La Medicinaa en La Edad Media

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 14

LA MEDICINA EN LA EDAD MEDIA

OBJETIVO GENERAL:

Describir el ejercicio de la Medicina en diferentes culturas durante la edad media.

RESUMEN:

El presente documento de revisión, consiste en una exposición del ejercicio de la


medicina en diferentes culturas durante la edad media a través de una clasificación
bibliográfica sobre el tema de diversas fuentes científicas de la web como Google
Académico, Pubmed, Lilacs, entre otros. El trabajo concluye que la medicina oriental
tiene el mismo peso que la medicina occidental para la medicina como ciencia pues
como se constató, las diversas manifestaciones culturales y cosmovisiones no son
un obstáculo para que los desarrollos científicos se manifiesten e influyan hasta
nuestra época.

PALABRAS CLAVES: Medicina, edad media, salud, enfermedad, castigo, religión.

MÈTODO:

Se realizó una revisión documental sistemática de artículos, libros y fuentes


primarias sobre la medicina en la edad media. Las bases de datos consultadas
fueron:

Google Académico: Se encontraron 50 artículos de los cuales se escogieron 30 y


de ellos se consideran los siguientes como los más importantes para el artículo:

Guardo, A. J., San Martín, G., De Gracia, A., & Palma, J. B. (2008). El despertar de
la medicina árabe en la Edad Media: algunos de sus médicos. Revista de la
Asociación Médica Argentina, 121(4). Se revisó la primera parte del libro donde
describen los alcances de ese mundo complejo como era la Edad Media,
Avicena, un gran pensador y sabio islámico, se
encontró en el momento preciso cuando se cruzaron
civilizaciones, épocas e ideas. Fue uno de los más
grandes espíritus universales de nuestros tiempos.

Hinojo, P. F. (1992). Las grandes epidemias de la temprana Edad Media y su


proyección sobre la Península Ibérica. En la España medieval, (15), 9-30. Permite
delimitar un antes y un después de la época
de Justiniano (527-565) en lo referente al tema que nos ocupa, no nos ceñiremos
con exclusividad al análisis del mismo en los siglos VI al VIII.

García-Ballester, L., & Arrizabalaga, J. (1999). El médico en la Edad Media. En esta


nueva forma de ver la medicina en Europa podemos reconocer la forma en que los
médicos fueron capaces de ofrecer un sinfín de especulaciones y soluciones
doctrinales en torno a la salud y la enfermedad.

Reyes, A. E. (2008). Evolución Histórica de la Medicina Tradicional


China. Comunidad y Salud, 6(2), 42-49. La Medicina Tradicional China es una
medicina holística ya que entiende que no existen enfermedades, sino enfermos,
tiene en consideración no sólo lo que sucede en el órgano, sino también lo que
sucede en todo el organismo, la manera de manifestarse, como responde a
las influencias externas y a los estímulos del entorno.

Vega-Franco, L. (2002). Ideas, creencias y percepciones acerca de la salud: reseña


histórica. Salud pública de México, 44, 258-265. El análisis de estas contribuciones
permite reconocer que en diversas culturas se ha definido la salud
con términos cuyo significado equivale a las palabras: equilibrio, armonía, equidad,
mientras la enfermedad se ha descrito con los antónimos de estos vocablos. Se
piensa que la teoría ecológica de la “resilencia”, para estudiar la capacidad de
adaptación de ecosistemas, puede orientar las ideas
en investigaciones fisiológicas de los procesos que conducen al organismo a una
nueva condición estable con el medio externo, para conocer el margen impreciso
que separa la salud de la enfermedad.

Se leyeron y seleccionaron los artículos con los que se realizaron fichas


bibliográficas y se realizaron las observaciones que mencionamos anteriormente de
los documentos principales.

