El Amparo Como Sistema de Protección Constitucional

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UNIVERSIDAD MARIANO GÁLVEZ

EXTENSIÓN MALACATÁN

3ER SEMESTRE
CARRERA: LICENCIATURA EN CIENCIAS JURÍDICAS Y
SOCIALES.
LICENCIADA VICTORIA NOHEMÍ DE LEÓN
CURSO: DERECHO CONSTITUCIONAL DE GUATEMALA

TEMA:
EL AMPARO COMO SISTEMA DE PROTECCIÓN
CONSTITUCIONAL

NOMBRE:
KARLA FLORIDALMA GUTIERREZ MÉNDEZ
CARNET:
6650-19-2562
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN.......................................................................................................1

El amparo...................................................................................................................2

a) Corte de Constitucionalidad de Guatemala........................................................2

 Funciones........................................................................................................2

 Integración y composición...............................................................................3

b) Origen del amparo..............................................................................................4

c) Conceptualización...............................................................................................5

d) Definición.............................................................................................................6

e) Naturaleza jurídica del amparo...........................................................................7

f) Finalidad del amparo...........................................................................................8

g) Casos de procedencia........................................................................................8

h) Abusos en el planteamiento del amparo............................................................9

 La frivolidad y la improcedencia....................................................................10

i) Tramite de la acción de amparo y esquema del mismo...................................11

CONCLUSIONES....................................................................................................13

E-GRAFÍA................................................................................................................14
INTRODUCCIÓN

La tradición constitucional guatemalteca, desde que con la reforma de la


Constitución en 1921 se introdujo el amparo como categoría jurídica particular,
utilizó los términos ``derecho de amparo'' o simplemente ``amparo''. No fue sino
hasta las constituciones de 1956 y 1965, que se habló, por un lado, de ``derecho a
pedir amparo'' y, por otro, que el amparo se entablaría ``mediante un recurso''.
La Constitución de 1985, en el título VI, dedicado a las ``Garantías
constitucionales y defensa del orden constitucional'', incluye el capítulo II,
dedicado al amparo y al artículo 265, que bajo el acápite ``procedencia del
amparo'' dispone que se ``instituye el amparo con el fin de proteger a las personas
contra las amenazas de violaciones a sus derechos, o para restaurar el imperio de
los mismos cuando la violación hubiere ocurrido''. Y agrega que ``no hay ámbito
que no sea susceptible de amparo, y procederá siempre que los actos,
resoluciones, disposiciones o leyes de autoridad lleven implícita una amenaza,
restricción o violación a los derechos que la Constitución y las leyes garantizan''.
La Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad (en adelante Ley
de Amparo), en la parte considerativa, declara que ``de conformidad con los
principios en que se basa la organización democrática del Estado, deben existir
medios jurídicos que garanticen el irrestricto respeto a los derechos inherentes al
ser humano, a la libertad de su ejercicio y a las normas fundamentales que rigen la
vida de la República de Guatemala, con el fin de asegurar el régimen de derecho''.
"Para tales propósitos debe emitirse una ley que desarrolle adecuadamente los
principios en que se basa el amparo, como garantía contra la arbitrariedad".

