Tema 1 Claculo Vecto
Tema 1 Claculo Vecto
Tema 1 Claculo Vecto
Primeras nociones
Topología del espacio euclídeo Limites y Continuidad Derivación
Teorema de la función inversa Ejercicios resueltos
Ejercicios propuestos
1.1Primeras nociones
f: D ⊂ Rn −→ Rm
X = (x1, . . . , xn) −→ f (X ) = ( f1(x1, . . . , xn), . . . , fm(x1, . . . , xn)),
fi : D ⊂ Rn → R
V : D −→R
(x, y) −→V (x, y) = πx2y.
2. La función
f : [0, 2π] −→ R2
t −→ f (t) = (cost, sent),
asocia a cada punto t ∈ [0, 2π] un punto sobre la circunferencia de centro (0,
0) y radio 1.
3. Sea f : D ⊂ R3 → R2 definida por
. Σ
4. Sea f : R2 → R3 definida por f (x, y) = (x2, y2, x−2 y2). Las tres
componentes de f vienen dadas por:
Por esta razón, a las n-uplas X = (x1, · · · , xn) ∈ Rn se les denomina vectores.
i) Si m = 1 se dice que la función f : D ⊆ Rn −→ R es una función real o
campo escalar de n-variables.
ii) Si m > 1 se dice que la función f : D ⊆ Rn −→ Rm es una función vectorial
o campo vectorial de n-variables y m-componentes.
donde cada fi : D ⊂ R −→ R, i = 1, . . . , m.
0.8
0.6
0.4
0.2
–1.0 –0.5 0.5 1.0
Los dominios más usuales de las funciones de una variable suelen ser los
intervalos, abiertos o cerrados, propios o impropios. Trataremos de extender estos
conceptos a otros equivalentes para las funciones de varias variables. Para ello
dedicaremos la primera parte de este capítulo a dar una breve iniciación a la
topología de Rn ya que necesitamos encontrar unos subconjuntos de Rn con las
mismas propiedades universales que dichos intervalos.
En la recta real la función valor absoluto nos permite medir la distancia entre dos
puntos x, y ∈ R, definiendo
De la primera podemos despejar "X − Y " ≥ "X " − "Y " y de.la segunda "X − Y
" ≥ "Y " − "X ". Deducimos que "X − Y " será mayor o igual.. que "X " −. "Y " ,
como queríamos probar. Q
Observaciones 1.2.7
1. Como d (X0, X0) = 0 resulta evidente que X0 ∈ Br(X0), ∀r > 0.
2. La bola abierta Br(X0) siempre está contenida en la bola cerrada
Br(X0). 3.Para n = 1, Br(x0) = (x0 − r, x0 + r) y Br(x0) = [x0 − r, x0 +
r].
4. Para n = 2, Br(X0) es el interior del círculo de centro el punto X0 y
radio r, mientras que Br(X0) también incluye a la circunferencia.
5. Para n = 3, Br(X0) es el interior de la esfera de centro el punto X0 y
radio r, mientras que Br(X0) también incluye a dicha esfera.
De igual forma, para n = 3, la ecuación de una esfera de centro X0 = (x0, y0, z0)
y radio r vendrá dada por
Ac = {X ∈ Rn : X ƒ∈ A},
es decir, Ac está formado por todos los puntos que no pertenecen al conjunto A.
⊂ A Rn se dice que es
Definición 1.2.13 (Conjunto abierto) Un conjunto
abierto si no contiene puntos de su frontera, es decir,
def
A es abierto
⇐ A ∩ Fr(A) = 0/ .
⇒
Observaciones 1.2.14
1. Si un conjunto A no es abierto será porque contiene puntos de su frontera.
Si quitamos estos puntos obtendremos un subconjunto de A que
llamaremos interior de A. Lo notaremos por int(A), es decir
int(A) = A \ Fr(A).
A es abierto ⇔ int(A) = A.
□ Ejemplos 1.2.15
1. Si tomamos A = [0, 2) ⊂R, entonces sabemos que Fr(A) = {0, 2 }. Por tanto,
A no es un conjunto abierto porque contiene puntos de la frontera (ya que
2 ∈ A ∩ Fr(A)). Si le quitamos a A los puntos que están en la frontera
obtenemos,
int(A) = A \ Fr(A) = (0, 2).
2. Si A = {(x, y) ∈ R2 : x2 + y2 ≤
: x2 + y2 = 1}.
1
x+ y= 1
x+ y< 1
–2 –1 1 2
–1
Fr(A) = {(x, y) ∈ R2 : x = 0}
def
A es cerrado
⇐ Fr(A) ⊆ A.
⇒
Observaciones 1.2.17
1. Si un conjunto A no es cerrado será porque no contiene todos los puntos
de su frontera. Si le añadimos los puntos de la frontera que no están en A
obtendremos un conjunto que contiene a A y que llamaremos adherencia
o cierre de A. Lo notaremos por A, es decir
A = A ∪ Fr(A).
A es cerrado ⇔ A = A.
A = A.
□ Ejemplos 1.2.18
2. Si A = {(x, y) ∈ R2 : x2 + y2 ≤
1}, entonces Fr(A) = {(x, y) ∈ R2
: x2 + y2 = 1}.
Por tanto, A es un conjunto cerrado, ya que Fr(A) ⊂ A. En este caso,
A = A.
r2}.
y = x2},
A = A ∪ Fr(A) = {(x, y) ∈ R2 : x ∈ R, y ≥ x2},
Observaciones 1.2.20
1. De la propiedad ii.a) se deduce que si A y B son conjuntos abiertos,
entonces
∩ A B es también un conjunto abierto. En efecto, si A y B son
abiertos, entonces int(A) = A e int(B) = B. Por tanto,
ii.a)
int(A ∩ B) = int(A) ∩ int(B) = A ∩ B,
r′
r
X
X0
no es abierto. Q
Observaciones 1.2.23
1. Informalmente, en el caso n = 2 o n = 3, podemos decir que un
conjunto A es conexo si, dados dos puntos cualesquiera de A, los
podemos unir mediante un trazo continuo sin salirnos de A.