INTRODUCCIÒN:
A lo largo de la historia los seres humanos han tratado de definir el concepto de
salud y han generado atributos a las diversas formas de generar bienestar en el
cuerpo, durante la edad media, la salud y la enfermedad era una cuestión
enmarcada de una forma espiritual basada en un castigo divino, “prevalecía la idea
de que las enfermedades eran el castigo que los dioses imponían a los hombres
que transgredían sus normas, aunque también algunas enfermedades podían ser
causadas por maleficio de alguna persona o por el capricho de demonios errantes.
Por eso, para recuperar la salud era necesario restablecer
la armonía entre el dios ofendido y el hombre pecador,
y según fuese la causa de la enfermedad el paciente
era objeto de ritos religiosos o bien expuesto a exorcismos y magia.” (Vega, 2002, p.
260)

Desde esta perspectiva, las enfermedades se han definido de forma mística, mágica
y hasta como un castigo divino para llegar a lo que conocemos hoy. En el presente
documento se llevará a cabo una descripción general de la Medicina en la edad
media partiendo de los aportes teórico, prácticos y científicos de diversos
personajes que fueron ilustres en tiempos y espacios determinados
cronológicamente en diferentes partes del mundo y cuyos aportes permitieron
descubrir las causas de muchas enfermedades, herramientas quirúrgicas, medidas
de higiene, etc. En general, se da a conocer el objetivo de la medicina en la edad
media.

DESARROLLO DEL TEMA:

Desde sus inicios hasta la actualidad, para la medicina, Hipócrates ha sido


considerado el padre de la medicina científica. El Corpus hipocrático, que son 53
libros, tiene escrito el juramento hipocrático y además otros de orden médico (7
libros de las Epidemias, 4 del Régimen, 4 de Enfermedades, 2 de Predicciones, 2 de
Enfermedades de las mujeres, Instrumentos de reducción de Articulaciones y
Fracturas), sobre los cuales estudiaron los médicos durante siglos. Uno de ellos aún
está vigente: el juramento hipocrático, porque es el que señala los deberes de los
médicos, deberes que no les fueron impuestos por la autoridad del momento, sino
que fue algo autoimpuesto después de evaluar el valor e importancia del trabajo que
realizaban.

Este Juramento es un modelo de comportamiento profesional para los médicos, y no


es que les reste dignidad a otras profesiones, pero, es que hasta la Biblia elogia al
médico: (Eclesiástico, 38, 1) “Honra al médico antes de que lo necesites, porque
también a él lo creó el Señor”. Félix Martí Ibáñez, médico e ilustre humanista
español, dice del médico que:

“ser médico es mucho más que recetar píldoras o reparar desgarros o


mentes trastornadas. El médico es un intermediario entre el hombre y Dios”.
Dice también que ser médico es mucho más que ser un mero dispensador de
píldoras o un carpintero médico que remienda y compone carnes y almas
rotas. El médico es una piedra angular de la sociedad humana y un
intermediario entre el hombre y Dios” (citado por Córdoba, 2005, tomo III).

Con esta cita entramos en relación con la estructura sociocultural y política de la


edad media, la religión. La edad media es una época que abarca desde el siglo V
hasta finales de siglo XVII, la visión del hombre medieval o mejor dicho del médico
medieval tenía su razón de ser en el alma. Guardo, (2008, p. 5) afirma que “desde el
siglo VI a finales del X, la medicina fue una labor reservada, especialmente, a los
sacerdotes médicos. Estos, como podemos suponer, no estudiaron la naturaleza y
la sintomatología del cuerpo con rigor científico. Todo obedecía a la voluntad divina:
la enfermedad, la curación o la agravación de esta, respondían a los designios de
Dios. Los religiosos fueron, ante todo, médicos del alma. Durante este periodo, la
medicina no fue formalmente técnica, como antaño lo había sido el método
hipocrático-galénico y como a partir del siglo VIII comienza a serlo el árabe. Y es
que distaba mucho de permitir un conocimiento racional de la enfermedad y de su
tratamiento”, las enfermedades más comunes eran las plagas y pestes que
aquejaban a poblaciones enteras y se extendían a través de los puertos donde se
intercambiaban mercancías y alimentos.

Las principales características y objetivos de la medicina en la edad media en los


diferentes imperios se pueden caracterizar así:
El Mundo Islámico o musulmán

La primera gran figura de la medicina del Islam conocido como el Galeno de los
Árabes fue uno de los clínicos más importantes y renombrados de su época,
considerado como el "científico por excelencia", llamado Abu Bakr Muhammad ibn-
Zakariya al-Razi, nació en Persia en una población cercana a Teherán cuyo nombre
es Rayy.