1
EL AMPARO COMO SISTEMA DE PROTECCIÓN CONSTITUCIONAL

El amparo

a) Corte de Constitucionalidad de Guatemala


La Corte de Constitucionalidad (CC) (oficialmente La Honorable Corte de
Constitucionalidad de la República de Guatemala) es el tribunal permanente
de jurisdicción privativa, cuya función esencial es la defensa del orden
constitucional. Además actúa como Tribunal Extraordinario de Amparo.
La Corte de Constitucionalidad actúa como tribunal colegiado independiente de los
demás Organismos del Estado y ejerce funciones específicas que le establece
la Constitución Política de la República, la Ley de Amparo, Exhibición Personal y
de Constitucionalidad y demás leyes constitucionales. La independencia
económica es garantizada con un porcentaje de los ingresos que correspondan
al Organismo Judicial.
 Funciones
Según el artículo 272 de la Constitución Política de la República de Guatemala,
establece que Corte de Constitucionalidad tiene las siguientes funciones:
a) Conocer en única instancia de las impugnaciones interpuestas contra leyes o
disposiciones de carácter general, objetadas parcial o totalmente de
inconstitucionalidad;
b) Conocer en única instancia en calidad de Tribunal Extraordinario de Amparo en
las acciones de amparo interpuestas en contra del Congreso de la República de
Guatemala, la Corte Suprema de Justicia, el Presidente de la República de
Guatemala y el Vicepresidente de la República de Guatemala;
c) Conocer en apelación de todos los amparos interpuestos ante cualquiera de los
tribunales de justicia. Si la apelación fuere en contra de una resolución de amparo
de la Corte Suprema de Justicia, la Corte de Constitucionalidad se ampliará con
dos vocales en la forma prevista en el artículo 268 de la Constitución;
d) Conocer en apelación de todas las impugnaciones en contra de las leyes
objetadas de inconstitucionalidad en casos concretos, en cualquier juicio, en
casación, o en los casos contemplados por la Ley de la Materia;
e) Emitir opinión sobre la constitucionalidad de los tratados, convenios y proyectos
de ley, a solicitud de cualquiera de los Organismos del Estado;
f) Conocer y resolver lo relativo a cualquier conflicto de jurisdicción en materia de
constitucionalidad;
g) Compilar la doctrina y principios constitucionales que se vayan sentando con
motivo de las resoluciones de amparo y de inconstitucionalidad de las leyes,
manteniendo al día el boletín o gaceta jurisprudencial;

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h) Emitir opinión sobre la inconstitucionalidad de las leyes vetadas por el Ejecutivo
alegando inconstitucionalidad;
i) Actuar, opinar, dictaminar o conocer de aquellos asuntos de su competencia
establecidos en la Constitución Política de la República.
 Según la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad,
establecida en la Constitución, relata en el artículo 164 de la misma Carta
Magna, que son otras funciones de la Corte de Constitucionalidad las
siguientes:
a) Dictaminar sobre la reforma a las leyes constitucionales previamente a su
aprobación por parte del Congreso de la República.
b) Emitir opinión sobre la constitucionalidad de los proyectos de ley a solicitud del
Congreso de la República.
c) Conocer de las cuestiones de competencia entre los organismos y entidades
autónomas del Estado.
 Integración y composición

Integración
Según el artículo 269 de la Constitución, la Corte de Constitucionalidad se integra
con cinco magistrados titulares, cada uno de los cuales tendrá su respectivo
suplente. Cuando conozca de asuntos de inconstitucionalidad en contra de la
Corte Suprema de Justicia, el Congreso de la República, el Presidente o el
Vicepresidente de la República, el número de sus integrantes se elevará a siete,
escogiéndose los otros dos magistrados por sorteo de entre los suplentes. Los
magistrados durarán en sus funciones cinco años y serán designados en la
siguiente forma:
1. Un Magistrado por el Pleno de la Corte Suprema de Justicia;
2. Un Magistrado por el Pleno del Congreso de la República de Guatemala;
3. Un Magistrado por el Presidente de la República de Guatemala, Vicepresidente
de la República de Guatemala en Consejo de Ministros;
4. Un Magistrado por el Consejo Superior Universitario de la Universidad de San
Carlos de Guatemala; y
5. Un Magistrado por la Asamblea del Colegio de Abogados y Notarios de
Guatemala.
Simultáneamente con la designación del titular, se hará la del respectivo suplente,
ante el Congreso de la República de Guatemala.
 Competencia de la Corte de Constitucionalidad.

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Corresponde a la Corte de Constitucionalidad, conocer en única instancia, en
calidad de Tribunal Extraordinario de Amparo, en los amparos interpuestos en
contra del Congreso de la República, la Corte Suprema de Justicia, el Presidente y
el Vicepresidente de la República.

