W.

de
Gaceta Médica Lips Castro,2014;150
México. C. Urenda Arias:
Suppl La medicina en la civilización
3:369-76 griega antigua
ENCUENTRO CONprehipocrática
EL PASADO

La medicina en la civilización griega antigua prehipocrática

Walter Lips Castro1* y Catalina Urenda Arias2
1Escuela de Psicología, Universidad de Valparaíso, Chile; 2Corporación Municipal de Valparaíso, Chile

Resumen
Los inicios de la concepción magicorreligiosa de la enfermedad se remontarían a los periodos previos a la aparición
de la escritura (Prehistoria). Durante la época antigua se concebía el mundo como un lugar donde lo sobrenatural
era esencial para la supervivencia del ser humano, por lo tanto, la explicación de todos los fenómenos, incluidas las
enfermedades, se basaba en causas sobrenaturales. Con el desarrollo de la civilización griega comenzó a establecerse
un enfoque racional acerca de la naturaleza del mundo, que incluyó gradualmente a la medicina. Pero el origen de la
perspectiva racional y naturalista de la medicina se debe, en parte, a la influencia de la civilización egipcia antigua.
Diversos términos fueron usados para referirse a los agentes sanadores durante el periodo prehipocrático de la Grecia
antigua: iatromantes, phôlarcos, oulíades y asclepíades. Posteriormente, en la civilización griega antigua la sanación
mediante la profecía gradualmente fue sustituida, aunque no del todo desplazada, por una nueva medicina basada en
un marco teórico racional acerca de la salud y la enfermedad: téchnê iatrikê.

PALABRAS CLAVE: Historia de la medicina. Medicina prehipocrática. Oulíades. Asclepíades. Iatromantes. Phôlarcos.

Abstract
The beginnings of the magical-religious conception of disease would go back to before the development of writing
(prehistory). During ancient times the world was conceived as a place where the supernatural was essential for
mankind’s survival, therefore, explanations of all phenomena, including disease, were based on supernatural causes.
With the development of Greek civilization began the establishment of a rational approach to the nature of the world,
which gradually included medicine. But the origin of the rational and naturalist perspective of medicine is due in part
to the influence of ancient Egyptian civilization. Various terms were used to refer to healing agents at the pre-Hippocratic
period of ancient Greece: iatromantis, phôlarcos, ouliads, and asclepiads. Later, in the ancient Greek civilization, healing
through prophecy was gradually replaced, though not entirely displaced, by a new medicine, based on a rational theo-
retical framework about health and disease: téchnê iatrikê. (Gac Med Mex. 2014;150 Suppl 3:369-76)
Corresponding author: Walter Lips Castro, [email protected]; [email protected]

KEY WORDS: History of medicine. Pre-Hippocratic medicine. Ouliads. Asclepiads. Iatromantis. Pholarcos.

Introducción a los periodos previos a la aparición de la escritura

(Prehistoria). Mediante la combinación de diferentes
fuentes de datos obtenidos tanto desde la investiga-
Los cuestionamientos acerca de la naturaleza y cau-
ción arqueológica general como de la paleopatología,
sa de las enfermedades han estado presentes desde
se ha logrado establecer que las actividades curativas
los albores de la vida humana. Los inicios de la concep-
prehistóricas se basaban en una concepción sobrena-
ción magicorreligiosa de la enfermedad se remontarían
tural acerca de las causas de las enfermedades. Los
estudios paleopatológicos han cobrado relevancia
Correspondencia: desde la década de 1960, fecha a partir de la cual
*Walter Lips Castro esta disciplina dejó de ser sólo un complemento para el
Médico Psiquiatra estudio histórico de las enfermedades1. En concordancia
Escuela de Psicología, Universidad de Valparaíso
con dicha creencia, la magia y la religión fueron un
Avenida Brasil, 2140
Valparaíso, Chile
E-mail: [email protected]
Fecha de recepción en versión modificada: 11-03-2014
[email protected]
Fecha de aceptación: 26-03-2014

