estuvo relacionada con un origen prehispánico en la que se le asocia a la diosa
Tonantzin y su ritualidad, es por ello que en el planteamiento doctrinal de la Iglesia hacia los
peregrinos se enfatiza que:
La tradición de los antorchistas viene de la época prehispánica, de la
celebración del fuego nuevo que realizaban nuestros antepasados. Cada
determinado tiempo, cada trece años (número simbólico) o múltiplo del
mismo cada 26 años, 52 años, 104 años, efectuaban la ceremonia del fuego
nuevo. El número trece significa el término de algo y el inicio de algo nuevo.
La celebración del fuego nuevo se hacía para mantener vivo el fuego, que
representa a Dios, era para pedir a Dios que siguiera presente en la vida de
las comunidades, que Dios siguiera acompañando a su pueblo. Esta
tradición se reactualizó con las apariciones de la Virgen de Guadalupe.
Cuando se apareció Tonantzin Guadalupe, que para el indígena es la madre
del Dios Sol, ellos se identificaron más con esa presencia y figura de Dios.
Los antorchistas llevan ese fuego sagrado, que representa a Dios y su
mensaje. Custodian el fuego, que no se apague, que no se apague dentro de
la comunidad la presencia de Dios361.

Aunque esta explicación no sea tan convincente, es utilizada por la Iglesia católica para
adoctrinar el guadalupanismo y justificar la idea de relacionar al origen del culto guadalupano
con la antigua diosa náhuatl de Tonantzin que se adoraba en el cerro del Tepeyac:
La Virgen María quiere que se le llame Guadalupe que en lengua náhuatl
sería Cuahtlapcupeuh o lo que es igual, Tlecuauhtlapcupeuh que significa: "La que
viene volando de la región de la luz, como el águila de fuego".
- Tle-tl, "fuego": Elemento que recuerda el lugar donde Dios vive y actúa.
- Cuauh-tli, "águila": símbolo del sol y de la divinidad.
- Tlalcup-a, "del oriente, de la región de la luz.
- Euh. Dicha terminación se usa para indicar el sujeto de la acción y que
continúa haciéndola.
El "Águila que habla", Juan Diego, se encuentra con "la que procede de la
región de la luz como el Águila de fuego", la Virgen de Guadalupe362.

Esta idea seguirá permeando hasta el día de hoy durante las pláticas o conferencias
dictadas por sacerdotes a los feligreses guadalupanos. En este planteamiento se vincula la
tradición de peregrinar al Tepeyac desde tiempos prehispánicos y de relacionar algunos
símbolos de la imagen guadalupana en la tilma de Juan Diego, con algunos de los elementos de

361 Tema para los antorchistas. Misión Guadalupe. Diciembre, 2012.


362 Tema para los antorchistas. Misión Guadalupe. Diciembre, 2012.

277
la iconografía prehispánica. Esta asociación será trascendental en la relación con la
guadalupana y el pasado prehispánico, ya que ha dado como consecuencia una relación
simbiótica entre la virgen y el origen del ser mexicano.

Para el antorchismo, los símbolos nacionalistas como la bandera y los colores patrios
en su vestimenta, son elementos que van íntimamente relacionados con la virgen de
Guadalupe, debido a que guarda una relación entre la construcción de la nación mexicana y la
identidad nacional de los peregrinos, con este sentido identitario no sólo se muestran como
católicos guadalupanos sino como mexicanos ante el resto del país.

Peregrinos corriendo por las carreteras


portando la bandera mexicana.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

El antorchismo es pues una expresión religiosa católica en la que se observa una


dimensión multifacética, en la cual se visualiza desde fuera como una práctica homogénea en
donde existen componentes simbólicos y representativos comunes con un mismo sentido de
devoción, sin embargo haciendo una mirada más focalizada de la ritualidad, existe en el interior
de estos grupos un sinfín de experiencias, anhelos, intenciones y maneras diversas de vivir su
peregrinaje, por lo que hace de este ritual un acto en el cual se observan diversos matices que
enriquecen su apreciación.

278
FETICHES GUADALUPANOS
EN LOS SANTUARIOS.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C y CDMX (2016 – 2017).

279
5.2 Nosotros, igual que Juan Diego: Clasificación de las Antorchas.

La composición de las peregrinaciones guadalupanas con antorcha se clasifican de distintas


maneras, ya sea por género, por edad, por gremios, por su origen étnico, etcétera; sin embargo,
en este apartado se enuncian algunos aspectos que se encuentran manifiestos en las distintas
formas de peregrinar entre los católicos guadalupanos y en especial entre los grupos de
antorchas, que en una primera impresión puede observarse como homogénea a partir de
ciertos elementos generalizadores, sin embargo se encuentra una diversidad de maneras y
formas de realizar el antorchismo, prácticas que ha tenido distintos orígenes y momentos
determinantes para la realización de estas expresiones religiosas.

Es por ello oportuno hacer una clasificación de los grupos de antorchas para
diferenciar las características particulares que determinan las formas de implorar con los pies. En
esta categorización también se destaca el origen, la organización y los procedimientos que rige
a la antorcha durante la peregrinación, así como las diversas formas de movilidad que existen
para realizar la antorcha y las maneras en que los peregrinos recorren los caminos corriendo,
caminando, en bicicleta o en motocicleta en busca de los santuarios marianos o de Cristo.

A partir de los datos etnográficos, se clasificaron a las peregrinaciones con antorcha,


atendiendo a las formas de movilidad, con el fin de explicar las diferencias de la peregrinación.
Para ello las distribuyó en tres grupos:
• De noche y de día, yo corro con María, se refiere a aquellos grupos de antorchas que
son pedestres, entre ellas las caminatas.
• Rodar y rodar hacía el Tepeyac, son aquellos peregrinos que se movilizan por medio de
un transporte sea este bicicletas o motocicletas.
• Con panderos y guitarras, nosotros danzaremos, son los grupos de antorchas que
tienen como característica pertenecer al movimiento de Renovación Carismática
Católica y por la cual utilizan la música durante su peregrinar.

280
5.2.1 De noche y de día, yo corro con María
Cuando era pequeñito,
mi mamá me decía,
no te metas a la antorcha,
que corren noche y día,
necio y necio el niño,
de antorchista se metió,
ahora corre con alegría,
con fe y devoción.
(Fragmento de una porra antorchista).

Las antorchas pedestres son las más generalizadas en el estado, esta práctica consiste en que un
grupo de peregrinos se organiza para correr en relevos, es decir, cada antorchista corre un
tramo, este puede ser de 100 a 500 metros, llevando en las manos la antorcha, una vez
terminado el recorrido entrega el pebetero a otro integrante. Estos grupos pueden llegar a ser
de 10 hasta 100 personas o más363, los cuales realizan su peregrinación corriendo con tenis o
descalzos, peculiaridad que está supeditada a la voluntad del peregrino. Cabe mencionar que
durante el recorrido de ida viajan en transporte (camiones, autobuses, volteos, tráileres,
camionetas, entre otros), y una vez que llegan al lugar de visita inician la peregrinación
encendiendo la antorcha.
Peregrino corriendo por la carretera

Fuente: Trabajo de campo en


Tapanatepec, Oaxaca.2015.

363Ejemplo de ello, es la antorcha Guadalupana que se organiza con más de 16 localidades del municipio de San
Cristóbal. Esta se fundó después de haber ocurrido la “Matanza de Acteal”, la intención de esta peregrinación
guadalupana es visitar las comunidades cercanas a la ciudad, que se encuentran más desprotegidas o con
problemas de marginación o pobreza. Este grupo puede alcanzar alrededor de 300 peregrinos, entre hombres,
mujeres y niños.

281
En la modalidad de antorchas pedestres se encuentran también las antorchas en
caminata, ellos se organizan en grupos de no más de 10 a 15 integrantes, caminan hasta llegar a
los lugares de visita debido a que no cuentan con transporte, por lo que cargan sobre su
espalda una mochila con objetos personales como cobijas, zapatos, trastes, comida,
medicamentos, etc., pero siempre incluyen una imagen de Guadalupe de bulto o en cuadro,
inclusive algunos de estos grupos, llevan jalando una especie de caja de fierro con llantas en la
que colocan objetos de cocina (anafre, carbón, trastes, y algunos alimentos) para realizar sus
alimentos en los sitios de descanso.
Las caminatas solamente caminan con sus pertenencias, mochilas, comida y
lo que carguen todo en su espalda y no descansan, todo el tiempo van
caminando hasta llegar al lugar donde tienen que llegar.364

Peregrinos llegando a la iglesia de Guadalupe en


S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

Estos peregrinos realizan el peregrinar desde sus lugares de origen de ida y vuelta hasta
el lugar de visita, solamente caminan por la mañana hasta llegar a un pueblo, para resguardarse
y seguir su camino al día siguiente. “Nos vamos en carro y luego de regreso ya que pedimos,
nos venimos de regreso por la madrugada como a las 2 de la mañana”365, este tipo de antorchas
sólo visitan ciudades y pueblos cercanos a su lugar de origen, aunque se han encontrado en el
trabajo etnográfico algunos grupos que llegan de otras partes del estado a visitar la iglesia
guadalupana de San Cristóbal.

364 Entrevista a Liliana Gómez, peregrina de caminata con Antorcha Cristo y María, de la comunidad de Carmen
Tonapac, municipio de Chiapa de Corzo. Noviembre de 2015.
365 Entrevista a Liliana Gómez, peregrina de caminata con Antorcha Cristo y María, de la comunidad de Carmen

Tonapac, municipio de Chiapa de Corzo. Noviembre de 2015.

282
Durante el recorrido se van pasando de mano en mano la antorcha, todos caminan y
descansan juntos. Los tramos de peregrinación son cortos y sólo se desplazan por la misma
región de donde son originarios, aunque estos grupos se diferencian en su comportamiento y
forma de realizar la peregrinación, existen otras formas de conducta que los hacen comunes,
como la forma de organización de la carrera, el sacrificio, el esfuerzo físico y los accidentes que
se enfrentan durante los recorridos.

Peregrinos en caminata visitando la iglesia de


Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

En ambos grupos se encuentran clubs de antorchistas que corren o caminan con tenis
o solamente descalzos, mientras que hay otras que son mixtos. La manera en que peregrinan se
determina desde la propia organización de la antorcha, la cual en algunas se acepta que corran
descalzos, siempre y cuando sea la voluntad del peregrino, mientras que otras antorchas
prohíben realizar esta actividad y solamente aceptan a personas que deciden realizar la
peregrinación con tenis, al respecto narra el Sr. Calixto González, coordinador de la Antorcha
de descalzos:
Si nuestro objetivo es sentirnos bien todos y más que nada el respeto a ella a
nuestra Madre Santísima, nosotros lo que hacemos en nuestras promesas
como decimos nosotros, en nuestras juntas lo platicamos que no es a la
fuerza que vayan descalzos, si quieren o sea cada quien va a sentir el latido
de su corazón y qué tanto amor sentimos a la virgen, prácticamente los ocho

283
vamos a salir de aquí descalzos desde el día cinco que salimos hasta el doce
que venimos descalzos todo el camino366.

Esta decisión es respetada por muchos peregrinos, aunque piensan que es un sacrificio
que le entregan a la virgen de Guadalupe, como menciona la siguiente peregrina:
Ellos lo hacen por una petición que ellos tienen y ellos corren igual solo que
descalzos, a mi si me viera gustado correr descalza pero no puedo por mi
embarazo… esta es una experiencia muy bonita, la verdad367.

En las antorchas pedestres, es común encontrar a mujeres embarazadas, ya que pueden


correr sólo en tramos cortos o correr en lugares seguros, algunas de estas mujeres peregrinan
esperando la bendición de la virgen para tener un parto exitoso, por lo que no tienen miedo a
sufrir algún peligro, ya que se sienten protegidas por ella durante su peregrinar, como describe
la peregrina:
Ahhhh, súper bonito, es algo bien padre, vine por mi bebe, es que estoy
embarazada de dos meses y ellos me entienden y me cuidan por eso saben
que no puedo correr mucho. Por lo mismo que estoy embarazada, me dejan
tramos cortitos, pero si mis compañeros les dejan tramos más largos, a los
hombres.368

Tanto las antorchas pedestres como las caminatas corresponden a las primeras formas
de peregrinación, por lo que son las más generalizadas debido a que algunas de ellas están
asociadas a las parroquias de sus lugares de origen, mientras otras se organizan de manera
independiente a la Iglesia y sus formas de organización son diversas.

5.2.2 Rodar y rodar hacía el Tepeyac.


Cuando tú me ves,
corriendo en la pista,
no me tengas lástima,
soy un Antorchista,
cuando tú me veas,
Corriendo en la orilla
No me tengas lastima,
lo hago por María
(Fragmento de una antorcha).

366 Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.
367 Entrevista realizada a la Srita. Karen peregrina de la Antorcha San Juan Pablo II, del barrio de Mexicanos. 11

de diciembre de 2014.
368 Entrevista realizada a la Srita. Karen, peregrina de la Antorcha San Juan Pablo II, del barrio de Mexicanos.11

de diciembre de 2014.

284
Otra modalidad de peregrinación con antorcha se encuentra en aquellos peregrinos que se
mueven por las carreteras en bicicleta o motocicleta, estos grupos realizan la peregrinación en
equipo, es decir, no peregrinan en relevos sino que todos al mismo tiempo se desplazan en los
caminos manejando su medio de transporte, sea bicicleta o motocicleta.

Peregrino en bicicleta.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2016.
El origen de estas antorchas, surgieron al mismo tiempo que las antorchas pedestres,
precisamente en el año de 1954 al celebrarse la Magna Carrera Nacional de Antorchas de Fe,
en el que se invitó a jóvenes mayoritariamente de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas para
que se registraran en la antorcha Ciclista que salió en ese año de San Cristóbal a la ciudad de
Tuxtla Gutiérrez.

Para que los jóvenes pudieran participar en ese momento, debieron de cubrir ciertos
requisitos que el Comité Diocesano solicitó para participar en aquella primera carrera, para esa
ocasión se solicitó a todos los interesados debían de contar con un examen médico para
conocer el estado físico y evitar posible problemas de salud a lo largo del recorrido. Ante esta
solicitud, el 20 de septiembre de 1954 se hizo entrega de la lista de nombres de las personas de
la ACJM que participaron en la carrera como ciclistas en esa ocasión369, así como los nombres

369San Cristóbal de las Casas, Chis. Sr. Pbro. Don J. Rubén Ramos. Presente. Estimado Monseñor: Tengo el
gusto de enviare a usted, los nombres de los señores de la A.C.J.M, después de haberlos revisado, manifestándole

285
de los corredores que fueron revisados por el médico encargado dando un total de siete
corredores iniciales, de los que salieron del examen en condiciones físicas para participar en la
Magna Carrera Nacional de Antorcha de Fe370.

Peregrinos en motocicleta, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

A través del Comité Diocesano de Chiapas se solicitó el apoyo del Dr. Joaquín Corzo
Ochoa para realizar el examen médico, el cual entregó los resultados el día 13 de septiembre de
1954, para esa ocasión se solicitó que en el análisis contuviera el nivel de presión arterial,
funcionamiento cardiaco y aparato respiratorio que tenían los deportistas371. Cabe mencionar
que aquella persona que no cubrió este requisito, no asistió debido a que podía encontrarse en

que están en condiciones de tomar parte en la carrera ciclista: Alejandro Hernández, Roberto Cruz, Fernando
Trujillo, Roberto Ruiz, Carlos Ruiz, Humberto Ruiz Castro, Víctor Guadarrama, Hermilo Bermúdez, Guadalupe
Sánchez. Respetuosamente Dr. Joaquín Corzo Ochoa 20 de septiembre de 1954 (AHDSC. Fondo Curia de El
Sagrario. Carp.313. Exp.27).
370 San Cristóbal de Las Casas, Chis. Sr. Pbro. Don J. Rubén Ramos. Presente. Estimado Monseñor: Me es grato

enviar a usted, lista de los señores de la A.C.J.M, que habiendo sido revisados los encontré en buen estado de
salud para tomar parte en la carrera: Marco Antonio Estrada, Virgilio Ventura, Rodolfo Ruiz, Enrique Ballinas
Castro, Fidel Latournerie, Miguel Hernández, Jorge Latournerie. Atentamente. Dr. Joaquín Corzo Ochoa. 22 de
septiembre de 1954. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.28).
371 “Sr. Pbro. Don J. Rubén Ramos, Presente. Estimado Monseñor: Tengo el gusto de adjuntarle el resultado del

examen Médico efectuado a los señores de la A.C.J.M, que formaran el equipo de la Carrera Ciclista: Felipe W.
Mijangos (dos exámenes), Cesar Augusto Lazos (dos exámenes), José Miguel Trejo (dos exámenes), Carlos
Jiménez, Carlos Muñoz, Ramón Cañas, Jorge Cordero Aguilar (dos exámenes), José Becerra Santiago, Jaime
Mandujano Franco, Jorge Suarez, Carlos Espinosa, Javier Molina Molinari, Juan José Latournerie, José Antonio
Trejo, Carlos Ramos, Federico Flores, Alberto Rojas, Fernando Enrique Ruíz, Homero Robles Gutiérrez (dos
exámenes), Humberto Ruiz, Ozcar Zúñiga, Pedro Alvarado Flores, Aureliano Velasco, Ramón Martínez Martil,
Francisco García R., Andrés Díaz, Humberto García Ramos. Los señores anotados se encuentran en buen estado
de salud por lo que respecta a presión arterial, funcionamiento cardiaco y aparato respiratorio, pudiendo tomar
parte en la carrera. Respetuosamente. Dr. Joaquín Corzo Ochoa. San Cristóbal de L, Chis. 13 de septiembre de
1954”. (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.27).

