FIJA. Guevara Gil, Armando. 2009. Apuntes Sobre El Pluralismo Legal PDF
FIJA. Guevara Gil, Armando. 2009. Apuntes Sobre El Pluralismo Legal PDF
FIJA. Guevara Gil, Armando. 2009. Apuntes Sobre El Pluralismo Legal PDF
DIVERSIDAD
Y COMPLEJIDAD LEGAL
Aproximaciones a la Antropología
e Historia del Derecho
Diversidad y complejidad legal
Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
J. Armando Guevara Gil
© J. Armando Guevara Gil, 2009
De esta edición:
© Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú, 2009
Av. Universitaria 1801, Lima 32, Perú
Teléfono: (51 1) 626-2650
Fax: (51 1) 626-2913
[email protected]
www.pucp.edu.pe/publicaciones
1. Introducción
En 1984, los miembros de la Confederación Sindical Única de Trabajadores
Campesinos de Bolivia (CSUTCB) plantearon una pregunta fundamental: ¿Por
qué se piensa que el derecho romano o el napoleónico están mejor adaptados
a nuestra realidad que nuestra propia experiencia y tradición multicentenaria?1
Esta aguda observación cuestiona de raíz el proyecto de construir estados-nación
latinoamericanos a imagen y semejanza de los idealizados modelos europeos
que establecen cómo deben estar organizadas nuestras sociedades. Trazados y
siguiendo las antiguas fronteras coloniales, a las que se aplicó el principio del uti
possidetis, y fundados bajo los principios liberales de Occidente, los estados-na-
ción latinoamericanos debían realizar una «misión imposible»: crear sociedades
nacionales, integradas y homogéneas a partir de paisajes humanos pluriculturales,
multiétnicos y altamente diferenciados.
Con ese fin, los nuevos estados-nación se embarcaron en proyectos etnocidas,
y a veces abiertamente genocidas, destinados a modernizar, asimilar o incorporar a
sus pueblos al cuerpo de la nación criolla. Se asumió, por ejemplo, que «la mancha
india» o el «problema del indio» iban a ser resueltos con el fomento del mestizaje,
*
Agradecemos a la Escuela de Derecho de la Universidad de Wisconsin, Madison, por haber
financiado nuestra investigación sobre el pluralismo legal. Publicado originalmente en Beyond
Law 5:75-102, julio 1992, revista del Instituto Latinoamericano de Servicios Legales Alternativos,
ILSA, Bogotá. Luego fue traducido del inglés por Silvia Arispe Bazán y Giuliana Bonelli Urquiaga y
publicado en Ius et Veritas, Revista de estudiantes de Derecho de la Pontificia Universidad Católica
del Perú, 19:286-304, 1999.
1
La cuestión se planteó mientras se debatía un Proyecto de Ley de reforma agraria (ver Albó
1987: 55).
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
2
Acrónimo de Miskito, Sumo, Rama y Sandinistas trabajando juntos.
30
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
3
Advierte Stavenhagen que «un burdo análisis de clase de la situación de un país, como los
que hace con frecuencia la izquierda latinoamericana, puede caer en serios problemas si es que
ignora o subestima las cuestiones étnicas involucradas» (1990, 82). Líderes quechuas y aymaras
de los sindicatos y del movimiento indígena en Bolivia han exigido con vehemencia que la iz-
quierda mantenga respeto y apertura mental. Sus demandas son similares a las que hacen otros
líderes étnicos latinoamericanos: «el crimen de la izquierda boliviana con respecto a los indios es
el de dividirlos en clases sociales, sin respetar su condición de pueblo o de nación [...] En Bolivia
tenemos el problema de las grandes nacionalidades aymara, quechua, guaraní [pero] para la gente
de izquierda este problema no existe. No lo perciben. Es uno de sus grandes errores. Los indios
no son una clase social en busca de alianzas o tutores, sino ante todo una nación oprimida con su
propia cultura, un pasado milenario y una alternativa de civilización específica» (en Le Bot 1988,
231, 229; ver Bonfil Batalla 1981, 16-17, 36).
