Lenguaje Escrito Exani II
Lenguaje Escrito Exani II
Lenguaje Escrito Exani II
Es una parte de la lingüística que estudia, concretamente, el conjunto de las reglas y los elementos que hacen de la
oración un elemento con sentido y carente de ambigüedad. Para ello, el análisis morfosintáctico se ocupa de marcar las
relaciones gramaticales que se dan dentro de una oración, las relaciones de concordancia, las indexaciones y la
estructura jerárquica de los principales constituyentes sintácticos.
De esta forma, para llevar a cabo el estudio morfosintáctico de una oración, lo que se hace es sumar a un estadio
morfológico otro sintáctico. Es decir, primero analizamos las palabras, una por una, y establecemos su tipología y
categorización: de esta forma tendremos sustantivos, verbos, determinantes, preposiciones, etc. Posteriormente,
haremos un análisis de tipo sintáctico, lo que nos llevará a establecer la función de esas palabras y sus agrupaciones en
sintagmas. Así obtendremos el núcleo de la oración, el sujeto y el predicado, los complementos, y las relaciones entre
ellos.
SUSTANTIVO
Los sustantivos son palabras que designan elementos materiales o inmateriales que hay en la realidad (p. ej., el libro, la
mesa) o que son construcciones del pensamiento (p. ej., el tiempo, la libertad). Los sustantivos suelen ir acompañados
de un artículo o un determinante o son reemplazados por un pronombre.
Forma de los sustantivos
El género de los sustantivos
pueden ser masculinos o femeninos según su terminación, aunque no se trata de un criterio unívoco. Además, Los
sustantivos van casi siempre acompañados de un artículo que concuerda con ellos en género y número.
un helado → masculino
una galleta → femenino
El número de los sustantivos
El español expresa en qué cantidad se da una entidad. En lingüística, esto se conoce como número: según su número,
un sustantivo puede ser singular o plural.
un helado → singular
dos helados → plural
Tipos de sustantivos
Sustantivos comunes y propios
Los sustantivos comunes designan con un nombre genérico de seres de una misma clase. Pueden referirse a personas
(hermano, abogado), animales (gato, tiburón) y cosas (cuaderno, felicidad). Los nombres comunes se escriben con
minúscula inicial.
ADJETIVOS
Los adjetivos son palabras que denotan los atributos o cualidades de un sustantivo.
El contenido que aporta un adjetivo sobre un sustantivo es muy variado: puede ser una cualidad (p. ej., playa grande,
rocosa, privada), o una relación (política marítima, 'relacionada con el mar'), una cantidad (numerosas playas), o una
referencia a un momento del tiempo (marea matinal) o a un lugar (playa mediterránea).
En español los adjetivos se sitúan por norma general a continuación del sustantivo al que acompañan y solo en casos
muy especiales lo preceden. Encontrarás una explicación detallada sobre esto en el apartado Posición del adjetivo.
Los adjetivos siempre concuerdan en género y número con el sustantivo al que acompañan.
Tipos de adjetivos
Los adjetivos en español se clasifican en calificativos, relacionales, adverbiales y sustantivados. Según el tipo que sean
pueden graduarse o no o deben ocupar un lugar específico en la oración.
Los adjetivos calificativos
Los adjetivos calificativos designan cualidades de los sustantivos que pueden ser tanto propiedades físicas (color,
tamaño, etc.) como abstractas o estados mentales (estado de ánimo, rasgos del carácter, etc.).
ojos verdes y grandes O persona feliz
Solo los adjetivos calificativos admiten grados: grado positivo, grado comparativo y grado superlativo.
Los adjetivos relacionales
Los adjetivos relacionales expresan un rasgo del sustantivo al que acompañan que permite clasificarlo en una cierta
categoría.
una cuchara sopera → adjetivo relacional (tipo de cuchara: para comer sopa)
una cuchara brillante → adjetivo calificativo (rasgo de la cuchara: brilla)
Los adjetivos adverbiales
Los adjetivos adverbiales poseen un significado similar al de los adverbios; es decir, no denotan rasgos que caracterizan
al sustantivo sino que designan nociones temporales (actual, bienal, presente, futuro, frecuente) o modales (probable,
seguro, presunto, supuesto).