369
 Gaceta Médica de México. 2014;150 Suppl 3

recurso esencial para la prevención, el diagnóstico y Por consiguiente, en base a estos antecedentes pode-
el tratamiento de las enfermedades. Dado que no hay mos plantear que fueron los egipcios de aquella épo-
evidencia directa de las enfermedades entre los seres ca quienes dieron inicio a una distinción entre un en-
humanos primitivos, se ha recurrido a una variedad de foque sobrenatural y uno natural acerca de las causas
estrategias de investigación indirectas para lograr al- de las enfermedades.
gún conocimiento acerca del mundo prehistórico. Por Con relación a las prácticas curativas que han sido
ejemplo, la figura del curandero de Cro-Magnon en desarrolladas tanto en la prehistoria como en toda la
una pintura rupestre encontrada en los Pirineos sería historia de la humanidad, se puede constatar, en ge-
una prueba de que aquellos seres humanos recurrían neral, que según el enfoque adoptado acerca de la
a lo sobrenatural para el manejo de los enfermos2,3. naturaleza de las enfermedades, es decir, el sobrena-
Como en el contexto de la perspectiva magicorreligio- tural o el natural-racional, ha sido el tipo de práctica
sa se concebía que las causas de las enfermedades sanadora utilizada. En efecto, hasta nuestros días, el
eran sobrenaturales, todos los procesos curativos se quehacer curativo de algunas culturas está estrecha-
fundamentaban en atenuar, o en lo posible combatir, mente vinculado con las creencias que se tiene acer-
dichas causas. Por ejemplo, muchos rituales de sana- ca de las causas de las enfermedades. Por lo tanto,
ción estaban dirigidos a la expulsión de los espíritus las actividades curativas han sido realizadas por agen-
que, habiendo ingresado al cuerpo del enfermo, pro- tes que comprenden desde el sanador-sacerdote y
ducían su estado de enfermedad. Cabe destacar que, brujo de los pueblos primitivos, pasando por los mé-
en general, durante la época antigua se concebía el dicos y filósofos racionales griegos, hasta el médi-
mundo como un lugar donde lo sobrenatural era esen- co-científico de mediados del siglo XIX en adelante.
cial para la supervivencia de los seres humanos, por En el caso específico de la medicina de la civilización
lo tanto, la explicación de todos los fenómenos, inclui- griega antigua, hubo un periodo en el que los procesos
das las enfermedades, se basaba en causas sobrena- curativos estuvieron exclusivamente vinculados a la
turales. Sin embargo, como es bien sabido, durante el perspectiva sobrenatural de la enfermedad. Dicho pe-
desarrollo de la civilización griega comenzó a estable- riodo corresponde al prehipocrático, en el que figura-
cerse un enfoque racional acerca de la naturaleza del ron diversos tipos de sanadores, siempre relacionados
mundo, que incluyó gradualmente a la medicina. con el enfoque sobrenatural. A continuación se descri-
Otras civilizaciones antiguas, como las de Egipto, birán las actividades y los agentes sanadores del pe-
Mesopotamia, India y China, también hicieron intere- riodo prehipocrático de la antigua civilización griega.
santes e influyentes aportes al respecto4,5. Pero el
origen de la perspectiva racional y naturalista de la Medicina prehipocrática
medicina se debe fundamentalmente a la influencia de en la Grecia antigua
la civilización egipcia antigua. Gracias al gran legado
escrito disponible acerca de la medicina del antiguo Como ha ocurrido en distintas civilizaciones de la
Egipto, tales como las minuciosas descripciones mé- Antigüedad, la curiosidad por el origen de la creación
dicas hechas en diversos papiros, como el de Ebers, llevó a los griegos a creer en dioses que interactuaban
por ejemplo, y los apuntes de los médicos de la corte con los seres humanos. La función explicativa de los
de los faraones egipcios del siglo III a. de C., se ha mitos acerca del mundo y la vida humana eran funda-
podido constatar que los egipcios de aquella época mentales para las sociedades antiguas. Aunque en la
no sólo desarrollaron un quehacer médico bajo un historia de la humanidad los diversos mitos eran simi-
enfoque magicorreligioso, sino que también uno racio- lares, la mitología griega ha tenido implicancias impor-
nal y natural, basado tanto en la observación y des- tantes en el desarrollo posterior de las concepciones
cripción de las enfermedades como en algunas teorías de la enfermedad. Por consiguiente, a continuación se
etiológicas naturales6,7. En efecto, en esta civilización realizará una descripción general de los mitos griegos.
se esbozó por primera vez la posibilidad de una cau- El más conocido de éstos con relación a la creación
sa natural de las enfermedades, en la época de Imho- es el que fue narrado por Hesíodo (c 700 a. de C.). El
tep. Un claro ejemplo de esto fue la presencia de tres conocimiento actual de la mitología griega se basa en
tipos de sanadores en Egipto antiguo: el sacerdote de una de sus obras literarias, la Teogonía. Tal como el
Sekhmet, el brujo (sa.u) y el médico laico (swnw). Estos origen del término indica (del griego theos [«dios»] y
últimos representaban a aquellos sanadores que proce- goneia [«descendencia»]), una teogonía es un tratado
dían bajo una concepción natural de las enfermedades7,8. sobre el origen y descendencia de los dioses9. Según
370
 W. Lips Castro, C. Urenda Arias: La medicina en la civilización griega antigua prehipocrática