31
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
4
Los reclamos territorialistas con respecto a dónde trazar la línea entre la sociología y la
Antropología del Derecho son irrelevantes. Los argumentos sobre cuál es más importante que la
otra también son inútiles. Aquí nos concentramos en la antropología legal porque, a pesar de ser
«meramente otro nombre para la sociología del derecho», da por sentado «el hecho social de la
heterogeneidad normativa», mientras la sociología del derecho «se desarrolló imbuida de la ideología
del Estado-nación moderno, bajo la noción de que el Estado debe tener y tiene el monopolio de
los asuntos ‘legales’» (Griffiths 1986b, 11, 15, 14).
32
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
5
El profesor Pospisil enseña Derecho y Antropología en la Universidad de Yale y ha realizado
trabajos de campo con los Nunamiut Eskimo de Alaska, los Kapauku Papuans de Nueva Guinea,
los Tiroleses austríacos y los Hopi norteamericanos.
33
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
segmentos tiene una normatividad interna que define temas fundamentales como
la pertenencia, organización y funcionamiento de estos grupos autorregulados.
Si el sistema regulatorio de cualquiera de estos segmentos o subgrupos tiene los
cuatro atributos que caracterizan a un sistema legal (autoridad, sanción, relaciones
obligacionales e intención de aplicación universal), entonces ese ordenamiento
normativo debe ser considerado como Derecho. Rechazando argumentos morales o
jurídicos, Pospisil plantea una posición relativista y por eso asevera que aun el crimen
organizado (las mafias) posee un sistema legal interno pese a su evidente colisión
con el derecho estatal. El derecho no es un monopolio del estado o de la sociedad
como un todo. Él reconoce que siempre existe un centro de poder que en última
instancia hegemoniza a los subcentros, pero esta supremacía, o grado de inclusión, es
constantemente negociada frente a la legitimidad y jurisdicción de los subgrupos.
Así, las sociedades no tienen sistemas legales comprensivos, sino, muy por
el contrario,
[revelan] marcadas diferencias en la actividad judicial y en el control social
informal ejercido por las autoridades de los varios subgrupos. Yo postulo
que cualquier sociedad humana no posee un solo y consistente sistema legal
sino tantos como subgrupos en funcionamiento existen. Inversamente, cada
subgrupo social en funcionamiento regula las relaciones de sus miembros
con su propio sistema legal y este es por necesidad diferente al de los otros
subgrupos (Pospisil 1974, 98-99).
34
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
6
La profesora Moore ostenta grados académicos en Antropología y Derecho. Enseña en la
Universidad de Harvard y ha realizado un prolongado trabajo de campo con los Chaaga del Kili-
manjaro (Tanzania).
7
El artículo «Derecho y cambio social: el espacio social semi-autónomo como objeto apropiado
de estudio» fue publicado en el Law and Society Review, verano 1973, 719-746. Luego incorporó
este artículo como el capítulo 2 de su Law as Process. An Anthropological Approach, 1978. Aquí
empleamos este último texto.
35
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
partes, en sus normas, y en sus normas sobre las normas, más espesa es la capa
de formalismo y representación ideológica que debe ser penetrada para saber
qué es lo está pasando realmente (Moore 1978, 30).
36
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
En tercer lugar, Moore se aparta de Pospisil al precisar que los espacios socia-
les, y no solo las corporaciones o segmentos, son los lugares donde se producen
los procesos de regulación social. Por eso rechaza el rígido concepto que define
a las corporaciones y a las organizaciones formales intermedias como los lugares
donde se formulan y aplican las normas. Al contrario, un espacio social no se
define por sus características formales, sino por los procesos que se llevan a cabo
en su interior.
Los límites y la naturaleza de un espacio social semiautónomo no están defi-
nidos por su organización (puede tratarse de una corporación o no) sino por
una característica procesal, a saber, por el hecho de que puede generar normas
e inducir o forzar a su cumplimiento [...]. La articulación interdependiente de
diversos espacios sociales constituye una característica esencial de las sociedades
complejas (Moore 1978, 57-58).
37
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
38
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
Solo en la medida en que una ley cambia las relaciones entre las personas,
alterando sus mutuos derechos y obligaciones, produce un cambio social [...]
La mayoría de los Chagga vive donde y como vivía antes de 1963. El espacio
social semiautónomo que domina la vida rural de los Chagga se basa en la
compleja relación existente entre el parentesco, expresado en el linaje local, y
la unidad residencial del grupo familiar (Moore 1978, 70).
