5 Formas de Orar - Muestra PDF

formas de
orar
DURANTE UNA
CRISIS GLOBAL
Rachel Jones
EDITOR DE LA SERIE: carl laferton
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN DE LA SERIE�� 7
ORAR POR MI CORAZÓN

Paz en la ansiedad�� 11
Consuelo en la soledad�� 15
Sabiduría en la inseguridad�� 19
Paciencia en la frustración�� 23
Confianza en la confusión�� 27
Esperanza en el sufrimiento�� 31
ORAR POR MI FAMILIA

Mi cónyuge�� 35
Mis hijos�� 39
Seres queridos a quienes
no puedo visitar�� 43
ORAR POR LOS AFECTADOS

El gobierno�� 47
El sistema de salud�� 51
Trabajadores clave�� 55
Los enfermos�� 59
ORAR POR MI IGLESIA
Unidad�� 63
Crecimiento�� 67
En un domingo�� 71
Los líderes�� 75
Personas vulnerables�� 79
ORAR POR EL CRECIMIENTO

DEL REINO
En mi comunidad�� 83
Alrededor del mundo�� 87
Después de la pandemia�� 91
INTRODUCCIÓN
Vivimos tiempos literalmente extraordinarios,

tiempos que nos moldearán de forma permanente
a nosotros, nuestras familias y nuestras naciones. La
pandemia de COVID-19 nos ha demostrado que,
incluso en el mundo occidental del siglo xxi, la vida es
frágil, la riqueza es fugaz y los planes se interrumpen
con facilidad.
En otras palabras, vivimos en el mismo mundo sobre

el que Santiago escribió en su carta a nuestros
antepasados espirituales del primer siglo (leer Sant.
1:10; 4:13-15). ¿Y qué insta Santiago al pueblo de
Dios a hacer cuando vienen las crisis? «¿Está afligido
alguno entre ustedes? Que ore» (Sant. 5:13). ¿Por
qué? Aquí hay un versículo al que aferrarse en
tiempos de problemas:
«La oración del justo es poderosa y eficaz».

(Sant. 5:16).
Santiago nos dice que cuando las personas justas

hacen oraciones justas, las cosas suceden. Las cosas
cambian. Las oraciones del pueblo de Dios son pode-
rosas. No son poderosas porque somos poderosos, o
porque las palabras que decimos son de alguna ma-
7
nera mágicas, sino porque la Persona a la que oramos
es infinita e inimaginablemente poderosa. Nuestras
oraciones son efectivas, no porque seamos especiales
o porque exista una fórmula especial para usar, sino
porque el Dios al que oramos se deleita en responder
a nuestras oraciones y transformar el mundo gracias
a ellas.
Entonces, ¿cuál es el secreto de la oración efectiva du-

rante la crisis del coronavirus? ¿Cómo puedes hacer
oraciones que realmente cambien las cosas? Santiago
sugiere dos preguntas que debemos hacernos.
Primero, ¿eres justo? Una persona justa es alguien

que está en una relación correcta con Dios, alguien
que, por la fe en Jesús, ha sido perdonado y aceptado
como hijo de Dios. ¿Eres alguien que, mientras oras,
estás orando no solo a tu Creador, no solo a tu Gober-
nante, sino a tu Padre celestial, quien te ha perdonado
por completo a través de Jesús?
Segundo, ¿tus oraciones reflejan esa relación? Si sabe-

mos que Dios es nuestro Hacedor, nuestro Gobernan-
te y nuestro Padre, queremos hacer oraciones que lo
complazcan, que reflejen sus deseos y que se alineen
con sus prioridades para nuestras vidas y para el mun-
do. El tipo de oración que realmente transforma las
cosas es la oración ofrecida por un hijo de Dios que
refleja el corazón de Dios.
Por eso, cuando los hijos de Dios oran, a menudo los

encontramos usando la Palabra de Dios para guiar sus
oraciones. Cuando Jonás oró en el vientre de un pez
para agradecer a Dios por rescatarlo (Jon. 2:1-9), usó
las palabras de varios salmos. Cuando los primeros
cristianos se reunieron en Jerusalén para orar, usaron
8
los temas del Salmo 2 para guiar sus alabanzas y sus
peticiones (Hech. 4:24-30). Y cuando Pablo oró para
que sus amigos crecieran en amor (Fil. 1:9), le estaba
pidiendo al Padre que trabajara en ellos lo mismo que
el Señor Jesús oró por nosotros (Juan 17:25-26), y lo
que el Espíritu Santo está haciendo por todos los cre-
yentes (Rom. 5:5). Todos usaron las palabras de Dios
para guiar sus palabras hacia Dios.
Muchos de nosotros hemos sido impulsados a orar

