El Jefe Perfecto 1 Serie Los Hermanos Smith de Brenda Ford PDF

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 28

~1~

~2~
1º Edición Enero 2019

©Brenda Ford

EL JEFE PERFECTO

Título original: The Perfect Boss

©2019 EDITORIAL GRUPO ROMANCE

© Editora: Teresa Cabañas

[email protected]

Esta es una obra de ficción. Nombres, caracteres, algunos lugares y situaciones


son producto de la imaginación de la autora, y cualquier parecido con personas,
hechos o situaciones son pura coincidencia.

Todos los derechos reservados. Bajo las sanciones establecidas en las leyes,
queda rigurosamente prohibida, sin autorización escrita del copyright, la reproducción
total o parcial de esta obra por cualquier método o procedimiento, así como su alquiler
o préstamo público.

Gracias por comprar este ebook.

~3~
Índice

Capítulo 1 – Tami .......................................................................................................... 6


Capítulo 2 – Brad ........................................................................................................ 12
Capítulo 3 – Tami ........................................................................................................ 18
Capítulo 4 – Brad ........................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 5 – Tami ........................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 6 – Brad ........................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 7 – Tami ........................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 8 – Brad ........................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 9 – Tami ........................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 10 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 11 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 12 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 13 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 14 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 15 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 16 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 17 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 18 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 19 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 20 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 21 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 22 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 23 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 24 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 25 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 26 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 27 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 28 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 29 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 30 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 31 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.

~4~
Capítulo 32 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 33 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 34 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 35 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 36 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 37 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 38 – Brad......................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Capítulo 39 – Tami ........................................................ ¡Error! Marcador no definido.
Epílogo ............................................................................... ¡Error! Marcador no definido.
Si te ha gustado este libro no te pierdas ............................................................. 24

~5~
Capítulo 1 – Tami
Lunes

—Le odio, Ruby —gimoteo desesperada, mientras golpeo la cabeza


contra la mesa—. ¡Es horrible!

—Supongo que debe ser bastante despiadado si es el jefe de una


compañía tan grande. Pero no puede ser tan malo... ¿no? —Le lanzo
una dura mirada—. Vale, sí lo es, me ha quedado claro. Pero solo serás
su asistente durante una semana.

—Una semana que se me hará eterna, aunque después volveré al


equipo creativo con Ángelo, en mi puesto de siempre.

Brad Smith… Brad Smith es el jefe de la compañía de marketing


para la que trabajo. El gruñón, malhumorado y melancólico señor
Smith que lo mantiene todo en marcha… Le tengo mucho respeto, sobre
todo porque sé que se hizo cargo del cuidado de sus cinco hermanos
después de la muerte de sus padres cuando era joven y que ha
convertido el negocio familiar en una gran empresa... pero prefiero
respetarlo desde lejos. De cerca, resulta un tanto aterrador. No sé por
qué su hermano menor, Ángelo, para quien trabajo normalmente, me
ha hecho esto. Es casi como si quisiera castigarme por algo y no sé por
qué. No he hecho nada malo, al menos que yo sepa.

—Tal vez se deba a que era tu primer día, Tami —dice Ruby
tratando de animarme—. Seguro que mañana te irá mejor.

—Creo que no me considera lo bastante buena para trabajar para


él, eso es todo.

—¡Oh, venga! ¡Eres fantástica, Tami! Y Brad podrá comprobarlo si


es el hombre de negocios despiadado e inteligente que parece ser.
Terminaste la carrera siendo una de las mejores de tu facultad y no has
hecho más que probarte a ti misma desde entonces. Personalmente,
opino que eres demasiado buena para ser la mera ayudante de Ángelo.
Deberías tener tu propio equipo creativo. Con suerte, al pasar un
tiempo con el jefe, le ayudará a verlo.

No puedo evitar sonreírle a mi mejor amiga.

~6~
—Siempre has sido mi mayor fan, Ruby, y por eso te quiero tanto.
Pero solo tengo veintidós años, y en cambio él más de treinta. Estoy
segura de que me ve como a una cría. Me fue bien en la universidad, sí,
pero no tengo suficiente experiencia laboral.

Ruby pone los ojos en blanco.

—Puede que yo no tenga un negocio tan grande como Smith's, pero


también soy jefa, ¿recuerdas? Y cuando veo potencial, la experiencia
laboral no importa.

—Bueno, tal vez, algún día, cuando tenga mis propias cuentas, te
acepte como cliente.

—Sabes que me encantaría. No confiaría en nadie más que en ti


para hacerlo.

Termino el resto de mi bebida: sin alcohol porque mañana tengo


que trabajar, y me recuesto más en la silla. Estoy contenta de haber
salido a cenar con Ruby. No iba a hacerlo porque estoy agotada, pero
necesitaba a alguien con quien desahogarme y ahora me alegro de
haberlo hecho. Tengo que admitir que me siento mucho mejor.

—Bueno, déjame sobrevivir a esta larga semana primero, y luego


veremos adónde va mi carrera.

