Cap 14 Conductas Innatas o Genotipicas
Cap 14 Conductas Innatas o Genotipicas
Cap 14 Conductas Innatas o Genotipicas
LOS REFLEJOS.
Los reflejos puros son respuestas innatas de los seres vivos, automáticos,
locales, involuntarios y por lo tanto no mentales sino fisiológicos.
Se diferencia con los reflejos condicionados pavlovianos en que estos, son
mentales y son adquiridos
Los reflejos puros son relativamente sencillos, pero a pesar de ello, para la
integración de su circuito, se hace necesario que se conecten por lo menos dos
tipos de neuronas especializadas, una sensitiva y otra motriz.
Los reflejos característicos son el hipo, la tos, el rotuliano, el de acomodación del
cristalino y el pupilar.
LOS TROPISMOS.
El instinto, del latín instinctus, impulso, desde su origen significó una reacción
animal, irreflexible, inconsciente y contraria a la razón o a la inteligencia.
El instinto es:
El comportamiento innato y representativo de la especie, en el que no participa la
inteligencia.
Es el modo de reaccionar de los seres vivos, para actuar sin el recurso del
aprendizaje o de la experiencia.
Ahora bien, la conducta instintiva pura es muy rara en el hombre. La especie
humana utiliza la inteligencia para su mejor adaptación ecológica. Aprende y
evoluciona, y ofrece comportamientos contrastados que tienen rasgos innatos,
pero mezclados con muchos otros aprendidos.
El ser humano llora al nacer, pero aprende a llorar posteriormente y le sirve como
respuesta defensiva por su descarga emocional.
CONDUCTAS INGENITAS.
Son conductas innatas también, pero representan otra forma de herencia ya que
no son comportamientos detéctales desde el nacimiento, sexar, anidar, caminar,
nadar o volar; hablar, cantar, rebuznar o piar, según el caso.
Sin embargo, estas conductas por su cualidad ingénita van aflorando
progresivamente por desarrollo que conduce a maduración como meta final.
Los experimentos de Spaling ( 1873 ) con relación a ese vuelo de los pájaros, hará
luz en nuestra conceptualización: a unos gorriones recién nacidos los encerró en
una jaula de dimensiones tales de no permitir que extendieran sus a las, y una
disposición experimental para impedir que pudieran ver volar a sus congéneres
mayores. En un lapso de crianza en que pajaritos semejantes, en cautiverio para
control, pero en libertad de actividad volaban ya a la perfección soltó a los del
experimento. El resultado fue que volaron casi como lo hicieron los animalitos
patrón, según su conducta filogenético.
Y aún sin ver a sus mayores ejecutar vuelo alguno, perfeccionaron el suyo
inmediatamente.
La oveja sintió mucho cariño por su entenado, que en poco tiempo, gracias a las
ubres de la amorosa madrastra, fue creciendo hasta hacerse mucho más
corpulento que ella, de modo que a veces le causaba pavor a pesar de su cariño,
por que descubría en los ojos del ya adulto león un fulgor extraño que no acertaba
a comprender.
Pero cierto día, apareció en la cumbre de la frontera colina un soberbio león cuyos
contornos se dibujaban sobre el azul del cielo. Sacudiendo su pobladísima
melena lanzó un rugido cuyos ecos estremecieron a las montañas. La oveja
quedó paralizada de terror, pero en el mismo instante en que aquel rugido resonó
en los oídos del hasta entonces ovejuno león, se revolvió todo su ser despertando
en él la natural y noble fiereza de la felina índole que dormitaba en sus entrañas.
El rugido del león había hecho vibrar una cuerda de su naturaleza todavía intacta.
Actualizó una nueve fuerza interna que antes no sintiera.
LO INNATO Y LO APRENDIDO.
Es algo así como si una parte de los cenzontles hubiesen aprendido a hablar en
otros “idiomas” pero conservando su acento original.
Los pájaros trinan y el hombre habla. Y los pájaros después aprenden trinos
especiales como el hombre a prende a hablar en diferentes idiomas y con distintos
léxicos.
El hombre camina y corre sin que le enseñen. Igualmente los animales, corren,
vuelan o nadan según su especie. Pero estos y aquel logran perfeccionar sus
capacidades motrices: aprenden hacerlo con velocidad, con elegancia, con
perfeccionamiento o en autopraxia si hacen creación plena en su actividad.