más por la crisis que estamos viviendo. Pero igualmen-
te, muchos de nosotros no estamos seguros de cómo
orar y qué pedir. ¿Cómo puedes hacer oraciones po-
derosas y efectivas que cambien las cosas? Primero,
debes ser un hijo de Dios. En segundo lugar, debes
hacer oraciones bíblicas; debes utilizar las palabras de
Dios para asegurarte de que tus oraciones le agraden
y compartan sus prioridades.
Este pequeño libro está diseñado para ayudarte en

estos puntos. Te guiará sobre cómo orar en 21 aspec-
tos diferentes de la vida durante esta pandemia: cómo
orar bien por ti mismo, tus seres queridos y tu iglesia,
por los afectados en tu nación y en todo el mundo, y
por el reino de Dios. No todas las oraciones serán rele-
vantes para tu situación personal todo el tiempo, pero
si ese es el caso, puedes usarlas para orar por otros
que se enfrentan a dicha situación.
Cada sugerencia de oración se basa en un pasaje de la

Biblia, por lo que puedes estar seguro de que son ora-
ciones que Dios quiere que hagas en este momento.
Hay cinco formas diferentes de orar por cada una de

las 21 áreas. Entonces puedes usar este libro de varias
maneras.
9
• Puedes orar un conjunto de «cinco formas»
cada día, en el transcurso de tres semanas,
y luego comenzar de nuevo.
• Puedes tomar uno de los temas de oración
y orar una parte todos los días de lunes a
viernes.
• O bien, puedes variar cuando quieras y ne-
cesites orar sobre un aspecto particular de
esta crisis.
• También hay un espacio en cada página
para que escribas los nombres de situacio-
nes específicas, inquietudes o personas que
deseas recordar en la oración.
Esto de ninguna manera es una guía exhaustiva. Pero

puedes estar seguro de que cuando la utilices esta-
rás haciendo oraciones que Dios desea que ores. Y
Dios promete que «la oración del justo es poderosa
y eficaz». Esta es una promesa a la que vale la pena
aferrarse con confianza. A medida que oramos con-
fiando en esta promesa, cambiará la forma en que
oramos y lo que esperamos de nuestras oraciones.
Cuando las personas justas hacen oraciones justas,

las cosas suceden. Las cosas cambian. Dios es pode-
roso y tus oraciones también lo son.
Carl Laferton
Director editorial, The Good Book Company
10
Formas de
orar
Orar por…
Paz en
la ansiedad
salmo 23
Motivos de oración:
Padre celestial, ayúdame a confiar en que tú…
Eres mi buen pastor

« El SEÑOR es mi pastor, nada me faltará»
(v. 1).
Hay muchas razones para sentirse asustado y vulnerable

en este momento. Pero alabado sea Dios porque eres
una oveja con un buen pastor. Él te conoce y te ama, y
está comprometido a cuidarte. Dale las gracias por las
cosas buenas que te ha dado: los «verdes pastos» y las
«tranquilas aguas» que muestran Su amabilidad (v. 2).
Agradece al Señor Jesús por ser un pastor que dio Su
vida para proporcionar todo lo que se necesita para la
salvación de sus ovejas.
Eres mi guía
« Me infunde nuevas fuerzas. Me guía por
sendas de justicia por amor a su nombre»
(v. 3).
Quizás estás preocupado por una decisión o no estés

seguro de cómo ayudar a alguien que amas; pídele
12
a Dios que te guíe. Luego pídele que use este tiem-
po para hacerte más dependiente de la oración. Ora
para que, al pasar tiempo cada día con Él en Su Pala-
bra, refresque tu alma.
Me acompañas
« Aún si voy por valles tenebrosos, no temo
peligro alguno porque tú estás a mi lado»
(v. 4).
La ansiedad se siente como un valle del que no ve-

mos salida, pero nuestro pastor ha prometido llevar-
nos al otro lado. Pídele a Dios que calme tus miedos
y te bendiga con un sentido real de Su presencia.
Luego ora pidiendo lo mismo por cualquier persona
que te preocupe.
Estarás conmigo maña-

na
« La bondad y el amor me seguirán todos
los días de mi vida» (v. 6).
Las palabras de Jesús son adecuadas para esta crisis:

«Por lo tanto, no se angustien por el mañana, el cual
tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus pro-
blemas» (Mat. 6:34). Pídele Su ayuda para tomar las
cosas un día a la vez, sabiendo que, sea lo que sea
que enfrentes cuando te levantes mañana, y en cada
13
día que sigue, la bondad y el amor de Dios están ase-
gurados y Su gracia es suficiente.
Eres mi pastor por

la eternidad
« … Y en la casa del Señor habitaré para
siempre» (v. 6).
Agradece a Dios porque eres una de las ovejas de

