Resumen Capitulo 3-Roma
Resumen Capitulo 3-Roma
Resumen Capitulo 3-Roma
EL PRINCIPADO
1. Emperadores y dinastías
El tema tercero trata sobre la Roma Imperial. Gonzalo Bravo
comienza analizando la formación del Imperio. Según él, la
formación del sistema imperial no es obra exclusivamente de
Augusto sino que es el resultado de la lenta evolución del
sistema político republicano. Una de las bases de este
imperialismo habría sido la expansión que Roma llevó a cabo
durante los primeros tiempos de la República y la
incorporación de dichos territorios como provincias.
La política de Augusto varió desde la recuperación de los
viejos valores republicanos hasta la instauración de nuevas
ideas en la sociedad. Augusto supo rodearse para llevar a
cabo su tarea de un importante grupo de colaboradores
( Agripa, Mecenas, Tito Livio,…) aunque también sufrió la
oposición de un alto numero de senadores a los cuales
anularía a través de medidas políticas ,administrativas e
institucionales. A pesar de ello, dio fuerza de ley a las
decisiones tomadas por el Senado y capacidad jurisdiccional
en ciertos casos cobre sus miembros. Sin embargo, le recortó
sus prerrogativas de gobierno y control sobre el Estado.
Augusto elaboró un sistema en el cual el gobernaba como
princeps, guiado por la moderatio, y poseía las virtudes de la
clementia, iustitia, virtus y pietas. Era un gobierno autocrático
donde él imponía el poder. Su instauración supuso un freno al
Senado que en época republicana había tenido un papel
principal. Los emperadores, a partir de este momento,
intentaran anularlo, lo que no pudieron lograr siempre.
En cuanto a la política social que se llevó a cabo en época
imperial cabe destacar la instauración de unas ayudas
económicas dirigidas a ayudar a la plebe: frumentationes,
congiaria, donativo; y otras destinadas a ayudar a las
ciudades italianas por medio del establecimiento de
instituciones alimentarias o alimenta, creadas en tiempos de
Nerva y que se mantendrán hasta Marco Aurelio. Se basaba
en la ayuda por una parte a los propietarios de tierra y por otra
a los niños de las familias más necesitadas.
El acceso a la ciudadanía romana se prolongó, no finalizando
este proceso antes del siglo III. Existían varias formas de
acceder a dicha ciudadanía, siendo las más comunes la
concesión que se realizaba con la creación de colonias de
veterani y la concesión que algunos emperadores otorgaban a
las provincias, destacando, como señala Gonzalo Bravo, la de
Claudio a los galos, Vespasiano a los hispanos con el
otorgamiento del derecho latino, Septimio Severo a los
africanos y, la más importante , la Constitutio Antoniniana de
Caracala por la cual concedió a los habitantes libres de todas
las ciudades del Imperio la ciudadanía romana. Y es que la
condición de ser ciudadano romano seguía siendo
considerado un privilegio, existiendo considerables diferencias
entre los poseían la condición de cives y los que no la tenían
(peregrini). La sociedad romana se basaba en la riqueza
(ricos, pobres), el poder (aristocracia, pueblo) y el
privilegio( cives, peregrini).
La sociedad romana tenía una estructura patriarcal, en la que
la mujer romana estaba bajo potestad masculina aunque, con
el tiempo , se produjo una cierta liberalización , sobre todo en
el aspecto económico, pudiendo llegar a ser la dueña de su
patrimonio cuando esta se casaba. Como apunta el autor, la
posición de la mujer romana varió de una época a otra y el
grado de discriminación, marginación y emancipación estaban
en condición del status social que poseyera.