Revolución Mexicana Y Cambio Arquitectónico
Revolución Mexicana Y Cambio Arquitectónico
Revolución Mexicana Y Cambio Arquitectónico
ORIENTE DE MICHOACÁN
ARQUITECTURA EN MÉXICO DURANTE EL
SIGLO XIX
REVOLUCIÓN MEXICANA Y CAMBIO
ARQUITECTÓNICO
ARQ. BLANCA ELENA BRISEÑO CORREA
JAIRO GARCÍA GARCÍA
ARQUITECTURA
6 CUATRIMESTRE
Principales precursores
El arte, especialmente en sus expresiones de diseño y artesanía, se hicieron altamente
notables entre los años 20 y 30 –y su revival en algunas ciudades en los años 50–, vieron
nacer a una de las corrientes más sofisticadas que se pueden apreciar en las artes
decorativas y la arquitectura: el art déco. Las principales características de este subgénero
del arte provienen de otras corrientes como el cubismo de la pintura, el futurismo, que
derivó del anterior Art Nouveau (pero en contraposición a ésta apuntaba por líneas rectas o
grecas en vez de onduladas), el arte egipcio antiguo y más formalmente de
los experimentos “racionalistas” que se creaban en el laboratorio de la Bauhaus. El Art
Déco es uno de los estilos decorativos más lujosos y de trasfondo social. De algún modo
fue una forma de protesta contra la austeridad post guerra del siglo XX. Así que surge en
esos periodos de los años 20 después de la primera guerra mundial y se termina en los años
50 después de la 2da guerra.
Entre las características del Art Déco, están el uso de vegetales y formas geométricas
tanto en las artes visuales como en la arquitectura, la mezcla de estilos, como
el constructivismo, cubismo, fauvismo y hasta el estilo egipcio, gracias a los
descubrimientos que se llevaron a cabo durante esa época. El Art Déco tuvo mucho
impacto en la arquitectura en México, debido en gran parte a que aquí no tuvimos guerra
y porque en general, los mexicanos desde siempre hemos mezclado estilos, formas y
proyectado deseos. Algunas colonias de la Ciudad de México aún nos permiten admirar
estas hermosas construcciones que hoy día siguen dándole un sabor único a sus calles.
Los casos más notables están en la colonia Tabacalera y la colonia Hipódromo Condesa,
que estaban dirigidos a la clase media que empezaba a expandirse tras la Revolución. Los
creadores destacados de esta etapa fueron los arquitectos Juan Segura y Francisco J.
Serrano.
Edificio El Moro
Paseo de la Reforma 1, Tabacalera.
Monumento a la Revolución
El Art Déco del monumento combina piedra volcánica con la piedra de cantera. El trazo
original pretendía la construcción de un Palacio Legislativo de estilo afrancesado; sin
embargo, la construcción tuvo que detenerse durante la Revolución. Durante la década de
los años 30 el arquitecto Carlos Obregón Santacilia retomó el proyecto, transformándolo
en el monumento a la Revolución.
53 metros hasta el espiral y 42,5 m hasta el techo, que forman parte de los 4 pisos y un
estacionamiento subterráneo. El palacio mezcla varios estilos arquitectónicos, donde
predomina el Art decó en el interior completado por Federico Mariscal.
Frontón México
Edificio Picadilly
Celaya, Condesa, CDMX.
Es un edificio de 3 pisos y 6 departamentos diseñado por el arquitecto Ernesto J.G.
Buenrostro y construido en 1930. Su fachada posee una forma asimétrica y dos líneas
verticales que la recorren a lo largo.
Plaza Popocatépetl
Esta fuente de pabellón estilo Art Déco fue diseñada construida en concreto armado por
el arquitecto José Gómez Echevarría en 1926 y es conocida popularmente como la
Bomba. Es una especie de domo o cúpula sostenida por cuatro columnas blancas, toda
decorada con azulejos y en la parte superior un orificio que durante el cenit permite la
entrada de la luz del sol al interior de la estructura iluminándola por un momento.
Este edificio fue realizado por Vicente Mendiola Quezada, Carlos Greenham y Luis
Alvarado en la década de los veintes. En su geometría predominan planos verticales que
generan una continuidad escalonada, los vanos de las ventanas y su composición exaltan el
volumen de cada elemento arquitectónico. Podemos apreciar una característica del Art
Déco en su entrada principal: el nombre del edificio grabado y la combinación de
elementos geométricos con motivos orgánicos que decora el cancel de ingreso.
Marquis Reforma
Paseo de la Reforma 465, col. Cuauhtémoc.
El hotel está ubicado en una de las zonas más exclusivas de Ciudad de México. En esta
ubicación, rodeado de las tiendas de moda más prestigiosas, los espacios gourmet con más
detalles exclusivos y las mejores galerías de arte de la ciudad, se encuentra este edificio
diseñado por Ochoa arquitectos. Además, su cercanía al famoso Bosque de Chapultepec
hace que las vistas desde el hotel sean realmente impactantes y espectaculares. Cada una
de las habitaciones del hotel ha sido decorada siguiendo las tendencias Art Deco más
lujosas.