La actual ministra de hacienda.
Estos adjetivos siempre preceden al sustantivo y no admiten grados: no se puede decir «esta ministra es más actual que
esa».
Los adjetivos sustantivados
Los adjetivos sustantivados son adjetivos que en determinados enunciados funcionan como sustantivos. Se utilizan en
lugar del sustantivo cuando la entidad que designa el sustantivo puede identificarse totalmente por medio de su adjetivo.
Suelen ir acompañados del artículo que acompañaría al sustantivo.
—¿Cuál es tu coche?
—El amarillo.
Los adjetivos en la oración
Los adjetivos pueden formar parte tanto del sujeto como del predicado de la oración. Lo fundamental es que califican a
un sustantivo. Normalmente, este sustantivo aparece pegado a ellos, pero también es posible que un adjetivo aparezca
en el predicado y se refiera a un sustantivo del sujeto.
ADVERVIO
Los adverbios son palabras invariables que complementan el significado de un verbo, un adjetivo u otro adverbio.
Ejemplo: El gato duerme plácidamente en el sillón. (verbo + adverbio), El gato está muy tranquilo. (adverbio + adjetivo),
El gato ronronea bastante fuerte. (adverbio + adverbio)
Dan información sobre el lugar, el tiempo, la intensidad o el modo en el que se desarrolla la acción. Consulta la
página Tipos de adverbios para descubrir las categorías en las que se clasifican los adverbios en español.
La posición del adverbio
Normalmente, los adverbios van después del verbo o antes del adjetivo o adverbio al que modifican, pero también
pueden ir al principio de la oración. El apartado Posición explica los lugares que puede ocupar el adverbio en la oración.
Ejemplo: El gato de Lucía duerme plácidamente en el sillón. Normalmente, el gato duerme en el sofá junto a la ventana.
Los grados del adverbio
Los adverbios, como los adjetivos, se pueden graduar. Los grados comparativo y superlativo indican la intensidad con la
que tiene lugar la acción verbal.
Ejemplo: El gato de Marta ronronea más fuerte que el gato de Lucía.
Diferencias entre adverbios y adjetivos
A veces resulta difícil identificar con claridad si una palabra tras un verbo es un adverbio o un adjetivo. Esto ocurre
porque en español hay adjetivos y adverbios que tienen la misma apariencia.
Ejemplo: El gato come rápido. (adverbio), El gato es rápido. (adjetivo)
Hay dos aspectos fundamentales que permiten saber si una palabra es un adverbio o un adjetivo.
Los adverbios complementan a verbos, adjetivos u otros adverbios. Los adjetivos solo complementan a
sustantivos.
Ejemplo: El gato come rápido. El adverbio rápido complementa al verbo comer. El gato come muy rápido El
adverbio muy complementa al adverbio rápido. El gato es rápido. El adjetivo rápido complementa al sustantivo gato. El
gato es muy rápido. El adverbio muy complementa al adjetivo rápido.
Los adverbios son invariables mientras que los adjetivos varían en género y número.
Ejemplo: El gato come rápido. / La gata come rápido. / Los gatos comen rápido. → adverbios.
El gato es rápido. / La gata es rápida. / Los gatos son rápidos. → adjetivos
Otra razón por la que suelen confundirse los adverbios y los adjetivos en español es que algunos adverbios se forman a
partir de adjetivos. Estos son los adverbios derivados y los adverbios adjetivales.
Los adverbios derivados
Los adverbios más fáciles de reconocer en español son los que terminan en -mente. Estos adverbios se
denominan derivados y se forman a partir de la forma femenina de un adjetivo. La formación y el uso de estos se explica
en el apartado Formación de adverbios.
Ejemplo: tranquilo → tranquila → tranquilamente El viajero camina tranquilamente.
Los adverbios adjetivales
Los adverbios adjetivales, o adverbios cortos, son aquellos que presentan la forma fija de un adjetivo
calificativo en masculino singular. Suele tratarse de adverbios acabados en -mente que se usan así de forma abreviada.
Ejemplo: rápido, limpio Las niñas corren rápido. (Las niñas corren rápidamente).
No puede tratarse de un adjetivo porque no concuerda con el sustantivo (niñas) y complementa la acción del verbo.