Me encantaría pensar que este podría ser un gran paso para mí y


que ese era el plan de Ángelo, pero no sé. No quiero ilusionarme. No
quiero que me decepcionen.

—Déjame ver una foto de ese arrogante ejecutivo —dice Ruby de


repente.

—¿Qué? ¿Quieres ver una foto de Brad? No creo que tenga cuenta
en las redes sociales.

—No, pero debe haber una foto de él en la web de la compañía o


algo así.

Saco mi teléfono móvil, preguntándome qué demonios planea


Ruby. Encuentro la página sobre la información de Brad y espero un
segundo a que se cargue. A medida que su rostro llena mi pantalla, lo
contemplo con la sensación de que su mirada penetra en mí, y mi
corazón se salta unos cuantos latidos.

—No vas a hacer ninguna tontería, ¿verdad? —pregunto antes de


mostrarle nada.

~7~
—¡Por supuesto que no! Solo quiero ver cómo es, eso es todo. —Le
entrego el teléfono e inmediatamente su expresión cambia—. ¡Oh, Dios
mío, es guapísimo! Vaya, no me extraña que sea arrogante. Apuesto a
que se comporta como un jefe de lo más sexi. Desde luego, a mí no me
importaría cumplir todas sus órdenes —señala con retintín.

—¡Ruby! —exclamo sorprendida—. Acabo de decirte que no quiero


trabajar para él...

—Pues no entiendo por qué. Está buenísimo e, incluso, si se


comporta como un auténtico imbécil, siempre puedes recrearte la vista
con él.

—Estás prometida, Ruby, por lo que no creo que debas hablar así
de otro hombre.

Mi amiga rueda los ojos.

—Entonces ¿no puedo decir que un tío es guapo? Anda ya, sigo
teniendo ojos en la cara, cielo, y este hombre es muy sexi. Alto, moreno,
guapo y es evidente que se cuida...

—¡No es tu tipo, Ruby! —Honestamente no entiendo de qué va todo


esto.

—No, pero podría ser el tuyo. ¿No crees? —Mueve las cejas con
picardía—. ¿No piensas que va siendo hora de que pierdas tú
virginidad?

—¡No voy a perder mi virginidad con mi jefe! —siseo mientras le


robo el teléfono—. ¿Has perdido la cabeza?

—¿Por qué no? Daniel siguió engañándote durante años y nunca


pasó nada entre vosotros, así que tal vez sea el momento...

Me remuevo incómoda en mi asiento, no quiero pensar en mi ex,


Daniel. El chico que conocí en el instituto y con el que soñé que pasaría
el resto de mi vida. Pensé que era el indicado. Nunca dormimos juntos
porque, en aquel momento, no nos sentíamos preparados. Luego
tuvimos que mantener una relación a distancia mientras íbamos a la
universidad porque él se mudó lejos. Pero yo no vi ningún problema, no
teníamos prisa por acostarnos juntos. Simplemente le amaba y habría
esperado siempre por él...

No obstante, en el último año de facultad, cometió el error de


llamarme mientras mantenía relaciones sexuales con otra. Me quedé
conmocionada con el teléfono en la mano, aunque lo peor fue que él ni

~8~
siquiera se disculpó. En realidad ni le importó, solo dijo que necesitaba
desenfrenarse un poco antes de atarse conmigo.... ¡como si quisiera
seguir con él después de eso! Ni hablar, habíamos terminado. Nunca
íbamos a volver, a pesar de que todavía lo amaba...

Pero eso fue hace más de un año y ya lo he superado, a él y al


dolor que me causó. Creo que incluso podría estar preparada para
seguir adelante y salir con alguien… apropiado, pero desde luego, no
con mi jefe. ¡Eso sería una locura!

—No —respondo a Ruby, al tiempo que sacudo la cabeza con


fuerza—. Con Brad, no. No es el indicado.

—Pero es muy guapo, eso no me lo negarás. ¡Míralo! Es un bombón


de lo más sexi.

—Tal vez. —Me encojo de hombros, tratando de restarle


importancia—. No sé, puede que lo sea.

Ruby me observa, casi como si pudiera ver que siento algo más por
Brad, lo cual no es cierto. Es el dueño de la compañía para la que
trabajo y con el que me he visto obligada a trabajar esta semana. Nada
más. Quizá sea guapo, no sé. La verdad es que nunca me había fijado
en él y eso no va a cambiar ahora. Todo lo que tengo que hacer es
intentar sobrevivir a esta semana con mi dignidad intacta. Eso es todo.

—Deja de mirar la página web —me recrimino a mí misma


mientras vuelvo a mirar la pantalla de mi teléfono—. Pero ¿qué es lo que
te pasa? ¿Por qué tienes que seguir mirando obsesivamente las fotos de
tu jefe todo el tiempo? Es raro —me digo.

