Ut7 Rescate en Ascensores y Apertura de Puertas
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1
Módulo formativo
TÉCNICAS DE UNIDAD DE TRABAJO
RESCATE
Rescate en
7 ascensores y
apertura de puertas
Objetivos de estudio
‐ Adquirir los conocimientos necesarios para
actuar eficazmente en intervenciones para
rescate en ascensores y apertura de puertas.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 1
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
ESQUEMA DE CONTENIDOS
1 Apertura de puertas
1.1 Introducción
1.2 Identificar el bombín
1.2.1 Elementos del bombín
1.2.2 Funcionamiento del bombín
1.3 Funcionamiento de la cerradura
1.4 Técnica 1: romper el bombín
1.4.1 Con qué romper el bombín
1.4.2 Qué espacio es suficiente
1.4.3 Cómo proceder
1.4.4 Situaciones a tener en cuenta
1.5 Técnica 2: taladrar el bombín
1.5.1 Con qué taladrar el bombín
1.5.2 Dónde taladrar
1.5.3 Cómo proceder
1.5.4 Situaciones a tener en cuenta
1.6 Manipular la cerradura
1.6.1 Situaciones a tener en cuenta
2 Rescate en ascensores
2.1 Introducción
2.2 Reseña sobre ascensores eléctricos de adherencia
2.3 Reseña sobre ascensores hidráulicos
2.4 Reseña sobre ascensores sin cuarto de máquinas
2.5 Salvamento
Maniobras en ascensores de adherencia
2.5.1
(personas atrapadas en el interior)
2.5.2 Maniobras en ascensores hidráulicos
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 2
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1 Apertura de puertas
1.1 Introducción
Los bombines o bombillos de pernos o pines son uno de los diferentes tipos de
bombines que podemos encontrar. Se caracterizan por un mecanismo
compuesto de pernos o pines de diferentes longitudes que evitan que la
cerradura se abra sin la llave correspondiente.
La tecnología utilizada en este modelo de bombines es una de las más usadas
del mundo, y existe desde hace miles de años. De hecho, hay vestigios de este
tipo de tecnología en el antiguo Egipto.
Para el presente curso delimitaremos los contenidos a impartir en dos técnicas
de aperturas de puertas, que se basan en la eliminación del bombín como
elemento intermediario entre los miembros del equipo de intervención y el
mecanismo de la cerradura. Estas dos maniobras son el taladro del bombín y la
rotura del mismo.
1.2 Identificar el bombín
Como se ha expuesto, existen diferentes tipos de bombines de pines. Por su
extensa localización en nuestro país, basaremos las técnicas aquí desarrolladas
en el tipo de bombín europeo, de pera o europerfil.
Este bombín es fácilmente reconocible por su forma.
Pero en ocasiones, nos encontraremos con elementos
como embellecedores y escudos que nos impedirán
inquirir el tipo de bombín que se encuentra en una
cerradura.
Si no podemos averiguar el tipo de bombín por su forma, seguramente
podamos distinguir su mecanismo de funcionamiento. De este modo, veremos
asomar los pines o pernos por el bocallave o canal de la llave.
(Las técnicas que aquí se desarrollan son aplicables a otros tipos de bombines, aplicando
las variaciones que requieren las características de los bombines)
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 3
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.2.1 Elementos del bombín
En función de la localización geográfica, encontramos disparidad de
criterios a la hora de referirse a las diferentes partes componentes de un
bombín. Con el fin de unificar criterios para hacer entendible este trabajo, se
proponen los siguientes nombres:
1) Bocallave: Abertura donde se inserta la llave.
2) Perno: Normalmente cilindricos. y afinados en el extremo. Realmente
son dos pernos accionados por un resorte.
Cada columna de pernos de la cerradura tiene en realidad dos pernos,
uno apoyado sobre el otro:
Perno superior (también llamado contraperno), impulsa o empuja
al perno inferior hacia abajo.
Perno inferior: queda apoyado sobre la guarda, y es el que entra
en contacto con la llave una vez la introduzcamos. Generalmente
tienen un extremo algo afinado que queda visible. El motivo es
facilitar el deslizamiento de la llave.
3) Guarda: (desambiguación: no confundir con la guarda de la cerradura)
Salientes a lo largo del canal de la llave (bocallave). Calzan en las ranuras
laterales de la llave y ofrecen una resistencia al empuje de los resortes
sobre los pernos.
4) Tambor y cilindro: El tambor es el cuerpo exterior del bombín, y el
cilindro es la pieza que rota dentro del bombín.
