Razones Por Las Que Debemos Enseñar La Biblia

Deuteronomio 6:1-9
6 Estos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos que Jehová vuestro Dios mandó que os
enseñase, para que los pongáis por obra en la tierra a la cual pasáis vosotros para tomarla; 2 para que
temas a Jehová tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando, tú, tu hijo,
y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida, para que tus días sean prolongados. 3 Oye, pues, oh Israel,
y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os
multipliquéis, como te ha dicho Jehová el Dios de tus padres.
4
Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de
toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
6
Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
7
y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al
acostarte, y cuando te levantes.
8
Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos;
9
y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
RAZONES POR LAS QUE DEBEMOS ENSEÑAR LA BIBLIA

Deuteronomio 6:1-9
INTRODUCCION
 Moisés exhorta al pueblo a guardar los mandamientos, estatutos y decretos de Dios, con aquel temor
que es el principio de la sabiduría (Prov. 1: 7).
 El objetivo de la enseñanza de las Escrituras es que: Guarden los mandamientos de Dios y los pusieran
por obra.
 Moisés se esforzó para que en la mente y el corazón de los hijos de Israel quedasen afianzados en su fe
y lealtad al Dios que los sacó de Egipto, hizo de ellos una nación santa y estaba a punto de introducirlos
en Canaán.
Considerando lo que le había sucedido a la generación anterior. Moisés apela fervientemente a Israel para que no
cometa el mismo error, para que guarden la ley y la pongan por obra. Si obedecen la ley, vivirán y tomarían
posesión de Canaán.
Veamos tres razones por las que debemos enseñar la Biblia.
A. LA BIBLIA NOS ENSEÑA A CONOCER A DIOS. Como:

a. Jehová nuestro Dios. Que Jehová es nuestro Dios. El Dios a quien amamos y servimos, por el que somos
protegidos y cuidados, es Jehová, es decir, el ser infinita y eternamente perfecto, auto-existente y todo-
suficiente.
b. Jehová uno es. Que El es único Dios vivo y verdadero. Nadie ni nada puede arrogarse la Deidad, sino
sólo El en exclusiva. La fe firme en esa verdad debía ser suficiente para mantenernos a los creyentes libres
del apego idolátrico a las cosas de este mundo.
El monoteísmo, la creencia en un solo Dios, era una característica distintiva de la religión hebrea. Muchas
religiones antiguas creían en muchos dioses. Pero el Dios de Abraham, Isaac y Jacob es el Dios de toda la
tierra, el único verdadero Dios. Juan 17:3
Bienaventurados somos los que cada mañana y cada tarde decimos: Oye Israel: Jehová es nuestro Dios;
Jehová es uno.
Dichosos los que tienen a éste por su único Dios, aél aman por encima de todo, y a él sirven con todo su
ser; porque tienen al único amo que ni cambia ni se puede morir; y al único bienhechor de quien asirse
y a quien refugiarse – Stg. 1: 17.
B. LA BIBLIA NOS ENSEÑA A AMAR A DIOS. Con todo
a. Nuestro corazón. Nos demanda AMOR; el corazón indica el centro de la personalidad y por lo tanto de la
conducta. El alma es el centro de los deseos e inclinaciones. La s fuerzas representan las energías operativas del
ser humano y , con mucha probabilidad, las posesiones o bienes. La mente es el centro del discernimiento.
b. Nuestra alma. La obediencia de Israel debía surgir de una relación basada en el amor. Este versículo fue
considerado por Jesús como el primero y mayor mandamiento. El corazón era considerado el asiento de la
mente y la voluntad. Cuando Jesús citó este pasaje en Marcos 12.30 y Lucas 10.27, añadió la palabra «mente»,
probablemente para destacar lo «consciente» de esa actitud.
Otro motivo para obedecer a Dios era que sólo Israel tenía el alto privilegio de ser su pueblo. Sólo para Israel
Jehová estaba tan cerca, les había hablado con voz audible y había firmado con ellos un pacto.
Dios exige a su pueblo absoluta lealtad
C. LA BIBLIA NOS ENSEÑA A CONSERVAR NUESTRA FE. Por medio de:

a. La meditación personal. Los medios para conservar y observar la verdadera religión en el corazón del
hogar, familia, para que no se marchite ni decaiga. Estos medios son:
a. La meditación de la Palabra de Dios. Estarán sobre tu corazón. Repetirlas. 2 Timoteo 3: 15
b. La educación a los hijos. Las repetirás a tus hijos
Tenemos que amar a Dios, pensar constantemente en sus mandamientos, enseñar sus mandamientos a nuestros
hijos y vivir cada día según los principios de su Palabra. Dios enfatiza la importancia de que los padres
enseñen la Biblia a sus hijos. No se puede delegar esta responsabilidad a la iglesia y las escuelas cristianas.
Cuando más nos familiarizamos con las Escrituras, más las amaremos, las admiraremos, nos alimentaremos de
ellas y estaremos deseosos de comunicarlas a otros, comenzando por nuestra familia.
Filaterías: eran las cintas que se ataban a la frente y en las que se escribían los más importante
del shemá, como un recordatorio ante sus ojos
Nos recuerden las bondades del Señor y nuestro deber de serle agradecidos.
b. La educación familiar
6.4-9 Este pasaje proporciona el tema central de Deuteronomio. Establece un patrón que nos ayuda a
relacionar la Palabra de Dios con nuestra vida diaria. Tenemos que amar a Dios, pensar constantemente en sus
mandamientos, enseñar sus mandamientos a nuestros hijos y vivir cada día según los principios de su Palabra.
Dios enfatiza la importancia de que los padres enseñen la Biblia a sus hijos. No se puede delegar esta
responsabilidad a la iglesia y las escuelas cristianas. La Biblia ofrece tantas oportunidades para obtener lecciones
objetivas y prácticas que sería una pena estudiarlas sólo un día a la semana. Las verdades eternas se aprenden de
una forma más efectiva en el ambiente amoroso de un hogar donde se teme a Dios.1
Deuteronomio 6.4–6 es el texto más importante del Antiguo Testamento. Jesús lo llamó el más grande
mandamiento de la Biblia y aún se mantiene como la principal confesión de fe entre los judíos. La verdad
fundamental para la redención del mundo es que hay sólo un Dios que crea y redime. Pero el Nuevo Testamento
muestra que Dios es Padre, Hijo y Espíritu Santo. Compárese la unidad de Dios con la unidad del ser humano
hecho a su imagen: el ser humano se compone de alma, cuerpo y espíritu (1 Ts 5.23). El ser humano no es tres
«seres» sino «un solo ser» con elementos físicos, espirituales y emocionales.
Pasos hacia la devoción dinámica Deuteronomio añade mucho a nuestro conocimiento de lo que es
estar consagrado a Dios con todo nuestro corazón y toda nuestra alma. Hace énfasis en la necesidad de una
entrega completa y llama a su pueblo a seguirlo con todas sus fuerzas. 1.42
Busca y depende de Dios. Sin eso la victoria no sólo es improbable sino imposible.
1
4.1, 2, 6–8
7
La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma;
El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo.
8
Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón;
El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos.
9
El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre;
Los juicios de Jehová son verdad, todos justos.
10
Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado;
Y dulces más que miel, y que la que destila del panal.
11
Tu siervo es además amonestado con ellos;
En guardarlos hay grande galardón.
12
¿Quién podrá entender sus propios errores?
Líbrame de los que me son ocultos.
13
Preserva también a tu siervo de las soberbias;
Que no se enseñoreen de mí;
Entonces seré íntegro, y estaré limpio de gran rebelión.
14
Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti,
Oh Jehová, roca mía, y redentor mío.

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Deuteronomio 6:1-9

RAZONES POR LAS QUE DEBEMOS ENSEÑAR LA BIBLIA

Veamos tres razones por las que debemos enseñar la Biblia.

A. LA BIBLIA NOS ENSEÑA A CONOCER A DIOS. Como:

C. LA BIBLIA NOS ENSEÑA A CONSERVAR NUESTRA FE. Por medio de:

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