Casi tanto como estar en mi habitación, en pijama, hablando


conmigo misma. Esto tiene que ser culpa de Ruby porque no dejo de
dar vueltas a sus comentarios sobre Brad y no puedo soportarlo. No
quiero pensar en el hombre que me ha estado molestando todo el día
como alguien sexi, aunque supongo que lo es y simplemente antes no
me había fijado. Tiene unos rasgos llamativos. Sus bonitos ojos oscuros
resultan cálidos y tiene un buen cuerpo. Además, parece que también
tiene una profundidad que no había notado antes... pero, aún así, no
debería estar pensando en él de esta manera. Especialmente porque

~9~
todavía me quedan cuatro días más para aguantarlo. Lo último que
quiero es seguir sintiéndome atraída por él...

Me meto en la cama y cierro los ojos, tratando de bloquear todos


los pensamientos sobre Brad, pero por supuesto no lo consigo porque
es como si necesitara torturarme más a mí misma pensando en él. No
solo está en mi mente, sino que se inclina sobre mí como si estuviera a
punto de besarme.

—Joder, para —murmuro. Sin embargo, a mi cuerpo le gustan


esas imágenes que visualizo. Las mariposas aletean en la boca de mi
estómago y siento una pulsación dentro de mis bragas—. Cerebro, ¿qué
demonios estás haciendo? No quiero esto...

Pero el imaginario Brad me agarra, y su boca me reclama. Me besa


con la clase de pasión ardiente que solo se encuentra en las películas,
con sus manos deslizándose sobre mi trasero y las llamas
encendiéndose a través de mí. Estoy embriagada de necesidad,
desesperada por conseguir la tan necesitada liberación que se está
acumulando en mi interior.

—Para —susurro—. Ya basta.

Estoy prácticamente fuera de control porque, a pesar de todo, mis


dedos viajan hacia abajo, hacia mis bragas. Me imagino que son las
manos de Brad las que me acarician, su toque experto viniendo por mí.
Mi espalda se arquea en la cama, mis caderas ruedan hacia mis dedos y
me toco como si fuera ese hombre quien me controla.

—Oh, joder —exclamó al sentir mi humedad—. Joder, Brad.

Paso mis dedos sobre mi garganta, imaginando sus labios allí,


chupando y lamiendo. Luego me pellizco el pezón, imaginándome como
sus dientes tiran de ellos burlándose de mí, volviéndome loca. Meto los
otros dedos en mi interior como si fuera él quien me llevara. Esto no es
una dulce fantasía virginal. Es algo crudo e intenso, lleno de pasión y
deseo. Es caliente y sudoroso, salvaje, primitivo, animal. Del tipo de
deseo que jamás tuve con Daniel, ni siquiera cuando las cosas iban
bien.

Me doy cuenta de que mi ex nunca me deseó así, o esto también


me habría pasado con él. Ahora sé que quiero que la persona a la que
me entregue sienta que morirá si no puede tenerme. Alguien como
Brad, que sabe lo que hace, que sabe follar, que sabe usar el clítoris de
una mujer para hacerla sentir… todo.

~ 10 ~
—¡Oh, mierda! —grito mientras me muevo en el filo del deseo y me
toco en la forma en que más que excita. Puede que sea virgen, pero en
mis fantasías he estado con todo tipo de hombres—. Brad, fóllame, por
favor.

Lo veo burlándose de mí, volviéndome loca y alejándose justo


cuando estoy a punto de alcanzar el orgasmo. Es el jefe en el dormitorio
y en la sala de reuniones. Me lleva hasta el límite de perder la cordura.
Una presión intensa me consume, me llena, hace chisporrotear mis
venas hasta que no puedo soportarlo un segundo más... hasta que
caigo. No puedo contenerme.

Mientras lo hago, con la cabeza inmersa en un remolino de


poderoso y ardiente placer, mi cuerpo se retuerce una y otra vez, y ni
siquiera puedo maldecir a Ruby en voz alta por hacerme sentir de esta
manera, porque ahora mismo es jodidamente increíble. Me imagino que
estar con él sería igual de asombroso.

~ 11 ~
Capítulo 2 – Brad
Lunes - martes

—Es tarde —le digo a Oliver cuando lo encuentro ante el ordenador


de su despacho—. ¿No te has mareado ya con tanto número?

Me mira y me sonríe, con los ojos llorosos por fijar la vista en la


pantalla durante demasiado tiempo.

—Sí, ya sabes cómo soy. Me resulta muy difícil delegar porque


quiero hacerlo bien.

—Por eso me alegro de tenerte aquí trabajando. No me las


arreglaría sin ti, hermanito.

Oliver es el siguiente de mis hermanos, pero nos separa una


diferencia de edad de trece años. Yo nací mucho antes que los demás,
por lo que me tocó a mí ocuparme de ellos cuando murieron nuestros
padres. Por aquel entonces, yo tenía diecinueve años y ellos iban desde
los dos a los seis años.

También me tocó a mí tomar el control de la empresa familiar y,


con el tiempo, a cada uno de mis hermanos les di la oportunidad de
trabajar conmigo, pero solo Oliver y Ángelo decidieron hacerlo. Los otros
dos optaron por perseguir sus propios sueños.

—¿Por qué sigues aquí? No es propio del gran jefe quedarse hasta
tan tarde.