5) Leva: Es la pieza que, accionada mediante el giro del cilindro, hace
contacto con el mecanismo de la cerradura, permitiendo el
funcionamiento de la misma.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 4
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.2.2 Funcionamiento del bombín
El bloqueo del cilindro del bombín impide su giro longitudinal, por lo que no
conseguiríamos hacer “funcionar” el mecanismo de la cerradura. Este bloqueo
es llevado a cabo por los pernos o pines, luego necesitamos un elemento que
nos proporcione la combinación acorde a los pines del bombín. Pero, ¿cómo
impiden los pernos el giro del cilindro? De dos maneras:
1) Si en situación de reposo, sin introducir una llave en el bocallave, los
resortes están empujando el conjunto de pines, de tal manera que el
cilindro superior del conjunto está apoyado sobre las guardas, y el perno
inferior queda interpuesto entre el tambor y el cilindro.
2) Si con un elemento introducido en el bocallave, el conjunto de cilindros
es empujado en contraposición del resorte más allá de su línea de trabajo.
De tal manera que el perno superior es, en esta ocasión, el que cruza la
línea que divide el tambor con el cilindro.
Cuando se inserta la llave con la combinación adecuada en el bocallave, “las
muescas” de la llave levantan los pernos hasta la posición adecuada. De esta
manera, cuanto más profundo sea el corte en la llave, mayor será la longitud de
los pernos.
Cuando la muesca esté a la altura correcta, la separación entre los pernos
superiores e inferiores estará a la misma altura que la separación entre el
tambor y el cilindro. Esta línea de separación se conoce como línea de corte.
Cuando ésto ocurre en todas las columnas de pernos, no quedan pernos que
obstruyan la línea de corte e impidan la rotación del cilindro. Entonces la llave
puede girar y abrir la cerradura.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 5
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.3 Funcionamiento de la cerradura
Son muchos los modelos de cerraduras que podemos encontrar en el mercado,
luego es lógico que pueda variar su modo de funcionamiento. No obstante, el
mecanismo básico es bastante similar entre unas y otras, repitiéndose, aunque
con las variaciones lógicas a la diversidad de modelos, algunos de los elementos
que componen una cerradura.
2) Guarda: (desambiguación: no confundir con la guarda del bombín) es el
elemento de la cerradura que traba o destraba la petaca. Sobre la guarda,
que suele estar dentada y tener un movimiento vertical, se ejerce la
presión de un resorte, que impide el movimiento de la petaca.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 6
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.4 Técnica 1: romper el bombín
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Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
Para poder llevar a cabo esta tarea, hemos de tomar en consideración algunos
puntos clave para su consecución satisfactoria:
1.4.1 Con qué romper el bombín
1.4.2 Qué espacio es suficiente
Una vez escogida la herramienta, hemos de poder aferrar el cuerpo del bombín
para poder romperlo. Para ello, se requiere un mínimo de 1 cm ya que, de lo
contrario, se resbalaría del útil que empleemos.
Por otro lado, el bombín requiere de un mínimo espacio a los lados para que los
movimientos laterales consigan su ruptura. Así, hemos de eliminar todo los
elementos que puedan impedirnos las manipulación cómoda del bombín como:
embellecedores, escudos, etc. Existiendo la posibilidad de encontrar como
obstáculo e impedimento a la maniobra la propia puerta.
1.4.3 Cómo proceder
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 8
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.4.4 Situaciones a tener en cuenta
a) El útil escogido para romper el bombín nos golpea con algún elemento,
como por ejemplo: el marco de la puerta
Ante este tipo de situaciones tenemos que barajar la opción de utilizar otra herramienta,
o la de actuar sobre el obstáculo. Por ejemplo: retirar las molduras del marco.
Para ello, como se ha mencionado con anterioridad, hemos de eliminar todos los
elementos que puedan impedir nuestra tarea (embellecedores, escudos…), pero, cuando
es la propia puerta la que nos impide el movimiento, podemos recurrir a efectuar
pequeños taladros a la puerta a los lados del bombín. De tal manera que nos
proporcionen el espacio suficiente (siempre que la puerta sea de madera, y se use la broca
adecuada)
Otra circunstancia análoga y que impediría llevar a cabo esta tarea nos la encontramos
en los supuestos en que los bombines queden embutidos en la puerta, de tal manera que
asoman menos de ese centímetro que hemos marcado como límite para afianzar la
herramienta al cuerpo del bombín.
d) El bombín no se rompe.
Esta posibilidad puede ser fruto del juego excesivo que presenta el bombín respecto a la
cerradura. Uno de los motivos más comunes suelen ser que el bombín no haya quedado
bien sujeto por su tornillo a la cerradura.
