TFM 2019 LopezCastillo Paula PDF
TFM 2019 LopezCastillo Paula PDF
TFM 2019 LopezCastillo Paula PDF
0. Resumen 3
1. Marco teórico 5
1.1 Concepto de apego 5
1.2 Determinantes del apego 7
1.3 Apego y vulnerabilidad psicopatológica 10
1.4 Apego y conductas de riesgo 18
2. Planteamiento del problema 28
2.1 Justificación 28
2.2 Preguntas de investigación 30
2.3 Objetivos 30
3. Metodología 31
3.1 Fuentes de información 31
3.2 Criterios de selección 32
3.3 Selección de artículos 33
4. Resultados 34
5. Conclusiones 62
6. Referencias 64
2
RESUMEN
Según la teoría del apego, las experiencias tempranas de los niños con sus padres
tienen una importancia fundamental en su capacidad posterior para establecer
vínculos afectivos y en la regulación de su sistema emocional.
El propósito de este trabajo es realizar una revisión sistemática acerca de los estilos
de apego y su influencia en el desarrollo en la adolescencia, en concreto, la relación
que este vínculo tiene en el desarrollo de vulnerabilidad psicopatológica y las
conductas de riesgo en la adolescencia. Para cumplir con este objetivo se revisaron
los principales conceptos teóricos relevantes del apego y los tipos de apego.
Posteriormente, se revisaron las contribuciones recientes sobre su relación con el
desarrollo emocional, la vulnerabilidad psicológica y las conductas de riesgo (el
consumo de sustancias, la conducta antisocial/delictiva y la conducta sexual). En
concreto se revisaron 29 artículos científicos que cumplieron con los criterios de
búsqueda, desde el 2000 hasta el 2019, obtenidos de las siguientes bases de datos:
Scopus, PsyArticles, Pubmed y Dialnet. La búsqueda tuvo lugar desde octubre de
2018 hasta junio de 2019, obteniendo una muestra de unos 7738 adolescentes. Los
resultados en base a los estudios seleccionados indican que la familia es crucial en el
desarrollo del niño y que el estilo de apego tiene un efecto protector y/o de riesgo para
el desarrollo emocional, social y cognitivo, especialmente durante la adolescencia, una
etapa crítica en la que se producen cambios a todos los niveles y donde la asunción
de riesgos es más evidente. El apego seguro es un factor de resiliencia psicológica,
mientras que el apego inseguro es un factor de riesgo psicológico y de vulnerabilidad a
las conductas de riesgo.
3
ABSTRACT
According to attachment theory children’s early experiences with their parents have
fundamental importance in their later ability to establish affective bonds and in the
regulation of their emotional system.
The purpose of this article is to make a systematic review of the literature about
attachment styles and their influence on adolescence development, in particular, the
relationship that this link has in the development of psychopathological vulnerability,
and risky behaviour. To fulfill this objective, we begin by presenting the main theoretical
approach of attachment and later, we will review the recent contributions on their
relationships with emotional development, psychological vulnerability and risky
behaviour, in particular, substance use, antisocial/criminal behaviour and sexual
behavior. Specifically, 29 scientific articles were reviewed from 2000 to 2019, obtained
from the following databases: Scopus, PsyArticles, Pubmed and Dialnet. The search
took place from october 2018 to june 2019, obtaining a simple about 7738 adolescents.
The results indicate that family is crucial in the child’s development and attachment
style has a protective and/or risk effect on emotional, social and cognitive development,
especially during adolescence, a critical stage in which changes occur at all levels and
where risk taking is most evident. Secure attachment is a factor of psychological
resilience, while insecure attachment is a factor of psychological risk and vulnerability
to risky behaviour.
4
1. MARCO TEÓRICO
Puede considerarse al apego como un vínculo afectivo que une a una persona
con otra a través del tiempo y la distancia (Ainsworth, 1979- citado en Cordellat y
Botella, 2007).
5
citados en Oliva, 2004) diseñaron y aplicaron un programa experimental para evaluar
la calidad del vínculo afectivo que existía entre los niños y sus cuidadores, al que llamó
la Situación Extraña. En ella trataba de examinar la relación existente entre las
conductas de apego y de exploración, bajo condiciones de elevado estrés, con el
objetivo de evaluar la forma en que los niños utilizaban a los adultos como fuente de
seguridad para explorar el ambiente, y qué ocurría en momentos de separación y
reunión con la figura del cuidador. A través de este experimento identificó tres estilos
de apego diferenciados, a cada uno de los cuales les correspondía un patrón
conductual característico: apego seguro, apego inseguro-evitativo y apego
inseguro-ambivalente.
6
figura del cuidador está disponible solo en ciertas ocasiones. Las personas con este
tipo de apego suelen presentar fluctuaciones conductuales en situaciones de
separación, son muy sensibles, con pocas habilidades sociales, con tendencia a ser
dependientes de los demás, impulsivos y con poca tolerancia a la frustración, así como
personas muy inseguras y poco asertivas (Adriá, 2008).
Bowlby (1988- citado en Dávila, 2015) ya resaltó la importancia que tenían las
primeras interacciones que se producían entre el niño y el adulto responsable de su
crianza, puesto que éstas iban a ser el primer ambiente que vivía el niño e iban a
marcar su forma de actuar en el grupo social y cultural. Estas interacciones marcarán
la forma de interpretar las experiencias y orientarán las conductas de apego futuras.
Por ello, la familia tiene un papel crucial en la formación de los modelos
representacionales o modelos de funcionamiento interno, los mismos que regularán la
conducta futura del niño con el entorno (Musitu, Buelga, Lila y Cava, 2001- citados en
Dávila, 2015).
1.2.1 La familia
Así pues, la familia tiene un papel clave en el desarrollo del niño, es el primer
grupo de referencia donde éste aprende, forma sus primeros lazos afectivos y
conforma sus valores y creencias sobre el mundo (Minuchin, 1968- citado en Cordellat
y Botella, 2007), es decir, es la base para el desarrollo socio-emocional y cognitivo del
individuo.
Sin embargo son varios los aspectos dentro de la familia que determinarán el
estilo de apego establecido.
7
En primer lugar, el sistema de apego establecido entre el niño y sus cuidadores
influye y es influenciado por el contexto familiar, como es la relación de pareja o las
relaciones entre los hermanos, entre otros. De ahí que en el desarrollo saludable de
este vínculo intercedan diversos factores y se vea afectado por situaciones de crisis
(discusiones, separaciones, maltrato, patología en alguno de los padres).
También las características del cuidador son importantes en el establecimiento
del apego, en concreto la sensibilidad materna y la capacidad de respuesta del adulto
con respecto a las necesidades del bebé (Botella, 2005).
8
1.2.2 Estilos de crianza
Los estilos de crianza son otro aspecto a tener en cuenta como variable
diferenciadora.
9
1.3 Adolescencia, apego y vulnerabilidad psicopatológica
A lo largo de la literatura han sido muchas las variables que se han estudiado
en relación al estilo de apego y su influencia en el desarrollo emocional o
vulnerabilidad de los adolescentes. A continuación se exponen las investigaciones que
relacionan el estilo de apego con las emociones más frecuentes, las habilidades de
regulación emocional y su relación con acontecimientos vitales negativos, así como
con la vulnerabilidad psicopatológica.
