Discurso de Feminicidio

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DISCURSO SOBRE EL FEMINICIDIO

Hoy en día es frecuente escuchar sobre la gran cantidad de asesinatos e


intentos de asesinatos de mujeres cometidos por varones, siendo estos en su
mayoría sus cónyuges, asesinatos causados por celos, inseguridades, ajustes
de cuenta entre otros.
Un caso muy particular es el de Carmen Mendoza Flores, natural de
Junín, quien fue encontrada desnuda y con signos de ahorcamiento en la
vivienda que había compartido con su expareja, Eder Solín Chagua Reyes.
Según reportaron medios locales, el feminicida llamó a sus familiares para
pedir que recojan el cuerpo de su expareja. Tiene orden de prisión
preventiva, pero está no habido.
La escala de homicidios violentos de mujeres cometidos por hombres en las
dos últimas décadas se ha ido incrementando tanto que los homicidios de
genero han sido tipificados como “feminicidios”. El objetivo era
concienciar y disminuir así el número de feminicidios cometidos cada año;
sin embargo, a medida del paso del tiempo los feminicidios han ido
aumentando cada vez más, esto debido a distintas causas y factores que se
detallaran en el presente.
Tenemos dos posturas en discusión, en relación a los feminicidios, la
primera sostiene que el feminicidio es causado principalmente por la
ausencia del estado de derecho; y la otra es que el feminicidio es causado
por un vacío legal (falta de reglamentación legislativa).
Creo firmemente que el feminicidio se da por la ausencia de un estado de
derecho, ya que hasta ahora no hay igualdad entre hombres y mujeres a
pesar del principio establecido de que toda persona es igual ante la ley.
Ahora, según Ana Carcedo, investigadora reconocida, el feminicidio se dan
por la falta de un estado de derecho, porque no exigen cumplir las
responsabilidades a los perpetradores de las violaciones, ya sea a través
de los procedimientos penales, civiles, administrativos o disciplinarios
existentes.
En el Perú, tan solo en lo que va del año 2019, entre los meses de enero y
mayo, se llevaron a cabo 58 feminicidios, según la base de datos y cifras
del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, el 19% de los
agresores se fugaron, el 42% quedaron detenidos, además el 8 % cometió
suicidio (RPP NOTICIAS 2019), ante estos hechos el poder legislativo no
toma las acciones debidas del caso; mediante el decreto legislativo,
artículo 108-B.- Feminicidio, dice: será reprimido con pena privativa de
libertad no menor a quince años el que mata a una mujer por su condición
de tal, en cualquiera de los contextos, familia, lugares públicos, con niños
presentes o bajo el cuidado de esa persona, se dará la pena de
inhabilitación conforme al artículo 36.
Hay tantas maneras de hacer justicia según las leyes pero no se pone casi
ninguna en práctica, se deja a los asesinos libres y sin ninguna explicación,
cómo dejarlos libres si acuchillaron 51 veces a una mujer, cómo dejarlos
libres si bañaron en ácido muriático a una mujer, cómo dejarlos libres si
hasta a niñas las violan, matan, descuartizan, cómo. Por tanto, la ausencia
de castigo fomenta la criminalidad y trae como resultado un Estado que
viola los derechos de sus ciudadanas a la vida y a la seguridad.
Quisiera hacer un llamado a la reflexión, a la práctica de buenas acciones y
valores, a inculcar el respeto por las personas. Recientemente salió una
campaña muy polémica propuesta por el ministerio de la mujer y
poblaciones vulnerables (MIMP) , la cual es llamada "Fuerza sin
violencia”, donde el ejército peruano fue partícipe, la campaña consiste en
colocar un mandil rosado como símbolo de respeto e igualdad de género,
con el objetivo de sensibilizar, concientizar y reducir la violencia contra
mujer, les invito a ser partícipe de esta tan emotiva campaña, en los talleres
que se brindan, los participantes comparten las dificultades que como
hombres tienen en la vida cotidiana y que están asociadas a los conflictos
con sus parejas y el ejercicio de su paternidad. Junto a especialistas, buscan
alternativas de solución no violentas. Y aprenden formas adecuadas de
solucionar esta problemática. Al acabar los seminarios –que tienen una
duración de tres meses–, los participantes visten el mandil rosado. Ello
representa que es una persona sensibilizada y comprometida en trabajar por
la no violencia contra la mujer. ¡No dejemos que se sigan cometiendo
injusticias y abusos, Sumémonos ya¡

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