b) Origen del amparo

Afirma AGUIRRE GODOY que la introducción del amparo en el derecho


constitucional guatemalteco se origina con la reforma decretada el 11 de marzo de
1921 por la Asamblea Constituyente en el periodo del presidente don Carlos
Herrera, que modificaba la Constitución de 1879, reformando el artículo 34 de
dicho cuerpo legal, reconociendo así el derecho de amparo y disponiendo que una
ley constitucional regulara esa garantía.13 En su artículo 34, decía: "La
Constitución reconoce el derecho de amparo. Una ley constitucional anexa
desarrollará esta garantía". A partir de entonces se mantiene como garantía
constitucional dentro de nuestro ordenamiento jurídico, es decir, se recoge en las
diferentes Constituciones que se han promulgado como resultado de consecutivos
golpes de Estado.
Señala VÁSQUEZ MARTÍNEZ14 que a raíz del golpe de estado del 5 de
diciembre de 1921, la Ley de Amparo de ese mismo año se vio afectada, puesto
que fueron derogadas las reformas constitucionales que le habían dado origen;
razón por la cual, la Asamblea Legislativa emitió una nueva Ley de Amparo el 12
de mayo de 1928 como corolario de las reformas constitucionales de 1927.
Resulta oportuno señalar que esta ley estuvo vigente durante treinta y siete años,
hasta 1965 (que fue derogada por el golpe de Estado producido por el ejército) y
conservó su vigencia y eficacia a través de cambios políticos que implicaron dos
reformas a la Constitución de 1879, su derogatoria total y substitución por la
Constitución de 1945 y luego la vigencia de cuatro Constituciones más.
Sin embargo, un sector de la doctrina señala que esta institución de garantía
aparece ya contemplada por la Declaración Americana de Derechos y Deberes del
Hombre, al prever el derecho que tiene toda persona a disponer de un
procedimiento sencillo y breve por el cual la justicia la ampare contra actos de la
autoridad que violen en su perjuicio alguno de sus derechos fundamentales.
Disposición que también recoge la Declaración Universal de los Derechos
Humanos, en su artículo 8o., aunque si bien como señala ALBÁNESE, no
específica el alcance de esta garantía, "al omitir enunciar la protección sólo de los
actos emanados de la autoridad, permite una interpretación acorde con la
expansión interpretativa desarrollada con posterioridad".

4
Por su parte, el artículo 25 de la Convención Americana de los Derechos
Humanos o Pacto de San José de Costa Rica, extendió su aplicación a los países
signatarios del mismo al establecer:
1. Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier recurso
efectivo ante los jueces o tribunales competentes que lo ampare contra actos que
violen sus derechos fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la
presente Convención, aún cuando tal violación sea cometida por personas que
actúen en ejercicio de sus funciones oficiales [...].
Circunstancia que confirmó la Corte Interamericana al pronunciarse sobre la
opinión consultiva No. 6 formulada por la República Oriental de Uruguay, en donde
dijo que la acción de amparo, así como el hábeas corpus, efectivamente son los
"recursos sencillos y rápidos" a que alude la Convención.
En la historia contemporánea del amparo guatemalteco, dice AGUIRRE
GODOY16 que, a raíz de la entrada en vigor de la Constitución de 1965 durante el
gobierno militar de Enrique Peralta Azurdia, volvió a regularse el amparo, y con él,
el Decreto No. 8 de la Asamblea Nacional Constituyente, o sea la Ley de Amparo,
Habeas Corpus y de Constitucionalidad, que al igual que la Constitución de ese
año cobraron vigencia a partir del 5 de mayo de 1966.
La regulación del actual amparo tiene connotaciones distintas que le apartan del
modelo mexicano que utilizara en sus inicios, aunque buena parte de la
jurisprudencia doctrinaria que sostiene la Corte de Constitucionalidad, se apoya
básicamente en la información que proporciona tanto la doctrina mexicana como
en la española y colombiana, pero busca adquirir fisonomía propia, aunque en su
desarrollo ha influido el amparo español.

c) Conceptualización

El amparo es una acción o un recurso, dependiendo de la legislación del país de


que se trate, que tutela los derechos constitucionales del ciudadano, y del que
conoce un tribunal específico como un Tribunal Constitucional, Corte Suprema,1 o
bien un juez tribunal ordinario,2 según lo dispuesto en la legislación procesal de
cada país. El amparo cumple una doble función: de protección al ciudadano en
sus garantías fundamentales y a la propia constitución al garantizar la
inviolabilidad de sus preceptos ya sea por normas generales contrarias a dichos
preceptos o por actos de autoridad que vulneren el contenido o los derechos
fundamentales reconocidos en la Constitución.
Según el Derecho procesal de cada país, el amparo puede garantizarse a través
de una acción jurisdiccional o a través de un recurso procesal.

