Trastorno de La Personalidad

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 5

TRASTORNO DE LA PERSONALIDAD PARANOIDE.

Estas personas se caracterizan por ser suspicaces, desconfiados, cautelosos,


vengativos y responden con ira al interpretar que los actos de los demás cursan con
engaño, desaprobación y traición. Protagonizan constantes conflictos con su cónyuge
debido a su elevada predisposición a los celos patológicos y poseen una actitud
autorreferencial constante tendiendo a sentirse agraviados, por lo que suelen incurrir
en injurias, falsas denuncias.

En cuanto a la imputabilidad, en este tipo de trastornos es muy común que la


capacidad cognoscitiva y la volitiva estén afectadas ya que son personas que suelen
tener muy presentes síntomas alucinatorios o delirantes, estos hacen que su
pensamiento se vea alterado, con la consiguiente alteración de su conducta y por su
puesto de su voluntad. Por ello es importante saber que su imputabilidad podrá verse
afectada ya que en ellos pueden estar alteradas las capacidades que responsabilizan
a las personas de sus actos.

Los individuos con este trastorno dan por hecho que los demás se van a aprovechar
de ellos, les van a hacer daño o les van a engañar, aunque no tengan prueba alguna
que apoye estas previsiones.

CARACTERISTICAS

Estas personas acuden de manera repetitiva a los tribunales para plantear quejas,
reclamaciones o denuncias, convirtiéndose en verdaderos pleitistas.

Los actos delictivos más probables en estos sujetos son los delitos contra las
personas, particularmente lesiones, homicidios, asesinatos, que rara vez no llevan
aparejada violencia y generalmente cometen también actos contra el orden social o
jurídico.

TRASTORNO DE LA PERSONALIDAD EZQUISOTIPICO

El trastorno esquizotípico de la personalidad es un patrón general de déficit sociales e


interpersonales caracterizados por un malestar agudo y una capacidad reducida para
las relaciones personales, así como por distorsiones cognoscitivas o perceptivas y
excentricidades del comportamiento. Este patrón comienza al inicio de la edad adulta y
se observa en diversos contextos.

Los individuos con trastorno esquizotípico de la personalidad suelen tener ideas de


referencia (por ejemplo, interpretaciones incorrectas de incidentes casuales y
acontecimientos externos como poseedores de un significado especial e inhabitual
específico para esa persona).

TRASTORNO DE PERSONALIDAD ESQUIZOIDE.

El Trastorno Esquizoide de la Personalidad suele estar caracterizada por el


aislamiento social y la evitación de actividades sociales y de relaciones
interpersonales. Estas personas suelen organizar sus vidas para evitar el contacto con
otras personas. Este patrón comienza al principio de la edad adulta y se da en
diversos contextos.

Los sujetos con trastorno esquizoide de la personalidad no demuestran tener deseos


de intimidad, parecen indiferentes a las oportunidades de establecer relación

es personales y no parece que les satisfaga demasiado formar parte de una familia o
de un grupo social. Prefieren emplear el tiempo en sí mismos, más que estar con otras
personas. Suelen estar socialmente aislados o ser «solitarios» y casi siempre escogen
actividades solitarias o aficiones que no requieran interacciones con otras personas.

TRASTORNO ANTISOCIAL DE LA PERSONALIDAD.

El trastorno antisocial o disocial de la personalidad, es una condición psiquiátrica que


se define acertadamente por una conducta persistente de manipulación, explotación o
violación de los derechos que se desarrolla a temprana edad, afirmó Murillo.

“Los niños o adolescentes con este tipo de personalidad suelen incumplir ciertas
normas sociales, pasando por encima del adulto, vulnerando cualquier derecho básico
de su entorno, al punto de implicar también comportamientos criminales, si los tutores
no corrigen a tiempo cualquier acto exagerado por parte de los pequeños”,

La característica esencial del trastorno antisocial de la personalidad es un patrón


general de desprecio y violación de los derechos de los demás, que comienza en la
infancia o el principio de la adolescencia y continúa en la edad adulta. Este patrón
también ha sido denominado psicopatía, sociopatía o trastorno disocial de la
personalidad.

Para que se pueda establecer este diagnóstico el sujeto debe tener al menos 18 años
y tener historia de algunos síntomas de un trastorno disocial antes de los 15 años. El
trastorno disocial implica un patrón repetitivo y persistente de comportamiento en el
que se violan los derechos básicos de los demás o las principales reglas o normas
sociales apropiadas para la edad.

Estos sujetos son los que más delinquen y por tanto son los que mayor alarma social
producen. Su falta de sentimiento de culpa se traduce en todo tipo de justificaciones
para sus actos, de modo que se muestra a sí mismo como incomprendido o víctima de
la sociedad, guiándose siempre por sus propias reglas.

Robos, agresiones, chantajes, estafas, violaciones y hasta homicidios o asesinatos.


Impulsivos por naturaleza, no miden el peligro ni las consecuencias de sus acciones,
incurriendo repetidamente en actos arriesgados para sí mismos y para los demás.