Tipos de adverbios
Adverbios de cantidad
Los adverbios de cantidad indican en qué grado se da la acción del verbo o la cualidad que expresa el adjetivo al que
complementan. Responden a la pregunta «¿cuánto/a?».
Los adverbios de cantidad más frecuentes en español son: algo, bastante, demasiado, nada, poco, más, menos,
suficiente, mucho. Ejemplo: Me gusta mucho el teatro.
Adverbios de lugar
Los adverbios de lugar expresan una ubicación o una dirección. Responden a las preguntas «¿dónde?», «¿a dónde?» y
«¿desde dónde?»
Los adverbios de lugar más frecuentes en español son: aquí, abajo, allá, allí, al lado, arriba, cerca, debajo, delante,
dentro, derecha, detrás, encima, fuera, lejos. Ejemplo: Las butacas más baratas están muy lejos del escenario.Nuestros
asientos están delante de la orquesta.
Adverbios de tiempo
Los adverbios de tiempo ofrecen una referencia temporal, de duración o de frecuencia. Responden a las preguntas
«¿cuándo?», «¿cuánto tiempo?», «¿con qué frecuencia?», «¿para cuándo?», «¿desde cuándo?» y «¿hasta cuándo?»
Los adverbios de tiempo más frecuentes en español son: ahora, actualmente, a menudo, antes, ayer, después, hoy,
luego, mañana, nunca, pronto, tarde, siempre, ya. Ejemplo: Nunca he ido a la ópera.Ayer fui a un teatro de marionetas.
Adverbios de modo o manera
Los adverbios de modo o manera expresan la forma en la que se da la acción del verbo. Responden a las preguntas:
«¿cómo?» y «¿de qué manera?».
Los más frecuentes son: así, bien, deprisa, alto, bajo, despacio, rápido, difícilmente, estupendamente, fácilmente,
especialmente, mal, mejor, peor, regular, etc. También pueden ser locuciones adverbiales: a gatas, a escondidas, punto
por punto, etc. Ejemplo: Los actores interpretaron la obra estupendamente. En una escena, salieron del escenario a
gatas.
Adverbios interrogativos y exclamativos
Los adverbios interrogativos cuándo, dónde, adónde cómo, por qué y cuánto permiten formular oraciones
interrogativas. y exclamativas. Ejemplo: Me pregunto cuánto tiempo dura la obra. ¿Dónde son nuestros asientos?
¡Qué buenos actores!
Adverbios de afirmación
Los adverbios de afirmación sirven para reforzar o suavizar una declaración.
Los adverbios de afirmación más frecuentes en español son: ciertamente, cierto, claro, efectivamente, exacto,
obviamente, seguramente, sí, también, verdaderamente, etc. Ejemplo: Ciertamente, el día del estreno se agotaron las
entradas.
Adverbios de negación
Los adverbios de negación sirven para negar declaraciones y se usan en las oraciones negativas.
Los adverbios de negación más frecuentes en español son: en absoluto, jamás, negativamente, no, nunca, tampoco, etc.
Ejemplo: Yo tampoco he entendido el final.
Adverbios de duda
Los adverbios de duda o posibilidad denotan inseguridad o incertidumbre con respecto a un curso de acción.
Los más frecuentes en español son: a lo mejor, posiblemente, probablemente, puede, puede ser, quizá(s), seguramente,
tal vez, etc. Ejemplo: A lo mejor viene el alcalde a ver la representación.
Adverbios relativos
Los adverbios relativos, junto con los pronombres y determinantes relativos, sirven de enlace entre las oraciones de
relativo y las oraciones principales que las preceden. Esta tabla muestra los adverbios relativos en español.
Relativo de Ejemplos
modo o
como Baila como sabes.
manera
Cuanto
En relativo cuando, sin variación de género y número equivale a todo lo que. Nunca debe escribirse con tilde, a
diferencia del adverbio interrogativo cuánto. Se emplea, sobre todo, en registros formales. Con variación de género y
número (cuanto/-a/-os/-as) se trata de un determinante o pronombre relativo. Ejemplo: Le contó a la
policía cuanto recordaba. (Le contó a la policía todo lo que recordaba)
Donde
El relativo donde introduce oraciones subordinadas de relativo que aportan información sobre un lugar. Cuando significa
dirección, también puede escribirse adonde o a donde.