286
peligro de cualquier percance, por lo que mejor se substituyó al corredor o se le negó su
inscripción372. Cabe mencionar que actualmente este requisito ya no es indispensable para ir en
la antorcha por lo que queda a responsabilidad del peregrino sobre el estado de salud en que se
encuentre.

Después de que se realizó este evento, las antorchistas ciclistas siguieron realizando las
peregrinaciones en los siguientes años, sin embargo, se tiene registró que aproximadamente a
mediados de los 60, se organizó la Antorcha Guadalupana Ciclista Mercedaria (AGCM). Ésta
se reunió en la Iglesia de la Merced de la ciudad de San Cristóbal, ahí recibían asesoría, platicas
del sacerdote de la parroquia, ayudar en los trabajos de la iglesia y otros estaban al cuidado del
Templo de El Calvario. Éste cargo lo tuvieron durante dos años, pero debido a que hubieron
problemas entre los miembros de la junta del barrio con el grupo de antorchistas dejaron de
apoyar.

Con relación al grupo de la AGCM estuvo realizando las peregrinaciones a lo largo de


más de 15 años interrumpidos, los cuales visitaron algunas ciudades del estado de Chiapas.
Finalmente este grupo se desintegró debido a que el coordinador el Sr. Lizandro Cordero Cruz
y el Sr. Alonso Cruz, fundadores de la AGCM se integraron al Partido Revolucionario
Institucional (PRI) y a un programa denominado Plan Joven, actividades que no fueron muy
bien vistas por todos los integrantes, como se menciona: “el comité de la antorcha estaba más
involucrada en los asuntos políticos que en realizar las actividades religiosas como la misma
antorcha”373. Esta situación provocó que una parte de los integrantes de la antorcha se
deslindaran de la AGCM y crearon otro grupo denominado Antorcha Ciclista Peregrina de
María (ACPM) en el año de 1982.

Esta viene realizando las peregrinaciones con antorcha interrumpidamente por más de
33 años, de los cuales de los 22 corredores ciclistas que pertenecían a la antigua antorcha

372 Al Señor Cura. Rubén Ramos. Ruego a usted de la manera más atenta dispensarme que no pueda asistir al
círculo de este día. Atentamente. Fernando Enriques Ruíz. “Nota: El joven Jaime Mandujano substituirá al joven
Alberto Rojas Cabrera que no salió del bien del examen médico, por lo cual suplico a Usted inscribirlo tomando
en cuenta del joven Rojas antes citado”. Firma (AHDSC. Fondo Curia de El Sagrario. Carp.313. Exp.20).
373 Entrevista realizada al Sr. Octavio Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María

(ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016. Además
de ser miembro de la Antorcha Guadalupana Ciclista Mercedaria (AGCM) en sus primeros años.

287
solamente se reagruparon 8 de ellos, mientras que el resto algunos tuvieron alguna conversión
religiosa, otros dejaron de participar o crearon otros grupos de antorchas. Muchos de estos
peregrinos eran ciclistas profesionales y tenían condición física adecuada debido a que hacían
recorridos de entrenamiento constantemente hasta de 100 km en bicicleta, características que
contribuyó para que siguieran realizando las peregrinaciones. Actualmente la antorcha está
integrada por 8 o 10 personas en donde la mayoría de ellos no son profesionales pero son
aficionados al ciclismo, aspecto que es indispensable para la integración de esta antorcha así
como de la preparación espiritual374.

Una de las características principales de estas antorchas es que los peregrinos se


desplazan al mismo tiempo y deben de conducir todo el recorrido en la bicicleta o motocicleta,
ya que no cuentan con trasportación para descansar y guardar sus vehículos, por lo que en caso
de llevar carro todos van hacinados junto con sus bicicletas. Cuando van a iniciar su recorrido
se levantan a muy temprana hora para hacer tramos de 100 kilómetros aproximadamente y
paran para descansar en los pueblos que están sobre su ruta. Ellos se van turnando de mano en
mano la antorcha o como se vayan cansando, por que como no cuentan con un sujetador de la
antorcha en el manubrio, se dificulta llevar la antorcha, sobre todo si la carretera es empinada o
con muchas curvas.

Los tramos del recorrido son planeados debido a que al desplazarse en el vehículo
deben de medir el tiempo suficiente para llegar a algún poblado para descansar y así evitar
posibles incidentes como el robo de algún objeto o vehículo. Durante el recorrido, todos
deben de manejar con la misma velocidad, solamente si hay algún peregrino que se haya
cansado o tuvo algún accidente, puede subirse al camión mientras se recupera – sí es que
cuentan con alguno-, sino esperan que el compañero se integre o se recupere como menciona

374 “Cuando estábamos en la Merced tuvimos una experiencia muy dolorosa, inclusive hasta vergonzosa porque
nosotros llegamos a Mérida y llegamos y nos quedamos un día para conocer parte de la zona turística, nos
invitaron a una reflexión unos niños, nos invitan a hacer una oración inicial y en serio no sabíamos nada, no
sabíamos hacer oración, éramos corredores ficticios y a mí me saco la espinita de decir porque ellos están
preparados y nosotros no, porque ello si saben y nosotros no si somos católicos y estábamos muy mal preparados.
A raíz de eso me metí más a la coordinación, si asistíamos pero no participábamos en la coordinación, cuando
llegamos nos atendía la madre Efigenia, teníamos platicas todos los sábados en las oficinas Conciliar, las antorchas
los atendía el padre José, el padre Rogelio Frutis que en paz descanse, el padre Eugenio que ya falleció, para ese
entonces ya existía Antorcha Unidas, esto era como en los 90s, ahí asistíamos los coordinadores, los antorchistas.
Como en el 85 comenzamos porque nos impartían temas lo sacerdotes” Entrevista realizada al Sr. Octavio
Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María (ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas
de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016.

288
el peregrino: “nosotros todos corremos al mismo tiempo, no hacemos relevos, hacemos
tramos, pero si alguien se cansa se sube el carro, de preferencia todos pedaleamos”375. En caso
de que alguna bicicleta tenga algún desperfecto muchas de las antorchas cuentan con algunos
de sus integrantes que conoce sobre estos vehículos y son ellos quienes lo arreglan; sólo en
caso de que sea muy difícil de solucionar, recurren a especialistas que son buscados en los
pueblos o ciudades que se encuentran en el camino.

Otra de las características de estos grupos es que no llevan alimentos enlatados, objetos
de cocina, cobijas etc., debido a que muchas de estas antorchas trazan la ruta a lugares cortos y
casi siempre buscan los pueblos que están a su paso para alimentarse, descansar o abastecerse
de gasolina para aquellas antorchas que van en motocicleta. Sólo llevan una imagen de la virgen
de Guadalupe casi siempre en cuadro, la cual es amarrada sobre las espaldas de alguno de los
peregrinos o sobre el manubrio del vehículo.

Cuando llegan a los santuarios sean de paso o a los lugares de llegada, los integrantes de
estas antorchas no son muy expresivos, es decir, debido a que estos grupos son reducidos y la
mayor parte está conformado por hombres adultos no exclaman jubilo, sino que “cuando
llegamos a los lugares no cantamos casi no hacemos eso, sino sólo oración o algunas porras”376,
muchas veces entran a las iglesias rezando y algunos se unen a los cantos de otras antorchas
que se encuentran ahí presentes.

En estas antorchas casi no participan mujeres en las peregrinaciones debido a que son
grupos cerrados los cuales son organizados exclusivamente por hombres que tienen alguna
relación familiar o comparten un mismo lugar de trabajo, por lo que es común solamente
encontrar este tipo de antorchas en las ciudades y no en las zonas rurales del estado.

375 Entrevista realizada al Sr. Octavio Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María
(ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016.
376 Entrevista realizada al Sr. Octavio Hernández, Coordinador de la Antorcha Ciclista Peregrina de María

(ACPM) y Coordinador de Antorchas Unidas de San Cristóbal de Las Casas. 27 de Noviembre de 2016.

289
5.2.3 Con panderos y guitarras, nosotros danzaremos.
¡Alábenlo con el fragor del cuerno,
Alábenlo con arpas y con citaras,
Alábenlo con danzas y tamboriles,
Alábenlo con mandolinas y flautas,
Alábenlo con platillos sonoros,
Alábenlo con platillos triunfales!
¡Alabe al Señor todo ser que respira!
¡Aleluya!
(Salmo 150. Pág. 1095. Biblia Latinoamericana).

Para hablar de las antorchas musicalizadas, se debe primero señalar brevemente algunas
consideraciones generales sobre las opciones pastorales actuales que hay entre las tres diócesis
que compone la Iglesia católica en el estado, con la finalidad de conocer la influencia que tiene
el Movimiento Carismático Católico en relación con la creación de las antorchas musicalizadas,
así como conocer algunos elementos de organización que se representa entre los feligreses
pertenecientes a este movimiento y describir algunas de las actividades que realizan las
antorchas con esta característica.

Es importante mencionar la diferenciación de las políticas pastorales entre las Diócesis


de Tapachula y Tuxtla Gutiérrez frente a la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas.
Las de Tapachula y Tuxtla Gutiérrez, se han caracterizado por asumir un
papel más tradicional, dentro de los cánones establecidos desde Roma.
Ambas optaron por privilegiar agrupaciones como la Acción Católica y la
Adoración Nocturna, esta última dedicada a rendir culto de adoración
durante las horas de la noche a la imagen de Cristo Sacramentado: así como
a grupos creados alrededor del Movimiento de Renovación en el Espíritu
Santo, vinculado al movimiento carismático católico (Rivera, 2005: 59 - 60).

Mientras que para el caso de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, actualmente se
encuentra en un proceso de transformación de una pastoral indígena a una que responde a las
características actuales de sus feligreses, esta modificación se presenta según Valtierra por:
El proceso de trasformación de la pastoral indígena de la Diócesis de San
Cristóbal de Las Casas [que] ha dado como resultado la implementación de
una pastoral indígena renovada a partir de una reflexión a través del tiempo
y de la improcedencia de una ideología homogénea en un entorno
pluricultural y plurietnico. Pero también a partir de la identificación de
problemas ecológicos, identitarios y económicos en las comunidades, sobre
todo por la dependencia de elementos externos que no buscaron o no
pudieron evitar el movimiento zapatista ni la catequesis integradora, tales
como los programas gubernamentales de ayuda, el uso de agroquímicos, la
tala inmoderada, etcétera, que persisten en la actualidad y conforman el

290
motivo principal que los mantiene sujetos a otras instituciones (Valtierra,
2012: 84).

Ante este panorama la Diócesis de San Cristóbal está en constante trasformación


pastoral, sobre todo a la llegada del Obispo Felipe Arizmendi Esquivel (antiguo obispo de
Tapachula) junto con el Coadjutor Enrique Díaz Díaz promovía a grupos alternos como el
caso del Movimiento Carismático Católico que se ha estado fortaleciendo en parroquias e
iglesias de ésta diócesis.
Peregrinos orando frente a la iglesia de Nachig,
Zinacantán, Chiapas.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015.

Este movimiento religioso católico es una forma de evangelización que ha sido


difundida en todos los países, por lo que “es un movimiento que no es exclusivo o nacido en
Latinoamérica sino más bien posmoderno contemporáneo y, se podría decir, existe en distintas
formas por todas partes del mundo” (Franco, 2010: 74).

Conocido entre sus seguidores como Movimiento de Renovación Carismática en el


Espíritu Santo, o la renovación surgió “en la ciudad de Pittsburg, Pennsylvania a fines de 1966
cuando un grupo de profesores y estudiantes católicos de la Universidad de Duquesne,
decidieron reunirse con el propósito de orar, hablar de su fe e invocar al Espíritu Santo para
que les renovará y llenará el vacío que cada uno sentía en su interior”(Várguez, 2008:1) Para el
caso del resto de América Latina, “la renovación quedó instituida con la creación del Consejo
Carismático Católico Latinoamericano en la ciudad de Bogotá en 1972” (Ibíd., 2008: 22). Para
el 18 de mayo de 1986, con motivo de la fiesta de Pentecostés, Juan Pablo II emitió su

291
encíclica El Espíritu Santo en la vida de la Iglesia y del mundo377. Este planteamiento fue para la
jerarquía católica un movimiento controlado para evitar la amenaza de que los feligreses se les
escaparan de las manos y buscaran integrarse a otros grupos religiosos, por lo que ahora es
custodiado y supervisado por los servidores de la misma iglesia católica, sumando a que
muchos de ellos ven con beneplácito este tipo de evangelización o predicación de la palabra de
Dios, en un tiempo en que los feligreses se enfrentan con una variedad de religiones en sus
espacios más locales.
Hoy día, los grupos de la renovación, al menos en México, están bajo el
control de sus respectivos párrocos. Ya sea que éstos los promuevan
abiertamente o los toleren calladamente en sus parroquias, en ambos casos
ellos deciden la formación de estos grupos, nombran a los coordinadores, a
los servidores y demás colaboradores; autorizan la apertura de cenáculos o
círculos de oración en los hogares de alguno de éstos y supervisan su
funcionamiento mediante su asesoría espiritual. Del mismo modo, los
sacerdotes con la ayuda de sus equipos de laicos organizan tanto congresos y
eventos multitudinarios como cursos de iniciación y reuniones de líderes
para incrementar su formación sobre las bases bíblicas de la renovación (Ibíd.,
2008: 23 – 24).
Peregrinos danzando durante la entrada a una
ciudad.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2015.

En este contexto se integra el Movimiento Carismático Católico a la Diócesis de San


Cristóbal a través de grupos de oración de las diversas parroquias de la ciudad, entre ellas se
encuentra la parroquia de San Francisco, San Ramón, Guadalupe, Iglesia de Fátima, entre
otras. Estas “agrupaciones surgen con la idea de recristianizar a los fieles, quienes mediante

377En la que se remarcaba tanto la aceptación de ese movimiento como su inclusión en la estructura de la Iglesia
católica. Para los sacerdotes y líderes de la renovación significó la simpatía del Papa por la Renovación Carismática y
motivo de aliento para continuar sus actividades y reforzar su ideología (Ibíd., 2008: 24).

292
ejercicios de culto y oración reciben instrucción y renovación moral; así mismo participan en
los sacramentos con los cuales pretenden impulsar el orden y la disciplina de los creyentes”
(Rivera, 2005: 60), al respecto el Sr. Iván Díaz menciona su experiencia de ingreso al grupo
Carismático:
Yo empecé en Fátima, en un grupo de restauración que se llama “Hombres
con petición” y posteriormente se inició un grupo en la parroquia de
Guadalupe en el cual invitamos a la antorcha y comenzaron a participar y
este año seguimos participando ahí en Renovación Carismática, que ahí se
llama “Grupo de Restauración Familiar” que es para esposos, esposas e
hijos. Ahí estamos casi todos los integrantes, bueno no todos, pero si hay
integrantes [de la antorcha] ahí. Ahí hemos tenido un retiro donde damos a
conocer que es la alabanza y ahí dijimos como vamos a trabajar este año, y
como dice la palabra de Dios, tenemos que predicar y pues queremos
evangelizar este año a través de la alabanza y bien dicen “que el que alaba
ora dos veces”378.

Estos nuevos grupos de evangelización se han comenzado a establecer en las


parroquias de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, los cuales están contribuyendo a
contener a los católicos que buscan nuevas maneras de vivir su religiosidad. En los grupos de
oración se difunde prácticas modernizadoras distintas a las tradicionales de la Iglesia católica,
las cuales están sirviendo para captar principalmente a los feligreses jóvenes que se encuentran
apáticos de las normas y dogmas de la iglesia. Estas acciones son validadas por la Iglesia
católica para mantenerlos dentro de las comunidades católicas aunque sea a través de nuevos
modos de ser católicos sobre todo a partir del embate de religiones evangélicas que se han
establecido en la ciudad y gran parte del estado de Chiapas.