2. Un caso particular de conjuntos conexos por arcos son los conjuntos
conve- xos. “Un conjunto A ⊆ Rn se dice convexo si dados dos puntos
cualesquiera X ,Y ∈ A, el segmento que los une está incluido en A”.
Observemos que, para un conjunto convexo ⊂ A Rn y puntos X ,Y∈ A,
podemos considerar la función continua f (t) =−(1 t)X +tY , con
∈ t [0,
1], que cumple f (0) = X y f (1) = Y . Esto nos dice que A es conexo
por arcos.
f (t)
0 t 1
1.3Limites y Continuidad
Se denota por
l´ım f (x) = L.
x→x0
x∈A
"L − Lj" ≤ "L − f (X )" +" f (X ) − 2Lj" < 1 "L −2 Lj" + 1 "L − Lj" = "L − Lj",
para cualquier X ∈D tal que " X − X0 "< δ jj. Esto nos da una
contradicción, que proviene de haber supuesto que existen dos límites
distintos.
Observaciones 1.3.3
1. Acabamos de ver que el límite, si existe, es único. Por tanto, suele usarse
la siguiente notación para hacer referencia a él:
entendiendo que los puntos X que tomamos tienen que estar en el dominio
de la función f .
2. En la definición de límite, f puede estar definida en el punto X0 o no,
aunque en este último caso X0 debe estar en la frontera de D.
3. Las propiedades del cálculo de límites de una variable pueden también
extenderse a funciones de varias variables.
n
4. Si f1, f2, . . . , fm son las funciones componentes de f : U R⊂ Rm,→el límite
de f cuando X tiende a X0 existe si, y sólo si, existe el límite de cada una
de las componentes de f , en cuyo caso
. fm(X )Σ .
l´ım f (X ) = l´ım f1(X ), l´ım f2(X ), . . . , l
X →X0 X →X0 X →X0 ´ım
X →X0
l´ım
(x,y,z)→(1,2,3) f (x, y, z).
S OLUCIÓN :l ´ım
(x,y,z)→(1,2,3) f (x, y, z) = 12 + 22 + 32 = 14. Q
l´ım
(x,y)→(0,1) f (x, y).
Por tanto,
f (x, y) = . l´ım cos xΣ
(x,y ,
l´ım x2 , l´ım y2, l´ım
(x,y)→(0,1) 1) (x,y)→(0,1) (x,y)→(0,1)
)→(0
= (0, 1, 1). Q
l´ım
X →X0 f (X ),
es observar qué pasa con f (X ) cuando tomamos puntos X ∈ D muy próximos a X0.
En el caso de funciones de una variable esta operación se simplifica bastante ya
que para tomar valores próximos a un punto x0 ∈ R sólo tenemos dos opciones:
1) Tomar un valor de x muy próximo a x0 con x > x0 (se dice entonces que
nos acercamos a x0 por la derecha y se escribe0x → x+).
2) Tomar un valor de x muy próximo a x0 con x < x0 (se dice entonces
que nos acercamos a x0 por la izquierda y se escribe x → x0− ).
Además sabemos que si ambos límites laterales existen, entonces
l´ım f (x) = L ⇔ l
´ım f (x) = l f (x) = L.
´ım
x→x0 x→x0+ x→x0−
Es decir, en el caso de que los límites laterales existan pero sean distintos se
concluye que no existe el límite de la función.
En cambio, si queremos tomar puntos X = (x, y) ∈ R2 muy próximos al punto
X0 = (x0, y0)∈ R2, tenemos una infinidad de formas distintas de poder hacerlo.
Parece razonable pensar, al igual que ocurría con las funciones de una variable con
los límites laterales, que si existe el límite
l´ım
X →X0 f (X )
este sea independiente de la forma en que nos acerquemos al punto X0.
Problema 1.3.5 ¿Existe l
´ım
x2 2
2+y?
(x,y)→(0,0) x
De igual forma, podemos acercarnos al (0, 0) tomando puntos de la forma (0, y) con
y → 0. En este caso, se obtiene
x 0
l´ım 2 l´ım 0
2 2
= → 2= .
(x,y)→ (0,0) x + y y0y
x=0
x
Por tanto, concluimos que no existe l´ım 2 . Q
2 2
(x,y)→(0,0) x +y
Esta técnica de acercarnos a X0 por direcciones distintas puede ser útil para
demostrar que no existe el límite. Sin embargo, no lo es tanto a la hora de
probar que existe. El siguiente ejemplo nos muestra un caso en el que al
acercarnos al origen tomando puntos sobre los dos ejes coordenados se obtiene
el mismo resultado pero al hacerlo tomando puntos sobre la recta y = x éste es
distinto.
Problema 1.3.6 Estudiar la existencia del límite l´ım(x,y)→(0,0) f (x, y), siendo
. Σ2
x2 − y2
f (x, y) .
= x2 +
y2
S OLUCIÓN : El dominio de f (x, y) es R2 \ {(0, 0)}. Si escogemos puntos sobre los
dos ejes coordenados para aproximarnos al punto (0, 0) tenemos
. 2 Σ2
x − y2 . 2 Σ2
x
→
l´ım = l´ım = 1,
(x,y) (0,0)x2 + x→0 x2
y=0 2
. 2y Σ2
x − y2 . Σ2
−y2
→
l´ım = l´ım = 1.
(x,y) (0,0) x2 + y→0 y2
x=0
y2
Sin embargo, si nos acercamos al (0, 0) tomando puntos de la forma (x, x) con x→ 0,
se obtiene
. 2 Σ2
x − y2 . Σ2
0
→
l´ım =l = 0.
(x,y) (0,0) x2 + ´ım 2x2
y=x
y2 x→0
l´ım
(x,y)→(x0,y0) f (x, y).
Una forma fácil de acercarnos al punto (x0, y0) es tomar puntos situados sobre
−
rectas de la forma y = y0 + m(x x0), siempre que dichas rectas estén contenidas
en el dominio de la función f para valores de x próximos a x0. Al límite
l´ım
(x,y)→(x0,y0) f (x, y) = L,
entonces todos los límites direccionales deben tener el mismo valor L. Este resulta-
do puede servirnos para decidir la NO existencia de límite pero, como se pone de
manifiesto en el siguiente ejemplo, el hecho de que todos los límites direccionales
coincidan tampoco es una garantía de que el límite exista.
