PERSA Monografia III A
PERSA Monografia III A
PERSA Monografia III A
UBICACIÓN GEOGRAFICA
Los persas era un pueblo indoeuropeo, procedían de las montañas del Sur de
Rusia y Asia Central. Los Medos que los acompañaron en la invasión de las mesetas
caspio y el golfo
Pérsico. Hacia el
sometieron a los
persas y fundaron el
primer imperio
iranio. Darío II levanto a los persas y reunió a ambos pueblos bajo su cetro, conquisto
Asia Menor y las comunidades griegas de la costa del Egeo. Su hijo Cambises con la
limitada por la hegemonía de Grecia. Las conquistas de Alejandro Magno dieron fin al
imperio persa, que fueron dominados por los Selecidas y más tarde por los Arsácidas El
sucumbieron sino ante la invasión árabe en el S VIII, El dominio árabe, en que Persia
fue gobernada desde Medina o desde Bagdad por enviados de los califas mahometanos
significo la islamización del país. Los persas tenían un complejo y avanzado sistema de
determinado periodo de tiempo para verificar que todo estuviera en orden dentro de la
ESTRATIFICACIÓN SOCIAL
El imperio persa En la época de esplendor asirio, los medos y los persas (ambos
frontera oriental de Mesopotamia. Persia, el Irán actual, es una extensa y elevada meseta
imperio persa limitaba al norte y el este con los ríos Sir Daria e Indo; al sur, con el mar
Desarrollo y esplendor del Imperio persa Durante muchos años, medos y persas
fueron vasallos de los asirios hasta que, unificados por el medo Deyoces, se
independizaron. Hacia mediados del siglo VI a. C., el persa Ciro II, ocupa el poder y
unificación de un imperio que abarcó a casi todo el mundo de la alta cultura. Ciro
sometió a la capital meda, Ecbatana, y fundó una nueva metrópoli en Persépolis. Sus
V a. C., por Darío I. Con él se inició una larga lucha entre griegos y persas, las llamadas
“guerras médicas”, de la cual salieron victoriosas las ciudades griegas. Con los
sucesores de Darío comienza la decadencia del imperio y hacia el año 333, Alejandro
Magno, rey de Macedonia, derrota al último soberano persa, Darío III, en Issos,
constituye la religión mazdeísta, que era dualista. Esta religión fue practicada por
Zaratustra, profeta que, según la tradición persa, vivió hacia el siglo VI a. C. La esencia
antagónicos: Ormuz, dios del bien, y Ahrimán, dios del mal. Esta lucha se lleva a cabo
constantemente entre todos los seres de la naturaleza. El hombre, por tanto, participa de
ella y, según sean sus acciones, así será su premio o castigo en el más allá. El culto se
hacía en altares al aire libre, donde ardía el fuego purificador. Fue en época de Darío I,
cuando los magos recogieron las enseñanzas del profeta Zaratustra en el Zend Avesta,
su libro sagrado. Para los persas, la muerte era obra del mal; por eso los cadáveres se
(elementos buenos). Por eso se colocaban en lo alto de las llamadas torres del silencio
para que fueran devorados por las aves de rapiña. Arquitectura y escultura Construyeron
adoptaron el tipo de palacio asirio para las grandes edificaciones reales. La escultura
IDEAS POLITICAS
los cuales el fundamental es el de una conspiración universal de las fuerzas del mal
contra el bien, cuyos efectos son la revolución y sus bases ideológicas, y cuyos actores
Luego demuestra que estos ‘mitos’ nacen en las postrimerías del XVIII, para
luego concluir que los ‘reaccionarios’ que los mantuvieron no tienen ninguna relación
con la genuina tradición española. Pues bien, ahí está la anomalía que comentábamos
respecto del uso de ‘origen’. Es la siguiente: el autor puede querer decir con ello que
apareció a finales del XVIII, y por influencia extranjera, lo que él llama ‘mitos’: la
denuncia del peligro masónico, del jansenismo y de la filosofía ilustrada. Pero puede
querer decir también que apareció en dicha época todo el ideario de los autores que
estudia”.
