Cadena de Valor de La Industria Lactea

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 19

EL CONSUMIDOR Y SU PARTICIPACIÓN EN LA CADENA DE

VALOR DE LA INDUSTRIA LÁCTEA

Área de investigación: Entorno de las organizaciones

Adriana Gabriela Cahue Olvera


ESCA, Tepepan. Instituto Politécnico Nacional
México
[email protected]

María Angélica Cruz Reyes


Facultad de Contaduría y Administración
Universidad Nacional Autónoma de México
Instituto Politécnico Nacional, ESCA, Tepepan
México
[email protected]
EL CONSUMIDOR Y SU PARTICIPACIÓN EN LA CADENA
DE VALOR DE LA INDUSTRIA LÁCTEA

Resumen

La industria láctea es la tercera agroindustria más relevante en México,


no solamente por su aportación en lo económico, sino que en la salud
por lo que representa en el beneficio nutricional para la población, sin
perder de vista que la demanda de productos lácteos se encuentra
relacionada estrechamente con los procesos de urbanización y cambios
de hábitos de alimentación por parte de los consumidores.

Los cambios en los hábitos de consumo, tienden a incorporar una


demanda adicional de distintos tipos de productos que no siempre se
encuentran disponibles en el medio rural, ya sea por las limitaciones
en la disponibilidad de los productos o por la facilidad con la que los
consumidores pueden hacen uso de mercados tradicionales en los que
los alimentos cuentan con mayor frescura y menor grado de
industrialización (García, 2012).

Por otra parte, los consumidores y los estímulos a los que se enfrentan
(García, 2012) tienen cada día una mayor influencia en el desarrollo de
la agroindustria y la adquisición de sus productos, y es por esto que
(Royo Bordonada, 2013) indica que las empresas agroalimentarias,
hacen uso de la vulnerabilidad del consumidor y compiten en la
presentación de sus productos ejerciendo diversas tácticas para captar
al consumidor.

De este modo, los consumidores y el análisis de su comportamiento al


momento de efectuar su compra hoy en día juegan un papel muy
importante para las empresas ya que puede determinar el nivel de
demanda y producción de productos.

El presente trabajo de investigación presenta el análisis de la cadena de


valor de la industria láctea y describe la importancia que el
consumidor tiene dentro de ésta. Primero se realiza el análisis de
información en cuanto al comportamiento del consumidor y de la
cadena de valor; segundo, se identifica la estructura que integra la
cadena de valor de la industria láctea, finalmente se presentan las
tendencias y expectativas que los consumidores tienen de ésta

Palabras clave: Consumidor, Cadena de valor, Industria láctea

Introducción

El estudio de las cadenas de valor es considerado reciente, teniendo


como enfoque a la organización y su producción en un contexto de
competencia, sin embargo, mediante los estudios de Gereffi se ha
puntualizado que la gobernanza de una cadena de valor define su
estructura y la posición de una organización dentro del mercado.

Dentro del ámbito organizacional resulta preciso un continuo análisis


de la cadena global de valor, la participación que la organización tiene
dentro de ésta y el impacto que los consumidores les representan para
establecer las estrategias necesarias y mantener ventajas competitivas
dentro del mercado.

En la industria láctea, el comportamiento de los consumidores y sus


cambios en los regímenes alimenticios adquieren importancia debido
a la demanda de productos que contribuyan a mejorar las condiciones
de salud de la población, lo cual requiere un mayor grado de
industrialización dentro del sector o en algunos casos la adopción de
nuevos métodos de producción que empaten con la ideología que los
consumidores mantienen.

Tanto el incremento de la población en las zonas urbanas, los nuevos


estilos de vida y la necesidad de cubrir la demanda de alimentos por
parte de los consumidores, propicia la generación de nuevas
estrategias agroindustriales que permiten garantizar el desarrollo y
mantenimiento tanto de las zonas urbanas como rurales, tomando en
cuenta la función que éstas tienen en el proceso del desarrollo del país
(FAO, 1997).