10
1.3.1 El apego y las emociones
Kochanska (2001- citado en Garrido-Rojas, 2006) señaló que las personas con
un apego inseguro-ambivalente respondían de forma más temerosa no solo a
estímulos que producían temor, sino también a estímulos elicitadores de alegría. A
este respecto, Mikulincer et al. (2003- citados en Garrido-Rojas, 2006) observaron
características como la alta ansiedad y evitación, fuerte necesidad de cercanía,
preocupaciones en las relaciones sociales y miedo a ser rechazados, así como un
acceso rápido a recuerdos dolorosos, propagando así la emoción negativa. Al parecer,
las emociones más relacionadas con este patrón de apego eran preocupación, miedo
a la separación (Lecannelier, 2002- citado en Garrido-Rojas, 2006), baja tolerancia al
dolor (Valdés, 2002), emociones de rabia, enojo, estrés, culpa, miedo, nerviosismo,
afecto depresivo y menores niveles de calma (Kerr, Melley, Travea y Pole, 2003-
citados en Garrido-Rojas, 2006).
11
1.3.2 El apego y la regulación de las emociones
Así pues, las personas con apego seguro son capaces de expresar sus
emociones, exhiben curiosidad e interés por la exploración, en situaciones de afecto
intenso modulan su excitación y son muy flexibles, adecuando la expresión de sus
impulsos y emociones al contexto, así como acuden a otros cuando sus capacidades
fallan (Sroufe, 2000-citado en Garrido-Rojas, 2006). Este tipo de apego también
correlaciona de forma negativa con las emociones negativas y con la tendencia a que
los afectos negativos recorran la conciencia (Magai, Hunziker, Mesias y Culver, 2000-
citados en Cordellat y Botella, 2007).
12
Los adolescentes inseguros evitaban fijar la mirada en las imágenes con contenido
emocional negativo en etapas tempranas del procesamiento de la información
emocional.
Esta evitación podría ser producto de una estrategia defensiva en la filtración de
información emocional negativa, en la línea de investigaciones previas que sugieren el
estilo de apego está relacionado con la forma en que se procesa la información
amenazante y se suprime el confort (Dewitte y Koster, 2014; Vandevivere, Braet,
Bosmans, Mueller y De Readt, 2014- citados en Szymanska et al., 2019), resaltando la
tendencia de los adolescentes inseguros a enfatizar la presencia y la gravedad de las
amenazas percibidas y a prestar preferente atención a las emociones negativas.
Las personas con un apego evitativo, rechazan toda aquella información que
les puede ocasionar confusión, cerrando sus esquemas a ésta y teniendo estructuras
cognitivas rígidas. Desarrollan modelos de sí mismos como suspicaces y retraídos, y
de los otros como poco confiables o demasiado ansiosos para comprometerse, lo que
les imposibilita confiar en los demás.
13
1.3.4 El apego y la vulnerabilidad psicopatológica
14
presentaban mayores niveles de psicopatología y mayor tendencia a presentar estilos
de apego inseguros.
Cordellat y Botella (2007) analizaron la relación que existía entre los estilos de
apego, los síntomas depresivos y los acontecimientos vitales negativos, y concluyeron
que existía una conexión significativa entre los patrones de apego inseguros, la
sintomatología depresiva y los acontecimientos vitales negativos, en la línea de lo
obtenido en gran parte de la literatura. Los estilos de apego más fríos se relacionaban
con mayor sintomatología depresiva, mientras que los hijos de madres que
expresaban emociones positivas tenían más respuestas adaptativas frente los
acontecimientos vitales. También encontraron que a mayor afecto materno y paterno,
disminuía la sintomatología depresiva.
15
predijo un menor riesgo de tener trayectorias caracterizadas por mayor sintomatología
depresiva.
Ya Bowlby (1993- citado en Cordellat y Botella, 2007) planteaba que las
relaciones tempranas, estrechas y profundas, ejercen un efecto protector frente a
posteriores acontecimientos vitales e impacto negativo.
En la misma línea apuntan Molero, Sospedra, Sabater y Pla (2011) que la
calidad de las experiencias tempranas ejerce una influencia significativa en las
interacciones sociales en etapas adolescentes. De la misma forma que las
experiencias negativas o la falta de expresión, comunicación o estimulación por parte
de la madre, pueden ser un factor de riesgo para el adecuado desarrollo socio-
emocional y cognitivo.
Parece probado que los apegos inseguros están asociados con mayor
probabilidad a posteriores patologías. De hecho, los cambios familiares que amenazan
la disponibilidad de las figuras de apego, están relacionados con desórdenes
emocionales y conductuales en la adolescencia, así como con trastornos de la
personalidad en adultos jóvenes. Lewis, Feiring y Rosenthal (2000) afirman que en las
familias con jóvenes que tienen trastornos de conducta y drogodependencias, la
relación de apego padres-hijos está seriamente dañada. Y es que cuando otros
significativos no están disponibles o no responden a las necesidades del individuo no
logrando la seguridad del apego, se forman representaciones negativas del sí mismo y
de los otros, y se desarrollan estrategias de regulación afectiva distintas a la búsqueda
de proximidad (Mikulincer et al., 2003- citados en Garrido-Rojas, 2006).
16
Celedón et al. (2016) llevaron a cabo un estudio que relacionaba los estilos de
apego en jóvenes con rasgos psicopáticos y antisociales. En él encontraron que el
apego inseguro conducía a sesgos hostiles en la percepción del otro, dando lugar a
reacciones de agresividad, viendo que aquellos jóvenes con altos rasgos psicopáticos
estaban asociados al apego ansioso y evitativo. Estos jóvenes eran reticentes a
relacionarse con otras personas, eran introvertidos y presentaban altos niveles de
hostilidad, agresividad y distancia emocional.
Otro estudio reciente (Nunes y Mota, 2017) relacionó estilos parentales, estilos
de apego e ideación suicida en un grupo de jóvenes y se observó una clara asociación
entre un estilo paternal autoritativo y un estilo maternal permisivo con ideación suicida.
Así pues, la calidad del vínculo emocional con los padres está asociada de forma
17
positiva con un estilo parental autoritario y negativamente con los estilos autoritativos y
permisivos e ideación suicida. De hecho, estos autores manifiestan que la ansiedad
por separación se asocia de forma positiva con el estilo autoritativo, mientras que la
inhibición de la exploración y la individualidad lo hace negativamente. Sin embargo
destacan que estilo autoritario no es el autoritativo, caracterizado por conductas
estrictas, castigo y con baja capacidad de respuesta afectuosa, siendo este último el
relacionado con la promoción de la inseguridad del vínculo, incrementando así el
riesgo de ideación suicida.
18
y con comportamientos de riesgo en el ámbito de las relaciones sexuales (Gómez-
Zapiain, Ortiz y Eceiza, 2016).
En esta revisión nos vamos a centrar en tres de las conductas de riesgo más
frecuentes: el consumo de sustancias, la conducta antisocial y las conductas sexuales.