Me rio y me siento al otro lado de su escritorio.

—Solo estoy ultimando algunas cosas, ya sabes cómo es esto. Pero


me alegro de encontrarte todavía aquí porque necesito hablar contigo de
Ángelo. De Ángelo y su nuevo plan.

—¿Te refieres a Tami? —De inmediato sabe lo que quiero decir.

—Ajá. No entiendo por qué la asignado como mi asistente durante


esta semana. No la necesito, y él lo sabe. Pertenece a su equipo creativo,
así que no sé qué puede hacer por mí. —Levanto las manos con

~ 12 ~
frustración—. De hecho, casi me obligó a aceptarla y no sé qué hacer al
respecto.

—¡Seguramente, hay cosas en las que ella puede ayudarte! Entre


otras cosas tienes mucho que archivar...

—Me gusta hacerlo por mí mismo. Soy como tú, Oliver. No me va lo


de delegar.

—Pero eres el jefe. —Se encoge de hombros—. Se supone que debes


hacerlo, y que tengas una ayudante quizá sea una buena idea. Tal vez
eso es lo que Ángelo está tratando de decirte. Todos vemos lo mucho
que te involucras con el negocio, pero tal vez lo estás haciendo
demasiado. No tienes tiempo para otras cosas.

—¿Qué demonios se supone que significa eso? —Gimo—. Estoy


harto de que habléis de mi vida amorosa...

—¿Por qué? Solo queremos lo mejor para ti y que seas feliz.

Pongo los ojos en blanco.

—Pero es que ya soy feliz viviendo a mi manera y no necesito novia,


gracias. Además, ninguno de vosotros tiene una increíble vida
sentimental de la que presumir, ¿verdad? De hecho, Ángelo es el único
que tiene pareja, que yo sepa. Y antes de que lo digas, sí, sé que soy
mayor que vosotros, pero eso no significa que tenga que sentar la
cabeza ahora mismo.

Oliver guarda silencio por un momento. Mi hermano está


convencido de que necesito que me busquen novia. Sí, en el fondo, me
gustaría conocer a alguien y ser feliz, claro, pero ahora esa no es una
prioridad inmediata para mí.

—Brad, tal vez por eso Ángelo le pidió a Tami que fuera tu
asistente. Ha estado hablando de presentarte a la mujer perfecta para
ti, ¿no? Tal vez su ayudante sea la indicada y por eso...

—Tami es demasiado joven —afirmo al instante—. Tiene veinte


años, por Dios.

—¿Y? —Oliver se encoge de hombros—. ¿Eso qué tiene que ver?


¿Qué importancia tiene su edad? Eso no cambia el tipo de persona que
es, ¿verdad? ¿Por qué un detalle como ese supondría alguna diferencia?

~ 13 ~
—Porque... bueno, porque sí. No puedes negar que la edad es un
factor importante. ¿Qué tenemos en común, por ejemplo? Hay infinidad
de aspectos en los que somos polos opuestos.

—Pero Ángelo no te la habría recomendado si no pensara que sois


perfectos el uno para el otro. ¿A qué no? Ángelo y tú sois uña y carne y
probablemente os conozca a ambos mejor que nadie. Él también quiere
lo mejor para ti. Si ha sugerido a Tami, al menos deberías darle una
oportunidad...

—No. —Sacudo la cabeza con fuerza—. No, eso es una estupidez


porque, aunque esa sea la intención de Ángelo, nunca sucederá nada
entre Tami y yo. Si voy a estar con alguien, tiene que tratarse de una
mujer que tenga experiencia en la vida, que me entienda y comprenda
por lo que he pasado. No una universitaria recién graduada.

—¿Crees que es atractiva?

—Eh —balbuceo sorprendido porque no esperaba aquella


pregunta—, pues… no sé. Supongo que es guapa, pero eso no
significa...

—Habla con ella. Solo te pido que la conozcas un poco. A ver qué
es lo que ha visto Ángelo. ¿No estás intrigado, al menos?

Sí, y ese es el problema. Sin embargo, hoy he intentado charlar con


Tami y ha resultado evidente que no nos sentimos cómodos el uno con
el otro. Lo normal sería estar a gusto con ella, si el concepto de «la
única» es real, ¿verdad? Al no haber visto ninguna prueba de ello, no
estoy seguro.

—No sé, Oliver. La vida es más simple cuando estás soltero, ¿no?

—¿Es esa la razón por la que nunca has tenido pareja? ¿Porque es
más fácil? Si te soy sincero, Brad, las aventuras de una noche tampoco
parece que te hayan funcionado. Algunas han armado incluso todo tipo
de dramas, ¿no? ¿No sería mejor conocer a alguien agradable para
variar?

—Tal vez, pero tengo muchas responsabilidades. No tengo tiempo


para una relación a largo plazo...

—Deja de usar eso como excusa, tío. No puedes esconderte


siempre. No te necesitamos tanto como antes, ¿sabes? Y ya es hora de
que empieces a vivir tu vida por ti mismo, para variar.