Considerando el planteamiento anterior, se deduce que para la


obtención de productos que garanticen la inocuidad alimenticia, el
tiempo de anaquel y la aportación de nutrientes, la industria láctea
debe realiza un adicionamiento de valor a sus productos mediante
diversas actividades que derivan en una mayor disponibilidad de
productos en el mercado y por ende una mayor variación en los precios
de los mismos.

De este modo, las empresas agroalimentarias, hacen uso de la


“vulnerabilidad” del consumidor y compiten en la presentación de sus
productos ejerciendo diversas tácticas para captar al consumidor,
haciéndolo sentir “especial” con base a sus circunstancias personales
mediante una gran variedad de productos.

El presente trabajo, muestra los primeros hallazgos del análisis de la


cadena de valor de la industria láctea y describe la importancia que el
consumidor y sus cambios de preferencias y hábitos tiene dentro de
ésta para la apertura de nuevos mercados.

Relevancia del comportamiento del consumidor en los negocios

Los consumidores son aquellos individuos que utilizan las mercancías


o artículos que compran (Mercado, 2004) y cuyo comportamiento
resulta ampliamente relevante para que las empresas cuenten con
información detallada respecto a qué, dónde, cuánto, cuándo y por qué
compran y/o consumen ciertos artículos (Corona, 2012) y a partir de
esta información enfocar esfuerzos estratégicos y calcular la demanda
de productos.

El análisis del consumidor se fundamenta en la microeconomía a partir


de diversos estudios realizados entre los años de 1950 y 1960 que
dieron origen a la teoría clásica del consumidor, en donde la conducta
de consumo se considera como un proceso de elección basado en la
utilidad que proporcionan los productos y la limitación económica del
consumidor, es decir, la racionalidad económica.

Sin embargo, Schiffman y Kanuk, (2005) plantean que para el análisis


de la relación oferta-demanda se ha hecho necesario cuestionar cuáles
son los deseos de los consumidores para saber qué bienes y servicios
resulta necesario producir. De este modo, con la finalidad de conocer
con mayor profundidad a los consumidores, se hace evidente la
necesidad de analizarlos desde diversas perspectivas dando origen a
nuevos estudios dentro de las ciencias sociales.
Por lo tanto, el comportamiento del consumidor, su impacto
económico y su relación con la administración de negocios debe
conceptualizarse desde una perspectiva amplia, ya que, tal y como lo
indican Shiffman y Kanuk, (2005), permite analizar el conjunto de actos
que despliegan los individuos para buscar, comprar, usar, evaluar y
disponer de productos.

La relevancia del análisis del comportamiento del consumidor para las


empresas radica en primer lugar en que éste forma parte de un proceso
integral que cubre todas las actividades que conllevan una compra
(Ver figura 1). y en las que al menos un individuo interviene
activamente.

Figura No. 1
Etapas del proceso de compra

• Detección de Compra • Sensaciones de


necesidades satisfacción o
• Búsqueda de insatisfaccion
información • El consumidor posteriores a la
selecciona un compra
• Precepción de
establecimiento
ofertas
• Se delimitan las
• Evaluación de
condiciones del
alternativas
intercambio
• Selección
• Influencia de
variables
Precompra Postcompra

Fuente: Elaboración propia con información de Moallá, Gómez y Quintanilla (2004)

A partir de la figura anterior es posible describir que la percepción que


los consumidores tienen de los productos y ofertas existentes en un
mercado adquieren cierto nivel de importancia para la toma de
decisión de compra de los consumidores, tal y como lo mencionan
Hernández y Montaner (2003), lo cual refuerza la necesidad de un
enfoque semi-racional.
Schiffman y Kanuk (2005), señalan que la menor diferencia a la que
una persona puede captar un segundo estímulo sobre un producto es
el “umbral diferencial”. Para una empresa que busca mejorar la calidad
de un producto, debe variar ésta por encima del umbral diferencial de
los consumidores, de manera que la mejora sea percibida. Pero el
cambio tampoco debe ser muy alto o estaría desperdiciando recursos
redundantes; las personas podrían darse cuenta de la mejora en un
punto más bajo.

