El Egoismo

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 7

EL EGOÍSMO

El ser humano es un ser que aunque es racional, en muchas ocasiones es guiado


por sus sentimientos. El comportamiento de éste se mueve en decisión sobre qué
camino tomar de acuerdo a la situación que enfrente en ese momento.

A la hora de tomar decisiones, las personas no solo utilizan su raciocinio, sino


también intervienen sentimientos, deseos y metas por realizar. Al existir tantos
factores, unos van a pesar más que otros; al final la toma de decisiones es algo
subjetivo. Uno de los rasgos que en muchas ocasiones es un factor determinante
es el deseo interno de la persona de realización, es acá donde entran en función
que tanto desea y merece algo y que tanto no.

El término Egoísmo hace referencia al excesivo e inmoderado amor propio, lo que


hace que atienda de manera desmedida su propio interés. La Filosofía establece
que el egoísmo, palabra que tiene origen del latín “ego” que significa yo, es un
principio de conducta; el cual estriba en seguir únicamente los propios intereses
personales sin tomar en consideración los intereses de los demás ni los de la
sociedad. Dentro de esta línea, la filosofía indica que, el egoísmo se encuentra
estrechamente ligado al individualismo.

El egoísmo es una propiedad moral, que caracteriza al ser humano desde el punto
de vista de su actitud hacia la sociedad hacia los otros. Con calidad moral, el
egoísmo es valorado generalmente de manera negativa. El egoísmo ético, en la
filosofía, es un sistema de pensamiento filosófico en el cual las personas actuaran
para su propio provecho, siempre; pero de manera ética y racional, con respecto al
otro, guiándose por el sentido común y honrando axiomas del estilo “no hagas a los
demás lo que no quieres que te hagan a ti”.

Desde la instancia psicológica, el egoísmo proviene del ego, que es una instancia
psíquica mediante la cual el individuo se hace consciente de su propia identidad y
se reconoce como Yo. El ego es aquello que media entre la realidad del mundo
físico, los impulsos del sujeto y sus ideales.

Desde esta perspectiva, el egoísmo alude a un conjunto de conductas del ser


humano que se pueden manifestar en el egotismo, que como se indicó es el
sentimiento de quien tiene una idea exagerada de su propia importancia, pues cree
que todo gira únicamente en torno a sus intereses y expresa una conducta
abiertamente asocial.

La psicología budista indica que el egoísmo viene de un aferramiento excesivo al


Yo/Ego. Lama Richen Gyaltsen, maestro budista, asegura que todo es cambiante,
por lo tanto el Yo también. Es decir, si el individuo acepta que todo cambia se
desapegaría del Yo y el mundo dejara de girar en torno a él. Lama indica además,
que no hay sentido en aferrarse a una identidad única cuando todo a su alrededor
cambia, incluido el mismo ser humano. Aquellos con más aferramiento a un Yo
estático, serán los que presenten conductas más egoístas y al mismo tiempo
tolerarán peor los cambios.

Comúnmente el egoísmo es asumido como un defecto y una conducta reprobable,


el cual no contribuye al bienestar común y se atribuye a menudo a las etapas más
tempranas de la formación psicológica, la formación del Ello y del Yo. Por lo general,
las personas egoístas sienten que son mucho más importantes de lo que realmente
son, y piensan que los demás deberían estar pendientes de él y de sus necesidades.

Empero, según otras doctrinas morales y filosóficas, las cuales han tomado el
egoísmo como concepto central; como son:

 Egoísmo psicológico. Es una corriente psicológica que afirma que la


naturaleza humana es realmente auto interesado e incapaz de la
generosidad o el altruismo, pues detrás de semejantes actos se esconde una
necesidad de compensar algo y sentirse bien con sí mismo.
 Egoísmo moral o ético. Una doctrina ético-filosófica que sostiene la máxima
de que el trabajo de los individuos debe estar orientado primeramente a su
propio beneficio, ayudando a los demás sólo opcionalmente y cuando
suponga algo provechoso a corto o largo plazo para el individuo. De este
modo, el Yo se construye a sí mismo y la realidad se fija en la propia
existencia.
 Egoísmo racional. Es una tesis filosófica que plantea que la persecución del
propio beneficio es siempre racional, convirtiendo así el egoísmo en un
mandato normativo. Pero si el egoísmo psicológico se interesa en la
motivación individual y el egoísmo moral se centra en la moralidad, el racional
se apega a la lógica y la capacidad de raciocinio humana como norte. En esta
tesis se basan teorías económicas y sociales como el liberalismo y la
economía clásica.
 Anarquismo egoísta. Fundada por Max Stirner, filósofo post-hegeliano, esta
corriente del pensamiento anarquista (y por ende filosófico y político)
apareció en el siglo XIX como base del posterior anarquismo individualista.
Según dicha tesis, la única limitación de los individuos es su poder, su
capacidad para realmente conseguir lo que desean. Desde este punto de
vista, toda forma de religión o de ideología es vacua e inválida. (concepto.de)

Como individuos, en algún momento de la vida, todos somos egoístas. Sin


embargo, hay personas que lo son en exceso, tanto que su comportamiento
sobresale de forma negativa afectando de manera negativa las relaciones
interpersonales.

Una persona egoísta muestra rasgos o características como son:

 No muestran sus debilidades y vulnerabilidades; este tipo de persona


sostiene el pensamiento de que su entorno intenta menospreciar su trabajo
y potencial. Es por ello que a menudo se defienden con la ironía y es muy
complicado que reconozcan que están equivocados.
 Consideran que merecen todo; son personas poco constantes a la hora de
seguir sus metas. Suelen pensar que el éxito estará siempre de su lado
porque sí, dándoles igual a quien tengan que quitarse de en medio en su
camino para conseguirlo.
 No escuchan a los que están en desacuerdo con ellos; sienten como
enemigos a toda persona que sean maduros e inteligentes.
 Critican a espaldas de los demás; prefieren la crítica fácil y por la espalda, ya
que en el fondo temen no tener la razón.
 Agrandan sus logros; poseen falta de humildad, se adjudican más
responsabilidades de la que les corresponde cuando el resultado ha sido un
éxito, o bien buscaran una salida de emergencia cuando el resultado no sea
satisfactorio.
 Les da miedo arriesgarse; no consideran el fracaso ya que nunca se exponen
a él, pero si critican de forma dura y severa cuando otros no consiguen
aquello que pretenden.

¿Qué hacer si eres egoísta?

Un comportamiento egoísta puede ser habitual; sin embargo, esto no quiere decir
que no se puedan adoptar otras actitudes, aquellas que nos permitan ser más
conscientes sobre cómo somos con los demás con el fin de lograr mejorar la calidad
de las relaciones interpersonales.

Dentro de las acciones que se pueden realizar para cambiar una actitud egoísta se
encuentra el reflexionar sobre eso, aceptarlo, para hacer esto se debe detectar y
reconocer la mala actitud, por lo que es importante tomar acción y poder realizar el
cambio interno.

Para esto se debe reflexionar sobre cómo es el comportamiento y cómo afecta no


solo a la sí mismo sino también a los demás, ya que las actitudes egoístas
contribuyen a deteriorar las relaciones, causan sufrimiento y sentimientos de
malestar.

Una vez reconocida la conducta se debe cambiar la perspectiva, esto quiere decir
que se comprende y se está dispuesto a aceptar que existen otras personas, que
tienen sus formas de pensar y que también cuentan. Es decir, que no sólo existen
sus verdades ni sus razones, que el mundo no gira alrededor de él.

Realizar esto requiere de mucho esfuerzo, pero al hacerlo se puede decir que se ha
recorrido la mitad del camino y que se encuentra preparado para ofrecer algo a los
demás, dejando de pensar únicamente en sí mismo.