Puede combinarse con preposiciones y nunca debe escribirse con tilde, a diferencia del adverbio interrogativo dónde.
Ejemplo: El bar donde nos conocimos ha cerrado. El lugar adonde vamos es Patrimonio de la Humanidad. El pueblo por
donde pasa el río es muy turístico.
Como
El relativo como introduce oraciones subordinadas de relativo que aportan información sobre el modo o la manera en que
se ejecuta la acción del verbo. Nunca debe escribirse con tilde, a diferencia del adverbio interrogativo cómo. Ejemplo:
Baila como sabes.
Cuando
El relativo cuando introduce oraciones subordinadas que hace referencia al tiempo. Nunca debe escribirse con tilde, a
diferencia del adverbio interrogativo cuándo. Ejemplo: La semana pasada, cuando volví de vacaciones, llovió sin parar.
Las locuciones adverbiales
Varias palabras que juntas funcionan como un adverbio se denominan locuciones adverbiales: a veces, de nuevo, en
absoluto por suerte, tal vez, a más no poder, al máximo, a mares, a todo pulmón. Ejemplo: Los protagonistas cantaron a
todo pulmón.
PREPOSICIÓN
Las preposiciones son palabras invariables que sirven de nexo entre las diferentes partes de una oración e introducen
complementos.
Las preposiciones en español son: a, ante, bajo, cabe, con, contra, de, desde, durante, en , entre, hacia, hasta,
mediante, para, por, según, sin, so, sobre, tras, versus y vía.
Además de las preposicionen, existen las locuciones preposicionales (ej. después de, cerca de), que son
agrupaciones de palabras que juntas funcionan gramaticalmente como una preposición. Tablas de preposiciones en
español
Las tablas siguientes reúnen las preposiciones y locuciones preposicionales de uso más frecuente en español.
Temporales
de 8 a 9
de indica el comienzo de un lapso de tiempo: de...a...
de lunes a jueves
desde 1980
desde comienza en un momento determinado
desde las 8 de la mañana
después de las 8
después de tras un momento concreto en el tiempo
después del curso
Locativas
a Madrid
a Brasil
a través de la puerta
a través de cruzar
a través de España
entre a los lados de dos o más sujetos u objetos Andorra está entre Francia y España.
por lugar a través del cual se pasa Tienes que entrar por la puerta.
Otras
Preposición o
Uso Ejemplo
locución
rápido.
para el sujeto de las oraciones pasivas El piso fue alquilado por una familia.
por
distribución/reparto tres veces por semana
Preposición +
Ejemplo
artículo
a + el = al yo voy al cine
de + el = del el perro del vecino
neutro lo lo bonito -
* Un sustantivo femenino singular que comience por a o ha tónicas debe acompañarse en caso necesario por los
artículos determinado o indeterminado masculino le, un, respectivamente. Esta regla solo afecta al artículo en singular y
no a otros modificadores del sustantivo.
Ejemplo: El águila ibérica es un animal en peligro de extinción. Las águilas son aves depredadoras. En esta zona se
pueden avistar muchas águilas. Los artículos determinados Los artículos determinados en español
son el, los, en masculino singular y plural, y la, las, en femenino singular y plural, respectivamente.
Los artículos determinados se emplean en español en los siguientes casos:
con sustantivos que se refieren a personas o cosas específicas; Ejemplo: El último disco del artista es buenísimo.
con sustantivos usados en sentido general; Ejemplo: La fruta es la base de una dieta sana.
con los días de la semana; Ejemplo: El viernes no trabajo. Pero: Hoy es miércoles..
con instrumentos, juegos y deportes, tras los verbos jugar y tocar; Ejemplo: Toco el violín. Juego a las cartas con
mi abuelo. En este parque juegan los niños al fútbol.
con las partes del cuerpo; Ejemplo: Me duele la espalda desde ayer.
con la hora; Ejemplo: Son las dos y media.
con títulos; Ejemplo: La Doctora Fernández ha ganado el Premio Nobel de Medicina.
con el apellido de familias, en plural; Ejemplo: Los Pérez se han mudado.
con el nombre de montañas, ríos, lagos, mares y océanos; Ejemplo: El Teide es el pico más alto de España.
con infinitivos que funcionan como sustantivos; Ejemplo: El leer alimenta el alma.
con los porcentajes. Ejemplo: Ha aprobado el 95% de los alumnos.