Por otra parte, el conocimiento pleno del consumidor, representa para


la empresa una ventaja competitiva respecto a aquellas que integran el
mismo sector o industria ya que, ignorar los gustos y preferencias de
los consumidores podría implicar un riesgo de que los consumidores
sean atraídos e influenciados para adquirir productos de la
competencia e inclusive sustitutos.

Por ende para las empresas e industrias, el análisis del


comportamiento del consumidor, implica diferentes orientaciones:

 Orientación a la producción:
Dentro de este enfoque, se considera que los consumidores
prefieren los productos con alta disponibilidad y de bajo costo, por
lo que las empresas se centran en hacer “bien” sus productos,
alcanzar economías de escala y tener una amplia distribución.
 Orientación de ventas:
Infiere que los consumidores deben ser estimulados para comprar
más, por lo que las empresas tienen una amplia gama de
herramientas de venta y promoción, adicionalmente, cuentan con
el suficiente desarrollo tecnológico para aumentar la producción,
reducir costos, hacer frente a la competencia y ofrecer diversas
opciones a los consumidores.
 Orientación de marketing:

Como se ha mencionado con anterioridad, el estudio del


comportamiento del consumidor tiene sus orígenes en la economía,
como respuesta a situaciones en las que la oferta es mayor que la
demanda, surge el análisis del consumidor con orientación de
marketing, en donde las empresas enfocan sus esfuerzos en identificar
y satisfacer las necesidades de los consumidores.
Por otra parte, de acuerdo con el premio Nobel de economía Richard
Thaler (2005), no siempre ocurre un comportamiento racional debido
a tres razones: racionalidad limitada, la percepción de justicia y la falta
de autocontrol, por lo tanto, desde una óptica estratégica, se debe tener
en cuenta que los consumidores no siguen una secuencia al momento
de realizar una compra, sino que se ven afectados por diversos
factores.

Galbraith (Arribas Macho, 2013) con su teoría de dependencia


menciona que una empresa “crea mayores necesidades y la necesidad
de una mayor producción [...] la producción crea las necesidades que
procura satisfacer no de una forma pasiva, a través de la competencia,
sino de una forma activa, mediante la publicidad y las demás
actividades relacionadas con ésta.”

Adicionalmente, salta el hecho de que los productores y/o empresas,


continuamente cambian el satisfactor de las necesidades a través de la
publicidad, generando un hábito que finalmente conlleva al
consumismo. Por lo tanto, el proceso para la toma de decisiones debe
incluir tantas variables como sea necesario para generar “situaciones”
que faciliten el reconocimiento de las necesidades del consumidor.

En la Figura 2 se muestra a manera de esquema los principales factores


que pueden influenciar las actitudes o necesidades del consumidor y
por lo tanto modificar su decisión de compra.
Figura No. 2
Influenciadores de la toma de decisión del consumidor

Fuente: Hawkins & Addison, 1994

La Figura 2 muestra la relación que existe entre las experiencias y


necesidades del consumidor con sus estilos de vida y el entorno donde
se encuentran.

La industria Láctea en México

Por la parte de la industria láctea, se ha observado que debido a las


características climatológicas y la organización pecuaria, México no ha
logrado incrementar la producción lechera (Cámara Nacional de
Industriales de la Leche, 2011) por lo que se ubica en el octavo lugar
como productor de leche a nivel mundial (Servicio de información
agroalimentaria y pesquera, 2016). Y en el contexto nacional, es la
tercera en importancia.

La producción láctea en México es variada principalmente por la


tecnología, la economía, el clima, así como las costumbres y tradiciones
característicos de cada uno de los estados que conforman al país. Tanto
la SAGARPA como la CANILEC han tipificado las regiones
productivas del país, de este modo, basados en las características de
cada una de ellas, señalan sus ventajas productivas clasificadas en dos
regiones: el Altiplano central y zonas tropicales.