Jones, Ehrlich, Lejuez y Cassidy (2015) estudiaron la relación que existía entre
el conocimiento paterno sobre las actividades adolescentes, el estilo de apego y el uso
de sustancias en adolescentes. En su investigación encontraron que el conocimiento
paterno sobre los quehaceres de sus hijos adolescentes era el predictor más robusto
de las conductas de riesgo. Más aún, era el estilo de apego inseguro hacia ambos
padres el que estaba asociado negativamente con el conocimiento parental tanto
autoinformado como informado por los adolescentes y con el uso de sustancias.
19
adolescencia, actuando el apego seguro como factor de protección y el apego
inseguro como factor de riesgo (De Lucas, Taracena y Montañés Rada, 2006- citados
en Becoña et al., 2014).
De esta forma, un bajo apego parental está relacionado significativamente con
mayor consumo de alcohol, marihuana y otras drogas (Kostelecky, 2005- citado en
Becoña et al., 2014).
20
Foshee y Bauman (1994- citados en Becoña et al., 2014), con respecto a la
influencia del vínculo con el consumo, refieren que el apego hacia la madre predice el
consumo de sustancias al inicio de la adolescencia y el apego hacia el padre lo
predecirá en la adolescencia tardía. Sin embargo otros autores consideran que el
apego hacia los padres está relacionado de forma significativa con el uso de
sustancias desde la adolescencia hasta la adultez temprana (Brook, Whiteman, Finch
y Cohen, 1998- citados en Becoña et al., 2014).
Si bien es cierto que la calidad del apego está relacionada con el consumo de
sustancias, como hemos visto a lo largo de diferentes investigaciones, también están
fuertemente relacionadas otras variables como acontecimientos vitales negativos,
características individuales o las influencias de otras fuentes de apego como es el
grupo de iguales, siendo esta última el factor que mejor predice el consumo de drogas
en los adolescentes (Swadi, 1999- citado en Becoña et al., 2014) y que explicarían
algunas disparidades en los resultados de los distintos estudios. Y es que, son varias
las investigaciones que afirman que la relación entre el apego parental y el uso de
sustancias está modulado por la influencia de los iguales (Bahr, Hoffmann y Yang,
2005; McArdle et al., 2002- citados en Becoña et al., 2014).
Por lo que respecta a otra de las conductas de riesgo que nos ocupan, la
conducta antisocial o delictiva, en un metaanálisis llevado a cabo por Hoeve et al.
(2012) expusieron que existen dos grandes teorías sobre la relación entre el apego y
la delincuencia: la teoría del control social de Hirschi y la teoría del apego de Bowlby y
Ainsworth.
Según Hirschi (1969- citado en Hoeve et al., 2012), el apego es un vínculo
afectivo a través del cual las personas internalizan las normas sociales, por lo que
hipotetizaba que los niveles de delincuencia serían inferiores en familias con fuertes
vínculos afectivos, ya que los adolescentes con vínculos seguros tendrían más
cuidado en cumplir con las expectativas de sus padres, protegiéndose así de los
impulsos antisociales.
La teoría del apego consideraba que si se interrumpía la relación de apego
durante la infancia, las consecuencias negativas a largo plazo son la incapacidad para
demostrar afecto o preocupación por los demás, así como una conducta agresiva y
delincuente. De ahí que Bowlby (1976- citado en Hoeve et al., 2012) afirmara que el
apego inseguro se constituía como un factor de riesgo en el desarrollo de conductas
antisociales.
21
También Winnicott (1991- citado en Hoeve et al., 2012) consideraba que el
punto de partida para comprender las conductas antisociales tenía su origen en el
desarrollo emocional del sujeto con sus figuras significativas. Y es que como bien
explica esta autora, el adolescente con conducta antisocial busca en la sociedad lo
que en su familia no consigue, el vínculo de seguridad. Al no disponer de vínculos
seguros de referencia, los jóvenes configuran su propia normatividad e inseguridades,
lo que pueden potenciar conductas antisociales.
Son múltiples los estudios que han relacionado los diferentes estilos de apego
con conductas antisociales o transgresoras, llegando a conclusiones muy similares
relacionadas con la correlación significativa entre estas conductas y deficiencias en el
vínculo de apego.
En otro estudio se encontró que el apego hacia los padres y el conflicto familiar
eran dos variables fundamentales para establecer diferencias entre delincuentes y no
delincuentes (Mirón, Luengo, Sobral y Otero, 1988). En concreto, las familias de
adolescentes infractores se caracterizaban por tener un bajo nivel de cohesión y alto
nivel de conflicto. Por lo que respecta a las relaciones con sus padres, la relación con
el padre es especialmente relevante para los adolescentes varones, dado que una
relación inadecuada puede llevar asociada una ausencia de modelos de rol; sin
22
embargo la relación con la madre también es muy importante. También observaron
que tanto la ausencia de supervisión como el exceso de control, en la adolescencia,
podían actuar promoviendo la conducta delictiva.
Uno de los estudios más amplios sobre conducta criminal (McCord, McCord y
Zola, 1959- citados en Celedón et al., 2016) reporta una fuerte relación entre la
presencia de conducta psicopática y la privación emocional que produce el conflicto
con los padres, la crueldad, el castigo errático y la falta de reconocimiento.
23
iguales y respaldados por las figuras de apego mostrarán más propensión a
comportamientos saludables (Markham et al., 2010- citados en Gómez-Zapiain et al.,
2016).
Esos mismos autores, en un metaanálisis encontraron que la mayor parte de las
investigaciones confirmaban que la vinculación con la familia, el control parental y la
comunicación con los padres e iguales sobre temas sexuales, se relacionaban
inversamente con los comportamientos sexuales de riesgo.
Con respecto al apego seguro, varios autores lo han asociado con ciertas
conductas como el inicio más tardío en la actividad sexual que los inseguros (O’Beirne,
1999- citado en Gómez-Zapiain et al., 2016), menor número de parejas sexuales y
utilización de métodos anticonceptivos con mayor consistencia (Moore, 2000- citado
en Gómez-Zapiain et al., 2016), así como menor propensión a mantener relaciones
sexuales al margen de la relación principal (Gómez-Zapiain, 2005).
24
En su estudio llegaron a tres conclusiones: los adolescentes con apegos seguros
revelaban menor disposición al riesgo en el comportamiento sexual, tanto en personas
sexualmente activas como no activas, siendo la disposición al riesgo superior en
varones que en mujeres en cada una de las categorías del apego. Eso va en la línea
de lo encontrado en otras investigaciones, que mantienen que la inseguridad es un
factor de riesgo respecto al comportamiento sexual, al utilizar la actividad sexual como
medio para resolver otras necesidades como la seguridad emocional, para afirmar la
identidad o para resolver estados afectivos negativos.
Otra de las conclusiones se relaciona con que la calidad de las relaciones de apego,
especialmente con la madre, juega un papel importante en relación a la disposición al
riesgo, en ambos grupos de actividad sexual y de género.
Finalmente obtuvieron que las dificultades en la regulación emocional eran un
importante predictor de la disposición al riesgo en la adolescencia, tanto en varones
como en mujeres, especialmente en personas sexualmente activas. En concreto en el
grupo de personas sexualmente no activas la relación del apego a la madre era al
variable que mejor discriminaba, mientras que en las activas lo eran sus dificultades en
la regulación emocional.