Ejemplo del impacto del movimiento carismático fue la creación de la antorcha


Musicalizada “Santa Cecilia”, grupo que venía realizando las peregrinaciones desde el año de
2008 a 2009 como una antorcha tradicional, sin embargo debido a que el Sr. Iván Díaz ahora
coordinador de la antorcha tuvo una prédica carismática convirtió a la antorcha como
musicalizada con fundamentos del Movimiento de Renovación Carismática, por lo que bautiza
al nuevo grupo como “Santa Cecilia” debido a que él y algunos de sus integrantes pertenecen a
esta colonia, como señala el Sr. Iván Díaz:

378Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.

293
Si participe en el club San Ramón, en de la Asunción y la antorcha san
Cristóbal, y ahora hace ya 7 años que funde este club, que gracias a Dios
vamos caminando de la mano de Dios y ahora este año que es primera vez
lo hacemos musicalizada. Ahí estamos algunos compañeros preparándose
para la peregrinación, ahora este año le pusimos una modificación porque
ahora se llama “Antorcha Musicalizada santa Cecilia”379.

Esta antorcha pertenece a la parroquia de san Ramón por lo que las reuniones son
llevadas a cabo los domingos en un salón dentro de la misma parroquia y en ocasiones son los
sacerdotes quienes apoyan con pláticas y eventos para este grupo. Mientras que las
preparaciones espirituales correspondientes a la Renovación Carismática son llevadas a cabo en
la Parroquia de Guadalupe, en la que participan devotos guadalupanos pertenecientes al mismo
barrio o de algunas colonias de la ciudad. Dentro de los grupos que ahí se reúnen hay algunos
que se involucran en participar en la antorcha musicalizada, como menciona el Sr. Iván Díaz:
Bueno la idea se dio porque algunos empezamos a estar en un grupo de
reflexión era un grupo de restauración, de renovación carismática. Cuando
comenzamos a estar en ese grupo, pues nos confundimos porque pues
comenzaron a alabar a Dios y pues dijimos que esto no era de los católicos y
pues nosotros despistados decían ¡¡¡Alabaré, alabaré!!!!, nosotros lo
escuchábamos con nuestros hermanos separados verdad?, y pues el alabaré!
sólo era de ellos, pues sin conocer la verdadera religión católica pues ahora
sí, pues estábamos perdidos en lo mundano y ahora estamos en el caminar
de Dios gracias a él, y pues ahora, lo alabamos, con sus alabanzas, gritamos
los gritos de júbilo porque ahora con las alabanzas se disfruta uno, se goza
uno, más que en otra fiesta, y es a través de eso que se nos ocurre ponerle a
la antorcha380.

Actualmente existen aproximadamente cuatro antorchas musicalizadas en el estado, la


primera que adquiere esta característica es la Antorcha Musicalizada de Mezcalapa381,

379 Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.
380Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de

2015.
381 Cabe mencionar que esta antorcha realiza eventos musicales a lo largo del año, sobre todo son contratados en

fiestas religiosas, como celebraciones de santos patronos de distintos pueblos y ciudades, en la que son llamados,
entre ellos está recientemente la participación en las localidades de Navenchauc (Festival Católica en honor a la
virgen María Auxiliadora, el 22 de mayo de 2017), en Zequentic (2do. Reventón Católico en la Iglesia de la Virgen
de Dolores, 5 de Abril de 2017) y en Nachig (en honor a la Virgen de Fátima, en el mes de mayo), así como
eventos masivos durante el 5to. Festival Católico realizado en Nachig, pertenecientes al municipio de Zinacantán,
Chiapas; además de realizar eventos en otras ciudades o pueblos del estado. Ver Apéndice IV.- Archivo
Fotográfico de Antorchas. Esta antorcha difunde a través de sus redes sociales como el Facebook (antorcha
Mezcalapa), sus propias experiencias de peregrinación que realiza cada año, además de publicitar sus canciones y
conciertos, los cuales sube en videos (https://www.youtube.com/watch?v=fG8RY6NDWEc). En los eventos
que participa ofrece entre el público, la venta de discos compactos en los que promociona las canciones que

294
posteriormente se crea la Antorcha San Juan Diego, ambas originarias de Copainala, le siguen
la Antorcha Zoque de San Fernando, y la más reciente es la Antorcha Musicalizada de “Santa
Cecilia” de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas.

Peregrinos corriendo por las carreteras y detrás el


grupo musical.

Fuente: Trabajo de campo durante 2015.

Para la creación de la antorcha “Santa Cecilia”, el coordinador se acercó al encargado de la


antorcha Mezcalapa para su asesoramiento debido a que esta última fue fundada desde el año
de 1996, por lo que ya tiene una amplia experiencia en el funcionamiento de este tipo de
antorchas. Es por ello que el coordinador de la antorcha “Santa Cecilia”, que ya contaba con
los instrumentos musicales, las luces y el sonido, debido a que su ocupación personal es la de
proporcionar servicios de animación y musicalización para eventos, optó por crear una
antorcha que difundiera el sentido del Movimiento Carismático Católico al igual que la de
Mezcalapa:
Hace un año llevamos una bocinita pero la verdad la alabanza lo hacíamos
solo para nosotros y pues solo adorábamos a Dios. Pues además porque
vimos la antorcha Mezcalapa que es de Copainala, Chiapas. Nosotros vimos
a la antorcha Mezcalapa entrar a Tuxtla Gutiérrez y entraron con las
alabanzas y nos fuimos a bailar, a danzar ahí todo y hace un año [2014] que
encontré a Antonio Valencia que es el de Antorcha Mezcalapa. Y como él
me conoce que pertenezco a una luz y sonido que tengo [sic]. Me dijo por
qué no haces una antorcha musicalizada si ya tienes los instrumentos y el
sonido?, hay que dar a conocer las alabanzas que es de los católicos y pues a
mí me dijo que me podía ayudar dando asesorías, paso lo de la carrera y pues

presenta y difunde en sus espectáculos. Así como también a través de esta blogg, tiene contacto con otros grupos
de antorchas dentro del estado y en otros del sureste del país.

295
en febrero de 2015 pues tuvimos una plática con ellos, y pues nos dio una
asesoría de como podíamos manejar una antorcha musicalizada este año382.

Peregrina en espera de comenzar su


tramo de peregrinación.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2015.
El grupo de Renovación Carismática Católica se encuentra apoyada por los
predicadores el Sr. Dardo Rigoberto Guillen Trujillo y la Sra. Magnolia Bautista López que
participan como locutores de la Radio Tepeyac de la 93.3 de Frecuencia Modulada383. Ellos
junto con el coordinador de la antorcha organizan el Retiro una semana antes de iniciar la
peregrinación, para ello eligen un sitio alejado del centro de la ciudad para que todos los

382Entrevista realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de
2015.
383 En esta radio se programa temas religiosos católicos y se invita a la participación de las antorchas

guadalupanas, preferentemente durante los meses previos o durante las fiestas de la virgen de Guadalupe y en
ocasiones son invitados a los coordinadores de las antorchas pertenecientes al grupo de Antorchas Unidas para
que lleguen a dar testimonio de sus experiencias de peregrinación. Además de realizar un programa en el que
participa el obispo de San Cristóbal, llamado “Pregúntale al Obispo” que es trasmitido los lunes de 7 a 8 de la
noche. Ahí se le pregunta sobre las actividades que la diócesis lleva a cabo, así como tienen la oportunidad los
radioescuchas de dirigirse al obispo y preguntarle sobre temas diversos
(https://www.youtube.com/watch?v=mKOmZqLcuV0). Al respecto en uno de estos programas mencionó el
tema del origen de la antorcha musicalizada. “Ahí le preguntamos y ahí él Obispo Felipe dijo que ya había
escuchado algunos rumores de una antorcha y nos dijo “muchas felicidades por la iniciativa, muy bien”, además
nos dijo que es importante difundir las alabanzas, es algo muy importante. Pero que no nos preocupáramos, ni
nos desanimáramos, porque iba a haber criticas pero también felicitación, confeti, porras, y que siguiéramos
adelante con ese entusiasmo y nos deseaba mucha bendición y que felicidades por la iniciativa” (Entrevista
realizada al Sr. Iván Díaz. Coord. de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. 20 de noviembre de 2015.

296
participantes de la antorcha se purifiquen previamente y vayan consientes de la responsabilidad
y compromiso de peregrinar con devoción.

Estas expresiones del antorchismo refleja una clara composición de diversas maneras
de vivir y entender su religiosidad, sin embargo es posible observar que para el caso de estos
grupos carismáticos se sienten comprometidos para promover el guadalupanismo desde este
movimiento, pese a que otros los vean con extrañeza o molestia, por lo que constantemente
mandan mensajes a través del sonido que son católicos y también guadalupanos, esto se debe
principalmente a que este tipo de antorchas son muy recientes en Chiapas y se obligan a
enfatizar constantemente a lo largo del recorrido la relación que tienen con la iglesia católica384.

La difusión y formación de los grupos de la Renovación Carismática es generado


principalmente por las redes de parentesco y de amistad que se han ido fortaleciendo cada vez
más a través de la integración de grupos, los cuales en algunos tienen en común haber tenido
problemas personales o buscan el apoyo y refugio, por lo que a partir de las pláticas y consejos
sobre la vida como cristianos pueden solventar sus dificultades, como señala el peregrino:
Lo que ahora estoy viviendo, yo le doy gracias a Dios, por eso nos ha visto
que para todo le damos gracias a Dios, que para a la hora que nos
levantamos, en la comida, a la hora que nos vamos a dormir, pero ese
cambio porque un día nos invitó un grupo carismático en el barrio de
Guadalupe, la mera verdad yo no quería ir, pero después de la invitación me
quedo algo en mi corazón, que pasaría si voy, mi vida estaba destrozada,
estaba aferrado al alcoholismo, antes decía puros defectos de carácter, ahora
veo que todos los defectos de carácter son pecados, yo vivía en pecado y
como dicen mis hermanos de la iglesia, vivir en pecado es ir directamente a
la muerte. Entonces empecé a buscar al señor y le dije a mi esposa y ella me
dijo que yo no iba a cambiar, que para que le intentaba, pero la sorpresa fue
más para mí. Porque al llegar al grupo carismático sentí una paz, sentí un
gozo, que en el mundo, que afuera de la iglesia sentía ni con la misma
botella, sentí muy bonito en mi corazón, sentí y le dije a ella me gustó, yo
quiero venir, me dijeron que hay grupo para mujeres, para hombres y hay
una asamblea general y a parte hay un grupo para niñas385.

384 La constante reiteración de enfatizar a que pertenecen a la iglesia católica se enuncia principalmente al
mencionar a la virgen de Guadalupe y a identificarse como católicos, como se muestra en este video:
https://www.youtube.com/watch?v=tiKTGVteUzE
385 Entrevista realizada al Sr. Geovanny López Martínez, peregrino de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”.

Diciembre de 2016.

297
Sin embargo, no hay que olvidar que estos grupos y ministerios se han desarrollado
bajo el cobijo de la Iglesia Católica, que tiene una gran influencia y cobertura entre los mismos
católicos y difundido en toda la Diócesis de San Cristóbal, en la que se anuncia en la radio los
eventos masivos para adorar el Espíritu Santo386 o se realizan eventos más pequeños en los que
solamente son invitados los feligreses que pertenecen a una sola iglesia de la ciudad, como la
publicidad que se expuso en la parroquia de san Judas Tadeo de la Colonia 14 de Septiembre
de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas:
Kerigma 3.
Restauración Familiar Parroquia de Guadalupe.
Si tu fe se ha dormido;
Si crees pero no Prácticas;
Si crees y quieres profundizar la fe;
Si no crees pero quieres creer;
¡No lo dudes! ¡Date esta oportunidad!
Ofrenda Voluntaria.
Lugar: Seminario Conciliar Julio M. Corzo No. 16 B
Barrio de Santa Lucía. Hora de Ingreso 3: 00 p.m.
23 de Junio de 2017. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.

El objetivo de esta ceremonia es confirmar al católico para que acepte la conversión en


el Espíritu Santo a través del Bautismo o Efusión. Los participantes a este tipo de evento
deben de ser personas cristianas que se encuentren bautizados por la Iglesia Católica para que
entonces puedan ser renovados en los sacramentos de la iniciación cristiana:
La Renovación Carismática está llamada en primer lugar a volcar lo que
recibe del Espíritu Santo en la llamada “primera evangelización”, o anuncio
del “kerygma apostólico”, dirigido no sólo a los que no pertenecen a la Iglesia,
sino a los “cristianos de nombre”, a los bautizados por tradición que no han
vivido quizás más que muy superficialmente la acción de la gracia recibida en
el bautismo387.

Como parte de las actividades fundamentales en la fraternidad generada desde los


grupos de Renovación Carismática es:
(a) Compartir, alentar y consolidar los frutos de la vida cristiana que el Señor
a través de su Espíritu ha suscitado en las diferentes comunidades y grupos
miembros. (b) Promover en la vida de la Fraternidad toda la riqueza
espiritual de la Iglesia, escucha fiel a la Palabra de Dios, activa participación

386 La Diócesis de San Cristóbal de Las Casas. Invita a la “Eucaristía de Consagración al Espíritu Santo”. Un
nuevo pentecostés para una nueva Evangelización. Oficiará Monseñor Felipe Arizmendi Esquivel. Predicador:
Presbítero José Bartolomé Gómez Martínez. Con el Tema: “El Espíritu Santo en la Iglesia”. 4 de Junio de 2017.
Inicio: 9 am. Donativo: Un kilo de fe, se donará a CARITAS A.C. ¡¡Te esperamos!!.
387 Renovar la Renovación Carismática Católica: 67.

298
en la liturgia (especialmente en la vida sacramental de la Iglesia y en
particular en la Eucaristía y la Reconciliación), y en los actos de devoción
popular (adoración al Santísimo, peregrinaciones, Vía Crucis, rezo del
Rosario, etc.), (c) Reafirmar y profundizar la conciencia de ser miembros de
la Iglesia Católica y del amor hacia ella, como así también en el vínculo de
comunión primario y esencial con ella. (d) Crecer en conocimiento de la
doctrina Católica y garantizar su fiel cumplimiento, particularmente con
respecto a la eclesiología constitutiva, la centralidad de los sacramentos y la
devoción a la Santísima Virgen María y a los Santos. (e) Poner especial
atención a los acontecimientos importantes de la Iglesia Católica,
participando y colaborando en dichos eventos en las maneras apropiadas. (f)
Alentar el compartir las experiencias específicas de vida comunitaria de la
Fraternidad con otras comunidades, asociaciones y movimientos de la Iglesia
Católica”388.

Estas congregaciones católicas ha venido a fortalecer y dinamizar a un sector de


feligreses de las parroquias debido a que muchos de ellos que han tenido alguna influencia con
religiones protestantes, ven a una Iglesia católica que se ha integrado a las nuevas prácticas
doctrinales apoyados por el Movimiento Carismático Católico, al igual que las prácticas
devocionales guadalupanas que han sido influenciadas con esta evangelización renovadora.

Y es que la característica de esta antorcha es que además de correr en relevos y realizar


sus actividades internas semejantes a las otras antorchas tradicionales, lo que los identifica es
que durante el peregrinar llevan dos vehículos, uno de ellos lleva a los peregrinos, mientras que
el otro que va detrás de él lleva un grupo musical acompañado de grandes bocinas que va
amenizando con alabanzas a los corredores, lo que incita a que en ocasiones aprovechen a
bailar mientras corran389. Al pasar por algún pueblo, bajan junto con las imágenes religiosas del
camión e inician su entrada danzando y gritando porras a la virgen de Guadalupe y a Cristo,
esta actividad casi siempre es planeada debido que al llegar a los pueblos no sólo danzan sino
que encienden las luces multicolores que adorna el camión, para que el evento se vea
espectacular. Es por ello que la participación de los peregrinos en este tipo de antorchas puede
llegar a ser muy demandante, ya que el esfuerzo es mayor porque no sólo corren por las
carreteras sino que también tienen que danzar en ocasiones hasta medio kilómetro hasta la
llegada del santuario guadalupano del lugar, mientras que al pasar por los pueblos por la

Renovar la Renovación Carismática Católica: 68.


388
389La música hace que su peregrinaje sea más ameno e inhibe por algún momento del dolor o cansancio que
pueda estar teniendo el peregrino: https://www.youtube.com/watch?v=o3dK2z26w7o

299
mañana, sólo anuncian su llegada tocando constantemente el claxon de los camiones y gritando
porras, mientras que los músicos toca melodías.

Peregrinos corriendo.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C.


2015.