Siendo una de las principales características de las regiones


productoras de leche es la presencia de agua, la cual permite una
mayor disponibilidad de pastos y forrajes para la alimentación de
ganado y pastoreo natural que permita un mayor aprovechamiento de
recursos para hacer a la industria competitiva y autosuficiente.

De acuerdo con el “Panorama de la leche en México” (SAGARPA,


2017) al segundo semestre del 2017, se ha registrado una producción
aproximada de 5, 670 millones de litros de leche, los cuales representan
un 2.1% más que el mismo periodo del año anterior, mientras que la
elaboración de derivados lácteos, alcanzó un volumen de 469,408
toneladas, con un valor de 19,657 millones de pesos.

Sin embargo, el abasto nacional es cubierto en un 58% por


importaciones, sólo el 42% es cubierto por la producción nacional. Para
el segundo trimestre de 2017, la cantidad de leche importada alcanza
las 162, 669 toneladas de leche, 18.5% más que en 2016 (web Cámara
Nacional de Industriales de la Leche [CANILEC], 2017). De este modo,
México ha sido un país deficitario que no solo recurre a la importación
de leche sino que requiere importar aproximadamente un 80% de sus
materias primas (Cámara Nacional de Industriales de la Leche, 2011).

Pese a las cifras presentadas, la producción láctea en México se


desarrolla a lo largo de todo su territorio; de acuerdo con el boletín de
leche (SAGARPA, 2016), la producción nacional proviene en un 63%
de ganado especializado y el 37% de ganado de doble propósito,
siendo los principales estados productores Jalisco, Coahuila, Durango
y Chihuahua con una aportación conjunta del 45% de la producción
nacional.

La leche producida, dependiendo su finalidad, puede ser utilizada


como producto final o como materia prima en diversos procesos de
industrialización, los cuales son llevados a cabo en aproximadamente
300 empresas formales a nivel nacional e integradas en un 10% por
grandes empresas, 30% por medianas y un 60% por pequeñas
empresas, ubicadas principalmente al norte del país (Coordinación
general de ganadaría, 2010).
México tiene un consumo per cápita de 110 litros al año, incluyendo
derivados lácteos, por debajo de los 150 litros recomendados por la
Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO, 2016), mientras que en el consumo de productos
lácteos destacan que en México se consumen anualmente alrededor de
373,000 toneladas de queso, 227,000 toneladas de mantequilla y
265,000 toneladas de leche en polvo.

García (2012) indica que el consumo de leche mantiene su nivel, debido


a la cantidad de productos diferenciados que han aparecido en el
mercado, destacando el consumo de yogurt por parte de mujeres y
niños, así como el aumento en ingesta de quesos, principalmente en la
presentación light, descremados y se mantiene en los untados,
rebanados y pre-empaquetados

Por su parte, SAGARPA (2017)menciona que el aprovechamiento de la


leche en los procesos de industrialización se distribuye de la siguiente
manera: 30.9% para la elaboración de leche pasteurizada,
homogeneizada y ultra pasteurizada; 17.6% o para leche entera y leche
para lactantes; 15.7% para quesos industriales; 9 % para yogurt; 6%
para la rehidratación de leche; 3.9% para productos como crema,
mantequilla, margarinas y grasas butíricas; mientras que el 17%
restante es utilizado para la elaboración de quesos artesanales, dulces,
y otros productos lácteos de carácter regional.