Uno de los aspectos que destacaron estos autores fue la diferencia en la tendencia a
la disposición al riesgo en función de si ya se había accedido a la experiencia sexual o
no. Cuando ésta era una expectativa, la mayor disposición al riesgo se asociaba a un
menor apoyo afectivo a través de vínculos de apego hacia personas significativas.
Cuando ya se había accedido a la experiencia sexual, las dificultades de regulación
emocional y la evitación eran las variables con mayor poder discriminativo en varones,
mientras que en las mujeres lo eran la dificultad para regular las emociones y la
inseguridad del apego con la madre.
25
Strachman y Impett (2009- citados en Paulk y Zayac, 2013) estudiaron la
relación entre el estilo de apego y el uso de preservativos, encontrando que las
personas con estilos de apego ambivalentes utilizaban en menor medida
preservativos, y esta relación permanecía significativa incluso cuando se controlaban
otras variables como el género, los métodos anticonceptivos alternativos y la
frecuencia de las relaciones sexuales.
Gentzler y Kerns (2004- citados en Paulk y Zayac, 2013) encontraron que los
adolescentes con estilos de apego evitativos y ambivalentes reportaban en mayor
medida que los seguros experiencias sexuales negativas y no deseadas, aunque no
forzadas.
26
Gómez-Zapiain (2005) en otro de sus estudios sobre disposición al riesgo,
observa relaciones débiles entre estilos de apego inseguros y el riesgo, así como
relaciones significativas entre la seguridad del apego y otras variables asociadas
directamente al riesgo como la empatía y la autoestima, actuando el apego como
mediador. Una de sus principales aportaciones es la relacionada con la empatía en el
espacio de la intimidad, relacionado ésta de forma positiva con la seguridad del apego
y negativamente con la disposición al riesgo. Además la empatía tiene un mayor peso
en relación al comportamiento sexual de los varones, refiriendo que los hombres más
empáticos se protegen mejor a sí mismos y sus parejas, haciendo un uso más eficaz
del preservativo.
27
2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
2.1 Justificación
28
Más aún cuando los datos sobre la vulnerabilidad de los adolescentes a los
problemas de salud mental que ofrece la Organización Mundial de la Salud (2018) no
son positivos.
La OMS estima que entre el 10 y el 20% de los adolescentes a nivel mundial
presentan problemas de salud mental, muchos de los cuales siguen sin ser
diagnosticados ni tratados de forma adecuada. De hecho, 1 de cada 6 personas que
sufren algún tipo de alteración psicológica tienen entre 10 y 19 años, presentando los
problemas mentales un 16% de la carga mundial de enfermedades en personas de 10
a 19 años, siendo la depresión la novena causa mundial de enfermedad entre los
adolescentes, la ansiedad la octava causa principal y los problemas de
comportamiento la sexta causa principal.
En esta publicación, la OMS también informa que la prevalencia mundial de
episodios graves de consumo de alcohol entre adolescentes de 15 a 19 años fue del
13.6% en 2016, mientras que el 5.6% de personas de 15 y 16 años habían consumido
cannabis al menos una vez en 2016 y la violencia interpersonal fue clasificada como la
segunda causa de muerte de adolescentes en 2016. Al mismo tiempo, la OMS informa
de que el uso nocivo de sustancias en adolescentes aumenta la probabilidad de tomar
más riesgos, como las relaciones sexuales sin protección. Esta asunción de riesgos
sexuales aumenta a su vez el riesgo de aparición de infecciones de transmisión sexual
y embarazos tempranos, una de las principales causas de muerte entre las
adolescentes.
Con respecto a la carga de morbilidad entre los adolescentes, en el Día
Mundial de la Salud Mental, la Organización Mundial de la Salud (2018) refiere que la
depresión es la tercera causa de muerte y el suicidio la segunda causa de muerte en
jóvenes de 15 a 19 años.
29
2.2 Preguntas de investigación
1. ¿Qué relación existe entre el tipo de apego establecido entre padres e hijos y
el desarrollo emocional durante la adolescencia?
2. ¿Qué relación existe entre el tipo de apego establecido entre padres e hijos y
el desarrollo de alguna psicopatología durante la adolescencia?
3. ¿Qué relación existe entre el tipo de apego establecido entre padres e hijos y
la probabilidad de desarrollar conductas de riesgo en la adolescencia?
2.3 Objetivos
Objetivo general
Explorar, describir y analizar el conocimiento existente de base empírica sobre
la influencia del tipo de apego entre los padres y sus hijos y su influencia en el
desarrollo en la adolescencia.
Objetivos específicos
30
3. METODOLOGÍA
31
de apego AND conductas de riesgo AND adolescentes; estilos de apego AND
conducta antisocial AND adolescentes; estilos de apego AND conductas sexuales de
riesgo AND adolescentes; estilos de apego AND conducta sexual AND adolescentes.
32
3.3 Selección de artículos
33
4. RESULTADOS
Artículos identificados
mediante las bases de
datos (SCOPUS,
PsycArticles y Dialnet).
(n=120)
Artículos excluidos
tras un primer filtro
(Año publicación
2000-2019)
(n=11)
Artículos excluidos
tras un segundo
Artículos resultantes
filtro (lectura del
tras el primer filtro título y resumen)
(n=109) (n=74)
Artículos
Artículos Artículos excluidos
seleccionados
seleccionadosparaparalala por:
lectura
lecturadel
deltexto
texto -Incluye en su
completo
completo estudio variables no
(n=35)
(n=35) objetivo.
-Incluye muestras
adultas e infantes
(n=21)
Artículos incluidos
para revisión
(n=15)
(n=14)
34
Artículos identificados
mediante las bases de
datos (SCOPUS,
Pubmed, PsycArticles y
Dialnet).
(n=107)
Artículos excluidos
tras un primer filtro
(lectura del título y
resumen)
(n=83)
Artículos excluidos
Artículos por:
seleccionados para la -Incluye en su
lectura del texto estudio variables no
completo objetivo.
(n=24) (n=8)
-Artículos repetidos
(n=1)
Artículos incluidos
para revisión
(n=15)
.
Figura 2. Resultados al aplicar el sistema de búsqueda y selección de artículos en la segunda
búsqueda.
35
4.1 Relación entre el tipo de apego y el desarrollo emocional en la adolescencia.
Todos los estudios revisados que relacionan los estilos de apego establecidos
en la infancia y su influencia en el desarrollo emocional en la adolescencia (Tabla 1),
ponen de manifiesto la gran relación que existe entre ambas variables.
En la Tabla 2 se resumen los principales resultados encontrados, para
posteriormente nombrarlos de forma más detallada.
36
Tabla 1.
Artículos seleccionados incluidos en la revisión referentes a la primera búsqueda.
Garrido-Rojas Apego, emoción y regulación emocional. Realizar una revisión teórica para conocer N=Sin especificar.
(2006) Implicaciones para la salud. las relaciones que se han encontrado entre
los diferentes estilos de apego, las
emociones y las estrategias de regulación
emocional.
Szymanska et al. How do adolescents regulate distress Investigar las formas de regulación N=81.
(2019) according to attachment style? A combined emocional en función del estilo de apego
eye-tracking and neurophysiological approach utilizando un enfoque multimodal, centrado
en parámetros neurofisiológicos y
conductuales.