Los artículos indeterminados
Los artículo indeterminados son un, unos, en masculino singular y plural, y una, unas, en femenino singular y plural,
respectivamente.
Los artículos indeterminados se emplean en español en los siguientes casos:
con un individuo que pertenece a un grupo genérico; Ejemplo: María es una amiga de Laura. (una de todas).
con una cantidad aproximada, en plural; Ejemplo: Estamos a unos 15 kilómetros de la costa.
delante de sustantivos y adjetivos que describen las cualidades personales del sujeto, destacándolas
especialmente; Ejemplo: Este niño es un ángel. Su hermano es un travieso.
con la forma impersonal del verbo haber: hay. Ejemplo: En el museo hay una exposición de las pinturas negras
de Goya. Junto a la chimenea había una mecedora.
El artículo neutro: lo
El artículo neutro lo solo existe en singular y no puede combinarse con ningún sustantivo, pues en español no existen
sustantivos neutros. El artículo neutro se usa:
delante de adjetivos, participios y ordinales que aparecen solos, sin un sustantivo. Ejemplo: Lo interesante es la
historia de la construcción de la catedral. el dato interesante es... Lo pasado, pasado está. eso que ya ha
pasado... Lo primero es tener motivación. el primer requisito es...
como alternativa a la expresión exclamativa qué + adjetivo/adverbio. Ejemplo: ¡Qué rica está la tarta de
manzana! → ¡Lo rica que está la tarta de manzana! ¡Qué rápido iba ese coche! → ¡Lo rápido que iba ese coche!
Sin artículo
En los siguientes casos no se emplea ningún artículo en español:
verbo ser + profesiones; Ejemplo: Marta es ingeniera de caminos. Pero: Marta es una ingeniera excelente. Si la
profesión va acompañada de un adjetivo.
verbo ser + nacionalidad o credo religioso; Ejemplo: Soy española. No soy católica.
con cantidades no específicas; Ejemplo: ¿Lleva huevo la ensalada? En esa tienda venden televisores.
delante de nombres propios de personas, organizaciones y lugares, excepto cuando el artículo pertenece
al nombre (los Estados Unidos, el Reino Unido, los Estados Árabes Unidos, etc.). Ejemplo: Lorena trabaja
en Oxfam en Grecia. Nunca: La Lorena trabaja en la Oxfam en la Grecia. Excepto: Fatima vive en los Estados
Árabes Unidos.
con los números ordinales de los títulos; Ejemplo: Alfonso X era conocido como Alfonso X «el Sabio». Alfonso
décimo era conocido como Alfonso décimo «el Sabio».
con nombres de idiomas o materias, excepto cuando son el sujeto de la oración; Ejemplo: Hablo japonés y ruso.
Pero: El chino es un idioma precioso.
delante de los meses; Ejemplo: Febrero tiene 28 días. Termino la facultad en junio.
con las estaciones del año; Ejemplo: En verano visito a mi familia en Galicia.
con los medios de transporte que se usan con la preposición en; Ejemplo: Podemos ir en coche al concierto.
Viajar en avión contamina más que viajar en tren.
con las palabras otro, medio; Ejemplo: Quiero otro café. Nos encontramos a medio camino.
con ciertas expresiones con los verbos llevar, tener. Ejemplo: llevar gafas tener coche; tener ganas; tener miedo
Preposición + artículo
Las preposiciones a y de y el artículo determinado masculino singular deben contraerse y formar una sola palabra. Esta
regla no se aplica si el artículo forma parte de un nombre propio.
Ejemplo: a + el = al Vamos al supermercado. Pero: Vamos a El Escorial.
de + el = del Es el libro del profesor. Pero: Es un cuadro de El Greco.
Estas preposiciones no pueden contraerse con los artículos indeterminados.
Ejemplo: a + un Vamos a un espectáculo de flamenco.