Pese a la existencia de diversas empresas formales, la Dirección


General de Industrias Básicas (2012) indica que la industrialización de
los productos lácteos derivados y su participación en el mercado, se
centra principalmente en seis grandes empresas, distribuyéndose de la
siguiente manera:

 Leches pasteurizadas y ultra pasteurizadas


Grupo Lala y Alpura, encabezan la producción con un
participación conjunta de mercado superior al 50%, seguidas por
empresas como Nestlé de México, Lechera Guadalajara, Grupo
Zaragoza, con presencia regional las dos últimas.
 Yogurts
Producidos principalmente por las empresas son Danone de
México y Sigma Alimentos, entre ambas se estima una
participación de mercado superior al 60%, seguidas por Lala,
Alpura y Nestlé de México con un 15% de participación en este
mercado.
 Quesos
Las principales empresas son Chilchota Alimentos y Sigma
Alimentos, que conjuntamente tienen una participación de
mercado del 50%, adicionalmente las empresas Lala, Alpura y La
Esmeralda cuentan con una participación aproximada del 18%.
 Cremas
Las principales empresas productoras son Alpura y Lala con una
participación superior al 50%.

A pesar de la clasificación anterior se ha observado que en la mayoría


de las ocasiones la industria láctea se relaciona sólo con la leche, crema
y quesos

El consumidor, último eslabón de la cadena de valor

El análisis de las cadenas de valor, tiene sus primeros esbozos a través


de los estudios de Alfred Hirschman en la década de los sesenta donde
destaca la importancia en el análisis económico por sus efectos hacia
atrás y hacia adelante que describe el flujo de entradas físicas en la
producción de productos, dando paso al concepto de “filiere”
(hilvanando en francés) que refiere la relación existente entre
actividades productivas, sin embargo, este análisis no era lo
suficientemente amplio para la comprensión de un sistema global
(Fernandez & Trevignani, 2015).

En recientes estudios, se ha comprendido que una cadena de valor no


debe limitarse a las actividades de una empresa, sino que ésta debe ser
una herramienta que dé apertura al análisis de factores externos que
abarcan a la totalidad de las cadenas o sistemas de valor,
convirtiéndolo en una herramienta de gran relevancia para el análisis
de las redes económicas globales (Fernandez & Trevignani, 2015)

De este modo, la cadena de valor se refiere al amplio rango de


actividades involucradas en el diseño, producción y comercialización
de un producto, cuyas actividades en el marco global “se centra en la
naturaleza y el contenido de los vínculos entre empresas y el poder que
regula la coordinación de la cadena de valor, principalmente entre los
compradores y los primeros niveles de proveedores, sin embargo es
importante no ignorar los actores en ambos extremos de la cadena”
(Gereffi, Humphrey, & Sturgeon, 2005).

Para Gereffi, una cadena global de valor incluye cuatro aspectos


básicos:

1. Una dimensión internacional que debe estar implícita en el


análisis
2. Un enfoque en el poder ejercido por las principales empresas
de los diferentes eslabones de la cadena
3. La coordinación de la cadena como una fuente clave de ventaja
competitiva que requiere redes estratégicas
4. Un aprendizaje organizativo como mecanismo de mejora o de
consolidación dentro de la cadena.

Método

El presente trabajo de investigación presenta el análisis de la cadena de


valor de la industria láctea y describe la importancia que el
consumidor para dicha cadena, tiene un alcance descriptivo.
Enseguida se presentan los pasos para alcanzar el objetivo.

1. Descripción de la conformación de la cadena de valor: a partir


del marco teórico sobre el análisis de la cadena de valor y del
comportamiento del consumidor, se puede asegurar que el análisis
trata de todo el ciclo de producción, la gobernabilidad y la
conectividad con los mercados finales, a modo tal de que el análisis
no solo considera la eficiencia, sino también los factores que
determinan la participación de grupos particulares de productores
pertenecientes a mercados finales (Kaplinsky & Morris, 2009).

