El Subrayado Gustavo Mamani Cori 16127
El Subrayado Gustavo Mamani Cori 16127
El Subrayado Gustavo Mamani Cori 16127
Definición:
Subrayar es una de las técnicas utilizadas por muchas personas que cuando
estudian un texto, remarcan con un color llamativo aquellas partes del mismo
que contienen las ideas principales. Al subrayar dichas ideas principales,
diferenciando claramente respecto de las secundarias, la persona puede
visualizar el contenido destacado. Subrayar es la fase previa a la realización de
un esquema o de un mapa conceptual de un tema de estudios. Además, el
subrayado también se realiza después de haber realizado varias lecturas del
texto.
Objetivo del subrayado:
DESTACAR LAS IDEAS BÁSICAS PARA DESPUÉS SER CAPAZ DE
MEMORIZAR TODO EL TEXTO
Esto requiere:
- Comprender el texto: que se entienda el vocabulario, y si no es así, se
buscarán en el diccionario las palabras cuyo significado se desconozca.
- Que la lectura sea buena, tanto en comprensión como en velocidad. Hay
una manera de mejorar la lectura: LEYENDO.
- Utilizar ciertas técnicas de subrayado: lápices de colores, hacer
anotaciones al margen del texto, plantearse dudas según se va leyendo para
luego darle respuesta...
El subrayado va a suponer economía de tiempo y apoyo al aprendizaje:
Economía de tiempo:
Estudias más concentrado.
Rapidez en el repaso
Ayuda a la memorización.
Facilita el estudio.
Apoyo al aprendizaje:
Te habitúa a analizar.
Te ayuda a captar la idea principal.
Te facilita el establecer relaciones.
Favorece la organización de las ideas.
Facilita la comprensión.
Desarrolla la capacidad de síntesis.
TIPOS DE SUBRAYADO
El subrayado es personal: Cada uno, además de tener su código, encuentra
unas ideas o aspectos a destacar cuando estudia. En general, se suelen utilizar
los siguientes tipos de subrayado:
1.- Lineal: Utiliza líneas de cualquier tipo para captar información de un
“vistazo” y facilitar su localización en el texto (una línea para la idea principal y
dos líneas para la palabra clave; un círculo para resaltar las fechas, rectángulos
para los nombres, etc.). También suelen utilizarse lápices de colores,
cambiando el color según la importancia del párrafo.
2.- Estructural: Algunos textos vienen perfectamente estructurados, señalando
el tema del cual trata, los apartados que tiene, destacando en letra negrita los
diferentes puntos o aspectos, etc.; pero otros muchos, no.
El subrayado estructural consiste en ir haciendo anotaciones al margen del
texto para darle una estructura al mismo.
3.- De realce: Consiste en ir destacando al margen del texto las dudas que
surgen, los comentarios que nos sugiere, aspectos a aclarar, etc.
Lo normal es utilizar a la vez los tres tipos de subrayado.
¿Cómo subrayar un texto?
1. Fíjate en el título de la lectura: a veces nos indica todo el contenido del
tema.
2. Haz una primera lectura del tema para enterarte de qué se trata, qué
apartados tiene, cómo se relaciona ese tema con los anteriores, etc.
3. Mira los dibujos, fotografías o esquemas; no están sólo de adorno, sino
que te pueden aclarar muchos aspectos del contenido.
4. Haz una segunda lectura pausada. Busca y subraya la idea principal del
texto.
5. Resalta la palabra clave de la idea principal.
6. Subraya de distintas formas las ideas secundarias y los detalles
importantes.
7. Usa los márgenes para anotar comentarios, dudas o aclaraciones que
necesites sobre las ideas expresadas.
8. Comprueba que leyendo sólo lo subrayado, le encuentras sentido al texto.
¿Para qué sirve subrayar?
La técnica del subrayado nos ayuda a dilucidar las partes más importantes de
un texto mediante un trazo, ahorrando esfuerzo y llegando a comprender las
ideas principales de un escrito de la forma más eficiente posible. Si
aprovechamos bien dicha técnica y logramos comprender las ideas principales
y secundarias de un texto, contribuiremos a fomentar un aprendizaje
significativo y abandonaremos la práctica de la memorización sin comprensión
ni relación conceptual.
¿Qué y cuánto debemos subrayar?
La extensión del subrayado no es fija, por tanto, lo que debemos tener en
cuenta es que en dicho subrayado se encuentren, fundamentalmente, las ideas
principales y secundarias del texto (nos ayudan a ampliar o aclarar la idea
principal). Para saber si las ideas que hemos subrayado son las principales de
ese texto, lo correcto sería, otorgar a cada párrafo un “titulo”, y si lo que hemos
subrayado responde a ese título, es que éste, está bien hecho. De esta
manera, realizamos unas acotaciones al margen a modo de señalización,
haciendo posible el seguimiento de las ideas principales del texto.
¿Cómo debemos subrayar?
Antes de empezar a subrayar debemos hacer una lectura previa del texto
(fijándonos en palabras en negrita y estructura del texto) y posteriormente
efectuar un lectura comprensiva para poder realizar el subrayado con sentido.
Si empezamos a subrayar sin saber previamente de qué va el texto,
cometeremos el error de destacar cuestiones sin importancia.
Este subrayado puede realizarse con distintos colores o marcas para
diferenciar la importancia de las ideas o su jerarquización, teniendo en cuenta
que esta técnica pretende que el estudio posterior sea lo más eficiente posible.
Existen multitud de formas de realizar un subrayado, en el caso de
desconozcas dichas posibilidades, coméntalo con un pedagogo/a para que te
oriente en la práctica de dicha técnica y su versatilidad.
Como sabemos, el estudio de una materia es arduo y necesitamos distintos
recursos para poder ayudar a nuestra mente en la asimilación de conceptos.
En este sentido, esta técnica favorece al estudio activo y a la comprensión de
un texto, captando lo esencial de éste. Además, fija nuestra atención y hace
que desarrollemos nuestra capacidad de síntesis. Por tanto, aunque el
subrayado parezca fácil o incluso a veces prescindible, debemos recordar que
nuestra mente necesita ser ejercitada, sin llegar a fatigarla. Por tanto, llevar a
cabo técnicas de estudio adecuadas y una buena planificación, ayudarán a que
esta tarea sea más amena y significativa.