Podas en Los Mangos

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PODAS EN LOS MANGOS

La implementación de podas técnicas en el cultivo de mango del Alto Magdalena


Tolimense, pueden llegar a generar un impacto altamente positivo en este sistema
productivo, teniendo en cuenta que, el mayor porcentaje de área establecida con
la especie tiene más de quince años; por lo tanto, son árboles que exigen un
manejo que permita alargar su vida productiva y aumento de rendimientos por ha.
La poda tiene como principales objetivos: • Formar un árbol más productivo. •
Facilitar las labores agrícolas como raleo, fumigaciones y cosecha. • Obtener un
balance entre el crecimiento vegetativo y reproductivo. • Promover la entrada de
luz y aire. • Reducir las condiciones favorables para la incidencia de plagas. •
Producir frutas de mejor calidad. • Optimizar la arquitectura del árbol. El manejo de
los cultivos es fundamental para asegurar buenos rendimientos y un producto de
buena calidad. Cuando se siguen correctamente los procedimientos para el
manejo de los cultivos, se contribuye a la protección del medio ambiente, al
desarrollo económico, la viabilidad económica del cultivo, la buena salud de los
trabajadores y de los consumidores. Los árboles de mango no se deben dejar a
libre crecimiento, se deben podar para lograr el equilibrio entre la actividad
vegetativa y la producción. Bajo las condiciones de suelo y clima existentes en el
municipio de El Espinal, el árbol de mango con normalidad tiende a crecer
rápidamente. La poda es quizás el procedimiento más importante para su manejo
y se sugiere, de ser posible, el uso racional y adecuado de retardantes de
crecimiento con la supervisión de un experto. Un árbol de porte bajo facilita la
recolección de frutos, disminuye problemas sanitarios como mosca de la fruta y
antracnosis, y facilita la realización de prácticas culturales y de manejo. Son
diversas las técnicas y dependerán mucho del sistema productivo que se desee
implementar:

• Utilizar un método de poda para la obtención de plantas compactas, reducir el


crecimiento de la planta, que sea compatible con el espaciamiento entre hileras
con el fin de facilitar hacia el futuro el manejo y la cosecha.• La poda de
producción debe implementarse con base en despuntes de brotes maduros,
siempre y cuando el tamaño del árbol lo permita.• La altura de la planta máxima no
debe superar el 60% de la distancia entre líneas, y la copa no debe proyectar a
más de 45% de la distancia entre surcos, para evitar el entrelazado de las plantas.
Los árboles nunca deberán tocar copa entre sí.• Durante la etapa reproductiva se
deben limpiar las ramas para eliminar restos de flores secas o dañadas por
enfermedades, las panículas improductivas y los frutos enfermos o malformados y
en lo posible las hojas que están muy cerca de los frutos (García L.J.; Sandoval
A.A., 2011).La poda tiene implicaciones en aspectos sanitarios muy importantes,
debido a que en una copa cerrada hay un ambiente favorable para plagas y
enfermedades tales como antracnosis, moscas de la fruta, escamas, fumagina o
algas. Al disminuir estos problemas, la cantidad de plaguicidas que se tiene que
utilizar es menor y al estar más abierta la copa, la eficacia de los productos es
mayor (Montero J.M.; Gamboa P.J., 2002). La altura final de los árboles de mango
debe ser planificada dependiendo del sistema de manejo seleccionado, pero se
deberá tener en cuenta que suelos fértiles y profundos favorecerán el desarrollo
exuberante de la copa. Primera poda en mango (Izq.). Planta producto de podas
(Der). Figura 8. Fuente: Montero J.M., 2002.

Existen diferentes tipos de poda para diversos propósitos, tales como la formación
de la planta, el control gradual del tamaño del árbol, la renovación de la copa de
árboles viejos y la eliminación de ramas viejas, todo esto con el propósito de
permitir una mayor penetración de luz al interior de la copa y estimular la floración.
En una plantación adulta de mango, mayor de 10 años, hay que realizar un
programa de podas que incluye: podas de renovación (dejando la misma copa o
injertando otra variedad), aclareo de las copas, desplumarle y eliminación de los
raquis secos, incluyendo la yema floral (Bernal E.J.; Díaz D.C., 2007).

7.1Poda de formación La poda de formación consiste en la eliminación de brotes


indeseados desde la germinación de las plantas y posteriormente en el despunte
de los árboles en el campo, para el estímulo de ramas laterales y con el propósito
de formar adecuadamente la copa de estos. Se efectúan los primeros estadios de
la planta, para proporcionar una estructura adecuada de las ramas, buscando una
inserción equidistante entre éstas, para que los racimos y la cosecha se
distribuyan mejor, evitando el desgarramiento de las ramas por el peso de los
frutos (Gavilán et al., 2000). El corte del despunte para árboles en formación
deberá hacerse por debajo del entrenudo seleccionado. La altura más apropiada
depende de la variedad, el patrón y las condiciones climáticas, en términos
generales va a 40cm altura. Una vez que el injerto tiene alrededor de 80cm, aún
en el vivero, se debe podar para engrosar el tallo e iniciar la ramificación. En los
‘arbolitos ‘jóvenes se deben seleccionar 4 ramas que estén bien distribuidas,
separadas 120 grados una de la otra (que no salgan del mismo punto en el
tronco), para balancear la copa del árbol. Estas ramas se despuntan a los 50 cm,
para que engruesen y, así, estimular el desarrollo de ramas secundarias. De estas
ramas secundarias, se vuelve a seleccionar tres brotes de cada rama para tener
un total de nueve ramas. Cuando estas ramas han alcanzado unos 80 cm, se
vuelven a podar a los 40 y/o60 cm. De estos nuevos brotes, se seleccionan tres
por rama, de tal manera que, al cabo de esta poda, el árbol tenga una estructura
de 27 ramas. Otras prácticas que se deben ejecutar en esta etapa son la
eliminación de chupones, de hijos del patrón, ramas que se entrecruzan, ramas
verticales y ramas muy próximas al suelo (Montero J.M.; Gamboa P.J., 2002).