En el caso particular de la industria láctea en México, el 90% del


insumo primario de los productos lácteos (leche) es comercializado
para su procesamiento entre los 19 grupos industriales con los que
cuenta el país. A continuación, se presentan los eslabones de la cadena
de valor de la industria láctea
Figura No. 3
Cadena de valor de la industria láctea

Insumos
para Envasado y
Producción Comercializa Procesa-
alimentación almacena- Distribución
ganadera ción miento
y resguardo miento
de ganado

- Forraje - Grandes - Procesa- - Pasteuriza- - Compañías -


• Alimentos granjas para miento y ción envasadoras Supermerca
energéticos ordeña transporta- • Ultrapasteu • Enlatados do
industrial ción de • Tiendas de
• Alimentos leche fria
rización • Tetrapack
protéicos • Granjas • Transforma • CEDIS convenien-
• Aditivos medianas • Acopio ción en cia
nutriciona- para leche en • Tiendas de
les ordeña polvo, abarrotes
industrial y materniza-
• Agua
artesanal da, con-
potable
• Granjas densada,
• Equipo de
pequeñas evaporada
confina-
para o
miento y
ordeña rehidratada
control
sanitario
artesanal • Saboriza-
ción
• Elabora-
ción de
derivados
lácteos

Elabora- Autocon-
Almacena
ción de sumo
-miento
deriva- - Merca-
de leche
dos dos
caliente
lácteos artesa-
nales

Fuente: Elaboración propia

2. Factor de compra de los consumidores: cabe señalar que el consumo


productos lácteos en México está ligado al ingreso, a los precios y las
preferencias de los consumidores. Un poco más del 40% del consumo
total es en forma de leche fluida y el resto se utiliza en productos
manufacturados (Servicio de información agroalimentaria y pesquera,
2016).

3. Cambios en los regímenes alimentarios: actualmente se enfocan


hacia productos que contribuyen a mejorar las condiciones de salud de
la población, tales como productos lácteos reducidos en grasa o azúcar,
productos adicionados con vitaminas, pre y prebióticos o fibra, que no
proceden directamente de la leche; sin embargo, al ser adicionados,
éstos representan una opción funcional para mejorar la dieta de los
consumidores a través de la industrialización de la leche y su
transformación en derivados (Secretaría de Economía - Dirección
General de Industrias Básicas, 2012).

Adicionalmente, Schiffman (2015) menciona que la urbanización


fomenta en los consumidores una rápida evolución social que dificulta
la consolidación de su estilo de vida al modificar el consumo con la
finalidad de que el individuo mantenga con función a sus recursos los
mejores niveles de bienestar.

De esta manera, los cambios en los regímenes alimentarios han


generado un enfoque hacia productos que contribuyan a mejorar las
condiciones de salud de la población, tales como productos lácteos
reducidos en grasa o azúcar, productos adicionados con vitaminas, pre
y prebióticos o fibra, que no proceden directamente de la leche sin
embargo, al ser adicionados con éstos, representan una opción
funcional para mejorar la dieta de los consumidores y aportar los
nutrientes requeridos para el cuidado de su salud (Secretaría de
Economía - Dirección General de Industrias Básicas, 2012).

4. La tendencia de la industria de alimentos: en los últimos años está


enfocada en elaborar productos lácteos que tomen en cuenta que
aproximadamente un 55% de los consumidores está consciente de la
relación entre una dieta sana y la salud, por lo que buscan que los
productos que consumen les ayuden a reducir peso y mantenerse
sanos. Por lo que la industria láctea ha tenido que responder mediante
la elaboración de productos como:

 Leches adicionadas de vitaminas y minerales, reducidas en


aporte energético (grasa y azúcar) y deslactosadas.
 Leches en polvo: adicionadas de vitaminas y minerales y
prebióticos para diferentes nichos de mercado.
 Yogurts: reducidos en aporte energético, deslactosados,
adicionados de probióticos y/o fibra soluble (prebióticos),
acompañados de cereales.
 Quesos tipo Petit Suisse: adicionados de vitaminas y
minerales, reducidos en aporte energético
 Crema: reducida en aporte energético.
 Mantequilla: reducida en aporte energético, untables y
de botella oprimible, de sabores.
Adicionalmente, referente a la extensión de la cadena de valor de la
industria láctea, es posible deducir que con base a los nuevos hábitos
de consumo, enfocados en productos orgánicos o con bajo nivel de
procesamiento industrial, da cabida a nuevos mercados que se frenan
en el autoconsumo, sino que ofrecen a sus consumidores una
alternativa para mejorar su salud.