Girón et al. (2003) Trastornos de comportamiento en los Estudiar cómo influyen los acontecimientos N=20.
adolescentes. Observaciones desde una ocurridos en el ámbito familiar en los
perspectiva sistémica-relacional. trastornos de conducta en la adolescencia.
Lorenzini y Fonagy Apego y trastornos de la personalidad: Breve Revisar de forma teórica los elementos N=Sin especificar.
(2014) revisión teóricos, psicológicos, neurocientíficos y del
desarrollo del apego y de su relevancia para
la comprensión la etiología, diagnostico y
tratamiento de los trastornos mentales.
González et al. Relaciones entre psicopatología y apego en la Estudiar la relación entre la psicopatología y N=88.
(2011). adolescencia. el apego en la adolescencia.
Cordellat y Botella Apego y sintomatología depresiva en la Examinar la relación entre los estilos de N=312.
(2007) adolescencia: su relación con los apego, la sintomatología depresiva y los
acontecimientos vitales. acontecimientos vitales negativos.
Duchesne y Ratelle Attachment security to mothers and fathers Investigar la relación entre la percepción de N=414.
(2014) and the development trajectories of los adolescentes sobre la seguridad del
37
depressive symptoms in adolescence: Which apego en sus relaciones con sus padres y el
parent for which trajectory? desarrollo de síntomas depresivos.
Molero et al. (2011) La importancia de las experiencias tempranas Revisar a nivel teórico la importancia de las N=Sin especificar.
de cuidado afectivo y responsable en experiencias tempranas en el desarrollo del
menores. apego.
Lewis et al. (2000) Attachment over time. Examinar la continuidad en la clasificación N=84.
del apego desde la infancia hasta la
adolescencia y su relación con la memoria
autobiográfica, divorcio y desajuste.
Celedón et al. Estilos de apego en un grupo de jóvenes con Describir los estilos de apego en un grupo N=100.
(2016) rasgos antisociales y psicopáticos. de jóvenes con rasgos antisociales y
psicopáticos.
Kimonis et al. Maternal care, maltreatment and callous- Examinar la contribución del afecto y la N= 227.
(2013) unemotional traits among urbanmale juvenile calidez materna a los rasgos poco
offenders. emotivos/crueles y la agresión en
delincuentes juveniles.
Konishi y Hymel An attachment perspective on anger among Investigar la relación entre el estilo de apego N=776.
(2014) adolescents. y la experiencia y expresión de enfado.
Nunes y Mota Parenting styles and suicidal ideation in Analizar el rol de los estilos de apego en el N=604.
(2017) adolescents: Mediating effect of attachment. desarrollo de la ideación suicida en
adolescentes.
Allen et al. (2007) The relation of attachment security to Examinar la relación entre la seguridad del N=167.
adolescents’ paternal and peer relationships, apego y múltiples dominios del
depression, and externalizing behavior. funcionamiento psicosocial.
38
Tabla 2.
Resumen de los resultados encontrados en referencia a la primera pregunta de investigación.
Desarrollo emocional
Tipo de apego
Regulación emocional Características personales Capacidad de afrontamiento
Seguro -Estrategias adecuadas de regulación. -Baja ansiedad y evitación. -Formas constructivas de
-Identificación y expresión de -Comodidad con la proximidad de afrontamiento al estrés.
emociones adaptativa. los otros. -Curiosidad y exploración.
-Adecuación de emociones e impulsos -Búsqueda de apoyo. -Búsqueda de ayuda.
al contexto. -Emociones frecuentes: alegría, -Adecuada resolución de
-Modulan su excitación en situaciones confianza, placer, calma y conflictos.
de afecto intenso. tranquilidad. -Búsqueda activa de
-Flexibles y con ajuste al cambio. información.
-Desarrollan modelos de sí mismos -Reorganización de esquemas
como amistosos y capaces y de los cognitivos para ajustarse a las
demás como confiables y bien situaciones.
intencionados. -Establecen metas realistas.
-Evitan creencias irracionales.
Inseguro-evitativo -Dificultades para identificar y expresar -Distancia emocional de los otros. -Rechazan información
emociones. -Bajos niveles de emociones confundible.
-Desactivación de estrategias positivas y alto afecto negativo. -Esquemas rígidos que no
(negación/bloqueo). -Desconfiados, inseguros, incorporan nueva información.
-Desarrollan modelos de sí mismos inestables, retraídos. -Distancia mental y emocional
como suspicaces y retraídos y de los -Emociones: mayor propensión al del material afectivo.
39
otros como poco confiables. enfado y hostilidad, estrés, -Metas destructivas.
ansiedad, miedo, desconfianza y -Énfasis en la presencia y
rabia. gravedad de amenazas
percibidas.
Inseguro- -Dificultades para identificar y expresar -Alta ansiedad y evitación. -Respuesta temerosa en
ambivalente emociones. -Fuerte necesidad de cercanía. general.
-Acceso rápido a recuerdos dolorosos. -Miedo al rechazo y al abandono. -Esquemas rígidos.
-Respuestas defensivas (Inhibición, -Emocionalidad negativa: -Actitud hipervigilante y
negación y bloqueo emocional) preocupación, miedo, afecto rumiativa.
-Estrategias de búsqueda de la figura depresivo, disminución de la clama, -Metas destructivas.
de apego. culpa, mayor propensión al enfado y -Inhibición emocional.
-Desarrollan modelos de sí mismos la rabia. -Sobreactivación general del
como inseguros y de los otros como -Inseguros, inestables y retraídos. organismo.
poco confiables. . -Énfasis en la presencia y
gravedad de amenazas
percibidas.
40
Apego seguro
Apego inseguro-evitativo
Por otro lado, las investigaciones con respecto al estilo de apego inseguro-
evitativo lo relacionan con dificultades para el desarrollo de la autonomía, vista ésta
como una amenaza a la calidad del vínculo, con la consecuente aparición de estrés y
actitudes defensivas (Allen et al., 2007).
La preferencia por mantener distancia emocional de los otros también es
característico en adolescentes con este tipo de apego, así como bajo nivel de
emociones positivas, afecto negativo, elevada sensibilidad al rechazo que tratan de
manejar con la negación, desactivación de estrategias emocionales como estrategia
defensiva, etc. (Garrido-Rojas, 2006). Además tienden a presentar dificultades para
manejar las situaciones emocionales en las que se ven implicados con otras personas,
así como dificultades en la identificación y expresión de sus emociones y tienden a
41
distanciarse mentalmente del material afectivo y de los contextos de apego (Garrido-
Rojas, 2006).
También suelen presentar estructuras cognitivas rígidas que les llevan a
rechazar la información que les pueda generar confusión, desarrollan modelos de sí
mismos como suspicaces y retraídos, y de los otros como poco confiables o
demasiado ansiosos para comprometerse, lo que les imposibilita confiar en los demás.
Las emociones que predominan en este tipo de apego son ansiedad, miedo,
rabia, hostilidad y desconfianza (Garrido-Rojas, 2006)
Apego inseguro-ambivalente
42
Con todo ello, parece probado que las relaciones familiares son quizás el factor
más importante en el desarrollo emocional del individuo. Y en este sentido son varios
los autores que recientemente esgrimen la importancia no solo del apego con la madre
sino con ambos progenitores.
