Alonso Andrea de Ledesma Un Anciano Flaco y de Barba Blanca
Alonso Andrea de Ledesma Un Anciano Flaco y de Barba Blanca
Alonso Andrea de Ledesma Un Anciano Flaco y de Barba Blanca
En el año 1595 el corsario inglés Amyas Preston decide saquear Caracas con una flota de
seis barcos y 500 hombres.
Al ser avistados por los centinelas de la ciudad, un ejército de 800 hombres, comandados por
Garci González de Silva se aprestan a defenderla, situandose en el Camino de los
Españoles, sendero que une el valle de Caracas con el mar. Pero dejando Caracas
desguarnecida.
Preston tomó a Caracas por sorpresa, ya que un español de nombre Villapando guió a los
piratas por un camino hecho por los indígenas. Al llegar a la cumbre, Preston hizo colgar de
un árbol a Villapando, según nos lo relata el historiador Walter Dupouy.
Al llegar a Caracas, que había sido abandonada por sus habitantes, los piratas de
asombraron al ver que un solitario jinete, armado con una lanza y escudo oxidados, Yelmo
desvencijado y montado en un jamelgo que a duras penas trotaba, los atacaba
amenazandolos de muerte. Preston, admirado, trato de disuadirlo de una pelea tan desigual.
Pero como este no desistiera en su ataque, ordenó dispararle y cayó muerto de un tiro de
arcabuz en el pecho.
Al acercarse descubrieron con estupor, que era un anciano flaco y de barba blanca. Era
Alonso Andrea de Ledesma.
Este personaje fue uno del centenar de españoles que junto a Diego de Losada, fundó en
1567 a Santiago de León de Caracas. Ciudad dónde vivió los 28 años restantes de su vida. Y
dónde ejerció los cargos de Alcalde, Regidor y Alguacil Mayor.
La historia ha llamado a Don Alonso Andrea de Ledesma, por su acto heroico: "El Primer
Defensor de Caracas"
A juicio del historiador Eduardo Casanova, existe la posibilidad de que Miguel de Cervantes
haya conocido está historia, y quedado fascinado con su excéntrico protagonista...
Diez años después, en 1605, el escritor publicaba "El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La
Mancha"...
La gráfica nos muestra una alegoría de Don Alonso Andrea de Ledesma. El Quijote
Venezolano.
Este último, natural de Baracaldo, «uno de los soldados de más consideración que llevaba en
su campo el General Diego de Losada», fue el encargado de diseñar la primitiva ciudad, de
medir las tierras y las vegas del río y sus contornos, para su reparto entre los poblado res.
Tuvo también otras notables acciones de armas con posterioridad, y llegó a Contador de la
Real Hacienda.
Sancho del Villar formó parte del sexteto de primeros regidores del cabildo caraqueño.
Vicente Amézaga aventura que sería del linaje de los Villar de Oñate.