Edificio Basurto
Avenida México 187, Colonia Hipódromo.
Aunque el edificio se encuentra cerrado por las afectaciones que sufrió en el 19s, la
edificación de 14 niveles emplazada en lo que alguna vez fue el jardín de la casa del Sr.
Basurto merece ser mencionada. Debido a la irregularidad del terreno, el arquitecto Serrano
propuso una planta en forma de cruz y gracias a su geometría, el edificio tiene relación
directa con el noreste, suroeste y noroeste, lo que le garantiza la posibilidad de
asoleamiento durante todo el año.
Modernismo multifamiliar
El modernismo en México es una corriente artística que surge a finales del siglo XIX y
principios del XX. Se suele asociar preferentemente a la literatura, aunque también influyó
en el resto de las artes: desde la pintura hasta la arquitectura. Aunque hay discrepancias
sobre dónde fue su origen, muchas fuentes consideran que fue en España y Latinoamérica.
Esto es muy visible en la literatura, con autores como Miguel de Unamuno (en el caso
español) o Rubén Darío (en América). En México hubo autores que comenzaron a
practicarlo en el s. XIX, pero su presencia es más fuerte durante las dos primeras décadas
del siglo siguiente, coincidiendo con la última etapa del Porfiriato y con su caída.
En las obras que se suelen identificar con el modernismo hay una búsqueda consciente de
su identidad nacional. Se trata de dejar atrás parte de la herencia cultural española y de
renovar las ideas de las primeras décadas como estado independiente, tan marcadas por las
guerras.
A principios del siglo XX otro aspecto significativo es la constatación del deseo de cambio
tras mucho tiempo bajo el gobierno de Porfirio Díaz. Esos vientos renovadores se dan
también en el arte.
Literatura
Si hay una manifestación artística por excelencia dentro del modernismo mexicano, esa es la
literatura. A pesar de que la mayoría de los expertos afirman que la primera figura dentro de
esa corriente es el nicaragüense Rubén Darío, México es de los países que ofrece mayor
variedad y calidad en sus autores.
Arquitectura
En otros países recibió nombres como Art Nouveau, Modern Style o Floreale. En líneas
generales se trata de un estilo rompedor con el clasicismo. Se empezaron a usar nuevos
materiales en la construcción, como el cristal o el hierro, y las construcciones se llenan de
asimetrías y curvas.
Pintura
Música
Representantes principales
Junto con el anterior, es uno de los introductores del modernismo en México. Trabajó como
periodista, pero es su faceta como poeta la que le otorgó más reconocimiento. Algunos
autores consideran que escribió algunos de las líneas más complejas en español,
especialmente en su obra Lascas. Tuvo que exiliarse en España por sus críticas al gobierno
de Venustiano Carranza.
Diego Rivera
El muralista más famoso del país. Sus obras siempre destacan por su contenido social
debido a sus ideas comunistas. Algunos de sus murales se encuentran en Ciudad de
México, aunque también las hay en Buenos Aires o Nueva York.
Los avances tecnológicos de la era digital han cambiado por completo el escenario en el que
se mueve el mundo de la Arquitectura. Los procesos constructivos van venciendo
límites insospechados y los retos que presenta la revolución 4.0 se van cumpliendo.
Todo ello se traduce en un crecimiento en este campo y que a su vez viene derivado de las
nuevas tecnologías. O al menos así lo refleja el Barómetro del Observatorio Industrial de la
Construcción, que sigue registrando resultados positivos en el sector.
3. Arquitectura Robótica
4. Metodología BIM
No solo está suponiendo una revolución en sí misma para los ingenieros, sino que los
arquitectos también experimentan sus ventajas en las fases del diseño y el mantenimiento
de edificios. Ten en cuenta que esta metodología permite realizar proyectos inmersivos en
los que se puede pasear por su interior antes incluso de que estos se lleven a cabo
o detectar y combatir errores en su planificación.
Las múltiples aplicaciones de la Realidad Virtual han convertido esta tecnología en un nuevo
nicho arquitectónico. Y entre todas ellas, cabe destacar que esta nueva forma de diseño 3D
en tiempo real permite a arquitectos, clientes u otros agentes del proyecto interactuar
con el entorno creado: desde modificar las texturas o el color de las paredes hasta cambiar
un exterior, consultar las medidas o actualizar los gastos.
6. Arquitectura sostenible
A partir de 1910 se empiezan a sentir en la economía los efectos del cambio de sistema,
aunque no podemos hablar de una crisis en la economía mexicana. Con la llegada de
Francisco I. Madero a la presidencia no se observan mayores cambios en las políticas
sociales y económicas, además de que las relaciones internacionales se mantuvieron sin
grandes cambios.
Etapa violenta
Es hasta 1913, al iniciar la lucha armada entre carrancistas y villistas, que se empieza a ver
una desarticulación del sistema económico estructurado durante el Porfiriato. Esto afectó a
todas las ramas de la economía hasta cierto punto, con excepción de la industria petrolera.