Dado que para llevar a cabo esta técnica el bombín ha de encontrar la oposición de un
elemento que impida su movimiento, tendremos que encontrar el modo de fijar su
posición, de tal manera que se ofrezca una resistencia a los movimientos laterales
llevados a cabo con la herramienta.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 9
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.5 Técnica 2: taladrar el bombín
1.5.1 Con qué taladrar
Teniendo claro que debemos usar una broca para metales, debemos escoger el
diámetro adecuado. En este punto, la bibliografía distingue varias opciones:
una en la que aconseja comenzar con una broca de 5 mm. Una segunda opción
en la que recomienda hacerlo con una broca de un diámetro <5 mm para pasar
a una broca de 5 o 6 mm, una vez facilitada la tarea. Y una tercera opción en la
que recomienda hacerse el taladro utilizando únicamente una broca de 7 mm.
1.5.2 Dónde taladrar
Puede ocurrir que el cuerpo del bombín disponga de pequeños pernos ubicados
fuera de la línea de pernos que se encuentra bajo el cilindro. En este caso hemos
de variar el punto de taladro, localizando el taladro justo en el medio del
bocallave. (ver situaciones a tener en cuenta)
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 10
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
1.5.3 Cómo proceder
1.5.4 Situaciones a tener en cuenta
Podemos hacer una muesca con un objeto punzante, golpeándolo contra el bombín.
b) Hemos taladrado todos los pernos y el cilindro aun no rota sobre su eje.
El giro del cilindro arrastra la leva siempre y cuando lo permita el embrague que lleva
dentro la propia leva. Para hacer solidario todo el conjunto, hemos de desplazar el
embrague a la posición de mando sobre la leva.
Esta acción, que normalmente se lleva a cabo introduciendo la llave por el bocallave
hasta su tope máximo, ha de ser efectuada por un elemento sustitutorio de la llave (ya
que se supone que carecemos de ella). Por tanto, hemos de utilizar un objeto lo
suficientemente delgado, largo y resistente para introducirlo por el bocallave hasta
empujar el embrague.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 11
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
Ahora, por el orificio que nos queda, podemos introducir nuestra herramienta y accionar
el mecanismo de la cerradura.
1.6 Manipular la cerradura
Una vez roto el bombín, tenemos acceso a la cerradura, auténtico elemento que
permite la apertura o cierre de la puerta.
Hemos de tener en cuenta que no todas las cerraduras son iguales, ni siquiera
las que comparten un mismo bombín. Pero sí que, normalmente, mantienen
unos elementos comunes que permite que sus mecanismos de funcionamientos
se asemejen lo suficiente como para que sean manipulados usando técnicas
análogas.
1.6.1 Situaciones a tener en cuenta
La mayor parte de las veces encontraremos la leva en dicha posición. La leva tiene una
ranura interna donde encaja el embrague, y puede hacerse coincidir dicha ranura con la
punta de un destornillador de cabeza plana. Así que podremos simular la acción de la
leva en el bombín haciendo girar el destornillador sobre su eje longitudinal.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 12
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
b) Tras romper el bombín la leva cae de su posición, entre los cuerpos del
bombín.
Puede ocurrir que la leva haya caído dentro de la cerradura, fuera de la posición que le
corresponde. En este caso, si nos es factible, podremos hacerle recuperar la posición con
un destornillador de punta plana (haciendo coincidir su ranura con la cabeza del
destornillador) para poder usar la pieza manualmente. De no ser factible, y siempre que
la pieza interrumpa el mecanismo de la cerradura, trataríamos de desplazarla a un lugar
donde no impida ningún movimiento.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 13
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
2 Rescate en ascensores
2.1 Introducción
Dentro de las diferentes modalidades de aparatos elevadores, encontramos los
ascensores.
Los ascensores, diferenciándolos de los montacargas, son aparatos destinados al
transporte de personas, generalmente, desde un plano superior a otro inferior o
viceversa. Existiendo otras modalidades de transporte en planos diferentes al
vertical, como por ejemplo los ascensores que trabajan en planos horizontales o
en planos inclinados.
Se instalan fundamentalmente dos tipos de ascensores: ascensores
electromecánicos y ascensores hidráulicos u oleodinámicos. Aunque hay que
mencionar los ascensores sin cuarto de máquinas, cuya instalación se está
viendo incrementada por las ventajas que presenta frente a los otros modelos.
Para el tiempo que nos ocupa esta parte del contenido del curso, centraremos
nuestra atención en los ascensores con cuartos de máquinas, aunque
mencionaremos alguna de las características de los ascensores sin cuarto de
máquinas.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 14
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
Reseña sobre ascensores eléctricos de
2.2
adherencia
Consisten en una cabina o plataforma que se desplaza dentro de un hueco,
deslizándose por unas guías verticales gracias a una fuente de energía eléctrica
para su funcionamiento.