La emoción comienza a regocijarlos, muchos de ellos aún cansados, llagados y sin


descansar comienzan a bailar, brincar y gritar por las calles, anunciando su llegada y predicando
en nombre de María de Guadalupe. Durante este momento la gente sale de sus casas y ven con
regocijo o con incredulidad al contingente, mientras que si se encuentran alguna antorcha en el
camino se integran a ellos y comienzan a danzar o bailar cargando sus imágenes guadalupanas y
sus antorchas, mientras que los músicos tocan alegres notas con letras religiosas, mientras que
los peregrinos responden cantando, alabando y gritando porras a María y a Cristo.

Muchos antorchistas no ven con buenos ojos estas nuevas formas devocionales390
porque consideran que es una falta de respeto que bailen a la virgen de Guadalupe y a las
imágenes religiosas que ellos cargan, mientras otros cuando los ven pasar se regocijan y les
agrada que alaben a la virgen de Guadalupe, aunque no les gusta mucho que muevan a la
antorcha, debido a que puede poner en peligro la integridad física de los que se encuentran

390La impresión que provoca a los observadores este tipo de manifestaciones religiosas católicas es de asombro
debido a que en San Cristóbal es muy reciente este tipo de grupos de antorchas, sin embargo en otros lugares
donde ellos se mueven es común encontrar a grupos de antorchas bailando, como se observa:
https://www.youtube.com/watch?v=eHg9Fm2-k2U

300
cercanos al pebetero porque puede caer estopa y causar algún accidente, como menciona este
peregrino:
Yo opino que cada quien sabe su sentir, nosotros no tocamos nada, nunca
agarramos una antorcha y empezamos a bailar nunca agarramos a una
imagen y empezamos alzarla. Nuestra fe la llevamos y nuestra fe la traemos
corriendo durante venimos y durante los días que estamos, incluso ni ganas
de estar danzando [sic]. Pero si yo opino que son diferentes los otros
antorchistas, nosotros vamos un poco cansados por el recorrido de tres días
corriendo, quizá otros clubes se van a querer ir a danzar y nosotros no, es
muy diferente porque nosotros venimos descalzos y muchos vienen con
tenis y nosotros lo que hacemos es descansar un tantito. Bueno para mí, no
es lo mío, para mí se me hace una falta de respeto y agarrar una antorcha
sabemos qué riesgo tiene la antorcha qué caso tiene y no vaya a ser que un
compañero le vaya a tocar que se le caiga la estopa391.

Mientras que para los miembros de la antorcha musicalizada, el danzar392 es el medio


por el cual expresan la conexión con la deidad y reconocen que es también una de la manera de
adoración a Dios y a la virgen, es por ello que peregrinar danzando es el acto más sublime de
expresar su devoción.

Cuando estos grupos terminan su peregrinar, las actividades de evangelización por


parte de la Iglesia prosiguen, ya que los participantes de estas antorchas predican la devoción a
la virgen de Guadalupe y a Cristo a lo largo del año ya sea a través de pláticas semanales, retiros
o ceremonias especiales. Estas actividades tienen el sentido de fortalecer a estos grupos
constantemente para que a través de la Iglesia tengan una vida moral más íntegra, además de
crear grupos ligados a las parroquias y apoyar en las actividades que ahí se organizan.

Otra de las actividades que participan los creyentes y los miembros de la antorcha
carismática es la realización de ceremonia con un enfoque similar a los pentecostales, en la que
se identifica la celebración de misas litúrgicas en las que participan sacerdotes católicos pero
con dinámicas fuera de los cánones de la Iglesia Vaticana.
Entre mediados y finales de los años ochenta del siglo pasado resurge este
movimiento con las llamadas “misas de sanación” que se propagan de
manera exponencial por todas las parroquias del país, esta vez con un
391 Entrevista realizada al joven Luis Ángel López, peregrino de la Antorcha “Corazón de María”. Diciembre de
2017.
392 Aunque el danzar con las imágenes religiosas puede interpretarse como un acto profano, la antorcha

musicalizada utiliza este recurso para reunir a jóvenes peregrinos para integrarse a estos grupos, ejemplo de ello se
observa: https://www.youtube.com/watch?v=tiKTGVteUzE

301
importante apoyo de sacerdotes y de algunos prelados de la jerarquía
eclesiástica. (Franco, 2010: 73).

Al respecto, estos grupos de carismáticos se encuentran dispersos dentro de la ciudad


de San Cristóbal de Las Casas como la iglesia del “Buen Samaritano” que está ubicada en la
calle Republica Dominicana al norte de la ciudad, en la que se llevan a cabo misas de
“sanación” auspiciadas por uno de los sacerdotes de la iglesia de Santo Domingo de
Guzmán393. Para el caso del grupo carismático de la iglesia de Guadalupe se congregan para
realizar “la misa de sanación”, en la que se llevan a cabo alabanzas y actividades no “propias”
de la misa tradicional católica como danzas o movimientos del cuerpo, en las que en ocasiones
hay desvanecimientos de algunas personas al “sentir el Espíritu Santo introducirse a su cuerpo
y alma”394.

Para estas sesiones, siempre son importantes los cantos, aunque a diferencia de los
cantos católicos comunes en los que el ritmo es pausado y apagado, acompañado
frecuentemente por la guitarra o instrumentos clásicos. En estas “misas revolucionarias”-
como las califican algunos de sus fieles – se canta, se brinca, se salta, se baila las alabanzas a
Cristo, a Dios y María. Esta música puede ser al ritmo del pop, del rock, del vallenato, de la
salsa y otras melodías populares; por ello es común el uso de la batería, la guitarra eléctrica, el
bajo y el teclado395.

De acuerdo con el documento Renovar la Renovación Carismática Católica,


Desde el comienzo del ritual, la música ayuda y estimula a que la
muchedumbre congregada dance y grite alabanzas a Dios, contrario a la
tradicional homilía católica que prohíbe gritar y cantar en los templos, en

393 En una de estas ceremonias que fue realizada el día 30 de julio de 2016, comenta Margarita una practicante que
asiste a esta iglesia, que mientras el Padre “Raúl” celebraba la Eucaristía se suscitó un milagro debido a que la
“Eucaristía le había salió sangre”, comenta que esto fue una impresión para todos los asistentes, sin embargo
después de haberse presenciado el suceso, el sacerdote expreso qué esto no había sido la primera vez que a él le
ocurría, por lo que no se asustarán debido a que esto se debía a que Dios se había hecho presente.
394 Esta manifestación de fe pude percatarme al participar en uno de los retiros previos para la peregrinación de la

antorcha a realizarse en el año de 2017. Durante las actividades del retiro hubo un momento en que el pastor
invitado comenzó a predicar e incitar a los presentes a meditar sobre su vida y sobre todo a desahogar penas que
ellos guardaran en su interior, a medida que las palabras fueron resonando en la mente de algunas personas
comenzaron a caer y tener pequeños desvanecimientos, estas actitudes de las personas son entendidas como una
bendición, ya que se le atribuye que la persona tuvo una cercanía directa con Dios. Sin embargo, hay personas que
mientras esto ocurre cuidan y vigilan a las personas que están próximas a desvanecerse para custodiarlos y evitar
fracturas o golpes fuertes.
395Ejemplo de ello son las alabanzas que utilizan teclado electrónico como puede verse en:

https://www.youtube.com/watch?v=JtUES-azn4s

302
éstas es fundamental la adoración a Dios con la voz, con las palmas e,
incluso, con los pies. Los sacerdotes, hasta el cansancio, recuerdan la
importancia de adorar a Dios con todo el cuerpo396.

Al respecto Kerkhof (2001) menciona que durante la ceremonia:


Se expresa en un ambiente de gran libertad y de mucha flexibilidad, la
atmósfera humana creada es sumamente acogedora, sin tensiones nerviosas,
con el equilibrio armónico de la alegría y la meditación, los cánticos y el
silencio, donde el hilo conductor es siempre la alabanza a Dios. Algo típico
de estos encuentros son los gestos. Se ora con las manos extendidas y
abiertas, implorantes, esperándolo todo del Señor. También se mantiene esa
misma postura a lo largo de la oración, pero apoyando las manos sobre las
rodillas. Los cantos también suelen ir acompañados de gestos, los brazos en
alto o tocando las palmas al ritmo de las canciones” (Kerkhof, 2001: 6).

Sin embargo, estas formas de expresión renovadas incitan al creyente a relajarse y


establecer una conexión espiritual entre el ser sagrado y él, al grado de despegarse de su vida
cotidiana y refugiarse a ese ambiente que le da certidumbre para su vida en adelante, aunque
para esto sea totalmente temporal.

Como parte de las actividades, se organizan ceremonias llamadas “Kerigma”397, que son
reuniones donde participan solamente parejas heterosexuales para tratar temas de Dios y de su
vida en matrimonio.
Significa el primer encuentro con Dios, creo que es en hebreo, es un retiro
espiritual. En la reunión no dejan meter celular ni nada, nosotros entramos
el viernes en la tarde, nos quitan celular, reloj, no dejan que entren los niños,
solo como pareja o solo uno, y se forman comunidades y en cada
comunidad hay un pastor que se encarga del desayuno, nos sirven, es una
comida muy sencilla pero se valora398.

Como parte de los requisitos que se requieren para estar en estas ceremonias, es que los
interesados deben de ser católicos y deseosos de participar:
Por comparación con la experiencia que va desarrollando la Renovación, se
va teniendo clara una de las grandes dificultades en la Iglesia Católica: el
396 Renovar la Renovación Carismática Católica, p. 75, disponible en: http://studylib.es/doc/6522538/capitulo-1--
qu%C3%A9-es-la-renovaci%C3%B3n-carism%C3%A1tica-cat%C3%B3lica).
397 “Esta palabra viene del griego keryssein, que significa “proclamar”. De ahí viene la palabra kerygma o

Proclamación. Los Apóstoles comenzaron con una proclamación, no comenzaron con una enseñanza, sino con
una proclamación de los hechos. Todo anuncio del kerygma debe culminar en una llamada a una respuesta de
decisión personal del que escucha; aceptar y creer en Jesús como Salvador y Señor; cambiar interiormente; y ser
bautizado. (Renovar la Renovación Carismática Católica: 26).
398Entrevista realizada a Rosario, peregrina de la Antorcha Musicalizada “Santa Cecilia”. Diciembre de 2016.

303
llevar a las personas el primer mensaje cristiano, lo que en la época
apostólica se conocía como el “kerygma”. Al no existir en general en los
católicos una experiencia viva de Dios, lo que no produce una aceptación del
Señorío de Cristo en sus vidas y una verdadera y sincera búsqueda de la
conversión personal a través de la apertura a la acción poderosa del Espíritu
Santo, las reformas propuestas por el Concilio Vaticano II en la vida
litúrgica y en las instituciones eclesiásticas no tienen la base que se asume
que poseen. De esta visión, que será cada vez más clara en la Renovación,
surgirá una definición clásica de la misión de la R.C.C.: debe ir y evangelizar a
los bautizados. Ese mensaje básico del cristianismo es el que se transmite en la
R.C.C. a través de los Seminarios de Vida en el Espíritu y en la vivencia de
oración en los grupos y comunidades. Pero tampoco es suficiente dar el
anuncio kerygmático, ya que luego hay que acompañar a ese cristiano abierto
a la acción del Espíritu a un crecimiento verdadero, por lo que se necesita
avanzar en una base doctrinal sólida, que constituye el paso ulterior de la
“catequesis” (Renovar la Renovación Carismática Católica: 26).

La apertura de la Iglesia a esta nueva práctica religiosa, ha generado que muchos


jóvenes o alguna persona que se identifiquen como católicos acepten o rechacen este tipo de
manifestaciones de fe, sin embargo, es claro que para algunos jóvenes se ven atraídos por estos
ritmos musicales y se enlistan en esta agrupación en donde a través de la danza y las alabanzas
desahogan su frustración, enojos, tristezas, pobreza e incluso problemas de su vida cotidiana,
por lo que es a través de la música el medio por el que se sienten liberados, aunque esto sea
solamente por un momento, para luego reintegrarse de nuevo a su actividades.

Los peregrinos de las antorchas musicalizadas no sólo encuentran a un grupo que los
cobija con su evangelización, sino que disfrutan de un viaje que los conecta con la divinidad a
través de la música y de paso tener una convivencia con sus “hermanos” a lugares que muchas
de las veces no conocen. Es por ello que estos grupos siempre tratan de ir alegres y entusiastas
por encima de lo que ocurra ya que constantemente invitan a unirse a su grupo para predicar el
amor a Cristo y la virgen de Guadalupe.

5.3 Rutas de peregrinaje

La conformación de grupos de antorchas en muchos de los municipios del estado de Chiapas


ahora independiente de la ACJM ha generado una multiplicidad de movilidad de peregrinos

304
antorchistas que se desplazan por los caminos de Chiapas, sobre todo en los que aún controla
o tiene presencia la Iglesia católica, motivo por el cual es común encontrar que en el mes de
diciembre se movilicen las antorchas por los mismos espacios sagrados o sitios de
peregrinación.

Aunque ésta muestra devocional es la más practicada en el estado, es también notorio la


disminución en los últimos años de grupos de antorchas principalmente en la zona Norte y
Costa de Chiapas (Ver mapa 1) debido a la presencia de una diversidad religiosa en estas
regiones. Pese a estas conversiones religiosas existe una presencia muy significativa de
antorchas que se mueven a lo largo de las zonas del Centro, Altos y Selva (Ver mapa 1), por lo
que es posible encontrarse varias antorchas en los caminos generando un tránsito lento de
automóviles que procuran tener precaución para evitar posibles percances; aunque es posible
que se presenten accidentes automovilísticos de grupos de peregrinos, en la que ha resultado
en el fallecimientos de algunos antorchistas.

Sin embargo, la práctica de peregrinar con antorcha no es exclusiva del estado de


Chiapas, ya que se encuentran en otros estados de la república ubicados principalmente en el
centro y sur de México, entre ellos se encuentran los estados de Tabasco, Yucatán, Quintana
Roo, Campeche, Veracruz, Oaxaca, Tlaxcala, Morelos, Estado de México, Puebla y Chiapas.
Cabe señalar que estos estados de la república comparten la característica de tener un alto
grado de población indígena y de abandono social en muchos de ellos, además de tener una
historia política y social distinta al resto de los estados del país, principalmente debido al
impulso de la economía en los estados del norte, mientras que en el sur de México han
quedado rezagados del crecimiento económico propiciado por la influencia de grupos
caciquiles y del poder de la Iglesia católica que se mantuvieron en estos espacios por varias
décadas (Brading, 2011). Esto coloca a esta región del país como una “zona de captación”
debido a que se concentran el mayor número de peregrinajes y que responden a una relación
social de tiempos pasados:
Un patrón similar de zonas de captación peregrinas nacionales, regionales,
distritales e interaldeanas existe hoy en día en México. Lo que parece haber
ocurrido allí después de la Conquista española, como en la Europa medieval,
es que cualquier región poseedora de cierta unidad cultural, lingüística o
étnica, a menudo correspondiente también a un área de interdependencia

305
económica, tendía a convertirse de inmediato en una unidad política y una
zona de captación peregrina (Turner, 2009: 31).

Ejemplo de lo anterior es Chiapas, uno de los estados que presenta un alto grado de
manifestaciones religiosas tanto locales como regionales que trascienden ámbitos más amplios,
como es el caso de las peregrinaciones con antorcha que se mueven por los caminos de la
entidad y fuera de él. Según datos etnográficos del año 2015 muestran que la mayor
concentración de antorchas se encuentra en los municipios de:
• Simojovel.
• Chamula.
• Tuxtla Gutiérrez.
• Cintalapa.
• Comitán.
• Chiapa de Corzo.
• Villa Flores.
• Copainalá.
• Chenalhó.
• San Cristóbal de Las Casas.

Peregrinos visitando a la iglesia de Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2017.

Éste último municipio es donde se concentra la mayor cantidad de antorchas


guadalupanas en el estado, es por ello que para tener una perspectiva más amplia de la
complejidad en su composición, tiempo y rutas de los grupos de antorchas como una manera
de implorar con los pies, se registró en el 2015 a las antorchas que visitaron o que son originarias
de la ciudad de San Cristóbal.

306
Para ese año, habían aproximadamente 94 antorchas registradas dentro del municipio
de San Cristóbal de Las Casas399, sin embargo, el número puede ser mayor de 100; de este
número 18 de ellas pertenecen a la Unión de Antorchas Unidas. Estas agrupaciones se
encuentran organizadas a través de clubs que tienen más de 50 años de realizar las
peregrinaciones con antorcha, con un número de integrantes de aproximadamente entre 30
hasta 150 personas o incluso más; mientras que hay otras antorchas entre 15 a 5 años de
creación que peregrinan interrumpidamente con un número alto de integrantes. Además
existen otras de reciente formación que no peregrinan constantemente, ya que están
organizadas por familias o conocidos que no pasan de 20 integrantes, inclusive se ha
encontrado en los datos etnográficos, algunas con uno o dos integrantes que realizan
peregrinaciones con antorcha, que muchas de las veces son organizadas de manera
improvisada debido a que responden a ofrecimientos o promesas que le hacen a la virgen.