Respecto a la imputabilidad del trastorno antisocial de la personalidad, el tema ha sido


muy debatido, sin embargo, la realidad es que, en sentido estrictamente jurídico-
psicológico estos sujetos tienen conocimiento de la ilicitud de sus acciones y voluntad
clara de infringir la norma legal.

TRASTORNO LÍMITE DE LA PERSONALIDAD

Estas personas suelen presentar una marcada sensación de vacío y aburrimiento, se


implican en relaciones intensas e inestables (pasando de la idealización de la persona
a su devaluación), realizando continuos intentos y amenazas suicidas con
autolesiones recurrentes. Además suelen manifestar frecuentes cambios de humor.

Estas personas suelen tener como consecuencia de su trastorno reacciones de ira


inapropiada, conductas violentas y agresividad impulsiva reactiva a situaciones
estresantes o al ser criticados por otras personas, Tienden a frustrarse con frecuencia
y sufren profundos sentimientos de abatimiento, apatía, vergüenza y culpabilidad.

Los delitos pueden estar relacionados con robos, pequeños hurtos, conducción
peligrosa, actividades sexuales de alto riesgo y actos violentos. La mayoría de estas
acciones son llevadas a cabo por un intento de ser queridos o ser integrados en un
grupo.

Hay datos que muestran que las personas con trastorno límite de la personalidad
puede actuar sin que pueda controlar su conducta (alteración de la voluntad) e incluso
en ocasiones debido a episodios psicóticos breves (alteración del juicio de realidad),
por lo que la imputabilidad se ve directamente cuestionada.

TRASTORNO NARCISISTA DE LA PERSONALIDAD.


El trastorno narcisista de la personalidad se podría definir como un patrón general de
grandiosidad, necesidad de admiración y falta de empatía (capacidad de “conectar”
emocionalmente con los demás) que empieza al principio de la edad adulta y se da en
diversos contextos.

Uno de los mayores problemas en este tipo de personas, es la dificultad para ser
conscientes de su trastorno. Se aman tanto a sí mismos que son incapaces de
apreciar errores o conductas disfuncionales en ellos mismos. Es un trastorno que está
muy asociado también a la personalidad psicopática.

Se caracterizado por un patrón generalizado de grandiosidad en la fantasía o en el


comportamiento, necesidad de admiración y falta de empatía, que empieza en la
adultez temprana y se representa en diversos contextos.

TRASTORNO HISTÉRICO DE LA PERSONALIDAD

Se define como un patrón generalizado de excesiva emocionalidad y búsqueda de


atención. Dicho patrón se inicia en la adultez temprana y se manifiesta en una
variedad de contextos.

Algunos criterios que se toman en cuenta para diagnosticar este trastorno son los
siguientes:

El paciente se incomoda en situaciones no es el centro de atención.

Muestra labilidad emocional y una expresión superficial de las emociones.

Utiliza la apariencia física de manera consistente para llamar la atención.

El Paciente habla con un estilo excesivamente impresionante para los demás, pero
carece de detalles.

Dramatiza “actúa" y exagera las expresiones emocionales.

Por menciona solo algunas.

TRASTORNO DE LA PERSONALIDAD POR EVITACIÓN

El trastorno de la personalidad por evitación es un patrón generalizado de inhibición


social, sentimientos de inadecuación e hipersencibilidad hacia la evaluacion negativa,
la cual se inicia en la edad adulta. También hace referencia que en un porcentaje de
iguales en el trastorno se puede dar de igual forma en varones como en mujeres.
Algunas de las características de este trastorno son las siguientes.

Evita el contacto con personas en actividades de colegio o trabajo

Resistirse o negarse a aceptar ascensos o nuevas relaciones por el miedo a la crítica


potencial o el rechazo.

Demuestra contención, dificultad para hablar de sí mismo, y la necesidad de cariño por


destacar solo algunos.

TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO DE LA PERSONALIDAD.

Se define el trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad como una preocupación


por el orden, el perfeccionismo y el control mental interpersonal, a expensas de
flexibilidad, espontaneidad y eficacia. Aunque señala que el patrón se inicia en la
adultez temprana, no comenta de los orígenes de este trastorno ni hace referencia a
su aparición en la niñez.

TRASTORNO HISTRIÓNICO DE LA PERSONALIDAD:

La personalidad histriónica está especialmente caracterizada por la afectividad.


Aquellos marcados por esta tendencia suelen ser bastante demandantes de la
atención y la aceptación de los demás, utilizando normalmente la seducción como
mecanismo para conseguirlo. Estas personas tienden a la teatralidad, representando
un papel y realizando actividades que les permita ser el centro de atención. Son
personas preocupadas en exceso por su aspecto físico, que necesitan ser apreciados
por los demás así como altamente sugestionables y desarrolladores de actitudes
seductoras y expresiones exageradas de sus emociones.

Lo más probable es que si este tipo de personas llegan a un juzgado sea para poder
llamar la atención y por una necesidad suya propia más que por que ellos hayan
cometido un delito. Para que estas personas consigan una eximente sobre su delito
debe haber en su conducta delictiva algo más que no sea este trastorno, algo que
haga que el sujeto pierda alguna de las dos capacidades, la cognoscitiva y/o la
volitiva)

También podría gustarte