Fue el primero en introducir las preparaciones químicas en la terapéutica. Pero


donde descuella es en sus obras de medicina. La más importante es sin duda Al-
Hawi, donde está todo, “es una verdadera enciclopedia y recopilación de todos los
conocimientos médico quirúrgicos, a lo que se debe de agregar su experiencia
personal, con un fuerte vigor descriptivo. Era un conciso manual sobre las
enfermedades y sobre la anatomía que influyó en la ciencia occidental hasta el
Renacimiento, trata de cada enfermedad, se analizan sus síntomas y los posibles
tratamientos. En anatomía describió a la rama laríngea de nervio recurrente y la
nasal del trigémino, describió el reflejo pupilar a la luz, incursionó en la ética y en
fisiología, escribió sobre los temperamentos del ser humano, unas originales
indicaciones sobre cómo alimentarse y qué agua beber cuando se viaja, bases de
higiene corporal, sobre las fiebres, excretas y sobre los medicamentos, tratamientos
y los venenos. En su libro sobre terapéutica llamado el Kitab alMansuri fi al-Tibb,
Secreto de los secretos, expone sobre los elementos y los medios para la
fabricación y administración de los medicamentos. Introdujo el uso del alcanfor y la
hioscimina; y siempre prefirió el uso de las preparaciones simples a las complejas.
En cirugía tenemos una monografía sobre las piedras en la vejiga y los riñones”
(Riviere et all., 1976, p. 22).Este gran imperio llegó a comprender casi la mitad del
mundo conocido en ese entonces. En las ciudades de Bagdad (Califato de Oriente)
y Córdoba (Califato de Occidente) se alcanzó el máximo desarrollo científico-cultural
de la época.

Europa Occidental

En sus monasterios y universidades se cultivó la ciencia greco-romana, iniciándose


la asistencia y educación médica organizada. Uno de sus más reconocidos
exponentes es el Papa Juan XXI, su nombre real era Pedro Rebuli Giuliani, nacido
en Lisboa, Portugal, alrededor de 1215, fue conocido como Petrus Hispanus.
Además de diversos escritos sobre medicina, lógica y filosofía, “fue autor del
Tesaurus Pauperum (El Tesoro de los Pobres), recetario con medicamentos simples
y baratos, de uso casero. Precede a este escrito un boceto sobre Medicina
Medieval, con acento en los siglos XII y XIII” (Hinojo, 1992, p. 31).

Durante esta época en Europa, se incorporó el mundo científico griego y árabe de


manera que se pudo establecer una relación entre la salud y la enfermedad de
forma racional, es decir, que las formas religiosas de la medicina empezaron a
preguntarse por las causas naturales de estas. Gracias a la incorporación de la
filosofía naturalista no solo fue posible identificar las causas sino aliviarlas, de igual
manera, al no mantenerse el statu quo eclesiástico surgieron nuevas instituciones
donde fue posible crear, sostener y argumentar una definición acerca de las
enfermedades, estas son: las Universidades que surgieron en el S. Xlll; Ballester y
Arrizabalaga (2010, p.37) afirman que “el modelo de enseñanza se caracterizaba
por un contenido similar en todas las universidades europeas y porque además la
lengua de transmisión de los conocimientos era en todos los casos, el latín. Esto
favoreció un internacionalismo positivo y estimulante. Dicho estudio se configuró
especialmente en el siglo XlV, como la institución más idónea de elaboración y
creación científica y el arma discutible de renovación intelectual de la sociedad
europea. Disponer o no de una Universidad marcó la frontera de la creación
intelectual de la medicina. El impacto de su producción intelectual alcanzó nuevas
dimensiones con la creación de la imprenta, cuando a partir de los años setenta del
siglo XV se comienza a imprimir los textos científicos y médicos”. En este punto de
la historia podemos identificar porque hasta ahora la medicina europea es una de
las más avanzadas y un modelo a seguir por otros países, desafortunadamente los
sistemas integrales de salud se han forjado sin tener en cuenta el contexto
subdesarrollado de nuestros territorios y por eso los modelos europeos que guían la
salud en Latinoamérica no han sido eficaces, sin embargo, esto no difiere de que
Europa sea un referente fundamental para la historia de la medicina especialmente
en la edad media.