Problemas 1.3.7
1. Decidir sobre la existencia de l
´ım x −y
.
x+y
(x,y)→(0,0)
x−y
S OLUCIÓN :El dominio de la función f (x, y) = x+ es el conjunto
y
. Σ
D = R \ (x, y) ∈ R2 : x + y ƒ= 0 ,
2
l´ım x−y x − mx 1 − m
x+ = l´ım = .
(x,y)→
(0,0) x→0 x + 1+m
y mx
y=mx
Dado que todos los límites direccionales coinciden podría pensarse que existe
el límite de la función. Sin embargo, si nos acercamos al punto (0, 0) tomando
puntos situados sobre la parábola y = x2, se obtiene
x y x 1
l´ım 2 l´ım 4
4 2
= = ,
(x,y)→ (0,0) x + y x→0 x4 + x4 2
y=x2
x2y
lo que nos lleva de nuevo a asegurar que no existe l . Q
´ım
(x,y)→(0,0) x4+y2
γ(t)
−1 0 1
γ^(t)
Figura 1.6: Límite según dos trayectorias que pasan por el punto (1, 0).
De igual forma, podemos considerar la curva γ(t) = (1 + t,t) con t ∈ [−1, 0]. Nue-
^ ()=^^vamente
(,) se tiene que γ 0 1 0 y su gráfica, Γ, es un
en D para valores de t próximos a 0 (ver figura 1.6). En este caso, se tiene que
segmento de recta contenido
t 1
l´ım f (x, y) = l´ım f (1 + t,t) = l´ım = .
(x,y)→(1,0) t→0 t→0 2t 2
(x,y)∈Γ^
Como hemos encontrado dos trayectorias para las cuales se obtienen límites
distintos concluimos, nuevamente, que no existe el límite de la función f en el
punto (1, 0). □
Llegados a este punto cabe preguntarse: ¿existe alguna forma de asegurar cuándo
existe el
l´ım
(x,y)→(x0,y0) f (x, y) ?
+ Si al considerar diferentes trayectorias que pasan por el punto (x0, y0), por
ejemplo rectas, parábolas, curvas en general, etc., obtenemos siempre el
mismo valor del límite, digamos L, podemos “sospechar” que dicho límite
existe y vale L. En este caso, la forma de estar seguro sería aplicar la
definición 1.3.2 (lo cual no resulta aconsejable).
. x = x0 + ρ cos
θ, θ ∈ [0, 2π],
y = y0 + ρ sen
θ,
tal y como se muestra en la figura 1.7. De las ecuaciones anteriores se deduce que
ρ = .(x − x0 )2 + (y − y0 )2 ,
Θ
y0
x0 x
= y = y0 + ρ sen
θ
donde F(ρ, θ ) = f (x0 +ρ cos θ , y0 +ρ sen θ ) es la función obtenida al
hacer el cambio de variable en la función f (x, y).
+ Para un valor fijo del ángulo θ ∈[0, 2π], el límite (1.3) es equivalente a
calcular el límite direccional siguiendo la recta y = y0 +−m(x x0) con m =
tg θ . Observemos que en el caso 2
θ = ± π se sigue la recta vertical x =
x0.
Esto significa que el valor del límite depende de la dirección con la que nos
acerque- mos al punto (x0, y0). Concluimos, por tanto, que no existe
l´ım
(x,y)→(x0,y0) f (x, y).
Problema 1.3.10 Mediante un cambio a coordenadas polares, estudiar la existencia
de l´ım +
(x,y)→(0,0)
y
S OLUCIÓN : xy
Σ
(x,y)→(0,0) x2 + y2 x = ρ cos θ ρ 2 cos θ sen
= l´ım l´ım cos θ sen θ
.
x2xy 2 . Σ
θ
y = ρ sen =
ρ→0 =
θ ρ2
Como el límite depende del valor de θ , podemos asegurar que el límite no existe. Q
Esto significa que el valor del límite no depende de la dirección con la que nos
acercamos al punto (x0, y0). ¿Significa esto que podemos asegurar la existencia del
l´ım
(x,y)→(x0,y0) f (x, y)?
Desafortunadamente, la respuesta es no, como se pone de manifiesto en el siguiente
problema resuelto.
S OLUCIÓN :
Σ
x2y x = ρ cos θ = ρ3 cos2 θ sen θ
l´ım 4 2 l
(x,y)→(0,0) x + y Σ ρ→0 ρ cos4 θ + ρ 2 sen2
4
= ´ım
θ
y = ρ sen
θ
ρ cos2 θ sen θ
´
= lım = 0,
ρ→0 ρ 2 cos4 θ + sen2
θ
para cualquier θ ∈ [0, 2π]. Podría pensarse que
l´ım x2y
= 0.
(x,y)→(0,0) x4 + y2
Sin embargo, si tomamos puntos sobre la parábola y = x2 con x → 0, se obtiene
x x 1
l´ım 2 l´ım 4
4 2
= = ,
(x,y)→(0,0) x + y x→0 x4 + x4 2
y=x2
Σ Σ
x = x 0+ ρ cos θ
l´ım f (x, y) = = l´ım F(ρ,
(x,y)→(x0,y0)
y = y0 + ρ sen θ ρ→0
ρ→0
Entonces, podemos asegurar la existencia del límite, siendo
l´ımf (x, y) = L.
(x,y)→(x0,y0)
l´ım x3 + 2y3
0 Q
√ =.
(x,y)→(0,0) x2 + y2
En tal caso, para probar la existencia de límite bastará con comprobar que la
función Φ(θ ) está acotada y que
l´ım Ψ(ρ) = 0.
ρ →0
aso particular del resultado 1.3.12) Supongamos que queremos calcular el límite (1.3) y que se cumple
Entonces, existe
l´ımf (x, y) = L.
(x,y)→(x0,y0)
l´ım (x,y)→(0,0)
f (x, y).
¿Cómo calcular el límite de una función f (x, y) en un punto cualquiera, es
decir, cómo calcular
l´ım
(x,y)→(x0,y0) f (x, y) ?