Hesíodo, aunque se considere una genealogía de los estaba vinculada al oráculo, cuyas sentencias antici-
dioses, el caos habría existido previamente. La idea paban la voluntad del destino (moira). El nombre con
del caos posiblemente fue heredada de los pueblos el que designaban los griegos a quienes eran partíci-
indoeuropeos. Muy resumidamente descrito, el relato pes de la divinidad oracular era el de promante o
de Hesíodo refiere que del Caos original se origina Gaia profeta (del latín propheta, a su vez, del griego pro-
o Gea, la Tierra, y su hijo-consorte, Urano, el cielo. phêtês: pro = antes; phemi = yo hablo; y del sufijo tes
Ambos crearon los animales y los vegetales terrestres, = agente; por lo tanto, significa «quien dice con anti-
así como también a sus hijos, los titanes (Océano y cipo»)21,22. Alrededor del siglo V a. de C., entre los
Cronos, entre otros) y los cíclopes. Posteriormente, Ura- griegos figuraban los iatromantes, término derivado de
no fue derrocado por uno de sus hijos, Cronos. De iatros y mantike, que significan «sanador, médico» y
Cronos y Rea nacieron los dioses olímpicos, entre ellos «adivinación, profecía», respectivamente23. En gene-
Zeus10-12. Respecto a la descendencia de este último, ral, en todas las culturas primitivas el predecesor del
de su relación con una de sus consortes, Letona, nació equivalente al iatromante griego fue el adivino o pro-
Apolo13. La mitología señala que de Apolo y Corónide feta, y tanto el uno como el otro tenían el poder de
nació Asclepio, el dios de la medicina. A su vez, Ascle- conocer el pasado, el presente y el futuro. Sin embargo,
pio tuvo tres hijas –Higiea, Panacea y Yasó– y dos hijos la labor específica del iatromante era la de una medici-
–Macaón y Podalirio–, llamados los asclepíades14. na profética24. En efecto, los iatromantes eran médicos
Aunque en algunas inscripciones micénicas del año adivinos o proféticos que realizaban su labor combi-
1.500 a. de C. ya se vislumbraba el culto a Asclepio, nando procedimientos curativos mágicos con sustan-
sería Homero, alrededor del año 900 a. de C., quien cias, además de encargarse de la curación de las
habría explicitado por primera vez este mito15,16. Los heridas de guerra. Poseían una sabiduría misteriosa,
cultos curativos relacionados con Apolo y Asclepio tu- vinculada a la magia y al misticismo, que les permitía
vieron una larga tradición entre los griegos occidenta- sanar a otros25. Los iatromantes habrían sido los ante-
les. Apolo fue un dios olímpico que se relacionó con el cesores de los filósofos-médicos racionales en Grecia.
oráculo, la profecía, la salud, la curación, la música, la A pesar de que se ha planteado que el iatromante es
poesía y la protección contra las plagas. Por lo tanto, un fenómeno propio de la Grecia antigua, las estrate-
Apolo, como otros dioses griegos, recibió varios epíte- gias sanadoras de estos personajes son coincidentes
tos que reflejaban sus diferentes roles. Con relación a con las usadas por otros sanadores de otras civilizacio-
sus funciones curativas y proféticas destacan los títulos nes antiguas, como la india, la mesopotámica, la de los
Apolo Iatros y Apolo Oulios12,17-19. Los descendientes mongoles, etc. Una figura notable entre ellos fue Parmé-
de Apolo Oulios fueron llamados oulíades, mientras que nides de Elea (entre el 530 y el 515-470 a. de C.). Gracias
los de Asclepio, asclepíades. Tanto los primeros como al descubrimiento arqueológico de una gran construc-
los segundos se relacionaron con actividades curativas. ción, posiblemente un Asclepeion (templo curativo
Sin embargo, otro término vinculado a la sanación fue consagrado al dios Asclepio), se encontraron varias
phôlarchos, que, como veremos más adelante, desig- esculturas, una de las cuales representaría a Parmé-
naba al líder de quienes practicaban el culto a Apolo20. nides. También se encontraron inscripciones, graba-
Finalmente, también se usaba el término iatromante, das posiblemente en la segunda mitad del siglo I d.
cuya referencia era más general, y correspondía a la de C., en las que se leen las palabras oulis, iatros y
de un sanador o médico adivino. En resumen, intentar phôlarcos. Se plantea que a partir de estas inscripcio-
definir las características propias de los sanadores de nes se habría introducido por primera vez en el voca-
la época antigua de Grecia es bastante complejo, sin bulario griego la palabra phôlarcos26.
embargo, se puede afirmar que los sanadores-profetas Nótese que además de los iatromantes los griegos
de la Grecia antigua, cuya labor habría durado por lo antiguos agruparon bajo el término óχλαγωγοí («reuni-
menos 500 años, recibieron diferentes denominaciones: dores de muchedumbre») a una variedad de persona-
oulíades, asclepíades, phôlarcos y iatromantes. jes vinculados a los temas de la salud y la enfermedad:
ριζοτóομος (rizótomos: «cortador de raíces de plantas
Iatromantes mágicas y medicinales»), íατραλεπτης (iatraleptis: «un-
gidor de medicamentos o masajista»), pharmakopolis
En la antigua Grecia se consideraba que la mántica («vendedores de medicamentos»), los ensalmadores,
era lo contrario de la memoria, porque a diferencia de los encantadores o magos, y los καθαρταí (kathartaí:
ésta, la mántica se relacionaba con el futuro. La mántica «purificadores»)24,27,28. En La Ilíada, Homero describió
371
 Gaceta Médica de México. 2014;150 Suppl 3