Su sistema de tracción se basa en la tracción por adherencia. La tracción se
logra por un cierto número de cables de acero o cintas planas, que tienen un
extremo anclado a la parte alta de la cabina.
Entonces el cable o cinta pasa por la polea motriz de
la máquina, y, en el otro extremo, se ancla al
contrapeso.
Tanto la cabina como el contrapeso disponen de
unas guías a lo largo del hueco del ascensor por el
que se desplazan estos componentes.
Si la tracción se realiza mediante cables, la polea
motriz presenta una serie de hendiduras o ranuras
para cada cable, donde la masa del contrapeso y de
la cabina hacen que los cables se aprieten contra la
garganta de la polea motriz, moviendo ésta los
cables sin que exista deslizamiento.
Imagen ascensor de tracción
1: sistema de control. 3: polea
2: motor eléctrico 4: contrapeso 5: guías
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 15
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
2.3 Reseña sobre ascensores hidráulicos
El funcionamiento de este tipo de ascensores se consigue mediante un motor
eléctrico acoplado a una bomba, que impulsa el aceite a presión por unas
válvulas de maniobra y seguridad, desde un depósito a un cilindro, cuyo pistón
sostiene y empuja la cabina para ascender.
Para el ascenso de la cabina, una bomba manda el fluido a presión al pistón a
través de unas válvulas. Cuando la cabina se aproxima a la planta correcta, el
sistema de control envía una señal al motor para cerrar gradualmente la bomba.
Para el descenso de la cabina, el sistema de control del ascensor envía una señal
para que las válvulas permitan el retorno del fluido al depósito.
El sistema de impulsión hidráulica de ascensores consta de dos modalidades:
a) El sistema de impulsión directa e inferior, donde la impulsión se
lleva a cabo por la parte inferior de la cabina, necesitando un
foso para el cilindro.
b) El sistema de impulsión indirecta lateral, donde no se requiere
tener foso, ya que el pistón se instala en un lateral del foso.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 16
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
Reseña sobre ascensores sin cuarto de
2.4
máquinas
Actualmente se está generalizando el ascensor eléctrico sin cuarto de máquinas
o MRL (Machine Room Less). Las ventajas desde el punto de vista arquitectónico
son claras: el volumen ocupado por la sala de máquinas de una ejecución
tradicional desaparece, ahorrando los costes de la
tradicional sala de máquinas, pudiendo ser
aprovechada para otros fines o haciendo posible
que se pueda llegar con el ascensor hasta la terraza
o planta más alta donde anteriormente se situaba la
sala de máquinas.
La tracción en estos ascensores es realizada por
adherencia con la polea, accionada por la máquina.
Este sistema suele emplear poleas más pequeña que
la de los ascensores convencionales, junto a
sistemas de tracción basados en cintas planas, en
vez de cables de acero. Este hecho, junto al diseño
más reducido de las máquinas, permiten que sean
montados en el propio hueco de ascensor, sin la
necesidad del cuarto de máquinas.
En este tipo de ascensores, la maquinaría suele ubicarse
en el propio hueco del elevador, en una estructura
destinada a este fin. De tal manera que el cuadro de
maniobra se sitúa en un armario, fuera del hueco el
elevador, y al que se tiene acceso directamente desde uno
de los rellanos de planta del edificio.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 17
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
2.5 Salvamento
Es muy complicado establecer un patrón de salvamento general para este tipo
de rescates, ya que el modo de intervenir dependerá del tipo de accidente y del
tipo de elevador.
Lo que sí podemos establecer es unas premisas generales a seguir en
emergencias relacionadas con ascensores, y luego actuar específicamente de a
cuerdo a las características particulares de la intervención.
Teniendo en cuenta los objetivos del curso, a continuación se incluye los pasos
más importantes a seguir en una secuencia de salvamento en diferentes tipos de
ascensores:
Maniobras en ascensores de adherencia
2.5.1 (personas atrapadas en el interior)
1. Localizar la sala de máquinas (si la tuviera) y desconectar el interruptor
eléctrico general del ascensor. Es importante tener en cuenta:
1.1. Cortar sólo el interruptor de fuerza, y no alumbrado, para no
incrementar el posible estado de estrés de las víctimas. Con este objetivo, otra
medida complementaria que podemos llevar a cabo sería encender el
alumbrado del hueco del ascensor.
1.2. Cortar la corriente independientemente de si la parada del ascensor
se deba a un apagón general
1.3. Existen modelos de ascensores que requieren el corte de energía
previo a la apertura de las puertas.