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Como acción, el amparo consiste en proteger, de modo originario iniciando el
proceso, todos los derechos diferentes a los que se encuentren regulados
especialmente por la misma constitución o por una ley especial con rango
constitucional, como por ejemplo el derecho a la libertad física o ambulatoria (este
derecho se encuentra protegido específicamente por el hábeas corpus). Así como
el hábeas corpus garantiza el ejercicio de la libertad física o ambulatoria, o como
el hábeas data garantiza la libertad de disponer de la información propia, el
amparo tiende a garantizar cualquiera de los demás derechos fundamentales que
no se encuentren regulados especialmente. De modo que puede recurrir a esta
acción quien se vea privado de ejercer cualquiera de los derechos reconocidos
expresa o implícitamente por la Constitución, una ley o, en su caso, en tratados
internacionales.
Como recurso, el amparo es una garantía procesal añadida para el ciudadano. Si
bien cualquier órgano judicial tiene la obligación de hacer cumplir la legislación,
cuando se hubiese finalizado la vía judicial ordinaria y el ciudadano estimase que
se han vulnerado sus derechos fundamentales podrá interponer un recurso de
amparo ante el órgano judicial competente.

d) Definición

Se llama amparo al acto y resultado de ampararse o amparar. Este verbo, que


procede del vocablo latino anteparāre, alude a cuidar, resguardar o beneficiar. Por
ejemplo: “Cuando fallecieron mis padres, quedé al amparo de mis abuelos
maternos”, “Mira ese perro que está bajo la lluvia: deberíamos darle amparo en
casa”, “Los refugiados sirios tendrían que recibir el amparo de los países
europeos”.
Dentro del grupo de expresiones que incluyen esta palabra, una de las más
comunes es al amparo de, y puede apreciarse en el primero de los ejemplos del
párrafo anterior. Sin embargo, es importante señalar que también puede decirse
bajo el amparo de, aunque no aparezca con tanta frecuencia como la primera.
El uso más habitual del concepto aparece en el plano judicial. Un recurso de
amparo, mencionado muchas veces simplemente como amparo, es una acción
que contemplan diversas Constituciones y que permite a una persona recurrir a un
alto tribunal cuando considera que sus derechos no fueron respetados o
protegidos por otros tribunales.
Los recursos de amparo, de este modo, permiten salvaguardar los derechos
constitucionales de los individuos. Además protegen los principios de la
Constitución ante eventuales violaciones por parte de organismos judiciales o
incluso de contradicciones generadas por ciertas normas.

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e) Naturaleza jurídica del amparo

Si tomamos en cuenta las características de nuestro medio de control


constitucional, así corno sus perfiles más significativos, podemos afirmar que
constituye un verdadero juicio, que se desarrolla con todas las etapas procesales,
y su misión social v de interés público es preservar el orden constitucional
mediante la tutela específica de las garantías del gobernado.
Estas consideraciones son aplicables particularmente cuando se trata del amparo
indirecto o biinstancial, que se tramita y resuelve por medio de los jueces de
Distrito, y ante quien se inicia una verdadera controversia judicial entre el quejoso,
como parte actora; y la autoridad responsable como parte demandada; ambas, en
ese carácter, pueden anunciar y ofrecer pruebas, participar en su desahogo,
formular alegatos y, en general, efectuar los trámites y presentar las promociones
tendientes a impulsar el procedimiento, hasta lograr que se dicte la resolución
constitucional respectiva.
En cambio, por lo que ve al amparo directo o uniinstancial, que se tramita y
resuelve por medio de los Tribunales Colegiados de Circuito, estas
consideraciones y características esenciales no resultan aplicables, puesto que la
sustanciación en este caso se asemeja más a la del "recurso", a tal grado que
muchos estudiosos de la materia afirman que el trámite del amparo directo
constituye una instancia más del juicio en que se pronunció la sentencia definitiva
que se reclama en esta vía constitucional.
En las condiciones señaladas cabe sostener que el amparo es un verdadero juicio,
siempre que no se reclame la violación de las garantías de "legalidad"
consagradas en los arts. 14 y 16 constitucionales; cuando se hace así, el amparo
adopta toda la materia y características de un recurso, y convierte a la Suprema
Corte y a los Tribunales Colegiados en meros revisores de las controversias civiles
y penales del orden común.
En función del proceso evolutivo de nuestro juicio constitucional, particularmente
en lo relativo a su extensión tuteladora, es procedente afirmar que en la actualidad
protege tanto los postulados de la Carta Fundamental del país, como la legislación
ordinaria en general, pues el control de la "legalidad" lo determinan de manera
expresa el art. 107 constitucional y los numerales 14 y 16 de dicho ordenamiento
supremo, que elevan el principio de legalidad a la categoría de garantías
individuales, y como tales son protegidas mediante el juicio de amparo.
Nuestro medio de control, en su estructura y práctica contemporánea, procede
tanto para reparar actos directamente inconstitucionales corno los que sólo por
medio de las violaciones de una ley ordinaria redundan en la infracción indirecta

