Alumna: Kidia Saklintec Miranda Sarabia
Matricula: 129583
Grupo: E115
Filosofía y epistemología de la educación
Asesora: Dra. Conchita Mar Martínez Cedano
Actividad 1. Ejemplos de paradigmas científicos e la vida
cotidiana
Ciudad y fecha: Arcelia, Gro. A 15 de Febrero 2020
Título: Una aventura a la filosofía y la epistemología de
la educación
Aprendiendo desde la experiencia y la realidad
Introducción
La visión del mundo ha sido concebida desde distintos postulados filosóficos en su afán
de entender la verdad y concretar el conocimiento y aunque toda cultura humana ha
generado su propio sistema de creencias o conocimientos sobre el universo, solo algunas
sociedades han desarrollado su pensamiento filosófico haciéndolo disciplina como tal,
sistematizada y con postulados, escuelas y corrientes, siendo el paradigma occidental el
que más influencia ha ejercido en la historia de nuestras civilizaciones y culturas, incluso
hasta nuestros días.
Partiendo de que el conocimiento es el objeto de la epistemología, centraremos nuestra
atención en el problema de cómo acceder u obtener el conocimiento y para ello
agruparemos las corrientes epistemológicas desde el medio por el que es posible conocer
y por la naturaleza de aquello que queremos conocer.
De esta forma distinguiremos dos grandes grupos: Según el medio: empirismo y
racionalismo (la experiencia vs. la razón) y según el objeto: idealismo y realismo.
Por su parte la evolución del sistema educativo hacia una relevancia del conocimiento
mediante el desarrollo de competencias como un contexto conveniente para el
aprendizaje significativo de los contenidos, nos permite ofrecer mediante el uso de
materiales adecuados una alternativa efectiva para dejar atrás el aprendizaje rutinario,
memorístico, basado en la repetición y derivado de una enseñanza centrada en el
docente.
Desde el contenido de la presente actividad se busca generar caminos alternos,
adoptando nuevas posturas donde podamos defender nuestros puntos de vista en la
aplicación de estrategias más convenientes para los alumnos. Por ello, esta actividad se
ha desarrollado a través de la revisión de la teoría, comprensión y reflexión de los
conceptos de filosofía, epistemología y sus principales características. En la misma, se
hace relevancia a las cuatro posturas estudiadas: (empirismo/racionalismo e idealismo/
realismo).
Por lo que en este documento se abordan ambos grupos presentando mi postura con
respecto a cada una de ellas, tratando de explicarlas relacionándolas con los contenidos
de la materia y describiendo también cómo se ven reflejadas en el ámbito de la
enseñanza. Finalmente se presenta una conclusión personal y comparto la bibliografía
consultada.
Empirismo y racionalismo.
Desde una visión muy natural los seres humanos sin duda tenemos saberes sin
necesariamente poseer conocimiento científico y son nuestros sentidos una fuente
enriquecedora para construir nuestro conocimiento, esta es la premisa principal del
Empirismo, mientras que el racionalismo basa su filosofía epistemológica en la razón, no
obstante ambas necesitan de creencias, las cuales se retroalimentan tanto de la razón
como de la experiencia, pues se necesita de la experiencia, pero también de la razón, y a
su vez también de las creencias, para poder hablar del conocimiento.
Ahondando en el empirismo, se puede enunciar que es una teoría basada en la alegación
de que la experiencia es la fuente del conocimiento, esta postura epistemológica se
contrapone al racionalismo, menciona que los individuos no tienen conocimientos innatos,
que su mente es como una hoja en blanco que debe llenarse a partir de la experiencia y el
aprendizaje, por lo que el conocimiento se basa en la experiencia y la experimentación
haciendo uso de nuestros cinco sentidos, siendo éstos las vías de aprendizaje para el ser
humano.
En lo que respecta a las aportaciones de los 3 empiristas que nos presenta la lectura, mi
postura hace mayor énfasis a David Hume sobre su filosofía de la mente que asienta que
todo cuanto conocemos es una percepción y divide estas percepciones, que además son
sensoriales en impresiones e ideas. “Las impresiones son más vividas, e incluyen
sensaciones y sentimientos. Las ideas incluyen recuerdos (que son copias menos nítidas
de las impresiones pasadas) e ideas producidas por la imaginación. El rol de la
imaginación para Hume será importante y es un elemento que los previos empiristas no
habían puesto en relieve. Por medio de la imaginación podemos generar ideas nuevas al
combinar aspectos de ideas previas. Por ejemplo, conocemos los peces y a las mujeres,
gracias a lo cual podemos generar la idea de las sirenas que nunca hemos experimentado
como tal más allá de la imaginación.” (Ieu, online, p. 12). Gracias a la imaginación también
podemos generar conocimiento nuevo a priori, pues de acuerdo con su postura las ideas
nacen de nuestras experiencias y aplicamos la lógica a algo que ya conocemos.