~ 14 ~
Asiento con la cabeza y me levanto de la silla, pues necesito poner
fin a esta charla con Oliver si no va a decirme que está de acuerdo
conmigo y que tengo razón. Quería a alguien con quien desahogarme,
alguien que me dijera que sí, que Ángelo se está comportando como un
auténtico capullo entrometido. No que me analicen y me obliguen a
profundizar demasiado en mis sentimientos y opciones de vida. Ya
tengo suficientes problemas ahora mismo.

—Bueno, me voy —digo en voz baja—. Te veré mañana.

—¿Vas a salir? —Oliver me conoce demasiado bien—. ¿Irás al bar?

Normalmente, lo haría, pero su comentario sobre las aventuras de


una noche se me ha atascado en la garganta y no sé cómo sentirme al
respecto. No estoy de tan buen humor como debería para salir a ligar
por ahí. Tal vez sea porque es cierto lo de que, a menudo, los polvos
intrascendentes traen consigo demasiados dramas. Desde luego, cuanto
más mayor me hago, más difícil me resulta divertirme sin ataduras y
sin problemas.

—No sé. Estoy bastante cansado. Probablemente me iré a casa.


Que duermas bien.

—Oh, claro. —Los ojos de Oliver se abren de par en par por la


impresión—. Bien, nos vemos mañana entonces.

¿Qué es esto? Me pregunto mientras me recuesto en la silla de mi


despacho y veo a Tami archivando. ¿Por qué Ángelo —y Oliver, según
parece— piensa que esta mujer es perfecta para mí? No tengo ni idea.

Aunque no ayuda tampoco el que esté destrozado. Lo malo es que


no se debe a una noche de sexo y diversión, sino a estar en la cama
toda la noche pensando en Tami. Odio admitirlo, pero supongo que
Oliver tiene razón. Ángelo me conoce mejor y si piensa que Tami es
perfecta para mí, entonces tal vez debería intentar averiguar por qué.
Insinuó que por eso la envió a trabajar conmigo, así que supongo que
debería tratar de averiguar qué está tramando.

Solo necesito dejar de mirarla, de admirar su belleza y hablar con


ella. Intentaré descubrir lo que Ángelo piensa que tenemos en común
porque debemos tener una conexión en alguna parte. Pero ¿por dónde

~ 15 ~
diablos empiezas con alguien de quien no sabes nada? Hasta ahora,
solo la he visto en la oficina. De hecho, ni siquiera fui yo quien la
entrevistó y la contrató. De eso se encargó Ángelo, ya que es de su
departamento.

—¿Necesitas ayuda con algo? —pregunto, e incluso a mí mi propia


voz me suena demasiado tensa—. Eh… para archivar, quiero decir.

—Oh, no, gracias. Cuando trabajaba con Ángelo también me


encargaba de esto todo el tiempo.

—Ah, así que eres una de esas raras personas creativas


organizadas. Es bueno saberlo.

Mientras se ríe y coloca un mechón de cabello detrás de la oreja,


me doy cuenta de que mis ojos se dirigen hacia sus sedosos muslos. El
vestido negro ceñido que lleva puesto roza la parte superior de sus
piernas, haciendo que mi corazón corra mucho más rápido. Parece que
usa a menudo este tipo de ropa, pero es la primera vez que pienso
realmente en lo que habrá debajo de ella...

Mierda, esto no es en lo que debería estar pensando, sino en


conocerla. No imaginar su cuerpo de una manera tan poco apropiada.
Tami no puede ser una más de mis aventuras de una noche. En
realidad, ninguna de las empleadas de la oficina puede serlo. Ahí es
donde fijo el límite. No hay manera de que pueda lidiar con el drama del
día después en el lugar de trabajo.

Pero esos labios... Dios mío, me encantaría besar los carnosos y


sexis labios que tiene.

—¿Necesitas conservar este documento? —Ella da un paso más


hacia mí, cerrando la brecha que nos separa con facilidad. La
incomodidad sigue existiendo entre nosotros, pero es menor que ayer.
Tal vez nos estamos sintiendo más a gusto en compañía del otro o quizá
se deba a que falta un día menos para poner fin a esta semana—. ¿O
debería tirarlo?

—Eh... —Inhalo profundamente y el suave aroma de su perfume


golpea la parte posterior de mi garganta. Es un olor dulce que me
acelera el pulso—. Esto... sí. —Joder, ¿por qué es tan difícil
concentrarse?—. Creo que es mejor conservarlo.

—Muy bien. —Su dulce sonrisa consigue iluminar toda la


habitación—. Lo archivaré entonces.

~ 16 ~
—Claro, sí. Perfecto. —Si necesito tirarlo, lo haré más tarde. No
puedo decidirlo ahora mismo mientras esté tan cerca de ella y mi
cerebro se parezca a un puré—. Gracias, Tami.