a los sanadores no racionalistas de aquella época, que esconde en una guarida», es decir, hace referen-
mencionando a los iatro-guerreros Macaón y Podalirio. cia al dios de la incubación30,33.
Por otro lado, en su obra La Odisea nos entrega una
caracterización distinta del curandero no racionalista, Oulíades
describiéndolo como un demiurgo o servidor del pue-
blo. En tal categoría también se ubica a los videntes, Otro término que se relaciona con los procesos de
los cantantes, los artesanos de la madera, entre otros29. sanación de la civilización griega antigua es oulis u ou-
líades, que designa lo relativo a Apolo Oulios. Oulíades
Phôlarcos significa literalmente «hijo de Oulios», pero se refiere a
sus sacerdotes o «descendientes». Esta denominación
La palabra phôlarcos resulta de la combinación de provendría de Asia Menor y derivaría de uno de los títulos
dos vocablos: phôleos y archos. El primero designa la de culto de Apolo Oulios31. Apolo fue un dios de la luz y
guarida o caverna donde se refugian los animales, la curación, pero también de la oscuridad, asociado a las
permaneciendo quietos, como en hibernación. Y el cuevas, al inframundo. Representaba para los griegos la
segundo vocablo designa a señor, jefe, o a quien di- capacidad divina de alcanzar estados de consciencia
rige. En griego antiguo los términos phôleia y phôleu- especial, era el dios del trance, del éxtasis o de los esta-
ien designan estar o yacer en una guarida. Existen dos catalépticos. Era quien podía estar más allá del tiem-
fuentes históricas que han descrito la existencia de la po y el espacio, tenía el poder de estar en cualquier lugar
pholarchoi de Elea, una agrupación de phôlarcos entre y visualizar tanto el pasado como el futuro. Como los
cuyos representantes más conocidos estaban los lla- dioses tienen una faceta destructora, el título Oulios se
mados oulíades, quienes tenían relación con Parméni- vincula tanto con lo destructivo como con lo sanador34.
des, el oulíade, médico y filósofo30-32. Por consiguiente, Por lo tanto, Apolo Oulios es el destructor que sana y
a quienes se les denominaba phôlarcos eran los en- el sanador que destruye. Por su capacidad sanadora
cargados de la guarida. Fueron sanadores cuya acti- también se le denominó Apolo Iatros. En consecuen-
vidad se relacionaba con estados de incubación, pro- cia, Oulis u oulíades es un nombre teofórico («portador
ceso a través del que se lograba la sanación de una de la deidad»), que puede haber sido adoptado por
persona en un contexto de trascendencia. Los rituales todos los phôlarchos que seguían a Apolo Oulios35.
de sanación por medio de la incubación consistían en El arte de la medicina practicada por los oulíades
adentrarse en una gruta, guiados por un phôlarchos, era diferente del de la escuela hipocrática racional. Al
y permanecer allí durante días en completo silencio y respecto, una inscripción incompleta descubierta en
quietud. Era un rito de semihipnosis, semejante a los Elea, que posiblemente señala lo siguiente: «Oulíade,
conocidos en Oriente Medio e India, que permitía la el sanador-profeta de Apolo», nos revela que los ou-
curación de quienes se encontraban enfermos. líades eran hechiceros o curanderos que usaban en-
En general, antes de que surgiera la llamada medi- cantamientos, un procedimiento despreciado por Hi-
cina racional (hipocrática), los enfermos solían dirigir- pócrates de Cos (460-377 a. de C.), pero que fue
se a los lugares de adoración a algún dios, que mu- practicado por curanderos tracios y por algunos filó-
chas veces fue, en sus inicios, una caverna, y que sofos griegos, como Pitágoras (c 569-c 475 a. de C.)
posteriormente fueron templos erigidos para sus cul- y Empédocles (490-430 a. de C.)32. En resumen, los
tos. En esos lugares los enfermos yacían en espera de oulíades eran seguidores de Apolo Oulios que realiza-
su curación25. En el caso particular de la ciudad de ban prácticas sanadoras. Esta divinidad tenía sus ado-
Elea, a quienes se les llamaba phôlarcos se les rela- radores en diversos lugares, como Mileto, Elea (Velia)
cionaba con el dios Apolo. Posteriormente, y gracias y las islas de Delos y Cos. Finalmente, cabe mencionar
a la fama que adquirió como sanador divino, el hijo de que entre los oulíades destacó Parménides, quien,
Apolo, Asclepio, se convirtió en el dios griego más además de filósofo, fue un sanador-adivino, un símil
famoso vinculado con la incubación, y compartió los del chamán en un contexto apolíneo en el que se
templos de Apolo. Uno de los centros más importantes practicaba un culto extático iatromántico36,37.
de adoración a Apolo estaba en Mileto, desde donde
se transmitió el culto a Istria, antigua colonia griega a Asclepíades
orillas del Mar Negro, donde se encontró una inscrip-
ción en mármol con dos palabras: Apolo phôleutêrios. Tanto a Apolo Oulis como a Asclepio se les rendía
Se ha planteado que esta frase significaría «Apolo el culto en diversos templos, en los que había una cofradía
372
 W. Lips Castro, C. Urenda Arias: La medicina en la civilización griega antigua prehipocrática