. x = X + x0,
y = Y + y0. (1.5)
2x2 − 2
3y
√2 2
Problema 1.3.15 Estudiar la existencia de l´ım(x,y)→(−1,1)+4x+6y−1 .
x +y +2x−2y+2
l´ım
X →X0 f (X ) = f (X0).
f (x, y) = 2x2y2 − 5y
∂ f
y supongamos que queremos calcular la derivada parcial ∂ (1, 2), es decir,
queremos calcular la variación de la función f respecto dex la variable x en el punto
(1, 2). Para ello lo primero que hacemos es fijar la variable y asignándole el valor y
= 2. De esta forma obtenemos
Observemos que se trata de una función de una variable. Pues bien, la derivada parcial
∂f
∂
(1, 2) es precisamente la derivada de la función f (x, 2) en el punto x = 1.
x ∂f d f (x, 2)
(1, 2) =
,∂ = x=1 = 16.
d 16x∫
x x x=1
Si queremos ahora calcular ∂ f (1, 2), el procedimiento es similar. Primero fijamos
∂
la variable x asignándole el valor x = 1:
y
2
f (1, y) = 2y − 5y,
con lo que se obtiene una función en la variable y. Entonces, la derivada parcial
∂f
∂
(1, 2) es la derivada de la función f (1, y) en el punto y = 2, es decir,
y
∂f d f (1, y)
(1, 2) =
, = 4y − y=2 = 3. □
∂ d 5∫
y y y=2
Observaciones 1.4.2
1. Las derivadas parciales representan la variación de la función f en el
punto (a, b) a lo largo de los ejes OX y OY , respectivamente.
Geométricamente, las derivadas parciales en un punto (a, b) nos
proporcionan la pendiente de la recta tangente en el punto P(a, b, f
(a, b)) a las curvas obtenidas por la intersección de la superficie z = f
(x, y) con los planos y = b y x = a, respectivamente (ver figura 1.9).
2. Según el manual de Matemáticas que utilicemos podemos encontrarnos
con diferentes notaciones para indicar las derivadas parciales de una
función de varias variables. Las notaciones más usuales son:
∂f ∂f
D1 f (a, b) = fx(a, b) = (a, b), D2 f (a, b) = fy(a, b) = (a, b).
∂x ∂y
∂f
= x2 + 3y2.
∂y
2. En la mayoría de los casos para calcular las derivadas parciales de una función
en un punto (a, b) bastará evaluar las funciones∂ ∂ yf ∂∂ f para x = a e y = b. Así,
x y
en el ejemplo anterior, mediante sustitución directa, podemos evaluar ∂∂ f y ∂ f
∂
en el punto (1, 0). x y
∂f ∂f
(1, 0) = 2xy, = 0, (1, 0) = x2 + 3y2 , = 1.
∂ x=1
y=0 ∂ x=1
y=0
x y
3. Sin embargo, en otros casos, para calcular las derivadas parciales de una
función en un punto, será necesario aplicar directamente la definición.
Consideremos la función
xy
√ si (x, (0, 0)
y)
f (x, y) = x2 + y2
0 si (x, y) = (0, 0).
∂f x2 y y y3
=− + = ,
∂x (x2 + y2)3/2 (x2 + y2)1/2 (x2 + y2)3/2
∂f xy2 x x3
=− + = .
∂y (x2 + y2)3/2 (x2 + y2)1/2 (x2 + y2)3/2
∂ f (x, y) = y3 si (x, ) ƒ= 0, 0)
∂ x (x2 + y (
y2)3/2
0 si (x, y) = (0, 0),
∂ f (x, y) =
∂y
2+ y2)3/2
x si (x, ) ƒ= 0, 0)
(x y (
0 si (x, y) = (0, 0).
□
Derivadas parciales de una función de n variables
∂f d f (1,
(1, 0, 1) =
, = 4y − y=0 = −5.
∂ d
y, 1) 5∫
y y y=0
f (1, 0, z) = 3z3.
Entonces,
∂f d f (1,
(1, 0, 1) = =
, , = 9. Q
∂ d 2
0, z) 9z
z z z=1
z=1
Sea f : D⊂ Rn→ Rm con f (x1, ..., xn) = ( f1(x1, ..., xn), ..., fm(x1, ..., xn)) una
función de n-variables y m-componentes. Entonces podemos calcular las derivadas
parciales de cada una de las funciones componentes fi, i = 1, . . . , m, respecto
de cada una de las variables x j , j = 1, ∈ ×
. . . , n, en un punto X0 int(D). De esta
forma obtenemos m n valores que podemos disponer en forma matricial. El
resultado es lo que llamaremos matriz derivada de la función f en el punto X0 y
la notaremos por D f (X0).
f (x1, ..., xn) = ( f1(x1, ..., xn), ..., fm(x1, ..., xn))
∂ fi
y tomemos X0 ∈ int(D). Si las derivadas parciales ∂ (X0) existen para i = 1, . .
. , m y j = 1, . . . , n, se define la matriz derivadax jde f en el punto X0 a la matriz
de orden m × n dada por
∂ f1 ∂ f1 ∂ f1
∂ (X0) ∂ (X0) ··· ∂ (X0)
∂
x1 f ∂
x2 f2 ∂
xn f2
. Σ 2
(X0) (X0) ··· (X0)
∂ ∂ ∂ ∂
x1 x2 xn
D f (X0) = fi .
j j=1,2,...,n . . .
∂ = .
(X0x) i=1,2,...,m
. . .. .
∂ fm ∂ fm ∂ fm
(X0) (X0) · · · (X0)
∂ x1 ∂ x2 ∂ xn
Entonces,
∂ f1 . Σ
∂x ∂ ∂ sen z 0 x cos z
f1 f1
∂
y
∂
z .
D f (x, y, z) = 2 =
∂ ∂ f2 0 cos z −y sen z
∂f
∂x f2 ∂z
∂
y
0 −1 0
Observaciones 1.4.11
1.D f (X0)T denota la transpuesta de la matriz derivada de f en X0.
2. El producto matricial (X − X0) · D f (X0)T está bien definido. En efecto,
(X − X0) es una matriz de orden 1 × n y D f (X0)T es una matriz de orden
n × m. El resultado es una matriz de orden 1 × m al igual que f (X ) y f
(X0).