La India Antigua

Las sociedades indias presentan una connotación radicalmente espiritual que opaco
incesantemente al materialismo desde la antigüedad, sin embargo, eso no impidió
que surgieran aportes científicos a la medicina, la cual, ellos la denominan Ayur
Veda o “ciencia de la vida”.

Lo anterior no impidió, de ningún modo, el desarrollo de la medicina, ciencia


preocupada por la salud mental y corpórea. Megastenes, embajador del rey Seleuco
y autor de Indica (siglo IV-III a. C.), habla de hospitales para
gente rica, que poseían un diseño arquitectónico en el que se manifestaba la
importancia de la higiene y de la salud mental del paciente. Más tarde, Duttha
Gamani fundó dieciocho instituciones para asistir a los pobres. El viajero chino
FaHsien, por ejemplo, señala en pleno siglo V de nuestra era, la existencia de
hospitales gratuitos.

La cirugía, a diferencia de otras culturas antiguas, que empleaban fundamental o


totalmente la herbolaria, llegó en la India a adelantos extraordinarios: “La cirugía,
aclara el autor Ballester (1987), es ciencia pura (en relación a su época) que nunca
se dejó influir ni por la religión ni por la superstición.
De hecho, había más de cien instrumentos quirúrgicos. Sobre la anestesia, nunca
existió el problema de la carencia, como en occidente, ya que se utilizaba la
poderosa droga sammohini, que dejaba insensible al paciente, y otra para acelerar
su retorno a la conciencia. Había varios tratados de medicina, pero
dos son los más importantes: el Charaka Samjitá y el Susruta Samjitá. El afán
clasificatorio y descriptivo de los antiguos hindúes era extraordinario: todo lo
clasificaban y subclasificaban; lo describían y detallaban. Los tratados de medicina
no son la excepción: allí se habla hasta de los tipos
de alcoholismo. Éstos y otros tratados describen la práctica de la cesárea, la cirugía
plástica, la operación de cataratas, etc. Es ya conocido que fueron los cirujanos
ingleses de la Compañía de Indias Orientales quienes tomaron lecciones de
rinoplastia de sus colegas hindúes” (p. 41).

Aunque pareciere que por su cultura, el territorio Indio no hubiese aportado a la


medicina pues culturalmente, la espiritualidad está por encima de los afectaciones
morfológicas del cuerpo, se puede inferir que esta aportó al mismo nivel que la
cultura europea y que sus aportes son igual de valiosos si se aprende a diferenciar y
a conocer el cuerpo desde el espíritu.
Como la medicina tradicional India data de muchos años de antigüedad, sus textos
son en su mayoría legados con algunos componentes de magia más que
colecciones de libros de personajes reconocidos a través de la historia, en sus
recopilaciones encontramos diversas técnicas y aplicaciones que se dividen según
las partes del cuerpo, entre las más representativas podemos mencionar los
siguientes:

Los cuatro Vedasamhitas (Rg Veda, Sama Veda, Yajur Veda y Atharva Veda, que
contienen una nomenclatura anatómica y de secreciones y partes del cuerpo
humano, en cantidades superiores a los 300 vocablos, como estos que de acuerdo
con Mora (1990) son los más importantes pues definen las partes generales del
cuerpo: “Amsa, hombro; amhubhedi, vulva; anga, miembro; anguri, dedo; anghri,
pie; pada, pie; antarodara, interior del vientre; alga, ingle; anda, testículo; ana, boca;
anata, región del cuello; udara, abdomen; upapaksa, flanco, costado; upastha,
órganos genitales femeninos; uras, pecho; usniha, protuberancias del cráneo; uru,
muslo; kakatika, nuca; kaksa, axila; kantha, garganta; kaninaka, pupila; kapala,
cráneo; kaprth, pene ; kara, mano ; karasna, antebrazo; karna, oreja; ktkasa,
vertebra; kuksi, pelvis; garbha, embrión; gavinika, uréter; guau, recto; gulpha, tobillo;
caksas, ojo; carman, piel; jangaa, pierna; jatru, clavícula; jambila, estomago;
jambha, mandíbula; jihva, lengua; tanu, cuerpo; nandathu, órgano sexual; nas, nariz;
parus, articulación; parsva, pared torácica; puritat, pericardio; prstha, espalda;
barsva, encía; majjan, medula; mastiska, cerebro; rnuska, testículos; rnutra, orina;
murdhan, cabeza; mehana, penis como órgano urinario; yakan, hígado; yoni, matriz,
vagina; vaksas, seno; vantsthu, colon; vasti, vejiga; vrkka, riiion; srotra, oído interno;
samdhi, articulación; sthulaguda, intestino grueso; hardi, corazón; hira, vaso
sanguíneo.” (p. 2)