de sanadores, los oulíades y los asclepíades, respec- un conocimiento obtenido a través de la incubación41.
tivamente. Cuando nació Asclepio, su padre delegó su Sin embargo, en la civilización griega antigua la sana-
educación al centauro Quirón, quien era sabio en las ción mediante la profecía gradualmente fue sustituida,
artes de la magia antigua, de la música y de la medi- aunque no del todo desplazada, por una nueva medi-
cina. Una vez que Asclepio aprendió todo lo que Qui- cina, basada en un marco teórico racional acerca de la
rón sabía se fue a ejercer sus artes a las ciudades salud y la enfermedad. Por lo tanto, a pesar del antedi-
griegas. Su éxito fue tal, que su fama como médico se cho proceso de cambio que se generó en la Grecia
difundió ampliamente. Con el pasar del tiempo, Apolo antigua, no se produjo el abandono total de la perspec-
abdicó de su papel como dios de la medicina, otor- tiva primitiva42.
gándole dicho rol a su hijo Asclepio. Aunque existe A medida que, gradualmente, la medicina fue con-
disputa acerca de la etimología del nombre Asklepios siderada como una téchnê humana, hubo una amplia
(Asclepio), algunos sugieren que el nombre inicial de gama de personas que reclamaban detentar el rol de
esta divinidad fue Epios (epios en griego significa iatros (iatroi, de iatros, que deriva de iaomai, que sig-
«dulzura, bondad, calma»), ya que se le caracterizaba nifica «sanar»), o médico, o también llamado sanador
por su dulzura y su calma. Sin embargo, después de racionalista. En este contexto, los escritores y segui-
que sanó a Askles, un tirano de Epidauro, se le co- dores del Corpus Hipocrático se esmeraron en sepa-
menzó a llamar Asklepios16,38. rarse de aquellos que ellos consideraban charlatanes
El culto a Asclepio se habría originado en las pro- e incluso de quienes, aunque practicaban como mé-
vincias rurales de la antigua Grecia. La aceptación dicos (sanadores racionalistas), no coincidían con las
general de Asclepio como un dios en el mundo griego teorías establecidas en el Corpus43. La medicina em-
se habría producido cuando se consagraron templos pírica, natural y racional fue posicionándose gradual-
en su honor, como el Asclepeion de Epidauro, y, pos- mente como una téchnê, hasta establecerse como la
teriormente el de Atenas en el año 420 a. de C. Su corriente médica principal del siglo V a. de C. Con
culto se extendió a gran parte de Asia Menor, Cartago relación al significado del término griego téchnê, no
y Egipto, principalmente gracias a la devoción que le existe en la lengua castellana una palabra que integre
prodigaba Alejandro Magno (356-323 a. de C.). Ade- todo su significado, sin embargo, se ha señalado que
más, Asclepio fue uno de los primeros dioses extran- la téchnê es «ciencia, arte, técnica, oficio y profesión».
jeros aceptados en Roma16,39. Los primeros asclepía- Para los griegos el término téchnê estaba referido a
des fueron los hijos de Asclepio y Epione: Podalirio y una habilidad mediante la cual se transformaba una
Macaón. Fueron héroes griegos que comandaron tro- realidad natural en una realidad «artificial». Pero era
pas desde el noreste de Tesalia (Tricala) para luchar una habilidad basada en reglas. Por lo tanto, en ge-
en la guerra de Troya, destacando como guerreros y neral, téchnê constituye una serie de reglas por medio
sanadores40. Ya en la segunda mitad del siglo VI a. de de las cuales se consigue algo44,45. En general, para
C., a la mayoría de quienes ejercían la medicina en el griego promedio de este periodo todos los enfoques
Grecia se les correlacionaba con los asclepíades. Sin curativos eran válidos, porque la restauración de su
embargo, el título de asclepíade se otorgaba especial- salud era su principal preocupación. Sin embargo, los
mente a médicos notables. Platón (427-347 a. de C.), sanadores racionalistas, seguidores de las obras hipo-
por ejemplo, hace referencia especial a Hipócrates cráticas, argumentaban la importancia de sus plantea-
como el «Asclepíade», y lo mismo hizo Aristóteles mientos, destacando que la medicina que practicaban
(384-322 a. de C.) al denominarlo el «líder de los As- merecía una denominación distinta y un lugar especial
clepíades»16. Es interesante destacar que se ha des- dentro del quehacer curativo de aquella época. En
crito que hubo un relato poco confiable en el que consecuencia, en los textos hipocráticos, respecto a
Galeno habría señalado la existencia de tres grupos la técnica o el arte aplicado a sanar a los enfermos,
de asclepíades en los que residía el conocimiento se estableció que la medicina era un arte, una técnica,
médico de la época: los de la isla Cos, los de Cnido la téchnê iatrikê23,29. Sin embargo, la medicina com-
y los de Rodas31. prende la ciencia (episteme), además del arte de curar
En resumen, previo al siglo V a. de C., los términos (ars medicina o téchnê iatrikê). En efecto, Hipócrates
iatromantes, phôlarcos, oulíades y asclepíades se re- caracterizó a la medicina como un saber técnico
ferían a sanadores cuyo trabajo se realizaba en un (téchnê) relacionado con la ciencia (episteme)46.
contexto sobrenatural de la enfermedad. En general, Se ha señalado ampliamente que Hipócrates fue
obraban mediante estados de trance o éxtasis, y con quien estableció una medicina basada en la búsqueda
373
 Gaceta Médica de México. 2014;150 Suppl 3