3. Puede probarse que si f es diferenciable en el punto X0, entonces f es
continua en X0.
.Σ
f g( X0)D f (X0) − f (X0) Dg(X0)
D (X0) = .
g [g(X0)]2
Obsérvese que todas las igualdades que aparecen son igualdades matriciales.
f (x) − f (x0) 0
l´ım
x→x 0 x − x0 = f j(x ).
Es decir, que se cumpla (1.6) es equivalente a que exista f j(x0). De ahí que,
para funciones de una variable, los conceptos de derivabilidad y
diferenciabilidad sean equivalentes. No ocurre lo mismo en el caso de
funciones de n variables: la existencia de la matriz D f (X0) no nos asegura
que se cumpla (1.7).
Problemas 1.4.16
1. Calcular la derivada direccional de la función f (x, y) = x2y en el punto (1, 1)
según la dirección del vector v = (1, 2).
√
S OLUCIÓN : Teniendo en cuenta que v" =" 5, aplicando la definición de
derivada direccional, se tiene
1
f ((1, 1) + t(1, 2)) − f (1, 1)
D√vf (1, 1) = l´ım+
5 t→0 t
1
=√ l´ım f (1 + t , 1 + 2t) − f (1, 1)
5 t
t→0+
1 (1 + t) (1 + 2t) − 1 1
2
2t3 + 5t2 + 4t
=√ l´ım = √ l´ım
5+ t 5 t→0+ t
1 t→0
= l´ım 4 + 5t + 4
= √. Q
2t2√ 5
5 t→0
√
2. Consideremos la función f (x, y) = x2 + y2. Probar que para cualquier vector
v = (v1, v2) ∈ R2 existe la derivada direccional Dv f (0, 0) y calcularla.
S OLUCIÓN :Dado que "v" = .v2 + v2 ,2aplicando la definición, se tiene
1
1 f ((0, 0) + t(v1, v2)) − f (0, 0)
D f (0, 0) = l´ım
v .
v21 + v22 t→0
+ t
1 f (tv 1,tv2) − f (0, 0)
= l´ım
.
1 2 + t
v2 + v2 t→0
1 .t 2 v2 + t 2 v2
= .v 1 2
2 l = 1. Q
´ım
1 v2 t→0
+ t
+
+ Usualmente la definición de la derivada direccional se da en un vector v
unitario, esto es, "v" = 1, con lo que (1.8) queda en la forma
v 0 f (X0 + tv) − f (X0)
D f (X ) :=t→0
l´ım
+ t .
. Σ
vf X +t
"v"
Dv f (X0) := l´ım . (1.9)
t→0+ t − f (X )0
Si en (1.9) hacemos el cambio de variable t = u v concluimos que la
defini- ción (1.9) es equivalente a la dada en"(1.8).
" A efectos de cálculo
resulta más ventajoso utilizar (1.8).
Una situación especial se produce cuando tomamos como vector v = ei, donde
ei es el vector unitario de la base canónica de Rn dado por
i
n
^ie = (0, 0, . . . , 1, . . . , 0)
∈R .
Si X0 = (a1, a2, . . . , an), entonces
e 0 f (X0 + tei) − f (X0)
D i f (X ) = t→0
l´ım+ t
f (a1, . . . , ai + t , . . . , an) − f (a1, . . . , . . . , an)
= l´ım
t→0+ t ,
∂f ∂f ∂f
(
D f v0 X ) =( 0X1 )v +( 0X2)v + · · · +(X ) 0 nv = ∇ f (X 0) · v,
∂ x1 ∂ x2 ∂ xn
(1.10)
v 1
Dv f (X0) = ∇ f (X0) · = ∇ f (X0) · v. (1.11)
"v" "v"
son continuas en R2, por tanto, dado que el vector v no es unitario, podemos aplicar
la fórmula (1.11) para calcular la derivada direccional. En nuestro caso,
∂f ∂f
∇f=. , Σ = (2xy, x2) ⇒ ∇ f (1, 1) = (2, 1).
∂ ∂
x y
Por tanto, aplicando (1.11),
1 1 4
Dv f (1, 1) = ∇ f (1, 1) · v = √ (2, 1) · (1, 2) = √ . Q
"v" 5 5
1
D∇ f (X0) f (X0) = ∇ f (X0) · ∇ f (X0) = "∇ f (X0)". (1.12)
"∇ f (X
)"0
g f
U ⊆ Rn .¸ V ⊆ Rm ¸. R p
X .¸ Y = g(X) ¸. f (g(X ))
f ◦g
h(x, y) = (x + y, y − x2 − y2).
u = x, v = y, w = x2 + y2
. Σ 1 0 . Σ
1 1 0 1 1
D f · Dg = 0 1· = = Dh.
0 1 −1 −2x 1 − 2y
2x 2y
2. Sea g : R2 → R2 dada por g(r, θ ) = (r cos θ , r sen θ ) y f :→
R2 R dada por
2 2
f (x, y) = x + y . Entonces
(r, θ ) −→
g
(r cos θ , r sen θ −
)
f 2
2r 2
(x, y) →
−→ x +y
luego la función h = f ◦ g : R2 → R vendrá dada por
h(r, θ ) = r2.
∂x ∂y =
.∂ ∂
Σ .
Dg = cos θ r sen θ
g1 g1 = .
∂ ∂ Σsen θ r cos θ
r θ −
Finalmente, ∂ ∂
g2 g2
∂ ∂
r θ
. Σ cos θ −r sen θ . Σ
D f · Dg = 2r cos θ 2r sen θ · . Σ = 2r 0 = Dh. □
sen θ r cos
θ
Regla de la cadena. Primer caso particular
d
x
dh dt
= D f (g(t)) · Dg(t) = Σ
∂f ∂f ·
∂f
.
d
dt ∂x ∂ ∂z
g(t) ydt
y
dz
dt (t)
∂ f dx ∂f
dy ∂ f dz
= + + .