39
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
8
Griffiths indica que no es una coincidencia que los ejemplos de Moore —la industria de la
moda en Nueva York y las políticas socialistas en Tanzania— hayan sido elaborados a partir de la
dicotomía Estado-sociedad y traten sobre la efectividad de la ley estatal en determinados campos
sociales. Esta «debilidad» se origina en su aproximación al «pluralismo jurídico, fundamentalmente
desde la perspectiva de la ley estatal» y en su falta de atención a las relaciones entre los espacios
sociales semiautónomos no estatales (1986a, 34-35).
9
Este artículo fue escrito en 1981, pero circuló restringidamente como manuscrito. Fue publi-
cado 5 años después, en 1986.
40
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
lientes como etnicidad, religión o nacionalidad y son atribuidos a los grupos por
las autoridades estatales y por las fuerzas dominantes en la sociedad10.
Basado en esta distinción, Griffiths afirma que casi todos los trabajos aca-
démicos —sobre todo los jurídicos— no han sido capaces de ir más allá de la
concepción del pluralismo legal «débil». Lo que sucede es que, cuando un Estado
reconoce la presencia de legalidades diferentes dentro de su dominio, se «añade
una formidable capa de complejidad doctrinaria a la complejidad normalmente
correspondiente a un sistema legal estatal supuestamente uniforme» (Griffiths
1986a, 7). Y es este fenómeno el que atrae la atención de los académicos. Sin
embargo, desde que solo hay una fuente de derecho, esos órdenes normativos
coexistentes están bajo la égida del Estado. Al final, cooptados como están, con-
figuran un caso más de pluralismo legal «débil» que no debería ser considerado
emancipatorio o radicalmente diferente del centralismo legal.
Sería una confusión total pensar que «el pluralismo legal» en su sentido débil
es fundamentalmente inconsistente con la ideología del centralismo legal. Al
contrario, es la mera configuración particular de un sistema cuyo cimiento
ideológico sigue siendo centralista. La propia noción de «reconocimiento»
y toda la parafernalia doctrinaria que trae consigo son reflejos típicos de la
idea de que «la ley» debe depender, en última instancia, de una sola fuente de
validación [...] Esta es, ciertamente, en términos de esa ideología, una forma
inferior de derecho, una adaptación necesaria a una situación social percibida
como problemática (Griffiths 1986a, 8).
10
«Dentro de semejante sistema jurídico pluralista “débil”, los regímenes legales paralelos, de-
pendientes del derecho estatal que los controla y engloba, resultan del «reconocimiento» que hace
el Estado del supuestamente pre-existente “derecho consuetudinario” de los grupos involucrados»
(Griffiths 1986a, 5).
41
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
11
Respondiendo a un crítico que cuestiona el uso de «derecho» como el grado de especialización
presente en todas las formas de control social, Griffiths afirma que el término se encuentra dema-
siado contaminado y que «deberíamos abandonarlo de una vez por todas y hablar solo de formas
más o menos especializadas de control social» (1986a, 50, nota 41).
42
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
43
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
12
Dar una definición del «sentido común» —o «el caletre» de Sancho Panza— es sin duda una tarea
difícil. El antropólogo Clifford Geertz asevera que el «sentido común» configura un sistema cultural
con no menos consistencia y racionalidad que otros campos más autodefinidos del conocimiento
humano (por ejemplo, derecho, ciencia, filosofía). Sus elementos se encuentran vagamente integrados
y su autoridad descansa en la convicción de quienes poseen y comparten sus valores y validez. Además,
«se fundamenta en la explicación inmediata de la experiencia y no en sesudas reflexiones sobre esta»
(1983 [1975], 75). El sentido común es eminentemente práctico, natural y mundano.
13
En este artículo el autor no trata específicamente qué es el derecho. Esto lo hace en Santos
1985.
44
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
45
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
derecho y los hechos. Las representaciones geocéntricas destacan características objetivas y genera-
lizables (formalización de las relaciones sociales, burocratización de las relaciones Estado-sociedad,
universalidad de la ley) (Santos 1987, 285, 291).
