Siervo de Dios antes que líder
por Enrique Zapata
Con este iniciamos una serie de cuatro artículos
dedicados a la formación del liderazgo juvenil.
Esta serie se ha preparado para ser usada como
herramienta para reuniones regulares de equipo o
seminarios de capacitación. El liderazgo juvenil
determina mucho el crecimiento de la iglesia, por
lo cual, es imperativo formar a un siervo al
dedicarnos a formar a un líder.
Formando líderes espirituales, Parte I
El líder y el crecimiento de la iglesia – Introducción
Existe un principio general en la salvación del pueblo de Dios: La redención
viene a través de la dirección de líderes de Dios. A estos, el Señor ha
levantado con base en Su misericordia soberana. Él responde a las
necesidades profundas y al clamor de su pueblo por la presión del fracaso y el
sufrimiento que viven. (Ex 3)
«Existe un fuerza de gravedad que es inherente a nuestra naturaleza
pecaminosa. Dicha fuerza casi garantiza que el vigor de la vida espiritual
disminuya poco a poco si no se renueva por medio de la oración
dependiente.»
«Dios responde al clamor de su pueblo, derramando su Espíritu, avivando la
vida de los del pueblo, levantando nuevos líderes y haciendo que los
corazones de las personas se vuelvan a Él.»
El pastor o líder como siervo de Dios
A. ¿Cuál es la meta? Colosenses 1.28-29; Mateo 28.19; 22.37—39
«formar hombres perfectos en Él»
B. ¿Cuál es la tarea? «Desarrollar personas»
«Perfeccionar o equipar a los santos para la obra del ministerio.» El
crecimiento es el resultado de preparara los santos para el ministerio,
«para la edificación del Cuerpo de Cristo». (Ef 4.4–16).
C. ¿Cómo se puede llevar a cabo esta tarea?
1. Basándonos en lo que Dios ha hecho y está haciendo. ¡Dios
quiere hacer crecer su iglesia!
2. Cumpliendo con el rol de líderes.
Principios básicos para ejercer el liderazgo
I. Tiene autoridad. Le es conferida por Dios y la inspira su
vida.
«Sus acciones hablan más fuerte que sus palabras».
i. Respaldada por un carácter digno. Personas
llenas de amor, misericordia, perdón, llenas del
Espíritu Santo.
ii. Respaldada por su compromiso. El pastor no
puede ser sólo una persona de metas. Debe estar
continuamente escuchando «la voz» de Dios, y
tener un corazón obediente. El ministerio no es
para personas que quieren ser «originales, de
ideas novedosas» sobre Dios, las Escrituras y la
Iglesia. Es para siervos y siervas del Pastor
Principal, que lo obedecen y cumplen con
diligencia los deseos de Su corazón.
II. Dirige hacia el cambio
«Generalmente, las personas sólo van donde las guían o
les permiten ir sus líderes».
i. El líder debe dirigir. «Y si la trompeta diere sonido
incierto, ¿quién se preparará para la batalla?»
ii. El líder no sólo debe guiar al pueblo, sino que
también debe animarlos a que desarrollen sus
vidas y ministerios (ej. Pablo y Bernabé). Muchos
líderes estorban el desarrollo de otros o por miedo
o por egoísmo o por negligencia.
«Elegir la estabilidad en lugar del cambio es una
tentación perenne para los hombres. La estabilidad
es más fácil. En circunstancias estables, un
hombre sabe con qué se va a enfrentar». (Tomado
de Building Christian Communities, de Stephen B.
Clark).
III. Busca el crecimiento
«Los líderes sólo pueden llevar a su gente tan lejos como
sean capaces o estén dispuestos a llegar».
i. Mediante la mejora del liderazgo: El liderazgo
puede ser mejorado y aumentado a través de la
capacitación, la experiencia y el conocimiento.
ii. Mediante la formación de habilidades: La
habilidad se adquiere con el desarrollo deliberado,
sistemático y continuo de conocimientos y
acciones.
iii. Mediante la elección de personal: Se debe
escoger a la persona adecuada para cada
responsabilidad, reconociendo dones,
conocimientos, etcétera.
iv. Mediante el buen gobierno: El líder tiene que ser
«gobernador».