PRONOMBRE
Los determinantes acompañan a los sustantivos y concuerdan con ellos en género (masculino o femenino)
y número (singular o plural). Tienen como función introducir en la oración la realidad que designa el sustantivo de manera
determinada limitando su significado. Se clasifican en definidos (el, mi, este) e indefinidos o cuantificadores (poco,
bastante, algún). Los determinantes son una categoría de palabras muy amplia a la que pertenecen los artículos
determinados, los demostrativos, los posesivos, el relativo cuyo, y los cuantificadores todos, ambos y cada.
Los pronombres, por su parte, no precisan ir acompañados de un sustantivo para designar a algo o a alguien, pues
aparecen solos. Al igual que los determinantes, hacen referencia a personas, animales o seres inanimados, esta vez sin
nombrarlos, concordando con ellos en género y número. Se clasifican en: personales, posesivos, reflexivos,
relativos e interrogativos.
Como los determinantes acompañan a los sustantivos y los pronombres los sustituyen, la mayoría de las categorías
pronominales coinciden con las de los determinantes, aunque los pronombres incluyen además los personales y los
relativos.
Personales
Los pronombres personales designan a los participantes en un discurso. Deben concordar en género y número con el
sustantivo al que se refieren. Ejemplo: Beatriz canta una canción. Ella canta una canción para ti.
Posesivos
Los posesivos reflejan posesión o pertenencia. Ejemplo: Es mi maleta. (determinante posesivo) Es la mía. (pronombre
posesivo)
Reflexivos
Los pronombres reflexivos complementan a los verbos reflexivos y concuerdan con ellos en persona y número. Estos
pronombres siempre hacen referencia al sujeto e indican que la acción que el sujeto ejecuta recae al mismo tiempo sobre
él. Ejemplo: Me miro en el espejo.
Relativos
Los relativos introducen las oraciones de relativo y siempre tienen un antecedente en la oración principal. Su función es
aportar información adicional acerca del elemento al que se refieren. Ejemplo: La policía busca al hombre que atracó el
banco.
Interrogativos
Los interrogativos qué, quién y cuál tienen un equivalente relativo. En las oraciones interrogativos sustituyen an
sustantivo cuya identidad pretenden determinar o delimitar. Ejemplo: ¿Quién ha dicho eso? ¿Qué ha dicho?
Demostrativos
Los demostrativos indican una persona, animal o cosa señalando la distancia que mantiene con respecto al
hablante: este, ese aquel, con sus variantes de género y número. Ejemplo: ¿Qué coche quiere comprar, este junto a
nosotros o aquel junto a la puerta?
Indefinidos
Los determinantes y pronombres indefinidos indican una cantidad de manera indeterminada. Algunos de los pronombres
indefinidos son: algo, alguien, cualquiera, nada, ningún. Ejemplo: No tengo ningún libro. (determinante) ¿Puedes
prestarme alguno? (pronombre)
Voseo
El voseo es el empleo del pronombre vos en sustitución del pronombre tú y usted en combinación con el verbo en la
2a persona del plural. Descubre las distintas variantes de voseo que existen en Latinoamérica. Ejemplo: Vos sos idéntica
a Lucía.
PARTICIPIO
El participio en español es, junto con el infinitivo y el gerundio, una forma no personal de los verbos. Por regla general, se
forma añadiendo -ado o -ido a la raíz de los verbos (p. ej., amado, temido, partido), aunque existen también participios
irregulares (p. ej., abierto, dicho, escrito).
Aprende los usos del participio en español y pon a prueba tus competencias gramaticales en la sección de ejercicios.
Ejemplo: El sábado pasado jugamos el último partido de la liga de fútbol. Los dos jugadores
más importantes estaban lesionados. Habíamos entrenado mucho durante meses, así que nos quedamos contentos con
lo que conseguimos.
Los asistentes estuvieron muy emocionados desde el principio. Debido a la abundante lluvia, el partido quedó
suspendido veinte minutos tras el descanso.
El participio
El participio también se conoce como participio pasivo, participio de perfecto, o participio pasado. Es, junto con
el infinitivo y el gerundio, una forma no personal de los verbos. No obstante, a diferencia de estos, el participio
admite flexión de género y número (p. ej., comprado/comprada/comprados/compradas).