∂ x dt ∂ y dt ∂ z dt
Problema 1.4.23 Sea g : R → R3 dada por g(t) = (t,t2,t3) y sea f : R3 → R
dada por f (x, y, z) = x2 + y2 + z2. Verificar la regla de la cadena para f ◦ g.
por lo que
dh
= 2t + 4t3 + 6t5.
dt
Por otro lado, utilizando la regla de la cadena se tiene
dh ∂ f dx ∂ f dy ∂ f dz
= · + · + ·
dt ∂ x dt ∂ y dt ∂ z dt
= 2x · 1 + 2y · 2t + 2z · 3t2 = 2x + 4yt + 6zt2 = 2t + 4t3 + 6t5. Q
El siguiente caso de la regla de la cadena que vamos a estudiar es, tal vez, el que
más se nos presente a lo largo del curso. Su aplicación es útil siempre que
realicemos un cambio de variables en el espacio; por ejemplo, de cartesianas a
esféricas o de cartesianas a a cilíndricas.
resultando
∂F ∂F ∂F
= 2r, = = 2z.
∂r ∂
0, θ ∂z
siendo
1 1
1 1
D f (2, 2) = 1
= 1 −1 ,
−1
v u 2 2
(2,2)
4x 0 = . Σ.
Dg(1, 1) = . Σ 4 0
0 (1,1)
04
Finalmente, 4y
1 1
. 4 0Σ 4 4
D( f ◦ g)(1,1) = 1 −1 · Q
2 2 0 4 = 4 −4 .
8 8
SOLUCIÓN:
a)Consideremos las funciones
g : R2 −→ R2 f : R2 −→ R
(x, y) −→ (x, u(x, y)), (x, u) −→ f (x, u).
. Σ . Σ . ∂
x
D ∂ ∂
= D f · Dg ∂ ∂
h ∂· g1 ∂
h h = f f g2
= ∂ ∂ ∂ ∂
Σ ∂
∂ g1 y
∂
D = D f · Dg · g2
h =
=
.
∂f
=
∂ ∂ ∂ ∂
∂f ·. Σ. x y u u
Σ 10 ∂ ∂
Por tanto,
∂h ∂f ∂f ∂u
= + · .
∂x ∂x ∂u ∂x
g : R −→ R3 f : R3 −→ R
(x, y, z) −→ (x, u(x), v(x)), (x, u, v) −→ f (x, u, v).
g : R3 −→ R3 f : R3 −→ R
(x, y, z) −→ (u(x, y, z), v(x, y), w(x)), (u, v, w) −→ f (u, v, w).
función f
f
respecto de las variables xi, x y se denota por ∂ 2 , es decir,
∂ x∂ ji
j x
. Σ
∂ 2 f def ∂ ∂f
= .
∂ x j ∂ xi ∂ ∂
xj
Si i = xj,i se llaman derivadas parciales iteradas y, si i ƒ= j, derivadas parciales mixtas.
□ Ejemplo 1.4.26 Sea f (x, y) = ex cos y. Entonces, se tiene que
∂f ∂
= ex cos y,
f = −ex sen y
∂x ∂
y
∂ 2f x ∂ 2f ∂ 2f ∂ 2f x
x x
Observaciones 1.4.28
1. De igual modo se pueden definir las derivadas parciales de orden
⊆
superior. Así, por ejemplo, si consideramos f→ : D Rn R, entonces
podemos definir las derivadas parciales de orden 3 como
∂ 3f . Σ
∂ ∂ 2f , i, j, k = 1, 2, . .
. , n.
∂ x j∂
=
∂ x i ∂ x j ∂ xk xk x j ∂
∂
∂ xi xk
n
2. Una función f : D⊆R R → se dirá de clase Ck si todas sus derivadas
parciales de orden k existen y son continuas en D.
3. En el caso de funciones vectoriales, f : ⊆ D Rn→Rm, dada por las funcio-
nes componentes f = ( f1, f2, . . . , fm), diremos que f es de clase Ck en
D, si todas las funciones componentes fi son de clase Ck en D.
Se observa que las derivadas parciales mixtas del ejemplo 1.4.26 coinciden. Este
hecho no se debe a la forma particular de la función f sino que se trata de un
resultado general. El siguiente teorema nos da condiciones para que esto se cumpla.
∂ 2f ∂ 2f
∂ xi∂ x j = ∂ x j∂ xi , i, j = 1, . . . , n.
f (x, y) = 0 (1.16)
representan, por lo general, una curva en R2 dada por
Esto nos dice que la función h(x) = f (x, g(x)) es idénticamente nula en D y,
por tanto, hj(x) = 0 para cualquier ∈ x D. Calculando esta derivada por la regla de
la cadena se tiene
∂ f ∂ x ∂ f dy dy ∂f ∂f
hj(x) = · + · =0⇒ =− , .
∂ ∂ ∂ d d ∂ ∂
x x y x x x y
Observemos que para que la igualdad anterior tenga sentido hemos de exigir la
condición de que ∂∂ f ƒ= 0, para x ∈ D.
y
ema 1.4.30(Teorema de la función implícita para una ecuación con dos variables) Sea la ecu
f (x, y) = 0 (1.17)
y tomemos un punto P = (x0, y0). Supongamos que se cumplen las siguientes condiciones:
1)El punto P satisface la ecuación, es decir, f (x0, y0) = 0.
2)Las derivadas parciales ∂ f∂,x∂∂ yf son continuas en un entorno
∂f
3)(P
∂y ) =ƒ0.
Entonces existen un entorno abierto U ⊆ R del punto x0, un ento
del punto y0 y una función
g : U−→ V
x−→ y = g(x),
,
=−
dx∂ x∂ y , para todo x ∈ U.
Observaciones 1.4.31
1. La condición 1), f (x0, y0) = 0, nos garantiza que la ecuación (1.17)
tiene al menos una solución. Esta condición previa es muy importante
ya que pueden presentarse ecuaciones como, por ejemplo,
x2 + ey + 1 = 0
x2 + y2 = 1,
Problemas 1.4.32
1. Probar que la ecuación y3 + y2− 5y − x2 − 2 = 0 define implícitamente a
la variable y como función de x en un entorno del punto (0, 2). Calcular
d
dy
. x
Las mismas consideraciones anteriores podemos hacer si tenemos ahora una ecua-
ción de la forma
f (x, y, z) = 0. (1.19)
P
3
1 2
√
Figura 1.10: Recta tangente a la circunferencia x2 + y2 = 4x en el punto P(1, 3).