17
Estos nuevos desarrollos legales dentro de la economía transnacional son particularistas y
contractualistas porque «cada empresa multinacional o asociación económica internacional tiene
su propia cualidad legal personal y lleva su derecho adonde vaya». Como tal, el derecho supraestatal
de las empresas transnacionales es un megacaso de pluralismo legal (Santos 1987, 294, 287).
46
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
47
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
18
Por ejemplo, afirman que en su libro «ningún autor usa el término ‘pluralismo legal’ o ‘siste-
ma legal dual’ cuando analizan sistemas legales complejos» (1989, 9). Pero, como van den Bergh
(1989) anota, estos conceptos son empleados por lo menos en tres contribuciones (por ejemplo,
la de Cohn sobre el derecho y el Estado colonial en la India). Además, el trabajo de Sally F. Moore
se basa en el concepto de «los campos sociales semiautónomos» para estudiar las transformaciones
del «derecho consuetudinario» en Tanzania. Como Moore enfatiza: «La propia idea de ‘derecho
consuetudinario’ implica que hay una forma distinta de derecho con la que puede ser contrastado;
por eso el concepto mismo es el progresivo producto de los choques entre las entidades políticas
locales y las más amplias y dominantes» (1989, 299-300). Por si esto no fuera suficiente para
convencer a las editoras de la utilidad del concepto que tan duramente critican, Moore claramente
categoriza su caso como uno en el que ‘un orden legal dual’ es fruto del proceso político nacional
y local: «Diversos gobiernos y muchas generaciones de pobladores rurales han colaborado, por
distintas razones, en la formación de la dualidad legal originada por la separación entre el Estado
central y los pueblos subordinados» (Moore 1989, 300).
19
Según Merry, el pluralismo legal clásico se dedicó al análisis de las relaciones entre los sistemas
legales indígenas y occidentales en contextos coloniales. Se enfatizó el dualismo al concebir a «los
órdenes normativos como paralelos pero autónomos». Desde fines de los años setenta, cuando los
48
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
investigadores aplicaron «el concepto del pluralismo legal a sociedades no coloniales, particu-
larmente a los países industrializados europeos y los Estados Unidos», una ‘nueva’ versión del
pluralismo legal comenzó a tomar forma (1988, 879, 872). Cabe mencionar que la clasificación
de Merry es cuestionada por Franz von Benda-Beckmann como «artificial y engañosa» porque
sería mejor «hablar del descubrimiento temprano y tardío de los ordenamientos normativos plu-
rales» (1988, 900).
20
El nuevo pluralismo legal «se basa en el rico trabajo teórico y etnográfico realizado por el
pluralismo legal clásico» y se fundamenta en por lo menos tres de sus significativas contribuciones:
enfocarse en la interacción entre ordenamientos normativos que pueden tener diferentes estructuras
conceptuales subyacentes, enfatizar la naturaleza histórica del ‘derecho consuetudinario’ y analizar
la relación dialéctica entre los múltiples ordenamientos normativos (Merry 1988, 873).
49
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
21
Sin embargo, la influyente contribución de Hernando de Soto recae en la ideología del ‘derecho
y desarrollo’ (a su vez basada en la teoría de la modernización) de los años sesenta y comienzos de
los setentas cuando enfrenta la cuestión del cambio social y legal y cuando se pregunta cómo pro-
ducirlos (2000, 233-237, 304-307). Para referencias adicionales sobre el movimiento del derecho
y desarrollo, ver Trubek and Galanter (1974), Griffiths (1986b, 40) y Zorn (1990, 284-286).
22
Para de Soto, la informalidad es una práctica cotidiana especialmente para los millones de
migrantes «que se vuelven informales» y para los pobres urbanos que tienen que usar medios ilegales
para satisfacer necesidades y objetivos definidos como esencialmente legales (por ejemplo, construir
una casa, vender ambulatoriamente). La informalidad se produce cuando los costos de obedecer
la ley exceden los beneficios de su cumplimiento, cuando el derecho oficial exige a la gente más de
lo socialmente aceptado, y cuando el Estado no tiene los medios para imponer su normatividad
(2000, 12).
23
En contraste al caso de Lima, donde ‘las organizaciones informales’ (junta vecinal, asamblea
general) ejercen jurisdicción ‘civil’ y ‘criminal’, en Río de Janeiro Santos encontró que la asociación
de residentes de Pasargada ejercía jurisdicción solamente en cuestiones de vivienda y terrenos.