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de la Constitución. De esta manera se realizan las funciones de control
constitucional y revisión de la legalidad en general.

f) Finalidad del amparo

En la Constitución Política de la República de Guatemala en su Artículo 265 se


hace mención que la finalidad del amparo es la de “proteger a las personas contra
las amenazas de violaciones a sus derechos o para restaurar el imperio de los
mismos cuando la violación hubiere ocurrido…”. Tal concepto también lo
encontramos en igual sentido en el Artículo 8º. de la Ley de Amparo, Exhibición
Personal y de Constitucionalidad, en consecuencia, ambas normativas indican la
misma finalidad del amparo.
Castillo en su tesis de graduación hace mención que para la Suprema Corte de
Justicia de la Nación de México, el amparo tiene como finalidad hacer respetar los
imperativos constitucionales en beneficio del gobernado; dicho en otras palabras,
su fin es el de servir de medio de defensa del gobernado frente a los actos
inconstitucionales del gobernante.
Se puede concluir que la finalidad principal del amparo es la de ser un mecanismo
de defensa de las personas cuando exista amenaza de violación a sus derechos
constitucionales o bien restaurar los mismos cuando la violación ya hubiere
sucedido; convirtiéndose de esta manera en un medio protector de los derechos
fundamentales frente a cualquier acto de autoridad que viole o amenace de
violación a los derechos de las personas, mismos que están garantizados por la
Constitución Política de la República de Guatemala y las leyes.

g) Casos de procedencia

La procedencia del amparo se extiende a toda situación que sea susceptible de un


riesgo, una amenaza, restricción o violación a los derechos que la Constitución y
las leyes de la República de Guatemala reconocen, ya sea que dicha situación
provenga de personas y entidades de derecho público o entidades de derecho
privado.
Toda persona tiene derecho a pedir amparo, entre otros casos:
a) Para que se le mantenga o restituya en el goce de los derechos y garantías que
establece la Constitución o cualquiera otra ley;
b) Para que se declare en casos concretos que una ley, un reglamento, una
resolución o acto de autoridad, no obligan al recurrente por contravenir o restringir
cualesquiera de los derechos garantizados por la Constitución o reconocidos por
cualquiera otra ley;

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c) Para que en casos concretos se declare que una disposición o resolución no
meramente legislativa del Congreso de la República; no le es aplicable al
recurrente por violar un derecho constitucional;
d) Cuando la autoridad de cualquier jurisdicción dicte reglamento, acuerdo o
resolución de cualquier naturaleza, con abuso de poder o excediéndose de sus
facultades legales, o cuando carezca de ellas o bien las ejerza en forma tal que el
agravio que se causare o pueda causarse no sea reparable por otro medio legal
de defensa;
e) Cuando en actuaciones administrativas se exijan al afectado el cumplimiento de
requisitos, diligencias o actividades no razonables o ilegales, o cuando no hubiere
medio o recurso de efecto suspensivo;
f) Cuando las peticiones y trámites ante autoridades administrativas no sean
resueltos en el término que la ley establece, o de no haber tal término, en el de
treinta días, una vez agotado el procedimiento correspondiente; así como cuando
las peticiones no sean admitidas para su trámite;
g) En materia política, cuando se vulneren derechos reconocidos por la ley o por
los estatutos de las organizaciones políticas. Sin embargo, en materia puramente
electoral, el análisis y examen del tribunal se concretará al aspecto jurídico, dando
por sentadas las cuestiones de hecho que se tuvieron por probadas en el recurso
de revisión;
h) En los asuntos de los órdenes judicial y administrativo, que tuvieren
establecidos en la ley procedimientos y recursos, por cuyo medio puedan
ventilarse adecuadamente de conformidad con el principio jurídico del debido
proceso, si después de haber hecho uso el interesado de los recursos
establecidos por la ley, subsiste la amenaza, restricción o violación a los derechos
que la Constitución y las leyes garantizan.
Lo determinado en los incisos anteriores, no excluye cualesquiera otros casos,
que no estando comprendidos en esa enumeración, sean susceptibles de amparo
de conformidad con lo establecido por los artículos 265 de la Constitución y 8 de
esta ley.