En tal caso se dice que la ecuación (1.19) define de forma implícita a z como
función de las variables x e y.
Como hemos indicado anteriormente, dada la ecuación (1.19) no siempre será
posible despejar una variable, digamos z, en función de las restantes. Sin embargo,
utilizando de nuevo la regla de la cadena podemos deducir fórmulas útiles para
calcular las derivadas parciales ∂ z y ∂ z sin el conocimiento explícito de z = g(x,
y). En efecto, ∂x ∂y
supongamos que podemos despejar z = g(x, y), para ∈ (x, y) D (aunque no
conozcamos la fórmula para calcularla). Sustituyendo z en la ecuación (1.19),
obtendríamos una igualdad en la que solamente figuran las variables (x, y), es
decir,
Esto nos dice que la función h(x, y) = f (x, y, g(x, y)) es idénticamente nula en
Ana M. Lerma, José M. Quesada y Rafael
Sánchez
D y, por tanto, las derivadas parciales ∂ h y ∂ h se anularán también en D.
Calculando estas ∂x ∂y
derivadas por la regla de la cadena se tiene
∂h ∂f ∂f ∂z ∂z ∂ f, ∂ f
= + · = 0⇒ =− .
∂ ∂ ∂ ∂ ∂ ∂ ∂
x x se llegaría
z x a que x x z
Análogamente,
∂z ∂ f, ∂ f
=− .
∂ ∂ ∂
y y z
Observemos que para que las igualdades anteriores tengan sentido hemos de exigir
ahora la condición de que ∂∂ f ƒ= 0, para (x, y) ∈ D.
z
En consecuencia, podemos enunciar un resultado análogo al teorema 1.4.30 para
el caso en que tengamos una ecuación con tres variables. Este resultado nos llevará
a dar una formulación más general para el caso de una ecuación con un número
cualquiera de variables.
ema 1.4.33(Teorema de la función implícita para una ecuación con tres variables) Sea la ecu
f (x, y, z) = 0 (1.20)
y tomemos un punto P = (x0, y0, z0). Supongamos que se cumplen las siguientes condiciones:
1) f (P) = 0.
∂z , f
∂ f∂ y∂ z , f
∂ f∂
= − = − para todo (x, y) ∈ U.
∂ y∂ z ,
(1.21)
∂x ∂ x∂ z ∂y
Observaciones 1.4.34
1. De nuevo la condición 1), f (x0, y0, z0) = 0, nos garantiza que la
ecuación (1.20) tiene al menos una solución.
2. De igual forma, la condición 3), ∂∂ f (P) ƒ= 0, junto con el hecho de que
∂
∂ f
es
continua en un entorno del punto P (ver condición 2)) nos permite asegurar
z z
x2 + y2 = z2,
Sin embargo, dicha ecuación solo representa la parte del cono situada en
el semiespacio superior (z ≥ 0). La parte que cae en el semiespacio
inferior (z ≤ 0) negativo vendría dado por la ecuación
√
z = − x2 + y2.
2 2 2
Problema 1.4.35 Probar que la ecuación x + y √+ z − 16 = 0 define a la
como unaz función de x e y en un entorno del punto ( 15, 0, 1). Verificar las fórmulas
variable
(1.21) para las derivadas parciales ∂ z y ∂ z y calcular dichas derivadas en el punto
∂x ∂y
√
( 15, 0, 1).
.∂ f1 ∂ . . ∂ f1 ∂ f1 .
.∂∂ .∂∂ uf2 ∂x
x f1
f2
∂
. ∂ f2 .
∂
v ∂
f2
∂u ∂x ∂v ∂v ∂u
x
=−. ., =−. ..
∂ . . ∂ . .
x ∂ f1 ∂ x ∂ f1 ∂ f1
∂v
.∂∂ uf2 f1
∂
∂u
. .∂∂ fu2 ∂ f2
∂ v.
.∂ u v
∂ . . .
f2
∂
v
Observemos que para que las igualdades anteriores sean posibles hemos de imponer
la condición de que el determinante
∂ f1
.. ∂ u ∂ f1 .
∂v
∂ f2 . ƒ=
∂ f2 .
.∂ u ∂v
0.
El determinante anterior se denomina jacobiano de las funciones f1 y f2 respecto de
las variables u y v, y se denota por
∂ ( f1 , f 2 )
.
∂ (u, v)
Consideremos ahora un sistema de m ecuaciones y n + m incógnitas de la forma
f1(x1, ..., xn, y1, ..., ym) =
0,
f2(x1, ..., xn, y1, ..., ym) = (1.24)
0,
.
fm(x1, ..., xn, y1, ..., ym) =
0.
Estamos interesados en establecer las condiciones bajo las cuales es posible despejar
las variables y1, y2, · · · , ym, en función de las variables x1, x2, . . . , xn.
Con objeto de simplificar la notación, observemos que el sistema (1.24) puede
escribirse en forma simplificada como
f (X ,Y ) = 0,
donde 0 = (0, 0, . . . , 0) denota el vector nulo en Rm, sin más que considerar las
variables X = (x1, x2, . . . , xn), Y = (y1, y2, . . . , ym) y la función vectorial
f : D ⊆ Rn+m → Rm,
de variables X ,Y cuyas funciones componentes son las funciones f1, f2, . . . , fm que
definen el sistema (1.24).
Teorema 1.4.37(Teorema general de la función implícita) Consideremos el
sistema de ecuaciones escrito en forma vectorial
f (X ,Y ) = 0, (1.25)
f∂ .,f
∂
.
∂ ∂ (y1, y2, . . . , fm
Y ym1) 2 ..
(P) = m
(P) = . . . ƒ= 0.
. . . .
∂
fm
... ∂ ym (P
∂ y1 . )
Entonces, existen un entorno U del punto X0∈ Rn, un entorno V del punto Y0 ∈ Rm
y una función
g : U ⊆ Rn −→ V ⊆ Rm
X −→ Y = g(X )
Y = g(X ), X ∈ U. (1.27)
Observaciones 1.4.38
1. Observemos que si denotamos por (g1, g2, · · · , gm) a las funciones compo-
nentes de g, la igualdad (1.27), Y = g(X ), es equivalente a decir que
y1 = g1(x1, x2, ..., xn),
y2 = g2(x1, x2, ..., xn),
. para todo (x1, x2, . . . , xn) ∈ U.
ym = gm (x1 , x2 , ...,
xn),
Problema 1.4.39 Mostrar que en un entorno del punto P = (x0, y0, u0, v0) = (1, 1, 1, 1)
el sistema
.
xu + yvu2 = 2,
xu3 + y2v4 = 2,
f1(x, y, u, v) = xu + yvu2 − 2
f2(x, y, u, v) = xu3 + y2v4 − 2
. −u yu2 .