Las monedas de oro y plata, así como los billetes de los bancos establecidos salieron de
circulación, privilegiando la existencia de monedas respaldadas por cacicazgos
revolucionarios; los llamados bilimbiques. Además, la zona norte del país que vio la mayor
parte del conflicto armado tuvo una baja en las inversiones que recibía del extranjero,
principalmente de Estados Unidos por su cercanía.
La ideología maderista
En el pensamiento de Francisco I. Madero siempre estuvo presente la miseria que sufrieron
los hombres y mujeres tanto del campo y de la ciudad, lo demuestra claramente en su
libro La sucesión presidencial de 1910. En algunas ocasiones, actuó de acuerdo con esa
concepción, forjada de un simple sentimentalismo, no de un compromiso social, era esa la
razón por la cual se desentendía del pueblo con facilidad. En una entrevista al Imparcial se
declaró creyente de la pequeña propiedad y negaba la posibilidad de despojar a los
terratenientes de alguna parte de su propiedad, así, cancelaba la posibilidad de la
distribución de la tierra como una forma de otorgar justicia social.
El errático pensamiento social de Madero, no se comparaba con su clara visión político del
mismo. Un concepto clave de Madero era el pueblo, para él ya no era una cuestión elitista
como en el porfiriato, donde sólo los pocos que integraban las “clases superiores” contaban,
los demás eran omitidos. En la concepción maderista los obreros y campesinos son
incorporados a la concepción del pueblo, en el cual todos somos iguales. El igualitarismo de
Madero no permitió destacar la desigualdad, donde la lucha de clases es una constante.
Los fundamentos de la ideología del villismo procedieron de la historia del norte de México y
en particular del estado de Chihuahua. Donde la concentración de la tierra en unas pocas
manos alcanzó una situación escandalosa a finales del siglo XIX, al grado que sin mentir el
terrateniente Terrazas cuando se le preguntaba “¿eres de Chihuahua?” El respondía “no soy
de Chihuahua, Chihuahua es mía”. La contra cara de la concentración de la tierra era un
mundo de campesinos despojados de sus parcelas, que se convirtieron en la base social del
villismo, pues pensaban que poseer una pequeña parte de la tierra les daría de comer.
La situación de ruptura social del norte del país fue donde se forjó la fuerza de la
personalidad de Pancho Villa, hombre que luchó por sobrevivir en ocasiones hasta como
bandido, esto le dio una esencia revolucionaria desde la base del pueblo. Su forma de ser
tan cercana a la gente provocó una infinidad de odios de quienes no deseaban perder su
posición social frente el levantamiento popular villista, estos sentimientos perduraron
después de la muerte de Pancho Villa, aunque no sólo se trató de un hombre, a su espalda,
a su lado y aún superándolo, está el mito de su División del Norte, un verdadero ejército
popular, que fue construido por los desarraigados del norte, su disciplina resultó impecable,
de temer hasta nuestros días por los poderosos y de admirar por todos aquellos que desean
hacer la revolución.
La ideología de los zapatistas se puede localizar desde lo más profundo de las comunidades
donde nació, pueblos que datan de los tiempos prehispánicos. Ocuparon una serie de tierras
de Morelos y de los estados aledaños, las cuales habían defendido de hacendados desde la
colonia. El despojo de las tierras se aceleró en el porfiriato por la creación de las
plantaciones azucareras, se estaba desintegrando a las comunidades indígenas, pues
buscaban que los hombres abandonaran sus pueblos para trabajar en las haciendas,
mientras perdían sus parcelas frente el avance de la agroindustria del azúcar, que
necesitaba más y más campos de cultivo.
El Ejército Libertador del Sur actuó principalmente como guerrilla, porque tuvo el mayor
arraigo de todos los grupos revolucionarios con la población y hoy en día inspira a otros
movimientos, por ejemplo, al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
La ideología del carrancismo
La identidad del carrancismo correspondió sólo a los marcos políticos, no tuvo un verdadero
contenido social, le hubiera encantado poder realizar la revolución desde las élites, sin tomar
en cuenta al pueblo, aunque esto fue imposible por estar en un contexto movilización de las
masas (Córdova, 1989: 68). Su hombre fuerte fue Venustiano Carranza, un viejo político del
porfiristo, quien se unió al maderista, tras la Decena Trágica logró crear y colocarse al frente
del constitucionalismo.
Sin duda resultaba una vanguardia revolucionaria, aunque desde un poco antes de 1910 y
en especial durante la Revolución, comenzó a plantear cambios radicales. Así, busca la
destrucción del capitalismo y, por consiguiente, de la aplicación de la noción de propiedad
privada que lo acompaña, pues ve en él la causa de todos los males de la humanidad. Los
Estado sirven al burgués, en consecuencia, mientras existiera el Estado un verdadero
cambio era imposible, por lo cual, proyectaron su destrucción.