h) Abusos en el planteamiento del amparo

En la mayoría de los casos el amparo es utilizado como medio para fines ajenos a
la protección o restablecimiento de derechos amenazados o conculcados. No
puede negarse la existencia de amparos cuyo planteamiento ha sido en forma
frívola e improcedente, desnaturalizando con esto el uso de esta institución. Para
este efecto se definirá, lo que se entiende por frivolidad y lo que se entiende por
improcedencia, en lo que al amparo se refiere.

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Por medio del amparo se somete a conocimiento del Tribunal Constitucional, una
controversia que ha surgido cuando se produce violación a las garantías
contenidas en la Constitución Política de la República y demás leyes. El amparo
termina con una sentencia, la que se emite para reestablecer en definitiva lo que
se ha considerado vulnerado o, por el contrario, en la sentencia, se deniega el
otorgamiento del mismo, por su improcedencia, en virtud de la no concurrencia de
uno o más requisitos para su procedencia.
De acuerdo con lo establecido en los Artículos 6, 36 y 55 de la Ley de Amparo,
Exhibición Personal y de Constitucionalidad, el tribunal constitucional, se
encuentra obligado a llevar el amparo a su culminación normal y de ejecutar lo
resuelto; ya que de acuerdo a los citados artículos, sólo la iniciación del trámite es
rogada, las diligencias posteriores, se rigen por el impulso de oficio, al extremo
que el tribunal constitucional, si hubieren hechos controvertidos, tiene facultad
para pesquisarlos de oficio, practicando cuanta diligencia sea necesaria para
agotar la investigación.
 La frivolidad y la improcedencia

Antes de llegar a establecer los problemas que surgen por el planteamiento del
amparo, en forma frívola e improcedente, resulta necesario establecer lo que se
entiende por frivolidad y lo que se enciente por improcedencia.
El Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual de Guillermo Cabanellas al
respecto de la frivolidad apunta: “Lo intermedio entre la seriedad y la divinidad, lo
ligero o veleidoso; lo fútil o insubstancial”.
Al respecto de la Improcedencia, el mismo Diccionario, apunta: “Que no se ajusta
a derecho. Que no cabe presentar o alegar ante los tribunales, o que será
rechazado de plano.” El Artículo 46 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de
Constitucionalidad, establece que “Cuando el tribunal estime, razonándolo
debidamente, que el amparo interpuesto es frívolo o notoriamente improcedente,
además de condenar en las costas, sancionará con multa de cincuenta a mil
quetzales, según la gravedad del caso, al abogado patrocinante.”
Tomando como base el comentario incluido por el Licenciado Jorge Mario Castillo
González, en su libro “Recurso de amparo, exhibición Personal y de
Constitucionalidad”, el amparo se considera evidentemente frívolo cuando durante
el trámite del mismo, el amparista no consigue probar que efectivamente existe el
agravio, por suponerlo, por la imprecisión tanto del acto que se reclama como en
la relación de los hechos, o por cualquier otra causa que indique que el amparo
solicitado, carece de fundamento. El amparo es notoriamente improcedente,
cuando del estudio del informe y de los antecedentes el tribunal deduce que se
abrió intencionalmente una tercera instancia; que existe interés en el amparista, de
retardar el cumplimiento de sus obligaciones derivadas ya sea de una resolución
administrativa o judicial, o de litigar de mala fe.

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i) Tramite de la acción de amparo y esquema del mismo.

