El Salmo 133
El Salmo 133
El Salmo 133
El rabino Yehuda Ribko nos da una interpretación cabalística del mismo que según mi
entender, es apropiada para cada uno de nosotros como seres humanos y hermanos masones.
“He aquí, cuan bueno y agradable es que los hermanos habiten juntos en
armonía”
Se sabe que la actividad principal del Templo no era otra que encender las luces de la
Menorá. La centralidad de la Menorá se debe a que su luz ardiente expresaba la presencia de
Dios - SHEJINA y su especial vínculo con el BEIT HABEJIRA – la morada de Dios y con el AM
SEGULA – el pueblo elegido. La unción de reyes y sacerdotes representaba en pequeño la
presencia del Eterno en sus funciones, pues líderes políticos y religiosos debían tener como
centro el servicio a Dios [o meta trascendental de algún tipo] y no metas egoístas personales o
grupales.
“sobre la cabeza”:
Aunque la unión es armoniosa, es la cabeza, la razón la que debe conducir los pasos de
la persona y no la emoción. Sin embargo se exige un equilibrio de ambos.
Por qué?
Y ello es para recalcar que Aarón todo lo que hacía, tanto en su servicio especial al
Eterno como Sumo Sacerdote o en su calidad de guía del pueblo, lo hacía con amor y no por
intereses ulteriores.
Las vestiduras sacerdotales eran para dar gloria y esplendor [Shmot, Exodo, 28:2], eran
un tipo distinto de ropaje no solo para cubrir y permitir la vida sino que favorecían el
florecimiento de lo mejor de quien las vestía y aquellos que lo contemplaban. Cuando la
persona se viste de espiritualidad y guía sus actos razonablemente sin duda que hallará lo que
es bueno y agradable.
“hasta el borde”
“Es como el rocío del Jermon que desciende sobre los montes de Zion ”
Jermon es jomer – materia, y es lugar alto, frío y monumental, en tanto que Zion -
además de Jerusalem y más precisamente el Kodesh Hakodashim - es el centro hacia donde
tienden las líneas, aunque más bajo y menos llamativo. Así pues dos representaciones
contrarias pero no contradictorias se dan en la misma imagen:
[1] El rocío es material pero intangible y está al servicio de lo ajeno. El rocío del Jermon al
servicio de Zion. La interpretación es que lo derivado de la materialidad debe ponerse al
servicio de lo trascendente.
[2]. Así como el rocío baja desde la altura y el aceite desciende de lo alto, la meta de la persona
debe estar dirigida por altos valores y no por la mezquindad.