No ejercía jurisdicción sobre asuntos ‘criminales’ porque eso «la hubiera expuesto a las acciones
arbitrarias de un Estado autoritario y quizás le hubiera costado la ilegalidad» (Santos 1977, 42; de
Soto 2000, 30-31).
24
De Soto 2000, 29-30. En su investigación sobre los barrios de Caracas, Pérez Perdomo y Nikken
también identificaron «un ordenamiento oficial informal» sancionado por las autoridades estatales
locales pese a que los procedimientos y la sustancia contravenían leyes vigentes (1979, 80-86).
50
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
que generan los informales para normar y ordenar su vida y sus transacciones,
y en esa medida tiene vigencia social (de Soto 2000, 19).
25
«Para vender [...] los informales recurren a la argucia de declarar que están traspasando las
edificaciones pero no el terreno, ocultando así la verdadera compraventa de la propiedad entera,
pues la tierra es legalmente ajena mientras que la propiedad de las construcciones no está cues-
tionada» (de Soto 2000, 25).
51
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
26
«Los campesinos queremos el desarrollo económico, pero partiendo de nuestros propios valores
[...] Tememos a ese falso “desarrollismo” que se importa desde fuera porque es ficticio y no respeta
nuestros profundos valores. Queremos que se superen trasnochados paternalismos y que se deje
de considerarnos como ciudadanos de segunda clase. Somos extranjeros en nuestro propio país»
(Barbados II, 1979, 108).
52
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
27
En virtud de este derecho, todos los pueblos tienen el derecho «a determinar libremente su
status político y alcanzar libremente su desarrollo económico, social y cultural» (Declaración de
las Naciones Unidas sobre la Independencia de Naciones y Pueblos Colonizados; citada en Sta-
venhagen 1990, 65). La autodeterminación no necesariamente significa la secesión o la creación
de un Estado independiente. «Puede ser interna o externa y sus componentes van desde la simple
autoidentificación en un extremo hasta el autogobierno pleno en el otro» (Stavenhagen 1990,
69).
28
Un reporte de las Naciones Unidas de 1987 recomienda que «en las sociedades multi-étnicas,
la acción del gobierno debe basarse siempre en criterios que, por lo menos en principio, afirmen
la igualdad de los derechos culturales de los distintos grupos étnicos. El Estado tiene la obligación
evidente de formular e implementar una política cultural que, entre otras cosas, cree las condicio-
nes necesarias para la coexistencia y el desarrollo armónico de los diversos grupos que viven en su
territorio» (Stanvenhagen 1990, 91).
53
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
29
Seguimos la clasificación de Jacques (1986) sobre los servicios legales en América Latina.
30
La posición de Iturralde merece ser citada en extenso: «Comprendo que a este planteamiento de
los movimientos indios [en su disputa por el derecho al derecho] se le pueden oponer innumerables
objeciones de doctrina y técnica jurídicas. Comprendo también que, tal como se ha expresado
hasta ahora, prefigura una utopía de muy difícil ejecución. Propongo entenderla fundamentalmente
como un recurso para organizar una lucha de supervivencia cultural, que ataca uno de los pilares
sobre los que se construye el sistema de dominación: el derecho; y que, si bien no conducirá a
la legitimación y al pleno ejercicio del derecho consuetudinario indígena, sí puede contribuir al
surgimiento de una nueva constitucionalidad, más justa [...] que arranque del reconocimiento de
la diversidad étnica y cultural» (1990, 52, 61, nota 8).
54
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
31
«El problema indígena no es sino el reflejo de la incompatibilidad estructural entre la sociedad
y el Estado. En América la estructura estatal se basa, históricamente, en el supuesto jurídico de una
sociedad nacional con una identidad homogénea. Tal supuesto se opone a la realidad pluricultural,
plurilingüe y multi-étnica de los pueblos [...] De aquí deriva la convicción de que la solución de-
finitiva de los problemas indígenas no podrá lograrse sino mediante una reforma del Estado que,
en algunas casos, deberá ser sustantiva» (Instituto Indigenista Interamericano, 1991, 115-116).
