Protección Del Niño y Adolescente
Protección Del Niño y Adolescente
Protección Del Niño y Adolescente
SEMESTRE : 2019-II
FACULTAD : DE DERECHO
El niño, la niña y el adolescente son personas dignas, sujetos de derechos. Por ello el
artículo 1°.- de la Constitución Política del Perú señala que “La defensa de la persona
humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo de la sociedad y del Estado”.
Asimismo, en su
Artículo 4º se señala que “la comunidad y el Estado protegen especialmente al niño,
adolescente, madre y anciano en situación de abandono”.
En 1924 esta orientación fue respaldada por la Asamblea General de la Sociedad de las
Naciones Unidas, con la Declaración de Ginebra sobre los Derechos del Niño.
Posteriormente, la Organización de las Naciones Unidas promulgó la Declaración de los
Derechos del Niño el 20 de noviembre de 1959. Luego, la Convención Sobre los Derechos
del Niño, que la firman los países convocantes el 20 de noviembre de 1989 (nuestro país la
ratificó el 4 de setiembre de 1990) propone cuatro principios fundamentales:
1.- la no discriminación;
2.- el interés superior del niño;
3.-el derecho a la vida, supervivencia y el desarrollo; y
4.-el respeto por los puntos de vista del niño. En esta Declaración se establecen los
siguientes derechos de los niños:
1.- a la igualdad sin ningún tipo de distinción, discriminación por raza, color, sexo,
idioma, religión y nacionalidad;
2.- a la protección para su desarrollo físico, mental y social;
3.- a un nombre y nacionalidad;
4.- a la alimentación, vivienda y salud;
5.- a la educación y cuidados especiales en niños/as con alguna discapacidad mental
o física;
6.- al amor y la comprensión;
7.- a la recreación y a la educación gratuita;
8.- a recibir atención y ayuda preferencial;
9.- a protegerlos de cualquier forma de abandono, crueldad y explotación; y
10.- a ser formado en un espíritu de solidaridad, comprensión, tolerancia, amistad,
justicia y paz entre los pueblos.
La Convención Sobre los Derechos del Niño define los derechos políticos, sociales,
culturales y económicos de los niños, protegiéndolo de los abusos que puedan sufrir por
parte de sus padres, la sociedad o el Estado. Cabe señalar que la Convención define como
niño/a todo ser humano menor de 18 años. Los derechos reconocidos en esta Convención
son un avance importante en la defensa y protección de los derechos del niño, la niña y el
adolescente ya que los Estados firmantes se comprometen en promover normas y políticas
para su protección. La Convención Sobre los Derechos del Niño también reconoce que en
la infancia se tiene derecho a cuidados y asistencias especiales conforme lo establece
también la Declaración Universal de los Derechos Humanos, reconociendo que para el
ejercicio pleno y armonioso de su personalidad debe crecer en el seno familiar, en un
ambiente de felicidad, amor y comprensión, para que el niño deba estar preparado para una
vida independiente en la sociedad. Sin embargo, a veces los niños se ven obligados a
madurar con anticipación y a asumir responsabilidades y deberes propios de las personas
mayores de edad, como el realizar trabajos para ayudar a sus familias o para sobrevivir
ellos mismos, trabajando muchas veces en situaciones riesgosas o infrahumanas, realizando
labores que son peligrosas y fuertes para su edad. Por ello, el Estado debe legislar
ampliamente en materia de protección frente al trabajo del menor de edad, buscando
brindarle ayuda y protección, cuidando que sus derechos sean reconocidos, tratando de
normar el hecho de que los niños pueden trabajar siempre y cuando su trabajo les brinde las
seguridades del caso y no afecten su integridad o su salud. En este sentido, en el año 2012
el Estado peruano publicó el Plan Nacional de Acción por la Infancia y la Adolescencia
2012-2021 (PNAIA 2021), instrumento que establece las políticas públicas en materia de
niñez y adolescencia.
CODIGOS DE LO S NIÑOS Y ADOLECENTES
Artículo I.- Definición.- Se considera niño a todo ser humano desde su concepción hasta
cumplir los doce años de edad y adolescente desde los doce hasta cumplir los dieciocho
años de edad. El Estado protege al concebido para todo lo que le favorece. Si existiera duda
acerca de la edad de una persona, se le considerará niño o adolescente mientras no se
pruebe lo contrario.