Las Iniciativas de Desarrollo Local en Los Países Desarrollados
Las Iniciativas de Desarrollo Local en Los Países Desarrollados
Las Iniciativas de Desarrollo Local en Los Países Desarrollados
ASIGNATURA:
ECONOMÍA DE LOS GOBIERNOS LOCALES
DOCENTE:
ESCOLÁSTICO AVILA COILA
SEMESTRE ACADÉMICO
2020 - I
.
Asimismo, la recuperación de la democracia en los niveles municipales y locales en general ha supuesto la introducción de
mayores exigencias a los responsables públicos territoriales para presentar programas y propuestas concretas a la
ciudadanía en los temas sustantivos del desarrollo productivo y del empleo a nivel local. En algunas ocasiones, la génesis
de la iniciativa de desarrollo local ha sido facilitada por un inteligente proceso de desconcentración institucional
impulsado por algunos organismos del nivel central.
Existen, pues, dos tipos de tensión que impulsan “desde abajo” las iniciativas de desarrollo local. De un lado, la tensión
introducida por el propio desarrollo democrático y la elección directa de los responsables en los diferentes niveles
territoriales de las administraciones públicas (municipalidades, provincias, regiones o estados), que obliga a atender las
demandas de la ciudadanía relacionadas con los temas básicos del desarrollo productivo y el empleo en cada ámbito
territorial.
De otro lado, la tensión introducida por la situación de crisis y reestructuración económica en general, que empuja a los
actores empresariales privados a incorporar elementos de modernización y procesos de adaptación ante las nuevas
exigencias productivas y los mayores niveles de competitividad en los mercados. A estos dos tipos de tensión “desde
abajo” se suma otro proceso “desde arriba”, correspondiente al avance de la descentralización y reforma del Estado
central en los diferentes países de la región. Este no tiene todavía una relación complementaria con los procesos
anteriores surgidos “desde abajo”, aunque es claro que el avance de la descentralización debería poder construir
escenarios propicios para impulsar las iniciativas de desarrollo local.
En todo caso, es importante constatar que los procesos de descentralización más avanzados, esto es, aquellos que
incluyen una elección directa de todos los niveles de representación pública territorial, desde las alcaldías a las regiones, y
que transfieren recursos y capacidades de decisión a los gobiernos subnacionales, constituyen bases mucho más
consistentes para el impulso de las iniciativas de desarrollo local. En resumen, entre los principales objetivos de las
iniciativas de desarrollo local cabe citar los siguientes:
Valorización mayor de los recursos endógenos de cada ámbito local, tratando de impulsar actividades de
diversificación productiva y promoción de nuevas empresas locales.
Organización de redes locales entre actores públicos y privados para promover la innovación productiva y
empresarial en el territorio.
Establecimiento de consorcios intermunicipales a fin de incrementar la eficacia y eficiencia de las actividades de
desarrollo local.
Búsqueda de nuevas fuentes de empleo e ingresos a nivel local.
Promoción de actividades de desarrollo científico y tecnológico a nivel territorial.
Creación de nuevos instrumentos de financiamiento para atender a las microempresas y pequeñas empresas
locales.
Superación de las limitaciones del enfoque asistencialista implícito en los fondos de inversión social y en los
programas de lucha contra la pobreza.
Incorporación de políticas de comercialización de ciudades para promover la competitividad sistémica territorial.
Búsqueda de acuerdos estratégicos en relación con los bienes ambientales y el desarrollo sustentable.
Movililación y
participación de
Institucionalidad actores locales Actitud
para el proactiva del
desarrollo local gobierno local
Coordinación de
INICIATIVAS DE Existencia de
programas e
DESARROLLO equipos de
instrumentos de
LOCAL liderazgo local
fomento
Fomento de
microempresas
Cooperación
y capacidades
Elaboración de público - privada
de recursos
humanos una estrategia
territorial y de
desarrollo
Se resalta, en primer lugar, la importancia de la movilización y participación de los actores locales. Esto supone la construcción de
capital social comunitario que, a su vez, requiere el fomento de la cultura proactiva y emprendedora, alejada de la lógica
dependiente del subsidio. Al mismo tiempo, una iniciativa de desarrollo local requiere una actitud proactiva por parte de los
gobiernos locales (y regionales en general) en relación con el desarrollo productivo y la generación de empleo.
Esto supone asumir nuevas funciones desde la gestión pública local más allá de los roles tradicionales como suministradores de
servicios sociales, urbanísticos o ambientales a nivel local. Hay que insistir en que la identidad regional, así como el capital social, no
deben ser entendidos como activos preexistentes en un territorio, resultado de una conjugación de factores geográficos o históricos
anteriores, sino como un activo intangible que es posible construir localmente mediante la generación de espacios de concertación y
confianza entre actores para enfrentar los retos comunes. En este sentido, la participación de los diferentes actores sociales en la
discusión de los problemas locales colabora a este proceso de construcción de identidad territorial compartida y, en suma, a la
construcción social de la región.
Los gobiernos locales no son siempre los que inician los procesos de desarrollo local, aunque a mediano plazo su presencia en ellos
es fundamental para asentar la institucionalidad que dichas iniciativas requieren. Asimismo, en democracia son los responsables
públicos locales los más legitimados para la convocatoria de los diferentes actores territoriales y la búsqueda de espacios de
concertación público-privada con miras al desarrollo local. De ahí la importancia de asumir un papel de liderazgo local para la
animación de dichos procesos de movilización y participación de actores locales y de construir los equipos de liderazgo que aseguren
la continuidad de las actividades.