Estas antorchas sancristobalenses visitan anualmente diversos santuarios marianos o


sitios religiosos dentro del estado de Chiapas400, entre ellos están los sitios de mayor afluencia
para peregrinar como son los municipios de Ocosingo, Chiapa de Corzo, Tila y Palenque, con
un aproximado de 5 a 8 antorchas que visitan a estos lugares anualmente; mientras que otras
antorchas originarias de San Cristóbal peregrinan a los municipios de Tuxtla Gutiérrez,
Chenalhó, Las Rosas, Cintalapa, Comitán, Trinitaria y la localidad de Puerto Arista del
municipio de Tonalá que arribaran entre 3 y 4 antorchas anualmente, el resto de ellas visitan
otros municipios con menos de 2 o incluso una antorcha (ver Mapa No. 1).

Mientras que en el año de 2015, otras antorchas sancristobalenses se desplazaron a los


distintos lugares del país como Tabasco, Veracruz, Tlaxcala, Chalma del Estado de México,
Xicotepec de Juárez, Puebla y Juquila, Salina Cruz, Matías Romero, Tapanatepec, Chahuites
que pertenecen al estado de Oaxaca, incluyendo la capital de estado, y por supuesto la Basílica
de Guadalupe en la Ciudad de México (ver Mapa No. 4), haciendo un total de
aproximadamente 25 antorchas sancristobalenses que peregrinaron a estos 13 santuarios401.

399 Ver Apéndice II: Cuadros de registro de archivo y etnográfico: Antorchas San Cristóbal de Las Casas 2015.
400 Ver Apéndice III: Cuadros de registro de archivo y etnográfico: Municipios y Estados que visitan las
Antorchas originarias de San Cristóbal de Las Casas.
401 Ver Apéndice III: Cuadros de registro de archivo y etnográfico: Municipios y Estados que visitan las

Antorchas originarias de San Cristóbal de Las Casas.

307
Entre ellos se encuentra con mayor número de visitas de antorchas originarias de San Cristóbal
a los santuarios de Tabasco, Tapanatepec, Juquila402, Oaxaca, y la Basílica de Guadalupe en la
ciudad de México, lugar considerado el centro rector del culto guadalupano.
Guadalupe tiene un lugar único en el sistema, pues no es compartido por
ningún otro centro; en el complejo de su santuario no hay referencia directa
ni indirecta a ninguna otra devoción peregrina mexicana, mientras que en los
otros centros hay santuarios, pinturas o estatuas dedicadas a la Virgen
Morena, los cuales indican su posición como símbolo dominante del
nacionalismo místico mexicano y, más allá de esto, sugiero, de una
communitas católica que se extiende más allá de las fronteras de los sistemas
políticos mexicanos presentes y pasados (Turner, 2009: 59).

Aunque también en otras ocasiones se ha visitado los santuarios como el Cristo Rey en
el cerro del Cubilete del estado de Guanajuato, La Virgen de Zapopan o de San Juan de Los
Lagos en el estado de Jalisco, así como Yucatán, Quintana Roo, entre otros santuarios de
México.
Peregrinos pernoctando en S.C.L.C. 2015

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

Para el caso del santuario guadalupano de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas es
considerado un paso obligatorio para aquellas peregrinaciones con antorcha que se movilizan
en la región, así como de algunos peregrinos que llegan a la ciudad procedentes de otros
regiones del estado403 o incluso de otros estados de la república, motivo por el cual la ciudad de
San Cristóbal se ve aglutinada por grupos de antorchas guadalupanas que arriban desde los días

402Ver (Sarmiento, 2007).


403Ver Apéndice III: Cuadros de registro de archivo y etnográfico: Antorchas Foráneas que llegan a San Cristóbal
de Las Casas. 2015.

308
8 al 12 del mes de diciembre a la iglesia de Guadalupe. Durante estos días es imposible caminar
libremente por las calles alternas a la iglesia de Guadalupe, ya que se encuentran estacionados
vehículos de todo tipo que traen peregrinos que utilizan las banquetas de las calles para
improvisar zonas de dormitorios a la intemperie, por lo que colocan colchas sobre el piso para
descansar y cubrirse de las bajas temperaturas que son comunes en estos días.

Peregrinos entrando a la iglesia de Guadalupe,


S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

La vida de las personas que ahí habitan trasforman su dinámica cotidiana durante las
fechas de la peregrinación, debido principalmente por la cantidad de personas que se mueven
en este santuario, ya que durante los días de fiesta, la gente se entrecruza, algunos llegan con el
entusiasmo de encontrarse con la virgen y otros regresan satisfechos de haber concluido la
visita. En medio de este vertiginoso espacio, la vida cotidiana se interrumpe, las calles
principales y aledañas a la Iglesia se encuentran saturadas de juegos infantiles que son animados
con música y que impide la tranquilidad al interior de las casas. A lo lejos se percibe los olores
que emanan de los puestos de vendimias, así como también en algunas calles se alcanza a
distinguir olores desagradables de orina que dejan sobre las banquetas, ya sea de grupos de
alcohólicos o de algunos antorchistas que utilizan como “baño” a los lugares obscuros o
menos transitables, principalmente en donde son escasos los sanitarios.

309
Estas dinámicas son comunes en estos días, en la que los santuarios son estos espacios
en donde el tiempo de la rutina se detiene y se trasforma para darle espacio a los peregrinos
que visitan. Para ello, la parroquia de Guadalupe de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas
cuenta con baños que renta durante estos días, así como un pequeño salón que se encuentra
cerca de la sacristía para ser utilizado como albergue para los peregrinos, si éste se encuentra ya
ocupado algunos se refugian en los pasillos de cualquier rincón del atrio de la iglesia y colocan
camas improvisadas sobre el piso. Cabe mencionar que muchos de estos peregrinos no traen
ropa adecuada para soportar las inclemencias del clima, por lo que es común encontrar a
jóvenes custodiando el altar y la antorcha cubriéndose el cuerpo con colchas para dormir, la
boca y nariz con pañuelos o bufandas improvisadas o se acercan al fuego del pebetero para
calentarse, mientras el resto del grupo se refugia dentro de los carros para protegerse del frio,
sobre todo aquellas que provienen de regiones de tierra caliente.

Peregrinos dentro de la iglesia de


Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

Los grupos que eligen San Cristóbal como lugar de llegada, inicialmente entran a la
iglesia de Guadalupe agradeciendo haber concluido su meta, rezan y gritan porras, al término
buscan un refugio para dormir y para realizar sus alimentos, para ello se organizan grupos que
bajan al centro para comprar en los negocios de autoservicio, ya que se quedarán uno o dos
días en la ciudad; por la tarde aprovechan a deambular por las calles conociendo la ciudad o se
integran a los bailes que se organizan en el atrio de la iglesia. Al día siguiente, preparan sus
cosas y suben de nuevo a la iglesia para “despedirse” de la virgen y encender la antorcha para

310
iniciar el camino de regreso a sus lugares de origen. Mientras que para aquellas que están de
paso, suben directamente a la iglesia de Guadalupe para “saludarla” y pedir su “bendición”
para proseguir su camino, algunas de ellas sólo permanecen por unas horas y siguen su
peregrinar.

Estas antorchas404 son originarias principalmente de los municipios de Tuxtla


Gutiérrez, Tenejapa, Tapachula, Simojovel, Chamula, Tumbalá, Chilón, Rayón, Ocosingo,
Aldama, Cintalapa, La Trinitaria, Motozintla, Teopisca, Comitán, Oxchuc, Venustiano
Carranza, Chenalhó, Bachajón, Huitihupán, Las Margaritas, Zinacantán, Tenejapa, Chicoasén,
Altamirano, San Miguel Mitontic, Salto de Agua, Soyaló, Pantelhó, Chiapa de Corzo,
Chalchihuitan, Jitotol, San Juan Cancuc, Sitalá, San Andrés Larraínzar, La Independencia,
Unión Buena Vista, Bochil y Las Rosas (ver Mapa No. 2). De las cuales vienen con un número
más alto de antorchas procedentes de los municipios de Chenalhó con 12 antorchas, Comitán
con 11 antorchas, Simojovel con 9 antorchas, Chamula con 6 antorchas, Cintalapa con 6
antorchas, Teopisca con 4 antorchas, y Venustiano Carranza con el mismo número de
antorchas; además de llegar una antorcha de la capital de estado de Oaxaca y otra de la
localidad de Xcalacoop de Hidalgo procedentes de Yucatán, que fueron registrados en el año
de 2015 (ver Mapa No. 3).

Es interesante reflexionar que estos espacios de peregrinación conforman una


“topografía ritual” en la que la distribución de los espacios sagrados rebasan los límites
estatales, generando relaciones entre sí, en las que como se observa no comparten una región
propia, además de que “estos sitios rituales y divisiones territoriales no coinciden precisamente
con centros y divisiones políticas de gran importancia como la capital nacional, las provincias,
las capitales provinciales y las aldeas guiadas por aristócratas (Turner, 2009: 34). Sino que las
rutas de peregrinaje son determinadas primeramente debido a la larga experiencia de los
peregrinos que han inculcado la práctica de visitar los mismos lugares, ya sea porque se ha
difundido devociones particulares por las imágenes religiosas que ahí se encuentran o porque
responde al interés de las nuevas generaciones a conocer estos lugares, por otro lado, esto va a

404Ver Apéndice III: Cuadros de registro de archivo y etnográfico: Municipios de Chiapas que peregrinan a San
Cristóbal de Las Casas.

311
depender de los factores externos con que cuenta el peregrino como el tiempo, los recursos e
intereses que tengan para la elección de los lugares de peregrinación.

A nivel nacional, la ubicación territorial de los municipios y estados de la república que


practican el antorchismo da cuenta que también existe una aparente delimitación territorial de
la presencia de la Iglesia católica, debido a que según se observa en el mapa 1 y 2, la
distribución de rutas y lugares de visita de las antorchas procedentes del municipio de San
Cristóbal y aquellas que llegan a la ciudad, comparten los mismos lugares de visita entre ambos,
muestra de que existe una comunicación entre parroquias y Diócesis; además de evidenciar que
las antorchas guadalupanas son para la Iglesia católica como una especie de “agrimensores
religiosos” que fijan límite en zonas ya controladas por la Iglesia católica y en los lugares donde
hay presencia de religiones no católicas.

312
313
314
315
La mayoría de los recorridos que realizan estos grupos de antorchas se encuentran
dentro del estado debido a que muchos de ellos se les hace difícil realizar rutas largas, esto se
debe principalmente debido al tipo de transporte que se requiere para la peregrinación.
Aquellas que utilizan bicicletas o motocicletas se les dificulta recorridos a largas distancias por
el esfuerzo que esto implica, mientras que las antorchas pedestres son las que pueden
trasladarse a lugares más lejanos debido a que se movilizan grupos grandes en un sólo
transporte, aunque puede haber algunas excepciones de grupos que aun no siendo pedestres
han realizado peregrinaciones fuera del estado, como el caso de la Antorcha Ciclista Peregrina
de María (ACPM):
Ya le dimos vuelta casi medio país, del sureste hasta la península y desde el
centro hasta Puebla. Ya hemos ido a Puebla, Oaxaca, Minatitlán, Villa
Hermosa, Campeche, Escarcega, todos los lugares de la península. Con la
ACGM corrimos más lejos porque nos patrocinaban la unidad, éramos más
integrantes y por eso podíamos trasladarnos a más lugares, ahora somos solo
ocho y pues no llegamos lejos.

Otro de los motivos principales que impide desplazarse a los santuarios a grandes
distancias es debido a los gastos que se requieren para el traslado y por el tiempo que se
necesita para la peregrinación, debido que la mayoría de los peregrinos trabajan en instituciones
o empresas particulares y no cuentan con muchos días para realizar el recorrido, muchas veces
solicitan permisos de dos o tres días, mientras que hay un mínimo de ellos que pueden tener
permisos por una semana.

Al respecto Turner (2009) señala que la peregrinación va a depender de las


características de la población que lo practica, sobre todo aquellas que tienen un origen más
provincial como serían las congregaciones religiosas vinculadas localmente, las cuales se han
extendido en el ámbito de relaciones de parentesco o de vecindad. Esto ha propiciado que la
mayoría de los grupos de antorchas están compuestas por personas que comparten los mismos
espacios de interacción ya sea en trabajos temporales o informales como albañiles, mecánicos,
comerciantes, así como personas que cuentan con negocios propios o que trabajan en algunas
empresas, por lo que los peregrinos piden permiso para ausentarse por el tiempo que dure la
peregrinación y luego reintegrarse a sus actividades, como señala el peregrino:
Mi trabajo es diario, yo trabajo en el ramo de la albañilería. Pues los días que
yo me voy, el patrón le conviene o no le conviene [sic], pues a nosotros, el
día que ya llega [la fecha de la peregrinación], nos organizamos y decimos, tal

316
día salimos y a nosotros no nos interesa, ni nos ponemos a pensar en el
trabajo o en cosas que ni al caso, porque el trabajo ya viendo, en el nombre
de Dios y en ella; que vengamos bien nuevamente, seguimos con nuestra
vida diaria y a prepararnos otra vez el otro año, para ver si logramos metas
nuevas, ir a la basílica, ir al Santuario de Juquila, ir a San Juan, y a ver al
Cristo de Chalma, son metas grandes405.

Peregrinos entrando a la iglesia de


Guadalupe, S.C.L.C.

Fuente: Trabajo de campo en S.C.L.C. 2016.

Esto ha propiciado que la vida cotidiana de estos lugares tengan otra dinámica, debido
a que muchos jóvenes “abandonan” sus espacios de trabajo para integrarse a las
peregrinaciones guadalupanas y una vez regresando buscan otro empleo, esto se debe a que
hay algunos peregrinos que no cuentan con estudios profesionales y no tienen un trabajo
definitivo o bien remunerado, por lo que prefieren abandonar esos espacios laborales y a su
regreso buscar uno nuevo después de haber visitado lugares y cumplido su manda. Esta
precariedad laboral permite que puedan desplazarse a los diferentes sitios sean estos a
santuarios lejanos o cercanos, como señalaba uno de los locutores más populares de San
Cristóbal, al referirse a los cambios de la rutina diaria de la vida comercial y laboral en San
Cristóbal de Las Casas mientras los antorchistas hacen su peregrinar:
Las fiestas guadalupanas nos dejan sin trabajadores!!; la costumbre de las
carreras antorchistas, que cada vez son más, se llevan a muchos jóvenes a
correr por los caminos en una mezcla de diversión, paganismo, promesa,

405Entrevista realizada al Sr. Calixto González, Coord. de la Antorcha de Descalzos “Sagrado Corazón” del
Barrio de Cuxtitali. San Cristóbal de Las Casas. El 16 de noviembre de 2016.

317
manda, pretexto o devoción, la situación es que es una semana antes del
doce de diciembre llueva, truene o relampaguee, los antorchistas suspenden
labores. Durante todo el año reúnen cierta cantidad de dinero para gastarla
en las famosas carreras de la antorcha, así es estimado lector que, si hoy no
encuentra su periódico, es porque los voceadores están corriendo para llegar
mañana a la fiesta de la guadalupana. Ni modos, es la costumbre406.

Pese a esta movilidad, actualmente el número de antorchas ha disminuido debido a la


incorporación de diversas religiones en la zona de Los Altos de Chiapas, sin embargo ante esta
diversidad religiosa, en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas se ha fortalecido a través de
grupos de comunidades católicas en las distintas parroquias de la ciudad, así como grupos
independientes que siguen realizando las peregrinaciones guadalupanas, motivo por el cual el
número de antorchas que son originarias de la ciudad es cambiante año con año, ya que se
puede encontrar a grupos que anualmente realizan su peregrinar, mientras que existen otras
que interrumpen esta práctica durante un año y se reintegran en el siguiente, mientras otras
surgen por única ocasión.

Al respecto Turner describe que para el caso de México como lo que ocurre en Europa,
es común que haya lugares donde se concentran actividades de peregrinación, las cuales tienen
la particularidad de tener grupos seculares organizados que tienden a realizar peregrinaciones
fuera de sus propios territorios, mientras que otros participan en actividades propias de la
fiesta.
En México, así como en muchas partes de la Europa católica, se encuentra
que pueblos y municipios contienen varias hermandades que incluyen en sus
actividades anuales una peregrinación al lugar donde su santo patrón es más
altamente venerado. Es interesante notar aquí que cuando un municipio
contiene o está cerca de un centro de peregrinaje importante, sus habitantes,
aunque puede que participen en actividades festivas y de mercadeo asociadas
a los días festivos del santo del peregrinaje, tienden a ir en su propia
capacidad de peregrinos a santuarios distantes más que cercanos. Pero estas
mismas personas participan diariamente en el sistema local de mayordomía o
administración de asuntos locales religiosos (Turner, 2009: 40).