de explicaciones racionales acerca de las causas de y que, por lo tanto, sólo se podía sanar por medio de
la enfermedad, en lugar de la superstición y la magia. oraciones. Por el contario, en dicha obra se señalaba
Pero debe notarse que la medicina racional hipocráti- que tal enfermedad no era causada por los dioses,
ca de la escuela de Cos tuvo sus características es- sino que se debía a causas naturales.
pecíficas que la diferenciaron de otra escuela, la de
Cnido. En efecto, la escuela de Cos se caracterizó por Factores influyentes para el desarrollo de
enfatizar al enfermo antes que la enfermedad; en cam- la medicina griega natural-racional
bio, la de Cnido centraba su atención en la enferme-
dad propiamente como tal. Esta última enfatizaba el Respecto al proceso de transición desde la concep-
diagnóstico, mientras que la primera el cuidado del ción sobrenatural a la natural de la enfermedad, dos
paciente y el pronóstico de su estado24,47,48. Toda la aspectos son esenciales. El primero ocurre en la civi-
obra hipocrática está constituida por más de 50 trata- lización egipcia antigua, hace aproximadamente 5,000
dos bastante heterogéneos, que habrían sido escritos años, con el surgimiento de la teoría del whdw. Este
entre el año 420 y 350 a. de C., y que constituyen los término egipcio designaba al agente etiológico básico
primeros escritos griegos relativos a temas médicos. de distintas enfermedades y se relacionaba con las
A pesar de su heterogeneidad, el tema central común materias fecales del intestino. Los egipcios asumían
de la obra hipocrática es la sistematización de una que los seres humanos eran susceptibles de enfermar
perspectiva natural y racionalista de la medicina. Ade- debido a la putrefacción intestinal. Consideraban que
más, en esta obra se distinguió que los médicos que la descomposición intestinal no sólo era un peligro
practicaban una medicina natural y racional eran de- constante, sino también ineludible. Sabían que los ali-
nominados iatroi (plural de iatros)8. Es interesante des- mentos eran necesarios para mantener la vida, pero
tacar que algunas de las obras del Corpus Hipocrático que a medida que avanzaban por el tracto intestinal
habrían sido escritas por Hipócrates, sin embargo, no estaban sujetos a procesos de descomposición con
se sabe con certeza cuáles y cuántas escribió. Según generación de sustancias pútridas. Si estas sustancias
Platón y Aristóteles, la obra Prognosis, junto a otras, pútridas contaminaban otras partes del cuerpo, se
como Epidemias, Aires, aguas y lugares, Sobre la En- presentaban enfermedades7,51.
fermedad Sagrada y la mayor parte de los tratados El conocimiento médico de la civilización egipcia
quirúrgicos, habrían sido escritas por Hipócrates. Nó- antigua, con sus dos grandes escuelas médicas, la de
tese que con relación a la obra Sobre la Enfermedad Imhotep y la de Heliópolis, ejerció una importante in-
Sagrada es prácticamente unánime la opinión de que fluencia sobre otras civilizaciones. Con relación a la
no sería obra de Hipócrates y que habría recibido una difusión de la teoría de los residuos putrefactos hacia
fuerte influencia de Alcmeón de Crotona49. la Grecia antigua, según el papiro Anónimo Londinen-
Con relación a la formación médica tradicional de la se, es posible que la teoría del whdw o de los residuos
antigua Grecia, se caracterizó por ser intrafamiliar y putrefactos hubiera sido adoptada por primera vez en
oral hasta que aparecieron los primeros tratados mé- la medicina griega antigua gracias al médico griego
dicos técnicos. A pesar de que hubo personas que autor de las Sentencias cnidias, Eurifón de Cnidos
pretendieron pertenecer a los iatroi («médicos») sin (mediados del siglo V a. de C.), quien sustituyó el
someterse a los procesos de capacitación adecuados, término whdw por peritomata7,52,53.
gradualmente se estableció la distinción en base a que El segundo aspecto influyente en el cambio de la
el verdadero iatros, a diferencia de los otros curande- concepción sobrenatural a la natural de las enferme-
ros, sólo hacía uso de terapias naturales. En el Corpus dades, con el consiguiente desarrollo de la medicina
Hipocrático pueden encontrarse muchas denuncias no racional-natural, se debe a la obra del primer filósofo
sólo contra los médicos malos o inexpertos, sino tam- griego, Tales de Mileto (624-546 a. de C.). Este pen-
bién contra los fraudes, curanderos y charlatanes, a sador, junto a Anaximandro (611-546 a. de C.), esta-
quienes se les llamó aniatroi (literalmente, «no médi- bleció las bases para que se iniciara la transición de
cos») o alazones (literalmente, «jactanciosos»)50. En la cosmogonía griega, religiosa y mítica a un enfoque
uno de los tratados del Corpus, Sobre la Enfermedad natural y racional acerca del mundo. Por lo tanto, con
Sagrada, se alude con sarcasmo a las afirmaciones y desde Tales de Mileto comienza el abandono de las
que los purificadores y charlatanes habían establecido causas sobrenaturales, postura que permitirá el surgi-
respecto a la «enfermedad sagrada», es decir, a que miento posterior de la idea filosófica de la physis. Los
la epilepsia era causada por un ataque de los dioses, cuestionamientos acerca de la naturaleza primaria
374
 W. Lips Castro, C. Urenda Arias: La medicina en la civilización griega antigua prehipocrática