A este respecto, Lewis, Feiring y Rosenthal (2000) ya afirmaban que en las
familias con jóvenes que tenían trastornos de conducta y drogodependencias, la
relación de apego padres-hijos estaba seriamente dañada. Al mismo tiempo incidieron
en la importancia de las buenas relaciones en el contexto familiar, ya que los conflictos
maritales y especialmente el divorcio entre los padres se relacionaban con estilos de
apego inseguros en los hijos al representar este último acontecimiento una falta de
disponibilidad de las figuras de apego.
43
4.2 Relación entre el tipo de apego y el desarrollo de alguna psicopatología en la
adolescencia.
44
Tabla 3.
Resumen de los resultados encontrados en referencia a la segunda pregunta de investigación.
45
-Rasgos paranoides.
Inseguro- -Mayor probabilidad -Mayor propensión a
ambivalente trastornos afectivos. trastornos de personalidad
-Trastornos de ansiedad. obsesivo-compulsivo,
histriónico, evitativo,
dependiente, límite (mayor
sensibilidad al rechazo).
46
Apego seguro
Apego inseguro
47
introversión y altos niveles de agresividad, hostilidad y distancia emocional (Celedón et
al., 2016), así como una mayor expresión de la ira (Konishi y Hymel, 2014).
También se ha encontrado que la falta de cuidados maternos, así como la falta
de calidez y afectividad materna, se relaciona con rasgos psicopáticos, al carecer
estos individuos de oportunidades de aprendizaje emocional (Kimonis et al., 2013).
González et al. (2011) encontraron diferencias según el género. En concreto,
las mujeres presentaban mayor tendencia a desarrollar apegos inseguros
(especialmente el inseguro-evitativo) y mayor probabilidad de problemas
psicopatológicos que los hombres en todas las escalas evaluadas, excepto en
hostilidad. Estos resultados van en la línea de la mayoría de las investigaciones que
apuntan a la existencia de diferencias en función del género en cuanto a
psicopatología y a la significativa relación entre estilos de apego inseguros y
psicopatología.
48
adolescentes. De la misma forma que las experiencias negativas o la falta de
expresión, comunicación o estimulación por parte de la madre, pueden ser un factor de
riesgo para el adecuado desarrollo socio-emocional y cognitivo.
Todos los estudios revisados que relacionan los estilos de apego establecidos
en la infancia y su influencia en la probabilidad de inmiscuirse en conductas de riesgo
en la adolescencia, ponen de manifiesto la gran relación que existe entre ambas
variables.
En las tablas 4 y 5 se resumen los principales resultados encontrados, para
posteriormente nombrarlos de forma más detallada.
49
Tabla 4.
Artículos seleccionados incluidos en la revisión referentes a la segunda búsqueda.
Molnar et al. (2010) Attachment, motivations, and alcohol: testing a Replicar el estudio de Cooper (2003) y N= 696.
dual-path model of high-risk drinking and extender su modelo motivacional sobre el
adverse consequences in transitional clinical elevado riesgo a beber y sus consecuencias,
and student samples. teniendo en cuenta la variable apego como
antecedente en el problema.
Schindler et al. (2007) Insecure family bases and adolescent drug Explorar la relación entre los patrones de N= 37.
abuse: A new approach to family patterns of apego familiares y el abuso de sustancias de
attachment. los adolescentes.
Becoña et al. (2014) Apego y consumo de sustancias en la Revisar los estudios más importantes N= 36
adolescencia: Una revisión de aspectos publicados en los últimos 30 años que estudios.
conceptuales y metodológicos. relacionan los estilos de apego y el consumo
de sustancias en la adolescencia.
Celedón et al. (2016) Estilos de apego en un grupo de jóvenes con Describir los estilos de apego en un grupo de N=100.
rasgos antisociales y psicopáticos. jóvenes con rasgos antisociales y
psicopáticos.
Allen et al. (2002) Attachment and autonomy as predictors of the Examinar la organización del apego en N= 117.
development of social skills and delinquency adolescentes como variable predictora en el
during midadolescence. desarrollo de las habilidades sociales y el
comportamiento delictivo en la adolescencia.
Jones et al. (2015) Parental knowledge of adolescent activities: Examinar como el estilo de apego se N= 203.
Links with parental attachment style and relaciona con el conocimiento de la madre y el
adolescent substance use. padre con respecto a las actividades de sus
hijos y al uso de sustancias.
50
El-Shikh et al. (2004) Acontecimientos vitales y adicción: una Revisar las diferentes investigaciones sobre N=Sin
revisión de la bibliografía acontecimientos vitales y su relación con los especificar.
trastornos adictivos.
Oshri et al. (2015) Child maltreatment types and risk behaviors: Examinar la relación entre distintas formas de N= 361.
Associations with attachment style and maltrato y conductas de riesgo.
emotion regulation dimensions.
Mirón et al. (1988) Un análisis de la relación entre ambiente Analizar la relación entre las interacciones N= 347.
familiar y delincuencia juvenil. afectivas y normativas del ambiente familiar, y
la conducta delictiva de adolescentes varones.
Hoeve et al. (2012) A meta-analysis of attachment to parents and Revisar las investigaciones realizadas que N=74
delinquency. relacionan el apego hacia los padres y la estudios.
delincuencia en la adolescencia.
Kobak et al. (2009). Adolescent attachment and trajectories of Comprobar la hipótesis según la cual los N= 224.
hostile-impulsive behavior: Implications for the estados de la mente caracterizados por la
development of personality disorders. preocupación predicen el incremento del
riesgo de presentar conductas agresivas a lo
largo del tiempo.
Gómez-Zapiain (2005) Apego y comportamiento sexual en la Estudiar la relación entre la seguridad del N= 299.
adolescencia, en relación con la disposición a apego y los riesgos asociados al
asumir riesgos asociados a la experiencia comportamiento sexual.
erótica.
Gómez-Zapiain et al. Disposición al riesgo en la actividad sexual de Analizar la relación entre la disposición al N= 1911.
(2016) adolescentes: El rol de los modelos internos riesgo en las relaciones sexuales en
de apego, de las relaciones de apego con adolescentes y variables afectivo-
padres e iguales y de las dificultades de emocionales.
regulación emocional.
Paulk y Zayac (2013) Attachment style as a predictor of risky sexual Examinar el estilo de apego como predictor de N= 258.
behavior in adolescents. la conducta sexual de riesgo en adolescentes.
51
Potard et al. (2017) The relationship between parental attachment Estudiar la relación entre la calidad del apego N= 312.
and sexualityin early adolescence. parental y la conducta sexual en la
adolescencia.
52
Tabla 5.
Resumen de los resultados encontrados en referencia a la tercera pregunta de investigación.
Conductas de riesgo
Tipo de apego
Consumo de sustancias Conducta delictiva/antisocial Conductas sexuales de riesgo
Seguro -Factor protector frente al -Menor probabilidad conducta delictiva. -Inicio más tardío en la actividad
consumo. -Mejores habilidades sociales. sexual.
-Relacionado con el uso -Mayor cuidado por cumplir las -Menor número de parejas sexuales.
experimental de las expectativas paternas. -Más comportamientos sexuales
sustancias (conducta -Relaciones interpersonales basadas saludables y menos disposición al
exploratoria). en la confianza. riesgo.