Dentro del ámbito de la enseñanza, recordemos que a partir de la experiencia se da un
aprendizaje significativo con nuestros alumnos, ellos crean su propio aprendizaje a través
de las ideas que obtienen de sus experiencias. Amidón y Hunter (1996) definieron la
enseñanza como un proceso de interacción que implica ante todo la conversación en
clase que se desarrolla entre el maestro y los alumnos, de tal forma que esta
“conversación” que mencionan los autores se sustenta en el intercambio de ideas que
surgen de la práctica y del contacto directo con la realidad. Pero mi postura no se limita
sólo al conocimiento empírico, éste sería un primer acercamiento, pues ya lo dijo Piaget,
(1975, p. 75) “traspasar los límites del empirismo superficial y con ayuda de la
observación sistemática y el control poder leer la experiencia con lógica”. Pues debemos
rescatar que el conocimiento implica no sólo las percepciones externas, sino la cuesta a
las ideas abstractas.
Por lo anterior las experiencias de aprendizaje que puedo proponer bajo este paradigma
es hacer diseñar estrategias pedagógicas donde los alumnos puedan exponer sus
experiencias como muy comúnmente lo hacemos al inicio de la clase al indagar qué
saben o conocen sobre el tema; También se pueden diseñar estrategias en las que les
ayudemos a despertar la imaginación con la lectura, escenificación de cuentos; para
encaminarlos a las ideas abstractas de pueden proponer actividades que impliquen la
reorganización de conceptos abstractos que ayuden a su razonamiento.
En lo que respecta al racionalismo este se basa en la afirmación de que la razón es la
fuente del conocimiento humano, creen en la intuición, los conocimientos innatos y la
deducción. Los racionalistas confían en el poder de la razón, pero para que esta razón
nos aporte un conocimiento seguro necesitamos un método y reglas, al adentrarnos al
ámbito educativo nuestros estudiantes siguen este método ya que deben de no aceptar
como verdadero nada que no sea evidente, se debe de indagar, investigar hasta
comprobar que ese conocimiento es indudable, el alumno dentro de nuestra clase puede
descomponer los problemas en partes hasta llegar a un análisis. Una experiencia de
aprendizaje desde este paradigma en la asignatura de matemáticas podría ser por
ejemplo que para conocer el área de un romboide si se desconoce su fórmula se puede
descomponer en partes, en figuras más simples cuya fórmula si se conozca y así sacar su
área, de esta manera nuestro conocimiento puede ser construido deductivamente a partir
de ciertas ideas o principios evidentes por sí mismos tal y como afirma el racionalismo.
Concuerdo con esta corriente y asumo una postura racionalista a través de las ideas del
autor Rene Descartes, pues si bien no presenta una pedagogía propiamente elaborada,
sus ideas filosóficas han llevado a los caminos de la ciencia y del método y en resumidas
cuentas esto se aborda nuestra práctica educativa. Su idea del método en el ámbito de la
docencia lo podemos traducir como un camino que nos lleve a ideas que nos resulten
claras y distintas, que bien aplicado en nuestros estudiantes ayudaría a despertar su
pensamiento crítico a través de la certeza de la duda de la que Descartes hace mención.
Desde esta postura tenemos que buscar la certeza a partir de lo que nosotros mismos
podemos desarrollar y llevada esta idea al aula, permite al docente ser guía para
cuestionar y poner en duda a los estudiantes, acción que me resulta muy conveniente en
mi trabajo docente con adolescentes.
Idealismo y Realismo
En la lectura presentada se hace referencia de que el idealismo y el realismo también se
cuestionan sobre la naturaleza de eso que queremos conocer. No obstante, el enfoque
que abordan es diferente, ya que no es lo mismo hablar sobre cómo puedo conocer la
realidad como lo asumen los empiristas y racionalistas y otro asunto diferente es
cuestionarse de qué está hecha esa realidad y en qué consiste. Para el realismo el
conocimiento es posterior a la realidad de las cosas, en tanto que para el idealismo la
realidad de las cosas es la última acción del pensamiento, de esta forma en el realismo el
conocimiento se inicia en las cosas mientras que, en el idealismo el conocimiento es una
actividad elaboradora de conceptos que va del hombre a las cosas.
El realismo sostiene que las cosas existen independientemente de nosotros” (Otero, 2016,
p. 215) y el idealismo postula que la realidad es, finalmente, una construcción mental,
donde sólo pueden existir para una mente que los percibe” (Otero, 20116, p. 138).