Uso
El participio en español tiene usos muy diversos:
forma, sin flexión, los tiempos compuestos con el verbo haber: pretéritos perfecto y pluscuamperfecto, futuro
compuesto y condicional compuesto de indicativo, y pretéritos perfecto y pluscuamperfecto de subjuntivo;
Ejemplo: … solo habríamos conseguido perder.
puede funcionar como adjetivo, concordando en género y número con el sustantivo al que modifica; Ejemplo: El
sábado pasado jugamos la última jornada de la liga de fútbol. Los asistentes al partido estaban emocionados.
puede conformar una conjunción: dado (que), visto que, debido a...; Ejemplo: Debido a la abundante lluvia...
como construcción de participio, sirve para abreviar oraciones de relativo en las que el participio hace referencia
a un sustantivo de la oración principal; Ejemplo: No me gustaría estar en un equipo entrenado por él.
como construcción de participio, sirve para abreviar oraciones de relativo en las que el participio hace referencia
a un sustantivo de la oración de relativo; Ejemplo: Terminado el partido, nos fuimos corriendo al vestuario.
en las oraciones en pasiva, concuerda en género y número con el sujeto paciente.
Ejemplo: Los partidos fueron suspendidos.
en perífrasis verbales, con flexión de género y número. Ejemplo: La jornada se dio por terminada.
Formación del participio
El participio en español se obtiene quitando las terminaciones del infinitivo -ar, -er, -ir, y añadiendo -ado o -ido a la raíz a
los verbos acabados en -ar y -er/-ir, respectivamente. Ejemplo: hablar – hablado aprender – aprendido vivir - vivido
Participios irregulares:
Algunos participios en español son irregulares.
Cuando la raíz de un verbo acaba en vocal, la i de la terminación -ido del participio debe acentuarse. Así se indica
que la vocal de la raíz del verbo y la de la terminación son independientes y no forman un diptongo. Ejemplo: leer –
leído traer - traído
Algunos verbos en español tienen dos participios: uno regular y uno irregular. Otros verbos pueden tener además dos
participios irregulares. Se trata en todo caso de participios aceptados por la RAE, y pueden utilizarse indistintamente,
pues son correctos. La tabla siguiente recoge los verbos más frecuentes de este tipo.
Participio Participio
Verbo
irregular regular
abrir abierto
decir dicho
escribir escrito
hacer hecho
morir muerto
poner puesto
suscribi
suscrito/suscripto
r
ver visto
volver vuelto
Participio variable
Cuando se usa como adjetivo después del verbo estar, el participio tiene flexión de género y número, pues debe
concordar en género y número con el sustantivo al que modifica. Se trata, pues, de un participio variable. Ejemplo: Los
jugadores estaban emocionados. La jugadora estaba emocionada.
Singular Plural
El participio presente
El participio presente no existe en el español actual, siendo abundante en el español antiguo, donde desempeñaban
estrictamente una función verbal. El participio presente ha llegado al español actual en la forma de adjetivos, sustantivos
y preposiciones.
un adjetivo; Ejemplo: Debido a la abundante lluvia...
un sustantivo; Ejemplo: Los asistentes al partido estaban emocionados.
una preposición: durante, mediante, etc; Ejemplo: Luchando enérgicamente durante el segundo tiempo…
una oración de relativo abreviada; Ejemplo: Los asistentes procedentes de diferentes lugares…
En lugar de: Los asistentes que proceden de diferentes lugares...
Formación
El participio presente se puede reconocer fácilmente por su terminación: -ante (abundante, distante, picante), -ente
(convincente, procedente, urgente) o -iente (correspondiente, durmiente, dependiente). Se trata de un resto del español
antiguo cuya forma en el español actual es bastante irregular.
Ejemplo: hablar → hablante oír → oyente vivir → viviente
INTERJECCIÓN
Las interjecciones son palabras que expresan sentimientos muy vivos, de dolor, de alegría, de tristeza, etc. Podemos
decir que son reacciones del hablante que se materializan a través de la palabra. Estas palabras van siempre entre
signos de exclamación. oh!, ;ay!, ;ah!, ;bah!, ;uf!, ;zas!, ;hala!, etc.