La documentación que podemos encontrar de la medicina hindú, son tres tratados


denominados: el Bhela, Shamita y el Caraka Sanzhita los cuales los encontramos
aun en la actualidad en versiones originales y copias de otros autores. Otros
conceptos relevantes de esta época en la India son el Salya que traduce cirugía
general, junto con Susruta Samhita que hace referencia a los instrumentos
quirúrgicos, En materia de cirugía (sastra karma), el Susruta describe ocho tipos:
chedya, escisión; lekhya, escarificación; vedhya, punción; esya, exploración; aharya,
extracción; visravya, evacuación y sivya, sutura. Respecto de 10s instrumentos
quirúrgicos, describe ciento uno romos y veinte filosos, catéteres, bougies, trocares,
jeringas, espéculos, agujas, sierras, tijeras, lancetas, ganchos y estiletes. Salakya,
define oftalmología y otorrinolaringología; Kayacikitsa significa medicina general.

Otros imperios médicos

Otro régimen que difiere del europeo no solo durante la edad media sino hasta la
actualidad, es el sistema de salud Chino, la medicina china tiene 3.000 años de
historia y para llegar a ser lo que es hoy, una ciencia con sus principios y sus
métodos propios tuvo que pasar por una evolución de siglos, prosperando en unas
dinastías imperiales, estancándose en otras, y en otras
diversificándose en escuelas. En ese largo proceso, hubo eminentes médicos que la
prestigiaron para siempre. También el islam que nacieron como consecuencia de la
asimilación y recreación de la medicina helenística, en particular, la galénica,
alcanzó su cumbre en los siglos Xlll y la vez perdió toda capacidad creativa. Sin
embargo, logró alcanzar como un acicate para la medicina europea medieval.

Y, el árabe que marcó significativamente la historia de la medicina y de la cual


podemos rescatar figuras médicas que Guardo describe (2008) como: Abu Bakr
Muham madibn -Zakariya al- Razi – Rhazes, quien en la anatomía describió a la
rama laríngea de nervio recurrente y la nasal del trigémino, describió el reflejo
pupilar a la luz, incursionó en la ética y en fisiología, escribió sobre los
temperamentos del ser humano, unas originales indicaciones sobre cómo
alimentarse y qué agua beber cuando se viaja, bases
de higiene corporal, sobre las fiebres, excretas y sobre los medicamentos,
tratamientos y los venenos.” (p. 2); “Ali ibn al-Abbas al- Magusi – Haly Abbas, se lo
considera como el precursor entre los médicos árabes con respecto a la ética entre
los colegas y los pacientes. En psico-patología dice que
el amor en forma patológica y la melancolía son
enfermedades afines. Clasifica varios tipos de demencia he indica sus posibles
soluciones. Prescribía múltiples tratamientos con aguas minerales y con
fisioterapia.” (p.4)

La potencia que históricamente construyó el mercado y el comercio del mundo


médico medieval que fue afectado por plagas, pestes, sequias y escases de
alimentos, este es: El Imperio Bizantino o romano de Oriente, este imperio
durante el siglo VII conoció dos brotes epidémicos, “uno en 697, que habría
afectado a Mesopotamia, Siria y Constantinopla. El otro en el año 700, que se
propagó por diversos lugares de oriente, tocando, de nuevo, la capital del Imperio
Bizantino” (Riviere et all., 1976, p. 2), cuya capital Bizancio (llamada después
Constantinopla) fue un verdadero centro de atesoramiento y recopilación científica.