2. Averiguar en qué planta se encuentra parada la cabina. Para la verificación
visual podemos abrir la puerta de un piso, mediante la llave al efecto,
preocupándonos del posterior enclavamiento de la puerta.
Una vez localizada la cabina es importante comunicarse con los atrapados, para
informarles de nuestra presencia y de las maniobras que vamos a desempeñar.
3. Una vez localizada la cabina, y si su cercanía a planta lo permite,
ayudaremos a las víctimas a salir. En caso de existir cierta altura, y siempre que
la práctica se desarrolle dentro de unas garantías de seguridad, es
recomendable la utilización de sillas o escaleras para favorecer la evacuación de
los atrapados.
4. Si la situación de cabina imposibilita la evacuación sin antes desplazarla,
deberemos hacer uso de la aparamenta de maniobra de la sala de máquinas
(para ascensores con sala de máquinas).
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 18
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
Para llevar a cabo esta acción deberemos colocar la llave que desbloquea el
freno en su posición de trabajo, y accionarla, suavemente, para desbloquear el
volante.
El movimiento del volante debe hacerse en el sentido que más convenga para el
rescate, dado que dependiendo de la posición de la cabina y el contrapeso,
puede resultarnos más sencillo subir y no bajar, o viceversa.
5. Con la cabina a nivel del piso deseado (que puede comprobarse con las
marcas en los cables que pasan por la polea), se puede proceder a abrir las
puertas exteriores con la llave de emergencia, y liberar a los pasajeros. En este
paso, poner atención al posible escalón de cabina con respecto al suelo, para
evitar tropiezos.
6. Una vez liberados los pasajeros, debemos asegurarnos de que las puertas que
hayamos abierto queden todas cerradas. (Además, sería conveniente, durante la
intervención, comprobar que todas las puertas de los ascensores están
perfectamente enclavadas, para evitar accidentes)
7. Si la cabina no puede ser desplazada por medio de los procedimientos
descritos, podremos hacer uso, si disponemos de la herramienta adecuada y los
conocimientos oportunos, de gatos o trácteles, que se instalarán en la caja del
ascensor, encima o debajo de la cabina, según convenga a la maniobra.
Otro tipo de maniobra, de sencilla realización, consiste en utilizar un cable de
acero como medio de tracción, uniendo un extremo a uno de los radios de la
polea, y el otro extremo al cable de tracción del ascensor.
Es conveniente que la puesta en marcha de los equipos sea llevada a cabo por
personal especializado, perteneciente a la empresa instaladora.
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 19
Técnicas de rescate en derrumbamientos, ascensores y apertura de puertas
2.5.2 Maniobras en ascensores hidráulicos
1. Localizar la sala de máquinas y desconectar el interruptor eléctrico general
del ascensor.
2. Debemos conocer la posición de la cabina. Podemos ver su posición a través
del cuarto de máquinas.
Es conveniente que algún miembro del equipo interviniente se comunique con
los atrapados, para informarles de nuestra presencia y de las maniobras que
vamos a desempeñar.
3. Deberemos asegurarnos de que todas las puertas de acceso a cabina de los
diferentes pisos se encuentran cerradas.
4. En la sala de máquinas, localizaremos el aparataje de maniobra manual. Suele
consistir en un pulsador, o similar, que oprimiremos para hacer descender la
cabina hasta la planta más próxima.
Es conveniente realizar esta maniobra intermitentemente, comprobando en sus
intervalos de parada, la posición de la cabina.
5. Ante la imposibilidad de descender la cabina (por ejemplo: por acuñamiento
en los ascensores provistos de paracaídas), procederemos al desbloqueo de la
cabina utilizando la bomba manual de emergencia, situada en la misma sala de
máquinas.
6. Una vez ubicada la cabina en la planta deseada podremos abrir las puertas
del piso, con la llave de emergencia, y liberar a los pasajeros. Durante esta paso
pondremos atención al posible escalón que pueda existir entre el nivel de planta
y la cabina.
7. Concluida la maniobra, nos aseguraremos de que las puertas que hayamos
abierto queden todas cerradas.
Es conveniente que la puesta en marcha de los equipos sea llevada a cabo por
personal especializado, perteneciente a la empresa instaladora.
(En caso de que no podamos mover manualmente la cabina, podremos utilizar
técnicas análogas a las utilizadas en ascensores de tracción por adherencia. Para
ello, como se ha mencionado anteriormente, hemos de disponer de la
herramienta adecuada y los conocimientos específicos.)
MÓDULO 1 ‐ U.T. 7 20