IDEAS FILOSOFICAS
otras varias provincias ocupadas por los Iranios, y sobre todo a la Bactriana,
entre estas dos concepciones. Enfrente del panteísmo enseñado en los Vedas,
del mal, para el mazdeísmo, Dios, o sea el Ormuzd de los escritores griegos y
latinos, es principio del bien, pero no del mal, el cual es sólo un accidente,
principio creador de todas las demás cosas, las cuales, así como tuvieron
cosas.
de esta vida le está reservado el premio o castigo, según merezcan sus obras.
La inclinación del hombre al mal proviene del pecado con que se contaminó el
del alma, de los premios y castigos en una vida futura, siendo notable que se
que nos enseña nuestra religión sobre la rebeldía de algunos espíritus y sus
CAPITULO II
que han poblado la Tierra, mediante la reflexión, a definir estructuras ideológicas que le
permitieran obtener una respuesta a sus inquietudes. Las transferencias ideológicas entre
culturas se han realizado, a lo largo del tiempo, mediante el contacto directo o mediante
documentos entre pensadores o escritores que han adecuado sus nuevos conocimientos
poesía. Rumi, Santa Teresa, San Juan de la Cruz, Miguel de Cervantes, Hegel, Goethe,
Larra, encuentran lazos que les unen de manera inequívoca, de manera que al irse
adaptando a los nuevos medios de difusión de las ideas favorecen el desarrollo de los
periódicos, introduciendo obras como los artículos de opinión o las columnas que
El autor de dicha obra es Manuel García Sánchez. Actualmente ejerce como catedrático
revistas especializadas, así como distintas monografías como la que hoy traemos aquí.
En este magno trabajo, M. García Sánchez analiza los recursos retóricos presentes en las
fuentes griegas antiguas, con especial énfasis a las literarias —aunque no pierde de vista
distintos atributos al mundo persa que actúa como el paradigma del otro, del extraño y
del extranjero, resumiendo, coge el papel de todo aquello que no es puramente griego.
Por lo tanto, nos encontramos ante una titánica obra, no en vano es su tesis doctoral
publicada, que analiza de forma pormenorizada esa ciencia que definimos con el
griego y el mundo persa, sin lugar a dudas una de las mejores documentadas y
conocidas a lo largo de la historia de la humanidad Dicho pueblo lo conocemos
mayoritariamente por la visión que nos legó el pueblo griego de él y que le otorgó una
situación, otorgándoles valores griegos siendo este hecho algo parecido a lo que pasa en
personajes griegos. Este autor concluye su obra planteándose la idea de que no hay
griego sin bárbaro. Esto es muy interesante pues nos lleva a plantearnos un concepto
básico. Este concepto del que hablamos es la naturaleza de esta ciencia ya que, a través
de ella, los griegos proyectan sus propias ideas y su mentalidad del mundo que les
rodeaba. Por ello, los griegos nos describen a estos pueblos desde su óptica generando
así un corpus ideológico y político clave para asentar su propia identidad siendo esto
una relación reciproca ya que los griegos también necesitan al alter, al otro, al extranjero
para potenciar su identidad. Al respecto, viene muy bien traer a colación una frase del
diferencia solo adquiere interés a partir del momento en que a y b entran en un mismo
sistema; hasta entonces, existía una no coincidencia pura y simple. De ahí es más
sur la représentation de l'autre, París [existe una traducción al castellano: Hartog, F. (ed.
alteridad que el hombre ha conocido y que ha dejado los suficientes documentos como
para poder analizarla. Dicha relación es la que establecen Grecia frente a Persia o la
en ese corpus ideológico que se fue conformando en el imaginario colectivo del griego
1) Justificación metodológica
6) Conjura del Harén: las mujeres y los eunucos del Gran Rey.
capítulo de este libro (p. 39 ss.), su autor nos presenta una serie de tópicos y clichés que
se le asignan al monarca aqueménida por parte del mundo griego. De esta forma, se
(1971), Discours, Figures, Paris, p. 142. Tiempo y sociedad Recensiones. Núm. 19,
2015, pp. 130-159 ISSN: 1989-6883 137 moralización de la Historia pues uno de los
lastrado por graves taras morales (p. 82 ss.): hybris; iban en contra de los dioses o
asebeia; incesto; se dejan influenciar por mujeres o eunucos (hombres que al no tener su
órgano viril son “afeminados”); se dejan dominar por sus vicios, etc. Es decir, desde un
prisma deformador, el gran rey persa nos aparece como un bárbaro, señor de la barbarie
y representante último de ésta, así sus atributos como tirano son claros y del todo
concepción, el papel de las mujeres y de los eunucos juega un papel fundamental (p.