Función
Aunque se trata de una palabra, la interjección se comporta como una oración independiente, es decir, comunica un
significado completo. ¡ay! , tiene una significación plena, equivale a una oración. como: ¡me he hecho daño!
Clasificación
Interjecciones Propias o Primarias
Son las verdaderas interjecciones, es decir, palabras que sólo se han creado para expresar emotividad, ¡ay!, ¡uf!, ¡eh!,
¡hala!, etc. y, por lo tanto, sólo pueden ser interjecciones
Interjecciones impropias
Éstas proceden de otra clase de palabra, nombre, verbo, adjetivo, etc., pero se utilizan como interjecciones. ¡ojo!
¡cuidado! ¡bravo! ¡magnífico! ¡oiga! ¡vaya! ¡narices! ¡estupendo! ¡formidable!
NOTA
No debemos confundir un verbo usado como interjección impropia con un verbo utilizado en una oración exclamativa.
Los verbos utilizados como interjecciones pierden su significado original. Cuando yo exclamo ¡anda!, no le pido a nadie
que se ponga a andar, es decir, no es posible añadirle un sujeto. Sin embargo, cuando yo digo:¡ve!, ¡mira!, ¡caIla!, estoy
formulando oraciones en las que sólo está el predicado, pero podría expresar el sujeto cuando expreso una exclamación
mediante un verbo: ¡ve tú! mirad vosotros!, ¡cállense ustedes!
Locuciones interjectivas
Las locuciones interjectivas son grupos de dos o más palabras que funcionan como interjecciones. Ejemplo: ¡Dios mío!
¡Cielo santo! ¡Qué horror!
Extra
Definición Las interjecciones expresan sentimientos muy diversos deducibles solamente a partir del contexto
comunicativo: –¡Oh! ¡Elvira está embarazada! –¡Oh! Luis me ha mentido descaradamente Pero también son indicadores
de la fuerza ilocutiva → propósito del hablante: muestran la actitud del hablante ante el contenido del mensaje.
Clasificación
Interjecciones primarias o propias: las verdaderas interjecciones → palabras que solamente se han creado para expresar
emotividad: ¡ay!, ¡uf!, ¡eh!, ¡hala!, etc.
Interjecciones translaticias o impropias: proceden de otra categoría de palabras, pero se utilizan como interjecciones (Cfr.
desemantización): –Sustantivos: ¡ojo!, ¡hombre!, ¡narices! –Adjetivos: ¡magnífico!, ¡estupendo! –Verbos: ¡vaya!, ¡anda!,
¡vaya!, ¡oiga!
A) Asertivas: –Positiva: el hablante se da cuenta de algo o piensa algo, pero no manifiesta explícitamente el contenido de
su pensamiento: Óscar se enfadó con Iván la semana pasada ¡Ah! Ahora entiendo muchas cosas –Negativa: el hablante
manifiesta rechazo, desprecio, incredulidad o indiferencia ante lo enunciado: ¡He sacado un diez en el examen! ¡Bah! Yo
también saqué un diez la semana pasada
B) Instativas o apelativas: se llama la atención del interlocutor e intentan provocar una respuesta en él: –Creo que no le
caigo bien a Daniel –¡Hala, no digas tonterías! –¡Eh! A ver si os calláis de una vez Interjecciones formularias: se usan
como fórmulas de saludo, despedida, cortesía, etc.: ¡Hola!, ¡Gracias!, ¡Enhorabuena! ¡Adiós!
C) Expresivas o sintomáticas: manifiestan las emociones o el estado de ánimo del hablante ante lo que se expresa: –
Lamento, susto, temor, dolor: ¡Ay! Me has hecho daño ¡Huy! No te había visto –Admiración, alegría, placer: ¡He aprobado
el examen de conducir! ¡Olé! ¡Ese es mi chico! –Sorpresa: ¡Caramba! ¡Hay pasteles! ¡Qué bien! ¡Anda! ¿Qué haces
aquí?
D) Fáticas: se utilizan para mantener la continuidad del discurso y para asegurarse que se mantiene el contacto con el
interlocutor: –Yo soy una persona sincera, ¿eh?, y tú no puedes negármelo –Sabes que te quiero, ¿eh?, así que yo
nunca te engañaría