del mundo, cuyas respuestas previas a Tales teoría egipcia de los residuos putrefactos (whdw), y
eran míticas y religiosas, serán, a partir de este por otro, a la obra de pensadores que, a partir de
filósofo, racionales y naturales. En efecto, para Tales de Mileto, tuvieron la creatividad de plantear un
Tales el mundo estaba fundamentalmente com- enfoque renovado, natural y racional del mundo. Fue
puesto por agua. Por su parte, Anaximandro, con éste el contexto propicio para que bajo el ingenio de
una notable creatividad abstracta, señaló que el origen Hipócrates se desarrollara una medicina técnica, ba-
de todo es el apeiron, lo ilimitado4. El intento por sada en la razón y en la experiencia.
explicar el mundo y, en consecuencia, la enferme-
dad, sin recurrir a lo sobrenatural sino a la razón y Bibliografía
a fundamentos naturales es la principal contribu-
1. Aufderheide A, Rodríguez-Martín C. The Cambridge Encyclopedia of
ción de los griegos al mundo occidental, prueba Human Paleopathology. Cambridge University Press; 1998. p. 8.
de ello es el naturalismo racional propuesto por los 2. Guthrie D. La génesis de la medicina. En: Historia de la medicina.
Guthrie D. Salvat Editores S.A.; 1953. p. 1-20, p. 1-2.
milesianos del siglo V a. de C. En este contexto se 3. Haggard H. Un desconocido héroe de la medicina. En: El médico en la
historia. Haggard H. Editorial Sudamericana; 1952. p. 15-22, p. 21.
constituye la medicina como un saber técnico (ars 4. Grant E. Ancient Egypt to Plato. En: A History of Natural Philosophy.
medica, téchnê iatrikê), fundado sobre el conocimien- From the Ancient World to the Nineteenth Century. Grant E. Cambridge
University Press; 2007. p. 1-26, p. 1, 2 y 8.
to científico de la naturaleza (la physiología)54,55. 5. Subbarayappa BV. The roots of ancient medicine: an historical outline.
Journal of Biosciences-Bangalore. 2001;26(2):135-143, 137 y 138.
En resumen, tanto el aporte de la teoría natural de 6. Jaeger W. La medicina griega, considerada como Paideia. En: Paideia:
los residuos putrefactos de la medicina egipcia anti- Los ideales de la cultura Griega. Jaeger W. Fondo de Cultura Económi-
ca; 2001. p. 5-57, p. 7 y 8.
gua como de la filosofía presocrática iniciada por Tales 7. Pérez Tamayo R. La enfermedad como fenómeno natural. En: El concepto
de Mileto permitieron que con gradualidad, pero con de enfermedad. Su evolución a través de la historia. Pérez Tamayo R. Tomo
I. Fondo de Cultura Económica; 1988. p. 65-89, p. 67, 72, 73, 74 y 75.
firmeza, se instalara una concepción naturalista y ra- 8. York W. Education and Training: Learned and non-Learned. En: Health
and Wellness in Antiquity through the Middle Ages. York W. ABC-CLIO,
cional de la enfermedad, es decir, la episteme de la LLC; 2012. p. 17-42, p. 23.
medicina. Esto, a su vez, fundamentó un arte de curar 9. Dowden K. Telling the Mythology: From Hesiod to the Fifth Century. En:
A Companion to Greek Mythology. Dowden K. Blackwell Publishing Ltd.;
(ars medicina o téchnê iatrikê) basado en la experien- 2011. p. 47-72, p. 48.
10. Eliade M. Zeus y la religión griega. En: Historia de las creencias y las ideas
cia, en causas naturales y en estrategias racionales. religiosas. Eliade M. Vol. 1. Paidós; 2010. p. 321-40, p. 321, 322 y 323.
11. Jaeger W. The Theology of the Greek thinkers. En: The Theology of the
Early Greek Philosophers. Jaeger W. The Gifford Lectures 1936, Oxford
Conclusiones at the Clarendon Press; 1948. p.1-17, p. 13 y 14.
12. Daly K. Greek and Roman Mythology A to Z. Facts On File, Inc.; 2004.
p. ix, 12, y 13.
En la civilización griega antigua, la actividad médica 13. Eliade M. Los olímpicos y los héroes. En: Historia de las creencias y las
ideas religiosas. Eliade M. Vol. 1. Paidós; 2010. p. 341-71, p. 345.
previa a la doctrina hipocrática se caracterizó por la 14. Rose H. The younger gods. En: A Handbook of Greek Mythology. Rose
presencia de una diversidad de cultos y seguidores H. Taylor & Francis e-Library; 2005. p. 111-36, p.115 y 116.
15. Mercatante A. The Facts on File Encyclopedia of World Mythology and
de sanadores que concebían el origen de las enfer- Legend. Facts On File, Inc.; 2009. p. 111 y 112.
16. Bailey J. Asklepios Ancient Hero of Medical Caring. Ann Intern Med.
medades como sobrenatural. Por esta razón, su que- 1996;124:257-63.
hacer curativo se basaba en rituales vinculados a lo 17. Graf F. Apollo, God of Healing. En: Apollo, Taylor & Francis Group. Graf
F; 2009. p. 65-83, p. 68, 69 y 70.
mágico y lo religioso. Estos sanadores fueron denomi- 18. Graf F. Gods in Greek inscriptions: some methodological questions. En:
The Gods of Ancient Greece Identities and Transformations. Identities
nados de diferentes maneras. Las denominaciones and Transformations. Bremmer J. Edinburgh University Press; 2010. p.
asclepíades y oulíades que algunos de dichos sana- 55-80, p. 73 y 74.
19. March J. Cassells Dictionary of Classical Mythology. Cassell and Co.;
dores recibieron se correlacionó con la creencia y el 2001. p. 110-6, 139, 140 y 141.
culto a los dioses Asclepio y Apolo, respectivamente. 20. Lomas K. Ritual and Society: Cults and Cultural Transition. En: Rome
and the Western Greeks, 350 BC - AD 200 Conquest and Acculturation
Con relación al término phôlarcos, su uso estaba es- in Southern Italy. Lomas K. Taylor & Francis e-Library; 2005. p. 126-41,
p. 136 y 137.
trechamente vinculado a quienes se encargaban de 21. Ustinove Y. Oracles and Caves. En: Caves and the Ancient Greek Mind.
los procesos incubatorios, que, a su vez, se relaciona- Ustinove Y. Oxford University Press; 2009. p. 53-155, p. 114.
22. López Moreno Á. Orígenes de la idea de hermenéutica: supuestos
ban, inicialmente, con el culto al dios Apolo, y, poste- terminológicos, históricos y filosóficos para una aproximación a la her-
menéutica jurídica. Anales de Derecho. 1985;8:33-60, p. 46.
riormente, con el culto a Asclepio. Por otro lado, es 23. Preus A. Historical Dictionary of Ancient Greek Philosophy. The Scare-
interesante notar que la referencia del término iatro- crow Press, Inc.; 2007. p. 144, 163, 258 y 259.
24. Rinella M. Medicine, Drugs, and Somatic Regimen. En: Pharmakon:
mante era más general, ya que sólo hacía alusión al Plato, drug culture, and identity in ancient Athens. Rinella M. Lexington
poder sanador mediante la adivinación, sin referirse a Books; 2010. p. 149-72, p.152, 154 y 155.
25. Kingsley P. Iatromantis. En: En los oscuros lugares del saber. Kingsley
algún culto específico. P. Ediciones Atalanta, S.L.; 2010. p. 98-102.
26. Rocca-Serra G. Parménide et les médecins d’Elée. Histoire des Scienc-
El gradual proceso de adquisición de una perspec- es Médicales París. 1985;19(2):169-74, p. 170.
tiva naturalista y racional de la enfermedad en la Gre- 27. Eidinow E. A Lapse into Unreason. En: Oracles, Curses, and Risk among
the Ancient Greeks. Eidinow E. Oxford University Press; 2007. p. 26-41,
cia antigua se debió, por un lado, a la influencia de la p. 27.