-Relaciones empáticas (mentalización). -Mayor utilización de métodos
anticonceptivos.
-Menos propensión a la infidelidad.
-Más calidad en las relaciones,
disfrutan más y muestran más
pasión.
-Motivaciones: expresión del amor.
Inseguro -Factor de riesgo para el -Mayor probabilidad conducta delictiva.
consumo de sustancias. -Menos habilidades sociales.
-Factores mediadores: -Mayor agresividad, violencia y
características parentales, retraimiento.
supervisión parental, -Miedo a la autonomía.
acontecimientos vitales -Sesgos hostiles en la percepción del
53
(abuso emocional y otro.
sexual), desregulación
emocional.
Inseguro-evitativo -Asociado a un mayor -Mayor disposición al riesgo.
consumo de drogas y -Mayor distorsión de la percepción
conductas delictivas. del riesgo.
-Más dificultades en regulación
emocional.
VARIABLES FAMILIARES -Más probabilidad de experiencias
sexuales negativas y no deseadas.
-Menos comprometidos.
-Motivación: autoafirmación ante
iguales.
Inseguro-ambivalente -Asociado a un mayor - Mayor disposición al riesgo.
consumo de alcohol. -Más dificultades en regulación
emocional.
-Inicio más temprano.
-Más parejas sexuales.
-Uso de drogas en la relación
sexual.
-Más probabilidad de experiencias
sexuales negativas y no deseadas.
-Actitudes negativas hacia el uso del
54
preservativo.
-Más promiscuos.
-Relaciones obsesivamente
comprometidas.
-Motivación: Conseguir intimidad
emocional.
55
Por lo que respecta al consumo de sustancias, todos los estudios revisados
que relacionan estilos de apego y consumo de sustancias en adolescentes dejan
entrever que el apego es uno de los mayores factores de riesgo y/o protección para el
consumo de sustancias en la adolescencia, actuando el apego seguro como factor de
protección y el apego inseguro como factor de riesgo.
El-Shikh et al. (2004) refieren la existencia de una relación entre el consumo de
drogas en adolescentes y padres con dificultades para expresar sus emociones,
desbordados, con pautas de sobreprotección o con falta de implicación en el cuidado
de sus hijos.
Jones et al. (2015) encontraron que el conocimiento o, en este caso el
desconocimiento, sobre los quehaceres de los hijos adolescentes eran el mejor
predictor de las conductas de riesgo, y en concreto el estilo de apego inseguro se
asociada negativamente con esta supervisión paterna y positivamente con el consumo
de sustancias.
Becoña et al. (2014) postulan que el apego seguro es uno de los mayores
factores de protección frente al consumo de drogas, relacionado de forma significativa
el bajo apego parental con mayor consumo de alcohol y otras drogas.
Sin embargo algunos autores (Becoña et al., 2014) señalan que también
existen otras variables que condicionan la influencia del apego hacia los padres en el
consumo de drogas de los hijos, dando lugar a disparidad de resultados, como por
ejemplo la influencia de los iguales. En este sentido existen autores que diferencian
dos etapas en la adolescencia, refiriendo que es en la adolescencia temprana donde la
relación con los padres tiene más influencia en los hijos, pasando esta influencia al
grupo de iguales en la adolescencia tardía. No obstante y al mismo tiempo, existen
autores que apuntan a la influencia de la familia y sus relaciones como variables
protectoras frente a la elección de compañeros, de forma que los jóvenes con
relaciones positivas con los padres serán menos influenciados por el consumo de su
56
grupo de iguales. Por lo tanto el apego hacia los padres modularía la influencia del
apego hacia el grupo de iguales, al constituir las relaciones de apego tempranas un
prototipo para otras relaciones interpersonales, de forma que los adolescentes con
estilos de apego inseguros tendrán más problemas a nivel interpersonal y más
dificultades en sus habilidades de afrontamiento, aumentando así su riesgo a consumir
sustancias (Becoña et al., 2014).
A este respecto, Becoña et al. (2014) apuntan a la importancia de distinguir
entre el uso experimental y el uso regular o abuso de sustancias, estando el primero
de ellos relacionado con el apego seguro en tanto en cuanto formaría parte de las
conductas exploratorias, y el segundo aparecería asociado a estilos de apego
inseguros.
57
En relación a este tema, dos son los trabajos que van un paso más allá y
ponen énfasis en la influencia que tiene tanto el apego hacia las dos figuras parentales
(madre y padre), como sus habilidades parentales en el desarrollo de la conducta
delictiva.
Hoeve et al. (2012) encontraron relaciones significativas entre el apego
inseguro y la conducta delictiva, tanto en chicos como en chicas. Siendo el apego
hacia la madre el más importante para el desarrollo de la conducta antisocial en chicas
y el apego hacia el padre el más significativo entre los jóvenes varones.
En este sentido Mirón et al. (1988) también encontraron que si bien las relaciones de
apego de los hijos hacia ambos progenitores eran importantes en el desarrollo de la
conducta delictiva, para los hijos varones lo era especialmente la relación afectiva
mantenida con su padre, puesto que relaciones inadecuadas podían llevar a una
ausencia de modelo de rol con la consecuente búsqueda del mismo fuera del hogar.
Además otra de las novedad que incluyen estos autores es la importancia del
control parental (supervisión y disciplina) en combinación con la relación de apego
como predictores de la conducta delictiva, más que la relación de apego padres-hijos
únicamente (Hoeve et al., 2012). En este sentido estos resultados van en contra de la
teoría del control social de Hirschi, el cual esgrime que el control parental directo
(supervisión y disciplina) es un predictor menos relevante de la delincuencia juvenil en
comparación con el control indirecto (relaciones de apego), puesto que en la
adolescencia tal control parental directo es más limitado al no pasar los adolescentes
tanto tiempo con sus progenitores al ser más autónomos, convirtiendo así al apego
como el principal mecanismo que actúa apartando al hijo de la conducta delictiva.
En esta misma línea apuntan Mirón et al., (1988), los cuales encontraron
diferencias significativas entre las características familiares de delincuentes juveniles y
no delincuentes. De entre todas las diferencias, fueron las variables afectivas, y
especialmente la relación de apego y los conflictos familiares, las que tenían más peso
en el desarrollo de un comportamiento antisocial, en detrimento de los aspectos
normativos familiares. En este sentido la disciplina parental jugaba un papel importante
pero no tanto como las relaciones de apego, si bien es cierto que en el estudio se le
concede menos peso a estas variables como una posible explicación.
Miron et al. (1988) encontraron que las familias de jóvenes infractores se
caracterizaban por presentar bajo nivel de cohesión entre sus miembros y alto nivel de
conflicto, además de un control parental caracterizado tanto por la ausencia de
supervisión como por un exceso de control.
58
Todo ello va en la línea de las aportaciones de Bowlby según la cual un pobre
apego hacia los padres era una de las principales causas de la delincuencia juvenil.
Con respecto al apego seguro, varios autores lo han asociado con ciertas
conductas como el inicio más tardío en la actividad sexual (Gómez-Zapiain et al.,
2016), un menor número de parejas sexuales y utilización de métodos anticonceptivos
con mayor consistencia (Gómez-Zapiain et al., 2016), así como menor propensión a
mantener relaciones sexuales al margen de la relación principal (Gómez-Zapiain,
2005). También está relacionado con una menor disposición al riesgo en el
comportamiento sexual, tanto en personas sexualmente activas como no activas
(Gómez-Zapiain et al., 2016).