A medida que nuestros ojos se cruzan, no puedo evitar


preguntarme si ella siente la misma química que yo. Es chisporroteante,
innegable, casi abrumadora. Pero a medida que da un paso atrás, todo
desaparece y vuelvo a ser capaz de respirar con más facilidad. Debe
haber sido solo un momento, eso es todo, y seguro que por culpa de las
ideas que Oliver y Ángelo me han metido en la cabeza.

—Sabes, este trabajo resulta más fácil contigo aquí —le digo y, a
continuación, reflexiono en alto—: Tal vez necesite una asistente a
tiempo completo.

De pronto, sus ojos se abren de golpe, como si tuviera miedo de


que le pidiera que fuera mi ayudante permanente. Al final, han debido
ser imaginaciones mías porque si Tami sintiera algo por mí, querría
pasar más tiempo a mi lado. Aunque, después de todo, quizá sea lo
mejor porque si ambos sintiéramos lo mismo, resultaría mucho más
complicado. En vez de eso, podré plantarme ante Ángelo y decirle:

—«Buen intento, pero no funcionó».

Sin embargo, esto me ha servido para comprender que es hora de


tomar las riendas de mi vida amorosa. Si quiero una relación estable y
dejarme de aventuras de una vez, debo hacerlo yo. Para ello, tendría
que empezar por dedicarme más tiempo a mí mismo: aunque me
parezca imposible, y salir con alguien para ver a dónde nos lleva eso.

Desde luego, la mera idea resulta aterradora de por sí.


Completamente contraria a lo habitual, pero es algo que tendré que
hacer si quiero cambiar de vida. Solo necesito terminar esta semana
primero...

~ 17 ~
Capítulo 3 – Tami
Miércoles

—¿Ese es... Ronnie Milsap? —No puedo evitar preguntar mientras


entro en el despacho de Brad, sintiéndome mucho más cómoda que el
lunes. Creo que entonces estaba demasiado alterada, porque Brad no
parece el cerdo arrogante que pensé que era el primer día—. Lo siento,
no quise interrumpir tu momento musical.

Brad es mucho menos caótico de lo que pensaba, y puedo


identificarme con esa forma de ser. No obstante, me necesita más de lo
que cree. Parece que lo tiene todo controlado, pero le hace falta alguien
que le ayude a organizarse.

Hay otras razones por las que también me gusta esta oficina,
aunque no estoy lista todavía para admitirlas, ni siquiera a mí misma.

—Sí, es Daydreams About Night Things. ¿Cómo es que conoces esta


canción? ¿No es un poco antigua para ti?

Baja el volumen de la música, aunque no la apaga. De pronto, sus


ojos se estrechan y me miran con algo de confusión. Supongo que es
normal que se sorprenda porque se trata de una canción muy antigua...
más vieja que él, estoy segura. De los años setenta.

—Era la canción favorita de mi padre, así que siempre la escucho


cuando lo echo de menos. —Me obligo a sonreír.

—Oh, lo siento. ¿Él ha…? —Brad me mira con esa expresión seria
que solía intimidarme al principio, pero ahora me doy cuenta de que
significa que está pensando. Ayer, cuando nos pusimos a hablar,
empecé a ver una faceta diferente de él. Hasta ahora, ha sido una
experiencia que me ha abierto los ojos.

—Murió hace tres años. De cáncer. —Me trago la gruesa bola de


emoción que me embarga.

—Yo también perdí a mis padres. Ambos murieron en un accidente


de coche hace años. —Brad clava la vista en el suelo. Es evidente que

~ 18 ~
su pérdida sigue siendo difícil para él—. Cuando todos éramos críos, así
que no fue fácil.

—Ángelo me lo contó. —No estoy segura de si hago bien en


decírselo, pero es cierto y creo que la honestidad es lo mejor—. Dijo que
te encargaste de todos ellos. Debió haber sido muy duro para ti.

—No fue fácil, pero nos teníamos los unos a los otros, así que
bueno... —Me mira una vez más, mientras sus ojos parecen
atravesarme el alma. No sé qué tiene su mirada, pero me penetra,
enviando un escalofrío a mi columna vertebral. Es como si me viera de
una forma que nadie más ha hecho nunca—. ¿Tienes hermanos?

—No —respondo—. Soy hija única. Aunque mi madre se mudó a


Texas para estar con su nueva familia. Yo prefiero vivir sola, por mi
cuenta. Además, disfruto de mi vida aquí. Tengo a mis amigos, un
increíble trabajo por el que estoy muy agradecida... —Me pregunto si
estaré hablando demasiado.

—No creo que debas ser asistente. —Sus inesperadas palabras


hacen que se me hiele la sangre. Debería haber sido menos honesta; al
parecer, unos días con Brad son suficientes para que me despidan—.
Eres demasiado buena para este empleo. Una vez que acabe la semana,
conseguirás un trabajo que te convenga. Deberías desempeñar otro
puesto y tener más responsabilidad.

—¿Qué? —Me quedo boquiabierta y aturdida por sus palabras—.


¿Qué intentas decirme? Estoy contenta en...

—Quiero decir que ya he visto de lo que eres capaz, y también he


revisado tu currículum. Deberías ocupar un cargo más alto en la
compañía, haciendo algo más importante.

