Carta de Los Bomberos
Carta de Los Bomberos
Carta de Los Bomberos
secretaría de internacional
FSESP
Federación Sindical Europea de Servicios Públicos
versión 2007
La presente Carta ha sido redactada por los afiliados a la Red de Bomberos de la FSESP con
el apoyo del Sindicato del Cuerpo de Bomberos de Reino Unido.
Introducción
Aunque hay claras diferencias entre estos dos grupos, el objetivo de los
sindicatos de bomberos es reducirlas en la medida de lo posible.
También debe entenderse que el término bombero incluye a todos los actores
implicados en servicios contra el incendio y de rescate que asisten y participan
en resolver incidentes, independientemente de su rango o papel.
La neutralidad del papel de los bomberos del sector público es notoria. Los
bomberos han de ser contratados por poderes públicos, regionales o
municipales. Deben separarse en todos los aspectos de sus deberes y en
todos los niveles de la policía, el ejército y cualquier fuerza militar y/o
paramilitar. Los servicios contra el incendio y de rescate del sector público y su
equipo no deben ser utilizados por la policía, el ejército o fuerzas paramilitares
a efectos de cumplir cualquier ley, función o acción judicial.
Los bomberos son, por encima de todo, trabajadores del sector público y sus
sindicatos han de constituir una parte integral del mismo y un movimiento
sindicalista más amplio.
Condiciones de trabajo
El salario y las condiciones del servicio de los bomberos deben reconocer que
ser bombero es un oficio peligroso e impredecible. Todas las horas de servicio
deben ser recompensadas, y los bomberos deberían recibir una paga extra
cuando se exceda la carga horaria normal o durante los días de fiesta.
Los bomberos han de tener derecho a recibir, además de una pensión estatal
general, una que reconozca la naturaleza peligrosa de su labor y toda la pericia
que han adquirido durante su período de servicio. Esto significa que debería
permitírseles la jubilación remunerada antes que a la media nacional en otros
trabajos. Idealmente, los bomberos deberían poder jubilarse voluntariamente a
los 55 años.
Formación y equipo
Deberían abrirse centros de formación allá donde sea posible. Puede ser una
residencia. Este centro debería tener financiación apropiada y se ocuparía de
formar a todos los bomberos que integren los servicios contra el incendio y de
rescate. El centro de formación debería disponer de instalaciones de formación
realistas.
Solo los bomberos que hayan superado dicho examen podrían encargarse de
dirigir a otros bomberos en un incidente de urgencia.
En las zonas fronterizas deberían existir acuerdos entre poderes públicos que
regulen en qué medida los bomberos de un país pueden ayudar a los de otro.
Igualdad de oportunidades
Salud y seguridad
Los bomberos deben recibir un trato igual que el de cualquier otro trabajador a
efectos de salud y legislación de seguridad. Esto significa que no deben
excluirse bomberos de directivas de la CE relativas a la salud y la seguridad de
los trabajadores.
Los empleadores deberían dar los pasos necesarios para evaluar los riesgos
de manera adecuada y controlar sistemáticamente la salud y la seguridad de
los bomberos. Deberían implicar concienzudamente a los sindicatos, tal y como
se estipula en las directivas de la UE.