Tamizaje NRS 2002 y VGS
Tamizaje NRS 2002 y VGS
Tamizaje NRS 2002 y VGS
Primera Etapa:
Tamizaje Inicial. Evalúe en la admisión del paciente las siguientes preguntas:
Facultad de Nutrició n, campus Xalapa, Universidad Veracruzana
PREGUNTAS SI NO
I.M.C < 20.5
¿El paciente ha perdido peso en los
últimos 3 meses?
¿El paciente ha reducido su ingesta
en la dieta en la última semana?
¿Es un paciente grave?
Los datos obtenidos deben ser interpretados por un nutriólogo quien define si se
continúa con la segunda etapa de la evaluación.
Segunda Etapa:
Valoración del Riesgo Nutricional
A+B+C= Riesgo Nutricional; en donde:
A = Daño al estado Nutricio
B = Severidad de la Enfermedad
C = Edad
Valoración del Riesgo Nutricional
Score 1: Pacientes con enfermedades crónicas, quienes han sido ingresados por
complicaciones secundarias a su enfermedad. Pacientes que por lo general
deambulan. Requerimientos de proteínas pueden estar incrementados, pero
pueden ser cubiertos a través de una dieta convencional o a través de
suplementos nutricionales como sucede en la mayoría de los casos.
Score 2: Pacientes encamados como consecuencia de su enfermedad.
Requerimientos de proteínas se encuentran levemente incrementados, pero
pueden ser cubiertos; aunque la Nutrición Artificial es requerida en la mayoría de
los casos.
Score 3: Pacientes en cuidados intensivos, con ventilación mecánica. Los
requerimientos se encuentran incrementados, demandas que en algunos casos
son difíciles de cubrir a pesar de manejarse con nutrición artificial.
ENTREVISTA CLINICA:
La entrevista clínica debe obtener información subjetiva en cinco campos
diferentes:
1. Peso corporal: La pérdida de peso corporal es un indicador significativo de
problemas en el estado nutricional. Es importante saber si las pérdidas han
ocurrido en los seis meses anteriores a la entrevista o en las dos últimas semanas.
La pérdida gradual de peso puede indicar una enfermedad cónica o un cambio en
la dieta. Pérdidas importantes en las dos últimas semanas, en cambio suelen
señalar un riego mayor de desnutrición.
2. Cambios en los hábitos alimentarios: Los cambios en los hábitos
alimentarios contribuyen al estado nutricional. Las personas cuyos hábitos
alimentarios han cambiado como consecuencia de la enfermedad están en riesgo
de desnutrición.
3. Síntomas gastrointestinales: Los signos y síntomas gastrointestinales que
persisten por más de quince días pueden colocar a la persona en riesgo de
desnutrición. La diarrea o vómito de corta duración pueden ser un problema
menor, pero si se prolongan se les debe prestar atención.
4. Capacidad funcional o nivel de energía: Las personas enfermas pueden estar
débiles y carecer de la motivación para mantener su actividad física. Pueden
cansarse con facilidad. Por ello, se les debe interrogar acerca de su actividad
física de rutina.
5. Impacto de la enfermedad: Muchas enfermedades cambian las exigencias
metabólicas del organismo. En la mayoría de las situaciones, la persona enferma
tiene aumentado su requerimiento de calorías y de proteínas, pero algunas
enfermedades pueden disminuir la actividad metabólica y por ello la persona
necesitará menos nutrientes.
EXAMEN FISICO
Para completar la VGS, se realiza un examen físico básico. Basta el simple
examen de la grasa corporal y la masa muscular, junto con la presencia de
edemas, para sospechar si hay o no riesgo de desnutrición en ese paciente. Los
signos físicos buscados son:
Pérdida de la grasa subcutánea
Edema de los tobillos
Pérdida de la masa muscular
Edema de la región sacra
Ascitis
Los parámetros valorados del examen físico se clasifican en normal, déficit
moderado o déficit severo. La perdida de grasa subcutánea se evalúa en la región
del tríceps y en la línea axilar media al nivel de las costillas inferiores, no se trata
de una evaluación precisa sino de una impresión subjetiva del grado de pérdida de
tejido celular subcutáneo. La atrofia muscular se busca en la región temporal,
deltoides y en el muslo (cuádriceps) evaluando pérdida de masa y tono muscular
mediante palpación, la presencia del déficit neurológico puede alterar esta
valoración. Se debe anotar la presencia de edemas sacro, maleolar, y ascitis,
teniendo en cuenta que enfermedades renales o cardiacas pueden producir las
Facultad de Nutrició n, campus Xalapa, Universidad Veracruzana
Todos los datos anotados permiten categorizar a cada paciente como: A = Bien
nutrido, B = Sospecha de desnutrición o desnutrición moderada, C = Desnutrición
severa. Esta clasificación se basa en un juicio subjetivo. Información dudosa o
errónea tiene menos valor que los datos precisos. La valoración del peso se debe
hacer considerando las desviaciones de los compartimentos hídricos por
enfermedad o por tratamiento. En general, un paciente que ha presentado pérdida
de peso y de masa muscular, pero recibe una ingesta adecuada y se encuentra
recuperando su peso, sé clasifica como A = Bien nutrido. Un paciente con pérdida
moderada de peso de patrón continuo, disminución persistente de su ingesta,
incapacidad funcional progresiva y con una enfermedad de estrés moderado, debe
ser clasificado como B = Desnutrición moderada. Un paciente con pérdida severa
de peso, ingesta disminuida, incapacidad funcional progresiva y pérdida de masa
muscular, se clasifica como C = Desnutrición severa independientemente de su
proceso patológico.
La información obtenida a partir de la VGS se debe resumir en un formato de
valoración nutricional y colocar en la historia del paciente. Esta información se
puede revisar y modificar a medida que se controla continuamente el impacto de la
terapia nutricional.