7.2Poda de producción, poda de mantenimiento y poda sanitaria Esta poda


conjuga una serie de prácticas que pueden ser usadas individualmente, o en
conjunto, y pretende estimular la brotación de los árboles, obtener una producción
equilibrada, árboles sanos y en general un mantenimiento adecuado, hacia la
búsqueda de mayor producción y mejor calidad de la fruta. Esta poda se lleva a
cabo en plantaciones en producción con miras a renovar el tejido y balancear el
árbol entre el crecimiento vegetativo y productivo; ralear ramas y cosechar más
fácilmente; podar ramas muy cercanas al suelo; eliminar ramas improductivas,
enfermas, secas y eliminar inflorescencias, flores o frutos. Este sistema incluye la
poda sanitaria, que consiste en cortar partes enfermas del árbol con lo que se
evita la presencia, propagación y posterior daño del árbol tanto en hojas, frutos,
ramas, corteza y raíces. Se debe realizar preferiblemente después de cada
cosecha. (Bernal E.J.; Díaz D.C., 2007). En ocasiones se hace poda de frutos con
el fin de mejorar el tamaño y/o apariencia de los frutos restantes, a esto también
se le conoce como raleo de frutos. En esta etapa la cantidad de follaje que se
poda no debe pasar del 25% del total de la copa del árbol, pues se puede
provocar que el árbol pase durante un año en fase vegetativa. (Montero J.M.;
Gamboa P.J., 2002).

7.3Poda de aclareo de copa En algunos huertos se presentan árboles con las


copas muy densas, lo que resta iluminación dentro del árbol, afectando las ramas
bajeras. Las ramas que no reciben buena luz son improductivas y dan mangos sin
color o con poca coloración, además, se aumenta la pudrición de frutos por ataque
de antracnosis y moscas de las frutas. Para evitar esto, es conveniente organizar
la copa del árbol quitando las ramas altas centrales que impiden la entrada de la
luz a las ramas internas y más bajas, mediante la denominada poda de aclareo de
copas. Esta poda consiste en la remoción de las ramas, en el centro de la copa
para permitir una adecuada aireación e iluminación solar a la misma (Rao y
Khader, 980). Al realizar esta práctica se debe cuidar de no exagerar la poda.
Siempre se deben dejar ramas productivas que se cortarán en la segunda etapa
de aclareo, cuando estén en la etapa de reposo, es decir, en la fase no productiva.

7.4Poda de brotes o desplumille posterior a las podas de aclareo y de renovación


de copa, se realiza la poda de brotes o yemas latentes que emergen después del
corte, denominado desplumille y consiste en quitar la brotación sobrante que se da
en las ramas que han sido podadas, para evitar que compitan con los renuevos
definitivos, que serán los responsables de la futura producción.
Estos brotes pueden ser eliminados cuando están tiernos con la mano o con
tijeras podadoras. Esta es una práctica corriente en todos los huertos y consiste
en eliminar chupones, ramas y ramillas que proliferan en las ramas centrales que
son improductivas, impiden la entrada de luz y producen un ambiente húmedo en
la copa. Además, favorecen la presencia de enfermedades por aumento de la
humedad relativa en la copa (Reyes yLario, 2002). Cuando crecen los brotes se
debe eliminar una parte de ellos, para evitar exceso de follaje dejando algunos
bien ubicados en las ramas. En un huerto viejo, esta práctica es importante y se
debe hacer gradualmente, para no afectar severamente la cosecha. Se puede
hacer alternadamente, podando filas completas de árboles o árboles dentro de las
filas. En zonas muy secas se debe hacer la poda parcial para evitar exceso de
estrés a los árboles que en ocasiones pueden morir. Aunque la poda se puede
hacer en forma total, es preferible realizarla por etapas, para causarle menos
estrés al árbol. Se puede eliminar media copa y cuando salgan los brotes, se corta
la otra media parte (Reyes y Larios, 2002). Una planta a la que se le ha realizado
una poda de renovación entrará en producción aproximadamente dos años
después de la poda. De otro lado, si se pretende cambiar la copa del árbol, se
injertan los brotes que emergen luego de la poda de renovación, con yemas
procedentes de la nueva variedad que se quiere propagar. El método más común
de enjertación es el de yema terminal en bisel o en púa. Una vez que hay
prendimiento y que los injertos han crecido, se eliminan tanto los brotes
indeseados, como los injertos que no prendieron (Bernal E.J.; Díaz D.C., 2007).
7.5Poda de rejuvenecimiento y renovación de la copa Se realiza en árboles viejos
demasiado frondosos, en árboles con daños físicos o patológicos que pueden
renovarse total o parcialmente. Se puede pensar en cambiar la variedad, mediante
la eliminación de la copa y posterior injertación con otra variedad (renovación). La
poda de rejuvenecimiento consiste en cortar la copa del árbol hasta el comienzo
de las ramas principales, estimulando crecimientos nuevos que serán
seleccionados como futuras ramas productivas.7.6Poda de los raquis secos
Después de la cosecha, quedan en los extremos de las ramas los raquis secos
donde estaban los frutos. Estos materiales deben ser retirados de los árboles
porque son fuente de inóculo de patógenos que causan enfermedades y
pudriciones. Esta poda consiste en eliminar la yema florífera por encima del nudo
para evitar la proliferación de brotes. También se ha observado que estimula y
uniformiza la floración en la copa (Reyes y Larios, 2002).

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