375
 Gaceta Médica de México. 2014;150 Suppl 3

28. Gil L. Medicina, religión y magia en el mundo griego. Cuadernos de Filología 43. Kosak J. Introduction. En: Heroic Measures. Hippocratic Medicine in the
Clásica. Estudios griegos e indoeuropeos. 2001;11:179-98, 192 y 193. Making of Euripidean Tragedy Studies in Ancient Medicine. Kosak J.
29. Kosak J. The Healing Art. En: Kosak, Jennifer, Heroic Measures. Hippo- Leiden: Koninklijke Brill NV; 2004. p. 19-41, p. 14.
cratic Medicine In The Making Of Euripidean Tragedy Studies in Ancient 44. Ferrater Mora J. Diccionario de filosofía. Editorial Sudamericana; 1964.
Medicine. Leiden: Koninklijke Brill NV; 2004. p.19-41, p. 21 y 30. p. 763.
30. Kingsley P. Amos de los sueños. En: En los oscuros lugares del saber. 45. Audi R. The Cambridge Dictionary of Philosophy. Cambridge University
Kingsley P. Ediciones Atalanta; 2010. p. 77-85, p. 78. Press; 1999. p. 904.
31. Nutton V. Healers in the medical market place: towards a social history 46. Ivanovic-Zuvic F. Consideraciones epistemológicas sobre la medicina y
of Graeco-Roman medicine. En: Medicine in Society Historical Essays. las enfermedades mentales en la antigua Grecia. Rev Chil Neuro-Psiqui-
Wear A. Cambridge University Press; 1992. p. 15-58, p. 18. at. 2004;42(3):163-75.
32. Ustinove Y. Sages and Philosophers. En: Caves and the Ancient Greek 47. Pikoulis E. Evolution of medical education in ancient Greece. Chin Med
Mind. Ustinove Y. Oxford University Press; 2009. p. 177-217, p. 194 y 197. J. 2008;121(21):2202-6.
33. Chiekova D. Cultes et vie religieuse des cités grecques du Pont Gauche 48. Turgut M. Ancient medical schools in Knidos and Kos. Childs Nerv Syst.
(VII-I siècle avant JC). Berna: Peter Lang S.A. Editions Scientifiques 2011;27:197-200.
Internationales; 2008. p. 15-70, p. 39 y 40. 49. Outes D, Orlando, J. Alcmeon de Crotona (El cerebro y las funciones
34. Kingsley P. Apolo. En: En los oscuros lugares del saber. Kingsley P. psíquicas). Revista Neuropsiquiatría y Salud Mental (Arg.). 1982;XIII(1-
Ediciones Atalanta, S.L.; 2010. p. 86-90, p. 89 y 90. 2):53-64.
35. Kingsley P. El hombre con toga. En: En los oscuros lugares del saber. 50. Dean-Jones L. Literacy and the Charlatan in Ancient Greek Medicine.
Kingsley P. Ediciones Atalanta, S.L.; 2010. p. 58-62, p. 59 y 60. En: Written Texts and the Rise of Literate Culture in Ancient Greece.
36. Bernal S. Parménides el poema y su datación. Ontology Studies. Yunis H. Cambridge University Press; 2003. p. 97-121, p. 106.
2011;11:297-331. 51. Magner L. Medicine in Ancient Civilizations: Mesopotamia and Egypt.
37. Nutton V. Before Hippocrates. En: Ancient Medicine. Nutton V. Rout- En: A History of Medicine. Magner L. Taylor & Francis Group; 2005. p.
ledge, Taylor and Francis Group; 2004. p. 37-52, p. 46. 25-51, p. 42 y 43.
38. Edelstein E. Deification and Divine Nature. En: Asclepius: Collection and 52. Shafik A, Elseesy W. Medicine in Ancient Egypt. En: Medicine across
interpretation of the testimonies. Vol. 1. Edelstein L (Ed.). The Johns cultures history and practice of medicine in non-Western cultures. Selin
Hopkins University Press; 1998. p. 108-78, p. 125 y 126. H. Kluwer Academic Publishers; 2003. p. 27-47, p. 43.
39. Veith I. The physician. Priest, Craftsman or Philosopher?. California Med- 53. López Piñero J. Pedro Laín Entralgo y la Historiografía Médica. Real
icine. 1970;113(3):20-6. Academia de la Historia. Madrid, España. 2005. p. 93.
40. Grote G. Arcadian Genealogy. En: A History of Greece. Grote G. Vol. 1. 54. Pérez Tamayo R. La teoría humoral de la enfermedad. En: El con-
Printed by Richard and John E. Taylor; 1849. p. 173-83, p. 180. cepto de enfermedad. Su evolución a través de la historia. Pérez
41. Kingsley P. Éxtasis. En: En los oscuros lugares del saber. Kingsley P. Tamayo R. Tomo I, Fondo de Cultura Económica; 1988. p. 95-151,
Ediciones Atalanta, S.L.; 2010. p. 103-11, p. 106 y 107. p. 105 y 107.
42. Kiple K. History of Western Medicine from Hippocrates to Germ Theory. 55. Laín Entralgo P. La medicina hipocrática. Revista de Occidente, p. 1.
En: The Cambridge World History of Human Disease. Kiple K. Cam- (serial online) 1970 (Consultado el 25 de octubre de 2013). Disponible
bridge University Press; 1993. p.11-9, p. 11. en: http://www.cervantesvirtual.com.

376