Es por esto que los santuarios son espacios donde convergen una diversidad de
intereses y manifestaciones de todo tipo que surgen anualmente durante los días festivos,
406Opinión de Salvador Camacho publicado en el periódico El Tiempo, 11 de diciembre de 1993, citado en
(Escobar, 2002: 119).

318
mientras unos asisten para ir en busca de sus deidades, algunas personas que viven cercanas a
la iglesia se incorporan a esa dinámica de fiesta, ya sea integrados a actividades y rituales
religiosos que hacen dentro y fuera del templo o participando en los eventos que ahí se
organizan, de acuerdo a una programación de actividades que no cesan durante varios días.

El antorchismo es sin duda un ritual que se encuentra ligado a la fiesta guadalupana, en


el que se contiene una infinidad de expresiones, vivencias y acciones en las que no pueden ser
explicadas a simple vista, ya que como se ha descrito anteriormente, existen elementos que son
compartidos y que aparentan similitud, sin embargo haciendo un registro más detallado de la
práctica, se puede clasificar por grupo étnico, por edad, por afiliación o por su práctica, como
se describe en este documento. Pese a estas similitudes y diferencias en la práctica del
antorchismo, también se encuentran rituales públicos y privados a lo largo de su caminar,
reflejo de ser uno de los rituales en los que la Iglesia católica no tiene control debido a que
muchas de estas prácticas son improvisadas o dirigidas por los mismos creyentes, y por ende,
está contenida de una enorme creatividad religiosa, en la que interviene la originalidad de sus
acciones a partir de creencias espirituales que adquieren un poder hacia los participantes.

Esta expresión religiosa católica también refleja la necesidad de la población creyente a


buscar alicientes espirituales a través de la religión para subsanar o remediar sus necesidades
económicas, de salud y psicológicas del individuo. Elementos suficientes para que los
participantes en las peregrinaciones con antorcha utilicen esta vía de sanación, ofreciendo
sacrificios físicos, económicos y espirituales para encontrar a través de ella, una recompensa a
sus incertidumbres terrenales.

Pese a que los antorchsitas se encuentran en peligro constante debido a las


características de la práctica, este tipo de ritualidades son acogidas por la población juvenil
principalmente debido a que cuentan con una condición física para movilizarse a los diferentes
santuarios, además porque es sin duda una oportunidad de visitar y conocer lugares donde en
otras condiciones, les puede ser más difícil llegar. Es por ello que aprovechan la coyuntura del
viaje para que con pocos recursos económicos y en compañía de personas de su misma
condición sociocultural, puedan conocer diferentes lugares dentro y fuera del estado.

319
Mientras que para la Iglesia católica es bien aceptado debido a que aprovechan la
movilidad de estos grupos para difundir el catolicismo en las partes donde ellos se encuentran,
aun conscientes de que no es una práctica religiosa vigilada por ellos. Situación que atrae más a
la población juvenil debido a que al estar más alejada del dogma católico, hace que su práctica
sea más autónoma, y por ende, se construya, se mantenga y se reproduzca fuera del alcance del
control de la misma Iglesia católica. Esto hace que la peregrinación con antorcha sea el medio
de liberación de una parte de la feligresía chiapaneca que utiliza este ritual para fincar una
nueva manera de ser católico.

Uno de los elementos fundamentales para la práctica del antorchismo, es el apoyo


constante de personas cercanas o de la familia que han propiciado, sustentado y respaldado a
los peregrinos antes y durante la peregrinación. Ellos son parte importante, porque aun sin
realizar la peregrinación, son personas devotas a la virgen de Guadalupe que acompañan a los
antorchistas ya sea apoyándolos durante la preparación y realización del trayecto o los que los
apoyan sin importar su procedencia, para ofrecerles alimentos o asilo en los caminos. La
práctica de peregrinación con antorcha es un acto en el que se puede observar la participación
de muchas personas que tienen la intención de ayudar, acciones que son ofrecidas como
“manda” para ser recompensados por la virgen y tener una solución a sus problemas.

320
Conclusiones
A la huella, a la huella
José y María
Por las pampas heladas
Cardos y ortigas.

A la huella, a la huella
Cortando campo
No hay cobijo ni fonda
Sigan andando
(Fragmentos de la canción: La peregrinación; de Ariel Ramírez, 1964).

Hacer un recuento del proceso de la investigación doctoral es fundamental para comprender la


construcción de este documento, el cual se centra en la descripción y el análisis del ritual de las
peregrinaciones con antorcha en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. Manifestación
religiosa en el que año tras año convoca a cientos de niños, jóvenes y adultos, con el anhelo de
recorrer y dejar sus huellas por los caminos de Chiapas con la devoción a cuestas de visitar los
santuarios guadalupanos.

Conforme me iba acercando al fenómeno a través de leer los textos referentes a este
tipo de expresiones religiosas y sobre todo de revisar material bibliográfico del culto
guadalupano, fui construyendo un andamiaje histórico sobre el proceso de larga duración que
requirió la institucionalización del culto guadalupano no sólo en México sino en toda América.
Material que me llevó a escribir hojas y hojas que fueron muy agobiantes para el mismo comité
de titulación, sin embargo, no fue en vano, ya que pude construir una mirada crítica sobre este
culto.

Sin embargo, al paso de los primeros meses de la investigación, fui notando que no
contaba con el dato histórico más importante que daba origen al ritual, es decir, desconocía
quien o cómo había surgido este tipo de manifestación religiosa, que hoy en día acaparaba las
iglesias, los santuarios y los caminos del estado de Chiapas y que inclusive, era particular para
algunos de los estados del Sur de México. Esto me obligó a adentrarme al quehacer del
historiador y revisar compilaciones de hojas amarillentas con olor ha guardado de los
expedientes que se encuentran depositados celosamente en el Archivo Histórico Diocesano de San
Cristóbal de Las Casas (AHDSC) y en el Archivo Histórico del Estado, de la Universidad de Ciencias y
Artes de Chiapas (CUID - UNICACH) en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Fueron momentos

321
abrumadores para mí, ya que en mi formación como antropóloga desconocía el procedimiento
para utilizar este tipo de material, además que estaba por primera vez haciendo trabajo de
campo en archivos y dialogando con documentos históricos que me iban llevando de la mano
a un mundo extraordinario del pasado. A medida que iba revisando los expedientes, encontré
un camino lleno de información valiosa que fui armando como rompecabezas.

Finalmente el día llegó, recuerdo perfectamente cuando encontré el dato, quería gritar
desde las alturas del campanario que por fin sabía quiénes habían planeado la idea de
peregrinar con antorcha y cuál había sido el objetivo de organizar este tipo de expresiones
religiosas. Había encontrado mi tesoro, y no sólo eso, había encontrado el sentido que tendría
la investigación.

A partir de ese momento, estuve convencida que nosotros los antropólogos hemos
descuidado el apoyo de otras ciencias, como en este caso es la Historia, ciencia que ayuda a
reconstruir un pasado y comprender los actuales fenómenos que observamos. Procedimiento
metodológico que implicó adentrarme a un proceso de investigación más largo, pero más
satisfactorio, ya que pude llegar a comprender desde una dimensión más amplia el sentido de
los fenómenos sociales que actualmente observamos los antropólogos. Como dijera
recientemente Claudio Lomnitz (2019) mientras que la historia es una disciplina textual que se
funda en la lectura de documentos, la antropología está ubicada en el campo y que tiene como
centro la etnografía. Finalmente, la contribución principal de este trabajo, fue hacer uso de las
técnicas metodológicas de ambas disciplinas, con el objetivo de plantear la investigación
tomando en cuenta el contexto histórico, cultural y social que dio origen al fenómeno religioso.

Como antropóloga, realizar las estancias de campo con los peregrinos guadalupanos
durante los días de peregrinación fue una “experiencia religiosa”, ya que pude adentrarme a
conocer, observar y vivir la peregrinación junto con el apoyo de muchas personas que hicieron
posible que pudiera acompañarlos durante sus recorridos. Esta aventura religiosa me enseño
que implorar con los pies, no sólo era una frase hecha para una tesis doctoral, sino que fue una
verdadera realidad.

322
Al recorrer los caminos junto a los peregrinos, pase hambre, sudor, cansancio y mucho
agotamiento físico, sin embargo, también llegué a conocer de primera mano, la importancia
que tiene la peregrinación para los antorchistas, así como las diversas intenciones que hay
detrás de cada uno de ellos. Estos momentos fueron fundamentales no sólo para mi
experiencia personal, sino también el momento de convivir, acompañar y experimentar
situaciones al límite. Todo ello me permitió reflexionar y comprender este tipo de fenómeno,
para conocer las otras maneras de vivir la religiosidad católica contemporánea y presentar una
mirada personal sobre las peregrinaciones con antorcha.

A lo largo de esta complicada pero satisfactoria travesía, concentré los siguientes


hallazgos que fueron resultado de este trabajo de investigación, que fueron fundamentales para
analizar este tipo de expresiones religiosas en un espacio urbano.

Primeramente hablar sobre las peregrinaciones con antorcha es referirse a la virgen de


Guadalupe como uno de los referentes más importantes para la Iglesia católica, para ello se
requirió de un proceso de larga duración que permitió su institucionalización y extensión del
culto a lo largo del territorio mexicano. Entre ellos destacan por ejemplo, las características
iconográficas que exhibe la imagen guadalupana, las diversas ocasiones en que la coronaron, su
exaltación simbólica en los eventos cívicos religiosos en diferentes periodos y épocas de la
historia de México, la difusión del milagro guadalupano, la construcción de templos y capillas
en distintas partes del país, así como la producción de materiales impresos que describieron el
milagro de las apariciones de la virgen en el Tepeyac. Elementos que fueron resaltando para los
siguientes años, como un símbolo que representaba en parte el ethos de una nación,
fortaleciéndose a partir del discurso de sacerdotes, políticos y militares en importantes sucesos
de la historia de México. Convirtiéndola no sólo en un símbolo religioso sino también para
integrar a una naciente nación.

De tal manera que estos eventos aseguraron la continuidad y el fortalecimiento al culto


guadalupano en México y en América desde la Colonia hasta la actualidad, ya que la veneración
se ha hecho cada vez más presente en distintos campos del catolicismo, generando una
variedad de prácticas religiosas que han fortalecido su culto.

323
Para el caso de guadalupanismo se tiene referencias que se estableció en la Nueva
España, llegando a Chiapas a finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX, con la
intención de fomentar la devoción y su culto. Basado en los datos obtenidos en los archivos, se
sabe que la devoción se mantuvo en las casas particulares o en algunas iglesias católicas de
Ciudad Real, por ser la capital de la Provincia y centro rector de la Diócesis. Pero a partir de
que el territorio se anexa a México, el fervor guadalupano adquiere otros matices, debido a que
no sólo se estableció el poder político y económico mexicano, sino que también se fortaleció
de manera paulatina a la imagen de la virgen de Guadalupe como uno de los símbolos
nacionalistas que se fue arraigado entre la población chiapaneca para generar una referencia de
una nueva identidad nacional.

Sin embargo, es importante resaltar que este proceso de institucionalización fue lento y
se consolido principalmente en tres etapas del siglo XX, con:
a) 1931: La Coronación de la virgen de Guadalupe en Chiapas.
c) 1954: La Magna Carrera de Antorchas de Fe.
d) 1960: Inicio de las antorchas guadalupanas en Chiapas.

Inicialmente esta imagen se consolida en el estado, a raíz de la Coronación de la virgen


de Guadalupe en el año de 1931, considero el año crucial del guadalupanismo chiapaneco. Este
evento que fue organizado por la Diócesis de Chiapas y apoyado por todas las parroquias e
iglesias del estado, tuvo el objetivo de entronizar y fortalecer la devoción guadalupana entre sus
feligreses, además de mantener la hegemonía de la Iglesia católica en Chiapas, debido a la cruda
política anticlerical que mantenía el Estado en el resto del país.

Aunque la historia anticlerical en Chiapas fue menos violenta, debido al alejamiento


con el centro de México y con la sutil presencia de la Iglesia, dio como resultado una aparente
benevolencia para realizar actos religiosos como la coronación de la virgen de Guadalupe. Esto
no hubiera sido posible sin la participación de las familias católicas de la ciudad de San
Cristóbal y de la comunidad católica del estado que apoyaron a la Diócesis para la organización
de la coronación. Con este acto no sólo se fortaleció el culto guadalupano, sino que también se
consolidó la Iglesia chiapaneca, debido a que este hecho posicionó a la Iglesia católica frente al
Estado mexicano, evidenciándose así, el poder de convocatoria que tenía en todo el país y

324
demostrando que la ciudad de San Cristóbal contaba aun con el poder religioso, mientras que
el poder político había sido reubicado 40 años antes a la ciudad de Tuxtla Gutiérrez.

Esto dio como consecuencia que en los siguientes años, se realizaron eventos que
encausaron la devoción y consolidación del culto guadalupano en el estado, a través de la
participación activa de la Diócesis de Chiapas y de las autoridades religiosas del centro de
México, como la organizada en el año de 1954 denominada “la Magna Carrera de Antorchas de
Fe”. Actividad religiosa que fue apoyada por el grupo de Acción Católica Mexicana y con la
integración del grupo de Acción Católica de Jóvenes Mexicanos en Chiapas.

Este evento se utilizó como “reclutamiento espiritual guadalupano” de algunos jóvenes


chiapanecos para unirse a la “comunidad” de la Iglesia para catequizar el guadalupanismo e
incentivar actividades deportivas. Esta peregrinación multitudinaria a nivel nacional quedó
grabada en la mente de los participantes e impulsó que en los años siguientes se siguieran
organizando peregrinaciones en los diferentes santuarios dentro del estado.

Posteriormente en la década de los años sesentas se comenzó con la creación de grupos


de “Antorchas Guadalupanas” en los barrios y colonias de la ciudad de San Cristóbal de Las
Casas y posteriormente se difundieron en otros lugares del estado que peregrinan en el mes de
diciembre en nombre de la virgen de Guadalupe por las distintas rutas dentro del estado y
fuera de él.

Una vez teniendo una dimensión amplia sobre la institucionalización y conformación


de los grupos de antorchas que surgieron de este culto guadalupano en Chiapas, era
indispensable describir el proceso ritual que compone las peregrinaciones con antorcha,
fenómeno religioso que dio origen a esta investigación.

Para ello, se tomó la propuesta teórica de Van Gennep (2008) y Víctor Turner (1988)
quienes ofrecen una mirada estructurada del proceso ritual que ayuda a describir la
peregrinación con antorcha, clasificando las fases en preliminal, liminal y posliminal. Estas etapas
contribuyeron a describir algunas formas de comportamiento que tienen los antorchistas
durante su práctica ritual.

325
Si bien Víctor Turner propone un modelo teórico para describir el proceso ritual, hay
que hacer notar que pone poco interés en explicar claramente la fase posliminal, posiblemente
porque su principal aportación se centra en el análisis de la fase liminal que compone el ritual,
en donde propone que el sujeto es un ser liminoide y por ende puede llegar a experimentar
acontecimientos sobrenaturales como “milagros” o actos inexplicables que percibe en el ritual.
Además que al encontrase en esta fase, el sujeto abandona los roles que tienen en su vida
cotidiana para integrarse con un sentido de solidaridad, compañerismo y con una identidad
común. En este proceso Víctor Turner (1988) propone que los participantes se incorporan en
una communitas y crean una antiestructura alterna a la estructura que rige su cotidianidad, y una
vez que el ritual culmina, ésta se diluye para de nuevo integrarse a sus actividades diarias.

Sin embargo, para el caso de los grupos de antorchas de la ciudad de San Cristóbal, no
sucede de esta manera, ya que los antorchistas están en constante participación en actos
religiosos y civiles, sean éstos apegados a la iglesia o de manera independiente, y por ende, estas
communitas se reactivan constantemente a lo largo del año. Por lo que considero que la
integración de estas communitas si bien responde a la necesidad de establecer procesos de
acompañamiento, solidaridad y sentido de pertenencia, se debe a la carencia de mecanismos de
integración de las comunidades a las que pertenecen originalmente. Es decir, son espacios
“vacíos” o intersticios que tiene la estructura de la religión o la sociedad, como propone Manuel
Delgado (1999), lo que invita a que estos grupos organicen esas communitas para tener
certidumbre y certeza a su vida. Es por ello que el sujeto ritual está determinado a asumir las
reglas antes y durante la peregrinación, ya que se encuentra desprotegido y carente de una
estructura que lo regule y de la cual se integra para brindar una seguridad en un ambiente
caótico que ofrece los espacios urbanos y rurales. Otra de las características de la interstiacialidad
es que al ser un acto no controlado, libre, espontáneo y no supervisado por la Iglesia, cada
grupo organiza y vive su peregrinar de acuerdo a los criterios que establece cada asociación.