La primera gran plaga, de la que tenemos noticia, data de la època de Marco


Aurelio. Procedente de la partia de los Arsàcidas, la epidemia según Riviere et all.,
(1976, p. 3) “contraida por las tropas romanas durante el asedio de Seleucia en el
verano de 165, penetrò en el imperio de la mano del ejercito victorioso, que
retomaba para celebrar su triunfo. El mal se extendiò por las provincias orientales
antes de llegar a italia. En Roma provocò la muerte de miles de personas en el
otoño de 166; y por otro tanto acaeciò entre los contingentes militares acantonados
en los cuarteles de invierno de la frontera reno-danubiana”.

Todas estas contribuciones científicas tuvieron afectaciones demográficas, políticas,


culturales y económicas en cada una de las sociedades mencionadas. De igual
manera, de cada una de estas surgieron personalidades ilustres para la medicina
que aún son reconocidas como iconos de la historia. En conclusión, se reconocen
dos vertientes de médicos en esta época, los primeros son los médicos físico que
correspondía el arte de la medicina es decir, el de diagnosticar y poner fin a las
enfermedades; el segundo, trataba las heridas, fracturas, abscesos, etc. claro está,
que ambos, elaboraban medicamentos porque los dos contaban con el
conocimiento suficiente para ello, podemos recordar que la influencia de estos
médicos en la edad media se mantuvo sobre el tratamiento de enfermedades y su
influencia principal fue en el núcleo familiar pues a partir de esta época los
profesionales médicos, desde el nacimiento hasta la muerta, acompañan las
familias, de ahí, que su posición en el sistema social , se convirtiera en parte de las
decisiones de los monarcas por ejemplo.. Su intervención en importantes decisiones
de los monarcas. Esta es la muestra de que la medicina escolástica y sus
practicantes generaron una gran confianza en toda la estructura social que se
sostiene en la actualidad, pues como podemos observar en la realidad todos y todas
tenemos algo que las familias llaman “médicos de cabecera”.
DISCUSIÒN:

De la información expuesta se puede destacar un fenómeno que tiene auge en la


actualidad y es el hecho de que las mujeres no son mencionadas en ninguna de la
documentación requerida para el presente artículo, aunque se sabe que el ámbito
del parto si les era otorgado exclusivamente a ellas, en general, la presencia de las
mujeres en la medicina ha sido opacado como en muchos otros momentos de la
historia.

CONCLUSIONES:

- La medicina oriental tiene el mismo peso que la medicina occidental para la


medicina como ciencia pues como se constató, las diversas manifestaciones
culturales y cosmovisiones no son un obstáculo para que los desarrollos
científicos se manifiesten e influyan hasta nuestra época.
- Existe poca distinción del género de los aportes científicos durante la edad
media, lo cual, limita una descripción profunda de la medicina en la edad
media.
- Los profesionales médicos a partir de la edad media, con la creación de las
universidades, pasaron a ser profesionales científicos reconocidos y formaron
parte de la jerarquía social de la época, cuyo reconocimiento subsiste hasta
la actualidad.
REFERENCIAS BIBLIOGRÀFICAS:

Benavides, J. L. I. (2007). El Juramento de Hipócrates¿ Aún vive?. Medicina


Universitaria, 9(37), 219-230.

Cano, A., & del Carmen, M. (2008). La bioética desde una óptica
marxista. Educación Médica Superior, 22(3), 0-0

Carrillo Ibarra, J. (2008). La evolución del pensamiento científico, la medicina y las


funciones mentales. Del pensamiento primitivo a la diversidad y creatividad
del pensamiento. Revista Mexicana de Neurociencia, 9(1), 61-69.

CARTELLE, E. M. (2000). De la Antigüedad a la Edad Media: medicina, magia y


astrología latinas. Cuadernos del CEMYR, (8), 53-72.

Castillo Lamas, L., & Cabrera Reyes, J. (2010). Apuntes históricos de la cirugía en el
trauma. Revista médica electrónica, 32(2), 0-0.

De Micheli-Serra, A. (2002). Notas sobre la medicina del antiguo Islam. Gaceta


Médica de México, 138(3), 281-286.

De Mora, J. M. (1990). La Medicina en India Antigua. Classica: Revista Brasileira de


Estudios Clássicos, 3(3), 91-105.

Del Valle García, M. (2007). Edad Media y enfermedad. Revista Científica de la


Sociedad Española de Enfermería Neurológica, 26(1), 9-27.

