Querella y Demanda Diego Eduardo Vargas Beltrán
Querella y Demanda Diego Eduardo Vargas Beltrán
Querella y Demanda Diego Eduardo Vargas Beltrán
PRIMER
OTROSÍ: INTERPONE DEMANDA CIVIL DE INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS.
SEGUNDO OTROSÍ: ACOMPAÑA DOCUMENTOS; TERCER OTROSÍ: SOLICITA
SE FIJE NUEVO DÍA Y HORA. TERCER OTROSÍ: SOLICITA RECEPTOR AD-HOC.
CUARTO OTROSÍ: PRIVILEGIO DE POBREZA; QUINTO OTROSÍ: PATROCINIO
Y PODER
LOS HECHOS:
5.- Podrá apreciar US., de los hechos expuestos y que obran en el proceso,
que la causa basal del accidente fue la actitud negligente y descuidada de la
conductora querellada, quien no estuvo atenta a las condiciones del tránsito, y que
transitaba a exceso de velocidad, obviando la señalización de viraje realizada por la
conductora de mi vehículo. Y aún más, el hecho de transitar sin la debida
documentación al día del vehículo, ya que atendidos estos antecedentes no debió
transitar en ese lugar sin documentación para ello, siendo de su exclusiva
responsabilidad el accidente y los daños ocasionados.
EL DERECHO:
LOS HECHOS:
a) Daño emergente:
Corresponde al monto de reparación de mi vehículo, por la suma de
$1.000.000.-
b) Daño moral:
En este ítem debo de señalar la afectación emocional que los hechos
descritos me han causado, así como la frustración que nace de no poder
utilizar mi vehículo para los fines previstos, puesto que he tenido que
privarme de realizar viajes en familia en verano, así como cargar con la
afección diaria y estrés que al que me he sometido en las respectivas
reparaciones.
Es necesario recalcar SS., que el daño en sus términos generales, “Es todo
detrimento o menoscabo que una persona experimenta tanto en su persona
como en sus bienes”, esto es, la pérdida de un beneficio de índole material
o moral, patrimonial o extrapatrimonial, bastando con que la víctima haya
sido privada como consecuencia del hecho ilícito, de una legitima ventaja, o
de un simple interés licito, para lo cual, siendo el daño un elemento esencial
del ilícito civil, se hace imperiosa la necesidad de obligar al autor del daño, a
indemnizar todos los perjuicios patrimoniales y extrapatrimoniales que
genera una situación tan injusta como esta.
El daño para que sea resarcible, debe ser cierto, debe ser real y efectivo, de
manera que el daño que logro acreditar en estos autos cumple con todos los
requisitos para ser indemnizado.
Al respecto la Corte de Apelaciones de Santiago, en Fallo de fecha 30 de
agosto de 1950, precisó que “la certidumbre del daño implica que éste ha
de ser real y efectivo, tanto que, a no mediar el, la victima habría hallado en
mejor situación”, la misma sentencia aclara que “la certidumbre de daño
dice relación con su realización, con el hecho de que haya ocurrido
realmente y no con su cuantía, ni la mayor o menor facilidad para
determinarla o apreciarla. Tampoco deja de serlo por la mayor o menor
dificultad para acreditarlo, la certidumbre del daño dice relación con su
existencia y no con su prueba”.
Dado lo anterior, es que solicito a SS., como indemnización de daño moral,
la suma de $500.000.-
EL DERECHO.
3.- Por último, cabe hacer presente a Us, que la demandada cuenta con
plena capacidad delictual en la ocurrencia de estos hechos por cuanto se cumplen
todos y cada uno de los requisitos para el ejercicio de esta acción.
TERCER OTROSÍ: Vengo por este acto en solicitar que para dar estricto
cumplimiento a lo dispuesto por la ley, relativo a la notificación de la presente
demanda, solicito se reagende la audiencia decretada en autos y se fije nuevo día
y hora para la misma.-
SEXTO OTROSI: Ruego a US., tener presente que confiero patrocinio y poder al
Abogado de la Corporación de Asistencia Judicial del Bio Bio, Consultorio Jurídico
de Padre Las Casas, don HERNÁN FELIPE SANDOVAL ALARCÓN, cédula de
identidad Nº 18.434.451-3, quien a su vez delega poder a la postulante doña
DEYANIRA IGNACIA NEIRA BASTÍAS, cédula de identidad Nº 18.874.104-5,
ambos domiciliados en calle Lord Cocharane Nº 1595, de la Comuna de Padre Las
Casas, a quienes confiero poder con todas y cada una de las facultades
consagradas en ambos incisos del artículo 7 del Código de Procedimiento Civil, las
que doy expresamente por reproducidas.