De pronto, deseo ponerme a gritar y bailar como una loca. Me


entran ganas de besar a Brad para darle las gracias y, luego, correr a la
otra habitación para abrazar a Ángelo. Este debe haber sido su plan
desde el principio, por eso prácticamente me forzó a ayudar a Brad,
porque quiere que llegue lejos. No puedo creer que haya funcionado tan
bien. ¡Brad piensa que valgo la pena!

Estoy encantada. Esto es todo lo que siempre he soñado. Cuando


terminé la universidad imaginaba que tendría que trabajar durante
mucho tiempo para lograr algo por mí misma... pero ya se está haciendo
realidad. No sé qué hice para ser tan afortunada, aunque me siento feliz
por ello. De hecho, lo estoy tanto que, de la impresión, apenas puedo
recuperar el habla.

~ 19 ~
—Oh, vaya… eso es... —Me agarro el pecho—. No sé qué decir.
Estoy impresionada.

—Bueno, te lo mereces. —Asiente, satisfecho—. Iba a esperar a que


finalizara la semana para decírtelo, pero ahora me ha parecido el
momento oportuno. Quiero que estés a cargo de tus propias cuentas
creativas. Lo harás muy bien.

Durante unos instantes no sé qué decir. Estoy rebosante de


felicidad.

—Ahora, probablemente debería apagar la música, ¿no? —Brad me


dirige una vez más esa sonrisa que me detiene el corazón—. Ya es hora
de que nos pongamos a trabajar y tenemos que concentrarnos. Aunque
podría escuchar a Ronnie Milsap todo el día.

—¿Te importaría dejarlo encendido solo dos minutos más, por


favor? —Le pido con las manos juntas—. Me hace recordar los buenos
momentos vividos con mi padre. Ha pasado tanto desde que pensé en él
por última vez…

Brad asiente con la cabeza y deja la música puesta mientras ocupo


mi asiento temporal. Cierro los ojos un instante para escuchar bien
cada parte de la canción, para recordar cómo era mi vida cuando tenía
a mi padre, cuando todo era perfecto. Al abrirlos de nuevo, veo que
Brad está haciendo lo mismo.

—¿Significa esta canción algo especial para ti? —pregunto sin


pensar. Desde luego, esto no es lo mejor que se puede hacer en el
trabajo, interesarse por la vida privada de tu jefe—. Lo siento, no quise
decir... Solo estaba...

—Sí, es la canción que recuerdo haber escuchado con mi madre.


Así que, siempre me encantará. —Él sonríe—. Y no sientas que no
puedes preguntarme nada. Soy un libro abierto, si quieres hablar.

¡Vaya! Eso es algo que nunca esperé que dijera. Siempre me ha


parecido un hombre demasiado reservado. Pero, por lo visto, me he
equivocado con él en muchos sentidos. Tal vez tengamos algo en común
después de todo.

—Hola, chicos... —Salto cuando alguien llama a la puerta,


recordándome que hay más gente en el edificio. Me llevado tal susto que
he saltado hacia atrás como si me hubiera electrocutado o me hubieran
pillado haciendo algo malo.

~ 20 ~
—Oh, Ángelo. —Brad asiente a su hermano mientras apaga la
música—. Adelante.

Ángelo entra en la oficina y dirige su mirada primero a Brad y,


luego, a mí. Sus ojos muestran un aire de suficiencia, casi como si
pudiera sentir que su plan ha funcionado y que, por tanto, mi carrera
ha comenzado a avanzar. O al menos lo hará, una vez que acabe esta
semana. Tal vez los hermanos han discutido sobre lo que va a pasar
conmigo y ya lo sabe.

—Solo quería ver cómo estáis —exclama sonriente—. Aunque


también necesito hablar contigo, Brad.

—Oh, bueno, mientras puedo ir a hacer unos cafés. —Me levanto


de mi asiento, necesitando alejarme de esa extraña atmósfera—. Así os
daré algo de tiempo para hablar a solas, o lo que sea.

Salgo corriendo de la oficina antes de que alguno de los dos pueda


decir algo, y me dirijo con rapidez hacia la sala de descanso donde está
la máquina de café. Mantengo los ojos pegados al suelo para que nadie
me hable mientras voy hasta allí. No sé si me encuentro con ánimo
suficiente ahora mismo para tener una conversación seria con alguien.
El corazón está a punto de salirme por la boca, el estómago no para de
darme vueltas, y mi aliento lucha por salir… Francamente, estoy hecha
un desastre y no sé por qué.

Cojo mi móvil y le mando un mensaje a Ruby. Necesito su consejo.

TAMI: ¡Ruby, ayúdame! No sé qué demonios está pasando. Creo


que entre Brad y yo ha habido algún tipo de acercamiento.

RUBY: Oh, ¿con el jefe sexi? Eso es genial. ¿Alguna muestra de


pasión?

TAMI: No lo sé. Honestamente, no estoy segura.

RUBY: ¡Lo sabía! Sabía que entre vosotros había algo.