Fernández Díaz, N. (2012). La historia de la medicina y de la enfermedad: metáforas


del cuerpo y de las instituciones. De la edad media al siglo XIX. Thémata
(2012, Vol. 45, p. 109-117).

Ferragud, C. (2007). Los oficios relacionados con la medicina durante la baja edad
media en la corona de Aragón y su proyección social. Anuario de estudios
medievales, (37), 107-137.
García Ballester, L. (1987). Panorama de la medicina en una sociedad medieval
mediterránea: la Valencia cristiana bajomedieval. Dynamis: Acta Hispanica ad
Medicinae Scientiarumque. Historiam Illustrandam, 7, 059-115.

García Barreno, P. (2007). La medicina medieval (1100-1500). Ciencia y cultura en


la Edad Media, 355-391.

García-Ballester, L., & Arrizabalaga, J. (1999). El médico en la Edad Media.

Guardo, A. J., San Martín, G., De Gracia, A., & Palma, J. B. (2008). El despertar de
la medicina árabe en la Edad Media: algunos de sus médicos. Revista de la
Asociación Médica Argentina, 121(4).

Hinojo, P. F. (1992). Las grandes epidemias de la temprana Edad Media y su


proyección sobre la Península Ibérica. En la España medieval, (15), 9-30.

Jiménez, P. C. (2006). La medicina en la historia medieval cristiana. Espéculo:


Revista de Estudios Literarios, 32.

Laval, E. (2013). Petrus Hispanus, médico medieval, elegido Papa con el nombre de
Juan XXI: Bosquejo de la medicina en la Edad Media. Revista chilena de
infectología, 30(5), 562-565.

Méndez, P. P., & Tembra, J. J. V. (2009). Evolución y desarrollo de la medicina


medieval en occidente. Oceánide, (1), 2.

Miranda Gómez, O., & Nápoles Pérez, M. (2009). Historia y teorías de la aparición
del virus de la inmunodeficiencia humana. Revista Cubana de Medicina
Militar, 38(3-4), 0-0.

Motta, G. (2010). La historia, la comida, la salud: Un vínculo siempre más estrecho


entre alimentación y medicina. Medicina y Seguridad del Trabajo, 56(218),
93-99.

Motta, G. (2010). La historia, la comida, la salud: Un vínculo siempre más estrecho


entre alimentación y medicina. Medicina y Seguridad del Trabajo, 56(218),
93-99.

Parra, M. M., & Fernández, L. F. (2016). Imagen y cultura de la enfermedad en la


Europa de la Baja Edad Media (p. 1). Universidad Complutense de Madrid.
Pérez-Cajaraville, J., Abejón, D., Ortiz, J. R., & Pérez, J. R. (2005). El dolor y su
tratamiento a través de la historia. Revista de la Sociedad Española del
Dolor, 12(6), 373-384.

Polar, A. (2009). Algunos apuntes sobre historia de la sexualidad hasta la edad


media. Disponible en URL: http://www. fmvuba. org.
ar/antropologia/VolIV_N1_2009/sexualidad. pdf Consultado, 10(12), 10.

Reyes, A. E. (2008). Evolución Histórica de la Medicina Tradicional


China. Comunidad y Salud, 6(2), 42-49.

Riviere, J. R., & Entralgo, P. L. (1976). La medicina en la antigua India. Entralgo PL.


Historia universal de la medicina, 1, 129-158.

Robles-Osorio, M. L., & Sabath, E. (2014). Breve historia de la intoxicación por


plomo: de la cultura egipcia al Renacimiento. Revista de Investigación Clínica,
66(1), 88-91.

Rodilla, B. M. G. (2015). Las mujeres y la medicina en la Edad Media y primer


Renacimiento. Cuadernos del CEMYR, (23), 121-136.

Santo Tomás Pérez, M. (2002). La asistencia a los enfermos en Castilla en la Baja


Edad Media (Doctoral dissertation, Tesis Doctoral. Universidad de Valladolid,
2001, pág. 115-116).

Vega-Franco, L. (2002). Ideas, creencias y percepciones acerca de la salud: reseña


histórica. Salud pública de México, 44, 258-265.

También podría gustarte