El auge de este tipo de productos ha llevado a organismos como


SAGARPA a elaborar a partir del año 2014, el distintivo orgánico
mexicano, el cual no solo brinda mayor confianza en los consumidores,
sino que amplía las posibilidades de exportación y crecimiento
económico.

De este modo, a partir de la demanda por parte de los consumidores


de productos que favorezcan su salud, los productos orgánicos han
representado una tendencia exitosa para el país, posicionándolo entre
los 20 principales países exportadores y en el 4° lugar como productor
de alimentos orgánicos. (SAGARPA, 2017)

Conclusiones

Adicionalmente, la producción orgánica en México es de gran


importancia social, ya que en ésta participan los sectores más pobres
del medio rural, grupos indígenas (poco más del 50% de los
productores) y pequeños productores de escasos recursos, siendo los
principales estados productores de alimentos orgánicos en el país son
Chiapas, Oaxaca, Michoacán, Chihuahua y Guerrero, que concentran
82 por ciento de la superficie orgánica total.

Finalmente, es importante resaltar que los consumidores que han


impulsado el mercado orgánico, la producción y consumo de este tipo
de alimentos, es la generación nacida entre 1979 y 2000 (SAGARPA,
2017) es quien está impulsando este mercado, pues se consideran
consumidores más saludables y naturales, además gustan de probar
alimentos étnicos y artesanales, lo cual ha ocasionado un crecimiento
anual del 10% en la producción orgánico-artesanal de diversos
productos.

Cabe señalar que la continuación del presente trabajo es la realización


del trabajo empírico que dé cuenta de la relación de los estilos de vida
del consumidor en un contexto determinado con las
actitudes/necesidades y experiencias de compra.

Referencias

Alonso, J., & Grande, I. (2016). Comportamiento del consumidor, decisiones


y estratégias de marketing. Madrid: ESIC.

Anda, C. (2005). Estructura socioeconómica de México. México: Limusa.

Arribas Macho, J. (2013). Sociología del consumo e investigación de


mercados. Madrid, España: Universidad Nacional de Educación a
Distancia.

Cámara Nacional de Industriales de la Leche. (2011). EL libro blanco de


la leche y los productos lácteos. Ciudad de México, México: Cámara
Nacional de Industriales de la Leche.

Coordinación general de ganadaría. (2010). Situación actual y


perspectivas de la producción de leche de bovino. México: SAGARPA.
Corona Vazquez, G. (2012). Comportamiento del consumidor. México:
Red tercer milenio.

Cuevas, R. (2008). Ingeniería de alimentos, calidad y competitividaden


sistemas de la pequeña industria alimentaria con énfasis en América Latina y
el Caribe. Roma: FAO.

Dávila, J. /. (2014). Panorama de la obesidad en México. México: Revista


Medica del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Ekelund, R. B., & Hébert, R. F. (2006). Historia de la Teoría Económica y


su Método. México: McGraw-Hill Interamericana.

Eysenk, M. W. (2009). Fundamentals of phsycology.

FAO. (1997). El estado mundial de la agricultura y la alimentación. Roma,


Italia: FAO.

FAO. (2016). Leche y productos lácteos- OCDE-FAO perspectivas agrícolas


2016-2025. FAO.
Fernandez, V., & Trevignani, M. (2015). Cadenas globales de valor y
desarrollo: perspectivas crítcas desde el sur global. Revista de Ciencias
Sociales, 58, 499-536.

Food and agriculture organization of the united nations, FAO. (2013).


Milk and dairy products in human nutrition. Roma: FAO.