Jesús y pasarás la eternidad habitando con Él, en
perfecta seguridad y paz. Ora para que saber esto te
ayude, no a temer la enfermedad o la muerte, sino a
vivir con creciente gozo y confianza.
14
formas de
orar
Orar por…
CONSUELO EN
LA SOLEDAD
Salmo 139
Motivos de oración:
Padre, en la soledad, ayúdame a recordar…
Tú me conoces
« Señor, tú me examinas, tú me conoces.
Sabes cuándo me siento y cuándo me le-
vanto» (v. 1-2).
La soledad es tan difícil de soportar. Pero alabado sea

Dios porque, incluso cuando nos sentimos más solos,
Él nos ve y nos comprende perfectamente. Puede
ser que nadie más pueda compartir lo que estamos
haciendo o vea cómo nos sentimos, pero para Dios
«todos [nuestros] caminos [le] son familiares» (v. 3).
Así que habla con Él ahora, en voz alta si eso ayuda,
sobre lo que sea que esté en tu corazón.
Tu Espíritu está conmigo

« ¿A dónde podría alejarme de tu espíritu?
¿A dónde podría huir de tu presencia?»
(v. 7).
Dios no solo está «allá afuera» mirándonos, sino que

mora dentro de nosotros mediante Su Espíritu. Agra-
décele por esta verdad y pídele que te dé una cre-
16
ciente conciencia de la presencia de Su Espíritu. Ora
para que en esta temporada de aislamiento camines
estrechamente con Él día a día.
Tu esperanza
« Ni las tinieblas serían oscuras para ti, y aun
la noche sería clara como el día. ¡Lo mismo
son para ti las tinieblas que la luz!» (v. 12).
La soledad puede hacernos sentir muy deprimidos.

Pídele a Dios que te ayude a mantener la esperanza
del evangelio: que Jesús, la luz del mundo, ha venido
y volverá pronto.
Tu soberanía
« Todos mis días se estaban diseñando, aun-
que no existía uno solo de ellos» (v. 16).
Una de las cosas más difíciles es no saber cuánto du-

rará esto o cuándo podremos volver a ver a nuestros
seres queridos. Pero alabado sea Dios: ¡Él sí lo sabe!
Estos no son días perdidos, sino ordenados por Él
para nuestro bien. Ora por una creciente sensación de
asombro por Su soberanía.
17
Tu llamado a amar
a los demás
« Fíjate si voy por mal camino, y guíame por
el camino eterno» (v. 24).
En una situación como esta, es muy fácil enfocarse en

uno mismo o ceder a la autocompasión. Con humil-
dad, pídele a Dios que te muestre si hay alguna for-
ma en la que estás respondiendo pecaminosamente
a tus circunstancias. Ora para que en cada día de ais-
lamiento busques amar y servir a los demás, tal vez
orando por ellos o llamando para alentarlos. Comien-
za orando por las necesidades de algunas personas
que conoces ahora.
18

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ORAR POR MI CORAZÓN

ORAR POR MI FAMILIA

ORAR POR LOS AFECTADOS

ORAR POR EL CRECIMIENTO

Vivimos tiempos literalmente extraordinarios,

En otras palabras, vivimos en el mismo mundo sobre

«La oración del justo es poderosa y eficaz».

Santiago nos dice que cuando las personas justas

Entonces, ¿cuál es el secreto de la oración efectiva du-

Primero, ¿eres justo? Una persona justa es alguien

Segundo, ¿tus oraciones reflejan esa relación? Si sabe-

Por eso, cuando los hijos de Dios oran, a menudo los

Muchos de nosotros hemos sido impulsados a orar

Este pequeño libro está diseñado para ayudarte en

Cada sugerencia de oración se basa en un pasaje de la

Hay cinco formas diferentes de orar por cada una de

Esto de ninguna manera es una guía exhaustiva. Pero

Cuando las personas justas hacen oraciones justas,

Padre celestial, ayúdame a confiar en que tú…

Eres mi buen pastor

Hay muchas razones para sentirse asustado y vulnerable

Quizás estás preocupado por una decisión o no estés

La ansiedad se siente como un valle del que no ve-

Estarás conmigo maña-

Las palabras de Jesús son adecuadas para esta crisis:

Eres mi pastor por

Agradece a Dios porque eres una de las ovejas de

Padre, en la soledad, ayúdame a recordar…

La soledad es tan difícil de soportar. Pero alabado sea

Tu Espíritu está conmigo

Dios no solo está «allá afuera» mirándonos, sino que

La soledad puede hacernos sentir muy deprimidos.

Una de las cosas más difíciles es no saber cuánto du-

En una situación como esta, es muy fácil enfocarse en

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