El Ser de los realistas es inteligible, es decir puede ser comprendido y entendido y el de
los idealistas es un ser pensante, los individuos son un yo pensante y retomando estas
ideas se puede decir que el ámbito educativo, parte de nuestra tarea en el aula, es poner
al estudiante cerca de sus realidad inmediata para que pueda ser comprendida y
entendida y es aquí donde nuestras estrategias de enseñanza para los alumnos deben
guiar su aprendizaje donde se proporcionan experiencias exactas para formar un juicio
reflexivo que posteriormente conducirá al razonamiento. Desde la visión idealista
aceptamos que nuestros alumnos son seres pensantes y que, por lo tanto, se debe de
llevar un proceso de aprendizaje mediante conocimientos útiles para integrar al alumno en
una sociedad, donde la disciplina se maneje a través de la responsabilidad moral.
Si bien es cierto que también la lectura analizada nos mencionaba sobre las
repercusiones en el ámbito educativo las cuales tienen que ver con la idea de que
debemos enseñar verdades o hechos para trasmitir y generar conocimientos objetivos,
también la pregunta de si ¿podemos enseñar sobre el mundo real, o sólo sobre nuestras
ideas y percepciones sobre el mundo real? Nos invita a la reflexión tanto del idealismo
como del realismo indirecto que de igual forma se cuestionan la aseveración sobre la idea
de transmitir o generar conocimientos objetivos en el aula. Ante esta idea resulta
conveniente poner en el centro del aprendizaje al estudiante donde él como ser pensante
genere su propio conocimiento por medio de la percepción, que es la manera en que está
percibiendo el mundo real y sus objetos, pues la manera como el objeto percibido es
caracterizado en la percepción puede coincidir o no con la forma en que en realidad es.
Para Freire (1990) “enseñar no pude ser un simple proceso,... de transferencia mecánica
de la que resulta la memorización mecánica.... Al estudio crítico corresponde una
enseñanza igualmente crítica que necesariamente requiere de una forma crítica de
comprender y de realizar la lectura de la palabra y la lectura del mundo, la lectura del
texto y la lectura del contexto”.
Por lo anterior y asumiendo las ideas de Freire, las estrategias de enseñanza que se
pueden proponer desde este paradigma las incorporaría en mi aula por medio de
investigación, de presentación de temas por parte de los alumnos, situaciones didácticas
que promuevan el debate, el pensamiento crítico, ensayos por escrito y actividades que
forjen su personalidad, sus ideales y aspiraciones, propondría actividades donde no sólo
adquiera conocimiento, sino que sepa cómo hacer un uso efectivo del mismo.
Conclusión
Finalmente y a manera de conclusión, si tengo que asumir una postura entre que todo
conocimiento que posea un individuo debe estar basado en la razón (racionalismo) o bajo
la premisa del empirismo que afirma que la experiencia sensorial es la base de todo
conocimiento humano, debo decir que si me voy sólo a sus ideas prácticas y no estructuro
ideas conceptuales teóricas filosóficas, aceptaría que ambas pueden ser observadas en el
aula durante la aplicación de diferentes estrategias que acompañan al proceso de
enseñanza.
Ahora bien, si también tengo que asumir una postura ante el idealismo y realismo me
resultaría igual de ambiguo definirme por una postura ya que en el aula se puede asumir
la razón realista cuando sea de nuestro interés el estudio de fenómenos o cosas
observables o bien la razón idealista si encaminamos a entender nuestra realidad que
sabemos está determinada por nuestros pensamientos e ideas.
Con lo anterior, aunque hemos visto que son posturas con ideas cercanas no podemos
considerar que son equivalentes, sino que más bien podemos comprenderlas y aplicar las
ideas relevantes a nuestro ámbito educativo.
Referencias bibliográficas.
Albert, Esteban Manuel. El alumno y el profesor: Implicaciones de una relación, Madrid,
Universidad de Murcia, 1986.
Freire Paulo, (1990) La naturaleza política de la educación, cultura, poder y liberación.
Barcelona. Editorial Paidós.
García, Morente Manuel (1973) Lecciones Preliminares de Filosofía, Editorial Losada
S.A., Buenos Aires, Argentina.
Leo on line. Filosofía y epistemología de la educación. Unidad 1. ¿Qué es la
econometría? Semana 1. Material compilado.
Otero, E. y Gilbert, J. (2016) Diccionario de epistemología. Chile: RIL Editores.
Recuperado de https://ebookcentral.proquest.com/lib/ieusp/reader.action?
docID=4850232&query=-diccionario%2Bde%2Bepistemolog%25C3%25ADa
Piaget, J. et al. (1975). Tendencias de la investigación en ciencias sociales. Madrid,
Alianza.