Como se indicó, al reconocer la conducta egoísta, se pasa a una conciencia de su


entorno por lo que la persona deja de creer que es el centro del mundo. Hay una
diferencia entre la egolatría, el egocentrismo y el egoísmo —aunque para muchos
parezca lo mismo—, pues se puede ser egoísta sin necesidad de ser ególatra; sin
embargo, estos conceptos muchas veces se relacionan. En el caso del egoísta, éste
quiere todo para sí mismo, y se trata de un comportamiento y una actitud; la
egolatría consiste en quererse mucho; y el egocentrismo surge cuando las personas
piensan que, tanto ellas como sus opiniones, conforman el centro del universo y
todo lo demás está por debajo.

No aparecen siempre juntos, pero sí es posible que una persona piense mucho en
sí misma, tanto que no tenga en cuenta a los demás, ni considere sus necesidades.
Como resultado de esto, existen personas que, además de egocéntricas, son
también egoístas. Es por lo tanto que si se andona esta forma de pensar, también
podría dejar de ser egoísta.

Otra actitud que se debe adoptar es la empatía. Para dejar de ser una persona
egoísta es importante aprender a ponerse en los zapatos de los demás. Una
persona capaz de sentir el sufrimiento de otra, tratará de aliviarle y no de causarle
daño. En algunas ocasiones, se actúa de forma negativa porque se está a la
defensiva, piensan que los demás quieren herir, o que son víctima de prejuicios, sin
detenerse a pensar en el dolor que se les puede causar a los demás.

Al ser empáticos se adquiere la actitud de escuchar, puesto que para lograr ser
empáticos es imprescindible escuchar a los otros, esto ya que se presta atención a
lo que los demás verbalizan, y a lo que expresan a través de su lenguaje no verbal
y su comportamiento. A esto se le conoce como “escucha activa”, la cual consiste
en un tipo de habilidad que puede ser adquirida y también desarrollada con la
práctica.

Llegado a este punto, el siguiente paso es el dar a los demás, no solo recibir; una
vez que se han comprendido los sentimientos de los demás, así como sus
necesidades, se podrá, entonces, ofrecer una amistad sincera. El ser humano al ser
una ser social necesita estar rodeados de personas, y por eso que se debe
demostrar que los otros también importan de verdad.

Lo anterior no es algo fácil de hacer, en especial cuando se trata de


comportamientos altruistas y compasivos, precisamente porque el egoísmo tiene
que ver con la forma en la que es educada la persona, añadido a que la sociedad
promueve este tipo de actitudes.

Es importante entender que no siempre se puede obtener placer inmediato, ni


beneficios de todo aquello que se haga, pues pensar así distorsiona la realidad y
hace que se actué sin tener en consideración a los demás, y mucho menos
considerar las consecuencias de nuestras acciones.

“La vida consiste en acumular experiencias que nos marquen, nos hagan crecer y
crear vínculos con otras personas, pero cuando se trata del amor, todo falla; así que
descubre cuáles son los tipos de amores irresponsables que todos hemos tenido
alguna vez en la vida”. (Gomez, 2017)
Bibliografía
concepto.de. (s.f.). CONCEPTO DE EGOÍSTA. Documento disponible en
https://concepto.de/egoista/

Díaz, P. (04 de 05 de 2015). Las 7 pistas que deja el egoísmo. Documento disponible en
https://lamenteesmaravillosa.com/las-7-pistas-que-deja-el-egoismo/

Gomez, E. (13 de 03 de 2017). Cómo dejar de ser egoísta y comenzar a disfrutar de la vida.
Documento disponible en https://www.entrepreneur.com/article/290516

Filosofia.org (s.f.). CONCEPTO DE EGOÍSTA. Documento disponible en


http://www.filosofia.org/enc/ros/ego.htm

la vanguardia. (08 de 08 de 2013). La cooperación, una ventaja evolutiva frente al egoismo.


Documento disponible en
https://www.lavanguardia.com/ciencia/20130808/54379274126/cooperacion-
ventaja-evolutiva-egoismo.html

También podría gustarte