El amparo, en su segundo aspecto, es uno de los "medios jurídicos que garantizan


el irrestricto respeto de los derechos inherentes al ser humano, a la libertad de su
ejercicio y a las normas fundamentales que rigen la vida de la República de
Guatemala, con el fin de asegurar el régimen de derecho" (primer considerando de
la Ley de Amparo), es decir, que es el instrumento mediante el cual el Estado,
incitado por el ejercicio del derecho de amparo, actúa las pretensiones de
protección jurisdiccional de los derechos humanos, y dicta las medidas concretas
de tutela correspondientes. Se trata en otras palabras, de un proceso.
Está fuera de toda discusión que sólo hay derechos humanos en puridad jurídica,
si se dan determinadas circunstancias:
a) Que una norma jurídica los reconozca, inclusive en la forma abierta que
contiene el artículo 44 de la Constitución, ya que "los derechos y garantías que
otorga la Constitución, no excluyen otros que, aunque no figuren expresamente en
ella, son inherentes a la persona humana";
b) Que dicha norma derive la posibilidad de su ejercicio;
c) Que su desconocimiento, infracción o limitación del ejercicio, legitime al titular
del derecho para pretender o reclamar de los tribunales el restablecimiento de la
situación y la tutela jurídica pertinente, con uso, si es el caso, del aparato coactivo
del Estado; y,
d) Que el Estado ponga a disposición del titular del derecho de amparo, un
instrumento eficaz para actuar su pretensión de tutela o protección.
El proceso de amparo es uno de esos instrumentos. No el único, ya que el
proceso en general y algunos mecanismos administrativos, se encaminan también
a tutelar los derechos humanos. Eso sí, el proceso de amparo es el instrumento
más adecuado, desde luego que está específicamente destinado a producir con
rapidez y eficacia la tutela jurisdiccional. Es el proceso especializado en el campo
de los derechos humanos.
En la práctica, según lo que venimos diciendo, se da la siguiente secuencia:
1o.
Uno de los derechos humanos ha sido reconocido o establecido por la
Constitución, la ley o los tratados y convenciones aceptados y ratificados por
Guatemala;
2o.
Surge para alguien la pretensión de ejercer o gozar de tal derecho;

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3o.
Se impide o limita el ejercicio del derecho en cuestión;
4o.
Se ejercita el derecho de amparo, como poder jurídico que faculta para acudir a
los órganos jurisdiccionales en reclamo de la tutela o protección estatal, y de las
medidas concretas pertinentes;
5o.
Se pone en marcha el proceso judicial específico, esto es, el amparo.

Esquema

12
CONCLUSIONES

De consiguiente, puede concluirse que las fuentes jurídicas del amparo


guatemalteco son: La Constitución, la ley, los convenios y pactos sobre derechos
humanos debidamente ratificados y la jurisprudencia. Como característica general
del sistema de fuentes del amparo, puede afirmarse su progresividad y su
vocación de asegurar los derechos humanos.
Más que un simple proceso, el juicio de amparo debe considerarse como aquella
institución idónea para la protección de los derechos fundamentales que posee
todo individuo por su simple razón de ser.
El problema se presenta cuando dentro del sistema normativo de cualquier Estado
se aprecia un determinado atraso con respecto a la finalidad que persigue éste y
las realidades de la sociedad por quien vela; así sucede en nuestro juicio de
garantías.
Tal y como lo muestra el contenido de la presente investigación, el amparo ha sido
materia de estudio por distintos juristas en diversas épocas, los cuales permitieron
una evolución rápida y adecuada en su momento, sin embargo por motivos
desconocidos se ha dejado en desventaja con respecto a otras instituciones que
forman parte del mismo sistema jurídico. Interesante resultaría conocer esas
razones, pero hasta el momento no se ha formulado una de ellas, al menos no
públicamente.

13
E-GRAFÍA

 https://es.wikipedia.org/wiki/Corte_de_Constitucionalidad_de_Guatemala

 http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1870-
21472011000100008

 https://definicion.de/amparo/

 https://es.wikipedia.org/wiki/Recurso_de_amparo

 chrome-
extension://ohfgljdgelakfkefopgklcohadegdpjf/http://www.oas.org/juridico/spanish/gt
m_res56.pdf

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04_8356.pdf

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04_8332.pdf

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04_6499.pdf

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oad/scons1/pdf/recurso.pdf

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CA/esquema-del-amparo.pdf

14

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