Por lo que respecta a las características de las relaciones sexuales, las personas son
estilos de apego seguros tienden a experimentar relaciones más erotofílicas, a sentirse
más orientadas hacia el amor, tienden a disfrutar más de la experiencia erótica,
muestran mayor pasión en las relaciones y tienen más facilidad para expresar
emociones positivas (Gómez-Zapiain, 2005).
59
emocional en la sexualidad, mientras que el apego evitativo hacia el padre parece
influenciar la toma de decisiones sexuales, especialmente en las chicas.
Todo ello va en la línea de lo que la literatura expone con respecto a la
influencia de ese tipo de apego, sin embargo en nuestra revisión encontramos un
resultado contradictorio. Paulk y Zayac (2013) reportaron que el estilo evitativo estaba
negativamente asociado con conductas sexuales de riesgo, en contra de lo referido en
la literatura, aspecto que ellos mismos explican por la menor actividad sexual de este
tipo de personas debido a sus características personales, lo que disminuye la
probabilidad de comportarse de forma arriesgada al inmiscuirse en este tipo de
actividades en menor medida.
60
varones, refiriendo que los hombres más empáticos se protegen mejor a sí mismos y
sus parejas, haciendo un uso más eficaz del preservativo.
Otro resultado sorprendente está relacionado con las variables diferenciadoras que
intervienen en la disposición al riesgo cuando aún no se ha experimentado a nivel
sexual y cuando sí se ha iniciado. En el primer caso, la mayor disposición al riesgo se
asociaba a un menor apoyo afectivo a través de vínculos de apego hacia personas
significativas. En el segundo caso existen diferencias según el género, siendo las
dificultades de regulación emocional y la evitación las variables con mayor poder
discriminativo en varones, mientras que en las mujeres lo eran la dificultad para
regular las emociones y la inseguridad del apego con la madre.
61
5. CONCLUSIONES
62
Tras la realización de esta revisión sistemática, han surgido una serie de
preguntas que podrían convertirse en futuras propuestas de investigación, dados los
pocos estudios que existen al respecto. Por ejemplo, determinar el papel que juegan
los diferentes subsistemas familiares y no únicamente la interacción entre sus
miembros en la formación del apego; explorar el papel de las diferencias individuales
en cuanto a resiliencia como factor protector frente a la vulnerabilidad psicológica y las
conductas de riesgo y estudiar en profundidad la relación directa que existe entre el
tipo de apego y la delincuencia juvenil, puesto que apenas existen trabajos que
relacionen ambas variables.
63
6. BIBLIOGRAFÍA
Allen, J.P., Marsh, P., McFarland, C., McElhaney, K., y Land, D.J. (2002). Attachment
and autonomy as predictors of the development of social skills and delinquency
during midadolescence. Journal of Consulting and Clinical Psychology, 70 (1),
56-66.
Allen, J., Porter, M., McFarland,C., McElhaney, K., y Marsh, P. (2007). The relation of
attachment security to adolescents’ paternal and peer relationships, depression,
and externalizing behavior. Children Development, 78 (4), 1222-1239.
Becoña, E., Fernández del Río, E., Calafat, A. y Fernández-Hermida, J.R. (2014).
Apego y consumo de sustancias en la adolescencia: Una revisión de aspectos
conceptuales y metodológicos. Adicciones, 26 (1), 77-86.
Celedón, J., Barón, B., Cogollo, M.E., Yánez, M.M., Martínez, P. (2016). Estilos de
apego en un grupo de jóvenes con rasgos antisociales y psicopáticos. Revista
Encuentros, 14 (1), 151-165.
Duchesne, S. & Ratelle, C.F. (2014). Attachment security to mothers and fathers and
the development trajectories of depressive symptoms in adolescence: Which
parent for which trajectory? Journal of Youth Adolescence, 43, 641-654.
64
Garrido-Rojas, L. (2006). Apego, emoción y regulación emocional. Implicaciones para
la salud. Revista Latinoamericana de Psicología, 38 (3), 493-507.
González, R., Ysern, L., Martorell, C., Mateu, C. y Barreto, P. (2011). Relaciones entre
psicopatología y apego en la adolescencia. Revista Iberoamericana de
Diagnóstico y Evaluación Psicológica, 29 (1), 9-26.
Hoeve, M., Stams, G.J., Van der Put, C., Semon, J., Van der Laan, P.H., y Gerris, J.R.
(2012). A meta-analysis of attachment to parents and delinquency. Journal of
Abnormal Child Psychology, 40, 771-785.
Jones, J.D., Ehrlich, K., Lejuez, C.W. y Cassidy, J. (2015). Parental knowledge of
adolescent activities: Links with parental attachment style and adolescent
substance use. Journal of Family Psychology, 29 (2), 191-200.
Kimonis, E., Cross, B., Howard, A., y Donoghue, K. (2013). Maternal care,
maltreatment and callous-unemotional traits among urbanmale juvenile
offenders. Journal of Youth Adolescence, 42, 165-177.
Kobak, R., Zajac, K., y Smith, C. (2009). Adolescent attachment and trajectories of
hostile-impulsive behavior: Implications for the development of personality
disorders. Development and Psychopathology, 21, 839-851.
65
Lewis, M., Feiring, C., Rosenthal, S. (2000). Attachment over time. Child Development,
71 (3), 707-720.
Mirón, L., Luengo, A., Sobral, J. y Otero, J.M. (1988). Un análisis de la relación entre
ambiente familiar y delincuencia juvenil. Revista de Psicología Social, 3 (2),
165-180.
Molero, R., Sospedra, R., Sabater, Y., Pla, L.R (2011). La importancia de las
experiencias tempranas de cuidado afectivo y responsable en menores.
International Journal of Developmental and Educational Psychology, 1, (1), 511-
520.
Nunes, F. & Mota, C.P. (2017). Parenting styles and suicidal ideation in adolescents:
Mediating effect of attachment. Journal of Child and Family Studies, 26, 734-
747.
Oshri, A., Sutton, T.E, Clay-Warner, J. & Miller, J.D. (2015). Child maltreatmenttypes
and risk behaviors: Associations with attachment style and emotion regulation
dimensions. Personality and Individual Differences, 73, 127-133.
66
Potard, C., Courtois, R., Réveillère, C., Bréchon, G., y Courtois, A. (2017). The
relationship between parental attachment and sexualityin early adolescence.
International Journal of Adolescence and Youth, 22 (1), 47-56.
Schindler, A., Thomasius, R., Sack, P. M., Gemeinhardt, B., & Küstner, U. (2007).
Insecure family bases and adolescent drug abuse: A new approach to family
patterns of attachment. Attachment & Human Development, 9, 111-126.
Szymanska, M., Monnin, J., Tio, G., Vidal, C., Girard, F., Galdon, L., Smith, C., Bifulco,
A., Nezelof, S., Vulliez-Coady, L. (2019). How do adolescents regulate distress
according to attachment style? A combined eye-tracking and neurophysiological
approach. Progress in Neuropsychopharmacology & Biological Psychiatry, 89,
39-47.
67