Si bien en las “antorchas guadalupanas” se encuentran peregrinos que corren en


relevos, en bicicletas, en motocicletas o en caminatas, también existe diversas formas en su
organización y composición de sus integrantes, sin embargo ante esta diversidad, todos
comparten un mismo fin religioso, el cual los representa y los caracteriza.

326
Al referirse a la conformación de los grupos de antorchas, los cuales se reúnen a lo
largo del año para establecer una asociación de antorchas Unidas, fue necesario proponer el
concepto de communitas ampliada, para hacer referencia a este tipo de organizaciones, que tiene
de particular integrarse en un grupo, el cual aun realizando su práctica de manera diferente,
construyen un sentido de pertenencia y de solidaridad en el momento en que se encuentran, ya
sea previamente o durante la peregrinación. Además de utilizar los medios electrónicos para
crear communitas virtuales que fungen de redes más amplias para difundir y fortalecer sus
prácticas religiosas.

Finalmente hablar sobre la importancia que ha tenido las peregrinaciones en todas las
religiones a lo largo de la historia, es referirse a uno de los medios más eficaces de
evangelización, ya que sus participantes se convierte en un tipo de “agrimensores” que
difunden un culto y una ideología religiosa en particular. En la actualidad, para la Iglesia
católica las peregrinaciones con antorcha, son aprovechadas para que cientos de peregrinos
guadalupanos evangelicen y reafirmen el catolicismo en los caminos en que transitan, aunque
en ocasiones, esta práctica es cuestionada debido a que la Iglesia católica le desagrada no tener
el control de los actos rituales de los antorchistas durante la peregrinación, insistiendo en que
realizan actos inmorales que están en contra de las reglas de la propia iglesia. Sin embargo, esto
es precisamente un elemento por el cual este tipo de actos tiene una verdadera aceptación entre
los jóvenes, ya que poseen la libertad de proponer y poner en práctica su religiosidad a partir
de los gustos e intereses de esta población, utilizando los medios que tienen a su alcance.

Al observar a las expresiones religiosas actuales como en este caso a las peregrinaciones
con antorcha, denota primeramente, el éxito de la institucionalización del culto guadalupano en
Chiapas y el fortalecimiento de la comunidad católica a través de la creación de grupos de
peregrinos guadalupanos que se mueven a lo largo de los caminos difundiendo su culto. Esta
expresión religiosa fue adquiriendo una característica multifacética, reflejo de la vertiginosa
trasformación que tienen los mismos feligreses para expresar sus creencias, debido a que se
encuentran en un momento de incertidumbre en el que carecen de referentes espirituales que
les dé certeza y acompañamiento frente a lo que ofrece sus propias comunidades religiosas.

327
Es por ello que analizar el proceso de consolidación de un culto religioso y describir a
las peregrinaciones con antorcha como un resultado de su establecimiento, ayuda a
comprender como la religiones se ha ido acomodando a las nuevas dinámicas que caracteriza
las sociedades contemporáneas en contextos urbanos y rurales, debido a que la feligresía se
encuentran en constante reinvención de su religiosidad, resultado de la complejidad religiosa
que se vive actualmente.

328
Bibliografía
Almeida De Souza Juliana Beatriz
2010 “La imagen de la Virgen de Guadalupe por Don Francisco Antonio de Lorenzana”. En:
XIV Encuentro de Latinoamericanistas Españoles: Congreso internacional, septiembre. Santiago
de Compostela. Universidad de Santiago de Compostela, Centro Interdisciplinario de
Estudios Americanistas Gumersindo Busto; Consejo Español de Estudios
Iberoamericanos, España. Pp.733-746.

Anderson, Benedict.
1983 “Introducción”. En: Comunidades Imaginadas. Reflexiones sobre el Origen y la Difusión del
Nacionalismo. Editorial Fondo de Cultura Económica. México. Pp. 17 – 25.

Andrade, Vidente de P.
2001 Mi excursión a Chiapas. Relación leída en la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística en las
sesiones del 15 de Enero y 12 de Febrero de 1914. Fundación Cultural Bios, A.C. San
Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México.

Artigas Hernández, Juan Benito.


1986 “Catedral de San Cristóbal de Las Casas” En: Juan B. Artigas (Ed). Cuadernos No. 3 de
Arquitectura Virreinal. Facultad de Arquitectura Universidad Nacional Autónoma de
México. México. Pp. 8 – 21.

Artigas Hernández, Juan Benito.


1991 La Arquitectura de San Cristóbal de Las Casas. Gobierno del Estado de Chiapas, Universidad
Nacional Autónoma de México, México.

Báez Jorge, Félix.


1995 “Los santuarios mexicanos: religión popular, región e identidad” En: Revista La Palabra y
el Hombre, Octubre – Diciembre. Universidad Veracruzana. México. Pp. 45 – 56.

Báez Jorge, Félix.


2003 “La Virgen de Guadalupe” En: Florescano, Enrique, Mitos Mexicanos. Ed. Taurus.
México. Pp. 179 – 188.

Beattie, John H. M.
1975 “Comprensión y explicación de la antropología”, En: La antropología como ciencia, José R.
Llobera (Ed.), Editorial Anagrama. España. Pp. 293-310.

Barabas Reyna, Alicia M.


2006 “Los santuarios de vírgenes y santos aparecidos en Oaxaca”. En: Cuicuilco, vol. 13, núm.
36, enero-abril, Escuela Nacional de Antropología e Historia. México. Pp. 225-258.

Barfield, Thomas.
2000 Diccionario de Antropología. Ed. Siglo XXI. México.

329
Barreiro Rivas, José Luis.
1993 La función política de los Caminos de Peregrinación en la Europa Medieval. (Estudio sobre el camino de
Santiago). Departamento de Ciencia Política y de la Administración. Facultad de
Ciencias Políticas y Sociología. Universidad Complutense – Madrid, España.

Barranco V. Bernardo.
1996 “Posiciones políticas en la historia de la Acción Católica Mexicana”. En: El pensamiento
social de los católicos mexicanos. Blancarte, Roberto J. (Comp.) Fondo de Cultura
Económica. México. Pp. 39 – 70.

Blasco López, Juan Miguel.


2005 “San Cristóbal de Las Casas 1864 – 1872: Radiografía de una ciudad en crisis”. En:
Liminar. Estudios Sociales y Humanísticos, Centros de Estudios Superiores de México y
Centroamérica. Vol. III, Núm. 1, junio. México. Pp. 149 – 165.

Brading, David.
2011 Los Orígenes del Nacionalismo Mexicano. Colección. Problemas de México. Ed. Era. México.

Camacho de la Torre, María Cristina


2001 Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe. Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. México.

Camacho, Dolores; Lomelí, Arturo y Hernández, Paulino.


2007 La Ciudad de San Cristóbal de las Casas: a sus 476 años. Una mirada desde las Ciencias Sociales.
Colección Hechos en Palabras. Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Chiapas.
México.

Carpio Pérez, Amílcar.


2016 “La Construcción de la santidad mexicana en el siglo XXI. En: Mártires, Santos, patronos.
Devociones y santidad en el México del siglo XX. López Menéndez, Marisol (Coord.),
Universidad Iberoamericana. Departamento de Historia. México. Pp. 55 - 80.

Carvajal González, Helena.


2015. “Santiago Peregrino”. En: Revista Digital de Iconografía Medieval, Vol. III, No. 14,
Universidad Complutense de Madrid. Departamento de Historia del Arte I (Medieval).
España. Pp. 63 – 75.

Chávez, Gabino.
1893 La peregrinación Guadalupana. Del 15 de Agosto y las Hijas de María. Reflexiones, episodios y
extracto del Sermón. Ed. Herrero Hermanos. México.
http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1080026710/1080026710.PDF

Chihu Amparán, Aquiles y López Gallegos, Alejandro.


2001 “Arenas y símbolos rituales en Víctor Turner”. En: Argumentos 40. Estudios Críticos de la
sociedad. División de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma
Metropolitana, Unidad Xochimilco. México. P.p. 137 – 152.

330
Delgado, Manuel.
1993 “La religiosidad popular”. En torno a un falso problema”. En: Gaceta de Antropología 10,
artículo 08. España. http://hdl.handle.net/10481/13637 Versión HTML · Versión
PDF

Delgado, Manuel.
1999a El animal público. Hacía una antropología de los espacios urbanos. Editorial Anagrama. España.

Delgado, Manuel.
1999b “Actualidad de lo sagrado. El espacio público como territorio de misión”. En: Revista de
Dialectología y Tradiciones Populares. Vol. LIV, No. 1. España. Pp. 252 – 289.

Domínguez Michel, Christopher.


2005 Vida de Fray Servando. Biblioteca Era, CONACULTA - INAH. México.

Douglas, Mary.
1973 Pureza y peligro. Un análisis de los conceptos de contaminación y tabú. Siglo XXI. España.

Dussel, Enrique.
1992. Historia de la iglesia en América Latina: medio milenio de coloniaje y liberación (1492 – 1992). Ed.
Mundo Negro – Esquila Misional. España. Pp. 181 – 184.

Durkheim, Émile.
2000 Las formas elementales de la vida religiosa. Ed. Colofón. México.

Escobar Siu, Aurora Eugenia y Ocampo Guzmán, Adolfo.


2002 Religiosidad popular en San Cristóbal de Las Casas: Culto a la Virgen de Guadalupe. Tesis de
Licenciatura en Antropología Social y Licenciatura en Sociología. Universidad
Autónoma de Chiapas, México.

Esponda Jimeno, Víctor.


1999 “Prologo”. En: Orozco y Jiménez, Francisco, Documentos Inéditos de la Historia de la Iglesia de
Chiapas. Gobierno del Estado de Chiapas, Consejo Estatal para la Cultura y Las Artes
de Chiapas. México. Pp. 11 – 18.

Franco, Francisco.
2010 “Cuerpo y “misticismo” en las Misas de Sanación del Movimiento de Renovación
Carismática Católico en Mérida (Venezuela)”. En: Liminar. Estudios sociales y humanísticos.
Año 8, Vol. VIII, Núm. 2, Diciembre. Centro de Estudios Superiores de México y
Centroamérica. Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, México. Pp. 71 – 88.

Fournier Patricia, Mondragón Carlos, Wiesheu Walburga (Coords.)


2012 Peregrinaciones ayer y hoy: arqueología y antropología de las religiones. El Colegio de México,
Centro de Estudios de Asía y África. México.

Flores Aguilar, Rafael.


1975 [1968] Breve Resumen de la Doctrina Cristiana. Ed. Librería Guadalupana. Tuxtla Gutiérrez,
Chiapas, México. Pp. 174 -189.

331
Flores Ruíz, Eduardo.
1978 La Catedral de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas 1528 – 1978. Edición Conmemorativa de
los 450 años de la fundación de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. Universidad
Autónoma de Chiapas, México.

Florescano, Enrique.
1998 “El estado nacional y los indígenas” En: Etnia, Estado y Nación. Ensayo sobre las identidades
colectivas. Ed. Nuevo Siglo – Aguilar. México. Pp. 333 – 371.

García Iglesias, Luis.


1987 “Las Peregrinaciones en la antigüedad” En: Cuadernos de Prehistoria y Arqueología. Vol. 14.
Universidad Autónoma de Madrid. España. Pp.- 301 – 311.

Graulich, Michel
1974 “Las peregrinaciones aztecas y el ciclo de Mixcóatl” En: Estudios de Cultura náhuatl. No.
11, Universidad Nacional Autónoma de México. Pp. 311 – 354.

Gruzinski, Serge.
2003 La Guerra de las imágenes. De Cristóbal Colón a “Blade Runner” (1492 – 2019). Fondo de
Cultura Económica, México.

Hlúšek, Radoslav
2013”La Peregrinación como demostración de la devoción Guadalupana de los indígenas
mexicanos” En: Martínez Cárdenas, Rogelio. (Coordinador) Santuarios, fiestas patronales,
peregrinaciones y turismo religioso. México. http://www.eumed.net/libros
gratis/2013/1281/index.htm. p.86 – 98.

Jamaica Silva, Liliana.


2008 “Imágenes peregrinas “Por la Unidad y Reconciliación de las familias” En: Boletín
Guadalupano. Información del Tepeyac para los Pueblos de México. Octubre. México. Pp. 29 –
31.

Jiménez Paniagua, José.


1994 Scholion In Rebus Gestis Sancti Christophori. Disertación sobre las cosas referents a San Cristóbal de
Las Casas, Ciudad Real de Chiapas. La Guía del Visitante. Ed. Fray Bartolomé de Las Casas
A.C. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México.

Josserand, J. Kathryn y Hopkins, Nicholas A.


2007 Tila y su Cristo Negro: Historia, peregrinación y devoción en Chiapas, México. En:
Mesoamérica 49. (Enero – Diciembre), México. P.p. 82 – 113.

Kerkhof F.J.
2001. “El Movimiento Carismático en la Iglesia Católica Romana”. En: Movimiento Carismático.
Smouter, W., Monjo., Kerkhof F.J., Moggré, A.J., Janse, J.C., Cerni, R. Fundación
Editorial De Literatura Reformada Felire. España. Pp. 41 – 60.

332
Ochiai, Kasuyasu
1985 Cuando los santos vienen marchando. Universidad Autónoma de Chiapas, México.

La Biblia.
Latinoamericana. Edición 134. Editorial. Verbo Divino. España.

Lafaye, Jacques.
1984 Mesías, Cruzadas, utopías. El Judeo – cristianismo en las sociedades ibéricas. Fondo de Cultura
Económica. México.

Lafaye, Jacques.
2006 Quetzalcóatl y Guadalupe. La formación de la conciencia nacional. Fondo de Cultura Económica,
México.

León Portilla, Miguel.


2000 Tonantzin Guadalupe Pensamiento náhuatl y mensaje cristiano en el “Nican Mopohua”. Fondo de
Cultura Económica, México.

Licona Valencia Ernesto.


2005 “La Celebración de la Virgen de Guadalupe en la ciudad de Puebla” En: Revista de
Antropología Experimental nº 5, Texto 16. Universidad de Jaén, España.

Lisbona Guillen, Miguel.


2005 “El estudio del anticlericalismo: Entre el análisis político y la interpretación cultural. Un
acercamiento para pensar el caso mexicano”. En: Anuario 2005. Centro de Estudios
Superiores de México y Centroamérica. Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas.
México. Pp. 15 – 102.

Lisbona Guillen, Miguel.


2006 “Mejorar la Raza”: cuerpo y deporte en el Chiapas de la Revolución Mexicana (1910 –
1940)”. En: Relaciones 105, Invierno, Vol. XXVII. Universidad Nacional Autónoma de
México. México. Pp. 60 – 106.

Lisbona Guillen, Miguel.


2007 “Vecinos y Gobierno tras la inundación de 1921 en San Cristóbal de Las Casas”. En: La
ciudad de San Cristóbal de Las Casas: a sus 476 años. Una mirada desde las ciencias sociales.
Camacho, Dolores, Lomelí, Arturo, Hernández, Paulino (Coords). Consejo Estatal para
la Cultura y Las Artes de Chiapas. Colección Hechos no palabras. México. Pp. 72 – 94.

Lisbona Guillen, Miguel.


2008 Persecución religiosa en Chiapas (1910 – 1940). Iglesia, Estado y Feligresía en el Periodo
Revolucionario. Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones
Antropológicas, Programa de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Mesoamérica y
el Sureste. México.

333
Lisbona Guillen, Miguel e Higuera Bonfil, Antonio.
2012 “Introducción” En: El Vigor de las Imágenes. Miradas interdisciplinarias. Universidad Nacional
Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Antropológicas, Programa de
Investigaciones Multidisciplinarias sobre Mesoamérica y el Sureste, Universidad de
Quintana Roo. México. Pp. 9 – 26.

Lomnitz, Claudio.
2019 Contrastes entre la historia y la antropología. En: Nexos. 1 de Agosto.
https://www.nexos.com.mx/?p=43561

López Menéndez, Marisol.


2016 “Martirio, milagros y memoria: Manuel Bonilla y Miguel A. Pro, dos mártires del
conflicto religioso, 1926 – 1929”. En: López Menéndez, Marisol (Coord.) Mártires,
Santos, patronos. Devociones y santidad en el México del siglo XX. Universidad Iberoamericana.
Departamento de Historia. México. Pp. 31- 54.