IV. Se conduce como líder: Nada ocurre o se mueve sin
que haya algún tipo de liderazgo (Nehemías).
i. Desarrolla su inteligencia: Planifica buscando a
Dios y Sus planes.
ii. Canaliza su energía: Sus acciones son dirigidas
por sus metas.
iii. Usa bien su tiempo: Persevera e insiste para
lograr sus metas.
iv. Crece en relaciones: Motiva a su gente y produce
convicción en ella.
3. Dando importancia al ambiente (Cuerpo-Comunidad).
La espiritualidad individual y grupal están unidas. Es imposible
llegar a la madurez completa si uno se separa del grupo grande
de la iglesia, como también de los grupos pequeños. El grupo
afecta al individuo y el individuo afecta al grupo. Realidad básica:
Las personas no funcionan independientemente de una
comunidad. Los grupos los cambian.Hay tres principios
derivados:
I. Las creencias, actitudes, valores y comportamiento son
formados mayormente por el ambiente. La persona
normal necesita un ambiente cristiano para crecer en
forma vital.
II. El ambiente influye más en su crecimiento que los
factores institucionales. Debemos preocuparnos más por
el ambiente que por la forma.
i. Relaciones. Las relaciones significativas dejan
huella en el individuo.
ii. Voluntad propia. Cada persona debe tomar la
decisión de relacionarse con su grupo y con los
individuos que lo forman.
iii. Significado. Mientras más significativo sea el
grupo para los individuos, más cambios producirá
en ello.
III. No podemos esperar que toda la sociedad acepte el
cristianismo. Debemos formar micro comunidades que
hagan posible la vida cristiana.
«Todo cristiano debe tener un ambiente en su vida en el cual el
cristianismo sea aceptado
abiertamente, se hable de él, y se viva, si quiere que su
experiencia cristiana sea realmente vital. Si no tiene esto, toda
su vida como cristiano va a ser débil e inclusive, puede llegar a
desaparecer».
«Los factores ambientales son más básicos para el crecimiento
cristiano que los institucionales, y por lo tanto, la principal
preocupación pastoral debería estar en formar ambientes
cristianos en lugar de reformar las instituciones cristianas.»
«La meta de la iglesia no es tener estructuras, sino tener
personas que están viviendo como cristianos.»
«Las relaciones básicas son necesarias entre los miembros de
una comunidad, si la comunidad y su vida van a significar mucho
para las personas involucradas. Generalmente, sólo cuando una
persona conoce un ambiente a través de una relación personal
con otro individuo, comienza a ser cambiada por el ambiente».
«La vida de una comunidad es débil si cada persona no tiene un
lugar en el cual se pueda expresar personalmente, recibir
atención individual y ser una ayuda para los demás».
«Si un individuo no tiene a algunas personas de la comunidad
para las cuales él es especialmente importante, no va a sentir su
valor para la comunidad en lo más mínimo».
«Un historiador dijo una vez que cuando una religión mundial
pierde su celo misionero, es un signo de que está empezando a
desaparecer. Siguió adelante en su explicación y dijo que
cuando los miembros de una religión dejan de sentir que creer
en ella es importante para otros, es porque ya no sienten que es
importante para ellos mismos. Pronto va a dejar de ser
considerada suficientemente importante como para justificar un
esfuerzo personal en la vida de la persona».
(Todas las citas han sido tomadas del libro Building
Christian Communities, de S.B. Clark).
Para reflexión y discusión:
1. ¿Cuál es la relación entre el liderazgo juvenil y el
crecimiento de su iglesia local?
2. ¿Cuál es su meta y tarea en el liderazgo juvenil?
3. ¿Cómo están llevando a cabo actualmente la tarea de
formar a otros?
4. De las tres maneras que el autor ofrece para cumplir la
tarea formadora, ¿en cuál necesita trabajar más cada
líder y el equipo para que la tarea sea más eficaz? Para
ayudar a responder esta pregunta busque responder las
dos que siguen.
5. ¿Alguno de los principios del rol del líder no se están
siguiendo? ¿Por qué?
6. ¿Cómo discernir si realmente se está dando importancia
al ambiente? ¿Realmente el grupo provee un ambiente en
que cada individuo percibe que es importante para el
grupo? ¿De qué manera se puede desarrollar este tipo de
ambiente? ¿Cuál será la parte de cada líder?
7. ¿Está formando cada líder a alguno de los del grupo?