177 ss.). M. García Sánchez sostiene que desde el punto de vista tradicional misógino
griego, la mujer persa —y por extensión el eunuco— fue duramente juzgada como
vida persa, cuyo destino venía determinado demasiadas veces relacionado con las
ponía en relación con sus costumbres culinarias y los banquetes “pantagruélicos” del
Gran Rey (p. 327 ss.) donde la gula, la voracidad extrema y el gusto desmedido por el
griego. Algo que se ponía en franca oposición en el mundo de la guerra donde eran
huidizos y cobardes por naturaleza (p. 275 ss.) Esta serie de tópicos los vemos
Recensiones….... Núm. 19, 2015, pp. 130-159 ISSN: 1989-6883 138 egipcios al quemar
el cuerpo de un faraón y atentar contra el buey Apis; Jerjes I como tirano que por su
dinastía aqueménida; Darío II es un bastardo (no es alguien con la sangre real, está
abocado al fracaso) que además se deja influenciar por su madre y tres eunucos;
eunucos) y Darío III que es el paradigma de rey cobarde y huidizo aunque antes de su
enfrentamiento contra Alejandro Magno, es tratado por la tradición irania como un
monarca valeroso. En todo esto, M. García, ve una retórica moral orientada a construir
una imagen del rey bárbaro. Incluso, las excepciones como Ciro, Darío I y Artejerjes I,
de gobernar a un pueblo bárbaro. Además, este potente estudio cuenta con un apartado
de abreviaciones y con una serie de índices muy útiles para buscar la mención de
de términos griegos así como un poderoso catálogo bibliográfico donde ninguna obra de
Persia e, incluso, para el estudioso de la alteridad en cualquier época. Por tanto, nos
ante una obra “rica y novedosa que colmará los intereses del especialista en la historia
de la cultura, de la literatura y de la filosofía griegas, pero que deberá ser también leída
alteridad en cualquier periodo histórico” (p. 13). En conclusión, como hemos podido
Núm. 19, 2015, pp. 130-159 ISSN: 1989-6883 139 griega fue construyendo una imagen
griego, nos pone en la pista del carácter ideológico y retórico de la historia, incluso del
sentido moral que tenía la propia historiografía griega antigua. Los griegos construyeron
medida, artificial. Vemos, por tanto, como el griego para afianzar su identidad necesita
de este bárbaro y podríamos terminar esta recensión con unas acertadas palabras de
antropomorfismos, en una palabra, una suma de relaciones humanas que han sido
prolongado uso, a un pueblo le parecen fijas, canónicas, obligatorias: las verdades son
ilusiones de los que se han olvidado que lo son”6 .6 Nietzsche, F. (ed. 1990), Sobre
CAPITULO III
“Los persas fueron los primeros en la historia en acuñar moneda. Eran de oro
comerciales”.[CITATION
FRA91 \p 45 \l 10250 ]
Las artes y las ciencias persas se valieron de los aportes de los pueblos
decoración era lujosa, con columnas, relieves decorativos y ladrillos esmaltados que
construyeron el gran camino real, que cruzaba todo el Cercano Oriente desde Anatolia
mal y la libertad de la elección del hombre para elegir entre ambos y eran tolerantes con
CONCLUSION
una mezcla de las diversas manifestaciones culturales que poseían los habitantes del
territorio que se despliega a los pies de los Montes Zagros. En el arte imperial estaban
persa; sin embargo, todas las obras imperiales coincidían en mostrar una cosmovisión
Debido al carácter expansivo que adquirió Persia con la subida al trono de Ciro II y sus