Luna Fuentes, Teresita Saraí.


2015 “Peregrinaciones al Cerro del Cubilete: prácticas religiosas y manifestaciones de fe
entorno a la devoción de Cristo Rey” En: Memorias II Coloquio de Santuarios y
Peregrinaciones del Norte y Centro de México. Guadalajara, Jalisco del 19 al 20 de marzo de
2015. CIESAS, CONACYT, ITESO. México. Pp. 24 – 31.

Luqui Lagleyza, Julio M.


2009. “Fray Servando de Mier y su sermón guadalupano de 1794. La búsqueda de una
justificación teológica a la independencia de América” En: Temas de historia Argentina y
Americana. No. 15, Universidad Católica Argentina. Argentina. Pp. 137 – 158.

Mayer González, María Alicia.


2000 “Las corporaciones guadalupanas: centros de integración “universal” del catolicismo y
fuentes de honorabilidad y prestigio. En: Pastor, Marialba y Mayer, Alicia (Ed).
Formaciones religiosas en la América colonial. Facultad de Filosofía y Letras, Dirección
General de Asuntos del Personal Académico, Universidad Nacional Autónoma de
México. México. P.p. 179 – 201.
Mayer González, María Alicia.
2002 El culto a Guadalupe y el proyecto Tridentino en la Nueva España. Instituto de Estudios
Históricas – UNAM. EHN 26. México. Pp. 17 – 49.

Martínez Cárdenas Rogelio.


2013 Turismo religioso en los Altos de Jalisco (México) En: Martínez Cárdenas, Rogelio.
(Coordinador) Santuarios, fiestas patronales, peregrinaciones y turismo religioso
http://www.eumed.net/libros gratis/2013/1281/index.htm. México. Pp. 99- 134.

Martínez Fuentes, Carlos Said.


2015 “Del Viaje Espiritual al Tour Cultural. Características territoriales del turismo religioso en
la Basílica de Santa María de Guadalupe”. Capítulo 5. En: Rogelio Martínez Cárdenas
(Coord.) Turismo Cultural y Accesibilidad. México. Pp. 145 – 178.

334
Montero García, Feliciano.
2007 “Del Movimiento a la Acción Católica. Continuidad y Cambio, 1900 – 1930”. En: De la
Cueva, Julio y Montero Feliciano (Eds). La Secularización conflictiva: España (1898 –
1931). Ed. Biblioteca Nueva. España. Pp. 169 – 185.

Navarrete Cáceres, Carlos


1999 “El Cristo Negro de Esquipulas: origen y difusión”. En: Estudios, 3ª época. Instituto de
Investigaciones Antropológicas, Universidad Nacional Autónoma de México, México.
P.p. 96-115.

Navarrete Cáceres, Carlos.


2005 “De las deidades oscuras prehispánicas a los Cristos negros Mesoamericanos”. En:
Cuadernos del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano, Series
Especiales. Vol. 2. Numero 3 Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento
Latinoamericano INAPL. Argentina.

Nebel, Richard.
1995 Santa María Tonantzin, Virgen de Guadalupe. Continuidad y transformación religiosa en México.
Fondo de Cultura Económica, México.

O´Gormán Edmundo.
2016 [1986] Destierro de Sombras. Luz en el origen de la imagen y culto de Nuestra Señora de Guadalupe
del Tepeyac. Instituto de Investigaciones Históricas. Universidad Autónoma de México,
México.

Orozco y Jiménez, Francisco.


1999 Colección de Documentos inéditos relativos a la iglesia de Chiapas, Tomo I y II, Gobierno del
Estado de Chiapas, Consejo Estatal para la Cultura y Las Artes de Chiapas, México.

Paz, Octavio.
2006 “Prefacio”. En: Quetzalcóatl y Guadalupe. La formación de la conciencia nacional. Fondo de
Cultura Económica, México.

Paniagua Barrios, Lucero del Carmen.


2013 “La fiesta a San Andrés apóstol en San Cristóbal de Las Casas. Los ladinos
sanandreseros”. Tesis de Maestría. Centro de Estudios Superiores de México y
Centroamérica. Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas. México.

Pedrero Nieto, Gloria.


2007 “La Desamortización y nacionalización de los bienes de la Iglesia de San Cristóbal de Las
Casas”. En: Revista Pueblos y Fronteras. Núm. 3. Pueblos y Fronteras. UNAM. México.
Pp. 1 – 41.

Peña Salinas, Daniela.


2015. “Camino de santos, camino de peregrinos. Peregrinación anual de San Pedro Atlapulco
al Santuario del Señor de Chalma”. En: Memorias II Coloquio de Santuarios y Peregrinaciones
del Norte y Centro de México. Guadalajara, Jalisco del 19 al 20 de marzo de 2015. CIESAS,
CONACYT, ITESO. México. Pp. 16 – 23.
335
Pinedo Márquez, Flavio.
2015 “Communitas alcohólicas y cosmovisión religiosa en la peregrinación de San Juan desde
Lagos de Moreno” En: Memorias II Coloquio de Santuarios y Peregrinaciones del Norte y Centro
de México. Guadalajara, Jalisco del 19 al 20 de marzo de 2015. CIESAS, CONACYT,
ITESO. México. Pp. 45 – 61.

Quiroz Malca, Haydeé.


2000 Fiestas, peregrinaciones y santuarios en México. CONACULTA, México.

Ramos, Gerardo Daniel.


2013. La vida como peregrinación: En camino hacia Santiago de Compostela. [En línea]. Saarbrücken:
Credo Ediciones. España. http://bibliotecadigital.uca.edu.ar/repositorio/libros/vida-
peregrinación_camino_santiago.pdf [fecha de consulta: 27/03/2017].

Ríos Figueroa, Julio.


2001. Un estado débil contra la iglesia ausente. Relaciones Estado – Iglesia católica en Chiapas, 1900 –
1932. Centro de Investigación y Docencia Económica A.C. Numero 10. México. P.p. 1
– 42.

Rivera Farfán, Carolina; García Aguilar, María del Carmen; Lisbona Guillen, Miguel; Sánchez
Franco, Irene; Meza Díaz, Salvador.
2005 Diversidad Religiosa y conflicto en Chiapas. Intereses, utopías y realidades. Universidad Nacional
Autónoma de México, Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en
Antropología Social, Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Chiapas, Secretaria
de Gobierno del Estado de Chiapas, Secretaria de Gobernación. México.

Rodríguez, Lucila.
1983 Santuarios bálsamos de América. Federación Editorial Mexicana, S. A de C.V. México.

Ruíz Bañuls, Mónica.


2013 “La devoción popular guadalupana en la teatralidad mexicana” En: Aracil Varón, Beatriz
(Coord.) Boletín de la Unidad de Investigación de la Universidad de Alicante. “Recuperaciones del
mundo precolombino y colonial en el siglo XX hispanoamericano.” España. Pp. 36 – 42.

Sánchez Álvarez, Guadalupe.


2011 Peregrinación de Santiago Ahuizotla al Santuario de Los Remedios. Espacio y tiempos que
permanecen. Tesis de Doctorado en Historiografía. Universidad Autónoma Metropolitana
Azcapotzalco. División de Ciencias Sociales y Humanidades. México.

Sarmiento Zúñiga, Mario Carlos.


2007 “Un portento milagroso en época de reformas. La imagen de la Inmaculada Concepción
de Juquila en la configuración de una devoción secular. Facultad de Filosofía y Letras.
Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Históricas.
México. P.p. 26 – 39.

Serrallonga, Silvia Aulet y Hakobyan, Kerine.

336
2011 “Turismo Religioso y espacios sagrados: Una propuesta para los santuarios de
Catalunya”. En: Revista Iberoamericana de Turismo – RITUR, Penedo, vol. 1. España. P.p.
63 – 82.

Septién Torres, Valentina Torres.


Archivo Histórico de La Acción Católica Mexicana. Un Acervo para la Historia de la Educación. México.
Http://Www.comie.Org.Mx/Congreso/Memoriaelectronica/V09/Ponencias/At09/P
re1177505581.Pdf

Stephen J. C. Andes.
2010 “El vaticano y la identidad religiosa en el México Posrevolucionario, 1920 – 1940”. En:
Estudios 95, Vol. VIII. Invierno. México. P.p. 67 – 98.

Taracena Arriola, Arturo.


2008 Guadalupanismo en Guatemala. Culto mariano y subalteridad étnica. Monografía Vol. 6.
Universidad Nacional Autónoma de México. México.

Traslosheros, Jorge E.
2002 “Señora de la historia, Madre mestiza, Reina de México. La coronación de la Virgen de
Guadalupe y su actualización como mito fundacional de la patria. 1895”. En: Signos
Históricos, Núm. 7, Enero – Junio. México. Pp. 105 – 107.

Torres, Lourdes de Urrutia y González Olnedo, Graciela.


2003 “Concepto y estructura del método científico” En: Metodología de la Investigación Social I.
Selección de Lecturas. Ed. Félix Varela. Cuba. Pp. 163 – 178.

Turner, Bryan S.
1983 La religión y la teoría social. Una perspectiva materialista. Ed. Sociología, Fondo de Cultura
Económica. México.

Turner, Víctor.
1988 El Proceso ritual. Ed. Taurus. España.

Turner, Víctor.
2009 El centro está afuera: la jornada del peregrino (Trad.) Cuéllar Gempeler Mónica, en:
Maguaré. No. 23. Universidad Nacional de Colombia. Colombia. P.p. 15 – 64.

Valtierra Zamudio, Jorge.


2012 “En busca de la Iglesia autóctona: la nueva pastoral indígena en las cañadas tojolabales”.
En: Liminar. Estudios Sociales y Humanísticos, Vol. X, Núm. 2, Julio – diciembre. Centro
de Estudios Superiores de México y Centro América. México. Pp. 74 – 89.

Van Gennep, Ardold.


2008 Los ritos de paso. Editorial el libro de bolsillo Antropología Alianza. España.

337
Várguez Pasos, Luis A.
2008. “El Movimiento de renovación carismática en el espíritu santo y el magisterio de la
iglesia católica. De la sospecha a la aceptación”. En: Sociedad y Religión: Sociología,
Antropología e Historia de la Religión en el Cono Sur, Vol. XX, Núm. 30 – 31. Argentina. Pp.
7 – 30.

Vázquez Estrada Alejandro.


2010 “Territorio e identidad étnica. La peregrinación al Divino Salvador”. En: Santuarios y
Peregrinaciones. México. Pp. 157 – 182.

Viqueira, Juan Pedro.


2009 “Cuando no florecen las ciudades: La urbanización tardía e insuficiente de Chiapas” En:
C. Lira Vásquez y A. Rodríguez Kuri, (Coord). Ciudades mexicanas del siglo XX. Siete
estudios históricos. El Colegio de México / Universidad Autónoma Metropolitana –
Azcapotzalco/ Consejo de Ciencia y Tecnología. México. Pp. 59 – 178.

Weber, Max.
2010 Sociología de la religión. Ed. Colofón. México.

Zielina, María.
2013 “El espacio socio – religioso del Santuario Nacional de San Lázaro y sus actores:
herencia, identidad y turismo”. En: Martínez Cárdenas, Rogelio. (Coordinador)
Santuarios, fiestas patronales, peregrinaciones y turismo religioso http://www.eumed.net/libros
gratis/2013/1281/index.htm. México. Pp. 30 – 55.

Zerón – Medina, Fausto.


1995 Felicidad de México. Centenario de la coronación de María Señora de Guadalupe. Clío. México.

Documentos
Tema para Antorchistas. Misión de Guadalupe. Diciembre 2012 (PDF)

Pio XI, Encíclica Ubi Arcano De Concilio, Para Nuestro Venerables Hermanos los
Patriarcas, Primates, Arzobispos, Obispos. Y al Ordinario Teniendo paz y
comunión. Con la Sede Apostólica: La Pregunta Del Romano 23 de Diciembre de
1922. http://w2.vatican.va/content/pius-xi/it/encyclicals/documents/hf_p-
xi_enc_19221223_ubi-arcano-dei-consilio.html (31/07/2017).

Papa XI, Carta Apostólica Paterna Sane Sollicitudo. 5 de


Septiembre1924.https://w2.vatican.va/content/piusi/la/apost_letters/documents/hf_
p-xi_apl_19260202_paterna-sane- sollicitudo.html (28/11/2017).

“Qué es la Renovación Carismática Católica”. En: Renovar La Renovación Carismática Católica.


Cap. 1: http://www.mg.org.mx/biblioteca/A/41.pdf
338
AHDSC - Archivo Histórico Diocesano de San Cristóbal de Las Casas.
Barrio de Guadalupe, S.C.L.C.
Fondo Cura de El Sagrario relacionado a la asociación de Acción Católica

AHE – Archivo Histórico del Estado, resguardado en la Universidad de Ciencias y Artes de


Chiapas (CUID - UNICACH) Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.04. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 2 de marzo de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5382&archivo=1930No4.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.07. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 20 de abril de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5385&archivo=1930No7.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.10. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 1 de junio de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5387&archivo=1930No10.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.14. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 3 de agosto de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5389&archivo=1930No14.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.16. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 7 de septiembre de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5390&archivo=1930No16.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.18. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 5 de octubre de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5391&archivo=1930No18.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.19. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 19 de octubre de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5392&archivo=1930No19.pdf

339
AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año I, No.22. San Cristóbal de Las Casas,
Chiapas. 12 de diciembre de 1930.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5394&archivo=1930No22.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.27. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 15 de marzo de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5395&archivo=1931No27.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.23. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 26 de abril de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5397&archivo=1931No29.pd
f

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.30. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 3 de mayo de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5399&archivo=1931No30.pd
f

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.31. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 31 de mayo de 1931. .-
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5401&archivo=1931No31.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.32. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 5 de julio de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5403&archivo=1931No32.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.33. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 19 de julio de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5406&archivo=1931No33.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.35. San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas. 16 de Agosto de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5407&archivo=1931No35.pdf

AHE, Col. Hemeroteca Fernando Castañón Gamboa (HFCG) “Boletín La Virgen de Guadalupe.
Órgano del Comité Organizador de la Coronación”. Año II, No.36. San Cristóbal de Las

340
Casas, Chiapas. 6 de septiembre de 1931.
http://cuid.unicach.mx/?clave=hemeroteca&he=1&id=5408&archivo=1931No36.pdf

Links de Fotografías:
Escudo de armas de México
https://www.google.com.mx/search?q=escudo+de+armas+de+mexico&tbm=isch&source=i
u&ictx=1&fir=XqLHSZqinjOceM%253A%252CrTqBFJbnj5g0UM%252C_&usg=AFrqEzd
K-
oqlwUXk_Xt5YknmaY8yuBfTWQ&sa=X&ved=2ahUKEwiEp92V7Y7dAhW5wMQHHY47
A3cQ9QEwBHoECAMQDA&biw=1366&bih=662#imgrc=XqLHSZqinjOceM:

Estandarte de Miguel Hidalgo y Costilla


https://www.google.com.mx/search?q=estandarte+de+hidalgo&tbm=isch&source=iu&ictx=
1&fir=U4XVxziFblLRlM%253A%252Cx1n2t6WUNxSibM%252C_&usg=AFrqEzfSb9hM_B
oxvxF1yNipbk1rywlaKg&sa=X&ved=2ahUKEwii5ryA747dAhWOHnwKHbbbA7EQ9QEw
AXoECAQQBg#imgrc=A5Wg9ymozztE8M:

Escudo de la epidemia
https://www.google.com.mx/imgres?imgurl=https://www.ciberjob.org/etnohistoria/joseibar
ra.jpg&imgrefurl=https://www.ciberjob.org/etnohistoria/peste.htm&h=885&w=600&tbnid=
l4_kDn4Ivmey7M:&q=epidemia+de+1737&tbnh=160&tbnw=108&usg=AFrqEzd23883fdyC
JYiUqjcH-
yVccDV9JQ&vet=12ahUKEwj_382u8Y7dAhUCwMQHHWpEBpQQ_B0wCnoECAoQEw..
i&docid=bUF07JyMjFYIdM&itg=1&sa=X&ved=2ahUKEwj_382u8Y7dAhUCwMQHHWp
EBpQQ_B0wCnoECAoQEw

Cerámica griega
https://www.google.com.mx/search?biw=1366&bih=657&tbm=isch&sa=1&ei=lrKWW8GP
GIa78APq8q8I&q=ceramica+griega+de+corredores&oq=ceramica+griega+de+corredores&
gs_l=img.3...0.0.0.33459.0.0.0.0.0.0.0.0..0.0....0...1c..64.img..0.0.0....0.H_mEPyIxx9U#imgrc=s
MbTuImCNRfe6M:

341

También podría gustarte