32
Es importante enfatizar que el derecho estatal también es plural: «En vez de explicar por
qué el derecho de los libros y el derecho en acción difieren según la teoría del divorcio derecho-
sociedad, podríamos tratar de comprender esta bien documentada característica de la vida legal
como la vigencia de ordenamientos legales plurales dentro de las cortes, la estación de policía o la
agencia burocrática. Estas se encuentran organizadas bajo diversos estándares, como pueden ser el
de la justicia comunal, el de la legalidad o el de las pautas culturales de los grupos que detentan el
poder» (Merry 1988, 890).
55
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
Por eso, más allá de su utilidad analítica, el pluralismo legal también puede ser
empleado para replantear nuestras agendas políticas. ¿Tendremos la capacidad de
forjar nuevos contratos sociales verdaderamente amplios e inclusivos? ¿Podremos
diseñar acuerdos políticos multiculturales y democráticos? Para responder a estas
preguntas y construir alternativas viables para superar la menguada instituciona-
lidad de los estados-nación, la perspectiva del pluralismo legal ofrece, realmente,
un cambio paradigmático.
Bibliografía
56
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
57
Diversidad y complejidad legal. Aproximaciones a la Antropología e Historia del Derecho
Nations. Processes of Interethnic Relations in Latin America, Southeast Asia, and the Pacific.
Houston: Rothko Chapel, pp. 107-153.
Maybury-Lewis, David (1991). Becoming Indian in Lowland SouthAmerica. En: G.
Urban and J. Sherzer (eds.) Nation-States and Indians in Latin America. Austin: University
of Texas Press, pp. 207-235.
Menezes, Claudia (1989). Estados y minorías étnicas indígenas en Brasil. América Indígena
49 (1): 153-170, México D.F.
Merry, Sally Ingle (1988). Legal Pluralism. Law and Society Review 22 (5): 869-896.
Moore, Sally Falk (1978). Law as Process. An Anthropological Approach. Boston: Routledge
& Kegan Paul.
Moore, Sally Falk (1989). History and the Redefinition of Custom on Kilimanjaro. En: J.
Starr and J. Collier (eds.) History and Power in the Study of Law. New Directions in Legal
Anthropology. New York: Cornell University Press, Ithaca, pp. 277-301.
O’Connor, Richard (1981). Law as Indigenous Social Theory: A Siamese Thai Case.
American Ethnologist 8 (2): 223-237.
Orlove, Benjamin (1991). Mapping Reeds and Reading Maps: The Politics of Representa-
tion in Lake Titicaca. American Ethnologist 18 (1): 3-38.
Pérez Perdomo, Rogelio y P. Nikken (1979). Derecho y propiedad de la vivienda en los barrios
de Caracas. Caracas: Universidad Central de Venezuela-Fondo de Cultura Económica.
Platt, Tristan (1984). Liberalism and Ethnocide in the Southern Andes. History Workshop
Journal (17): 3-18. London.
Pospisil, Leopold (1974) [1971]. Anthropology of Law. A Comparative Theory. New Haven:
Harper and Row Publishers Inc.
Pressburger, Miguel (1990). Derecho insurgente: El Derecho de los oprimidos. El otro
Derecho (6): 15-21. Bogotá: Témis-ILSA.
Santos, Boaventura de Sousa (1977). The Law of the Oppressed: The Construction and
Reproduction of Legality in Pasargada. Law and Society Review 12 (1): 5-126.
Santos, Boaventura de Sousa (1985). On Modes of Production of Social Power and Law.
International Journal of Sociology of Law (13): 299-336.
Santos, Boaventura de Sousa (1987). Law: A Map of Misreading. Toward a Postmodern
Conception of Law. Journal of Law and Society 14 (3): 279-302.
Sills, Marc (1989). Etnocidio: Un análisis de interacción Estado-nación. América Indígena
49 (1): 57-76. México D.F.
Soto, Hernando de (2000) [1986]. El otro Sendero. La Revolución Informal. Lima: Instituto
Libertad y Democracia.
Starr, June and Jane Collier (eds.) (1989). Introduction: Dialogues in Legal Anthropology.
En: History and Power in the Study of Law. New Directions in Legal Anthropology. New
York: Cornell University Press, Ithaca, pp. 1-28.
58
Capítulo I: Apuntes sobre el pluralismo legal
59