García, P. (2012). La alimentación de los mexicanos. Cambios sociales y


económicos, y su impacto en los hábitos alimenticios. México: Soluciones de
Comunicación, S.C.

Gereffi, G. (2001). Las cadenas productivas como marco analítico para


la globalización. Problemas de desarrollo, 32(125), 1-30.

Gereffi, G., Humphrey, J., & Sturgeon, T. (2005). The Governance of


Global Value Chains. Review of International Political Economy, 12(1), 78-
104.

Gil Juárez, A. e. (2004). Psicología económica y del comportamiento del


consumidor. Barcelona, España: UOC.

Hawkins, B., & Addison, W. (1994). Comportamiento del consumidor,


repercusiones en la estrategia de marketing. Estados Unidos:
Iberoamericana.

Henao, O., & Córdoba L., J. F. (2007). Comportamiento del


consumidor, una mirada sociológica. Entramadovol. 3, núm. 2, pp. 18-
29.

Hernández, M., & Montaner, M. (2003). Racionalidad y conducta del


consumidor: el impacto de la utilidad de transacción y el precio de referencia.
Santiago, Chile: Universidad de Chile.

James Mora, J. (2002). Introducción a la teoría del consumidor, de la


preferencia a la estimación. Cali, Colombia: Universidad ICESI.

Kaplinsky, R., & Morris, M. (2009). Un manual para la investigación de


cadenas de valor. Canadá: International Development Research Center.
L.G., S. (2015). Comportamiento del consumidor. México: Pearson.
Lavoie, M. (2004). La economía postkeynesiana, un antídoto del pensamiento
único. Barcelona, España: Icaria Antrazyt.

Martínez, I. /. (2005). La alimentación en México. Un estudio a partir de la


encuesta nacional de ingresos y gastos de los hogares y de las hojas de balance
alimenticio de la FAO. México: Ciencia UANL.

Mercado, S. (2004) Comportamiento del consumidor.Grupo Vanchri.


Mollá, A. B., Gómez, M. A., & Quintanilla, I. (2004). Comportamiento del
Consumidor. Barcelona, España: UOC.

OCDE/FAO. ( 2016). OCDE-FAO Agricultural Outlook. Paris:


OCDEPublishing.

Rivera, J., Arellano, R., & Molero, V. (2013). Conducta del consumidor,
estratégias y tácticas aplicadas al marketing. Madrid, España: ESIC.

Royo Bordonada, M. Á. (2013). La alimentación y el consumidor. Madrid,


España: Ministerio de economía y competitividad.

Royo, M. (2013). La alimentación y el consumidor. Madrid, España:


Escuela Nacional de Sanidad, Instituto de salud Carlos III - Ministerio
de Economía y Competitividad.

SAGARPA. (2016). Boletín de la leche. México: SAGARPA.

SAGARPA. (2017). Panorama de la leche en México. México: SAGARPA.

SAGARPA. (2017). Producción de alimentos orgánicos, tendencia exitosa


para México. México.

Schiffman, L., & Kanuk, L. (2005). Comportamiento del consumidor.


Pearson Prntice Hall.

Secretaría de Economía - Dirección General de Industrias Básicas.


(2012). Producción láctea en México. México: Secretaría de Economía.

Servicio de información agroalimentaria y pesquera. (2016). Boletín de


leche, octubre-diciembre 2016. México: SAGARPA.
Servicio de información agroindustrial y pesquera. (Junio, 2017).
Panorama de la leche en México. México: SAGARPA.

Shiffman, L. G. (2015, 11va Edición). Comportamiento del consumidor.


México: Pearson

Silva, A. R. (2017). Evolución y análisis del pensamiento de Michael


Porter. Su aplicación e implicancias para las cadenas agroalimentarias.
Universidad de Buenos Aires, 1-7.

Solomon, M. R. (2008). Comportamiento del consumidor. México: Pearson


Education.

Thaler, R. (2005). Misbehaving: The making of behavioral economics.


Estados unidos: W.W. Norton & Company

También podría gustarte