TAMI: Pero ¿¡qué hago!?

RUBY: Pasa todo el tiempo que puedas con él. Debes conocerlo
mejor. Trata de descubrir qué es esa química que surge entre ambos.
Después de todo, podría ser el hombre al que has estado esperando
para dejar atrás tu virginidad.

TAMI: Y dale, ¿quieres parar de una vez con eso? Brad es mayor
que yo y, además, mi jefe

~ 21 ~
RUBY: ¿Y qué? Tú inténtalo. No sabes que pasará.

TAMI: Podría perder mi trabajo...

RUBY: O podrías encontrar al hombre de tus sueños.

No sé qué pensar sobre todo esto. ¿Podría ser Brad el hombre de


mis sueños? Lo veo muy improbable, pero parece haber una especie de
conexión entre nosotros. Escuchar esa canción juntos y descubrir que
tenemos cosas en común ha desbloqueado algo. Creo que ese vínculo
empezó a surgir ayer, y hoy… está al rojo vivo.

¿Debo hacer lo que Ruby me ha aconsejado e intentar pasar más


tiempo con él? Podría estar bien porque, al final, aunque no termine
siendo el hombre de mis sueños, es posible que, gracias a Brad,
aprenda más sobre lo que me gusta. Desde lo de Daniel, no he salido
con nadie. Necesito algo de emoción en mi vida y mi jefe podría ser un
buen punto de partida.

Aprovecho para pensar mientras preparo los cafés. Hoy buscaré


algo que hacer para intentar quedarme hasta un poco más tarde, solo
para darle una oportunidad. Puede que haya archivado ya lo principal,
pero en el despacho todavía faltan por organizar un montón de papeles.
Hmm, podría encargarme de eso.

Dios, la idea de estar a solas con Brad en esa oficina tan grande
me provoca escalofríos. Es absolutamente aterrador y, al mismo tiempo,
también estimulante. No sé si esto es lo que se supone que se siente,
pero como no se parece a nada de lo que he sentido antes, tiene que
significar algo, ¿no?

Las voces de las recepcionistas, al entrar en la sala de descanso, es


aliciente más que suficiente para obligarme a volver al despacho. A
pesar de lo aterrador que pueda resultar enfrentarse a Brad de nuevo,
es peor quedarse aquí y soportar a Tawny, Beth o la asistente de Oliver,
Amy. Son el tipo de personas con las que nunca me juntaría, así que no
voy a empezar ahora, justo cuando estoy hecha un manojo de nervios.
No creo que mi autoestima sea capaz de soportarlo.

—Ya estoy aquí. —Le doy un café a Ángelo, quien me lo agradece


enseguida, guiñándome un ojo como tiene por costumbre.

—Y este es el tuyo...

Al ir a tomas Brad su taza, sus dedos rozan los míos y noto cómo
una descarga me atraviesa. Jadeo, incapaz de evitar que el sonido salga
de mi boca, y él parece tan aturdido como yo. Definitivamente ha

~ 22 ~
sentido lo mismo. Mierda. De pronto, es como si todo lo demás
desapareciera a nuestro alrededor, incluso Ángelo. Solo estamos él y yo,
mirándonos el uno al otro. No sé cómo hemos pasado del odio a esto,
pero necesito averiguarlo. Por Dios, pero si al principio ni siquiera me
gustaba y creía que era un tipo arrogante y miserable… ¿Cómo es que
ahora, un par de días más tarde, despierta en mí semejante deseo?
¿Después de, tan solo, unas cuantas conversaciones? ¿Esto es normal?
¿A otras personas también le pasa lo mismo?

Decidido, hoy me quedaré hasta tarde. Debo averiguar qué


demonios es esto. No podré concentrarme de nuevo hasta que no lo
descubra.

~ 23 ~
Si te ha gustado este libro no te pierdas

~ 24 ~
~ 25 ~
¡Estar con él causaría estragos!
Ángelo es muy rico y educado. Y me mira con sus
penetrantes ojos azules todo el tiempo. Él es todo lo
que necesito y lo quiero en mi cama.
Pero ya está cogido.
Su novia es una tramposa de cuidado, por lo que
Ángelo merece algo mejor. Pero no soy la mujer
adecuada para él.
"¡Una chica normal saliendo con un
multimillonario!"
Eso en sí mismo suena a broma. Y también como
una fantasía inalcanzable, ya que se supone que no
debemos estar juntos. Pero ahora que él está sobre
una rodilla frente a mí esperando una respuesta.
¿Crees que debería decir que sí?

~ 26 ~
PRÓXIMAMENTE:
- 2º Tiéntame para siempre (5 marzo, 2020)
- 3º Duro como una roca (7 mayo, 2020)
- 4º Ciego enamorado (9 julio, 2020)
- 5º Me vuelves loco (10 septiembre, 2020)
- 6º Un bebé inesperado (6 noviembre, 2020)

~ 27 ~
Y si quieres saber más sobre cada uno de los
hermanos y sus historias no te pierdas la precuela:

~ 28 ~

También podría gustarte