.x + 2yuv −u .
= ,
=
∂u .−u3 4y2v3. ∂ v . 3xu2 −u3.
∂x .x + 2uvy yu2 . ∂ x .x + 2uvy yu2 .
. 3xu2 4y2v3 . . 3xu2 4y2v3 .
f1(x, y, u(x, y), v(x, y)) = 0, f2(x, y, u(x, y), v(x, y)) =
h1(x, y) = f1(x, y, u(x, y), v(x, y)), h2(x, y) = f2(x, y, u(x, y), v(x, y)),
para x1, . . . , xn como funciones de las variables y1, . . . , yn, es decir, estamos
tratando de invertir el sistema. Esto es análogo a, por ejemplo, calcular la
inversa de y = ex, que es x = ln y. En este caso, sin embargo, tratamos con
funciones de varias variables. La cuestión de la existencia de la solución se
responde con el teorema general de la función implícita considerando el sistema
de ecuaciones
(F1, · · · , ∂ F1 ∂ F1 ∂ f1 ∂ f1
Fn) ∂ ··· ∂ xn ··· .
. .. .∂ x1
∂ X Y) .x
1
. =. .
∂ (x1, · · · , 0 0
, = . ∂. .
. .
∂ .∂f . . ∂f
( ∂
x n) F Fn . xn
.
. 1
··· .
∂ xn ∂ xn .
(X0,Y0) . ··· n
∂ xn (X0)
∂
x1 .
∂ ( f1 , . . . , fn )
= (X0) ƒ= 0.
∂ x 1, . . . , xn )
f (x1 , · · · , xn ),
y = 11
.
yn = fn(x1, · · · , xn),
y sea (X0,Y0) ∈ Rn+n un punto que satisface el sistema. Si las derivadas parciales
∂f
∂ xi , i = 1, · · · , n,
Σ Σ−1
∂ ( f1, · · · , fn) ∂ (g1,· · ·, gn)
(X ) = (Y ), para todo X ∈ U, Y ∈ V. (1.32)
∂ (x1, · · · , xn) ∂ (y1, · · · , yn)
Observaciones 1.5.2
1. Teniendo en cuenta que yi = fi(x1, . . . , xn), i = 1, . . . , n, la condición
(1.31) suele escribirse en la forma:
∂
y1 . ∂ y1
··· .
∂ (y1, · · · , . .
y n) . . ∂
∂ yn
∂
∂ x x (X0) = . . xn.
( 1, · · n) . ƒ= 0.
.
·, .
. ∂. ∂x · · · ∂x
.
1 n X0
yn
Además, como xi = gi(y1, . . . , yn), i = 1, . . . , n, la igualdad (1.32), se
escribe también como:
∂ (y1, · · · , yn) . Σ
∂ (x1, · · · , xn) . (1.33)
Σ−1
= ∂ (y , · · · ,
∂ (x1, · · · , xn) . 1 (Y0)
(X0) y n)
Problemas 1.5.3
1. Consideremos el sistema dado por las ecuaciones
u = x2 + y 2 , y
=
v .x
Probar que en un entorno del punto P = (x0, y0, u0, v0) = (1, 1, 2, 1) es
posible invertir el sistema, es decir, podemos despejar las variables x e y en
1.5 Teorema de la∂ función 75
inversa (u,v)
función de u y v. Hallar ∂ (x,y)
.
S OLUCIÓN : Veamos que se cumplen las condiciones del teorema de la
función inversa:
a) El punto P satisface las ecuaciones
del sistema. C
b) Las derivadas parciales,
∂u ∂ ∂v ∂v 1
u
y
= ,
= 2x, = =− ∂y x
∂
2y,x ∂y ∂ x,
x2
x=0
Figura 1.11: Entorno en R2 del punto (1, 1) donde las funciones u y v son de clase C1.
c) El jacobiano
∂ (u, v) . 2x
.∂u ∂u 2y. .2 2.
.
=
∂ x
∂
. .
. x
∂ x ∂ y. = y .(1,1) =4
(x0, y0) = y x 1
∂
∂
1 1.
es distinto de cero. C ∂v
v
∂
.− 2 x
. −
(1,1)
∂ (x, y)
. .
es distinto de cero. C
Por tanto, existen un entorno U ⊆ R2 del punto (x0, y0) = (1, 1), un entorno
V ⊆ R2 del punto (u0, v0) = (2, 1) y una función biyectiva y de clase
C1, g : V −→ U
(u, v) −→ (x, y) = (g1(u, v), g2(u, v)),
es decir, se pueden despejar x e y como funciones de u y de v, siendo
para todo (u, v) ∈ V . Para calcular el jacobiano∂ ∂(x,y) podemos utilizar la igual-
dad (1.33). En nuestro caso, (u,v)
∂ x x
∂ y
x 1
. .
∂x ∂y. . =2 1+ = , (1.34)
= = 1
y
∂
x
∂ (x, y) . ∂v v ∂
. .− 2 . x2 x2
de donde se obtiene
que
∂ (x, y) x2
= .
∂ (u, v) 2(x2 + y2)
∂ (x, y) x2 1
= = .
∂ (u, v) 2(x2 + y2 ) 2(1 + v2)
ecuaciones u = x + y, v = x − y.
Probar que para cualquier punto P que satisfaga el sistema se cumple que
∂ ( x, y)
= Σ ∂ (u, vΣ
) −1
∂ (u, v) .
∂ (x, y)
SOLUCIÓN:
∂ (u, v)
∂u ∂ .1 1.
u
∂ (x,
y) . ∂
1 −1
v
∂
∂
v
∂
.∂x ∂ y. .
= . = . = −2 ƒ= 0.
. .